DATOS SENSIBLES AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN: 390/2013. QUEJOSA: **********. VISTO BUENO SR. MINISTRO. MINISTRO PONENTE: ALFREDO GUTIÉRREZ ORTIZ MENA. SECRETARIA: CECILIA ARMENGOL ALONSO. México, Distrito Federal. Acuerdo de la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en la sesión correspondiente al día catorce de agosto de dos mil trece. SENTENCIA Cotejó: Mediante la que se resuelven los autos relativos al juicio de amparo directo en revisión 390/2013, promovido por ********** en contra de la sentencia dictada el seis de diciembre de dos mil doce, por el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Séptimo Circuito, en el juicio de amparo directo 688/2012 del índice de ese órgano colegiado. I. ANTECEDENTES De acuerdo a las constancias que obran en autos se desprende que: 1. **********, promovió juicio civil ordinario en contra de **********, en el que demandó la declaración judicial de reconocimiento de su mejor derecho a ejercer la guarda y custodia respecto de sus menores hijos de apellido **********, así como la determinación de la forma y términos en que se debería llevar a cabo la convivencia de los menores con la AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 demandada, y el pago de gastos y costas que se generen por la tramitación del juicio.1 2. La parte demandada al contestar la demanda opuso sus excepciones y defensas, y en diversa demanda en la vía ordinaria civil demandó de **********, la disolución del vínculo matrimonial; la pérdida de la patria potestad que ejerce sobre sus menores hijos, y la asignación a favor de la actora de la guarda y custodia de éstos, el otorgamiento de una pensión alimenticia en su favor y de sus menores hijos y la liquidación de la sociedad conyugal; así como el pago de gastos y costas.2 3. Durante la tramitación de la controversia familiar, se decretó el depósito judicial de los menores a favor del padre, y sin conocimiento de ello, el día quince de septiembre de dos mil seis, la madre sustrajo a los menores de un restaurante, motivo por el cual a ésta se le condenó penalmente por el delito de sustracción de menores conforme al artículo 241 del Código Penal para el Estado de Veracruz. 4. De las demandas en la vía civil conoció inicialmente el Juzgado Sexto de Primera Instancia del Distrito Judicial de Veracruz, pero éste se excusó, por lo que se remitieron los autos al Juzgado Cuarto de Primera Instancia del mismo Distrito Judicial, quien radicó la controversia familiar y acumuló los juicios ordinarios civiles, resolviendo que **********, no acreditó su acción y el demandado en reconvención acreditó parcialmente su acción; asimismo declaró disuelto el vínculo matrimonial, así como la sociedad conyugal, absolvió de la pérdida de la patria potestad a ambos progenitores, determinó que la guarda y custodia de los menores seguirá correspondiendo a **********, por lo que fijó un régimen de convivencia de los menores con su madre.3 1 De acuerdo a lo que se desprende de los resultandos de la ejecutoria recaída al amparo recurrido, que obra a fojas 77 a 257 del cuaderno de amparo 688/2012. 2 Ibíd. 3 Ibíd. 2 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 5. Inconforme con esa determinación **********, interpuso recurso de apelación al cual se adhirió el demandado, así como éste también interpuso diverso recurso de apelación principal, de los que conoció la Sexta Sala del Tribunal Superior de Justicia en el Estado, con residencia en esa ciudad, quien el once de mayo de dos mil doce, determinó modificar la sentencia del juez de primera instancia para el efecto de condenar a la progenitora a la pérdida de la patria potestad conforme a lo dispuesto por el artículo 373, fracción VI, del Código Civil para el Estado de Veracruz.4 II. TRÁMITE 6. Demanda de amparo. **********, interpuso juicio de amparo directo mediante escrito presentado el cuatro de junio de dos mil doce, ante la Secretaría de Acuerdos de la Sexta Sala del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Veracruz de Ignacio Llave, señalando como autoridades responsables a la Sexta Sala del Tribunal Superior de Justicia del Estado señalado, así como al Juez Cuarto de Primera Instancia en materia Civil en la Ciudad de Veracruz; y como actos reclamados la resolución dictada en el toca de apelación **********, el once de mayo de dos mil doce, así como su ejecución. La parte quejosa precisó que se violaron en su perjuicio los derechos consagrados en los artículos 14, 16 y 17 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.5 7. Juicio de amparo directo. Del amparo conoció el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Séptimo Circuito, quien por acuerdo de su Presidente de veintisiete de agosto de dos mil doce,6 admitió y registró la demanda de amparo bajo el número de expediente 688/2012. Seguidos los trámites correspondientes, en sesión del seis 4 Ibíd. Escrito de demanda de amparo, que obra a fojas 6 a 64 del cuaderno de amparo 688/2012. 6 Ibíd. Foja 71. 5 3 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 de diciembre de dos mil doce, el Tribunal Colegiado determinó negar el amparo. 8. Interposición del recurso de revisión. **********, en su carácter de quejosa del juicio de amparo 688/2012, interpuso recurso de revisión por escrito presentado el veinticinco de enero de dos mil trece, 7 ante el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Séptimo Circuito. Posteriormente, por oficio **********, el actuario adscrito a dicho órgano remitió el asunto a esta Suprema Corte de Justicia de la Nación. 9. Trámite del recurso de revisión ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación. El Presidente de esta Suprema Corte de Justicia de la Nación, mediante acuerdo dictado el seis de febrero de dos mil trece, tuvo por recibido el expediente, lo registró bajo el número 390/20138 y lo admitió con reserva del estudio de importancia y trascendencia. Además, ordenó que se turnara a la Ministra Olga Sánchez Cordero de García Villegas, en términos de los artículos 81, párrafo primero y 86, párrafo primero, del Reglamento Interior de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, así como que se enviaran los autos a la Sala de su adscripción. Y ordenó dar vista al Procurador General de la República por conducto del Agente del Ministerio Público adscrito a este Alto Tribunal. 10. La Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, se avocó al conocimiento del asunto, por medio de acuerdo de once de febrero de dos mil trece, dictado por el Presidente de la misma; asimismo, se ordenó que en su oportunidad se remitiera el asunto a la Ministra ponente para la elaboración del proyecto de resolución.9 11. Por proveído de veinticinco de febrero de dos mil trece, se ordenó agregar a los autos el pedimento número 7/2013, suscrito por el 7 Fojas 2 a 116, del amparo directo en revisión 390/2013. Ibíd. Fojas 118 a 120. 9 Ibíd. Foja 126. 8 4 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 Ministerio Público de la Federación, designado por el Procurador General de la República, para intervenir en el presente asunto, mediante el cual expuso su parecer, en el sentido de que lo procedente en el caso es la negativa del amparo. 12. Por auto de treinta de mayo de dos mil trece, visto lo acordado por los Ministros integrantes de la Primera Sala en la sesión de veintinueve de mayo del presente año, el Ministro Presidente de la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, ordenó el returno de los autos a la ponencia del Ministro Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.10 III. COMPETENCIA 13. Esta Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, es competente para conocer de este recurso de revisión, en términos de lo dispuesto en los artículos 107, fracción IX, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; 83, fracción V, y 84, fracción II, de la Ley de Amparo; 21, fracción XI, de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación; 47, en relación con los artículos 14 a 18, todos ellos del Reglamento Interior de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, publicado en el Diario Oficial de la Federación el día primero de abril de dos mil ocho; así como en los puntos primero y tercero del Acuerdo General Plenario 5/2013 publicado en el Diario Oficial de la Federación el veintiuno de mayo de dos mil trece. 14. Lo anterior, en virtud de que el recurso fue interpuesto contra una sentencia pronunciada en un juicio de amparo directo, en el que el Tribunal Colegiado del conocimiento realizó una interpretación del artículo 4° de la Constitución Federal, en relación al principio del interés superior del menor, en atención a que se cuestionó la constitucionalidad del artículo 373, fracción VI, del Código Civil para el 10 Ibíd. Foja 189. 5 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 Estado de Veracruz, aunado a que no se requiere la intervención del Tribunal Pleno de esta Suprema Corte de Justicia de la Nación. 15. Cabe señalar que el presente asunto se rige por la Ley de Amparo vigente hasta el dos de abril de dos mil trece, en atención a que la demanda de amparo fue interpuesta durante la vigencia de dicha ley, por lo que en términos del transitorio tercero del Decreto que publicó la Ley de Amparo el dos de abril de dos mil trece en el Diario Oficial de la Federación, la ley aplicable es la ley de la materia abrogada. 16. Oportunidad del recurso. El recurso de revisión planteado por el recurrente, fue interpuesto en tiempo y forma, de conformidad con lo dispuesto por el artículo 86 de la Ley de Amparo, pues de las constancias de autos se advierte que la sentencia dictada por el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Séptimo Circuito, le fue notificada a la parte quejosa por medio de lista el lunes catorce de enero de dos mil trece,11 surtiendo efectos el día hábil siguiente, es decir, el martes quince del citado mes y año, de conformidad con la fracción II del artículo 34 de la Ley de Amparo. 17. Así, el plazo de diez días que señala el artículo 86 de la Ley de Amparo, corrió del miércoles dieciséis al martes veintinueve de enero de dos mil trece, sin contar en dicho plazo los días diecinueve, veinte, veintiséis y veintisiete de enero de dos mil trece, al corresponder a sábado y domingo, inhábiles conforme a los artículos 23 de la Ley de Amparo y 163 de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación. 18. Por lo tanto, si el recurso que nos ocupa se presentó el viernes veinticinco de enero de dos mil trece, ante el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Séptimo Circuito, es evidente que tal interposición se hizo oportunamente. 11 Foja 257 vuelta, cuaderno de amparo directo 688/2012. 6 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 IV. PROCEDENCIA 19. En primer lugar, se debe analizar si el presente asunto reúne los requisitos de importancia y trascendencia a que hacen alusión los artículos 107, fracción IX, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, 83, fracción V, de la Ley de Amparo, así como el punto Primero del Acuerdo General Plenario 5/1999, que aparece publicado en el Diario Oficial de la Federación de veintidós de junio de dicho año, para verificar si es o no procedente el recurso de revisión que nos ocupa. 20. De conformidad con lo dispuesto en los artículos 107, fracción IX, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y 83, fracción V, de la Ley de Amparo, para la procedencia del recurso de revisión en amparo directo, se requiere reunir los siguientes requisitos: 20.1 Que en la sentencia recurrida se haya hecho pronunciamiento sobre la constitucionalidad de una ley, tratado internacional o reglamento, o se establezca la interpretación directa de un precepto constitucional, o que, habiéndose planteado alguna de esas cuestiones en la demanda de amparo, se haya omitido su estudio; y 20.2 Que el problema de constitucionalidad entrañe la fijación de un criterio jurídico de importancia y trascendencia, a juicio de la Sala respectiva. 21. Por lo que se refiere al segundo de los requisitos antes mencionados, el Punto Primero, fracción II,12 del Acuerdo 5/1999, señala que, por 12PRIMERO. Procedencia (…) II. Por regla general, se entenderá que no se surten los requisitos de importancia y trascendencia cuando: a) Exista jurisprudencia sobre el tema de constitucionalidad planteado; 7 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 regla general, se entenderá que no se surten los requisitos de importancia y trascendencia cuando exista jurisprudencia sobre el problema de constitucionalidad hecho valer en la demanda de amparo, así como cuando no se hayan expresado agravios o, en su caso, éstos resulten ineficaces, inoperantes, inatendibles o insuficientes y no haya que suplir la deficiencia de la queja, o bien, en casos análogos. Sobre el particular, es aplicable la jurisprudencia 1a./J. 101/2010.13 22. En este sentido, cabe destacar que el recurso en cuestión cumple con los requisitos antes aludidos, porque en el amparo se alegó la inconstitucionalidad del artículo 373, fracción VI, del Código Civil para el Estado de Veracruz, aunado a que en la sentencia recurrida se interpretó lo relativo al principio del interés superior del menor, de conformidad a como lo reconoce el artículo 4° de la Constitución Federal, toda vez que se realizó una ponderación de las circunstancias del caso para alcanzar la conclusión de negativa del amparo. V. CONSIDERACIONES Y FUNDAMENTOS 23. Consideraciones necesarias para resolver el asunto. A fin de resolver el presente asunto, es preciso referir a los argumentos esgrimidos en el escrito de demanda de amparo, las consideraciones que tuvo el Tribunal Colegiado para emitir la sentencia controvertida, y los agravios recurridos en contra de dicha resolución. 24. Conceptos de violación. La parte quejosa argumentó siete conceptos de violación en los que en síntesis señala: b) Cuando no se hayan expresado agravios o cuando, habiéndose expresado, sean ineficaces, inoperantes, inatendibles o insuficientes, siempre que no se advierta queja deficiente que suplir; c) En los demás casos análogos a juicio de la Sala correspondiente. 13 Novena Época del Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, tomo XXXIII, enero de 2011, visible en la página 71, de rubro: “AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN. REQUISITOS DE PROCEDENCIA QUE DEBEN SER REVISADOS POR EL PRESIDENTE DE LA SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN O DE SUS SALAS”. 8 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 24.1 Que es injusto e ilegal que se le prive de ejercer la patria potestad respecto de sus hijos, porque en el caso no se demostró que hubiere cometido dolosamente un delito en agravio de sus hijos, pues si bien fue condenada por el delito de sustracción de menores, pues nunca tuvo conocimiento de que los menores estaban en depósito sujeto a la guarda y custodia del tercero interesado, lo que demuestra que dicha conducta no puede consistir en un acto doloso como indebidamente señala la Sala responsable. Ni tampoco puede derivarse que los menores hubieren sido las víctimas del delito, sino en todo caso la víctima lo fue el tercero perjudicado, quien no pudo ejercer la guarda y custodia de los menores. De ahí que al no ser dolosa la conducta delictiva por la cual fue condenada no puede aplicarse la fracción VI del artículo 373 del Código Civil para el Estado de Veracruz. 