paradigmas de entendimiento de la realidad

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PARADIGMAS DE ENTENDIMIENTO DE LA REALIDAD. HACIA UNA
COMPRENSIÓN CUÁNTICA DEL COSMOS
Pedro A. Bravo Reinoso
Licenciado en Filosofía
1. Introducción
Platón en el Mito de la Caverna nos cuenta la historia de unos sujetos que durante toda
su vida han estado encadenados, en el fondo de una caverna, contemplando una pared
donde se proyectan sombras provenientes de la superficie. Para estos sujetos la realidad
no es más que las sombras que podían ver. Platón usaba esta figura para referirse al
conocimiento y a la realidad, o más propiamente, a la forma cómo comprendemos la
realidad. Él creía que nuestro mundo, aparentemente lleno de luces y de conciencia, es
en realidad un mundo rodeado de sombras donde todos somos prisioneros de una
caverna. La pregunta que resuena de fondo es ¿a qué llamamos realidad? ¿qué
comprendemos por mundo? ¿cuál es nuestra imagen del universo? Si bien es cierto la
ciencia en los últimos siglos ha avanzado grandemente y nos ha brindado mayores
conocimientos sobre el universo, pero ¿podemos afirmar que hemos salido de la
caverna?
En el presente trabajo pretenderemos desarrollar la idea de que todavía nuestra
comprensión del universo está llena de sombras al igual que los habitante de la caverna
platónica, que aunque la ciencia ha dado mayores luces, éstas han creado nuevos
espacios de sombras. Aún así, la pretensión del hombre siempre ha sido conocer más
sobre la realidad ya que en la comprensión de ésta, en la comprensión del cosmos está la
clave de la comprensión humana (2), y es en este camino de búsqueda como han surgido
distintas posturas y corrientes epistemológicas que han articulado una imagen del
cosmos. En el presente trabajo haremos una revisión de aquellas matrices disciplinarias
que han articulado concepciones diversas del mundo, para esto (3) empezaremos por las
visiones clásicas del universo inspiradas en la matriz aristotélica-tomista que tuvo
vigencia durante muchos siglos, para luego revisar (4) el aporte que la modernidad
brinda a la comprensión de la realidad y como desde ahí se va gestando una visión
-1-
mecánica del mudo, para finalmente (5) concluir con el aporte que la física cuántica da
y cómo está pone en cuestión aquellos presupuestos anteriores. La pregunta que recorre
de fondo a este trabajo es la misma que se hacía Platón: ¿a qué llamamos realidad? Y
para responderla, plantearemos distintas matrices epistemológicas.
2. Una historia de la materia
Lo que llamamos realidad del mundo objetivo, del mundo de los estados de cosas, tiene
una historia que inicia hace aproximadamente 15 mil millones de años cuando toda la
materia y energía del universo estaba concentrada con una densidad muy elevada en un
punto matemático de dimensión casi nula denominado singularidad. Todo cuando
conocemos, incluido el tiempo y el espacio, estaban concentrados en un volumen muy
pequeño cuya explosión daría inicio a lo que llamamos realidad. Previamente no existía
nada y sería engañoso pensar que algo fuera de la singularidad existía.
Durante los primeros 3 minutos de realidad se empezaron a formar los primeros
protones y neutrones estables, los cuales tendrían que esperar unos 300 mil años para
poder combinarse con electrones y empezar a formar átomos para que 1000 millones de
años después de la gran explosión se empezasen a formar cúmulos de materia, los
cuales por su fuerza de gravedad atraía hacia sí cantidades sustanciales de helio e
hidrogeno para que 15 mil millones de años después del big-bang se formen galaxias
con sistemas solares alrededor de las estrellas y con una multiplicidad de formaciones
planetarias que eventualmente generaron formas complejas de organización molecular,
produciendo organismos vivos los cuales llegaran a aparecer desde hace 3800 millones
de años primero con organismos unicelulares muy simples hasta llegar a organizaciones
complejas como el ser humano, cuya existencia es reciente.
En todo este proceso de formación del universo, como menciona Wagensberg1, se ha
dado un triple proceso de selección en el que la materia se ha revelado a sí misma para
progresar. Dicho proceso de selección se concretiza en tres dinamismos, a saber:
fundamental, natural y cultural, mediante los cuales todo aquello que pertenece al
1
Cf. WAGENSBERG, Jorge, La rebelión de las formas. O cómo
perseverar cuando la incertidumbre aprieta, 2° Edición, Editorial
Tusquets, p. 60-81
-2-
mundo objetivo busca perseverar como res inerte, continuar existiendo como res viva, y
seguir conociendo el mundo como res culta. El mundo de las realidades inertes busca
resistir al entorno para no desaparecer; las realidades con vida pretenden modificar su
entorno para continuar siendo y; las realidades que han generado conciencia procuran
anticiparse al mundo para asegurar su existencia.
El hombre debe su particular complejidad a la capacidad que ha adquirido de no
solamente transformar el medio dentro del cual se desarrolla, sino por su capacidad de
anticipación al entorno por medio de la generación del pensamiento abstracto el cual le
permite conocer las cosas para transformarlas. La facultad de conocer la realidad de
manera conciente y poder comunicar lo conocido mediante articulaciones lingüísticas lo
que funda el surgimiento de la humanidad. “El conocimiento
representa […] la
estrategia dotada de proyectos que mejoran nuestra independencia de los caprichos
ambientales. El conocimiento se alimenta a sí mismo para seguir conociendo y es la
base de una innovación universal: la creatividad humana.”2
Ahora bien, dentro del reino animal también podemos observar que existen niveles de
inteligencia con la característica de que ésta se encuentra supeditada al plano instintivo.
Así la conducta animal depende de las formas de satisfacer necesidades contingentes
con la imposibilidad de controlar un instinto en función de un instinto mayor. El
“conocimiento” que generan tiene un carácter de inmediatez y de particularidad en
función del instinto presente. Únicamente la inteligencia humana es capaz de generar un
conocimiento que va más allá del plano contingente de la realidad y puede producir
ciencia y organizarse en sociedad. El pensamiento lógico hace que el hombre pueda
anticiparse a la realidad y despertar aquella intencionalidad que le posesiona frente al
mundo en base a un objetivo.
Preguntarse y preguntar por la realidad es para el hombre, a más de un interés
cognoscitivo, una forma de autoconocerse y un medio de superviviencia dentro de la
incertidumbre del entorno. En el universo están claves para la comprensión de la
existencia humana que hacen de las ciencias físicas una forma de acceder a la realidad
humana. Sin pretender caer en determinismos positivistas o cientificistas consideramos
2
WAGENSBERG, Jorge, Op. Cit. p. 76
-3-
que de la forma como sea nuestra comprensión del mundo de los estados de cosas
surgen paradigmas desde donde la realidad se manifiesta y a su vez desde donde el
hombre se manifiesta a la realidad. “Porque nosotros somos la encarnación local del
Cosmos que ha crecido hasta tener consciencia de sí […] Nosotros hablamos en nombre
de la Tierra. Debemos nuestra obligación de sobrevivir no sólo a nosotros sino también
a este Cosmos, antiguo y vasto, del cual procedemos.”3
Ahora bien, a lo largo de la historia humana han surgido distintos presupuestos
epistemológicos desde los cuales la realidad ha sido comprendida. La evolución del
pensamiento y de la ciencia ha planteado distintas alternativas a la pregunta sobre la
realidad. Una evolución no siempre continua, sino más bien discontinua y en zig-zag
como dice Kuhn puesto que la aparición de distintas matrices disciplinarias hacen que
aquello que llamamos realidad vaya cambiando. Nuestros habitantes de la caverna
platónica han buscado distintas alternativas de sacarse las cadenas para buscar un punto
donde mirar más claramente. Nuestra tarea es hacer un recorrido de las formas cómo el
hombre se ha posicionado dentro de esta “caverna”.
3. Contemplar las sombras: Un acercamiento a la matriz griega de la
comprensión
Mirar las sombras que se reflejan en la pared, es para los habitantes de la caverna, su
primera alternativa de mirar la realidad, que para un observador será la forma mediante
la cual la realidad es comprendida en cuanto reflejo de algo que es superior. Suponiendo
que nuestros personajes de la caverna lograsen mirar hacia el lugar de donde provienen
las sombras descubrirían que la pared que tienen al frente refleja lo que en el exterior de
la caverna acontece. ¿Cuál será su primera actitud? Creemos que su primera postura
frente a este hecho será el respeto y la contemplación al descubrir que su mundo de
sombras es dependiente de otro que se presenta como inaccesible. Justamente la primera
matriz epistemológica que vamos a desarrollar es aquella que toma la actitud antes
descrita y que inicia desde el mundo griego y se extenderá durante varios siglos,
específicamente perdurará hasta la Edad Media.
