los conflictos internacionales globalizados en la posguerra fria

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INSTITUTO DE ESTUDIOS ESTRATEGICOS DE BUENOS AIRES
Gral Br Heriberto Justo Auel
Presidente
Índice General
LA ARGENTINA EN SUS POSGUERRAS.
(Verano de 1998)
1. GLOBALIZACIÓN IMPERIAL Y ESTADO NACIÓN. (10
Pág.).
2. EL ESTADO NACIÓN REGIONAL FRENTE
ESTRATÉGICAS GLOBALIZADAS. (17 Pág.).
3. LOS CONFLICTOS INTERNACIONALES
POSGUERRA FRÍA. (13 Pág.).
A
LAS
AMENAZAS
GLOBALIZADOS
EN
4. LA SEGUNDA ARGENTINA,
EN LA UNIÓN SUDAMERICANA. (12 Pág.).
Mendoza 2041 – 1er. Piso – (1428) – Buenos Aires – Argentina - Tel.: (01)4781-8482
Email: [email protected]
LA
LOS CONFLICTOS INTERNACIONALES GLOBALIZADOS EN LA
POSGUERRA FRIA.
1. "Si Quieres la Paz, Prepárate para la Guerra".
"La guerra es como el camaleón", decía Clausewitz (1), haciendo referencia al continuo
cambio de sus formas y de su naturaleza.
En un sentido lato, podemos describir a la guerra como un hecho de violencia organizada,
eminentemente político y social, intra o internacional, que normalmente ocurre cuando el poder
de negociación de un actor se agota y da lugar al empleo de la fuerza, en sus diversas
expresiones, en pos de un objetivo en disputa.
En ésta posguerra fría, ¿cuál es la naturaleza y cuales las formas de la violencia en desarrollo
en o entre las comunidades sociales?.
Nos proponemos a continuación desbrozar ese terreno para penetrar en el escenario actual,
que se nos presentó sorpresivamente a fines de los ’80 y prever los que dinámicamente advienen.
Desde 1945 estamos obligados, como firmantes de la Carta de la ONU, a "la resolución
pacífica de los conflictos". Por cierto, esta norma no evitó ni evitará la guerra. Pero desde un
punto de vista legal, hay una nueva norma: Queda estrictamente prohibida la agresión y se
autoriza la defensa ante ella.
Ahora bien, ¿cuándo hay y qué es la agresión?.
La respuesta legal está en el Derecho Internacional Público, codificado como Derecho de
Guerra en la Convención de Ginebra. Por ello existen guerras "convencionales", es decir,
agresiones violentas que quedan comprendidas en los artículos y protocolos de esta Convención.
Pero sabemos que estas normas no preceden a los hechos, sino que trabajosamente los siguen,
en procesos que pueden llevar décadas. Y también sabemos que desde la aparición de las
capacidades nucleares, para evitar sanciones e intervenciones establecidas, aparecieron formas
no convencionales de agresión, que han sido reconocidas como tales tardíamente, produciendo
en los agredidos graves situaciones, por ausencia de previsiones y bases legales suficientes y
eficientes, en el Derecho Nacional, que apoyen la legitimidad monopólica del Estado en el uso
de la fuerza, en sus diversas formas, ante el vacío legal en el derecho de gentes.
Terminada la guerra fría esta situación se ha agravado, con la aparición de nuevos
actores y nuevas modalidades de agresión, siendo muy probable repetir la historia reciente,
aun no asimilada.
Demasiados políticos y militares siguen previendo las guerras que pasaron, de espaldas
a una realidad acelerada y peligrosa, o bien permanecen paralizados por perplejidad,
ignorancia o conveniencias sectoriales.
2
Su consecuencia es el estado de INDEFENSION NACIONAL, del que ya hemos hablado
(4) en capítulos anteriores y que nos coloca en riesgo de violencia social, por imprevisión del
Estado Nacional.
La guerra se prevé y planifica para eludirla o ganarla. No hacerlo es
convocarla.
Vivimos una posguerra diferente, porque la guerra fría fue diferente (la primera guerra
mundial de la era nuclear) y diferente su resolución incruenta.