24.2 Que la responsable pasa por alto que la comisión de delitos puede ser de forma dolosa o culposa, y que en el caso, no puede considerarse que en la sustracción de sus hijos haya actuado con dolo, porque no tenía conocimiento que estaban bajo la guarda y custodia del padre. 24.3 Solicita que sean revisadas las constancias de autos, porque al momento que el tercero perjudicado hizo valer en vía de reconvención su demanda de pérdida de la patria potestad, todavía estaba sub júdice la legalidad de la sentencia penal, al estar pendiente el amparo promovido en contra de la condena penal. 24.4 Le agravia que la Sala responsable determine que debido a la sustracción de sus menores hijos se repercutió gravemente en su sano desarrollo específicamente en su 9 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 educación, porque es ilegal la valoración de la entrevista que se le realizó a su menor hija, en la que fue evidente que era víctima de alienación parental, lo que no se valoró debidamente. Al igual que la responsable tampoco valoró los contenidos de las documentales aportadas que contrario a su apreciación sí probaban que los niños acudían a la escuela. Lo que demuestra que la quejosa nunca incurrió en algún supuesto para que se le condene a la pérdida de la patria potestad. 24.5 Solicita que en atención al principio del interés superior del menor se analicen todas y cada una de las pruebas aportadas a juicio, las cuales demuestran que no se comprometió la salud, la seguridad o la integridad moral de sus hijos, que en su caso ocasionara el motivo de pérdida de la patria potestad. 24.6 En su segundo argumento, insiste que no es correcto que se le condene a la pérdida de la patria potestad, porque nunca ha sido condenada por haber cometido un delito doloso en agravio de sus hijos, ni ha abandonado sus deberes de madre, por lo que si por justicia se determina que no debe condenársele a la pérdida de la patria potestad, solicita se estudien los agravios formulados en el escrito de apelación relativos a la determinación de guarda y custodia a favor del padre. 24.7 En el tercer concepto de violación señala que le agravia la modificación al régimen de convivencia y vigilancia que tendrá con sus menores hijos, porque no se tomaron en cuenta los periodos vacacionales de abril, julio, agosto o diciembre, al considerar el juzgador que por el momento sus hijos se sienten inseguros y sólo será más adelante 10 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 cuando ya no haya esa inseguridad cuando se modifique lo pertinente de la convivencia en dichos períodos vacacionales, aunado a que en las referidas vacaciones es cuando los niños viajan a Francia a convivir con sus abuelos, además, porque dice que los niños manifestaron sentirse inseguros con su madre, lo cual es una mentira, ya que la expresión y declaración de los niños se hizo bajo presión, aunado a que fue evidente la alienación parental. De modo que el régimen de convivencia decretado resulta también lesivo para los niños pues se reduce a diez horas un solo día a la semana (sábado), y a que reduce por completo la posibilidad de que los menores vacacionen con su madre y convivan con los familiares maternos, pues no sólo tienen abuelos paternos, lo cual es un trato injusto y desigual que puede ocasionar que se alejen más de la madre y que no se les permita la convivencia a la que tienen derecho como familia. Todo ello, es contrario al artículo 4° de la Constitución Federal, así como al contenido del artículo 9° de la Convención sobre los Derechos del Niño. 24.8 En su cuarto concepto de violación, la quejosa señaló que en caso de que se decida que no debe perder la patria potestad y que la guarda y custodia le corresponde, se cancele la condena al pago de alimentos al incorporar a los niños a su vivienda, con lo cual cubriría la obligación alimentaria. 24.9 En el quinto argumento, señala que le agravia que la responsable no haya atendido al último párrafo del artículo 514 del Código de Procedimientos Civiles para el Estado de Veracruz, que le obliga en todo caso a suplir los agravios de la suscrita. 11 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 24.10 En el sexto argumento señala que le agravia que la responsable no haya valorado debidamente todas las pruebas que obran en autos, por ejemplo, por lo que hace al estado de autos donde se desprende que la sentencia del proceso penal al que fue sujeta aún no estaba firme cuando el tercero perjudicado demandó la pérdida de la patria potestad, lo que de haberse tomado en cuenta, así como las constancias del proceso penal se habría concluido que no se cometió una conducta dolosa en contra de los menores. 24.11 En su séptimo y último concepto de violación, nuevamente reclama la inconstitucionalidad del artículo 373, fracción VI, del Código Civil para el Estado de Veracruz, porque considera vulneran los artículos 4°, 14, 16 y 22 de la Constitución Federal, ya que no es clara su redacción, pues no otorga las bases para que el juez civil pueda clasificar como doloso algún ilícito, dado que no le indica cuáles podrían ser tales ilícitos y cuando serían dolosos. Lo que ocasiona que el juez civil no pueda tomar en cuenta las circunstancias particulares del caso para decretar la pérdida de la patria potestad, lo que violenta el artículo 4° de la Constitución Federal, pues deja a un lado la posibilidad de arbitrio judicial del juzgador, que constituye la facultad del juez para valorar discrecionalmente las diferentes circunstancias que se presentan en el desarrollo de los procesos. 24.12 Argumenta también que la sanción que impone el precepto cuestionado es excesiva y en consecuencia violatoria del artículo 22 de la Constitución Federal, el cual no es un numeral exclusivo de la materia penal, pues la 12 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 intención del texto constitucional es proscribir todas las penas inusitadas e intrascendentes. Lo que violenta el artículo 373, fracción VI, del Código sustantivo aludido, porque al prever la sanción de pérdida de la patria potestad lejos de garantizar el desarrollo del menor, puede afectarlo, aunado a que incide en el desarrollo integral de la familia lo que también constituye un derecho y garantía fundamental. 24.13 Desarrolla su argumento en relación a que la protección a la familia constituye un imperativo constitucional y convencional, que comprende el derecho de protección al núcleo familiar frente a actuaciones arbitrarias e injustificadas que lo lesionen, de modo que la patria potestad también se erige como una garantía de carácter fundamental con una clara dimensión social, a la par que una dimensión individual, y por lo tanto incide en la pena civil a la cual se le ha condenado, misma que resulta desproporcionada y no adecuada para la protección del interés superior del menor. 25. Consideraciones de la sentencia recurrida. El Tribunal Colegiado que conoció del amparo, resolvió sobre su negativa al considerar medularmente lo siguiente: 25.1 Sobreseyó respecto a la autoridad responsable ejecutora, Juez Cuarto de Primera Instancia residente en Veracruz, en virtud de que no se le imputó ningún acto reclamado, ni se advirtió la necesidad de ejecución de la sentencia recurrida al haber sido la apelación admitida en ambos efectos conforme al artículo 516 del Código de Procedimientos Civiles para el Estado de Veracruz. 13 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 25.2 Determinó que toda vez que en el caso se encuentran inmersos los derechos de dos menores, se debía de suplir la deficiencia de la queja en su favor, en términos de la fracción V del artículo 76 de la Ley de Amparo. 25.3 Consideró que en parte resultan fundados los conceptos de violación de la quejosa, sin embargo no es procedente la concesión del amparo. Ello, porque a pesar que calificó como fundado el argumento respecto a que la fracción VI del artículo 373 del Código Civil para el Estado de Veracruz, vulnera el artículo 22 de la Constitución Federal, pues la sanción que impone sí contradice el principio de proporcionalidad así como al principio del interés superior del menor, no obstante ello, la norma no puede calificarse como inconstitucional porque persigue un fin constitucionalmente válido relativo a la protección del derecho del menor a un desarrollo y bienestar íntegro, por lo que consideró que la deficiencia de la norma puede ser subsanada por medio de una interpretación conforme a los principios establecidos en los artículos 4° y 22 de la Constitución Federal. 25.4 Para ello señaló que la Suprema Corte de Justicia de la Nación, ya ha establecido un principio constitucional de protección a la familia desde una dimensión social e individual, así como una protección constitucional a la institución de la patria potestad, que es reconocida como una institución que comprende un conjunto de poderes y deberes a cargo de los ascendientes como lo es la custodia, la educación, la formación cultural, ética, moral, religiosa así como la administración patrimonial sobre la persona y bienes de los descendientes. 14 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 25.5 Señaló que la patria potestad también representa un derecho subjetivo protegido por la Constitución y por los instrumentos internacionales que implica que los padres tienen el derecho de protección contra cualquier intervención arbitraria externa ya sea pública o privada, lo cual es coherente con el principio de interés superior del menor, conforme al artículo 4° de la Constitución Federal, en tanto los menores tienen el derecho de desarrollarse en la unidad familiar y ser criados por sus padres. 25.6 No obstante, existen circunstancias en las que es necesaria la pérdida de la patria potestad de alguno de los progenitores, lo que se erige como una sanción civil, de acuerdo a como lo ha interpretado la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Como la fracción VI del artículo 373 del Código Civil de Veracruz, que la establece como condena. 25.7 En ese sentido al consistir el artículo reclamado en una sanción de carácter civil, el Colegiado advirtió que entonces ésta debe cumplir con los principios que regulan a las penas y las sanciones y por ello se analizó lo relativo al principio de proporcionalidad, mismo que presupone la existencia de una relación entre el objeto o la finalidad de una decisión normativa y el medio o instrumento empleado para intervenir en los derechos constitucionales. 25.8 Así, el Colegiado determina que el artículo 373, fracción VI, del Código Civil para el Estado de Veracruz, contraviene el principio de proporcionalidad establecido en el artículo 22 constitucional para las penas y sanciones, porque no permite al juzgador graduar la medida de la pena de acuerdo a las circunstancias particulares del caso, esto 15 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 porque no todo delito doloso conlleva la misma afectación al menor, específicamente señala que por ejemplo con base en el delito de sustracción de menores la afectación al bienestar y desarrollo íntegro del menor es diferente. Situación que también menoscaba el principio del interés superior del menor reconocido en el artículo 4° constitucional. 25.9 No obstante el vicio de inconstitucionalidad, consideró el Colegiado que la norma no puede ser desaplicada porque de ser así implicaría un mayor perjuicio a los intereses del menor, por lo que en el caso cabe realizar una interpretación conforme del precepto a efecto de determinar que para la aplicación de esta norma, el juzgador debe partir de las circunstancias particulares del caso concreto a fin de realizar un juicio de ponderación entre los derechos del menor a un desarrollo y bienestar íntegro y el derecho del progenitor a ejercer la institución de la patria potestad, a fin de buscar la solución más idónea a cada caso en particular. 25.10 Bajo esas consideraciones, el Colegiado estimó que en el caso no es procedente conceder el amparo atendiendo a sus particularidades y en atención al interés superior que asiste a los menores, porque de las actuaciones remitidas por la autoridad responsable, se advierte que durante la tramitación de los juicios naturales los menores han sufrido perturbación en su sano bienestar y desarrollo. 25.11 Además, porque el delito de sustracción de menores de acuerdo a como se tipifica en el artículo 241 del Código Penal de Veracruz, califica como sujeto pasivo al menor de dieciséis años de edad o incapaz, con relación de 16 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 parentesco respecto del sujeto activo del delito, y no al progenitor que por una situación de hecho o derecho detentaba la guarda y custodia del menor al momento de la comisión del ilícito, además que se advierte que la conducta sí fue dolosa contrario a las argumentaciones de la quejosa. 25.12 Por lo anterior, consideró que también resultan infundados los argumentos relativos a que la responsable valoró indebidamente las pruebas aportadas, porque la sanción de la pérdida de patria potestad sólo toma de base el elemento objetivo consistente en la existencia de la sentencia penal del ilícito doloso cometido en contra de sus hijos. 25.13 Igualmente consideró infundado el argumento relativo a que al momento de que el tercero perjudicado accionó la pretensión de pérdida de la patria potestad, la sentencia penal aún no era firme porque estaba pendiente un amparo interpuesto en su contra, por que el amparo no tiene naturaleza de recurso ordinario, sino de un medio de defensa de los derechos humanos, por lo que al momento de la interposición de la acción reconvencional de pérdida de la patria potestad, la condena por el delito de sustracción de menores ya había causado estado. 25.14 El Colegiado después de realizar un estudio de ponderación respecto de todas las documentales y pruebas aportadas al juicio, concluye que éstas son suficientes para decretar la pérdida total de la patria potestad en perjuicio de la quejosa, porque de acuerdo a las circunstancias particulares se demuestra que sí se afectó la integridad y desarrollo de los menores por efectos 17 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 de la comisión del ilícito de sustracción de menores, y en consecuencia la sanción resulta proporcional, aunado a que ello es lo más conveniente para los menores debido a la evidente falta de acuerdos de los progenitores, lo que obstaculizaría sin duda las decisiones que se deban tomar respecto a su educación. 25.15 Por último, el Colegiado desestima todos los argumentos relativos al cambio del régimen de convivencia de la quejosa con sus menores hijos, así como confirma la pensión alimenticia decretada en su contra. 26. Agravios. La recurrente en su escrito de recurso de revisión que aquí se estudia, formuló siete agravios de los que en síntesis señala: 26.1 En el primer agravio la recurrente manifiesta que es incorrecta la determinación del Tribunal Colegiado de no declarar la inconstitucionalidad e inaplicabilidad del numeral 373, fracción VI, del Código Civil para el Estado de Veracruz, porque no comparte la opinión respecto de que a pesar que dicha norma es desproporcionada, la misma es útil para resguardar el bienestar íntegro del menor, pues contrario a ello el Colegiado debió de ponderar las circunstancias particulares del caso. Aunado a que el Colegiado no advirtió, que la norma no permite el análisis de los casos en concreto. 