PLAN DE ACCIÓN CONTRA LA VIOLENCIA EN EL FÚTBOL “Fútbol sin Violentos = Familias en las Canchas.” Fundación Creer y Crecer Por Dra. Florencia Fontán Balestra. I. INTRODUCCIÓN Desde 1939 a la fecha se han producido 172 muertes por hechos violentos ocurridos relacionados con el fútbol. Más de la tecera parte de estos se produjeron en la última década. La inusitada violencia de los hechos en los últimos años liderados en general por las llamadas barras bravas impone la necesidad de generar una política de seguridad que pueda disminuir radicalmente estos episodios. Para ello nosotros creemos necesario abandonar el modelo reactivo que tiende a militarizar el espectáculo deportivo que se centra en reaccionar cuando los desmanes han ocurrido, por un modelo pro-activo que pone el foco de atención en quienes son los generadores centrales de los episodios de violencia, actuando fundamentalmente antes que los sucesos graves ocurran e inhabilitarlos con penas y sanciones para concurrir a los estadios donde se centra su actividad criminal. Estos niveles de violencia terminan alejando de los estadios a los verdaderos espectadores espantados por las acciones irracionales de un grupo minoritario que no representa ni al 1% de los espectadores tradicionales del fútbol, poniendo en riesgo la continuidad de este maravilloso espectáculo generador de trabajo y satisfacciones en la Argentina. Con el marco jurídico actual y sin necesidad de mayores reformas legales, la violencia en el fútbol se puede reducir mediante un plan de acción que contenga medidas preventivas y proactivas focalizadas. Lo novedoso de la estrategia radica en el método con el cual se enfrentará la cuestión, un método que requiere la identificación y análisis de los diferentes elementos que inciden en el problema y el diseño de una respuesta adecuada para reducirlo o eliminarlo. Las características de las personas involucradas (grupos violentos con alto 1 grado de vulnerabilidad) y del lugar de comisión de los hechos (estadios y sus inmediaciones) hacen de esta problemática el marco conceptual ideal para implementar estrategias que han obtenido resultado exitosos en diversas partes del mundo en el corto plazo. Diversos discursos políticos dejan traslucir que la violencia en el fútbol es producto de la falta de herramientas legales, tanto procesales como substantivas, para reprimirla. Entre los discursos más populares se encuentran aquellos que sostienen que la violencia es consecuencia de la entrada en vigencia del Código Contravencional de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires; o que la policía carece de facultades para combatir eficazmente a los violentos (excusa que se utiliza para explicar el auge de la delincuencia en cualquier ámbito); o que el problema está en las leyes penales vigentes. Sin embargo, como veremos, la violencia en los espectáculos deportivos no es producto de la falta de herramientas legales para combatirla. Si bien se podrían efectuar algunas modificaciones en este sentido, la normativa vigente en torno a los espectáculos deportivos es los suficientemente vasta como para refutar tales discursos. Por el contrario, creemos que el problema radica fundamentalmente en la falta de aplicación consistente de tales preceptos legales y en la falta de un plan de acción diseñado específicamente para tales fines. Pero para que ello sea posible, es fundamental la voluntad política de poner fin a la violencia en el fútbol. Sin la participación activa de dirigentes, políticos, policía, fiscales y jueces, es muy difícil lograr resultados exitosos. Para poner en marcha un plan de acción debe necesariamente existir una alianza entre los diferentes actores que descanse sobre un sólido liderazgo. 2 II. MARCO TEÓRICO: La estrategia se basa fundamentalmente en dos ejes centrales: 1) el concepto de policía orientada a problemas; 2) una teoría penal basada en la prevención del accionar delictivo denominada “Pulling Levers” o Moviendo Palancas. 1) Policía Orientada a Problemas: La policía orientada a problemas requiere que los oficiales identifiquen las conexiones entre los incidentes o delitos–comportamientos similares, ubicación, personas involucradas, etc.-, que se familiaricen con los factores que originan estos incidentes específicos y que desarrollen soluciones para resolver los problemas subyacentes. Con este arsenal de información, la policía puede prevenir eficazmente el crimen en lugar de simplemente aminorar los síntomas evidentes y ofensivos del problema. El enfoque parte de las siguientes premisas: 1) en áreas geográficas delimitadas, el crimen y el desorden pueden reducirse mediante un cuidadoso estudio de las características particulares y los problemas de la zona, para luego aplicar los recursos apropiados y 2) los individuos efectúan elecciones basándose en las oportunidades que presentan las características físicas y sociales de una zona. Mediante el manipuleo de estos factores, las personas se verán menos inclinadas a actuar en una manera ofensiva. La teoría detrás del accionar policial orientado a problemas es simple: las condiciones subyacentes crean problemas. Estas condiciones incluyen las características de las personas involucradas –delincuentes, víctimas potenciales, y otros-, el entorno social en donde estas personas interactúan, el ambiente físico y la manera en que el público se relaciona con estas condiciones. Por lo general, un problema creado por estas características genera varios incidentes, que si bien nacen de una causa común, en apariencia son diferentes. Estos 3 incidentes son los síntomas de un problema y subsistirán hasta que el problema no sea resuelto. Consecuentemente, la policía debe encargarse no sólo de los hechos delictivos aislados, sino también de identificar cuidadosamente aquellos problemas medulares que afectan a la comunidad y desarrollar respuestas policiales de mayor efectividad, diseñadas a medida de las circunstancias. Estas respuestas pueden comprender una amplia gama de métodos, siendo la represión de delitos mediante la aplicación de la ley penal una de las tantas alternativas posibles. 2) La teoría “Pulling Levers” En los Estados Unidos, la teoría clásica de la prevención penal estipula que la comisión de delitos puede ser prevenida si el delincuente percibe que el costo de cometerlos es mayor que los beneficios que el mismo le genera. Generalmente se entiende que la pena asociada al delito es una amenaza que debe tener la suficiente entidad como para apartar del delito a los posibles autores. En este sentido, la rapidez, la certeza y la severidad del castigo son considerados como los factores claves de disuasión. Sin embargo, en la práctica la capacidad disuasiva de la pena no ha tenido grandes resultados. Para ser efectiva, es necesario que la policía arreste a aquellos que cometen delitos y que la justicia penal los condene. No obstante, se sabe que la mayoría de los delitos no son reportados a las autoridades ni detectados por estas; que la mayoría de los delitos reportados no resultan en arrestos (aprox. el 80 %); que el tiempo promedio entre el arresto y condena en los Estados Unidos es de 173 días; y que el 60% de las condenas por delitos graves resultan en libertad condicional. Esto representa aproximadamente el costo de delinquir en los Estados Unidos. La teoría “Pulling Levers” parte de la teoría de prevención penal clásica pero modifica sus postulados para lograr alto grado de certeza y rapidez en el castigo y una mezcla de sanciones de menor y mayor severidad. Se parte de las siguientes hipótesis: 4 Alto grado de certeza de arresto para un espectro pequeño de