sistemas de producción bovina en colombia

Anuncio
SISTEMAS DE PRODUCCIÓN BOVINA EN COLOMBIA
ARIAS, J. H; BALCAZAR, A; HURTADO, R. 1990.
Consideraciones Metodológicas
La ganadería, como otras actividades del agro, se caracteriza por la diversidad
y heterogeneidad en la organización técnica y económica de la producción. De
hecho, ninguna finca está organizada en forma idéntica a otra; cada una
tiene elementos
propios y únicos
que determinan
propiedades y
características irrepetibles en razón de la naturaleza biológica y cultural de
muchos de sus componentes. Sin embargo, muchas veces las fincas
comparten rasgos y propiedades que las hacen semejantes en algunos
aspectos; sus semejanzas permiten clasificarlas o agruparlas para
propósitos diversos (analíticos, planificación, campañas de extensión). El nivel
y el tipo de clasificación dependen de los fines que se persigan y de los
criterios que se adopten.
En el proceso de adaptación de los patrones de cultivo y de las técnicas de
producción a las condiciones naturales, económicas y sociopolíticas de cada
localidad y de cada finca, se han desarrollado formas de organización más o
menos diferenciadas y diferenciables. En general, se puede afirmar que
cuando comparten el mismo entorno natural, económico y socioinstitucional,
las fincas tienden a desarrollar componentes cuyas interacciones forman
estructuras que los hacen semejantes dentro de ciertos niveles de
caracterización; por lo tanto desarrollan propiedades que las diferencian de
otras ubicadas en contextos diferentes.
Siempre es posible explicar la forma específica que adopta la organización
técnica y económica de una explotación agrícola. Tales explicaciones
provienen del tipo de relaciones que se establecen entre las propiedades
individuales de la unidad de producción y las del medio ambiente natural y
sociocultural donde se ubica. La aplicación de la teoría general de sistemas
a la caracterización y
análisis de los procesos agrarios ha facilitado
enormemente la realización de este trabajo.
Las definiciones del concepto de sistema son innumerables. Sin embargo en
su mayoría se basan en los conceptos de conjunto de componentes,
estructura de conexiones y función.
En términos generales, un sistema está definido por tres características
fundamentales: el conjunto de componentes, cada uno con propiedades
específicas y analizables; el conjunto de relaciones que especifican la
estructura de conexiones y los modos de interacción entre los componentes;
el ambiente conformado por otros elementos y sistemas que se relacionan
con el sistema en cuestión mediante interacciones con sus componentes.
Las dos primeras características definen los límites del sistema y la tercera
define las condiciones (recursos e información) que inciden en su estructura y
en sus funciones (componentes tecnológicos, tipo de productos, eficiencia
biológica y económica).
En consecuencia, la estructura de una finca dada es el resultado de las
interacciones entre las relaciones internas y las condiciones del medio
ambiente en que se encuentra.
El contexto influye sobre el sistema finca a través de las relaciones
externas esto es, las condiciones naturales; el estado del conocimiento y la
información tecnológica compatible con las condiciones naturales del
contexto en cuestión; el ambiente institucional; el ambiente económico
(dimensión de los mercados vías de comunicación y medios de transporte;
mercados de insumos y productos precios relativos entre insumos, entre
insumos y productos y entre productos y infraestructura económica) y el
medio ambiente sociocultural (estructura de valores y símbolos de prestigio
social, hábitos de consumo, relaciones políticas).
Las condiciones naturales determinan las actividades ecológicamente
factibles. El clima, por ejemplo, afecta el comportamiento fisiológico de los
animales y el crecimiento de las plantas; ciertas razas de alto potencial
lechero no se adaptan bien a climas tropicales con altos niveles de radiación
solar y elevada humedad relativa, lo que afecta negativamente no sólo su
productividad sino la misma viabilidad de estos animales.
El estado del conocimiento y la información sobre las técnicas de producción
agrícola
y pecuaria no sólo determina
las alternativas
técnicas
(combinaciones de insumos y formas de usarlos) utilizables en una actividad
determinada, sino que delimita las actividades productivas que son viables
y factibles desde el punto de vista ecológico y económico y, por tanto, el
grado en que éstas compiten por el uso del espacio y los recursos
disponibles en una localidad o región determinada.
El contexto institucional – particularmente la estructura de tenencia de la
tierra, el tamaño de las fincas, la presencia de servicios de extensión y crédito,
el régimen tributario – ejerce una influencia considerable sobre las decisiones
de organización técnico-económica de las fincas y define, en buena parte, las
actividades productivas y su grado de intensidad (fincas pequeñas tienden a
ser explotadas en forma bastante intensiva mientras que las de gran tamaño
adoptan sistemas extensivos de producción).
El medio ambiente económico propiamente dicho – infraestructura económica,
dimensiones y dinámica de los mercados de insumos y productos, presencia
de industrias de transformación- no sólo condiciona el tipo de insumos que
pueden utilizarse sino también los productos económicamente viables. Las
relaciones de precios entre insumos pueden afectar la combinación que se
emplee en el proceso de producción; las relaciones de precios entre
productos pueden influir en el tipo de producto o la mezcla de productos; la
intensidad de uso de los insumos también depende, en buena parte, de las
relaciones de precios entre insumos y productos a nivel de la finca.