2. La Posguerra Fría.
Desde el año 1500 hasta el presente, el 60 % del tiempo estuvo ocupado por guerras entre
grandes potencias. Nueve de ellas fueron mundiales (2). Consideraremos, a los efectos de
relacionar sus posguerras, a las últimas tres:
 La Posguerra Napoleónica: dio lugar al "Concierto Europeo", liderado por La Santa
Alianza (La Paz de Viena-1815). Mantuvo el equilibrio de poder durante cuarenta años. El
objeto perseguido fue el de preservar a los poderes absolutos frente a las "revoluciones
democráticas". Su rigidez abrió el camino a la Primera Guerra Mundial.
 La Post-Primera Guerra Mundial: fue instrumentada por el Tratado de Versalles y la Liga
de las Naciones (1918). Su objeto fue retornar al equilibrio de poder y limitar a Alemania a
través de reparaciones de guerra. Se logró un efecto opuesto: los nacionalismos e
imperialismos, la recesión y la inflación. La reacción a éstos errores engendró la Segunda
Guerra Mundial.
 La Post-Segunda Guerra Mundial: se hizo lo contrario que en 1918. En 1945 emerge la
ONU, donde los vencedores tienen derecho a veto y el Plan Marshall para recuperar a Europa
y Japón (incluso a los vencidos). Nuevamente la búsqueda del equilibrio. Pero para el Reino
Unido el costo de la victoria fue la pérdida del Imperio. Europa dejó de ser el meridiano
mundial. Emergen las Repúblicas Imperiales: EE.UU. y la URSS. A partir de 1947 inician la
Guerra Fría, que terminó el 1989, con el colapso soviético. Es el fin del conflicto Este-Oeste,
de naturaleza ideológico-militar y de la Pax Nuclear resultante.
 La Posguerra Fría: En los '90 se inicia una posguerra DIFERENTE a las anteriores. La
Bipolaridad Imperial da paso al Imperio Global (3), bajo la multipolaridad del G7/8 y se
potencia el hibernado conflicto Norte-Sur. Antiguos conflictos retornan y conviven con
otros inéditos e hijos de éste tiempo histórico acelerado.
3
 La transición está signada por la INCERTIDUMBRE y ésta es la impronta que define,
por el momento, a la posguerra fría.
De la relación comparada de estas últimas posguerras, observamos una constante:
la búsqueda de un equilibrio dominado por los vencedores, a veces con aciertos, otras
veces con errores.
Es el ejercicio moderador del o de los Imperios. Su resultante es el estadio de PAX, como
situación controlada hegemónicamente por el poder imperante.
La fractura de ese equilibrio conduce a una nueva guerra mundial entre el último vencedor y
quien lo desafía.
A lo largo del tiempo, progresivamente, estas guerras han aumentado el número de bajas y de
daños, hasta alcanzarse la posibilidad de la hecatombe mundial durante los cuarenta y dos años
de la Pax de Terror Nuclear, solo contenida por la "mutua destrucción asegurada".
El cuadro de la situación estratégica actual, esquemáticamente puede describirse así:
 En la posguerra fría, las probabilidades de guerra entre las Grandes Potencias son bajas,
pues se retiene un conveniente nivel de disuasión nuclear, a través de los Acuerdos de
Control de los arsenales QBN, si bien en el caso de su ocurrencia estaríamos en presencia de
un enorme desastre. En éste nivel, la incertidumbre estratégica reside en la incierta evolución
de Rusia, de China o de la India, en particular estos dos últimos macro-estados, no
incorporados ni adscriptos a la Tríada (G 8).
 Entre Potencias Regionales las probabilidades de guerra son mayores y corresponden a las
situaciones particulares que devienen del período bipolar en sus respectivas áreas y de las
variantes de liderazgo que ostentan estos estados, aspirantes a la hegemonía regional,
normalmente acompañada por la necesidad de desarrollar armas nucleares, químicas o
biológicas. Son los casos de Irán, Irak, Pakistán, Israel o Corea del Norte.
