ACCIDENTES EN TRANSITO EN TRANSPORTE DE LA EMPRESA O CONCESIONADO Recientemente se dieron a conocer los oficios suscritos por los Titulares de la Coordinación de Salud en el Trabajo, y de la Coordinación de Legislación y Consulta, ambos del Instituto Mexicano del Seguro Social en los que resuelven que: “Como puede observarse de la transcripción de los numerales citados (artículos 41 y 42 de la Ley del Seguro Social), y especialmente del último párrafo del artículo 42, el legislador previó la posibilidad de que un accidente ocurrido fuera de las horas de servicio, tenga el carácter de accidente de trabajo, cuando es consecuencia del mismo trabajo, es decir, cuando el trabajo es causa de determinado accidente o cuando el accidente es consecuencia de aquél, el patrón debe pagar la indemnización que corresponda, sin que el nexo de causalidad que ha de existir entre el accidente y el trabajo tenga que ser necesariamente inmediato y directo, como es el caso de los accidentes sufridos por el trabajador, producidos al trasladarse de su domicilio al lugar de trabajo y viceversa. En este sentido, la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha sostenido el criterio de que “... bastará que el trabajo sea la causa remota o accidental y ocasional para que el patrón tenga la obligación de indemnizar, ya que necesariamente, para encontrar esa relación con el trabajo debe atenderse a que el riesgo sea creado por la empresa, lo que claramente se observa en el caso de los trabajadores que tienen que transitar por un sitio peligroso, debido a la ubicación de la empresa, o tiene necesidad de utilizar los medios de transporte proporcionados por la empresa...” (Registro 2741745, Sexta Época, Cuarta Sala, Semanario Judicial de la Federación, Quinta parte, LXXIV, p. 37) Lo que se complementa con la tesis denominada “Accidente de trabajo ocurridos con motivo del Transporte de los Trabajadores, en la que se establece que: “... la doctrina francesa se ha pronunciado en el sentido de considerar que cuando la empresa tiene un servicio regular de transporte, para llevar de su casa a la factoría, o a la inversa, a los trabajadores, aquélla es responsable de los accidentes que éstos sufran, como consecuencia de ese transporte, y se ha estimado que hay un interés de su parte, no sin excluir el interés del trabajador, para utilizar aquellos medios; de suerte, que no obstante la regla general de que el trabajo se efectúa dentro de la factoría y de que comienza a existir la dependencia del obrero hacia el patrono, tan pronto como se inicia la hora estipulada o fijada para principio de la jornada, puede suceder que el accidente se realice antes o después de dicha jornada y fuera del lugar en que el trabajador presta sus servicios, y no obstante ello, el mismo debe considerarse como de trabajo, estimándose que la dependencia comienza a existir desde el momento en que el trabajador aborda el vehículo que ha de transportarlo de su casa a la factoria o a la inversa, y deja de existir esa dependencia, cuando habiendo concluido la labor del trabajador, éste abandona dicho vehículo”. (Registro 377616, Quinta Época, Cuarta Sala, Semanario Judicial de la Federación, LXVIII, p. 2986). Lo que se confirma con lo dispuesto en el artículo 58, de la Ley Federal del Trabajo, que establece que la jornada de trabajo es el tiempo durante el cual el trabajador está a disposición del patrón para prestar su trabajo, es decir, basta que el trabajador esté a disposición del patrón para que se considere jornada de trabajo aunque materialmente no labore, configurándose así la hipótesis contemplada en los artículos 41 y 42, primer párrafo, de la LSS, por lo que se deberá considerar como riesgo de trabajo (y no en trayecto) aquél que le ocurra a los trabajadores en transporte del a empresa o concesionado, en virtud de que a partir de ese momento se encuentran a disposición del patrón.” Al respecto es importante destacar lo que regulan las normas aplicables: Para efectos del Seguro de Riesgos de Trabajo la legislación del seguro social tiene disposiciones muy claras que se han aplicado permanentemente por los tribunales y las autoridades en el sentido de no considerar siniestro para efectos del cálculo de las cuotas patronales del seguro de riesgos de trabajo, los accidentes que ocurran del domicilio del trabajador a su centro de labor o viceversa. Para la calificación de un accidente de trabajo la Ley del Seguro Social tiene dos disposiciones que se deberán interpretar de manera armónica para que puedan ser correctamente justificadas, el artículo 42, segundo párrafo en relación con el artículo 72 quinto párrafo; el primero considera como accidente de trabajo el llamado accidente en trayecto y el segundo releva del cálculo de la siniestralidad para efectos de aplicar la fórmula de la prima de riesgo a estos mismos accidentes. El sentido de esta situación es para que los trabajadores gocen el mismo nivel de prestaciones y de servicios incluyendo rehabilitación y prótesis en el capitulo de riesgos de trabajo, que son prestaciones muy superiores a un esquema de invalidez ajena al trabajo, esto ha sido claramente definido por el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa donde el juzgador concluye que si bien el segundo párrafo del artículo 42 de la Ley del Seguro Social considera el accidente en trayecto como accidente de trabajo, sin embargo de acuerdo con lo dispuesto en el artículo 72 de la propia Ley “No se tomarán en cuenta para la siniestralidad de las empresas, los accidentes que ocurran a los trabajadores al trasladarse de su domicilio al centro de labores o viceversa” Por su parte la Ley Federal del Trabajo dispone en los artículos 473 y 474, lo siguiente: Artículo 473.- Riesgos de trabajo son los accidentes y enfermedades a que están expuestos los trabajadores en ejercicio o con motivo del trabajo. Artículo 474.