CONCIERTO DÍA DEL CENTRO BANDA DE MÚSICA DEL IES “ORDEN DE SANTIAGO” Voy a empezar con una anécdota curiosa este artículo sobre el concierto que la banda de música del IES “Orden de Santiago” ofreció el Día de Centro. Este curso, el concierto iba justo detrás de las exhibiciones de acrossport que prepararon algunos grupos de alumn@s de distintos niveles dentro de la materia de educación física (por cierto, todas ellas fueron actuaciones muy buenas, con gran nivel y preparación; un buen trabajo, eso sí, yo que soy muy torpe, me alegra que en mi época no nos hiciesen hacer esas coreografías), y cerraba las actividades del centro, ya que este año no tocaba el grupo de rock “Mente rota”; hasta aquí todo bien, nada fuera de lo normal; mientras estábamos esperando a que acabasen las coreografías, mientras esperaba a que llegasen los músicos, algunos de ellos ex -alumnos que vienen ex profeso a tocar en este breve concierto, estábamos concretamente en el pequeño hall, por así llamarlo, que da acceso al gimnasio, que estaba abarrotado, pues bien, la última coreografía llegó a su fin, el acrossport había terminado, y empezó a salir la gente que atestaba el gimnasio, y a salir, y a salir, cosa que llevó a que un músico, un ex alumno del instituto y gran trompetista y persona, Alberto, mirándome con cara con una mezcla de sorpresa, expectación e incertidumbre, me preguntaba, a la vez que seguíamos como seguía saliendo gente del gimnasio: “Abel, ¿no es ahora el concierto”, a lo que yo con cara y mirada de resignación le dije, ¿qué te voy a decir que no sepas ya? Como veis la anécdota no es graciosa, ni nada del otro mundo, pero al menos, me resulto curiosa y por eso la cuento; y es que la música de banda, podríamos decir que no gusta en demasía a la juventud de nuestro centro, aunque eso sí, tuvimos un gran público, quizá poco numeroso, pero como siempre, muy agradecido. Contamos un año más, y ya son unos cuantos por suerte, con la visita de algunos grupos de alumn@s de infantil del colegio “José Montalvo”; es un detalle que las maestras de infantil (tan infravaloradas en muchas ocasiones) hagan un gran esfuerzo al traer a los pequeños a que escuchen música, así que, hay que agradecerles que lo hagan y les den la oportunidad a los pequeñines de escuchar buena música. En cuando al programa, y sin la posibilidad de traernos los instrumentos de percusión, fue breve, dos marchas cristianas, una marcha mora, una obra con carácter celta (the lord of the dance) donde Álvaro Garrido lleva la voz solista con el flautín, y por último, y lo más destacable, el preestreno (aunque en un escenario demasiado informal) de una marcha de semana santa compuesta por Casimiro Mejía Montalvo, ex alumno de este instituto, y titulada “¡Salve Maestro! Y lo besó…” Fue lo mejor de este breve concierto, Casimiro es un músico excelente (además de graduado en magisterio), pero si cabe, mejor persona, siempre dispuesto a ayudar a cualquiera y echarle una mano en cualquier proyecto, como este de la banda del instituto, sin la ayuda de Casi y otros ex alumnos sería imposible que funcionase; la marcha es de una gran calidad (cosa que quedo patente con las excelente críticas que recibió en la semana santa de Cuenca) y fue todo un placer el poder interpretarla en el instituto, en su instituto, el que le ha visto crecer como persona. En el concierto de fin de curso volveremos a interpretarla, en un escenario ya más formal, y volveremos a disfrutar de esta bonita y emotiva composición. Y esto dio de sí el concierto del día del centro un año más. Dar las gracias, como siempre, a todos los que asistieron a escucharnos y a los músicos que vinieron ex profeso a tocar, sin su esfuerzo y su buena voluntad este proyecto música sería imposible, y por eso, siempre les doy las gracias por hacer lo que hacen, buena música a cambio de nada. Esperamos el próximo año ofrecer un nuevo concierto. V. Abel Granell Profesor de Filosofía