. COCEPTO 10348 DEL 11 DE FEBRERO DE 1999 DIRECCION DE IMPUESTOS Y ADUANAS NACIONALES BOGOTÁ GLORIA MARÍA VELASQUEZ V Transversal 5a A No. 45-259 Medellín Ref: Consulta radicado número 77481 de 10/11/1998 Recibido en este despacho el oficio mencionado, nos permitimos manifestarte que de acuerdo con lo establecido en el artículo 13 del Decretó 1725 de 1997 y concordante con el literal b) del artículo 17 de la Resolución 3366 de 1997 originada en la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales, este Despacho es competente para absolver en sentido general las consultas escritas que se formulen sobre interpretación y aplicación de las normas tributarias nacionales. PROBLEMA JURÍDICO 1 ¿El reembolso de gastos causa impuesto sobre las ventas? TESIS El reembolso de gastos no causa impuesto sobre las ventas INTERPRETACIÓN Sobre el punto en particular, este Despacho se pronunció en el concepto especial del impuesto sobre las ventas No. 90564 de noviembre 25 de 1998, en el cual expresó: "El artículo 420 del Estatuto Tributario señala como hechos generadores del impuesto sobre las ventas la venta de bienes corporales muebles que no se encuentren excluidos, la prestación de servicios en el territorio nacional salvo que conforme a lo previsto en el artículo 476 ibídem se hallen expresamente excluidos y las importaciones.” De acuerdo con lo previsto en las anteriores disposiciones, el reembolso de gastos no constituye hecho generador del impuesto sobre las ventas. Se agrega a lo anterior que para el reembolso de gastos no se requiere de expedición de factura. Del texto del artículo 615 del Estatuto Tributario que señala las personas que deben expedir factura o documento equivalente se infiere que debe expedirse en operaciones de comercio y en prestación de servicios. No obstante; en los casos de contratos de consultoría e interventoría el impuesto sobre las ventas, se causa sobre el valor total percibido por el contratista. PROBLEMA JURÍDICO 2 Una sociedad disuelta y en estado de liquidación, debe liquidar renta presuntiva por el lapso comprendido entre el inicio del año gravable y el momento en qué se decreta la disolución? TESIS Las sociedades en proceso de liquidación están excluidas de la renta presuntiva. . INTERPRETACIÓN Ha sido doctrina reiterada de este Despacho el señalar que las sociedades en proceso de liquidación están excluidas del cálculo de la renta presuntiva; mediante concepto 88324 de 1996 expresó lo relacionado con este punto, el cual por constituir interpretación oficial al respecto y contener solución a su inquietud, se anexa para mayor ilustración. Baste señalar que el hecho de no calcular la renta presuntiva es independiente de la obligación de declarar por fracción de año, de acuerdo con las precisiones que al respecto trae el artículo 595 del Estatuto Tributario, que igualmente es analizado en el concepto en comento. PROBLEMA JURÍDICO 3 Puede una sociedad quedarse en estado de disolución en forma indefinida y no volver a calcular renta presuntiva? INTERPRETACIÓN Para efectos de abordar lo atinente a la disolución y liquidación de las sociedades, es menester adentrarse en el estudio de la legislación comercial que regula este tema, a fin de determinar si al tenor de dicha legislación las sociedades pueden permanecer indefinidamente en estado de disolución y liquidación; por no ser de competencia de esta Oficina, no es del caso entrar a analizar En materia tributaria como se señaló en el punto anterior, las sociedades en proceso de liquidación están excluidas de la renta presuntiva. Una sociedad que no ha sido disuelta y por lo tanto no ha entrado en proceso de liquidación, debe liquidar renta presuntiva, pues la excepción para aplicarla sólo cobija en este caso a las que se encuentran en proceso de liquidación (artículo 191 E.T.) Por otra parte, se reitera que el artículo 595 se refiere al período fiscal cuando hay liquidación en el año, para indicar las fechas en las cuales este concluye, tema que como se señaló está tratado en el concepto en comento. PROBLEMA JURÍDICO ¿Un contribuyente que hizo uso del saneamiento de bienes raíces consagrado en el artículo 80 de la ley 223 de 1995, puede para efectos de la enajenación de los bienes hacer caso omiso del saneamiento teniendo en cuenta que si el costo fiscal incluye el saneamiento se generaría una pérdida? TESIS Si en la declaración de renta del año de 1995, el contribuyente decidió declarar sus bienes raíces ajustándolos a su valor comercial (valor patrimonial - costo fiscal), no podrá enajenarlos por un valor inferior a su costo fiscal. INTERPRETACIÓN Prevé en artículo 90-2 del Estatuto Tributario, relativo al saneamiento de bienes raíces, que para efectos de lo previsto en el artículo 90-1 ib. (valor de enajenación de bienes raíces y para los demás fines del impuesto a la renta y complementarios), en las declaraciones de renta y complementarios del año gravable de 1995, los contribuyentes podrán ajustar al valor comercial los bienes