F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S RED NACIONAL UNIVERSITARIA SYLLABUS GENÉRICOS Facultad de Ciencias Jurídicas y Políticas Relaciones Internacionales CUARTO SEMESTRE SYLLABUS DE LA ASIGNATURA DE SOBERANIA Y LIMITE II ELABORADO POR: LIC. JUAN CARLOS PRADO YEPEZ U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S II. PROGRAMA ANALITICO DE LA ASIGNATURA. UNIDAD I: TEMA 1. La geopolítica chilena y su efecto en Bolivia 1.1. Objetivos geopolíticos. 1.2. La “Conciencia de Montaña”. 1.3. La geopolítica hacia el sur. TEMA 2. Planes chilenos para desviar aguas bolivianas. 2.1. Proyectos respecto al agua. 2.2. El desvío del río Lauca. 2.3. El problema de la sequedad. TEMA 3. Proyecciones de Bolivia sobre el Litoral peruano. 3.1. Antecedentes históricos trascendentes. 3.2. El acuerdo de 1950. 3.3. Puertos peruanos proclives a Bolivia. TEMA 4. Efectos de la guerra del pacifico. 4.1. 4.2. 4.3. 4.4. 4.5. Chile y la guerra del pacifico. Recursos mineros. Lago Titicaca Lago Poopo. El oleoducto Sica Sica - Arica. Remoción de hitos. TEMA 5.El proyecto de la exportación del gas y las relaciones boliviano chilenas. 5.1. 5.2. 5.3. 5.4. Factores adversos para el crecimiento chileno. Tratado de Ancón y de Lima. Nota ultimátum de Koening. Títulos de posesión de Bolivia en el pacifico. U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S TEMA 6. El tema marítimo. 6.1. 6.2. 6.3. 6.4. EEUU y el Vaticano. La política exterior y el mar. Importancia del Litoral para Bolivia. Negativa de Chile para ceder una costa a Bolivia. III ACTIVIDADES PROPUESTAS PARA LAS BRIGADAS UDABOL Las Brigadas están destinadas a incidir de manera significativa en la formación profesional integral de nuestros estudiantes y revelan las enormes potencialidades que presenta esta modalidad de la educación superior no solamente para que conozcan a fondo la realidad del país y se formen de manera integral, sino, además, para que incorporen a su preparación académica los problemas de la vida real a los que resulta imperativo encontrar soluciones desde el campo profesional en el que cada uno se desempeñará. El trabajo de las Brigadas permite que nuestros estudiantes se conviertan a mediano plazo en verdaderos investigadores, capaces de elaborar y acometer proyectos de desarrollo comunitario a la vez que se acostumbren a trabajar en equipos interdisciplinarios o multidisciplinarios como corresponde al desarrollo alcanzado por la ciencia y la tecnología en los tiempos actuales. La ejecución de diferentes programas de interacción social y la elaboración e implementación de proyectos de desarrollo comunitario derivados de dichos programas confiere a los estudiantes, quienes son, sin dudas, los más beneficiados con esta iniciativa, la posibilidad de: - Desarrollar sus prácticas pre-profesionales en condiciones reales y tutorados por sus docentes con procesos académicos de enseñanza y aprendizaje de verdadera “aula abierta”- - Trabajar en equipos, habituándose a ser parte integral de un todo que funciona como unidad, desarrollando un lenguaje común, criterios y opiniones comunes y planteándose metas y objetivos comunes para dar soluciones en común a los problemas. - Realizar investigaciones multidisciplinarias en un momento histórico en que la ciencia atraviesa una etapa de diferenciación y en que los avances tecnológicos conllevan la aparición de nuevas y más delimitadas especialidades. - Desarrollar una mentalidad, crítica y solidaria, con plena conciencia de nuestra realidad nacional. U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S ACTIVIDADES A REALIZAR VINCULADAS CON LOS CONTENIDOS DE LA MATERIA TAREAS TEMA(S) PROPUESTAS QUE CON LOS LUGAR DE ACCIÓN FECHA PREVISTA SE RELACIONA Visita a las fronteras Bolivianas Unidad I Puerto Suarez y Yacuiba Prácticas reales sobre Unidad I: . aplicación de los conocimientos UnidadII: Unidad Santa Cruz de la Sierra, ciudad capital adquiridos el análisis de las RRIOI Participación en la IV Jornadas Unidad I, II, III, UTEPSA Latinoamericanas de Historia de Relaciones Internacionales Participación y organización de Unidad I,II,III Oficina Regional actividades con el Instituto de Cancilleria Relaciones Internacionales de Santa Cruz Viaje a Chile al VI Encuentro de Unidad I,II,III Historiadores e Iquique - Chile Intelectuales Bolivia – Chile U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A de F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S IV.- EVALUACION DE LA ASIGNATURA Procesual o Formativa A lo largo del semestre se realizaran exposiciones, work papers, lectura de obras, DIF además de otras actividades en aula: también se contaran los trabajos en campo de las brigadas en los diferentes eventos de historia. Todos ellos se evaluaran sobre 50 puntos De Resultados de los Procesos de Aprendizaje o Sumativa Se realizaran dos evaluaciones parciales con contenido teórico y práctico. La evaluación final consistirá en un examen escrito y en la presentación de documentos resultantes del trabajo practico V. BIBLIOGRAFIA. FORTEZA, Roxana. Apuntes Sobre Teorías de Relaciones Internacionales. Alar Ediciones. Santa Cruz – Bolivia. 2005. T3. MINISTERIO DE RELACIONES EXTERIORES Y CULTO, UDAPEX. Diálogos de Política Exterior Boliviana. Editores Muela del Diablo. La Paz – Bolivia. 2005. 327.1 Ud1 FERNANDO SALAZAR PAREDES, Hacia una Nueva Política Exterior Boliviana. Cerid. La Paz - Bolivia. 2000. 327.1 Sa31 VI. CONTROL DE EVALUACIONES 1° evaluación parcial Fecha Nota 2° evaluación parcial Fecha Nota Examen final Fecha Nota U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S APUNTES U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S VII. PLAN CALENDARIO SEMAN A 1ra. 2da. 3ra. 4ta. 5ta. 6ta. 7ma. 8va. 9na. 10ma. 11ra. 12da. 13ra. 14ta. 15ta. 16ta. ACTIVIDADES ACADÉMICAS Avance de materia Avance de materia Avance de materia Avance de materia Avance de materia Avance de materia Avance de materia Avance de materia Avance de materia Avance de materia Avance de materia Avance de materia Avance de materia Avance de materia Avance de materia Avance de materia OBSERVACIONES Tema 1 – 2 Tema 3 – 4 Tema 5 Tema 6 Tema 7 Primera Evaluación Presentación de Notas Primera Evaluación Presentación de Notas Tema 8 – 9 Tema 10 – 11 Tema 12 Tema 13 Tema 14 – 15 Segunda Evaluación Presentación de Notas Segunda Evaluación Presentación de Notas Tema 16 – 17 Tema 18 – 19 17ma. Evaluación final Presentación de Notas 18va. Evaluación final Presentación de Notas 19na. Evaluación del segundo turno Presentación de Notas U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S PROGRAMA DE CONTROL DE CALIDAD WORK PAPER # 1 UNIDAD O TEMA: Unidad I, Tema I TITULO: LA GEOPOLITICA CHILENA Y SU EFECTO EN BOLIVIA FECHA DE ENTREGA: PERIODO DE EVALUACIÓN: Primera Evaluación.- LA GEOPOLÍTICA CHILENA Y SU EFECTO EN BOLIVIA Las ideas geopolíticas de Lewis Tames, aún con sus errores hidrográficos, nos permiten introducir que la conquista del Heartiand ha sido una constante geopolítica de los países que nos rodean. Chile, un país estrecho, sujeto a la Cordillera de los Andes y el mar, no tiene posibilidad de aumentar su producción agrícola e industrial, porque todo su territorio está desarrollado y explotado al máximo, mientras que su población crece a la par de sus necesidades. En razón de ello, aspira a repetir el ciclo de 1879 y hoy mira con codicia los yacimientos mineralógicos de Potosí, Oruro, Cochabamba y La Paz, con cuyas riquezas podrían tener un nuevo auge económico y convertirse en su mayor ambición, en una potencia sudamericana de primer orden. U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S Como no tiene posibilidades de ensanchar su territorio hacia el sudeste, frente a su vecino la Argentina, busca como es lógico el punto débil, concentrando toda su atención y su política diplomática hacia Bolivia, cuyas porciones del rico territorio pretende conseguir con el señuelo de un corredor marítimo para que nuestro país obtenga acceso al mar. Su diplomacia es tan hábil, que seguramente pretende obtener otros lugares de acceso estratégico hacia el altiplano, para, más adelante contar con puntos de apoyo directos que su pretendida conquista de los sitios que le interesen geopolíticamente. Las pretensiones Chilenas hacia el sur se extienden hasta el mismo polo y abarcan desde el meridiano 53° hasta 90°, incluyendo las islas Ashetland sur en la parte mas austral del continente, teniendo presión con la Argentina por cuestión del canal de Beagle, los hielos polar en definitiva la Antártida". En la actualidad, la geopolítica de Chile está orientada para cumplir tres objetivos fundamentales. El Derecho de un gran Poder Marítimo. Crear en su población la "Conciencia de Montaña", es decir el dominio del altiplano boliviano y peruano". Impulsar el Poder Económico Industrial hasta un primer plano entre los países Sudamérica. Chile pretende una "Conciencia de Montaña", es decir una penetración a América tierra adentro, como una constante geopolítica fundamental, así como la penetración hacia la masa continental a través de las líneas de resistencia de menos esfuerzo y que fundamentalmente considera que es Bolivia. U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S Esta intención tiene el objetivo de penetración hacia las grandes riquezas del altiplano, por lo tanto su gravitación y su línea de tensión más importante es la penetración hacia los Lípez y el Salar de Uyuni y las aguas del lago Titicaca para irrigar y vitalizar el Norte de Chile o sea Azapa y la Pampa de Tamarugal. CUESTIONARIO WORK PAPER 1 1. ¿Qué características principales encuentra en Chile? 2. ¿Qué mira Chile en estos días de Bolivia? 3. ¿Cuál es la pretensión chilena hacia el sur? 4. ¿Qué busca la geopolítica chilena? 5. ¿Qué es para Chile la “Conciencia de montaña” ? 6. ¿Conque países sudamericanos Chile congenia? WORK PAPER # 2 UNIDAD O TEMA: Unidad 2, Tema 2 TITULO: PLANES CHILENOS PARA DESVIAR AGUAS BOLIVIANAS FECHA DE ENTREGA: PERIODO DE EVALUACIÓN: Primera Evaluación.