26.2 Que es equivocado hacer una interpretación subsanada de la norma, porque los fines que el legislador pretende con dicha sanción pueden ser alcanzados y cumplidos a través de otras normas también contempladas en el mismo ordenamiento o en el Código Penal del mismo Estado, por lo que no es legal el análisis teleológico. 18 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 26.3 Apela a que se analice su situación particular, por la que relata que es una mexicana, mujer y madre y que precisamente derivado de un acto acarreado por la naturaleza materna, fue lo que la motivó a llevarse a sus hijos ante el maltrato que recibía en el hogar, pero que desconocía que el padre hábilmente había establecido un depósito provisional de personas y por ello incurrió en un ilícito que de ningún modo fue doloso. 26.4 Que se debe tomar en cuenta que si bien el legislador puede restringir derechos, estos límites deben ser proporcionales e idóneos, lo que demuestra que la sanción establecida en la fracción VI del artículo 373 del Código Civil para el Estado de Veracruz, es inconstitucional porque no permite la posibilidad de valoración jurisdiccional sobre las circunstancias particulares del caso, porque tal y como lo señaló el Colegiado el numeral no establece reglas para calificar la característica del delito, es decir, si se está en presencia de un delito grave o no grave. 26.5 Que para concluir en la inconstitucionalidad del precepto se debe considerar la garantía institucional de protección a la familia, la cual reconoce la Constitución y los diversos tratados internacionales en materia de derechos humanos, que goza de una dimensión individual y social, y por ello la patria potestad está estrechamente ligada a esta protección, pues es necesaria para la cohesión del grupo familiar, en ese sentido no es válido que se prive de la patria potestad de forma desproporcionada, por más que persiga una finalidad constitucionalmente válida, so pena de violar la norma suprema. 19 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 26.6 Solicita que esta Suprema Corte de Justicia de la Nación, determine hasta qué punto el legislador puede restringir el derecho de los padres a ejercer la patria potestad frente a la protección del interés superior de los menores. 26.7 En su segundo agravio reclama el ilegal análisis y valoración de las circunstancias particulares del caso para determinar la ponderación de derechos, así como de los medios de prueba, especialmente porque el Colegiado concluyó que la estabilidad emocional y psicológica de los menores de edad resultó seriamente perturbada como producto de la comisión de la conducta delictiva. 26.8 Señala que el Tribunal Colegiado es incongruente porque determina que la causa de pérdida de la patria potestad, por comisión de ilícitos en contra de los menores, opera tratándose de delitos graves, sin considerar que el delito de sustracción de menores no se califica como grave en el Código Penal para el Estado de Veracruz. 26.9 Además, que es ilógico que el Colegiado sostenga que en todo delito de sustracción de menores, se está en presencia de un delito doloso, pues argumenta que dicha conducta nunca se realizó de forma dolosa, pues jamás tuvo conocimiento del depósito judicial de sus menores hijos entablado a sus espaldas por el padre. 26.10 En su tercer agravio la recurrente reclama que del análisis al tipo penal del delito de sustracción de menores, el Colegiado concluya que invariablemente en este ilícito la víctima es siempre el menor, lo que es injusto, porque no se toman en cuenta las particularidades del caso. 20 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 26.11 También le agravia que el Colegiado no haya tomado en cuenta que cuando el padre de los menores ejerció la acción de pérdida de la patria potestad la sentencia penal aún no había causado estado, porque estaba sub júdice el juicio de amparo que promovió, que no obstante confirmara la sentencia penal, ya que en ese momento no había posibilidad de ejercer una acción de pérdida de la patria potestad por esa sentencia penal pues ésta estaba suspendida. 26.12 En el argumento señalado como quinto agravio,14 dice que es injusta la valoración completamente subjetiva que realiza el Tribunal Colegiado para concluir que a consecuencia del delito de sustracción de menores se ha causado una grave alteración en los ámbitos educativos, emocionales y psicológicos de sus menores hijos, pues es evidente que no se revisó el expediente ni se analizaron los argumentos inmersos en los conceptos de violación. Por ejemplo, lo relativo a las manifestaciones que demuestran que es falso que los niños hubieren faltado a la escuela el tiempo que estuvieron con ella. 26.13 En el sexto agravio, manifiesta que le afrenta que el Tribunal Colegiado haya señalado que es palpable que el juicio entre su aun esposo y la suscrita no ha podido conciliarse, por lo que han tenido que llegar hasta las últimas instancias, y de ahí que exista la necesidad de determinar la pérdida de la patria potestad, pues si bien no ha podido ponerse de acuerdo con su esposo, esto ha sido así porque es él quien no quiere ceder, y por ese 14 Se advierte que en secuencia numérica corresponde al cuarto agravio, pero la recurrente lo distingue como agravio quinto. 21 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 motivo la recurrente manifiesta que no va a dejar de pelear por sus hijos. 26.14 En su séptimo y último agravio, señala que el Colegiado no dio respuesta correcta a su concepto de violación en relación a la modificación del régimen de convivencia que se decretó entre la recurrente y sus hijos, pues la consideración del Colegiado se basa en una indebida valoración de pruebas, pues por ejemplo, no valoró ni mencionó los reportes de convivencia de los niños con la suscrita que fueron remitidos por el DIF de Veracruz. Ni tampoco que al momento de que el tercero perjudicado incoara la acción de pérdida de la patria potestad, la sentencia penal aún estaba sub júdice por motivo de la interposición de un amparo. 27. Problemática jurídica a resolver. Los extremos del problema estriban en determinar primeramente si fue correcta la determinación del Tribunal Colegiado para considerar que en el caso resulta proporcional la sanción impuesta con base en la fracción VI del artículo 373 del Código Civil para el Estado de Veracruz, de acuerdo a la cual es una causa de pérdida de la patria potestad que el progenitor cometa un delito doloso en contra del menor, así como en segundo término dilucidar si la conclusión del Tribunal Colegiado para negar el amparo fue correcta. 28. Por tanto, las interrogantes a responder son las siguientes: a. ¿La fracción VI del artículo 373 del Código Civil para el Estado de Veracruz, es contraria a los principios de proporcionalidad y del interés superior del menor y protección a la familia? 22 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 b. ¿Cabe realizar una interpretación conforme a la fracción VI del artículo 373 del Código Civil para el Estado de Veracruz? c. ¿Fue correcta la apreciación de las circunstancias particulares del caso concreto por parte de la autoridad responsable? VI. ESTUDIO DE FONDO 29. Primeramente es necesario determinar que en el caso se actualiza el supuesto contenido en el artículo 76-Bis, fracción V, de la Ley de Amparo, por lo que procede suplir la deficiencia de los agravios expresados por la recurrente, al estar de por medio la esfera jurídica de menores de edad,15 y así poder establecer la interpretación constitucional que debe prevalecer en el caso concreto. 30. Ahora bien, con el objeto de responder a las dos primeras interrogantes, se abordará el estudio de los agravios primero, segundo y tercero, sintetizados en los puntos 26.1 a 26.10 de esta resolución, en los que medularmente señala que la fracción VI del artículo 373 del Código Civil para el Estado de Veracruz, es inconstitucional porque no 15 Véase la jurisprudencia 1a./J. 191/2005 de la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo XXIII, mayo de 2006, página 167, cuyo rubro y texto es el siguiente: “MENORES DE EDAD O INCAPACES. PROCEDE LA SUPLENCIA DE LA QUEJA, EN TODA SU AMPLITUD, SIN QUE OBSTE LA NATURALEZA DE LOS DERECHOS CUESTIONADOS NI EL CARÁCTER DEL PROMOVENTE. La suplencia de la queja es una institución cuya observancia deben respetar los Jueces y Magistrados Federales; suplencia que debe ser total, es decir, no se limita a una sola instancia, ni a conceptos de violación y agravios, pues el alcance de la misma comprende desde el escrito inicial de demanda de garantías, hasta el periodo de ejecución de la sentencia en caso de concederse el amparo. Dicha suplencia opera invariablemente cuando esté de por medio, directa o indirectamente, la afectación de la esfera jurídica de un menor de edad o de un incapaz, sin que para ello sea determinante la naturaleza de los derechos familiares que estén en controversia o el carácter de quién o quiénes promuevan el juicio de amparo o, en su caso, el recurso de revisión, ello atendiendo a la circunstancia de que el interés jurídico en las controversias susceptibles de afectar a la familia y en especial a menores e incapaces, no corresponde exclusivamente a los padres, sino a la sociedad, quien tiene interés en que la situación de los hijos quede definida para asegurar la protección del interés superior del menor de edad o del incapaz. Se afirma lo anterior, considerando la teleología de las normas referidas a la suplencia de la queja, a los criterios emitidos por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, así como a los compromisos internacionales suscritos por el Estado mexicano, que buscan proteger en toda su amplitud los intereses de menores de edad e incapaces, aplicando siempre en su beneficio la suplencia de la deficiencia de la queja, la que debe operar desde la demanda (el escrito) hasta la ejecución de sentencia, incluyendo omisiones en la demanda, insuficiencia de conceptos de violación y de agravios, recabación oficiosa de pruebas, esto es, en todos los actos que integran el desarrollo del juicio, para con ello lograr el bienestar del menor de edad o del incapaz”. 23 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 permite al juzgador ponderar las circunstancias particulares del caso, en perjuicio del interés superior del menor, del derecho a la patria potestad y de la protección a la familia, así como alega que esta sanción civil resulta inusitada y desproporcionada lo que contraviene el artículo 22 de la Constitución Federal. 31. La primer pregunta a responder entonces es si ¿la fracción VI del artículo 373 del Código Civil para el Estado de Veracruz, es contraria a los principios de proporcionalidad, del interés superior del menor y de la protección a la familia? 32. Para determinar lo anterior es pertinente transcribir aquí lo que dispone el artículo 373, fracción VI, del Código Civil para el Estado de Veracruz, en su texto, el cual es el siguiente: “ARTÍCULO 373 La patria potestad se pierde: I.- Cuando el que la ejerza es condenado expresamente a la pérdida de ese derecho, o cuando es condenado dos o más veces por delitos graves; II.- En los casos de divorcio, teniendo en cuenta lo que dispone el artículo 157; III.- Cuando por las costumbres depravadas de los padres, malos tratamientos o abandono de sus deberes, pudiera comprometerse la salud, la seguridad o la moralidad de los hijos, aun cuando esos hechos no cayeren bajo la sanción de la ley penal; (ADICIONADO, G.O. 12 DE JUNIO DE 1997) Asimismo, cuando tolere que otras personas atenten o pongan en riesgo la integridad física o moral de los menores; (REFORMADA, G.O. 1 DE FEBRERO DE 2008) IV.- Por la exposición que el padre, la madre o ambos hicieren de sus hijos, o porque los dejen abandonados por más de dos meses. En los casos de adopción, tomando en cuenta el interés superior del menor, acreditada su situación de abandonado, el juez resolverá previamente la pérdida de la patria potestad; 24 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 (ADICIONADA, G.O. 12 DE JUNIO DE 1997) V.- Por la entrega que el padre o la madre o quien ejerce la patria potestad hiciere del menor a una institución de asistencia social pública o privada con la finalidad de que sea dado en adopción; (ADICIONADA, G.O. 8 DE SEPTIEMBRE DE 1998) VI.- Cuando el que la ejerza sea condenado por la comisión de un delito doloso en el que la víctima sea el menor; (ADICIONADO, G.O. 15 DE AGOSTO DE 2005) VII.- Cuando el que la ejerce haya sido limitado en la misma tal y como lo describe el artículo 373 Bis, y al recuperarla reincida en conductas de violencia familiar.” 33. Del artículo anterior, se desprende que este precepto establece una serie de supuestos que causan la pérdida de la patria potestad, tal como la relativa a la fracción VI, de cuando quien ejerza la patria potestad sea condenado por la comisión de un delito doloso en el que la víctima sea el menor. 34. Así, para entender los extremos de la gravedad de la sanción de esta naturaleza, es preciso abundar sobre la institución de la patria potestad. La cual se define como la institución derivada del vínculo paterno-materno filial que relaciona ascendientes con descendientes, en el que se considera que existe un poder concedido a los ascendientes como medio para cumplir con sus deberes respecto a la guarda, custodia, crianza y formación de sus descendientes, lo que se equipara a una función de interés público, pues los padres se encuentran sumisos a las necesidades de los hijos de acuerdo a como se consideran correctas por la sociedad. 35. Esto es, la patria potestad implica la delegación de una función de interés público y social, para que sea ejercida por los ascendientes y de este modo cuenten con determinadas facultades o derechos conferidos por la ley con el objeto de cuidar a los menores, cuyos efectos inciden primeramente sobre la persona, en tanto los menores están sometidos al progenitor con motivo de la función protectora y 25 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 formativa relativa a la crianza y a la educación, que incluso otorga al progenitor la facultad correctiva a la conducta del menor, misma que es una potestad limitada, pues los progenitores para usar legítimamente esta facultad deben usar medios correctivos adecuados que no atenten contra la integridad física del menor. 36. De igual modo, la patria potestad tiene efectos sobre el patrimonio del menor, en tanto la facultad de esta institución también otorga al ascendiente el poder para administrar los bienes del menor, potestad que igualmente es limitada pues el progenitor no puede disponer de los bienes del menor, sino sólo administrarlos en búsqueda de su mantenimiento e incremento en beneficio exclusivo del interés del menor. 