 Las mayores probabilidades de guerras, en la posguerra fría, se dan en los marcos
internos de los Estados, al aparecer los conflictos locales ya descriptos en nuestro trabajo
anterior al presente(4). La significativa permeabilidad de las fronteras, sumada a la debilidad
institucional y funcional de los Estados, a la apertura de los mercados que intensifican los
tráficos, a la revolución de las comunicaciones, a los problemas del medio ambiente, a la
desocupación (marginales del mercado de trabajo) por avances tecnológicos en los sistemas
de producción, a la explosión demográfica y a los espacios vacíos, a las tradiciones sociales
frente a los progresismos materialistas, a las asimetrías entre poder y población, a la
aparición de actores privados que ocupan al Estado por vía de compra de voluntades, etc.,
constituyen un complejo plexo de riesgos y amenazas estratégicas, aun no percibidas
con claridad en función de la ya descripta CONFUSION E INCERTIDUMBRE, que
hemos citado reiteradamente en los sucesivos capítulos de éste trabajo.
3. Características de la Transición de la Bipolaridad Imperial a la Globalización Imperial.
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En el punto anterior hemos afirmado que en ésta transición, vivimos una posguerra diferente
a las anteriores (2). He allí la incertidumbre, la desorientación de los académicos y las ideas
encontradas, aun entre quienes que han compartido opiniones durante el período de la guerra fría.
Algunas de las características de la transición, que confirman esa situación, son las
siguientes:
 El colapso por implosión de una superpotencia, la URSS., produjo en 1989 una acelerada
transferencia de poder y realineamientos vertiginosos. Contemporáneamente se unificó
Alemania y Europa recordó su historia reciente, acelerando la construcción de la Unión
Europea. EE.UU. quedó sin enemigo y redescubrió su intimidad. El mundo volvió a
apercibirse que "la guerra es menos probable cuando está claro, para todos, quienes pueden
ganarla".
 Como quedó dicho al describir el Imperio Global (3), cambió la caracterización del ejercicio
del poder imperial. Se retornó al modelo romano. El poder concentrado en el duopolio
nuclear, se hizo más "disperso" o "distribuido". En su expresión militar es unipolar, pues
solo EE.UU. está en condiciones de proyección estratégica de fuerza. En el frente
económico-financiero, el poder está en la Triada, que ostenta los 2/3 del PBI mundial,
siendo el espacio geográfico que demográficamente menos crece. Como elemento novedoso,
la transformación inesperada lanza al ruedo a nuevos núcleos de poder privados, como el
crimen organizado y el terrorismo, que se expanden cabalgando la apertura económica
y la multiplicación progresiva del intercambio comercial, explotando la debilidad de
contralor consecuente de los Estados Nacionales, a su vez presionados por grupos
económicos privados transnacionales, para que abandonen sus roles históricos (3 y 4).
En conclusión:
 Muy pocas o ninguna de las características de las posguerras anteriores aparece en ésta
situación singular que llamamos posguerra fría y que desde la reunión de Denver, afianza la
PAX GLOBAL en manos del G 8.
 Los cambios significativos de tipo político y tecnológico, con profundas consecuencias
sociales, constituyen fuentes de conflictos locales, muy diferentes a los del pasado.
 La naturaleza y el número de estos conflictos, limitan la intervención de las Grandes
Potencias y de los Organismos Internacionales. La solución se ha encontrado en los
esfuerzos combinados y las organizaciones ad-hoc, donde la Argentina ha participado
intensamente recibiendo de EE.UU., en reconocimiento, la calificación de Aliado Especial
Extra OTAN.
 En la posguerra fría, la mala noticia es la menor preparación del sistema de seguridad
internacional para enfrentar conflictos locales y la buena noticia es que el sistema está
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fuertemente preparado para enfrentar conflictos entre Grandes Potencias y Potencias
Regionales.
 Para los argentinos la mala noticia es que en esta posguerra fría, en la que los conflictos
locales son los más probables y peligrosos, no contamos con la preparación del sistema
de seguridad internacional para atender este tipo de conflictos y soportamos la total
ausencia del propio sistema, por imposición de la legislación de Defensa vigente (4).
Las Fuentes del Conflicto y las Lecturas de las Diferentes Escuelas Teóricas.
Básicamente existen dos escuelas de pensamiento acerca del tratamiento del conflicto
contemporáneo. En lo que hace a las fuentes que lo originan, difieren sensiblemente y de estas
diferencias de lectura de una misma realidad, aparecen los "halcones" y las "palomas", en el más
sencillo lenguaje periodístico.
