Boletín Febrero 2008

Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario – INPEC
Ministerio del Interior y de Justicia
República de Colombia
“Hacia una Nueva Cultura de los Derechos Humanos”
Boletín No.
Febrero de 2008
“CONVIVENCIA, RECONCILIACIÓN Y AUTONOMÍA*”
LA CONVIVENCIA
Todos los seres vivos somos sistemas
dinámicos en continua interacción con
nuestra circunstancia; interacciones
por lo general involucran otros seres
vivos y en particular otros seres
humanos1.
Los hombres son distintos, ven el
tiempo histórico según criterios
diferentes, aprecian bienes diversos,
hacen las mismas cosas de manera
diferente y planean y edifican el mundo
en que viven de acuerdo con sus ideas,
sus necesidades y sus conveniencias.
Se presentan como cultivadores de las
fuerzas de la naturaleza, cultivan no
sólo la tierra y los rebaños, sino sus
gestos, sus expresiones, su fisonomía,
los hábitos de vivienda, vestido y
alimentación; cultivan amistades, el
espíritu y las relaciones con entes
divinos.
El cultivar es un gesto profundamente
humano en cuanto es de cultura, hay un
culto inmerso en el gesto de cultivar de
la misma forma que todo gesto de
cultura manifiesta el cultivo de alguna
cosa2. Para vivir tenemos que admitir la
vida de los otros como un punto de
encuentro en el cual aparece la
libertad, la cual pertenece a nuestro
ser psíquico y espiritual3.
La acción de aceptación del otro como
un legítimo otro en la convivencia
define el dominio de las acciones del
amor; entender éste, como punto de
partida que configura lo humano es
fundamental, porque permite aceptar
que lo humano se configura en el vivir
y no preexiste.
No podemos acusar a nadie de no ser
como debería ser según nosotros,
porque el ser de determinada manera
dependerá de cómo y con quién vive y
de las circunstancias de ese vivir.
CONSIDERACIONES FINALES DE
LA CONVIVENCIA: En todo grupo
humano existe la necesidad de
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“Hacia una Nueva Cultura de los Derechos Humanos”
convivir o mejor de aprender a
convivir; la sociabilidad y la socialidad
son formas básicas de la naturaleza
humana
que
nos
ayudan
a
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conseguirlo . Vivir con otros no es
tarea fácil, pero más difícil todavía
es la convivencia diaria en el trabajo,
si no estamos preparados. El arma
más poderosa y eficiente que el
hombre posee es el lenguaje, porque
es con ella que nos comunicamos con
los otros5; así, una palabra puede
agradar, herir, convencer, estimular,
entristecer, instruir, engañar, alabar,
criticar o aborrecer a las personas a
quien sea dirigida; es con ella que nos
comunicamos con las personas y que
ellas se comunican con nosotros, o sea
que el lenguaje es el instrumento
esencial de la convivencia.
Marlene Montes, Enf., Ph.D. Profesora Emérita,
Directora Escuela de Enfermería, Facultad de
Salud, Universidad del Valle, Cali, Colombia.
REFERENCIAS
1. Maturana H. El sentido de lo humano.
Santiago; Ediciones Pedagógicas Chilenas S.A.,
1991. P. 264.
2. Crippa A. Mito e cultura. São Paulo; Convivio,
1975. P. 182.
3. Gadamer GH, Vogler P. Antropologia
filosófica. São Paulo; Editora Pedagogica
Universitaria Ltda (EPU); Editora Universidade
de São Paulo. Vol. 7, 1977. Pp. 235-42.
4. Fritzen SJ. Relaciones humanas
interpersonales. A sociabilidade. Editora Vozes
Ltda., 1987. Pp. 47.
5. Weil P. Relaciones humanas na familia, no
trabalho. Editora Vozes Ltda., 1992. Pp. 47.
El
concepto latino de convivencia
implica comulgar con el anfitrión,
comer del mismo plato. En tanto, el
concepto democrático de convivencia
se conforma con menos: se relaciona
con la tranquilidad y seguridad de los
ciudadanos; la aplicación de normas,
el acatamiento individual y colectivo
frente a su cumplimiento, el acuerdo
sobre principios mínimos de respeto a
la vida e integridad de las personas,
así como la utilización de mecanismos
de resolución de conflictos a través
del diálogo y la negociación.
Para distinguir los problemas de
convivencia, es necesario comprender
el concepto de grupo. Las relaciones
entre las personas se pueden
clasificar de acuerdo al grado de
conocimiento
mutuo
de
los
participantes en la relación y el grado
de compromiso en el sostenimiento
de la misma. Las relaciones entre las
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personas
se
clasifican
como
estar restringidos a la interacción
relaciones de socialización densa, es
social grupal.
decir, aquellas que se dan al interior
de un grupo, y las relaciones de
La convivencia puede ser entendida como la
socialización tenue, es decir aquellas
vida en común; se refiere a compartir
que se dan entre personas que no
regularmente unas ideas y un espacio común:
tienen
un
vínculo
grupal
Por
o supuesto se convive con la familia, los
intergrupales.