37. Así la patria potestad es una institución en beneficio de los menores, no de lo progenitores lo que se corrobora del propio Código Civil para el Estado de Veracruz, en el cual se advierte que en la reforma publicada el ocho de septiembre de mil novecientos noventa y ocho, por la que se adicionó la fracción VI del artículo 373 del Código Civil de dicha entidad, el legislador también consideró adecuar diversas disposiciones relativas a reforzar que la institución de la patria potestad debe siempre ejercerse en beneficio del menor, y no como una institución de potestad del progenitor. Las cuales disponen: “ARTÍCULO 340 En la relación entre ascendientes y descendientes debe imperar el respeto y la consideración mutuos, cualquiera que sea su estado y condición. ARTÍCULO 351 A las personas que tienen al menor bajo su patria potestad o custodia, incumbe la obligación de educarlo convenientemente. Cuando llegue a conocimiento de los Consejos Locales de Tutela o de cualquier autoridad administrativa que dichas personas no cumplen con la obligación referida, lo avisarán al Ministerio Público para que promueva lo que corresponda. (REFORMADO, G.O. 8 DE SEPTIEMBRE DE 1998) 26 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 ARTÍCULO 352 Para los efectos del artículo anterior, quienes ejerzan la patria potestad o tengan menores bajo su custodia, tienen la facultad de corregirlos y la obligación de observar una conducta que sirva a éstos de buen ejemplo. La facultad de corregir no implica infligir al menor actos de fuerza que atenten contra su integridad física o psíquica en los términos de lo dispuesto por el artículo 254 TER de este Código. ARTÍCULO 354 Los que ejercen la patria potestad son legítimos representantes de los que están bajo de ella, y tienen la administración legal de los bienes que les pertenecen, conforme a las prescripciones de este Código.” 38. Además, esta Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, al resolver el amparo directo en revisión 348/2012, en la pasada sesión del cinco de diciembre de dos mil doce, ya ha determinado que esta institución ha evolucionado pues la patria potestad no se configura como un derecho del padre, sino como una función que se les encomienda a los padres en beneficio de los hijos y que está dirigida a la protección, educación y formación integral de los hijos, cuyo interés es siempre prevalente en la relación paterno-filial, acentuándose asimismo la vigilancia de los poderes públicos en el ejercicio de dicha institución en consideración prioritaria del interés del menor. 39. Lo anterior es así, porque la institución de la patria potestad parte de la premisa de que el menor de edad no puede cuidarse y necesita la educación, cuidado y protección de sus ascendientes para sobrevivir; por lo mismo, los órganos judiciales deben abandonar la vieja concepción de la patria potestad como poder omnímodo del progenitor sobre los hijos, pues la función que se le encomienda a los padres debe ser en todo momento en beneficio de los hijos, por lo que toda función debe estar dirigida a la protección, educación y formación integral de estos últimos, pues es el interés de los menores el que 27 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 prevalece en la relación paterno-filial, a lo anterior tiene aplicación la tesis 1a. LXIII/2013 (10a.),16 de rubro y texto: “PATRIA POTESTAD. SU CONFIGURACIÓN COMO UNA INSTITUCIÓN ESTABLECIDA EN BENEFICIO DE LOS HIJOS. La configuración actual de las relaciones paterno-filiales ha sido fruto de una importante evolución jurídica. Con la inclusión en nuestra Constitución del interés superior del menor, los órganos judiciales deben abandonar la vieja concepción de la patria potestad como poder omnímodo del padre sobre los hijos. Hoy en día, la patria potestad no se configura como un derecho del padre, sino como una función que se le encomienda a los padres en beneficio de los hijos y que está dirigida a la protección, educación y formación integral de estos últimos, cuyo interés es siempre prevalente en la relación paterno-filial, acentuándose asimismo la vigilancia de los poderes públicos en el ejercicio de dicha institución en consideración prioritaria del interés del menor. Es por ello que abordar en nuestros días el estudio jurídico de las relaciones paterno-filiales y en particular de la patria potestad, requiere que los órganos jurisdiccionales partan de dos ideas fundamentales, como son la protección del hijo menor y su plena subjetividad jurídica. En efecto, por un lado, el menor de edad está necesitado de especial protección habida cuenta el estado de desarrollo y formación en el que se encuentra inmerso durante esta etapa vital. La protección integral del menor constituye un mandato constitucional que se impone a los padres y a los poderes públicos. Al mismo tiempo, no es posible dejar de considerar que el menor es persona y, como tal, titular de derechos, estando dotado además de una capacidad progresiva para ejercerlos en función de su nivel de madurez.” 40. Pues bien, entre los derechos y obligaciones derivados del ejercicio de la patria potestad, destaca el deber de la protección integral del menor en sus aspectos físico, moral y social, su guarda y su custodia, la administración de los bienes y el derecho de corrección que como se señaló encuentran sus límites precisamente en el bienestar físico y 16 Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Libro XVII, febrero de 2013, Tomo 1, página: 828, Registro: 2002848. Derivado del amparo directo en revisión 348/2012. 5 de diciembre de 2012. Unanimidad de cuatro votos; José Ramón Cossío Díaz reservó su derecho para formular voto concurrente. Ausente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario: Javier Mijangos y González. Y del amparo directo en revisión 2554/2012. 16 de enero de 2013. Mayoría de cuatro votos. Disidente: José Ramón Cossío Díaz. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario: Javier Mijangos y González. 28 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 mental del menor, pues de transgredirlo el ejercicio de esta potestad resulta ilícito.17 41. Por este motivo, la pérdida de la patria potestad no es una medida que tenga por objeto castigar a los progenitores por el incumplimiento a los deberes de la patria potestad, sino que la medida pretende defender los intereses del menor en aquellos casos en los que el bienestar del menor se garantiza mejor cuando los padres estén separados de sus hijos y así evitar que puedan decidir respecto a la vida de éstos, de forma que ésta es una medida extrema que debe comprobar plenamente que el progenitor no pretende buscar el bienestar del menor, sino por el contrario su perjuicio. A lo anterior resulta aplicable la Tesis: 1a. XLIX/2013 (10a.)18 de rubro y texto: “PRIVACIÓN DE LA PATRIA POTESTAD. SU FUNCIÓN COMO MEDIDA PROTECTORA DEL INTERÉS SUPERIOR DEL MENOR. La privación de la patria potestad no es una medida que tenga por fin sancionar a los padres por el incumplimiento de los deberes de la patria potestad respecto del hijo. Por el contrario, ésta debe entenderse como una medida excepcional con la que se pretende defender los intereses del menor en aquellos casos en los que la separación de los padres sea necesaria para la protección adecuada de los mismos. En este sentido, el artículo 9.1 de la Convención sobre los Derechos del Niño, establece que los Estados partes velarán porque el niño no sea separado de sus 17 Tesis: 1a. CXI/2008. De rubro y texto: DERECHOS DERIVADOS DE LA PATRIA POTESTAD (CÓDIGO CIVIL DEL ESTADO DE MÉXICO). Esta Suprema Corte de Justicia de la Nación reiteradamente ha destacado la importancia de tomar en cuenta el interés superior del niño que implica entre otras cosas tomar en cuenta aspectos relativos a garantizar y proteger su desarrollo y el ejercicio pleno de sus derechos, como criterios rectores para la elaboración de normas y aplicación en todos los órdenes relativos a la vida del niño, de conformidad con lo establecido en el texto constitucional y la Convención sobre Derechos del Niño. De ahí que de un análisis correlativo entre los artículos 4.96, 4.98 y 4.205 del Código Civil del Estado de México, se entiende que el establecimiento y definición de los derechos derivados de la patria potestad no sólo se refiere al derecho del niño a convivir con ambos padres o su representación legal, sino también se refiere a la protección integral del menor en sus aspectos físico, moral y social, su guarda y su custodia, la administración de los bienes y el derecho de corrección. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Tomo XXVIII, diciembre de 2008, página: 236, Registro: 168337. Derivada del amparo directo en revisión 1475/2008. 15 de octubre de 2008. Unanimidad de cuatro votos. Ausente: José de Jesús Gudiño Pelayo. Ponente: José Ramón Cossío Díaz. Secretaria: Dolores Rueda Aguilar. 18 Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Libro XVII, febrero de 2013, página: 830, Registro: 2002864. Derivada del amparo directo en revisión 348/2012. 5 de diciembre de 2012. Unanimidad de cuatro votos; José Ramón Cossío Díaz reservó su derecho para formular voto concurrente. Ausente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario: Javier Mijangos y González. 29 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 padres contra la voluntad de éstos, a excepción de cuando las autoridades competentes determinen que tal separación es necesaria para el interés superior del niño. Conforme a dicha norma se entiende que el derecho de los padres biológicos a estar con sus hijos no es reconocido como principio absoluto cuando se trata de adoptar medidas de protección respecto de un menor desamparado y tampoco tiene carácter de derecho o interés preponderante, pues está subordinado a que dicha convivencia procure el interés del menor. En este sentido, para poder decretar una medida tan grave como la privación de la patria potestad, los órganos jurisdiccionales deben comprobar en forma plena que ha ocurrido un efectivo y voluntario incumplimiento por parte de los padres; establecer el alcance y gravedad de los incumplimientos imputados y las circunstancias concurrentes para poder atribuir las consecuencias negativas de las acciones y omisiones denunciadas.” 42. Así, en la institución de la patria potestad el interés del menor es el único y exclusivo fundamento sobre el cual se ejerce, de ahí que las causas para la pérdida de la patria potestad deben estar dirigidas a satisfacer este principio y buscar en todo momento su garantía. Tiene aplicación a lo anterior la tesis: 1a. LXV/2013 (10a.)19 de rubro y texto: “ABANDONO DE UN MENOR DE EDAD. SU INTERPRETACIÓN COMO CAUSAL DE PÉRDIDA DE LA PATRIA POTESTAD ATENDIENDO AL INTERÉS SUPERIOR DEL MENOR. A juicio de esta Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la privación de la patria potestad se justifica por el incumplimiento grave de los deberes inherentes a la misma ya que, en definitiva, lo que importa es el bien de los hijos, cuyo interés es el único y exclusivo fundamento de la función en la que se configura la patria potestad. Las autoridades jurisdiccionales, al analizar el abandono de un menor de edad como causal para decretar la pérdida de la patria potestad previsto en las distintas legislaciones, deben interpretar el término ‘abandono’ no sólo en su acepción más estricta, entendido como dejar desamparado a un hijo, sino también en la amplia, vinculada al más radical incumplimiento de los deberes inherentes a la patria potestad, incluso en el caso de que las necesidades del menor queden cubiertas por la intervención de otras personas. Así las cosas, se estima que en los casos de abandono sancionados con la privación de la pérdida 19 Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Libro XVII, febrero de 2013, Tomo 1, página: 793, Registro: 2002687. Derivado del amparo directo en revisión 348/2012. 5 de diciembre de 2012. Unanimidad de cuatro votos; José Ramón Cossío Díaz reservó su derecho para formular voto concurrente. Ausente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario: Javier Mijangos y González. 30 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 de la patria potestad, existe una abdicación total, voluntaria e injustificada de los deberes inherentes a dicha función. Asimismo, los tribunales, en aras de proteger al menor, deberán analizar en cada caso concreto las causas del abandono, la edad del menor, su madurez y autonomía, ya que en aquellos supuestos en los que el abandono se realice al momento mismo del nacimiento, resulta patente el radical desinterés de los progenitores respecto del menor. Esta pauta interpretativa es la que deben tomar en cuenta los órganos judiciales al analizar las causales de privación de pérdida de la patria potestad que hacen referencia al ‘abandono del menor’ y siempre teniendo presente que estos supuestos denotan una situación de absoluto desprecio a las obligaciones parentales más elementales y primarias respecto del menor.” 43. Lo anterior es así, porque la decisión de cualquier cuestión familiar relacionada con el ejercicio de la patria potestad debe valorar siempre el beneficio del menor como interés prevalente, de modo que el juzgador antes de condenar a su pérdida debe tomar en cuenta que el ejercicio de la patria potestad comprende un conjunto de facultades enunciados y deberes, de ámbito personal legalmente en abstracto pero y patrimonial, cuya adecuada aplicación exige su ejercicio siempre de acuerdo con el bienestar de los hijos. Por lo que los juzgadores deben tener presente en todo momento, que la patria potestad también tiene la función de garantizar el bienestar de los menores en tanto los progenitores deben cumplir con ese conjunto de facultades y deberes inherentes al cuidado y bienestar de los menores. Tiene aplicación la Tesis: 1a. LXIV/2013 (10a.)20 de rubro y texto: “INTERÉS SUPERIOR DEL MENOR. LA APLICACIÓN DE ESTE PRINCIPIO EN EL MARCO DE LAS RELACIONES DE LA PATRIA POTESTAD. La decisión de cualquier cuestión familiar suscitada en el marco de las relaciones de patria potestad -y, por extensión, todo conflicto o situación en que intervengan menores o de un modo u otro les afecte- debe valorar el beneficio del menor 20 Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Libro XVII, febrero de 2013, Tomo 1. página: 823, Registro: 2002814. Amparo directo en revisión 348/2012. 5 de diciembre de 2012. Unanimidad de cuatro votos; José Ramón Cossío Díaz reservó su derecho para formular voto concurrente. Ausente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario: Javier Mijangos y González y amparo directo en revisión 2554/2012. 16 de enero de 2013. Mayoría de cuatro votos. Disidente: José Ramón Cossío Díaz. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario: Javier Mijangos y González. 31 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 como interés prevalente. A juicio de esta Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la aplicación de este principio rector debe estar sometida a las siguientes consideraciones fundamentales: En primer término, el contenido de la patria potestad comprende un conjunto de facultades y deberes, de ámbito personal y patrimonial, enunciados legalmente en abstracto pero cuya adecuada aplicación exige su ejercicio siempre de acuerdo con la personalidad de los hijos. En segundo lugar, el principio del interés superior del menor se consagra como criterio fundamental orientador de la actuación judicial en los procedimientos que afectan a los menores, por lo que las estipulaciones y pactos convenidos entre los progenitores no serán oponibles si resultan lesivos para los hijos. Por último, debe considerarse que la patria potestad tiene hoy un indudable carácter de función tutelar, establecida en beneficio de los hijos y, por ello, cuando la conducta de los padres ponga o pueda poner en peligro la integridad o formación del menor, cabe privar o suspender a aquéllos del ejercicio de la patria potestad de conformidad con el interés superior del menor y atendiendo a lo que establezcan las leyes en la materia.” 