Ensayo sobre la vida humana; Monique Canto-Sperber

Anuncio
Ensayo sobre la vida humana
Â
Por Ignacio González Barbero.
Â
El mundo antiguo concebÃ−a la filosofÃ−a como la actividad reflexiva o de meditación que llevaba a una
existencia en consecuencia. Un pensador lo era porque su vida lo demostraba. Sus acciones declaraban un
sentido claro y distinto, marcado por las razones que se habÃ−a dado en el proceso de pensar.
Â
La autora busca con la obra que nos ocupa retomar esta consideración, entendiendo que el análisis de la
vida humana sigue siendo uno de los temas más interesantes que pueden darse en filosofÃ−a. El
fin del libro es delimitar las condiciones que hacen comprensible la biografÃ−a de cada uno, encontrando en
el camino los argumentos que organizan ese curso vital.
Â
El significado de la vida está anclado, inevitablemente, en la existencia humana. AsÃ−, las narraciones de
nuestra historia personal son ordenadas y guiadas por la búsqueda de un sentido o de una multiplicidad de
sentidos en nuestro devenir vital. El sentido de la vida, a su vez, requiere del hallazgo de razones y
justificaciones; conclusión que, como bien indica Canto-Sperber, puede ser resumida con una afirmación de
Sócrates: “Una vida sin examen no vale la pena ser vivida”.
Â
Vivir una vida es comprometerse con ella, asumiendo los intereses y las aspiraciones que veamos necesarios.
Incluso si uno quisiera justificar una actitud de rebeldÃ−a vital ante la existencia, comenta la autora, no puede
excusarse de las razones que hacen determinante este desafÃ−o. Esta legitimación racional es siempre
alusiva al agente, en aquello en lo que el punto de vista del agente está inscrito: no hay justificación
impersonal de la vida.
Â
AsÃ−, todo análisis propio de la acción no es indiferente al hecho de que el agente existe o no en el mundo.
Además, toda justificación existencial requiere de una individualización, una visión inmanente, y, por
otro lado, de una visión distanciada de uno mismo, que incluya, además, a los otros (“mi” mundo).
Â
En el lugar entre el yo y los demás, por tanto, es donde se juega la acción, sus justificaciones y sus
sentidos. Esta relación se articula en función de las decisiones, porque todo el que haya reflexionado sobre
las consecuencias de una elección importante no puede dejar de considerar el conjunto de acontecimientos
que podrÃ−an confirmar, o no, su legitimidad. El vÃ−nculo que los hechos, comunes a mÃ− y a los otros,
mantienen con la reflexión sobre la decisión tomada, nunca es aleatorio.
Â
1
Cada decisión relevante para mi vida abre una temporalidad en la que los sucesos que se dan modifican la
decisión inicial. Suponen, expone Canto-Sperber, un punto clave dentro de nuestro devenir existencial.
à ste implica un movimiento hacia adelante que impide la comprensión de su sentido desde dentro, mas
esta imposibilidad no anula, sin embargo, el hecho de que el hombre busca y dibuja su sentido a través de
los actos propios, las justificaciones, en base a razones, que se dan de éstos, y los acontecimientos que a
toda vida acompañan.
Â
Además, no hay que olvidar, explica la pensadora francesa, que la acción humana, en toda su
complejidad, siempre remite a un orden de bienes y valores morales propios, que se va construyendo
conforme vamos viviendo. Hay una gradación de preferencias que nos ayuda a seguir eligiendo. El ser
humano siempre se está haciendo.
Â
Lo que se nos propone en este libro, es, en definitiva, la vuelta al análisis de la vida humana, en tanto que
incardinada en un mundo complejo, donde las decisiones tienen consecuencias y los actos son respondidos.
Darse razones de éstos implicará siempre abrazar lo que supone estar vivo y con los demás. La obra
nos brinda tesis para entender mejor nuestro quehacer en el mundo, cosa de gran importancia en la época de
frenesÃ− y sinsentido en la que vivimos.
Â
Â
2
Descargar