Capítulo 2 Diagnóstico del sector agropecuario en el estado 2.1. Situación del sector en el Estado El sector Rural y Agropecuario en el Estado de Jalisco contempla un amplio abanico de situaciones, los escenarios son complejos y difíciles de visualizar. El sector requiere un cambio estructural de fondo para disminuir los grados de marginación y pobreza, lograr crecimiento en el sector, competitividad, y disminución del desempleo, todo esto en el marco de una economía abierta. Se necesita una política de estado y voluntad política no electoralista para comenzar a hablar de un cambio. Se requiere que sumemos esfuerzos con compromiso de solución, y que queramos mejorar la calidad de vida y el bienestar de los habitantes del campo. En el Estado, estos segmentos de la población rural se encuentran claramente definidos, por un lado los agroempresarios, con alta o mediana tecnificación, que compiten a nivel nacional e internacional, crean empleos, tiene buenos rendimientos, son competitivos, etc., y que en el caso de los porcicultores representan el 20% de los productores, quienes generan el 80% de la producción estatal, y por otro lado la mayoría de los habitantes rurales, que son pequeños productores, con dificultades para subsistir en la actividad, con baja tecnología, dependientes de los mercados locales o produciendo para su subsistencia o autoabastecimiento, esta categoría tiene varios niveles desde los productores en transición hasta los que se encuentran con un alto grado de marginación y pobreza extrema. Este es el “sexenio del campo” para el Estado de Jalisco, de acuerdo al Plan Estatal de Desarrollo (PED 2001-2007), en ese tenor, la Secretaría de Desarrollo Rural (SEDER) ha implementado un “Nuevo Modelo de Gestión”, basado en las Cadenas Agroproductivas. El Modelo tratado de sistematizar, lo que de hecho ha existido, para llegar al conocimiento ordenado de las Cadenas y sus componentes y se puedan detectar oportunidades de crecimiento y negocio. 2.1.1. Situación de Jalisco en el contexto económico nacional La economía del estado de Jalisco es una de las más importantes de México, ocupa el 4° lugar entre las entidades federativas por su aporte al Producto Interno Bruto (PIB) nacional. El sector agropecuario de Jalisco ocupa el primer lugar en su aportación al producto agropecuario nacional. Además, mientras que el peso del sector agropecuario es cada vez menor con respecto a la producción nacional; en Jalisco dicha tendencia, aunque con altas y bajas pronunciadas, mantiene su importancia relativa. 6% 5% 4% 3% 2% 1% PIBA/PIB DE JALISCO 2001 2000 1999 1998 1997 0% PIBA NACIONAL/ PIB NACIONAL Fuente: Elaboración propia con datos del INEGI: Producto Interno Bruto por Entidad Federativa. 2.2. Recursos productivos y estructurales de explotaciones La superficie total del Estado es de 8’013,700 hectáreas, de las cuales el uso actual y el uso potencial del suelo necesita ser normado con una intervención de parte de las autoridades para garantizar la preservación de los recursos naturales y hacer la actividad más sustentable. De acuerdo a la información obtenida del Sistema Estatal de Información de Jalisco (SEIJAL) en el 2001, el uso actual de suelo en pastizales es 39.75% y el uso potencial del suelo es 21.98% lo que significa que se está sobreexplotando la superficie, por otro lado, en el caso de silvicultura y la agricultura de temporal el uso potencial es de 39.62% y 27.99% y actualmente se utiliza 29.99% y 17.77% respectivamente. 2.3. Las Cadenas Agroproductivas en Jalisco Una forma de abordar el análisis del sector agropecuario en Jalisco es a través del enfoque de las cadenas agroproductivas, el cual nos permite identificar y comparar la importancia de cada sistema producto de acuerdo con diferentes criterios como pueden ser su importancia económica, la cantidad de empleos que genera o su distribución regional. Las Cadenas principales que se identificaron de acuerdo a su importancia económica se muestran en la gráfica 2.3.1, y aunque Jalisco se ha considerado como un Estado agrícola, el subsector ganadero genera un valor de producción considerablemente mayor. Es conveniente señalar que un elevado valor de la producción no necesariamente se traduce en una generación de empleos proporcional, ya que existen cadenas agrícolas como la de maíz grano y caña de azúcar que emplean directamente a una gran cantidad de individuos sin generar la derrama económica de las principales cadenas pecuarias, las cuales en general requieren menor intensidad en el empleo. A su vez, dentro de las cadenas pecuarias se presentan diferencias en la generación de empleo, destacando por su importancia en