Lecturas de la Tercera Semana de Julio 2016

Anuncio
COORDINADORES: ROBINSON SALAZAR-PÉREZ
NCHAMAH MILLER
Se moderniza la práctica del Trabajo Social
https://www.youtube.com/watch?v=FJDUzNo2Ohk&app=desktop
Teoría e historia antropológica: Lévi-Strauss: la estructura como modelo
http://teoriaehistoriaantropologica.blogspot.com.es/2012/04/levi-strauss-la-estructura-comomodelo.html
Hemisferio Izquierdo actualiza contenidos sobre la democracia
http://www.hemisferioizquierdo.uy/
1
Revista Memoria de México
Número 258. Año 2016-2
http://revistamemoria.mx/
Revista Herramienta actualizada
http://herramienta.com.ar/
Voces de Bolivia.
https://visionzinternacionalbolivia.blogspot.mx/
Praxis Sociológica es una revista electrónica del Área de Sociología de la
Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de Toledo, de la Universidad de Castilla-La
Mancha (UCLM), con una publicación monográfica anual.
http://www.praxissociologica.es/
Polis, Revista Latinoamericana
43 | 2016
Noviolencia, resistencias transformaciones culturales
https://polis.revues.org/11493
Reflexiones marginales
NÚMERO ESPECIAL BILINGÜE DE DELEUZE
EDITORES INVITADOS:
ANA CAROLINA PATTO MANFREDINI
HÉLIO REBELLO CARDOSO JR.
http://reflexionesmarginales.com/3.0/category/numero-especial-1/numero-especial-1dossier/
Jorgina, una transexual wayuu de 76 años desterrada por su gente- VideoEn un pueblo de machos como la Guajira la decisión de Jorge de convertirse a Jorgina hace
más de 70 años le significó morir en vida. VIDEO
http://www.las2orillas.co/jorgina-una-transexual-wayuu-de-76-anos-desterrada-por-supueblo/
Revistas Buzos
http://buzos.com.mx/images/pdf/buzos724.pdf
Revista Anfibia
http://www.revistaanfibia.com/ensayos/
Revista Palabras al margen
http://palabrasalmargen.com/
Revista Analectica actualiza contenidos
http://www.analectica.org/
Artículos de Analectica
http://www.analectica.org/category/articulos/
2
Revista Ideas de Izquierda
http://www.laizquierdadiario.com/ideasdeizquierda/category/politica/
http://www.laizquierdadiario.com/ideasdeizquierda/category/economia/
http://www.laizquierdadiario.com/ideasdeizquierda/category/internacional/
http://www.laizquierdadiario.com/ideasdeizquierda/category/debates/
http://www.laizquierdadiario.com/ideasdeizquierda/category/cultura/
http://www.laizquierdadiario.com/ideasdeizquierda/category/numeros-anteriores/
NÚM. 8 (2016): ENERO-JUNIO/ Revista Las Torres de Luccas.
Especializada en filosofía política
http://www.lastorresdelucca.org/index.php/ojs/index
Revista Contrahegemonía actualiza contenidos
http://contrahegemoniaweb.com.ar/
LA UNIVERSIDAD NACIONAL DE CÓRDOBA (ARGENTINA), ACABA DE
INAUGURAR SU NUEVO PORTAL DE REVISTAS
https://revistas.unc.edu.ar/
Libros
Políticas de la amistad, J. Derrida. Seguido de el oído de Heidegger
http://bit.ly/29o4eit
SOTOLONGO CODINA, PEDRO LUIS Y DELGADO DÍAZ, CARLOS JESÚS, (COMP)
(2006) LA REVOLUCIÓN CONTEMPORÁNEA DEL SABER Y LA COMPLEJIDAD
SOCIAL: HACIA UNAS CIENCIAS SOCIALES DE NUEVO TIPO. Biblioteca Virtual
de CLACSO. Acceso al texto completo:
http://www.paginaspersonales.unam.mx/files/266/sotolongo.pdf
Vídeo: Los efectos del alcoholismo en un exmandatario norteamericano
Un video que circula en redes sociales muestra al ex presidente estadounidense George W.
Bush moviéndose rítimicamente durante el funeral de los cinco policías asesinados en Dallas.