delitos obtiene mejores resultados que bajo grado de certeza para un espectro más amplia de delitos; La delincuencia se encuentra altamente concentrada en determinados grupos o personas –grupos de riesgo- y en determinadas zonas –zonas calientes. Generalmente, a partir de distintos estudios estadísticos realizados en Europa, Estados Unidos, Canadá y Oceanía. Se ha llegado a la conclusión que menos del 5% de la población son responsables de un alto porcentaje de los delitos que se cometen en un año (entre el 50 y el 70% del total de los delitos y entre el 65 y 85% de los delitos violentos) y un alto porcentaje de las víctimas de los mismos reside generalmente en un número limitado de barrios (en los Estados Unidos, el 50% de los delitos violentos son cometidos en un 3% de los domicilios); Los grupos de riesgo son extremadamente vulnerables al sistema criminal. Generalmente, estos cometen una gran cantidad de delitos para los cuales las autoridades cuentan con un número importante de sanciones aplicables (consumo / venta de estupefacientes, desorden, lesiones, etc). A su vez, muchos de ellos se encuentran en libertad condicional o tienen pedidos de captura pendientes y frecuentemente tienen contacto con las agencias criminales. En definitiva, las autoridades tienen un “amplio menú” de sanciones formales –palancas para moverque podrían imponer costos en estos grupos o personas. Las sanciones contravencionales son más efectivas en términos de rapidez y certeza que la sentencias penales elevando así los costos del accionar criminal. Si bien estas sanciones no resultan necesariamente en sentencias prolongadas, los miembros de las bandas pueden llegar a considerarlas como verdaderamente severas al inhabilitarlos para participar de sus actividades delictivas comunes en los lugares habituales. Por otro lado permite construir causas penales más sólidas para actuar en el régimen correccional. 5 Sobre la base de estos presupuestos se diseño la siguiente estrategia. Se comienza seleccionando un determinado problema. La selección puede hacerse utilizando diferentes criterios, como ser su gravedad o impacto social (Ej. delincuencia juvenil o violencia familiar), el costo que representa para el sistema criminal (Ej. tráfico de drogas), su capacidad para promover otro tipo de delincuencia, etc. Primero se realiza un estudio detallado del problema elegido como eje de la acción, tomando en consideración las características de las personas involucradas –delincuentes, víctimas potenciales, y otros-, el entorno social en donde el delito se comete, el ambiente físico, las causas que lo generan y los beneficios que el delito genera para el delincuente. Luego se desarrollan las respuestas de mayor efectividad, diseñadas a medida de las circunstancias y de las necesidades concretas. Estas respuestas pueden comprender una amplia gama de métodos, siendo la represión de delitos mediante la aplicación de la ley penal una de las tantas alternativas posibles. Para su implementación, se utiliza la capacidad operativa de todas aquellas agencias gubernamentales que tengan relación con el conflicto. Una vez diseñado el plan, se crean canales de comunicación con el grupo de riesgo asociado al problema y se envía un mensaje de disuasión (“retail deterrence message”) informándoles que tipo de comportamiento no va a ser tolerados y cuales van a ser las consecuencias en caso de ignorarse el mensaje. La comunicación continúa a lo largo de toda la estrategia, informando sucesivamente que les sucedió a aquellas personas que desoyeron el mensaje. Ello permite que la causa y el efecto queden claramente asociadas en la mente de los infractores y que aumente la credibilidad de la estrategia. Por último, se efectúa un seguimiento cercano de la estrategia diseñada para evaluar su eficacia y modificar aquellos elementos que no generen los resultados esperados. 6 III. ELEMENTOS CLAVES PARA QUE EL PLAN SEA EXITOSO Diagnóstico -retos y factores de riesgo -recursos Plan de Acción -prioridades -actividades Centro de Responsabilidad -ejercer liderazgo -movilizar sectores Evaluación y Retroacción -procesos -resultados Implementación -coordinación -criterios A. Diagnóstico: Para poder elaborar un diagnóstico de la problemática es necesario contar con la mayor cantidad de información posible en cuanto a las personas involucradas, lugares de encuentro, apoyos que reciben, etc. La información se puede obtener vía métodos convencionales (investigaciones judiciales) o vía métodos encubiertos (agentes encubiertos, informantes). Es aconsejable contar con grupos especializados de policía que puedan desarrollar relaciones de confianza con diferentes miembros de los grupos. Lo fundamental es contar con la mayor cantidad de información posible y necesaria sobre los diferentes grupos violentos involucrados, de modo que ante un acontecimiento concreto se disponga de elementos de juicio para prevenir posibles actuaciones violentas. 7 Los responsables policiales de la seguridad en los espectáculos deportivos deberán colaborar estrechamente con el organismo a cargo de la coordinación de la seguridad, intercambiando la información disponible. La información debe ser colectada y procesada por el mencionado organismo. La información debe procurar responder a los siguientes interrogantes: ¿Cuál es el problema que induce a cada incidente –episodio de violencia? ¿Qué necesitamos saber para entender el problema? ¿Quién está involucrado –víctimas y victimarios? (factor de riesgo) ¿En dónde y cuándo ocurren los actos de violencia? (factor de riesgo) ¿Quién puede ayudar a resolver el problema? ¿Dónde obtengo la información? ¿Qué recursos tengo para resolver el problema? ¿Qué leyes o recursos utilizaremos para sancionar a las personas involucradas?¿Cuál opción será más efectiva? El triángulo del delito se conforma por tres elementos que son: la ubicación, las víctimas y los sospechosos. La mayoría de las estrategias proactivas implementadas en el mundo partieron de la identificación y consideran estros tres elementos. La idea de fondo es procurar averiguar de qué manera la víctima, el sospechosos y la ubicación, se relacionan o están involucradas en el problema o el crimen. B. Plan de Acción: Formación de un grupo de elite de policías y de fiscales especializado en violencia en espectáculos deportivos: 8 o Será el encargado de identificar a los miembros y lideres de las barras bravas; recolectar información respecto de sus actividades, antecedentes penales y futuras acciones. o El grupo deberá mantener una lista de todos los miembros de las diferentes barras bravas con sus antecedentes penales. La información debe ser actualizada constantemente. Se reportará al organismo coordinador. o El grupo, si bien participará en los operativos de seguridad de los partidos, tendrá la función especial de tener a los líderes de las barras custodiados durante los espectáculos. o En caso de que algún líder de la barra brava incurra o de la orden a otros miembros de incurrir en actos contravencionales o delictivos, el cuerpo especial procederá inmediatamente a su arresto. o La idea de involucrar fiscales responde a la necesidad de dotar de procedimientos correctos al accionar policial, darle celeridad al proceso evitando al cajoneo o “siesta” de las causas en los juzgados y asegurarse la no connivencia de autoridades policiales o de los apoyos indirectos: Políticos, dirigentes, sindicalistas, etc. en la evolución del proceso. o El objetivo del accionar conjunto de estos grupos es lograr resultados con mayor certeza y celeridad para que estos sean visibles en el corto y mediano plazo generando una situación disuasiva sobre el resto de los barras bravas. Creación de Organismo/ Consejo Responsable por la Seguridad en el Fútbol: o Tendrá la función de colectar y procesar la información; coordinar e implementar el plan de acción y evaluar su evolución. o El organismo necesariamente debe contar con autoridad para dirigirse a las diferentes instituciones públicas o privadas involucradas en los partidos de fútbol. o Miembros de la policía, fiscales (contravencionales y ordinarios) y directivos de los clubes deberán participar en su composición. (no ser sólo un organismo de instituciones de seguridad). 