capitulo 1 - 3

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I CAPITULO
El día tan esperado para Giselle había llegado, después de una ansiosa espera desde que decidió ir
a Estados Unidos a ver a Kevin y decirle que lo amaba y que era la persona más importante en su
vida.
Kevin era un chico muy guapo y codiciado por miles de chicas, debido a su fama junto a los otros
cuatro chicos, quienes formaban “Backstreet Boys”.
Kevin tenía una novia de años y muy pronto de casaría, por lo menos eso se había publicado
oficialmente en una revista y comentado por televisión.
Giselle había logrado aquella noche, entrar a la disco donde Kevin iría aquella noche, gracias a los
contactos con Katie, una chica que había conocido por un fanbook.
Estaba feliz, aunque sabía lo difícil que sería acercarse a él, aún así, haría lo imposible por
entregarle una carta, en la que sincera, detallada y especialmente le explicaba sus sentimientos.
Eran ya las 3 de la madrugada, Kevin rodeado de chicas y algo mareado con algunos traguitos en
su cuerpo, bailaba al medio de la pista. Mientras Giselle con algunas dificultades, comenzó la dura
tarea de acercarse a él. Tuvo que mentir ante unos encargados, para lograr entrar al salón Vip, lo
que resultó una odisea y casi lo echan todo a perder por su visible nerviosismo, hasta que
entraron. Giselle comenzó lentamente a caminar hacia él, y ya casi a su lado, se detuvo, sintiendo
algo muy extraño, por fin lo tenía cerca y sus nervios la atacaban, respiró profundo y continuó,
caminaba hacia él lentamente, observándolo sin pestañar, sintiendo como si solo ellos dos
existieran, como si la música se detuviera, era realmente emocionante, tanto tiempo siguiéndolo,
soñándolo y ahora lo tenía frente a ella.
Lo encontró más guapo que nunca y que lo amaba aún más, conteniendo incluso sus lágrimas,
sobre todo cuando él la vio, fue un instante de una cálida y fija mirada, que Giselle sintió una luz
que iluminó su alma. De pronto, todo aquello se apagó y fue como si la despertaran del hermoso
sueño que estaba viviendo, miró a su lado para ver quien la había tomado del brazo, era uno de
sus guardespaldas que lo acompañaban.
Tim – Señorita por favor, Kevin viene a divertirse
Giselle – Yo solo quiero entregarle algo … Kevin! Esto es para ti! Pls Léelo!!
El chico le hiso una coqueta sonrisa, recibiéndole la carta y dándole las gracias. La chica se dio
vuelta, pero cuando iba casi llegando donde su amiga, vio que el guardespalda tenía la carta y la
guardaba en su bolsillo, Giselle se devolvió donde él muy molesta.
Giselle : Hey!! Dame esa carta, se la entregué a él, no a ti!!
Tim: Tranquila, es solo por un momento.
Giselle: Dámela!
Tim : Mira, él me dijo que se la tuviera, no se va a perder, la leerá
La chica no muy convencida, se dio vuelta y estaba su amiga a un costado de la barra, fue hacia
ella.
Katie : Qué te dijo?
Giselle : Que Kevin le pidió que se la tuviera, que no me preocupara
Katie : Y Kevin?
Giselle : Si pudieses sentir lo que yo cuando estaba cerca de él ( mientras hablaba lo miraba ) …
cuando me miró …es que tiene unos ojos maravillosos y fogosos, no sé como no lloré, grité o me
desmayé.
En ese momento Kevin fue donde Tim, recibió la carta, oyendo lo que Tim le contaba sobre la
chica, quien sonrió e intentó buscarla, Giselle presentía que hablaban de ella, y mientras los
nervios comenzaban, sintió la hermosa luz de su mirada, quien levantó su mano para saludarla,
ella sólo lo observaba sin moverse, deseando que ese momento fuera eterno, pero ahora fue Katie
quien la despertó diciendo:
Katie : Te está saludando, salúdalo!!!!!!!!!
Ahí recién la chica levantó su mano y respondió el saludo
Katie: Amiga despierta, Kevin te saludó, es que no lo creo.
Giselle: Es que este hombre me hipnotiza con su mirada y cuando siento que sus ojos buscan los
mios …me…me…vuelven loca, y ahora esto, creo que no lo voy a soportar.
Katie tomó la mano de su amiga para demostrarle en ese gesto que la entendía y tenía su apoyo.
Hacía años que la chica soñaba con ese momento, con lograr que él se fijara en ella aunque sea
por un instante, lo que para muchos era algo insignificante, para ella lo era todo.