El ex mandatario sujeta las manos de su esposa Laura y de la primera dama Michelle Obama,
mientras se mueve al ritmo del Himno de Batalla de la República, durante la ceremonia
celebrada este martes. (Video RT)
http://aristeguinoticias.com/1207/multimedia/bailando-en-el-funeralvideo/?utm_source=feedburner&utm_medium=email&utm_campaign=Feed%3A+AristeguiNot
icias+%28Aristegui+Noticias%29
La desaparición de la URSS 25 años después: Algunas reflexiones
http://lhblog.nuevaradio.org/b2-img/rodriguez_urss_25.pdf
3
Libros de Rebelión
http://es.youscribe.com/catalogue/tous/actualidad-y-debate-de-sociedad/ensayos/nuestraamerica-complejidad-y-unidad-dialectica-de-la-humanidad-y-la-2744618
Una parte no conocida de la historia de la nacionalización de los
hidrocarburos :Para recuperar la memoria histórica
http://www.rebelion.org/docs/214324.pdf
Las aporías del progresismo
x Miguel Mazzeo
¿No será excesivo considerar como de “izquierda” y/o “populares” a aquellas políticas que no
pretenden trascender el horizonte de un capitalismo reformado?
Texto completo en: http://www.lahaine.org/las-aporias-del-progresismo
http://www.herramienta.com.ar/revista-herramienta-n-58/las-aporias-del-progresismo
"Felices de ver tanta comida junta": así se vivió la apertura de la frontera
entre Venezuela y Colombia
Natalio CosoyEnviado especial de BBC Mundo a Cúcuta (@nataliocosoy)
Actualizado Viento Sur.
http://vientosur.info/
Revista Sin Permiso actualiza contenidos
http://www.sinpermiso.info/
“Tony Blair es un criminal de guerra”. Tariq Ali, entrevistado sobre el informe
Chilcot y la Guerra de Irak
Tariq Alí
10/07/2016
El silencio tras el Brexit
Michael Hudson
10/07/2016
En el aniversario del referéndum griego
James K. Galbraith
10/07/2016
Capitalismo del desastre: la doctrina de choque que los tories se mueren por lanzar
Howard Hotson
10/07/2016
El error europeo de Podemos
Yanis Varoufakis
10/07/2016
Noam Chomsky, John Halle y una confederación de lampreas: una nota sobre el
voto del mal menor
Jeffrey St. Clair
07/07/2016
La reunión de la OTAN en Varsovia: la cumbre de la tensión
Àngel Ferrero
10/07/2016
Análisis estadístico de fidelidad del voto a UP
4
Vitorino García
04/07/2016
Política laica: ¿tiene sentido hablar de un “Islam moderado”
Omair Ahmad
10/07/2016
«La tortura es lo que queda dentro». Informe sobre la tortura
Ramón Sola
04/07/2016
Margaret Thatcher no provocó el Brexit, pero el Brexit volverá a traer el thatcherismo
Andy Beckett
05/07/2016
Una experiencia de barrio. Sant Antoni de Barcelona
Miguel Salas
et alii
10/07/2016
Premios Nobel al servicio de Monsanto y Syngenta
Silvia Ribeiro
05/07/2016
26J: nada cambia, todo sigue por hacer
Antón Sánchez
10/07/2016
Semillas de la discordia: entre derechos y patentes
Vanina Lombardi
06/07/2016
El desencanto cultural que puede acabar con Podemos
Carlos Prieto
06/07/2016
Comunicado sobre el asesinato de la compañera Lesbia Yaneth Urquía Urquía
COPINH
10/07/2016
De aquellos polvos de la Agenda 2010, estos lodos de 2016: el miedo de la clase
obrera alemana
Oskar Lafontaine
10/07/2016
“Si Podemos y Ciudadanos no se hubieran enfrentado, PP y PSOE estarían
triturados”. Entrevista
Jaime Miquel
10/07/2016
Más allá del cooperativismo, más allá de la economía social
Emmanuel Rodriguez
David Gámez
08/07/2016
La otra humillación (y 2)
Gregorio Morán
10/07/2016
Las muertes misteriosas de Thunder Bay
The Guardian
04/07/2016
Los glaciares del Pirineo aragonés han perdido el 75% de su superficie en los
últimos 35 años
Pirineodigital
05/07/2016
Unidos Podemos, las confluencias y el 26J
Ramón Luque
10/07/2016
5
Ulf Christiansson: Entrevista y testamento de una vieja esperanza
Según la revista Sweden Rock, Ulf Christiansson sigue siendo todavía el mejor vocalista de rock
de Suecia - que no es poco teniendo en cuenta que Suecia es junto a Finlandia, el país con
mayor concentración de grupos de heavy metal del planeta Tierra. Pero lo cierto es que con 26
años, Ulf tomó la decisión de escribir exclusivamente en torno a Jesús, el tema más impopular
del rock. Esta es la entrevista que nos ha concedido a Entrelíneas, 40 años después....