Finalmente, el medio ambiente sociocultural influye considerablemente en las
características que adoptan las unidades de producción en la agricultura y la
ganadería. Los símbolos de valoración, de status y de prestigio social
determinan comportamientos y decisiones tecnológicas que escapan a los
dictámenes de una supuesta racionalidad maximizadora y a la optimización
de los abalances económicos. Muchas veces la propiedad y la tenencia de la
tierra obedecen
a consideraciones
de poder
y status, esto es, al
reconocimiento social derivado de su posesión, antes que a razones
económicas. Algunas formas de organización técnica de las explotaciones
no son rentables desde un punto de vista económico, pero dan un prestigio y
un status que satisfacen necesidades culturales de sus titulares y refuerzan
sus posiciones en la estructura social de la cual forman parte.
Las propiedades individuales de lo que podríamos denominar el sistema finca
y la forma como se relacionan e interactúan constituyen el otro conjunto de
determinantes de los patrones de organización de la producción agropecuaria.
Estas se establecen a partir de los siguientes componentes: la cantidad y
calidad de los recursos naturales, particularmente suelos (fertilidad, relieve) y
aguas; la disponibilidad y facilidades de acceso a los mercados de insumos y
productos (tanto de elementos materiales como de información) y las
motivaciones del productor o propietario.
Las propiedades específicas de cada unidad de producción derivadas de la
combinación de estos componentes
individuales están estrechamente
asociadas a la diversidad y heterogeneidad de las estructuras de organización
de la producción
agrícola, incluso dentro de contextos
ambientales
relativamente homogéneos. Estas, además, determinan las posibilidades
individuales de asimilar los cambios en el medio ambiente económico,
institucional y sociocultural y, en consecuencia, la dinámica de transformación
o de conservación de sus propiedades fundamentales.
Las propiedades del medio ambiente, las condiciones individuales y el
sistema finca propiamente dicho establecen sistemas de relaciones e
influencias recíprocas que lugar a procesos de cambio y dinámicas de
transformación regional de carácter permanente. De hecho, el funcionamiento
de la unidad de producción puede alterar el estado de los componentes y
sus relaciones fundamentales, no sólo a nivel individual sino también a nivel
del contexto ambiental.
La acumulación de capital (en forma de más y mejores medios de
producción, mejoras incorporadas a la tierra), de conocimientos tecnológicos
y de relaciones comerciales e institucionales modifica con mayor o menor
intensidad la situación relativa de las unidades en cuanto a la disponibilidad
de medios de producción, el acceso a los mercados de insumos y productos
y hasta sus propias motivaciones. Por otra parte, la extensión y la difusión de
los cambios individuales van acumulando
condiciones que provocan
transformaciones fundamentales en el ambiente institucional, en la estructura
y dimensión de los mercados y en la tecnología disponible.
Mientras que el medio ambiente natural, económico y sociocultural no sufra
cambios significativos, los sistemas de producción agrícolas y pecuarios
tienden a conservar aquellos componentes y conexiones determinados por
las condiciones medioambientales. Se configuran así situaciones de
estabilidad de los sistemas de producción que no son estados de equilibrio o
de total ausencia de cambios en el funcionamiento de la explotación sino
situaciones de invariabilidad o permanencia de sus componentes y conexiones
fundamentales, valga decir, estructurales.
Por lo general, aun en situaciones de estabilidad, los sistemas de producción
agrícolas y pecuarios experimentan procesos evolutivos y modificaciones que
no alteran su estructura fundamental pro que pueden dar lugar a cambios
importantes en los componentes y las relaciones secundarias. Por ejemplo, el
ajuste de las dosis y las épocas de aplicación
de fertilizantes, el
perfeccionamiento de las prácticas de manejo de los pastos introducidos y el
balanceo del contenido de minerales en las sales no incorporan nuevos
componentes ni afectan las relaciones fundamentales de las estructura
tecnológica de la explotación, pero sí mejoran la eficiencia del sistema. En este
sentido es más apropiado considerar la estabilidad de los sistemas de
producción como situaciones de estabilidad dinámica.
La disposición al cambio, que caracteriza a una sistema de producción o a
una finca cualquiera en ausencia de modificaciones fundamentales en el
contexto donde se ubica, depende principalmente de su propia estructura. Así,
la evolución de los sistemas agrarios, dentro de los dominios de estabilidad
dinámica, es un proceso esencialmente auto determinado, cuyos alcances
están limitados a procesos de desarrollo del sistema que no representan
cambios de carácter estructural.
Las transformaciones fundamentales de los sistemas de producción –que en
sentido estricto implican la transformación de un sistema en otro y, por tanto,
la modificación de sus componentes y su estructura- están determinadas por
la interacción de elementos y procesos autodeterminados y la transformación
de elementos y procesos de determinación externa, esto es, los que
dependen del medio ambiente. En otras palabras, por las características de las
unidades de producción y la forma como éstas asimilan las transformaciones
fundamentales en el medio ambiente.
Conviene, entonces, diferenciar
claramente entre cambio estructural
(transformación del sistema en otro) y desarrollo del sistema (cambios que no
afectan los componente ni las relaciones fundamentales y, por lo tanto, no
alteran sus propiedades emergentes).
Una consecuencia de este enfoque es que, dado un contexto económico y
socioinstitucional, los diferentes sistemas de producción no representan
conjuntos de opciones o alternativas factibles y viables de organización
técnico-económica entre las que pueda elegir el empresario. En la práctica, en
un momento y lugar determinados, las alternativas no se presentan entre
pastos cultivados y sabana natural, entre pastoreo abierto y rotación de
potreros, entre pastoreo y estabulación. Las alternativas son, más bien, entre
diferentes especies y variedades de forraje y formas de manejo; entre
sistemas de rotación de potreros; entre materias primas para la elaboración
de raciones alimenticias.
