aquì - Tributo postumo a Juan Ramirez.

Anuncio
TRINIDAD DE RELLENO.
Por Juan Ramírez.
“Delante de ellos los monos se la sacudían y lanzaban chorros de
porquería blanca. La porquería se escurría por el interior de las
ventanas de plástico. Ya había restos de porquería blanca antigua,
adherida a las ventanas y tan seca que ya era casi transparente.
-
Eliminas su lucha por la supervivencia y esto es lo que obtienes a
cambio – dijo la mamaíta”.
Chuck Palahniuk - Asfixia.
I
DEL VENGA PA'CA:
INHABITANTES.
1. ENUMERANDO.
Ágata se sentó en el piso. Yo escuchaba el reloj como si estuviera
detrás de mi oído.
- Me refiero a qué cuánto tiempo, realmente. De cuánto disponemos en
verdad - digo - últimamente siento como si todo pasara muy rápido. O
demasiado lento. ¿Sabes cuánto gastamos en un paradero de micro?
Siete días al año. No estoy hueviando.
Diego se dio vuelta. Eran las doce, faltaba un cuarto de hora para que
terminara el recreo.
En alguna parte de la tierra caía un avión de papel.
- O sea, ¿cuántas veces has podido asegurar que estás vivo? Realmente
vivo, me refiero - Diego miraba a Ágata - No creo que muchas. Para mí
que se nos han agotado los recursos. Que el mundo se está agotando, y
ahora busca la autodestrucción. Ya no vemos un atardecer con los
mismos ojos que en el siglo XV. Tenemos suficiente de la misma
basura. Y lo que nos ha tocado por esencia temporal no nos satisface.
Queremos consumir, pero me da la sensación de que estamos
atrapados en un segundo interminable con demasiadas cosas que
desechar.
Ágata se toca el borde de los labios.
- Mauricio - dime - cacha -.
Julia dormía.
- Qué ni ahí - dice Diego.
- Es tan ni ahí - digo yo -.
Según Diego, el 30% de las personas busca los karmas de palahniuk
para sentirse menos defectuosa. Pero no les sale. Están en el lado
equivocado del mundo.
Enumerando:
- Imagen perfecta.
- Billetera perfecta.
- Vida social perfecta.
Esa era Julia. La ni ahí. Toda su vida había sido una matea sin
capacidad de perfección. Y ahora se había disociado del sentido
académico para redimirse con el social. Y de paso pololear con un
imbécil, para caerle bien a unos cuantos tarados.
- Es una persona tan sincera - dice Diego - no le tiene miedo al fracaso
-.
- Esa es talla pesada, ¿no? -.
Ágata se acurruca en el piso. Mira a Julia y luego me mira a mi. Diego
juega a vaciar un cigarro.
- Da muy mala imagen.
- Me importa un pito - dice Diego - ves, juegas con mi inconsciente.
A las 8 horas, Lenguaje. De 9 cuarenta a diez un recreo. Luego Historia.
Luego física. Después de física, nos situamos en el presente.
Es como una mala fábula.
La gente hace horarios para repetirse a sí misma. A la gente no le gusta
experimentar lo desconocido. Salirse de cualquier esquema
preestablecido es en términos sergilaguianos, irse del dos y comenzar a
hacer verdadera televisión. Una verdadera mierda.
- Por favor mírala - Dice Diego - qué perfecta, Julia, qué culo -
Enumerando:
- celulitis.
- Cáncer a la próstata.
- Injertos de piel.
- Ampoyas.
- Es tan atractiva -.
- No huevees. A ti te gusta.
- Me gustan las prietas. No por eso voy a follarme una.
Aparte el miedo a que quede preñada, dice Diego.
Miro a Ágata. Ella se esconde el pelo detrás de la oreja. Lo hace con dos
dedos.
- Mírala - dice Diego - sólo mírala un poco.
Suena el timbre. Matemáticas. Es el horario, una y otra vez.
Alguien pisa un avión de papel.
2. CARLA A RATOS.
La estética está muerta. Las relaciones de pareja están muertas.
Todo lo que pudimos crear ya nos lo enseñó la televisión.
Los dragones siempre han existido. Los trolls, orcos, enanos, hobbits;
no son imaginación, existieron y ya están muertos. Volarte bailando
gótico, enamorarte de tu profesora, jugar fútbol; ya se inventó, tus
padres lo terminaron.
Esto me cuenta Diego cuando vamos pasando por Paula Jaraquemada.
La cosa no es qué tanta novedad podemos dar a la ciencia. Al arte. A
cualquier institución conceptual.
¿Cuántos israelitas estoy matando por fumar este cigarro? ¿Cuántos
pakistaníes estoy mandando a la guerra por tomarme una cocacola?
¿Cuántos negros estoy ahorcando por hacerme un pito? ¿Cuántas veces
he sentido culpa cuando me como un bistec? ¿pensado en mi madre?
¿cuántas veces me he masturbado con una persona, sabiendo que al
día siguiente nuestra relación va a cambiar? Pero hay otro límite. La
cosa es cuánto podemos entretenernos sin codepender. La adicción es
imposible de cambiar. Estamos demasiado contentos sabiendo que
controlamos el día de nuestra muerte. Demasiado contentos de
controlar nuestro destino.
Caminamos por Blest Gana. Es de noche, y vamos a buscar a Javiera
Bustamante para irnos al teatro carrera. Son las 11 cuarenta y cinco.
La estética esta muerta.
Javiera es gótica.
Diego anda con un traje negro y una corbata beige. Se ha pintado rayas
en el rostro, y lleva una camisa a cuadros porque según él "el día que
mueras y sepas la verdad, te darás cuenta de que todo el mundo
estuvo hecho de cuadros".
El negro es un color especialmente cuadrado. Es lo mismo.
Javiera abre la puerta. Nos dice que esperemos un poco.
Noticia de último momento: Javiera Bustamante necesita arreglarse las
uñas.
Cuando tenía ocho años mis padres se separaron. Desde entonces que
no creo en los ránkings. Porque no creo en los valores. Desde entonces
que mi vida es enumeración. Listas de cosas. Números que le den
sentido a lo abstracto.
Para ejercicio de esto, Javiera Bustamante es:
- piel.
- Senos
- Labios
- Pelo; uñas; lubricación.
Manos que abren una reja.
- Hola, Javi - dice Diego.
No sé cómo se llama esta calle, pero avanzamos por ella.
- ¿La Marce? ¿La Camila? -.
- Sabí que hoy día llamé a la Marce, y me dijo una wea' como que iba a
ver al papá y que por eso no podía ir hoy día - Dice Javiera - igual lo
pensé un poco, pero le dije que claro, o sea, no podía decirle que no le
creía y mandarla a la mierda y si era verdad.
Prendo un cigarro.
- Después llamé a la Camila y me dijo que si no iba la Marce, que no
podía ir ella. Aparte que no tenía plata y wea'. Yo le dije que cómo,
tenía que ir. Y ella dijo que no podía, pero yo le dije que iba a estar el
Diego, que demás - suficiente para excluirme a mi de la conversación,
¿no? - pero dijo que mejor no. Después llamé a la Marce y parece que
no estaba. Llamé a la casa del papá y no había llegado. La weona había
salido o qué se yo. Me dijeron que llegaba a las diez. Llamé a las diez, y
me dijeron que todavía no estaba.
- Ah, o sea, nos cagaron - Dice Diego -.
- Si po, y más encima yo tengo que hacer el trabajo con ellas. O sea, yo
fui a Suecia cachai, na que ver que me caguen así. Y tenemos que
hacer el trabajo pal viernes, la wea es que quizás podíamos pedirle
plazo, pero ni cagando.
Se me acaba el cigarro. Maldición.
Tomamos micro en tobalaba.
Cuando subimos, las manos de Javiera Bustamante tocan
accidentalmente mi trasero.
Enumerando cosas que no hacer:
- sonreír.
- Devolvérsela.
- Eyacularme en los pantalones.
Estamos sentados y Javiera conversa con Diego. Yo observo la ventana.
El reflejo. Lo que hay atrás. En realidad me da lo mismo. Es el hecho de
observar. De abstraer.
Javiera extiende sus dedos y habla con Diego.
Noticia de último momento: A Javiera Bustamante se le ha roto una
uña.
No sé de qué hablan. En realidad me da lo mismo. La ventana es mi
amiga. Le tengo ganas a la ventana.
En algún punto Javiera me sonríe y me pregunta cómo estoy. Esto
sucede cuando Diego ha dejado de hablar.
- ¿Cómo estai, Mauri? -.
- Bien po, Javi -.
- ¿Qué contai? -.
- Na po, aquí estoy-.
Su sonrisa falsa y sus ojos desorbitados me indican que ya no sabe qué
decir.
- Y tú, ¿qué contay?-.
- Aquí estoy po, lo mismo que tú -.
Espacio en blanco.
- Me encantan las iglesias - dice Javiera Bustamante -.
Espacio en blanco.
- Hay una catedral, o sea, en realidad una iglesia, por ahí por maturana.
Es hermosa. Una vez le tomé una foto - dice Javiera -.
- ¿Y siempre les tomai fotos? - cacha el recurso, cacha la pregunta
hueona.
- Sí, de hecho, ahora quiero pegar esas fotos en mi pieza. Pero no
tengo como ampliarlas - Pero podí pegarlas como están en tu pieza. Y haces un mosaico -.
- Es que una vez hice uno. Pegué muchas fotos chicas en mi pared.
Pero me aburrió -.
Espacio en blanco. Puta que ando hueón.
- ¿Cachai un cuadro que es como una terraza? - dice Javiera.
- No sé. Pero cómo es -.
- Es como una terraza, y una calle, y está de noche. Y es como
impresionista.
- Sí, creo que lo cacho.
- Me encanta ese cuadro, ese es el que le regalé a mi papá pal día del
padre - ¡he ahí el significado del espacio en blanco número 3! ¡si! -.
- ¿Y qué tal? -.
- No sé, onda tus papás siempre te dicen que está bacán. Mi mamá
estaba ohh qué hermoso cuadro, es la pintura más hermosa que he
visto en mi vida. Pero igual yo no la encuentro tan bacán. Me gusta
porque me recuerda al extraño mundo de Jack.
- ¿y por qué no hací eso, y pintai un cuadro de…? -.
- ¡Sí! Eso podría haber hecho, pintar un cuadro del mundo de jack.
Pucha. - o de una iglesia en tu pared, pero no importa -.
Noticia de último momento: El escote de Javiera muestra sus senos
rebotando.
Nos bajamos pasados del teatro carrera. Casi en la Blondie. La noche
cubre Santiago, excepto por las luces y por las tiendas abiertas. La
noche estética. La noche top. La maldita noche adicta y de tetas
grandes.
- Qué hermoso - digo, pensando en la hernia sangrante del próximo
irakí que mate al prender un cigarro.
"MACABEÍSMO ANÓNIMO ORGANIZADO (MAO):
Primeros seis sencillos pasos para dejar de ser macabeo:
1.- Haga una lista de todas las personas que le han gustado.
2.- Establezca una relación entre ellas, y todas las enfermedades
venéreas existentes.
3.- Deje de ser pasivo. Vuélvase recreativo. Para esto, repítase todas
las mañanas frente al espejo "soy una máquina de historias. Toda
realidad pasa por mi".
4.- Nunca, pero nunca diga piropos. A nadie. No importando cuán bien
le caiga.
5.- Tome dos pastillas de seconal en las noches. Deje de cortarse el
pelo. Véase al espejo como si fuera Auster.
6.- Tenga identidad y reprodúzcala. Preferentemente en ironías
inconclusas. En cualquier caso, por nada del mundo se vuelva
vulnerable. Usted debe decidir su destino. El club de la pelea estaba
equivocado. Nadie ahí fue macabeo".
3. UN VERANO ES UN INVIERNO ES UN VERANO.
Y caminar por las calles
Porque
La
Humanidad
Es:
- Cartílago roído.
- Piel ampoyada.
- Neurotransmisores inconexos.
Ágata dice: te estás poniendo demasiado adolescente.
Y el verano es un infierno: dice ágata.
Y Chile es bulímico.
Caminamos. Diego nos cuenta de la otra vez, con el rocinante. Que el
rocinante se tomó como cinco chelas. Que güitreó en la cama. Que
recostó su cabeza en el almohadón, durmiendo con su propio vómito. Y
despertó con la cabeza pegada.
Todo esto me suena a un cuento de Donoso. Como si Donoso pudiera
hacer relatos cortos.
Ágata dice: estoy en el séptimo cielo.
Chile es narcotraficante: dice Ágata.
Y tengo la sensación de que vamos a algún lado.
Santiago no es un nombre suficiente. No puedes usar a Santiago como
usarías a Chipewea, a Oakland, a Wyoming. No es la ciudad de la que
hablan los poetas. No es un cuento corto para una pared en el metro.
Coupland no llamaría a Santiago tratando de invocar a los grateful
dead.
- ¿Los grateful? - le digo a Diego - El otro día leí que tenían algo que ver
con el ciberpunk -.
- Los grateful inventaron todo.
Enumerando:
- Las tapas de la bebida de comida rápida.
- Drogarse con manjar.
- Enrique Lihn.
Los Grateful inventaron a Enrique Lihn.
- ¿Y eso qué me importa? -.
- Banco Bhiff es un consolador -.
- ¿No era otro banco? -.
- En fin -.
Caminamos. Caminamos un poco más.
Ahora Diego le está contando el rollo de que si no te lavas las manos,
en alguna parte del mundo alguien inicia una revolución.
- Es una historia verdadera. Es la cochinada, lo impregnado; a eso
necesitamos sujetarnos. Alguien está lavando el agua por ti. Alguien
está tirando tus colillas de cigarro al basurero. Alguien está mojando tu
ropa, luego referirse al momento uno. Alguien te está preparando la
comida. Alguien se está identificando con lo que dices, y se prepara, te
roba la actividad. No tengas amigos. No te bañes. Es el secreto de la
iluminación - .
Y todos los perdedores nos fuimos al cielo.
4. INFORNOGRAFÍA.
"Se perdió la elegancia".
El esposo mea con la puerta abierta.
"Se perdió la niñez".
El niñito cuico se jala un psicotrópico. Le corre mano a la nana. Intenta
suicidarse con el cable de la aspiradora.
"Se perdió el brillo"
Una panorámica de todos los bosques talados, de los campos de
residuos nucleares; todos los mapuches en chile; todos los pobres con
sarna del mundo. Con hijos que no los quieren. Con un paso en la
tumba de los que nunca aparecieron en televisión.
Un tenista sonríe y dice: "yo también uso a Tu Hermana".
"La basura y la literatura. Y la literatura. Y Tu Hermana".
Este es mi proyecto para publicidad en lenguaje.
Este es mi sueño post-apocalíptico.
- Asume el rojo - dice Diego -.
Estoy sentado, con los brazos en mi pupitre, y la cabeza entre los
brazos.
- Ayer en el trece dieron un programa sobre la mafia, la venta de
marihuana y qué se yo, puras weas - dice Diego - buenos datos, en
cualquier caso.
- En Chile casi no hay mafia -.
- ¿Tiene penita? - dice Ágata -.
- A veces me da la sensación - dice Diego - que entre todos, nos
estamos fumando. Cachai. Onda que mientras yo te hablo y te cuento
que tengo un padrastro en España o una enfermedad terminal, tú lo
que estás haciendo no es escucharme. Tú tienes los labios en mi filtro.
Y cada vez que te tiro un pulmón seco de feto fermentado, me estoy
agotando.
Hay toda clase de clasificaciones, dice Diego. Algunos somos cogollo.
Otros, paraguas. Existen también los yerbis, los belmont light, y los
viceroy azul sin filtro.
- ¿Qué clase de cigarro son los grunge? -.
- Los grunge son marlboro, compadre.
Suena el timbre. Quedan cuatro horas de extender el tiempo.
- Cacha, la Javiera está hablando con el Palominos -.
- ¿El Palos de Mino? Media noticia po hueón.
- Ya po, hueón, para de pisarme el pelo - dice Pablo -.
Pablo está acostado en el piso. Esta jugando Pokemón.
- ¿Qué se siente entretenerse por abajo? - le dice Diego -.
- Pregúntale a tu madre.
El profesor se va de la sala. Inglés nunca fue suficiente. Nada es
suficiente.
Es la revolución gestándose desde la basura.
- Y tu hermana - dice Diego -.
5. Y EL PRESENTE.
8 años.- Te convences de que la vida es una mierda.
10 años.- Endogenización, certificados médicos, enamorarse por
deporte; todo ese rollo.
12 años.- Masturbación, escritura por sobre literatura; satori; Gibson;
tu madre.
14 años.- Primera etapa menstrual de desintoxicación masista. Y
reconciliación graduada.
15 años.- Algo sobre algo. No remitirse a tu madre.
16 años.- Teleserie del 7.
Y el presente.
Viernes es el día de desintoxicación masista. Cuando con el Diego
conversamos las pendejadas más gritadas e imbéciles que se nos
puedan ocurrir. Sólo por deporte. Para volvernos menos y tener más.
Para sentirnos cerca del vacío. Para perder cualquier clase de
popularidad con nuestros congéneres.
Diego abre bien la boca y se prepara para gritar la primera maravilla.
- ¡¡¡¿¿¿Sabías que las mujeres cagan???!!! - dice Diego -.
- ¿En serio? No creo, ¿en qué diario salió? -.
- En ninguno.
- ¿En la Paula? ¿En la cosas? -.
- Nooooo -.
- ¿Y en algún libro seguramente? Obvio que escrito por mujeres -.
- No, bueno, creo que me he equivocado -.
Cuando los extraterrestres acaben con nuestra civilización y busquen en
la reseña histórica la naturaleza de la humanidad, las mujeres jamás
habrán cagado. Y como los alien son todos feministas, lo más probable
es que no le crean a Martin Amis.
Tomo aire y me preparo mentalmente:
- ¡¡¡¿¿¿Sabías que Pablo Neruda era nazi y se culió a Skármeta pa que
le hiciera el favor del postino???!! -.
- ¡¡¡¿¿¿ Sabías que Violeta Parra se suicidó por se dio cuenta de que
cantaba puras weas???!!! -.
- ¡¡¡¿¿¿ Sabías que Ricardo Arjona se mira todas las mañanas al espejo
y se masturba???!!! -.
- ¡¡¡¿¿¿ Sabías que Cortázar murió de Sida y tenía de prostituto a todo
el realismo mágico???!!! -.
Somos las cajas vacías de un edificio lleno de mierda. Somos el residuo
de cada cuenta decimal de cada banco de cada maldito país. No
creemos nada de esto. Nada de esto es sentido. Hemos perdido fe en la
identidad social. Hemos perdido fe en lo que somos para nadie. Somos
nada. Creemos en nada.
Los pobres que ha sido millonarios y emprendedores. Los irakíes
conchatumadriados que mueren por el islam en un avión hacia ninguna
parte. Cada cristiano matando a una bruja. Cada soldado realmente fiel,
realmente sincero. Todos ellos creyeron en algo.
Lo que hacemos es salvar al mundo.
- ¡¡¡¿¿¿ Y sabías que el piyama de Julia es un tanga???!!! -.
- Uuughhh - dice Diego.
"Jen era un mono
Y dawson's creek era una mierda
Nosotros escuchábamos
Las voces chillonas. El canto imbécil. La parte pragmática.
Buscar: en bajada
de ir en bajada
El computador prendido y las voces
Del programita imbécil, ese programa que
Ves en las noches, cuando no queda más que poner
Y has preparado una malta con huevo, y estás con una amiga.
Y mañana tienes que estudiar.
¿Y qué es mañana?
- No sé -
Dijo Daniela, jalándose un psicotrópico".
6. DESTRUIR TODOS LOS SEMÁFOROS.
Nos molesta:
La cara que pones cuando te hablamos de conformidad.
Nos molesta la estúpida cara que pones,
Cuando te hablamos
De conformidad.
- Y cuando te rascas la nariz, fascista culiao -.
- Cuando te rascas tu puta nariz - dice Ágata y se remanga el polerón -.
Nos molesta tu nariz regordeta y alimentada. Los pelos de tu puta
nariz. Las espinillas que tuviste de adolescente. Los chancros purulentos
que te saldrán en las fosas. Los escupitajos agudos que has inspirado
de tu
Gorda
Y estúpida
Nariz.
Es el semáforo. Pero también es Sabat. Lagos. Sergio Lagos y Carla
Ballero. Sebastián y Ballero. Neruda, Villegas, Pasalacqua, Villouta.
Todos los comediantes que han hecho homosexuales. Todas las minas
que han bailado axé. Todos y cada uno de los imbéciles que llenan
nuestra puta y solemne existencia.
- Difusión.
- Vencimiento.
- Carné de identidad.
No llenes la vida de nadie. No cumplas tu propósito en la vida. No seas
útil. No salgas en televisión.
No te salves. No te salves ahora ni nunca.
- ¡¡Nos molesta tu cuenta en un banco en europa!! -.
- ¡¡Nos molesta tu hipocresía de teletón!! -.
- ¡¡A la mierda tu Barney!! -.
- ¡¡A la mierda tus teletubbies de mierda!! -.
Ágata termina de remangarse la camisa. Y ahora está mirando el poste
del semáforo.
- Tu televisión - dice ágata - Tu territorio. Tu inmortal ética. Tus
acuerdos de realidad. Tu realidad.
Tu fornicador deseo de ocultar la verdadera mierda: dice ágata.
Ágata dice: ahora has muerto.
Y es este momento cuando:
- Una niña cae de un edificio y el cerebro se contorsiona contra el
cemento haciendo añicos cualquier información
- La sarna carcome al último pobre de estados unidos.
- Los rieles de un metro se retuercen causando la muerte de
Decenas de
Personas
Que nunca salieron
En el periódico.
- Marilyn manson toma la última pastilla del frasco.
Y a nadie le importa. Y el sonido retumba en los huesos de Ágata.
Los párpados se abren.
- Ves, tú lo pediste - dice.
- Chucha, Ágata, te hiciste daño.
Diego y yo observamos el poste del semáforo ensangrentado.
Ágata se lame el borde del puño.
- Es el valor agregado del producto - dice Ágata - el impuesto a 19% de
la vida y existencia.
Cruzamos la calle.
7. ESCUCHÉ QUE SIGO VIVO.
El horario una y otra, y otra vez.
Ágata pone su mano en mi pecho.
- ¿Cuántas veces has respirado hoy día? -.
Pablo tiene puesto el personal y se divierte viendo como el Nacho y el
Daviko se hacen moretones en el hombro.
El horario una
Y otra
Maldita
Vez.
- ¿En serio? - dice Ágata -.
Para Ágata, escuchar la propia respiración es lo más importante. Más
importante que la relación con tus padres, las enfermedades venéreas,
los seamonkeys.
Cuando escuchas tu propia respiración, es como si tú mismo la
produjeras. Es como si poseyeras cada una de tus acciones. Hay más
respiraciones por año que años en el universo. Que números reales. Lo
que damos por automático termina automatizándonos. Las cosas
garantizadas, e: caminar, e: escuchar música, e: ver morandé con
compañía; no nos lo merecemos. Y creemos que sí, porque estamos
demasiado ocupados teniendo problemas en la oficina o paseando al
jefe por una plaza en las condes. Somos demasiado humanos para ser
humanos.
El límite es la respiración. Y la verdad es mentira. Y la certeza no existe.
Demasiado cerca cómo para darnos cuenta.
- ooohhh aaaii jeeerd dat am stil alaiv, ooohhh -.
- ¿Qué estai escuchando, jetón? -.
- Los gemidos de tu madre anoche -.
- Y tu hermana - dice Diego, pero ya me tiene medio aburrido, siempre
dice la misma weá.
Y el horario, de nuevo y para siempre.
Una, otra, de nuevo, ahora, masticándose lentamente con el sabor del
hígado. De nuevo.
La manito de Ágata está vendada. Hoy día no puede escribir.
Ágata está sentada en el pupitre. Me mira. Luego sus ojos se desorbitan
y la sala comienza a temblar. La venda se rompe. Salta sangre y pus
para todos lados. Algo me posee y corro hacia su mano para tragarme
al seco el pus y llenarme de glóbulos blancos y rojos de la sangre de
Ágata. Entonces me atraganto y muero, ahí mismo. Corre un hilo por la
comisura de mis labios.
- ¿Cuántas veces, realmente? -.
Los párpados se abren.
- Creo que las suficientes - le contesto, y vuelvo a acurrucar mi cabeza.
El horario una y otra vez.
8. EL PASO DE LOS MINUTOS.
Mi padre está trabajando en el escritorio.
Yo lo observo desde mi cama, fumando un yerby y sintiendo el paso de
los minutos.
Pasa un minuto: a algún idiota se le cae el cigarro.
- Gil - dice mi padre.
- Le echamos agua ras y queda impecable.
No sé que está haciendo. Llevar la cuenta de los trabajos de mi padre
es imposible. Hace de todo para sobrevivir. Es un nómade paranoico.
Un tratado sobre la experiencia.
Llego a la conclusión de que me gusta este momento.
Es hora de tirarle tallas homosexuales.
- Exquisito - digo.
Y también digo:
- Buen tipo.
- Tremendo varón.
- Te necesito dentro de mi carne.
- Eres el deseo que tengo entre las piernas.
Mi padre es una pelota de sensaciones. Pero parece que no me pesca.
- Algún día te vas a aburrir - le digo - vas a ceder.
- No me interesan tus sensaciones. Y exclúyeme de tu maldita lista.
Lista de hombres que tengo que besar antes de morir (sacada de la
lista de experiencias de vida necesarias para la existencia):
- Lemebel.
- Mi padre.
- Hitler (en un futuro cercano).
- Roberto Bolaño.
- Auster (con lengua y moviendo la cabeza).
Comodín: Julia.
- A todo esto, ¿de dónde sacas tanta weá? - dice -.
- Tú eres mi inspiración. Mi bello unicornio azul -.
"Seremos esa generación perdida" porque escuchábamos a Serrano.
Y conversábamos y fumábamos minutos antes de las 11. En el silencio
un bic rayando la hoja. Un bic haciendo el tiempo pasar.
- Qué tienes largo el lápiz - le digo -.
- Así es. Nada que ver contigo -.
- Yo tengo 17 centímetros de literatura, mequetrefe -.
- Así que lo mides… -.
- Todas las noches, me ayuda a dormir -.
'Onírica' por Mauricio Peralta.
- Y estoy usando tu regla… mierda… -.
- Toda comodidad tiene su precio -.
- ¿Y hasta cuándo tengo que pagar la tuya? -.
- Hasta que me des el divorcio.
- Vieras lo que te voy a dar -.
- ¿Reconciliación, supongo? -.
- ¿redención?.
- ¿el cielo?.
- ¿Lsd?.
Olvídalo, dice mi padre.
Y quizás piensa en algo relacionado a su vida. El precio que pagamos.
En cada maldito trabajo. En cada estúpida compensación. Quizás piensa
en mi madre, o en cualquier mujer.
Olvídalo, dice mi padre. Y pasan los minutos.
"Me habías invitado a deprimirme por deporte
A enamorarme de una amiga
Ver el telecompras hasta que amaneciera
Rayar el in utero de nirvana
Vomitar mis antidepresivos cuando las escudos
Puedan
Volverse
Nosotros"
9. ALBINA.
Y caminar por las calles porque
nunca buscábamos destino.
- Cacha - dice Diego - una penthouse -.
Recolectamos basura. La evolución involuntaria de pasear por la reina.
La: drag queen.
La: loca.
La Manuela y nuestro complejo de Pancho Vega de reina kilómetros de
extensión.
Como si Donoso pudiera definir algo de esto.
- Mina rica - dice Diego - me la haría filete -.
- Filetéame este.
- Puro surrealismo - dice Ágata.
Diego guarda la revista en su bolso, y continuamos por larraín hacia
tobalaba. Es de noche, y el eco de nuestros pasos es como un silbido en
la oscuridad. Y el humo del cigarro prendido. Y Ágata, que a todo esto
es casi albina.
Unos pasos que apenas se escuchan.
- ¡¡¡¿¿¿ Sabías que Pinochet es un tremendo amante???!!! -.
- Jajaja, hueón, cállate, la gente está durmiendo -.
Pero Diego se siente realmente inspirado.
- ¡¡¡¿¿¿ Sabías que Sergio Lagos usa condones con sabores???!!! -.
- ¡¡¡¿¿¿ Sabías que Margot Kahl planea concebir al hijo de dios???!!!.
- ¡¡¡¿¿¿ Sabías que los irakís rezan antes de copular???!!! -.
- ¡¡¡¿¿¿ Sabías que los jóvenes sólo hablan de sexo???!!! -.
Se prende una luz en un departamento. Sale a la terraza un pelado:
- ¡Cállate, hueón! -.
- ¡¡¡¿¿¿ Sabías que el porcentaje de adultos impotentes es mayor
que…???!!! -.
- ¡Cochatumadre! -.
- ¡¡¡¿¿¿ Sabías que la concha de tu madre está como un billete de
quinientos circulando desde el…???!!! -.
- ¡Voy a bajar, culiao! -.
- ¡¡¡¿¿¿ Sabías que si no te baja es porque estás medio…???!!!
- ¡Cagaste! -.
Se escucha una puerta siendo azotada.
- ¡Uuuu, corre cresta! -.
Ágata, Diego y yo: corremos. La noche se distorsiona acelerando
mientras el eco de nuestras zancadas mediocres zumban en los oídos
de algún idiota. Y de nosotros, los idiotas mismos, que corremos más
apurados que la puta. Tosiendo humo de cigarro. Porque se abre una
puerta a lo lejos. Porque cruzamos la calle. Y seguimos. Y no hay que
mirar atrás. Por nada del mundo mirar hacia atrás.
Se cierra una puerta, quizás la puerta de un auto. Cruzamos otra calle.
Ágata parece cansada. Ágata disminuye la velocidad
¡Ágata, por-la! ¡Cuidado, Mauri!
Tropiezo. Me saco la chucha.
Tutú. Tutú. Tutú.
(Bueh, ustedes imagínense el sonido)
- ¿Ya estás bien? - dice Ágata poniéndome hielo en la ceja -.
¿Les he dicho que me encanta cómo huele la cocina de Ágata?
- Diego te manda saludos -.
- Sí, caché que se fue corriendo y ni pescó -.
Ágata me acaricia la cabeza y se sienta en un sillón.
- ¿Te sientes mejor? - dice -.
- Sí.
Me siento de maravillas.
Lista de imbéciles que mañana serán ahorcados:
- Diego.
Nos acomodamos frente al televisor. Disfruto el momento. Ágata me
mira.
- ¿Y ella, cómo se siente? - dice -.
- ¿Quién? -.
Me traspaso a un show de casos de abducciones ovnis. Un clon ha
culiado con Javiera mientras a mi me metían sondas.
- Tu hermana, querido - dice Ágata y sonríe, maravillosamente albina.
10. LOS VENDEDORES DE MICRO.
- La escritura es totalmente homosexual - Dice Diego -.
Estamos en clases de inglés y el leñador, nuestro profe
que también es:
- vendedor de micro,
- Brit pop, grunge,
- El psicópata que nos va a matar a todos con una ginzu a final de año,
parece haber perdido el rumbo en una lista de oraciones gramaticales
enorme y suficientemente aburrida.
Si alguna vez eres profesor, haz todo menos dedicar la hora a escribir
en la pizarra. O hacer ejercicios de análisis morfológico o qué sé yo. En
serio, a menos que lo único que quieras sea pasar los minutos
discretamente.
Si haces clases, hay tantas posibilidades morbosamente satisfactorias:
- Gritarle a un alumno.
- Llevar a una alumna a la oficina y manosearla.
- Y creerse el cuento.
Creo que ese es el pilar. Creerse el cuento de ser profesor. Y explotarlo.
A todo esto. Lista de profesiones de mi padre:
12.- vendedor de micro.
Y yo también quiero practicarlo algún día. Pero yo me metería en otra
cosa. Disfrazarme de payaso. Improvisar. Está en la lista de
experiencias de vida.
- Creo que ya está inventado - dice Ágata -.
- Todo está inventado - le digo - excepto nuestro futuro adn; nuestra
redención mutágena.
La cosa es crear un contexto. Pintar nuestros dientes postizos. Inventar
nuevas formas de masticar. Hacernos nuevos brazos, crear apéndices
externos en nuestro estómago, inyectarnos colágeno, crearnos tetas de
hombre.
Porque
El arte es un ejercicio
de femineidad.
- Por algo dicen que todos los poetas son gays - dice Diego -, en
realidad tienen razón. La escritura es un parto -.
- ¿Y el acto sexual? -.
Me imaginé al pene de dios metiéndose en la vagina del arte.
- La verdad es que toda la basura debe ser reconsiderada - dice Diego como ha pasado con la biblia.
Enumerando:
- Detective Conan: las incoherencias del sistema. Y un niño sea auditor.
- Card Captor Sakura: un personaje homosexual. Un niño de auditor.
Un niño que quizás ya era homosexual. Un niño que puede sentirse
comprendido.
La basura es la nueva escritura, dice Diego. Es la nueva palabra. Y no
nos va a salvar, dice Diego. Pero por lo menos es más entretenida que
clase de inglés.
- Entreténme esta - dice Ágata -.
La quedamos mirando, perplejos.
- ¿Qué? ¿No puedo ser vulgar yo también? -.
¿El arte es femenino o no?
11. HIMNO PARA EL AÑO 2000.
La naturaleza muerta, sí, me gusta. Porque la naturaleza está
realmente muerta. Es una de las pocas cosas buenas que tiene
Huidobro.
Joder, comer, morir; son procesos que ya pasaron de moda hace
mucho.
Y sin embargo, dice Diego, creo que son inevitables.
Es la lata vencida de sopa campbell encontrándonos en cada cruce. La
clasificación, prejuicio y regla que nos sigue como un inspector que
quiere sacarnos el esmalte negro de las uñas con acetona.
Y no me pongas a hablar del dinero. Es lo mismo. Sino fíjate en el
mundo de las relaciones. Si quieres comprarte unos cigarros con
monedas de diez, tienes que hacer paquetes con scotch. El scotch
cuesta plata, por lo tanto gastarla es necesario para comprar. Necesitas
gastar plata para gastar plata. Ahora por otro lado: si quieres
comprarte un papelillo, va a haber gente que trate de censurarte. Ya
sabes; televisión, estado, colegio, instituciones del miedo y reforma,
qué se yo. Luego prendes la televisión para verte a ti mismo gastando
plata, momento en el que gastas plata drogándote contigo mismo
drogándote. Es el mundo. Ya no podemos considerar al dinero
inconsecuente.
Después de todo, denunciar también cuesta billetes. Y su poco de
scotch.
Sólo hay que cuidarse de no posear cosas que no podamos cumplir. La
ley del mínimo esfuerzo. A eso debemos atenernos.
Caminamos por Blest Gana hacia la casa de Javiera Bustamante.
Y Javiera es gótica. Javiera es tan, pero tan gótica.
- Rápido, antes de que la pregunta se desinfle - Dice Diego - Nómbrame
el himno que defina el año 2000.
Yo pienso en:
- Sugar: de System.
- Amigos.
- Anthem for the year 2000.
Pero a final de cuentas digo que una axé, y si quiere se la bailo.
- Yo sabía que bailabas axé - dice Diego -.
Javiera abre la puerta.
Trae un escote, que te digo. Pero por alguna razón pienso en Ágata.
- ¿Cómo están? -.
- Bien - dice Diego -.
- Espérenme un poco, vuelvo altiro - dice Javiera y nos cierra la reja en
la cara.
Noticia de última hora: Javiera se está jalando un psicotrópico en el
baño.
- Listo, ¿vamos? -.
- Vamos - le dice Diego -.
Caminamos por una calle. Algún día me aprenderé el nombre.
- ¿Y cómo te fue con el trabajo? -.
- O sea, cachai el profesor dijo onda que igual estaba bien. Pero a mí
como que no, igual como que no me dejó así, llena. Y la wea' es que
igual pa la próxima semana queda la coeficiente dos, así que yo cacho
que si le ponemos empeño demás que subimos el promedio y wea'.
- ¿Y qué con la blondie? -.
- Puta, al final tuve que hacer el artículo yo sola. Así que no sé igual
cómo nos va a ir. Yo cacho que mal, porque no tenemos reportaje
principal ni nada. Pero, será po, hasta la próxima semana.
- ¿Y a ustedes? - dice una vocecita. Marce nos acompaña en esta
ocasión.
- Mal yo cacho. No fue lo que queríamos -.
- Pero igual en el apartado gráfico está decente. O sea, por diseño igual
nos podemos sacar un seis.
Hay olor a asado.
- Mmmm, olor a cadáver de vaca - digo yo -.
Pero no me pescan en realidad. Nos imagino colgando del techo de un
matadero. Imagino a las tetas de Javiera por debajo de la piel,
goteando sangre. Imagino el pequeño cuerpo de Marce siendo
despedazado por un cuchillo carnicero. Me imagino siendo comido.
Y no a Diego. Diego corrió antes de que llegara la van.
Por alguna razón pienso de nuevo en Ágata.
"El humo me marea. Ya te lo había dicho.
Ese tipo de gente que juega aquí los sábados por la noche.
Te miran las entrañas. Te las miran tosiendo.
Volar no es un espectáculo.
Te nace de adentro. Un par de ojos y un par de alas.
El humo ahoga, pero estás preparada.
También te crecerán algún día.
Cubierta en sangre como yo y te crecerán.
Juntémonos cerca.
Cuando venía del juego pude sentir algo como un roce y miré hacia
atrás pero no eras tú.
Pela esa fruta, ok.
Ahora el cuchillo y vuelves a la mesa.
Les dices que no me di cuenta. Les llevas snacks y todo sigue bien.
