UN ENFOQUE PLURAL HACIA LA CALIDAD DEL E-LEARNING 1. EL E-LEARNING: ¿SECTOR EN CRISIS O REALIDAD CON DESARROLLOS DIFERENTES SEGÚN LOS CONTEXTOS? Fuente web: http://www.buenaspracticas-elearning.com/capitulo-12enfoque-plural-hacia-calidad-e-learning.html CUADRO COMPARATIVO ENTRE e-L 2000 e i_eL2010 e-L 2000… i-eL 2010… Distribuye conocimientos consolidados Genera nuevos conocimientos Aún es e-Enseñanza El alumno se apropia del proceso y le da sentido Puede aislar al alumno Crea comunidades de aprendizaje Se eroga por un Es el resultado y el proveedor/institución individual instrumento para apoyar un partenariado de aprendizaje Ignora el contexto del alumno y sus conocimientos previos Se construye a partir del contexto del alumno y sus conocimientos previos Reduce la creatividad del alumno Estimula la creatividad del por la lógica transmisiva alumno realzando la dimensión espontánea y divertida de aprender Constriñe el papel de docentes y tutores Enriquece el papel de docentes y tutores Enfoca la atención en tecnología y contenidos Se centra en la calidad, los procesos y el contexto de aprendizaje Sustituye las sesiones de aula Está arraigado en los procesos administrativos y sociales de transformación Privilegia a aquellos que ya aprenden Alcanza y motiva a esos que no aprendían Como se podrá observar, en la realidad de 2010, al término e-learning se le ha añadido la letra. Pero no es una única, sino que pretende agrupar todas las características anteriormente descritas y que hacen de este nuevo e-learning el instrumento central de un enfoque de Lifelong Learning para todos, ya que lo describen (tanto en español como en inglés) como un aprendizaje: Innovador. Inteligente. Integrador. inter-personal. Imaginativo. Inclusivo. Internacional. y una última “y” (fonética, en este caso) del Yo , como representación de la apropiación del aprendizaje por parte del individuo. Por tanto, mientras que se observa una crisis institucional del e-learning, en la práctica el uso de las TIC para apoyar los procesos de aprendizaje están más extendidas y mejor articuladas que nunca. Se trata de una cuestión de diferenciación. En 2000, el e-learning se percibía como una mega-tendencia integradora tanto en los sistemas formativos como en los formativos y corporativos, en ocasiones sustitutivo de la <<formación tradicional>> en la que las tecnologías eran el centro. Cuando disminuyen las expectativas, se avanza a un nuevo escenario, donde aparece el término blended learning, utilizándose de manera ambigua tanto para representar la necesidad de diseñar sistemas formativos que sean capaces de integrar diferentes estrategias de formación, incluyendo aquella asistida por las TIC, como para ocultar una resistencia a la innovación, introduciendo elementos de aprendizaje basado en las TIC para ofrecer la misma enseñanza que antes. Sin embargo, este proceso de integrar enfoques nos lleva a que, hoy en día, podamos por fin hablar de e-learning, no ya como una metodología o enfoque únicos, sino como el espacio en el que coexisten uno, doce, mil… ámbitos formativos que, en mayor o menor medida, se benefician de las TIC para desarrollarse Son lo que en el proyecto HELIOS se ha llamado, los << territorios del elearning>> , para representar una serie de realidades que tienen poco en común entre sí, más allá del uso de las tecnologías: Gráfico 1: Los “Territorios del eLearning” de HELIOS Un territorio no es un sector en sí, sino que representa una combinación de contexto, finalidades y modalidades, tanto pedagógicas como organizativas, que se asocian por el uso de las TIC, con un objetivo (la mayoría de las veces) de aprendizaje formal, no formal e, incluso informal. Unos representan áreas conocidas de los sistemas formativos y educativos, otros son nuevas áreas aún por germinar, pero todos indican desarrollos interesantes tanto de conceptos como de prácticas del elearning. Si reflexionamos sobre la variedad de estos casos, entenderemos que los territorios de e-learning representan meta-contextos en los que diferentes recorridos de aprendizaje se articulan, formando conjuntos de finalidades, sectores y enfoques que son, en sí, pistas sobre nuevas áreas de innovación. Por tanto, no son sectores, sino prácticas de aprendizaje que tienen lugar sin una clara separación entre procesos laborales, relaciones sociales y actividades de ocio o entre contextos de