9 o El objetivo principal es que todos sean responsables de las decisiones que se tomen con respecto a los encuentros deportivos y pasibles de sanciones si se incumplen directivas que fueron emanadas de este organismo al cual pertenecen. En la experiencia europea la integración de los clubes, los medios de comunicación, junto con los organismos e seguridad y las autoridades judiciales y ejecutivas permitió una mayor coordinación, entendimiento y comprensión e la acción de todas las partes y evitó tanto el doble discurso como la evasión de la responsabilidad. o El organismo se reunirá una vez por semana para evaluar el desempeño y accionar de los diferentes partidos de fútbol y podrá establecer sanciones a quienes incumplan directivas. Establecer Acciones Pro-Activas: La certeza y la celeridad de una sanción es más importante que la severidad de la pena El plan se compone de dos estrategias de implementación simultanea. Por un lado, como principal objetivo, se intentará desmantelar a las barras bravas y arrestar a sus líderes más violentos e inhabilitar a participar de espectáculos deportivos a la mayor cantidad de sus miembros posibles y, por el otro, se procederá a identificar y arremeter contra aquellas personas que les dan sustento económico o apoyo político. i. Barras Bravas: a) Partimos de las siguientes premisas: 1. Las personas involucradas en los incidentes de violencia en los partidos de fútbol conforman un grupo de número reducido fácilmente identificable. En su gran mayoría son miembros de las llamadas “barras bravas.” 10 2. Por su carácter violento, estas personas por lo general tienen antecedentes penales y participan en diferentes tipos de actividad delictiva. Ello los torna altamente vulnerables al sistema penal (policía y justicia) en la medida que continuamente se exponen al mismo. 3. El sistema tiene una amplia gama de sanciones en su poder para aplicarles a estos individuos, desde contravenciones hasta penas. No son necesarias nuevas leyes sino aplicar eficientemente las existentes. 4. La policía cuenta con un arsenal de medidas procedimentales para implementar en caso de presencie una ilegalidad (arresto, requisa personal, secuestro de armas o drogas, detención, requisa de automóviles, etc.) 5. Un alto grado de certeza y celeridad sobre la posibilidad de que recaiga una sanción leve por la conducta violenta en espectáculos deportivos es más efectivo que un bajo grado de certeza de que recaiga una sanción más severa. La certeza y la celeridad importan más que la severidad. b) Implementación de la teoría “Pulling Levers.” El lema ha de ser que de ahora en adelante, ninguna ilicitud, por más mínima que esta sea, va a ser tolerada. o Identificar a los líderes e integrantes de cada barra brava. o Obtener información respecto de su ocupación habitual, antecedentes penales, modos de actuación, vínculos con los restantes miembros de las barras bravas, otras actividades ilícitas en las que se encuentran involucrados, etc. o Diseñar un plan de respuesta para cada incidente posible. Identificar sanciones y procedimientos aplicables y personal operativo. o Establecer canales de comunicación con los miembros para obtener información y para comunicarles el nuevo plan de acción. En la medida de lo posible, se deberá comunicar la capacidad operativa de la estrategia, los poderes con los que se cuenta y como van a ser utilizados en caso de no disminuir la violencia. El mensaje es claro: “La violencia no va a ser 11 tolerada en el fútbol. Sabemos quienes son ustedes y como operan. Si no cesan en su comportamiento, vamos a actuar con todo nuestro potencial.” o La estrategia debe ir acompañada por una campaña de difusión masiva en donde se comunique a la sociedad cuáles son las nuevas reglas de juego. o En el primer episodio de violencia, demostrar claramente que las intenciones son las de llevar adelante el plan. Es decir, utilizar todos los medios legales disponibles para castigar al infractor. Las sanciones contravencionales son más efectivas por su rapidez y certeza que las sentencias penales, elevando así los costos del accionar criminal. Si bien estas sanciones no resultan necesariamente severas, son eficaces a los fines de la estrategia. o Se utilizan operativos sorpresivos en los lugares de reunión, estaciones de trenes, medios de transporte para tener la iniciativa del proceso, en vez de reaccionar cuando ellos deciden que la violencia debe ocurrir. Además un importante número de delitos ocurren fuera de los estadios donde pueden tener escondidas armas o donde deciden encontrarse para pelear entre las propias barras, por lo cual se hace necesario trabajar fuertemente fuera del estadio también. o Evaluar permanentemente la evolución de la estrategia. Modificar aquellas respuestas que no resultaron exitosas y planificar respuestas alternativas. o Volver a comunicarse con las barras bravas mediante canales informales explicándoles lo que les ocurrió a aquellas personas que desobedecieron el mandato. o Aplicar esta metodología hasta que la violencia disminuya. Todos los proyectos analizados en el contexto Europeo que han sido exitosos en la disminución de la violencia en el fútbol destacan como mayores logros: el cumplimiento efectivo de las penas, las políticas focalizadas en quienes generan los disturbios con penas ejemplares antes que las políticas generalizadas a todos los espectadores, la inhabilitación para concurrir a los estadios para las faltas, aún las menores, la tipificación y agravamiento, según los casos de penas para quines incitan a la violencia, la coordinación 12 de tareas entre policías y fiscales y la política comunicacional desde el gobierno y los medios de comunicación. ii. Participantes Indirectos: a) Premisa: 1) Los barras brava reciben apoyo económico y político de diferentes personalidades políticas y dirigentes (políticos, directivos, gremialistas, jugadores). Estos grupos son utilizados por políticos para ganar internas, por gremialistas como fuerza de choque, por empresarios como seguridad privada, etc. 2) Si bien en muchos casos, este apoyo se obtiene en forma coaccionada, la realidad indica que esta metodología esta profundamente enquistada en la existencia y viabilidad misma de las barras bravas. Sin este apoyo, su accionar se tornaría mucho más complicado e incluso insostenible. Por lo mismo, si el apoyo persiste, ninguna estrategia política o policial puede poner fin al accionar violento de las mismas. 3) Existen herramientas legales con penalidades severas (Ej. Asociación ilícita) que podrían aplicarse a las diferentes personas involucradas de alguna manera en el apoyo a las barras bravas. b) Desbaratamiento de las organizaciones y/o personas que estimulan directa o indirectamente el accionar de las barras bravas. o Identificar quienes están detrás de las barras bravas, ya sea brindando apoyo económico o político. 