Geología General Presenta unas características geológicas similares a las de las zonas aledañas (Venezuela, Brasil y Perú) en lo que se refiere a rasgos estructurales, petrográficos y fisiográficos. Está representada por un conjunto petrotectónico metamórfico de edad precámbrica que estuvo sometido a un fallamiento y posteriormente, a una etapa de migmatización que dio origen a rocas con aspecto granitoide. A continuación se presenta un régimen geológico de tectonismo de fallamiento y erosión, dando lugar a la depositación de grandes cuerpos de sedimentitas precámbricas, acompañado de nuevos fracturamientos y una última etapa de metamorfismo que afectó en parte los cuerpos sedimentarios como también las rocas del Escudo en su parte occidental. El último evento magmático de carácter regional durante el Precámbrico está representado por un vulcanismo ácido a intermedio y una subsiguiente etapa de sedimentación (Galvis, et al.,1979). A comienzos del Paleozoico el área sufre una suave subsidencia (hundimiento) que se acentúa hacia el occidente, presentándose una transgresión marina (invasión del mar al continente) y originando un nuevo evento de depositación. Por último ocurre un nuevo evento magmático que se reconoce por la aparición de la Sienita Nefelínica de San José del Guaviare. A partir de esta última actividad ígnea el área sufre levantamientos con posteriores basculamientos de bloques hacia el sur y sedimentaciones de carácter marino o lacustre y continental ocurridos durante el Terciario (Galvis, et al., 1994). La cobertura cuaternaria está constituida por depósitos arcillosos y arenosos no consolidados que cubren gran parte del área y que se localizan a lo largo de los grandes cursos de agua. Las unidades geológicas reportadas hasta ahora son las siguientes (partiendo desde la más antigua): 1. Complejo Migmatítico de Mitú: -Neises de Atabapo-río Negro -Granitos Migmatíticos -Neises de Araracuara 2. Formación La Pedrera 3. Formación Roraima 4. Granófiro del Tijereto 5. Formación Pirá-Paraná 6. Diques de Diabasa 7. Formación Araracuara 8. Sienita Nefelínica de San José del Guaviare 9. Terciario inferior Amazónico 10. Terciario superior Amazónico 11. Depósitos cuaternarios Historia geológica general Hace más de 2.000 millones de años emergió un protocontinente (cratón de Venezuela, Brasil y Colombia) de placas marinas, sobre las cuales se depositaron sedimentitas de grano fino durante el Arqueano-Proterozoico (hace ±2.500 millones de años). Posteriormente, a través de procesos metamórficos de alto grado, vulcanismo básico y tectonismo, estos depósitos fueron levantados y convertidos en migmatitas con aspecto granitoide, a comienzos del Proterozoico (hace más de 1.700 millones de años). Estas secuencias de origen precámbrico, las más antiguas del continente, están representadas principalmente por el Complejo Migmatítico de Mitú. Por procesos de expansión de esta nueva masa continental, se generó una zona subsidente en lo que hoy corresponde a la Amazonia colombiana y parte de la Amazonia brasilera, en su sector limítrofe con nuestro país, bordeada por bloques elevados. Durante el Proterozoico medio (hace 1.600 a 900 millones de años) esta zona fue rellenada por procesos sedimentarios intercontinentales. En la región correspondiente a la actual Venezuela y la zona limítrofe con Colombia, ocurrió un intenso proceso de sedimentación transicional entre continental y deltaico. A comienzos del Paleozoico (hace ±570 millones de años) es probable que la plataforma del cratón haya sufrido un movimiento vertical, que originó una cuenca sedimentaria invadida posteriormente por el mar, dando lugar a un nuevo proceso de sedimentación de tipo epicontinental-litoral que está representado por el sector sur de la Formación Araracuara. Hacia la Orinoquia y en parte de la Serranía de La Macarena, a poca profundidad, se desarrollaron formaciones calcáreas debido a la actividad de organismos fotosintéticos primitivos (algas azules) y sedimentación de abanicos submarinos. Posteriormente, se produjo un evento tectónico que desencadenó procesos metamórficos de grado bajo para las sedimentitas recién depositadas y un evento magmático que originó la Sienita Nefelínica del Guaviare. A partir de ésta última actividad (Ordovícico – hace 505 a 438 millones de años), se presentó un largo período de tiempo sin depósitos en la región amazónica y ocurrió un basculamiento suave del borde del cratón hacia el oeste. Esto facilitó la consolidación de nuevas sedimentitas de grano fino en forma de cuña, que se adelgazan hacia el este de la Orinoquia. Durante el Triásico (hace 245 a 208 millones de años), al inicio de la deriva del continente suramericano, ocurre una colisión del borde irregular saliente del protocontinente (saliente del Vaupés) contra una masa continental. Esto produce intensos procesos de metamorfismo en el área de La Macarena y una sedimentación turbidítica y epicontinental en el borde entrante. El fallamiento de la plataforma generado por la colisión, es posteriormente reactivado, dejando