Caso práctico – consulta ante la DGI Partidas de Capacitación y su tratamiento fiscal Al comienzo de un nuevo año lectivo, es oportuno repasar el tratamiento a estas partidas, desde el punto de vista del empleado y del empleador Por Cra. Ma. del Carmen Sforza [email protected] Comentaremos una caso planteado recientemente, donde la DGI dio respuesta a un contribuyente en relación al tratamiento para el Impuesto a las Rentas de las Personas Físicas (IRPF) aplicable a las partidas por capacitación (Consulta 5.480 de febrero de 2011). En esta consulta, la persona manifiesta que trabaja en una empresa en el sector de finanzas, desempeñando tareas contables bajo el cargo de auxiliar administrativo contable, y además, señala que la empresa para la cual trabaja le paga la carrera de Contador Público en una Universidad privada. Consulta entonces a la DGI si dicha prestación que le realiza su empleador está gravada por el IRPF. Veremos ahora la respuesta que dio la DGI a este planteo, y repasaremos el tratamiento aplicable a la partida de capacitación también del punto de vista del empleador. Cuándo no tributan IRPF Cabe recordar que no tributan IRPF las partidas para cursos de capacitación, siempre que se cumplan las siguientes condiciones: a) que los cursos sean contratados y pagados por el empleador o exista rendición de cuentas; y b) dichos cursos estén inequívocamente vinculados a la actividad que el empleado desarrolla en la entidad empleadora. Esta exclusión se basa en el entendido que estos cursos no representan un “ingreso” para el trabajador, condición que debe cumplir una partida para que constituya renta del trabajo gravada por IRPF. En este sentido, es posible distinguir -por un lado- las partidas que el empleador entrega al trabajador por motivos vinculados al funcionamiento de la empresa, es decir, que dan satisfacción a un interés o necesidad de la misma, partidas que no representan un “ingreso” para el trabajador; de aquellas que se entregan para satisfacer una necesidad propia del trabajador, que éste tendría aún si no desarrollara actividades para la organización, las que sí representan un “ingreso”. Los cursos que el empleador abona porque mejoran o facilitan el desempeño del trabajador en la empresa satisfacen una necesidad de la organización, y por ende, no representan un “ingreso” para el empleado, si bien lo benefician. Por último, debemos tener presente que la exclusión de esta partida no comprende a las partidas otorgadas al dueño, socios o directores. En esta línea respondió la DGI al consultante, manifestando que estas partidas no están alcanzadas por el IRPF. Tratamiento del gasto en la liquidación del impuesto a la renta de la empresa En la situación planteada, tratándose de un gasto de la empresa, a efectos de analizar la deducibilidad del gasto, además de verificarse el cumplimiento de los requerimientos generales aplicables a todos los gastos de la empresa (que sean gastos devengados, necesarios para obtener y conservar la renta, y que se encuentren debidamente documentados), deberemos analizar la tributación de la contraparte, requerimiento introducido por el nuevo impuesto a las rentas de las empresas. La contraparte, una institución privada de enseñanza, en principio no tributará IRAE por estar comprendida en el artículo 69 de la Constitución, por lo que el gasto no resultaría deducible por no cumplir con este requerimiento. No obstante, fue establecida una excepción a esta regla, a través del artículo 42 del Decreto150/007, por lo que la empresa tiene permitido deducir este gasto. Por último, la empresa puede evaluar la posibilidad de computar el beneficio de deducir una vez y media (computar fiscalmente un 50% más del monto del gasto) el gasto por cursos efectuados por sus empleados en áreas prioritarias, definidas por el artículo 43º bis del Decreto Nº 150/007. Las áreas prioritarias fueron divididas en las áreas prioritarias sectoriales y las áreas prioritarias transversales. Las primeras comprenden exclusivamente a las cadenas agroindustriales, de producción de energía, la industria farmacéutica, el sector de prestación de servicios turísticos y el complejo de la industria audiovisual; y las segundas las tecnologías de la información y comunicaciones, la logística, la biotecnología, la nanotecnología y el manejo del medio ambiente. Encastre No tributan IRPF las partidas si los cursos son contratados por el empleador o existe rendición de cuentas; y están vinculados a la función del empleado Claves Situación planteada: una persona que trabaja en una empresa en el sector de finanzas, desempeñando tareas contables bajo el cargo de auxiliar administrativo contable. Capacitación: la empresa para la cual trabaja le paga la carrera de Contador Público en una Universidad privada. Pregunta: consulta a la DGI si dicha prestación que le realiza su empleador está gravada por el IRPF. Respuesta: la Administración le responde que no corresponde que tribute IRPF.