Para identificar y caracterizar los sistemas de producción bovina se pueden
utilizar diferentes procedimientos metodológicos. Uno de ellos consiste en
elaborar modelos teóricos que representen las propiedades y las relaciones
fundamentales que se establecen entre los elementos que integran la unidad
de producción ganadera. Y después, a partir de los modelos resultantes,
clasificar las diferentes formas de organización de la producción observables
en la realidad.
En este estudio adoptamos un método explorativo. No se parte de una idea o
criterio taxonómico predefinido. En vez de ello, consideramos que las
propiedades concretas de organización y funcionamiento de las fincas
ganaderas están determinadas simultáneamente por las características
individuales de la unidad de producción y las de su entorno.
Así, clasificar los sistemas de producción consiste en agrupar fincas que
comparten
ambientes similares (con respecto a los componentes
fundamentales, como la infraestructura económica, la tenencia de la tierra, el
tamaño de los predios y el desarrollo institucional) y analizar las propiedades
emergentes, es decir, elementos tales como los productos básicos para la
alimentación del ganado, el manejo de los pastos, el manejo de los animales,
la infraestructura y la maquinaria.
Con base en estos criterios se definieron varios sistemas de producción que
tienen en cuenta las condiciones imperantes en la América tropical: sistema
extractivo; sistema de pastoreo extensivo tradicional; sistema de pastoreo
extensivo mejorado; sistema de pastoreo intensivo con suplementación y
sistema de producción en confinamiento.
Cada uno de estos sistemas permite desarrollar una o varias actividades, las
cuales a su vez generan uno o varios productos que lo diferencian. Cuando
se consideran las actividades que se desarrollan en cada sistema y el tipo de
producto que se puede obtener, se llega a los siguientes resultados:
Extractivo.
Pastoreo extensivo de cría.
Pastoreo extensivo tradicional de cría con levante.
Pastoreo extensivo tradicional de cría con doble utilización de la vaca.
Pastoreo extensivo tradicional de ciclo completo.
Pastoreo extensivo mejorado de cría.
Pastoreo extensivo mejorado de doble propósito.
Pastoreo extensivo mejorado de ciclo completo.
Pastoreo extensivo mejorado de leche especializada.
Pastoreo extensivo mejorado de ceba.
Pastoreo intensivo suplementado de doble propósito.
Pastoreo intensivo suplementado de leche especializada.
Pastoreo intensivo suplementado de ceba
Producción de leche en confinamiento.
Producción de ceba en confinamiento.
A continuación se describen las principales características de los sistemas de
producción ganaderos en Colombia.
3. 1 SISTEMA EXTRACTIVO
Condiciones del entorno
Los suelos en donde se desarrolla el sistema extractivo son de muy mala
calidad, poseen altos niveles de aluminio, bajo contenido de bases
intercambiables y son deficientes en fósforo.
La infraestructura de vías es muy escasa en la región; las carreteras con
afirmado son casi inexistentes y, en general, son transitables sólo durante el
verano. En tales circunstancias, las vías fluviales adquieren una gran
importancia.
La tenencia de la tierra es muy precaria, pues al ubicarse en terrenos baldíos
lo que en realidad existe es una ocupación de hecho sin títulos.
Condiciones internas
Las fincas están localizadas en sabanas de muy baja productividad con una
capacidad de carga mínima: se requieren de 2 a 10 hectáreas por animal.
El acceso a ciertos recursos productivos, como el crédito institucional
especializado, es muy difícil pues no se dispone de garantías hipotecarias, ya
que la tierra no es considerada como tal por tratarse de baldíos.
Los bienes de consumo, incluida la mayor parte de los alimentos, deben ser
adquiridos en mercados alejados situados en las pocas cabeceras
municipales que poseen cierto nivel de desarrollo comercial.
El sistema extractivo es practicado por productores con mentalidad tradicional
que buscan reducir sus gastos en todo lo posible, dejando que los animales
crezcan libremente, en forma natural, dentro del ecosistema.
Parámetros Productivos
Producto: Machos de 44 a 45 meses, vacas de despaje con peso máximo de
300 Kg.
Natalidad sobre vacas: 43%
Mortalidad de terneros: 10%
Mortalidad de adultos: 4%
Capacidad de carga: 0.1 UGG/ha
Actividades
El sistema extractivo sólo permite una actividad, la cría con levante, en donde
los machos se desarrollan hasta alcanzar un peso que permita llevarlos,
caminando o hacinados en barcos remolcadores, a los cebaderos localizados
en el piedemonte o a las áreas sembradas con pastos mejorados de la
altillanura próxima. Los descartes –vacas viejas, toros y algunas novillas- se
venden para sacrificio, con pesos muy inferiores a los obtenidos en el resto
de los sistemas a una edad mucho más avanzada.
Por su calidad, los precios de estos productos son mucho más bajos que el
promedio nacional.
La actividad extractiva es la más atrasada de toda la estructura ganadera
colombiana y, en gran medida, su extensividad es responsable de los bajos
promedios de productividad nacionales.
