Instrucciones para el personal Colaboración con la Fundación Clinton En días recientes se ha anunciado ampliamente que el Banco ha establecido una alianza con el Fondo Mundial de Lucha contra el SIDA, la Tuberculosis y el Paludismo, el UNICEF y la Fundación Clinton para hacer posible que los países en desarrollo adquieran medicamentos contra el SIDA de alta calidad y a bajos precios. Los convenios sobre medicamentos, que ahora sólo incluyen regímenes de tratamiento de primera línea, podrían significar un ahorro de entre US$150 y US$400 por paciente al año (dependiendo del país), y permitirían que un mayor número de personas recibieran tratamiento. Los convenios sobre equipos y pruebas de diagnóstico significarán ahorros de hasta el 80%, dependiendo del país y de la prueba específica. En los últimos ocho meses, la Fundación Clinton ha colaborado con los fabricantes de medicamentos y de pruebas de laboratorio para celebrar convenios que permitan ofrecer atención y tratamientos para el VIH/SIDA que estén al alcance de los países participantes. La Fundación ha suscrito un convenio con cuatro laboratorios de formulación, dos productores de ingredientes farmacéuticos activos, y cinco prestigiosas empresas de tecnología médica. También ha firmado convenios de asociación con países que representan el 33% de los casos de SIDA en África (Mozambique, Rwanda, Sudáfrica y Tanzanía) y el 90% de los casos en el Caribe (Bahamas, República Dominicana, Haití y los países miembros de la Organización de Estados del Caribe Oriental (OECO)), y está haciendo gestiones para incorporar a más países. Los países que reciban financiamiento del Banco Mundial (préstamos, créditos y donaciones) y estén interesados en estos convenios deben ponerse en contacto directamente con la Fundación Clinton: Procurement Group, William J. Clinton Presidential Foundation, HIV/AIDS Initiative; correo electrónico: [email protected] El Banco Mundial, el Fondo Mundial y la Fundación Clinton colaborarán para evaluar la capacidad de los gobiernos de llevar a cabo las compras en forma eficiente a través de sus organismos nacionales de suministros médicos, y de cumplir los principios del convenio. Los países que no tienen dicha capacidad pueden optar por diligenciar las adquisiciones a través del UNICEF u otra organización que pueda operar en el marco de los convenios de la Fundación Clinton. Los países deberán otorgar garantías de pago, firmar contratos por varios años con los proveedores, y garantizar la seguridad de la distribución de los medicamentos y reactivos. Para ayudar a asegurar la calidad de los medicamentos, el Banco trabajará en estrecha colaboración con la Organización Mundial de la Salud (OMS) y con la Fundación Clinton para fortalecer la capacidad de los laboratorios de control de calidad tanto regionales como nacionales. Para esto puede ser necesario reasignar recursos financieros de las actuales operaciones relativas al SIDA. Además, el Banco prevé poner en marcha un mecanismo de notificación de precios (semejante al del Fondo Mundial) a fin de dar a conocer de manera transparente cuáles son los productos adquiridos por los países y los precios pagados por éstos. En los Anexos A y B se proporciona información sobre los aspectos operacionales de esta iniciativa. Además, se ha preparado un addendum a los documentos de licitación sobre adquisición de bienes para el sector de salud que refleja los requisitos establecidos por la Fundación. En los siguientes sitios Web sobre adquisiciones y VIH/SIDA (http://www.worldbank.org/procure y http://www.worldbank.org/aids) se puede obtener información adicional sobre este y otros temas conexos. El personal puede dirigir sus consultas sobre esta nueva alianza y el uso del addendum a los documentos de licitación a Yolanda Tayler, [email protected]. Anexo A Aspectos operacionales de la iniciativa contra el SIDA del Banco Mundial y la Fundación Clinton 1. Los países que tengan interés en realizar compras en el marco de los convenios sobre terapia antirretrovírica (ARV) de la Fundación Clinton deberán ponerse en contacto con la Fundación y proporcionarles pronósticos de demanda y otros antecedentes sobre sus programas para el tratamiento del VIH/SIDA. 2. Si el Banco Mundial ha realizado una evaluación de la gestión de las adquisiciones y los suministros del país interesado, es decir, ha determinado si el país puede desarrollar o no, en forma oportuna (ya sea mediante el fortalecimiento de la