 Los realistas o conservadores (halcones): entienden que los conflictos surgen porque los
actores internacionales, en un mundo escasamente normado, buscan retener o aumentar su
poder y resguardar sus ideales e intereses. Por ello, al producirse desequilibrios estratégicos,
de inmediato surgen nuevas alianzas, nuevos alineamientos y adscripciones, para recuperar la
seguridad de los intereses permanentes. Según esta escuela, los Organismos Internacionales y
los Institutos que conforman el Sistema Internacional para la Preservación de la Paz, son
efectivas cuando no son necesarias y necesarias cuando no son efectivas. Actualmente
ponen énfasis en que el balance de poder no es suficiente, ante el grado de erosión de la
soberanía de los Estados.
 Los idealistas o progresistas (palomas): entienden que la prevención del conflicto reposa en
las estructuras internas del Estado, tienden al desarme, creen firmemente en las Instituciones
Internacionales para la Resolución de los Conflictos, en el comercio y en la democracia como
barreras ante el empleo de la fuerza. En la posguerra fría, entienden que el poder
económico reemplazó al poder militar y que es necesario crear las "islas de Paz
democráticas". Es la posición de nuestros legisladores y burócratas progresistas. Sin
embargo, la nueva situación les ha llevado, a algunos de ellos, a entender que las propias
democracias débiles constituyen fuentes de conflictos y que hay actores que no son
democracias.
Ambas escuelas han creado posiciones polarizadas. Los unos llevando el concepto de
seguridad a extremos "hobbesianos", los otros encaminándose a un pacifismo "wilsoniano".
Por sobre las doctrinas, actualmente pareciera estar imponiéndose el sentido común, bajo el
nombre de un "pragmatismo lúcido".
Desde un ámbito de conflictos limitados o muy limitados, propios de la bipolaridad nuclear,
ingresamos a una situación de conflictos "diluidos" o "extendidos", hijos de la globalización,
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en tiempos de ritmos acelerados, distancias "más cortas" y fronteras más permeables de Estados
débiles, frente a amenazas y actores que se enancan en esas debilidades de la transición de
estructuras, explotando la incertidumbre y la indefensión.
Ninguna de las escuelas vio cumplido su paradigma al término de la guerra fría.
Es probable que la verdad esté en el equilibrio. En el equilibrio que no signifique una
posición ecléctica, sino una respuesta audaz al desafío y a la oportunidad que conlleva el
progreso de la civilización posindustrial, si retenemos nuestra cultura e identidad y
efectuamos las reformas institucionales para alcanzar el ESTADO NACIONAL
NECESARIO, retener la convivencia en la diversidad y en libertad, preservando la PAZ.
La recuperación de ese "bien público" que es la Defensa Nacional, exige la total reforma de
la extemporánea legislación vigente y la elaboración de una Política de Defensa Combinada
para la Unión Sudamericana, a iniciar en el Area del actual Mercosur con un Acuerdo de
Defensa Común y Seguridad Colectiva Regional, contando con la presencia de los EE.UU.,
como Observador.
4. Las Amenazas Estratégicas en la Posguerra Fría y el Estado Nacional Argentino.
Ya hemos introducido éste tema en el trabajo anterior, referido a “Los Conflictos
Internacionales Globalizados”, punto 1 – a). Vamos a profundizarlo.
Es habitual escuchar, en las reuniones académicas especializadas de nuestro medio, variados
comentarios acerca de la particular situación interna de los EE.UU. a partir de 1989, cuando
quedó sin enemigo a la vista.
Llama la atención que en esos mismos ambientes no abundan las reflexiones referidas a
nuestra propia situación estratégica frente a los conflictos reales y perceptuales, en la
posguerra fría.
Es más, en pleno proceso de integración regional, se plantean aun los conflictos
históricos como hipótesis vigentes, pero se omite estudiar a los actores internacionales que
ya nos agreden, que ya están presentes, pero que no son reconocidos como tales.
¿Cuál es la razón de tantas sinrazones?
Desde nuestro punto de vista las relaciones cívico-militares continúan quebradas.
EL SISTEMA POLITICO ARGENTINO NO CONFIA EN SUS FF.AA.
No hay un solo partido político argentino que reconozca hoy que fuimos agredidos por el
terrorismo revolucionario marxista y muchos están infiltrados por ex-guerrilleros.
