Sentencia Tribunal Superior de Justicia Murcia núm. 389/2002 (Sala de lo Social), de 20 marzo 2002 Jurisdicción: Social Recurso de Suplicación núm. 31/2002. Ponente: Ilmo. Sr. D. Francisco Martínez Muñoz. MINUSVALIDOS: impugnación del grado de minusvalía: competencia e incompetencia de la Jurisdicción Laboral; art. 12 del RD 1971/1999: interpretación; competencia: prestaciones ajenas al sistema de Seguridad Social. Texto: En la ciudad de Murcia, a veinte de Marzo de dos mil dos. La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Autónoma de Murcia formada por el Iltmo. Sr. Presidente D. FRANCISCO MARTÍNEZ MUÑOZ, y los Iltmos. Sres. Magistrados, D. RUBÉN ANTONIO JIMÉNEZ FERNÁNDEZ y D. JOSÉ LUIS ALONSO SAURA, ha pronunciado EN NOMBRE DEL REY la siguiente: SENTENCIA En el recurso de suplicación interpuesto por don Joaquín C. B., contra la sentencia del Juzgado de lo Social número 1 de Cartagena, de fecha 7 de noviembre de 2001, dictada en proceso número 592/2001, sobre invalidez no contributiva, y entablado por don Joaquín C. B. frente a Consejería de Trabajo y Política Social de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia. Actúa como Ponente el Iltmo. Sr. Magistrado D. FRANCISCO MARTÍNEZ MUÑOZ, quien expresa el criterio de la Sala. ANTECEDENTES DE HECHO PRIMERO.- La única instancia del proceso en curso se inició por demanda y terminó por sentencia, cuya relación de hechos probados es la siguiente: "1º) El demandante, con D.N.I. número ......, solicitó del organismo demandado el reconocimiento de la condición de minusválido. 2º) Tras dictamen del Equipo de Valoración y Orientación de fecha 1 de febrero de 2001, el Instituto de Servicios Sociales de la Región de Murcia dictó resolución por la que reconocía al demandante un grado de minusvalía del 27%, incluidos factores sociales complementarios (23% de discapacidad global y 4 puntos de factores sociales complementarios). 3º) Disconforme con la referida resolución, el demandante presentó reclamación previa, que fue desestimada por nueva resolución de 18-06-2001, tras nuevo dictamen del Equipo de Valoración y Orientación en el que reconocía al demandante un grado de minusvalía del 31%, incluidos factores sociales complementarios (27% de discapacidad global y 4 puntos de factores sociales complementarios)"; y el fallo fue del tenor literal siguiente: "Que declaro la incompetencia material del orden jurisdiccional social para el conocimiento y fallo de las pretensiones esgrimidas en el presente pleito, en virtud de demanda interpuesta por don Joaquín C. B. contra el Instituto de Servicios Sociales de la Región de Murcia y, en consecuencia, me abstengo de entrar en el conocimiento del fondo del asunto, previniendo a la parte actora de que podrá hacer uso de los derechos de los que se crea asistida, en relación con el asunto litigioso, ante los órganos judiciales del orden jurisdiccional contencioso-administrativo, a través de los procedimientos legalmente establecidos al efecto". SEGUNDO.- Contra dicha sentencia se interpuso recurso de suplicación por el Letrado don Gabriel Álvarez Sánchez, en representación de la parte demandante, sin impugnación de contrario. FUNDAMENTOS DE DERECHO FUNDAMENTO PRIMERO.- Al actor y recurrente, don Joaquín C. B., por acuerdo de la demandada, Consejería de Trabajo y Política Social de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, de 18 de junio de 2001, le fue declarada minusvalía del 31%; agotada la reclamación previa, con resultado adverso, quedó finiquitada la vía administrativa. Ejercitó acciones jurisdiccionales en instancia, postulando reconocimiento de que el grado de minusvalía procedente era el 33%. El Juzgado de lo Social número 1 de Cartagena, por sentencia de 7 de noviembre de 2001, declaró la incompetencia material de esta jurisdicción social, y sin pronunciamiento sobre el fondo, reservó acciones para ante la jurisdicción contencioso-administrativa. Contra la anterior resolución interpuso el presente recurso de suplicación, articulando como único motivo nulidad de actuaciones desde el momento procesal de ser dictada sentencia en instancia, declarando la competencia material de la jurisdicción social, y con remisión de los autos a instancia para resolver sobre la cuestión de fondo; ello con base en el artículo 191, apartado a) de la Ley de Procedimiento Laboral. El Ministerio Fiscal ha informado a la Sala, ser competente la jurisdicción contencioso-administrativa. FUNDAMENTO SEGUNDO.