- Planes chilenos para desviar aguas bolivianas En la zona Norte de Chile no llueve nunca los cursos miserables de aguas fluviales si no se desplazan sobre costosos canales, se insumen U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S a poco de llegar a los arenales y los centros industriales establecidos, en excepcionales para aquel sector abastecer precisan de energía adoptar hidroeléctrica medidas a sus actividades en forma regular y menos onerosa. Hasta el presente se ha recurrido a tres alternativas para solucionar el problema de la sequedad. a) acudir a procedimientos artificiales para desalar el agua del mar. b) Extraer agua mediante procedimientos o perforaciones profundas en los arenales, cosa muy improbable. c) Busca la manera de utilizar aún más las aguas dulces de la Cuenca del Altiplano Boliviano. Esta última posibilidad abre para Chile una nueva era de prosperidad, porque el aprovechamiento de la fuerza hidroeléctrica de los lagos del altiplano les da la perspectiva no sólo de regar las áridas tierras de la esforzada zona norte, sino de proporcionar energía abundante al cobre y al salitre, disminuyendo sus costos para el desarrollo y el progreso técnico de transformación de los salares. Tan ostensible es la necesidad que sostiene el norte chileno de las aguas bolivianas que, como una manera de concordar en que el desarrollo de esa región depende fundamentalmente de Bolivia, se han elaborado diversos planes para desviar hacia esa zona caudales del sistema hidrográfico de la meseta boliviana. Entre estos planes chilenos, conforme aquella dependencia natural se mencionan los siguientes: a) En 1922 el Ing. chileno Luis Lagarrigue, presentó un proyecto consistente en desviar aguas del río Desaguadero hacia el Litoral U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S chileno, a través de un canal de mil kilómetros con destino de la pampa de Tamarugal. b) En 1950 en la IV Conferencia Mundial de Energía (Londres) el Comité Nacional Chileno, presentó un proyecto consistente en utilizar aguas provenientes del Lago Coipasa y desviarlas hacia la quebrada de Cuya o de Aroma con destino al litoral chileno. c) En 1954, presentaron otro proyecto consistente en tomar 80 metros cúbicos por segundo de aguas del río Desaguadero en su confluencia con el Mauri dirigida hacia el valle de Lluta al norte de Arica. d) El año 1962, se produce el desvío del Río Lauca. e) En 1962, Chile propone a Bolivia un plan como base para una reanudación de relaciones diplomáticas, contempla la propuesta de la utilización definitiva y perenne de las aguas de los ríos y lagos del altiplano, fundamentalmente las del lago Titicaca.(5). Queda pues, demostrado el interés de Chile por promover el adelanto de la zona norte de su territorio, utilizando las aguas del sistema hidrográfico del altiplano boliviano. El desvío del río Lauca Chile, no solamente ha despojado de todo su litoral a Bolivia, sino también a desviado hacia su territorio las corrientes de sus ríos de curso internacional sucesivo, violando con su prepotencia las normas aprobadas en la Conferencia Panamericana reunida en Montevideo en 1933, que rigen el uso industrial y agrícola de aquellas aguas internacionales y que son obligatorias para todos los signatarios. U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A países F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S Desde 1939, Chile haciendo caso omiso de dichas disposiciones, sin llenar los requisitos pertinentes, empezó los trabajos para desviar las aguas del río Lauca, que si bien nacen en el territorio chileno, fronterizo con Bolivia, desembocando en el Lago Coipasa, en cuyo trayecto y zona están asentadas comunidades indígenas que viven gracias al caudal de ese río, que abreva su ganado, riega sus magras tierras y regula el clima seco del altiplano. Por otra razón vital es que, esa corriente fluvial que se origina en las ciénagas de Parinacota, a una altura de 4.390 metros sobre el nivel del mar y penetra a territorio boliviano, no podía ser desviado unilateralmente, sin un previo estudio y acuerdo entre los dos países ribereños, a fin de no afectar el clima, la flora, la fauna y habitat de las poblaciones autónomas de Bolivia. De ahí que la arbitraria utilización de esas aguas para irrigar y electrificar el Valle de Azapa por parte de Chile, fue motivo de constantes reclamos diplomáticos por parte de Bolivia, pero aquel país, incumplió su obligación de devolver a su cauce natural, las aguas una vez utilizadas racionalmente y purificadas como es norma obligatoria. La desviación del río Lauca, gravita e incide en los derechos soberanos de Bolivia y comprende en gran magnitud el desarrollo geopolítico y socioeconómico del país. Sin embargo de ello, la Conferencia de Río de Janeiro, cuando Bolivia presentó su reclamo, eludió su estudio y sus determinaciones y los transmitió a conocimiento del Consejo de la Organización de Estados Americanos (OEA) que hizo un llamado amistoso a ambos gobiernos para que acudiesen a los medios de solución pacifica (Pacto de Bogotá) cuyas disposiciones fueron aceptadas por ambas partes. En la primera nota de Bolivia a Chile, con la que se abre la disputa U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S sobre el río Lauca, fue el 11 de julio de 1939, está exclusivamente fundamentada en la Declaración de Montevideo, a la que se somete incondicionalmente en todo cuanto preceptúa y dispone acerca de la manera y forma como debe jurídicamente precederse para el uso y aprovechamiento de los ríos internacionales, en vez de acogerse al Derecho internacional, que expresa, y cortamente prohíbe la desviación de los ríos internacionales y resguarda los derechos fluviales de Bolivia. El 31 de octubre de 1961, Bolivia trata de rectificar su errónea posición jurídica al haberse acogido a la Declaración de Montevideo, y hace un replanteo de la cuestión del Lauca y la coloca dentro de las prescripciones del Derecho Internacional y demanda su estricta aplicación para la solución del problema. Esta posición fue contestada por el gobierno chileno que la Declaración de Montevideo no tiene carácter contractual, es decir que no obliga a su cumplimiento por las partes que la han suscrito y que el concederle validez legal, la hacía por pura deferencia a Bolivia, obligando al país a negociar en base al tratado de Montevideo, nefasta para el desarrollo político, económico y social de Bolivia, y que deviene nuestro fracaso en el pleito del Lauca con Chile y que amenaza los derechos soberanos y exclusivos del dominio y jurisdicción que ejerce Bolivia sobre el río Pilcomayo. CUESTIONARIO WORK PAPER 2 1. ¿En la zona norte chilena que es lo que mas hace falta? 2. ¿Qué actividades realiza Chile para solucionar el problema de la sequedad? 3. ¿Las aguas bolivianas son una alternativa? 4. ¿Qué proyectos ha estudiado Chile respecto del agua? 5. ¿Qué ocasiono el desvío del río Lauca? U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S 6. ¿Cómo afecto a la soberanía boliviana el desvío del río Lauca? WORK PAPER # 3 UNIDAD O TEMA: Unidad 3, Tema 3 TITULO: PROYECCIONES DE BOLIVIA SOBRE EL LITORAL PERUANO FECHA DE ENTREGA: PERIODO DE EVALUACIÓN: Primera Evaluación.- Proyecciones de Bolivia sobre el litoral peruano Está demostrado que el Estado boliviano, en las tres etapas fundamentales de su evolución histórica (las civilizaciones milenarias aymarás y quechuas, el coloniaje y la República), se ha proyectado necesariamente hacia el Océano Pacífico y que el Litoral comprendido entre los paralelos 26 y 27, por justificativos históricos y la leyes de la naturaleza, es complemento indispensable del macizo Andino que conforma la Cuenca del Altiplano. En esa costa, Bolivia ejerció soberanía legítima entre los grados 26 y U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S 22, correspondiendo al Perú territorio comprendido entre los grados 22 y 17; el triunfo chileno de 1879 suspendió aquella soberanía boliviana y redujo la del Perú, pero este resultado no impidió que Bolivia prosiga gravitando sobre todo aquel extenso litoral. Al abordar el tema de la concurrencia del Perú en la reintegración marítima de Bolivia, es preciso mencionar como los elementos de juicio inexcusables, antecedentes históricos de indiscutible trascendencia, que se resume en lo siguiente: a) Antes de la guerra de 1879, en diversas oportunidades, el Perú manifestó su asentimiento para que los territorios de Tacna y Arica quedasen incorporados a Bolivia. Esa incorporación no se produjo entonces por la oposición del Mariscal Andrés de Santa Cruz. b) Antes y durante la guerra de 1879, Chile propuso a Bolivia la conquista armada del Litoral peruano para anexarlo a Bolivia. c) Después de la guerra de 1879, Chile se comprometió a transferir a Bolivia los territorios de Tacna y Arica. El Perú concordó en la sesión de d) Arica a Bolivia, pero ante la perspectiva del plebiscito de Tacna y Arica, manifestó que esa transferencia perjudicaba los propósitos revindicacionistas del Perú. e) El acuerdo de 1950, por el que Chile se comprometió a realizar negociaciones directas para dar a Bolivia salida propia al mar, no fue jamás objetado por el Perú. Las apreciaciones del Perú al respecto, se concretaron a señalar dos aspectos que nunca nadie puso en tela de juicio sea: que las aguas del lago Titicaca U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S pertenecen al Perú y Bolivia y que el Perú no recibió ninguna sugerencia formal para modificar el "status" territorial de la frontera peruano-chilena determinado por el tratado de 1929(7). A más de 100 años de la pérdida del Litoral boliviano, Chile sigue oponiéndose a la solución del enclaustramiento boliviano, porque ha comprobado que cuanta mayor exigencia tenga Bolivia para su desarrollo, mayores serán las utilidades que deparen el movimiento comercial boliviano por el norte de Chile; así el encierro de Bolivia, significa fuente de recursos y bienestar para Chile. Para no seguir coadyuvando a ciegas el éxito de la política chilena, Bolivia ha procurado el emplazamiento de sus importaciones y exportaciones por territorio peruano, y al respecto existen planes que no han sido debidamente concretados como la construcción de las Carreteras Tacna-La Paz a llo-La Paz (Convenio de 19 de febrero de 1957), la construcción del ferrocarril Puno-Guaqui para unir la ferrovía Bolivia Guaqui-La Paz (Convenio de 30 de julio de 1955 y el acuerdo sobre salida de petróleo boliviano para puertos peruanos establecidos en Notas Reversales de 19 de febrero de 1957. Por el tratado de y Protocolo Complementario de 1955, Chile y Bolivia convinieron con la construcción del oleoducto que partiendo de territorio boliviano lleguen al puerto de Arica o a cualquier otro puerto chileno y fue, en virtud de ese acuerdo, que se definió el tendido del oleoducto Sica Sica-Arica, con el previo compromiso de Chile de dar a Bolivia una salida propia y soberana al Pacífico, mediante notas de 1ro. y 20 de junio de 1950 y que posteriormente desconoció cuando desvió las aguas del rió Lauca. Polos de influencia chilenos y la carretera Oruro-lquique