A ésta situación la hemos descripto (4) como un bloqueo en el camino de la rehabilitación del
Estado Nacional Necesario. Esta es la razón de la ausencia de la Defensa Nacional en la
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agenda política, la razón del extrañamiento militar dentro del propio Estado, a través de
las Leyes de Defensa, la razón del engendro de "las tropas del Ministerio de Interior" y por
fin, la razón por la que permanecemos en situación de INDEFENSION NACIONAL.
EE.UU. impulsó, en los dos últimos años, las reuniones de Ministros de Defensa. Las
primeras en la historia del Continente Americano. Intentó con ellas, sin mayor éxito, el
desarrollo de Políticas de Defensa actualizadas y coordinadas, en su "patio trasero".
Veamos sobre que compromisos buscó ese objetivo el Secretario Perry, en Williamsburg (5):
 Reafirmación del compromiso de consolidar la democracia, basado en la seguridad
hemisférica.
 Reafirmar el papel crítico de los militares en el apoyo a la democracia.
 Sometimiento de las FF.AA. a los gobiernos constitucionales.
 Aumento de la transparencia en la cooperación de la Defensa.
 Fijación de metas para la resolución negociada de las disputas, con base en la confianza.
 Promoción de una mayor cooperación en todos los órdenes, especialmente en apoyo en
la lucha contra el narcoterrorismo y participación en tareas de paz internacionales.
Estos seis puntos definen la política estadounidense hacia nuestra Región, buscando consenso
sobre parámetros comunes.
En 1996, en Bariloche, EE.UU. intentó profundizar y ampliar esta política. La Argentina, a
pesar de las "relaciones carnales" desarrolladas en los últimos años con los americanos del Norte
y a pesar de haber desarrollado la mayor "participación en tareas de paz internacionales" que
cualquier otro país Sudamericano, se ha negado sistemáticamente al requerimiento de luchar
contra el narcoterrorismo desde su política de Defensa, como lo hacen la mayor parte de
los países, por tratarse de un conflicto estratégico. Puntualmente EE.UU. lo hace desde una
enmienda impuesta en 1988.
En nuestro país, la desconfianza hacia los militares y en el propio sistema político, es
superior al requerimiento imperial y al imperio del sentido común.
Durante la reciente visita a Buenos Aires del Presidente Clinton (Octubre 1997), nuestro
“resignado” ex Presidente, principal responsable de la actual legislación de Defensa y
autodefenestrado autor de la "excepcionalidad argentina", repitió en los medios de comunicación
social que insistiría ante el ilustre visitante que era inadmisible para él y su Alianza electoral, que
ésta amenaza al Estado pasara a responsabilidad de la Defensa Nacional, en nuestro país.
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Debía ser considerada como un delito común.
Acabamos de perder dos batallas por carencia de Estado y consecuentemente de
planificación estratégica, en una guerra limitada y en otra muy limitada.
Luego de esa experiencia, estamos repitiendo el error frente a las actuales amenazas
estratégicas "difusas", sin desarrollo teórico y de muy difícil resolución, por cuanto las
derrotas sufridas impiden la rehabilitación del Estado en el área de la Defensa Nacional.
Acabamos de quebrarle el espinazo a la Justicia Federal, llevando a sus estrados a un
"delito político", no judicial.
Ahora le entregamos a la Policía el inédito planeamiento estratégico del conflicto más
peligroso y probable en la posguerra fría, en un momento en que el delito común afecta con
intensidad desconocida a la seguridad pública, que es de natural incumbencia policial.
¿Qué nos debe ocurrir a los argentinos para recuperar la razón política, "la unidad y
dirección" y "un sistema que nos salve de la anarquía", como decía nuestro Libertador?.
SIN REHABILITACION INSTITUCIONAL, es decir, SIN EL ESTADO NACIONAL
NECESARIO, LA ARGENTINA NO ADMINISTRARA LA PAZ.
5. El Narcoterrorismo como Principal Amenaza Estratégica en las Américas.
Entre el 22 y 24 de Octubre de 1990, en el Centro Cultural General San Martín de la Capital
Federal, nuestro “Instituto de Estudios Estratégicos de Buenos Aires” desarrolló el "Primer
Seminario Internacional del Narco-Terrorismo en las Américas", con la presencia de quince
especialistas de diez países que representaban los espacios geográficos con mayor experiencia en
el tema, en todo el orbe.