Transformación del sistema
Los cambios en el ambiente condicionan o posibilitan el cambio de los
sistemas y su transformación. De acuerdo con información proporcionada por
investigadores y expertos, la evolución del sistema de producción extractivo y
las condiciones para su ruptura y transformación se pueden esquematizar
como sigue:
Límites del sistema
La producción potencial está limitada por las condiciones naturales –límite
biológico- puesto que no hay un control humano consistente sobre esos
procesos.
Cambios en los componentes
1. Integración de la región al mercado; éste presiona para que el sistema
se modifique.
2. La tierra comienza a tener precio.
Cambios operados
Separación de levantes.
Construcción cercas.
Uso selectivo de pastos naturales.
Posible uso de pastos introducidos en áreas pequeñas de las fincas.
Consecuencias
Aumenta la producción cuantitativa y cualitativamente.
3.2 SISTEMA DE PASTOREO EXTENSIVO TRADICIONAL
Condiciones del entorno
Aunque los suelos donde se encuentran los sistemas de pastoreo excesivo
tradicional (cría, cría con levante, doble utilización de la vaca y ciclo completo)
no son del todo homogéneos, muchos son de mala calidad, un tanto similares
a aquéllos en donde se desarrolla el sistema extractivo, es decir, suelos
ácidos, con alto contenido de aluminio y pobres en fósforo.
En comparación con el pésimo sistema vial de los Llanos Orientales (sistema
extractivo), en algunas regiones la infraestructura vial está bastante más
desarrollada y se encuentran carreteras con muy buen afirmado, utilizables
durante todo el año; también existen zonas con pésimos caminos de
penetración, intransitables durante el invierno.
Los servicios públicos son escasos y deficientes. La cobertura de los
centros de salud es muy baja y existen altos índices de morbilidad infantil, en
especial
por enfermedades
gastrointestinales
y por enfermedades
endémicas. Existe un notorio déficit de escuelas y aún mayor de maestros
rurales.
En las zonas más apartadas del sistema de pastoreo extensivo tradicional
aún la precariedad de la tenencia pero, en general, existen procesos de
titulación.
En estas regiones, también de manera diferenciada, la presencia institucional,
a través de entidades como el ICA, la Caja Agraria, el Sena y el Incora, es un
poco mayor que en los Llanos. De todas maneras, es una presencia incipiente,
con extensas áreas desatendidas y grandes falencias en la prestación de
servicios primarios por la precariedad de los recursos disponibles.
Condiciones internas
En los sistemas de pastoreo extensivo tradicional, los suelos están cubiertos
por praderas naturales, o por variedades de pastos introducidas, de baja
productividad.
La inversión diferente de ganado y tierra es muy baja y normalmente se
limita a cercar los terrenos, levantar una vivienda siguiendo las costumbres
regionales y construir un corral en donde se trabajan los ganados y se ordeñan
las vacas.
Por la disponibilidad demás y mejores vías transitables así como por la
mayor densidad de población, se presenta un notable incremento del
intercambio comercial.
Muchos alimentos
son producidos localmente, pues
existe un nivel
relativamente alto de agricultura de subsistencia entre los parceleros
arrendatarios, quienes después de extraer una o dos cosechas de maíz,
ñame o yuca deben devolver las parcelas convertidas en potreros.
La supervivencia de estos sistemas de producción en las áreas con sistemas
de comunicación relativamente buenos se puede explicar por la escasez de
los recursos necesarios para transformar áreas relativamente grandes que
requieren gran disponibilidad de capital para adecuar tierras y comprar
ganado de mejor calidad.
Características del sistema productivo
La nutrición en las diferentes actividades del sistema de pastoreo extensivo
tradicional está basada exclusivamente en el pastoreo libre, en gramas
naturales o pasturas introducidas hace tiempo cuya productividad depende
únicamente de la calidad de la tierra.
Las prácticas de manejo y sostenimiento de praderas se reducen al control
periódico de las malezas o a la quema estacional para la renovación de los
potreros.
Parámetros Productivos
Levante: animales de 30 meses, machos cebados
Ciclo completo: machos cebados de 42 mese y 410 kilos; vacas de despaje de
320 Kg; leche y queso.
Natalidad de vacas: 54.0%
Mortalidad de terneros: 8.0%
Mortalidad de adultos: 3.0%
Capacidad de carga: 1.0 UGG/Ha.
Actividades
A diferencia del sistema anterior, que sólo permite un tipo de actividad
ganadera, en este sistema se presentan varias posibilidades, de acuerdo con
la ubicación en términos de mercado, la calidad de los terrenos y la función
objetivo del productor. A saber:
1. Cría tradicional
Constituida por explotaciones con un hato compuesto básicamente por
hembras reproductoras, cuyas crías son ofrecidas al mercado a la edad del
destete, que fluctúa entre los 9 y los 14 meses.
Ocupa las áreas más alejadas de los mercados o caracterizadas por sus
difíciles condiciones de topografía y fertilidad de los suelos. El producto
principal, machos destetos, debe venderse en una fase temprana debido a la
carencia de recursos para continuar el proceso de levante y ceba o a la
insuficiente disponibilidad de tierra para sostener animales en proceso de
crecimiento; por tanto, el ingreso es bajo en comparación con otro tipo de
actividades y muy sensible a los ciclos de precios.
