Un mandamiento divino para los padres.

Anuncio
Un mandamiento divino para los padres.
Pastor Carlos J. Téllez
www.palabrabiblica.org
¿Es usted un padre o una madre que esta obedeciendo al Mandamiento Divino?
“Oye, Israel: Jehová nuestro Dios, Jehová uno es. Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu
alma, y con todas tus fuerzas. Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; y las
repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y
cuando te levantes. Y las atarás como una señal en tu mano, y estarán como frontales entre tus ojos”
Deuteronomio 6:4-8
Hay un peor dolor que la condena eterna del infierno y esto es ver a un hijo diciéndole a su padre o a su
madre: “estoy en el infierno porque seguí tus pasos.” La Palabra Bíblica nos exhorta diciendo:
“No rehúses corregir al muchacho; Porque si lo castigas con vara, no morirá.
Lo castigarás con vara, Y librarás su alma del Seol” Proverbios 23:13-14
Los padres cristianos de hoy no toman la responsabilidad ante Dios de enseñar y vivir la Biblia delante de
sus hijos. Los hijos ya no les creen a sus padres porque sus testimonios en la casa no muestran lo que
ellos aparentan ser en la iglesia. Por otro lado, los padres esperan que sea la iglesia o la escuela
cristiana las entidades correctas para cambiar el comportamiento de sus hijos. Muchas familias gastan
bastante dinero en campamentos de verano, y “entretenimiento cristiano” creyendo que así han cumplido
con toda la responsabilidad ante Dios de crecer sus hijos.
El resultado de esto, es que los jóvenes en las iglesias no estén interesados del todo por la Palabra de
Dios porque ellos no han aprendido ningún respeto por ella en sus casas. Muchos niños y jóvenes “han
sido hecho cristianos” por las manos de las actividades seculares de la iglesia. Y digo que “han sido
hechos cristianos” entre comillas porque todavía en realidad no los son.
El Salmo 11:3 nos dice que: “Si fueren destruidos los fundamentos, ¿Qué ha de hacer el justo?”
Si en nuestras casas no se sirve y se adora al Señor en palabra y en obra, nosotros no podemos esperar
que nuestros hijos hagan lo mismo. Tenemos el ejemplo de Lot y su familia en el Antiguo Testamento.
Lot perdió toda autoridad y respeto delante de su esposa e hijas porque el nunca velaba por enseñar y
vivir la Palabra de Dios delante de su familia. Su hogar carecía del amor y la comunión de Jesucristo y
todo porque sus prioridades estaban en otras cosas. El solo pensaba en si mismo, sin importar el costo,
amando mas lo que este mundo le ofrecía que a su misma familia. En lugar de añorar vivir en comunión
con Dios, vivió un estilo de vida pecaminosa en la ciudad de Sodoma y Gomorra. Su mente solamente
estaba concentrada en la posición, en el dinero y en el prestigio que su trabajo le ofrecía. En lugar de su
vida ser sal y luz en las tinieblas de Sodoma y Gomorra, aquellas prácticas inmorales empezaron a
practicarse en su hogar.
Lo mismo pasa en las familias de hoy. El padre ya no tiene ninguna autoridad o control disciplinario sobre
sus hijos. La mayor parte del tiempo se la pasan en el trabajo y no con sus familias. En lugar del marido
ser la cabeza del hogar ahora es la mujer, junto con sus hijos quienes usurpan dicha autoridad. A
consecuencia de esto los hijos al ver que el amor de Cristo no se vive en casa, empiezan a adoptar las
modas y el pecado del mundo. Crecen inseguros de si mismos, en muchos casos sin una presencia
masculina o femenina en el hogar. El resultado de todo esto es que los hijos crezcan con una rebeldía
hacia Dios y hacia sus padres. El hogar de Lot carecía de esta presencia masculina de autoridad
paterna. Y por ende, de la disciplina bíblica que nos recomienda Proverbios 13:24 que dice: “El que
detiene el castigo, a su hijo aborrece; Mas el que lo ama, desde temprano lo corrige.” ¿Eres tu uno
de los que detiene el castigo a tu hijo cuando se lo merece?
1
Un mandamiento divino para los padres.
