Al estudiante de Iniciación

Anuncio
CHARLA DE UN GAG-PA
Al Estudiante de Iniciación.
Conocemos como estudiante a la persona que se interesa en alguna de las ramas del saber.
Todos somos o hemos sido estudiantes de matemáticas, física, biología... y también nos hemos
reconocido como estudiantes de diferente nivel, de acuerdo con el grado de estudios cursados, ya
sea el básico, medio, superior o de post-grado.
En la Iniciación ocurre algo parecido: hay estudiantes muy avanzados y que por lo mismo la
humanidad los reconoce como Maestros; otros, intermedios; y otros más, que apenas comenzamos.
En términos generales, podríamos considerar como estudiante de Iniciación a todo individuo que se
interesa en encontrar las respuestas a las preguntas tradicionales: ¿Qué soy? ¿Cuál es mi origen?
¿Cuál, mi destino?
Aunque la respuesta a las interrogantes expresadas es demasiado sencilla, para llegar a ella el
estudiante debe recorrer un camino constituido por un conjunto de experiencias tipo que los
Maestros llaman El Sendero. Resulta lógico pensar que, como en los grados escolares, estas
experiencias son cada vez más complejas y solamente pueden ser enfrentadas por quienes tienen
sólidos los conocimientos adquiridos en los grados inferiores.
A veces ocurre que el estudiante se conforma con conocer los programas de las asignaturas,
sin estudiar verdaderamente el contenido de los mismos, pero adquiriendo el manejo de algunos
términos más o menos técnicos. En Iniciación puede ocurrir algo parecido y es por ello que
distinguimos la Iniciación Real de la Iniciación Simbólica.
En esta última se ubican quienes pretenden conocer el Sendero mediante la simple
documentación, leyendo textos diversos que hablan acerca de las experiencias y pruebas que vive el
Iniciado, pero conformándose como aquél que, sin salir de casa pretende conocer como es
determinada cultura del mundo, tan sólo porque cuenta con algunas postales. Por el contrario, el
Sendero de Iniciación Real exige al estudiante que no se conforme con la fotografía, sino que vaya a
la experiencia directa. Es entonces cuando el estudiante se da cuenta que el camino sólo se recorre
andando y que para ello se requiere dar el primer paso (OSAR).
Debemos aclarar que, si bien es cierto que la Iniciación Real exige la experiencia directa, esto
no implica que nos pasemos la vida repitiendo la misma experiencia, o lo que es lo mismo, que
ocupemos diferentes encarnaciones viviendo situaciones semejantes y cometiendo los mismos
errores, pues entonces nunca avanzaríamos. También es oportuno recordar cómo el estudiante de
una asignatura cualquiera puede, con empeño, aprender más rápidamente que sus condiscípulos y
hasta puede llegar a presentar, en el mismo ciclo escolar, exámenes correspondientes a otros grados.
Así es que se puede decir que nuestra capacidad para comprender a quienes nos rodean nos indica
claramente nuestro estado evolutivo respecto a ellos, pues en la medida que los comprendemos, en
esa misma medida ya no necesitamos la experiencia por la que ellos están pasando. Desde luego
que no es lo mismo comprender a alguien, que simplemente tolerarlo.
Se ha dicho que "todos los caminos llevan a Roma" (ROMA=AMOR), es cierto, y que todos
los hijos de DIOS algún día alcanzarán sus pies, por alejados que anduviesen, mas, para quienes se
sientan particularmente interesados en acercarse a EL, diremos que el Sendero puede ser comparado
con un viaje que pudiera realizar alguien que decide ir de una ciudad a otra. Como hipotéticos
observadores, podríamos apreciar algunas diferencias entre los viajeros: algunos se ven sanos y
fuertes, mientras que otros, débiles y enfermos; hay quienes se encuentran bien equipados y van
atendiendo a su brújula, mientras que otros han aprendido a guiarse por las estrellas y, otros más,
simplemente hacen caso a su instinto; varios hacen el viaje por escalas, mientras que unos cuantos
parecen llevar prisa; no falta quien se haya quedado dormido, sin tener quien lo despierte, así como
algún otro se ha extraviado sin darse cuenta de ello, etc.
¿Cómo le agradaría a usted viajar? Seguramente que de la manera más cómoda, agradable y
segura; o lo que lo mismo: bien equipado, en grupo y con un guía que conozca bien el camino.
Pero si usted piensa que lo más cómodo es subirse al vehículo y viajar dormido, dejándose
transportar por el operador del mismo, debo aclararle que eso no es válido en lo que a Iniciación se
refiere. ¿Porqué? Porque este viaje no es otro, sino el que nos lleva al conocimiento de nosotros
mismos (algunos le llaman el Camino que conduce al Padre, a Dios, Al Ser Supremo) ;
conocimiento que sólo se consigue mediante el desarrollo de la conciencia, y ésta no puede
desarrollarse inconscientemente; porque sólo a través de la experiencia asimilada es que se avanza
en el Sendero; porque cada paso (que representa un nuevo tipo de experiencias) no puede ser dado,
si esperamos que alguien lo haga por nosotros. Cualquier avance, por mínimo que sea, sólo podrá
conseguirse a través del ejercicio de la voluntad.
La experiencia del recorrido es individual, no se repite, pero se puede compartir. Quien
comprende esto se da cuenta de lo conveniente y hasta ventajoso que resulta la colaboración que
consigue y puede proporcionar, al participar en una Escuela o Colegio de Iniciación, así como la
importancia que para la seguridad del grupo representa el contar con la guía de un verdadero
Maestro.