La enamorada chica no lo soportó más y comenzaron a caer suaves lágrimas que ella intentaba
disimular, lágrimas de emoción que acarisiaban su rostro, acompañados de suspiros y su voz
entrecortada, dijo:
Giselle: Katie, discúlpame, es que ya no puedo seguir ocultando mi emoción
Katie: Lo sé amiga, tranquila, no olvides que yo amo a Howie .
En ese momento sonó el celular de Katie, era su padre quien ya venía a buscarlas.
Katie: Odio tener que decir esto, pero mi padre viene en camino, debemos irnos.
Giselle: No puedo dejar de mirarlo … es hermoso!
Katie: Pero puedes despedirte
Giselle: Despedirme? … ah claro! Y quizás robarle un beso … vamos!!
Se arreglaron, mientras Giselle intentaba detener las cosquillas que sentía en su estómago y el
tiritón en sus piernas. Llegaron donde él con mucho nerviosísmo.
Tim: Kevin ya tiene la carta.
Mientras el chico miró a Giselle a los ojos, haciéndole una sonrisa.
Giselle intentando sacar la voz, dijo: Quería despedirme, ya … ya no vamos.
Kevin con una voz que formó una melodía dentro de ella, dijo: Porqué tan temprano?
Giselle: Ma…mañana…tenemos queeeee … levantarnos temprano.
Kevin: Cuál es tu nombre?
Giselle: Yo … yo… Giselle…sí, ese es mi nombre , Giselle … ah! Y ella es Katie mi amiga.
Comenzaba un nuevo tema, música suave, Kevin la tomó de la mano, dijo: Pero bailemos esta
canción antes de que te vayas.
La respuesta de ella era obvia, solo se dejó llevar hacia la pista, donde él la llevó, en donde las
luces habían bajado su tono de alegría, para convertirse en suave y romántico color. La chica
sintió que la música cálidamente los abrazaba, los brazos del chico rodeaban completamente sus
caderas, comenzando con un suave movimiento como las suaves olas de mar. Ella intentaba
respirar profundo el perfume del chico, para que aquel exquisito olor quedara para siempre dentro
de ella. Su cabeza se había apoyado en el pecho del chico, acarisiando su rostro, que se dejaba
querer, como si deseara esos tiernos gestos, respondiendo colocando sus delgados labios en el
cuello de ella, quien estaba muy nerviosa y su temperatura había subido. La canción estaba por
terminar, cuando él la miró a los ojos y dijo:
Kevin: Te volveré a ver?
Ella con su voz entrecortada, dijo: Cuando … tu quieras.
Kevin: Me das tu numero?
Giselle: Claro … si , pero yo el lunes me voy a Ny, allá me estoy quedando.
Kevin: No hay problema.
Ella lo miraba mientras él anotaba el número. Luego de prometerle que la llamaría, le dio un
pequeño beso en la mejilla, sientiendo ella que la quemaba, luego volvió a tomarla de la mano y
dirigirse hacia la barra, donde la esperaba Katie.
Katie: Nos vamos?
Giselle: Ok … Bye!
Se despidieron y salieron de la disco completamente emocionadas e ilusionadas, sobretodo Giselle,
quien aquella noche no durmió recordando a cada instante su tan esperado y especial encuentro
con Kevin.
CONTINUARA...
II CAPITULO
Cuando Giselle llegó a NY, fue muy emocionada a contarle a su amiga Soledad, quien también se
había venido desde Chile, pero a quedarse a trabajar.
Giselle: Adivina cómo me fue?
Soledad la miró casi sin importancia, este tema de Kevin no le atraía lo suficiente, algo en él no le
gustaba, con lo que con cierta molestia contestó:
Soledad: Como siempre, buscándolo por los hoteles.
Giselle con una sonrisa especial: No, lo encontré!!!!! … si!! … hablé con él y hastabamos!!
Soledad notó la emoción en su amiga e intentando no herir sus sentimientos, dijo: Eso quiere
decir que ya no habrán más noches en vela, ni persecuciones?
Giselle: Tú nunca lo entenderás, Kevin para mi es demasiado importante y lo que estoy viviendo
es un sueño.
Soledad: Y tú nunca entenderás que es un hombre cualquiera.
Giselle: Es el hombre que amo.
Soledad: Bueno ya!, el asunto es que ya encontré una casa, es grande y económica, ojalá
podamos ir a verla juntas.
Giselle: Ah si, iremos mañana, ahora quiero descansar y recordar.
Soledad: Por suerte ahora ya te olvidarás de él.
