3. La Escuela Superior de Música Reina Sofía La Escuela Superior de Música Reina Sofía, centro de alta formación L a Escuela es un centro académico joven que participa de la herencia de las corrientes reformadoras que han existido en la España de los últimos dos siglos. Desde su fundación la Escuela ha tenido una decidida vocación internacional, tanto por la procedencia de sus alumnos y profesores como por su firme proyección académica y artística. La Escuela Superior de Música Reina Sofía es, en esta línea, sinónimo de alta calidad musical. La Escuela está orientada a la formación de músicos de excelencia preparados y con vocación para desarrollar una carrera artística como solistas, intérpretes de música de cámara y orquesta. Con este objetivo la Escuela se ha planteado el cuidado de las aptitudes individuales de cada estudiante conjugando la formación académica con la actividad concertística, de modo que ésta se convierta en una prolongación del aula. En este sentido, resulta indispensable la asimilación de conceptos que permitan al alumno adquirir una perspectiva global del fenómeno musical que abarque desde las materias de mayor aplicación práctica hasta la consideración de la música como hecho cultural perfectamente contextualizado. El marco docente se distingue de este modo por la valoración de la formación integral del músico. Y para ello se hace necesario contar con los mejores maestros que dirijan las aptitudes musicales e intelectuales de los alumnos. De ahí que, además de los profesores que desde hace años conforman el Claustro académico, la Escuela incorporó nuevos nombres a las diversas áreas de enseñanza. En este nuevo curso se han creado tres cátedras nuevas, flauta, clarinete y fagot. Como Profesores Titulares se han incorporado Jacques Zoon en la cátedra de flauta, Michel Arrignon en la de clarinete y Klaus Thunemann en la de fagot. Los nuevos Profesores Asistentes son Aniela Frey, Enrique Pérez Piquer y Francisco Alonso Serena. Para finalizar, como Profesores Pianistas Acompañantes se han incorporado Enrique Bernardo de Quirós, Martín Martín Acevedo y Alina Artemyeva. Como Centro de alta formación profesional contempla la proyección artística de los alumnos como parte sustancial de su programa. Durante el curso que nos ocupa se programaron más de 350 conciertos, en los cuales los alumnos de la Escuela participaron como solistas, como miembros de un grupo de cámara, o como parte de la Orquesta de la Escuela. De esta manera, los alumnos tienen la posibilidad de perfeccionar su actuación en los conciertos de cara a su futura trayectoria artística. Varios de estos maestros han sido alumnos de la Escuela, lo que nos recuerda la directora Paloma O’Shea “(...) Contribuye a anudar el tejido de una tradición que ya tiene perfiles propios (...)”. Las bases de un proyecto La Escuela Superior de Música Reina Sofía celebró su primer curso académico en octubre de 1991. Tras más de diecisiete años en los que se ha desarrollado un proyecto pedagógico basado en una formación de excelencia, se ha convertido en un centro de reconocido prestigio internacional, donde la calidad de los jóvenes músicos ha quedado demostrada en los más de dos mil conciertos en los que han participado, en los numerosos premios nacionales e internacionales y en las carreras profesionales que nuestros alumnos están desarrollando. Por las aulas de la Escuela Reina Sofía han pasado más de trescientos alumnos, y casi un centenar de profesores entre titulares e invitados han impartido su docencia en este centro. Gracias a la ayuda que han prestado tanto las instituciones públicas como entidades privadas, los alumnos que disfrutan de esta enseñanza personalizada han tenido el privilegio de recibir una educación de elite contando para ello con grandes profesores y artistas destacados en el panorama musical internacional. Nuestra escuela es un centro académico joven que parte de la experiencia y el ideario de las corrientes reformistas liberales de principios del siglo XX. Si en una sociedad de masas, como es la nuestra, no es posible disponer de los recursos suficientes para asegurar un tratamiento individual a cada joven, es necesario dotar a los más capaces de los medios necesarios para que concluyan plena y satisfactoriamente su formación y puedan desarrollar una carrera artística de alto nivel. Esta tarea pedagógica ha ido madurando año tras año hasta llegar a convertirse en una excelente realidad académica y artística que encauza eficazmente la capacidad musical de los alumnos y da cuerpo al objetivo reformista y modernizador de la Escuela. Como proyecto pedagógico singular, la Escuela se rige por los siguientes principios: - Máximo nivel del profesorado: La formación de los mejores requiere un claustro del máximo nivel. La Escuela cuenta para este fin con un cuerpo académico compuesto por primeras figuras