44. Con base en el concepto de la patria potestad de acuerdo al marco anterior resulta de gran relevancia para el caso que nos ocupa, porque la patria potestad tiene hoy un indudable carácter de función tutelar, establecida en beneficio de los hijos y, por ello, cuando la conducta de los padres ponga o pueda poner en peligro la integridad o formación del menor, cabe privar o suspender a aquéllos del ejercicio de la patria potestad de conformidad a lo que establezcan las leyes en la materia. 45. Lo que está estrechamente ligado a la exigencia de protección a la familia que se establece como el derecho humano cuyo contenido deriva de artículo 4° constitucional, así como de los artículos 17 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos y 23 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, cuyo contenido y alcance implica que: a) la familia es el elemento natural y fundamental de la sociedad y debe ser protegida por la sociedad y el Estado, así como que el derecho de protección a la familia implica favorecer ampliamente el desarrollo y la fortaleza del núcleo familiar, mas no del matrimonio, entre otros, motivo por el cual la institución de la patria potestad incurre también para garantizar esta protección a la familia, 32 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 motivo por el cual las posibles suspensiones o pérdidas de las facultades derivadas de la patria potestad además de verificar el interés superior del menor, deben pretender mantener la unidad familiar hasta en tanto no existan motivos extraordinarios que indiquen que sea mas perjudicial para el menor la cohesión familiar que su desmembramiento.21 46. Del mismo modo la Corte Interamericana de Derechos Humanos, ha señalado que el niño tiene derecho a vivir con su familia llamada a satisfacer sus necesidades materiales, afectivas y psicológicas. El derecho de toda persona a recibir protección contra injerencias arbitrarias o ilegales en su familia, forma parte, implícitamente, del derecho a la protección de la familia del niño, y además está expresamente reconocido por el artículo 12.1 de la Declaración Universal de Derechos Humanos, y del artículo 11.2 de la Convención Americana de Derechos Humanos, disposiciones que poseen especial relevancia cuando se analiza la separación del niño de su familia.22 21 Tiene aplicación la tesis: 1a. CCXXX/2012 (10a.), Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Libro XIII, octubre de 2012, Tomo 2, página: 1210. Derivado del amparo directo en revisión 1905/2012. 22 de agosto de 2012. Cinco votos. Ponente: José Ramón Cossío Díaz. Secretaria: Teresita del Niño Jesús Lúcia Segovia. Registro: 2002008. De rubro y texto: PROTECCIÓN DE LA FAMILIA COMO DERECHO HUMANO EN EL DERECHO INTERNACIONAL. SU CONTENIDO Y ALCANCE. Los artículos 17 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos y 23 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, reconocen la protección de la familia como derecho humano. Ahora bien, de la interpretación que de este derecho han realizado diversos organismos internacionales en materia de derechos humanos, deriva su contenido y alcance: a) la familia es el elemento natural y fundamental de la sociedad y debe ser protegida por la sociedad y el Estado; b) la familia y el matrimonio no son conceptos equivalentes, lejos de ello, el matrimonio únicamente es una de las formas que existen para formar una familia; c) el derecho de protección a la familia implica favorecer ampliamente el desarrollo y la fortaleza del núcleo familiar, mas no del matrimonio; d) por el simple nacimiento de un niño, existe entre éste y sus padres un vínculo que implica vida familiar, donde el goce mutuo de la compañía constituye un elemento fundamental de aquélla, aun cuando la relación de los padres esté rota, por lo que medidas nacionales que limiten tal goce sí conllevan una interferencia al derecho a la protección de la familia; así, una de las interferencias más graves es la que tiene como resultado la división de una familia; e) la Convención Americana sobre Derechos Humanos y el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, reconocen como legítima la disolución del vínculo matrimonial, siempre y cuando se asegure la igualdad de derechos, la adecuada equivalencia de responsabilidades de los cónyuges y la protección necesaria de los hijos sobre la base única del interés y conveniencia de ellos; y, f) ningún instrumento internacional en materia de derechos humanos ni sus interpretaciones, se pronuncian sobre procedimientos válidos o inválidos para disolver el vínculo matrimonial, lejos de ello, dejan en libertad a los Estados para que en sus legislaciones establezcan los que consideren más adecuados para regular las realidades propias de su jurisdicción, siempre y cuando ninguno de éstos se traduzca en un trato discriminatorio en los motivos o en los procedimientos. 22 Caso de la Masacre de los dos Erres vs Guatemala. Excepción Preliminar, Fondo, Reparaciones y Costas, sentencia de 24 de noviembre de 2009. Serie C No. 211. 33 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 47. Lo anterior implica que las autoridades en todo momento deben preservar y favorecer la permanencia del niño en su núcleo familiar salvo que existan razones determinantes para separarlo de alguno de sus miembros, precisamente en función del interés superior del menor. De modo que cualquier decisión relativa a la separación del niño de su familia debe estar justificada por el interés del niño. 48. Por otra parte, esta Primera Sala, también ya ha advertido que el interés superior del menor implica que el desarrollo de éste y el ejercicio pleno de sus derechos deben ser considerados como criterios rectores para la elaboración de normas y la aplicación de éstas en todos los órdenes relativos a la vida del niño, lo que implica que los juzgadores deben tomar en cuenta este principio rector en todas las controversias en las que se afecten derechos de los menores. Tesis: 1a./J. 25/2012 (9a.)23 de rubro y texto: “INTERÉS SUPERIOR DEL MENOR. SU CONCEPTO. En términos de los artículos 4o., párrafo octavo, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; 3 de la Convención sobre los Derechos del Niño, ratificada por México y publicada en el Diario Oficial de la Federación el 25 de enero de 1991; y 3, 4, 6 y 7 de la Ley para la Protección de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, los tribunales, en todas las medidas que tomen relacionadas con los menores, deben atender primordialmente al interés superior del niño; concepto que interpretó la Corte Interamericana de Derechos Humanos (cuya competencia contenciosa aceptó el Estado Mexicano el 16 de diciembre de 1998) de la siguiente manera: ‘la expresión ‘interés superior del niño’ ... implica que el desarrollo de éste y el ejercicio pleno de sus derechos deben ser considerados como criterios rectores para la elaboración de normas y la aplicación de éstas en todos los órdenes relativos a la vida del niño’.” 49. En efecto, el principio del interés superior del menor, se erige como una obligación para todas las autoridades a fin de potencializar la 23 Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Libro XV, diciembre de 2012, Tomo 1, página: 334, Registro: 159897. 34 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 protección integral de los niños y niñas, en todo momento, lo que traduce a las autoridades judiciales en la obligación de ponderar en todo momento sus intereses sobre los intereses de terceros.24 50. Pues el objeto de este principio es cumplir con dos funciones normativas medulares, la primera como principio jurídico garantista y la segunda como pauta interpretativa para solucionar los conflictos entre los derechos de los menores. 51. En esa lógica cuando los juzgadores tienen que analizar la constitucionalidad de normas que inciden sobre los derechos de los menores, es necesario realizar un escrutinio más estricto en relación con la necesidad y proporcionalidad de la medida de modo que se permita vislumbrar los grados de afectación a los intereses de los menores y la forma en que en todo caso deben armonizarse para servir como herramienta útil a garantizar en todo momento el bienestar 24 Tesis: 1a. CXXII/2012 (10a.) de rubro y texto: INTERÉS SUPERIOR DEL MENOR. SU FUNCIÓN NORMATIVA COMO PRINCIPIO JURÍDICO PROTECTOR. La función del interés superior del menor como principio jurídico protector, es constituirse en una obligación para las autoridades estatales y con ello asegurar la efectividad de los derechos subjetivos de los menores, es decir, implica una prescripción de carácter imperativo, cuyo contenido es la satisfacción de todos los derechos del menor para potencializar el paradigma de la "protección integral". Ahora bien, desde esta dimensión, el interés superior del menor, enfocado al deber estatal, se actualiza cuando en la normativa jurídica se reconocen expresamente el cúmulo de derechos y se dispone el mandato de efectivizarlos, y actualizado el supuesto jurídico para alcanzar la función de aquel principio, surge una serie de deberes que las autoridades estatales tienen que atender, entre los cuales se encuentra analizar, caso por caso, si ante situaciones conflictivas donde existan otros intereses de terceros que no tienen el rango de derechos deben privilegiarse determinados derechos de los menores o cuando en el caso se traten de contraponer éstos contra los de otras personas; el alcance del interés superior del menor deberá fijarse según las circunstancias particulares del caso y no podrá implicar la exclusión de los derechos de terceros. En este mismo sentido, dicha dimensión conlleva el reconocimiento de un "núcleo duro de derechos", esto es, aquellos derechos que no admiten restricción alguna y, por tanto, constituyen un límite infranqueable que alcanza, particularmente, al legislador; dentro de éstos se ubican el derecho a la vida, a la nacionalidad y a la identidad, a la libertad de pensamiento y de conciencia, a la salud, a la educación, a un nivel de vida adecuado, a realizar actividades propias de la edad (recreativas, culturales, etcétera) y a las garantías del derecho penal y procesal penal; además, el interés superior del menor como principio garantista, también implica la obligación de priorizar las políticas públicas destinadas a garantizar el "núcleo duro" de los derechos. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Libro IX, junio de 2012, Tomo 1, página: 260, Registro: 2000988. Derivada del amparo directo en revisión 69/2012. 18 de abril de 2012. Cinco votos. Ponente: José Ramón Cossío Díaz. Secretaria: Teresita del Niño Jesús Lúcia Segovia. 35 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 integral del menor al que afecten. Tiene aplicación la Tesis: 1a. XV/2011,25 de rubro y texto: “INTERÉS SUPERIOR DEL NIÑO. FUNCIÓN EN EL ÁMBITO JURISDICCIONAL. En el ámbito jurisdiccional, el interés superior del niño es un principio orientador de la actividad interpretativa relacionada con cualquier norma jurídica que tenga que aplicarse a un niño en un caso concreto o que pueda afectar los intereses de algún menor. Este principio ordena la realización de una interpretación sistemática que, para darle sentido a la norma en cuestión, tome en cuenta los deberes de protección de los menores y los derechos especiales de éstos previstos en la Constitución, tratados internacionales y leyes de protección de la niñez. Cuando se trata de medidas legislativas o administrativas que afecten derechos de los menores, el interés superior del niño demanda de los órganos jurisdiccionales la realización de un escrutinio mucho más estricto en relación con la necesidad y proporcionalidad de la medida en cuestión.” 52. En esa medida, en el presente caso se debe primeramente precisar que el derecho de la recurrente a ejercer las facultades de la patria potestad no se erige como un derecho subjetivo de la recurrente, sino que éste deriva del pleno cumplimiento a las obligaciones derivadas precisamente del ejercicio de la función potestativa sobre sus hijos, la cual implica el cuidado y atención a las necesidades de sus menores hijos, con el único objeto de buscar el beneficio de éstos no de la recurrente. 53. De suerte que, se advierte que la privación de la patria potestad de la recurrente, con base en la fracción VI del artículo 373 del Código Civil para el Estado de Veracruz, debe cumplir invariablemente con la ponderación del interés superior del menor y la protección a la familia frente a los intereses particulares de los progenitores para mantener la patria potestad y de este modo resultar proporcional de acuerdo al interés que protege. 25 Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Tomo XXXIII, febrero de 2011, Registro: 162807, página: 616. Derivada del amparo directo en revisión 1187/2010. 1o. de septiembre de 2010. Cinco votos. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretarios: Ana María Ibarra Olguín y Javier Mijangos y González. 36 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 54. Así, para determinar si la norma es conforme con el principio del interés superior del menor es necesario realizar un juicio de proporcionalidad,26 a fin de comparar los grados derivados de la determinación judicial de pérdida de la patria potestad por este supuesto, y su beneficio o favorecimiento al principio del interés superior del menor y protección a la familia. 55. Así las cosas, en el caso, tenemos que la causa de pérdida de la patria potestad por condena de delito doloso en el que el menor sea la víctima, sin lugar a dudas busca beneficiar el interés superior del niño, sin embargo dicha finalidad puede resultar desproporcionada en tanto que se vislumbra que hay delitos cuya naturaleza no denota una afectación evidente a los intereses de los menores, o bien no demuestra fehacientemente que el progenitor ha decidido incumplir a las obligaciones inherentes a la función de la patria potestad, como sucede con el caso del delito de sustracción de menores, porque no demuestra indubitablemente el incumplimiento a las obligaciones derivadas de la patria potestad, de ahí que en ese caso la acción jurídica de pérdida de la patria potestad no resulta proporcional ni idónea.27 56. Lo anterior es así, pues la condena a la pérdida de la patria potestad por un delito de esa índole, no favorece efectivamente al principio del interés superior del menor, pues la naturaleza del delito por sí misma no comprueba que el progenitor haya incurrido en incumplimiento de las obligaciones derivadas de la patria potestad, o bien que con la comisión de dicho ilícito se haya perjudicado al menor o arriesgado en su integridad física y mental a grado tal que sea conveniente la condena a la pérdida total de la patria potestad, pues de este modo en García, Amado J. A. (2007), en “Robert Alexy, derechos sociales y ponderación” Fontamara. Pp. 285. 