Giselle: No, me pidió mi número de celular y prometió llamarme.
Soledad: Y le creiste?
Giselle: Me llamará … pero ahora llamaré yo a Carla a Chile, algo le conté y quiere los detalles, soy
FELIZZ!!!!!.
Así mismo, unos días después, Kevin llamó a Giselle, la chica estaba emocionadísima, su sueño se
cumplía. El chico la invitó a comer en el hotel donde se estaba hospedando.
Todo estuvo delicioso, entretenido, agradable, emocionante. Al terminar la comida, el chico la
llevó junto a la piscina, donde se sentaron en unos sillones de mimbre.
Kevin: Asique vienes desde Chile.
Giselle: Si, me vine de vacaciones y para conocerte a ti.
Kevin: Gracias.
Conversaron hasta casi oscurecer.
Kevin: Con quien vives acá?
Giselle: Con una amiga, arrendamos una casa.
Kevin: Y tu novio? Te dejó venir sola por estos lados?
Giselle: Yo…yo…eh , no tengo novio.
Kevin: Y eso por qué, si eres tan linda e interesante.
Giselle algo ruborizada: De verdad lo crees?
Kevin muy coqueto y mirándola a los ojos: Lo veo.
La chica sentía derretirse bajo esa verde mirada y sentía sus labios secos al ver como él
humedecía los suyos en ese suave trago que había pedido.
Kevin: Sabes…hace mucho que no cometo locuras, pero siento una fuerte necesidad de hacerlo
ahora, tu no preciosa?
Giselle sintió su rostro enrojecerse, pero batallando con su timidez y su terremoto hormonal
dentro de ella, contestó.
Giselle: Creo que si.
Kevin: Se está poniendo algo frio … subamos a mi habitación?
Ella sabía que ocurriría si iba, pero también sabía que quizás sería esta la última vez que lo vería,
pero también perder su virginidad con el hombre a quien amaba, sería impagable, aunque nunca
más supiera de él, solo por televisión, radios o revistas.
Giselle: Vamos!
Kevin la tomó de la mano y subieron en el ascensor, hasta una habitación muy grande y muy
linda, donde se sentaron en unos grandes y muy cómodos sillones de cuero, bajo una suave
música y suave luz, inventando temas de conversación para hablar, mirándose intensamente a los
ojos.
Cuando él se había acercado aún más, acarisiando su rostro suavemente, la chica sintió cierto
temor y se puso de pié, hacia los ventanales.
Giselle: Tienes una…vista hermosa.
Sintió que él se le acercó por atrás, colocando sus manos en su cintura.
Kevin: Todo se ve diferente…dependiendo con quien estés.
La dio suavemente vuelta para mirarla a los ojos.
Giselle: Y…y…ahora cómo ves todo?
Kevin: Beautifull.
Se acercó y sin prisa, comenzó a besarla suavemente, con mucha dulzura, sintiendo ella aquellos
labios, aquella lengua y su barbilla que era una combinación perfecta y no tenía palabras para
definir lo que sentía en ese momento, él era tan suave, lento, delicado y la vez apasionado, que la
enloquecía.
Luego de tantos minutos que ambos ni cuenta s dieron, el chico solo la abrazó, quedándose en
silencio, intentando entender por qué esta chica le era tan especial.
Giselle: Sucede algo?
Kevin: No, nada, intentaba recordar si alguna día sentí unos labios tan dulces como los tuyos.
Giselle: Y lo recordaste?
Kevin: Nunca había sentido ese sabor tan especial de tu boca, es única, me encanta.
Comenzó a besarla unos cortos minutos para luego detenerse y decir.
Kevin: Me enloqueces.
Otro pero largo beso renació, hasta guiarla suavemente a su cama. La chica estaba muy nerviosa,
intentó explicarle su inexperiencia sexual.
Giselle: Yo…yo, bueno…no tengo experiencia en esto…ya sabes…eso.
Kevin: Tranquila, no te haré daño, déjate guiar.
Comenzó a besar su cuerpo mientras la desnudaba, su cuerpo le fascinaba. Tuvieron un sexo
especial, desgarrador, casi con amor, un amor de improviso y que sin dudar, ambos jamás
olvidarán.
Al otro día cuando Giselle dormía, apareció un guardespalda de piel oscura y muy grande, quien la
despertó, la chica muy asustada despertó.
Giselle: Qué sucede?
Él: Es hora de que te largues, tienes 10 minutos o te saco yo! , la diversión ya terminó.