Puedes leer el resto desde el siguiente enlace:
http://www.entrelineas.org/leer.asp?a=ulfchristiansson&utm_source=suscripcion&utm_medium=email&utm_c
ampaign=ulf-christiansson
Saludos,
José Pablo Fernández
Entrelineas
Alertas rojas: señales de implosión en la economía global
Posted: 07 Jul 2016 08:44 PM PDT
Ahora las señales de alarma se multiplican, desde desajustes financieros graves hasta
perturbaciones geopolíticas cargadas de guerras y desestabilizaciones, desde crisis
institucionales hasta declinaciones económicas. Los comentaristas occidentales se
maravillaban en los años 1990 ante el espectáculo de la implosión de la URSS, es probable que
dentro de no mucho tiempo empiecen a horrorizarse ante desastres mucho mayores
centrados en Occidente.
http://feedproxy.google.com/~r/piensachile/~3/7HfYtTbWaKs/?utm_source=feedburner&utm
_medium=email
MEMORIAS DE GUERRA. OPERATIVO INDEPENDENCIA Publicado en Revista
Puentes, año 4, Nº12, sept. de 2004 con el título “Los primeros años de la
represión” Mayo de 2004. Datos actualizados a junio de 2008)
http://webiigg.sociales.uba.ar/conflictosocial/publicaciones/Memorias_de_guerra_Operativo_
Independencia.pdf
REVISTA HISTORIA PARA TODOS – AÑO 2 – NÚMERO 3 – JULIO 2016 – ISSN
2451 – 6333
https://revistahistoriaparatodos.wordpress.com/2016/07/06/revista-historia-paratodos-ano-2-numero-3-julio-2016-issn-2451-6333
Cuadernos de filosofía Latinoamericana
VOL. 37, NÚM. 114 (2016)
FILÓSOFOS Y FILOSOFÍAS
http://revistas.usta.edu.co/index.php/cfla/issue/view/349
Convocatoria para publicar en Márgenes.
Historia, justicia y sociedad | H-México
6
El Comité Editorial de la revista Márgenes. Historia, justicia y sociedad tiene el honor
de invitar a los investigadores procedentes de la historia, las ciencias sociales y las
humanidades para participar en los números 1 y 2 de nuestra revista,
correspondientes a enero a junio y julio diciembre de…
http://www.h-mexico.unam.mx/node/17879
Entrevista Pierre Bourdieu:Habitus,dominación y violencia simbólica.
http://porelpanyporlasrosas.weebly.com/artiacuteculosdocumentales/entrevistapierre-bourdieuhabitusdominacion-y-violencia-simbolica
Devenires No 34
http://devenires.umich.mx/devenires-34/
Interesante actualización de Marxismo crítico.
https://marxismocritico.com/
Teoría y praxis No 3, Revista
http://www.debates.teoriaypraxis.org/index.php/es/2-uncategorised/53revista-teoria-y-praxis-n-3-pagina-de-descarga
Revista Question
http://perio.unlp.edu.ar/question/
Vol. 1, Núm. 50 (2016): Otoño (abril-junio) de 2016
Tabla de contenidos
Editorial
Lo próximo
PDF
Ensayos
Una lectura “contrailustrada” de la modernidad: sujeto, carencia y desamparo en el
pensamiento de Weber
PDF
3-12
Marcelo Carlos Altomare
De hombres y mujeres. La subjetivación publicitaria y los espacios “a ganar”, ¿un
problema de igualdad?