Recién se iniciaba la posguerra fría y se empezaba a percibir que la situación que llegaba era
cualitativa y cuantitativamente más complicada que la que cesaba.
También se observaba el ingreso de nuevos actores privados al espacio estratégico regional,
mientras los Estados iniciaban la formación de alianzas comerciales, que deflacionaban
conflictos históricos.
Los conflictos cambiaban su naturaleza y se hacían locales y dispersos.
Ante la ausencia de investigación universitaria en éste específico terreno, nuestro Instituto
hizo el máximo esfuerzo para difundir las recomendaciones surgidas de las ponencias y
discusiones del Seminario. Debemos confesar que el interés del Estado en el tema fue pobre y
9
que aun hoy son mayores los requerimientos que provienen de investigadores del exterior, que
desde nuestro país.
En 1991, el Vicepresidente de la República convocó a un grupo de personalidades para
conformar la "Comisión para la Preservación de la Etica en la Sociedad y en el Estado", que
sesionó durante un año y produjo diecisiete proyectos de leyes, a ese fin. El autor de éste trabajo
presentó una propuesta titulada "El Narcoterrorismo en las Américas, el Mayor Potencial
Corruptor del Estado y de la Sociedad en los Años Noventa". Esta fue aprobada por la Comisión
y elevada al Poder Ejecutivo, para su consideración.
Incluía la propuesta citada en la parte final del punto 4 de éste trabajo.
Las Américas, como el resto del planeta, reciben y perciben el efecto de la globalización
impulsada por la revolución de las comunicaciones y el transporte y contemporáneamente el
proceso de reafirmación de los particularismos nacionales, de las identidades, frente a una
cultura universal que llega por las redes de comunicación social, del tipo CNN.
Hay menos tensión ínter-estatal, pero aumentó el conflicto intra-estatal y actores privados
presionan al Estado Nacional o bien lo agreden, feudalizándolo.
El narcoterrorismo es uno de ellos. En el momento en que cesa la ayuda económica a las
guerrillas revolucionarias desde la URSS o desde Cuba, aparecen los "carteles" como los nuevos
asociados de los terroristas. Estos proporcionan hoy seguridad a las plantaciones, instalaciones
industriales, transporte o comercialización, a cambio de apoyo logístico y financiero.
Estas organizaciones criminales tienen, en algunos casos, una conducción de altísimo nivel
técnico y jurisdicción internacional, dividiendo sus actividades según las conveniencias que le
presentan los espacios geográficos. Hasta el momento, esta es una ventaja fundamental de los
carteles, frente a la fragmentación política de los Estados.
Los Estados actúan individualmente o con leves coordinaciones, frente a un enemigo
privado transnacional, con comando unificado. Los Estados tienen problemas diferenciados
y reacciones distintas e individuales, ante un enemigo monolítico, sin códigos y normalmente
más poderoso; que tiene la iniciativa, impone la división del trabajo y explota las crisis de la
transición de era, de la moral pública y de la debilidad estructural de nuestros estados.
En el Continente Americano:
Bolivia y Perú son productores del insumo básico, la hoja de coca. Si eliminan las
plantaciones, como lo exige EE.UU., lanzan a los brazos de la guerrilla a los desocupados y
agravan su situación.
Colombia es espacio de destilación de la pasta básica y base de los principales carteles que
apoyan a las guerrillas. El Gobierno, bajo sospecha, no controla gran parte de su territorio.
Méjico es el principal país puente, con relación a EE.UU.. Los países puente se hacen
consumidores, lavadores y organizan carteles. Estos ocupan progresivamente al Estado.
10
La Argentina es país puente.
EE.UU. es el principal consumidor y el tamaño de su economía facilita el lavado de dinero,
que en mayor o menor medida se realiza en todos los demás estados.
Brasil, hoy nuestro principal aliado, tiene una situación particular. Limita con los
principales países productores y destiladores, a través de fronteras selváticas y montañosas que
dificultan enormemente el contralor del tráfico. Su numerosa población y la existencia de
antiguas organizaciones criminales, han llevado a algunos analistas a señalarlo como la futura
"potencia narco" de la Región.(6)(7).
Una respuesta continental unificada, a ésta situación estratégica de muy difícil
resolución, a pesar de las continuas reuniones internacionales que provoca, no se ha
logrado y sus consecuencias están a la vista en toda América.