3
SAGAN, Carl, Cosmos. Una evolución cósmica de quince mil millones
que ha transformado la materia en vida y consciencia, 7° Edición, Editorial
Planeta, Barcelona 1983, p. 345
-4-
“Antes de 1500, en Europa – y en la mayoría de las demás civilizaciones – predominaba
una visión orgánica del mundo. Las personas vivían en pequeñas comunidades
solidarias y sentían la naturaleza en términos de relaciones orgánicas.”4 Para esta matriz
existía una interdependencia entre los fenómenos materiales y espirituales. Casi se
podría hablar que lo material era un reflejo de lo espiritual. En cuanto a la organización
social existía una supeditación de lo individual a lo colectivo. Las sociedades se
organizaban en aquello que Durkheim denominaba solidaridad mecánica ya que eran
las creencias comunes las que regulaban la vida social conforme a un tipo de moral.5
Son básicamente dos los referentes teóricos que organizan la estructura científica de
toda esta época: Aristóteles y la Biblia. Incluso Santo Tomás de Aquino en el siglo XIII
llegará a sintetizar ambas doctrinas.
La realidad es un todo ordenado porque en ella hay atributos que remiten a una
trascendencia. Justamente los griegos para referirse al universo lo hacían bajo la
categoría de κόσμος. Categoría que perduraría durante varios siglos pera denotar la
armonía que se podía encontrar en la realidad. Para esta imagen de la realidad no hay
cabida para el azar o los cambios cualitativos, puesto que las cosas son, y los únicos
cambios que se pueden percibir son en sus notas accidentales, sin tocar lo esencial de la
realidad. No puede hablarse de una evolución de la realidad, ya que ésta es, y continúa
siendo en cuanto ella es. Se trata de una realidad acabada y abierta a su conocimiento
por lo racional de su formación. El κόσμος está guiado por una dinámica espiritual que
lo aleja del caos y de todo aquello que lo ponga en el plano de lo incognoscible.
Si tomamos la imagen aristotélica del universo, vemos que en ella Aristóteles defendía
que la “Tierra era estacionaria y que el Sol, la luna, los planetas y las estrellas se movían
en órbitas circulares alrededor de ella. Creía eso porque estaba convencido, por razones
místicas, de que la Tierra era el centro del universo y de que el movimiento circular era
4
CAPRA, Fritjof, El punto crucial. Ciencia, sociedad y cultura naciente, 1° Edición, Editorial
Estaciones, Argentina 1992, p. 55
5
Cf. GIDDENS, Anthony, Política, sociología y teoría social. Reflexiones sobre el pensamiento social
clásico y contemporáneo, 1° Edición, Editorial Paidós, Argentina 1997, p. 94
-5-
el más perfecto.”6 Esta doctrina la retomaría Ptolomeo en el siglo II d.C. el cual
construiría una teoría cosmológica completa.
La forma de acceder a la realidad es la contemplación. Efectivamente los griegos
entendían la teoría como pura contemplación, separada de toda praxis, y que se la hacía
de manera desinteresada en base a principios generales los cuales eran obtenidos en
virtud de la identidad establecida entre sujeto y objeto. La meta del conocimiento era
comprender el significado y la importancia de la realidad por el vínculo material y
espiritual que hay en ella. El hombre se siente impedido de intervenir sobre el cosmos
ya que éste al gozar de una armonía preestablecida y de un valor supremo, lo hacían
impenetrable. El mundo únicamente estaba puesto frente al hombre para ser conocido
en cuanto a sus manifestaciones de trascendencia. Durante la Edad Media “los
científicos que investigaban el objetivo primario de los distintos fenómenos naturales
daban la máxima importancia a todo lo relacionado con Dios, con el alma humana y con
la ética.”7
La vía contemplativa del conocimiento de la realidad instaura una forma particular
dentro de la cual el conocimiento se sistematiza. Esta vía es la metafísica. Se colige que
para una realidad cuyo fundamento está en un estado más allá del mundo empírico, se
requiere un tipo de conocimiento que facilite al hombre ir más allá de lo físico (τά μετά
τά φυσιχά) para en él encontrar los fundamentos del ser. Aristóteles comprendía que la
metafísica era la forma suprema del conocer humano cuyo fin era el conocimiento de las
causas y principios primeros. La metafísica es la búsqueda de la verdad y Aristóteles
creía que ésta era “la causa o razón de ser las cosas: la verdad suprema es el ser
supremo y por ende coincide con la causa primera, o sea con la causa que es la razón de
ser de la verdad de las cosas que de ella dependen.”8 Aunque Aristóteles no
desprestigiaba el mundo de lo físico, ya que incluso escribió un tratado sobre física, el
máximo estadio de desarrollo del conocimiento se encontraba mediante la metafísica ya
que posibilitaba acceder a aquella causa incausada y causa de todas las cosas desde
donde se podía entender el resto de fenómenos físicos.
6
HAWKING, Stephen, Historia del tiempo: Del big-bang a los agujeros negros, 16ª Edición, Editorial
Crítica, Colombia 1999, p. 10
7
CAPRA, Fritjof, Op. Cit. P. 56
8
REALE, Giovanni, Guía de lectura de la “Metafísica” de Aristóteles, 2° Edición, Editorial Herder,
España 2003, p. 28
-6-
En general el proceso de conocimiento de la realidad, partiendo de las tesis de Platón y
Aristóteles, es un proceso articulado desde la llamada “teoría del reflejo” la cual partía
del supuesto fundamental de la unidad entre el saber y el objeto. Platón formuló la
teoría causal de la percepción: comparó el sujeto cognoscente con un pedazo de cera y
el objeto de la percepción con un sello que penetra la cera. Para Platón el conocimiento
es el resultado de la contemplación de las cosas en la que el sujeto hace anámnesis de
las ideas que previamente ya conocía, de tal forma que el valor de las cosas está en las
ideas de donde proviene. Aristóteles planteó la abstracción como proceso mediante el
cual el sujeto capta la esencia de las cosas, siendo el intelecto el agente capaz de captar
la realidad en cuanto es. La inteligencia cumple la función de captar la verdad
ontológica del ser, la cual corresponder al ser y que para cuya captación el hombre juega
un rol pasivo.
Como vemos, el primer paradigma epistemológico plantea que entre conocimiento y
realidad existe una simetría de tal modo que el primero es el reflejo del segundo. Pero
también podemos ver que esta idea no solo se aplico al campo epistemológico sino que
también se derivó a otras esferas sociales como la del arte. Si nos fijamos en el modelo
aristotélico del teatro descubrimos una dinámica que es reflejo a la estructura de la vida
puesto que la trama aristotélica se construía en base a tres actos: introducciónplanteamiento del problema, desarrollo-clímax de la obra y conclusión, semejante al
mundo biológico donde existe un nacimiento, desarrollo y muerte. La elaboración de
una obra artística era un proceso de mimesis por el hecho de que la auténtica obra de
arte era aquella que mejor representaba la realidad. La misma tragedia griega era una
forma de representar estéticamente situaciones de la vida cotidiana. Esto era así no
porque la creatividad humana se vea limitada a lo que acontece en el mundo objetivo o
social, sino porque la representación de esto era un medio de remitirse a la realidad
metafísica y sobre esto podemos remitirnos al planteamiento de los trascendentales que
hace Platón, donde él equipara el ser con la verdad y la belleza. El arte como
manifestación de la belleza es un medio contemplativo de acceder a la verdad del ser y
por tanto a la causa primera.
Para la filosofía antigua no se podía comprender que la actividad creativa del sujeto era
indispensable para la construcción ideal del objeto. Se pensaba que el objeto verdadero
-7-
sólo puede ser "dado" al ser cognoscente: todo aquello que es producto de su creatividad
cognoscitiva subjetiva, sólo puede ser un simple opinar, doxa, y por lo tanto, no es
verdadero, no corresponde al ser.
Todas estas ideas son continuadas en la Edad Media con la particularidad de que la
causa primera recibe el nombre de Dios. La búsqueda de la verdad es una búsqueda
esencial y metafísica. Quid fortius desiderat anima queram veritatem? decía san
Agustín para referirse al hecho de que el conocimiento de la realidad es una búsqueda
teológica por encontrar a Dios como primer y último sustrato del mundo.