26 27 La idoneidad entendida como un subprincipio de la ponderación de derechos, determina que la limitación de un derecho fundamental (u otro principio constitucional) sólo es constitucionalmente admisible, si efectivamente, y fácticamente, sirve para favorecer a otro derecho fundamental. Op. Cit. pp. 253. 37 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 lugar de alcanzar el beneficio a los intereses del menor, la sanción los perjudica. 57. Esto es, la fracción VI del artículo 373 del Código Civil para el Estado de Veracruz, tiene un vicio en tanto a que no todo delito comprueba por sí mismo que el progenitor ha incumplido a sus obligaciones derivadas del ejercicio de la patria potestad y con ello ha causado un perjuicio a los intereses y bienestar del menor, y en consecuencia de considerar que la norma deba aplicarse en automático ante la comisión de cualquier ilícito sin distinguir su naturaleza, resulta contraria al interés superior del menor, pues como se determinó las potestades que derivan de las obligaciones a la patria potestad tienden a la protección del menor, por lo que el privar a un progenitor de estas facultades sin existir un motivo manifiesto para ello, sólo infiere de forma negativa en la protección que deben recibir los menores de sus ascendientes. 58. Pues si bien para esta Primera Sala es claro que la norma reclamada persigue un fin constitucionalmente válido, en tanto protege los intereses e integridad de los menores que han sido víctimas de delitos cometidos por sus progenitores, cuando sí se comprueba la afectación indubitable a los intereses de los menores, ello sólo ocurre con delitos cuya naturaleza no da lugar a dudas de que en realidad es así, no obstante la norma reclamada al prever que debe ser aplicada ante cualquier delito, no permite vislumbrar de acuerdo a la naturaleza de los ilícitos si la condena a la pérdida de la patria potestad del progenitor resulta adecuada para los intereses del menor. 59. Entonces, de acuerdo a los agravios formulados por la recurrente, es preciso responder a si la norma por ese vicio resulta inconstitucional o tal y como lo determinó el Tribunal Colegiado ¿cabe realizar una interpretación conforme a la fracción VI del artículo 373 del Código 38 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 Civil para el Estado de Veracruz? de forma diversa a como lo consideró el Tribunal Colegiado en la sentencia recurrida. 60. Pues, como se advirtió, la norma sí persigue un fin constitucional válido que estriba en la protección a los intereses del menor para su sano desarrollo y bienestar integral, pero para que pueda alcanzar su objetivo de forma proporcional e idónea es imprescindible que sea certera en la imposición de la sanción de la pérdida de patria potestad. 61. Dicho de otro modo, la norma resulta imprecisa en cuanto a la forma de alcanzar la finalidad pretendida, de ahí que es procedente realizar una interpretación conforme al principio que trata de resguardar, esto es el principio del interés superior del menor. Y de ahí que resulte fundado el argumento respecto a que la interpretación que realiza el Colegiado respecto a este precepto resulta inadecuada, puesto que no consideró la posibilidad de interpretarla conforme al octavo párrafo del artículo 4° de la Constitución Federal.28 28 Tiene aplicación la Tesis: 1a. CCXXXIII/2011 (9a.), Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Libro II, noviembre de 2011, Tomo 1, Registro: 160679, Página: 202. De rubro y texto: INTERPRETACIÓN DE LA LEY EN AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN. CASOS EN LOS QUE LA SUPREMA CORTE PUEDE MODIFICARLA. Si bien es cierto que esta Suprema Corte ha establecido en varios precedentes que la interpretación de la ley puede formar parte de las cuestiones propiamente constitucionales que se abordan en el amparo directo en revisión, este criterio debe interpretarse en conexión con lo dispuesto en la fracción IX del artículo 107 constitucional. En efecto, la función que ejerce este alto tribunal a través de la revisión en amparo directo, no consiste, en principio, en determinar la correcta interpretación de la ley. La gran mayoría de las disposiciones legales admiten varias interpretaciones y corresponde a los tribunales ordinarios y a los tribunales de amparo encargados de controlar el principio de legalidad establecer la forma correcta en la que aquéllas deben interpretarse. En este sentido, el control de la interpretación de la ley puede hacerse fundamentalmente en dos escenarios a través del recurso de revisión que se interpone en contra de una sentencia dictada en un juicio de amparo directo: (i) cuando entre las distintas interpretaciones que admite una disposición sólo una de ellas resulta constitucionalmente válida y ésta no es la que ha realizado o avalado el tribunal colegiado, resulta obligatorio optar por la interpretación de la ley que esté conforme con la Constitución; (ii) cuando una disposición admite varias interpretaciones constitucionalmente aceptables y el tribunal colegiado selecciona o avala implícitamente una que es inconstitucional, esta Suprema Corte debe declarar que esa interpretación se encuentra prohibida e interpretar el precepto en cuestión de una forma consistente con lo dispuesto en la Constitución. En consecuencia, cuando existen varias interpretaciones de una disposición que no violan la Constitución y se opta por alguna de ellas no es posible censurar la interpretación efectuada con el argumento de que no se ha hecho una "correcta" interpretación de la ley. Derivada del amparo directo en revisión 1273/2010. ********** 1o. de diciembre de 2010. Unanimidad de cuatro votos. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario: Arturo Bárcena Zubieta. 39 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 62. Pues sólo así el artículo reclamado puede satisfacer un test estricto de constitucionalidad que demuestre la proporcionalidad e idoneidad de la medida, por lo que la norma debe ser interpretada de conformidad con el principio del interés superior del menor y la protección a la familia, en atención a que la pérdida de la patria potestad sólo es constitucionalmente válida cuando se demuestre que quien la detenta pone en riesgo la integridad física, mental y moral del menor, por haber ya evidenciado la falta a sus obligaciones inherentes al ejercicio de la patria potestad. 63. Ahora bien, como ya se determinó la patria potestad es una institución cuya finalidad principal es la asistencia y protección a la persona y bienes de los descendientes, y por la cual se deriva el principal deber de cuidado sobre la custodia, educación, formación ética y moral, religiosa y cultural, así como la administración del patrimonio de los hijos. 64. De donde destaca que es del cumplimiento a dichas obligaciones de la cual se derivan potestades a los ascendientes para decidir sobre estos aspectos, que siempre deben tender a buscar el bienestar físico, mental y patrimonial del menor. De forma tal, que no es posible ejercer la patria potestad cuando no se pretenda buscar ese bienestar integral del menor, pues de ser así no puede hablarse de una potestad sino de un ejercicio ilícito de la patria potestad. 65. Es por ello, que el legislador ha previsto la sanción de la pérdida de dicha potestad cuando es claro y evidente que el progenitor ha incumplido sus obligaciones de cuidado del menor lo que denota que de seguir ejerciendo la patria potestad se ejercerá sin miras a buscar ese bienestar integral, de ahí que cuando se cometa un ilícito que claramente demuestre el perjuicio al bienestar del menor, es constitucionalmente válido restringir el ejercicio de la patria potestad, puesto que se comprueba que no se cumple con el deber derivado de 40 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 esta institución y por lo tanto no es lícito ejercer una potestad para decidir sobre los ámbitos educativos, morales, culturales, religiosos y patrimoniales del menor, pues comprobado está que la conducta cometida como ilícito demuestra indefectiblemente que no se busca el bienestar del menor sino por el contrario su perjuicio, lo que sin duda permite sancionar la pérdida de la patria potestad con un claro y evidente beneficio a los intereses del menor. 66. No obstante, el legislador no previó que hay ilícitos cuyas circunstancias no demuestran per se y de forma indubitable que el progenitor incumplió los deberes inherentes a la institución de la patria potestad, o bien que éste sólo busca el perjuicio a los intereses del menor, en lugar de su bienestar integral, lo que da lugar a una duda razonable en el juzgador respecto a si la pérdida de la patria potestad no acarreará más perjuicios al interés del menor que beneficios. 67. En efecto, puede suceder que aún ante una sentencia penal de la comisión de un ilícito en el que el menor sea víctima, exista la duda razonable respecto a si con dicha comisión del ilícito el progenitor incumplió a su deber de cuidado y bienestar del menor, tal y como sucede en el caso del delito de sustracción de menores, en el que no obstante se tenga al menor como víctima del delito, existe una duda razonable de si el progenitor al cometer el ilícito actuó con ánimo de buscar el bienestar integral del menor en vez de su perjuicio. 68. Pues si bien la comisión del ilícito ya fue comprobada con base en los elementos del tipo penal, ante el juez competente para así determinarlo, el juzgador que deba decidir respecto a la pérdida de la patria potestad no puede basar su conclusión tomando en cuenta el análisis del ilícito con los elementos que tomó el juez penal, pues la conducta reprochable respecto a la legislación penal, toma en consideración elementos distintos a la sanción civil que condena la pérdida de la patria potestad, en tanto esta última debe dilucidar si al 41 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 progenitor le asiste aún la potestad de decidir sobre el desarrollo y bienestar integral de su descendiente en ponderación directa con el interés superior del menor. 69. De ahí que, si de las circunstancias en las que se comete el ilícito en cuestión al juzgador le surge una duda razonable respecto a si con la comisión de dicho ilícito se comprueba que el progenitor ha sido falto a su obligación de cuidado y búsqueda del bienestar del menor, entonces la sanción de la pérdida de patria potestad no debe aplicarse porque no asegura la consecución de la finalidad de la norma, que es evitar que los progenitores ejerzan actos derivados de la patria potestad cuando éstos han fallado a su obligación de cuidado y respeto por el desarrollo y bienestar moral, educativo, y patrimonial de los menores hijos. 70. Así, el artículo 373, fracción VI, del Código Civil para el Estado de Veracruz, sólo resulta constitucional bajo una interpretación conforme con el artículo 4° de la Constitución Federal, en el sentido de que es obligación de los ascendientes cuidar de los menores por lo que si estas obligaciones no son satisfechas entonces es dable que la ley castigue con la pérdida de la patria potestad a quienes incumplen con su deber de padre o madre, en atención al derecho y bienestar del menor, por lo que no puede imponerse dicha sanción cuando exista la duda razonable de que el progenitor ha incumplido con la obligación que le impone dicho artículo 4° de la Constitución Federal, o bien no sea fehaciente el daño y perjuicio realizado al menor. 71. Esto es, la duda razonable,29 para imponer la sanción de pérdida de la patria potestad estriba en si el ilícito cometido en contra del menor demuestra de forma indubitable que el padre ha sido falto a su deber 29 La duda razonable es aquí entendida como un principio orientador para la valoración de pruebas en juicio, las cuales deben demostrar las mayores probabilidades a ser ciertas del hecho que imputan, por lo que en caso de no ser así, deberán ser tomadas con cautela en tanto no demuestran la realización del hecho más allá de toda duda razonable. Nieva Fenoll, Jordi. (2010) “La valoración de la Prueba” Marcial Pons. Madrid. Páginas 85 a 88. 42 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 de cuidado y búsqueda de bienestar del menor en todo momento, pues de no demostrarlo indubitablemente las circunstancias del ilícito cometido, entonces habrá una duda razonable relativa a si el progenitor ha incumplido sus deberes de padre o madre, por lo que no podrá imponerse la sanción establecida en la fracción VI del artículo 373 del Código Civil para el Estado de Veracruz, pues de imponerse se vulneraría el principio del interés superior del menor, y con ello la patria potestad que se erige como una institución a favor del menor, así como la protección a la familia como núcleo primario de la sociedad. 72. Lo anterior, porque al establecer el supuesto de pérdida de patria potestad por la sentencia condenatoria al ilícito cometido en contra del menor, el legislador pretendió que la sentencia penal constituye una prueba fehaciente de que el progenitor incumplió a su obligación de cuidado y protección al desarrollo del menor, y con ese motivo comprobar la pérdida de patria potestad, por lo que si derivada de dicha prueba no se demuestra de forma indubitable el incumplimiento a dicho deber, entonces no cabe la posibilidad de actualizar el supuesto de la norma, puesto que con ello no se alcanza la finalidad pretendida, a saber, la plena satisfacción y resguardo de la integridad y bienestar del menor por medio de la institución de la patria potestad. 73. Lo cual es constitucionalmente correcto, porque sólo bajo esta interpretación la norma puede constituir así la hipótesis en el cual hay un grado más elevado de probabilidades concluyentes sobre la pérdida de la patria potestad.30 Esto es, de no existir esta probabilidad o existir una duda razonable respecto a que se perdió la potestad de decisión sobre la vida de los hijos derivada al incumplimiento del deber de cuidado y protección que exige el artículo 4° constitucional en consonancia con la institución de la patria potestad, entonces no cabe la actualización del supuesto de la norma, porque no hay demostración fehaciente del incumplimiento por parte del progenitor. 30 Taruffo Michele (2012) Proceso y decisión. Lecciones mexicanas de derecho procesal. Marcial Pons. Madrid. Página 193. 43 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 74. Lo que también tiene apoyo en la lógica de satisfacer eficientemente la finalidad de la norma que aquí se analiza, en tanto que la sanción de pérdida de la patria potestad por sentencia condenatoria de ilícito cometido por el progenitor en contra del menor, sólo es válida cuando la sentencia penal demuestre correctamente que el progenitor ha incumplido las obligaciones inherentes a la patria potestad relativas al deber de cuidado y protección del menor, pues es la que confirma de forma indubitable que la funciones y potestades del progenitor sobre la vida del menor derivadas de la patria potestad han cesado por el incumplimiento al deber que impone dicha institución. 