Ejercicio 10

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Ejercicio 10
Introducción de un producto en el mercado
Un distribuidor de un producto mantiene una política agresiva de introducción del mismo en el mercado. Para
ello destina una parte del beneficio de las ventas a incrementar el número de vendedores. Pensemos, por
ejemplo, que vende ordenadores a un determinado precio que suponemos constante y que de cada ordenador
vendido una parte del beneficio se destina a mantener vendedores. En conjunto, si sabemos cuál es el coste de
un vendedor y sabemos en un momento dado cuántos son los pedidos totales que ha recibido la empresa
sabremos cuál es el número indicado de vendedores, es decir, aquellos que pueden mantenerse de acuerdo al
presupuesto de que se dispone para vendedores. El número real de vendedores tiende a ser el de vendedores
indicados pero, por motivos de que hay que contratar a las personas adecuadas, se tarda un tiempo en el ajuste.
Los pedidos que la empresa consigue dependen, naturalmente, del número de vendedores y de la eficacia en las
ventas de estos. Por eficacia en las ventas de un vendedor entendemos el número de pedidos que es capaz de
conseguir por unidad de tiempo. En general la eficacia en las ventas dependerá de factores tales como la
habilidad del vendedor, la calidad del producto, los precios y la presión de la competencia etc. No obstante, a
efectos de este ejercicio, supondremos todos estos factores fijos y que determinan una eficacia media idéntica
para cada vendedor que tan sólo depende del plazo de entrega. El plazo nominal de entrega, y por otra parte
mínimo, es dos meses. En estas condiciones un vendedor puede llegar a conseguir cerca de 40 pedidos por mes.
Conforme el plazo de entrega aumenta los potenciales compradores irán redirigiendo su compra hacia productos
de la competencia. Debe notarse, y esto es importante, que no se conoce nunca el plazo real de entrega.
Posiblemente se le ha dicho al cliente, y de buena fe, que va a ser dos meses y luego resulta que son cuatro.
Pero, el plazo de entrega que influye en la eficacia en las ventas no es el plazo real de entrega, sino el plazo
conocido. El plazo de entrega se va conociendo con retraso y es este plazo conocido (el real retrasado) el
responsable del cambio de actitud del potencial comprador.
Conforme los vendedores consiguen pedidos, y en la medida en que no se satisfacen instantáneamente sino con
un cierto retraso, estos se acumulan como pedidos pendientes. La empresa tiene una capacidad límite de
distribución de 2000 unidades por mes. Mientras los pedidos a satisfacer por unidad de tiempo no excedan esta
capacidad límite la empresa podrá mantener su retraso nominal de dos meses en la entrega. Si más y más
pedidos deben ser satisfechos debido al aumento del número de vendedores, llegará un momento en el que, al
no poder suministrar a la velocidad requerida, el plazo en la entrega aumentará. Este es de hecho el motivo del
aumento del plazo, no un capricho, sino la imposibilidad de dar abasto.
Supondremos un número inicial de vendedores igual a 10. Un número inicial de pedidos pendientes igual a 800.
La parte del beneficio en ventas que en definitiva se destina a mantener vendedores 100 Euros. El coste total de
un vendedor 2000 Euros/mes. El tiempo para que el retraso real en la entrega se llegue a conocer 6 meses. El
tiempo de ajuste del número de vendedores a los que requiere el mercado 20 meses.
Se pide:
Meditar un rato sobre la estructura global que se está describiendo. ¿Qué comportamiento cabe esperar?
Construye un modelo preciso. Simúlalo y estudia cómo se comporta al variar algún parámetro al que pueda ser
sensible.
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