Pastor Carlos J. Téllez
www.palabrabiblica.org
Muchos padres idolatran a sus hijos tolerándoles el pecado. ¿Y porque ocurre esto? Simplemente
porque procediendo así piensan que les están demostrando que les ama. Pero a la luz de la Palabra
Bíblica usted como padre de familia a la verdad los esta es aborreciendo y en realidad destruyéndoles
sus vidas. ¿Y porque digo esto? Porque usted solo esta pensando en usted y en el hoy, y no en ellos, ni
en su futuro. Todo lo que a usted le importa en realidad es el ser aceptado hoy por sus hijos sin
importarle el porvenir de ellos. ¿Y porque ocurre esto? Sencillamente por el temor de afrontar el rechazo
de los hijos al decirles lo correcto que deben de hacer. Por eso el pensar así es una actitud egoísta y
pecaminosa. Así le paso a Lot en Sodoma y Gomorra.
¿Y como Lot llego a perder toda autoridad sobre su familia? Llego a perderla progresivamente:
I. Mirando y deseando el estilo de vida pecaminoso de las ciudades.
“Y alzó Lot sus ojos, y vio toda la llanura del Jordán, que toda ella era de riego, como el huerto de Jehová,
como la tierra de Egipto en la dirección de Zoar, antes que destruyese Jehová a Sodoma y a Gomorra.”
Génesis 19:10
II. Comenzando a tener comunión con los ciudadanos de ella.
“(porque este justo, que moraba entre ellos, afligía cada día su alma justa, viendo y oyendo los hechos
inicuos de ellos)” 2 Pedro 2:8
III. Liderando el comportamiento pecaminoso de dichas ciudades. La Palabra nos dice que cuando
los ángeles llegaron a la ciudad “Lot estaba sentado a la puerta de Sodoma” Génesis 19:1; dándonos a
entender su posición de líder en aquella ciudad.
IV. Pagando por su decisión pecaminosa y desobediente un alto precio “perdió a su familia.” Lot
trato a ultima hora [antes de que cayera el juicio sobre aquellas ciudades] de ser el predicador y líder de su
familia, pero fue en vano, pues fue muy tarde.
1. El perdió toda autoridad y respeto: Su propia familia se burlo de el:
“Entonces salió Lot y habló a sus yernos, los que habían de tomar sus hijas, y les dijo: Levantaos, salid de
este lugar; porque Jehová va a destruir esta ciudad. Mas pareció a sus yernos como que se burlaba”
Génesis 19:14.
2. El perdió a su esposa: “su esposa miro atrás.”
“Entonces la mujer de Lot miró atrás, a espaldas de él, y se volvió estatua de sal” Génesis 19:26
3. Su hija le dio vino y cometió incesto con él.
“Entonces la mayor dijo a la menor: Nuestro padre es viejo, y no queda varón en la tierra que entre a
nosotras conforme a la costumbre de toda la tierra. Ven, demos a beber vino a nuestro padre, y durmamos
con él, y conservaremos de nuestro padre descendencia. Y dieron a beber vino a su padre aquella noche, y
entró la mayor, y durmió con su padre; mas él no sintió cuándo se acostó ella, ni cuándo se levantó. El día
siguiente, dijo la mayor a la menor: He aquí, yo dormí la noche pasada con mi padre; démosle a beber vino
también esta noche, y entra y duerme con él, para que conservemos de nuestro padre descendencia”
Génesis 19:31-34
2
Un mandamiento divino para los padres.
Pastor Carlos J. Téllez
www.palabrabiblica.org
¿Cómo los fundamentos de la Palabra de Dios pueden ser destruidos en nuestros hogares? Por
medio de tres pasos sencillos: Ellos empiezan por las letras T, A, y P.
1) Primero, por la Tolerancia del pecado
2) Segundo, por la Aceptación del pecado
3) Y finalmente por la Practica del pecado
“Si Jehová no edificare la casa, En vano trabajan los que la edifican; Si Jehová no guardare la ciudad, En
vano vela la guardia” Salmo 127:1
Para mayor información del tema escuche nuestro mensaje en PB Audio:
La Visión de Dos Creyentes: Abraham y Lot. La Dispensación de la Promesa: ¿Dónde está el foco:
en la promesa de Dios o en el Dios de la promesa? Génesis 13
Que Dios bendiga nuestros hogares,
Carlos J. Téllez
3
Descargar