raíces poseídos a 31 de diciembre de dicho año. . El valor correspondiente a la diferencia entre el costo fiscal ajustado y el valor comercial en la fecha antes mencionada no generará renta por diferencia patrimonial, ni ocasionará sanciones, ni será objeto de requerimiento especial, ni de liquidación de revisión ni de aforo. Las personas naturales y jurídicas podrán tomar el ajuste que se origina por la aplicación de los artículos 72 y 73 del Estatuto Tributario para determinar el costo fiscal ajustado a 31 de diciembre de 1995, el cual servirá como base para compararlo con el valor comercial. Por tanto, ajustado al valor comercial del bien en la declaración de renta del año gravable de 1995, este será el valor patrimonial, para efectos de la declaración del año gravable de 1996 y será base de los ajustes por inflación si el contribuyente está obligado a efectuarlos. Siendo así, por efecto del saneamiento será objeto de los beneficios previstos en los incisos 2, 4 y 5 del artículo 90-2 únicamente la diferencia entre el costo fiscal ajustado y el valor comercial del bien objeto del saneamiento. Los contribuyentes en sus declaraciones de renta y complementarios pueden llevar como valor patrimonial fiscal el valor comercial de sus bienes raíces poseídos al 31 de diciembre de ese año (95), el cual constituye la base para los futuros ajustes por inflación en los años gravables subsiguientes. Dicho valor comercial declarado y ajustado en los años siguientes debe ser tenido en cuenta para los efectos de determinar el costo fiscal del bien raíz al momento de su venta. (Art. 90-2 Estatuto Tributario). Ahora bien, el inciso 4o. del artículo 90 del E.T. dispone que tratándose de la enajenación de bienes raíces no se aceptara un precio inferior al costo fiscal, ni al avaluó catastral, ni al autoavalúo efectuado para el cálculo del impuesto predial unificado. Así las cosas, si en la declaración de renta del año de 1995, el contribuyente decide declarar sus bienes raíces ajustándolos a su valor comercial (valor patrimonial - costo fiscal), entonces no podrá enajenados por un valor inferior a su costo fiscal constituido en este caso por el valor comercial del inmueble. Ello por cuanto una vez acogido el beneficio del saneamiento, no puede el contribuyente pretender su desconocimiento para efectos de la enajenación de dicho bien, y menos aún si ha precluido el término señalado en el artículo 588 para la corrección voluntaria de las declaraciones. PROBLEMA JURÍDICO ¿Cuál es la norma aplicable en el caso de la contabilización de los costos, deducciones e impuestos descontables por parte del mandante? TESIS Para efectos de la contabilización de costos, deducciones o impuestos descontables o devoluciones por parte del mandante, deberán tenerse en cuenta las disposiciones del decreto 1514 de 1998. INTERPRETACIÓN Señalaba el artículo 34 del decreto 836 de 1991 que "En los contratos de administración delegada, contratante contabilizará los ingresos, costos, deducciones y retenciones en la fuente realizados efectuados por el administrador delegado, con base en la información que éste le suministre contratante, la cual deberá reposar en la contabilidad del contratante para ser exhibida cuando administración tributaria lo exija". el o al la Dicha disposición fue recogida por el artículo 29 del decreto 3050 de 1997 que al reglamentar la retención en la fuente en el contrato de mandato (incluida la Administración delegada), señaló frente al tema referido :"...EI mandante declarará los ingresos y solicitará los respectivos costos, deducciones, impuestos descontables y retenciones en la fuente, según la información que le suministre el mandatario, . el cual deberá identificar en su contabilidad los ingresos recibidos para el mandante y los pagos y retenciones efectuadas por cuenta de éste..." Posteriormente, el decreto 1514 de 1998 en el artículo 3º al referirse a la facturación en el mandato modificó la anterior disposición indicando "...Para efectos de soportar los respectivos costos, deducciones o impuestos descontables, o devoluciones a que tenga derecho el mandante, el mandatario deberá expedir al mandante una certificación donde se consigne la cuantía y concepto de éstos, la cual debe ser avalada por contador público o revisor fiscal, según las disposiciones legales vigentes sobre la materia..". Así, la norma vigente es la contenida en el artículo 3º del Decreto 1514 de 1998, la cual deberá ser tenida en cuenta en los contratos de administración delegada en el entendido en que éstos constituyen una forma del contrato del mandato. Por otra parte, en lo que respecta a la obligación de suministrar información conforme lo previsto en los artículos 631 y siguientes del Estatuto Tributario, habrán de analizarse las resoluciones que anualmente se expiden, en donde se precisan claramente los sujetos obligados al cumplimiento de la misma. Atentamente, (Fdo) CAMILO VILLARREAL GUERRA, Delegado División de Doctrina Tributaria. Oficina Jurídica.