13 o Organizar unidades de fiscales destinados a investigar las actividades ilícitas en las que estos sujetos participan y sus conexiones con las barras bravas. o Reunir toda la información y prueba necesarias para conocer el grado de involucramiento de las personas y su modus operandi. o Para reunir pruebas y obtener testimonios de los participantes, se puede utilizar a los barras bravas como informantes. Para que sea más efectivo habría que estipular alguna modalidad que permita el perdón de las sanciones a los que estos estarían sujetos por sus ilicitudes a cambio de información (esto tiene límites claros en nuestra legislación pero es una de las armas más fuertes que tienen fiscales y jueces en Europa y los Estados Unidos para ir al núcleo de las organizaciones y no quedarse con los miembros operativos). o Una vez identificados las personas y reunidas las pruebas, buscar canales de comunicación para hacerles llegar el nuevo plan de acción y la información que se tiene respecto de sus actividades. o Para que el plan sea exitoso es preciso castigar severamente a quien se sepa certeramente que participa en estas prácticas. o Acompañar la estrategia con una campaña masiva en los medios de comunicación. La ejemplificación sobre algunos casos testigo generan un efecto disuasivo enorme en quienes trabajan en conjunto con la barras bravas. iii. Medidas complementarias: 1. Medidas de Prevención Situacional: CCTV en Estadios e inmediaciones, conectado a una base de datos que mediante un programa informático que controla los rostros de los espectadores con una base de antecedentes y buscados (photophone system). Barreras y elementos materiales que desincentiven e impidan el conflicto entre hinchadas y dentro de las mismas hinchadas. Control informatizado de acceso y venta de entradas. Estas, deberán especificar en el reverso las causas por las que se puede impedir la entrada al estadio. 14 Localidades numeradas y con asientos para todos los espectadores (ver experiencia comparada al final del punto). Presencia policial en las vías de comunicación y transporte antes y después del partido. Los envases de bebida o alimentos que sean vendidos dentro del estadio no deberán superar la capacidad de 500 gramos o mililitros. De la misma manera, no será permitido el ingreso de envases que no cumplan con esta especificación. Establecimiento de un del Centro de Comando y Control. Este Centro, deberá estar situado en un lugar estratégico dentro del estadio. Asimismo deberá contar con el control del sistema de CCTV, que incluya un número indeterminado de cámaras móviles (aparte de las fijas) para ser ubicadas en los lugares que el encargado del operativo de seguridad considere para cada evento en particular. También se debe controlar desde aquí el sistema de megafonía, sistemas de comunicación radial y telefónica con todas las agencias públicas o privadas que participan del operativo (Servicios Sanitarios, Bomberos, Policía, Seguridad Privada, etc.). Durante el desarrollo de los eventos, los responsables de cada una de las mencionadas agencias, deberán estar presente en el Centro y a través de los medios de comunicación propios y del Centro, dirigir a su personal en coordinación con el resto del operativo. Realización de controles de alcoholemia en la entrada del estadio a los individuos que sean detectados por el personal policial como posibles perturbadores del orden. Muchas de estas medidas de prevención situacional e utilizan hoy, pero no dentro de un marco preventivo y de acción concreta contra los barras bravas sino para reaccionar ante un desmán que haya ocurrido. Encierra la vieja lógica del modelo de seguridad reactivo que acciona una vez que ha ocurrido la violencia con su tendal de víctimas. La idea es aplicarlas de manera preventiva hacia los espectadores en general y pro-activa hacia aquellos que han sido detectados como miembros de estas asociaciones violentas. La razón de mantener sentados a los espectadores impuesta por la FIFA responde no sólo a cuestiones de comodidad, sino fundamentalmente a cuestiones de seguridad. 15 Luego de la matanza del Estadio Heysel en Bélgica donde la mayoría de las decenas de espectadores muertos del equipo Juventus a partir de la agresión de los hinchas del Liverpool se debió a problemas de hacinamiento, asfixia y avalanchas producto de que los espectadores se encontraban parados. Además fue sumamente dificultoso identificar a los agresores debido a que se confunden entre los cuerpos parados. A partir de ello y de una serie de recomendaciones la UEFA aplicó este criterio que ahora ha sido adoptado por la FIFA. 2. Derecho de Admisión y Apoyo del Estado. El derecho de admisión es una instrumento que ha demostrado ser sumamente efectivo en los casos europeos donde se aplicó, pero el rol crucial del mismo lo cumplió el Estado siendo este quien lo aplica en conjunto con la institución que organiza el espectáculo deportivo. La gran ventaja que se obtiene es que no es necesaria la decisión de un juez para evita el ingreso al estadio de alguien que se encuentra en una actitud violenta o bajo los efectos del alcohol o de los alucinógenos. Para su correcta aplicación, nos parece a partir de la aplicación de este principio en países como España, que es necesario reglamentar las conductas, actitudes o estados en los cuales se puede prohibir el ingreso al estadio de un espectador así como también la expulsión del estadio de darse estas conductas dentro del mismo. Esto también evitará problemas de juicios contra los organizadores por discriminación o acciones de amparo para concurrir al estadio. Si la acción es delictiva o contravencional darle curso de acción inmediato a los fiscales correspondientes. En nuestro contexto se hace imprescindible la acción conjunta de los organizadores y funcionarios estatales ya que es irreal pensar en su aplicación por parte de los organizadores solamente ante la amenaza que significa el accionar violento de los barras bravas. 16 3. Responsabilidades de los organizadores Los clubes y sociedades deportivas tienen la obligación de proporcionar adecuada capacitación al personal fijo y temporal, que se desempeña para velar por la seguridad y el normal desarrollo del evento deportivo. Entre otras medidas, deberán efectuar regularmente ejercicios de simulacro de emergencias, para que todo el personal del estadio conozca su rol ante los problemas y actúe correctamente para garantizar la seguridad de los espectadores, jugadores y personal técnico. Deberán proveer toda la información y medios necesarios (llaves maestras, planos, comunicaciones con el personal del estadio, etc.) al responsable del operativo policial, con quien estarán en permanente contacto a través del Centro de Comando y Control. El Jefe del Operativo Policial, será el encargado de ejercer la coordinación general del operativo. Al finalizar cada evento deportivo, el Jefe del Operativo, conjuntamente con los responsables de los demás servicios auxiliares, levantarán un acta destinada a los miembros del Comité de Seguridad en la se dejará constancia: 1. El desarrollo y aplicación del dispositivo de seguridad, antes durante y después del evento. 2. Los hechos violentos o perturbaciones del orden relevantes para la situación de seguridad del espectáculo. 3. Las conclusiones o sugerencias propuestas por cualquiera de los responsables de los servicios asistentes, con relación a nuevas medidas para mejorar las condiciones futuras de la seguridad en los espectáculos deportivos. 4. Medios de Comunicación y relaciones con la comunidad Trabajo conjunto con los medios de comunicación y regulación de contenidos para evitar el tratamiento sensacionalista de los hechos de violencia. Buscar el apoyo de los medios para la concientización de los espectadores para que aíslen a los violentos en las canchas y no los conviertan en el centro del espectáculo. 