U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S El enclaustramiento boliviano se ha constituido en una fuente de riquezas para Chile. En el transcurso de ciento quince años, se ha puesto en evidencia que el gobierno chileno, utiliza los puertos de Antofagasta u de Arica y el derecho de libre tránsito, para controlar la evolución de las actividades económicas de Bolivia. Sabido es que por Antofasta se efectúa en forma apreciable el movimiento de exportación de los minerales bolivianos y que por Arica, se realiza principalmente el de importación de productos de ultramar. De esta manera, Chile convirtió a Arica y Antofasta en "polos de influencia" sobre la economía boliviana; así nuestro país, se encuentra atrapado en una especie de tenaza, a la cual Chile se esmera en introducirle un aguijón ubicado en el centro de aquella costa o sea Iquique. Para ejercitar dicha influencia, ese país se vale de los ferrocarriles que conectan Bolivia con Arica y Antofasta y al presente esta empeñado en lograr la construcción de la carretera Oruro-lquique, fundamentalmente que dicha vía conviene a la zona norte, la que por sus cuantiosas producciones minerales y sus relaciones comerciales, esta llamada a ser en todo tiempo el punto de apoyo del progreso económico y de la seguridad y bienestar de Chile, subrayando que la unión de Iquique con Oruro aseguraría para siempre la vida de Iquique, aun después de agotado el salitre, porque ella acarrearía a este puerto las substancias minerales existentes en diversos sectores del territorio chileno y las ricas producciones del centro de Bolivia. Esta claro que Bolivia confronta ahora un dilema: o seguir estimulando el desarrollo de Arica con las actividades económicas U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S Bolivianas o complacer a Chile creando además de Antofasta y Arica, un nuevo "polo de influencia" chileno desde Iquique con proyecciones sobre Oruro, Cochabamba y Santa Cruz de Sierra. Ese afán de estrangular a Bolivia se ha manifestado en todas las épocas: Chile nos arrebato nuestro Litoral y últimamente cedimos territorio en la zona de "Cerro Capitán"'; Brasil mediante hábiles maniobras diplomáticas logró la rectificación de nuestras fronteras alejándonos de la margen del río Paraguay; Argentina se llevó buena parte de nuestro territorio del Chaco Central, La Puna de Atacama y Toldos; Perú aprovechando el Laudo Argentino se apropió de las zonas Yavari, Manuripi y Madre de Dios y el Paraguay, aprovechando nuestra desorientación fue posesionándose paulatinamente de gran parte del Chaco Boreal, hechos que han originado y originan que nuestros recursos naturales sirvan para potenciar a otros países en detrimento de Bolivia. Estas dolorosas experiencias nos demuestran que en la actualidad, hay peligrosos intereses geopolíticos de nuestros vecinos y las dolorosas experiencias que la historia nos ha demostrado y que ha puesto áreas enlutadas en nuestros mapas, debe inducirnos a pensar seria, responsable y cuidadosamente en todos los problemas y sus derivaciones geopolíticas cuando se juegan los intereses económicos y territoriales de nuestro país y de las futuras generaciones. CUESTIONARIO WORK PAPER 3 1. ¿Cuál es la proyección histórica de Bolivia? 2. Mencione 3 antecedentes históricos trascendentes de esta epoca 3. ¿A que se comprometió Chile en el acuerdo de 1950? 4. ¿Qué significa para Chile el enclaustramiento boliviano? 5. ¿Hacia que puerto peruanos, Bolivia se ha inclinado? 6. ¿Qué significo el oleoducto sica sica – Arica, y cual fue el compromiso de Chile? U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S WORK PAPER # 4 UNIDAD O TEMA: Unidad 4, Tema 4 TITULO: EFECTOS DE LA GUERRA DEL PACIFICO FECHA DE ENTREGA: PERIODO DE EVALUACIÓN: Primera Evaluación.- Efectos de la guerra del Pacífico La guerra del Pacifico, significó para Chile la solución a su problema de empobrecimiento natural, porque territorialmente la incorporación del Litoral boliviano y la provincia peruana de Tarapacá, no tenía importancia para un país cuya estructura geográfica es la larga extensión de una costa estrecha, comprendida entre el océano Pacífico y la Cordillera de los Andes, pero donde radicaba la enorme ganancia fue en las riquezas minerales de este territorio, que eran el guano y el salitre. Los propósitos logrados por Chile tuvieron efectos durante largos años, pero el ocaso de estas materias primas fundamentales, significa para este país una negra perspectiva futura que no ha desaparecido de ninguna manera. Chile ha tenido que ingresar por el desahucio total del salitre y por las fluctuaciones amenazadoras empobrecimiento que, del lógicamente cobre en significó una etapa también su de nuevo debilitamiento internacional y la agitación angustiada de sus sectores dirigentes y gobernantes, que ven el empobrecimiento como una perspectiva pavorosa para un país que logró la condición de ser casi la mayor potencia militar y económica en Sudamérica, precisamente con la explotación y exportación de materia U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S prima de aquellos territorios que conquisto con la violencia de la agresión injusta. Ambiciones chilenas Chile como cualquier otro pueblo, se resiste a insumirse en la decadencia definitiva y considera que su salvación radicará indudablemente en la posesión de recursos mineros, por lo que en este país se ensaya la contemplación de las realidades geográficas vecinas, por lo que ambiciona las riquezas mineralógicas de Bolivia, ubicadas en los Lípez y el Norte de Bolivia, por eso en Chile no se oculta muchos sectores de opinión pública, que si la acción de los gobernantes chilenos pudiese conseguir la incorporación pacífica o violenta del altiplano boliviano, rico en minerales y aptos para la exportación y la industrialización propia, se debiera hacerlo como se hizo con las costas salitreras y guaneras en el siglo pasado. En Chile también se piensa que hay otra ruta de salvación porque el territorio chileno, estrechado entre la orilla oceánica y la cordillera, es duro y estéril, fundamentalmente en la costa norte arrebatada a Bolivia que es tierra arenosa, salitrosa, sin corrientes de agua significativas, sin lluvias y completamente seca y estéril; por eso allí la explotación del guano, del salitre, del cobre o de la plata, eran las únicas posibilidades de actividad y desarrollo económico y, como ésta explotación se ha agotado o ha desaparecido, entonces no hay otras que les sustituyan, salvo que las condiciones naturales de esterilidad y falta de humedad desaparezca mediante obras poderosas de irrigación, de manera que esos territorios desérticos se conviertan en una especie de vergeles con agricultura de cultivo. Esta perspectiva es posible de cumplirse, siempre que Chile contara con posibilidades para desviar y orientar los ríos de la cordillera que se vierten sobre el altiplano boliviano, o por lo menos, servirse de una parte de sus caudales, que es lo que ha hecho con prepotencia con el rió Lauca, para regar las grandes extensiones de la costa desértica que se mantiene en su poder y si lograra contar con las aguas de los lagos altiplánicos, tales como el Titicaca y el Poopó, entonces las perspectivas no solamente serían para regar U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S abundantemente los desiertos de la Costa Norte, sino hasta de electrificarlos, llevando energía a todo el resto de Chile. Por otra parte, con Chile tenemos un limite físico natural que corresponde a las altas cumbres de la cordillera occidental desde el Cerro Zapaleri en el sur, hasta el flanco occidental de la cordillera corresponde a Chile y el oriental a Bolivia. La economía factor clave Chile es un país pujante que avanza a pasos gigantescos, mientras sus tres vecinos del norte y del oeste, no pueden hacer lo propio porque tienen numerosos problemas. La superioridad económica pretende lanzar a Chile a una aventura de expansión territorial como en 1879, y para esto se arma en el exterior, y de sus tres vecinos territoriales, escogió al mas débil como elemento de prueba de futuros avances y, de esta manera, Bolivia se ha visto envuelta en un barullo geopolítico, porque por denuncias de bolivianos que viven en la extensa frontera con Chile, este país remueve hitos y avanza por donde quiere, limitarse a mencionar tres cosas. a) En Liscaya y el Cerro Capitán, sobre la frontera con la provincia Atahuallpa de Oruro, la norte de la latitud 190. b) En Sillillica, frente al gran salar de Uyuni, en la Provincia Daniel Campos de Potosí, con avance comprobado de 15 kilómetros cuadrados. c) En Laguna Verde, en el ángulo noroeste del territorio boliviano, al pie del volcán Licancabur. En este caso han llegado al colmo de publicar tarjetas postales en las que figura dicha laguna como posición de Chile. El litio es uno de los elementos que ha cobrado inusitada importancia en la presente era tecnológica por sus innumerables aplicaciones en la industria y en la metalurgia y como una reserva energética mundial con un uso probable en la U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S fusión nuclear cuando la ingeniería resuelva ciertos problemas técnicos; es decir es un material estratégico del futuro y por lo tanto apreciado y codiciado. Bolivia posee el salar mas extenso del mundo y en consecuencia una de las reservas mundiales mas grandes de ese elemento y el sistema de salares de Uyuni, Chiguana y Coipasa con todo su enorme potencial, se halla tentadoramente expuesto precisamente en el borde de la frontera con Chile, nuestro secular, inescrupuloso y codicioso vecino que ya es un importante productor de litio extraído del anteriormente Salar de Atacama. La explotación de estos recursos, que significarían un alivio a la economía nacional, la base del desarrollo regional y por lo tanto, la presencia soberana del estado, no ha sido iniciada ni siquiera incipientemente obstaculizada por intereses políticos regionales. Conclusiones Las experiencias de nuestro pasado histórico, nos hacen ver que en la actualidad existen grandes intereses geopolíticos de nuestros vecinos y Bolivia confronta dos amenazas principales: La que se proyecta desde el Pacífico con el fin de dominar al altiplano boliviano y la que viene desde el sudoeste a invadir el oriente. Bolivia por su posición geográfica (macizo Andino) reviste una gran importancia geoestratégica en el Continente Sudamericano, que convierte a nuestro territorio en el "Heartland" del mismo y ésta realidad geográfica, determina que Bolivia esta llamada a cumplir una misión de