La realidad tiene un valor espiritual porque es una manifestación de lo divino. La
propuesta de las cinco vías tomistas de la existencia de Dios es una forma de
argumentar que la realidad física es obra y remite a un ser supremo. Para Santo Tomás
el hombre debe saber hasta inclinarse ante la belleza de una piedra para poder escuchar
su verdad, es decir, aquella que manifiesta Dios.
La visión geocéntrica del universo, derivada de un análisis literal de los textos bíblicos,
condujo al hombre a sentirse el centro de todo cuanto existe. Santo Tomás se refería a
esto diciendo que en el hombre de alguna forma confluyen todas las cosas y donde
“nada es conocido sino en la medida en la cual lo conocido se encuentra presente e
inmanente en el sujeto que conoce.”9 Según esto no hay necesidad de intervenir sobre el
mundo para conocerlo puesto que la vía contemplativa sigue siendo el camino más
certero del conocimiento de la realidad en cuanto a su fundamento último. El
conocimiento de los fenómenos empíricos pierde importancia porque en último término
estos tienen una justificación y explicación teológica y por tanto la ciencia en la medida
en que se vuelva reflexión teológica-metafísica estará comprendiendo la realidad.
Debemos considerar que las formas de organización socia obedecen a los presupuestos
antes mencionados puesto que si la realidad es un extensión de la “voluntad divina” la
unión entre Iglesia y Estado es esencial. Nos encontramos frente a sociedades de
carácter teocrático y sumamente jerárquicas. Lo sagrado se fue convirtiendo
progresivamente en sinónimo de poder donde las personas ligadas con roles referentes a
9
AQUINO, Santo Tomás, De Div. Nom,. Cap II, Lect 4, núm. 176
-8-
la religión tienen mayor poder de mando y organización. En la Edad Media no podemos
hablar de formas democráticas de organización social porque la matriz disciplinar
vigente es un modelo verticalista y la sociedad se construye desde este paradigma.
En definitiva, nos encontramos frente a un mundo donde la realidad es creada,
ordenada, armónica de la que el hombre es el centro y de donde Dios es el fundamento
último.
4. Alejarse de las sombras: La matriz epistemológica de la modernidad de la
comprensión de la realidad
Volviendo a nuestros personajes de la caverna hemos descubierto que su primera actitud
al liberarse de las cadenas es contemplar con admiración el lugar de donde provienen las
sombras. Sin duda para una vida que ha visto sombras el contemplar la luz es causa de
respeto y veneración. Ahora bien, después de cierto tiempo de admirar el mundo de las
luces, a algún habitante de la caverna se le puede ocurrir la idea de mirar más de cerca
la superficie de la caverna para entender más en detalle el origen de las sombras. Es
más, podría decirse a sí mismo: todo lo que yo creía que era real, no lo ha sido. Y con
actitud de explorador decidirá salir de la caverna para conocer más de cerca la realidad
y poder mirar con sus propios ojos todo lo que acontece en la superficie. Los habitantes
de la caverna iniciarán un proceso que Kant denominó aufklärung todo con el fin de
apoderarse de aquella realidad que antes se presentaba como incuestionable e
“intocable”.
Con el inicio de la Modernidad se da un cambio en la forma de comprender la realidad.
Se deja a un lado las cosmovisiones de tipo espiritual que veían en el universo algo
orgánico, vivo y espiritual, para instaurar una matriz epistemológica que equipara la
realidad con una máquina. Así, la dinámica del mundo se puede predecir, controlar e
intervenir sobre ella para modificarla. En la Modernidad se inicia un proceso de
racionalización, como lo denominó Weber, el cual consiste en un continuo alejamiento
de las imágenes religiosas, místicas y míticas del mundo mediante un proceso de
secularización que irá instaurando una racionalidad con arreglos a fines. La ciencia
modelo deja de ser la metafísica para que el conocimiento sea construido a partir de la
-9-
física. No más referencias a modelos que buscan explicar la realidad desde términos
trascendentes, sino que la realidad busca ser explicada desde la misma realidad.
Lo que posibilitó el paradigma de la máquina como matriz comprensiva de la realidad
es la llamada Revolución Científica cuya génesis vamos a reconstruir ahora.
La Revolución Científica comienza con Nicolás Copérnico el cual planteó teorías que
invalidaron la visión geocéntrica expuesta por Tolomeo y descrita en la Biblia.
Consecuencia de los estudios publicados por Copérnico fue que el hombre se sienta
“despojado” de su categoría de ser el centro del universo y de la creación divina.
Contrariamente a lo que la fe religiosa defendía, la visión heliocéntrica planteaba que la
Tierra es un planeta más del universo que giraba alrededor de una estrella de tamaño
medio situada al borde de la galaxia. Con esto se empieza a cuestionar la autoridad
científica que textos como la Biblia presentaban y el hombre siente la necesidad de
buscar la verdad en base a sus propias investigaciones y al margen de cualquier
referencia dogmática. A partir de Copérnico la matriz disciplinar de comprensión de la
realidad empieza a cambiar. Ya no hay referencias a lo espiritual, sino que esto empieza
a ser cuestionado lo que derivará en un cambio de época. Evidentemente esto fue algo
que se fue sucediendo progresivamente. El mismo Copérnico publica sus tesis en el año
de 1543, año en que fallece, y las presenta a la manera de hipótesis.
Lo importante es que en la Modernidad surge la conciencia de que es posible
comprender cuáles son las leyes que rigen el comportamiento de la realidad. Y en este
sentido Johannes Kepler a partir de las tablas astronómicas hechas por su colega Tycho
Brache logrará establecer las tres leyes de las órbitas de los planetas. De este modo, la
realidad no solamente podía ser comprendida sino que también se la puede predecir.
Si bien es cierto los aportes de Copérnico y Kepler son importantes dentro del nuevo
modelo de comprensión de la realidad, podemos decir que es Galileo Galilei el auténtico
padre de la ciencia moderna, ya que no solamente comprobó la hipótesis copernicana
sobre el modelo heliocéntrico, sino que también dio un giro en la forma de hacer ciencia
puesto que para la realización de sus investigaciones no solamente utilizó el formalismo
que brindaba la matemática sino que integró la experimentación. Además de esto, “el
hecho de haber formulado leyes y de haberlas planteado en lenguaje matemático, fue el
- 10 -
detonante de dos nuevas ideas: el universo opera con leyes y la naturaleza puede ser
descrita en términos matemáticos.”10 Con Galileo gana fuerza la idea de que el mundo
objetivo opera en base a leyes que el hombre es capaz de descubrir y entender. La
realidad está dispuesta para ser conocida y las leyes vendrían a revelar el “lenguaje
divino” del mundo. La consigna galileana es lograr cuantificar matemáticamente todo
los aspectos de la forma cómo se presenta el mundo. “Medir todo lo que es mensurable,
e intentar hacer mensurable lo que todavía no lo es”. Esta era la tesis central de Galileo.
La naturaleza empieza a ser vista desde modelos matemáticos, los cuales al ser exactos,
inauguran una ciencia que se erige sobre la certeza del conocimiento que brinda el
análisis experimental. El mundo es una ecuación que es revelada mediante la
investigación. Por ejemplo cuando Galileo plantea que el espacio recorrido por un
cuerpo en caída libre se relaciona con el cuadrado del tiempo necesario en la trayectoria
está indicando como la naturaleza tiene una estructura matemática fija que la compone y
por tanto se inaugura una objetividad en la forma de conocer el mundo.
Según Galileo para que los científicos puedan describir matemáticamente la naturaleza
tenían que limitarse al estudio de las propiedades esenciales de los cuerpos materiales
tales como forma, número y movimiento, es decir, lo que puede ser cuantificado
mientras que las demás categorías (color, sonido, sabor, olor) por caer en el campo de lo
subjetivo debían ser descartadas.