de reconocido prestigio internacional. - Libertad de cátedra: La relación entre profesor y alumno de condiciones sobresalientes no puede estar condicionada. Sólo el profesor puede evaluar las necesidades concretas de cada joven artista y guiarle en su difícil formación desde su plena responsabilidad académica. - Enseñanza personalizada: Para asegurar la relación directa entre alumno y profesor la Escuela Reina Sofía ha limitado el número de alumnos por cátedra que oscila entre 5 y 10, así se ha propiciado la convivencia mediante la creación de una Residencia y un conjunto de servicios comunes donde coinciden profesores y alumnos. - Excelencia del alumnado: Un esfuerzo económico y académico de estas características sólo tiene sentido si el alumnado reúne las condiciones de talento y disposición necesarias para aprovechar la enseñanza que recibe. Ello exige un sistema de selección muy riguroso -mediante una convocatoria anual de audiciones llevadas a cabo en la Escuela- que descansa sobre los profesores titulares de cátedra, como responsables últimos del rendimiento de los jóvenes músicos. - Justicia social: La falta de recursos no puede ser un impedimento para que jóvenes de talento reciban una enseñanza de alto nivel. Para solucionar este problema la Fundación Albéniz ha dotado un sistema de becas de matrícula y residencia. En la actualidad el conjunto de los alumnos recibe algún tipo de ayuda, total o parcial, para hacer frente a los gastos correspondientes a su estancia en la Escuela. - Formación general: Un músico de alto nivel debe recibir una formación general que le permita, desde una sólida técnica, comprender las obras en su sentido más amplio. De este modo los departamentos académicos y de formación complementaria ofrecen una gama muy variada de asignaturas académicas y actividades culturales. - Experiencia artística: Un músico de excelencia debe formarse también en el escenario, de manera que éste sea una prolongación del aula, acostumbrándose así, desde muy pronto, a asumir la responsabilidad de tocar ante el público. Por ello, la Escuela propicia la realización de más de doscientos conciertos por curso. Tanto en la modalidad de recital, como ofreciendo la posibilidad de actuar como solistas con orquesta o como integrantes de grupos de cámara y de la orquesta de la Escuela. Plan de estudios El Plan General de Formación de la Escuela Superior de Música Reina Sofía correspondiente al curso 2008/2009 describe y articula las actividades desarrolladas en este centro en cuatro departamentos fundamentales: Departamento de interpretación. Incluye un programa de formación superior y de perfeccionamiento instrumental / vocal. Departamento académico. Incluye dos importantes apartados: - Área de disciplinas teóricas - Área de idiomas Departamento artístico Departamento de formación complementaria - Programa de Lecciones Magistrales - Programa de formación complementaria Si hay un rasgo que caracteriza a la Escuela Superior de Música Reina Sofía es sin duda la enseñanza de primer orden que se les ofrece a todos sus alumnos. Gracias a un claustro de reconocido prestigio profesional en la vida artística y docente, los alumnos de la Escuela reciben una enseñanza además de personalizada, privilegiada. Departamento de Interpretación El Departamento de Interpretación consta de tres áreas: Instrumental y de Canto, de Música de Cámara y de Práctica Orquestal. La primera incluye las cátedras de piano, de violín, viola, violonchelo, contrabajo, flauta, canto, oboe, clarinete, fagot y trompa. En dichas unidades de enseñanza estudian entre cinco y quince alumnos, cumpliéndose de este modo el objetivo de la Escuela de ofrecer una enseñanza personalizada. El contacto permanente dentro y fuera del aula garantiza el seguimiento óptimo del aprendizaje del estudiante. Dentro del Área de Interpretación, la Música de Cámara ocupa un lugar destacado al ser esta modalidad una de las asignaturas pendientes dentro de nuestro país. La Escuela Superior de Música Reina Sofía no ha escatimado esfuerzos en prestar una especial atención a esta disciplina camerística, así como intentar desarrollar un programa en el que los alumnos puedan demostrar sus cualidades artísticas dentro de esta práctica musical. En colaboración con el Instituto Internacional de Música de Cámara de Madrid Paloma O’Shea, Directora de la Escuela, se refería con estas palabras a la labor que la Escuela Superior de Música Reina Sofía está realizando en esta dimensión de la interpretación musical y sus frutos: “(…) estamos orgullosos de que se haya impulsado la formación de grupos de cámara que, originados por necesidades docentes, han proseguido su trayectoria artística, ya en el plano profesional, después de que nuestros alumnos hayan abandonado la Escuela (...)”