La traición escondida, el disco de hewlett packard bajo una almohada
en el sillón del living. Que nadie toque el sillón.
Les dices que hubo sorpresa. Luego me llevas a la cama y dejas una
nota junto al velador.
Llamas a los pacos.
Cierras la casa.
Le prendes fuego y
Enciendes un cigarrillo, esperando".
12. NUNCA FUIMOS BOLAÑO.
Ágata pasa sus manos por mi cintura y se recuesta en la cama.
- Siéntate junto a mi - dice.
- O tal vez Diego se siente solo en el piso - dice Diego.
Perro bastardo.
Estamos viendo el 11 y, de lejos, tenemos una pinta bastante punk.
- Rápido, antes de que la pregunta se conchatumadriee - dice Diego ¿Qué tema literario salvarías luego que todos los libros sean quemados
por cristianos? -.
- No sé -.
- Algo bueno. Algo realmente importante -.
- Quizás no habría que salvar a, tú sabes, el amor, la muerte y la
locura. Quizás le estaríamos dando un nuevo rumbo a todo -.
- ¿Pero entonces? ¿Cuáles salvarías? -.
- No sé - digo - tu hermana es un buen tema literario.
- ¿Y cómo te fue con el proyecto? -.
¡El proyecto!
Bueh, se entrega atrasado.
- Me fue super bien… -.
- Rojo o atrasado -.
- Atrásame este -.
- Si, igual está como adelantado tu reloj.
- ¿Si o no que es bonito? -.
- Ágata - dice Diego - ¿Tú qué tema salvarías? -.
- Creo que no salvaría a ninguno.
Yo no salvaría a la literatura: dice Ágata.
- ¿Y si fuera otra cosa? -
- Un destino.
- Una respuesta.
- Un psicotrópico.
- Nos salvaría a nosotros, ¿no? - dice Ágata -.
- ¿Ágata? -.
- ¿Y si lo fuéramos? - digo -.
- Si lo fuéramos… no sé -.
- Pero, ¿y si realmente nuestras vidas quedaran registradas? ¿Todas
nuestras vidas? ¿Y si al morir, no estamos muriendo realmente? ¿Si
esta tremenda idiotez en realidad va a pasar a la historia, y todo tiene
sentido? -.
- Yo cacho que habría que hacerlo a lo JFK, y matar al escritor - dice
Diego -. No es que no lo merezcamos. No lo merecemos, eso está
clarito. Pero ¿y pasar a la historia? ¿Y ser leídos por ser nada? ¿A quién
le interesa? -.
- No sé - dice Ágata. No sé, el ícono de una generación - pero quizás
esto sería diferente.
- ¿Y quién escribiría un libro sobre nosotros? - dice Diego.
- No sé -.
- Bolaño - digo yo.
Bolaño escribiría un libro sobre nosotros.
13. ENCONTRAR LO SUTIL.
Fue como culiarse a la literatura. Y a la escritura. A una fusión
maravillosamente albina de todo lo que vale la pena en este mundo.
Porque si lo pensamos bien, ya no hay una forma sutil de decir que
culiamos a alguien. Hacer el amor es más cursi que la mierda. Fornicar
es como metérselo a un perro. Preñar, es decir… vamos por pasos. Y
joder… no tiene nada qué decirme, es hasta insultante. Vulgar, ñato,
demasiado vulgar.
Pero fue maravilloso. Cuando tenga 30 años me deprimiré pensando
que es la única cosa que jamás podré repetir. Creo que no hay forma
de decirlo sin caer en la cursilería. Por lo tanto…
A continuación haré un show de marionetas sobre el mejor día de mi
vida:
ESCENA 1:
(Una cortina. Un fondo con estrellas y la luna. Qué esperabas, con qué
presupuesto.)
(aparece Mauricioneta en escena)
Mauricioneta: Chucha, ¿dónde estoy? Bah, hay una puerta. Bueno,
toquémosla, total. Y si sale alguien feo, le hacemos rin rin raja.
(suena el timbre. Aparece en escena Marionetágata).
Marionetágata: Mauri, ¿eres tú?
Mauricioneta: ¡si, mi querida Ágata! ¡soy yo! ¡en género y felpa!
Maurionetágata: ¿Y qué haces por acá? Es como tarde. Sino mira la
alucinante luna de tres gambas que tenemos atrás.
Mauricioneta: es que tenía que…
Marionetágata: ¿si?
Mauricioneta: este…
Marionetágata: ¿si?
Mauricioneta: ¡usar tu baño! ¡si! Ando con churretera.
Marionetágata: ¿No encontraste una excusa menos asquerosa?
Mauricioneta: es que esa me salva socialmente de lo que te venía a
decir…
Marionetágata: ¿sí?
Mauricioneta: Bueh… Está bien.
Venía a decirte que te amo, Marionetágata.
Marionetágata: Haberlo dicho antes.
Niños, ajusten sus asientos.
Marionetágata: yo tambien te tengo más ganas que la mierda.
Y todos los adolescentes del mundo se corrieron.
Y todas las mujeres embarazadas dieron a luz.
Y todos los suicidas se atragantaron con el valium,
y escupieron.
Yo también te amo: dijo Marionetágata.
ESCENA 2:
(El cuarto de marionetágata. El televisor pintado con corrector. Los
pósters de A perfect circle son un chicle pegado. El cuadro sobre la
madre de Marionetágata; una hoja de confort con un rayón de lápiz
bic.)
Marionetágata: siéntate si quieres.
Mauricioneta: no, no te preocupes, no tengo piernas.
Marionetágata: ¿quieres algo de tomar?
Mauricioneta: una escudo, si tienes.
Marionetágata: yo también voy a sacar una escudo.
Los niños en el público le preguntan a sus padres qué es una escudo.
Espérate a la siguiente escena.
Marionetágata: Toma.
Mauricioneta: De nada. Es decir gracias… lo siento, se me quedó
pegado de Diego.
Marionetágata: Ok. Pero dejemos de hablar de diego, ¿bien?
(Marionetágata se acomoda junto a Mauricioneta).
Marionetágata: ¿Qué quieres ver?
Mauricioneta: lo que pongas está bien.
Marionetágata: lo mismo va para ti…
Mauricioneta: ¿ah?
Se abren los párpados.
Marionetágata: que si quieres pones la tele tú. Está desconectada.
Mauricioneta: Está bien.
(Mauricioneta hace malabares, en fin, es como si se agachara)
Mauricioneta: listo.
Marionetágata: bien. Acomódate junto a mi.
Mauricioneta: bien.
(Marionetágata y Mauricioneta ven televisión un rato. Luego
Mauricioneta toma un poco de escudo y se le cae en Marionetágata).
Mauricioneta: ¡chucha!, perdona, perdona…
(Mauricioneta trata de limpiar a Marionetágata. En eso, toca
accidentalmente su pecho).
Mauricioneta: este…
Marionetágata: ahora si la hiciste.
Se abren los párpados. Los del público.
- Papá, ¿qué están haciendo las marionetas? -.
- No mires, kike, no mires -.
ESCENA 3 Y FINAL.
(Marionetágata y Mauricioneta acostados en la cama. Mauricioneta
enciende un yerbi).
Marionetágata: Dios.
Mauricioneta: Dios.
Marionetágata: ¿así de bien, no cierto?
Mauricioneta: Dios y re- dios.
Marionetágata: ¿Diecisiete centímetros de literatura?
Mauricioneta: de felpa, querida, felpa de primera calidad.
Y Marionetágata y Mauricioneta lo hacen:
- en la alfombra.
- En la maravillosa cocina.
- En la exquisita ducha.
Hasta que el público se ha ido y quedan los dos solos para:
- Sonreír.
- Abrazar.
- Dejar que las horas de sueño
Pasen.
"De aquello recuerdo cenizas de papel de diario
Ciertas marcas de inodoros y la mascota diabólica de una banda brit
pop
Unas obras que quedan atrás
y los restos de saliva en una almohada en un hotel en alguna parte
De mi vida y obra no hablaré porque ahora (que todo está en llamas
verdeazules)
La retórica del per se no me incumbe ni a mí ni a los desgraciados que
recuerden haber leído los recuerdos de alguno contra saliva y quién
sabe]
Deseo dejarlo en paz.
Lo destruyan las esperanzas procreadas.
Los moluscos universales y las ideas; mierda, y hasta cero.
Cavilando junto al pacífico has de extender tus brazos y dejarte levitar.
Abrir los ojos un poco
antes de caer.
La verdad poco deseo, y si te inmiscuyo en las redes del océano es
porque
Hoy
Todo
Es
Océano
Aún así
Sólo algo de compañía
Que por eso del destino
Que por eso
Arribe el otro cuerpo y te abrace
Que por eso te abrace y seamos uno".
14. ATESORAR.
"Frígida, si me niego a ser la descarga de tú estrés".
- Estrés si no te llega una vez al mes - dice Diego -.
" Frígida, porque deberían seducirme tu obesidad, tu higiene animal, tus
besos alcohólicos".
- Puta, si igual hay más que agarrar… -.
- Eres una pelota de sensaciones, Diego -.
" Frígida, si te pido que me esperes"
- Es que tenía que hacer algo en otro lugar, mi vida -.
- Con esa te la ganai altiro - dice Ágata.
" Frígida, porque en realidad me haces sentir como un objeto y no
como una mujer".
- O sea, para la wea - dice Diego - estas minas de la Paula creen que
siguiendo las dietas de la página 36 no van a ser tratadas como objeto .
Enumerando:
- sección sociales.
- Sección modas.
- Sección mujeres: puros hombres.
Puro machismo disfrazado de feminismo.
Estamos recorriendo las calles en busca de basura. Inspeccionando
tarros, montones llenos de cartón y tierra, sedimentos cutáneos
mezclados con alquitrán y cemento, pequeñas fichas de datos, hojas
vacías, cuadernos de séptimo año, colillas de cigarro. Pero hasta el
momento hemos encontrado pura mierda.
E:
- Paula.
Creo que si alguna vez tuviera un apartamento, lo llenaría de cosas
inútiles. Viejas revistas Wired, videos de eventos familiares, juegos de
monopolio, polaroids carcomidas por el tiempo, boletos de micro
pegados en la pared, rayones y fotografías de cada uno de los
vagabundos a los que les he convidado fuego. Qué se yo. No botaría
nada.
La gente bota cosas para hacerle espacio a lo nuevo. Y lo nuevo
normalmente es una alfombra persa, un compaq presario, una mesita,
un televisor de 20 pulgadas. Sobreviviría con trueque. Esta revista de
mecánica popular por tu eds, esta máquina de escribir por tu primera
edición de nadie sabe más que los muertos; ¿tus grabaciones del canal
dos? Sí, me sirven.
Atesorar el residuo
Como si fueras
Tú mismo.
Es una de las pocas buenas cosas que tenía Neruda.
Ágata se ve hermosa hoy día. Triste, pero hermosa.
- ¿Ágata, hasta cuándo vas a ser albina? - le dice Diego -.
- No sé, Diego - dice ágata - la verdad es que
últimamente
es lo que más
me preocupa.
15. DIOS.
Siempre le he tenido miedo
A winnie de pooh.
- Desde los ocho años -.
- Es un oso sin pantalones - dice Ágata -es un cura tato cualquiera.
Estamos en una plaza esperando que empiece la protesta.
Desde lejos,
tenemos
una pinta bastante punk.
- Me quedé pensando el otro día en eso de que alguien esté escribiendo
esto -.
- ¿Ah sí? -.
- Tengo la sensación… - dice Ágata -.
Tengo la sensación de que uno de nosotros va a morir.
- Porque por un lado… sí, hay un factor de salvación. Pero también está
metido el destino, dios, y un montón de rollos, qué sé yo -dice- le tengo
un poco de miedo -.
- Entonces sólo queda una cosa por hacer -.
Tenemos que dejar de ser literatura.
- Tenemos que volvernos inhumanidad -.
- No sé. Hay algo maligno en todo esto -.
Observamos las palomas autistas buscando migajas de pan.
Observamos:
- Al predicador de siempre.
- A los viejos de siempre.
- Las palomas de siempre.
- El predicador, otra vez.
- Siempre he tenido ganas de hacer esto - dice Ágata - ven.
Ágata me toma de la mano y nos vamos caminando hacia el predicador.
- ¡Y Dios era la palabra! ¡y Dios era amor! ¡Herma…! -.
- Compadre - dice Ágata - tiene abajo el cierre -.
- ¿Qué hueá? -.
- Que tiene abajo el cierre -.
- Espérate tantito, ¡y Dios nos ama, hermanos! -.
- Compadre - dice Ágata - dios le está mamando el hermano -.
- ¡herma…! ¿Qué huea? -.
- ¿Realmente crees en esto? -.
El predicador baja su mano al cierre.
- ¿Realmente crees que un dios te va a salvar porque controlas tus
impulsos? ¿Crees que a dios le importa que no te la menees, que no te
jales coca ni te metas con maricones? ¿Dios te escucha? ¿Dios te
quiere? ¿Y Dios también quiere a tu esposa, la mujer que has insultado
todo el tiempo? ¿Dios te quiere cuando le pides comida y ella está muy
ocupada haciendo lo que tiene que hacer para recuperarse a sí misma?
¿Dios te va a salvar, compadre? ¿Dios necesita escucharte? ¿A todos
nosotros? ¿Dios es tan omnipotente que necesita oír cómo te quejas de
tus hijos, porque saliste mal en la prueba de adn y de pronto te das
cuenta que no te necesitan? ¿Te has preguntado si te mereces a un
dios? ¿Te has preguntado si a dios le interesa? ¿Te has preguntado si
dios estaba ocupado en el teléfono cuando te estabas muriendo porque
nada de esto tiene sentido? ¿Y qué tal si dios tampoco te necesita?
¿Qué tal si todo lo que te han contado de dios es una mentira y el cielo
en realidad lo inventaron los gringos para matar a los residuos de una
globalizante cuenta en el banco de esta enorme y puta existencia? ¿Y si
no hay cielo ni infierno, y la vida es esto? ¿Entonces qué vas a hacer
con tu vida? ¿A quién le vas a contar tus problemas? Dios existe,
compadre. Pero está ocupado en júpiter. No nos necesita. Somos la
prueba fallida de un experimento sobre mutaciones. Pero ya no
necesitamos a dios. ¿Qué vas a hacer mañana? Por favor pregúntate
eso. El día que pierdas relación con dios.
¿Qué vas a hacer mañana?
En este punto las pelotas del predicador se habían agarrado con el
cierre y había una mezcla de salchicha, albóndigas y cartílago
entrecruzado por toda la extensión.
- Dios es amor -.
- Si dios es amor, no te estaría mandando a una idiota como yo a
hacerte el día -.
Si dios es amor, nunca nos habría abandonado. Estás sólo con el dolor
de tus pelotas.
Y ahora te llevamos a un hospital, compadre.
Proyecto de salvación inhumana, por Ágata Olivo. Y creo que esta vez
no bromea.
"El clip apareció. Al lado de la despensa. El clip, ahí, justo en el lugar.
Agarrado. El cable no sabía. Te juro. Tantas cosas. Hilos, dientes,
música electro-industrial. Aunque parezca una reiteración. Un boom
atónito, apagado, célebre. Un boom de cómic, y salir disparado como
cartas, dorios, pegatinas de chicle Cowboy Joe cerca de un mcdonald's
que a las dos de la tarde parece la imagen que tenemos del sol. Hilos
más bien, bienes de cabizbajos judíos. Seinfeld era, como el pecado a
los campos de trigo, como siluetas desinenciales, golonfinas de la
intertextualidad. Y salir disparado, disparatado, disasociado,
distensionado, disconforme, dis di y dilo bien antes de que llegue esa
palabra. Y del pensamiento a la palabra, dios era la palabra, y dios era
amor, y la palabra era elefante. Entonces en el zoológico hubo una
discusión. Porque Evangelion tenía una cresta en Lain con
Nabucodonosor retozando a la deriva como si fuera griego, pero no
conocía ningún animal que fuera griego así que la distensión le hizo
decir que no lo había dicho. Como todo. Como esto. Como pequeñas
frases en el teatro providencia. Como dilatados pasares a la entrada de
la Blondie. Como gritos apagados en tu casa. Tengo que violarte.
Violándome. Necesito hacerlo recíproco. De carácter ecoico. Vuelta en la
calle, agudeza plana, tú lo sabes".
16. DEFINIR LA HOMOSEXUALIDAD.
- Cacha, el gato está culiándose al elefante -.
Estamos en casa de Diego y el Copito, su gato, se está masturbando
con un elefante de peluche.
- ¿Tienes las preguntas? - le digo -.
- Sí, están en la mesa -.
Tenemos que hacer un trabajo sobre Existenz. O en definitiva, tengo
que hacerle el trabajo a Diego, para que él ponga su nombre. Pero los
dos estamos implicados; de una forma u otra. Y él no se deja estar. Es
muy amable cuando ha dormido más de 6 horas.
- Cacha, ahora le está haciendo el 69 -.
Hay que buscar datos de la ciencia ficción. De ciberpunk. Relacionar
cuerpo, sexo, identidad personal, demiurgo; lo que se te ocurra. Para
mí es una vía de escape. La verdad es que me gusta este momento.
Ahora Diego prende un cigarro y dice:
- Fumar también es un acto extremadamente homosexual -.
Porque todo
Es fálico.
Esta botella de escudo, este pito de paraguaya, la cabeza de tu padre,
un lápiz, una mano.
- Se podría decir que hasta las vaginas son medio fálicas.
- Estás loco, Diego -.
A veces pienso que todos somos homosexuales reprimidos.
Que todos esos símbolos fálicos son en realidad una flecha enorme
hacia nuestra propia identidad.
- ¿Pero, marcas? -.
No sé, tal vez las marcas, tal vez la naturaleza. Tal vez hay algo más en
alguna parte que nos señale un camino. Quizás por eso últimamente
hay tantas lesbianas. Porque entre tanto pene disfrazado se han dado
cuenta de algo.
Porque dios es un pene gigante, dice Diego. Dios es el pene gigante
detrás de toda publicidad de megacorporaciones. Detrás de cada
anuncio de toallas ajustables. De cada coca cola. De cada oso polar.
El gato mira a Diego, y continúa con su tarea. Al parecer está realmente
inspirado. Yo lo acaricio detrás de las orejas y le digo:
- Tú sólo quieres lo que quieres. Eso está bien, gato. No dejes que
nadie te diga que no puedes pololear con un elefante de peluche -.
Y el gato continúa, ausente de tiempo entre su lengua áspera y la felpa
entre las piernas de fantito.
17. EL POLLO SAGRADO.
- Lo que más me gusta es sacarme los mocos y pegarlos en la pared dice Diego -.
Esta clase de conversaciones cubren el tiempo académico
constantemente.
Es el recreo y Ágata conversa con Daviko en los bancos junto a las
mesas de ping pong.
Pasa un minuto: algún predicador se acomoda en la camilla.
- Rascarme los sobacos es más que nada un hobby - dice Diego - pero
sacarme los mocos es como una adicción -.
Una sensación que roza el orgasmo, dice Diego, citando a Jaime Bayly.
O como se escriba.
Arriba, en el cielo, pasan aviones, las palomas proyectan su sombra en
el patio, extraterrestres pelean sus guerras y un mundo paralelo de
nosotros mismos amenaza con autodestruirse. Y colisionar.
- Ayer fue mi estrategia para quedarme con el sótano - dice Diego -,
pegué un montón de mocos de diferentes colores, tamaños y texturas
en la pared, y llega mi madre y dice ¡Diego! ¡Ahora tendremos que
pintar el sótano! Y yo le digo, no mamá, yo lo pinto, pero me lo dejo
para mi -.
Y extrañamente funcionó, dice.
En otros mundos, la gente besa, estornuda, gime, chapotea, danza, se
desliza, cae. En otros mundos, la gente se eleva con el pensamiento, se
sumerge por horas en océanos y estornuda peces de colores. En otros
mundos, nadie se aburre. En otros mundos, la vida es buena y hay un
suicidio por cada respiración.
¿Cuántas veces has respirado hoy día?
- Creo que la historia de la arcilla y el polvo es falsa - dice Diego - si
dios tuvo algo de cordura, hizo el mundo de los mocos que se sacaba -.
La biblia, por Diego Vid.
Observo a Ágata. Ágata una y otra vez.
- Esta mesa, puros mocos, este piso, mocos de mocos, este jipi, moco
entero y absoluto, esta palabra, pura mucosa pulmonar -.
El mundo es un moco pegado en la pared de dios. Y todos los mocos se
van al infierno, dice Diego.
- ¿Y el sol? - le digo -.
- El sol es una bolsa con mierda a la que le prendieron fuego -.
Y así las cosas van teniendo sentido. Así dios va naciendo.
Vamos inventando una religión.
Un himno para el año 2000.
"Porque Cami era la palabra. Cami era el sentido que le dábamos a las
cosas. Pasajes, senderos, solapas, sensatez. Un augurio plantado en la
página. La razón de ciertos caminos, de aquellas tardes. La persona que
tomaba cuentas en una plaza. Las desinencias y los actos, el gusto por
decir te quiero después de la llamada. Cami era la repulsión y los
espejos, el día, su mañana, la extensión del espacio entre la punta de
dos dedos. Y nada, cuando las grietas se alzaban en plegaria. Nada
cuando el todo era un símbolo. Nada a la hora de los pelasgos, y los
etruscos sonreían y gemían en el espacio. Nada y cami y Cami y la nada
y nada, tomando, nada, Cami y sonriendo, sacando de pronto,
golpeando, estirando, convulsiones y nada y cami Y Cami y lA nada".
18. NUNCA FUIMOS GODDARD.
Si fuera Goddard (o cómo se escriba), quizás podría relatar esto de
mejor forma. Pero no lo soy, así que a la mierda.
Nos ponemos calcetines con rayas. Nos ponemos pantalones de
campana. Bototos, camisas floreadas, corbatas de mickey mouse. Nos
ponemos:
- Anteojos para llorar.
- Pecas con lápiz delineador.
- Pelucas
Azul para: ágata.
Rosada para mi.
Nos ponemos maquillaje.
Vestimenta de guerra.
Salimos de casa de Ágata a las cinco. Y ella me dice
Es el inicio,
Querido,
Te ves bien.
En la esquina de larraín con tobalaba tomamos micro.
El piso se mueve como si el suelo estuviera teniendo sexo con las
ruedas. Como si algo en alguna parte realmente estuviera pasando.
Ágata me mira. Se agarra de uno de los postes de la micro y yo me
siento cerca de ella. Es hora de empezar.
- Apenas él le amalaba el noema - dice Ágata - a ella se le agolpaba el
clémiso y caían en hidromurias, en salvajes ambonios, en sustalos
exasperantes. Cada vez que él procuraba relamar las incopelusas, se
enredaba en un grimado quejumbroso y tenía que envulsionarse de
cara al nóvalo…
- Sintiendo - digo yo - cómo poco a poco las arnillas se enpejunaban, se
iban apeltronando, reduplimiendo, hasta quedar tendido. Y sin
embargo… -.
Ya habíamos llamado la atención de unos cuantos pelagatos.
- Y sin embargo, era apenas el principio, porque en un momento dado
ella se tordulaba los orgalios, consintiendo que él aproximara
suavemente sus orfelunios -.
- Apenas se entreplumaban - dice Ágata - algo como un ulucordio los
encrestoriaba, los extrayuxtaba y paramovía, de pronto era el clinón -.
- La esterfurosa convulcante de las mátricas -.
- La jadehollante embocapluvia del orgumio -.
- ¡Los esproemios del merpaso en una sumítica agopausa! -.
- ¡Evohé! ¡Evohé! -.
- ¡Volposados en la cresta del murelio se sentían balparamar! -.
- ¡Temblaba el troc, se vencían las marioplumas!
- Hasta el límite del… -.
- ¡Chucha! - dice el conductor -.
- ¡Hasta el límite del encefalobronquisteroide!
- ¡Impujándose, agasalmando!
- ¡briando profusamente dentro del murelio en balparamado triunfo
sexual! -.
Ágata se puso a gemir y a moverse.
- ¡moviendo, profundizando, aclamando! -.
- ¡ah! ¡ah! -.
- ¡revolviendo, destrozando, aglutinándose las masas y los músculos! -.
- ¡ah! ¡ah! ¡ah! -.
- ¡el jadehollante momento pródimo! -.
- ¡conchatumadreeeee!!! -.
- ¡cada vez más cerca! ¡sintiéndose venir! -.
- ¡mierdaaaaaa! - dicen los pasajeros -.
- ¡sólo un segundo! ¡una súplica en el aire!
- ¡ah! ¡ah!
- ¡méteme el omóplato! ¡méteme el omóplato! -.
Saliva corría por el rostro de todos.
- ¡méteme el omóplato! ¡lléname con tu enorme y regordete omóplato!
-.
- ¡¡¡mierdaaaaaa!!! -.
La micro se detiene bruscamente justo antes de chocar con una
motocicleta.
Cuando nos bajamos, la gente nos da la mano y sonríe.
- ¿Revolución desde la basura? - me dice Ágata cuando abre el
refrigerador - ¿Y qué tal, hasta ahora? -.
Miro un jamón. Pensando en fumármelo.
- No sé - digo yo -.
Ágata me toma de la mano, apaga la luz de la cocina y me lleva a su
pieza.
- Es mejor de lo que esperaba - digo un segundo antes de que Ágata
apague la luz -.
- ¿Cuántas veces has respirado hoy día, Mauri? -.
Miro el rostro de Ágata en la oscuridad.
19. REGLAS CON REGLA.
La hora de clases se extiende eternamente.
Entonces yo le digo a Diego que mira la página 37.
En los libros de preuniversitario y los textos escolares la frase Sabía
usted, es bastante común. Cuando llegue la revolución que yo veo, será
reemplazada por Realmente me importa. Como por ejemplo al final de
la 37:
De…
"¿Sabía Usted que…
Los árabes introdujeron la numeración y el álgebra?"
A…
"¿Realmente me importa que…
Los árabes hayan introducido la numeración y el álgebra?"
Los medios de "educación" siempre están tratando de meternos cultura.
Por dónde sea. Forzándonos a interesarnos por cada tremenda
babosada que se les ocurra. Y convenciéndonos de que la flojera, y lo
que nos gusta hacer es inferior a la educación. Pero están equivocados.
Y se los comprobamos:
- Con cada hacker.
- Con cada escritor adolescente.
- Con cada estrella de rock.
- Con la identidad que tengas.
Porque en alguna parte de esta realidad: un pendejo está creando.
Somos los dueños del futuro. Tenemos el poder de cambiar al mundo y
ni siquiera nos damos cuenta.
Y sin embargo, rechazamos: el poder.
- Nuestros padres… - le digo - nuestros padres trataron de no ser como
nuestros abuelos. Pero fracasaron. Quizás estamos destinados al
fracaso hagamos lo que hagamos.
Quizás no es tan malo.
Quizás lo que nos han impuesto como destino…
- Éxito.
- Sexo.
- Familia.
- Iglesia.
- Celebridad.
Quizás todo eso era para desorientarnos. Y lo que en realidad sale en
nuestras actas de nacimiento es: "Te pondremos en un montón de
situaciones confusas para que veas como reaccionas. Te irá mal, en
cualquier caso. Luego tratarás de llegar a algo, pero está decidido que
todo lo que te dijimos era mentira y la verdad es que el paraíso
prometido, lo de que todo esto era fácil… lo sentimos, pero te
estábamos hueviando".
Estamos en la era de las mitades. Desde los productos hasta la
existencia. Vivimos en un Japón virtual. Y ninguno de estos caminos
llega realmente a Roma.
- Se viene el fin, en cualquier caso - dice Diego - después de todo a las
reglas también les da la regla -.
- ¿Y todos los perdedores se van al cielo? -.
- Todos los perdedores nos quedamos en el infierno.
Pero algún día, en alguna instancia, lo hacemos nuestro.
20. DOROTHY EN EL PAÍS DE LAS MARAVILLAS, JALANDO COCA.
¿Qué te estás perdiendo tras bastidores?
Vemos la teleserie del trece y adivinamos lo que hacen los actores y
actrices después de cada escena.
- Felipe Braun se está masturbando con la idea de ser un ídolo
homosexual -.
- La elena swet, sí, seguramente se mira al espejo y canta una de Barry
white -.
Porque el arte
Siempre
Tiene autor.
- Esta wea' es como una serie manga ciberpunk - dice Diego - te
pierdes un capítulo y no cachas nada.
- Es como una persona - digo yo, y la verdad es que no vemos Machos
hace más de dos semanas -.
Las personas reales son, de una u otra forma, como teleseries. Están
ahí, palpitando, reclamándote atención, gritándote: "oye, gil, he estado
aquí todo el rato sufriendo y cambiando y tú no tienes por qué estar tan
ocupado".
Pero siempre estuvimos ocupados.
Cuando los extraterrestres acaben con nuestra civilización y busquen en
google el año dos mil, dirán: "mierda, al parecer llegamos en el
momento justo en que no estaban haciendo nada". Y quizás sería
verdad. Cada vez nos estamos dedicando más a un salario, una nota o
simple sobrevivencia, y en ninguno de los casos estamos realmente
haciendo algo.
El tiempo está detenido.
Y nosotros, aquí, desechando.
- Ahora el Adán se está jalando coca en el baño - dice Ágata -.
- ¿Dorothy? -.
- No, gil, el adán -.
Que Dorothy se está jalando coca en el baño, esto se vuelve cada vez
más difuso.
- ¿Alguna vez se han preguntado como sería un partido de fútbol entre
todos los personajes de cuentos para niños? - dice Diego -.
- ¿Narnia, el principito, las fábulas, todo? - digo yo.
- Sí. Entre ellos y la otra literatura clásica. Oliveira, Belano, Castel,
todos los latinoamericanos -.
- ¿Y cómo sería la formación? -.
- Mmm, yo cacho que…
Formación por Diego Vid:
- Equipo de literatura para niños:
"En el arco, pondría al rey león de Narnia".
- Claro, es un león, se las ataja todas - dice Ágata -.
"En la defensa, pondría al bárbol, se los echa. También pondría al
hombre de hojalata, ese que el gorro era como el techo de una
chimenea, y a Barney".
- ¿A Barney? - dice Ágata -.
- El poder del amor es infinitamente atemorizante-.
"En el medio campo: Pippin, Merry, Frodo y el principito".
- Puros hobbits en el medio campo -.
- Es que son ágiles, y con las piernas cortas yo cacho que se controla
mejor el balón. Aparte de que si lo toman con la mano, nadie cacha -.
" Y en la delantera pondría a Aragorn, a la bruja del primero de Narnia,
y a un cronopio".
- ¿Y qué chucha es un cronopio? - digo yo -.
- Nadie sabe en realidad.
"En todo caso, el cronopio vale para los dos equipos".
En Los latinoamericanos:
"En el arco pondría a macondo"
- Macondo es un país, hueón - le digo -.
- A mí siempre me sonó a una hamburguesa con viagra - dice Ágata.
- En fin. Macondo es arquero - dice Diego -.
"En la defensa pondría a Belano, ése es asesino. También le daría con la
Manuela, de donoso, y Castel".
- Este equipo pinta bueno -.
- Sí, pero siempre se ponen a conversar antes del entretiempo. Y le
achuntan a la pura pelota.
- Sí, lo que queremos es sangre -.
"En el mediocampo, una fama, un cronopio, un inmortal de Borges, el
coronel de García márquez y el cartero, de skármeta".
- Jajaja, ¿qué onda Skármeta en todo este cuento? -.
- No sé, me tinca que el cartero era bueno pa la pelota. Y al parecer era
bueno pal medio campo, o sea… -.
- No lo expliques, se entiende - digo yo - Tu hermana también es buena
pal medio campo -.
" Y en la delantera: oliveira y la maga".
- ¿Y quién ganaría? - dice Ágata -.
- Empate. Porque se agarran a combos, el cronopio saca una ginzu, le
corta la cabeza a Barney, que se estaba violando a la Manuela, que
estaba chupándoselo a castel, que tenía una fama en el poto.
Y en ciertas escalas de valores,
Este momento
Tiene sentido.
"Destrozarte como a un maricón contra la pared. Destrozarte como la
bala que ha penetrado todos los cráneos palpitantes llenos de sangre y
pus de un animal en la carretera. Destrozarte. Abstraerte. Maquinar la
salida a un espacio en el vacío. Lapidarte. Hacerte sentir que ya no te
tocas. Que estás en el vacío, destruirlo, hacerte nacer. Destrozarte.
Desde el suelo hasta el cielo, mostrarte lo que yo veo con su intensidad
más fosforescente. Eliminarte, deconstruirte, borrarte y hacer nuevas
imágenes del canal dos. Destrozarte como si fueras escritura, y de esto
dependiera mi vida".
21. MARÍA, ENTONCES.
Está lloviendo. Ha empezado el invierno. Que es verano. Y es invierno.
Y otoño. Y tu hermana en cuatro.
- Tengo ganas de pololear por deporte - Dice Diego - con una mina.
Observo el plástico que tenemos por techo en el patio, y me pregunto si
resistirá un huracán, y cuánto nos tomará para morir después de que
nos lleve volando y nos arrastre con pétalos, troncos de árbol, vacas y
animadores de matinales.
- ¿Y por qué no con un mino? - le digo -.
- Es que ésa es la idea, ves, necesito una relación desastrosa con
alguien que no valga la pena, para decir "puta la wea, soy un hombre",
y tirarme al primer hueón que me tenga ganas -.
- Entonces evaluemos -.
Evaluar minas vacías con las cuales pololear es como ir al hipódromo.
Es una apuesta. Necesitas calcular todas las posibilidades. Debe ser
popular, pero no demasiado popular. Quizás busca amigos, tirada para
intento de popular, pero no amiga de popular subiendo, ni mina top en
bajada. Debe ser algo seguro. Las amigas con ventaja tampoco son una
opción. La idea es no estar relacionado de principio a fin. Enamorarse
por deporte tiene técnica. No es simplemente agarrarse a la primera
que veas y ya. El timing es otro factor. Saber cuándo debes tirar, el
momento de decir las cosas justas, hacerse el difícil, ser tierno sólo en
pequeñas y notables ocasiones. Tampoco hay que ser gil y pasarse
diciendo cumplidos. No, sólo lo suficiente como para ser recordado. Y
por nada del mundo debes llamarla todos los días. Tú debes ser el que
enseñe. Por lo tanto, la opción más clara es agarrarse a una menor de
edad.
- Constanza Llanos en la cuarta -.
- Me gusta su voz, pero su padre es un militar de mierda - dice Diego tendría que ponerme terno y corbata cada vez que entre a su casa -.
- ¿ Y la Carla Fontén? -.
- Cuica. Muy, pero muy cuica -.
- ¿Javiera Bustamante? -.
- Creo que está pololeando -.
- ¿Julia? -.
- Idiota -.
- Bueh, Julia se gasta un buen cuero -.
- Olvídalo, no sirves para esto -.
- Está bien, está bien… y qué tal… -.
Miro los bancos junto a las mesas de ping pong.
- ¿Qué tal la María Muzzio? -.
- Es como media cartucha - dice Diego - Sí. Es perfecta.
- María, entonces -.
Diego se acerca a la Muzzio y le dice: ¿Sabías que el día llora porque
sólo yo noto tu belleza?
Y también le dice:
- No te mojes, cariño, el agua no se lo merece.
- Estás tan bella que
Dios
Sangra ácido.
Y María se sonroja.
Soy María y me declaro: inocente.
Me siento en la escalera.
Ágata está en el medio de la cancha. Mirando hacia el cielo y
mojándose. Hablando cosas que no puedo escuchar.
Me acerco y la abrazo. Y le digo: Ágata.
Abrázame, Ágata.
22. KURT HUELE A ESPÍRITU ADOLESCENTE.
La pregunta no es qué hay detrás. La pregunta es qué hay debajo.
- Cacha, entrevista a 31 minutos -.
Para ver televisión, hay que hablarle en períodos de tiempo no mayores
a los 50 segundos. Para ver televisión, hay que ser maldita sea para el
asunto.
Recibe
La basura
Luego escúpela.
Escupe estímulos. Escupe flores. Escupe
Tus mundos paralelos.
- Igual le han hecho mala propaganda al asunto -.
- Es lo que siempre pasa con lo que está hecho sólo para niños - digo
yo - dicen que no es sólo para niños, sino para adultos y wea'. Pero los
adolescentes quedamos en el coladero. Cuando en realidad somos los
que más ráting les damos.
Ver ráting como: base.
Ver televisión como: jerarquías del poder.
Ver mañana: como hoy.
Sentados frente al televisor, sabiendo.
Ahora Tulio sale en escena. Diego se caga de la risa y me llega la
bebida en la cara.
- Lo siento, lo siento - dice Diego.
- Lista de razones por las cuales no debería cachetearte -.
- Porque soy hermoso y me tienes ganas -.
- Dame sprite -.
Ágata está sentada en un cojín en el piso. Me pregunto que se
pregunta. Como una canción de Serrano. Y Ágata me mira.
- ¿Y si realmente estuvieran escribiendo esto? - dice Ágata - ¿cuál sería
el final? -.
- ¿Cachai la lógica dragon ball z? - dice Diego - me imagino algo así.
Onda, Ágata se transforma, voh Mauricio buscai ser inmortal para
conquistar el mundo, yo me rapo y me voy a entrenar a un monte, y
me salen seis puntos en la frente y wea -.
- ¿Y nos volvemos super saiyayin? -.
- ¿Rubias? Nah -.
Pelirrojas, y hacemos entrevistas y behind the music.
- ¿Y en qué termina? -.
- No sé -.
Hacemos como que nos suicidamos y nos vamos a vivir a una isla a
fumar paraguaya.
