RE`EH - Joseph Radinsky

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RE’EH
Viendo, & los beneficios de Nuestra Religion
La porcion de la Torah, Re’eh, comienza con la palabra Re’eh, que significa ver. Es raro
que esta palabra sea usada porque la palabra que debe ser usada es oir. El pueblo Judio
estaba escuchando el ultimo discurso del Rabino Moisés. Porque es la palabra ver usada
aquí? “ Vean, Yo estoy dandoles hoy una bendicion y una maldición.” Los rabinos nos
dicen que Shmeeya no es como Re’eh, que escuchar no es como ver. El ver hace un
impacto inmediato en una persona. En efecto, en la ley Judia, si un juez vio un cierto
evento, el no puede ser el juez de ese caso, porque el impacto de haber visto ese evento es
tan fuerte que no importa el testimonio, el nunca cambiara su forma de pensar. Ademas,
algunas veces nosotros no vemos todo exactamente de la manera que es. Ciertas cosas tal
como ilusiones opticas, etc, se levantan.
Aquí, Moisés nos esta diciendo, si tu observas las leyes de la Torah, tu veras un beneficio
directo en tu vida. “ Vean, Yo estoy dandoles hoy una bendicion y una maldición.”
Nosotros podemos tornar nuestras vidas en una bendicion si nosotros seguimos nuestra
religión. Nuestra religión verdaderamente cumple tres propositos en nuestras vidas. Por
supuesto, el proposito principal es conectarnos a Dios, ensenarnos que hay esperanza,
para permitirnos sentir que somos necesitados y queridos, para darnos significado y
proposito en nuetras vidas.
El segundo proposito de nuestra religión es el dar estructura en nuestras vidas. Algunas
personas pudieran decir que esta estructura es actualmente perjudicial porque nos hace
presumidos y arrogantes y no nos permite ser esas personas morales, amorosas y
sensibles que debemos ser. Si todo en lo que nos concentramos es estructura, y aunque
esta estructura nos de seguridad, no nos permite cumplir el primer proposito de nuestra
religión, el cual es el ser individuos sensibles, morales, benevolos quienes saben que solo
nos podemos apegar a Dios si somos morales, bondadosos y sensibles. Esto no es verdad
porque la misma estructura de nuestra religión nos forza a hacer decisiones correctas y
morales. El tercer proposito de nuestra religión es el traernos cerca los unos de los otros
al hacernos contribuir y participar en sinagogas, escuelas, y comunidades. Para ser un
Judio religioso, tu debes ser parte de una comunidad. Esto nos forza a hacer decisiones
correctas y morales. Si una persona no da caridad, no educa a sus hijos, no trata a su
esposa bien, el no sera respetado en la comunidad. La misma estructura de la religión se
enfoca en la familia y el dar. La cena del viernes en la noche, la comida del Shabbat son
asuntos de familia. Todos los festivales se enfocan en la importancia de ayudar al pobre,
etc. Esto no significa que un Judio individualmente no trata de compensar en una area por
sus lapsos en otras areas, pero estos esfuerzos son claramente vistos. Todos nosotros
sabemos que los magnates en los barrios bajos y los empresarios tramposos no pueden
compensar por sus pecados al dar mas caridad u orando mas fervientemente.
La porcion de la Torah, Re’eh, habla de estos beneficios los cuales vienen a ti si tu
observas la religión. Nosotros aprendemos sobre las bendiciones que vendran sobre
nosotros, y las maldiciones que vendran sobre nosotros si no observamos la Torah.
Nosotros decimos al principio, “ Vean, Yo estoy dando (singular) delante de ustedes
(plural) una bendicion y una maldición.” En otras palabras, nosotros podemos tornar
cualquier situación en la que nos encontremos ya sea en una bendicion o una maldición.
Cada situación puede ser ambas una bendicion o una maldición. Es nuestra decision el
tornarla en una o en la otra. Jacob, en su lecho de muerte, maldijo a Simon y a Levi, y les
dijo que ellos no tendrian tierra en Israel. Levi torno su maldición en una bendicion. Ya
que el fue dispersado por todo Israel, su tribu se hizo la fuente de maestros y lideres de
Israel. Moisés y Aaron eran de la tribu de Levi. Simon, en lo contrario, solo recibio unas
pocas ciudades en la tribu de Judah. Simon dejo su maldición ser una maldición. Levi
torno su situación en una gran bendicion. Cada uno de nosotros, cuando enfrentamos
situaciones difíciles en la vida, podemos tornarlas en una bendicion o en una maldición.