equilibrio continental, que sea una tierra de contactos y no de antagonismos, porque en su suelo convergen todos los sistemas y se entrecruzan todos los caminos, de norte a sur de este a oeste, de suerte que se constituye en el nudo de atracción, de articulación y de soldadura entre las sub-regiones y los países sudamericanos. Chile, un país expansionista, en su geopolítica tiene como uno de sus objetivos, el crear la "Conciencia de Montaña" y dominar el altiplano boliviano y peruano, constituyendo su línea de tensión mas importante, la penetración U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S hacia los Lípez buscando obtener las riquezas de sus salares, el aprovechamiento de las aguas de ríos ribereños y las aguas de los lagos Titicaca y Poopó, con el fin de irrigar su desértico territorio, fundamentalmente el Valle de Azapa y la pampa del Tamarugal, además de llevar energía eléctrica a parte de su territorio ubicado en el norte. A mas de 117 años de la pérdida del Litoral boliviano, Chile sigue oponiéndose a la solución del enclaustramiento boliviano, por que ha comprobado, que cuanto mayores exigencias tenga Bolivia para su desarrollo, mayores serán sus actualidades que le deparen el movimiento comercial boliviano por el Norte de Chile (Arica Antofagasta) así el encierro de Bolivia significa fuente de recursos económicos y bienestar para Chile. El Gobierno Chileno, permanentemente ha rechazado la consideración de nuestra reivindicación marítima, con la cuestión de Lauca, porque talvez supone que le sirve de precedente para desviar hacia su territorio con el mismo pretexto, otros ríos de la meseta andina. El desguarnecimiento de fronteras, constantemente provocó remoción de hitos en el altiplano boliviano por parte de Chile, como en Viscaya y el Cerro Capitán sobre la frontera con la provincia Atahuallpa en Oruro, en Sillillica frente al salar de Uyuni, en la Provincia Daniel Campos de Potosí y en Laguna verde al pie del Volcán Licancabur, hecho que demuestra las actitudes expansionistas de Chile a costa de nuestra heredad nacional. CUESTIONARIO WORK PAPER 4 1. ¿Qué significo para Chile la guerra del pacifico? 2. ¿Qué aspira Chile en la posesión de recursos mineros? 3. ¿Los lagos bolivianos Titicaca y Poopo, tienen alguna importancia para Chile? 4. Mencione 3 casos de remoción de hitos por parte de los chilenos. U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S 5. ¿Qué amenazas confronta actualmente Bolivia? 6. ¿Cuál es la misión de Bolivia en el continente sudamericano? U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S PAPER # 5 UNIDAD O TEMA: Unidad 5, Tema 5 TITULO: EL PROYECTO DE EXPORTACION DEL GAS Y LAS RELACIONES BOLIVIANO-CHILENAS FECHA DE ENTREGA: PERIODO DE EVALUACIÓN: Segunda Evaluación.- El proyecto de exportación del gas y las relaciones boliviano — chilenas "Si la historia la escriben los que ganan y aun así nos da claro testimonio de la expoliación producida por los países más ricos a los más pobres, la magnitud de tal despojo habrá sido sin duda descomunal" Gabriel Stilman. El 17 de octubre de 2003, luego de una conmoción social que produjo muchas víctimas fatales, el presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, a sólo 14 meses desde que asumiera el mando constitucional, debe abandonar el poder y opta, precipitadamente, por salir del país. La protesta ciudadana se nutre de varias vertientes: la falta de atención oportuna del gobierno a las crecientes demandas sociales, agudizadas por la severa crisis económica que vive Bolivia; la decepción ciudadana frente a los resultados negativos del proceso de capitalización que ejecutó el mandatario durante su primer gobierno (1993 — 97) y, sobre todo, su pertinaz insistencia en la misma política. U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S La resistencia de los pobladores del altiplano, y de las ciudades de El Alto y La Paz, quienes someten a un cerco por varios días a la sede del gobierno, se aglutina bajo la consigna "nada por Chile ni para Chile". Los fundamentos de esa reacción colectiva se originan en un hecho ocurrido hace 125 años. El 14 de febrero de 1879, Chile ocupa militarmente el litoral boliviano, desatando la llamada Guerra del Pacífico. Las causas económicas y políticas forman parte del registro histórico, lo mismo que el detalle de las operaciones bélicas. Lo cierto es que Chile inicia su vida republicana con un territorio reducido en espacio y muy limitado en recursos naturales. Ve como una seria amenaza para su seguridad externa la posibilidad de un creciente desarrollo de sus vecinos, especialmente de Argentina y Perú. Sus prioridades se orientan, entonces, a superar esos factores que le son adversos, sin reparar en los medios. En 1836 el Mariscal boliviano Andrés de Santa Cruz logra, al fin, concretarla Confederación Perú — Boliviana, recogiendo viejos anhelos secularmente enraizados en ambas naciones. Desde ese mismo instante destruir la Confederación se convierte para Chile en una razón de Estado, porque sabe que tal entendimiento boliviano — peruano obstaculizará poderosamente sus avances hacia el norte, hacia los territorios donde se encontraban los grandes depósitos de fertilizantes naturales, el bórax, el azufre, la plata y el cobre; indispensables para recuperar su economía y financiar su futuro desarrollo. Tales temores los resume, sin ambages, el estadista chileno Diego Portales cuando le escribe al general Blanco Encalada, en momentos en que este jefe militar preparaba su ofensiva militar contra Santa Cruz: "Unidos estos dos estados –le dice— serán siempre más que Chile" "La Confederación debe desaparecer para siempre jamás del escenario de América......ésta debe ser su máxima U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S ahora y ojala fuera la de Chile para siempre". Después de ese primer intento fallido, Chile alcanza su objetivo, en 1839, al derrotar al ejército del Protector Santa Cruz en la batalla de Yungay. En los próximos años, mientras crecía el poderío militar de Chile, se confiará a la acción diplomática y a los grandes intereses empresariales, vinculados al capital transnacional, la tarea de promover los avances hacia el norte (el desierto de Atacama) y generar las confusiones jurídicas que más adelante servirían de pretextos para la expoliación. Por aquel tiempo se habían descubierto en dicho territorio boliviano inmensos depósitos de nitratos y gigantescos yacimientos mineralógicos. Tales reservas resolverían el segundo factor adverso para el crecimiento de Chile: la falta de recursos naturales. El 6 de febrero de 1873, Bolivia y Perú suscriben un Tratado de Alianza Defensiva "para garantizar soberanía y integridad la mutuamente de sus su independencia, territorios su respectivos...". Contemporáneamente se agudizaba la crisis de la economía chilena, que llega a un punto álgido en 1976. En los apuntes personales del presidente Pinto Garmendía aparecen frases como las siguientes: "Un año malo sobre una situación muy delicada ya no puede dejar de producir fuertes influencias. Si algún descubrimiento minero o alguna novedad por el estilo no vienen a mejorar la situación, la crisis que de años se está sin-tiendo, se agravará" (2). ¿En qué pensaba el mandatario Aníbal Pinto? Obviamente no era en los yacimientos de Taltal, en territorio chileno, sino en los de Antofagasta y de Tarapacá. Chile sabe que no puede esperar mucho tiempo. Acelera sus planes, pero sabe también que primero debe solucionar el diferendo con la Argentina sobre el territorio de la Patagonia. Se empeña en este U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S propósito y zanja temporalmente el problema mediante un acuerdo para someter la controversia al arbitraje internacional. Ello se concreta en diciembre de 1878; sólo dos meses antes de la ocupación del litoral boliviano, cosa que ocurre en febrero de 1879. En medio de una serie de desencuentros, que se presentarán a lo largo de toda la contienda, Bolivia y Perú deben afrontar la guerra. Las consecuencias de la derrota son mucho más duras para la nación boliviana. Los antiguos aliados acuerdan, por separado, los términos de la paz. No tienen otra salida. Lo hace primero el Perú con la cesión a perpetuidad de la provincia de Tarapacá, lo cual se estipula en el Tratado de Ancón, suscrito en 1883. Respecto de Tacna y Arica se aplaza la solución definitiva hasta que un plebiscito, decida el destino de ambas provincias, cuyo verificativo debía realizarse diez años después de la ratificación del citado instrumento. En vista de que tal plebiscito jamás tuvo lugar, el 3 de junio de 1929, ambos estados definieron mediante tratado que Tacna quedara bajo la soberanía peruana y Arica se incorporara a la de Chile. Pero, además, se pacta un protocolo secreto que estipula que "Los gobiernos del Perú y Chile no podrán, sin previo acuerdo entre ellos, ceder a una tercera potencia la totalidad o parte de los territorios que, en conformidad al tratado de esta misma fecha, quedan bajo sus respectivas soberanías, ni podrán, sin ese requisito, construir, a través de ellos, nuevas líneas férreas internacionales". El Tratado de Ancón y el de Lima, constituyen lo que muchos historiadores han coincidido en calificar como "el doble cerrojo" para impedir el acceso boliviano al Pacífico. En efecto, a partir de la cesión de Tarapacá a Chile, Bolivia no podrá recuperar una salida soberana al océano por su antiguo litoral, porque ello supondría partir en dos el territorio chileno. A partir del Protocolo Adicional al Tratado de Lima (la cláusula secreta) se introduce un obstáculo adicional, porque para U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S hacerlo por ex territorios del Perú tropezará con la oposición de este país a cualquier solución que interrumpa la llamada unidad socioeconómica entre Tacna y Arica. Este fue el argumento para que el Perú planteara la zona de soberanía trinacional como condición para dar su consentimiento en oportunidad de la consulta que recibió con motivo de las negociaciones emprendidas en 1975. Es posible que, en las circunstancias actuales, se haya flexibilizado tal exigencia. En abril de 1884, Bolivia no tiene más remedio que aceptar los términos del Pacto de Tregua, que suscribe con Chile. La Paz está amenazada desde Puno. Aquí comienza el triste historial del supuesto libre consentimiento para aceptar los acuerdos que se sucederán en el tiempo. Lo refleja nítidamente el escritor y diplomático Walter Montenegro en su obra "Oportunidades Perdidas ": "El litoral era boliviano y