El rey de los genios y otros relatos. Muhammad Zafzaf Este relato corto es de Muhammad Zafzaf, escritor de origen marroquí. Sus aportaciones a la narrativa de los sesenta suponen una serie de innovaciones y tendrá sus propias características formales como de contenido. No es posible fijar una fecha para hablar de relato en Marruecos, ya que se extiende a lo largo de toda una época y es fruto de una generación de intelectuales. Hay más conciencia de la existencia del relato hacia los años cuarenta, ya que es un momento de conciencia política y nacional. La narrativa, por lo tanto, en estos años es de lucha nacionalista contra el ocupante francés y español. También es cierto que la literatura marroquí tiene un desarrollo posterior, ya que la nahda cultural que se produjo en Siria, Líbano, Egipto e Iraq sorprendió a los marroquíes que no estaban preparados para esta renovación cultural. Marruecos se encontraba en desventaja por el aislamiento sufrido en el siglo XIX bajo la hegemonía turca y después siguió con el colonialismo europeo. Muhammad Zafzaf es un autor muy reconocido en Marruecos gracias a una labor continuada y una producción con sello propio. Su producción narrativa es de carácter universalista. El rey de los genios presenta desde mi punto de vista una estructura in media res ya que el relato comienza en uno de los momentos principales de tensión y, a partir de ahí, la historia se narra progresivamente. También presenta un final abierto, esto quiere decir que un relato no acaba la trama narrativa y se dejan líneas o acciones sin resolver. Es característica de los finales abiertos la vuelta al status inicial, como se deja entrever en este relato. Pienso que será amplio el número de lectores que interpretemos que el joven no volverá a andar nunca más. El narrador del relato es un narrador observador que narra los hechos en tercera persona pero que aunque conozca todos los detalles de la acción no interviene y los presenta de manera objetiva. Los personajes centrales, según mi punto de vista, son personajes planos. Son personajes simples que presentan un solo rasgo dominante de caracterización, ejemplo característico es el tipo. Pienso que los personajes han sido creados a conciencia por el autor de forma plana ya que es una manera de englobar y dotar de un carácter más universal al relato. Es importante prestar atención al ambiente y a los paisajes puesto que muchas veces en el relato pueden ser la clave de lo que va a suceder después. Por ejemplo Aun así, no alcanzaban a ocultar las verdes cumbres de algunos montes, cuyas cimas coronaban nubes grises tirando a negras o La densidad de las nubes y su lento avance revelaban algo desconocido, terrible y espantoso. Podemos apreciar que el ambiente que recrea Muhammad Zafzaf es frío, sin alegría y lleno de tensión entre los personajes. También es curioso ver el ambiente de picaresca que se vive en Imlil y en Sidi Shamharush. Por ejemplo como el conductor de la carreta prácticamente les coacciona para que le alquilen los burros a esa buena mujer viuda que él conoce y como el conductor recoge el dinero de los burros que en realidad debería recoger la mujer. También, como el dueño de las habitaciones les enseña las instalaciones con muy buena voluntad y con simulada bondad pero luego le exige más monedas de las que el padre de Sulayman le entrega. En el relato podemos ver como el autor mete pinceladas de critica social en observaciones casi casuales. Por ejemplo cuando el conductor de la carreta le dice al padre de Sulayman lo mal que esta la carretera aunque habían prometido arreglarla cuando se estaba haciendo campaña electoral. Los dos hombres aparecen 1 resignados ante esta circunstancia. Se hace una comparación muy curiosa: −¿Qué puede decir el muerto a quien lo entierra? Por supuesto, no puede hablar. −Pero Dios recompensará al enterrador y al enterrado. Aquí se compara al enterrador con la figura autoritaria del estado que no cumple sus promesas ante el pueblo y el enterrado es el pueblo que tiene que soportar la opresión de ese estado que se aprovecha de la necesidad del pueblo. Muhammad Zafzaf habla también de los intereses creados, es decir de cómo el Gobierno quiere aprovecharse de una fuente segura de