17 Esto fue sumamente efectivo en España en términos de la relación de los Ultras con los espectadores en general: cuando estos ingresaban o colgaban sus banderas eran abucheados por los espectadores en general. Habilitación de centro móviles de recepción de denuncias, ubicados en las inmediaciones de los estadios durante el desarrollo del operativo de seguridad de cada evento deportivo. Facilitar el proceder contra quienes actúan con violencia o en violación a los Códigos Contravencionales o Correccionales. La comunicación fluida con los propios barras bravas, dirigentes y demás actores involucrados es vital para ir generando una conciencia de cambio de actitud y fortalecer el aspecto disuasivo del Plan. Para ello se utilizan los canales formales e informales para hacerles llegar las “novedades” en cuanto a la nueva política, sus resultados y la consecuencia de seguir actuando de manera violenta. En Alemania, Bélgica, Holanda y en los Estados Unidos (en toros deportes en este último caso) se han aplicado políticas dirigidas a fomentar el control informal del comportamiento de los propios barras (hooligans, ultras, skinheads, etc.) sobre quienes cometen actos violentos en general. El fundamento detrás de esta idea radica en que la premisa para esta gente es identificarse con una organización que le da sentido de pertenencia y en muchos casos, eso es anterior a la violencia en sí misma. Por ende para poder mantener ese lugar de pertenencia y su posición en el mismo deben asegurarse el comportamiento razonable de sus miembros y vigilar que no se cometan desmanes o actos ilegales que puede atentar contra la misma organización. En muchos casos esto ha generado resultados positivos aunque parece de dudosa aplicación en la Argentina por el contexto e historial de las barras. C. Centro de Responsabilidad: "El liderazgo es la capacidad de transformar la visión en realidad." Es indispensable disponer de un organismo que asuma la tarea de llevar adelante la estrategia y que pueda ejercer una acción directa sobre el conjunto de actores implicados, 18 estimulando así el trabajo de asociaciones, facilitando la difusión de los conocimientos e instrumentos y respaldando las prácticas de evaluación. A nuestro entender dicho organismo clave debe ser la Secretaría de Seguridad. Este organismo se encargará en primer lugar de reflejar la voluntad y el liderazgo políticos con la finalidad de elaborar una estrategia proactiva y eficaz en materia de seguridad en los partidos de fútbol. El organismo será responsable de: • elaborar un plan de acción que contenga prioridades y objetivos; • influir sobre las políticas y decisiones de otros organismos; • estimular la implementación de diversas acciones complementarias. Para que ello sea posible, el organismo deberá: disponer de instrumentos de análisis capaces de definir las tendencias delictivas, los factores de riesgo y las acciones más adecuadas a realizar, así como fijar los parámetros que garanticen una evaluación rigurosa de estas acciones; poseer recursos para llevar a cabo las acciones necesarias, invertir en proyectos pilotos, divulgar los conocimientos y hacerse cargo del entrenamiento del personal necesario; tener la capacidad de asegurar la coordinación entre los principales organismos de la administración; elaborar una estrategia de movilización del público, con la finalidad de modificar las actitudes y las prácticas tradicionales. Sin embargo para que dicho organismo centralizado donde se centra la información y las responsabilidades para la ejecución de dicha política sea efectivo debe tener una fluida relación con la Procuración General de la Nación para la acción conjunta con los fiscales que son una pieza vital para el éxito de esa política. Esta coordinación s clave y a su vez uno de los factores donde se debe hacer hincapié ya que es donde la política puede naufragar por falta de resultados rápidos, visibles y justos. 19 Como la Secretaría de Seguridad no tiene jurisdicción en las provincias para este tipo de delitos es recomendable proponer y coordinar políticas similares en el conjunto del país. El hecho que hace que muchos clubes pertenezcan a jurisdicciones diferentes hace aún más importante el rol de la Secretaría de Seguridad de la Nación en su rol de coordinación y recolección de la información qe se produce en todo el país. D. Implementación: Para que el plan de acción sea exitoso es preciso que el mismo se conforme a los siguientes principios: 1) Inteligencia Oportuna y Precisa: reunir rápidamente la información esencial para responder a los sucesos criminales reportados, es decir, dónde esta ocurriendo el crimen, cómo se está llevando a cabo y quiénes son los delincuentes que viven en el sector; 2) Despliegue Rápido de los Recursos: respuesta policial rápida de acuerdo a los datos recopilados mediante la selección del equipo adecuado para resolver el delito. Una vez que el incidente de violencia se ha identificado, el personal y otros recursos deben movilizarse para enfrentarlo. Aunque algunas tácticas impliquen solamente personal policial, por ejemplo, la experiencia prueba que los planes más efectivos requieren de personal de muchas otras unidades. Una respuesta total al crimen o violencia generalmente requiere de patrullas, investigadores y personal de apoyo, para poner en funcionamiento su experiencia y recursos en un esfuerzo coordinado; 3) Coordinación de Tareas: si bien el sistema tiende a aclarar responsabilidades y establecer objetivos concretos a cada actor involucrado, existe un esfuerzo de coordinación al existir diversos organismos estatales involucrados, como también 20 distintas organizaciones de la sociedad civil. Por ello es clave el rol del centro de responsabilidad: que debiera ser ejercido por la Secretaría de Seguridad. 4) Tácticas Efectivas: búsqueda de las tácticas policial más eficaz para el delito en cuestión según los factores y circunstancias particulares del mismo. Estas tácticas deben ser flexibles y adaptables a los constantes cambios identificados y deben ser supervisadas por las autoridades a cargo de cada operación. 5) Seguimiento y Evaluación Implacable: revisión de la eficacia y éxito de las diferentes táctica empleadas para combatir los diferentes delitos. Una vez determinado cómo funcionará una táctica en un determinado crimen y que elementos específicos funcionan de manera más efectiva, es mejor diseñar e implementar respuestas efectivas para problemas similares en el futuro. El proceso también permite reorganizar recursos para reconocer desafíos una vez detectado el problema. Se deben elaborar estrategias para controlar que el trabajo se lleve a cabo de manera eficiente. Una forma eficiente de hacerlo es mediante reuniones semanales del equipo de trabajo, en donde se evalúe la información obtenida y el éxito o fracaso de las tácticas implementadas. Por otra parte, es necesario que exista una entidad que coordine la información y implementación de las estrategias. 