El asma es una enfermedad crónica del sistema respiratorio caracterizada por vías aéreas hiperreactivas (es decir, un incremento en la respuesta bronco constrictora del árbol bronquial).1 Las vías aéreas más finas disminuyen ocasional y reversiblemente por contraerse su musculatura lisa o por ensanchamiento de su mucosa al inflamarse y producir mucosidad,2 por lo general en respuesta a uno o más factores desencadenantes3 como la exposición a un medio ambiente inadecuado (frío, húmedo o alergénico), el ejercicio o esfuerzo en pacientes híper-reactivos, o el estrés emocional. En los niños los desencadenantes más frecuentes son las enfermedades comunes como aquellas que causan el resfriado común. Los síntomas más característicos del asma son : - Disnea o dificultad para respirar, especialmente temprano en la mañana o en la noche. - Presencia de espasmos bronquiales, habitualmente acompañados de tos. - Rigidez torácica. - Secreciones mucosas. - Respiración sibilante. Estos episodios pueden ser desencadenados por ciertos factores: Los catarros y la gripe continuos así como otros trastornos que afectan a las vías respiratorias. Antecedentes de familiares asmáticos. El consumo de ciertos alimentos. Alérgenos: Polen, lana, polvo, etc. Irritantes y contaminantes que son transportados por el aire: Humo de cigarro, los cosméticos, las soluciones limpiadoras y los perfumes; los olores fuertes de los vapores de la gasolina o la pintura húmeda, así como el ozono. Variaciones meteorológicas: El frío o el aire seco a veces desencadena síntomas de asma en algunas personas, lo que también ocurre con el calor o la humedad extremos. El ejercicio o esfuerzo El estrés emocional. Consecuencias anatómicas Los tapones de moco comienzan a presentar espirales de epitelio desprendido –> espirales de Curschmann Aparecen abundantes eosinófilos (tipo de célula blanca) Cristales de Charcot-Leyden (acúmulos de cristaloides elaborados con las proteínas de las membranas de los eosinófilos) Cambios en los bronquios Engrosamiento de la membrana basal del epitelio bronquial Edema e infiltrados inflamatorios en las paredes bronquiales Hipertrofia de glándulas de la submucosa Hipertrofia del músculo liso bronquial, lo que traduce broncoconstricción prolongada que dificulta respirar