PDF
13-20
Lucas Enrique Bazzara
¿Qué es un Macho? Más preguntas que certezas en el abordaje del género
Juan Bautista Branz, José Antonio Garriga Zucal
PDF
21-33
Migración femenina en España: Una aproximación a la “otra” desde la representación PDF
34-50
social
Paola Andrea Contreras Hernández
7
La construcción mediatizada de la incertidumbre económica
PDF
Martín José Cortés
51-74
De la vida, la muerte y otras trivialidades
PDF
Gelly Genoud, Analia Lorena Meo, Francesca Capelli
75-89
Progresividad o regresividad en materia de derechos económicos sociales y
culturales. Claves para pensar Nuestramérica (2015 – 2019)
PDF
90-97
Jerónimo Guerrero Iraola, Carlos José Giordano
Sol y Luna, revisitando una revista nacionalista de derecha
PDF
Nicolás Iannini
98-113
La construcción discursiva de las artes visuales de los noventa
PDF
Syd Krochmalny
114-134
Dualidades luteranas. Breve ensayo sobre la libertad, la servidumbre y la obediencia PDF
135-149
en Martín Lutero
Ignacio Luis Moretti, Lorena Schefer
Comunicación: entender que ayer no es hoy
Paula Inés Porta
PDF
150-159
Trabajo y salud: aproximaciones a un estudio de caso referido a los peones forestales PDF
160-172
en la provincia de Entre Ríos, Argentina
María Celeste Rosso
El trabajo managerial. Las particularidades locales de un modelo hegemónico
Diego Szlechter, Leopoldo Blugerman, Ezequiel Cozza
PDF
173-193
Informes
(Im)posibilidades, adscripciones y disputas en las trayectorias de los y las jóvenes en PDF
194-207
contextos rurales de Ñorquin Co y Cushamen
Aymará Daniela Barés
Dimensión discriminación: xenofobia y clasismo en la ciudad de Buenos Aires. Notas PDF
208-227
sobre una encuesta acerca de la disposición democrática
Nicholas Dieter Berdaguer Rauschenberg, Oriana Seccia
La erradicación en el cine. Las villas de la Ciudad de Buenos Aires durante la última
dictadura militar
PDF
228-244
Leandro Daich Varela
Uso efectivo de las redes sociales como herramientas comunicacionales para la
promoción de destinos turísticos
PDF
245-278
Miguel Felipe Espinoza Méndez, Suhail Aurora Zabala Ayala, Inrgrith Roselys Marcano Rojas
La alteridad como lo nuevo radical y el proyecto de autonomía: huellas de Castoriadis PDF
279-296
en discursos sobre naturaleza y género
Maria del Socorro Foio
La estrategia comunicacional en el sector mega-minero. Un estudio del caso La
Alumbrera en Argentina
Julieta Godfrid
8
PDF
297-314
Marketing y posicionamiento: un análisis desde la gubernamentalidad neoliberal. La
gestión pública del turismo en la Argentina del siglo XXI
PDF
315-330
Fernando Francisco Mas
Caracterización de la agenda mediática en la Agencia Cubana de Noticias durante los PDF
331-351
años 2014 y 2015
Viviana Muñiz Zúñiga, Yamile Haber Guerra, Gretchen Gómez González
Los diputados de la ciudad de Buenos Aires: análisis de perfiles y trayectorias durante PDF
352-369
el periodo 2007-2015
Noelia Belén Noya Iglesias
El lugar de las radios comunitarias ante los desafíos de la implementación de la Ley
de Servicios de Comunicación Audiovisual
PDF
370-386
Marina Alejandra Ollari
La Salada: imaginarios y representaciones de la informalidad y las desigualdades
territoriales en la prensa escrita
PDF
387-404
Ester Schiavo, Paula Vera, Camilla Dos Santos Nogueira
Iniciación a la investigación
Reflexiones sobre políticas culturales y dinámicas de circulación durante la
democracia neoliberal argentina
PDF
405-413
María Paula Pino Villar
Los intelectuales de derecha en América Latina: los usos sociales del conocimiento y PDF
414-427
su vinculación con la política
María Florencia Prego
Gauchito Gil, entre la adoración y la justicia divina. Un acercamiento al mito religioso PDF
428-440
popular desde la comunicación
Mauro Daniel Salvador
Entrevistas
La etnografía como estrategia de trabajo. Experiencias y reflexiones sobre su utilización dentro del camp
de las ciencias sociales
Fernanda García Germanier, Leonardo González
Ya salió El Socialista Centroamericano No 223.www.elsoca.org
31 audiolibros de Julio Cortázar.
http://www.elciudadano.cl/2015/10/06/218883/buenisimo-te-dejamos-31audiolibros-gratuitos-de-julio-cortazar/
Diario de octubre actualiza contenidos.
https://diario-octubre.com/
La implosión de la Venezuela rentista1 Edgardo Lander
http://www.rebelion.org/docs/214427.pdf
9
Movimiento estratégico de Maduro en la dirección del gobierno venezolano
¿será suficiente?
Venezuela: ¿quién es Vladimir Padrino, el militar que Maduro nombró de "superministro"?
