Publicidad Comercial Directa en Buzones

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Ordenanza Municipal sobre “Publicidad Comercial Directa en Buzones"
EXPOSICIÓN DE MOTIVOS.
El encuentro de diferentes preceptos constitucionales acaba por perfilar el encuadre de
una economía de mercado, como la española, como la española, en el estado social. En
el artículo 38 se reconoce la libertad de empresa en el marco de la economía de
mercado. El artículo 38 se reconoce la libertad de empresa en el marco de la economía
de mercado. El artículo 45 de la Constitución Española recoge el derecho de todos los
españoles a disfrutar de un medio ambiente adecuado para su persona así como el deber
de conservarlo. También dispone que "los poderes públicos velarán por la utilización
racional de todos los recursos naturales, con el fin de proteger y mejorar la calidad de
vida y defender y restaurar el medio ambiente". Continúa dicha disposición
contemplando que "para quienes violen lo dispuesto en el apartado anterior, en los
términos que la ley fije se establecerán sanciones penales o, en caso, administrativas, así
como la obligación de reparar el daño causado". Por último, el artículo 128 dispone que
"toda la riqueza del país en sus distintas forma y sea cual fuere su titularidad, está
subordinada al interés general.
Al hilo de lo que anteceda, la presente Ordenanza trata de equilibrar diversos intereses
en juego. Por un lado el de las empresas que legítimamente tratan de ofertar sus
productos y servicios utilizando todos los medios publicitarios a su alcance. Por otro, el
de las empresas publicitarias y distribuidoras de publicidad a desarrollarse en el ámbito
de las funciones que les son propias, esto es, el del reparto de publicidad en buzones y,
por último, de especial trascendencia, el de los ciudadanos a desenvolverse en un
medioambiente digno y adecuado.
Es por todo ello, y con el objeto de armonizar dichas pretensiones, que esta
Administración Local ha elaborado la disposición general que nos ocupa. En ella se
trata, por una parte, de evitar que la proliferación incontrolada de este medio
publicitario pueda suponer una molestia para los administrados, ya no sólo al recibirla
en sus hogares de manera desproporcionada e indiscriminadamente y sin su
consentimiento, sino también por las consecuencias que dicha actividad acarrea al resto
de los ciudadanos al tener que soportar, muchas de las veces, el penoso espectáculo de
observar cómo el suelo, tanto el perteneciente al dominio público como el de las zonas
comunes de las comunidades de propietarios, aparece repleto del material que no ocupa.
Por otro lado, la presente norma, intenta conseguir que este tipo de publicidad cumpla
con los requisitos medioambientales que la legislación sectorial contempla en cuanto a
la composición y reciclaje de dicho medio publicitario.
Por último, se recoge una relación de infracciones a la misma y su correspondiente
sanción. Todo ello en consonancia con lo dispuesto en la Ley 30/92 de 26 de
Noviembre, de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas y Procedimiento
Administrativo Común y en el Real Decreto 1.398/1993, de 4 de Agosto, por el que se
aprueba el reglamento del Procedimiento para el Ejercicio de la Potestad Sancionadora.
ARTÍCULO 1º
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La presente Ordenanza Municipal tiene por objeto regular la denominada "Publicidad
Comercial Directa en Buzones" con la finalidad de dignificar el sector, racionalizar la
actividad y reducir las molestias que el "buzoneo" provoca a los ciudadanos.
ARTÍCULO 2º.
Sólo podrán ejercer esta actividad, las empresas de distribución de material publicitario
en buzones que estén legalmente constituidas para esta finalidad, sin perjuicio de la
excepción derivada de la propaganda institucional y electoral.
ARTÍCULO 3º
La publicidad se depositará en el interior de los buzones de los ciudadanos y/o en
aquellos espacios que los vecinos o las comunidades de propietarios hayan dispuesto
para su colocación. Se prohíbe expresamente dejar la publicidad en el suelo de los
vestíbulos de los edificios o viviendas. Igualmente queda prohibido repartir publicidad
en la vía pública, salvo caos muy excepcionales y previa autorización fundamentada.
ARTÍCULO 4º
Todo el material publicitario repartido, sea de las características que fuere, llevará en
lugar visible una identificación de la empresa distribuidora. La ausencia de la
identificación será objeto de una sanción que, en el caso de que el reparto sea realizado
por empresa que no esté legalmente constituida, recaerá sobre la empresa anunciante.