2. Cría con levante
Cuando existe la posibilidad de continuar el proceso de crecimiento de los
terneros, hasta que alcancen una edad u un peso que permita concluir su
ceba en un tiempo corto, se presenta la cría con levante, actividad confinada
también a las áreas geográficamente más apartadas y difíciles de los sistemas
de pastoreo extensivo tradicional.
El tipo de manejo que se ha dado tradicionalmente a la actividad del levante
consiste en enviar a los terneros destetos a las peores áreas de la finca,
donde deben sobrevivir en condiciones de escasa disponibilidad de alimento
e incluso de agua, de modo que el peso necesario para iniciar la ceba se
alcanza dos años más tarde, contribuyendo así a aumentar el promedio
nacional de edad al sacrificio.
3. Cría con doble utilización de la vaca
A pesar de que es una actividad tan antigua como las demás, el alto grado de
integración vial que se alcanzó en país a finales de la década de los setenta
ha permitido que se ubique como la principal actividad de toda la ganadería
colombiana, cuando se considera en términos de su participación en el
inventario.
Esta actividad se diferencia de la cría y de la cría con levante en que un
porcentaje de las vacas se ordeña para vender leche fresca o queso,
dependiendo del grado de integración al mercado.
De acuerdo con los reportes obtenidos, el número de vacas ordeñadas es
inversamente proporcional al tamaño de la explotación, esto es, las fincas
pequeñas –cuyo peso específico dentro del total es bastante importante en
número de explotaciones aunque no en superficie total- ordeñan casi todas
las vacas que paren, mientras que las fincas grandes conservan su
orientación hacia la cría tradicional y sólo ordeñan un pequeño porcentaje de
las vacas paridas, aprovechando para ello el personal disponible de la finca.
El crecimiento de la demanda de leche en los últimos años ha contribuido a
consolidar esta actividad dentro del sistema de pastoreo extensivo tradicional,
convirtiéndola en el mayor proveedor de terneros para los sistemas de ceba
y de buena parte de la leche ofrecida en el mercado.
En este sistema se produce casi la totalidad del queso costeño, salado o
picado.
4. Ciclo completo
El ciclo completo tradicional es consecuencia de una mayor disponibilidad de
recursos, que permite concluir la ceba, o del relativo aislamiento de las
explotaciones, que hace necesario llevar los animales a un eso cercano al de
sacrificio - como mecanismo para valorizarlos- puesto que el costo de
transporte hace difícil venderlos a edades menores.
Transformación del sistema
En buena medida, los cambios operados frente al anterior sistema obedecen
aun precio de la tierra más alto, debido al mejoramiento del sistema vial, al
menor grado de aislamiento - que posibilita incluso la producción de queso- y
a la consiguiente conveniencia de introducir mejoras que eleven la
producción por unidad de superficie.
En la medida en que las vías van acercando ciertas áreas de ganadería
extensiva y tradicional, comienza el tránsito hacia el sistema extensivo
mejorado y a presentarse los siguientes cambios:
Límites del sistema
El valor del producto del sistema extensivo tradicional (Animales viejos flacos o
queso), medido por unidad de tiempo y de superficie, no corresponde al valor
de la tierra. Las condiciones viales permiten comercializar un producto de
mejor calidad.
Cambios en los componentes
Se hacen factibles y viables otras producciones que compiten por el uso de la
tierra.
Aumenta considerablemente la renta del suelo en la región.
Cambios operados
Incorporación de animales más eficientes
Introducción e intensificación de pastos
Subdivisión de potreros
Suplementación con minerales
Control de elementos reproductivos
Separación de animales por grupos reproductivos
Consecuencias
El producto cambia a animales de ceba, terneros destetos de 8 a 10 meses o
leche.
3.3 SISTEMA DE PASTOREO EXTENSIVO MEJORADO
Condiciones del entorno
Los sistemas de pastoreo extensivo mejorado (cría, doble propósito, ceba,
leche especializada y ciclo completo) se encuentran en zonas con suelos muy
superiores a los de los sistemas anteriores, donde los pastos entran a
competir con algunos cultivos comerciales por la ocupación de la tierra.
Estas regiones se encuentran
cruzadas
por carreteras nacionales
pavimentadas o por vías departamentales y locales con buen afirmado y
mantenimiento.
Existe una antigua tradición de propiedad y ésta es claramente legal, y la
presencia institucional es notoria pues, en general, se encuentran todas o
algunas de las siguientes entidades: Ica, Sena, Incora, Secretarías de
Agricultura, caja agraria e Himat, entre cuyas actividades se cuenta la de
prestar servicios especializados a los productores del agro.
Condiciones internas
En las fincas donde se desarrollan actividades explotadas bajo el sistema de
pastoreo extensivo mejorado, por ubicarse en tierras con posibilidad de sus
agrícola y al ser una alternativa económica viable, el suelo se encuentra
cubierto de praderas mejoradas con la incorporación de gramíneas de alta
productividad sembradas en épocas recientes, o de productividad mejorada
que datan de épocas más lejanas.
La red de mercados intermedios, tanto de insumos necesarios para la
producción como de productos finales, es bastante densa y la influencia de
los grandes centros urbanos se manifiesta en la formación de los precios de
unos y otros.
Sin lugar a dudas, entre los productores de este sistema se encuentran
desarrolladas ya actitudes características de una racionalidad empresarial. La
búsqueda de aumentos de productividad de las praderas, mediante el manejo
de potreros, y de los animales, a través del mejoramiento genético y de la
nutrición,
revelan un productor que busca aumentar sus utilidades
introduciendo mejoras en la producción.