como resultado un conjunto estructural de bloques y un sistema de fallas de cabalgamiento como la falla de Guaicáramo y todo el conjunto de fallas satélites asociadas a ella. Según la teoría de la deriva continental, entre los períodos Triásico y Jurásico los continentes que conformaban Pangea migran notoriamente. En este período, en la región donde posteriormente se levanta la Cordillera Andina, ocurre una sedimentación calcárea con intrusiones, vulcanismos comagmáticos y sedimentación volcanoclástica. Ya en el Cretáceo, la zona del Macizo de Garzón había emergido parcialmente y la región de La Macarena se había deprimido. El avance del mar fue continuo, llegando a La Macarena, sectores aislados de la protocordillera Oriental y las cuencas llanera y amazónica, donde se depositaron sedimentitas de origen marino. La transición Cretáceo-Terciario está marcada por un solevantamiento general de la zona que causa la retirada del mar (regresión marina). Es marcado el dominio de los ambientes continentales y en menor proporción, el de los transicionales. En las cuencas sedimentarias Terciarias de la región se presentaron los siguientes eventos: - En la cuenca llanera hubo sedimentación continental fluvial durante el Terciario, con carga procedente en gran parte de la recién formada cordillera. En el PliocenoCuaternario, debido al levantamiento de la Cordillera Oriental (evento que afectó a todas las subcuencas), cambia la dinámica y la orientación de muchos ríos. Hacia el este se depositan capas cuarzosas detríticas, producto de la erosión continua del Escudo. - En la cuenca amazónica se generaron ambientes de depositación algo diferentes, unos aislados y otros en contacto. Durante el Mioceno inferior las cuencas recibieron aportes del Escudo Guyanés y el sistema fluvial era de poca sinuosidad con una dirección de transporte noroeste. En el Mioceno medio ocurre una gran transgresión (ingreso del mar por una conexión con el Mar Caribe, a través de la cuenca amazónica o desde el portal de Guayaquil), dando lugar a grandes sistemas lagunares y depósitos cenagosos de ambiente costero. Entre el Mioceno medio y el Plioceno la Cordillera Oriental comienza su levantamiento final, evento que termina por anular el sistema fluvial de origen amazónico, cerrando el portal de Guayaquil. Entre el Plioceno y el Cuaternario se forma un nuevo sistema fluvial de origen andino; a partir de este momento, domina la sedimentación andinense en las cuencas del Putumayo-Amazonas. En la cuenca de La Macarena se produjo una sedimentación continental fluvial, coluvio-aluvial y diluvial, en sentido oeste-este, con aportes de la Cordillera Oriental (Van der Hammen, 1952). En el Cuaternario predominan los ambientes de depositación fluvial para todas las regiones. La sedimentación eólica se presenta en un sector de la cuenca llanera, y la sedimentación volcánica y fluvio-volcánica, en la Cordillera Oriental y en una parte del piedemonte. En este período es muy probable la ocurrencia de movimientos tectónicos que afectaron los depósitos más jóvenes. Galvis (1994) propone una sucesión de eventos geológicos que han tenido repercusión en la conformación del paisaje actual en la Amazonia colombiana (ver tabla Principales eventos geológicos en la Amazonia colombiana). Era Precámbrica Periodo Epoca Proterozoico temprano (?) (>1.700 millones de años) Evento geológico Manifestación Pulso de actividad volcánica de En forma de depósitos granitizados en la base de la composición félsica secuencia litológica de la serranía de Naquén (Guainía) Erosión Sedimentación Conglomerado polimíctico de la base de la serranía de Naquén y Caranacoa (Guainía). Sobre el conglomerado se depositaron sedimentos arenáceos y pélticos en un ambiente subacuático. Granitización Los sedimentos sufrieron un metamorfismo regional de bajo grado y se transformaron gradualmente en rocas de composición y texturas granitoides. Formación de los continentes Proterozoico tardío (>600 millones de años) Oxigenación de la atmósfera Presencia de sedimentos rojos en especial terrestre, cambio de hierro profusión, así como vulcanitas de ese color ferroso a férrico. comunes en la región del Chiribiquete donde constituyen la base de la sección estratigráfica local. Pulsos de magmatismo produjeron vulcanismo composición alcalina. que Vulcanitas riolíticas riodacíticos y traquíticas del de raudal Huitoto (Yarí), raudal superior del río Taraira, Yacayana (río Vaupés), Soratama (Bajo Apaporis). Granitización Paleozoica Cambio de rocas sedimentarias e ígneas en rocas de aspecto granitoide con profusión de feldespato de potasio a veces en cristales gigantes. Presencia de numerosos diques de diabasa. No existen registros de sedimentos marinos Ingresión del mar en la Sedimentos característicos de ambientes neríticos al Amazonia desde el occidente oriente del Chiribiquete y en Araracuara. Cámbrico Ordovícico Silúrico Devónico Denudadción, erosión de los núcleos de los anticlinales que formaron los sedimentos del Ordovícico, quedando como remanentes las estructuras