Iglesia Invisible

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IGLESIA INVISIBLE
Hasta el día de la segunda y definitiva venida de Cristo al final de los tiempos, “sus discípulos,
unos peregrinan en la tierra; otros, ya difuntos, se purifican; mientras otros están glorificados,
contemplando claramente a Dios mismo, uno y trino, tal cual es” (Lumen gentium 49). Estas
tres porciones del Pueblo de Dios componen una misma y sola Iglesia: la única Iglesia de
Cristo. Pero cada una es uno de los estados de la Iglesia: Iglesia triunfante, purgante y
militante.
La Iglesia triunfante es la del cielo, constituida por todos los que han muerto en gracia de Dios
y están debidamente purificados. 1 Cor 2, 9: “ni ojo vio, no oído oyó...”. Es el modelo de la
Iglesia en la tierra, y su meta: el objetivo final de la misión que Cristo le confió.
La Iglesia purgante es la formada por todos los que precisan una última purificación: CCE
1030: “los que mueren en la gracia y en la amistad de Dios, pero imperfectamente
purificados, aunque están seguros de su eterna salvación, sufren después de su muerte una
purificación, a fin de obtener la santidad necesaria para entrar en la alegría del cielo”.
La Iglesia militante es la formada por los que caminan todavía en la tierra. Es siempre
“misionera”.
En la Iglesia existe una íntima unión entre todos sus miembros, estén donde estén: en la tierra,
en el purgatorio o en el Cielo = la Comunión de los santos. Es como una suerte de corriente
interior de gracia y de vida divina, que circula entre todos los miembros de la Iglesia y a todos
aúna. Tiene dos significados estrechamente relacionados: - comunión en las cosas santas = los
fieles de la tierra participan en los bienes espirituales de la Iglesia; - comunión entre las
personas santas = compenetración que se da entre todos los fieles: “la unión de los miembros
de la Iglesia peregrina con los hermanos que durmieron en la paz de Cristo de ninguna manera
se interrumpe” (Lumen gentium 49).
Los modos de participar en la Comunión de los santos son distintos, según la situación y estado
de cada uno: 1. Los fieles de la Iglesia militante en estado de gracia pueden intervenir a favor
de los demás y de las almas del purgatorio, con su oración y el mérito de sus buenas obras. 2.
Los miembros de la Iglesia purgante pueden recibir la ayuda de los demás para su purificación
y, a su vez, interceder a favor de los fieles de la tierra. 3. Los bienaventurados de la Iglesia
triunfante ya han alcanzado su meta y no necesitan auxilios. Pero ayudan mucho a los fieles de
la Iglesia peregrina y de la purgante con su intercesión ante Dios.
INDEFECTIBILIDAD DE LA IGLESIA
La Indefectibilidad de la Iglesia significa que No puede faltar o desaparecer (perpetuidad de
la Iglesia): no sólo en el sentido de perseverancia en el tiempo, sino en el de persistencia en ser
tal y como Cristo la ha querido y fundado, hasta el final de los siglos. Es una Verdad de fe
basada en dos promesas de Jesús: Mt 16, 18: “las puertas del infierno no prevalecerán contra
Ella”, y Mt 28, 20: “Yo estaré con vosotros todos los días hasta el fin del mundo”.
CONSUMACION DE LA IGLESIA
Lumen gentium 48: “La Iglesia... sólo logrará su plenitud consumada en la gloria del cielo,
cuando llegue el tiempo de la restauración de todas las cosas y cuando, junto con el género
humano, también la creación entera... quede perfectamente renovada en Cristo”.
Ignoramos por completo cuándo ocurrirá el fin del mundo (cfr. Mc 13, 32). Pero sabemos que
varios acontecimientos precederán a la consumación o perfección final de la Iglesia. 1. La
Iglesia se verá sometida a una gran prueba: Mc 13, 19-23. 2. Resucitarán los cuerpos de todos
los hombres: CCE 990: “la ‘resurrección de la carne’ significa que, después de la muerte, no
habrá solamente vida del alma inmortal, sino que también nuestros ‘cuerpos mortales’ volverán
a tener vida”. 3. Cristo glorioso vendrá para juzgar a todos los hombres. Es la Parusía. CCE
1039: “Será puesta al desnudo definitivamente la verdad de la relación de cada hombre con
Dios”. Entonces la Iglesia alcanzará su meta y su consumación o plenitud.
MADRE DE LA IGLESIA
Lumen gentium 54: María es quien, “después de Cristo, ocupa en la Santa Iglesia el lugar
más alto y a la vez el más próximo a nosotros”. Desde el Calvario y hasta al final de los
tiempos, María Santísima lleva a cabo junto a Cristo una singular misión maternal entre los
miembros del pueblo de Dios. De su maternidad divina provienen todos sus títulos y
privilegios.
La Iglesia siempre ha considerado a María, además de Madre de Dios, también Madre de los
fieles cristianos en el orden de la gracia. 1. precede a la Iglesia, porque su concepción
inmaculada es el primer acto redentor de Cristo, y su fe y obediencia libre son requisitos
previos para la entrada de Jesús en el mundo. 2. está activamente presente en todo momento
de la fundación de la Iglesia (encarnación, vida, muerte, resurrección de Jesús y Pentecostés). 3.
“asunta en el Cielo, no ha dejado esta misión salvadora, sino que con su múltiple intercesión
continúa obteniéndonos los dones de la salvación eterna” (Lumen gentium 62).
El 21.XI.1964, Pablo VI proclamó a María “Madre de la Iglesia”. En su discurso de clausura
de la tercera sesión del Concilio Vaticano II afirmó: “Por ser Madre de Aquel que desde el
primer instante de la encarnación en su seno virginal se constituyó en Cabeza de su Cuerpo
Místico que es la Iglesia... María, pues, como Madre de Cristo, es también Madre de los fieles
y de los pastores; es decir, de la Iglesia”.
1. - ¿Cuáles son los tres estados en que se encuentra la Iglesia?
Iglesia triunfante, purgante y militante.
2.- ¿Qué es la comunión de los santos?
Tiene dos significados estrechamente relacionados: - comunión en las cosas santas: los fieles de
la tierra participan en los bienes espirituales de la Iglesia; y comunión entre las personas santas:
es la compenetración que se da entre todos los fieles (ya sea los del cielo, purgatorio o militante)
3.- ¿Qué la Iglesia sea Indefectible significa que no tiene defectos y es pura y sin mancha?
Falso, que la Iglesia sea Indefectible significa que No puede faltar o desaparecer (perpetuidad de
la Iglesia) tal y como la fundo Jesucristo.
4.- ¿Cuándo será la consumación de la Iglesia?
Ignoramos por completo cuándo ocurrirá el fin del mundo (cfr. Mc 13, 32). Pero sabemos que
varios acontecimientos precederán a la consumación o perfección final de la Iglesia.
5.- ¿Todos los títulos y privilegios que tiene la Bienaventurada Virgen María de donde le
vienen?
De su maternidad divina
¿El 21 de Noviembre 1964, Pablo VI proclamó a María “Madre de la Iglesia” quiere decir
que antes no era considerada como tal?
La Iglesia siempre ha considerado a María, además de Madre de Dios, también Madre de los
fieles cristianos en el orden de la gracia, María, pues, como Madre de Cristo, es también Madre
de los fieles y de los pastores; es decir, de la Iglesia.
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