Documento 3156025

Anuncio
“adóro te devóte, latens deitas, te qui his formis vere látitas: tibi sur cor meum totum súbicit, qui te contémplans totum déficit”
Boletín Electrónico de Viva Jesús Sacramentado http://www.jesus-sacramentado.org - Año 2- Nº 24 - Octubre de 2007
GOCÉMONOS AMADO, Y VÁMONOS
A VER EN TU HERMOSURA.
Las palabras con las que iniciamos nuestra reflexión mensual están
inscritas en la canción 36, del Cántico Espiritual compuesto por el
santo místico español San Juan de la Cruz, quien en una hermosa y
rítmica poesía, ha delineado a modo de versos el itinerario de
transformación al que va siendo conducida el alma de los creyentes,
por la Gracia, hasta encontrarse con el autor y creador de la misma,
el “Amado” Dios, en donde la fuente misma de la vida y la
existencia desemboca.
Este proceso o camino de “transformación” por el que es llevado el
cristiano a la unión con Dios meta última de su existencia, es un
proceso, un camino de conversión, una vía de salvación, en donde el
mismo Dios como artista va esculpiendo en el alma la imagen y la
figura ultima de su propia obra de arte.
Es curioso que el santo español al hablar de esta transformación
experimentada desde lo más profundo y oculto del alma, señale que
su meta última es la imagen misma de Dios, y dice en boca de la
esposa “Vámonos a ver en tu hermosura” es decir en tu imagen
radiante y gloriosa, la misma declaración de la estrofa pone lo siguiente a modo de explicación de la estrofa
precedente:
“Hagamos de manera que, por medio de este ejercicio de amor ya dicho, lleguemos hasta vernos en tu hermosura en
la vida eterna, esto es: que de tal manera esté yo transformada en tu hermosura, que, siendo semejante en
hermosura, nos veamos entrambos en tu hermosura, teniendo ya tu misma hermosura; de manera que, mirando el
uno al otro, vea cada uno en el otro su hermosura, siendo la una y la del otro tu hermosura sola, absorta yo en tu
hermosura; y así te veré yo a ti en tu hermosura, y tú a mí en tu hermosura, y yo me veré en ti en tu hermosura, y tú
te verás en mí en tu hermosura; y así, parezca yo tú en tu hermosura, y parezcas tú yo en tu hermosura, y mi
hermosura sea tu hermosura y tu hermosura mi hermosura; y así, seré yo tú en tu hermosura, y serás tú yo en tu
hermosura, porque tu misma hermosura será mi hermosura; y así, nos veremos el uno al otro en tu hermosura”..
(CB 35,5)
Un filósofo moderno puso de moda una frase que ha calado muy bien entre la sociedad de nuestro tiempo, inclusive
ha convertido en refrán popular sobre la comida. “Somos lo que comemos” decían y dicen hoy en día nuestros
abuelos y abuelas. Y por que no, en cierta medida es valida esta afirmación, por lo menos sino en el campo físico si
en lo espiritual. “Somos lo que comemos” o por lo menos así debería ser; debemos convertirnos en otro Cristo como
lo afirma la frase de San Gregorio Nacianceno “Vosotros sois Cristo”.
Y es que no lo seremos de momento completamente como dice San Juan de la Cruz, si al menos lo somos en deseos,
este es el sentimiento que nos mueve a correr hacia las Aguas de la Vida, hacia el Pasto bendito en donde sólo el
Buen Pastor nos conduce, hacia su presencia en la Santísima Eucaristía.
Realizado por el Equipo Web Master de VIVA JESÚS SACRAMENTADO – Lcd. Rixio Portillo y Arq. Raymundo Portillo – Email: [email protected]
1
“adóro te devóte, latens deitas, te qui his formis vere látitas: tibi sur cor meum totum súbicit, qui te contémplans totum déficit”
Boletín Electrónico de Viva Jesús Sacramentado http://www.jesus-sacramentado.org - Año 2- Nº 24 - Octubre de 2007
Por eso en este mes de Octubre dedicado a la misiones y a la meditación contemplativa del Santo Rosario, sin duda
el mejor propósito será vivir nuestra fe y devoción eucarística con el vivo deseo de ser más consecuentes con la fe
que profesamos, para desear de verdad que aunque sea espiritualmente nos convirtamos en lo que comemos, es decir
en el mismo Jesús, y reflejar como en un espejo a nuestra generación la imagen Gloriosa de Cristo vencedor de la
muerte.