Contemporáneo a Galileo, Francis Bacon en Inglaterra formuló una teoría clara del
método inductivo el cual plantea que la validez del conocimiento está en la
experimentación de donde se lo extrae. Si antes la meta del conocimiento era
comprender el orden natural y la vida en armonía en este orden, ya sea “para gloria de
Dios” o para “confluir en la corriente del Tao” como decían los chinos, con Bacon “la
ciencia comenzó a tener como fin un tipo de conocimiento que permitiera dominar y
controlar la naturaleza conocimientos que hoy se emplean junto con la tecnología para
lograr objetivos que son profundamente antiecológicos.”11 A juicio de Bacon la
naturaleza tenía que ser “sometida y obligada a servir”, “esclavizada” y la labor del
10
ARAYA MONGE, Rolando, El camino del socialismo cuántico, 1° Edición, Editorial Norma,
Colombia 2006, p. 127
11
CADRA, Fritjof, Op. Cit. p. 58
- 11 -
científico era “torturarla hasta arrancarle sus secretos”. Como vemos, este pensamiento
conduce al hombre hacia el dominio de la naturaleza y la ciencia sería el método para
extraer todos sus secretos y no dejar nada al azar.
En el siglo XVII aparecerá otro autor que vendrá a consolidar aún más el paradigma del
mundo-máquina. Este autor es Descartes y su obra cumbre La duda metódica instaurará
una forma de hacer ciencia que tendrá vigencia durante los siglos posteriores.
Descartes concibió un método que permitiera construir toda una ciencia de la naturaleza
de la que se podía estar seguro y que se asentase en la certeza. La certidumbre
cartesiana es matemática ya que creía que la clave del universo se hallaba en su
estructura matemática. El método que desarrolla Descartes tiene como clave la duda
radical ya que él pone en duda todo aquello de lo que sea posible dudar hasta llegar a un
punto donde no se es posible dudar: la existencia del sujeto como ser pensante ( cogito
ergo sum). De este principio se deduce que la esencia de la naturaleza humana se halla
en el pensamiento y que todo aquello que sea concebido con claridad y distinción es
absolutamente cierto. Para Descartes la ciencia era sabiduría cierta y evidente y por
tanto rechazaba todos aquellos conocimientos que son probables la probabilidad es
sinónimo de error.
Además, a partir del pensamiento cartesiano surge una distinción entre res cogitans y
res extensa ya que se otorga una sustancialidad propia a cada una de estas realidades,
consiguiendo que el pensamiento se convierta en una actividad que se autojustifica y
construye desde sí misma. Mediante el método cartesiano se dio una mayor importancia
a la razón siendo ésta la fuente de la certeza del conocimiento. Para Descartes la mente
no incluía nada que pertenezca al cuerpo y el cuerpo nada que incluya la mente. Este
dualismo cuerpo-mente fue uno de los pilares para la construcción de la civilización
occidental ya que empezó a dar primacía a las actividades relacionadas con el trabajo
intelectual mientras que las de índole manual eran desvaloradas. Estando la realidad
material separada de la mental hizo suponer que el conocimiento es objetivo ya que su
búsqueda es una actividad puramente mental y por tanto verdadera. Existe una total
independencia entre la realidad observada y el sujeto que la analiza y es esta separación
la condición sine qua non de la certeza del conocimiento. Además, el criterio de
separación no es válido únicamente para la relación sujeto-objeto, sino para los objetos
- 12 -
entre sí ya que el método cartesiano proponía “dividir cada una de las dificultades que
examinara en tantas partes como fuera posible y necesario para mejor resolverlas.”12
Con esto la realidad adquiere una idea de totalidad como la suma de las partes y la
ciencia adquiere una concepción atomizada del mundo en el que la globalidad pierde
validez y las unidades elementales se ontologizan. Entender la realidad era hacer un
proceso analítico sobre ella, y mientras en más partes se pueda dividir el conocimiento,
más seguro será el conocimiento.
El método de conocimiento de la realidad que usó Descartes se lo conoce como el
cogito o “duda metódica”. Este método es el proceso por el cual la razón es capaz de
elaborar el conocimiento de manera depurada y consiguiendo que la realidad no sea más
que una construcción deductiva de proposiciones y de hipótesis. El tercer paso que
plantea Descartes en su método reza de la siguiente forma: “conducir por orden mis
pensamientos, comenzando por los objetos más simples y más fáciles de conocer para
subir poco a poco, como por grados, hasta el conocimiento de los más compuestos, y
aun suponiendo orden entre aquellos que no se preceden naturalmente unos a otros.”13
Se trata de un proceso deductivo que es seguido por la razón con el fin de organizar las
proposiciones existentes de tal forma que permitan una explicación más efectiva de la
realidad. La estructuración proposicional así como también la formulación de hipótesis,
son un proceso que ocurre dentro de la cabeza del investigador y si sucediere el caso en
que no se da una correspondencia entre las formulaciones teóricas y los hechos
observables tendría que ser sometida a verificación alguna de las dos, ya que el error
puede radicar en una incorrecta articulación de ideas o en percepciones equivocadas de
la realidad. Además mientras menor sea el número de proposiciones que sirvan de base
deductiva mejor estará organizada la ciencia. “En cuanto a mí, si hasta ahora encontré
algunas verdades en las ciencias…puedo decir que son sino consecuencias y accesorios
de cinco o seis principales dificultades que logré vencer y que yo cuento como otras
tantas batallas en que la suerte estuvo de mi lado.14 Esta metodología, a juicio de
Descartes, era la forma cómo se podría asegurar la objetividad y certeza total en el
conocimiento científico.
12
DESCARTES, René, Discurso del método, 1 ª Edición, Editorial Losada, Barcelona-España 1997, p. 39
Idem., p. 39
14
Idem., p. 85
13
- 13 -
Ahora bien, la forma como Descartes entendía que era posible alcanzar las
proposiciones explicativas de la realidad era mediante la estructura matemática ya que
el formalismo que estas ofrecen cumplen la condición de explicar la realidad mediante
unas cuantas ecuaciones. La matemática se convertía así en la “lengua oficial” de la
naturaleza y las investigaciones y descubrimientos de Descartes consistieron en
averiguar la estructura matemática que rige en la naturaleza, y de ahí que halla fundado
la geometría analítica. Consecuencia de esto también es que se instaure la imagen del
universo como una máquina puesto que para ésta no hay ni vida, ni espiritualidad, sino
únicamente leyes que la conducen. Incluso los organismos vivos eran vistos desde la
visión mecanicista ya que Descartes explicó detalladamente la manera de reducir los
movimientos y funciones biológicas del cuerpo a funciones mecánicas.
Pero no podemos completar la Revolución Científica sin citar el gran aporte de Isaac
Newton en la consolidación de la matriz disciplinar que estamos analizando puesto que
él llevará a la realidad el gran sueño cartesiano de la mecanización del mundo mediante
la creación de un nuevo método: el cálculo diferencial, el cual le permitió enunciar las
leyes generales del movimiento que rigen todos los objetos del sistema solar, desde las
piedras hasta los planetas. Si Kepler formuló leyes para el movimiento de los planetas y
Galileo para la caída de los cuerpos, Newton planteó leyes universales para todos los
cuerpos, las cuales se fundamentaban en el hecho de que la misma fuerza que atrae los
cuerpos hacia la tierra es la que atrae los planetas hacia el sol, la cual era exactamente
igual al producto de sus masas dividido por el cuadrado de la distancia entre ellas. La
importancia de esta ley es que al ser universal parecía confirmar la visión mecanicista
de la naturaleza.
A más de esto, Newton inaugurará una nueva forma de hacer ciencia mediante la
implementación de un método analítico-sintético el cual recogerá los aportes
inductivistas de Bacon y las premisas deductivas de Descartes. En sus Principia Newton
expuso la manera justa de combinar ambos métodos argumentando que era imposible
construir una ciencia únicamente en base a validaciones empíricas sin una interpretación
sistemática, ni tampoco por medio de deducciones carentes de referencias
experimentales. El programa científico de Newton sigue estos pasos: 1) Identificar y
aislar los objetos que se van a estudiar; 2) Realizar el proceso de experimentación; 3)
Formular principios generales; 4) Aplicar los principios a otros fenómenos; 5) Delimitar
- 14 -
las formulaciones a campos específicos. Años más tarde Kant inspirado en las ideas de
Newton escribirá la Crítica de la Razón Pura donde resuelve la pregunta: ¿cómo son
posibles los juicios sintéticos a priori? En la misma línea de Newton, Kant afirmaba que
“El objetivo final de nuestro conocimiento especulativo a priori se basa por entero en
semejantes principios sintéticos o extensivos. Pues aunque los juicios analíticos son
muy importantes y necesarios, solamente lo son con vistas a alcanzar la claridad de
conceptos requerida para un síntesis amplia y segura, como corresponde a una
adquisición realmente nueva.”15
Para la teoría newtoniana “el tiempo y el espacio constituían un fondo sobre el cual se
producían los sucesos, pero que no era afectado por ellos. El tiempo estaba separado del
espacio y era considerado como una línea recta, o una vía de tren, infinita en ambas
direcciones.”16 La enunciación de las leyes físicas y la objetividad de las observaciones
no eran afectadas por el contexto desde donde estas se las hacía. El tiempo y el espacio
son entidades absolutas y separadas entre sí. Cualquier cambio efectuado a uno de ellos
únicamente afectará a su dimensión y no se extenderá a otra.
