“Tomad esto… repartidlo” Domingo de Ramos / C Este domingo de los Ramos, iniciamos la Semana Santa, una semana solemne en la que queremos vivir con Cristo, su Pasión, Muerte y Resurrección. Hoy la Iglesia recuerda la entrada victoriosa de Cristo en Jerusalén para consumar su misterio pascual. La liturgia de este domingo consta de tres momentos: 1) La bendición de los ramos; 2) La procesión en honor a Cristo Rey; 3) La celebración de la Eucaristía. Mientras él avanzaba, la gente extendía sus mantos sobre el camino. Cuando Jesús se acercaba a la pendiente del monte de los Olivos, todos los discípulos, llenos de alegría, comenzaron a alabar a Dios en alta voz, por todos los milagros que habían visto. Y decían: “¡Bendito sea el Rey que viene en nombre del Señor! ¡Paz en el cielo y gloria en las alturas!”. ........Evangelio: Pasión de Jesucristo según san Lucas: 19, 28-40 Llegada la hora, se sentó Jesús con sus discípulos y les dijo: - «He deseado enormemente comer esta comida pascual con vosotros, antes de padecer, porque os digo que ya no la volveré a comer, hasta que se cumpla en el reino de Dios.» Y, tomando una copa, pronunció la Z L O S A Z N A I L A acción -de gracias y dijo: C I R I O S T I A F N - «Tomad esto, repartidlo entre vosotros; porque os digo que no beberé O S L D A P M O R S C desde ahora del fruto de la vid, hasta O M I A E N R U Z O A que venga el reino de Dios. » Y, tomando pan, pronunció la acción de R E M O C L T E A R S gracias, lo partió y se lo dio, diciendo: E E M A A O N A U E S «Esto es mi cuerpo, que se entrega por N I V T U A C R C O vosotros; haced esto en memoria mía.» A Después de cenar, hizo lo mismo con la N L E N A E C G N E T copa, diciendo: «Esta copa es la nueva R U A D O A N S D D E alianza, sellada con mi sangre, que se derrama por vosotros.» N J E S U A S E A A N ……Busca en el evangelio de hoy diez palabras de más de cuatro letras. Con las que sobran obtendrás una frase. J E R U S S A L E P N ……………………………….. Jesús, de muchas maneras y a través de parábolas y hechos concretos, nos ha invitado a reconocernos pecadores y así poder acoger la gracia y la alegría de su perdón. Todos estamos llamados a acercarnos al Padre de la Misericordia y Dios de todo consuelo porque Él está con los brazos abiertos para acoger a sus hijos heridos por el pecado. Preparemos, pues, nuestros corazones para acoger -como se merece- al que va a dar su vida por nosotros mostrándonos el amor que nos tiene. ……………… Frase anterior: Jesús nos enseña a ser misericordiosos y a acoger a los pecadores como lo hacía Él.