Aquel hombre salió, Giselle no podía creer lo que le estaba pasando y donde estaba Kevin. Se
vistió y mientras se lavaba la cara, apareció allí nuevamente ese feo hombre que asustaba.
Él: Tienes que irte ahora mismo!
Giselle: Hey! Por qué me hablas así? Quién crees que soy?
Él: Eso no me interesa, sólo debes irte, Kevin no quiere verte aquí para cuando regrese!
Giselle: Qué?, eso no es cierto!
El hombre la tomó del brazo, para que saliera, ella no entendía nada, sólo lloraba, al parecer Kevin
no creyó en ella.
En casa la chica contó lo lindo que le había ocurrido, estaba confundida, triste, pero emocionada a
la vez.
Pero, la emoción duró solo 1 mes …
CONTINUARA..
III CAPITULO
Pasado un mes, tuvo en retraso en su periodo, sumado a algunos desmayos y vómitos, lo que
estuvo obligada a ir a un médico, confirmándole lo que temía; sería madre. Esto no sería para
nada fácil, se suponía debía volver a Chile en unos meses más y seguir estudiando, no sabía cómo
lo tomaría su familia y Kevin, de quien siempre esperó una llamada que nunca hiso, lo que
provocó la idea de ir a buscarlo.
Katie su amiga, le consiguió una dirección, tenía un departamento aquí en NY, Giselle no dudó en
ir.
Al llegar allá, fue Tim quien le abrió, pero al verla salió cerrando la puerta tras de él, dijo:
Tim: Qué quieres?
Giselle: Hablar con él, permiso!
Tim la tomó del brazo, deteniéndola: Me temo que eso no podrá ser! … mira … él agradece lo que
vivieron, pero eso ya pasó, olvídalo … no lo volverás a ver nunca más.
Giselle: Necesito hablar algo muy importante con él!
Tim abrió la puerta, pronunció el nombre de Pet, saliendo aquel tipo negro que asustaba en el
hotel, lo que puso nerviosa a la chica.
Giselle: Solo 5 minutos Tim por favor, nada más!
Pet la tomó en brazos y subió con ella al ascensor diciendo: Quieres dinero??
Giselle: Qué?? No seas estúpido!
Pet: La diversión ya terminó, el chico se va casar y créeme ( sonriendo ) que ya ni te recuerda.
Salieron del ascensor, la chica se sentía muy mal con todo esto, claramente había sido una más en
la lista del chico y todo lo maravilloso se quebraba brutalmente.
Pet informó a recepción que la chica no podía volver a entrar, mientras ella salía en silencio para
irse a vomitar cerca a un auto y luego irse a casa con mucho dolor, tristeza y rabia.
A los dos meses y cuando visiblemente su embarazo ya se notaba, decidió volver a buscarlo al
enterarse que grabaría un comercial en el centro de la ciudad. Sentía que él debía saber lo que
sucedía y que la ayudaría y la apoyaría.
La chica insistió prácticamente todo el día, Kevin no quería hablar con ella, hasta que fue tanto su
insistencia, que un productor la ayudó para que hablasen. Esta vez Kevin fue muy diferente a
cuando se conocieron.
Giselle: Insistí mucho porque quería decirte que…bueno…no sé qué sucedió, pero … embarazada …
vamos a tener un hijo.
Kevin: Vamos?...(se puso nervioso)…no, no, espera…cuanto tiempo tienes?
Giselle Desde que estuvimos juntos…lo dudas?
Kevin: Si…no…no lo sé…pero no puede ser, tú no puedes esperar un hijo mío, es imposible!!
Giselle: Imposible? De qué hablas?
Kevin: Fue muy especial lo que vivimos, pero ese hijo que esperas no es mío.
Giselle asombrada: No?? … por qué lo aseguras tanto? … yo .. haré un ADN!
Kevin: Me tengo que ir, deja con Tim tu dirección y teléfono.
El chico Salió con una enorme preocupación, mientras Giselle congelada, no podía creer lo que
había escuchado, él no era el mismo Kevin que había conocido, jamás pensó que la trataría así.
Llegó muy mal a casa, la casa que había arrendado junto a su amiga Soledad y que habian
separado de forma ordenada para no tener peleas. Cuando le contó, tampoco podía creer lo que
estaba pasando. Giselle optó por no saber más de él, se destruyó totalmente el amor que por él
sentía, el respeto, admiración, se había decepcionado totalmente, simplemente lucharía sola,
luego que naciera el bebé, lo pondría en una sala cuna para trabajar y juntar dinero para volver a
su país.