educación formal, como escuelas o universidades, y también (y cada vez más) de otros ámbitos no académicos, que muchas veces son ignorados o tratados como una intromisión en el patrimonio de los ambientes serios de formación. Es más, a veces resulta más interesante analizar no el territorio en sí, sino las áreas de intersección que se producen entre ellos (como, por ejemplo, el modo en que se produce aprendizaje informal entre los universitarios y su impacto en el desarrollo de la educación superior) 2. CÓMO ANALIZAR LA CALIDAD DEL NUEVO E-LEARNING Si el término <<calidad>> no es unívoco, no al hablar de e-learning, sino ya dentro del propio mundo educativo y formativo ¿cómo afrontar la temática de calidad en este nuevo i-e-learning? Debemos empezar por señalar que esta disparidad de conceptos no sólo se explica por razones sectoriales, o a partir del papel que una persona tiene respecto a la acción formativa (la visión de un estudiante, de un docente, de un equipo de gobierno de una institución…) sino también con las visiones del mundo y los valores que cada persona tiene. Cuando se habla de calidad en el ámbito educativo, unos hablan más de eficiencia, otros de estándares, otros de excelencia académica, otros de adaptabilidad de su uso… Desde el proyecto SEEQUEL se trató de reconducir el debate sobre la calidad del e-learning, tratando de observar cuáles son los aspectos en los que los diferentes sectores prestan su atención a la hora de afrontar las cuestiones de calidad del e-learning, intentando conseguir una visión de conjunto y la comprensión de los factores que terminan los diversos enfoques, favoreciendo de esta manera el diálogo entre las diferentes <<culturas de la calidad>> que conviven en el e-learning. Para definir un dialogo sobre la calidad del e-learning, se tienen en cuenta los siguientes tres elementos: La identificación del sujeto/stakeholder (individuo u organización), es decir, el punto de vista de quien observa el problema. El punto de vista del sujeto hace a su vez referencia a otras variables tales como el papel o rol que se tiene, el sector al que se pertenece, las visiones, los valores y las principales preocupaciones inherentes a la calidad propia de un sujeto. Las visiones y los valores no derivan necesariamente del sector y del rol de referencia. Por ejemplo, si consultáramos a un grupo de profesores (misma función) de escuela secundaria superior (mismo sector), probablemente encontraríamos diferencias en el modo de definir la calidad del elearning, o mejor, probablemente conseguirían un acuerdo sobre criterios pero posiblemente atribuirían un peso diferente a la importancia de estos criterios. El nivel y el tipo de percepción del fenómeno por parte del sujeto que observa. Por ejemplo, un alumno/usuario podría percibir y definir la calidad del curso en e-learning según criterios tales como reconocimiento y acreditación de los resultados, significatividad y coherencia de la experiencia con las propias necesidades y el contexto en el que se opera, la posibilidad de ser ayudado y motivado y la facilidad de uso de los recursos. Mientras un productor podría hablar en términos de calidad técnica, eficacia del sistema, reutilización e interoperabilidad de los recursos. El objeto de la calidad: experiencia de aprendizaje. Son tres los factores principales que influyen sobre cada experiencia de aprendizaje: las fuentes de aprendizaje (Learning Sources), los procesos de aprendizaje (Learning Process) y el contexto de aprendizaje. Leyenda: S : sector. R : rol. V : valores. LS : learning sources : fuentes de aprendizaje (p.e. los materiales didácticos, los profesores/tutores/mentores, la infraestructura tecnológica, etc.). LP : learning processes : procesos de aprendizaje (proceso de orientación/selección de participantes –análisis de las necesidades, planificación, proyección, erogación y evaluación ). LC : learning context: el contexto de aprendizaje. (p.e. el contexto institucional, el contexto cultural, etc.). Gráfico 2: La percepción del e-learning. Proyecto SEEQUEL Gráfico 3: Los objetos del aprendizaje. Proyecto SEEQUEL Es importante, además, recordar que todas estas visiones del mundo son válidas, tienen <<ciudadanía legítima>>, por lo que ninguna visión se puede mantener como la única para describir y tratar un fenómeno o argumento, y que otras personas tienen más visiones del mundo. Con