La religión nos ayuda a hacer esto. En la porcion de la Torah de esta semana, aprendemos
como Dios dice que podemos comer carne. Originalmente, cuando estabamos en el
desierto, solo podiamos comer carne si traiamos un sacrificio. Después de todo, quien nos
da el derecho de quitarle la vida a un animal? Un animal tiene un alma; en verdad, una
alma mas baja que la del ser humano, pero es solo con el permiso de Dios que podemos
comer carne. Después de que el pueblo Judio se establecio en la tierra de Israel, ellos
tenian que hacer una larga jornada para venir al Tabernáculo cada vez que ellos querian
comer carne. Dios entonces nos dio permiso de comer carne, si nosotros matabamos
como El lo habia ordenado. La oracion lee, “ Y tu mataras del ganado vacuno y de las
ovejas que Dios te dio como El ha ordenado.” El problema, es que en la Torah no se
encuentra lo que Dios ha ordenado acerca de las leyes de el ritual de cómo matar a un
animal. Esta es una de las pruebas que tenemos acerca de la ley oral. Nosotros creemos
que Dios no solo nos dio la Torah escrita, pero tambien la Torah oral, la cual interpreta la
Torah escrita. Dios nos ha ordenado a que guardemos el Shabbat, pero no explica como.
Dios nos ha ordenado hacer una succah, pero no nos dice como. Lo mismo es verdad
concerniente a el lulav y esrog. La ley oral llena estos espacios. Lo mas interesante, es
que notamos que en las leyes de shochait nosotros aprendemos como debemos tratar a los
demas, y como no debemos ser personas desconfiadas y fisgonas. Las leyes de matar
kosher son muy complicadas. Un rabbi debe estudiar estas cosas antes de recibir su
smicha. Hay un principio, aunque, en la ley Judia que cuando se trata de asuntos de
dinero, o casos capitales o inmoralidad sexual, tu necesitas dos testigos ya sea para pagar
tu deuda o para declarar a alguien culpable de una ofensa criminal. Sin embargo, para las
leyes rituales – kosher y nidah y cosas como esas – un testigo es suficiente para verificar
que algo es kosher. Por ejemplo, nosotros confiamos el sochait. El es solo una persona. Si
el dice que hizo un buen trabajo, el hizo un buen trabajo. Su cuchillo estaba suave, su
movimiento era tambien suave. El corta la traquea en el lugar correcto, etc. El
inspecciono al animal correctamente. Nosotros no necesitamos dos testigos para hacer
constar que el hizo las cosas correctamente. Su palabra es suficiente. En verdad, un
principio en el Talmud dice que la mayoria de nuestros Schochteem hacen sus trabajos
correctamente, por ello nosotros les creemos. Nosotros seguimos a la mayoria. Aun si un
testigo dice que el Shochait no hizo su trabajo bien, nosotros no le ponemos atención.
Nosotros necesitamos tener dos testigos. Cuando de asuntos rituales se trata, nosotros
confiamos en las personas. Nosotros estamos supuestos a sentir que todos van a tratar de
hacer las cosas bien. Nuestra religión debe unirnos, no dividirnos. En esta porcion de la
Torah, Moisés enfatiza los tres aspectos de la religión – como nuestra religión nos da
esperanza, como nosotros podemos vivir vidas bendecidas al practicarla, y tambien como
podemos estructurar nuestras vidas al guardar los festivales, guardar kosher, y dando
caridad. Nosotros ademas aprendemos acerca de el segundo diezmo que era comido en
Jerusalem cuatro de los siete anos. Tu tenias que llevar el diez por ciento de tus cosechas
y gastarlo en comida y bebida. Nuestra religión nos hace sensibles y por su misma
estructura nos forza a ser individuos dadivosos. Una persona no podria posiblemente
gastar diez por ciento de su cosecha en comida y bebida solo para el. El tenia que invitar
a otras personas. Es verdad que hay individuos quienes no necesitan estructura para vivir
vidas buenas y morales. Sin embargo, la mayoria de nosotros si la necesitamos. Lo
hermoso del Judaísmo es que crea comunidades morales, no solo individuos morales.
Uno de los principales temas de esta porcion de la Torah es que nuestra religión cumple
las tres metas que todos nosotros necesitamos. Nos permite tener esperanza y significado
y proposito en la vida. Dos, nos da una estructura para que seamos personas afectuosas y
dadivosas, y, tres, nos lleva a un acercamiento al hacer la comunidad muy importante.
Desafortunadamente, en nuestros dias muchas personas no creen que la estructura y la
comunidad son importantes. Ellos estan batallando para vivir vidas sensibles, afectuosas,
dadivosas y llenas de significado. Recuerdo la historia que dicen de una mujer quien
llamo a su anciano esposo quien estaba manejando en la autopista. Ella estaba muy
excitada. Ella acababa de escuchar en la radio acerca de un loco manejando a 60 millas
por hora en el carril contrario al trafico en la autopista que su esposo solia tomar. Ella
tomo su telefono celular y dijo, “ Sam, por favor ten cuidado. Hay un loco manejando en
el carril contrario en la autopista.” El dijo, “ Querida, estas equivocada. No hay solo una
persona manejando en el carril opuesto; hay cientos.” Desafortunadamente, hay muchas
personas que no conocen los beneficios de nuestra religión, y estan yendo en el camino
equivocado. Esperemos y oremos que todos nosotros conozcamos los beneficios de
nuestra religión para que verdaderamente podamos vivir vidas llenas de sentido,
significado, vidas afectuosas para que el Mesias venga pronto en nuestros dias. Amen.
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