Además de Soledad, quien la ayudó bastante fue su otra amiga Katie, la misma con quien conoció
a Kevin aquella noche en la disco y con quien por mucho tiempo había compartido su fanatismo
hacia los chicos. En ella sintió bastante apoyo, aunque ella continuase siendo fan, sentía cierto
rechazo hacia Kevin, pero amaba a Howie.
En el límite del tiempo en que naciera la pequeña Ann, Giselle estaba muy nerviosa, tenía fecha
para el 7 de Diciembre, pero sabía que se le podía adelantar, como atrasar. Aún así, tenía todas
sus cosas listas para irse al hospital e intentaba estar relajada, asumiendo su soledad, dejando de
derramar lagrimas por un hombre que había roto su corazón en mil pedazos y de quien nunca más
quería volver a saber.
Por otro lado Kevin, no estaba totalmente indiferente, la chica no le había dejado ningún tipo de
información y quería saber de ella, jamás quiso tratarla mal, a Pet se le había pasado la mano con
su actitud y el chico actuaba así por miedo, pero estaba preocupado, por esto, que al ver a Katie,
amiga de Giselle afuera del hotel, esperando verlos, envió a Tim por ella, habló con ella y la
convenció de dejarlo hablar con Giselle, pidiéndole ayuda para el encuentro, el que se organizó en
su misma casa.
Para Giselle, había sido muy extraño la insistencia de su amiga para que fuera a su casa, aún así,
fue hasta allá donde luego de conversar y comer unas ricas galletas, sonó el timbre, Katie muy
nerviosa fue abrir, para cuando regresó sola, dijo.
Katie: Ehhh…
Giselle la interrumpió: Quien era que te dejó tan nerviosa?
Katie: Amiga…yo sé que todo esto de Kevin te ha tenido muy mal…pero la bebé que esperas, tiene
derecho a tener padre…y que este sepa que la pequeña Ann es su hija, su verdadera hija…
Kevin escondido tras la puerta estaba sorprendido al enterarse que su supuesto bebé era sexo
femenino y que su nombre era Ann como su madre y como la madre de la chica.
Giselle: De qué estás hablando? No es un tema que yo quiera hablar
Katie: Si, pero…no te molestes conmigo, él me convenció y …
Kevin apareció frente a ella, quien muy nerviosa y molesta comenzó a ponerse de pié.
Giselle: Ah no, no…ahora yo no quiero hablar contigo!
Kevin: Pero tenemos que hablar.
Giselle: Ya no!
Katie: Amiga escúchalo, él fue cruel, pero su obligación es ayudarte.
Giselle: Estás con él o conmigo!
Kevin: No se trata de eso…solo…tenemos que hablar.
Giselle no alcanzó a responder, cuando su amiga salió rápido para dejarlos solos, tras cerrar la
puerta.
Kevin: Intenta ponerte en mi lugar, esto es tan difícil para ti, como para mi.
Giselle aún molesta: Dificil para ti? No me hagas reir, ya me dejaste claro cual es la situación,
quien fui yo en tu vida, asique el jueguito terminó, no te buscaré asique vete por donde viniste!!
La chica comenzó a ordenar y guardar sus cosas para irse.
Kevin: Jamás ha sido un juego ( se acercó a ella ) … no quiero hacerte daño, pero necesito ese
exámen ADN cuando la niña nasca.
Giselle iba hacia la puerta para salir dijo: Aquella maldita noche que estuvimos juntos, fui sincera
y me entregué a ti ( comenzaron sus ojos a llenarse de lágrimas )…con el corazón, pero si no me
creiste y crees que soy una ramera, el problema es tuyo, yo no quiero volver a verte!
La chica salió muy molesta, mientras él con un nudo en la garganta dijo: Estaré siempre cerca de
ti…
La chica salió, simplemente lo odiaba.
Sin detenerse salió de la casa muy afectada, tomó un taxi y se fue a su casa, pero no sabía que
Kevin junto a Tim la seguían sigilosamente para que no se diera cuenta.
Kevin también estaba muy afectado, sentía la sinceridad de ella, la sintió aquella noche, pero
llevaba muchos años intentando tener hijos con su novia, hasta que luego de unos exámenes, se
enteró que no podía tenerlos, lo que le había provocado una tristeza enorme en su corazón, por
esto seguridad de que el bebé no era de él, pero la duda lo estaba matando.
Habló con su novia y futura esposa Gina, ella lo tomó pésimo, pero era tanto que lo amaba que lo
aceptó aunque muriera de celos por dentro, pero segura que esa hija no era de él.
CONTINUARA…
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