Chile lo sabe. También sabe que el Pacto de Tregua y el Tratado de 1904, fueron documentos suscritos por Bolivia en su condición de país vencido, obligado a aceptar las condiciones del vencedor...........". "Ya dictó la sentencia definitiva en esta materia, el jefe Galo Breno, que derrotó a los romanos el año 390 a. de JC". "Ay de los vencidos". "La condición de los vencidos no ha variado". La evidencia histórica sobre las presiones para que Bolivia aceptara incondicionalmente todos los términos del pacto tiene muchos sustentos. Pero basta, como ejemplo el contenido de la carta que el destacado historiador José Luís Roca reproduce en su ensayo "1904: un tratado que restableció la paz pero no la amistad"; carta dirigida por el presidente Domingo Santa María al coronel Almeida, quien se encontraba a cargo de la guarnición acantonada en Puno, Dice a la letra: "tenemos la puerta abierta para imponer nuestra voluntad en La Paz a fin de obligar a Bolivia que tome el camino de la razón y de la derrota, con garantías y ventajas completas a nuestro favor". U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S Con esas ventajas completas y bajo las mismas presiones, aunque esta vez expresadas también a través de una presión diplomática, de arrogancia estridente, se impone el Tratado de Paz y Amistad. Ante la justificada resistencia de Bolivia de someterse a un tratado que le significará su encierro geográfico, Chile intensifica sus acciones para doblegar la voluntad del gobierno de La Paz. Como parte de esa ofensiva designa a Abraham Koning, embajador en Bolivia, quien, desde el comienzo de su gestión hizo gala de una suerte de matonaje diplomático, lo cual queda reflejado en la carta que dirigió al canciller boliviano de la época, a tiempo de admitir que, efectivamente, Chile desató una guerra de conquista, con el objetivo no sólo de apropiarse de territorios y riquezas ajenos. Pero aún más, cree pertinente enrostrar al vencido que el precio de su derrota le priva también de cualquier reclamo, para evitar la condena de un enclaustramiento definitivo. En nota-ultimátum fechada el 13 de agosto de 1900, sostenía Koning con desenfado: "En cumplimiento de las instrucciones de mi gobierno y partiendo del antecedente aceptado por ambos países de que el antiguo litoral boliviano es y será siempre de Chile ...", (propone a continuación las bases leoninas del futuro arreglo), y prosigue : "Es un error muy esparcido y que se repite diariamente en Ja prensa y en la calle, la opinión de que Bolivia tiene derecho de exigir un puerto en compensación de su Litoral". "No hay tal cosa, Chile ha ocupado el Litoral y se ha apoderado de él con el mismo titulo con que Alemania anexó al imperio la Alsacia y la Lorena, con el mismo titulo con que los Estados Unidos de la América del Norte, han tomado Puerto Rico. Nuestros derechos nacen de la victoria de la ley suprema de las naciones". "Que el litoral es rico y vale muchos millones, eso ya lo sabíamos. Lo guardaremos porque vale; que si nada valiera, no habría interés en su conservación". "Terminada la guerra, la nación U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S vencedora impone sus condiciones y exige el pago de los gastos ocasionados. Bolivia fue vencida, no tenía con qué pagar y entregó su Litoral". "Esta entrega es indefinida, por tiempo indefinido; así lo dice el Pacto de Tregua: fue una entrega absoluta, incondicional, perpetua". "En consecuencia, Chile no le debe nada, no está obligado a nada, mucho menos a la concesión (a Bolivia) de una zona de terreno y un puerto”. En realidad Bolivia, en más de veinte años de ocupación de su litoral, había pagado ya en demasía los costos de la guerra. Chile, durante más de dos décadas, se benefició con la explotación de los recursos existentes en ese inmenso territorio. Las recaudaciones aduanares fueron percibidas íntegramente por el erario chileno. Pero, nada sería suficiente. El objetivo geopolítico era, al parecer, otro: tener un vecino vulnerable y dependiente, atrasado y dócil. Ese objetivo se traduce plenamente en las cláusulas del tratado suscrito hace cien años. Bolivia entrega a Chile todo su litoral (400 kilómetros de costa) y un territorio inmenso (158 mil kilómetros cuadrados), en el que se encontraban cuantiosas reservas minerales, especialmente de plata y cobre. Hoy el cobre sigue representando un tercio del total de las exportaciones chilenas, lo que le significa en ingresos un monto superior, cada año, al total de la deuda externa e interna de Bolivia. A cambio, Bolivia recibe, en dos pagos, la irrisoria compensación de 300 mil libras esterlinas, un ferrocarril de Arica a La Paz y un régimen de libre tránsito, cuya amplitud responde, invariablemente, a la caprichosa voluntad del vecino país. Cabe recordar, que en plena Guerra del Chaco, precisamente cuando más necesitaba Bolivia de los pertrechos bélicos para sostener la contienda, Chile decide cerrar el paso por su territorio para el citado material. Con esa actitud, que no U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S se la puede calificar sólo de inamistosa, colocó a Bolivia, en un momento decisivo de la guerra, inerme frente a los avances paraguayos, cuya importación de armamento se realizaba por la Argentina; de modo que la supuesta neutralidad de Chile, adoptada en 1933, afectaba únicamente al Estado boliviano. Fue otra forma de agresión gratuita e indirecta. Por fortuna estaban los puertos peruanos para romper ese inesperado cerco desde la frontera oeste. Por supuesto que no se discute la validez formal del citado instrumento. Se lo suscribió y luego fue ratificado. Sin embargo, una cosa es la expresión formal del consentimiento y otra, muy distinta, la libertad de ese consentimiento, como fuente legítima de las obligaciones que emanen del mismo; circunstancia ausente, como se ha visto, tanto en el Pacto de Tregua como en el Tratado de 1904. La lógica es incontestable: ¿Se puede elegir libremente desde el encierro? En la esencia de la libertad reside la facultad para elegir, sin que ella esté sometida a ningún otro poder ¿Se puede sostener, entonces, que Bolivia estaba en capacidad de elegir su destino cuando firmó el Pacto de Tregua y el Tratado de 1904? La conclusión es categórica. Ambos documentos fueron impuestos en las condiciones más duras, jamás un país podría aceptar el despojo de su libertad. Ejercer la libertad para consentir en perderla es el contrasentido más grosero. Pero más allá de las disquisiciones filosóficas sobre lo formal y lo ético, lo justo o lo injusto, está el sentido visionario de quienes negocian un acuerdo de paz. Hay metas, en el tiempo, que deben asegurarse con inteligencia y previsión. Son las que determinarán si habrá amistad o enemistad, solidaridad y cooperación, o recelos y desconfianza. El fulgor de los triunfos militares de fines del siglo diecinueve obnubila la mentalidad de la dirigencia chilena de la época. Le permite ver únicamente el horizonte de sus nuevos límites, U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S vale decir, el espacio físico ganado y las posibilidades que se le abrían para financiar su desarrollo y alejar los temores de un país rodeado de naciones tal vez más fuertes. Le impide ver los límites intangibles, que son los que, a la larga, determinan el verdadero sentido de la victoria, sea militar o política. Como dice Stilman: "pareciera que los deseos de poder y hegemonía superan con creces la preocupación por asegurarse un marco de respeto mutuo y desarrollo equilibrado". Se dirá, seguramente, que no existe amistad entre las naciones: sólo intereses. Admitiendo la validez de ese argumento, ciertamente frío, no hay que perder de vista que es más fácil entrelazar esos intereses cuando los factores de una relación internacional son menos divergentes, cuando hay un mejor clima de entendimiento que posibilite ampliar las coincidencias. Hay metas comunes y elementos de complementariedad entre las naciones. Hay también ideales v criterios convergentes. De ese material están hechos los intereses, lo cual no descarta, no puede descartar, que los espacios integradores propicien relaciones estables de las que se desprendan beneficios recíprocos. Tanto más importante es lo anterior tratándose de países vecinos, cuyos vínculos, por ese hecho, adquieren una intensidad especial. Algo similar puede decirse del Protocolo Adicional de 1929. Responde a la misma lógica de cerrar, con todas las trabas imaginables, la posibilidad de que Bolivia pueda romper su encierro geográfico. Restringir el camino de los arreglos futuros es un profundo error histórico. Siempre lo será. Esta imaginación se ha venido utilizando, recientemente, para tratar de desvirtuar los fundamentos de la demanda marítima boliviana, con el argumento de que el litoral arrebatado fue siempre de Chile. Si bien los títulos históricos de Bolivia sobre la costa del Pacífico son U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S incuestionables, vale la pena citar algunos comentarios y ejemplos, porque sería muy largo e, incluso, innecesario, mencionar la inmensa documentación probatoria. Bastará con hacer referencia breve a los antecedentes que tienen su origen en el propio Chile. Comencemos por las constituciones políticas de los años 1822, 1823 y 1833. En ellas se reconoce que el límite norte de Chile era el desierto de Atacama. En esta materia, se dice, invariablemente, desde tal punto hasta tal otro. Se entiende, para no alterar también el diccionario de la lengua que: "hasta" "se usa para expresar el término del cual no se pasa con relación al espacio, el tiempo y la cantidad." La tesis de que la guerra se hizo para recuperar territorios resulta igual de absurda, porque, de lo contrario, cabría suponer que Chile invocaba derechos también sobre las provincias de Tarapacá, Tacna y Arica, que, hasta donde sabemos, fueron siempre peruanas, las que, como consecuencia de la guerra, excepto Tacna, fueron incorporadas a la soberanía chilena. En el primer Tratado de Amistad, Comercio y Navegación (1833 - 34) establece Atacama como el límite norte. Chile propuso comprarle a Bolivia (misión Lindsay) el territorio comprendido entre los paralelos 24 y 23. La compra implica la adquisición de un bien que pertenece a otro. Hay más: en 1866, 1872 (Protocolo Corral — Lindsay ) y 1874 se suscriben tratados de límites (que fijan el paralelo 24), entendiéndose que ningún país podría concretar acuerdos delimitatorios con otro Estado sobre territorios que los considera propios. U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S