Quienes se oponen a la consideración estratégica de éste conflicto, que afecta al Estado y a
la sociedad como un todo, demuestran un alto grado de confusión o despiertan diversos
grados de sospecha.
A veces, extrañamente se presenta a ésta agresión como un mero problema social, de
drogadicción; otras considerándolo como un hecho policial o de seguridad pública y entre
militares, es común observar una visión exclusivamente táctica, traducida en esta expresión:
"nos quieren reducir a Guardias Nacionales". Se imaginan con perros, controlando valijas en las
aduanas y esa es la razón de su equívoca actitud.
La respuesta a este inédito ataque y ocupación del Estado (a sus instituciones), a través de la
capacidad de compra de voluntades de las poderosas organizaciones criminales, debe ser
necesariamente innovadora y requiere de las FF.AA. sus mejores hombres para la tarea de
planificación estratégica combinada y conjunta; en la conducción y perfeccionamiento del C 4I,
en el alto mando; en la operación de la radarización aérea, naval y terrestre de la Región; en el
cruzamiento de los controles en todos los niveles y áreas intervinientes y en la supervisión de la
cooperación internacional e interinstitucional.
Como puede observarse, no existe empleo de tropas militares.
La ejecución táctica será desempeñada por las organizaciones que ya están desplegadas en
las fronteras o en los lugares precisos.
Las FF.AA. deberán aportar el cerebro y el sistema nervioso central de la nueva
estructura conjunta y combinada y las Policías y Aduanas el sistema de procedimientos tácticos
sobre el terreno.
EE.UU. lo viene haciendo desde 1988.
Actualmente, de acuerdo a las leyes vigentes, los argentinos estamos haciendo exactamente
lo contrario, invirtiendo las jerarquías institucionales, como ya fue dicho. Además, "pedimos
peras al olmo".
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La expansión del narcotráfico revela no solo el deterioro generalizado de los Estados y de la
autoridad gubernamental, como manifiesta tendencia finisecular, sino que el ritmo de su
avance lo ubica como la amenaza estratégica principal para la Región.
Según informes de la DEA (Agencia Para el Control de Drogas de los Estados Unidos), los
ingresos anuales de los carteles rondan los 500 mil millones de dólares.
A pesar de ello, este fenómeno mundial que afecta particularmente a las Américas,
"permanecerá invisible, en gran medida, en tanto los políticos no tengan la voluntad para
reconocer la relación entre producción, tráfico, consumo, lavado de dinero y fuerzas
sistémicas mundiales más amplias...".(8)
En conclusión:
 El narcoterrorismo avanza en las Américas y constituye el hecho o la principal amenaza
estratégica frente a Estados Nacionales débiles, en la transición estructural posguerra
fría.
 Se ha enancado en la globalización capitalista, específicamente en la revolución del
comercio, del transporte y de las comunicaciones.
 El crecimiento exponencial del comercio internacional y de los circuitos financieros
electrónicos, permite este tráfico de muerte y poder.
 La contención del fenómeno en las sendas y autopistas de la economía mundial, es
condición indispensable para evitar la feudalización de los Estados. Este hecho en curso,
es de naturaleza estratégica (no militar) y por ende de responsabilidad de la DEFENSA
NACIONAL.
 Los dirigentes que se niegan a entender el fenómeno ya son sospechados por la sociedad
como partícipes de éstas poderosas organizaciones criminales.
El nuevo terrorismo merece un párrafo. Si bien ya hemos tratado brevemente al
terrorismo, relacionado en nuestra Región desde principios de la década con el narcotráfico, por
razones "presupuestarias", vale la pena tratarlo brevemente por separado.
Entendemos por terrorismo a los actos violentos, sistemática y deliberadamente dirigidos a
blancos altamente sensibles, por parte de ciudadanos civiles agrupados en banda, que disputan el
monopolio del uso de la fuerza al Estado, con fines políticos y a través del terror.
12
Hemos conocido de cerca al terrorismo ideológico, en tiempos de la bipolaridad. Aun
vivimos las secuelas de esa guerra muy limitada, tema que desarrollamos en los capítulos
anteriores.
En la posguerra fría, caído el paradigma soviético, chino o cubano, el terrorismo
ideológico se ha transformado progresivamente. Podríamos decir que se ha globalizado. (9).