Como Kurt Cobain.
23. ADONDE VAN LOS RESTOS DE SOPA.
- Cacha, ya está tomando forma -.
Observo el escupo pegado en la pared junto al baño de hombres.
Observo sus contorneados estilos, sus voluminosas capas de mucosa
gastrointestinal, arboreadas curvas de flema con pelo, pegoteándose a
través de dimensiones colosales, desde donde podemos apreciar
burbujas estallando como ampollas, deshaciéndose en gargajos internos
mezclados con sangre.
- ¿Cómo le vas a poner? - le digo a Diego, el padre -.
- Ed - dice Diego - es un pollo solitario -.
O Jesús, debido a las precarias condiciones de concepción.
- Ed Jesús, el escupo sangriento.
- Parece película de terror.
¡Cuidado, Mauricio, el escupo sangriento te persigue! ¡el escupo
sangriento viene por ti! ¡Te va a resfriar y vas a tener que pasar en
cama tomando sopa!
- No es tan efectivo -.
- Lo intenté - dice Diego -.
Ya no llueve. El cielo se ha limpiado bastante. Ágata está sentada atrás,
y nosotros nos situamos frente a la pared. Observando el pollo que
Diego tiró ayer. Cuando trataba de bañar a Pablo de flema
incandescente.
En mundos paralelos, la gente paga para observar una pared de
concreto. En esos mundos, Cortázar tenía razón.
En este no.
Ver pared como: territorio ocupado por fuerzas del mal.
Ver pollo como: revolución.
Ver revolución como revolución de la basura.
Un pollo sangriento a las dos de la tarde.
- ¿Y por qué empezó todo esto? - le pregunto -.
- Puta, va como así - dice Diego - Tu cachai que a los profes ahora les
ha dado porque tengamos identidad de sala, que seamos lugar, me
entiendes. O sea, que peguemos pósters y cosas en la sala para que el
sitio ése nos habite. Bueh, yo quería comprobar hasta qué punto
éramos libres en el cuento, así que traje una porno, ves. Pensaba pintar
de pamela mi puesto, cuando Pablo me la quita y me dice que se la
lleva al baño y que no la espere intacta.
- Ah, mierda -.
- Si po, así que tuve que jugar con las mismas condiciones. Si él la
ensuciaba con mocos, él se iba a ensuciar con mocos, me entiendes. Así
que empezó la guerra. Supieras cuánto talento le puse a mi hijo. Ese
pollo lo saqué del colon, hueón -.
- ¿Y ése es este? -.
- Sí, pero evolucionado. Lo que pasa es que Pablo también tiró uno, y
cayó encima del que ves acá. Entonces yo me fui en la volada, y tiré
uno encima, y él tiró otro, y así. Después llegaron el nacho y el daviko y
se mandaron tres cada uno con mucho ímpetu, cachai. Y el resultado:
esta maravilla arquitectónica. Mi hijo, Ed Jesús Vid.
- Es sinceramente hermoso -.
Ágata me mira y se levanta. Le escupe un par de ojos.
- Construyamos algo nuestro - dice Ágata -.
Y yo le escupo un corazón.
24. BOLAÑO.
Bolaño ha muerto.
- Yo tenía tu edad - dice Eduardo por el teléfono.
He terminado con Ágata. Hace cinco minutos. No sé por qué lo hice.
- Yo tenía tu edad cuando murió Cortázar - dice.
Eduardo al otro lado, porque Bolaño. Él,
Quién sabe si hoy
O ayer
O mañana, en los idiotas tiempos de la rotación
él ha muerto.
Diego abre la puerta.
- ¿Qué pasa? - dice, con el tono de los que huelen un cadáver -.
- Mierda, Diego, mierda doble y asquerosa.
Mierda, le digo a Diego, y es como si me la tragara entera.
- Bolaño ha muerto - le digo -.
- Me estai hueviando -.
- Vete a la mierda, Diego -.
- No me lo creo, no es posible -.
En los idiotas tiempos de rotación, Bolaño muere mientras pronuncio
estas palabras.
- Bolaño ha muerto -.
- Es… - dice Diego y se atraganta con saliva -.
Escucho la tos compulsiva de Diego, escucho un tic tac que se
pronuncia violenta y estúpidamente. El estúpido e idiota tic tac de las
rotaciones del mundo que nunca, ni ahora ni nunca nos van a salvar.
Porque no
Salvaron
A Bolaño.
- Bebe - le digo - él se lo merece.
- Se abren el pisco y la botella de vino.
Y en ese momento de idiota rotación, se abren.
Ahora es el sonido de nuestras gargantas tragando. De nuestras
lágrimas impactándose con el piso. De nuestros gritos iracundos cuando
salimos a la calle y rayamos un toyota dos mil dos en paula
jaraquemada. Y cruzamos sin pensarlo. Y casi nos atropellan.
- Mierda tu tiempo -.
- Mierda tu supuesta salvación -.
- Mierda tus promesas de paz -.
- Mierda tu Pinochet de mierda -.
Mierda todos tus símbolos. Mierda todos tus sueños americanos. Mierda
todo esto, cada una de las cosas que mató a Roberto Bolaño el martes
15 de Julio del 2003. Mierda elegir vida. Mierda elegir sueño. Mierda
elegir
Cualquier
Tipo
De esperanza.
¿Y cuál es la verdadera esperanza?, pregunta Diego.
No sé, le digo.
Que lea esto. Que escriba esto. Que en las idiotas rotaciones del
mundo, en algún nivel de realidad sea él
Quien escriba
Esto.
25. EL PRINCIPIO DEL FIN Y EL FIN DEL PRINCIPIO Y EL PRINCIPIO
DEL PRINCIPIO Y EL FIN DEL FIN Y TU HERMANA.
(Nota: Antes de que sigas leyendo, te advierto. Este es el capítulo cursi.
Ése que tratas de evadir porque su espíritu reconciliador y sonso te
arruina el resto del libro. Si, yo sé lo que se siente, yo también leí La
vida después de dios de Coupland. Yo sé que después de pasarte por
esto me vas a mandar emails llamándome mamón, o mensajes en la
contestadora acusándome de aweonao suicida y mal parido hijo de una
tía francesa con pene. Yo sé, calculo el riesgo que estoy tomando. Y
supongo que ya te has dado cuenta que te estoy hablando a ti, lector
(dah!), claro, esa wea es obvia… bueh, da lo mismo. El asunto es que
te hablo a ti, porque a pesar de que el resto de este libro está escrito en
presente, te habrás dado cuenta que soy yo quién está escribiendo esto
(se escucha el eco de un "dah!"). Que en algún punto del libro que
estás leyendo (mi presente), decidí escribir este libro (mi presente)
situándote en este momento… ¿Y te diste cuenta? Claro. Este es el final
del libro. Esa parte donde esperas que todo se resuelva en cierta
medida, y quedes con una gran verdad y una especie de salvación. Lo
cual dista de lo que ocurrirá en este capítulo. Lo que sí te prometo:
muchos espacios en blanco, y un vacío que no te cuento).
1.
Breakthrough: Bolaño está vivo.
Breakthrough: Ágata desapareció.
Retrocedamos. Situémonos.
Estás en la casa de tu tía. Estás en internet. Conversas con los tipos.
Entonces piensas, mierda, tengo que salir en 15 minutos. Te preparas,
y luego no encuentras locomoción. Y luego tomas un taxi. Y luego
tomas el metro. Y luego haces transbordo. Y luego, estás ahí. Y no se
han ido.
Es algo así.
Entonces le doy la mano a Diego, y observo a las ellas. Javiera
Bustamante, Daniela y Valentina. Las saludo. Caminamos.
Hoy día no he tenido tiempo para sentirme solo.
La ausencia de Ágata. Creo que sé por qué corté con ella.
Pero en fin. Caminamos por providencia hasta Flannerys, el bar
medieval (donde todos hablan élfico y se visten de duendes, claro), y
nos sentamos en una de las mesas de arriba. En el bar, una secta
abanderada de adoradores de Magma, el grupo de rock progresivo,
exhalan un himno incomprensible mientras en la pantalla suena Pink
Floyd. En sus palabras podemos apreciar riffs reiterados de un canto
muy pubiano. De pub, no de pubis. En fin, un canto alcoholizado, como
entonando (sin doble sentido) un himno escocés que apoya a un equipo
de fútbol inexistente, pero cervecero.
Es decir, estamos sentados, y nos da por quemar cosas, como palillos,
el costado de la vela, un pedazo de camisa, un gato en la ventana, los
extintores, etc. Pero piola. Y entonces llega el mesero y nos dice que
qué queremos. Parece cacareo pensándolo bien. O quizás estoy un poco
volado.
Entonces le decimos, y se lleva las tablas de madera que tiene por
menú. O la imitación de tablas de madera, para hacernos sentir en el
medioevo.
- ¿Cómo estai, Mauri? - dice Javiera Bustamante -.
¡Cabalgadme, nena, cabalgadme!
- Bien, ¿y tu? -.
- Decente.
Nos sirven lo pedido. Para mi una escudo. Se lo dedico a la nostalgia,
tan mal comprendida ella.
- ¿Puedo tomar de tu cerveza? -.
- Claro - le digo a Javiera -.
- Gracias - dice, y sorbe.
Detengámonos un momento y observémoslas.
Está Daniela, de quién jamás recordaré el color de ojos, y puedo hacer
una descripción Clairedaguiana bastante acertiva. Tiene mejillas.
A la derecha, está Diego, de quien no haré descripción.
Más allá, podemos ver a Valentina, que es muy callada y tiene una aura
como de gótica sin serlo. Y es como hermosa, qué sé yo, labios, rostro,
ojos; dejémosle la descripciones a la Allende, ¿bien?
Y está Javiera Bustamante, que si no mal recuerdo es:
- Piel
- Senos
- Labios
- Pelo; uñas; lubricación.
Y estoy yo, que debo tener una imagen, pero me siento menos que
nada.
Y por un segundo somos nosotros. Un grupo dispar.
- Cacha, los canutos le están rezando en inglés a Madonna -.
Es algo así.
Luego de hacer todo lo que se hace en esta clase de situaciones:
- Quemar.
- Fumar
- Tomar.
- Conversar.
- Y varios verbos con ar que para nuestra desgracia no son ni jalar ni
paraguayear.
Luego de todo eso, se decide. Vamos a la blondie.
Pero antes, la imagen de Diego tirando con Javiera y Daniela. Estar ahí
con una cámara fotográfica.
Caminamos por una calle. Sí, hueón, la que nunca tendrá nombre.
Aunque insisto, en Santiago debería haber una calle que se llamara
paraguay. Sería increíble. A pura paja y paraguaya. O sino:
- Avenida Rusia,
- Diagonal Camboya.
Qué sé yo.
Caminamos, y nadie dice nada. Tomamos micro un poco más allá del
Flannerys.
Con Diego, nos sentamos autisteando de las minas.
- Quedémosla mirando harto rato - le digo a Diego, refiriéndome a
Javiera.
- Ya - dice Diego.
La quedamos mirando. Un delgado chorro de baba corre por mi
mentón.
Que no es:
- semen.
(Ya, si sé que no es la gran lista. Qué querías, he estado tomando)
(es mi vida, ¿ya?)
Observo un poco más a Javiera Bustamante.
- ¿Alguien sabe dónde queda la blondie? - dice Daniela -.
- Ni idea -.
- ¿Pero tú fuiste una vez o no? -.
- Claro.
O sea, yo y el cogollo psicotropizado en mi sangre.
- No sé, falta poco - le digo.
Javiera se para y se acerca al conductor. Un rato después nos bajamos
en la blondie.
Espacio en blanco.
Vacío en negro.
Ojo, oreja, esternón, wachulín.
Entramos a la Blondie.
Las minas dejan la ropa que les sobra en algún lado, ya no lo recuerdo
bien, y con el Diego bajamos a ver más o menos de qué se trata.
Posibilidades de descripción de entrar a la blondie:
- La cortazariana: bajando por las escaleras a un ritmo violento y
ajustado, de esa manera, tomando el pasamanos como poseyéndolo,
como si en el fondo, en esa noche, y dentro de esas ánimas
ennegrecidas, el pasamanos nos poseyera con el ritmo del final.
- La carveriana: bajamos las escaleras.
- La palahniukeana (¡cómo se pronuncia esa wea'!): Me calenté bajando
las escaleras y maté a un tipo, pero la weá era chistosa.
- La donosiana: La escalera era prole y me dio cosa tocarla, podía estar
cochina y llevo un abrigo de sus doscientas lucas.
- La borgiana: en teoría, la escalera representa la bajada de los
drogadictos en conjunción onírica con la bajada inmortal, la cuesta
debajo del espiritismo a las cuatro cuarenta y cinco, en alguna parte de
buenos aires. Y no güitrié porque soy borges y soy seco.
- La serguilagueana: Es que bajar las escaleras es under cachai, em, es
como la juventud que se cree ni ahí, o sea, no, em, espérate, em, que
es ni ahí, no, que no es ni ahí, pero que está bajando una escalera
porque es under o sea yendo hacia abajo, y… em, no sé, hueón, estoy
rehabilitándome. ¿Tení metanfetiaminas?
Algo así.
El asunto es que bajamos las escaleras y entramos a la blondie.
Lo que no te he contado: después de que Diego tirara con estas dos
minas, he tratado de no pescarlas.
Por miedo a que de ahí salga algo superficial. Por miedo a volver a lo
mismo de antes de Ágata.
Pero observo a Valentina, la niña callada, y no sé. Es como si quisiera
destruir algo bello. Esta noche, sabes. Quizás necesito algo superficial.
- Hola - dice Javiera Bustamante con el rostro a dos centímetros de mi .
- Hola - le digo.
Y entonces acerco mi rostro. Y pasa.
- ¿Ahora con la Dany? - me dice Javiera.
- No - le digo, porque en el fondo… porque en el fondo quiero salvar
esto. Porque de lo superficial también puede salir algo bello.
- ¿Y entonces? -.
- Ven - le digo.
Y nos juntamos en el final de la pista, y tiramos por unos 30 minutos.
Un solo beso. Yo le aspiro la lengua. Ella me muerde el labio. Yo juego
dentro de su boca. Ella me muerde la lengua. Tan fuerte que no siento
nada.
A veces me pregunto qué me quería decir con eso. Si lo que buscaba
era dejar una marca en mi. Si, por alguna razón, necesitaba
desesperadamente hacerme daño para marcarme con sus dientes. Para
alcanzar mi alma.
Aunque suene cursi. Ya te dije que iba a haber esa clase de cosas.
Porque, de hecho, estoy empezando a pensar que algunas verdades sí
son cursis.
- Ven - me dice Javiera.
Avanzamos por un pasillo, y luego subimos hasta otro ambiente. En una
mesa más arriba, encontramos a Diego, Daniela y Valentina.
- ¿Qué se cuenta? -.
- ¿Te estás quedando dormido, Diego? -.
- Más o menos - dice Diego.
En algún punto, Daniela y Javiera me llevan a bailar.
- Yo subo - les digo después de un rato -.
- Nosotras nos quedamos bailando -.
- Bien -.
Las imagino atracando pesado. Daniela le agarra una teta a Javiera,
Javiera mete la lengua entre los muslos de Daniela. Y yo me caigo
accidentalmente en medio de todo eso, y aspiro.
Por alguna razón, pienso en Bolaño. Y no en donoso.
Cuando llego a las sillas de arriba, Diego está durmiendo en el hombro
de Valentina y me siento a un lado, pensando en Bolaño y en Ágata una
vez. Y otra. De nuevo. Ágata
Over
And
Over me.
Lista de cosas que se pueden hacer en este momento:
- Nada.
Lista de sentimientos que se pueden tener:
- Ninguno.
Lista de idiotas perdedores sentados en lo oscurito:
- Yo.
Nueva lista de sentimientos que se pueden tener ahora:
- Te lo imaginas.
¿Te ha pasado que ves al futuro como una estúpida ventana de mierda?
¿Y que miras por esa ventanita idiota, y no ves más que caminos muy
largos y agotadores que no llevan a ningún lugar, onda una calle vacía
donde los últimos drogos de este infierno se jalan el último relajante
muscular de la existencia, y todo ahí es un paso atrás mejor, todo ahí
es mierda a menos que pudiéramos retroceder? ¿Y sin embargo tú
estás ahí, junto a la ventanita del paso primero, y todo pinta igual de
vacío y solitario porque la maldita e idiota ventana que es el futuro
sigue siendo una mierda en el presente? Te ha pasado. O te pasará.
La advertencia primera sigue en pie.
Porque, ¿de qué chucha sirve realmente esa ventana?
- No sé - dice Diego, despertando -.
No sé, el ícono de una generación. De la mía. El gran no sé que dará
final a este libro.
- Quizás no necesitamos esa ventana -.
- Quién sabe - le digo -.
Los ojos de Valentina desviándose. Llega Javiera Bustamante.
- ¿Quieren bailar? -.
- No - dice Diego -.
- ¿Quieres bailar, Vale? -.
La toman de la mano y se la llevan a la pista dos.
- Chau, Diego - le dice Javiera.
- Chau - digo yo, en la silla de los extranjeros -.
Pero no me escucha.
No voy a describir la conversación que tuvimos después con Diego. Sólo
diré que fueron las palabras claves del resto de mi vida. Que si hubieras
estado ahí, quizás nada de esto sería igual. Y no finalizó con esperanza.
No finalizó con juventud de mentira y burguesía salvada.
- Es extraño - dice Diego.
- Sabes - dice Diego -.
Y nada más importa.
2.
Breakthrough: yo soy Diego.
Breakthrough: Mauricio no existe.
Cualquiera pudo ser Mauricio. Cualquiera pudo ser el pololo perfecto
para Ágata. Cualquiera pudo terminar con Ágata por cualquier razón
que se le ocurriera a cualquier idiota en cualquier parte del mundo.
El espacio se llena fácilmente.
Yo soy Diego. El extranjero. Nunca viví algo así de perfecto. Otros
tuvieron a Ágata, y con una mezcla de ellos he inventado a un
personaje. Mauricio Peralta. Yo siempre he estado solo.
Y Ágata no sabe ni siquiera por un segundo que lo he pensado.
A eso me refería con terminar con Ágata. Pero remontémonos.
Situémonos.
En el 2003, en un foro en internet, nació Fyes. Que no es una secta sino
una cultura. "Fuck You, Estoy Solo", fue mi regalo para el mundo. Un
grupo de gente que cada vez se hizo mayor. Un grupo de gente que era
genial. Un grupo de gente a quienes nadie les había dado la
oportunidad de saber que podían conocerse, y hasta que nació Fyes y
se dieron cuenta que la tenían. Que los cartuchos imbéciles compañeros
de su colegio no eran lo último. Que no tenían destino. ¿Por qué no te
había contado todo esto?
Porque: ésa es la revolución de la basura. Y si realmente existe, ¿qué
pasa?
Porque: ya no existe. Porque Fyes acaba de morir.
Este es el asunto:
Después de juntarnos con Javiera, otro tipo de Fyes (Giovani) terminó
pololeando con ella. Y esto
Porque: yo era el extranjero dentro del grupo.
Porque no es Javiera con quien tiré. Porque hace tres semanas que no
veo a Javiera, y tiré con Nicole, una amante del negro antigótica y
máquina antisentimientos. Según descripciones de ella.
Así que he decidido contarte la verdad, ves.
¿A qué me refiero con que terminé con Ágata?
A que he decidido dejar de tener amigas. A que estoy aburrido de estar
solo. A que no aguanto más ser el segundo en la fila. ¿Recuerdas que el
número dos me parecía excitante? Ya no lo soporto. Estoy aburrido del
puto bloody mary. Estoy aburrido de no tener a nadie por completo, y
estar incompleto en mi rincón de extranjerismo.
Necesito
Ser el primero
En conocerte.
Breakthrough: Ágata sí existe. Y Ágata ha desaparecido.
Esta tarde,
Ágata
Me llamó.
Y esta vez no lo describiré como Cortázar, Borges, Sergio Lagos… será
como Diego. Como Maori Pérez.
A las seis, suena el teléfono. Estoy solo en la casa, y al otro lado siento
una respiración albina. No me preguntes cómo lo sé. A los cinco
segundos escucho un ¿aló?
Es ella.
- ¿Aló? -.
- Hola, Ágata -.
- ¿Diego? Te marqué inconscientemente -.
- No sabes cuánto -.
- Vaya, bastante irónico para haberte ido -.
De Fyes, a eso se refiere.
- ¿Lo estás pasando bien? -.
- De maravillas, no hay cosa que me entretenga más que estar
amargado -.
- ¿Estás fumando? -.
- Estoy convencido de que los yerbis tiene marihuana. Planeo morirme
de sobredosis de cigarros. No van a cachar una cuando me hagan la
autopsia -.
- Soñé eso el otro día. Que morías de sobredosis -.
- Eso o se me desangra la lengua -.
- ¿Por qué te fuiste de Fyes? -.
- Tú sabes por qué -.
- La verdad, sí -.
- ¿Y? -.
- Y que nada que ver, po, tú lo creaste. Como decían en el foro, te
necesitamos -.
- En la tele están hablando de la memoria frágil. De preservar
documentos y recuerdos escritos. Me pregunto si, cuando muera de
sobredosis de nicotina, recordarás algo de esto -.
- Pero te mueres y me penas, ¿ya? Después carreteamos en el más allá
-.
- Nah, estaría ocupado buscando a Kurt Cobain -.
- ¿No estaba en una isla? -.
- Ya no sé, querida, estoy demasiado deprimido como para pensar
positivo -.
- No te vayas de Fyes, quieres… nos harías falta. Se siente bien tu
presencia.
- No todos piensan lo mismo.
- Quizás no deberían importarte todos.
- ¿Y Giovani? Ese hueón está pololeando con la Javiera y hasta un guiño
me echó -.
- Pero le echó un guiño a todos, era como su despedida. Desde ese lado
es comprensible -.
- ¡Por la cresta, todos aman a Giovani! -.
- Quizás él es más maduro, y lo envidias -.
- Quizás no me interesa ser maduro, y esta conversación se acaba… se
desvanece… -.
- Te extrañé, sabes -.
- Yo también me extrañé -.
- Idiota -.
- Perna -.
- Idiota una y otra vez -.
- ¿Por qué, Ágata? -.
Porque me estaría engañando: dice Ágata.
Y Ágata dice: ya no hablemos más de eso, ¿quieres?
Ahora me tengo que ir, dice.
- Pero te llamo mañana - dice -.
Okey, mañana.
- Te extraño, Ágata - pero ya había cortado-.
Esa noche vi las noticias. Hablaban de Sadam Hussein. Que había
escapado, y que los gringos mataron a sus dos hijos. De pronto, se me
ocurre.
Todo eso es mentira. Sadam hussein es mentira. Los gringos controlan
toda la prensa. Entonces, ¿por qué no matar a sadam hussein? Porque
quieren a Irak. ¿Y por qué no tomarse Irak de una? Por los procesos.
Entonces se me ocurre de verdad. Esto es realmente mentira. Los
gringos ya controlan Irak. Irak no existe. Estados Unidos ya controla
todo el mundo. Todo es mentira. ¿Entonces por qué no lo dicen y ya?
Por el proceso. Porque si todo esto no pasa por un proceso, la gente
puede perder un tornillo. Estamos condenados desde que nacemos.
Entonces sí que se me ocurre. De verdad y por completo.
Bolaño está vivo.
Bolaño no murió. Bolaño lo que hizo fue escapar. Y estados unidos lo
quiere ocultar por el valor del proceso. Para ocultar que realmente haya
una revolución en contra. Para aplacar cualquier sublevación. Bolaño
está vivo. Pero en la verdad televisiva, Bolaño está muerto. Estados
unidos mató a Bolaño porque un muerto no puede empezar una
revolución.
Y si salgo ahora, puede que lo alcance.
3.
Corro por Larraín y mi tos, es como si realmente dejara aliento a
marihuana.
Corro.
Corro más, corro más tiempo, más rápido, más distancia. Llego a
Irrarázabal. Tomo micro hacia el aeropuerto de Pudahuel. En la micro
voy pisando fuerte. Pisoteo en mi asiento. Pisoteo cuando me levanto,
impaciente. La micro toma una curva y casi me voy de hocico. Pero en
fin. Me vuelvo a sentar.
La micro se detiene y bajo en la esquina. Corro un tanto más. En una
de las entradas del aeropuerto se ve. Sus anteojos, sus cejas grandes.
Su rostro enflaquecido. El autor de Una Novelita Lumpen entra al
aeropuerto de pudahuel.
Corro rajado. Corro como si mis pulmones no existieran, como si las
pantorrilas fueran cosa del pasado, como si rajarse los pantalones fuera
algo que inventaron los del realismo mágico, como si morir asfixiado en
la calle fuera
Algo que
Un pelagato
Dejó escrito en la biblia.
Y entonces alcanzo la entrada. Y subo las escaleras. Y tomo la primera
puerta que se me cruza. Y llego a la ventana.
Para observar el avión de Bolaño yéndose.
Nunca más vi a Bolaño.
Cuando salí, le pregunté a una secretaria hacia dónde iba ese avión. Me
dijo que a la Patagonia.
4.
Pasé un buen tiempo deprimido. Vagaba por las calles. Macheteaba en
las esquinas para plata para comprar yerbis. Vivía la mayor parte del
tiempo en bares, sin amigos. Cuando iba al colegio, estaba tan cagado
que ni siquiera despertaba. Y de verdad, paseaba mucho por las calles.
Como buscando algo que no sabía qué era.
Entonces estoy en la casa, y suena el teléfono. Se escucha la
respiración de alguien al otro lado. Cortan.
Luego llamo a Ágata, y referirse la breakthrough número dos.
- ¿Qué Ágata? ¿De qué chucha estás hablando? -.
- Ágata, hombre, Ágata Olivo -.
- ¿Qué mierda? - dice la voz, dirigiéndose a otra voz - este hueón habla
de una Ágata, ¿conoces a alguna Ágata, Victor? -.
- Para nada - dice la otra voz -.
- Lo siento - dice la primera - no hay ninguna Ágata -.
Corto.
Quizás tuve el número equivocado. Quizás nunca hubo una Ágata.
Pero lo que era seguro, si es que la hubo, había desaparecido.
Salí a la calle. Se sentía el principio del fin, de Demian. O quizás el fin
del principio. O el Principio del principio. O el fin del fin. O tu hermana,
pero la verdad es que siempre digo esa wea, y creo que algo ha
terminado el día de hoy. Algo es inminente.
Y salí. Y caminé más que la puta.
Caminé por Larraín. Por Blest Gana. Por la plaza ñuñoa. Por la plaza
egaña. Por tobalaba. De tobalaba al aeródromo. De larraín a Paula
jaraquemada. De Paula a Violeta parra sur. A violeta parra norte. Hasta
vespucio. Hasta vicuña mackena. Hasta el 14, en la florida.
Pasó una tarde y se puso a llover. Me resguardé con unos diarios y
luego seguí caminando. Machetée en una esquina para comprar algo
que comer. Y seguí caminando.
Me fumé un cigarro. Miré hacia el cielo en la lluvia. Tragué ácido del
agua caída. Tragué barro que me tiraron los autos que pasaban. Me caí
en un charco y seguí caminando.
Porque ese día iba a encontrar algo.
Y seguí caminando.
Hasta que lo vi, eso que necesitaba. En una esquina, un cuadro de
imagen, un centímetro en la esquina de mi ojo, un pequeño detalle en
el ojo de la aguja que era seguir caminando, esa pequeña cosa era un
cabello blanco.
Era Ágata.
Caminé más rápido. Y sin embargo no había nada. Di la vuelta a la
esquina y no había nada. Lo más probable es que hubiera sido una
mota de polvo en mi párpado. Lo más probable es que hubiera sido un
escape de gas. Un hilo canoso de mi pelo. Un espacio en la luz del sol
que reflejó con mi párpado y me hizo pensar que en la esquina estaba
Ágata.
Lo más probable es que Ágata no existiera. Que, en toda esta mentira,
yo me hubiera mentido a mí mismo inventando a la mujer perfecta.
Y seguí caminando. Ya no sabía cómo volver. Ya no tenía hogar. Ya me
había olvidado del colegio. Seguí caminando hacia el vacío, hacia esa
ventanita idiota dibujada de blanco.
¿Por qué seguí, por qué esta tremenda idiotez?
Te la digo de una. En palabras de Cortázar, nuestro mayor enemigo:
"¿Encontraría a la Maga?".
***
II
DEL SALTA PA'LLÁ:
REVISTA "DOCE SUICIDIOS Y CUARTO".
Introducción: (Carnet de existencia)
El editor de la revista explica en un artículo: "Segùn Otero 'la vida es
maravillosa. El problema es que hay cierta cantidad de distracciones
que limitan esta apreciación'. Lo que el autor no dice es que tales
distracciones componen una tristeza inconmensurable. Y que esta es
una de esas noches".
(Pàgina 12. Pàrrafo 15.)
En las postrimerías de la Revista, un artículo de Camilo Marks sobre
Bolaño: "Roberto Bolaño es, hoy en día y sin lugar a dudas, el mejor
escritor vivo en lengua española. Una afirmación así debe, por cierto,
calificarse, aclararse, profundizarse. Si decimos 'el mejor' es porque
estamos planteando una comparación: es decir, hay muchos autores
inferiores a Bolaño y ninguno de cuantos practica el oficio literario en
nuestro idioma lo supera en la actualidad".
(Página 69. Párrafo 1.)
Y en la Zona de Peralta el día siguiente, la contestación de Mauricio
Peralta: "Escritores en lengua española hay muchos, y son todos
inferiores. Pero inferiores a mi. Bolaño está muerto en cuerpo y en mi
corazón. Lo está desde la contraportada. 'Altura literaria'. Ése no es
premio, es insulto. Los Nadistas, los Basura, nos rebelamos contra tu
bolaño, tu cortázar y tu joyce. Aunque joyce no deja de tener encanto
(todo escritor borracho lo tiene). No entiendo como puede semejante
vejestorio de artículo pertenecer a una revista (o fanzine) que debería
definirnos. Camilo Marks, espero tu respuesta en la entrada de mi culo".
La editorial del mismo día contiene el siguiente fragmento: " 'Los
premios que recuerdo con mayor cariño e incluso mayor fervor son esos
premios de provincias, porque cuando yo gané el Herralde, no me hacía
falta el dinero, y cuando gané el Rómulo Gallegos, tampoco. Pero
cuando yo ganaba esos premios de provincias, cuando llegaba el
cheque, era como agua bendita, era maná caído del cielo, pennies from
heaven. Realmente, el favor que me hicieron los que me dieron estos
premios es enorme. No sabrán jamás la enorme gracia que derramaron
sobre mi…' Roberto Bolaño. Dunia Gravas Miravet, op. Cit., p. 56"
(Página 4. Párrafo 15.)
Patricia Espinoza escribe en la Sección Críticas un análisis sobre
Lumpérica: "Diamela Eltit irrumpe en el triste panorama narrativo
chileno con un libro que se mueve entre la poesía y la narrativa,
produciendo y produciendo absolutamente todas las técnicas literarias
concebibles para realizar un texto innovador y catastrófico". (Más
adelante) " Melancolía en los textos de Eltit. Esto no es novedad. La
prosa de esta escritora juega con los sentimientos más oscuros del
espíritu humano, que se funden y se mezclan con el lenguaje, con la
visión de la cámara. Una cámara observa todo. Un director ordena. Los
personajes de la plaza están condenados a su destino.
Pero en sus errores, se rebelan".
(Página 17. Párrafo 1. Luego, párrafo 4.)
Entrevista a Floridor Sepúlveda (escritor Nadista) en el tercer número: "
Pregunta: ¿Cómo va tu nuevo libro? Respuesta: Como el horto. No. La
verdad es que estoy haciendo cuatro libros al mismo tiempo. P: ¿Y de
qué tratan? R: El primero se llama logos, y es una parodia a la biblia,
algo así como 'y nació el mundo, y dios era la palabra, y la palabra era
elefante". Los otros tres son sólo proyectos de Poemarios que mandaré
con diferentes seudónimos al concurso del Ministerio de educación. P:
¿Y cómo te definirías en este momento? R: triste pero pujando. Quizás
pueda parir un buen día".
(Página 12. Párrafo 3.)
Editorial del día 11 de Septiembre: "Otra frase de Otero: ' La wea' es
infinita'. No carece de sentido. Vivimos en una democracia que nos
vende. Y la violencia contra las manifestaciones es bastante mayor que
la velocidad con que se gesta la violencia de los que luchan. Hoy es un
día catastrófico. Pero, saben: lucharemos. Todavía quedan minutos
para el final".
(Página 4. Párrafo 4.)
En el decimocuarto número de la revista, el siguiente fragmento del
cuento Los vacíos en la oscuridad, de Mauricio Peralta: "2: Lo que hay
es lo que queda" (Antes, una cita a una página web sobre la historia de
la música industrial: "La ley sólo rige para los infelices que no pueden
eludirla".)
(Página 45. Párrafos sexto y primero, respectivamente)
X - Rasta A. M. escribe sobre la gloria en la literatura: " Nunca
buscamos fama. Nunca la quisimos. La fama estaba en una anaquel
para los privilegiados que podían pololear con minas de tetas grandes. Y
se sumergían en esas tetas grandes, y el tamaño de su fama era el
tamaño de su ego era el tamaño de su auto era el tamaño de sus
pierciengs era el tamaño de las tetas. No pertenecemos a ese lugar. La
Gloria viene por otro lado. Quizás seamos la juventud de los ni ahí.
Quizás no lo seamos, y el puto de Sergio Lagos tenga razón. Quizás
seamos pernos que no han encontrado mejor manera de publicar libros
que en una página web, o en un cd en formato pdf o flash o lo que sea.
Incluso esta Revista. Quizás seamos esa generación perdida, como
decía Serrano en una canción de amor. Pero la Gloria si es asequible.
Nos arde en la mano. Como a Vallejo debió arderle el poder de su
poesía en alguna oportunidad. Su rebeldía.
Somos perdedores. Somos elegidos".
(Página 31. Párrafo 4.)
Portada del número 15: "La postura Nadista aparece en el noticiario de
megavisión".
(Abajo una foto de la estatua del bellas artes con la frase NI AHÍ escrita
con un marcador indeleble)
Manifiesto del Nadismo, con la aparición de la Revista: " PRIMERA
BOTELLA DE CERVEZA: Odiamos todo lo que hubo antes. Esto no es
nada nuevo, por lo cual nos deprimimos y tomamos la siguiente botella
de cerveza".
(Página 5. Párrafo 1.)
Diamela Eltit critica un disco de tool en la sección Crítica de Discos: "Lo
que resta de este anochecer será prender el aparato y meter el disco.
Ahí L. Iluminada lo percibe. El tercer ojo se abre". (unas líneas antes).
"Si hablamos de referentes de altura artística, en la lista cabe tres
nombres. Tool, Kerouac y posiblemente el Spoonman de Sound Garden.
En la música de Tool hay una inspiración inagotable, pero también
podemos mencionar que hay violencia, que hay desenfreno, que vemos
melancolía. Maynard James Keenan es un hombre que ama y odia a la
humanidad. Según sus propias palabras. Y ninguno de sus dioses podrá
salvar a Estados Unidos de la ola venganza que se cierne sobre sus
hombros. Tool ha llegado".
(Página 23. Párrafos quinto y segundo respectivamente)
Entrevista a Arturo Delano (escritor Nadista): "Pregunta: ¿Qué
escribes? Respuesta: Ahora estoy escribiendo un libro de poemas. Se
llama 69. Son 69 poemas surrealistas sobre el sexo oral entre dos
sujetos. P: ¿Y después? R: Estoy armando un libro que hasta el
momento se llama 'Los flaitectives que al mismo tiempo son la raja". P:
¿Un título tan largo? R: Es un libro largo. P: ¿Y de qué trata? R: De un
estudiante de medicina que conoce a dos médicos que inician un
movimiento medicinal. Se llama 'Realismo visceral". Después de unas
cuantas operaciones, son demandados y mueren en la cárcel. P: ¿Y qué
lo hace tan largo? R: Entrevistas como ésta".
(Página 44. Párrafo 3.)
Manifiesto del Nadismo, con la aparición de la Revista: " SEGUNDA
BOTELLA DE CERVEZA: Nadismo es la estructura no formal de las
cosas. La eyaculación precoz de Abraxas, el primer aborto comenzado
de la tierra. Y aún sin inventar, dejémoslo claro, está wea' es imposible,
y vámonos a la tercera botella de cerveza".
(Página 5. Párrafo 2.)
Díaz Eterovic comenta un disco de Type o Negative en el número 16 de
la Revista: "Terminé de leer este artículo, y lo releí, una y otra vez. Me
sentía fragmentado, inconcluso, partido en dos. ¿Hay alguna manera de
explicar lo que es Type O Negative, sin desgastarlo, sin dejar al grupo
con un saborcito a haberlo rasurado? Ya sabemos que los Negative son
más que gótico, más que trash, más que música noventera con
teclados y una voz profunda y penetrante. Type O Negative es una
cultura. Cada cierto tiempo, después de muchos procesos, la música se
vuelve banal y aparecen del fondo grupos como Type O Negative, que
simplemente dan ganas de buscar y buscar información, ver las fotos
de sus autos pintados como las monstruosidades gore del 11, escuchar
los violines y el contrabajo con un ánimo acelerado. Por eso Type O
Negative es un grupo fenomenal. Es una cultura. Tanto, que casi no
existen".
(Página 23. Párrafo 3.)
Palabras al final del número 17 de la Revista, el último número: " El
suicidio no es una opción"
(Página 56. Párrafo 7.)