sinclinales. Desertificación que produjo erosión. Formación de Pangea. Fallamiento de un bloque que forma una gran fosa tectónica o graben que subside entre bordes constituidos por fallas normales y recibe una gran cantidad de sedimentos detríticos Aumento de la pluviosidad Carboniíero Pérmico Mesozoica Triásico Jurásico Cretáceo Cenozoica Terciario Paleoceno Eoceno No existen registros. Acumulaciones enormes de arena. Grabens en la Amazonia occidental Presencia de sedimentos fluviales en amplias zonas de la región amazónica. Solevantamiento del área central El eje de la anteclisa se localiza en el Chiribiquete del Amazonas colombiano, y la cuenca del Vaupés, lo que levantó las mesas formándose una amplia del Chiribiquete a su actual altura topográfica. anteclisa. Extensos depósitos de gravas en el extremo occidental de la Amazonia (Formación Pepino) Erosión Cubrió las gravas de espesas capas de ceniza volcánica típicas del piedemonte del Macizo de Vulcanismo Garzón. Mineralización residual Desarrollo de espesos suelos lateríticos; bauxitas en las sabanas del Tunia. Oligoceno Mioceno Cuaternario Pleistoceno Activación de fallamientos de Se trasladó el sector occidental y se pusieron en tipo transcurrente contacto la Amazonia occidental y el Macizo de Garzón. Movimientos transcurrentes Generaron fallas transcurrentes menores como la que limita al oriente el Macizo de Garzón y la Movimientos cizallantes de Macarena. dirección sureste-noroeste Fallas aún activas que producen el encauzamiento de la red hidrográfica en ese sentido. Disminución de la pluviosidad Semidesertificación de la región, como lo evidencia la presencia de paleosuelos de calcrete en los sedimentos. Desertificacion y glaciaciones. Alternancia de períodos secos y húmedos, Luego, la pluviosidad aumentó concomitantes con glaciaciones e interglaciaciones. hasta llegar a las condiciones climáticas actuales. Tabla No. 9: Tabla esquemática de los principales eventos geológicos en la Amazonia colombiana, propuestos por Galvis (1994). Geología Estructural Los rasgos estructurales de los eventos que produjeron el metamorfismo en el Complejo Migmatítico de Mitú son indeterminables porque procesos posteriores a su formación como orogénesis y tectomagmatismo los enmascararon. Solo se puede definir y ver claramente la paleosutura que se extiende desde el río Negro hasta el río Atabapo en dirección noroeste (Galvis, et al., 1979). En el sector de Mitú y según el tratamiento estadístico dado a los diferentes lineamientos identificados en las imágenes de satélite y fotografías aéreas usadas en el Proyecto ORAMIGAC (1999), el 35% de los datos muestra una tendencia en dirección N20°-30°E, cerca del 43% en dirección N40°-50°W, y las demás siempre se encuentran asociadas a las anteriores. El rasgo más evidente es la paleosutura que se extiende desde el río Negro hasta el río Atabapo en dirección noroeste y aunque sus desplazamientos se desconocen, el trazo de ella es relativamente claro. Son evidenciables también esfuerzos compresionales en dirección noroeste que originaron unas directrices de movimientos en sentido N30°W a N50°W en la Formación La Pedrera hacia el borde sur del cratón (Galvis, et al., 1979). El sistema difiere ya que hacia el centro, en la Formación Roraima, se presentan grandes estructuras anticlinales y sinclinales en forma de cuchara y grandes fallamientos en dirección norte-sur a través de los cuales se observa con frecuencia alteración hidrotermal. Otra directriz tectónica en dirección noreste se evidencia en la Serranía de Naquén representando pliegues como el anticlinal de Maimachi. En el área pericratónica del sur, la Formación La Pedrera presenta pliegues apretados y evidencias de deslizamientos sobre el piso granítico, evidenciado por grandes cizallamientos en los contactos. Al suroeste de Mitú el plegamiento de la Formación PiráParaná presenta una dirección norte-sur a N20°E en estructuras monoclinales. Los fallamientos más importantes son la Falla del río Aque, Falla del Querarí y un sistema con dirección N70°W a N80°W, dentro del cual es importante la Falla de Puerto Colombia en el bajo Guainía. Un sistema con dirección N40°E a N50°E dentro del cual están la Falla de Mitú y la del Cuiarí paralelas entre sí, determinan una amplia franja de montes e islas en dirección noreste. Otras fallas pertenecientes a este sistema se pueden observar en la cuenca del río Atabapo, como son las Fallas del río Chaquita y caño Garza en direcciones N50°E y N60°E. Al suroeste de éstas se encuentra la Falla de Aguazul ubicada en el interfluvio de los ríos Apaporis y Caquetá. Otro sistema importante se encuentra al sur con dirección N30°W a N40°W al cual pertenecen la gran Falla del río Putumayo que se observa a partir de las bocas del río Sábalo-Yacu, con movimiento relativo de su bloque norte. En el sector occidental, la Cordillera Oriental está afectada por el sistema de fallas inversas de Guaicáramo y todo el conjunto de fallas satélites asociadas a ésta que recorren la zona en dirección norte-sur a N30°E.