- Accidente en trabajo es toda lesión orgánica o perturbación funcional, inmediata o posterior, o la muerte, producida repentinamente en ejercicio, o con motivo del trabajo, cualesquiera que sean el lugar y el tiempo en que se preste. Quedan incluidos en la definición anterior los accidentes que se produzcan al trasladarse el trabajador directamente de su domicilio al lugar del trabajo y de éste a aquél. Como inicialmente lo comentamos, la Ley del seguro social si considera como accidente de trabajo al sufrido por el trabajador en tránsito, únicamente para que el trabajador pueda gozar de los beneficios de la atención y subsidios que otorga la Ley, más lo excluye como factor determinante de la siniestralidad. Para reforzar aún más la interpretación de los dispositivos legales antes mencionados, resulta oportuno invocar el criterio que sostiene la Suprema Corte de Justicia al respecto, en la tesis que a la letra dispone: ACCIDENTE DE TRABAJO OCURRIDO EN TRAYECTO DE IDA O VUELTA AL DOMICILIO. CONCEPTO DE ESTE. Como la Ley Federal del Trabajo no consigna lo que debe entenderse por domicilio para el efecto de que pueda configurarse la hipótesis de riesgo de trabajo en trayecto o traslado, establecido en el artículo 474, párrafo segundo, de la Ley Federal del Trabajo, debe considerarse como domicilio del trabajador aquel del cual habitualmente sale para trasladarse al lugar del trabajo y al cual, después de terminadas las labores, debe regresar. De esta manera, para establecer el domicilio del trabajador debe atenderse al en el que se halle con motivo del trabajo y le permita el trayecto mencionado, o al que tenga registrado ante la empresa siempre que sea factible que ordinariamente pueda hacer el itinerario de ida y vuelta de ese domicilio a su trabajo. Amparo directo 8390/86. Román Cervantes Morales. 22 de octubre de 1987. Cinco votos. Ponente: Felipe López Contreras. Secretario: Rolando Rocha Gallegos. En la opinión que vierte el seguro social pretende rebuscar el sentido de la norma al considerar que el transporte patronal o concesionado implica la disposición del personal para la ejecución del trabajo contratado y lo asimila a transitar por un sitio peligroso; sin embargo, en este momento todo el territorio del país es sitio peligroso y de transito riesgoso. El mismo órgano Judicial ha manifestado que no es riesgo de trabajo la transportación del trabajador al lugar de trabajo. “RIESGO PROFESIONAL, TRANSPORTACION DEL TRABAJADOR AL LUGAR DEL TRABAJO. No puede estimarse profesional el accidente que ocurre a un trabajador cuando se dirige al lugar donde presta sus servicios, a bordo de un camión de pasajeros del servicio público, pues en esas condiciones el accidente no ocurre durante el trabajo y en ejercicio de éste, ni como consecuencia del mismo, pues el accidente que ocurre a un obrero en el trayecto al lugar donde trabaja únicamente tiene carácter profesional, cuando ese trayecto se realice en un medio de transporte proporcionado por el patrón a consecuencia de una estipulación contractual, más no cuando el obrero emplea camión de pasajeros del servicio público. Amparo directo 6899/62. Gregorio Briseño Jesús. 7 de agosto de 1963. Cinco votos. Ponente: María Cristina Salmorán de Tamayo.” En este momento de crisis nacional donde los trabajadores se ven afectados en su economía, un criterio como el que se analiza, inhibe a los patrones a otorgarles este tipo de beneficios a sus empleados e impactará en las negociaciones de los contratos colectivos que contengan esta prestación. Finalmente y para la tranquilidad de los patrones, con independencia de los criterios que emita en Instituto a través de sus órganos de normativa interna, impera el dispositivo legal que norma de manera general y clara, sin posibilidad de interpretación los accidentes en trayecto, sin excluir a los que ocurren en transporte proporcionado por el patrón. Ante la posición inicialmente planteada de manera absurda la Dirección Jurídica del IMSS desmintió esta interpretación inadecuada el 5 de diciembre de 2008 en el oficio 09 52 17 4000/732 el cual dice a la letra: El alcance a los oficios 095217614200/0721 y 095217614200/2351, emitidos por la Coordinación de Legislación y Consulta, en respuesta a los planteamientos formulados por la Coordinación de Salud en el Trabajo, de la Dirección a su cargo, con fundamento en el artículo 75, fracción I, del Reglamento Interior del Instituto Mexicano del Seguro Social, me permito comunicarle las siguientes precisiones: 1. El artículo 474, de la Ley Federal del Trabajo y el 42, de la Ley del Seguro Social, definen como accidente de trabajo, toda lesión orgánica o perturbación funcional, inmediata o posterior, o la muerte, producida repentinamente en ejercicio, o con motivo del trabajo, cualesquiera que sean el lugar y el tiempo en que se preste. 2. Las disposiciones legales citadas, establecen que también se considerará accidente de trabajo el que se produzca al trasladarse el trabajador, directamente de su domicilio al lugar del trabajo, o de éste a aquél. 3. Como puede observarse, el término “accidente en trayecto”, referido en los planteamientos de la Coordinación de Salud en el Trabajo, no corresponde a una figura jurídica prevista en los ordenamientos legales antes citados. Tampoco existe dicho término en el Reglamento de Prestaciones Médicas del Instituto Mexicano del Seguro Social, ni en el Reglamento de la Ley del Seguro Social en Materia de Afiliación, Clasificación de Empresas, Recaudación y Fiscalización. 4. Por consiguiente, de acuerdo al orden jurídico nacional, los accidentes que ocurran a los trabajadores al trasladarse directamente de su domicilio al centro de trabajo o viceversa, son accidentes de trabajo. Sin embargo, estos accidentes no se deben tomar en cuenta para la siniestralidad de las empresas, de conformidad con lo dispuesto en el tercer párrafo del artículo 72, de la Ley del Seguro Social.