Características del sistema productivo
Los animales se alimentan mediante pastoreo con base en especies
mejoradas de gramíneas, generalmente asociadas con leguminosas nativas, y,
en ocasiones, con variedades introducidas. A los animales de ceba y a las
vacas en ordeño en el doble propósito se les da suplementos, mientras que a
las vacas de las lecherías especializadas se les suministra pequeñas raciones
de alimentos balanceados.
En este sistema se efectúan prácticas de manejo y sostenimiento de potreros
mediante el control anual de malezas y la fertilización selectiva de las mejores
áreas de la finca; esto se hace, principalmente, mediante la aplicación, anual o
cada 2 años de urea, y en ocasiones, recurriendo adicionalmente al uso de
fertilizantes compuestos.
Parámetros productivos
Cría: terneros de 180 a 200 Kilos y 12 meses
Ceba: machos cebados de 420 kilos y 32 meses; vacas de descarte de 340 a
350 Kilos
Natalidad de vacas: 66% en cría
Ciclo completo: 69% en doble propósito, 721% leche
Mortalidad de terneros: 7%
Mortalidad de adultos: 2%
Capacidad de carga: 1.2 UGG/Ha.
Actividades
En el sistema de pastoreo extensivo mejorado se desarrollan, como actividades
predominantes, las siguientes; cría, doble propósito, ciclo completo, leche
especializada y ceba.
Aquí se presenta una diferencia notable con los anteriores pues aparecen tres
actividades nuevas: el doble propósito, la ceba en zonas cálidas y la lechería
especializada en áreas frías; adicionalmente, el levante desaparece como
actividad específica, debido a que sus características no son compatibles con
el nivel productivo de este sistema.
1. Cría
A medida que se identifica la actividad de ceba, requiere del suministro de
animales jóvenes con los que se pueda iniciar el proceso de engorde sin pasar
por el período de levante que tradicionalmente se había realizado en el
pasado, lo cual obliga a la producción de destetos de 160 o más Kilogramos,
aptos para hacer el tránsito hacia el cebadero. Asimismo, la producción de
pie de cría puro –machos y hembras- para las fincas productoras de carne,
e incluso para el doble propósito, debe hacerse en condiciones mejores de las
que imperan en la cría tradicional, por lo cual se presenta en un sistema
relativamente avanzado como el de pastoreo mejorado.
Esta modalidad se localiza en las áreas periféricas de los cebaderos, y
normalmente ocupa tierras cuya aptitud no es la ceba.
Sin embargo, la cría destinada al suministro de reproductores puros se localiza
en áreas de excelente calidad y muy cercanas a los centros urbanos, debido
a que el valor de los pocos animales producidos excede notoriamente el de
los productos cebados.
2. Doble propósito
A diferencia de la cría con doble utilización, esta actividad se orienta a la
producción de leche, apareando las vacas con reproductores de razas
lecheras y suministrando mejor alimentación, consecuencia de un manejo
cuidadoso de las praderas; sin perder de vista la producción de destetos con
un peso que permita incorporarlos a un proceso de ceba de mediana
duración.
Los costos del doble propósito en sistemas de pastoreo mejorado están
cubiertos básicamente por la producción de carne, mientras que la leche
genera casi la totalidad del excedente económico y produce ingresos
monetarios durante todo el año.
3. Ciclo completo
La integración completa de todas las actividades en las cuales se puede
separar la producción de carne de una sola explotación requiere disponer de
grandes extensiones de tierra, con características edafológicas variadas que
incluyan áreas planas y bajas propias para la ceba y áreas pendientes con
suelos de regular calidad propias para la cría y el levante.
Para realizar todo el proceso, e incluso adquirir gran parte de los terneros que
se ceban en estas fincas, se debe disponer de grandes recursos financieros;
por ello, el ciclo completo mejorado es una actividad exclusiva de los grandes
propietarios. Sin embargo, su importancia relativa ha venido decreciendo con
el paso del tiempo, debido a la participación por herencia y a los procesos de
reforma agraria.
4. Lechería especializada
A mediados de la década de los treinta se empezó a imponer, en las
ganaderías de los altiplanos y de las zonas montañosas, el ordeño sin ternero
en hatos de ganado especializado en la producción de leche, proveniente
principalmente de Europa y los Estados Unidos. Inicialmente, este proceso se
consolido en las ganaderías de las áreas cercanas a las grandes ciudades
pero posteriormente, en la medida que aumentó la demanda por el producto,
se extendió a regiones que se consideraban marginales.
En este sistema, la producción de leche se realiza principalmente por
campesinos con explotaciones medianas, y en algunos casos en fincas de
gran tamaño, utilizando sistemas de manejo de las praderas que incluyen la
rotación con cultivos como mecanismo de renovación.
5. Ceba
Actividad característica de grandes propietarios por la necesidad de
cuantiosos recursos de capital para comprar animales flacos aptos para
engorde. Este renglón ocupa las mejores áreas de las regiones cálidas, en
las vegas de los ríos y quebradas, con la presencia de pasturas de buena
palatabilidad y rendimiento.
La ceba, bien sea de novillos o de vacas, es la actividad reproductora de carne
con mayor rotación del capital invertido debido a que, dependiendo del tipo de
animal, el proceso dura entre cuatro y doce meses, período de maduración
de la inversión bastante inferior al de la actividad de cría, que requiere en
promedio cuatro años. La actividad cebadora ocupa tierras de alto potencial
agrícola, por lo cual el conflicto entre agricultura moderna y ganadería
comienza en estos terrenos, como ocurrió en el Valle del Cauca y
recientemente en el Alto Magdalena y en el Cesar.