La materia se mueve dentro de este espacio y tiempo absoluto y está formada por
partículas pequeñas, sólidas e indestructibles. Para Newton toda la materia estaba
compuesta de los mismos elementos y su diferencia radicaba en la forma cómo se
agrupaba ésta. Los fenómenos físicos dependían de la manera cómo la materia ejercía su
fuerza sobre el resto de la realidad.
En definitiva descubrimos que la matriz epistemológica que se instaura en los inicios de
la modernidad si bien es cierto permite un conocimiento científico de la realidad a
través de la experimentación y teorización de los fenómenos físicos, no considera el rol
que juega el sujeto dentro del proceso de investigación, surgiendo así una ciencia sin
sujeto y con primacía del objeto. El conocimiento se basa en la certeza, tanto
gnoseológica como ontológica. Gnoseológica porque los resultados obtenidos en la
investigación obedecen a una estructura matemática universal que no varía y que el
sujeto la va descubriendo. Y ontológica porque el objeto de estudio es, no hay variación
15
KANT, Immanuel, Crítica de la Razón Pura, B 14
HAWKING, Stephen, El universo en una cáscara de nuez, 9° Edición, Editorial Planeta, Barcelona –
España, 2003, p. 32
16
- 15 -
en sus formas, es una estructura sólida que habita en un cosmos. Además la matemática
refleja lo que el objeto es. Lo que para una época anterior era la metafísica, desde la
modernidad esto se traduce en física y matemática lo que permite al hombre no
solamente comprender la realidad, sino también controlarla y anticiparse a ella. La
realidad deja de esconder misterios o relacionarse con una dimensión espiritual, sino
que es posible descubrir cómo es y será su comportamiento. “Laplace sugirió que debía
existir un conjunto de leyes científicas que nos permitirían predecir todo lo que
sucediera en el universo, con tal de que conociéramos el estado completo del universo
en un instante de tiempo.”17 Para un universo-máquina la realidad demanda ser
controlada. Pero esto no solamente se aplicó al campo del mundo objetivo sino también
ingresó en el ámbito del mundo de las relaciones sociales.
Cuando Comte fundamental los principios de la sociología lo hace desde una
perspectiva positivista haciendo de ésta una ciencia natural de la sociedad que es capaz
de reproducir un sistema de leyes muy similar a los que produce las ciencias naturales.
Comte ubicaba a la sociología en la cúspide dentro de la clasificación de las ciencias
puesto que en ella convergen las metodologías y presupuestos de las demás ciencias
pero aplicadas al campo del estudio de las relaciones sociales. “El positivismo
proporcionaba un plan de base general para la formación de la sociología: es decir, la
nueva ciencia de la sociedad tenía que compartir la misma forma lógica global que las
demás ciencias, puesto que se había librado de los residuos de la metafísica.”18
La física social, como también la llamaba Comte a la sociología, sigue los parámetros
ofrecidos por las ciencias naturales, a saber: la observación, la experimentación y la
comparación que buscan controlar y predecir los fenómenos sociales mediante la
formulación de teorías. Un ejemplo de la unión entre matemáticas y ciencias sociales lo
encontramos en el análisis estadístico el cual pretende explicar o anticiparse a un
fenómeno social mediante el análisis de datos matemáticos.
Ahora bien, en el momento en que el hombre entiende la realidad al modelo de una
máquina se siente libre de controlarla como mejor le parezca, produciendo así una
17
HAWKING, Stephen, Historia del tiempo. Del big bang a los agujeros negros, Editorial Crítica,
Décimo Sexta Edición, Colombia 1999, pág. 81
18
GIDDENS, Anthony, Op. Cit. p. 156
- 16 -
tecnificación de la ciencia que derivará en una explotación sin medida de la naturaleza y
en una instrumentalización de la razón y de las relaciones sociales. La ciencia por su
propio método y sus conceptos, ha proyectado y fomentado un universo en el que la
dominación de la naturaleza queda vinculada con la dominación de los hombres,
haciendo que la tecnología sea una forma, a más de dominio de la naturaleza, una forma
de dominio del hombre sobre el hombre. 19
5. Redescubrir las sombras: La matriz cuántica de la comprensión
Retomando nuestro relato de los habitantes de la caverna, hemos descubierto que el salir
a la superficie ha provocado en ellos la pretensión de conocer más de cerca la realidad
que producían las sombras, así como la idea de estar conociendo realmente la realidad.
Pero este aparente triunfo sobre el mundo duraría poco porque descubrirían que los
objetos iluminados, si bien es cierto se los puede conocer más detenidamente, también
producen sombras en la superficie y que incluso, cuando se oscurece el día, estos
objetos dejan de ser tan claros y pasan también a ocupar un lugar dentro del mundo de
las sombras. Para los sujetos que habitaban en la caverna el mundo exterior, la
superficie, no es tan diáfana como ellos creían sino que más bien la realidad presenta
incertidumbres irrenunciables.
Cuando la máquina newtoniana del universo parecía imponerse como el modelo más
adecuado para explicar la realidad, aparecen, en el campo de la física, nuevos
descubrimientos que vendrán a revelar una estructura diferente del mundo. Este cambio
de matriz epistemológica comienza con los descubrimientos hechos en el campo del
electromagnetismo cuando Faraday y Maxwell argumentan que existen otros tipos de
fuerzas que explican el comportamiento de los objetos y que son fuerzas que no
dependen de la materia sino que forman un campo de fuerzas con leyes y dinámicas
propias. Además, dentro del ámbito de la termodinámica, se descubre que en todo
sistema físico existe una entropía20 que hace que éste sufra un desgaste o pérdida de
energía, demostrando así que el universo no es una máquina tan perfecta como se
19
Cf. HABERMAS, Jürgen, Ciencia y técnica como ideología, 4° Edición, Editorial Tecnos, España
2002, pp. 58-60
20
Rudolf Clausius fue el que introdujo este concepto a partir de la integración de dos palabras: energía y
tropos (evolución, transformación).
- 17 -
pensaba. La física incluso dejará de trabajar exclusivamente en base a cálculos exactos,
sino que utilizará el cálculo estadístico para establecer la probabilidad del acaecimiento
de un fenómeno.
Ahora bien, si dentro de la física se proponía la imagen de un universo cuya cantidad de
energía útil iba perdiéndose, dentro de la biología se proponía lo contrario, ya que la
teoría de la evolución planteada primero por Lamarck y perfeccionada por Darwin
daban la idea de una materia que está en constante cambio y transformación pero
siempre en un proceso ascendente fruto de la selección natural.
Por lo pronto lo que nos interesa de estas ideas es que la imagen del universo máquina
se va abandonando, puesto que para éste la materia era algo dado y perfecto, contrario a
lo que proponen la evolución y la segunda ley de la termodinámica (entropía) donde el
universo más bien sufre fluctuaciones y se debate entre el caos y el orden. Pero aún así
estas tesis son solo los prolegómenos a una verdadera revolución física y de matriz
disciplinar que sucederá a partir de la teoría de la relatividad y de la física cuántica.
Cuando Einstein trabajaba en la oficina de patentes de Berna en el año de 1905 escribe
unos ensayos que marcarán un giro en la comprensión física de la realidad. Pero es
espacialmente a partir del descubrimiento de que la velocidad de la luz es constante
independientemente de la velocidad de su fuente21 como Einstein irá reformulando la
imagen clásica del universo.