Editorial del primer número: "Según Otero, la vida es maravillosa. Es
cierto, pero hay distracciones. Y en base a estas distracciones es que
vamos construyendo la rutina. En base a estos malditos columpios es
que vamos creando silencio. Y ese maldito silencio que es la crítica, que
es la literatura contemporánea, nos lleva a preguntarnos: '¿Queda algo
nuevo?'. En la televisión hay dos clases de personas. Los que hablan
sobre su vida y los que hablan sobre algo más. No me cabe obviar que
ambos grupos son una tropa de tarados. Todos han caído en el maldito
silencio. ¿Y lo nuevo?
El Nadismo es una tendencia que nació en 1989 cuando la dictadura en
Chile terminaba. Y tampoco me cabe obviar que habla justamente de
eso. Del sentimiento que produjo la democracia en la Juventud.
Habremos tenido 16 años Floridor y yo cuando iniciamos el Nadismo.
Sentíamos que nos habíamos perdido todo. Que llegamos atrasados.
Esta revista comienza el 2003 con un tiraje de 3000 ejemplares por
mes. Somos un grupo de periodistas que no alcanzamos a ser
escritores. Porque llegamos en el tiempo equivocado. No leímos
suficiente. No analizamos suficiente. Nuestra literatura es la nada
misma. La equivocación. Pero desde ahí, vamos construyendo un
mundo, forjando una realidad que sea nuestra. Porque Chile no nos
basta. Porque las patrias no nos bastan.
Bolaño escribía como nosotros. Pero se hizo mala propaganda. Ahora
Bolaño ha pasado al olvido.
Réplicas y réplicas de réplicas es lo que esperamos suscitar. Y acabar
con esos malditos silencios que matan".
(Página 4.)
En el 2004 la Revista publica un ejemplar dieciocho (casi inexistente)
con un cuento de Bolaño. El cuento se llama Carnet de Baile. No tiene
un tiraje mayor a los 20 ejemplares.
" El martes 15 de Julio del 2003, cuando este libro iba en camino a la
imprenta, murió Roberto Bolaño, en Barcelona, España. No nos queda
más que decir, junto a Nicanor Parra: se nos adelantó Bolaño".
"Territorios en Fuga: estudios críticos sobre la obra de Roberto Bolaño",
Patricia Espinosa, Editorial Frasis. También citado en el libro "Los
Nadistas Suicidas: cómo morir antes que Bolaño", autogestionado y sin
editorial.
"Y descubrí un mundo muy complejo en mi imaginación, ahora soy feliz
y creo en el amor".
(LA INTRASCENDENTE TRASCENDENCIA Y DILO TRES VECES RÁPIDO:
MANIFIESTO DEL NADISMO)
PRIMERA BOTELLA DE CERVEZA:
Odiamos todo lo que hubo antes. Esto no es nada nuevo, por lo cual
nos deprimimos y tomamos la siguiente botella de cerveza.
SEGUNDA BOTELLA DE CERVEZA:
Nadismo es la estructura no formal de las cosas. La eyaculación precoz
de Abraxas, el primer aborto comenzado de la tierra. Y aún sin
inventar, dejémoslo claro, está wea' es imposible, y vámonos a la
tercera botella de cerveza.
TERCERA BOTELLA DE CERVEZA:
Nadismo es alcoholismo, y alcoholismo es Nadismo. Son sólo imágenes.
No tenemos nada que contar. La trama no importa. Todo lo que
teníamos que decir ya lo inventó la televisión. La televisión es imbécil,
nosotros también, cuarta botella de cerveza.
CUARTA BOTELLA DE CERVEZA:
La creación no importa. La imagen es todo. "Obedece a tu sed". Puta la
wea' imbécil… 5ta botella de cerveza…
QUINTA BOTELLA DE CERVEZA:
Lo imbécil es bueno. Lo podemos concluir después de 5 botellas. Existe
la imbecilidad: alcohólica, grunge, gótica (todos siguen a un líder,
nosotros somos nuestro líder). Esta es una contradicción, por lo tanto
somos imbéciles y nos amamos. Como forma de amor, sexta botella…
SEXTA BOTELLA DE CERVEZA:
Me eduqué escuchando led zepelin, pink floyd… puta, ¿cómo esperan
que baile esta wea'?
SÉPTIMA BOTELLA DE CERVEZA:
¿Qué sabemos de los yuppies y los hippies? Por la cresta, ¿qué sabemos
del golpe militar? Igual alegamos… 8ª Botella.
OCTAVA BOTELLA DE CERVEZA:
Nadismo es la mina que come sola en un lugar. Nadismo es el último
cigarro de tu paquete, y tu paquete no literal. Tu amigo homosexual, la
gótica lesbiana, tu jefe, tu secretaria, la que nunca te pescó, la que te
trae las cervezas, el vocalista de U2… tu amante.
NOVENA BOTELLA DE CERVEZA:
Nadismo es tu profesora de filosofía y mi profesora de castellano.
10ª BOTELLA DE CERVEZA:
hip…
11ª BOTELLA DE CERVEZA:
Nadismo es tu amigo alcohólico y los amigos de tu amigo alcohólico,
alcohólicos. La persona que no puedes sacar de tu mente.
12ª BOTELLA DE CERVEZA (LA RONDA COMPLETA):
Tomar, Güitrear, llamada obscena a tu ex, morir.
EN CONCLUSIÓN:
Nadismo es un niño
Dibujando
En tu cuaderno,
A ESTAS HORAS.
1. (Odisea de los yo-yo)
Una caja de fósforos es el comienzo.
Tomar la cerilla y
Decir adiós.
Te vimos en talca.
Te vimos en santiago, con
Una sonrisa falsa.
Te vimos en concepción
Tomando una hoja de papel y mojándola
Con tolueno
Minutos antes
Del amanecer.
Te vimos salir de la tienda
Hablar con alguien que
No conocíamos
Y que tenía acento sureño y barba de dos días.
Los vimos salir juntos.
Justo antes de que
La tienda
Estallara en flamas incandescentes
Casi las mismas flamas que
Tenía el sol
Esa madrugada.
2. (No les importa)
Es posible que
Cuando
vea
Los siete pecados capitales piense en
Cada uno de los siete pasos hacia el infierno.
Y desee un final macabro, miserable, los pasos tenues
Que tomamos cada uno y yo
Por ejemplo, ahora
Fumo un cigarro.
Es el séptimo menos
De las siete colillas que me quedan para el cáncer.
Ellos
Graban
La conversación.
Habla un tipo sodomizado con una pistola.
Me recuerda
A algo muy latente,
Aquí,
Ahora,
Sin saber
Exactamente qué.
3. (Hálito De Yuppie)
El humo me marea. Ya te lo había dicho.
Ese tipo de gente que juega aquí los sábados por la noche.
Te miran las entrañas. Te las miran tosiendo.
Volar no es un espectáculo.
Te nace de adentro. Un par de ojos y un par de alas.
El humo ahoga, pero estás preparada.
También te crecerán algún día.
Cubierta en sangre como yo y te crecerán.
Juntémonos cerca.
Cuando venía del juego pude sentir algo como un roce y miré hacia
atrás
pero no eras tú.
Pela esa fruta, ok.
Ahora el cuchillo y vuelves a la mesa.
Les dices que no me di cuenta. Les llevas snacks y todo sigue bien.
La traición escondida, el disco de hewlett packard bajo una almohada
en el sillón del living. Que nadie toque el sillón.
Les dices que hubo sorpresa. Luego me llevas a la cama y dejas una
nota junto al velador.
Llamas a los pacos.
Cierras la casa.
Le prendes fuego y
Enciendes un cigarrillo, esperando.
4. (Luciérnagas de orina)
Estábamos
Volados sin marihuana
Subiéndonos a los arcos de la ciudad
Y sacándonos
La mierda
Esa misma mierda
Que
Tu televisión
Tu dictadura
Tu revisteo propagandístico
Nos tiene hartos
Y al levantarnos
Subíamos árboles
Y tomábamos
Hasta que pensábamos en escribir
Los mejores poemas
Esos que
Se te ocurren en las
M-i-c-r-o-s
Y se te olvidan al bajarte.
El título
De este poema
Habla del olvido
se me ha olvidado
mi mejor poema
Y llego a
Mi casa
A mear
Y meo en las sombras
Y el
Último chorro
Lo tiro a la luz.
Entonces lo recuerdo.
Pero nunca
Leerás
Mi mejor poema
Y lo guardaré en un cajón
Hasta que el día de mi suicidio
Se lo lleven
Mis propias cenizas abultadas con seconal.
Ellos dijeron
No eres
Bolaño
Ni lemebel
Ni Eltit
Ni diaz eterovic
Ni cortázar
Ni kerouac
Yo les dije
Que a
Bolaño
Lemebel
Eltit
Eterovic
Cortázar
Kerouac
Me los metía
En la raja.
5. (Veinticuatro horas)
La página en blanco
se quema
por las incontables horas de calor en Santiago.
Pasa un avión, y en
otras salas
un ejecutivo se
ahorca
Y los ojos
miran el vientre
que albergan los brazos
que lo dan por tendido.
Son los recuerdos y sus
horas
a esta hora, cuando
nadie
podrá dejar
de mirarlo.
6. (El sol apagándose en Espartaco)
(y) es el destino
(y) es
buscarla
entre líneas
Ciertos rasgos y señales
(y) son los sueños tardíos de una cabeza decapitada
Son los colores y las formas
Liberando
A los puntos de vista
(y) es una furia inagotable
hacia las cosas
a
g
o
t
a
b
l
e
s
frases de institución que se
rompen con la sagrada (y) en cúspide
y ella dice: ¿Qué quieres que pare?
Y ella dice: ¿Onanismo, no?
Y ella dice: La literatura
No es un
ejercicio de memoria.
Tomar las formas de (y)
Y hacerla
Por unas palabras
Mía.
7. (Cardiograma)
(Yo tenía una amiga)
(éramos amigos con ventaja)
(ella vivía en las afueras de la ciudad)
(No recuerdo cómo se llamaba)
(pero éramos grandes)
(Y también recuerdo que hablábamos mucho por teléfono)
(en su casa sonaba Pulp)
(En la mía sonaba Primus)
(la pe siempre significó algo)
(recuerdo que yo cantaba mucho, antes)
(era para poner la voz grave)
(y luego nos decíamos cochinadas políticas por teléfono)
(Me tienes caliente la Longueira)
( Estoy pensando en Zaldívar)
(esa clase de cosas)
(y luego
ella
me dejó)
(recuerdo la última conversación por teléfono)
(es como si guardara algo muy importante)
(y también tengo esta manía)
(sabes)
(de ir rellenando las palabras que me faltan)
( de ir formando la conversación)
(de irla escribiendo en mi mente)
(ahora escucho alice)
(alicia pierde la batalla en machos)
(y no puedo recordar
su nombre)
8. (Voyeur bajo tierra)
De aquello recuerdo cenizas de papel de diario
Ciertas marcas de inodoros y la mascota diabólica de una banda brit
pop
Unas obras que quedan atrás
y los restos de saliva en una almohada en un hotel en alguna parte
De mi vida y obra no hablaré porque ahora (que todo está en llamas
verdeazules)
La retórica del per se no me incumbe ni a mí ni a los desgraciados que
recuerden haber leído los recuerdos de alguno contra saliva y quién
sabe]
Deseo dejarlo en paz.
Lo destruyan las esperanzas procreadas.
Los moluscos universales y las ideas; mierda, y hasta cero.
Cavilando junto al pacífico has de extender tus brazos y dejarte levitar.
Abrir los ojos un poco
antes de caer.
La verdad poco deseo, y si te inmiscuyo en las redes del océano es
porque
Hoy
Todo
Es
Océano
Aún así
Sólo algo de compañía
Que por eso del destino
Que por eso
Arribe el otro cuerpo y te abrace
Que por eso te abrace y seamos uno
9. (Nuestro)
Mantendremos
Los momentos en alto
Pía
Sólo porque
Lo sientes
No significa
Que haya parado.
La métrica es una desastrosa e imbécil
Puta.
Sabemos de
Casas que
Suben por las calles de Valparaíso
Endebles y agarrando cierta
Rima
Y desinencia intertextual y que
A veces
Las sombras se proyectan
Sobre rostros calcados por el calor.
Podemos sentir
Una canción
Donde la cabeza es un algo
Esas canciones que
Empiezan por la cabeza y terminan donde
Podamos
Deprimirnos
Jugar
Desearlo
Sentirnos
En
Un
Tumulto
Sin que el suicidio
Sea opción.
A las doce de la noche
Estaremos juntando piedras.
Construiremos una torre.
Un mundo que sea Nuestro.
10. (Sobre el frío)
Me gustas cuando tiemblas porque estás como cagándote
De frío
Nadismo
A las 10 de la noche
Hora de
Acostarse
Suena dover
Y yo pienso en una chica literata que adoro.
Puede ser
Cursi
Puede ser auto
Referencial
Onanismo
Onanemia
Dadá entonado
Antipoesía o post-literatura
Los nadistas escribientes
Porque todo
Lo escrito
Hasta hoy
Ha sido dividido en clases sociales
Y nosotros dividiremos la literatura
En modas de freaks pajeándose con personas que conocieron en la
micro.
Pernos que se revientan espinillas y se las comen.
Bellezas que se ponen frenos.
Dover a las 10 de la noche
Nadismo de acostarse
Esa canción que pones
Cuando quieres tener
Sexo con tu polola
Porque para tener
Sexo en la universidad
Necesitas una polola
Y nosotros soñamos con cristina llanos en bragas y sostén.
Como una imagen
Caliente
Chistosa
Sobre nada.
La nada que
nos proteja del frío.
11. (Rambo)
No el militar, sino
El poeta porque
Escuchábamos a Placebo en una pieza
Y ella dice
Si Rimbaud fuera
Uno de nosotros
Probablemente estaría aquí escuchando Placebo.
Y tendría frenillos.
Y vería películas Gore.
Y sería un fanático del I sat a la una.
Y nosotros
Cantando una canción en inglés que no comprendemos
Citando a una canción de
Un grupo argentino que prefiero no recordar
Que es una cita al quijote y ella dice
Si, ese grupo
Es una porquería, citando
A una amiga
Que cita a Salinger
Que en estos tiempos
Extraños
Se parece de lejos a la imagen que tengo
De Rimbaud.
12. (Mierda el mundo)
Cuando descuartizaron a Diego,
En mi casa
Sonaba Nine Inch Nails.
Fue como si
Nos hubieran dado un tiempo
Para percatarnos de todo.
Estábamos vivos y
Él no.
Ella brilla
En un mundo de fealdad.
Ella importa
Cuando nada importa.
Fueron
Un
Conocido
Ku Klux Klan
Tiempo y
Herencia
Entre medio del
Waterclose
Ostentosas
Ratas incendiándose
Listas para
Destruirnos.
Water
Inherente a
Tantos deseos
Hombría y desempeño
Me estoy yendo, Diego
Estoy desvaneciéndome
Instantáneamente
No soy
Sólo
Intento
Deberíamos dejar de
Estudiarlo
13. (Nunca)
Hay rasgos
En las coliflores
Que me recuerdan a ciertos pasajes de cuentos.
Quizás todo es como dice bolaño
Y todos los cuentistas somos
Filenos.
Quizás los cuentistas del pasado
Estamos destinados a la precocidad
De una poesía barata
Dirigirnos a la nada
Siempre alejados
Del satori
Y moriremos vacíos
Sin letras ni piedad
Y perderemos el respeto
A la gente que guste de nuestros textos
Encabezados por el vacío
Del diario
Vivir como si
Jamás
Pudiéramos recuperar el sentimiento primero
El satori desechado
Sólo pidiendo a gritos
Una improvisación larguísima
Que nos lleve
De nuevo hacia
Nosotros mismos.
Buscando algo
O alguien
Que nos salve.
Nunca seremos grandes escritores.
Y lo fuimos.
Nunca seremos grandes pensadores.
Nunca
(Y la carita de messenger
te guiña
un
ojo).
14. (El poema de relleno)
De hecho, la idea
Me angustia
Porque ser el poema de relleno es una
Derrota compartida.
Somos tres
Contra el mundo.
Y realmente pido
Perdón
Por no hablar de cosas importantes
Como la dictadura
O los detectives
O cualquier cosa que sea
Realmente importante
Pero es que
Me da miedo
Que todos hablen de cosas importantes
Y yo ni siquiera pueda decir bien
Lo pésimo que es
vivir
la dictadura presente.
Soy inútil.
Soy el poema de relleno.
Somos tres
Contra el mundo.
15. (Epitafio a un libro de Mauricio Peralta)
Mauricio Peralta fue
Un pésimo escritor
Un borracho
Infiel a sí mismo a cagar
Y nunca supo lo que quería
Pero como
Todos
Los malos escritores
Tenía un buen libro.
No me acuerdo cuál.
Bueh
El asunto
Es que creo
Que
Fue su primer libro.
Vaca en un establo con yumbina, algo así.
Y hablaba
Sobre el prózac.
La gran prisión de
nuestro tiempo.
Mauricio Peralta
Ha muerto
Por jalarse
Cinco frascos de spiron
En el baño de un bar cerca de plaza egaña.
Nunca ganó el nobel.
Ni siquiera el troma.
Ni siquiera ese de la fruta, el que otorga
La academia.
Peralta no fue una gran persona,
De hecho
No ayudó a nadie.
No fue un líder de opinión
Ni una gran celebridad.
No tuvo libros en editoriales ni
Casas en Valparaíso que quisieras visitar
Algún día.
No tuvo código de honor
Y sus chistes
Eran tan fomes
Que
Cortázar
Se reía en la tumba.
Nunca hizo nada bueno,
De hecho
Su último libro se llama "Lo menos peor de Peralta".
Defraudó a sus grandes amigos.
Y vivió en soledad, escribiendo porquería hasta que alcanzó el frasco de
pastillas.
Mauricio Peralta fue un fiasco
Y esta
Es la última advertencia.
16. (Ciegos al fin)
(1)
El día que empecé a fumar Marlboro, Jorge se suicidó.
Era el primero de nosotros. Se había instalado un cuchillo en la cabeza,
y luego hizo la invertida sobre un barranco. Al soltar las manos, el
cuchillo atravesó su cráneo, y luego su cuerpo desnudo cayó cuesta
abajo.
Antes de caer, Jorge dijo: "Díganle a mi madre que fue su culpa".
Estábamos cagados de la risa.
(2)
En Chile hay pocos clubes de suicidas. Aunque sería pedante decir que
somos el primero. Existe un club llamado FUGA (Fuimos Unos Giles
Antisistémicos), en Valparaíso, que utilizan las aspas de las aspiradoras
para cortarse el cuello. También sabemos de los MARIA, los CUAC, y
hay un club "especial", Attack, y hasta han publicado un libro sobre el
suicidio y el 1% de interés sobre el gobierno. Pero sin mayores
resultados.
Caminamos con Feña por la estación central, fumándonos unos pitos y
hablando sobre los mejores suicidios de nuestros tiempos.
- Lo que hace falta es un nuevo Werther - dice Feña - algo que nos
mueva el piso.
- Lo que hace falta es una generación Marilyn manson en shile -.
- Quizás - dice Feña - pero en Shile son todos tan cobardes -.
- Es cierto.
Recuerdo un pasaje de Arthur Rimbaud. "Tomé a la belleza y le escupí".
La gente es realmente cobarde cuando se trata de romper con sus
propios límites.
- Todos tenemos un destino -.
- La cosa es saber cómo vencerlo - dice Feña -.
Entonces se sube a los rieles más alejados de la estación, y se acuesta.
- ¿Qué pasa si todo acaba aquí? - dice Feña, recitando la canción -.
- ¿Y tus últimas palabras? -.
- No tengo nada que decir.
- ¿Nada? -.
- Bueh, tengo un tema de Nine inch nails que me gustaría cantarte.
- Dale.
El tren, a metros de distancia, relincha.
- I cut myself today - dice Feña -.
- To see if i still feel pain - digo yo -.
- Focus on the pain -. Dice Feña.
- The only thing that's… - digo y me alejo unos pasos.
Feña pronuncia la palabra "real", y el tren pasa por encima. La
descuartiza. Saltan órganos doblados en sangre, apuñalados
velozmente por la maquinaria. Saltan pequeñas gotas y chorros de
torrencial potencia en quiebre, explotando y deshaciéndose en la tarde
de verano.
Pienso en una frase de Camus. "Es el sol".
Los chunchules y las prietas gruesas se esparcen por el camino. Los
pulmones se contorsionan negros y se desparraman por el piso de
tierra. La mezcla de tierra y sangre burbujea. El rostro de Feña se nubla
y enrojece, sonríe. El cuerpo salta con el impacto y al caer contra el piso
se destroza en fragmentos de carne ensangrentados y fluyendo,
encaramándose a la tierra con el sonido del tren en el fondo.
Como si todo esto fuera realmente una canción de Nine Inch Nails.
Me guardo un pedazo del rostro de Feña en el morral y sigo mi camino
a casa.
Prendo un cigarro. En eso, se me ocurre. Saco un pedazo de carne de lo
que le quité a Feña, y lo pongo en la punta del tabaco. Me lo fumo.
Nunca lo había hecho.
(3)
Estoy en una fiesta para niños con Paco. Los niños juegan a lo que sea.
Les cuentas cosas que no podrías contarle a nadie.
- Pedrito -.
- ¿Sí? -.
- Tu mamá me la meneo ayer -.
- ¿Qué es menear? -.
- Mira, te tomas el pene con la mano, y empiezas a frotarlo.
- ¿Y para qué sirve? -.
- Pregúntale a tu mamá.
- ¡Mamá! ¿Para qué sirve que te la meneen? -.
Hemos decidido hacerlo a lo Columbine. Paco hace de payaso y yo de
mago.
La madre de Pedrito está tomando ponche en el living. Los demás niños
están sentados en una ronda, esperando que empiece el show. El
sorbeteo del ponche es asqueroso.
- Hoy día tenemos un acto especial para ustedes - Haremos… ¡desaparición! -.
Los niños sonríen y aplauden.
- Mi asistente paco hará del desaparecido, y yo seré el mago -.
- No se asusten, que todo resultará bien -.
- Es una promesa.
Los niños sonríen.
- Paco, métete en la caja.
- Bien.
- Ahora, niños, digan hocus opus dei -.
- ¡Hocus opus dei!
Yo hago un movimiento con mi varita y señalo la caja. La abro. Está
vacía. Ha parado el sorbeteo de la vieja.
- ¡Bravo! ¡Bravo! - dice un niño un poco más allá.
- Bien, ahora, para cerrar, haré aparecer a Paco.
- ¡Bravo!
- Digan "Pirinpinpin Gladys Marín" -.
- ¡Pirinpinpin Gladys Marín! -.
- Bien, bien -.
Hago unos movimientos con mi varita mágica, y abro la caja.
Los niños no pueden mover sus ojos del cuerpo.
- Lo sentimos, pero eso ha sido todo por esta noche. Muchas gracias, y
nos vemos la próxima.
La cumpleañera llora, observando impactada la caja.
- Ya, Paco, vámonos, el trabajo está terminado -.
- Vámonos.
Paco sale de la cortina y guarda el instrumento en la caja. El cuerpo
parece moverse cuando la roza el cuchillo.
Caminamos por Tobalaba y Paco me menciona la expresión de la niña.
- Era como si quisiera despertar.
- Sí -.
- Me pregunto que habrá pensado.
- Ni sabe que la estábamos salvando.
A nosotros nos llaman los Salinger. Y tenemos merecido el título. A
pesar de que no tenemos libros de Salinger. No podría citarlo aunque
quisiera.
Nunca tuvimos razones. Nadie necesita razones cuando puedes matar a
alguien. No es justificable. La ley sigue los mismos patrones que la
mente comunitaria. Matar a alguien es como sentir algo. En los días de
hoy, sentir algo es injustificable. No mereces que nada cambie. Por eso
matamos. Por eso nos suicidamos. Para justificarnos nuestros propios
sentimientos.
(4)
Estoy sentado en un sillón. Es el cumpleaños de una prima. Me
simpatiza mi prima porque es inocente. Incorruptible. Debe ser increíble
en la cama…
- ¡Mauri, la torta está servida! -.
- Ya voy - les digo.
Me levanto del sillón y me encierro en el baño. La cuchilla va dejando
un rastro, y puedo describirlo como un aburrimiento encerrado, un
doble sentido apaciguado, una tremenda idiotez.
- ¡Mauricio, la torta está servida! -.
- Ya voy, te digo.
La cuchilla va delineando un rostro triste. Es un rostro con lágrimas. Me
recuerda a la imagen que tengo de un cuadro, pero no sabría decirte
cuál.
Citando a Palahniuk: "crearemos lo que sea".
- ¡Mauri, la torta! -.
- Ya estoy listo.
Me miro al espejo. Busco un lápiz rojo en el estuche y me pinto
lágrimas.
En el comedor, sirven la torta. Las luces se apagan. Como mi madre me
escucha cantar, presume que estoy ahí. Feliz cumpleaños, Javiera, feliz
cumpleaños a ti.
Las luces se prenden.
Aparece mi cuerpo ensangrentado. Me levanto del sillón y me mantengo
erguido como una cruz. En mi pecho hay una cara triste hecha de mis
heridas. La carita triste del messenger.
Le he dado un significado.
- Mierda - dice mi padre.
Esto es vida.
Cuando abro los ojos, es como si sangraran. Pero es llanto. El llanto
incontrolable de los reprimidos.
- Mauri, ¿qué has hecho? -.
- … -.
- Mauri, respóndeme -.
Javiera cumplía 11 años hoy día.
- Le he dado un sentido a mi vida, madre -.
- Tenemos que llevarte a un hospital -.
- No hace falta -.
- ¡Cómo no va a hacer falta, niño! -.
- No hace falta -.
- ¡Idiota, mil veces idiota! -.
- No sigas -.
- ¡Cómo se te ocurre hacer esto! -.
- Madre… ¿Qué no lo ves, madre?
- Mauri, cállate y sígueme al hospital -.
- ¿Qué no lo ves, madre? -.
- Cállate, Mauri -.
- Madre, ¿no lo ves? ¿No ves que nos hallamos al final?-.
- Cállate.
17, (Amada Montiel y los Shit)
Una academia del lenguaje en España explica que las palabras no deben
necesariamente escribirse como tales. Si están todas las letras, y la
letra del principio y el final en posición correcta, la palabra se entiende
igual.
Un anónimo escribe sobre la Historia del rock Industrial: "Un recurso
muy empleado es la reconstrucción de los temas cortándolos en
pedazos para volver a unirlos de manera distinta, recombinando la
realidad, exhibiendo los monstruos que ésta genera en busca de la
destrucción de los débiles esquemas de mentiras sobre los que
justificamos nuestras vidas. Puede ser un grito o un susurro al oído,
porque lo que nos asusta es simplemente el contenido del mensaje".
Esto no tiene nada que ver con la historia de la cultura Shit. Pero me
pareció apropiado mencionarlas, porque son parte esencial del discurso
del filósofo dadaísta Maurice Pierre Altaire, quien es por cierto uno de
los visionarios de la cultura Shit.
He de confesarlo, yo inicié esta cultura. Recuerdo que desde pequeño
me asombraba con las diferencias entre las culturales normales y las
culturas urbanas. Y antes de seguir, prometo que usaré la palabra
"cultura" un montón de veces. Pero el asunto no es ése. Y
definitivamente es ése. Las "culturas". Para explicitarlo, la categoría
urbana de estas, reconózcase en esta clasificación a los punkis, góticos,
metaleros, grunge, brit, freak, artesa, los tatuados, los ska, emo,
industriales, mangakas, los piercingueados y si se me olvida uno, mis
disculpas o mil disculpas, aunque dudo que en mi vida pueda dar mil
disculpas, más bien dudo que me dé la paja.
Desde pequeño, como les decía. Yo veía pasar a un gótico o a un
artesa, y veía al lado a un montón de normales. Antes no lo sentía, pero
la normalidad también es una moda. No recaeré en sonar filosófico,
porque no lo soy, pero me parecía, en ese tiempo, que todo era una
moda, que todo movimiento tenía un inicio, y que lo que los normales
estaban tratando de hacer era jerarquizar la vestimenta y la forma de
hablar. Los normales poblaban regiones enteras del chile. Eran una
infección. La marca de sus polerones era "Pasar Desapercibido". El
apellido de sus costureras era "Quiero parecerme a todos". La etiqueta
de sus poleras era un símbolo chino que significaba "llamar la atención
es para perdedores". Eran una amenaza de la cuiquería. Siempre podías
ver un punk con un mohicano parado con mechas verdes y una
chaqueta desgarrada y decir "así quiero ser cuando grande". Eran un
respiro de novedad entre tanta mierda normal.
Desde entonces, desde pequeño, que pensaba en las culturas urbanas y
deseaba llegar a pertenecer a alguna. Pero todos los intentos fallaron.
Una vez me metí con los punkis y me hice un mohicano azul. Andaba
con Blue jeans ajustados y rajados en la rodilla, piercings y no me
bañaba por un sentido animalista. A veces tenía sueños donde hacía
jabón de grasa humana. Mi droga de elección: la marihuana y el copete.
También tenía amigos ska y a veces escuchábamos emo en la casa de
un conocido. Pero falló. Odiaba el acento a-kumado de esos nacidos en
cuna de plata, y odiaba estar peinándome con gomina todo el día.
Odiaba mirarme al espejo, y odiaba conversar con gente sobre quién le
pegó a quién, quién tiró con quién, sobre los nazis y los skin, los oi y los
core, los NS y los Pinochetistas. Odiaba los ocupa y las protestas.
Amaba a Flema y los odiaba más que la puta. Un buen día de un buen
año, el vocalista de Flema se suicidó y yo dejé a mis amigos punk para
siempre.
Una vez me volví gótico y me pinté los labios con rouge negro. Andaba
con ternos negros y pantalones de oficinista negros. Me pintaba una
línea debajo de los párpados y me hacía rayas como sangre desde la
comisura de los labios al borde del mentón. Iba a todas las discotecques
góticas, la Blondie, el Teatro Carrera, y ahí escuchábamos Lacrimosa,
Bauhaus, Type O Negative, Sins of thy beloved, Theatre of Tragedy,
Cristian Death, hasta hartarnos de tanto bailar y tomar latas de chela
que valían luca, y cigarrillos belmont que costaban dos lucas. Mi droga
de elección: cortarme las venas. Íbamos a pubs góticos y hablábamos
de música clásica. Visitábamos cementerios y prendíamos la radio con
música electrónica que sonaba como una casa habitada por espíritus
que escriben con sangre en las paredes la palabra "VÁYANSE".
Observábamos iglesias a través de las ventanas de nuestros autos e
imaginábamos cómo sería irnos a Alemania un maldito día, a estudiar
historia del arte y visitar catedrales y catedrales, y mirar vitrales y
vitrales, y darnos pajares y pajares. Falló. Me aburrió la puta ropa
elegante. Odiaba mirarme al espejo y comprar cada semana un puto
lápiz delineador de ojos. Prefería gasta tres lucas en un incienso de
canabis que en el puto Teatro Carrera, y en los pubs góticos terminé
vomitando los elegantes y cursis tragos de la barra. Odiaba la música
de barquito y la música de violín. Odiaba a los clásicos y a los maestros.
Odiaba esa estúpida esperanza de que algo te asustara en un
cementerio, cuando sabía (por un poema de la nadista Amada Montiel)
que los cementerios eran un lugar para derrocar el olvido, no para
repetir fórmulas. Odiaba las ovaciones y los redentores. Odiaba la
estética. Amaba y odiaba a las putas iglesias. El día que supe que
Amada Montiel (la poeta nadista) se había convertido al cristianismo,
dejé el gótico para siempre.
Una vez me metí en el grunge y empecé a usar chalecos de lana. Era
verano, pero yo usaba chalecos de lana. Me ponía camisas de leñador y
pantalones con rajaduras en la zona de la rodilla. Me dejé el pelo largo y
me lo teñí de rojo. Yo era rubio (rusia). Cambié todos mis discos de
punk y gótico por libros de bukowski y discos tan distantes como Late
at night de Dover y The wall de Pink floyd. Mi droga de elección: la
heroína. Me encantaba el número dos. Íbamos con mis amigos grunge
a tocatas de Elemento neutro y Newton Ball, a escuchar covers de Pearl
Jam y tomar hasta que saliera el sol. Íbamos al eurocentro a ver
información sobre tocatas, y tocábamos en una banda temas de The
doors con nuestras melenas rojas y nuestras camisas de leñador.
Leíamos a Kerouac. Leíamos a Burroughs. Leíamos a Beckett. Me
cambié de casa; a Puente Alttle. Íbamos a bares donde tocaban Led
Zeppelin toda la noche, y fumábamos marlboros y contábamos chistes
que habíamos copiado de Generación X. Llorábamos el suicidio de Kurt
Cobain y teníamos un estandarte con fotos de su hija y le prendíamos
una velita cada año que se cumplía el aniversario del suicidio. Pero falló.
Los chalecos de lana me picaban en todo el cuerpo. Las camisas de
leñador ya no podían lavarse de tanto masturbarme con la bajista de
Hole. Los pantalones rotos en las rodillas ya eran bermudas. De tanto
lavarme el pelo, me quedó rosado. La distancia de los discos me
producía nauseas y me angustiaba. Elemento neutro era neutramente
una mierda. Y cuando salía el sol después de sus tocatas, no me podía
la caña ni el dolor en las piernas de tanto saltar. El eurocentro me tenía
cabreado con su música subliminal, y la plata que gastaba comprando
libros de Kerouac, Burroughs y Bukowski podía gastarla en revistas
porno. Generación X se comercializó. Las velitas del altar se apagaron.
Amé y odié a Alice in Chains. El día que murió su vocalista sentí que
esto me había pasado tres veces. Sería la última. Ese mismo día me
despedí de los grunge.
Empecé esto citando a Maurice Pierre Altaire, y lo haré de nuevo. Según
Altaire, toda cultura urbana empieza por un reconocimiento. Y también
por una búsqueda. "Buscas en diferentes culturas, y terminas por
rebelarte". Esto me pasó a mi. Descubrí que lo que quería era crear mi
propia cultura urbana.
Descubrí a Altaire por un percance. Un día de esos en que andas
asqueado, tomé la micro hacia mi casa. En el camino, había un mural.
El mural estaba dividido en cuatro cuadros. Era de allende. El asunto es
que el tercer cuadro había reemplazado el de allende por una imagen
oscura (el mural de allende era todo lindo y jipi), una imagen que era
como si se saliera de lo pintado. Debajo de una cabeza decapitada,
estaban las iniciales. M. P. A. Luego busqué en la biblioteca de mi
colegio (mi colegio es cuico y tiene una biblioteca bastante deseable), y
encontré a Maurice entre un libro de Floridor Sepúlveda y uno de
Amada Montiel. Ahí descubrí a los nadistas, pero eso no viene al caso.
Tomé el libro de Altaire y no lo devolví hasta tenerlo fotocopiado.
Para Maurice Pierre Altaire hay dos clases de culturas urbanas. Las
basuras, y las clásicas. Las basuras se remiten al dadaísmo, y
posteriormente al beatnick, y más posteriormente al punk. Entre ellas
podemos situar al grunge en un puesto correspondiente. Las otras, las
clásicas, mezclan de una u otra forma su estilo de vida con el estilo de
vida de las grandes sinfonías. Las clásicas se remiten a Beethoven, y
posteriormente a los relatos de terror clásicos, y más posteriormente a
Poe y Lovecraft. Entre ellas podemos situar a los góticos y los metal en
un puesto correspondiente. Sin embargo, todas ellas tienen algo de
punk, porque toda cultura urbana se rebela contra lo establecido. La
diferencia se hace cuando mandas el mensaje. "¿Lo quieres hacer
bonito, o lo quieres hacer directo?" Ésa es la pregunta de Maurice.
Todas las grandes culturas urbanas son dadaístas. Beatnick. Punk. Todo
gran culto urbano es un poeta maldito. Un puto Rimbaud. Toda
creación de un gran culto urbano es necesariamente una puta
Temporada en el infierno ("y un invierno con tu hermana, agregaremos
con gusto", dice Altaire). Lo que distancia a los basura de los clásicos es
que los basura tienen una mirada hacia el futuro, mientras que los
clásicos siempre miran hacia el pasado con nostalgia. Y Altaire agrega
"el futuro está escrito con un idioma basura. Todo gran culto urbano
que hable latín es un cursi maldito y una contradicción con patas".
Hay más. Según Altaire, son 6 características las que necesita una
cultura urbana para llamarse tal.
1. Una filosofía.
2. Un estilo de música.
3. Una literatura.
4. Una vestimenta.
5. Una droga de elección (esa me la sabía).
6. Un nombre. La más importante.
Según Maurice, "hemos acordado anteriormente que las culturas basura
son por ende las grandes culturas urbanas". Entonces Maurice dice que
hay una tendencia a que el nombre de estas nazca por fuerzas
externas. El punk es un sinónimo de basura. El grunge es un sinónimo
de basura. Todas impuestas por los periodistas o los organizadores de
recitales. Incluso los poetas malditos originales no se llamaban poetas
malditos hasta que un tipo les hizo una antología llamándolos como
tales. Por lo tanto, el nombre era prescindible. Llegaría solo. Había que
definir las otras 5.
"1. Una filosofía."
Según Altaire, "rebelarse"
Rebelarse es una cosa obvia. Lo que tenía que preguntarme era "contra
qué".
A) Recuerdo una ocasión en que un cuico me dijo que tenía voz kuma,
y que me fuera de su negocio sport. Opción descartada. No quiero ser
otro cuico hablando con voz kuma y rebelándome contra los cuicos,
cuando eso es lo que soy.