ARTÍCULO 5º
En el supuesto que el material publicitario a distribuir, por imposibilidad técnica y/u
operativa justificada no reúna las condiciones exigidas pro la presente Ordenanza, las
empresas distribuidoras de material publicitario en buzones lo habrán de comunicar por
escrito al Ayuntamiento con la anticipación necesaria y deberán adjuntar un modelo del
material a distribuir.
ARTÍCULO 6º
El incumplimiento de esta Ordenanza, en el sentido de no depositar correctamente los
folletos, detectado por los servicios de inspección de este Ayuntamiento o denunciado
repetidamente por los ciudadanos, será objeto de sanción.
ARTÍCULO 7º
Para garantizar un buen servicio y evitar molestias a los ciudadanos, el material
publicitario objeto de distribución se doblará adecuadamente y se tendrá en cuenta la
medida más habitual de la boca de los buzones.
ARTÍCULO 8º
Considerando que el buzón es un bien privado, las empresas distribuidoras de material
publicitario se deberán abstener de depositar publicidad en aquellos buzones cuyos
propietarios indiquen expresamente la voluntad de no recibirla. Dicha voluntad quedará
plenamente acreditada mediante cualquier tipo de señal que se coloque sobre los
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buzones y que, sin ningún género de dudas, aperciba de la no disposición del titular de
la vivienda a recibir dicha publicidad.
ARTÍCULO 9º
Las empresas de distribución de material publicitario en buzones deberán recomendar a
sus clientes la cantidad de folletos a repartir y la periodicidad, a fin de disminuir el
impacto y garantizarse la eficiencia.
ARTÍCULO 10º
Las empresas de distribución de material publicitario en buzones deberán recomendar a
sus clientes que usen papel reciclable, que no usen papel dorado, que eviten la
plastificación y los folletos satinados, y que favorezcan el uso de tintes ecológicos.
ARTÍCULO 11º
El material publicitario, una vez usado tendrá la consideración de residuo municipal
reciclable. Las empresas de distribución de material publicitario en buzones deberán
aconsejar a sus clientes que coloquen en su publicidad mensajes de educación ambiental
y, muy especialmente, de la necesidad de depositar la publicidad, una vez usada, en los
contenedores especiales de papel ubicados en la ciudad con la finalidad de garantizarse
el reciclaje.
ARTÍCULO 12º
Especialmente, y sin perjuicio de lo previsto en los artículos anteriores, no se permitirán
y constituirán infracción los siguientes actos.
- No encontrase legalmente constituida la empresa distribuidora.
- Dejar la publicidad en el suelo de los vestíbulos de los inmuebles o en lugar diferente
al dispuesto por los vecinos o las comunidades de propietarios.
- El reparto de material publicitario sin identificación de la empresa distribuidora,
excepto en los supuestos expresamente autorizados previstos en la Ordenanza.
- No doblar adecuadamente o colocar correctamente el material publicitario en los
buzones.
- Distribuir publicidad en los buzones de los propietarios que hayan hecho uso de su
derecho voluntario a no recibirla.
- Negarse o resistirse a suministrar datos o a facilitar la información necesaria solicitada
por las autoridades competentes o por sus agentes en el cumplimiento de sus funciones,
y también suministrar información o documentación falsa, inexacta, incompleta o que
induzca a error, implícita o explícitamente.
ARTÍCULO 13.- Concepto de infracción.
Constituyen infracción administrativa de esta Ordenanza las acciones y omisiones que
representen vulneración de sus preceptos, tal y como aparecen tipificadas en los
diferentes artículos de desarrollo.
ARTÍCULO 14.- Responsabilidad.
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Son responsables de las infracciones administrativas las personas físicas y jurídicas que
las cometan a título de autores y coautores.
Esta responsabilidad se podrá extender a aquellas personas que por ley se les atribuye el
deber de prever la infracción administrativa cometida por otros.
De las infracciones relativas a actos sujetos a licencia que se produzcan sin haberla
obtenido previamente, o con incumplimiento de sus condiciones, serán responsables las
personas físicas y jurídicas que sean titulares de la licencia, y si ésta no existiese, la
personal física o jurídica bajo cuya dependencia actúe el autor material de la infracción.
ARTÍCULO 15.- Clasificación de las infracciones y su sanción.
Las infracciones administrativas de esta Ordenanza se clasifican en leves, graves y muy
graves.
Las sanciones derivadas de las infracciones administrativas tendrán la naturaleza de
multa y se impondrán de acuerdo con la siguiente escala:
- Infracciones leves: Hasta 15.000 pesetas.
- Infracciones graves: De 15.001 pesetas hasta 25.000 pesetas.
- Infracciones muy graves: De 25.001 pesetas hasta 50.000 pesetas.