La velocidad constante c de la luz exigió abandonar la idea de una magnitud universal
llamada tiempo que todos los relojes pudiesen medir. En vez de esto, cada observador
tendría su tiempo personal. Únicamente los tiempos de dos sujetos coincidirían si ambas
estuvieran en reposo pero no cuando alguna de ellos está desplazándose. Existe una
21
Si la velocidad de la luz aumentara conforme a la velocidad de su fuente o la dirección del observador
tendríamos casos paradójicos en los que un observador vería fenómenos a destiempo o antes de que
realmente suceden. Supóngase la siguiente paradoja: Un sujeto A se desplaza en bicicleta en dirección de
un observador O. Al acercarse A, en el cruce de camino, está a punto de chocarse contra una carroza B. A
realizará un giro sinuoso para evitar la colisión y saldrá ileso. Suponiéndose que este hecho sucede a
velocidades cercanas a la luz donde la velocidad de ésta se suma a la velocidad de desplazamiento de A y
B. En este caso al observador O le llegaría primero la luz de A, puesto que éste se dirige hacia él, y luego
le llegaría la luz de B, haciendo que O vea hacer el giro zigzagueante de A antes que llegue la carroza.
De este modo, lo que fue para A y B evitar un choque, fue para O solo un movimiento sin sentido. La
solución de esta paradoja consiste en afirmar que la velocidad de la luz ha de ser independiente de la
velocidad del objeto en movimiento.
- 18 -
correlación entre velocidad y tiempo, puesto que si un sujeto se moviera a velocidades
cercanas a c el tiempo para él transcurriría de manera más lenta y la visión que tuviera
del espacio sería la de los sucesos pasados. Para un observador que mira a un sujeto
desplazarse conforme a una velocidad cercana a c lo mirará como una onda de luz roja,
si es que se está alejando, o azul si se está acercando. La confirmación del hecho de que
el tiempo transcurre más despacio según sea la velocidad de desplazamiento, ha sido
realizada mediante varios experimentos, en uno de los cuales se hizo volar alrededor de
la Tierra y en sentidos opuestos dos relojes muy precisos, que al regresar indicaron
tiempos ligeramente distintos. Pero es quizá la paradoja de los gemelos la que mejor nos
puede ilustrar el modo como el tiempo está relacionado con la velocidad: Supóngase
que uno de los gemelos parte a un viaje espacial durante el cual se desplaza a una
velocidad próxima a la de la luz, mientras que su hermano se queda en la Tierra. Por el
movimiento, el tiempo transcurre más lentamente en la nave espacial que para el gemelo
que permanece en la Tierra. Al regreso del viaje, el gemelo que estuvo en la nave
espacial constatará que su hermano es más viejo que él.
En cuanto al espacio, y a su forma, Einstein planteará cambios que desafían la visión de
la física clásica. Si recordamos, para el modelo de Newton, el tiempo y el espacio
constituían un fondo sobre el cual se producían los fenómenos físicos pero que no
afectaba sobre ellos. Pero, desde la teoría de la relatividad, no existe forma en que un
cambio en el espacio no afecte el tiempo y éste adquiriría una forma según sea la
curvatura del espacio, aunque siempre mantendría la misma dirección. Así, el tiempo y
el espacio pasan a convertirse en participantes activos de los sucesos y no meros
espectadores como antes se creía. Por tal motivo Einstein hablaba, a más de las tres
clásicas dimensiones de la materia, del tiempo-espacio como elemento constitutivo de la
realidad. Si bien es cierto las teorías físicas son válidas para todo y en todo el universo,
los resultados y mediciones dependen de la posición y velocidad del observador, es
decir, de la categoría tiempo-espacio. La forma como el espacio afecta al tiempo lo
podemos ver a través del siguiente gedankenexperiment (experimento mental) como
acostumbrada decir Einstein: Una nave espacial pasa cerca de la Tierra de izquierda a
derecha con una velocidad cercana a c. En un extremo de la cabina se emite un puso que
se refleja en el otro extremo. La luz es observada por personas que se hallan en la Tierra
y por otras que se hallan en la nave. Debido al movimiento de ésta, no miden la misma
distancia para el recorrido de la luz reflejada. Según esto, no deben estar de acuerdo en
- 19 -
el tiempo que ha tardado la luz en su recorrido ya que la velocidad de la luz es la misma
para todos los observadores.
Otro postulado importante de la teoría de la relatividad y que concierne al espacio es
que se abandona la geometría euclideana desde donde se había construido la física
clásica, y se postula un modelo espacial curvo. La distribución de la materia y la energía
en el universo deforma y distorsiona el espacio-tiempo de forma que éste ya no es
plano. Aunque los objetos intenten moverse por trayectorias rectilíneas por el espaciotiempo no lo podrán conseguir porque sus trayectorias aparecerán curvadas. La distancia
más corta entre dos puntos, desde estos postulados, ya no es la recta, sino la curva. La
fuerza de la gravedad sería producto de la deformación del espacio producida por la
materia.
En lo que concierne propiamente a la estructuración de la materia, si para la física
clásica ésta estaba conformada por partículas sólidas, Einstein cuando descubrió que la
luz se mueve a una velocidad constante y que ningún objeto puede trasladarse a una
velocidad mayor que c, planteó que la masa de un cuerpo, conforme aumenta su
velocidad, también va aumentando, es decir, que un objeto conforme mayor es su
velocidad mayor será su masa y por tanto la estructura de su materia se verá modificada
cualitativamente. La materia, tal como lo plantea Einstein, tiene una estructura relativa a
su velocidad. Y además, la materia es mucho más que una estructura sólida sino que
también es energía. La clásica ecuación E=mc2 viene a indicar que una diminuta
cantidad de masa equivale a una enorme cantidad de energía. Las armas nucleares son
ejemplo de esto, puesto que en ellas la liberación de la energía nuclear que conforma el
núcleo de un átomo radioactivo como el uranio, tiene tanta energía y poder destructor
como la totalidad de armas que se usaron durante toda la Segunda Guerra Mundial.
Con los aportes de Einstein se empezó a abrir un nuevo camino dentro de la
investigación física: el mundo atómico y subatómico, ya que en este aparecían nuevas
claves y paradojas de comprensión del universo que desconcertaban, y todavía lo hace,
a los investigadores. Heisenberg comenta que después de las largas conversaciones que
mantenía con Bohr sobre el mundo atómico, casi siempre terminaban desconsolados
ante el gran misterio de esta nueva realidad que hacía que constantemente se hiciera esta
pregunta ¿es posible que la naturaleza sea tan absurda como nos lo parece en los
- 20 -
experimentos atómicos? La investigación atómica de inicios del siglo pasado demostró
que la realidad no está formada de partículas duras y sólidas sino que está constituida
por enormes espacios vacíos y por un núcleo y electrones que se mueven alrededor de él
y que incluso estos elementos estaban formados por otros elementos más pequeños
llamados quarks.
Si cuando Hubble descubrió la expansión del universo y puso las bases para la teoría del
big-bang mediante la cual se descubrió que el universo básicamente está vacío. La física
atómica proponía que la realidad, asimismo, es vacía y que la noción de dureza que
tenemos de los cuerpos sólidos es fruto del movimiento muy acelerado de los átomos
que lo conforman. Si por ejemplo aumentásemos el tamaño de un núcleo al de una
pelota de baloncesto tendríamos que el electrón que lo conforma, suponiendo que es un
átomo de hidrógeno, giraría a su alrededor a una distancia de 30 km. pero ese aparente
espacio vacío que existe en él en realidad posee tanta energía que tiene la fuerza de
producir una explosión semejante a un big-bang. Si la materia es energía, y la materia
en esencia es vacía, este vacío encierra mucha energía. El carácter de vacío que tiene la
materia hace que incluso dos objetos no lleguen a estar en contacto porque sus átomos
no se encuentran por el vacío del que están rodeados. Pero esto que hemos dicho hasta
ahora solo nos sirve para adentrarnos plenamente al campo de la física cuántica que
ahora vamos a revisar.
La nueva matriz epistemológica que surge más concretamente con los aportes de la
cuántica hacen que se abandone la máquina cartesiana del universo para inaugurar un
modelo más bien de carácter holista (del griego holos que significa totalidad) y de
comprensión sistémica de la realidad. Además la ciencia ya no trabaja en base a certezas
sino que existe una constante recurrencias a “sombras”, probabilidades o incertidumbres
en la construcción gnoseológica y ontológica de la realidad.
