FILIACION: LIBRO I TITULO VII DEL CODIGO CIVIL Reformado en mayo de 2000, antes de la paternidad y filiación. Antes diferenciaba entre hijos de y fuera de matrimonio, se preveía la legitimación, ahora todos los hijos son iguales y se aumentó la posibilidad de tener hijos por métodos asistidos. 337 vivo y viable PRUEBAS: 338 LA FILIACIÓN es la relación que existe entre el padre o la madre y el hijo. 340 la filiación se prueba con acta de nacimiento, a falta (341) por la posesión de estado de hijo o por pruebas de los avances científicos o testimonial, pero la testimonial acompañada de pruebas escritas o indicios. 343 Existe prueba dela posesión de estado de hijo, si la familia del padre, de la madre y en sociedad se le reconoce como hijo y se da alguna de: el hijo haya usado los apellidos de los padres con su anuencia; el padre o la madre la traten como hijo y lo mantengan; o que el presunto padre o madre tengan edad para casarse. 347 acción de filiación es imprescriptible para el hijo y descendientes. 352 la condición de hijo sólo se pierde por sentencia ejecutoriada. 353 Quáter el no nacido tiene derechos si el padre declara que reconoce al hijo de la mujer embarazada. RECONOCIMIENTO DE HIJOS: 360 la filiación también se establece por reconocimiento de padre, madre o ambos o por sentencia ejecutoriada que lo declare. 361 pueden reconocer a sus hijos los que tengan edad para casarse (antes pedía además más la edad del hijo a ser reconocido) (13-01-04) 362 el menor sólo puede reconocer con el consentimiento de los que ejercen la patria potestad o del tutor o con autorización judicial. 366 el reconocimiento hecho por un padre sólo surte efectos respecto de él. 367 el reconocimiento es irrevocable, aunque sea por testamento. 369 se puede reconocer un hijo por: acta de nacimiento, acta especial, en escritura pública, en testamento, o por confesión judicial. Si no se hace de alguna de éstas formas, no produce efecto, pero es indicio para paternidad o maternidad. 370 (modificado) establecía el testar de oficio dejando ilegible el nombre de quien no comparecía a reconocer, ahora dice que se pondrá sólo el nombre del compareciente 375 el hijo mayor, no puede ser reconocido sin su consentimiento y el menor o el interdicto sin el de su tutor. 380 cuando padre y madre no vivan juntos y reconozcan un hijo en el mismo acto, convendrán quien de los 2 ejercerá la guarda y custodia 381 si el reconocimiento es sucesivo y no viven juntos los padres, tendrá la guarda y custodia el primero que lo haya reconocido, salvo pacto 382 la paternidad y maternidad se puede probar por cualquier medio ordinario; si se propusiera prueba biológica o proveniente de los avances científicos y el presunto progenitor se negara a dar la muestra, se presumirá salvo prueba en contrario, que es la madre o el padre. 383 se presumen hijos de los concubinos: los nacidos en el concubinato o dentro de los 300 días siguientes a que cesó la vida en común. 385 no se puede indagar maternidad de mujer casada, salvo (386) el hijo por sentencia civil o criminal. 387 el dar alimentos no es presunción o prueba para indagar paternidad o maternidad. 389 el hijo reconocido tiene derecho a: llevar apellido paterno de los progenitores o ambos del que lo reconozca; a ser alimentado por los que lo reconozcan; percibir porción hereditaria y alimentos que fije la ley y las demás que deriven de la filiación. CICU: En la filiación se tutela el interés de los hijos en su condición de incapaces y al no poder ser defendido por ellos mismos, es elevado a interés superior de la familia: el interés del hijo lo siente el padre como propio. La filiación como hecho natural siempre existe, se es siempre hijo de un padre y de una madre y para el derecho, es la relación jurídica entre padre e hijo. Por la procreación se produce un sujeto de derecho que se relaciona con los demás individuos y el Estado y en especial entre procreantes y procreado, relación que da deberes y derechos. Para Cicu, lo característico de la filiación no sólo son las relaciones que unen al hijo con sus padres, sino con todos los parientes de sus padres, por lo que el estado de filiación se da propiamente en la familia legítima (hijo de matrimonio), aunque pueda existir un estado de filiación fuera del matrimonio (filiación natural), siempre que no sea adulterina o incestuosa, que reconoce solamente relaciones entre padre e hijo. La legitimidad (ya derogada en nuestro C. C.) de la filiación, presupone el matrimonio de los padres (filiación legítima). En la filiación natural no existía un acta de nacimiento, sino de reconocimiento y se hacia una anotación marginal en la de nacimiento. En materia de filiación el título de estado de hijo es el acta de nacimiento. Sin embargo, no es el único, la ley atribuye valor de título a la posesión de estado de hijo legítimo, subordinado a la falta del acta de nacimiento (y en nuestro derecho, se permiten ya otras pruebas), mencionando que la posesión de estado atribuye un título pero no crea un estado. GALINDO GARFIAS Cita la definición de Ripert, “la filiación puede definirse como la relación que existe entre dos personas, de las cuales una es el padre o la madre de otra”. La filiación constituye un estado jurídico, en cambio la procreación del ser, el embarazo y el nacimiento, son hechos jurídicos. La fuente primordial de la familia es la filiación, que es el parentesco más cercano y más importante: el que existe entre los padres y los hijos y que por su particular