El Protocolo de 9 de diciembre de 1895, dice en su articulo 2° "Que la cesión definitiva del Litoral de Bolivia en favor de Chile, quedaría sin efecto si Chile no entregase a Bolivia, dentro del término de dos años, el puerto en la costa del Pacifico de que habla el tratado de transferencia". Este fue uno de los compromisos más significativos por parte de Chile para resolver el problema marítimo boliviano, por lo que vale la pena volver sobre el mismo más adelante. Nótese que el tratado habla claramente "del Litoral de Bolivia". El plenipotenciario Koning, en la antes referida nota-ultimátum, de agosto de 1900, aunque torpemente, deja constancia escrita, como ya se dijo, "de que el antiguo Litoral boliviano es y será siempre de Chile y se jacta luego de que su país "se ha apoderado de él..." En fin, como ejemplos, son más que suficientes. Bolivia tuvo acceso soberano al Pacífico. Su demanda por recuperar su condición de país costero es indeclinable. El desafío consiste en hallar la fórmula de la solución, pero sobre todo el compromiso de las voluntades capaces de viabilizarla. Hacia fines del año 2001 y principios del 2002 se confirma la noticia de que las reservas probadas y probables de gas natural existentes en Bolivia alcanzan a 53 trillones de pies cúbicos. Los compromisos de provisión del energético con Brasil y la Argentina, a veinte años, más el consumo interno, que es muy reducido, dejan, todavía, un saldo de aproximadamente 41 TCE Con lo cual, el país se convierte en una potencia gasífera en Sudamérica. Se hace perentoria, en consecuencia, la búsqueda y concreción de nuevos mercados. La oportunidad se presenta en la costa oeste de los Estados Unidos de América. Se conforma el consorcio transnacional Pacifíc LNG para el desarrollo del proyecto, cuyas dimensiones requerían de una enorme capacidad en inversión y U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S tecnología. Algún tiempo después el consorcio firmaría un compromiso con la empresa Sempra Energy, que tomaría a su cargo la distribución comercial del energético en el mercado de California. No se trataba de una operación sencilla ni técnica ni financieramente, pero nadie esperaba que el principal escollo iba a estar en el plano político internacional. Era indispensable ubicar en la costa del Pacífico una planta de licuefacción y el tendido hasta allí de un gasoducto de una considerable longitud. Sometido al proceso de regasificacion en México, el gas sería transferido luego al mercado de consumo. La opción, al parecer, técnicamente más factible señalaba a un puerto chileno (de preferencia Palillos ). Surgió, sin embargo, la propuesta peruana. Ello desató en Bolivia una encendida polémica. La factibilidad técnica se enfrentaba a la inviabilidad política. El resentimiento de los bolivianos por el cercenamiento de su cualidad marítima afloró con fuerza. Se le dijo al pueblo que éste era el mejor negocio que se le había presentado, después de la era floreciente de la plata y el estaño, recursos que, infortunadamente, se consumieron sin dejar ningún excedente en el suelo explotado. Ese pueblo se hizo la pregunta: ¿Será justo y razonable hacer el más grande negocio que se le presenta a Bolivia con el socio que menos confianza le merece? ¿Es una desconfianza justificada? En el transcurso de 125 años desde la guerra y 100 desde el Tratado de Paz y Amistad, se produjeron muchas negociaciones encaminadas a resolver el problema marítimo. El antecedente más importante fue, sin duda, el de 1895. En aquella ocasión, Chile se comprometía — al tenor del tratado — a transferir a Bolivia los territorios de Tacna y Arica, si adquiriese dominio y U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S soberanía permanente sobre los mismos. Y si no se cumplía tal condición, dice el artículo 4° del indicado instrumento "se compromete a ceder a Bolivia la Caleta Vítor, hasta la quebrada de Camarones u otra análoga." Tales tratativas fueron vistas por el Perú como un acto inamistoso. Lo dejó en claro algunos años más tarde con motivo de la proposición del secretario de Estado norteamericano, Frank B. Kellog, en 1926, que se basaba en similar transferencia. Torre Tagle (cancillería peruana) fijó doctrina, al respecto, al declarar, que "no puede aceptar la cesión, propuesta de los territorios de Tacna y Arica a nadie, ni por compra ni de otro medio, porque el Perú que viene defendiendo, más de cuarenta años, sus derechos sobre aquellos, no puede convertirlos en mercancía sujeta a precio, por grande que éste sea". Es pertinente destacar que, al propio tiempo, este país no descarta la "internacionalización parcial o completa de las provincias", "dando gratuitamente un callejón a Bolivia hasta la playa y en esta una ensenada en condiciones que permitan convertirla en un puerto grande, cómodo y seguro". En 1950 se produjo otro momento de acercamiento extraordinariamente interesante. Chile aceptó ingresar formalmente en negociaciones directas encaminadas a " buscar la fórmula que pueda hacer posible dar a Bolivia una salida propia y soberana al océano Pacífico, y a Chile obtener las compensaciones que no tengan carácter territorial y que consulten efectivamente sus intereses". En 1975, luego de reanudadas las relaciones diplomáticas en el encuentro presidencial (Banzer — Pinochet) en la localidad fronteriza de Charaña, en respuesta a la proposición boliviana, Chile manifiesta su acuerdo con la cesión a Bolivia de una costa marítima soberana, unida al territorio boliviano por una franja territorial, igualmente U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S soberana al norte de Arica. Condiciona, sin embargo, dicha eventual cesión a un canje simultáneo de territorios, equivalente en superficie, en la que incluye el área de mar cedida a Bolivia. El territorio podría ser continuo o integrado por distintas porciones de territorios fronterizos. La transferencia incorporaba el ferrocarril a Arica y el aeropuerto internacional, a un precio de reposición. La zona sería desmilitarizada. Con la propuesta boliviana y la respuesta chilena se conformó una base global de negociación. En virtud del Protocolo de 1929 se produjo la consulta al Perú, país que demoró once meses en dar a conocer sus puntos de vista. En su respuesta aceptaba la transferencia de la franja territorial hasta la intersección de la carretera que une a Tacna y Arica, a partir de la cual y hasta el mar proponía establecer un área de soberanía compartida. Reconocía, no obstante, el derecho de Bolivia a contar dentro de ese espacio con un puerto bajo su exclusiva soberanía, que se extendería al mar adyacente. Se insistía, como en 1895, acerca de la necesidad de no interrumpir la vinculación socioeconómica entre las indicadas provincias. El primer gran escollo fue la exigencia de un canje territorial en superficie equivalente. La opinión publica boliviana, no sin el estímulo de intereses internos y externos, se mostró contraria a tal condición. El argumento no dejaba de tener fundamentos: Bolivia había perdido no menos de 150 mil kilómetros cuadrados y aspiraba solamente a no más de 2 mil. Había perdido 400 kilómetros de costa y se contentaba con alrededor de sólo 40, o, incuso, menos. Era, sin duda, un exceso que la compensación territorial contemplara también la superficie marítima, teniendo en cuenta, por otra parte, que aún no se habían U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S definido ínter nacionalmente los límites del mar territorial. Recibida la posición del Perú, el gobierno de La Moneda, simplemente, declinó considerarla, en vista de que, a su juicio, el planteamiento peruano pretendía modificar las bases de la negociación bilateral boliviano — chilena. Sin embargo, Chile siguió exigiendo a Bolivia una definición sobre el precio (el canje) pero sin sanear los títulos que le permitieran perfeccionar el acuerdo (obtener el consentimiento del Perú). Adicionalmente, consideró que no le correspondía hacer nada más al respecto, pretendiendo, incluso, transferir esa responsabilidad a Bolivia. Se ingresó en un punto muerto. Había caído el telón de la negociación más importante emprendida en el siglo XX, en procura de resolver el problema marítimo. El gobierno de La Paz sintió que se había burlado su buena fe y no tuvo otro camino que el de interrumpir nuevamente las relaciones diplomáticas con Santiago. El restablecimiento del diálogo tenía un fin: superar el enclaustramiento boliviano. Perdió su razón de ser y fue nuevamente cortado. Ha quedado la impresión en la conciencia de los bolivianos -no desmentida por los hechos - de que Chile nunca tuvo intención franca de solucionar el problema marítimo, porque, invariablemente, puso condiciones imposibles de cumplir. En 1950 Chile acepta ingresar formalmente en negociaciones para la transferencia a Bolivia de un territorio soberano al norte de Arica, sujeta a compensaciones que no tengan carácter territorial. Lo que ocurría es que tales compensaciones apuntaban a las aguas de los lagos Titicaca, Poopó y Coipasa. Y aunque nuestro embajador sostuvo que no se había comprometido ni una gota de agua ni un grano de arena — lo cual era cierto en esa etapa — de haber seguido el proceso negociador tal exigencia hubiera sido formalizada. U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S Lo confirma el propio presidente Gabriel Gonzáles Videla en su informe sobrela llamada fórmula conciliatoria. Y dice: "La fórmula que encontramos después de cuidadosos estudios fue que contemplaría ceder a Bolivia al norte de Arica una faja de terreno de un ancho de diez kilómetros, contigua a la frontera peruana que correría del litoral hasta el límite, para que Bolivia pudiera comunicarse con el océano Pacífico a través de su propio territorio y pudiera construir su puerto. A cambio de ello, porque esta cesión requería una compensación, Bolivia permitiría que se aprovechara el agua del lago Titicaca para generar energía hidroeléctrica que podría ser utilizada en las provincias chilenas de Tarapacá y Antofagasta... Se tomó como base el estudio del afamado ingeniero Luis Lagarrigne". De modo que no fueron sólo elucubraciones del presidente Truman. La oferta, en todo caso, traía consigo la negativa del Perú, como algo absolutamente seguro. Era absurdo pretender, que el Perú diera su consentimiento perdiendo por triple partida: claudicando sus expectativas sobre las provincias cautivas, abandonando el principio sobre la necesidad de preservar la unidad socioeconómica entre Tacna y Arica y, por añadidura, cediendo