En el ámbito de la gnoseología se pone en duda la certeza del conocimiento en base al
principio de incertidumbre que Werner Heisenberg planteó. Según este cuanto mayor
sea la precisión con que se intenta medir la posición de una partícula, menor es la
precisión con que se puede medir su velocidad y asimismo, cuanto más precisa sea la
medida de la velocidad de una partícula, menor precisión habrá en la medición de su
posición. Podemos graficar el principio de incertidumbre mediante la siguiente
- 21 -
comparación: Suponiendo que existe un ciclista que se desplaza por una pista y que para
medir su posición o velocidad se va a usar una técnica fotográfica que consiste en elegir
un tiempo muy corto de velocidad de disparo de la cámara para precisar su posición o
poner más bien un tiempo un tanto largo para medir su velocidad. En el primer caso la
foto obtenida será muy nítida lo que nos permitirá determinar con precisión su posición
pero no nos dirá nada sobre la velocidad. Pero, en el segundo caso, la foto obtenida será
más bien borrosa pero facilitará la determinación de su velocidad con el consecuente
sacrificio de medición de posición. Ahora bien, podría decirse que esta paradoja podría
solucionarse si contásemos simultáneamente con dos aparatos fotográficos para así
medir la posición y velocidad simultáneamente, pero cuando nos desenvolvemos en
sistemas cuánticos no hay forma de aplicar esto ya que el solo acto de observar modifica
la realidad observada.
Para comprender más detenidamente este hecho debemos partir de lo que significa un
estado físico. Por estado comprendemos una representación matemática, generalmente
construida como ecuación, que permite responder cualquier pregunta relevante sobre un
sistema y su comportamiento futuro. A partir del estado se pueden conocer los valores
que determinados elementos del sistema pueden adquirir. Para un sistema clásico
formado por una partícula que se mueve por el espacio, el es posible determinar la
posición y velocidad de una partícula mediante la aplicación de las ecuaciones de
Newton. Para el sistema clásico es posible determinar todas las propiedades del objeto,
mientras que el sistema cuántico está fijado por algunas propiedades solamente y las
predicciones son probabilísticas en virtud del principio de incertidumbre. Además los
resultados obtenidos durante la investigación aporta una información sobre el sistema
que es válida para instantes posteriores al registro de los datos, sin que se obtenga
información alguna sobre instantes anteriores a la medición o durante ésta puesto que
todo experimento implica la interacción entre el sistema que se está observando y
ciertos aparatos de medida apropiados y esta interacción implica un intercambio de
energía entre el sistema y el aparato. “Por más pequeña que sea el intercambio, el
proceso de medición implica una acción [por acción se entiende la capacidad que tiene
un sistema para cambiar su entorno y de interactuar con otros sistemas físicos] que,
según aquella ley fundamental de la naturaleza, no puede ser menor que ћ, la constante
- 22 -
de Planck.”22 El valor que tiene la constante de Planck es de 10-34 joules por segundo.
Cualquier medición en un sistema cuántico lo perturbará de tal manera que se borrará
toda posible información sobre su estado anterior a la medición. La física cuántica no
impide que la medición simultánea de la posición y velocidad de una partícula, más bien
afirma que dicha medición está sujeta al error y más bien se la realiza a la forma de un
cálculo de probabilidad.
Heisenberg “en términos más precisos demostró que la incertidumbre en la posición de
una partícula multiplicada por la incertidumbre en su cantidad de movimiento (masa por
velocidad) siempre debe ser mayor que la constante de Plank, que es una magnitud
estrechamente relacionada con el contenido de energía de un cuanto de luz.23 Por
ejemplo si tomamos un péndulo podemos decir que su estado más bajo de energía no es
aquél en que está en reposo hacia abajo, ya que si este estado implica una posición y
velocidad bien definidas, ambas de valor nulo, contradice el principio de incertidumbre,
por lo que el estado de energía más baja de un péndulo no tiene energía nula sino que en
dicho estado un péndulo, o cualquier sistema oscilante, debe tener una mínima cantidad
de energía, haciendo que no necesariamente el péndulo apunte hacia abajo sino que
habrá cierta probabilidad de hallarlo formando un pequeño ángulo con la vertical.
Las mediciones que se hacen en un sistema clásico siempre aumentan o dejan constante
la cantidad de información que se tenía sobre un sistema. La ciencia evoluciona en la
medida en que acumula más información sobre los hechos. Pero, tal como hemos estado
viendo, para un sistema cuántico el carácter de la ciencia no es evolutivo, sino que más
bien, como diría Popper, avanza en cuanto los resultados invalidan los procesos
anteriores ya que las mediciones hechas en física cuántica aportan con una información
que puede destruir la información anterior en lugar de acumularse. No importa cuán
perfecta esté realizada la experimentación, ya que en el momento que hay interacción
hay alteración y además debemos tomar en cuenta que todo sistema cambia así que las
mediciones obtenidas sobre por ejemplo la posición de una partícula únicamente son
válidas para el instante en que se recolectó la información, pero nada impide que la
partícula pueda ocupar distintas posiciones e incluso las que menos se esperaría.
22
DE LA TORRE, Alberto Clemente, Física Cuántica para filó-sofos, Editorial Fondo de Cultura
Económica, 2° Edición, México 2000, p. 57
23
HAWKING, Stephen, Op. Cit. p. 42
- 23 -
Richard Feynman, sobre este mismo asunto, contradijo la hipótesis de que cada
partícula tiene una historia particular en el momento en que se desplaza, sino que
planteó que las partículas se mueven de un sitio a otro a lo largo de cada trayectoria
posible en el espacio-tiempo. 24
Tal parece que la partícula pierde localidad y se difumina en todas las posiciones
adyacentes. La física cuántica permite averiguar la velocidad con que la partícula se va
a difundir. “Sucede que, para los objetos que podemos captar con nuestros sentidos, el
cálculo indica que tardarán tiempos millones de veces mayores que la edad misma del
universo para difundirse en una medida que pudiera ser observada. Muy distinto es lo
que ocurre con un electrón, que por estar caracterizado por pequeñísima acción
rápidamente se difunde perdiendo la propiedad de localización y adquiere una
probabilidad no anula de ocupar distintas posiciones.”25 Observamos que afirmaciones
de este tipo desafían el sentido común donde decimos que un objeto está en un lado y no
en otro, o siguiendo las leyes de la lógica, decimos que A es igual a A y distinto que B,
pero la cuántica nos remite a estados físicos donde existe una probabilidad de que una
partícula esté en A y en B.
En cuanto a la construcción ontológica de la realidad descubrimos nuevos cambios que
nos aporta la física cuántica en cuanto a nuestra forma de comprender la realidad
circundante. Ya hemos estado hablando del carácter difuso que tiene la materia, ahora
vamos a revisar más detenidamente el por qué de dicho atributo.
Mediante el siguiente experimento podemos ejemplificar cuál es carácter dual de la
materia: Cuando se intentó pasar un conjunto de electrones por dos rendijas de una
placa de metal se observó que los electrones en lugar de comportarse como partículas y
atravesar una sola rendija, adquirieron las propiedades de una onda y atravesaron ambas
rendijas a la vez y en lugar de impregnarse en la pared de fondo en dos columnas
paralelas correspondientes a cada una de las rendijas de la plata metálica, se fijaron en la
pared como un conjunto de columnas. Este hecho insólito llevó a la conclusión de que
24
Hawking y Penrose aplicando este principio a la historia del universo plantean que no existe una única
historia del universo sino que existen múltiples historias de éste, donde en una de las cuales el hombre
existe y ha evolucionado hasta el estado actual. Tarea de la física es averiguar cuál de esas muchas
historias es la más probable.
25
DE LA TORRE, Alberto Clemente, Op. Cit. p. 64
- 24 -
la materia a más de comportarse como partícula y estar limitada a un volumen
extremadamente reducido, se comporta también como una onda que se difunde a través
de una vasta región del espacio-tiempo. La realidad está construida de “ondículas”, es
decir, la realidad subatómica es onda y partícula a la vez. Y además, siguiendo el
experimento antes citado, cuando los físicos decidieron medir por cual rendija
atravesada primero aquel electrón solamente con el acto de observar hizo que aquella
partícula dejase de adquirir propiedades de onda y se mueva como una partícula. Esto
sacó la conclusión que la presencia del en cualquier campo de la realidad hace que ésta
se modifique.