Transformación del sistema
Por influencia de la urbanización, la mayoría de los empresarios del sistema
tecnifican progresivamente sus explotaciones, comenzando
por el
mejoramiento de las praderas, introduciendo cambios significativos en el
manejo, construyendo instalaciones e incorporando importantes controles en
aspectos genéticos y reproductivos, así como conceptos modernos en la
administración. Por esto, en las áreas cercanas a las ciudades importantes,
con suelos aptos para la producción agrícola moderna, los sistemas
extensivos mejorados están cambiando hacia formas de producción más
intensivas, iniciados en una nueva serie de innovaciones más cualitativas, a
saber:
Límites del sistema
El pastoreo impone límites incompatibles con un elevado nivel de renta
La extensión promedio de la tierra no permite que el ganado se mantenga
exclusivamente en pastoreo (saturación de la finca).
Cambios en los componentes
La urbanización influye en la formación de la renta del patrón.
Competencia de cultivos muy intensivos (café, caña, frutales).
Gran aumento de la renta.
Surgimiento de nuevas formas de alimentación con base en residuos
productos de cosecha.
y
Cambios operados
Introducción de la Suplementación alimenticia, la cual disminuye el tiempo
de ceba e incrementa la producción de leche por animal.
Se requiere modificar por completo el sistema para controlar rigurosamente
el proceso productivo.
Consecuencias
Desaparece la factibilidad y la viabilidad de producir queso y crías para carne.
Desaparece el pastoreo como única forma de alimentación.
Se empieza a “llevar” el alimento al animal.
3.4 SISTEMA DE PASTOREO INTENSIVO SUPLEMENTADO
Condiciones del entorno
Los sistemas de pastoreo intensivo suplementado se desarrollan en áreas
cercanas a los centros urbanos más importantes, y aunque en muchos casos
utilizan suelos aptos para productos agrícolas de alto valor unitario (café,
caña de azúcar, flores, frutales o actividades intensivas en el uso de capital
como la avicultura) no se requiere necesariamente de una óptima calidad de
los mismo, pues las deficiencias que presenten pueden superarse mediante
la acción dirigida y deliberada del hombre.
Los servicios públicos son completos a nivel municipal; a nivel rural se
encuentran bastante desarrollados
los acueductos
veredales,
la
electrificación y la telefonía rural. El transporte público es eficiente y en
algunas áreas a aparecer mercados móviles que llegan en furgones hasta
las fincas.
Diminuye notoriamente la concentración de la tierra y se genera una fuerte
presión urbana para desarrollar grandes proyectos recreacionales o montar
pequeñas fincas de veraneo; esto impulsa la subdivisión de los predios y la
modernización de lasa explotaciones.
Las zonas en donde se practica el pastoreo intensivo suplementado y los
productores que lo practican están fuertemente influidos por la expansión
urbana. La vecindad de las ciudades y el desarrollo de los medios de
comunicación han ejercido un profundo impacto sobre la población rural,
modificando sus patrones de consumo y sus valores, remplazándolos por los
que imperan en las ciudades.
Condiciones internas
Existe una alta disponibilidad de maquinaria y equipos (tractores con todos
sus aparejos cuando el tamaño lo justifica, equipo de ordeño, henificadora,
equipos de riego, etcétera); en los casos de leche y doble propósito, los
animales están semiestabulados; se hacen todas las obras de adecuación de
terrenos que sean necesarios.
Como las fincas en donde se practica este sistema se encuentra en las
inmediaciones de grandes y medianos centros urbanos, y al interior de
regiones productoras de cultivos comerciales (caña de azúcar, arroz, sorgo,
algodón), los
residuos o subproductores de esas cosechas quedan
disponibles como alternativa económicamente viable para ser utilizados
como Suplementación animal.
El productor debe aumentar significativamente la producción de carne y
leche por hectárea; esto exige optimizar la nutrición y disponer de animales
que estén en capacidad de lograr altos niveles de eficiencia en la
transformación de los alimentos que se les son suministrados.
Características del sistema productivo
La introducción de la Suplementación alimenticia para disminuir el tiempo de
ceba e incrementar la producción de leche es probablemente la característica
fundamental de este sistema.
El manejo de los pastos incluye el uso de riego, la fertilización intensiva (con
fertilizantes químicos o abono orgánico) y el control estricto de malezas, tanto
en los pastos de corte como en los potreros.
Parámetros productivos
Doble propósito: terneros de 1 año y 170 Kg., vacas de 400 Kg.
Leche: 1.829 1/año por cabeza en hato y vacas de descarte de 440 Kg.
Ceba: machos entran de 12 meses y 200 Kg. y salen de 24 meses y 420 Kg.
Natalidad sobre vacas: 71% en doble propósito, 75% en leche
Mortalidad de terneros : 4% en doble propósito, 3% en adultos
Capacidad de carga: 3.0 a 3.5% UGG/ha.
Actividades
El sistema de pastoreo intensivo suplementado elimina la actividad de ciclo
completo por la imposibilidad de disponer de las grandes extensiones
necesarias parea el desarrollo de la misma.