ese rubro la cadena bovinos leche. PIBA/PIB NACIONAL 9% 8% 8% 8% 8% 8% 7% 7% 7% 7% 7% 6% 1996 PIBA/PIB DE JALISCO Figura 2.1.1 Peso específico del producto agropecuario en el producto económico total a nivel estatal y nacional Figura 2.3.1. Importancia económica de las cadenas agroproductivas en Jalisco 2001 Fuente: Elaboración propia con datos de la Agencia de Estadística Rural de Jalisco. Es evidente la mayor generación de valor que presentan las cadenas pecuarias con respecto a las agrícolas como regla general, situación que se ha agravado recientemente ya que los precios de las primeras se han visto más favorecidos en los últimos años simultáneamente a la caída en los precios de granos, frutas y otros cultivos. Así, si tomamos como referencia la evolución de los últimos siete años, las tasas de crecimiento medio anual del volumen de la producción de las cadenas pecuarias es similar al de las cadenas agrícolas. Sin embargo, si consideramos el valor de la producción para el mismo período, nos damos cuenta que existe una gran diferencia o “brecha” a causa de la caída en los precios de los granos, la mayoría de las frutas y otros cultivos. Es decir, que aunque la dinámica productiva de las cadenas agrícolas y pecuarias en los últimos años ha sido similar, los precios de los productos ganaderos muestran una tendencia mucho más favorable y por lo tanto un mayor impacto económico. Sin embargo, cadenas como el maíz y la caña de azúcar aunque desfavorecidas en los precios, siguen teniendo un impacto mayúsculo en el empleo, pero no así en el ingreso de los productores. En este punto habría que mencionar la excepción que representa la cadena del agave, la cual ha presentado en promedio incrementos muy fuertes para el período en cuestión, a causa de factores concretos que serán expuestos más adelante con mayor detalle. Analizando la gráfica 2.3.2, observamos áreas de oportunidad como en el caso de especies menores, en donde se ha presentado un incremento en los precios de productos como la miel a un ritmo mucho mayor que el incremento de su producción. La oportunidad consiste en que los productos de la cadena están siendo valorados en los mercados, pero para aprovecharla serían necesarias una serie de estrategias como el mejoramiento de la infraestructura, la capacitación de los productores, implementar los canales de comercialización adecuados, etc. De otra forma, la oportunidad se desvanece. Por otro lado, llama la atención el poco valor relativo que la producción agrícola tiene, así como la caída de sus precios en los últimos años que derivan en bajas tasas de crecimiento en el valor de la producción. Ello se puede considerar como una amenaza, ante la cual se han establecido otro tipo de estrategias de “contención” para proteger a los productores primarios y que el de por si escaso valor generado no se vaya a otros eslabones de la cadena. Lo anterior se vuelve más trascendente si consideramos que frecuentemente se trata de cultivos como el maíz con gran tradición regional y nacional y con gran generación de empleos, y de los cuales depende una gran cantidad de familias que no están dispuestas a renunciar fácilmente a su actividad independientemente de los movimientos en los precios. Tomando en cuenta el comportamiento global, se pueden analizar los factores específicos de cada cadena. Para efectos prácticos, tomaremos como ejemplo de manera breve una cadena agrícola y una pecuaria que sean representativas, a saber, la cadena del agave y la porcícola. Figura 2.3.2. Evolución de la producción y del valor de la producción de las principales cadenas pecuarias y agrícolas de Jalisco (TMCA 1996-2002) Fuente: Elaboración propia con datos de la Agencia de Estadística Rural de Jalisco. http//:aer.jalisco.gob.mx 2.3.1. Cadena del Agave-tequila La Cadena agave-tequila es una de las principales cadenas en el Estado de Jalisco, por su rentabilidad, valor que genera, empleos directos e indirectos generados, etc. El tequila tiene reconocida la denominación de origen en el Estado de Jalisco y la comparte con municipios específicos en los estados de Guanajuato, Michoacán, Nayarit, Tamaulipas, etc. El principal producto que se obtiene del Agave azul tequilana Weber es el Tequila. En el año 2002 se produjeron más de 190 millones de litros, de los cuales el 51% se exportó a 62 países, destacando las ventas a los Estados Unidos, por más de 290 millones de dólares (82% del volumen exportado). La industria tequilera se encuentra concentrada en las compañías: Sauza, Herradura, Cuervo y Cazadores como empresas privadas y sólo existe una empresa propiedad de una Unión de Ejidos. A partir de la crisis de 1997 