Pensemos por un breve instante en los miles de cristianos diseminados por todo el orbe de la tierra, los que pasan
calamidades, los que sufren persecuciones por causa de la fe, los que están en medio de las guerras, del hambre y de
la pobreza; a ellos podemos aplicarles las palabras de Nacianceno “Vosotros sois Cristo”, unámonos a este inmenso
coro de almas que claman delante del trono del Cordero, anhelando ver cumplidas ya las nupcias místicas, en donde
ya no sean muchos sino uno, pidiendo y celebrando en cada momento de vida, en cada instante de la existencia lo
que dice la esposa en el poema del santo español místico:
Gocémonos, Amado,
y vámonos a ver en tu hermosura
al monte o al collado,
do mana el agua pura;
entremos más adentro en la espesura.
Ojala que después de haber leído estas líneas, Dios haya encendido en lo profundo del alma la dulce Llama de Amor
Viva, y que conducida por esta imagen gloriosa entremos más adentro en la espesura de Cristo Eucaristía y vernos
reflejados en la infinita hermosura.
Así sea.
VERBUM DOMINI
«Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el viñador.
Todo sarmiento que en mí no da fruto, lo corta, y todo el que
da fruto, lo limpia, para que dé más fruto.
Vosotros estáis ya limpios gracias a la Palabra que os he anunciado.
Permaneced en mí, como yo en vosotros. Lo mismo que el
sarmiento no puede dar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid; así
tampoco vosotros si no permanecéis en mí.
Yo soy la vid; vosotros los sarmientos. El que permanece en mí y yo
en él, ése da mucho fruto; porque separados de mí no podéis hacer nada.
Si alguno no permanece en mí, es arrojado fuera, como el sarmiento,
y se seca; luego los recogen, los echan al fuego y arden.
Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid
lo que queráis y lo conseguiréis.
La gloria de mi Padre está en que deis mucho fruto, y seáis mis discípulos.
Como el Padre me amó, yo también os he amado a vosotros;
Realizado por el Equipo Web Master de VIVA JESÚS SACRAMENTADO – Lcd. Rixio Portillo y Arq. Raymundo Portillo – Email: [email protected]
2
“adóro te devóte, latens deitas, te qui his formis vere látitas: tibi sur cor meum totum súbicit, qui te contémplans totum déficit”
Boletín Electrónico de Viva Jesús Sacramentado http://www.jesus-sacramentado.org - Año 2- Nº 24 - Octubre de 2007
permaneced en mi amor.
Si guardáis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor, como
yo he guardado los mandamientos de mi Padre, y permanezco en su amor.
Os he dicho esto, para que mi gozo esté en vosotros, y vuestro gozo sea colmado.
Este es el mandamiento mío: que os améis los unos a los otros
como yo os he amado.
Nadie tiene mayor amor que el que da su vida por sus amigos.
Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando.
No os llamo ya siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su
amo; a vosotros os he llamado amigos, porque todo lo que he oído a mi
Padre os lo he dado a conocer.
No me habéis elegido vosotros a mí, sino que yo os he elegido a
vosotros, y os he destinado para que vayáis y deis fruto, y que vuestro fruto
permanezca; de modo que todo lo que pidáis al Padre en mi nombre os lo conceda. (Jn 15, 1-16)
VOX SUMMI PONTIFEX
"Yo les doy (a mis ovejas) la vida eterna y no perecerán
jamás" (Jn 10, 28). Así afirma Jesús, que poco antes había
dicho: "El buen pastor da su vida por las ovejas" (cf. Jn
10, 11). San Juan utiliza el verbo tithénai, ofrecer, que
repite en los versículos siguientes (15, 17 y 18);
encontramos este mismo verbo en el relato de la última
Cena, cuando Jesús "se quitó" sus vestidos y después los
"volvió a tomar" (cf. Jn 13, 4. 12). Está claro que de este
modo se quiere afirmar que el Redentor dispone con
absoluta libertad de su vida, de manera que puede darla y luego recobrarla libremente.