En la línea de este mismo experimento, en lugar de usar dos rendijas y pasar electrones,
se utilizo solo una rendija y se hizo pasar fotones (que son ondas de luz). El resultado
fue que en la pared de fondo se proyectó un punto luminoso, puesto que los fotones
estaban actuando como partículas. Pero, al abrir nuevamente la otra rendija se produjo
el fenómeno anterior y los fotones volvían a tomar naturaleza de ondas. “Un electrón no
es una partícula ni una onda, si bien unas veces tiene aspectos similares a los de una
partícula y otra, a los de una onda. Mientras actúa como partícula, puede desarrollarse
naturaleza ondulante a expensas de su naturaleza corpuscular y viceversa.”26
Las propiedades de los átomos dependen de las condiciones del entorno. El hecho de
que adquieran características de partículas o de ondas está en correlación con el
ambiente en que se encuentra el sistema. Y específicamente en el campo de la
investigación la conciencia humana juego un rol central en la estructuración de la
materia ya que determina en gran medida las propiedades de los fenómenos observados.
El observador no solo es necesario para observar las propiedades de los fenómenos
atómicos, sino para provocar la aparición de dichos fenómenos. Por ejemplo si se decide
observar a un electrón como partícula manifestará propiedades de partícula, pero si de
decide observarlo como onda manifestará propiedades de onda. No hay propiedades
objetivas del electrón, estas están en función de la conciencia del observador. Esto hace
que la distinción cartesiana entre mente y materia se vuelva inoperable. La
interpretación gnoseológica mantiene que la partícula ocupa un lugar en el espaciotiempo sin que se logre conocer con precisión donde, mientras que la interpretación
26
CAPRA, Fritjof, Op.Cit. p. 85
- 25 -
ontológica demuestra que la partícula tiene una tendencia a existir difuminadamente a lo
largo del espacio.
Ahora bien, a más del carácter dual de la materia y de su irrenunciable conexión con la
conciencia humana, la física cuántica plantea otro postulado que cuestiona el segundo
paso de la duda metódica cartesiana, a saber: la noción de separabilidad. La física
clásica se había construido sobre el presupuesto de que la realidad puede ser dividida en
partes y estudiada independientemente, pero las investigaciones realizadas revelan todo
lo contrario. Mediante el siguiente gedankenexperiment podemos desarrollar otro
cambio en la ontología de la realidad.
El experimento llamado EPR (
por el nombre de los tres físicos que idearon el
experimento: Einstein-Podolsky-Rosen ) fue una elaboración teórica que consistió en lo
siguiente: suponiéndose que se separasen dos electrones de un mismo átomo al uno se
lo encerrara en un laboratorio de New York y al otro se lo llevara a 20 mil millones de
años luz de distancia, cualquier cambio o alteración en el movimiento o spin del uno
influirá directa e instantáneamente en el otro y no porque dicha información pueda
viajar a una velocidad mayor a la de la luz, puesto que ninguna entidad lo puede hacer,
sino porque ambos electrones forman uno solo. Ahora bien, si reconocemos que en el
momento del big-bang toda la materia del universo estaba condensada en un solo punto
debemos aceptar que todo está unido y la noción de separación y distancia es solo una
apariencia. Es más, por el solo hecho de que el cosmos presenta esta característica
podemos asumir que la composición de una partícula obedece a las interrelaciones que
ésta tiene con el entorno con que se relaciona y que nociones como causalidad son ahora
difíciles de suponer puesto que ésta deja de ser lineal, como usualmente se supone, sino
que la causalidad es una cuestión más de probabilidad que de cadenas causales fijas e
inmutables evitando de esta forma usar imágenes deterministas y mecánicas del
universo. La física cuántica indica que no se puede analizar el mundo a partir de
fenómenos aislados sino a partir de interrelaciones. “El comportamiento de una parte
está determinado por las conexiones ilimitadas que ésta tiene con el conjunto y, puesto
que es imposible saber con precisión cuáles son estas conexiones, hay que reemplazar la
visión clásica y parcial de causa y efecto por un concepto más amplio de causalidad
- 26 -
estadística.27 Para los sistemas cuánticos la no separabilidad implica que cualquier
cambio en una de sus partes influenciará directamente sobre las demás ya que toda la
realidad forma un todo indivisible, y de ahí que la nueva matriz disciplinar sea
eminentemente holista.
La llamada “sociedad de la información” como dice Castells, ahora puede ser entendida
de manera más amplia puesto que debemos reconocer que el mundo de las relaciones
sociales es un entramado complejo de interacciones en base a informaciones que
circulan a escala global y que por tanto no es posible establecer leyes fijas e inmutables
para el análisis de los fenómenos sociales. Ya no es posible acercarse a la comprensión
de las dinámicas sociales desde la posición de aquel observador que mira las cosas de
manera externa y al margen de la acción social, puesto que esto es sencillamente
imposible. La sola presencia de un sujeto afecta a la forma de relacionarse que tienen
los demás participantes de la interacción y por lo tanto el investigador social es aquel
que es capaz de construir teoría desde la participación en los fenómenos sociales. Se nos
hace difícil aceptar que las sociedades progresen todas juntas hacia una misma forma de
organización como la visión mecanicista proponía, puesto que la evolución social, si
bien es cierto está sujeta a leyes, la compleja red social evita que caigamos en posturas
deterministas, sino que más bien aceptemos la incertidumbre como principio de
evolución social.
6. Conclusión
Hemos descubierto que la nueva matriz epistemológica que nos plantea la física
cuántica pone en duda los presupuestos con que tradicionalmente hemos comprendido
la realidad ya que enfrentarse al mundo desde la cuántica es reconocer que la realidad
sigue presentando sombras para la comprensión y que el conocimiento que
construyamos sobre la misma está sujeto a imperfecciones. Pasar del mundo máquina al
mundo holista es hacer un salto en la ciencia que vaya de la certeza a la incertidumbre,
de lo absoluto a lo relativo, de lo separado a lo unido, etc.
27
Idem., p. 94
- 27 -
El hombre forma parte del cosmos, no solamente porque comparte una historia de 15
mil millones de años, sino porque en su dimensión subatómica existe una interrelación
con el universo, con la realidad, que hace que los pensamientos sean no solo ideas, sino
substancia que afecta al mundo. Ahora bien, si bien es cierto no podemos hablar de que
existe una realidad objetiva independiente del sujeto, tampoco podemos afirmar que
todo en la realidad es subjetivo, porque esto nos conduciría a posiciones idealistas
inoperantes. Efectivamente las cosas siguen siendo, pero lo son en cuanto el hombre es.
Hay una relación dialéctica entre la realidad objetiva, realidad subjetiva y realidad
social. Si bien es cierto que la conciencia humana afecta a la realidad, no es posible
pensar que dicha afectación sea cualitativa, es decir, con solo pensar no se puede
convertir una piedra en un árbol, pero sí es necesario comprender que hay una
interrelación fundamental entre la conciencia y el mundo que evita que estos existan de
manera independiente.
En el ámbito de las relaciones sociales descubrimos que la actitud positivista del
investigador que cree conocer la realidad en su estado puro no es así puesto que todo
acercamiento al mundo de las interacciones humanas requiere de la participación y
presencia en dicho ámbito para así dar significado, comprender e interpretar las
pretensiones de validez que los sujetos tienen en determinadas formas de vida.
7. Bibliografía
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Editorial Norma, Colombia 2006

CAPRA, Fritjof, El punto crucia. Ciencia, sociedad y cultura naciente, 1°
Edición, Editorial Estaciones, Argentina 1992.

DE LA TORRE, Alberto Clemente, Física Cuántica para filó-sofos,
Editorial Fondo de Cultura Económica, 2° Edición, México 2000

GIDDENS, Anthony, Política, sociología y teoría social. Reflexiones sobre
el pensamiento social clásico y contemporáneo, 1° Edición, Editorial Paidós,
España 1995.

HABERMAS, Jürgen, Ciencia y técnica como ideología, 4° Edición,
Editorial Tecnos, España 2002
- 28 -
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HAWKING, Stephen, Historia del tiempo: Del big-bang a los agujeros
negros, 16ª Edición, Editorial Crítica, Colombia 1999.
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HAWKING, Stephen El universo en una cáscara de nuez, 9° Edición,
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KANT, Immanuel, Crítica de la Razón Pura, Editorial Taurus.
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España 2005.
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SAGAN, Carl, Cosmos. Una evolución cósmica de quince mil millones de
años que ha transformado la materia en vida y consciencia, 7° Edición,
Editorial Planeta, España 1983.
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WAGENSBERG, Jorge, La rebelión de las formas. O cómo perseverar
cuando la incertidumbre aprieta, 2° Edición, Editorial Tusquets, España
2004.
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WAGENSBERG, Jorge, Ideas para la imaginación impura. 53 reflexiones
en su propia sustancia, 3° Edición, Editoria Tusquets, España 2006.
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