Hoy el terrorista es altamente móvil, desplazándose permanentemente a través del mundo,
encubriéndose en los grupos de inmigrantes que abundan en las grandes capitales o en puntos
focales de comercio, como lo es la zona fronteriza entre Argentina, Brasil y Paraguay.
Los vínculos internacionales de los distintos grupos, también son una de las nuevas
características notables.
El MRTA (Tupac Amaru) trabajó con el Ejército Rojo Japonés en lugares tan distantes como
La Haya o Bucarest en 1995. Hay elementos del ERJ involucrados en la toma de la residencia del
Embajador japonés en Lima, en Diciembre de 1996, cuando veinticinco individuos del MRTA
tomaron como rehenes a quinientas personalidades de casi todo el mundo.
El terrorismo globalizado es altamente organizado, normalmente muy bien financiado, con
acceso a sistemas de armas de última generación. Pueden llegar al chantaje nuclear, manejar
explosivos como el "sentex", misiles y medios electrónicos.
Buscan establecer su legitimidad clamando como campeones de los derechos étnicos,
religiosos o sociales, pero en realidad intentan alcanzar el poder, evadiendo el
proceso electivo.
En su mayor parte tienen representación política legal, abierta o encubierta, normalmente
subordinadas a la rama terrorista de la organización.
Su vulnerabilidad mayor está en el financiamiento, pues es altamente costoso. Por ello
cuentan normalmente con la fachada de grandes organizaciones financieras o frentes de
negocios.
El número de terroristas profesionales disponibles por contrato, es cada vez mayor.
El núcleo de éste grupo, proviene de los mujaheddin afganos.
En nuestro continente, la Central de Coordinación del terrorismo remanente, que
actualmente busca encuadrar a los marginales sociales, se encuentra en San Pablo (Brasil).
Las cuarenta bandas más importantes y los números de incidentes y bajas en los últimos
años, se agregan como Anexo 1 y 2. (9).
En Marzo de 1996, con el patrocinio de Egipto y EE.UU., se realizó la Conferencia
Internacional Antiterrorista, en Sharm al Shaykh. En ella se trató específicamente acerca de la
cooperación internacional para enfrentar la globalización del terrorismo. Su resultado más
importante ha sido el acuerdo para la difusión de inteligencia disponible, en forma oportuna.
En Conclusión:
13
 El terrorismo “globalizado” es altamente peligroso. Busca la destrucción del Estado a
través de una elaborada estrategia, para ocupar el poder a través de una elite sin
consenso.
 El dinero es el requisito básico de todos los grupos terroristas organizados y
técnicamente eficientes.
 Las armas y tácticas empleadas están relacionadas con: la destrucción organizada del
Estado, la demostración de su impotencia, lograr la fatiga social y, eventualmente,
alcanzar el apoyo del electorado para la toma del poder.
 Al constituirse en una amenaza de agresión al Estado y a la sociedad en su conjunto, es
un riesgo de carácter estratégico, correspondiente al campo de la Defensa Nacional.
 En nuestra América opera en colusión con los nuevos núcleos de poder privados de la
Región y en conexión con conflictos externos.
6. Bibliografía:
(l) On War. Carl v. Klausewitz. Princeton University Press. 1989.
(2) International Conflicts After the Cold War. J.S. Nye, Jr.- Report of The Aspen Institute
Conference. 1995.
(3) Globalización Imperial y Estado Nación. IEEBA. 1997.
(4) El Estado-Nación Regional Frente a las Amenazas Estratégicas Globalizadas. IEEBA. 1997.
(5) Williamsburg: ¿Un Giro Definitivo en la Relaciones Hemisféricas de Seguridad?. Francisco
Rojas Aravena. Revista Occidental 1/13. 1996.
(6) Conclusiones del Primer Seminario Internacional del Narcoterrorismo en la Américas.
IEEBA. 1990.
(7) Brasil: La Emergente Superpotencia de las Drogas. M. Vélez de Berliner y K. Lado. Revista
Occidental 2/13. 1996.
(8) Erosión de la Soberanía y la Incipiente Globalización del Narcotráfico. Stephen E. Flynn. El
Narcotráfico. IICLA. 1995.
(9) Manual de Terrorismo Internacional. Colin M. MacLachlan. IICLA. 1997.
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