B) Recuerdo una ocasión en que unos hip hoperos proletas me robaron
todo. Una guitarra acústica. Un celular motorola. La mochila con el
carnet. Todo. Opción descartada. No nos podemos rebelar contra la
mala suerte. No somos pacos. Dejémosle a ellos la incompetencia y la
inconsecuencia.
C) Recuerdo una ocasión en que hablé con un tipo y me dijo que yo no
tenía razón, porque todo era subjetivo. Me pareció un argumento
imbécil. Y también recuerdo una vez que estaba paseando triste por
una calle de La Dehesa y el perro de un paco me ladró. Y me ladraba y
me ladraba. De alguna manera, pensé que era para darme fortaleza,
porque siempre he sentido que los perros son seres iluminados. Pero
desde otro punto de vista, era sólo un perro hueón protegiendo la casa
de un paco hueón. Y ese paco hueón seguramente le pegaba al perro
hueón para que ladrara y ladrara. Ahí mismo me di cuenta que hay
creencias y convenciones. Y que son la misma puta wea'. ¿Opción
descartada?
Ni cagando.
Nos rebelaremos contra las creencias. Aún nuestras propias creencias.
¿Y en qué creemos?
Da lo mismo.
Nos rebelaremos contra la subjetividad. Y contra la absurda posería de
objetividad. Nos rebelaremos contra lo humano.
"2. Un estilo de música".
Según Altaire, "rabioso, melódico y directo".
El problema aquí comienza con que todos los estilos de música tienen
su moda adjudicada. Los punks tiene su punk, los ska tiene su ska, los
grunge tienen su grunge, los jipis tienen su folk, los guasos tiene su
cueca, los sound su sound y así. Por lo tanto, había que buscar un estilo
de música que no tuviera moda.
A) Existe un grupo llamado At the cinema. Tienen un estilo de música
propio, y no están adjudicados a modas. Su modalidad es reiterativa
pero emocionante. Sus guitarras no son poderosas, pero su música es
poderosa. El problema: cuando At the cinema se separó, se formaron
dos grupos con los ex integrantes. Ambos grupos predicaban el emo.
Una banda asociada al emo no puede pertenecer a una cultura nueva.
Opción descartada.
B) Smashing Oranges. Un grupo de un estilo único, que varía entre el
rock pesado y melodías básicas con teclados y sintetizadores, de una
modalidad depresiva bastante efectiva. Casi más que FM-Head. FMhead está asociado al brit. Y Smashing Oranges está asociado al grunge
por haber pasado por el mismo agente que Nirvana. Y también
asociados al metal setentero, al gótico, al folk… Opción descartada.
C) Primos. El mejor bajista del mundo. El guitarrista más psicópata de
la historia. El baterista más monótono. El problema: existe un estilo de
música llamado Primos. No existe la moda Primos, pero aún así es
matapasiones. Descartado.
Hasta este punto estaba desesperándome. Pero, saltando la vaguedad
de cualquier introducción a la solución del problema, todo se solucionó.
En el lanzamiento del libro de un compañero, tocó una banda que me
dejó muerto. Muerto es lo que quería estar, así que les pregunté por su
estilo de música.
- No tenemos -.
Estaba en el cielo.
Así se llamaba el grupo. "Estaba en el cielo".
"3. Una literatura".
Según Altaire, "Basura Maldita".
Saltándome las opciones (puesto que no consideré ninguna más), tomé
el par de libros junto al de Maurice Pierre Altaire y adjudiqué al Nadismo
como la corriente literaria de trasfondo.
Debo decir que fueron los poemas de Amada Montiel los que me
conquistaron. Floridor Sepúlveda era basura, sí, pero no lo
suficientemente honesto. Y si quería matar las convenciones, Amada
Montiel iba a ser mi escritora favorita.
"4. Una vestimenta"
Según Altaire, "una imagen clara de algo, que será inexpresable de otra
forma".
Cuando me hice esta pregunta, recordé al momento la vestimenta que
más me había marcado. En la existencia. Fue en un año nuevo. En
realidad un día antes. Estábamos grabando un video para el año nuevo,
iba a ser la sorpresa para mi familia opus dei. El asunto es que un
sketch del video trataba de mi primo vistiéndose para la gala, y mi
prima (su hermana) acompañándolo a esta. Mi primo no encontró
zapatos negros, así que se puso chalas. Andaba de oficinista, con un par
de chalas en los pies.
Una imagen que me marcó.
"5. Una droga de elección"
Con la conversión de Amada Montiel al cristianismo, algo cambió en mi.
Amada Montiel siempre fue anarquista, una nadista, y fue ella, al fin y
al cabo. Al volverse anarko-cristiana, la respuesta a esta interrogante se
me vino sin tapujos.
Nos beberíamos la sangre de Cristo.
Ya tenía todo claro. Ahora sólo faltaba encontrar cultores.
Para Maurice Pierre Altaire, encontrar cultores de una cultura urbana es
una bendición. Están por ahí, en alguna parte. No sabes cuándo ni
cómo los vas a encontrar, pero están ahí, repartidos, pensando lo
mismo que tú, vistiéndose con tu moda, porque al fin y al cabo "una
cultura urbana despierta sola. Se rebela porque ansía despertar.
Volverse universal".
Yo encontré uno solo. Y con eso era suficiente. Cuando se empezara a
escuchar nuestra música, cuando nuestra moda se empezara a ver en
los canales de videos y en los diarios, cuando nuestro sentimiento lo
transmitieran voceros de revistas y fanzines, cuando en rock axis
anunciaran la nueva cultura urbana, ahí todo se volvería inmenso y
podríamos llamarnos los primeros.
Se llamaba Benjamín. Lo conocí en una tocata de Estaba en el cielo.
Para ese entonces, todos los integrantes ya estaban vestidos de
oficinistas con chalas. Y él se pronunció fan. Yo le llamé Vergamín y le
pregunté si era autor de alguna obra o si había creado algo en su vida.
Él me dijo que un libro. "La importancia del demonio". Días después
revisaría la biblioteca de mi colegio y encontraría un libro muy
particular. "La importancia del demonio". Autor: Bergamín. No estoy
mintiendo. Ese libro realmente existe.
- ¿Y tú has creado algo en tu vida? - me preguntó desde la barra.
- Estoy creando una cultura urbana, y tú eres el primer integrante -.
- Notable - me dijo, y se puso a corear "Jesucristo me mira desde el
cobertor azul", de los Estaba en el cielo - ¿Y tengo que hacer algo?.
- Sí -.
- ¿Qué cosa? -.
- Tienes que venir conmigo a Valparaíso -.
- ¿Por qué a Valparaíso? -.
- Siento que algo nos espera en Valparaíso. Siento que el nombre está
en Valparaíso - le dije.
Al par de días siguientes tomamos un autobús hacia Valpo.
Al bajarnos, vimos a una paloma defecar y nos secamos las frentes de
la humedad que nos había traído el viaje. Ver la ciudad de Valpo era
como si el mundo se estuviera abriendo.
En el fondo, era la cultura urbana que nacía.
Vagamos por los barrios de Valpo. Encontramos a un tipo que hablaba
en sílabas separadas. Era un vago, como nosotros. También
encontramos a un grupo de minas, y les preguntamos cómo nos
llamarían. Dijeron "Nerds". Supongo que es un sinónimo de basura,
pero no me dejó satisfecho.
Al final llegamos al puerto, a esa zona donde venden cosas para los
turistas, y nos sentamos en la orilla a esperar que algo pasara. Y no
pasaba nada. Entonces Benjamín se puso a observar a un turista. Y yo
también lo observaba. Llevaba una bandera de Polonia en el morral. Y
un perro lo estaba persiguiendo. Cada vez que el polaco se daba vuelta
a espantar el perro, el perro se movía hacia el trasero del polaco y le
echaba una olida. Una voz en mi cabeza dijo "ese polaco, pobre hueón,
que haga algo pa quel perro pare el hueveo". Entonces una conexión
entre universos debió hacer clic, porque el polaco empezó a decirle en
inglés al perro que se sentara. Debió pensar que el perro era chileno, y
que iba a tratar de comunicarse con él en una lengua compartida. Sólo
que el perro no hablaba inglés. Sólo que el polaco tampoco, no
demasiado bien, y en vez de decir "seat, seat", lo que decía era "shit,
shit". Que significa mierda. Que a la vez significaba que habíamos
encontrado un nombre.
De ahí en adelante seríamos los shit. Una cultura urbana que estaba
despertando.
Lo que sucedió después fue el momento que le dio la característica de
extraordinario a todo esto.
Maurice Pierre Altaire escribe casi al final de su libro " el reencuentro
con el útero es el pic de una cultura urbana. Cuando una cultura urbana
vuelve a sus orígenes, cuando encuentra su propio camino, es la
instancia en que tal cultura decide permanecer en el tiempo. Se
universaliza. Se masifica. Ante todo: la masificación de una cultura
urbana es el fin del legado del creador. Kurt Cobain murió cuando el
grunge estaba en su momento más alto. Rimbaud se retiró a los 18.
Puedes olvidarte de ti mismo y abrazar el fin cuando tu creación se ha
vuelto universal. Ya no es tuya. Es del mundo. Bolaño se masificó y
murió de hepatitis. Pero la verdad es que murió de cirrosis. Una
enfermedad que viene de la basura. La masificación y la basura abren
todas las puertas del futuro. Bolaño era un escritor del futuro. Y ahora
es de todos nosotros".
Lo que sucedió es lo siguiente.
Después de encontrar el nombre, después de ser nombrados los shit
por un turista polaco, encontré a Amada Montiel. Con Benjamín
estábamos tomando en un bar del puerto cuando la vi, sentada unas
mesas más allá, tomándose una chela y escribiendo un poema en una
pared llena de fotos porno. En media hora nos volvíamos a Santiago. Le
dije a Benjamín que se fuera solo, que yo tomaba el de la noche. Que
necesitaba quedarme. Nos separamos ahí. Entonces yo me acerqué a
Amada.
- Hola - ¿Qué se le dice a la mejor poeta del chile? -.
- Hola - me dijo, y fue todo lo que he esperado de un hola en mi vida -.
- ¿Tú eres Amada Montiel? -.
- Ése es mi nombre de libros. Los nadistas somos así -.
- ¿Y cuál es tu verdadero nombre? -.
- Rebeca -.
- ¿Y qué haces aquí? -.
- Tenía la sensación de que algo me esperaba en Valparaíso. Algo
grande. Decidí escribir este poemita acá, y tiene algo que ver con esa
esperanza -.
Leí el poema.
" En Potencia.
Niña
Conservo aún muñecas
Y recuerdos,
Pero ya abandono las esperanzas de ser rescatada
Por niños de Nunca Jamás.
Pero duele tanto,
Asusta tanto.
Y me pides
Que sea mujer,
Que responda a tu tacto de una forma,
Que deje ilusiones de amor
Para mis juegos
En casas de muñecas
Que son burbujas de eterna fragilidad.
Y es que
Nuestros conceptos son
Opuestos paralelos
Que pareciera que nunca se tocan
Excepto cuando te toco y me tocas.
El idealismo y las lágrimas
Los respiran todos mis poros;
Mientras tú,
Con los pies en la tierra
Miras el mundo de frente
Y te mueves
Como una extremidad de éste.
Nos preguntamos
Si podremos atravesar las frustraciones
Pero la otra orilla no se ve
Y las respuestas son inciertas;
Y buscamos en el mundo un faro
Pero ese faro nunca está
Y así a ciegas
Nos cuesta seguir.
Lo que sé
Es que de tu mano
Haremos brotar luz suficiente
Para cegar a todos
Menos a tus ojos, que a medianoche o mediodía
Siempre me ven.
Y con esa luz
Sabré cómo debo crecer
Y veremos por donde caminar"
- Hermoso - le dije -.
- Planeo dejar en todos los bares un poema -.
- ¿Puedo acompañarte? -.
- Veremos por donde caminar -.
Y esa tarde caminamos. Caminamos más que la cresta. Vagamos y
vagamos como un par de freaks Shit nadistas por Valpo, sin búsqueda.
Yo le conté que desde hace mucho tiempo estaba enamorado de ella.
Ella me sonrió, y luego se puso fuxia.
Después de un tiempo, me fue contando que tenía muchos rollos con
esto del amor. Yo le insinué que quería besarla, y ella me dijo que hace
tiempo, había conocido a un personaje bastante interesante y lo había
besado. Resultó ser un imbécil, y Amada no quería volver a besar otro
hombre en lo pronto.
Entonces recordé una frase de Altaire, y lo cité.
- Sabes, según un filósofo… bueh, tú debes conocerlo. El asunto es que
según un filósofo llamado Altaire, la vida es maravillosa. Pero hay
muchas distracciones -.
Se puso fuxia y callada. Pasaron dos segundos.
- A la chucha - dijo Amada -.
Nos besamos. Sentí su lengua y su sonrisa de frenillos en mi lengua.
Sentí su belleza en mi boca. Puedo decir cosas más cursis si insisto.
Pero nos besamos. Y luego la abracé.
Y sabes. Realmente. Lo sentí.
Yo acababa con ese abrazo. Fue como abrazar el final de mí mismo. El
final de una historia.
18, (Desde las curvas)
- Había decidido salvar su vida -.
La imagen de una espalda curvada, blanca, tiesa con una joroba.
- ¿Qué me decías de Diego? Ah claro-.
- Si, tendrías que darte cuenta -.
La cámara cubre totalmente la espalda. Cubre la curva de los hombros,
una línea dorsal delineada levemente, cubierta por grasa.
- Pero lo de Diego es otro caso. Hay parámetros, sabes -.
- Claro que sí -.
- No insisto -.
La cámara se acerca y hay pecas en la imagen; arrugas, várices, pelos.
- Es que tú nunca lo conociste bien -.
- Claro -.
- Es en serio. Esa mirada que tú tienes, esa es la mirada de Diego,
antes -.
Los músculos están tensos. El humo del cigarro se mete en la imagen y
le da una sensación de vaguedad. La espalda se acerca y se aleja; es la
noción de un cuerpo que todavía respira.
- Hay veces en que pienso que todavía está aquí -.
- ¿Cómo? -.
Cae
- Que en alguna parte -.
una gota
- aquí -.
de sangre.
- Diego sigue vivo -.
- Claro que sí -.
- Me crees loco -.
- No, yo también lo pienso -.
La espalda aguarda. Se resiente y luego aguarda.
- A veces creo que lo he visto en la calle -.
- Yo también -.
Entre pasajes.
- Pero es imposible, sabes… -.
La gota de sangre va dejando una línea roja sobre el dorso. La espalda
tirita y se retuerce.
- Creo que de pensarlo tanto, puedo ver a Diego en la imagen de
cualquier otra persona -.
- Yo sé -.
- A veces lo siento en el espejo, empujando mis ojos -.
- Yo sé -.
- A veces sólo es la presión. Pero, sabes, creo que cuando lloro… -.
La espalda se arquea.
- Creo que cuando lloro, tengo miedo a estar siendo perseguido -.
- ¿Por quién? -.
- No es alguien -.
La gota de sangre ha desaparecido de cámara. Por el momento, queda
un rastro café. La espalda se mantiene erguida. En la joroba hay una
mancha azul.
- ¿Entonces qué? -.
- Son autos, Gerardo, siento que si lloro me perseguirán los autos -.
De seguro es el humo, pero han aparecido severas manchas en la
espalda. El color azul recuerda a cisnes azules, a pequeñas imágenes de
retratos azules. A imágenes azules del sol.
- No es nada de qué preocuparse -.
- ¿Por qué? -.
La espalda puede estar infectada.
- Porque yo también lo he sentido -.
Porque sigo aquí, y ahora es una mancha violácea cubriendo
enteramente la espalda.
- ¿Y no te angustia lo de Diego? -.
- Viejo, necesito salvar mi vida -.
La cámara enfoca un punto minúsculo. Desde ahí puede ser cualquier
cosa.
- Porque Diego no será el último -.
- Y luego me dices que no te angustia -.
- No, no me angustia -.
Las venas de la espalda están palpitando. La sangre bombea. Corre
sangre por los ductos de la pequeña zona enfocada, corre y tirita como
si la espalda estuviera en convulsión. Desde cerca
- Todo se ve diferente -.
- Pero ya estamos metidos en esto, Gerardo. No huevees -.
- Desde cerca, viejo -.
todo se ve diferente.
- Tenemos que irnos -.
- ¿Y a dónde? ¿En qué puto sitio de este planeta no nos encontrarían? -.
- No sé, pero está demasiado latente. Irnos, alejarnos del asunto -.
- ¿Y Diego? ¿Y el puto recuerdo de Diego? -.
Se asemeja a un corazón. Las manchas han desaparecido. Quedan
bosquejos de humo, la respiración de una mujer.
- Diego está muerto -.
- No podemos salir -.
- Claro que no -.
- No podemos hacer nada, Gerardo -.
El flujo es mayor. Son cinco gotas. Caen dispares. Una tras otra. La
espalda jorobada tirita pero se mantiene erguida. Ante cámaras, sólo
tenemos la imagen de la espalda.
- Nunca podremos hacer nada -.
- Tenemos que irnos, ya nos queda muy poco que hacer acá -.
- Tal vez -.
Caen otras siete gotas. En ningún caso alcanzamos a ver la superficie
de los hombros o el cuello o la cabeza.
- Apaga el cigarro. Diego ya está muerto -.
- Está bien -.
- Ahora sales a la calle y tomas un taxi -.
- Está bien -.
- Y luego vas al aeropuerto -.
- ¿Y luego? -.
- Y luego, nada. No nos volvemos a ver.
- Oye -.
- Qué -.
- El cigarro ya estaba apagado. No es mi cigarro -.
- Tienes razón -.
- Gerardo -.
Creo que no nos volveremos a ver.
19. (Esbozo escrito desde donde la patria sea una mierda)
Hace unos minutos había sonado.
- Sí, Fanor está en la cocina -.
Los dedos de Mónica pasan por entre los botones del teléfono.
- No sé, dime tú-.
Mónica escucha el impacto de un metal contra un acrílico.
Fanor pasa el dedo por la piel y sigue buscando.
- ¿Te conté lo de María Ignacia? -.
La voz contesta que le cuente, pero Mónica piensa en una palabra de
dos letras que signifique Naftalina.
Fanor pasa el dedo reiteradas veces hasta darle forma a la figura.
La cocina está sucia. Tiene un montón de platos en el lavadero. Platos
con restos de Palta. Pequeños trozos de tomate. Platos sucios con
aceite y pedazos de carne. Arroz. Salsa golf esparcida y mezclada con
agua. Todos los platos apilados uno sobre otro, inmersos en el agua.
- ¿Qué decía? Ah, sí, María Ignacia -.
Mónica escribe "Tomáscox".
Fanor pasa una segunda capa de blanco. El tacto es frío. Siente como la
pintura va negándole el aire.
Es témpera barata. De luca. De esas que vienen 6 colores. Una cosa
muy tóxica.
- Si, la María Ignacia tiene unos problemas que ni te cuento - dice
Mónica - parece que el marido -.
Sentada, sólo puede observar el espejo y el escritorio. El espejo está
dividido por líneas de metal. Cada línea de metal se cierra con una
esfera de metal partida en cuatro.
Observando el escritorio, lo único que le atrae son unas revistas Cosas y
una Paula a medio abrir.
Escribe la palabra "Acidocitrico".
- Parece que el marido ha estado saliendo de noche. Y siempre llega
con estas excusas tan huevonas… que tenía que hacer unos encargos.
Que la prima se había enfermado o tenía que darle las condolencias
porque la prima se había muerto, qué se yo.
La línea blanca comienza a tomar forma de estrella.
- La tipa que se muere es por supuesto la María Ignacia, que no sabes
lo intrigada que está con todo el asuntito ese -.
Suena un plato contra el piso. Varios tenedores y cuchillos impactan el
plato. Fanor no se inmuta. Sigue dándole con el dedo al pecho.
Mónica, esa máquina.
La palabra que escribe es "diecisiete".
- ¿Fanor, estás bien? -.
- Sí, mamá, déjame tranquilo -.
- Bueh… como te contaba -.
En el aire, el olor es a palta y tomates. También olor a carne. La comida
recién preparada aún hiede en el ambiente.
Fanor cumple diecisiete años mañana.
El color azul comienza a tomar forma.
- La María Ignacia pregunta por todas partes, pero no sale nada -.
La voz dice: ¿Tú qué crees?
Mónica escribe una palabra y luego la borra. Ahora escribe en letras
grandes: "willysabor".
- Yo no sé. Yo sólo… presumo… que no sé… que la está engañando -.
¿Presumes?
- ¡Ay, por favor! ¿No es obvio que el hombre está engañando a la pobre
mujer? -.
La voz se queda callada.
La palabra que escribe es "sordera".
- ¡Amá! ¿Dónde está el color rojo? -.
- En el estuche, mijito, en el estuche - dice Mónica - ¿Qué te decía?
¿Por qué estás tan callada? -.
Se escucha un cierre abriéndose.
Cae un plato. Se rompe.
- ¡Fanor! -.
- Mamá, déjame tranquilo, estoy haciendo algo importante -.
- No, niña, es Fanor que me está quebrando todos los platos -.
Suena una caja abriéndose. Suena un diván abriéndose. Suena un cojín.
Una cobija. Libros que caen. Suena una tapa de plástico que impacta
con el suelo.
Fanor no encontró el color rojo en la basura.
- Ay, niña, es que Fanor quiere pintarse la bandera chilena. Me salió tan
patriota -.
La voz dice "qué lindo".
Fanor busca entre las cacerolas y los lápices de tinta. Entre los platos y
los tenedores y los cuchillos. Pero no encuentra el color rojo.
- ¿Fanor, lo encontraste? -.
Fanor mira fijamente todo. Los cuchillos, los tenedores. Y el cuchillo
grande. Y la vajilla. Y los platos. Y la fruta puesta en un tiesto donde
debe ir la fruta. Pero Fanor no encuentra el color rojo. Fanor está
desesperado. Necesita plasmar su patria. Necesita rescatar el color del
copihue y el fulgor de la nación. Fanor NECESITA el color rojo.
- ¿Fanor? -.
- ¿Sí, mamá? -.
- ¿Encontraste el color rojo? -.
Fanor mira por todos lados. No está. El tonto color rojo no está. Lo
necesita. Mira una y otra vez todas las cosas que hay pero ninguna le
sirve. Mira su pecho con los colores patrios, pero falta uno. Falta el rojo.
- ¿Lo encontraste? -.
Fanor mira una vez más la cocina. Mira su pecho y la cocina. Mira los
platos. Mira su pecho. Mira los colores y su pecho. Mira el cuchillo. El
tenedor. Su pecho.
- ¿Y? -.
- ¿Y qué? -.
- ¿Lo encontraste? -.
Se escucha el sonido de los pies de Fanor sobre los platos.
- Cállate - dice la voz al teléfono.
- ¿Qué? -.
- Cállate y escucha -.
20. (El pedazo de carne sentimental)
La cita de ella es esta noche. Se va a encontrar con Sergio, un tipo que
no ve hace años. Guapísimo, de rechupete. Un pecado capital. Esto se
va diciendo ella al espejo, de rechupete el tipo y se alinea las pestañas
con el extremo del instrumento. De pronto se reprocha, porque le
suena a las teleseries del siete. Esas que son puros dichos chilenos.
Esas donde la gente no puede hablar si no es a la chilena.
Se le llama "la preparación". De algo le sirvieron las semanas con las
boy scout. Pero el contexto es diferente. Las palabras al espejo. Las
sonrisas y los hola sergio, no, mal, hola sergio, no, de nuevo, hola
sergio. Todo sale y debe salir mal en la preparación. Es un rito. La
iniciación del echar a perder. De lejos, es un llamado a improvisar. De
lejos, es una cuerda que tira de lo espontáneo. Hola, sergio. Sí, esa sí, y
se acerca al espejo cuando le toca el lápiz delineador.
Ella se toca los pómulos, y luego pasa sus manos por las nalgas. Son
firmes. Pero Sergio no está, y es ella abriendo los ojos. Los ojos sobre
los pómulos.
Se saca el sostén y lo deja sobre la cama. Sus tetas al aire son como
dos limones con pezones duros en la punta. Se saca las bragas y las
deja sobre la cama.
No lo ve hace años, y se imagina como serán sus contornos. Sus
piernas firmes. Sus gluteos macizos. Sus dientes blancos y perfectos. Ya
se ha terminado de vestir, y cuando busca el bíper, se le agota la
preparación.
Se ha dado cuenta que ya está todo listo. Sólo nos queda el encuentro.
¿Qué será de Sergio?
Toca sus nalgas firmes y deja que el ritmo se la lleve, él arremete, él
mete y saca, él despilfarra, contrae, seduce y busca entre medio de las
tetas de ella algo que no sé, algo que Sergio no puede distinguir pero
está ahí, entremedio de los dos pezones duros y los dos limones.
Ella mete el bíper en el bolso y sale del departamento.
La calle está fría y puede observarme entre la silueta de un edificio y un
par de borrachos que llamo mis mejores amigos.
- M'hijita -.
Ella camina.
No puede saber que la he observado por la ventana de su habitación.
- M'hijita, no vaya - le digo -.
- Cállese -.
- M'hijita, quédese aquí con nosotros, con la cordura. Usté no vaya.
Ella se va y se pierde entre la silueta de un edificio y dos personas que
probablemente no son mis dos mejores amigos.
Dos siluetas de nada.
Dos brazos cruzados cuando Sergio acaricia sus nalgas y ella gime de
gusto pidiéndole más, que siga, que incruste, que bese, que llene, que
se plazca de un mártir sexual, que la tome y se la lleve a donde sea.
Los ojos lagrimeando cuando Sergio la besa, y ella abre esos ojos para
cruzar la calle y seguir por Ramón Enríquez hacia el restaurant, la silla
ventana y reflejo donde la espera Sergio.
- Hola - dice el mesero -.
¿Dónde la siento?
De arriba abajo, cabalgando y dejándose llevar por el desenfreno.
- En la mesa de al frente - dice ella -.
Ahí espera. En ese lugar revisa el reloj. El bíper. El teléfono celular. Allí,
ahí mismo, come a medias un pan añejo. Lo unta en el pebre.
A veces observa la calle y me mira. Quizás no sabe que soy yo.
Entonces llega Sergio.
- Hola, querida - dice -.
- Hola Sergio - dice ella -.
Es ella la protagonista. Es ella la elegida.
Yo la miro por la ventana como si aguardara.
Ella lo llamaba la preparación.
Lo de la cita. Lo llamaba preparación.
- ¿Cómo estai? -.
- Bien po, ¿y tu? -.
- Bien también. Recordando.
- ¿Ah sí? ¿Como qué? -.
- Ah, tú sabes. Nosotros.
- Sí, yo también lo he recordado mucho. De hecho te tengo un regalo.
- Qué bacán, muéstramelo.
- Espérate, después de la comida.
El mesero llega con la carta. Piden dos chuletas con puré. Nada muy
ostentoso. Lo de siempre. Lo de ellos.
- Sí, he estado pensando en ti - dice Sergio -.
- ¿Cómo qué cosas? -.
- Nuestra relación. Lo que tuvimos.
La gente come apresurada en las tablas. Come bistecs con aderezo.
Cuero de pollo con ketchup. Papas fritas y trozos de cerdo. Yo observo
por la ventana.
- He estado pensando… -.
- Sabes… desde que te perdí, inventé algo.
- ¿Ah sí? -.
- Sí, es un proceso. Pero es obsceno eso sí. Se llama "La preparación" -.
- … -.
- Se trata de pensar en muchas cochinadas y prepararme para una cita
-.
- Aquí tienen - dice el mesero -.
- Gracias -.
- ¿Qué te parece mi historia? -.
- ¿Y eso es lo que hiciste hoy día antes de venir? -.
- Sí, ¿por qué? ¿Te parece mal? -.
- No. Me parece perfecto.
Sergio abre el bolso y abre un paquete con el objeto.
- Es un recuerdo de ti -.
Ella piensa, pero no se adelanta cuando Sergio se saca la camisa y se
esparce el pebre por todo el pecho.
- Debe arder - atina a decir ella -.
- No sabes… - dice Sergio, y antes de terminar, contextualiza hacia el
gore.
Se lo mete en una clavícula. Baja por el esternón, cruzando levemente
la piel y rozando los órganos. Sacando jirones cuando roza el abdomen.
Sacando jirones cuando roza los glúteos. Sacando jirones cuando roza
el corazón. Jirones de pectorales, hombros, cuello (levemente y con
cuidado). Jirones robustos de las mejillas y la frente.
Después de un rato, lo único que queda de Sergio son los músculos.
Sergio la mira y le dice: "No sabes cuánto".
Entonces el puto de Sergio se pone a llorar. Es una estatua de carne
llorando. Es un pedazo de vientre llorando. Una vaca alcohólica
desmenuzada con sentimientos. Una oveja lista para echar a freír que
necesita terapia. Un puto palo de cebo que ha encontrado fuertes
encontrones sentimentales con su vida.
El pedazo de carne sentimental.
- Qué has hecho… - dice ella, la protagonista -.
- Esto es lo que significas para mi -.
- Entonces, dame un segundo - dice y se hace una herida en el hombro
-.
No es suficiente, dice Sergio.
- Tienes razón - dice nuestra protagonista -.
- Así - dice Sergio y raya fuertemente su brazo -.
Ella pega un grito de dolor. Él dice que no es sólo dolor.
Él dice que ella se ha vuelto preparada.
21. (Mantra Gore)
Conocí a Pablo en 1982.
Fue en un festival Gore de la Blondie. Pablo andaba vestido de negro,
con rayas en el rostro como cruces, y una lágrima desde el ojo derecho
hacia abajo. Cuando le pregunté por las rayas, me dijo: "Porque
prefiero llevar mis tumbas en el rostro que en el cementerio". Supuse
que seríamos grandes amigos.
Pablo toma el vaso de cerveza y dice:
- Quiero que me mates -
No todavía, dice Pablo. En este puente. Tan cerca de la plaza italia.
Quiero colgar de los brazos, dice Pablo.
Pero antes. Nómbrame una película Gore. La primera que recuerdes. La
más clásica.
Le digo: La Cosa, de John Carpenter.
Un grupo de científicos de una estación americana en la Antártida que
comienza a ser diezmado por una entidad extraterrestre. La entidad
extraterrestre que ha vuelto a la vida después de permanecer durante
siglos enterrada bajo el hielo.
- El Planeta Gore. Pedro Enríquez Silva. 23/02 - dice Pablo -.
¡Ficha Técnica!
- Dale - dice Pablo -.
- Director: John Carpenter -.
- Eso es fácil, ¿y los productores? -.
- Productores: David Foster y Lawrence Turman para MCA/Universal y
Turman-Foster Company -.
- Impresionante, pero te falta -.
- Guión: Bill Lancaster, basado en una historia de…
- Aer aer…
- ¿Stephen King? -.
- Error. Una historia corta de John W. Campbell.
- Aer si te creí tan chorito… Fotografía -.
- Fotografía: Dean Cundey; Música: Ennio Morricone ; Efectos
especiales: Rob Bottin (maquillajes), Jim Danforth (pinturas matte)
- Wow, igual le pegai, te la sabí. ¿Y los actores? -.
- Kurt Russell (MacReady), Wilford Brimley (Blair), T.K. Carter (Nauls),
David Clennon (Palmer), Keith David (Childs), Richard Dysart (Dr.
Cooper), Charles Hallahan (Norris), Richard Massur (Clark), Donald
Moffat, Thomas G. Waits, Norbert Weisser, Larry J. Franco, John
Carpenter…
- Bueh… me has dejado impresionado -.
- ¿Nacionalidad y año? -.
- Esa es fácil, nacionalidad y año, la nacionalidad de los muertos… :
USA 1982
- Duración y datos técnicos: 109 min. color scope.
- Qué gran película -.
- ¿Sabías que en los razzie del 83 Morricone fue nominado a la peor
banda sonora?
- Debe ser un título encantador para un visionario como Morricone -.
- Suena a Marricones -.
- Suena Italiano, wn, Marricones italianos haciendo gore del bueno -.
¿Y decías?
- Ah, sí -.
- Habla po, hueón, qué quieres -.
- Quiero que me mates, hueón -.
- ¿Cuándo? -.
- No sé cuándo, pero todavía no.
- ¿Dónde? -.
- En el mismo puente que tenemos aquí atrasito -.
- ¿Cómo? -.
- No sé aún, pero se viene bueno. Quiero que lo celebremos.
Son épocas de dictadura y nosotros vivimos en una libertad falsa. La
libertad de los muertos. Una vez le pregunté a Pablo qué quería ser
cuándo grande. Me dijo que resucitar.
Pablo está muerto hace más de veinte años. Por lo menos en su mente.
- Nómbrame la mejor película Gore de la historia -.
Las alas de la mariposa aletean en la mano de Pablo. Con la otra mano
sostiene el vaso de cerveza, y mira el mapocho.
- Aer… la mejor mejor -.
- Sí, la que más te haya marcado -.
- ¿Creepers? -.
- Puede ser - dice Pablo y juega con las alas de la mariposa - ahora
dime por qué es la mejor -.
- Porque es la más censurada, ¿Sabías que la versión total es de 112
minutos, y que en su estreno llegó con 85 minutos? -.
- Nah, no lo sabía.
- Sólo en Italia, y doblada del inglés, ha podido ser estrenada como
corresponde.
- ¿Qué más? -.
- La trama po, hueón.
Una joven llega a un internado para señoritas enclavado en plenos
Alpes suizos. Pronto, en el lugar, comienzan a acontecer macabros
asesinatos. La chica, que posee cierta hipersensibilización para con los
insectos, investigará los crímenes...
- Can you handle real life, Patrick Manson, 23 / 05 - dice Pablo -.
- Y la música, hueón. I Goblin, Iron Maiden, Motorhead, Simon Boswell.
Perfecta para su época. Bastante comercial, no está de más decirlo.
Pero muy censurada, y excelente en su versión completa.
- ¿Qué más? Todavía no me convence.
- Jennifer Connelly. Con esa te mato.
- Me mataste. Ya ganó mi puesto particular. Jennifer Connelly vestidita
de internada, con el frío de los alpes suizos, en su camita con guatero.
De repente se asoma una pierna…
- Una teta en la ducha…
- Un atisbo de vagina… -.
- Dios qué gran película -.
Pablo retira las alas de la mariposa. Sosteniendo la mariposa con una
mano y dejando el vaso en el borde, usa el otro brazo para posar las
alas sobre sus labios. Luego saca la lengua y se las traga.
- ¿Y Carry? -.
- No, Carry no - dice Pablo y suelta la mariposa sobre el Mapocho.
Vemos a la mariposa sumergirse en el río y desaparecer.
- Sabes, creo que el Gore en chile es cada vez más difícil de encontrar.
- Sí, las tiendas chuchesumadres.
- Quizás cuando haya democracia, todo se vuelva más agilizado. Más
dinámico. Pero el mercado está saturado.
- Sí, el mercado hueón. Saturado con tanta mierda.
- Sabes, envidio a los exiliados. Porque, más que mal están en europa o
en méxico o algo así, y tienen todo a su disposición -.
- Y de todas formas… -.
- ¿Y de todas formas qué? -.
- Y de todas formas chile siempre será una mierda -.
Somos un par de gores anarquistas. Somos un par de filósofos de lo
grotesco. Y todo esto que está pasando en Chile nos importa una raja.
Mientras hayan películas, la vida continúa.
- ¿Qué quieres hacer si esto termina? - dice Pablo -.
- No sé - le contesto - no sé -.
- Yo sé cómo va a terminar -.
- ¿Sí?
- Por lo menos para mi, yo sé cómo va a terminar -.
- ¿Y por qué quieres que te mate? -.
- Porque la forma en que quiero morir necesita de dos personas, y tú
eres perfecto para el trabajo -.
- ¿Pero por qué quieres morir? -.
- Para dejarle algo al mundo. Para salir en las noticias, qué se yo.
Pablo atrapa otra mariposa.
- ¿Cómo qué? -.
- No sé, algo valioso. Algo que me defina.
- ¿Y eso lo vas a conseguir matándote? -.
- Viejo, todos estamos muriendo -.
Pablo guarda la mariposa en su mano y la deja revolotear ahí dentro.
- Todos estamos muriendo y porque a todos nos están matando. Sólo
los que son perdedores permanecen en pie. Y yo soy un perdedor. Un
nadie.
- Yo también, wn, no sabes cuánto.
- Pero sabes… yo tengo algo que decirle al mundo.
- Parece que estás encabronado -.
- Lo estoy. Y sabes… ahora es el momento.
Pablo abre las manos y deja volar a la mariposa. El bicho se pierde
entre las incontables nubes de humo que vamos dejando sobre el
puente.
- Es ahora - dice Pablo y abre su mochila.
Saca una soga. Se quita la camisa. Los pantalones. Se para del otro
lado del puente.
- Anuda la cuerda a mis brazos -.
- Está bien -.
- Ahora pásala por entre medio -.
- Está bien -.
Pablo se tira del puente. Queda colgando a metros del mapocho.
- ¿Me escuchas? - dice Pablo -.
- Sí - le grito -.
- Está bien -.
Cuando una cuerda te estira los brazos, todo comienza a cambiar de
perspectiva. Los huesos se reacoplan. Los tendones. Pablo debe estar
sufriendo un montón.
- Ahora te recitaré un mantra -.
- Haz lo que quieras -.
- Ommm, Reanimator, are are crishna crishna -.
Cuando tus huesos alcanzan el límite, un tendón cerca del hombro se
rompe. Luego tu único apoyo es la carne. Lo que queda de ti. Son los
tendones los que te resguardan. Pero tienen doble filo. Hay
terminaciones nerviosas en cada músculo en el sufrimiento de los
tendones. Entonces, sabes que estás sufriendo.