Cristo es el verdadero buen Pastor que dio su vida por las ovejas —por nosotros—, inmolándose en la cruz. Conoce
a sus ovejas y sus ovejas lo conocen a él, como el Padre lo conoce y él conoce al Padre (cf. Jn 10, 14-15). No se
trata de mero conocimiento intelectual, sino de una relación personal profunda; un conocimiento del corazón,
propio de quien ama y de quien es amado; de quien es fiel y de quien sabe que, a su vez, puede fiarse; un
conocimiento de amor, en virtud del cual el Pastor invita a los suyos a seguirlo, y que se manifiesta plenamente en el
don que les hace de la vida eterna (cf. Jn 10, 27-28).
Extracto de la Homilía pronunciada por el Santo Padre Benedicto XVI en la Basílica Vaticana 29 de abril de 2007.
Realizado por el Equipo Web Master de VIVA JESÚS SACRAMENTADO – Lcd. Rixio Portillo y Arq. Raymundo Portillo – Email: [email protected]
3
“adóro te devóte, latens deitas, te qui his formis vere látitas: tibi sur cor meum totum súbicit, qui te contémplans totum déficit”
Boletín Electrónico de Viva Jesús Sacramentado http://www.jesus-sacramentado.org - Año 2- Nº 24 - Octubre de 2007
EN TI VIVIMOS
NOS MOVEMOS Y EXISTIMOS.
ISTIMOS. (Hech 17,27)
A dos años desde que iniciamos este camino con nuestro Boletín
Electrónico Adóro te Devóte, y uno del grupo internacional de Oración
Panis Vivus, quisiéramos poder compartir con nuestros subscritores el
inmenso gozo que sentimos al ver que todos los esfuerzos realizados en
nuestro sitio web, tienen como fin último y único en hacer vivas estas
palabras de los Hechos de los Apóstoles.
Es únicamente en Jesús, Vivo y Resucitado en la Iglesia, en donde
encontramos la vida, en donde nos movemos y existimos para si, toda
nuestra existencia se orienta a vivir con nuestro corazón inquieto, como
lo decía San Agustín hasta que no descansa en Él.
Durante este tiempo hemos podido, vivir esta experiencia con más de
200 subscritores de nuestro Boletín y con más 50 hermanos que
diseminados por toda la geografía universal se unen con sus voces
orantes y silenciosas por las más de 500 intenciones que han sido
enviadas durante todo este tiempo a nuestro portal, comprometidos no
solo a rezar por ellas sino también en vivir muchas veces las
preocupaciones y angustias de tantos que aunque no los conozcamos, son
parte de nuestra esencia misma de Iglesia.
Por eso solo en Él, en Jesús, podemos decir que somos, nos movemos y
existimos, sólo en Él podemos encontrar esa hermosura que no proviene
de nosotros si no de Él que con su infinito amor y misericordia nos hace
día a día poder entregar nuestras súplicas en medio de nuestras vidas,
como ofrenda agradable a sus ojos.
Les repetimos pues queridos supscritores las palabras que les enviamos
en Diciembre para nuestra salutación en esa oportunidad “A ustedes
queridos hermanos de todo el mundo, a aquellos que no conocemos,
pero que sentimos como nuestros por que Cristo los ha amado y ha dado
su vida por ustedes, les enviamos un sincero y afectuoso saludo, nuestra
gratitud y respeto”.
Viva Jesús Sacramentado, sea por siempre bendito y adorado.
Realizado por el Equipo Web Master de VIVA JESÚS SACRAMENTADO – Lcd. Rixio Portillo y Arq. Raymundo Portillo – Email: [email protected]
4
Descargar