EVALUACIÓN DE TRES TIPOS DE SOPORTES CON USO POTENCIAL EN HUMEDALES ARTIFICIALES. 1 MAYRA EDITH BURCIAGA-SIQUEIROS ,1MA. ELENA PÉREZ-LÓPEZ, 1MA GPE VICENCIO DE LA ROSA, 2ADRIANA MARTÍNEZ-PRADO Y 2 JOAQUIN PINTO-ESPINOZA. 1 Becarias COFAA, CIIDIR- IPN Unidad Durango Sigma S/N, Frac. 20 de Noviembre C.P. 34220, Durango, Dgo. Fax (618) 8-14-40, [email protected]; 2 Instituto Tecnológico de Durango (ITD). Oral (X) Cartel ( ). Área de interés: Tecnología y Biotecnología Ambiental Palabras clave: evaluación, soportes, humedales artificiales. Introducción. Uno de los componentes principales de los humedales es el soporte, la selección adecuada del material a emplear es muy importante ya que dentro de él se llevan a cabo procesos físicos y químicos que permiten elevar la eficiencia del humedal, además pueden ayudar a bajar el contenido excesivo de sales, problema que se presenta con relativa frecuencia en las aguas residuales de algunas localidades del Estado de Durango, México. Como soporte generalmente se emplea grava con tamaños de partículas que pueden ir de 3 a 32 mm (Crites R. et al, 1998); y se busca que los yacimientos sean locales para que los costos sean menores. Considerando lo anterior el objetivo del presente trabajo fue la evaluación de tres materiales nativos que presentan potencial para ser empleados en la instalación de humedales artificiales. Metodología. Se evaluaron tres tipos de soportes: una zeolita (Z) y dos tipos de grava de río triturada (G1 y G2). Se revisó la potencialidad de los soportes mediante su granulometría, conductividad eléctrica (CE), y pH. Después se analizó el comportamiento de los soportes cuando se colocaron en una solución sintética de mezcla de iones (fosfatos, cloruros, calcio, sodio y potasio), con una CE de 7.28 mS/cm y un pH de 4.28, simulando los contenidos del agua residual de una quesería. Para esto se introdujeron, por triplicado, 40 y 80 g. de cada uno de los soportes en 100 mL de la solución; el tamaño de partícula empleado fue de 2-6 mm. La relación entre el contenido de grava y el volumen se ajustó a la que podría usarse en un sistema de humedal artificial subsuperficial. Se revisó pH y CE en el tiempo 0 y a los 1, 2, 5 y 6 días. El experimento se llevó a cabo a nivel laboratorio a una temperatura constante de 20 °C. Las diferencias se validaron mediante un Modelo General Lineal de Homogeneidad de Pendientes y una prueba de medias, Newman-Keuls, todo con un α de 0.05. Para llevar a cabo el análisis estadístico primero se normalizaron los datos. Resultados y Discusión. Para pH los sistemas G1 y G2 alcanzaron un equilibrio al primer día y la Z hasta los 5 días; con respecto a la CE no se alcanzó en el tiempo determinado, para ninguno de los soportes, esto indica que se requieren más días de los utilizados. Las diferencias entre los soportes fueron significativas en sus comportamientos con respecto a pH y CE. La respuesta de la Z fue la de mejor resultado incremento el pH de 4.28 a 6.94, pero el valor de la conductividad tuvo un aumento de aprox. 220 µS/cm, hecho no deseable. Entre la G1 y G2 la primera obtuvo una mejor respuesta para CE con una reducción en promedio de 413 µS/cm; pero su efecto sobre el pH no fue tan favorable, ya que sólo se modificó en una unidad, en promedio. Conclusión. Uno de los propósitos del trabajo fue establecer si soportes nativos disminuían la concentración de sales en la matriz acuosa, de acuerdo a esto el de mejor respuesta fue el G1. Agradecimientos. Este trabajo forma parte del proyecto apoyado por Fondos Mixtos.; clave DGO-2007CO1-67972 Bibliografía. 1. CRITES, R.; TCHOBANOGLUS G. 1998. Wetlands and Aquatic Treatment Systems en Small and Decentralized Wastewater Management Systems. McGraw-Hill. Estados Unidos de América. pp 563-640.