cuando existió falta de material y el kilogramo de la “cabeza” del agave se llegó a cotizar hasta en $17.00 pesos, los dueños de predios vieron como una buena inversión el cultivar agave, actualmente existen más de 28 mil productores de agave en el Estado. Algunos establecieron un contrato con algunas de los grandes industriales y otros quedarán a la especulación. Este año la oferta ha superado a la demanda, las grandes compañías, ante las crisis cíclicas que ha vivido en los últimos años, han decidido ser autosuficientes en la producción de la materia prima. Este cultivo se debe planear a mediano y largo plazo, ya que para tener un material de excelente calidad se necesita que el agave haya alcanzado su madurez fisiológica (5-6 años) para obtener los azúcares de la mejor calidad. Existen tres aspectos a resolver inmediatamente: 1) establecer los parámetros precisos para la determinación de la “madurez”, 2) la regulación del cumplimiento de la edad fisiológica, 3) la normatividad, donde se establece que se puede llamar tequila a la bebida que contenga por lo menos un 51% agave azul y el resto de otros azúcares. 2.3.2. Cadena Porcícola En el 2003, se redujo a cero los aranceles para la importación de carne de cerdo y carne de aves de los socios comerciales del TLCAN. Este hecho causó que los productores a nivel nacional pidieran al gobierno establecer salvaguardas y cupos bien regulados. Es la Cadena que genera mayor valor de la producción dentro de las cadenas ganaderas del Estado. El principal problema son las importaciones ilegales de carne de muy baja calidad y precio, los subsidios que reciben los socios comerciales del TLCAN, los precios altos de los insumos (granos), mayoritariamente importados y el Estatus sanitario que tiene el Estado fase de erradicación, para la fiebre porcina clásica y Auyeski. El 20% de los productores, altamente tecnificados, manejan el 80% de la Producción. La comercialización se hace en “pie” y solo a los Estados que tienen el mismo estatus Sanitario. Para darle valor agregado se requiere de por lo menos un Rastro Tipo Inspección Federal (TIF) en la Región productora. 2.4. Alianza para el Campo en el Estado 2.4.1. Relación entre las Cadenas y la Alianza para el Campo La operación de los Programas de Alianza para el Campo data de 1996, ocupando el 5° lugar de captación de recursos federales y manteniéndose las aportaciones estatales. Las tasas de crecimiento nos muestran que las inversiones de la Alianza para el Campo y del PIBA del Estado, en los últimos años (99-2001) muestran una trayectoria paralela y que los recursos de la APC en Jalisco han crecido a una velocidad mucho mayor en proporción al producto económico estatal y al producto agropecuario estatal, lo cual habla en principio de un esfuerzo importante por incidir en un cambio del sector primario en el estado. Figura 2.4.1. Evolución comparativa de los recursos de la APC en Jalisco 1996-2001. (Tasa de crecimiento medio anual) 50.00% 40.00% 30.00% 20.00% 10.00% 0.00% 1997-1996 1998-1997 1999-1998 2000-1999 2001-2000 -10.00% PIB PIBA ALIANZA Fuente: Elaboración propia con datos del INEGI y del CTEE Jalisco considerando recursos estatales y federales. Entonces, si bien el esfuerzo de inversiones del programa en el estado ha sido significativo, es difícil calcular los impactos que éste ha generado en el sector agropecuario de Jalisco, visto desde una perspectiva global. 2.5. Análisis de correspondencia 2.5.1. Correspondencia entre los Programas de la Alianza para el Campo y las principales Cadenas Productivas Sabemos a través de las evaluaciones particulares y sus respectivos indicadores cuales han sido los impactos más importantes en el contexto de la propia Alianza para el Campo, sin embargo, no sabemos con precisión cual ha sido el impacto a nivel global en el sector primario de Jalisco. A priori esperamos algunos resultados en ciertos sectores debido a la propia naturaleza de los programas, así como a sus montos de inversión. Pero también existe el problema de la continuidad de los subprogramas e inversiones en distintos años, que dificultan o hacen imposible medir el impacto a nivel estatal. Tomando en cuenta dichos factores, se llega a la conclusión que por su consistencia a través del tiempo, la importancia de sus montos y la existencia de datos relativamente confiables, la cadena o subsector que se puede abordar de mejor manera es la cadena de bovinos leche a nivel estatal y su correspondencia con el programa lechero de la Alianza para el campo en Jalisco a partir de 1996. Para ello se ha tratado de hacer una correlación entre el desarrollo rural del Estado y la contribución de la