Un
individuo
se
compañeros de trabajo, los vecinos, pero
inserta en un grupo no en la
también se convive con las personas que
sociedad entera. Los grupos tienen
comparten ideas y un espacio público. En fin,
la capacidad de mediar entre el
la convivencia estaría limitada a las relaciones
individuo y la sociedad.
de socialización densa, es decir, a las
relaciones que se dan únicamente al interior
El primer Grupo, en el cual se inserta
del grupo.
el individuo, es la familia. En la familia
el individuo adquiere las primeras
Convivir, el acto de la relación, supone
reglas de conducta de la vida social.
correspondencia con la familia, con el
Luego vienen los grupos de amigos y
vecino, con el barrio, con la sociedad,
el
grupo
de
trabajo.
Las
corresponsabilidad que no puede
características de los grupos sociales
entenderse
sin
participar.
La
son: relativa constancia y continuidad,
participación ciudadana más allá de
organización basada en la distribución
recurso dialéctico de la retórica en la
de funciones entre los miembros
oratoria y la teoría, es el transporte
individuales
y
formación
de
colectivo idóneo para hacer el
tradiciones y hábitos en los casos de
itinerario, el viaje hasta el final del
mayor duración. La socialización
trayecto que nos haga llegar a la
puede entenderse como el proceso
ciudadanía plena.
mediante el cual un individuo se
inserta en un grupo para aprender sus
LA RECONCILIACIÓN
reglas y lenguaje; por tanto, los
s
necesario
diferenciar
la
procesos de socialización suelen
reconciliación desde el punto de vista
interpersonal y otro desde el punto
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de vista jurídico-político. En el
primer aspecto, estamos hablando de
reconocer
un
conflicto
social,
político, cotidiano, cultural, en el que
debemos socializar, desde un punto
de vista autocrítico, los elementos
que nos han llevado a una ruptura
como personas y como comunidad. Se
trata de hacer PACTOS que nos
lleven a recuperar la confianza y a
trazar caminos para fortalecer la
democracia y la sociedad como tal.
combatientes y el Estado, sino
también la sociedad civil. En el marco
de la violencia política, los Crímenes
de Guerra y los crímenes de Lesa
Humanidad, la reconciliación debe
estar supeditada a procesos de
verdad, justicia y reparación en el
que las víctimas interlocuten y
decidan.
“La reconciliación no puede considerarse
como indiferencia, ingenuidad, cobardía,
fuga de la realidad, carencia de
convicciones o falta de conciencia de su
dignidad. Por el contrario, es un acto de
valentía que busca superar situaciones
límite de ruptura; un acto que está
animado por una gran confianza en la
capacidad de cambio del otro. Peo es un
gesto que no admite, ni ser trivializado,
ni ser institucionalizado”.. *
muestra de soberanía, la plenitud de
poderes jurídicamente reconocidos
para ser responsables y dueños de lo
que hacen y dicen, es decir dueños de
si. La sociedad actual ha adquirido
herramientas que le han permitido
tener un papel protagónico, y hacer a
sus constituyentes más críticos y
proposititos.
*GIRALDO, Javier. Reflexiones sobre la
impunidad de los crímenes de lesa
humanidad. Guatemala. Noviembre,
1996
En el marco del conflicto armado, la
RECONCILIACIÓN y el perdón son
procesos posteriores a la firma de los
acuerdos de paz; en estos procesos
no
solo
deben
participar
los
LA AUTONOMÍA
La autonomía en las personas es una
Una sociedad autónoma es la que
niega la existencia de un fundamento
extrasocial a la ley y actúa en
consecuencia.
Desde
esta
perspectiva, la idea de autonomía
consiste, en última instancia, en la
existencia de sujetos que cuestionan
sus propias leyes y de sociedades que
cuestionen su propia institución. Esto
significa que sujetos y sociedad no
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“Hacia una Nueva Cultura de los Derechos Humanos”
sólo se auto dirijan, sino que se auto
instituyan continuamente, en tanto
los limites sean creados desde la
propia autonomía.
Un filósofo llamado Enmanuel Kant
afirmó que estamos saliendo de la
minoría de edad, es decir, de la
incapacidad de servirse del propio
entendimiento sin la dirección de un
otro. Uno mismo es responsable de
esta minoría de edad cuando la causa
de ella no yace en un defecto del
entendimiento, sino en la falta de
decisión y ánimo para servirse con
independencia de él, sin la conducción
de otra persona o grupo.
GRUPO DERECHOS HUMANOS
DIRECCIÓN GENERAL
INPEC.
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