. Desde el curso 2007/2008 la formación camerística de la Escuela se consolidó en colaboración con el Instituto Internacional de Música de Cámara de Madrid. Actualmente consta de tres departamentos, el Departamento de Cuerdas, el de Grupos con Piano y el de Vientos, dirigidos por Heime Müller, Marta Gulyás y Radovan Vlatkovic, respectivamente. La Música de Cámara reúne en su repertorio una gran cantidad de obras maestras y constituye, para los jóvenes, un eficaz factor de maduración. Por ello, la Escuela ha mostrado desde el principio un interés especial en este género, interés que ha acabado fructificando en el Instituto Internacional de Música de Cámara de Madrid que la Fundación Albéniz ha puesto en marcha y que ha de convertir a Madrid en una capital internacional del género. La formación orquestal del Instituto Internacional de Música de Cámara de Madrid, la Camerata, ha estado dirigida en su gira por el prestigioso maestro de origen ruso Jean-Jacques Kantorow. Por último, el Área de Práctica Orquestal comprende todas las actividades docentes orientadas a desarrollar las facultades interpretativas de esta modalidad. Está dividido en dos, la Orquesta de Cámara Sony y la Orquesta Sinfónica Freixenet. Este departamento reúne varias actividades, por un lado las clases del maestro que a su vez se apoya en el Programa de Preparación y Perfeccionamiento Orquestal, y por otro lado la actividad artística que se pone en práctica sobre el escenario. En este último sentido, la Orquesta se reúne en tres períodos ofreciendo, bajo la batuta de diversos directores, una serie de conciertos en los que participan los alumnos de la Escuela: Zoltan Kocsis y Antoni Ros Marbà han sido los profesores invitados para ponerse al frente de esta formación orquestal cuyo principal fin es hacer música juntos y ”aprender nuevas formas y estilos musicales”. Departamento Académico El Departamento Académico está compuesto por una serie de asignaturas destinadas a completar la formación musical de los alumnos. Estas disciplinas se crearon con el fin de orientar a los alumnos en todos los campos de la educación musical. Las cátedras de Educación Auditiva; Educación Auditiva para alumnos de canto; Análisis Musical e Introducción a las Formas Musicales de Constructora San José; Armonía aplicada; Armonia Bassat Ogilvi; Historia de la Música; Historia del Arte; Piano Complementario Recoletos Cía Editorial; de Improvisación ABC y de Idiomas La Razón sirven como complemento a los estudios más específicos de las Cátedras de Instrumento, de Orquestas y de Música de Cámara impartidas en la Escuela. Departamento Artístico El Departamento Artístico de la Escuela Superior de Música Reina Sofía es la plasmación de un principio pedagógico fundamental en los planes académicos del centro por el cual se considera la actividad artística de los alumnos como parte esencial de su formación. La Escuela entiende que la participación de los alumnos en conciertos es sustantiva para completar el proceso educativo y para desarrollar sus dotes artísticas en un contexto profesional. Dicha idea ha sido refrendada por los asesores internacionales y los claustros docentes. Asimismo, lo que en su momento fue una convicción es hoy una firme realidad pues la experiencia de los dieciocho cursos académicos ha confirmado la importancia de la actividad artística en la Escuela. Bajo la supervisión de los catedráticos y con supeditación a la programación académica, la Dirección Artística en colaboración con la dirección de Relaciones Institucionales de la Fundación Albéniz organiza conciertos para solistas y grupos de cámara en toda España y en países de Europa y América, y coordina la actividad de la Orquesta de Cámara de la Escuela, conjunto que agrupa a los instrumentistas de las diferentes cátedras y que realiza su labor en tres periodos a lo largo del curso. Todos los alumnos que por su nivel están en disposición de hacerlo intervienen a lo largo del curso escolar en recitales de su especialidad instrumental o recitales de canto, así como en grupos de cámara de cuerda o con piano y naturalmente en la orquesta. Por último, el Departamento Artístico produce grabaciones discográficas de los alumnos lo que redunda en una mayor adquisición de experiencia profesional para los músicos y facilita su promoción a través de la edición de discos compactos. Área de Disciplinas Extra-Académicas Para cumplir con el objetivo de dar la mayor y mejor formación a los alumnos, la Escuela Superior de Música Reina Sofía configuró un programa de actividades que sirven de contrapunto a la disciplina de las enseñanzas y de la intensa vida artística, que se convierten en una formación absolutamente necesaria para la vida del alumno, según se concibe en el plan de estudios. La Técnica Alexander es la asignatura que integra esta área, El programa proporcionan la necesaria relajación y ergonomía para que el alumno se pueda enfrentar a su actividad artística.