21 IV. MARCO JURIDICO Haremos una breve reseña de los diferentes instrumentos legales con los que se puede en la actualidad combatir la violencia en los espectáculos deportivos. El ordenamiento que regula la violencia en los espectáculos deportivos en la Ciudad de Buenos Aires se integra por la Ley 24.192 y el Código Contravencional de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. La ley 24.192 establece un régimen penal y otro contravencional. En el primero tipifica delitos que, de acuerdo a la pena con que se los reprime, resultan de competencia criminal (pena privativa de la libertad mayor a tres años únicamente) o correccional, cuya vigencia se mantiene inalterable al resultar una atribución del gobierno federal el dictado de los códigos de fondo, entre ellos el penal. Por otra parte, conoce de los mismos la Justicia Penal ordinaria Ambos regímenes se complementan al compartir la naturaleza penal, los principios generales que los regulan y el carácter preventivo del segundo respecto de las conductas previstas en el primero. Esto es, una relación de medio a fin de naturaleza preventiva, por la cual de producirse la intervención de la autoridad pública en el primer estadio, cuando la conducta realizada es más leve, se evitará la producción de las subsiguientes más graves. Adicionalmente, y por la menor gravedad de la sanción, el régimen Contravencional tiene un procedimiento más rápido y ágil con lo que se garantiza la celeridad de la sanción. La regulación del régimen Contravencional es facultad propia de las provincias. Si bien la Ley 24.192 establece contravenciones para la Ciudad de Buenos Aires, éstas ahora son reguladas por el Código Contravencional dictado por la legislatura porteña. Sin embargo, los operadores del sistema en ambos regímenes son los mismos: la Policía Federal Argentina en la prevención y la Justicia en la posterior investigación y sanción de los sucesos ocurridos (Justicia Nacional –fuero penal ordinario- y Local –contravencional-). 22 1. El Código Contravencional a) Las contravenciones aplicables a espectáculos deportivos son: Art. 37: Pelear o tomar parte en una riña o agresión, con la participación de dos o más personas o en reunión multitudinaria, en lugar público o sitio expuesto al público. Art. 38:Hostigar de modo amenazante o maltratar físicamente a otro/a, siempre que el hecho no constituya delito. Art. 39: Portar armas a disparo, cortantes o contundentes o un objeto apto para ejercer violencia o agredir, sin autorización o causa que lo justifique, según el caso. Art. 39º ter: Disparar un arma de fuego fuera de los ámbitos autorizados por la ley. Art. 40: Colocar o arrojar en lugares públicos, o privados de acceso público, sustancias o cosas capaces de producir un daño. Art 40º bis: Organizar, promover o premiar juegos o competencias basados en el consumo de bebidas alcohólicas. Art. 53: la provocación de desórdenes en las filas de ingreso o egreso. Art. 54: la reventa de entradas que genere desórdenes. Art. 55: el ingreso sin autorización a lugares de acceso restringido. 23 Art. 56: el acceso a lugares distintos de los autorizados (por la entrada o la autoridad). Art. 57: la venta en exceso o el permiso de ingreso de personas que supere la cantidad autorizada. Art. 57bis: la omisión de los recaudos mínimos de organización o seguridad. Art. 58: la perturbación del desarrollo del espectáculo. Art. 59: la provocación a simpatizantes del equipo contrario. Art. 60: la guarda dentro del estadio de insignias, banderas o símbolos de clubes distintos del propio. Art. 61: la portación de elementos pirotécnicos, explosivos, emanantes luminosos, etc. Art. 62: la generación de avalanchas o aglomeraciones. Art. 63: el arrojar líquidos, papeles encendidos o cualquier objeto o sustancia que cause molestias o daños a terceros. Art. 64: la portación, tenencia, guarda e introducción de elementos aptos para ejercer violencia en un estadio o inmediaciones. Art. 65: la guarda de esos elementos en las dependencias del estadio. Art. 66: la venta de elementos aptos para agredir. Art. 67: la pretensión de ingresar al estadio con elementos aptos para agredir. 24 Art. 68: el suministro de bebidas alcohólicas en el estadio o en las adyacencias, antes, durante o después del evento. Art. 69: la pretensión de ingresar con bebidas alcohólicas. Art. 70: la obstrucción de las bocas de ingreso o egreso a los estadios o lugares. b) Las penas aplicables son: Art. 11: ENUMERACION: Las penas contravencionales son: Inc. 1º apercibimiento Inc. 2º caución de no ofender inc. 3º multa; inc. 4º: reparación; inc. 5º: prohibición de concurrencia inc. 6º: clausura inc. 7º: inhabilitación; inc. 8º: instrucciones especiales. inc. 9º: trabajos de utilidad pública; inc.10º arresto Cuando el contraventor o contraventora no cumpla o quebranta las penas individualizadas, el juez/a la sustituye por arresto. Puede cesar cuando el contraventor manifiesta su disposición a cumplir la pena, o el resto de ella. Art. 12: APERCIBIMIENTO: La pena de apercibimiento consiste en un llamado de atención efectuado en privado por el juez o jueza al contraventor o contraventora. Art. 13: CAUCION DE NO OFENDER: La pena de caución de no ofender consiste en el depósito en el Banco de la Ciudad de una suma establecida conforme a los 25 criterios señalados para la multa, con el compromiso formal de no cometer una nueva contravención durante el tiempo que se le fija, nunca mayor de seis meses. Si a su término la persona no ha cometido una nueva contravención, se le reintegra lo depositado; en caso contrario la suma depositada pasa a la Ciudad, con el destino previsto en el Artículo 14. Art. 14: MULTA: La pena de multa obliga al contraventor/a a pagar una suma de dinero que el Consejo de la Magistratura debe destinar a la financiación de los programas de educación, deportes, de promoción social o médico-psicológicos en los que se cumplan instrucciones especiales, o trabajos de utilidad pública, según lo establecido en el presente código. La multa se cuantifica en días-multa. El monto del día-multa equivale, como máximo, a la suma de quinientos pesos y el mínimo, a la suma de veinte pesos. El valor de cada día-multa debe fijarse de conformidad a la renta real o potencial del infractor/a. No se impone pena de multa a quien no tiene capacidad de pago. El contraventor/a puede hacer efectivo el pago de la multa en cuotas mensuales. Si el contraventor/a no tuviere bienes suficientes el juez/a puede reemplazar los días-multa que no hubieren sido cumplidos, ni hubieren podido ser ejecutados, por la pena de trabajos de utilidad pública a razón de 4 horas de trabajo por cada día-multa no cumplido. El trabajo de utilidad pública cesa en cualquier momento si el contraventor/a abona el monto de la condena. Art. 16: REPARACION: Cuando la contravención hubiere producido un perjuicio a una persona física o jurídica determinada, el juez/a puede disponer que el pago sea en beneficio de dicha persona, aplicando los mismos criterios establecidos para la multa. La reparación dispuesta en el fuero contravencional es sin perjuicio del derecho de la víctima a demandar la indemnización en el fuero pertinente. Art. 17: PROHIBICION DE CONCURRENCIA: es la prohibición impuesta al contraventor/a de concurrir a lugares determinados. 