Pero hay un punto en que eso para.
- Ommm, Aquarius, are are crishna crishna -.
Me pregunto por un segundo cuánto resistirán los tendones de Pablo
antes de romperse. Y después de eso, cuánto tiempo durará hasta que
la carne de la axila y el hombro se rompan y Pablo caiga para ahogarse
en el mapocho.
Y por ese mínimo segundo, me pregunto si habrá significado algo.
- Ommm, Braindead, are are crishna crishna -.
Entonces sucede. Escucho el tendón romperse. Escucho el alarido de
Pablo. Escucho las aguas del mapocho refulgir como llamas.
Aún queda el pedazo de carne.
- Estamos casi en retrospección- dice Pablo -.
- ¿Qué retrospección? ¿De qué mierda estás hablando? Déjame subirte,
todavía puedo salvarte -.
- Ya no, Maori. Ya no. Aunque, aceptémoslo, esta retrospección es
deliciosa. Es como vivirlo todo de nuevo.
- Cállate Pablo y déjame subirte.
- Ya no.
Tiro de las cuerdas, pero eso dificulta más el asunto. En el siguiente
segundo, ese segundo donde deberías pensar algo muy importante, ese
segundo que debería cambiar tu vida, ese segundo que lo es todo pero
dura sólo un segundo, un puto segundo, los brazos de Pablo se
rompieron y cayó al Mapocho.
No lo vi más.
La mariposa danzaba entre las estelas de humo. Y jamás volvería a ser
Pablo.
22. (El día que te rajé el falo y tú te vestiste de serpiente)
Santiago se ha quitado un pedazo de piel del codo. Asumo que el
reemplazante es la piel del hombro de un perro atropellado.
Recuerdo que cuando conocí a Santiago, llevaba unos libros bajo el
brazo. Eran de química. Se le cayó la planilla de notas, y Santiago trató
de esconderla bajo unos papeles. Santiago era un buen estudiante.
Hasta que murió su serpiente. La serpiente se llamaba Taty Pena.
Cuando murió, ver a Santiago gritando era todo un melodrama. Quizás
porque lo que gritaba era: "¡Pena! ¡Pena!". Era difícil reírse, pero en el
fondo era sólo un bicho que se había muerto.
Recuerdo una ocasión en que nos subimos a una micro, y Santiago
temblaba al pagar el pasaje. Puedo imaginarme en qué circunstancias
murió Taty Pena.
Desde entonces, Santiago bajó las notas. A veces iba al colegio, a veces
no. Y cuando llegaba, era callado y traía puestos un montón de chalecos
encima. Pero no hacía frío. Sin embargo, Santiago temblaba. Creo que
era de dolor.
Santiago me contó que no lo hacía por psicosis. Lo que quería era
invertir los tatuajes. No los estrafalarios, sino los clásicos, me dijo. Los
de serpientes, me entiendes. Entonces lo que Santiago hacía era, cada
noche, quitarse un pedazo de piel. Podía ser el codo, podía ser el
hombro. Podía ser la zona lumbar de la espalda, la rodilla, el antebrazo.
Podía ser la frente. Pero cada noche, Santiago se sacaba un jirón, y al
día siguiente llegaba más y más cubierto al colegio. No quería que
vieran los reemplazantes. Piel de perros atropellados, gatos que
vomitaron desde el nacimiento, guaguas abortadas, incluso frutas. La
zona abdominal del estómago era una cáscara de plátano. Te juro.
Hubo veces en que Santiago faltaba semanas seguidas. En esos
momentos, me dedicaba mucho a pensar en Santiago. En por qué lo
hacía.
Yo tenía una amiga. Kiara. El asunto es que yo no la pescaba mucho,
pero eso me hacía pensar. Creo que nadie estuvo detrás de Santiago en
su vida. Es como si lo único que hubiera tenido fuera su serpiente.
Un día Santiago llegó al colegio, y traía un gorro de esos que cubren
todo el rostro. Santiago se había sacado la mejilla. Ahora su rostro era
mitad terrier.
Por un momento me fijé en sus ojos.
Santiago tenía bellos ojos. No los de todo el mundo. Eran ámbar, con
tonos de verde y café. Había manchas negras que se colaban por las
orillas, pero el tono que tenía total, era verde azulado.
Kiara me comentó que era lo único bonito de Santiago.
No está ausente de mención que había una relación sexual entre
Santiago y la serpiente. Por algo el nombre. Yo siempre dudé que no
fuera psicosis. Pero Santiago decía "Ten paciencia", y luego hablaba del
verdadero arte, y de una ciudad en llamas. Las llamas de la muerte de
los últimos perdedores.
Una vez, estábamos en una plaza y Santiago se desnudó. Santiago
siempre se desnuda cuando hay protesta. Era un espectáculo
asqueroso. Los rastros de hedionda piel de perro muerto se cruzaban
con cáscaras de manzana podridas, con costados de piernas de gato
hediondos a mierda. Los pelos tiesos danzaban con el aire, corroídos
por las pulgas y la sangre coagulada entremedio de las costuras. Habían
ampollas palpitando como vacas alcohólicas, sangre hirviendo
desparramándose por la piel, y pedazos contaminados con tétano, con
quemaduras de cigarro, con cortes reveladores de espacios amplios de
carne interior.
De lejos, podía sentir la pierna de Santiago palpitar.
Creo que hasta salió en el diario. No sé, no leí la noticia.
Recuerdo de una ocasión en que me invitó a su casa. Fue la primera
vez que vi el acto en sí. Fuimos caminando desde Plaza Egaña, y vimos
a un tarado atropellar a un cachorro. Santiago no le gritó nada. Yo le
grité: "Así dejé a tu mamá". Tomamos al cachorro. Ya había muerto. Lo
llevamos a la casa de Santiago y los separamos en trocitos. Los dedos
del cachorro aquí. Las piernas allá. Le abrimos la guata y le sacamos los
chunchules y los dejamos en un recipiente. Santiago después los
botaría.
- ¿Quieres ver de qué se trata? - me dijo -.
- Bueno. Pero quiero participar.
Entonces Santiago me pasó un cuchillo y rebané la pierna del cachorro.
- Ahora déjame sacarme el pantalón -.
- Bien -.
Santiago se sacó el pantalón, y luego los calzoncillos.
- Ahora ábremelo -.
- ¿Cómo? -.
- Que me lo abras. Pon el cuchillo en el prepucio y vas bajando.
Hice lo que me dijo. Puse el cuchillo en la punta, y descubrí la piel del
escroto. Luego le pasé un poco de alcohol por las heridas, y planté el
nuevo pedazo de piel.
- Gracias, así está bien -.
- ¿No sientes dolor? -.
- Obvio que sí po, wn, cómo no voy a sentir dolor -.
- Sorry, disculpa -.
La piel de Santiago la dejé sobre una mesita. Él tomó el pedazo de piel
y lo guardó en un cajón. Presumo que ahí se hallaban los demás. El
cajón costó en cerrarse. Creo que había algo más en el cajón.
- Bien, ¿y ahora? - le digo -.
- Ahora veamos películas -.
Vimos El Dentista, y nos quedamos dormidos.
Lo que quería era invertir los tatuajes. Ése era su plan.
Lo que pasa con los tatuajes es que son marcas. Son definiciones.
Apoyan a un sentido. En la ciudad, la propaganda cubre todo. Los
metros. Los edificios. Y en la televisión, los únicos que hablan de algo
que pareciera real se creen líderes. Pequeños líderes con tatuajes y
piercings, hablando de un camino alternativo que ya todos seguimos, y
del que todos ya nos sentimos decepcionados. Había que dejar la
personalidad. La identidad. El cuerpo. Santiago tenía una lógica.
Aunque me costaba aceptarla.
La última vez que vi a Santiago fue en un puente que cruzaba el
mapocho.
En mi pieza sonaba Primus cuando escuché el teléfono.
- Diga -.
- Hola, Mauri, soy Santiago -.
- ¿Cómo estai? -.
- Viejo, la obra está completa, quiero que me ayudes con el final -.
- ¿Y qué quieres que…? -.
- Ven. Nos juntamos en Plaza Italia. A las 9.
- Oka -.
Tomé una micro en Plaza Egaña. En el camino, fui leyendo un libro de
lemebel. No quería ni debía preguntarme lo que iba a pasar esa noche.
Llegué a las 9 cero cinco. Ahí estaban los trozos de carne. Era Santiago
caminando hacia mi.
- ¿Cómo va? -.
- ¿Qué tienes planeado? -.
- Mira esto.
Santiago me mostró una bandera. Era su piel. También me mostró una
tabla con un palo que hacía de mastil.
Caminamos alejándonos de Plaza Italia. Bajamos hacia providencia, y
subimos por un puente hasta encontrarnos en la mitad del río mapocho.
- Ayúdame a poner la bandera en el mástil -.
Lo hice. Agarré su piel de pequeños clavos que podían ser sus uñas, y
terminé algo extrañado. Había un par de manchas corroídas a través de
toda la tela. Manchas verdes con tonos azulados.
Bajamos a la orilla del mapocho y le prendimos fuego al barco. Lo
dejamos irse. Vagó por el agua, y seguía ardiendo fuerte, como un
sentimiento que estalla en silencio.
Fue hermoso.
Luego, volvimos a subir. Hacía frío, y la altura me provocaba vértigo.
- Algo me extraña - le dije -.
- ¿Qué cosa? -.
- No sé -.
Entonces miré sus ojos. Estaban completamente oscuros.
Eran los ojos de la serpiente.
Eran las llamas del barquito de su piel refulgiendo en sus ojos. Eso es lo
que quería Santiago. Eso es lo que siempre había querido.
Santiago estaba ciego, pero la serpiente lo había visto todo.
- Nos vemos - dijo, y se fue por la bajada del puente -.
No lo volví a ver. Desde entonces que no va al colegio. No sintonizo las
noticias, así que no sé si habrá habido algún anuncio sobre nuestro
barquito apocalíptico. A veces pienso cosas. Sabes. Pero no tienen
mucho sentido. Y la verdad es que no recuerdo mucho más de
Santiago.
Tampoco es que sean recuerdos. Pedazos inconexos.
Creo que así era él.
23. (Lo que esperábamos del final)
La primera cajetilla de cigarros está puesta a un costado de la mesa,
arrugada y aún contiene algunos restos de tabaco.
Segunda cajetilla de cigarros: Derby.
- El niño, che - dice Artázar - debe observar, debe ser un eco y recorrer
el riachuelo, pero no olvidemos que el niño también está esperando, y
por eso recae en la historia que haya manchas y saliva, tomadas de
pelo y juegos inofensivos con el primo, el que mira al niño, que a la vez,
observa.
- No, po, Julio - dice Díaz Jetarovic - la historia es clara. Es hasta poca
cosa. Debemos empezar por el asunto del primo, que entra a la casa de
la familia opus dei, y que ve al niño junto a un riachuelo. Es poca cosa .
- Pero por favor no caguemos a Pinochet - dice Borgues, el del
condimento -.
- Si Pinochet no tiene nada que ver, huevón - dice Jetarovic -.
- Pero el juego, che - dice Artázar - el juego.
- Métete tu juego por la raja - dice Mauricio Peralta -.
- Mirá, mal parido, el juego lo meto donde quiera y a la hora que
quiera, en las circunstancias que ameriten sangre y entrequejidos
entrecortados como diría Huidobro -.
- ¿Qué me huivean a mi? - dice Ausencia Huidobro -.
- Che, te estaba ayudando -.
- Vous ni me ahiudes - dice Ausencia -.
- ¿Le tienes mala leche? - dice Gracia Márquez -.
- Tú, con tu biografía te crees la culia' más vendedora de la tierra - dice
Mauricio - Pues fíjate que me meto tu biografía por la rrraja, y no te
metas en el relato, que esto es pa expertos -.
- Mira, huevón - dice Jetarovic - tu pásame el último cigarro (no sé
cómo te pueden gustar los yerbis) y terminemos que sea el primer
párrafo -.
Borgues se mantenía callado, dice el narrador omnisciente.
Tercera cajetilla de cigarros: Ele y eme.
- Oui, vamos pgoguesando - dice Emar -.
- Seguro - dice Mauricio -. Prefiero los Yerbis.
- Ya po, guarros culiados - dice Arturo - en qué íbamos.
- Decíamos, sin decirlo, esto está claro - dice Artázar - que el niño
observa en el riachuelo, y que al mismo tiempo está siendo observado
por un primo, que ha llegado por el azar a un recinto opus dei al cual
este Jetarovic apellida la casa de unos familiares militantes -.
- Eso decías tú - dice Jetarovic - porque con tu "juguemos a las bolitas
con la literatura" seguramente es que te gustan las bolitas, huevón,
porque la idea es que el primo en realidad sea un detective, o por lo
menos, que esté pensando en ser detective -.
- Esa idea me gustó - dice Arturo -.
- A voh cualquier wea' con detectives - dice Mauricio Peralta -. Miren, la
wea que les pido es un suicidio. Con eso quedo contento. El resto de la
historia se la dejo a Ustedes, incluso al saco e wea' de Diamelo.
- Si po, Tito - dice Arturo -, habla un poco.
- El Tito no pesca - dice Mauricio -.
- Hip - dice Diamelo -.
- ¿Te curaste, wn? -.
- La elite se me subió a la cabeza.
- ¿Alguien se ha preguntado que palabra se forma si juntamos Tito con
Elite? -.
- Eltit - dice Artázar -.
- Wea' rara - dice Mauricio - es como nombre de pastillas pa la
menstruación -.
- Bueno, malas leches - dice Gracia Márquez - ¿terminamos el puto
primer párrafo de una vez? - Yo me fumo el último - dice Borgues -.
- Puta, como si fuerai el último escritor del mundo - dice Mauricio
Peralta -, igual me cago en las cagadas de cigarros. Más malas las weás
-.
- Che, ¿y tus yerbis purulentos? -.
- Julito, Julio, te encuentro toda la razón - dice Jetarovic -.
- Váyanse los dos a la mierda - dice Mauricio -.
Arturo Delano mira a Señoroso y escupe en el piso, dice el Narrador.
Tercera cajetilla de cigarros: Apolo.
- ¿Entonces cómo empezamos el cuento? - dice Delano -.
- Ya no sé, Che, hay que darle desde la estocada, volverlo vulgar - dice
Artázar -.
- En eso estoy de acuerdo -.
- Delano, me caí mal - dice Mauricio -.
- ¿Y eso qué me importa? -.
- Te creí Rimbaud, por puro que te llamai Arturo -.
- Ah, ¿y tú no? -.
- A mí me han dicho Rimbaud - dice Mauricio - es una perspectiva
totalmente diferente de vida.
- Claro, ¿sigamos? -.
- Delano, ¿cuándo escribiste mamé erres, el primero? -.
- Ya ni me acuerdo -.
- Te acordai de tu fecha de nacimiento y no te acordai de eso. Yo escribí
mi primer libro a los 15 añitos, compadre, igualito a Rimbaud -.
- Igual era una basura - dice Arturo -.
- A mucha honra - dice Mauricio - prefiero comprar basura sin
contraportada que tu mierda de altura literaria. Esa wea' no la compro
ni cagando -.
- Malas leches - dice Gracia -.
- Huivones - dice Ausencia -.
- Pero el cuento, por el amor de Artázar… - dice Jetarovic -.
- ¿Lo dices en serio? - dice Artázar -.
- Es en serio - dice Jetarovic -.
Artázar y Jetarovic se pegan un calugazo ahí mismo, dice el narrador.
- ¿Cómo estuvo? - dice Artázar -.
- Mucho mate y poca lengua -.
- Oye, hueón - dice Mauricio - ¿quién chucha se llevó el último cigarro?
-.
- Perdona, tenía hambre - dice Borgues, el del condimento -.
- Aguí paguece que tgodos tienen hambrgue - dice Emar -.,
El narrador omnisciente se come un pan con queso.
Cuarta cajetilla de cigarros: Colo colo.
- Parece que vamos cayendo bajo - dice Diamelo Tito -.
- Mira, los cigarros importan un pico - dice Jetarovic - terminemos el
primer párrafo de una maldita vez -.
- Yo ya me doy por suicidado en todo este relato - dice Artázar -.
- Y dale con las intertextualidades - dice Mauricio - Seamos Artázar y
juguemos a que todo es un cuento, que todo es literatura, seamos
malos y juguemos; la cultura maya me la meto en el poto.
- ¿Y la mapuche? - dice Merríos -.
- La mapuche no po hueón, si tampoco soy inconsciente social -.
- ¿Y la Inca? - dice Verga Llorosa -.
- Tú nunca hai pescado, no hablí de la cultura inca ahora -.
- ¿Vámonos a tomarnos un mate mejor, Che? - dice Artázar - nos
vamos a la séptima -.
- Me carga esa boludez - dice Zápato - vámonos donde el partido,
escuchemos la octava, crucemos un perro en las puertas de La
Sociedad.
- Apuesto que voh, Zápato, ni escuchai la Sociedad - dice Mauricio
Peralta - pura música country y wea' -.
- No, boludo - dice Zápato - yo escucho clásica -.
- Ah, psicópata - dice Peralta -. Me agradas, Zápato -.
- ¿Y de qué se iba a tratar el cuento? -.
- ¿Quedan puchos? - dice Artázar -.
- Huevón, no te des por vencido - le dice Jetarovic - sigamos con el
cuento -.
- Está bien, pero con un cigarro estoy de ánimos -.
- Borgues, pásale un cigarro al clasiquito - dice Mauricio -.
- Esto es vida - dice Borgues - me siento inmortal -.
- No weí, Borgues -.
- Lo siento, che, era el último.
- Seguramente hiciste lo mismo con el pinocho - dice Arturo Delano.
- No, con pinocho, nos fuimos con puros -.
Puros qué, pregunta el narrador omnisciente.
- Con "puros" cubanos - dice Borgues -.
Quinta cajetilla de cigarros: Calvin Klein.
- Cada vez peor y peor - dice Lacroix -.
- ¿Alguien sabe para qué madre invitamos a un crítico? - dice Delano -.
- Yo aún no sé qué estoy haciendo aquí - dice Peralta -.
- Bueeeeno. ¿Y el cuento? -.
- Íbamos en que era poca cosa - dice Jetarovic -.
- A mi ya ni me importa - dice Lamebel - yo vine aquí para hacerle el
favor a los cuiquitos que compran mis libros (a los demás no me los
toquen eso si). Después de media hora, mis patitas echan a correr dice y le cierra un ojo a Jetarovic -.
- Todos Ustedes los under de la nueva literatura son iguales -.
- ¿Cómo iguales? - dice Díaz Jetarovic -.
- No sé, wn, cuando tenga editorial te explico -.
- Yo te entiendo - dice Floridor Sepúlveda -.
- Gracias, wn, se agradece realmente -.
- Oye, estos cigarros son una boludez - dice Borgues, el del condimento
-.
- Ahora te quejai, después de fumarte todas las otras cajetillas -.
- Boludo, es mi vida -.
- Yo sabía que eras gay -.
- No po, Mauricio - dice Floridor - ¿no ves que es "intertextualidad"? -.
- No te preocupes, Borgues - dice Delano - yo hasta te ayudaría a
escribir una novela -.
- Si po, la novela que Borgues habría aceptado escribir -.
- Boludo - dice Borgues y toma un cigarro -.
- Borgues, dame un beso -.
- Bueno.
Y entonces Delano y Borgues se dan el calugazo del millón, dice el
narrador omnisciente. Pero no es nada impresionante.
- Bueh, había un niño, ¿no? -.
- Creo que ése era el principio -.
- ¿Y dónde quedamos? -.
- Che, eso fue todo. Al principio, un niño, y un hombre que lo observa.
- Vaya -.
- Bueh… -.
- Che - dice Artázar - eso es todo lo que aguanto por hoy -.
- Un niño, y un hombre que lo observa.
- Es todo lo que necesito - dice Jetarovic - eso y un cigarro… bah…
Borges, dice el narrador omnisciente.
Señoroso, Delano, Jetarovic, Emar, Ausencia, Mauricio, Floridor,
Artázar, Tito, Lamebel, Verga Llorosa, Gracia Márquez, Zápato, todos
ellos: mirando a Borgues. Él fuma y observa el cielo. Un cielo estrellado.
Nebuloso. Asequible con la primera agarrada, lo agarran, sin pensarlo
Borgues trata de articular una palabra, pero el ademán puede más, sin
embargo Borgues quiere decirla, necesita expresarla, el narrador
omnisciente no sabe cuál es la palabra, el narrador omnisciente está
perdido.
Dos pájaros de una, dice Mauricio Peralta.
24. (Doce Suicidios y Cuarto.)
Tres imágenes:
2.
Nota del autor: incurriremos en este error no por darle al cuento un
aura de Bolañismo; recuerdo que algunos críticos escribían sobre
Bolaño diciendo que era un escritor que no creía en el comienzo, y me
pareció una cursilería. Una típica cursilería de esas que amo. El asunto
es que hemos caído en el número dos de las imágenes a describir, no
por un trasfondo filosófico como el de Bolaño, sino por un error
inconsciente. Puta la wea', la cosa es que se me olvidó cómo empezaba
el cuento. Algunos críticos (si es que me llegan a criticar algún día)
verán en la cita de Bolaño una referencia a mi comentario. Y por lo
tanto apelarán al simbolismo. Quizás este olvido no fue casual. Quizás
fue premeditado. Quizás lo que hacía Bolaño era dárselas de ser
humano, y describir en cada cuento fragmentario la forma en que se
nos olvida el principio de todas las cosas importantes. Bolaño no era un
ser humano, así que le salió el tiro por la culata. Yo no lo soy, y
hablando de cosas cursis y olvido, me acordé cómo iba a escribir este
cuento. Pero eso lo voy a dejar para el final. De esta forma, si el
principio está al final, y el final está al medio, me sentiré menos
angustiado por la idea de haber mencionado a un inhumano como
Bolaño y no hacer algo inhumano con mi cuento. Como por ejemplo,
escribirlo real.
Escribir ficción real.
Introducción a la imagen número 2.
Nota del autor: esta es una historia que me ocurrió con mi polola. Iba a
empezar a contarla, nombrando una serie de movimientos literarios que
aparecieron después del Nadismo, en orden de aparición. El Pezonismo,
el Masturbismo y el más importante y rescatable de todos, el
Zorrefalismo. Existía también el Pedofilismo Mágico, pero este se lo
dejábamos a los hueones. Iba a decir que en los noventas, la música se
convirtió al grunge por una razón: las fórmulas se habían agotado. En el
fondo, lo que quería era intervenir diciendo que en el 2003 ya nos
habíamos percatado bastante de tal asunto. Y con la muerte de Bolaño,
muchos quedamos marcados en la literatura chilensis. Sabes, nos
habíamos dado cuenta que el único que realmente había estado
escribiendo era Bolaño (no haciendo literatura, eso es una cursilería de
las que no me gustan; me refiero a ESCRIBIENDO). Y cuando llegó este
punto, muchos habíamos leído a Bolaño y dijimos diantres. Bueh, eso
no es lo que dijimos. Lo que dijimos fue rechuchetumadre y la puta que
la parió, y luego tomamos vino y lloramos con lo que tuviéramos cerca.
Luego nos masturbamos con una porno (esa es una imagen que, con la
referencia a Bolaño, debería entrar aquí, pero incurriré nuevamente en
un error, porque, aceptémoslo, la imagen que voy a relatar es mil veces
más eyaculante que un pendejo como yo pajeándose con una
penthouse). Y cuando perdimos las esperanzas, empezó la avalancha
de mierda. Estalló en nosotros una que nos haría crear y crear, para, de
alguna manera, reestablecer el equilibrio en la literatura chilena. Algo
bueno iba a salir si nos seguíamos masturbando y si continuábamos
escribiendo basura. Esta serie de movimientos literarios apelaban a eso.
El Nadismo también, pero podemos considerarlo la base de todas las
demás corrientes, que por cierto son más post y más basura que el
Nadismo. El Pezonismo expone que todo relato debe ser escrito como
una mina a la que le estás mordiendo un pezón. Cada mordida debe ser
un rayo de excitación para el lector. Y debe conducir necesariamente a
un orgasmo, y un beso con el lector. Un beso que te rompa el corazón,
como postulaba Palahniuk en un artículo sobre Amy Hempel. Palahniuk
era definitivamente un pezonista, aunque no debió saberlo, puesto que
él vagaba por una carretera en Oregon cuando en Chile se inventó el
movimiento. Una cosa que me gustaría aclarar antes de seguir, es que
los pezonistas llamaban a Palahniuk el mejor escritor del mundo, y a
Macedonio Pierro Altamira (otro pezonista) el mejor escritor de Chile.
Esta inconsecuencia (puesto que Macedonio era un pezonista
destacado, mientras que Palahniuk era un minimalista sin conocimiento
del Pezonismo) tenía validez desde el punto de vista que si naces en
Chile, siempre podrás ser sólo el mejor escritor de chile, mientras que
naciendo en América, beibi, ahí puedes ser el mejor escritor del mundo.
Eso también pasa si naces en Argentina, Colombia, o Pakistán. No
puedes empezar un cuento con la palabra pico y esperar ser leído en
todo el mundo. En cambio, si escribes Pinas (que en inglés significa
pene; cursi, pero universal), ahí sí puedes ser el mejor escritor del
mundo. Sin embargo, los pezonistas decían que preferían a Macedonio
que a Palahniuk. Simplemente porque adoraban los chilenismos. Los
pezonistas odiaban a Chile, y algo que los hiciera cuestionarse sobre su
odio, como por ejemplo la palabra pulento, era para quererlo. Un
escritor podía ser bueno sin ser querido. Pero un escritor no bueno
podía ser más querido que la cresta. Luego está el Masturbismo, que
postulaba una idea muy interesante. Todo cuento debe ser una
masturbación de cuarenta minutos sin haberse tomado los
antidepresivos después de una noche en vela. Debías quedar tan
agotado y satisfecho después de un cuento, que cerrarías el libro hasta
que te recuperaras para continuar la eterna masturbación. A pesar de
que los Masturbistas se consideran independientes de otros
movimientos, su ideología se basa en un cuento de Macedonio Pierro
Altamira: "La última eyaculación". Todo cuento debía ser la última
eyaculación. El cuento debe terminar como si el libro mismo terminara.
Como si la vida terminara en ese cuento. El Masturbismo tenía en un
altar a Bukowski y a Macedonio, pero los desechaban por lo mismo que
los adoraban. No pertenecían al movimiento. Ninguno supo del
Masturbismo, y sin embargo se supieron lo suficientemente geniales
como para ser masturbistas. Macedonio declara en una de sus últimas
entrevistas antes de retirarse del Pezonismo y empezar una carrera
zorrefalista: "Ni el Pezonismo ni el Masturbismo me atraen. Son
movimientos que han perdido la mística. Literatura que ya no tiene
vida. Me uno al Zorrefalismo por opción, no por reducción. He
encontrado en las aulas zorrefalistas lo que le faltaba a los movimientos
anteriores. Una chispa". El movimiento zorrefalista, nacido el 2003,
cuando Macedonio tenía 23 años (7 años antes de que el cáncer lo
matara), habla de un falo enorme que es toda las cosas. Dios es un
falo. Las mujeres son un falo. Las manzanas son un falo. Tu padre es
un falo. Al principio, los iniciadores pensaban llamarlo olafismo, por una
anécdota particular. La persona que convirtió a un país entero al
cristianismo se llamaba Olaf. El mismo día que lo contaron en una
entrevista, se dieron cuenta: olaf al revés, es falo. Fue una revelación.
Pero luego vino otra, aún mayor. Los olafistas (pre-zorrefalistas)
descubrieron en su propia literatura la vagina universal. Estaba en cada
texto que escribían. Era un órgano que se escurría por sus páginas con
olores deliciosos pidiendo a gritos, en cada final de texto, llamarse. Por
lo tanto, los olafistas decidieron cambiar el nombre del movimiento.
Luego de contar todo esto en lo que iba a ser la imagen, pensaba dar
una explicación de la relación entre la imagen y los movimientos. El
asunto es que todos estos movimientos fallaron en su ética por una
razón: ocultaron la verdadera mierda. Y en esto, el Nadismo se irguió
sobre los demás competidores. Macedonio se convirtió al Nadismo a los
29 años, escribió dos libros y murió a los 30. Esto de ocultar la mierda
tiene que ver con la imagen, pero eso lo debemos dejar para el final. Lo
que yo iba a relatar es una historia con mi polola. Yo iba a contar lo
siguiente: que estaba frente al ritz de las condes, celular en mano,
llamando a mi polola porque buscaba saber dónde encontrarla. Nos
habíamos juntado para ver a un amigo de ella en una parada militar en
la comuna. Yo no soy de las condes, más bien me ubico entre la reina y
ñuñoa (con esto: no me estoy sacando los pillos de la corrupción ni
tampoco lo estoy logrando). Pero siempre hacía lo posible por viajar,
porque ella me encantaba y la buscaría incluso en una parada militar.
Hablando de nuevo de los críticos, es probable que los mencionados no
pesquen mucho este último comentario. Pero habla de un asunto
universal. Decir "incluso en una parada militar", expresa que las
paradas militares son una mierda, y que nunca iría sin alguien
agradable a una huea' como esa. Y expresa que la literatura es en
esencia excluyente. Desde mencionar a Andy Warhol hasta el nombre
de una calle en parís le da un aire de exclusividad. Por eso los bebés no
pueden leer. No porque no sepan (estoy convencido de que los bebés si
saben hablar y leer, sólo no quieren ir al colegio), sino porque no
poseen la información literaria. En la literatura cabe toda clase de
información. De eso hay que convencer a los nuevos y clasiquistas
literatos. En la literatura no sólo vas por leer sobre una ópera o un viaje
a Francia o la cultura maya. A la literatura también puedes ir para
entretenerte. Ningún imbécil que abra un libro sabe si ese libro que
abre es el libro que lo impulsará a crear un libro. Y los lectores no son
imbéciles. No, desde que saben lo que quieren. Y por culpa de los
literatos clasiquistas, es que no quieren más lectura. En la literatura
caben cosas tan distantes como una teta o un párrafo de kírkegar.
Desde tul a la informática. Desde praimus al porno. Desde una cultura
urbana a un poeta maldito. Desde el cielo hacia Nunca Jamás. Por eso
es que los bebés no pueden leer libros. Y por eso es que debemos dejar
de ser bebés, y convertirnos en informacionómanos. La infornografía
debe ser nuestra droga. Es la época de la información rápida, y en vez
de saturarnos, debemos canalizarlo. De ahí a leer. De ahí a escribir. La
frase era "incluso a una parada militar", y la historia la hubiera
continuado escribiendo sobre cómo la encontré, sobre el beso que nos
dimos cuando la encontré, sobre la cara que pusieron sus amigos
cuando la besé al encontrarla, porque en el fondo (comprenderán los
críticos, si alguna vez me critican), lo importante era encontrarla y no
otra cosa. Pero soy escritor Nadista, así que sí, me olvido del origen. Lo
que esperábamos con ella era que pasara su amigo. Nos besamos. Nos
acurrucamos. Nos regaloneamos. En algún punto, la gente en las
demás gradas gritó: "un dos tres viva chile y pinochet", y el hermano
de Rebeca les respondió: "fachos culiados, métanse su Perrochet por la
Raja, fachos de mierda". Era un iluminado. Podía morir, pero era un
iluminado. Yo habría muerto con él, pero estaba ocupado con mi
Rebeca. Entonces los críticos (que no me criticarán, eso ya lo doy por
sentado), verán en la palabra "mi" de la frase "mi Rebeca" un aire de
exclusividad que no sólo expresa que hay millones de Rebecas, pero
esta es la mía, la que adoro y necesito, sino que tal exclusividad es un
símbolo de lo que es la literatura. Y que rebeca y Literatura eran la
misma persona y concepto.
(Ahí, eyaculación)
Luego de hacernos y deshacernos en las cosas que hacíamos como dos
enamorados regalones (otra cursilería que me gusta), empezó la
parada. Cuando vayas a una parada, notarás que el comentarista habla
mucho. Y que le da mucho suspenso innecesario.
Nota del crítico hipotético: ¿Y voh?
Nota del autor hipotético: chúpate un coco.
Volviendo a Nota del autor: No vayas a una parada nunca. No, a menos
que vayas con alguien maravilloso. Bueh, ante las quejas, pasaré al
meollo del asunto. Este era la introducción a la imagen, así que
introduciré a la imagen. El asunto es que justo después de que
empezara la parada militar, pasaron unos caballos. Y un caballo de los
que pasaron se cagó en medio de la calle. Todos menos yo y mi polola
se hicieron los que no cacharon. Y la parada siguió.
La imagen que guardo de ese momento: cuando el primer paco caminó
y pisó la mierda.
Epílogo a la imagen número 2.
Nota del autor: La verdad es que en las paradas militares el
comentarista siempre habla de orden y patria. Y los militares hacen
todo muy ordenado y métrico, muy apretado y matemático. Cuando
pisó mierda, pisó mierda improvisada y se impregnó de ella. Se
impregnó de naturaleza. De algo que nadie esperaba, y que fue
indominable.
(Ahí, eyucular de nuevo)
3.
Nota del autor: Anteriormente dije que se me había olvidado el
principio. Por eso ahora el principio está al final y el final está al medio.
Es como comprensible que con esto también se me haya olvidado el
final. ¿Es lógico, no? Ahora prendo un cigarro y pienso en todos los
antiseudointelectualoides que se morirán cuando diga "prendo un
cigarro". Quizás pienso en la literatura de nuevo, o no sé, en mi mujer,
que se llama Rebeca y me comprende mejor que nadie. Sabes, Rebeca
es hermosa. Diciendo esto me siento como si escribir fuera un diario de
vida. Quizás mencionar a Bolaño no fue lo mejor después de todo.
Quizás nunca completemos la obra tan incompleta de Bolaño con todos
estos trozos incompletos de escritura nueva. Entonces los críticos (que
no me criticaran, porque son hueones), dirán: "me siento más agarrado
pal hueveo que con Rayuela. ¿Era real o era ficción lo que me ha estado
contando hasta el momento?". Entonces yo diré que las dos. Entonces
yo diré que ya recordé cuál era la imagen, cuál era el final (que está al
medio), y que aunque no seamos nunca Bolaño, escribiré inhumano,
escribiré real.
Escribiré ficción real.
Introducción a la imagen número 3.
Nota del autor: En esta imagen se suponía que iba una aclaración. Y
esto puede parecer confuso, pero bastante obvio. Los movimientos
antes mencionados son y no son verídicos. Los creamos con un amigo
por msn una tarde de volados. Aquí los críticos (que ni siquiera me
leerán, porque soy hueón y no tengo editorial), apreciarán (que soy
hueón por no tener editorial y) que esta es una irrupción particular. ¿Es
la literatura misma, la literatura entera, una creación de dos amigos
que se pusieron a conversar volados e inventaron un mundo entero en
un par de minutos? ¿Es la literatura el mundo en sí? ¿Es el mundo una
creación de dos minutos? ¿Dios creó al mundo conversando con unos
amigos sobre algo que sería muy entretenido, sin saber que podría
cagar a un montón de gente, excluyéndolos por falta de información?
¿Es Bolaño ese dios? ¿Es Macedonio Pierro Altamira ese dios? ¿Eres tú
el próximo dios que va a crear al mundo? ¿Y si lo haces, tus personajes
se preguntarán esto mismo mientras tú escribes sobre unos personajes
preguntándoselo? Y con esto así de confuso, ¿fue lo que acabo de
contar real?
(aquí, eyacular)
Hago nota de esta irrupción, ya que lo que voy a contar a continuación
es y no es real, y por qué no decirlo, muy eyaculante.
Es otra historia sobre Rebeca (¿Es Rebeca real?)
Nota del crítico hipotético: puta, este hueón ahora se va a burlar de sí
mismo.
Nota del escritor hipotético: búrlame éste.
El alias del amigo con el que inventamos todos esos movimientos es
Prop. Que puede ser la abreviatura en el diccionario de "propósito", o el
sonido que hace un peo en un manga animé. Según Prop, la imagen
que viene a continuación es muy zorrefalista. Algo que no les he
contado sobre el zorrefalismo es que aparte de tener mucho de falo y
mucho de zorra, ambos universales, trata sobre la unión entre el útero
(el volver al origen), y la verga (el lugar que lo tira todo afuera con el
propósito (nótese la intertextualidad, y a mií mismo, qué clase) con el
propósito de eyacular, de la catarsis; pero también es el que viola, el
que destruye la virginidad, y es una cosa muy horrible y a la vez
entretenida, se mueve y todo). Lo que me ocurrió a continuación es una
historia sexual con Rebeca (¿Es Rebeca real?).
Nota del cursi hipotético: es más real que la cresta. Es hermosamente
real. Con todo lo que implica ser "real", si es que me entiendes.
En un libro de Coupland, el Coupland real hipotético se pregunta qué
significa ser real.
(Aquí, eyacular de nuevo).
El asunto es que Rebeca sí es verídica, y estábamos en un
supermercado comprando cosas porque íbamos a ver una película en
casa de Daniela. Por alguna razón, escribir lo anterior me recordó algo
que dijo el director de Memento en una entrevista para emtiví. Dijo que
lo que quería era crear un narrador del que debieras desconfiar. Esto
también me recuerda otra cosa. Lain. ¿Alguna vez has visto Lain? Bueh,
es una película de Manga ciberpunk (viva el ciberpunk), y en ella, la
protagonista se encontraba con un dios de la red (huaierd), quien le
decía que ella era software de una enorme computadora. Lain
desconfiaba siempre del dios del huaierd, y al final de la serie,
terminaba convertida en Dios, y el dios del huaierd, él era simplemente
un oficinista en el mundo real, agobiado por la rutina y corroído por la
ambición. Es decir…
Nota del crítico hipotético: es decir que nos hay hueviado todo el rato,
hueón culiao.