75. La interpretación conforme en este sentido es pertinente porque para sancionar con la pérdida de la patria potestad debe comprobarse el proceder del progenitor incumplido y razonar los motivos por los cuales se puede afectar la salud, seguridad o moralidad de los hijos.31 76. Lo anterior especialmente, porque la pérdida de la patria potestad acarrea graves consecuencias perjudiciales para el interés superior del menor, de modo que para decretarla deben demostrarse pruebas plenas e indiscutibles para sancionar sólo en los casos 31 Tesis: 3a./J. 30/91 (31/91), Octava Época, Registro: 206948, Instancia: Tercera Sala, Jurisprudencia, Fuente: Semanario Judicial de la Federación, Tomo VIII, julio de 1991, Materia(s): Civil, página: 65. De rubro y texto: PATRIA POTESTAD. SE PIERDE SI SE ACREDITA EL ABANDONO DE LOS DEBERES DE ALGUNO DE LOS PADRES, SIN QUE SEA NECESARIO PROBAR QUE EL MENOSCABO EN LA SALUD, SEGURIDAD Y VALORES DEL MENOR SE PRODUZCAN EN LA REALIDAD, PERO DEBEN EXISTIR RAZONES QUE PERMITAN ESTIMAR QUE PUEDEN PRODUCIRSE. (ARTÍCULO 444, FRACCIÓN III, DEL CÓDIGO CIVIL PARA EL DISTRITO FEDERAL). La patria potestad como estado jurídico que implica derechos y obligaciones para el padre, la madre y los hijos, tiene la característica de ser una institución de orden público, en cuya preservación y debida aplicación de las normas que la regulan, la sociedad está especialmente interesada. La pérdida de este derecho natural reconocido por la ley, entraña graves consecuencias tanto para los hijos como para el que la ejerce, en consecuencia, para decretarla en el caso del artículo 444, fracción III, del Código Civil para el Distrito Federal, tratándose del abandono de los deberes de alguno de los padres, se requiere demostrar tal hecho y valorar las circunstancias en que se presenta para determinar si hay razones que permitan estimar que pueden producirse los resultados lesivos para el menor; es decir, se debe probar la conducta o proceder del progenitor incumplido y razonar los motivos por los cuales puede afectar la salud, seguridad o moralidad de los hijos; sin que sea necesario acreditar que el perjuicio o afectación en dicha salud, seguridad o moralidad del menor se hubiere dado en la realidad, ya que el verbo poder utilizado en pasado subjuntivo en la expresión "pudiera", implica un estado de posibilidades pero no que se hubiere actualizado. 44 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 excepcionales, por lo que si no existe esa prueba plena e indiscutible o de existir se tenga la duda razonable de que la misma en realidad no muestra de forma contundente el incumplimiento del progenitor, entonces no es procedente decretarla pues se pueden ocasionar mayores perjuicios que beneficios a los intereses y derechos de los menores involucrados. 77. Tiene aplicación a lo anterior la tesis jurisprudencial de la entonces Tercera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de rubro y texto: “PATRIA POTESTAD, PRUEBAS PARA LA PÉRDIDA DE LA. Como la condena a la pérdida de la patria potestad acarrea graves consecuencias perjudiciales tanto para los hijos como para el progenitor, para decretarla en los casos excepcionales previstos en la ley, se requiere de pruebas plenas e indiscutibles, que sin lugar a dudas hagan manifiesta la justificación de la privación.”32 78. Por ejemplo en el caso concreto, la autoridad responsable consideró que el supuesto de pérdida de patria potestad se actualizaba debido a la comisión del delito de sustracción de menores, el cual por sí mismo expone una duda razonable respecto a si en realidad se compromete la integridad de los menores de continuar con el ejercicio de la patria potestad, puesto que la recurrente argumenta que la conducta si bien está tipificada como delito, la realizó como una medida protectora a los intereses de sus hijos. 79. Situación que válidamente establece una duda razonable respecto a si la madre en realidad de continuar con la patria potestad comprometerá la integridad física, mental o moral de los menores, y en ese sentido se demuestra entonces que la norma no alcanza la finalidad pretendida por el legislador, porque finalmente lo relevante para el caso es determinar qué es más conveniente para los menores, esto es si conforme a su interés superior es pertinente que se prive de la patria 32 Fuente: Semanario Judicial de la Federación, Volumen 169-174, Cuarta Parte, Página: 243 Registro: 240745. 45 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 potestad a la madre cuando no es fehaciente con la mera existencia de la sentencia penal en su contra, que ha incumplido las obligaciones derivadas de la patria potestad, ya que de aplicarse sin reparo en la duda razonable, tampoco se puede ponderar si con ello se afecta más que beneficia a los intereses de los menores. 80. Especialmente, porque la pérdida de la patria potestad es una sanción severa y como tal sólo encuentra justificación cuando existen causas fehacientemente graves, que sin lugar a dudas demuestren el riesgo y perjuicio inminente de los menores de continuar bajo la potestad del progenitor que los ha dañado por la comisión de un ilícito. 81. De ello se desprende, que es sólo cuando el juzgador advierta el evidente riesgo de los menores derivado de la continuación del ejercicio de la patria potestad de los progenitores, que debe condenar a la pérdida de la patria potestad, pues de tener una duda razonable al respecto, entonces no debe sancionarse a ese extremo, pues de ser así, la sanción puede constituir una sanción desmedida y desproporcionada porque no asegura que se alcancen las finalidades por las cuales fue creada la norma y que incluso por el contrario se perjudiquen. 82. Por tanto, con base en una interpretación conforme al párrafo octavo del artículo 4° de la Constitución Federal, la fracción VI del artículo 373 del Código Civil para el Estado de Veracruz, resulta constitucional sólo cuando las circunstancias por las que se cometa el ilícito, por parte del progenitor en contra de los menores de forma dolosa, demuestren de forma evidente e indubitable que el progenitor ha incumplido a sus obligaciones derivadas de la función de la patria potestad y por lo que de continuar con el ejercicio de dichas potestades se pone en riesgo la integridad y estabilidad moral, física y mental de los menores. 46 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 83. De ahí que si las circunstancias del ilícito cometido por el progenitor formulan una duda razonable respecto a si con dicha sanción se logra resguardar el bienestar de los menores, o dicho de otro modo que de condenar a la pérdida de la patria potestad se tenga duda de alcanzar un beneficio a favor del menor en vez de su perjuicio, entonces dicha sanción no puede imponerse porque de ese modo sí resulta desproporcionada y por ende inconstitucional al transgredir la finalidad para la cual fue creada. 84. En esa lógica resultan fundados los agravios de la recurrente, en tanto a que en el caso no puede imponerse la sanción de pérdida de la patria potestad con base en la fracción VI del artículo 373 del Código Civil para el Estado de Veracruz, en atención a que las circunstancias del delito de sustracción de menores por sí solas, exponen una duda razonable, respecto a si se acredita de forma fehaciente que la recurrente incumplió las obligaciones derivadas de la patria potestad, lo cual conlleva también a dudar si la condena de la pérdida de la patria potestad en el caso no resulta más perjudicial que benéfica para los menores. 85. Por tanto, es fundado el agravio de la recurrente, y en esa lógica se revoca la resolución recurrida para el efecto de que el Tribunal Colegiado tomando en cuenta la interpretación conforme del precepto reclamado, nuevamente analice las circunstancias particulares del caso, a fin de dilucidar si la recurrente debe ser acreedora a la sanción de pérdida de la patria potestad por algún otro motivo, y no sólo por la existencia de la sentencia penal en su contra por la comisión del delito de sustracción de menores, ya que la naturaleza de dicho delito, per se expone una duda razonable de si al condenar a la pérdida de la patria potestad a la recurrente se alcanzará en realidad la protección y beneficio al interés de los menores involucrados en vez de su perjuicio. 47 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 86. Especialmente, porque la autoridad responsable para determinar la condena de pérdida de la patria potestad sólo tomó en consideración la existencia de la sentencia penal del delito de sustracción de menores, la cual consideró como prueba plena y suficiente para condenar a dicha sanción, tal y como se desprende de la transcripción del acto reclamado en el amparo consistente en la resolución al toca de apelación **********, de la cual se colige que: “D) Visto todo lo anterior y valorado el material probatorio antes reseñado de una manera conjunta, sistemática y entrelazada en términos de los artículos 57, 225 y 337 del Código de Procedimientos Civiles; pero especialmente, atendiendo al cúmulo de pruebas aportadas por las partes de forma que resulte más benéfica a los intereses de los menores ********** y ********** de apellidos **********; aun cuando ello pudiera repercutir en alguno de los derechos de los progenitores, atendiendo siempre al interés superior que representa su minoría de edad, conforme al artículo 4° de la Constitución General de la República y a la Convención sobre los Derechos del Niño; esta alzada estima que en el caso particular, le asiste la razón al apelante **********, respecto a la procedencia de su acción de pérdida de la patria potestad; habida cuenta que, como es de explorado conocimiento, la pérdida de la patria potestad, ciertamente es una forma de desmembración de la familia que acarrea graves consecuencias; por lo que en ese sentido, es verdad que para decretar su pérdida hacia alguno de los progenitores, deben apreciarse todas las pruebas y analizarse los hechos de una manera que las causales previstas por el legislador, queden plenamente acreditadas, al tenor de la siguiente jurisprudencia: PATRIA POTESTAD, PRUEBAS PARA LA PÉRDIDA DE LA. (Se transcribe) --- En ese orden de ideas, si bien es cierto, no quedaría plenamente acreditado que ********** expuso a algún riesgo de salud a sus menores hijos ********** y ********** de apellidos **********, por no haberlos llevado al dentista, como lo asegura el doliente; toda vez que, como ya se había anticipado, para ello se cuenta únicamente con las constancias glosadas al tomo II, expedidas por la Doctora **********, en las que se hace ver que acudieron a consulta para revisión odontológica y que refirieron no haber acudido a ninguna consulta desde hace dos años y medio, presentando caries dental en ella de manera avanzada, y en él, además observándose inserción baja del frenillo bucal superior y hábito de lengua; pero teniendo ambos menores una higiene bucal satisfactoria; lo que evidentemente no podría hacer prueba plena para tener por demostrado un riesgo en la salud de los menores y mucho menos, un menoscabo en su Derecho Humano a la salud; toda vez que entiéndase por ésta, un bienestar general y sistemático que no puede reducirse a la simple presencia o no de caries en un infante. En otras palabras, el hecho de que los menores le refirieran a su dentista (o que lo hiciera el adulto que los acompañó), que no habían acudido a una consulta dental desde hace más de dos años y medio y que por eso presenten problemas de caries; de 48 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 ninguna manera puede servir de argumento sólido para decretar la pérdida de la patria potestad que se pretende, al no estimarse por esta Sala que ello implique verdaderamente un peligro en su salud y mucho menos un descuido que importe poner en riesgo la vida de los infantes; lo que de suyo, es más que suficiente para desestimar el argumento hecho valer respecto a esa causal. --- Y también es cierto que tampoco quedaría demostrado, como bien lo apreciara el a quo, que ********** abandonó significativamente a sus menores hijos cuando viajó a **********; porque aun cuando tal viaje estaría probado con la propia confesión rendida por ********** al momento de contestar las demandas que se entablaron en su contra y al momento de absolver posiciones; lo que se concatena con el testimonio de **********, quien fue contundente en señalar que debido a la investigación privada que le encomendó la compañía para la que trabaja, localizó y vio a la señora ********** en dos diversas fechas en **********; según también su propio reporte de dicha investigación y su traducción al español glosado en un engargolado de color azul que obra en el secreto (sic) aunque no puedan hacer prueba plena de ello los videos y los audios ahí aportados, al no tenerse la certeza de que se trate de imágenes y/o audios atribuibles a la investigada, por más que el a quo en su reproducción haya asentado que coincide con los rasgos físicos de la señora **********; como quiera que sea, también consta en autos, como incluso así lo reconoce el propio **********, que los menores ********** y ********** de apellidos ********** quedaron al cuidado de su abuela materna, mientras que su progenitora estaba en aquella nación; sin que estuviera realmente probado en autos que la señora ********** sea efectivamente una persona afecta a las bebidas embriagantes, como así lo afirma el señor **********; y menos aún (sic) que esto haya puesto en riesgo a los menores ********** y ********** de apellidos **********; pues a lo más, la testigo ********** refirió que tanto el hermano de ********** como su señora madre, gustan de ingerir algunas bebidas alcohólicas; pero sin que tal atestado pueda hacer prueba plena de la existencia de un verdadero alcoholismo que haya arriesgado la salud o la integridad física de los menores involucrados; aún y cuando efectivamente **********, al momento de absolver posiciones, reconociera que efectivamente permitía que su madre y su hermano ********** la visitaran en el hogar conyugal, pues el alcoholismo es una verdadera enfermedad que bien pudo acreditarse con pruebas directas y no simplemente a través de la presunción humana que se engendra de que, a lo más, puede tratarse de personas que en determinados momentos de convivio, suelen tomarse alguna bebida con alcohol; tanto y más que tampoco está probado en actuaciones que los menores ********** y ********** de apellidos **********hayan presenciado esas situaciones y menos que esto haya repercutido en su sano desarrollo. En consecuencia, al advertirse que los menores, mientras su madre estaba en **********, en realidad nunca se vieron comprometidos en su salud o en su integridad física o emocional; es inconcuso que por tal viaje, no puede atribuirse a la señora ********** una conducta de verdadero abandono hacia sus menores hijos en una connotación jurídica que sea suficiente como para privarle de la patria potestad hacia sus descendientes. Cobrando vigencia al respecto, la siguiente tesis jurisprudencial: PATRIA POTESTAD, PÉRDIDA DE 49 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 LA (LEGISLACIÓN DE VERACRUZ). (Se transcribe) --- Lo anterior, aun cuando pudiéramos concederle plena eficacia probatoria al atestado de ********** en términos del numeral 332 del código adjetivo civil; quien está demostrado que vivió durante algún tiempo en el hogar de los involucrados y quien asegura que ********** es una madre un tanto desinteresada en las actividades de sus menores hijos, a quienes desde pequeños los dejó a su cuidado