26 Art. 18: CLAUSURA: La clausura implica el cierre del establecimiento, comercio o local del propietario o titular que haya cometido una contravención valiéndose del establecimiento comercio o local. Art. 19: INHABILITACIÓN: La inhabilitación implica la prohibición de ejercer empleo, profesión o actividad y sólo puede aplicarse cuando la contravención se hubiese producido por incompetencia, negligencia o abuso en el ejercicio de un empleo, profesión, servicio o actividad dependiente de una autorización, permiso, licencia o habilitación de autoridad competente. Art. 20: INSTRUCCIONES ESPECIALES: Las instrucciones especiales consisten en el sometimiento del contraventor/a a un plan de conducta establecido por el juez/a. Pueden consistir, entre otras, en asistir a un curso determinado, emprender un tratamiento psicológico o médico siempre que fuere aceptado por el contraventor/a. La instrucción especial a que fuere sometido el contraventor/a debe tener relación con la contravención que hubiere dado motivo a la pena. El juez/a no puede impartir instrucciones cuyo cumplimiento sea vejatorio para el contraventor, que afecten sus convicciones, su privacidad, que sean discriminatorias o que se refieran a pautas de conducta no directamente relacionadas con la contravención cometida. Art. 21: TRABAJOS DE UTILIDAD PÚBLICA: El trabajo se debe prestar en lugares y horarios que determine el juez/a, en su caso, fuera de la jornada de actividades laborales y/o educativas del contraventor/a. Se realiza en establecimientos públicos tales como escuelas, hospitales, geriátricos u otras instituciones dependientes del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Esta pena debe adecuarse a las capacidades físicas y psíquicas del contraventor/a. Se tendrán especialmente en cuenta habilidades o conocimientos especiales que el contraventor/a pueda aplicar en beneficio de la comunidad y deben realizarse de modo que no resulte vejatorio para éste/a. 27 Art. 22: ARRESTO: El arresto debe cumplirse en establecimientos que cumplan con los recaudos previstos por el artículo 13 de la Constitución de la Ciudad, no pudiendo utilizarse a tal fin reparticiones policiales ni otras destinadas a alojamiento de personas procesadas o penadas por delitos. No puede exceder de treinta días en caso de ser aplicado en forma sustituva. El juez puede disponer la modalidad de arresto domiciliario, que obliga al contraventor/a por los períodos de tiempo fijados a permanecer en su domicilio sin salir de él. Puede fraccionarse el arresto para que sea cumplido los días feriados o días no laborables. En caso de fraccionamiento se computan 24 horas por día de arresto. Corresponde el arresto como pena principal de aplicación directa, en los casos de los artículos 39º; 39 bis; 39 ter; 43º; 43° bis; 57° bis; 63º; 64º; 65º; 66º; 67º; 68º, 70º (en este caso sólo la figura dolosa), 75º, 76º y 78 Art. 23: EXTENSIÓN DE LAS PENAS: Las penas no pueden exceder: La multa, los treinta (30) días-multa. La prohibición de concurrencia, los doce (12) meses. Las instrucciones especiales y trabajos de utilidad pública, los cuatro (4) meses. La inhabilitación, los dos (2) años. La clausura, los noventa (90) días. El arresto, los treinta (30) días. Art. 24: GRADUACIÓN DE LAS PENAS: La pena en ningún caso excede la medida del reproche por el hecho. Para su graduación se deben considerar las circunstancias que rodearon al hecho, la extensión del daño causado y, en caso de comisión culposa, la gravedad de la infracción al deber de cuidado. También deben ser tenidos en cuenta los motivos, la conducta anterior al hecho, las circunstancias económicas, sociales y culturales y el comportamiento posterior, especialmente la disposición para reparar el daño, resolver el conflicto, mitigar sus efectos y las condenas por contravenciones del mismo capítulo en los doce meses inmediatos anteriores al hecho del juzgamiento. En las contravenciones de tránsito deben computarse, las cometidas en los 2 (dos) últimos años. Se pueden imponer hasta tres 28 penas en forma conjunta, conforme a las pautas anteriores, y optando por las más eficaces para prevenir la reiteración, reparar el daño o resolver el conflicto. No pueden imponerse conjuntamente las penas de multa y trabajos de utilidad pública y reparación, ni alguna de ellas y la caución de no ofender. En caso de pena de arresto sólo se podrá combinar con otra pena y no es compatible con trabajos de utilidad pública. Art. 26: COMISO: La condena por contravención dolosa importa la pérdida de los instrumentos con los que se ha cometido, cuando los mismos impliquen riesgo o peligro para las personas. Si los bienes comisados fuesen de utilidad para algún establecimiento oficial o de bien público, les son entregados a éste en propiedad. Si no tuvieren valor lícito alguno se los destruye. No pueden ser objeto de comiso los automotores. Quien se tome el trabajo de comparar las figuras enunciadas con las previstas en la ley 24.192 advertirá, en la mayoría de los casos, la correspondencia entre ellas. II. El procedimiento contravencional. (Ley de Procedimiento Contravencional)- a) Características: Art. 16: La prevención de las contravenciones está a cargo de la autoridad que ejerza funciones de policía de seguridad o auxiliar de la justicia (verbigracia, la Policía Federal Argentina). 29 Art. 18: Las autoridades preventoras están autorizadas a adoptar medidas precautorias por sí, debiendo comunicar su decisión inmediatamente al fiscal en turno (art. 21), el cual en caso de convalidar lo actuado debe, a su vez, dar intervención al Juez. Las medidas precautorias son: APREHENSIÓN (en los casos que se requiera coacción directa sobre el sujeto para hacer cesar la conducta de flagrante contravención). CLAUSURA PREVENTIVA: cuando exista grave e inminente peligro para la salud o seguridad públicas. SECUESTRO DE BIENES que sean susceptibles de comiso. INMOVILIZACIÓN Y DEPOSITO DE VEHICULOS MOTORIZADOS (sólo en contravenciones de tránsito). Conclusión: la autoridad preventora (policía local) tiene la obligación y los medios para prevenir y/o hacer cesar las conductas reprimidas por el Código Contravencional, y para ello posee las atribuciones que se han enumerado. b) Duración: PROCESO COMUN: 1- Si el/los imputados no fueron objeto de aprehensión, deben comparecer ante el fiscal dentro del quinto día de iniciadas las actuaciones. 30 2- Al comparecer, es oído por el fiscal. En caso de confesar su responsabilidad por el hecho (y resultar el mismo una conducta contravencional de las previstas en el Código), el fiscal puede requerir el juicio abreviado (se omite la audiencia oral y pública, dictando el juez sentencia condenatoria en caso de no necesitar un mayor conocimiento del hecho). 3- No habiendo admitido el hecho, el fiscal reúne la prueba mínima e indispensable para sustentar su requerimiento de juicio (o acusación), respetando durante la investigación preliminar que tiene asignada los principios generales del derecho procesal penal y el derecho de defensa en juicio), y en caso de corresponder (puede archivar las actuaciones cuando, por ejemplo, el hecho no constituya una contravención –art. 39-) reclama la realización de juicio (art. 44) 4- Requerido el juicio por el fiscal, el Juez fija la fecha de audiencia de juicio y notifica a las partes. La defensa puede, dentro de los cinco días, ofrecer prueba (art. 45). 5- En juicio oral y público, se sustancia el debate y, transcurrido el mismo, se dicta sentencia (absolución o condena). La sentencia es apelable dentro de los cinco días de notificada. Conclusión: respetando los pasos procesales, entre veinte y treinta días de producido el hecho, el imputado de la comisión de una contravención puede ser absuelto o condenado luego de desarrollado el juicio oral y público. PROCESO SUMARÍSIMO: 1- Si se dispuso la aprehensión del/los imputados, el Juez debe realizar la audiencia de juicio y dictar sentencia en las cuarenta y ocho (48) horas siguientes. 2- En tal caso, si bien no está reglamentado el modo de realizar el juicio, puede interpretarse que hasta la hora de la audiencia el fiscal y la defensa pueden reunir la prueba que sustente cada posición, y una vez iniciada la misma el primero deberá hacer saber si requiere o no el juicio contra la persona y fundar su petición. Inmediatamente la defensa 31 puede ofrecer prueba, la que deberá ser aceptada o rechazada por el Juez, ordenando en el primer caso su producción para el momento correspondiente (por ejemplo, disponer la comparecencia de los testigos ofrecidos, disponer una inspección judicial u ordenar la inmediata realización de una pericia). 