ingresos, por supuesto su intención no es sincera como la de los visitantes de Sidi Shamharush. Es una critica a los Gobiernos que hoy en día no respetan algo tan sagrado para las gentes como es la religión. Es muy importante la doble visión que se da sobre los europeos en este relato. Tenemos la visión negativa e irrespetuosa: Pero no se contentan con eso, sino que hacen cosas feas que no le gustan a Sidi Shamharush o porque un sucio europeo le alquiló uno (refiriéndose a los burros) hace seis meses y desaparecieron él y el burro. Pero también hay una visión positiva que no entiende de procedencias ni de personas, solo de fe: También hay europeos que vienen por la bendición. Él no rechaza la petición de quien busca refugio. El relato está plagado de connotaciones religiosas populares. Por ejemplo los castigos que inflige Sidi Shamharush a quienes no se dirigen a él con una intención sana y sincera: Vienen a escalar el monte y están por todas partes. Suben por el monte hasta Sidi Shamharush. ¡Muchos de ellos han sido objeto de la maldición de Sidi Shamharush y se han matado despeñados!. Otro ejemplo lo tenemos en la conversación que mantiene el padre de Sulayman con el carretero: −Hasta ellos roban. (Refiriéndose a los europeos). −Dígamelo a mí. Pero Sidi Shamharush no los olvida. Pero el rey de los genios no solo castiga, también sana a los enfermos aunque en el relato no obre ningún milagro. Más bien da la sensación de burla porque mucha gente vuelve de nuevo con todas las esperanzas puestas en el rey de los genios para sanarse, gastándose así un dinero que le cuesta mucho ganar y que en esa montaña todo el mundo pide sin cesar beneficiándose de los pobres incautos: Esa mujer fue la que le dijo que ellos habían visitado el santuario dos años, sólo que no era el deseo de Sidi Shamharush que el niño se pusiera en pie esta vez. o Vuelva la próxima primavera, porque hay épocas en las que Sidi Shamharush se ausenta, y es imposible saber que épocas son estas. Desde mi punto de vista choca un poco con los preceptos del Islam esa adoración a Sidi Shamharush ya que los musulmanes no pueden adorar a otros dioses y aquí se ve como se entregan a la voluntad de los santones aunque no sea un dios, pero a fin de cuentas es una forma de adoración. El diálogo en el relato es el arma para mostrar el carácter de los personajes. Por ejemplo, vemos el carácter reposado, esperanzado y tranquilo de los padres de Sulayman pero también el carácter extrovertido y figuradamente amable de los que trabajan en la montaña de Sidi Shamharush, los cuales tiene un lazo familiar con el genio según ellos. Podemos ver que el diálogo no es muy fluido ni rápido, sino todo lo contrario. Personalmente creo que da una sensación de lentitud, como que todo va muy pausado en la montaña de Sidi Shamharush. 2 Para ir concluyendo citare un fragmento que me parece muy acertado para definir esta obra de Muhammad Zafzaf del libro Aproximación al relato marroquí en lengua árabe (1930−1980) de Fernando Ramos López: Los relatos de Zafzaf se apartan de los modelos trillados de narrativa realista, tanto marroquí como árabe en general y se transforman en relatos abiertos, de perspectivas y límites inciertos, con personajes extraños y anormales, en los que los contornos de las cosas y los seres llegan a cobrar dimensiones irreales y alegóricas, y la trama es a veces confusa con el fin de expresar con autenticidad la vida y el destino humanos, en el marco de lo absurdo, incongruente y fragmentario. Personalmente opino que El rey de los genios es, a pesar de su brevedad, un relato muy original que quizá siga un poco la estructura del cuento. Aunque el relato no posee ningún aspecto que indique temporalidad sigue una línea muy tradicional, sin embargo el autor utiliza un lenguaje moderno ligado con la realidad del momento. La religiosidad popular que se ve en el relato hace que la gente se identifique con lo que se cuenta, que se mezcle con el mundo de los beréberes y con las creencias populares. BIBLIOGRAFÍA: • Ramos López, Fernando: Aproximación al relato marroquí en lengua árabe (1930−1980). Publicaciones de la Universidad de Alicante. • Camarero, Manuel: Introducción al comentario de textos. Editorial Castalia 4 • 3