Nota del escritor hipotético: ¿Y voh te creí muy crítico con todas las
pistas para las segundas lecturas de este cuento? Acéptalo, te has
vuelto inservible.
Nota del escritor hipotético arrepentido: no, crítico lindo, te quiero, por
favor críticame en tu revista para saltar a la fama. Te quero mucho,
crítico lindo.
Nota del narrador omnisciente: Lo que falta es saber reírnos de
nosotros mismos.
Nota de un perrito: ¿Y qué chucha hago acá? guau.
Nota del autor: sale de acá, pato culiao.
Nota de un perrito: bueno, cuac. ¿Me quedo?
Nota del autor: no.
Nota de un perrito: Bueno, chau.
Nota del autor: gracias.
Bueh, cómo les iba contando. Estábamos en el supermercado con
Rebeca, comprando nachos y besándonos más enamorados que la
cresta, y volvemos a la casa así, enamorados y besándonos. El
hermano de Rebeca prendió un cigarro en la entrada y yo hice lo
mismo. Rebeca le dio un beso al video, y la película funcionó. Luego
todas las luces estaban apagadas, y empezó el juego.
Nota del crítico hipotético: ¿Ahora citai a Cortázar? ¿No que le teníai
rabia?
Nota del escritor hipotético: mira, hueón, este recurso ya se trilló.
Ándate de acá mejor.
Nota del crítico hipotético: Bueh, me voy a un cuento de Díaz Eterovic,
allá si me quieren. Chao, conchetumadre.
Volviendo a Nota del autor: Como les iba contando. Estábamos con las
luces apagadas, y entonces empecé a jugar con el cabello de Rebeca. Y
nos dábamos besos. Y ella acercaba mi mano a su mano. A veces metía
mi mano en su pecho, y yo jugaba con sus pezones. A veces ella
tomaba mi mano y me hacía apretar su teta, y nos besábamos. A veces
yo mordía el labio de Rebeca, a veces ella me mordía a mi. A veces
mirábamos a los demás presentes, pero estaban concentrados viendo la
película. El hermano, sí, el hermano posiblemente se percató, pero yo
cacho que se hizo el leso. Entonces paramos por un buen rato, y yo
prendí un cigarro.
- Préstame el cigarro - dijo Rebeca con la mirada, y con los dedos.
Tomó el cigarro y le dio una bocanada. Entonces nos besamos y me
ahogué. Reí y le dije que estaba loca. Le dije que la amaba. Entonces
ella me dijo ahora hazlo tú. Lo hice, y nos dimos un beso largo y
profundo, algo de otro mundo. Lo hicimos una vez más, y luego nos
calentamos de nuevo. Comencé a tocarle los pezones de nuevo. Y ella
apretaba mi mano para que sintiera su teta hermosa en la oscuridad. A
veces me preguntaba si era que me amaba mucho, o que la excitaba
mucho. O si eran las dos cosas.
Nota del crítico hipotético: hip… puta, volví. Estaba bueno el carrete
con Heterovic, pero funó y me vine con los perdedores. ¿Qué se cuenta
por acá?
Nota del escritor hipotético: nah, le estaba contando de la otra vez con
Rebeca. Oye, estai pasao a trago.
Nota del crítico hipotético: no hagai caso. No todos somos así.
Volviendo otra vez a Nota del autor: Bueno, y después de calentarnos
mucho, ella posó su mano en mi pene y empezó a apretarlo y a
moverlo.
(Aquí, yo eyaculé)
La película terminó, y prendimos las luces y llamamos a un taxi en la
calle. Ella me despidió con un beso, y me sonrió.
La imagen que guardo de ese momento: la sonrisa de Rebeca. Con
frenillos. Sonriéndome hermosa.
Epílogo a la imagen número 3.
Nota del autor: no hay nada más que decir. Es eso. Eso me guardo para
el resto de mis días. En mi casa escuché The Cure, y el Robert Smith
decía Ai güil olgüeis lov yu, siempre te amaré, y era la verdad.
1.
Antes de decir la imagen final (que es el principio, por lo tanto la
imagen que va al final, la principal; nótese, críticos, la clase), me
gustaría hablar de dos manos. Las de Rebeca y las mías. Recuerdo que
al principio de nuestra relación, yo observaba mucho sus manos, y
ahora han hecho de todo. Y se podría decir que todo lo que ha sido,
empezó por nuestras manos juntas. Pero es una sensación, sabes.
Siento que esto empezó de antes. Que trasciende las manos. Ni siquiera
siento que haya empezado, estaba aquí desde siempre, palpitando,
esperando nacer. Entonces pierdo la noción de lo que es el principio. Y
te confieso, te confieso lo mismo que te confesé al principio. Se me ha
olvidado cómo iba a escribir este cuento. ¿Lo que te iba a contar, esa
imagen? Se me olvidó.
Pero sabes, Bolaño tenía razón. No hay principio. No hay final.
4. Porque al final, las historias las tienes que crear tú, y somos dos
amigos o dos amantes creando un mundo.
5. Y crearemos mundos hasta el día que partamos hacia otra parte, un
lugar donde la información no sea necesaria, donde podamos ser bebés
que no necesitan cultura para conocer y reconocerse en una creación.
6. Y quizás en ese mundo nos encontremos de nuevo, amigos y
amantes, y quizás en ese mundo, un avión vuele, un sol pegue en
nuestras nucas, y una lluvia nos lleve por pasajes.
7. Y no haya necesidad de razón para decir te amo, como esta noche,
cuando tomo el teclado y escribo una historia corta, la historia
larguísima que no pensaba escribir, donde todo importa, no por la
literatura, sino por lo que siento, esta noche, este mismo momento
donde los seres humanos somos animales profundísimos que pueden
escuchar el trinar del amanecer.
8. El rugido profundo de un motor atravesando la calle.
9. Las legañas en los ojos.
10. Escuchar la noche en vela y estar seguros a la hora de dormir,
cobijados por la seguridad.
11. Que ya no estamos solos. Soltar las cuerdas de esa última palabra y
sentir que ya no es una palabra.
12. Que me puedo entregar al amanecer como si fuera amanecer, sin
que sea bello, grave, agudo, insensato, perdurable, nada.
12 y cuarto. Sea sólo la imagen que tengo del sol:
"Un pendejo masturbándose con una penthouse el día que Bolaño
murió".
III
De la micro que me sirve:
El lugar que no existe en la televisión.
A1. Volando en el culo del mundo.
(A)
- Antes que nada, tres cosas que tienes que saber de mi -.
1. Mi nombre artístico es Edi Barflai (que significa Eddy moscadebar, y
que quiere decir que me llamo Eduardo Berríos Fuguet, y por un
percance, también suelen llamarme Profesor; un percance con la
profesora de filosofía). El primer nombre, por la película de Bukowski y
por el grupo grunge.
- Dale - dice Kati -, la segunda.
- Bueh… -.
2. Soy trisexual (que significa que soy imposiblemente sexual, y que
quiere decir que soy bisexual, y por un percance, también escribo
guiones de cine). También puede significar que soy tri (stemente)
sexual, pero no te preocupes, no me masturbo tanto.
- Esa no te la creo - dice Kati - apuesto a que te pajeas como mono.
- Pero si soy un mono castrado lanzado al espacio, beibi - digo y me
paso la mano por la cabeza rapada -.
- Dale - dice - la tres -.
- Bueh… -.
3. Acabo de terminar con Virginia (que significa que he vuelto a ser el
perdedor que todos adoran, y que quiere decir que he vuelto ser el
perdedor que todos detestan, y por un percance, el perdedor que
Virginia metió en una licuadora para dárselo a su perra como laxante, y
ahora soy churretera de perro con un toque de limón y un pedazo de
intestino delgado de cóker spániel. Ah, y una zanahoria metida en la
raja). Pero estoy bien. Sí, estoy bien.
- ¿Y la querías mucho? - dice Kati -.
Virginia, ese lavalosas. Virginia, esa etapista mentirosa. Virginia, esa
arriesgada por cinco días. Esa feminista de piernas peludas y masoca
secreta. Esa animalista; esa perra. Esa vegetariana; esa huevona. Esa
feminista; esa zorra. Parir piedras por la diuca tiene más valor que estar
con esa mina.
- Sí, la quería caleta -.
- Pucha - dice - qué pena por ti -.
- Abrázame y me siento mejor -.
- Bueno -.
Kati me abraza y aprovecho de mirarle el culo.
Los culos son el dios del bien y el mal juntos. Los culos son abraxas.
¿Cómo te sientes? "como el culo" ¿Qué quieres hacer para recuperarte?
"Culiar". Son el final y el principio.
- ¿Sabes qué es lo interesante del medioevo? - dice -.
- No. Dale, cuenta -.
- Que es la etapa del medio, la época del medio, la tierra media, pero
nunca tuvieron clase media. Lo que explica que el medio nunca tiene
algo que necesariamente tenga que ver con el medio. El medio puede
ser el final. El medio puede ser el principio. Decadente, próspero,
oscuro, clarísimo, pero siempre es ni ahí consigo mismo.
- Como el culo - digo -.
- ¿Me estás mirando el culo, hueón? -.
- No, sólo estoy filosofando -.
- Ya, suficiente abrazo -.
Esas feministas anti abraxas.
- ¿Alguien tiene algo más que leer? - dice Cristo (nombre artístico).
- No, yo ya me estoy yendo -.
- Bueno, vámonos todos - dice Kati -.
- Vámonos - dice Cristo -.
Caminamos por Plaza Italia.
- Sabí, dejé de tomar - dice Cristo -.
- ¿Y tus transfusiones qué? -.
- Prefiero que otros se beban mi sangre -.
- ¿Por qué? ¿Qué pasó? - dice Kati -.
- Quiero concentrarme en mi escritura. Quiero observar sin
distracciones. El alcohol te hace escribir puras hueás -.
- Pero el alcohol es tu esencia - le digo -.
- La existencia precede a la esencia - el imbécil estudia filosofía en Viña
y se cree el cuento.
- Tendrías que haberlo dicho en parábola po saco e wea' - digo - y no
sé qué tanto de existencia hay en escribir -.
- Mucho. Léete a… ves, con eso está claro. Si te lees a alguien para
cachar un concepto, estás existiendo por sobre la esencia. Si te pones a
escribir, informas, divagas, existes. La escritura y la literatura son lo
mismo.
- Te faltó decir una wea' en latín - digo -, la literatura es nada que ver
con la escritura. Porque los críticos pueden alcanzar la literatura, pero la
escritura no la tocan. Cuando escribes, cualquier cosa es válida. Cuando
haces literatura, es necesario que leas y que escribas bien.
Ránking de discos country nunca vendidos de neruda:
1. "Confieso que conecté con tanto hueón porque escribía en vez de
hacer literatura"..
2. "Con la Literatura en el horto".
3. "Igual le hacía a la institucionalidad"
- La altura literaria es una droga liviana. En cambio, la escritura es un
alucinógeno -.
- Puta, hueón, no quiero tomar nomás -.
- ¿Pero en serio, por qué? - dice Kati -.
- Porque se escriben puras hueás cuando estai dopado -.
(Z)
Ziempre ez azí. Dezpuéz de zinco pitoz de marihuana en la meza,
planeamoz el mejor guión de zine arte ezpañol del mundo.
- Tiene que ser una wea' muy volada - dice Dadá-Vinchi (nombre
artístico) - onda tiempos inconexos, el final al medio, el principio al
final, el medio como imágenes entre el medio final y la imagen que
debería ir entremedio, que es el principio. Y onda astronautas que no
sienten la gravedad, como en el libro de ese hueón, el Javier Campos.
- ¿Ciberpunk tú decí? ¿Una película Ciberpunki chilensis? -.
- No po - dice Suarín (nombre artístico) - tiene que ser como esta hueá.
Cachai, todos volados diciendo hueás y escuchando De Kiur en una
mesa en un recinto privado, a los pies de un cerro con una vela
prendida.
- ¿Y esa sería toda la película? - dice Dadá-vinchi -.
- Si po - dice Bergamín (nombre artístico que significa que escribió la
importancia del demonio, y que empieza con B larga porque
supuestamente la tiene larga) -.
- Si po - digo - onda Esperando a Godot, pero postmoderno.
- Tan postmoderna ella -.
- La postmodernidad… te la meten por detrás - dice Dadá-vinchi -.
- A ti te lo meten por detrás -.
- Tu papá me lo metió por detrás -.
- Esa wea' es bacán - dice Suarín -.
- Suarín tiene novio -.
- No po, hueón, decir que tu papá me lo metió por detrás. Porque
quedai como el hoyo tú, pero también queda como el hoyo, aun más
pal horto, el compadre al que se lo decí, porque "su papá está
engañando a su mamá con tu compadre" -.
- ¿Veí que es buena idea pa una película? -.
- Se anota - digo -.
La vela se apaga.
- Bueh, otro día lo escribo completo -.
- Mi papá te lo metió por el abraxas -.
- Hueón, esta huea' es épica.
- La… cagó - digo - muy edad media.
La canción ya no es de De Kiur. Ahora termina una de Placibo, y
empieza una de un grupo ska gringo.
- ¿Y qué pasó con la Virginia? - dice Bergamín -.
- Puta, la mina terminó conmigo -.
- Wea' mala - dice Suarín -.
- Si po -.
- ¿Y qué es lo primero que te acordai de ella? - dice Dadá-vinchi -.
- Una huea' de los momentos. Que atesoráramos los momentos que
teníamos, no importando la presión. Y que nos acordáramos para
siempre. Yo cacho que fueron los culiados del colegio los que le
metieron presión y cagaron los que teníamos. Y sus problemas. Y yo,
que le decía a cada rato que si esto terminaba, que se olvidara de
hablarme, porque yo no iba a hablar con ella -.
- Pero si tú no quieres tener amigas mujeres po hueón - dice Bergamín
- es tu opción.
- Pero puta, me da la sensación de que me estoy perdiendo los
momentos que podríamos atesorar con ella -.
- Ella los rechazó - dice Suarín - que ella se los pierda, y tú te creas
nuevos momentos. Piensa en todos los hueones que vivieron la
dictadura y ahora están intentando esa huea'.
- ¿Y la muerte de Bolaño, hueón? - dice Dadá-vinchi - Da para pensar -.
- No sé, hueón, no me vengai con los blops. Últimamente estoy un poco
apestado de los momentos.
- Dale, dale, dale - dice Bergamín - los momentos hay que hacerlos.
Ten cuidado.
- ¿Cuidado de qué? -.
(De la M a la O)
- Momentos, hueón. Ellos destruyen los momentos -.
Un poco antes:
- ¿Y si nos pillan los pacos? -.
- Puta, cagamos nomás po - dice Bergamín -.
- Me da cuco esa huea' - dice Dadá-vinchi - y pasar el bajón en la
cárcel, chucha.
- ¿Y cómo nos van a pillar? - dice Suarín - sin terror, hueón -.
Caminamos cerca del metro el golf (ténganme miedo, soy cuico y me
drogo), hacia un cerro privado en el sector más hacia providencia. Me
bajé de la micro que me traía de Plaza Italia, caminé por apoquindo y
nos encontramos entre el metro escuela militar y el golf.
- Bergamín - le digo - ¿Por qué le tenemos miedo a los pacos? -.
- Porque ellos destruyen momentos.
Me imagino a la mujer ciega de la justicia metiéndole el candelabro por
el hoyo a un momento.
La justicia, esa feminista anti Blops. Esa zorrista anticoupland.
- Tú tení que leerte a Coupland. Generación X, hueón. Ahí hablan caleta
sobre los momentos. Onda, los capitalistas dicen que la vida son dos o
tres momentos y que, si tení suerte, podí hacer una historia coherente
con esos tres momentos. Pero los X dicen que hay que rescatar todos
los momentos, y por lo tanto, todo momento es un libro.
- Creo que lo voy a leer.
Bergamín anda con una mochila. Suarín también. Dadá-vinchi no lleva
nada, excepto la ropa que pilló en el clóset. Ah, y Bergamín lleva puesto
un huók man mini disc. Yo llevo una camisa a cuadros.
Ránking de discos country nunca vendidos de neruda:
4. "Mi poesía se vende porque uso boina".
5. "Inventé una moda para ganarme el nóbel".
Yo llevo una camisa a cuadros. Quizás me gane el óscar de la fruta.
- Hay un hueón en mi colegio - dice Bergamín - que es el que me cae
más mal. O sea, hay hueones que me caen mal, pero este se las gana.
Onda, cuando estaba en el preu de castellano, la profe dice "los dos
ganadores del nóbel", y este saco e wea' dice "¡Pablo Neruda y Gabriela
Mistral!". Huea' obvia. Medio aporte -.
- ¿Y pa qué sirve el nóbel? -.
- Pa limpiarse el poto con billetes. Ésa es la meta de todo escritor con
altura literaria. Ganarse un gran premio, para completar la fantasía.
Rascarse el poto con los billetes que te sobren, y con el resto vivir, y
dar muchas entrevistas y hacer biografías hueonas.
- Si me ganara el óscar por mejor película extranjera - digo - usaría el
discurso para pedirle prestado el culo a almodóvar.
- Al final todo pasa por el culo - dice Bergamín -.
- Es que… a ti te dan por atrás - dice Dadá-vinchi -.
- Es que tú eres el que me da por el culo, ves -.
Suarín se ríe.
Llegamos a la entrada del cerro.
- Puta, está cerrada - dice Suarín -.
- ¿Y qué hacemos? -.
- Conozco otra parte pa entrar -.
Caminamos en subida. El anuncio de que vamos a volar.
Nuestra pista de despegue.
Miramos hacia el cielo.
A2. Carnet de seguridad existencial.
(A)
- Antes que nada, tres cosas que tienes que saber de Virginia -.
1. Se llama Virginia Carolina Pérez Lobos (nombre no artístico que no
significa que sea virgen, y no quiere decir que el que se la culió haya
sido tu servidor, y no por un percance le han puesto Virginia; su madre
lleva los pantalones en la casa). Otra cosa que no vale la pena decir es
que el que la culió fue un panki, y hasta se la mamaron al panki culiado,
y hasta por el culo le dio a la Virginia. Cosa que envidio triplemente,
puesto que me gustaría ser tanto el que le da por el culo, como el que
recibe, como el que me observa dando y siendo dado por el culo
tomándome un café, cámara en mano.
- No es malo - dice Dadá-vinchi -.
- Sigamos -.
2. Es masoca reprimida (lo que no significa que yo haya tenido sexo con
ella, y no quiere decir que me haya manifestado sadista en mi vida, y
no por un percance es que lo soy, y la verdad no sé qué me calienta
más; que me violen, o que yo sea el violado, o escribir sobre una
violación doble en la cual soy el personaje principal). Otra cosa que no
vale la pena mencionar es que sus besos siempre dejaban gusto a poco,
que tenía una boca minúscula, y que nunca le agarré el poto cuando
nos besábamos, asunto del que me arrepiento, puesto que cuando
sabes que una relación no da para más desde el comienzo, es
imperativo que beses a la mina agarrándole el poto. Es tu carnet de
seguridad existencial.
- Siempre hay que agarrar el poto - dice Suarín - es como que la
nostalgia te queda en las manos.
- O las gomas por debajo del sostén - digo - pero sigamos.
3. Me abandonó (lo que no significa que hayamos durado más de 5
días, y no quiere decir que ella se haya arriesgado como mintió al
principio, y no por un percance fue que… mierda, cinco días). Yo le dije
que no quería hablar más con ella, y que me sentía engañado. Ella me
preguntó por qué, y yo le dije que no lo iba a saber de mi. Y ella agregó
"si así lo quieres", y se fue. A trabajar como obrera en una peña del
colegio mientras sus amigos pankis se morían en un hospital en alguna
parte.
- Jevi - dice Bergamín -, quizás debiste haberla alegrado. Por lástima,
digo.
- Yo no le tengo lástima a la gente - digo -, es una cosa muy extraña la
verdad. Me da pena tenerle pena a alguien. Es como que el hecho de
que algo te cause lástima me produce ganas de vomitar. Como si
alguien pudiera darse ese poder.
- Los psicópatas hacen eso todo el tiempo - dice Suarín -, en serio. Está
en la Biblia de los psicópatas. Ese libro de Salinger.
- ¿Lo de tenerle pena a alguien? - digo -.
- No. Que mi papá te dé por detrás - dice Dadá Vinchi.
- ¿Hay cachado que ahora todos se drogan con tapsin período? -.
- Sí, hueón. Y todos dicen "y tu hermana".
- Es como ése cuento de Cortázar - digo, y agrego, el que la tiene
Cortaza - donde el tipo iba al teatro y lo hacían meterse a la obra. Y
después Cortázar - y agrego, el ministro de salud que tiene un moño recibió una carta de un tipo diciéndole que había pasado por las mismas
circunstancias. Es como si nosotros - que habíamos escrito un guión de
cine donde salían todas estas cosas, pero en sí me refería a "nosotros",
como a "la humanidad" - le diéramos un empujón a la sociedad con
cada obra. Y en serio, nadie se da cuenta pero está ahí. Gestándose
desde que alguien escribe, no sé, Golonfina, y por ahí cachai que hay
una tipa que se llama así y que tiene mucho que ver con Huidobro.
- ¿García Huidobro? - dice Dadá-Vinchi -.
- No po, Huidobro, el escritor francés.
- Ah, sí lo cacho, por ahí había escuchado que era chileno -.
- No. Es Francés - le digo -. Los escritores chilenos no dicen golonfina.
Se van directamente a la palabra pico.
- ¿Pero le dai una piteada o no? -.
- ¿A tu pico? -.
- No, tarado, al cogollo.
La vela alumbra apenas el cerro. Suena el tema de la banda ska gringa.
Le doy tres piteadas y casi me piteo. La tos se confunde con los
ladridos. Hay bestias que acechan. Canes amaestrados para matar. De
pronto el tema, la frase de Ismael Serrano, "seremos esa generacion
perdida". Nada más apropiado.
El nombre artístico de Virginia: Perdida.
Su droga de elección: la marihuana.
Su marca de zapatillas: sin marca.
Lo que guarda en el refri: Mi corazón en pedacitos nicotínicos. Porque,
no seamos cursis, una mina puede hacerte el corazón pedacitos, pero lo
único que puede matarme es el cáncer.
Prendo un cigarro.
Ránking de discos de boleros nunca vendidos de Neruda:
1.- "Maté disidentes del comunismo y sigo siendo el rey".
2.- "Soy el arturo prat de la poesía".
3.- "Sólo moriré si soy un héroe".
- A veces siento que la gente quiere ser celebridad sólo para morir
tranquilo - dice Dadá-vinchi -.
- Y eso que a las celebridades les atormenta la muerte -.
- Las organizaciones de caridad deberían publicar una lista de cuantos
famosos están matando los pobres que leen tabloides -.
- Y los pobres deberían hacer caridad para salvar a los ricos - digo - así
se volverían famosos -.
- Saben - dice Suarín -, yo no quiero ni gloria ni fama ni prestigio ni
plata ni razones. Ya no las necesito. Pero no quiero morir solo -.
- Suarín - le digo - es el destino de los perdedores. Naces solo, vives
solo, mueres solo. Y para ser un solitario no se necesita mucho. Te juro.
El certificado te lo ganas imaginándote a una mujer bonita cagando.
Cualquiera que se haya imaginado eso, entiende perfectamente lo que
es la soledad.
- Ser famoso tampoco aleja la soledad.
- Pero puta que hay droga disponible.
- Viva Nelsón Ávila mierda.
¿Existe algo para matar la soledad? ¿O sólo existen caminos para morir
solos? Todos los caminos llevan a roma. Roma es la total desesperanza.
El camino es la mentira. Hay que agarrarle el poto al camino.
Y puta que hay droga disponible.
(Z)
Zigzagueando por tobalaba hasta príncipe de gales la iba a encontrar.
Tuti (nombre artístico que significaba que nunca le habían dado con
tuti, que esa noche tenía tuto, y que tenía una esquela del cura tato en
el bolsillo; güini de pu, el pedófilo más pedófilo de los monitos
animados).
La encuentro a las 9 y veinte. Habíamos quedado a las 9. Cruzo el
semáforo con los brazos extendidos simulando un abrazo, pero ella no
pesca.
- ¿Cómo estai? - digo -.
- Bien -.
- Que hueno -.
Vamos caminando por Avenida Ossa, hacia el hogar (nombre
patéticamente artístico). Me gusta mi pieza, eso es lo único mío de
casa. Lo demás es familia. Orden, disciplina, protección: "amor".
Nunca ames a alguien. No a menos que quieras caerle como el forro.
- Te ves bonita - digo -.
- Sí, claro -.
- En serio -.
Ella se tapa la boca y levanta la ceja. Eso es propio de Tuti.
- Me encanta cuando haces eso -.
- Entonces no lo haré más.
- Hace poco estuve conversando con una amiga de Amy Hempel -.
- ¿Quién es Amy Hempel? -.
- La escritora favorita de… Bueh, da lo mismo - digo -. El asunto es que
en un cuento de Amy Hempel la protagonista estaba en un quirófano, y
decía que podía sentir el dolor en la habitación, pero no sabía si era de
ella.
- ¿Y? -.
- Y que hay dos clases de personas. Las que sienten el dolor sin saber si
es de ellos o de otro, y las que creen que todo el dolor es de ellos, y
anulan el dolor de los demás. Es decir super pateados y patudos de
mierda. Creo que yo soy de los últimos.
- ¿Y? -.
- Y que creo que hago eso de apropiarme del dolor de todos, porque
creo que el dolor es lo único que tengo que sea mío. A pesar de que no
sea totalmente mío.
- Exageras.
- Obvio. Ése es mi punto. Me encanta que me escuchen hablar de lo
solo que estoy.
- Espero que no hables de eso todo el tiempo.
- También puedo hablar de lo odioso que es tener amigas mujeres y
que desconfíen de ti y te llamen pendejo de mierda.
- Estaba picada.
- Da lo mismo, tú sabes que te perdono todo.
- ¿Y a Virginia? -.
- Yo me imagino a Virginia como la madre que me ha dejado en el
orfanato. Una perra que me trajo a un mundo vacío, y que ni siquiera
se percató de que tenía que cuidarme.
- ¿No que te molestaba que te cuidaran? -.
- Bueh, es que Virginia no es exactamente mi madre. Es diferente
cuando has elegido que una maldita te parta el corazón -.
- Ves, tú tienes la culpa - dice Tuti -.
- Eso es una falacia - digo -.
- ¿Por? -.
- Porque nadie es culpable. Nadie es inconsecuente. Siempre te puedes
reinventar a ti mismo y siempre tienes una segunda oportunidad.
- Eso sí que es una falacia. Tiene que haber culpa y castigo. Sino todos
andaríamos maltratándonos con plena libertad.
- ¿Y por qué lo haríamos? -.
- Por herencia - dice Tuti -. Por las malditas madres de nuestro trauma
eterno.
- ¿Y si viviéramos en un mundo sin traumas? ¿Si naciéramos en el
comienzo con lo que sabemos? -.
- Tan tool… Ai yust güant tu star dis ouver.
- Muéstrame tus utopías entonces -.
Y las tetas, si tienes un rato libre.
- ¿Mis utopías? -.
- Dale -.
- Un mundo sin familia, hueón - dice -, donde no hubiera que convivir
con nadie que no eligieras.
- ¿Pero y si elegir te lastima aún más? -.
- Por lo menos fuiste libre de elegir tu propia condena. Como decía
Serrano. Inventarle el final a la canción.
- ¿O sea que igual termina triste la puta canción? -.
- Si po - dice -. Pero al menos es tu dolor.
(De la M a la O)
Me bajo en plaza egaña de la micro que me trae de apoquindo. Prendo
un cigarro cerca de la casa.
A las tres viene Moco (nombre artístico que significa que se llama
Macarena, que quiere decir que tiene una hermana que se llama
Lorena, y por un percance, le dicen loro; al hermano le dicen esputo, y
a los tres les gusta el grupo Flema).
En que llegue, me pongo a pensar. He decidido no tener nunca más
amigas. Desconfío del sexo femenino. Moco está pololeando y lleva un
mes. No sé por qué mierda la he invitado. Realmente no quiero tener
amigas. Últimamente siento deseos de mandar a todas las mujeres a la
mierda y ser planamente bisexual. Es decir, homosexual y escritor de
guiones de cine.
Pero puta, ya la invité.
Escondo la zanahoria lubricada en el cajón donde guardo la rosa que
me regaló Virginia, y me siento a esperar, fumando en la cama.
La verdad ya recuerdo por qué la invité:
Moco prometió traer paraguaya.
Pasan unos minutos.
- ¡Eduardo! ¡Te llama Tuti! -.
- Voy -.
Pesco el teléfono.
- Edi - dice Tuti - mi mamá se quiere suicidar.
- Yo también.
- Y yo, pero ella va a salir, así que podríamos juntarnos. Necesito
hablar. Que ella salga y me mande a la casa de mi papá significa que
algo malo va a pasar.
- ¿Y tu mamá es capaz? -.
- Sí -.
- A las nueve entonces -.
- ¿Y dónde? -.
- En tobalaba con príncipe de gales.
- Ya. Ahí nos vemos -.
- Chau -.
Cuelgo y suena el teléfono. Es moco.
- Estoy en la puerta pero está con llave.
- Yo te abro - la puerta, no te culpo, cualquiera hubiera malpensado.
Está detrás de la reja. Lleva ropa artesa y sonrisa de volada.
Siempre he tenido la siguiente idea para un cortometraje: una bomba
atómica que va estallando de a poco, y entremedio, las sonrisas voladas
de todos los jipis de chile.
No sé por qué.
La verdad sí sé por qué. Y por eso el grunge es tan perfecto. Porque
toman el contexto jipi, y lo ridiculizan de forma dadaísta, punk. Aunque
también depende del grupo. Por la idea, el mejor grupo sería Pixies o
Nirvana, pero la verdad es que mi favorito es Soundgarden.
Ránking de discos punk nunca vendidos de neruda:
1. "Yo soy mamón porque el mundo me hizo así".
2. "El meneo siempre está".
3. "Con Los Miserables en el corazón".
Llega Moco y es hermosa.
- Puta, hueón - dice una voz en mi cabeza - ¿vai a desconfiar de las
mujeres o no? -.
Pérame tantito.
Estamos en mi pieza, fumando y tomando chela.
- Barflai - dice Moco - perdona pero no pude conseguirme el pito -.
- No importa - digo pensando en el plan de emergencia.
- ¿Me das un poco más de cerveza? -,
- Bueno -.
- ¿Escuchemos algo? -.
- Vámonos al computador -.
Tengo un pentium I, 166 Mhz. Corre a la velocidad de un viejo sin
sangre en las piernas, con taquicardia, en una fila del banco, en un piso
hecho de lija en una atmósfera gaseosa, en un mundo paralelo donde
los segundos corren a la velocidad de un viejo sin sangre en las piernas,
con taquicardia, en una fila del banco, etc.
- Sabí - dice - quiero que seamos grandes amigos -.
- Si po - digo, con el barómetro de desconfianza destilando sangre.
- Quiero que nos conozcamos -.
- Si po - el barómetro a mil -.
- Quiero que seamos mejores amigos - esa frase era de la Virginia. Se
acabó. Plan B.
- Oye, ¿puedo besarte? -.
- Lo siento -.
- Qué eres bella… - acerco mi rostro a su rostro -.
- Lo siento -.
- Ya po, uno solo -.
- Bueno, pero un beso de amigos -.
Nos besuqueamos desenfrenadamente. Ella se pone a mil y me agarra
la mano y la posa sobre una de sus tetas. Luego, se detiene.
- Hasta ahí nomás - dice -.
- Seguro - le digo y le doy otro beso, está vez más agitado -.
Se me tira encima. Está sentada en mi coxis.
Ni wea que es un coxis, pero se oye bien.
- Espérate, estoy incómoda, sentémonos en la otra silla.
Cabalgamos por un rato. La tiro a la cama y seguimos cabalgando por
encima de la ropa.
En unos minutos me pongo talentoso y alcanza el orgasmo.
Y por esos minutos, deseo que sea fingido. Que no lo haya alcanzado.
Deseo que todo este placer sea falso, incluyendo el de ella. Deseo
desconfiar de las mujeres.
Pero puta que estaba rica la wea'.
- Me tengo que ir donde la Vale - dice -.
- Sí, obvio.
- Esto fue cariño de amigos, ¿ya? -.
- Obvio.
- Seamos los mejores amigos, ¿ya? -.
- Bueno.
- Pero esta fue la última vez, ¿ya? -.
- Obvio. Chau.
- Chau.
Cierra la puerta y se va.
Deja su aire a "no pololees conmigo, no eres atractivo" y se va.
Tremenda amiga que me había ganado.
A3. La hidra de falos.
(A)
- Antes que nada, tres cosas que debes preguntarte todas las mañanas
-.
1. ¿Cuántas veces me hurgaré la nariz? (Respuesta de este minuto: 15
veces). Mirando el techo, la pared, el cuadro de Guérnica, el
computeador, la tele, el piso; en mi cama, en el piso, pegado a la
pared, en la cocina haciéndome un sánduich de mostaza, en la ducha;
pensando en mi, en la soledad, en Virginia; masturbándome.
- Qué huena - dice el vagabundo -, ¿ahora me da unas moneditas?
- No - digo - sigamos -.
2. ¿Cuántas veces me masturbaré para alcanzar el cielo? (Respuesta de
este minuto: 3 veces, pero sólo porque acabo de despertar). Una en la
cama. La segunda en la ducha. La tercera en el computa, leyendo un
libro electrónico de otro Berríos que prefiero no mencionar.
- ¿En serio? - dice el vagabundo - ¿Por qué? -.
- Porque en el mundo sólo hay espacio para un Berríos - digo -, un solo
Barflai -.
3. ¿Cuántas minas mandaré a la mierda? (Esa es una pregunta más
para períodos de una semana. Respuesta del minuto: 6 minas).
- Dale - dice el vagabundo -.
- Van así -.
1) Nicolisón (nombre artístico que significa que es feminista, que quiere
decir que besa mujeres, y que por un percance sí se rasura las piernas).
Este detalle: a que es gótica, por lo tanto, estética, por lo tanto,
inconsecuente, por lo tanto, culo, tetas, maquillaje; lubricación rebelde.
- ¿Por qué tan así? -.
- Es que últimamente odio a las minas -.
- Yo tengo todas estas minas - dice el vagabundo -.
- Puta, yo también, cachai. Pero es que me piden tanto sexo, y yo sólo
tengo nueve falos -.
- Yo también. Es una paja -.
- De hecho, ocho pajas y una mamada, con suerte -.
- Lo sé, macho, lo sé -.
- Sigamos -.
2) Natilla (nombre artístico que significa que su estado de ánimo es
como los grumos que se hacen en la leche, que quiere decir que se
llama Natalia, y por un percance es la besada en la relación Nicolisón Natilla). Al contrario de Nicolisón, Natilla escribe sobre árboles y cosas
de mujeres. Suele ser depresiva, a veces cursi (los árboles son una cosa
muy cursi), pero tiene momentos buenos. Aunque se rebela contra el
machismo, también lo hace contra el feminismo. Y sin embargo,
arbolitos y una estrella en el cielo y wea'.
- Es que debe ser inocente po compadrito - dice el vagabundo - nadie
aquí nació sabiendo cosas -.
- Si te rebelai, rebélate por completo - digo -.
- Quizás esos arbolitos y esas estrellas son su búsqueda personal -.
- Búscame éste - digo -, si te pica un coco, entiérrale una estaca. Si te
rebelai contra algo, no seas igual a tu enemigo -.
- Eso sí lo entiendo - dice el vagabundo - hombrezotes tan hombrezotes
y muercitas tan mujercitas - dice -, pero usted no se salva -.
- Yo odio a las mujeres y me odio a mi mismo- digo - sabes, eso es una
relación de pareja con todas -.
- Yo te cacho, macho -.
- Siguiente -.
3) Tuti (ésa ya la he mencionado). Nuestra relación se mantiene en la
barrera de la amistad con la barrera del distanciamiento. Pero algo
hablamos.
- ¿Y por qué? - dice el vagabundo -.
- Porque tiene más problemas que la mierda - digo -, y mi odio es
diferente al de un nazi o un homofóbico. La verdad es que yo sentiría
culpa si llega a morir, y eso no me hace bueno, sólo es un egocentrismo
diferente al de un racista, pero igual en cantidad.
- Bien - dice el vagabundo - por poco pensé que me iba a matar a mí
también.
- Creo que no es odio lo que les tengo - digo -, es más bien
desconfianza.
- Si po, hay que desconfiar de las perras - dice -. Ahora, ¿me da unas
monedas? -.
- Sigamos -.
4) Kati (estuve con ella hace dos días, y fui su pololo por una semana).
La mandé a la mierda porque por un segundo estuve dispuesto a darle
algo mejor, ahora que había terminado con Virginia, y ella dijo que lo
nuestro había sido la nada misma. Y, loco, yo lo di todo con ella.
- Puta que es fresco usté - dice el vagabundo -, termina con ella para
estar con Virginia, y luego Virginia termina con usté, y descubre que
Kati ya no quiere más basura. ¿No cree que es fresco? -.
- Mira, culiado - digo -, yo soy un perdedor de la séptima luna de
Júpiter, y voh te vai a gastar las monedas en trago. Y tení familia,
culiado. No hueí, ¿ya? Estamos del mismo lado -.
- Yo voy a usar las monedas para entrar a la política -.
- Me tincaba. ¿Sigamos? -.