relevancia, toma el nombre de filiación; una vez conocida la filiación de una persona, ésta tiene derecho a llevar el nombre de su progenitor, puede exigir alimentos, está facultado para disfrutar de los derechos derivados de la patria potestad y es llamado a la sucesión hereditaria de su padre y de su madre (Planiol y Ripert). Por lo que se refiere a la maternidad, el parto es el hecho que permite conocer la filiación en forma directa e indirecta. La paternidad por el contrario, no puede ser conocida directamente en forma inmediata. Existe filiación consanguínea y filiación adoptiva, la consanguínea se divide en matrimonial (legítima) y extramatrimonial (natural o ilegítima), puesto que la filiación alude a la procedencia biológica de una persona y esto es puramente, un fenómeno de la naturaleza, no existe ninguna diferencia entre la filiación legítima y la ilegítima (división que no diferencia el C. C.). Respecto de la legítima, existe una presunción por la que el hijo de matrimonio no tiene que probar quien es su padre, porque el Código presume que el embarazo de la madre es obra del marido. La filiación se prueba con el acta de nacimiento y subsidiariamente, por la posesión de estado de hijo. De acuerdo con la opinión de Josserand el reconocimiento presenta los siguientes caracteres: es declarativo (no modifica ninguna situación anterior), personalísimo (sólo puede venir de los progenitores), individual (solo produce efectos respecto del que lo hace), irrevocable (376 C. C., aunque es anulable por error, el reconocimiento que haya hecho un menor ) y es un acto solemne (369 C. C.). Es consecuencia fundamental, que el reconocido entra bajo la patria potestad de quien lo reconoce. Existe la acción de investigación de paternidad o maternidad (para el hijo fuera de matrimonio) y la acción de reclamación de estado (para el hijo de matrimonio). ROJINA VILLEGAS Por filiación en sentido estricto se entiende la relación de derecho que existe entre el progenitor y el hijo y en sentido amplio se refiere a toda la línea ascendente y descendente. La filiación implica un conjunto derechos y obligaciones que respectivamente se crean entre padre e hijo, que constituyen un estado jurídico, es decir, una situación permanente que el derecho reconoce por virtud del hecho jurídico de la procreación, para mantener vínculos constantes entre el padre o la madre y el hijo. Planiol menciona que la filiación crea el parentesco en primer grado. Existe la filiación legítima y la natural. La legítima es el vínculo jurídico que se crea entre el hijo concebido en matrimonio y sus padres y la natural, corresponde al hijo que fue concebido cuando su madre no estaba unida en matrimonio, la natural puede ser simple, incestuosa o adulterina. Además existe la filiación legitimada (el hijo nacido fuera de matrimonio pero se legitima por contraer sus padres matrimonio) y la adoptiva (hay relación padre e hijo sin que medie la procreación). La maternidad es un hecho cierto de prueba fácil y para que se dé la filiación respecto a la madre basta el parto y la identidad entre la persona nacida y el que después pretende serlo. Al contrario, la paternidad sólo se puede probar indirectamente. La prueba perfecta para probar la filiación, es el acta de matrimonio. Si del juicio ordinario de investigación de maternidad legítima, se acredita ésta respecto a la madre y el juez lo reconoce en sentencia, tiene los mismo efectos que un acta de nacimiento. Demostrada la filiación legítima de la madre, se presume la del padre. Durante la vida del marido, él es el único que puede plantear el problema de la legitimidad respecto de los hijos concebidos durante el matrimonio, mediante la acción contradictoria (si no la ejerce existe la presunción de que el hijo de la esposa es del marido). La posesión de estado como título de filiación legítima, esta subordinado a la falta de título preferente, que es el acta de nacimiento. La acción para reclamar el estado de hijo legítimo, es la que tiene el hijo que tiene acta de nacimiento o estado de posesión de hijo o existe contradicción entre el acta y la posesión que tiene. La acción de estado de hijo es imprescriptible para el hijo y sus descendientes y prescriptible para sus herederos, acreedores, legatarios y donatarios; es personalísima mientras vive y no puede ser objeto de transacción. La acción de paternidad es la que se tiene cuando no hay acta de nacimiento y no hay posesión de estado de hijo, la acción de paternidad se puede investigar en los casos que haya elementos para poder sospechar que determinado hombre es el padre (como en el concubinato) y se puede probar por cualquiera de los medios ordinarios y si el presunto progenitor se negara a proporcionar la muestra necesaria, se presumirá, salvo prueba en contrario, que es el padre o la madre (382). Actualmente, la investigación de la paternidad o la maternidad es libre en principio, ya que el 382 del C. C. ya no limita los casos de la investigación de paternidad y en principio sólo pueden intentarse en vida de los padres, pero si hubieren fallecido durante la menor edad de los hijos, éstos la podrán ejercer dentro de los 4 años siguientes a su mayoría de edad (22 años) y si el hijo muere la podrán intentar sus descendientes. La consecuencia del reconocimiento es la protección de la patria potestad, da derecho a llevar el apellido de quien lo reconozca, derecho a reclamar alimentos y la porción hereditaria correspondiente en la sucesión legítima.