Sobra hablar de lo incómodo que resulta hacer un viaje (por experto que sea el guía y lo
agradable que puedan ser los compañeros) cuando se tiene algún malestar físico o de cualquier otro
tipo. Es por esto que el viajero debe cuidar de traer siempre consigo el medicamento que le permita
controlar cualquier enfermedad y que es, al mismo tiempo, el recurso al que puede acudir para
reponer la energía gastada, adaptarse a los cambios de temperatura o de alimentación, ahuyentar a
los mosquitos, enfrentarse a monstruos y fantasmas, resistir al canto de las sirenas, etc.
¿Cuál es este recurso múltiple? Es una fórmula mágica, capaz de proporcionar a su poseedor
las llaves que abren las puertas del cielo y se pronuncia así: disciplina, disciplina, disciplina... Es
por esto que la disciplina es la característica fundamental del estudiante de Iniciación, mientras éste
se considere como tal. Pero, ¿Qué es la disciplina?
Podemos decir que la disciplina es el resultado de la combinación armónica del esfuerzo y la
constancia, aplicada a cualquier actividad humana. De este modo, hasta el simple juego de pelota
puede constituirse en disciplina, si a través de él se intenta constantemente conseguir la perfección;
de lo contrario, la actividad, por sublime que parezca, no pasa de ser una simple rutina o un
esfuerzo aislado, cuyo beneficio resulta ser mínimo, como un día de lluvia en el desierto.
Naturalmente, de acuerdo al tipo de actividad que adoptemos como disciplina, obtendremos
los efectos correspondientes, ya sea que se trate de un deporte rudo, una actividad casera o cualquier
otra. Nos parece, por lo tanto, innecesario repetir aquí las múltiples ventajas por todos conocidas, de
adoptar la YOGA como disciplina; baste recordar que el S.H.M., Dr. José Manuel Estrada, nos dijo
que "la YOGA es la disciplina de la Era del Acuarius".
La disciplina constituye la mejor expresión del primero de los siete atributos divinos que
podemos apreciar en el ser humano: la VOLUNTAD.
Hay quienes piensan que solamente mediante la realización de acciones espectaculares se
puede proyectar una poderosa fuerza de voluntad. Se equivocan. Las acciones simples, de la vida
cotidiana, pueden significar tanto o más que las aplaudidas por la sociedad. Es, sobre todo, cuando
el individuo se encuentra solitario, cuando estas acciones simples se vuelven más trascendentes,
pues, contra lo que la mayoría piensa, es en la soledad donde mejor se puede proyectar la grandeza
de alguien.
Por supuesto, debemos concebir la soledad como un estado mental y no como mero
aislamiento físico. De esta manera podemos comprender, por ejemplo, cómo el responsable, jefe o
coordinador de un grupo puede llegar a sentirse solo, aún cuando se encuentre rodeado de
colaboradores y del afecto de los que de él dependen, si no comparte la responsabilidad, el
conocimiento, la autoridad o lo que aparentemente posee en exclusiva.
El Estudiante de Iniciación debe, por lo tanto, considerar que se encuentra ante una bella
oportunidad de desarrollo, cuando vive su disciplina, sin que lo haga solamente por cumplir con los
requisitos que le exige la Escuela o grupo al que pertenece. Quien colabora en una institución, como
la G.F.U., porque se identifica con los ideales de la misma, se encuentra un paso delante de quien
participa buscando el reconocimiento de los Maestros o de la comunidad.
Después de lo expuesto puede parecer contradictoria nuestra recomendación muy especial
para que se practique la Disciplina de la Era del Acuarius en grupo y, preferentemente, en un
instituto de la G.F.U., pero recordemos que la soledad no consiste en el aislamiento físico y, por
otra parte, recordemos la comparación que habíamos hecho de los viajeros que van al encuentro de
sí mismos y lo ventajoso que resulta viajar acompañados de otros que nos ayudan a no quedarnos
dormidos en el camino, o bien, a no olvidar la fórmula mágica de la disciplina.
Amado Nervo, poeta mexicano nacido en el siglo XIX, escribió el siguiente poema,
relacionado con nuestra charla:
HATHA-YOGA
Yo tengo la voluntad
en ejercicio perpetuo;
esa voluntad que acaba
por mandar (si persevero)
a las almas de los vivos
y a las almas de los muertos.
La voluntad, que en la lucha,
en el noble vencimiento
de sí mismo, a cada instante
va creciendo, va creciendo,
y al fin transporta montañas
y al cabo enciende luceros.
Yo tengo la voluntad:
con ella todo lo tengo,
pues Dios mismo sólo es
una voluntad sin término
que exterioriza, penetra
y mantiene el universo...
Yo tengo la voluntad...
mas no la gasto en terrenos
antojos, ni en procurar
privanzas, honras, empleos.
Mis alas suben más alto:
van lejos, mucho más lejos.
Mi reino no es de este mundo,
Y he de llegar a mi reino.
ACLARACIÓN: Las Charlas de un Gag-Pa están dirigidas al público en general; y en particular, a
los Seres Humanos que se inician en la búsqueda de sí mismos. Debido a que este servidor es tan
sólo un estudiante más de Iniciación, los conceptos vertidos constituyen parte de lo que ha sido
posible comprender de lo dicho por los MAESTROS, los Maestros y la propia experiencia. Si usted
se encuentra bajo la tutela de algún Maestro de Iniciación y encuentra en estas Charlas algún
concepto que difiera de lo expresado por su Maestro, le recomiendo atender a las orientaciones de él
y le agradeceré la aclaración o información al respecto, así como cualquier comentario a la presente,
pues me daría la oportunidad de hacer las aclaraciones correspondientes.
NOTA: Si usted desea participar de las prácticas que complementan esta Charla, puede escribir a
este servidor.
Rigoberto Hernández Fuentes,
Gag-Pa. A su servicio.
Descargar