- El actor y recurrente, en su único motivo impugnatorio en el plano jurídico de derecho procesal; acusa la infracción del Real Decreto 19711999 de 23 de diciembre, artículo 12, por su no interpretación positiva para declarar la competencia de esta jurisdicción social. Son antecedentes históricos no discutidos que, el actor fue declarado por el Instituto de Servicios Sociales de la Región de Murcia afecto de minusvalía grado del 31%; tanto en vía administrativa, como en la demanda jurisdiccional, la única postulación es la pretensión que el grado procedente es el 33%, sin conexión alguna de ello ser antecedente para prestaciones de invalidez permanente no contributiva, u otro beneficio de la Seguridad Social. El Real Decreto 1971/1999 de 23 de diciembre, en vigor desde el 27 de enero de 2000, establece en su artículo 12 que, contra las resoluciones definitivas que sobre reconocimiento de grado de minusvalía se dicten por los organismos mas competentes, los interesados podrán interponer reclamación previa a la vía jurisdiccional social de conformidad con lo establecido en el artículo 71 del Texto Refundido de la Ley de Procedimiento Laboral de 1995. Dicho último artículo dispone la preceptividad de reclamación previa para poder formular demanda en materia de Seguridad Social. En el contencioso de autos no se evidencia que la pretensión del actor sea la de obtener beneficio integrado en la Seguridad Social; pues para pensión por Invalidez No Contributiva, los artículos 144.1.c) de la Ley General de la Seguridad Social, y 1.c) del Real Decreto 357/1991 de 15 de marzo, que desarrolló la Ley 26/1990 de 29 diciembre, que estableció las prestaciones no contributivas, exigen minusvalía del 65%, grado que ni con aproximada diferencia pretende el actor; tampoco se está en el supuesto de invalidez no contributiva, por equiparación de la minusvalía del 65% en el supuesto de situación de invalidez permanente absoluta en postulación contributiva, declarada en cuanto a la incapacidad, y denegada en cuanto a prestaciones, así Disposición Adicional 3.1 del citado Real Decreto 357/1991; ni respecto a otra ayuda o beneficio. Los artículos 1 y 5 de la Ley de Procedimiento Laboral, respecto a la competencia material de la jurisdicción social, en su calidad de especializada, la establece respecto a las pretensiones que se promueven dentro de la rama social del derecho en conflictos tanto individuales como colectivos, no estando comprendida la petición del actor, por lo expuesto, en cuestión integrada en Seguridad Social. El Tribunal Supremo, por auto de 18 de febrero de 1998, (rec. 4013/1997), interpretó que "el conocimiento de las cuestiones litigiosas que surjan respecto de actuación de la Administración para la protección de los minusválidos fuera del ámbito de aplicación del sistema de la Seguridad Social, y específicamente, las prestaciones sociales y económicas de la Ley 13/82, desarrolladas por Real Decreto 383/1984, corresponde a la jurisdicción contencioso-administrativa, ello coincidente con las sentencias del mismo Alto Tribunal de 27-01-1993, 3-05-1995 y 3-06-1995. El Tribunal Supremo, en sus sentencias de 27-10-1997 y 20-06-1998, definió la competencia de esta jurisdicción, en contenciosos sobre grado de minusvalía, pero entendido a procesos vinculados a posibles devengos por prestaciones dimanantes de invalidez no contributiva. FUNDAMENTO TERCERO.- El Tribunal Supremo, con distinta directriz interpretativa, en su sentencia de 11-10-1999 (rec. 4325/1998), declaró la competencia material de esta jurisdicción, en reclamación de grado de minusvalía, aunque no estuviese vinculado a prestación de la Seguridad Social; y ello con anterioridad al Real Decreto 1971/1999 de 23 de diciembre, en vigor desde el 27-07-2000, sobre procedimiento, declaración y calificación del grado de minusvalía. FUNDAMENTO CUARTO.- Ya vigente el dicho Real Decreto 1971/1999, el Tribunal Supremo en sus sentencias de 17 y 24 de diciembre de 2001, mantiene la antecedente decisión de ser competente esta jurisdicción sobre cuestión de fondo de grado de minusvalía, en contencioso de ser este el tema únicamente discutido, sin concreción con petición para prestaciones de la Seguridad Social. FUNDAMENTO QUINTO.