las aguas del Titicaca. Para no hablar de las reacciones en Bolivia. En 1975, Chile confrontaba serias amenazas externas. La presión argentina, por un lado, a raíz del diferendo sobre el canal de Beagle y las islas Pincton, Lenox y Nueva, y, por otro, la agresiva política del entonces presidente del Perú, Gral. Velasco Alvarado, quien no ocultaba el propósito de recuperar Arica por las armas al cumplirse el centenario de la Guerra del Pacífico. A lo anterior se sumaba el aislamiento internacional de Chile, por la resistencia que en el ámbito externo provocaba la dictadura del Gral. Pinochet. En estas circunstancias, se inicia la negociación ya referida, U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A una F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S salida soberana al mar, neutraliza la posición boliviana A medida que se atenúan las presiones desde Perú y Argentina aumentan, proporcionalmente, las rigideces chilenas en la negociación con Bolivia, hasta que, superadas aquellas, Chile ya no tiene motivos para mantener sus compromisos encaminados a resolver el asunto marítimo. En la última década del pasado siglo, Chile consiguió cambiar la agenda histórica con Argentina y Perú, reemplazando una larga trayectoria de confrontaciones de diversa intensidad, por una vía de colaboración y de iniciativas destinadas a fomentar la confianza. No ha ocurrido lo mismo con Bolivia. En este campo fracasó la diplomacia chilena porque apostó a la resignación boliviana, y apostó mal. Pensó que más de un siglo sería suficiente para que la demanda marítima quedase archivada definitivamente. Al parecer, pensó, asimismo, que el régimen de Ubre tránsito y algunas facilidades portuarias compensarían la necesidad de un acceso costero soberano al océano Pacífico. Fue un error de cálculo que tiene que ser enmendado, o lo que sería inaceptable, una actitud deliberada para mantener a Bolivia atrasada y dependiente. Está claro que los conflictos que tienen su origen en cesiones territoriales, forzadas por tratados que violentaron los límites de lo razonable, no se disuelven por la resignación y el olvido de las naciones afectadas. Mucho menos cuando el despojo es cualitativo. Bolivia sufrió muchas desmembraciones, es cierto, enormes en términos cuantitativos. Pero sólo una: la del litoral, la privó de un atributo de soberanía, que únicamente se puede reparar con la restitución de un bien de naturaleza jurídica y política equivalente. Las facilidades de tránsito, los servicios portuarios, los programas de complementación económica o el comercio, por amplios que pudieran ser jamás compensarán un cercenamiento territorial. U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A Pero, F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S adicionalmente ha significado para el pueblo boliviano una pérdida de libertad, un confinamiento, al haber sido separado del contacto directo con las dos terceras partes de la realidad física del planeta, que es la extensión de los mares y océanos. El ex canciller de Chile y actual senador, Gabriel Valdés, habría declarado hace poco a la revista Ercilla que "la cancillería (chilena) tiene un pecado. Creer que la solución del caso boliviano es comercial. Y los problemas políticos no son comerciales. Bolivia tiene un sentimiento que se ha transformado en resentimiento y eso no se conquista con 30 mil toneladas de azúcar". Cierta o no, tal percepción es absolutamente certera, y sale al paso de quienes todavía consideran en Chile que acuerdos comerciales, corredores bioceánicos o zonas económicas devolverán a Bolivia la cualidad marítima. Lamentablemente, el historial de las relaciones boliviano-chilenas está saturado de temas que explican los recelos del pueblo boliviano y avivan ese resentimiento. En 1962, Bolivia se vio obligada a romper relaciones diplomáticas con Chile por el desvío unilateral de las aguas del río Lauca, sin compensaciones. La drástica disminución del caudal de ese curso de agua condenó a que se convirtieran en desiertos zonas ya severamente afectadas por la falta de recursos hídricos. Chile se negó sistemáticamente a considerar los reclamos bolivianos. Desde hace casi un siglo, Chile viene utilizando las aguas de los manantiales Silala, ubicados íntegramente en el departamento de Potosí (una de las regiones económicamente más deprimidas). La concesión solicitada y concedida en 1908, tenía como objeto canalizar artificialmente dichos manantiales para luego derivarlos hacia territorio chileno. Bolivia, en uso de su legítimo derecho de dominio originario, otorgó la concesión para que las aguas fueran utilizadas en U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S las operaciones del ferrocarril Antofagasta — Bolivia. Hace 50 años que las locomotoras funcionan a diesel. No obstante. Chile sigue comercializando los citados recursos sin beneficio alguno para Bolivia. En los años 70, Chile sembró más de medio millón de minas terrestres antipersonal a lo largo de la frontera. Y se niega a removerlas, a pesar de la Convención de Ottawa, suscrita en 1997. En tales condiciones no es congruente que el vecino país hable de integración fronteriza. Chile ya no garantiza el régimen de libre tránsito. En una decisión insólita resolvió privatizar el ejercicio de obligaciones asumidas en un Tratado de Paz y Amistad, con la entrega a la administración empresarial de los puertos de Antofagasta y Arica. La reciente huelga de estibadores en este puerto ocasionó gravísimos daños económicos al comercio exterior boliviano. De acuerdo con un estudio realizado por el prestigioso economista de Harvard, Jeffrey Sachs, Bolivia pierde, cada año, por su encierro geográfico, alrededor de 600 millones de dólares. Son costos para el comercio exterior boliviano que ingresan a la economía de Chile y corresponden al transporte por el territorio del vecino país (carretero y ferroviario) y de servicios portuarios. Es el tributo diario y de por vida que Bolivia seguirá pagando como consecuencia del Tratado de 1904, mientras pierde competitividad. Lo difícil para recomponer una relación normal con Chile es que no se trata solamente de olvidar los agravios del pasado, sino modificar las realidades del presente para abrir las puertas de un futuro distinto. Con ese ánimo, en febrero de 2000, al iniciarse un nuevo siglo, los cancilleres de Bolivia y Chile se reunieron en Algarbe, Portugal. El propósito fue el de explorar las formas que permitieran retomar el U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S camino de la reconciliación, a sabiendas de que el trayecto sería muy largo y lleno de obstáculos. Se adoptó, como método, la elaboración de una agenda común, que incorporara con una mentalidad abierta, sin preconceptos, todos los asuntos de interés vital para las partes. Este compromiso fue recogido en un Comunicado Conjunto (Murillo Valdés) en el que los cancilleres " resolvieron conformar una agenda de trabajo que incorpore sin exclusión alguna, las cuestiones esenciales de la relación bilateral, con el espíritu de contribuir al establecimiento de un clima de confianza que debe presidir el diálogo". Se pone de relieve, asimismo, " que en la ocasión abordaron con una clara voluntad constructiva y con el fin señalado precedentemente todos los temas de interés fundamental para ambos países, sin exclusiones." El documento de Algarbe enfatiza también en que "el desarrollo de este diálogo estará encaminado a superar las diferencias que han impedido una plena integración entre Bolivia y Chile, con el firme propósito de buscar y alcanzar soluciones a las cuestiones que afectan a sus relaciones políticas y económicas." La decisión de abordar todos los temas sin exclusiones ni prejuicios respondía a la necesidad de adoptar nuevas formas para el relacionamiento bilateral, de manera que la solución a cada uno de los asuntos pendientes, eliminaba una barrera y tendía un puente de acercamiento vecinal. El superar progresivamente los problemas acumulados en más de un siglo de conflictos se convertía en un objetivo común, donde la. motivación esencial de este proceso, era precisamente, ese: construir al final del mismo los fundamentos de una plena integración binacional. El concepto era y es válido. En septiembre de 2000 este acuerdo fue ratificado por los presidentes (Banzer - Lagos) con ocasión del encuentro de Jefes de Estado Sudamericanos, celebrado en Brasilia, para sentar las bases de la U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S futura integración física de la región. Durante los dos años siguientes se hicieron algunos avances interesantes. Ocurrió, sin embargo, que la cuestión del gas natural, por sus dimensiones y la magnitud de los proyectos vinculados a la comercialización de este recurso energético, se convirtió en el factor dominante de la agenda. Chile dejó pasar esta nueva oportunidad. Se negó a considerar las trata uvas sobre el gas, como parte de un arreglo integral con Bolivia, que incorporase la centenaria demanda boliviana. Por lo que se sabe, desestimó, de plano, cualquier salida al Pacífico con soberanía, ofreciendo, en cambio, una ampliación del régimen de tránsito y de facilidades portuarias, consistente en la dotación de un área no mayor a las industria/es, cuatrocientas la construcción, hectáreas, operación para y las instalaciones mantenimiento del gasoducto y la posibilidad de que Bolivia administre, con cierta autonomía, un régimen aduanero y tributario. En realidad, muchas de las citadas facilidades fueron concedidas ya en el Acuerdo de Complementación de 1955, que posibilitó la construcción del oleoducto Sicasica - Arica. La opinión pública boliviana se mostró decepcionada. Ante las resistencias crecientes que asomaban, cada vez que se mencionaba la opción chilena como la más conveniente para la exportación del recurso energético, el gobierno comenzó a hablar de un referéndum, primero consultivo y luego vinculante. Ya era demasiado tarde. Afloraron, con fuerza arrolladora, los resentimientos hacia Chile, encendidos en el rescoldo de 125 años y aglutinaron la carga explosiva del descontento social, que estalló incontenible hasta expulsar al gobierno el 17 de octubre de 2003. Como resultado y ante la imposibilidad de que se tomaran decisiones U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S como las que esperaban y estimulaban los consorcios interesados, Bolivia perdió el mercado de California. Chile perdió una inversión mayor a los 1500 millones de dólares y una fuente segura, barata y de largo plazo para abastecerse de