capacidad o diligencias con otras organizaciones) la capacidad mínima necesaria para adquirir productos farmacéuticos y suministros de conformidad con las normas sobre adquisiciones del Banco Mundial, debe proporcionar a la Fundación Clinton los resultados de dicha evaluación y una indicación de las áreas fundamentales en las que se estime necesario fortalecer la capacidad de ese país. 3. Si el Banco Mundial no ha realizado tal evaluación, la Fundación Clinton lleva a cabo una evaluación independiente para determinar la capacidad del país de respetar los principios conforme a los cuales opera la Fundación. La Fundación Clinton da a conocer los resultados de su evaluación al Banco Mundial. 4. Si se estima que el país posee la capacidad necesaria, firma un memorando de entendimiento con la Fundación Clinton en el que se especifican los principios del convenio y los requisitos que debe cumplir el país receptor para hacer el seguimiento e informar sobre la ejecución del programa. Este memorando de entendimiento gobierna únicamente la relación entre el país y la Fundación Clinton y no incluye al Banco Mundial. Una vez que se ha firmado el memorando de entendimiento, el país receptor puede adquirir terapias ARV y/o equipos y pruebas de diagnóstico a los precios establecidos en el convenio con la Fundación Clinton, de conformidad con las normas sobre adquisiciones del Banco Mundial según hayan sido modificadas por este último. 5. La Fundación Clinton hará un seguimiento de los costos para los proveedores y publicará una lista actualizada de precios en caso de que éstos sean reajustados o si se agregan nuevos productos durante la vigencia del programa. Anexo B Adquisiciones: Principios en que se funda el convenio entre la Fundación Clinton y el Banco Mundial 1. Los países que firmen un memorando de entendimiento con la Fundación Clinton y reciban financiamiento del Banco Mundial deben utilizar los documentos de licitación que el Banco Mundial ha preparado para la adquisición de terapias antirretrovíricas (ARV) y de equipos y pruebas de diagnóstico. 2. Los países adquieren estos bienes (ya sea directamente o por intermedio de un agente de adquisiciones) mediante licitación pública, según se define en el Convenio de Préstamo/Crédito/Donación. 3. Los licitantes deben haber sido precalificados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) o por un organismo de reglamentación farmacéutica confiable. 4. En nombre del gobierno, el laboratorio nacional o un organismo equivalente somete a prueba los suministros para determinar su calidad. 5. Los pagos se efectúan mediante cartas de crédito u otros medios seguros. 6. Pueden participar en la licitación todos los licitantes precalificados, ya sea que hayan suscrito o no un convenio con la Fundación Clinton. 7. De conformidad con los documentos de licitación, serán rechazadas las ofertas con precios por encima del “precio máximo publicado por la Fundación Clinton”, lo que constituye una desviación de las prácticas tradicionales sobre adquisiciones del Banco Mundial y se justifica debido a la prevalencia de un mercado imperfecto para estos artículos. 8. Los países tendrán la opción de introducir en los documentos de licitación un mecanismo transparente para dividir la adjudicación de los contratos entre los dos (o tres) licitantes que presenten las ofertas más bajas según los porcentajes definidos previamente y señalados en los documentos de licitación. Esta es otra desviación de las prácticas tradicionales sobre adquisiciones del Banco Mundial, según las cuales sólo se puede permitir la división de los contratos en casos excepcionales (por ejemplo, cuando el licitante ganador no está en condiciones de suministrar la totalidad de las cantidades requeridas). En este caso, sin embargo, se deben tener en cuenta dos aspectos importantes: los países pueden preferir que haya varios proveedores para evitar el riesgo de que uno sólo no pudiera cumplir el contrato; también pueden querer aumentar el número de proveedores ofreciendo un incentivo a los proveedores existentes para que aumenten la producción, y atraer nuevos proveedores. 9. De conformidad con los documentos de licitación, los contratos asegurarán el abastecimiento durante varios años (de tres a cinco años). Para equilibrar los riesgos de variación de precios entre el comprador y el proveedor, en los documentos de licitación se incluirá un mecanismo de reajuste que sea aceptable para el Banco Mundial.