Igualmente, introduce cambios importantes en las actividades predominantes,
a saber:
1. Lechería especializada
Localizadas en las áreas cercanas a las ciudades más importantes del país
Bogotá, Medellín, Cali, Bucaramanga y Barranquilla, las explotaciones de
pastoreo intensivo suplementado presentan unos rendimientos en
producción de leche bastante satisfactorios, y el proceso de alimentación
utilizado aún permite aumentarlos incorporando los resultados de la
investigación desarrollada por instituciones como el Ica.
El alto precio de la tierra que ocupan estas explotaciones lecheras, por su
localización en áreas urbanas, ha venido ocasionando el fraccionamiento
paulatino de los terneros y ha impulsado la intensificación sistemática de la
explotación ganadera.
2. Doble propósito
En las regiones donde la ganadería fue desplazada por actividades agrícolas
hacia áreas marginales en épocas recientes, como el Valle del Cauca, Tolima,
pequeñas áreas cercanas a Valledupar, Montería, Cartagena, Barranquilla y la
zona cafetera, se ha venido configurando una explotación orientada hacia el
doble propósito mediante el uso intensivo de praderas y la suplementación
con residuos de cosecha, tamos de arroz y sorgo, melaza – urea, bloques
multinutricionales y otras fuentes.
El proceso no se ha llevado hacia la lechería especializada, en parte por las
dificultades climáticas pero también por la demanda de terneros que se
producen en las fincas cercanas.
3. Ceba
El desplazamiento de la ganadería por la agricultura, y su retorno en la
medida que el desarrollo agrícola lo permite y exige, también ha venido
consolidando la ubicación de cebaderos en áreas costosas, debido a la
disponibilidad de construcciones, maquinaria y equipo, residuos de cosecha y
productos agroindustriales que abrevian el tiempo necesario para que los
animales alcancen el peso de sacrificio.
Así mismo, el desplazamiento de las ganaderías de ceba en áreas de intenso
conflicto social, como consecuencia de la extorsión y el secuestro, ha obligado
a que algunos propietarios adquieran predios de menor tamaño ubicados
cerca de los centros de consumo, y los exploten en forma intensiva mediante la
complementación de la alimentación basada en pasturas con productos como
melaza urea, torta y cascarilla de algodón, torta de palmiste y otras mezclas.
Transformación del sistema
Límites del sistema
Agotamiento relativo del espacio abierto como hábitat para mantener el
ganado.
Límites de carácter biológico
impuestos por exigencias
económicas
(producción y reproducción). Esto se expresa en una muy alta presión social
sobre la tierra.
Cambios en los componentes
Consolidación de la urbanización como determinante de la renta patrón, a
través del uso del suelo en actividades altamente intensivas, como flores,
horticultura, avicultura.
La agricultura permitió una formación de capital, en la zona y en las fincas,
utilizable en ganadería intensiva.
Cambios operados
Al animal se le suministran todos sus requerimientos de nutrición, sanidad y
ambiente. El animal pasa a depender totalmente del hombre.
Consecuencias
Supresión del pastoreo y confinamiento total de los animales en condiciones
de ambiente controlado.
Sólo es posible producir leche o animales cebados.
Presupone la articulación con sistemas extensivos para la cría de animales
que van a ser cebados (materia prima).
3.5 SISTEMA DE CONFINAMIENTO
La alimentación de los animales que se estabulan para ser cebados está
constituida por subproductos de cosechas y, en menor medida, por alimentos
balanceados; para la producción de leche en confinamiento, las vacas se
alimentan
con pasto de corte
picado
y alimentos
concentrados,
suplementados en algunos casos con gallinaza o subproductos de cosecha.
Estas actividades se pueden desarrollar entonces sin disponer de áreas
diferentes a aquellas en donde se encuentran los establos; aunque en la
práctica, la gran mayoría funciona al interior de una empresa agrícola que se
encuentra en la periferia de centros urbanos intermedios o grandes, como en
el caso del pastoreo intensivo suplementado.
Con frecuencia, el sistema en confinamiento se encuentra dentro de grados
empresas agrícolas, razón por la cual se dispone, más que en cualquier otro
sistema, de grandes obras que inicialmente fueron construidas con otros fines
(grandes bodegas o antiguos molinos convertidos en establos), y de la más
completa maquinaria y equipos cuya función principal está en la agricultura,
pero que se pueden utilizar marginalmente en la explotación pecuaria.
Características del sistema productivo
La característica central del sistema es la total estabulación de los animales,
en instalaciones construidas para tal fin o en antiguas construcciones
readecuadas. Excepcionalmente, los animales disponen de una pequeña
área adicional para hacer ejercicio o descansar.
El sistema en confinamiento es incipiente y con relativamente pocas las
explotaciones en donde se práctica; las dietas suministradas a los animales
son casi tantas como el número de fincas que utilizan el sistema.
Parámetros productivos
Ceba: los animales entran de 200 Kilos y 12 meses, y salen a los 24 meses
pesando 420 Kilos en promedio.
Leche: 2516 1/año por cabeza en hato y vacas de descarte de 440 Kg.
Natalidad sobre vacas: 83%
Mortalidad en terneros: 11%
Mortalidad en adultos: 2% en leche y 1% en ceba
Actividades
Las únicas
actividades
bovinas
susceptibles de ser explotadas en
confinamiento son la lechería y la ceba de animales jóvenes; cualquier otra es
incompatible con la inversión en infraestructura requerida para iniciar el
proceso.
Descargar