3- Sustanciado el debate, respetando el plazo máximo de cuarenta y ocho (48) horas, el Juez deberá dictar sentencia (absolutoria o condenatoria). Conclusión: su duración en primera instancia no supera las 48 horas. III- La ley 24.192.- Como señalara precedentemente, al régimen contravencional le suceden las normas punitivas del Código Penal cuando la conducta es cuantitativamente más grave. Así, se prevé: a) Características: Art. 2: se incrementan en un tercio las penas mínimas y máximas en caso de homicidios (dolosos o culposos), hurtos y robos que se produzcan con motivo o en ocasión de un espectáculo deportivo. Art. 3: prisión de 1 a 6 años para la introducción, tenencia, guarda o portación de armas de fuego o artefactos explosivos con motivo o en ocasión de un espectáculo deportivo. Art. 4: prisión de un mes a 3 años a los dirigentes, etc., que consintieren guardar en el estadio o sus dependencias armas de fuego o artefactos explosivos. No obstante, se aplicaría el art. 189 bis en caso de ser considerados partícipes necesarios de la 32 tenencia ilegítima de armas de guerra o materiales explosivos, teniendo prevista la pena de 3 a 6 años. Art. 5: prisión de 1 a 6 años al que instigare, promoviere o facilitare de cualquier modo la formación de grupos destinados a cometer alguno de los delitos previstos en el capítulo. Art. 6: prisión de un mes a 2 años, al que resistiere o desobedeciere a un funcionario público encargado de la tutela del orden, o a la persona que prestare asistencia al mismo. Art. 8: prisión de seis meses a 3 años al que destruyere o dañare una cosa mueble o inmueble en ocasión o con motivo de un evento deportivo. Art. 9: prisión de seis meses a 3 años al que impidiere u obstruyere el normal funcionamiento de los transportes hacia o desde los estadios. Art. 11: prevé como accesoria adicional la pena de multa cuando el autor de alguno de los delitos previstos sea director o administrador de un club deportivo, dirigente, miembro de comisiones directivas o subcomisiones, en ejercicio o en ocasión de sus funciones. A este catálogo represivo especial, debe sumarse lo establecido por el Código Penal para cualquier otra conducta que no se encuentre expresamente prevista en la ley de violencia en espectáculos deportivos. b) Procedimiento: 1- Características: 33 INSTRUCCIÓN: etapa de investigación a cargo de un juez, o delegada en un representante del Ministerio Público Fiscal. La autoridad preventora tiene facultades ordinarias (recibir denuncias, preservar los rastros materiales, efectuar exámenes técnicos –inspecciones, planos, fotografías, comprobaciones químicas, entre otros-, interrogar testigos, aprehender a los presuntos culpables, etc.) y excepcionales (requisa personal, allanamiento de morada, secuestro de objetos, hacer uso de la fuerza pública, etc.). El juez puede disponer medidas de cautela personal (detención, prisión preventiva), allanamiento de morada, secuestro de cosas relacionadas con el delito o que puedan servir como medio de prueba, pericias, etc. JUICIO ORAL: a cargo de un tribunal colegiado (para delitos criminales) o unipersonal (delitos correccionales). 2- Duración: PROCESO COMUN: De acuerdo con el art. 207 CPPN, la instrucción puede durar 4 meses, prorrogables por dos más. Una vez elevada la causa a juicio, se cita a las partes para que durante diez días hábiles examinen las actuaciones y ofrezcan prueba (art. 354). Vencido el término o culminada la instrucción suplementaria que pudiera haberse ordenado, se fija la audiencia con un intervalo no menor de diez días (art. 359) que puede abreviarse con acuerdo de las partes. INSTRUCCIÓN SUMARIA: En caso de delito flagrante, cuando no se dispusiera la prisión preventiva del imputado, la instrucción queda directamente a cargo del Fiscal, quien deberá culminarla en quince días 34 (art. 353 bis), luego continúa de acuerdo a lo previsto para el proceso común o puede adoptarse el juicio abreviado. JUICIO ABREVIADO: En caso de estimar el fiscal que la pena a imponer no superará los 6 años de prisión, podrá solicitar que se proceda conforme al Capítulo IV (art. 431bis y siguientes). Para que sea admisible, deberá acompañarse la conformidad de todos los imputados sobre la existencia del hecho y su participación. Verificados los requisitos exigidos en el capítulo, se omitirá la realización de la audiencia de juicio y el Tribunal dictará sentencia condenatoria, no pudiendo imponer una pena más grave o superior a la solicitada por el fiscal. La duración del proceso dependerá del tiempo que insuma la instrucción (4 meses o quince días según el caso) y del cumplimiento de los pasos procesales posteriores al requerimiento de juicio. JUICIO CORRECCIONAL: En caso de tratarse de delitos con pena de prisión no superior a los tres años, se aplican las reglas del juicio común excepto por la abreviación de algunos términos y por ser un tribunal unipersonal quien juzga en audiencia oral y pública, resultando ser el mismo que tuvo a su cargo la instrucción. También en este caso, puede aplicarse la instrucción sumaria (art. 353 bis) y el juicio abreviado (art. 431 bis). 35 Conclusión: dada la mayor complejidad y gravedad de las conductas tipificadas como delitos, y las características propias del proceso penal, este siempre es razonablemente más extenso. IV- Análisis Como dijimos inicialmente, es conocida la predisposición de propiciar soluciones a los problemas de seguridad, mediante el superficial y efectista discurso del aumento de penas y de otorgar mayores atribuciones a la policía; en definitiva, dictar leyes más duras. Independientemente que se piense en la conversión en delito de las conductas actualmente contravencionales reprimidas en la ciudad de Buenos Aires, lo cierto es que la consecuencia inmediata será que habrá de alejarse la posibilidad cierta que a su autor se le aplique una pena, dadas las diferencias enunciadas precedentemente de procedimiento. A ello debe sumarse el necesario proceso de selección de casos que la colapsada justifica penal se ve obligada a realizar. Por otra parte, el efecto disuasivo de la amenaza que conlleva la previsión de una pena para una conducta ilegal se neutraliza o anula por el bajo porcentaje de casos juzgados y de penas aplicadas. Es decir, la baja probabilidad de castigo prácticamente anula la función disuasoria que una pena más severa estaría destinada a cumplir. En consecuencia, si tomamos en cuenta la influencia del sistema penal sobre el propio sujeto activo, no será el arresto o la prisión, necesaria y únicamente, la que operará sobre sí para enderezar su conducta; la prohibición de concurrencia, la realización de trabajos comunitarios o el sometimiento a un plan de conducta o tratamiento médico pueden tener mayor y mejor influencia para ello. En cualquier caso, lo indispensable es aplicar sanciones por las conductas delictivas y contravencionales que a diario se producen en los estadios de fútbol. La amenaza que la ley penal pretende infundir en los habitantes se diluye y pierde su efecto si nunca deja de ser 36 eso: la mera advertencia de la aplicación de una pena por la realización de una conducta desvalorada. En definitiva, de procurarse alguna reforma legislativa, deberían acentuarse aquellas que optimicen el funcionamiento de la Policía y la Justicia para hacer más efectiva y productiva sus tareas. Por lo demás, se deberían aplicar las leyes existentes para comprobar, empíricamente, si son eficaces para combatir la violencia y disipar la inseguridad que nos gobierna. 37