para que ella los bañara, alimentara, durmiera y demás; toda vez que a criterio de quienes integramos esta Sala, tal conducta, aunque reprochable en una madre, tampoco podría considerarse como un 'abandono' notorio y tan grave como para repercutir en su patria potestad; habida cuenta que, finalmente, sus menores hijos, ella y el progenitor estaban habitando el mismo hogar y consta en actuaciones que ********** nunca ha trabajado desde que contrajo nupcias; e incluso, también consta que la familia y el propio ********** siempre contrataron personal para el servicio doméstico y para que les cuidaran a sus menores hijos; de ahí que no pueda válidamente refutársele a la madre una conducta de abandono, cuando tal situación también fue propiciada por el propio cónyuge, quien en todo momento favoreció la asistencia doméstica, a grado tal, de que ********** se desatendiera -en mayor o menor medida- de sus hijos; pero sin que se revele de los autos que ésta haya efectivamente abandonado a sus hijos a su suerte o puesto en peligro su integridad o estabilidad emocional, sólo por el hecho de que guste de ir al gimnasio o a tomar café con sus amigas. O lo que es lo mismo, esta alzada considera que tal conducta que se atribuye a la madre de los menores ********** y ********** de apellidos **********, aunque criticable, de ninguna manera es suficiente como para privarle de la patria potestad que ejerce sobre sus hijos, cuando finalmente ese desinterés tampoco trascendió de una manera grave hacia sus hijos; de ahí que tampoco podamos afirmar, como regla general, que todas las madres deben estar al cien por ciento al cuidado de sus hijos, descuidando su propia salud y su propia vida social, cuando incluso el propio ********** contrataba personal para asistirla en esas actividades. En consecuencia, tales alegaciones e imputaciones que hace el señor ********** hacia su contraparte, respecto del cuidado de sus hijos, en nada trascienden al resultado del fallo apelado. Tanto y más (sic) que la madre ********** y su hermano, al momento de rendir su atestado, meridianamente sostienen que aquélla sí se hacía cargo de sus menores hijos; e incluso, el propio ********** acepta que era ella quien llevaba a la escuela al menor **********; tal y como también se deduce de la constancia de fecha seis de mayo del año dos mil diez, signada por la Licenciada **********, en la que se asienta que ********** gestionó la inscripción de sus menores hijos al ciclo escolar 2006-2007, y que ella asistió a la junta de inicio de ciclo; lo que evidencia que tampoco se trata de un total desinterés hacia las actividades de sus descendientes; pues tampoco pasa inadvertido que los menores ********** y ********** de apellidos **********, al momento de comparecer a dar su opinión en las audiencias previstas por el numeral 157 del Código Civil, aseguraron que su relación con su madre siempre ha sido buena y que ********** tiene buena comunicación con ella; de ahí que a lo sumo, podría decirse que se trata de una madre que no abandona sus propias actividades personales, pero que tampoco deja al 50 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 desamparo a sus hijos; de ahí que, como se dijo, tales alegaciones en nada trasciendan al fondo de la cuestión planteada. --- Empero lo anterior, no menos cierto es que, como ya se dijo, esta alzada estima que sí debe resultar procedente dicha pérdida de la patria potestad reclamada, basada en la causal prevista en la fracción VI del artículo 373 del Código Civil, adicionada mediante decreto publicado en la Gaceta Oficial número ciento ocho, de fecha ocho de septiembre de mil novecientos noventa y ocho y que derivó de la Ley número ciento cinco expedida en el Primer Periodo de Sesiones Extraordinarias de la LVII Legislatura del estado de Veracruz; cuya exposición de motivos revela también la necesidad de adicionar diversas normas al derecho civil veracruzano, relativas a la violencia intrafamiliar; lo que motivó dicha inclusión para el efecto de establecer que: 'la patria potestad se pierde:.. VI. Cuando el que la ejerza sea condenado por la comisión de un delito doloso en el que la víctima sea el menor…'; y en el caso particular, como bien lo resalta el apelante, está plenamente acreditado que ********** fue condenada por el delito de sustracción de menores en agravio de sus menores hijos ********** y ********** de apellidos **********; sin que quepa hacer ninguna apreciación subjetiva o algún juicio de valor respecto de dicha condena, como erróneamente lo hiciera el a quo; porque como claramente se deduce de la redacción de dicho precepto, en términos del artículo 14 constitucional y 14 de la propia codificación civil, basta el hecho objetivo codena (sic), para que opere la pérdida de la patria potestad, al no apreciarse, ni del propio precepto, ni del propio diario de debates que generó dicha reforma, que haya existido por parte del legislador veracruzano, alguna limitación, condición o ponderación que deba hacerse al respecto; por lo que conforme al principio general del derecho de que en donde el legislador no distingue, no es lícito distinguir; este Órgano Colegiado considera que al quedar demostrada la condena impuesta a ********** por un delito doloso donde sus menores hijos resultaron ser las víctimas; es inconcuso que debe resultar procedente el reclamo hecho valer. Sin que sea dable, como se dijo, acudir a la apreciación de aspectos subjetivos en la conducta desplegada por la sujeto activo del delito, como erróneamente lo hace el resolutor de primer grado; porque como meridianamente lo sostiene el apelante, cualquier excluyente de incriminación o cualquier justificación de la conducta expuesta por **********, debió haber sido ponderada por la autoridad penal, quien a pesar de que se trata de la madre, que por obvias razones quería tener a su lado a sus hijos y que eventualmente tampoco sabía de la existencia del depósito judicial decretado a favor del padre, fue condenada por dicho delito; de ahí que no resulte procedente ni jurídico pretender ahora cuestionar esa condena que fue incluso analizada por un órgano jurisdiccional de la misma categoría que esta Sala, como lo fue nuestra homóloga Séptima Sala, quien también encontró penalmente responsable a ********** del delito cometido. --- Congruente con lo anterior, al establecer el artículo 373 del Código Civil en su fracción VI que: (se transcribe) de ello se colige que, para que se actualice dicha causal de pérdida de la patria potestad, basta demostrar dentro del juicio natural, que quien la ejerce, en este caso la señora **********, haya cometido un delito doloso en el que la víctima sea el menor sujeto a patria potestad, como lo son los menores ********** y ********** de 51 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 apellidos **********; y además que exista una condena penal en ese sentido. Extremo que en la especie esta alzada estima que quedó por demás demostrado en autos, pues para ello se cuenta con la copia certificada de la sentencia penal dictada por la Séptima Sala de este H. Tribunal Superior de Justicia del Estado, de fecha ocho de noviembre del año dos mil ocho, en los autos del toca número **********; quien modificó la sentencia dictada por el Juez Tercero de Primera Instancia del Distrito Judicial de Veracruz, Veracruz, en la causa penal número **********, mismas que hacen prueba plena en términos de los artículos 261, 265 y 326, del Código de Procedimientos Civiles; lo que finalmente derivó en la condena impuesta a la señora ********** por el delito de sustracción de menores previsto en el artículo 241 del Código Penal del Estado, donde las víctimas resultaron ser los citados infantes; delito que es considerado de naturaleza dolosa por la misma autoridad penal, y en las que consta también incluso, que ********** se acogió a los beneficios que en la misma sentencia penal se le concedieron; por lo que no cabe duda alguna de dicha condena impuesta con antelación al ejercicio de la acción reconvencional. (…) En consecuencia, si está más que demostrada la condena impuesta a ********** por un delito doloso cometido en agravio de sus menores hijos, por el que se le impuso una pena privativa de libertad de dos años de prisión y una multa; y dichas actuaciones penales que en diversas copias certificadas corren agregadas a los autos, de conformidad con lo dispuesto por el numeral 326 del Código Procesal Civil, hacen prueba plena en cuanto a la resolución ahí tomada, gozando de pleno valor jurídico para tener como verdadero lo que en ella se asienta, por constituir cosa juzgada; es inconcuso que, contrario a lo apreciado por el a quo, no cabe hacer ninguna apreciación valorativa sobre lo justo o injusto que pudiera haber resultado dicha condena; es decir, resulta equívoca la apreciación del juez natural, al señalar que tal conducta por la que fue condenada penalmente **********, no fue algo que se haya cometido de manera intencional, sino como una reacción propia de una madre que desea estar con sus hijos; porque estimarlo de esa manera, por un lado, se estarían negando los efectos legales de la cosa juzgada penal; pero además, se estaría cuestionando la procedencia de esa condena que constituye la verdad legal y en que (sic) cuyo caso ********** estuvo en condiciones de justificar por lo que en ese contexto, el juzgador primario y esta Sala, tenemos la ineludible obligación de respetar y deducir las consecuencia civiles que lógica y jurídicamente se desprenden de esa sentencia penal, al haber sido esa la intención del legislador veracruzano, al adicionar como causal de pérdida de la patria potestad, la condena penal sin ninguna limitación; por lo que no es dable ya ahora pretender excusar la conducta desplegada por la madre, so pretexto de que lo hizo de manera natural; ya que de permitirlo así, se estaría dejando a los gobernados en la posibilidad de hacer justicia por su propia mano, sin acudir a los órganos jurisdiccionales a través de los procedimientos previamente establecidos. Razón por la cual, nuestro más alto tribunal ha resuelto que las actuaciones judiciales de naturaleza penal, acreditan plenamente hechos que no pueden ser negados ni desatendidos; pues el hecho objetivo lo constituye que, a la aquí recurrente **********, se le condenó por un delito doloso (en la 52 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 especie la sustracción de menores) en el que las víctimas fueron sus menores hijos, lo que da pauta a que indudablemente se actualicen en su contra los particulares previstos por la fracción VI del numeral 373 del Código Civil de la entidad. Cobrando aplicación al respecto, las siguientes tesis jurisprudenciales: DILIGENCIAS PENALES EN JUICIOS CIVILES. y DOCUMENTOS, FALSEDAD DE. DECLARADA EN UN PROCESO PENAL, SU VALOR EN JUICIO CIVIL (LEGISLACIÓN DEL ESTADO DE VERACRUZ). (Se transcriben).” 87. Ahora bien, determinado lo anterior, ya no es preciso responder a la última de las interrogantes relativa a si ¿fue correcta la apreciación de las circunstancias particulares del caso concreto por parte de la autoridad responsable? la cual pretende analizar los agravios formulados en los puntos quinto, sexto y séptimo del escrito de revisión, los cuales fueron sintetizados en los puntos 26.11 a 26.14 de esta resolución. 88. En los agravios referidos la recurrente básicamente alega, que ni el Colegiado ni la responsable valoraron debidamente las documentales que obran en autos y de las que se desprende que no se ocasionó un perjuicio emocional, físico ni en el desarrollo educativo ni de cualquier otra índole a los menores, por la comisión del ilícito de sustracción de menores, así como que para determinar el régimen de convivencia con sus menores hijos no se toma en cuenta que los menores también tienen derecho a la convivencia con la familia materna y a pasar más horas con su madre, pues si bien este régimen puede cambiar con el tiempo, de la forma en que se ha establecido sólo se provocará que los menores se alejen cada vez más del amor materno. 89. Así también señala que en el caso debió tomarse en cuenta que al momento en que el tercero perjudicado incoara la acción de pérdida de la patria potestad, la condena penal no era firme porque estaba pendiente la resolución del amparo promovido en contra de dicha determinación penal, aunado a que en la comisión del ilícito nunca medio el dolo. 53 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 90. Se estima innecesario analizar los argumentos anteriores, en tanto esta Primera Sala, revoca la interpretación realizada por el Tribunal Colegiado respecto a la fracción VI del artículo 373 del Código Civil para el Estado de Veracruz, y en ese sentido será el órgano Colegiado quien con base en los lineamientos de esta resolución resuelva lo atinente conforme corresponda. VII. DECISIÓN 91. En atención a las consideraciones anteriores, se concluye que al resultar fundados los agravios de la recurrente relativos a la indebida interpretación que realizó el Tribunal Colegiado del artículo reclamado, procede revocar la sentencia recurrida y se ordena devolver los autos al Tribunal Colegiado para efecto de que tomando en consideración la interpretación que esta Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, realiza del artículo 373, fracción VI, del Código Civil para el Estado de Veracruz, analice las circunstancias particulares del caso, a fin de dilucidar si la recurrente debe ser acreedora a la sanción de pérdida de la patria potestad por algún otro motivo, pues la sola existencia de la sentencia penal en su contra por el delito de sustracción de menores expone una duda razonable respecto a si la recurrente incumplió con las obligaciones que atañen a la función y ejercicio de la patria potestad, que en consecuencia pueda poner en riesgo la estabilidad y bienestar integral de los menores. 92. En conclusión, esta Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, R E S U E L V E: PRIMERO. En la materia de la revisión, se revoca la sentencia recurrida. 54 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 SEGUNDO. Devuélvanse los autos al tribunal colegiado, para los efectos precisados en el apartado séptimo de esta resolución. Notifíquese; con testimonio de esta resolución, devuélvanse los autos a su lugar de origen y, en su oportunidad, archívese el toca como asunto concluido. Así, lo resolvió la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, por mayoría de cuatro votos de los señores Ministros: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena (Ponente) y Presidente Jorge Mario Pardo Rebolledo. Votó en contra la Ministra Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Firman el Presidente de la Sala y el Ministro Ponente con el Secretario de Acuerdos, que autoriza y da fe. PRESIDENTE DE LA PRIMERA SALA MINISTRO JORGE MARIO PARDO REBOLLEDO. PONENTE MINISTRO ALFREDO GUTIÉRREZ ORTIZ MENA. 55 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 390/2013 SECRETARIO DE ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA LIC. HERIBERTO PÉREZ REYES. En términos de lo previsto en los artículos 3º, fracción II, 13, 14 y 18, de la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión pública se suprime la información considerada legalmente como reservada o confidencial que encuadra en esos supuestos normativos. 56