Alianza para el Campo. Se muestra la serie histórica desde 1980 hasta el 2002 de la Producción lechera de Jalisco de acuerdo a los datos oficiales. La APC empezó a operar en 1996, los apoyos requieren un periodo de maduración para poder generar alguno impacto, en la gráfica 2.5.1. se puede observar que desde 1998 (dos años después de la APC) se comienza a ver un incremento en la producción y se revierte la tendencia de crecimiento desacelerado. Analizando hipotéticamente el hecho de que no hubiesen existido los apoyos de la Alianza para el Campo la tasa de crecimiento sería la que se muestra con la línea punteada muy alejada de la producción actual. Se necesitaría hacer una investigación más profunda sobre diversos factores que pudieron haber afectado el incremento en la producción lechera, antes de poder concluir que la Alianza para el Campo con sus varios programas (Programa Lechero, Mejoramiento Genético, DPAI, etc.) han contribuido directamente en el crecimiento de la cadena bovinos leche, pero de entrada el resultado es muy sugerente y es un hecho que se presenta un incremento significativo a partir de 1998. Figura 2.5.1. Serie histórica de la producción lechera en Jalisco 1980-2002 2,000,000 MILES DE LITROS 1,800,000 1,600,000 1,400,000 1,200,000 1,000,000 800,000 600,000 400,000 200,000 2002 2000 1998 1996 1994 1992 1990 1988 1986 1984 1982 1980 0 Producción lechera real de Jalisco (miles de litros) Producción con APC Producción hipótetica sin APC Fuente: Con datos del Sistema de Información Agroalimentaria y Pesquera de SAGARPA. En otras Cadenas no se pueden ver los resultados tan claramente por que falta información de los volúmenes de producción y demás factores que influyen. En el Caso de las Cadenas Agrícolas, de acuerdo con los apoyos otorgados y el valor de la producción, pudiera haber una correspondencia. En las Cadenas Pecuarias, las cadenas de mayor valor de la producción, son las que en menor medida se han apoyado. No conocemos la cantidad que se necesita para realizar los cambios estructurales, en el caso de la superficie de irrigación, de acuerdo a una estimación de los funcionarios directivos y documentación en siete años que han operado los programas de la Alianza para el Campo se han podido tecnificar 12% de la superficie potencial de ser beneficiada. En las cadenas productivas, actualmente se está apoyando la producción primaria, que representa uno solo de los eslabones de la cadena agroproductiva. Sin embargo, uno de los principales problemas con que se enfrenta el sector en el Estado, es la comercialización como eslabón hacia delante y la compra de insumos como eslabón hacia atrás. Otro aspecto que se repite en el sector es la falta de capacitación y asistencia técnica. Si vemos a largo plazo las estrategias para poder impulsar el sector agropecuario tienen que ver con el desarrollo tecnológico para tener independencia y enfocar los esfuerzos a lo que realmente el estado necesita. 2.6. Aspectos Sociales del Desarrollo Agropecuario de Jalisco 2.6.1. Empleo A pesar de todos los esfuerzos que se han realizado por impactar en el ámbito de la producción primaria en el estado, tanto por políticas públicas estatales como federales, una variable clave en la cual no se ha logrado incidir es en el empleo, ya que de 1998 a la fecha se observa una tendencia a la baja en el sector primario, si tomamos en cuenta el porcentaje de la población ocupada por sector económico y su evolución con respecto al sector secundario o terciario. 0.02 0.5 1998 0 PERÍODO DE TIEMPO. SECTOR TERCIARIO 0.52 II/2003 0.54 0.04 I/2003 0.06 IV/2002 0.56 III/2002 0.08 II/2002 0.58 I/2002 0.1 IV/2001 0.6 III/2001 0.12 II/2001 0.62 I/2001 0.14 IV/2000 0.64 III/2000 0.16 II/2000 SECTOR PRIMARIO Figura 2.6.1.1. Porcentaje de la población ocupada en Jalisco por sector de actividad económica 0.48 Primario Terciario Fuente: Encuesta Nacional de Empleo del INEGI. Es claro que existen otros sectores que han presentado un mayor dinamismo económico en los últimos años, sobre todo los relacionados al sector de los servicios. Sin embargo, la importancia social del sector primario en el estado es fundamental, ya que abarca la totalidad de los municipios y provee de los insumos fundamentales a las zonas urbanas y ofrece áreas de oportunidad trascendentes a nivel regional y local. 