gas natural, en momentos en que se ve afectado por una severa crisis energética. Las intervenciones de los presidentes Mesa y Lagos en la Cumbre de las Américas, celebrada en Monterrey, permitieron constatar que hay una diferencia muy grande en-los respectivos enfoques. Chile insiste en los foros y declaraciones en que es preciso reemplazar la vieja mentalidad que originó los conflictos para superar las enormes equivocaciones del pasado, pero a costa de que; Bolivia resigne definitivamente su demanda. Bolivia, en cambio, estima que ese cambio debe traducirse en criterios y actitudes más amplias para llevar adelante grandes proyectos complementarios que se traduzcan en un destino solidario. Para que no vuelva a repetirse la consigna que derribó un gobierno, en el asunto de la exportación del gas: "nada por Chile ni para Chile". |Ho seria útil, sin embargo, haber revisado los datos históricos, si no los ordenaos conforme a un razonamiento que permita despejar la visión hacia el futuro. Las conclusiones podemos resumirlas como sigue: La demanda boliviana encaminada a recuperar un acceso soberano en el océano Pacífico no se extinguirá por el transcurso del tiempo. No se puede compensar la pérdida de un atributo, como la soberanía marítima que ejerció Bolivia, por espacio de 54 años, sino con un bien jurídico y político de naturaleza equivalente, lo U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S que descarta soluciones mediante facilidades de tránsito, portuarias o para su comercio exterior. El problema marítimo boliviano sólo podrá ser resuelto cuando concurran en un mismo momento político internacional, la voluntad real de Chile para resolverlo, el consentimiento del Perú y la convergencia de criterios en Bolivia sobre las características del planteamiento de fondo. El factor vectorial es, obviamente, la voluntad de Chile. El vecino país tiene que modificar su enfoque y ver en la solución del problema marítimo boliviano una ventaja y no una derrota de su diplomacia, sino algo beneficioso para sus intereses políticos, económicos y comerciales. La negativa de Chile a considerar el componente del gas como parte de un arreglo integral con Bolivia le ha privado — como se dijo - de una inversión no menor a los mil quinientos millones de dólares y de una fuente de provisión del energético excepcionalmente favorable en precios y plazos. El Perú sostuvo siempre que sus propuestas eran flexibles y negociables. Su respuesta de 1976 bien pudo haber abierto un proceso de negociación tripartita. Pero, también es cierto, que no debe considerar su eventual consentimiento para la transferencia a Bolivia de un territorio al norte de Arica, como una claudicación diplomática. El tercer factor tiene que ver con la búsqueda de criterios coincidentes en la opinión nacional boliviana, respecto de las características y dimensiones de la fórmula que se proponga para la solución del enclaustramiento geográfico. Ello no puede soslayar el difícil tema de las compensaciones, sin descartar ninguna. Me atrevo a sostener que sólo cuando se logre reunir esos tres U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S factores en un mismo tiempo político internacional, será posible encontrar la solución para el enclaustramiento boliviano. Finalmente, cabe poner de relieve la importancia de un entendimiento entre países vecinos. El mundo globalizado de nuestros días está propagando los conflictos e incrementando la dependencia especialmente en perjuicio de los pueblos más débiles. Los intereses transnacionales sistemáticamente están subordinando a los estados. Mientras metódicamente y las naciones cuidan celosamente sus fronteras, de la vecindad inmediata, éstas son vulneradas, a cada minuto, por los instrumentos de la sofisticada penetración tecnológica. Ello ocurre a la par que los países fronterizos se colocan barreras entre ellos. En el caso de Bolivia y Chile hay condiciones objetivas para su complementariedad, distorsionadas por los desaciertos políticos del pasado y las rigideces del presente. El potencial de esa complementariedad de sus economías es inmenso. Hace falta movilizarlo removiendo los impedimentos históricos, abriendo el diálogo, sin exclusiones, como se acordó en Algarbe. No se puede renunciar a este instrumento por difíciles que sean las actuales circunstancias. CUESTIONARIO WORK PAPER 5 1. ¿Cuál fue la consigna de los pueblos altiplanicos en contra del presidente Gonzalo Sánchez de Lozada? U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S 2. ¿Cuál es el factor adverso para el crecimiento de Chile? 3. Explique el tratado de Ancón y el de Lima. 4. ¿En el año 1900, que decía la nota ultimátum de koenig? 5. ¿Cuántos kilómetros cuadrados entrego Bolivia de su Litoral? 6. Explique que títulos poseía Bolivia sobre el pacifico. U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S WORK PAPER # 6 UNIDAD O TEMA: Unidad 6, Tema 6 TITULO: EL TEMA MARITIMO FECHA DE ENTREGA: PERIODO DE EVALUACIÓN: Segunda Evaluación.- El tema marítimo Algunos sectores en Chile consideran que el problema marítimo reaparece cada vez que el gobierno boliviano tiene problemas internos y necesita cohesionar al país. Esto no es cierto porque la demanda marítima boliviana ha sido una constante de la política exterior y una demanda permanente de la población. Los conflictos de febrero y octubre de 2003 pusieron nuevamente en agenda el problema marítimo, lo que demuestra que no fue sólo el gobierno nacional, sino la población la que reposicionó el tema. El pueblo boliviano se opuso a exportar gas por Chile, en vista de que el vecino país no quiere solucionar la demanda marítima. El enclaustramiento marítimo significa un gran perjuicio para el crecimiento y el desarrollo económico del país. Sería importante buscar el involucramiento de los Estados Unidos en el tema de la reivindicación marítima boliviana. Si se lograra este apoyo, podría abrirse una puerta para la solución del problema con Chile. Otro actor que debería ser involucrado en la solución del problema marítimo es el Estado del Vaticano, que tuvo una U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S considerable influencia en la resolución del problema entre Argentina y Chile. El gobierno de Bolivia considera que el problema marítimo es multilateral, trilateral y bilateral. En el ámbito multilateral, el país debería aprovechar la intermediación de Naciones Unidas, que viene estudiando desde hace más de 40 años la problemática de los países sin litoral. En el mundo existen más de 30 estados sin litoral, pero solamente 2 de ellos están en América Latina (Bolivia y Paraguay). El drama de los países sin litoral fue discutido en un evento realizado hace pocos meses en Kazajstán. Uno de los casos más dramáticos de países sin litoral es el de Bolivia, que fue privado de su acceso soberano al océano Pacífico durante la Guerra del Pacífico. Chile cuenta con una de las costas más extensas del mundo y no perdería nada si cediera un pedazo de su costa a Bolivia. El territorio en disputa entre Bolivia y Chile en realidad es un pedazo de desierto. CUESTIONARIO WORK PAPER 6 1. Analice el tema marítimo del año 2003. 2. ¿Por qué se trataría de involucrar a EEUU en este tema? 3. ¿Cómo Bolivia considera el problema marítimo? 4. ¿A que otro estado seria necesario involucrar? 5. ¿En la política exterior, que significa el mar para Bolivia? 6. ¿Por qué razón Chile se niega a ceder costa a Bolivia? U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S DIFF 001 Las negociaciones del ALCA y los procesos de integración Probablemente para Bolivia era mejor suscribir el ALCA que negociar un acuerdo de libre comercio con Estados Unidos, debido a que en el ámbito bilateral se hacen más patentes las asimetrías de poder y de capacidad de negociación. Existen planteamientos dentro de las negociaciones del AECA que podrían favorecer a Bolivia, como ocurre con el tema del tratamiento especial y diferenciado. En todo caso, este tipo de alternativas podrían permitir que los beneficios del proceso se repartan de manera proporcional entre los países desarrollados y en desarrollo. El tema del ALCA no sólo debe analizarse desde una perspectiva técnica, pues tiene un fuerte componente político e ideológico. El punto de vista de la sociedad civil debe ser tomado en cuenta en las futuras negociaciones comerciales. La sociedad civil parece ser más proclive al desarrollo de procesos de integración subregionales. Al hablar de los procesos de integración debe analizarse el recorrido y el desarrollo institucional seguido por la Unión Europea que se ha convertido en el modelo paradigmático de los procesos de integración. Bolivia debe hacer un mejor seguimiento de la política de liderazgo del Brasil, que se ha expresado en las negociaciones de la OMC, el AECA y a nivel sudamericano. En las negociaciones comerciales no sólo se debe hablar de la posibilidad de U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S Suscribir el ALCA, sino también de la posibilidad de firmar un Tratado de Libre Comercio entre Bolivia Estados Unidos. Este acuerdo podría ser otro tema de nflicto para la actual administración gubernamental. Para evaluar el impacto de las negociaciones del ALCA y de un acuerdo de libre comercio con Estados Unidos, en primer lugar se deben analizar los efectos que tuvo el ATPDEA sobre la economía boliviana y, especialmente, el sector textil. 1. Realice un trabajo grupal y formule preguntas para ser analizadas con sus compañeros DIFF 002 El tema de la coca El país debería tener una visión autocrítica acerca del esfuerzo que ha hecho para eliminar la coca excedentaria destinada al narcotráfico. Este esfuerzo no ha sido adecuadamente compensado ni comprendido por la comunidad internacional. Es importante analizar y replantear el impacto de las políticas de lucha contra el narcotráfico sobre la economía de Bolivia. El problema del narcotráfico se está trasladando desde el Chapare hacia los Yungas. El epicentro de los nuevos conflictos será la localidad de la Asunta. U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S La política de erradicación no ha significado avances en la lucha contra el narcotráfico y, más bien, ha contribuido a generar problemas políticos y tensión social. Temas como el narcotráfico y el contrabando hacen parte de la inserción negativa de Bolivia en la comunidad internacional. U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A F A C U L T A D D E C I E N C I A S J U R I D I C A S Y P O L I T I C A S U N I V E R S I D A D D E A Q U I N O D E B O L I V I A