- Esta Sala en su antecedente sentencia de 17-12-2001, también se pronunció aceptando la competencia material en postulación de petición única del 33% de minusvalía, sin conexión con beneficio de la Seguridad Social. FUNDAMENTO SEXTO.- Dados dichos antecedentes, fácticos y jurisprudenciales, siendo la última doctrina sentada por el Tribunal Supremo, antes y después de la entrada en vigor del reiterado Real Decreto 1571/1999, la de asumir en todo caso la competencia material respecto a tema del grado de minusvalía, aunque el contencioso se haya articulado sin conexión a petición de beneficio de la Seguridad Social; y debiendo aceptar el criterio del mas Alto Tribunal, procede estimar el recurso, y, con revocación de la sentencia impugnada, declarar la competencia material de esta jurisdicción laboral; y la nulidad de actuaciones desde el momento procesal de ser dictada sentencia en instancia, con devolución del procedimiento, para que el Magistrado, con total libertad de criterio resuelva sobre el fondo. FALLO En atención a todo lo expuesto, la Sala de lo Social de este Tribunal, por la autoridad que le confiere la Constitución, ha decidido: Que estimando el recurso de suplicación interpuesto por don Joaquín C. B. contra la Consejería de Trabajo y Política Social de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia; en procedimiento sobre grado de minusvalía. Revocamos la sentencia del Juzgado de lo Social número 1 de Cartagena, de fecha 7 de noviembre de 2001, dictada en su procedimiento número 183/2001; declaramos la competencia material de esta jurisdicción para el conocimiento del asunto, contencioso sobre grado de minusvalía; y la nulidad de actuaciones desde el momento procesal de ser dictada sentencia en instancia; con remisión del procedimiento, para que el Magistrado, con total libertad de criterio, resuelve sobre el fondo. Dese a los depósitos, si los hubiera, el destino legal. Notifíquese esta sentencia a las partes y al Ministerio Fiscal de este Tribunal Superior de Justicia. ADVERTENCIAS LEGALES Contra esta sentencia cabe Recurso de Casación para la Unificación de Doctrina ante la Sala de lo Social del Tribunal Supremo, que necesariamente deberá prepararse por escrito firmado por Letrado dirigido a esta Sala de lo Social y presentado dentro de los 10 días hábiles siguientes al de su notificación. Además, si el recurrente hubiera sido condenado en la sentencia, deberá acompañar, al preparar el recurso, el justificante de haber ingreso en la cuenta de Depósitos y Consignaciones abierta en el Banco Bilbao Vizcaya Argentaria, cuenta número: ......, a nombre de esta Sala el importe de la condena, o bien aval bancario en el que expresamente se haga constar la responsabilidad solidaria del avalista. Si la condena consistiese en constituir el capital-coste de una pensión de Seguridad Social, el ingreso de éste habrá de hacerlo en la Tesorería General de la Seguridad Social y una vez se determine por éstos su importe, lo que se le comunicará por esta Sala. El recurrente deberá acreditar mediante resguardo entregado en la Secretaría de la Sala de lo Social del Tribunal Supremo, al tiempo de la personación, la consignación de un depósito de 300'51 Euros, en la entidad de crédito Banco Bilbao Vizcaya Argentaria, cuenta corriente número ...... Madrid, Sala Social del Tribunal Supremo. Están exceptuados de hacer todos estos ingresos las Entidades Públicas, quienes ya tengan expresamente reconocido el beneficio de justicia gratuita o litigase en razón a su condición de trabajador o beneficiario del régimen público de la Seguridad Social (o como sucesores suyos), aunque si la recurrente fuese una Entidad Gestora y hubiese sido condenada al abono de una prestación de Seguridad Social de pago periódico, al anunciar el recurso deberá acompañar certificación acreditativa de que comienza el abono de la misma y que lo proseguirá puntualmente mientras dure su tramitación. Una vez firme lo acordado, devuélvanse las actuaciones al Juzgado de lo Social de origen para el oportuno cumplimiento. Así, por esta nuestra sentencia, definitivamente juzgando, lo pronunciamos, mandamos y firmamos.