5) Picci (nombre artístico que en italiano se pronuncia Pichi). Ella me
había mandado a la mierda unas semanas antes, y volvió a acercarse a
mí. Pero yo no tenía idea hasta que me lo contó. No confío en la gente
que no confía en mi. A la mierda con ella.
- Pero ella se volvió a acercar, ¿o no? - dice el vagabundo -.
- Sí - digo - pero no me gusta que otros condenen mi pasado. Yo ya
estoy suficientemente ocupado siendo un imbécil en el presente.
- Clarísimo, don - dice el vagabundo -.
- Y última y por eso mismo la peor -.
6) Virginia. Terminó conmigo y la mandé a la mierda. No pienso volver
a hablar con ella.
- ¿Pero no es mejor quedar amigos? - dice el vagabundo -.
- No - digo -. Eso es darle otra oportunidad para enamorarme de ella y
que me vuelva a hacer daño. Ya me ha pasado muchas veces con ella.
- ¿Y cómo quería una segunda oportunidad con Kati si no le da una no
sé cuánta oportunidad a la Virgi? -.
- Porque no se la merecía - digo - todo lo que me dijo: etapas,
arriesgarse, jugársela, no le duró más que cinco días. Y no me dio todo.
Yo con la Kati di todo, y me duró una semana porque realmente me
agoté. Lo cual no significa que la Kati debiera darme una segunda
oportunidad, ni que yo le aceptara llamarme sensible.
- ¿Y usté no estaba sensible? -.
- Demás que sí - digo - pero cualquier persona, mujer hombre o vaca
que te llame hipersensible, es un imbécil -.
- Si po, master - dice - ¿unas monedas? -.
- Puta, me quedan como quinientos pesos, pero te lo tragaste todo, así
que toma - me guardé 100 pa la micro - y aer si te haces una novela
con eso -.
- No soy escritor, sólo alimento a mi familia -.
- Yo te aconsejaría tomártelos con un vino - digo - el amor sólo caga a
la gente -.
- Depende del amor, don - dice -. Usté váyase con cuidado. No haga
tonteras. Y páselo bien. No se ande deprimiendo, que hace mal y uno
avanza menos que el país, cosa que nunca es buena -.
- Lo sé - digo - gracias -.
- Hasta pronto -.
Se mete al primer bar de la calle. Y a pesar de que se ve que no tiene
familia, uno puede apreciar quién era el pobre hueón de los dos.
(Z)
Zapatos de tacón, en una bicicleta de esas que parece que vienen con
una radio incluida que toca "Don guorri bi japi" las veinticuatro horas.
La vi pasar, sonrió. Me sentí miserable.
Andaba con mi mamá. Íbamos a comprar un pollo en el Ekono de
Irarrázabal con la comisaría.
Estábamos en el semáforo esperando a que la luz cambiara.
- Siempre he pensado que me voy a volver ciega - dice mamá -.
- ¿Por qué? -.
- No sé - dice - es como un presentimiento -.
Pasa una micro.
- Pero me manejo súper bien en la noche - dice - o sea, a veces,
cuando es de noche, me levanto de la cama y puedo caminar súper
bien por la casa, sin chocar ni nada -.
- Ah bien -.
- Aún así - dice - ser ciego debe ser lo peor. No puedes hacer nada.
Prefiero ser minusválida. Andai en silla de ruedas, pero puedes hacer de
todo -.
- No creas - le dije - ¿No te acuerdas de cuándo fuimos a lo de las
bicicletas, y había un tipo en silla de ruedas pidiendo aire, y el tipo de
las bicicletas le dijo que no? Onda, el minusválido se fue súper
cabreado. Se nota que tienen una vida mala -.
- Ah bueno, sí -.
- Es la herencia del latín - le digo -. "Menos válidos". Son súper
discriminados. Y siempre piensan en correr y weás. Y ven gente
corriendo y les da como una sensación de miseria -.
Recordé una frase de Claire, personaje de Coupland en Generación X.
"Me gustaba la gente incompleta. Es más completa".
- Quizás - dice mi madre -. Pero puedes tejer y todo sin problemas. Ser
ciego es peor. Lo único que no me gustaría es que no se puede nadar.
Así me sentía. Minusválido. Menos válido e incompleto. No sé qué se
había llevado Virginia, pero era algo muy mío, y se había perdido para
siempre.
Quizás era inocencia.
Entramos al Ekono y sacamos un pollo. Pasamos por una tienda de
fotos a preguntar por las tarjetas de prepago.
En el camino de vuelta mi madre me dice:
- ¿Sabías que las belsauz tienen 50% de descuento? Ojalá nuestro
celular sea belsauz, tendríamos suerte.
- Si po -.
Camino a casa, me imagino a mí mismo como una tarjeta de prepago
belsauz.
Virginia me había dejado con un 50% de descuento.
(De la M a la O)
Méntal masturbeichon. Güiski yenereichon. La canto al revés, pero es
Placibo, y es lo que yo escucho en el huókman, justo cuando la micro
para.
De alguna forma, necesito creer que es importante. Que por un
momento, cualquier cosa que yo haga es importante, y por qué no, yo
también.
Pero dura poco.
- ¿Cuánto queda para ahumada? - le digo al micrero -.
- Estamos en ahumada, compadrito -.
- Gracias - le digo y me bajo -.
It onli comfor comin leit.
Me meto a un cibercafé de quinientos y abro messenger segundos antes
de que me anoten en la ficha.
Neber sod ai fil sou acheim.
Mi an de dragon.
Rimember jer.
Qué asco.
Observo la pantalla con los contactos quietos y malditamente
silenciosos. Entonces suena el celular.
- ¿Aló? - digo, sabiendo que es mi madre -.
- Edi, ¿vas a salir a la noche? -.
- No, ¿por qué? -.
- Porque si no sales, compramos un pollito -.
- Ya po -.
- Ya, chau -.
- Chau -.
En la pantalla, alguien me habla. Péiperdol (nombre artístico que no sé
qué significa, ni que quiere decir, ni por qué percance lo tiene). Su
nombre real es Daniela.
- Hola - dice -.
- Hola - digo y pongo una carita feliz - J.
- ¿Cómo estai? -.
- Bien, ¿y tú? -.
- Bien… - dice - ¿Qué cuentas?
- Bueh… hablé con esta mina, la Tuti, y parece que ya no quiere
suicidarse.
- =) - Carita feliz por parte de ella -.
- J - Carita feliz por parte de mi -.
- ¿Y qué más cuentas? -.
- Nada más, aquí estoy. ¿Y tú? -.
- Me tengo que ir - Por alguna razón, al decir esto me recordó que era
una mujer -.
- Bu.. - digo, y creo que lo digo en serio -.
- Chau -.
- Chau - digo, y de verdad la extraño -.
Pasan los minutos. La pantalla se mantiene estática.
Foquer lóber, jeven sent yu.
Jodidos amantes, el cielo los mandó. Ese cielo que no quiere nada
conmigo. Que me ha echado hace millones de momentos. Que me mira
desde lo alto, haciéndome sentir bajo. Ese cielo que se llama Virginia, y
que me abandono en tierra de perdedores. Y ya no creo en el cielo de
los perdedores. Ya no soy Edi Barflai, el escritor de guiones positivos y
creadores. Soy el destructor.
¿Y hay un cielo para los destructores, señor dios? ¿O sólo miseria?
- Sólo miseria - dice dios en su ferrari -.
A4. Compro, vendo, arriendo.
(A)
- Antes que nada, tres cosas que tienes que saber sobre el sexo -.
1. El sexo como elemento basura lo inventó Bukowski: lo que significa
que antes de Bukowski no había sexo, fornicación, lujuria, fealdad,
basura; lo que quiere decir que antes había erotismo, que era una
mentira del tamaño de la verga de pía barros; y por un percance, aún
los primeros poetas malditos (recordemos que Bukowski es un maldito
de segunda generación), aún gente como Rambó y Bodeler no hablaba
de sexo más que erotizándolo, aunque fuera sexo con cadáveres y
carroña. Podían hablar de una puta o de una palanca de cambios
(recordemos que habían autos en el siglo XIX), pero lo decían de una
manera cursi. Bukowski fue el primero en hablar de sexo con elementos
de la escritura sin literatura.
- Mami - dice Nachín -.
- No, Nachín, soy tu hermano Edi -.
- Mami, quelo pokemón -.
- Después, esta wea' es importante para tu futuro. Sigamos.
2. Sexo con amor puede que no sea la única ni la mejor película de sexo
que hay en chile, pero es a mi juicio, la más citable: lo que significa que
tener sexo en la lavadora no es nuevo, pero sí aplicable; lo que quiere
decir que cuando estás borracho puedes tener sexo tanto con un
hombre, como con la mujer más fea, o un perro o una zanahoria; y por
un percance, nos enseña lo imprescindible que es la banda sonora en
una película buena. También nos enseña que la historia del sexo en
chile está elaborada por homosexuales que quieren ganar plata
mostrando culos femeninos, y de paso enseñarnos que la homofobia es
una maldad. Está el ejemplo de machos, y está Sexo con amor, que
entre culiar y culiar con minas, nos muestra a un solo personaje
homosexual que es, al mismo tiempo, el personaje más maduro,
sensible y correcto del film.
- ¿Seso com amó? - dice Nachín - ¿Qué eso? -.
- Papá se lo mete a mamá y nacemos los dos -.
- ¿Mete? -.
- La diuca -.
- Ah -.
- Sigamos -.
3. El sexo produce endorfinas: lo que significa que el chocolate produce
endorfinas; lo que quiere decir que si haces deporte produces
endofirnas, y por un percance, el consumismo está conectado a todo
ese cuento. Es decir, haces ejercicio para ser un puto deportista, te
consigues a una mina, le compras chocolates, tienes sexo con ella, y la
relación termina cuando nos aburrimos todos. Lo que tus padres no te
están diciendo es que los seres humanos no chocamos contra la misma
piedra dos veces; chocamos contra una secreción. Y que Bukowski no
creía en el sueño americano, y por eso supera a los poetas malditos
primitivos.
- Pero el sistema tiene como destino autodestruirse - digo - de hecho,
creo que está en la biblia -.
- ¿Poqué? -.
- Porque el deporte inhibe el sexo, la obesidad inhibe el sexo, y el sexo
inhibe el sexo. O sea, mira a nuestros padres. -.
- ¿Somo bataldos? -.
- Somos los bastardos de la postdictadura, Nachín. Somos la pantalla
error del pc de la sociedad. Pero se viene la autodestrucción. Porque de
tanto inhibirnos, algo va a estallar. No sé si el crimen o la locura.
- ¡Locula! ¡Waaa! -.
- Si po, Nachín. Esperemos que sea la locura. Que todos pierdan por
una vez los putos esquemas. Pero el sistema está matando a los locos.
Los pacos y conservadores están cagados de miedo. Es la vida. A nadie
le gusta lo que no puede clasificar. La Rae es el nuevo fascismo. Y el
diccionario es la SS postdictadura -.
- ¡Locula! ¡Waaa! -.
- ¿Te cuento algo? -.
- Cha -.
- Hace tiempo un amigo mío escribió un guión donde el mejor escritor
de chile era matado ficticiamente. El escritor se llamaba Bolaño.
Últimamente siento que algo malo me va a pasar si sigo existiendo -.
- ¿Poqué? -.
- No sé. Creo que voy a morir de cáncer. Como Cortázar.
- ¿Cálcel? ¿Ahí donde meten a los plesos? -.
- Nachín, tú eres un iluminado. ¿Quieres ver Pokemón? -.
- ¡Cha! -.
Pero ten cuidado con el Picachu. Nah, esa wea' no se la digo.
Tampoco voy a corromper al cabro chico.
(Z)
Zumba la hueona loca. No sé si está roncando o tiene un sueño a lo
Kafka.
Duerme al lado mío y tiene una almohada en la cara. Yo se la puse.
Y también se la puse, pero es otro cuento.
Ella duerme y yo fumo un cigarro esperando el amanecer. No sé
cuántas neuronas estoy matando, pero deben ser unas quinientas
menos para alcanzar el nirvana. O el suicidio neuronal. O el cáncer.
Últimamente creo que los hombres tienen sexo para demostrarles a las
mujeres que les importa una huea lo que piensen mientras tengan las
piernas abiertas. Y sin embargo, las mujeres siguen el juego porque las
otras veintitrés horas les cuentan a la cabeza de arriba lo mal o bien
que se sienten, lo sufridas o aburridas que son sus existencias, lo
huecas o alternas que son para no sentirse mal consigo mismas, lo
necesitadas o hartas que están de cariño, lo malos que somos (ahí no
importa si seamos buenos o malos, siempre somos malos no
importando cómo actuemos, hablemos o sigamos su estrategia). Los
hombres somos burgueses y las mujeres son proles. Los hombres
somos beneficiados y las mujeres son maltratadas por la sociedad. Los
hombres somos machistas y las mujeres feministas. Los hombres
somos materiales y las mujeres espirituales. Los hombres cagamos dos
veces al día y las mujeres dan a luz después de 9 meses.
La naturaleza es feminista.
Por eso la isabel allende vende tantos libros de realismo mágico. Por
eso garcía márquez es una mina. Por eso neruda era dios y a Bolaño ni
lo pescaron. Por eso Nirvana y Pearl Jam son clásicos y Korn es un
grupo de misóginos inservibles.
El feminismo vende. La naturaleza vende. Lo correcto vende.
Nietzche era machista y se volvió loco. Y no es que yo sea machista.
¡Dios no lo permita!
Sólo que fue una mina la que me hizo desconfiar de toda realidad. Y
ahora desconfío de las minas.
Se escucha un ronquido. Luego zumba la hueona loca.
Kafka sabría mejor. O Palahniuk. O Nietzche.
- Despierta - la muevo un poco -.
- ¿Ah? -.
- Despierta.
- ¿Quieres culiar de nuevo? ¿Estás loco? -.
No les respondo la última pregunta. La primera sí:
- Quiero hacerte una pregunta -.
- Son las cinco de la mañana, mi amor - Virginia también me llamaba
"mi amor". Perras.
- Es que necesito preguntarte algo -.
- Ahora no. Mañana quizás - dice y se duerme -.
Esas obreras anti-Sócrates.
Esas diosas anti-memento.
Ya se me olvidó la pregunta.
Saco mi falo del calzoncillo. Para mañana seré el mejor ciudadano. Y
tendré doble nacionalidad.
O triple, si me animo.
(De la M a la O)
Me bajo de la micro. De mi casa a casa de Moco.
Prendo un cigarro en el camino y voy pensando hueás instrascendentes.
O pensando que las hueás instrascendentes son lo más trascendente
que hay. Es la intrascendente trascendencia. El Manifiesto del Nadismo
de Mauricio Peralta y Floridor Sepúlveda. Muchas hueás que salen ahí
son ciertas. Aunque últimamente desconfío de todo. Pero algo muy
cierto, por ejemplo, la parte final. "Nadismo es un niño dibujando en tu
cuaderno". Yo no podría desconfiar de Nachín. Aunque el Nadismo no
se llama Nadaísmo para que no lo confundan con el dadá. Por eso
desconfío del movimiento. Porque hablan de que todo está pasado de
moda, inventar lo ininventable, pero el Nadismo tiene cerca de un siglo
de estar prefabricado. Igual que el punk. Igual que la basura.
Creo que en esencia desconfío hasta de mí.
El huókman toca reidiojed. Crip.
Llego a la puerta de la casa de Moco. Presiono el timbre con cuidado de
no electrocutarme.
- ¿Sí? - dice a través de la ventana -.
- Hola, Maca -.
- Hola. Pasa nomás -.
Chuck Palahniuk decía que cuando escribes, no es necesario decir lo que
realmente estás haciendo. Hay que señalizarlo.
Por ejemplo: Moco no quiere nada conmigo. Eso señaliza que nos
estamos besando.
Por ejemplo: Moco me dice que hasta ahí nomás. Eso señaliza que le
estoy agarrando una teta por los próximos diez minutos.
Por ejemplo: Las tetas de Moco son grandes. Eso señaliza que el sostén
no se merece tanto peso.
Por ejemplo: que la cama era cómoda.
Creo que eso no señaliza nada, ¿no?
Fornicando con Moco, pienso algo por un minuto.
Pienso que quizás las mujeres no son tan malas. Moco hace un gesto
tierno y sus jugos cubren el condón por completo.
Quizás las mujeres no son tan malas. Quizás todo esto es por algo.
Quizás hay más que sexo en la vida. Quizás alguien me espera en la
oscuridad. Quizás no sea ni hombre ni mujer ni cámara, y realmente
me albergue. Quizás no necesitamos a EL dios, pero puedo crearme a
mi propio dios. Mi propia religión. Una creencia real. Una realidad. Algo
tangible que me salve. Quizás no soy un pobre hueón. Quizás nadie es
tan odiable ni desconfiable como parece. Y las mujeres son iguales a los
hombres y a los teclados. Quizás somos tres contra el mundo. Quizás el
útero del mundo se abra, y nos ayude contra el frío. Y supermán salve
al mundo y topoyiyo nos dé las buenas noches.
Dura un minuto.
Y el sexo dura una hora.
Y las hueonas relaciones duran 5 días.
Y esta imbécil vida dura hasta el cáncer.
O hasta el Sida, o el momento que te dé la gana.
¿Soy Eduardo Berríos soñando que soy Edi Barflai? ¿Soy un eunuco
soñando la trisexualidad? ¿Soy una mujer soñando el machismo? ¿Soy
una letra en tu cabeza que no tiene nada que ver con la palabra? ¿Soy
un perdedor que sueña que es un perdedor?
Y en cualquiera de esos casos… ¿despertaré?
A5. El lugar que no existe en la televisión.
(A)gata.
- Antes que nada, tres señales de que algo malo va a pasar -.
1. Es ese día en que crees que nada peor puede pasar (lo que significa
que crees que estás suficientemente cagado, lo que quiere decir que te
sientes realmente como el forro, y por un percance, algo aún peor te
puede sacar la mierda). Esto puede variar al extremo opuesto. Puede
que te sientas suficientemente iluminado, lo que puede entenderse
como que estás realmente bien, y por un percance, algo te puede
mostrar lo bajo que es el mundo, o lo podrido que eres tú mismo, o lo
vacía que se puede volver la felicidad. Lo importante no es si estás muy
bien o pésimo. Lo importante es que algo decididamente malo va a
ocurrir, y no estás preparado.
- No tienes por qué ser tan pesimista - dice el contacto de messenger -.
- Sólo juego un poco -.
2. Es ese día en que tienes algo mejor que hacer (lo que significa que
de pronto crees que algo te va a salvar, lo que quiere decir que
realmente sientes que en este mundo hay cabida para distracciones, y
por un percance, la salvación, la distracción… esas cosas no funcionan
en el mundo real). Esto también puede variar al extremo opuesto.
Puede que tengas que hacer algo peor de lo que acostumbras, lo que
puede entenderse como un intento de autodestrucción, y por un
percance, no te has dado cuenta que estás lastimando a alguien que
respetabas, o destruyendo algo diferente a ti mismo, o vaciando tu
basura con gente que realmente no puede comprenderla, y te das
cuenta que no quieres ser comprendido, y te vas en la destructiva. La
legal. Lo importante no es si tienes algo mejor que hacer, o algo peor a
lo acostumbrado. Lo importante es que algo podridamente malo va a
pasar, y no vas a tener tiempo de preguntarte qué vas a hacer después.
Sólo sucede.
- ¿ "Vaciando tu basura con gente que realmente no puede
comprenderla"? ¿Eso es una indirecta?
- No. Lo digo por otra gente -.
- Am -.
3. Es ese día en que no importa si eres bueno o malo, o si existes bien
o mal, pero confías en que la rutina te va a salvar (lo que significa que
no importa si estás suficientemente cagado y quieres que algo te salve,
porque al final estás medio acostumbrado; lo que quiere decir que no
importa si te sientes como el forro y quieres distraerte, porque
aceptémoslo, estás acostumbrado; y por un percance, aun eso te
quitan, aun el sabor cómodo y humillante de la costumbre te la roban y
te pegan el último knock out esencial, existencial, y antirutinario). Esto
puede variar al extremo opuesto. Puede ser que todas las anteriores
estén equivocadas, y estás ahí, libre al fin, fuerte y valiente como un
puto superhéroe, lo que puede entenderse como que no necesitas ni la
rutina, ni las distracciones, ni la salvación, ni el afecto, ni tranquilizantes
ni marihuana heroína cocaína morfina psicotrópicos hechos polvo, lsd
éxtasis báteri… sino que estás en el jardín del edén, digo libre,
realmente libre (imagínatelo, no digo que pueda suceder), y por un
percance, alguien que te parecía el mejor de los tipos se muere y te das
cuenta de lo cansado que estás; de lo aburrido, triste y agotado que
estás. Lo importante no es si vives en la rutina o eres libre. Lo
importante es que algo realmente malo siempre pasa. Y ni siquiera vas
a saberlo cuando las malas noticias te llamen por cobro revertido, y
estés en un lugar oscuro (porque las compañías de luz no lo auspician),
frío (porque las compañías de gas sólo pasan por los buenos barrios), y
solitario. El lugar que no aparece en las noticias de la mañana. Que no
sale en Machos, ni en CQC, ni siquiera en Smac Gueims. El lugar que no
existe en la televisión.
- Oye, me tengo que ir - dice el contacto de messenger -.
- Chau -.
Observo el computador. Estoy en un cibercafé. Uno cerca de mi casa.
Estamos con mi tío y mi papá, celebrándole el cumpleaños al segundo.
Mi papá cumple 37. Mi tío debe andar por los 40.
A veces creo que nos ponemos en situaciones sólo para darle sentido a
nuestras vidas. Por decirte, el otro día estaba más triste que la mierda,
y mi mamá se acercó y se puso a conversar conmigo. En el fondo, yo
quería estar triste. Pero también quería que ella estuviera ahí. Era un
apoyo. Porque bien en el fondo, necesitamos que las cosas tengan
sentido, que tengan un valor, sino perdemos lo que somos. Y aun
cuando estamos muy cagados, siempre hay un poco de sentido. De eso
habla mi enumeración. Del momento en que pierdes todo,
absolutamente todo. Porque a veces le pierdes el gusto a muchas cosas
(en esta instancia en particular, le estoy perdiendo el gusto al
machismo; estoy pensando pasarme al asesinato en serie), pero nunca
pierdes totalmente el valor de las cosas. Hay encontrones que te
cambian la percepción, pero nunca pierdes la moral. La valoración. Yo
no soy machista porque se me haya zafado un tornillo y no sepa quién
soy. Lo hago porque me estoy creando de nuevo. Por una nueva
búsqueda.
Lo que yo quiero es ser un antihéroe.
La valentía y la fortaleza, todas esas cosas del superhéroe también se
aplican al antihéroe. Necesitas valentía para dejar de ser correcto y
negar el heroísmo: es decir, que las mujeres que conozco valen poco y
el hombre que soy vale nada. Negar el heroísmo, la salvación, lo
correcto, es un acto con sentido. Es rebelarse contra toda persona que
quiera tener la razón, contra el ego. Me cargan las mujeres que se
enojan cuando las llamas perras, porque la verdad, las "perras" y la
especie perruna en general son sólo animales con una conciencia
superior a la nuestra. No les andan diciendo a sus amigos perros lo mal
que se sienten, sólo se sienten mal. No les preocupa cagarse donde sea
y revolver la basura para sobrevivir. No necesitan un porsch para ser
felices. Quizás ni siquiera necesitan sexo (la mayoría de los varones son
castrados, que es atroz, y los dueños de hembras son muy cuidadosos
a la hora de que su perra tenga críos, puesto que es un problema tener
que regalarlos y qué se yo). Lo mismo pienso de cuando a una mujer le
dices puta y se ofende. Una prostituta no sólo es la protagonista de casi
toda la literatura en chile, sino un ser abnegado, sufrido, y con más
dolor en un pelo del que las ofendidas sentirán jamás. Las perras y las
prostitutas son seres iluminados.
En cualquier caso, opino lo mismo de los hombres que se ofenden
cuando los llaman locas, o cuando les dicen que sus madres son perras
o prostitutas; incluso cuando los llaman bastardos.
Que te llamen loca es una weá genial. Tienes toda la literatura de
Lemebel de tu parte. Según Lemebel, están los mister gay y las locas.
Los mister gay son como el felipe braun, y las locas son como los tipos
que aparecen en las marchas del orgullo gay todos los años. Los
primeros se creen hombres y en las noches se buscan un putito que les
haga el favor, y los últimos no niegan su instinto, y se sienten
orgullosos de lo que son, aunque sea una vez al año. El resto del
tiempo son personas perjudicadas y prejuiciadas, incluso agredidas
físicamente, que el mundo de lo correcto ha condenado por ser
diferentes. Bueh, el mundo de los correctos del otro extremo. También
está el mundo de los correctos que habla de tolerancia con las etnias
homosexuales; y su ley es "si no me toca, que juegue tranquilo". Esos
miedosos del cuerpo. Esos adictos a lo normal. Yo besaría a un
heterosexual tolerante sólo para sentir su odio. Y yo no nací trisexual;
soy trisexual por elección. Lo besaría para ver cómo se quiebra nuestra
confianza. Para verlo odiarme porque él no se atreve a besar a otro
hombre y yo sí. La tolerancia que todos ovacionan está equivocada. Los
tolerantes no comprenden nada. Los tolerantes toleran por moral. Por
lo correcto. O no eres tolerante, o pruebas lo que toleras. La
comprensión es imposible si nunca has estado en el lugar del
comprendido. Todo eso de "yo sé, te entiendo" es una mierda. O dices
explícitamente que no toleras a los homosexuales, que les tienes
desconfianza, o eres parte de los homosexuales y luchas con sus
mismas reglas. Es lo mismo que los apolíticos predictadura, y que la
visita de tunick. Los apolíticos se llamaban a sí mismos apolíticos y
luego resultaron ser todos de derecha. Los tolerantes se llaman a sí
mismos correctos, y resulta que son todos unos intolerantes de mierda.
Si toleran y admiten que no les gusta, ¿por qué toleran? ¿Les gusta la
diversidad y no son de la diversidad? ¿Reconocen la igualdad y sin
embargo se alejan? Esos malditos individuos. Esos temerosos de lo que
respetan. O desconfían de lo que no les gusta, o prueban lo que no les
gusta y se dan cuenta que no es como creían. Porque sí somos todos
iguales. Y eso no significa "te tolero pero no te pruebo". Eso significa
que un individuo tiene la capacidad de ser todos los individuos. Y todo
esto realmente quiere decir dos cosas: o somos destructivos, o somos
activos. O mandamos a la mierda lo que no nos gusta, o probamos todo
lo que no nos gusta y empezamos a vivir, de una vez. Porque la tercera
opción es ser "tolerante". Ser "distanciado". Te conozco, pero la verdad
es que nunca he sido tú. Te tolero, pero no sería tú ni cagando. En eso
las locas son superiores a los heterosexuales. Y a los correctos en
general.
Que llamen a tu madre puta es otra wea' genial. Le dicen a tu madre
iluminada, y más encima se creen la raja porque piensan que te están
cagando. Una madre "puta" es una madre que ha sufrido. Una madre
conciente de su dolor, y que no necesita andarlo divulgando, porque la
vida sigue. Una madre puta es una mamá que te cuida más que la
cresta, y para la cual lo más precioso del mundo eres tú. El hecho: casi
toda la literatura en chile. Una mujer que se vende por sexo, que tenga
una vida tan mala, debe apreciar mucho a un hijo. Aunque seas como
alicia (no la del país de las maravillas, sino alicia de machos), y te
hayan mandado a un colegio lejos de tu familia real. Eso significa que te
querían tanto como para que tú te hicieras una vida alejada de la
prostitución. Así tanto te protegían. Una madre puta puede que no
tenga las mejores ideas del mundo, ni la mejor filosofía de vida, pero sí
quiere mucho a sus hijos, y sí tiene una vida sufrida. Y por ejemplo, si
eres un hijo no querido porque tu mamá tuvo sexo con el hombre
equivocado, quizás hasta tengas la oportunidad de saber cuán mal se
siente ella. Y ella te lo hará saber. Puede que no conecten ni tengan una
relación genial de madre e hijo, pero habrá una conexión mayor. Serán
casi la misma persona. Piensa en todos los que son grandes amigos sin
tener nada en común. Piensa en lo tolerantes que son. Piensa lo falso
que es vivir junto a una persona así, con algo como el amor de por
medio. Y piensa qué clase de amor. Un amor "tolerante con las
diferencias". Un afecto que sabe que no involucra a dos personas
iguales. No hablo de gustos y esas cosas, eso da lo mismo. Hablo del
mismo nivel de sufrimiento. Piensa cuántas veces ha sentido lo falso de
la relación la persona que sufre más. Piensa cuántas veces le ha
preguntado esa persona a la otra si la comprende, y la otra ha dicho
que sí, cuando en un pelo de la primera hay más sufrimiento que en el
cuerpo entero de la última. Ahora imagina que la prostituta y el hijo no
querido ni siquiera se hablan, pero en algún punto se dan cuenta que
son iguales. Ahora imagina que por un momento, cada uno de nosotros
fuera igual en dolor. Y creo que lo somos. Pero nos falta reconocerlo.
No lo niego, a mí me falta mucho. Pero por un segundo, ¿qué nos
impide experimentar lo que el otro experimenta? No el dolor. El miedo.
La desconfianza. La "tolerancia del distanciamiento".
- El medio discursito que te mandaste - dice el contacto de messenger .
- Volviste. Pensé que se lo había tragado la máquina -.
- No, lo leí completo -.
- ¿Siempre estuviste aquí? -.
- Sabía que si me extrañabas te pondrías más sincero -.
- He dicho puras hueas la verdad -.
- Y ya volviste al papel… Al "anti-héroe". Hueón, un antihéroe es lo
mismo que un héroe -.
- No es lo mismo -.
- Sí lo es. Quizás más aun.
- No.
- Creen tener tanto la razón, que niegan lo correcto para buscar su
verdad personal. Eso está bien. Pero en el fondo es una máscara -.
- Ya no te extraño tanto -.
- Porque ser machista o feminista es la misma wea'. Tú no eres
realmente machista, o realmente feminista. Los sexistas son gente que
piensa que si el otro sexo no existiera todo sería mejor. Son asesinos.
Esencialistas. Que por tener un pene o una vagina no mereces lo mismo
que todos. Y tú eres trisexual.
- ¿Alguna vez te he contado que significa realmente ser trisexual? -.
- ¿Cómo? -.
- Es decir, cuál es el verdadero tercer sexo.
- ¿No era escribir guiones de cine? -.
- Eso es una pantalla. La verdad hay un tercer sexo.
- ¿Y cuál es?
- Primero… me gustaría saber quién eres. He estado hablando todo el
rato con "contacto de messenger", y quiero saber si te conozco.
- Me conoces pero no me conoces -.
- ¿Quién eres? -.
- Espérate -.
Esto siempre pasa un messenger. Yo me conecto por cibercafé, así que
lo digo poco, pero la gente que tiene internet en su casa tiene más
problemas o cosas que hacer.
- Ya - dice el contacto de messenger -.
- ¿Quién eres? -.
- Soy Bolaño, ja -.
- Ya po, en serio -.
- Ensériame éste -.
Esta weá no puede ser.
- Tu nombre empieza con la letra… -.
- No te pienso decir -.
- ¿V?
- No -.
- ¿No eres Virginia? -.
- No -.
- ¿Kati? -.
- No -.
- ¿Natilla? -.
- No -.
- ¿Nicolisón? -.
- No -.
- ¿Picci? -.
- No -.
- ¿Tuti? -.
- No -.
- ¿Moco? -.
- No -.
- ¿Loro? -.
- No -.
- ¿Y decías que te conozco? -.
- Me conoces pero no me conoces, eso fue lo que dije -.
- ¿Y de dónde te conozco? -.
- De antes que te apodaras eduardo berríos. O Edi Barflai. O… No sé,
Maurice Pierre Altaire o lo que sea -.
- ¿Y tu nombre empieza con…? -.
- No lo voy a decir -.
- No recuerdo -.
- La verdad, creo que nunca sucedió -.
- Ah, por eso.
- ¿Te cuento algo? -.
- ¿Qué cosa? -.
- Sí puedes volver a empezar -.
- Sabes… para ser mitad alguien que no conozco, ese es un consejo
que no me interesa -.
- Te interesa la mitad. Acéptalo -.
- Acéptame esta mitad -.
- Ya po, pero si me pescai -.
Esta wea' realmente no puede ser.
- Sí puedes volver a empezar.
- Lo que pasa es que… tú sabes. La verdad, he cambiado. Maduré,
digamos -.
- Los maduros son una secta. Y tú no eres sectario.
- ¿O sea que debo ser para siempre como era? ¿Y la evolución? ¿Y el
cambio? -.
- Ésa es mierda lavinista -.
- Pero, es decir… tiene que haber algo mejor que el pasado, ¿no? -.
- Yo estoy hablando del presente, querido. Y de lo que estás tratando
de guardarte para siempre, y de lo que realmente eres, querido-.
- ¿Soy Linx, el demi-humano? -.
- Eres el maldito freak que amo, hueón -.
- ¿Y tú eres…? -.
- La que desapareció -.
- ¿Ni un nombre? -.
- Tenía nombre, pero no era acertado -.
- Ese soy yo, el que nunca da en el clavo -.
- Conmigo diste en el clavo, no con mi nombre -.
Y agrega, "querido", que es una wea' ya lo más imposible que hay.
- Ya po, dime quién eres -.
- ¿Quieres que esta wea' se vuelva el principito? -.
- Odio el principito -.
- Yo también. Odio la idea de que el amor sea domesticación, y que no
podamos amarnos como bestias. Odio las estrellas y odio las flores.
- Es que no puedes ser tú.
- ¿Entonces qué mierda has estado buscando todo el tiempo? -.
Una respuesta. Un psicotrópico.
Es ella.
- Y pensar… - digo -.
- Dime -.
- Que todo esto empezó por un cuento en un libro que ni siquiera me
gusta -.
- Claro. Y porque te sonaba a una gata -.
- Todos los hueones pensaban que era una referencia a Agatha Cristie,
y yo lo puse porque era como el nombre de una gatita albina -.
- Claro, hablando de domesticación… -.
- Es que tú no entiendes. Había una gata que se llamaba Tatiana. Y yo
estuve enamorado por mucho tiempo de una tatiana. Y por alguna
razón, toda mujer de la que está enamorado parece gata. Existe una
psicosis de un tipo o algo así… que si te traumas, puede que renazcas
con la personalidad de un gato. Creo que eso es lo que amo de las
mujeres. El hecho de que en el fondo puedan volverse un animal y
pierdan la conciencia egoísta y puedan amarme. Y por alguna razón me
enamoro del amor no domesticado… de los gatos.
- ¿Y eso no te parece egoísta? -.
- No cuando te das cuenta de que todos, en el fondo, somos animales
que tienen muy poca psicosis y demasiada morfina conectada al brazo.
Y que si nos volvemos locos un día de estos, puede que recuperemos el
mundo. Este mundo que ya no es de la humanidad. Welcome to the
machine y todo ese hueveo. Pero quizás si nos volvemos… -.
- ¿Qué pasaría entonces? ¿Seríamos felices y todo el rollo televisivo?.
- Lo dudo. Pero el infierno, hueón, todo este infierno sería nuestro. Y la
pasaríamos mal. Y sería una mierda. Pero los inhabitantes tendríamos
algo nuestro -.
- ¿Y cómo lo llamaríamos? -.
- No sé. Perdedorlandia -.
- Qué creativo -.
- No sé po… aer.
- Creo que ya has puesto demasiados nombres, hueón -.
- Sí, estoy un poco cansado.
- ¿Y si yo le pongo un nombre? ¿Te digo mi utopía?-.
- Ni siquiera sé si eres ella. No sé, la verdad -.
- ¿Y si no soy ella? ¿Y si soy mujer? ¿Me matarías? ¿Dejarías de confiar
en mi? -.
- No sé -.
- ¿Hasta que punto crees que has cambiado, Maori? Si soy ella o no,
¿acaso importa? ¿Sabes?
- Pero quiero saber tu nombre. Por favor, lo necesito.
- Bien, pero antes te haré una pregunta. Y si no contestas como lo que
eres, yo no te diré quién soy. Luego de eso, puedes ser machista y
antihéroe cuánto quieras. Puedes morirte de cáncer todas las malditas
vidas que te plazca. Sólo necesito una cosa de ti. Luego de eso te diré
mi nombre.
Pasan un minuto antes de que ponga ella ponga el siguiente mensaje.
- La pregunta es simple: ¿Podemos crear el lugar que no existe en la
televisión? ¿Puedes confiar en mi?
Para responder no pasan ni siquiera cinco segundos. Me veo tecleando.
Uno nunca piensa demasiado estas cosas. Me veo tecleando el
comienzo. La conozco y no la conozco. Y sin embargo me veo tecleando
y tecleando. Presionado botones. Y ya no sé si Bolaño está vivo o
muerto. Si es malo o bueno. Lo único que tengo claro es que, pese a
mis esfuerzos, sigo vivo, y por lo menos soy mejor persona que
pinochet. Con eso tengo para unas cuantas vidas más. Ya no sé ni qué
estoy insinuando. Pero creo que tengo las cosas bastante claras. La
última letra tecleada es A. De AferradA. De AlbinA. La última letra, y se
cierra el ciclo del abecedario. La palabra es inconclusa. Y la pregunta
es:
- ¿Confías en mi? -.
- Yo siempre he confiado en lo que todavía no existe, querida - le digo ¿Sabes lo cacofónico que suenan las palabras Ágata y ácrata en una
idea que me hago sobre el día de mañana? -.
/\/\/\
Descargar