esta premisa, se han determinado seis diferentes visiones del mundo: 1. El mundo de la inspiración, con valores de referencia tales como la singularidad, diferencia, innovación, originalidad, creatividad, imaginación, espiritualidad, inconsciencia, oportunidad… 2. El mundo doméstico, con valores de referencia tales como la confianza, responsabilidad, mérito, respetabilidad, convencimiento, dignidad, tradición, jerarquía, rango… 3. El mundo de la opinión y de la imagen, con valores de referencia tales como la imagen, reputación, fama, éxito, honorabilidad, reconocimiento, visibilidad, audiencia, credibilidad, identificación… 4. El mundo civil, con valores de referencia tales como el bien general, el interés común, la generosidad, la auto-abnegación, el sacrificio, el orgullo, el grupo, la acción colectiva, las entidades colectivas (ideas, valores, símbolos e instituciones)… 5. El mundo mercantil, con valores de referencia tales como la riqueza, dinero, negocios, los tratos justos, los buenos negocios, interés, atención a los clientes, contrato, competencia, oportunidades, libertad... 6. El mundo industrial, con valores de referencia tales como el progreso, futuro, funcionalidad, eficiencia, optimización, funcionalidad, productividad, profesionalidad, fiabilidad, durabilidad, sistema... Cada uno de estos mundos tendrá una visión diferente de lo que es el elearning y, por tanto, tendrá unas expectativas de calidad distintas: o o o o Para el mundo de la inspiración, el e-learning representa una increíble oportunidad de ampliación de las fronteras de los recorridos de formación, creando una nueva conciencia y nuevos contenidos a través de una movilización de energías y recursos de aprendizaje sin precedentes. Para el mundo doméstico, se configura como desarrollo potencialmente peligroso que necesita de una legislación apropiada, de procesos de control de calidad, de una importante atención hacia los alumnos jóvenes y de otro nivel de estructuración de los recorridos de aprendizaje, antes de ser considerados elementos válidos como complemento a los métodos de enseñanza tradicional. Para el mundo de la opinión y de la imagen, un desarrollo reciente dentro del sector de la educación y la formación que debería ser considerado solamente cuando viene propuesto por una organización sólida, la cual pueda aducir prestigiosos reconocimientos. Para el mundo civil, representa una interesante oportunidad para desarrollar comunidades de aprendizaje, para permitir a personas con riesgo de exclusión el acceso a la oportunidad de aprendizaje; sin embargo, el e-learning puede también conllevar el riesgo de descontextualizar las experiencias de aprendizaje a causa de la presencia dominante de grandes o o empresas internacionales y grandes <<universidades virtuales>>. Para el mundo mercantil, el e-learning es una modalidad que permite maximizar el acceso a la oportunidad de aprendizaje, reduciendo, a su vez, los costes tanto para la producción como para la adquisición. Además, el e-learning representa una ocasión para <<desafiar>> un sistema formativo y educativo que resulta demasiado conservador. Finalmente, el e-learning puede llevar al desarrollo de nuevos servicios y contenidos para un mercado potencialmente muy vasto. Para el mundo industrial, representa una modalidad moderna y eficaz para la racionalizar la erogación de educación y formación, garantizando estándares concretos de calidad y suministrando de forma constante un acceso a oportunidades de aprendizaje. Es una modalidad capaz de afrontar de modo rápido las enormes necesidades de formación y actualización constante, sin depender demasiado de variables tales como los límites organizativos y la calidad de los formadores/profesores. Por tanto, la calidad debe entenderse como un proceso negociador que debe seguir una serie de pasos: 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. Identificación del contexto y del problema. Identificación de la propia visión de la calidad y comparación. Identificación de la posición de los actores en el propio contexto. Focus en el objeto: experiencia formativa y análisis de los 3 componentes (recursos, procesos y contextos de aprendizaje). Determinación de los criterios y su ponderación. Verificación de procedimientos e instrumentos disponibles. Desarrollo y adopción. Verificación del impacto. Gráfico 4: El proceso negociador de la calidad