La clasificación de la infracción y la imposición de la sanción se adecuarán a los
hechos, sopesándose los siguientes criterios de aplicación.
- a) La existencia de intencionalidad o reiteración.
- b) La naturaleza de los perjuicios ocasionados.
- c) La reincidencia, por haber cometido en el plazo una o más de una infracción de la
misma naturaleza.
- d) La trascendencia social.
La imposición de las sanciones será compatible con la exigencia al infractor de la
reposición de la situación que haya alterado a su estado originario, así como la
indemnización por los daños y perjuicios causados por los hechos sancionados.
ARTÍCULO 16.- Prescripción y Caducidad.
Las infracciones muy graves prescriben al cabo de dos años, las graves al año y las
leves al cabo de seis meses.
Estos plazos comenzarán a contar a partir del día en que la infracción se haya cometido.
Las sanciones impuestas por faltas muy graves prescribirán al cabo de tres años, las
impuestas por faltas graves a los dos años y las impuestas por faltas leves al año.
Estos plazos comenzarán a contar desde el día siguiente a aquel en que haya adquirido
firmeza en vía administrativa la resolución por la cual se impuso la sanción.
Si transcurridos seis meses desde la iniciación del procedimiento sancionador no
hubiese recaído resolución expresa y definitiva se iniciará el plazo de 30 días para la
caducidad del expediente y el archivo de las actuaciones.
Estos plazos se interrumpirán en los supuestos que el procedimiento se haya paralizado
por alguna causa imputable a los interesados o que los hechos hayan pasado al
jurisdicción penal.
ARTÍCULO 17.- Medidas Cautelares.
Para la incoación del procedimiento sancionador el órgano competente puede adoptar,
mediante resolución motivada, las medidas cautelares de carácter provisional que sean
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necesarias para la buena finalidad del procedimiento, evitando el mantenimiento de los
efectos de la infracción e impulsando las medidas exigidas pro los intereses generales.
En este sentido, podrá acordar la suspensión de las actividades que se realicen sin
licencia y la retirada de objetos, materiales, utensilios o productos con que se estuviese
generando o se hubiese generado la infracción.
Estas medidas podrán adoptarlas la Jefatura de la Policía Local una vez formulada la
preceptiva denuncia y serán mantenidas, modificadas o levantadas por el órgano que
incoe el procedimiento.
ARTÏCULO 18.- Competencia y Procedimiento.
La competencia para la incoación de los procedimientos sancionadores objeto de esta
Ordenanza y para la imposición de sanciones, así como de otras exigencias compatibles
con las sanciones, corresponde al Alcalde, y por delegación al Concejal de Urbanismo,
Obras Públicas y Medio Ambiente.
La instrucción de los expedientes corresponderá, igualmente, al Concejal Delegado de
Urbanismo.
Se utilizará con preferencia el procedimiento abreviado y en su tramitación se podrá
acumular, si procede, la exigencia al infractor de la reposición a su estado original de la
situación alterada por la infracción y la determinación de la cuantía a que ascienda la
indemnización de los daños y perjuicios causados al dominio público, los edificios
municipales, a las instalaciones municipales al arbolado y al mobiliario urbano.
La indemnización de los daños y perjuicios causados se determinará, si no se
acumulase, en un procedimiento complementario, con audiencia del responsable.
En todo los casos servirá de base para la determinación de las valoraciones realizadas
por los Servicios técnicos municipales.
Las resoluciones administrativas darán lugar, según los supuestos, a la ejecución
subsidiaria y al procedimiento de embargo sobre el patrimonio o a dejar expedita la vía
judicial correspondiente.
Cuando los daños y perjuicios se ocasionasen a bienes e instalaciones de carácter no
municipal, con independencia de la sanción administrativa que pudiese corresponder
por los hechos, se podrán facilitar a los titulares de los bienes o derechos los
antecedentes y su cualificación por si quisiesen acudir a la vía judicial.
ARTÏCULO 19.- Terminación Convencional.
Determinada la responsabilidad administrativa del infractor y señalada la multa, podrá
convenirse de forma voluntaria la sustitución del pago de la cuantía de la indemnización
de daños y perjuicios por la realización física de los trabajos que comporten la
reparación del daño y la recuperación del aspecto anterior de aquéllos.
En estos supuestos las cuantías de las multas podrán reducirse.
ARTÍCULO 20.- Normativa Complementaria.
Para lo no previsto en este capítulo sobre Régimen Sancionador, será de aplicación el
Real Decreto 1.398/1993 de 4 de Agosto (B.O.E. número 189 de 9 de Agosto).
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