2.6.2. Desarrollo regional Otra de las vertientes desde las cuales se puede intentar entender la dinámica agropecuaria del estado de Jalisco es por la distribución regional de la actividad primaria. Al igual que en el nivel nacional, existen una serie de aspectos sociodemográficos que caracterizan a cada región al interior del estado y en las cuales se observan diferencias importantes como niveles de educación, pobreza, marginación y migración. También existen otra serie de variables agroclimáticas que determinan en buena medida las posibilidades de producción en cada región como usos del suelo, tenencia de la tierra, niveles de altura y humedad, ríos y cuencas, etc. Dentro de la cuestión productiva primaria, se presentan regiones con mayor vocación pecuaria, agrícola o forestal. Tomando en cuenta tales diferencias, a continuación se presenta la distribución del valor de la producción agropecuaria en el estado. Jalisco cuenta con 8 DDR que sirven como referencia a nivel nacional dentro de la política agropecuaria, pero además, a partir del sexenio 1994-2000 se implementó una nueva política de organización administrativa al interior del estado que divide a Jalisco en 12 regiones. La intención de dicha división es alcanzar una mayor eficiencia en la aplicación de las políticas públicas al interior del estado. Conviene señalar también que al hablar de desarrollo regional se incluyen implícitamente otros aspectos de desarrollo económico en sus diversas áreas y en donde el desarrollo agropecuario juega un papel muy importante. Figura 2.6.2.1. Distribución regional del valor de la producción de las cadenas agroproductivas de Jalisco 2001 0.3 0.25 0.2 0.15 0.1 0.05 ZMG CENTRO VALLES SIERRA OCCIDENTAL COSTA NORTE COSTA SUR SIERRA DE AMULA SUR SURESTE CIÉNEGA ALTOS SUR ALTOS NORTE NORTE 0 Fuente: Elaboración propia con datos de la Agencia de Estadística Rural de Jalisco. Prácticamente la mitad de la riqueza generada en el sector primario se presenta en 2 regiones, las cuales a su vez se caracterizan por una producción casi exclusivamente pecuaria: En los Altos de Jalisco se localiza las cuencas lecheras, así como la producción de aves y la cadena porcícola. Dichas cadenas se caracterizan por niveles del valor de la producción relativamente altos y en algunos casos como la cadena bovinos leche por una interconexión importante con el sector agroindustrial. En el otro extremo, la región Norte prácticamente no aporta nada al valor de la producción agrícola estatal, sin embargo, existen actividades sectoriales importantes para esa región como la exportación de ganado bovino ya que es la única zona libre de epidemias junto con la región Sierra Occidental. Asimismo, al tratarse de la región con más altos grados de marginación y pobreza, una parte importante de su producción es de autoconsumo, por lo cual el valor social de la actividad agropecuaria reviste una importancia mayor aunque ésta no se refleje en las cifras, además de contar con actividades a pequeña escala pero que en el mediano plazo pudieran potenciarse con políticas adecuadas como la explotación de orégano, las especies menores, etc. Figura 2.6.2.2. Distribución del valor de la producción en Jalisco por conjunto de Cadenas (Año 2001) ZONA METROPOLITANA CENTRO VALLES SIERRA OCCIDENTAL COSTA NORTE COSTA SUR SIERRA DE AMULA SUR SURESTE CIÉNEGA ALTOS SUR ALTOS NORTE NORTE 0.00% AGRÍCOLAS 5.00% 10.00% 15.00% PECUARIAS 20.00% 25.00% 30.00% 35.00% HORTOFRUTÍCOLAS Fuente: Elaboración propia con datos de la Agencia de Estadística Rural de Jalisco. Existen otras zonas de gran peso agrícola pero con una producción pecuaria relativamente baja, y por lo tanto, su aportación en el valor de la producción no es tan significativa. Nos referimos en ese sentido a la región Valles que comprende zonas de alta producción de agave, caña de azúcar y maíz; así como la región Ciénega, la cual comprende la mayor parte de los municipios aledaños al Lago de Chapala y que se caracteriza por una buena producción de granos, frutales templados y hortalizas. Las regiones sureñas del estado se caracterizan por un clima y suelos más propicios para el cultivo de frutas y hortalizas y por lo tanto tienen un gran peso en este subsector, aunque a nivel global su aportación al valor de la producción no sea tan importante pero también se presentan áreas de oportunidad importantes. Por último las regiones costeras despuntan lógicamente en áreas de frutícola templada y tropical, la producción de alimentos exóticos y algunas hortalizas importantes como el caso de la sandía. En resumen, lo que se desea plantear con la descripción regional es que, aunque resulta evidente el despunte de un par de regiones en la riqueza que produce el sector primario en Jalisco, cada una tiene sus ventajas comparativas, áreas de oportunidad y retos que resulta muy importante identificar para que la aplicación de políticas tenga una mayor efectividad, caso concreto la ejecución de los programas de la Alianza para el Campo.