Daniel Pardo
http://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-36780599
Todo y de todo se asoma por Venezuela.
http://www.aporrea.org/
Alertas rojas: señales de implosión en la economía global. El capitalismo
global a la deriva
x Jorge Beinstein - La Haine
Los que se maravillaban en los '90 ante la implosión de la URSS, es probable que dentro de
poco empiecen a horrorizarse ante desastres mucho mayores en Occidente
Texto completo en: http://www.lahaine.org/alertas-rojas-senales-de-implosion
http://beinstein.lahaine.org/b2-img/Beinstein_sealesglobales_julio2016.pdf
El negocio de los Outsourcing
http://www.contralinea.com.mx/archivo-revista/index.php/2016/07/13/el-outsourcing-sucionegocio-del-gobierno/
El outlet Margaret Hilda Thatcher...
Theresa May: ¿Una nueva “dama de hierro” para el Reino Unido?
Durante su ministerio, ella ha reformado a la institución de la policía, endurecido las
políticas anti drogas y reforzado las medidas de vigilancia. También se ha opuesto a la
adopción homoparental y ha puesto duras restricciones a los inmigrantes.
http://www.elciudadano.cl/2016/07/12/305262/theresa-may-una-nueva-dama-de-hierropara-el-reino-unido-12-07-2016/
10
“Hillary Clinton parece una enfermera sádica” y otros 4 insultos al mundo de
Boris Johnson, el nuevo canciller de Reino Unido
RedacciónBBC Mundo
http://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-36795692
POLÍTICOS Y FUNCIONARIOS PASARÁN POR EL POLÍGRAFO PARA ACABAR
CON LA CORRUPCIÓN…EN RUSIA
https://elrobotpescador.com/2016/07/12/politicos-y-funcionarios-pasaran-por-el-poligrafopara-acabar-con-la-corrupcion-en-rusia/
¿Cómo ha decidido una ciudad filipina combatir el acoso sexual callejero?
https://lnkd.in/e36JXkE
LO PERSONAL ES POLÍTICO Y LO POLÍTICO SUELE SER PERSONAL: DIARIO DE
ECUADOR
http://www.unitedexplanations.org/2016/07/08/lo-personal-es-politico-y-lo-politico-sueleser-personal-diario-de-ecuador/
La economía mexicana en franca recesión
http://www.contralinea.com.mx/archivo-revista/index.php/2016/07/12/la-economiamexicana-en-franca-recesion/
¿Cuáles son los países de América Latina con las mejores universidades?
RedacciónBBC Mundo
http://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-36791078
Por qué los jóvenes tienen miedo de convertirse en adultos
Un estudio sociológico indica que la inmadurez y el miedo de crecer son inherentes a los
jóvenes estadounidenses.
https://actualidad.rt.com/sociedad/212649-jovenes-miedo-eeuu-convertirse-adultos
György Lukács, 'Derrotismo y dialéctica'. Una defensa de 'Historia y
conciencia de clase'
x Alejandro Nahuel Alzu
Lukács se refiere a sus críticos, que terminan proponiendo una concepción mecanicista de la
historia que no deja lugar para la acción del proletariado
La publicación de la primera edición en castellano de este texto lukácsiano ofrece una
herramienta valiosa para los estudios marxistas. El texto central es la respuesta de György
Lukács a las críticas de las reseñas de Historia y Conciencia de Clase –de aquí en más HCC–
escritas en 1924 por László Rudas y Abraham Deborin. El texto en cuestión fue hallado a
mediados de los años ’90 en los archivos moscovitas de la Comintern y publicado
originalmente en 1996 en húngaro y alemán. Se estima que fue escrito alrededor de 19251926 y el título del mismo: “Chvostismus und Dialektik”, como señalan los cuidadores de la
11
edición, recoge el primer término del ruso jvost –“cola”, “zaga”– empleado por Lenin para
denunciar el desconocimiento de la posibilidad objetiva del instante revolucionario de parte de
los “economistas” que irían a la zaga del movimiento obrero, tanto en cuestiones de política
organizativa como de conciencia de clase.
Texto completo en: http://www.lahaine.org/gyoergy-lukacs-derrotismo-y-dialectica
PDF/ http://www.herramienta.com.ar/revista-herramienta-n-58/gyoergy-lukacs-derrotismo-ydialectica-una-defensa-de-historia-y-conciencia
Comprender el poder hoy: autores clave responden a cuestiones clave (02)
Rafael Palacios “Rafapal”
https://elrobotpescador.com/2016/07/06/comprender-el-poder-hoy-autores-claveresponden-a-cuestiones-clave-02-rafael-palacios-rafapal/
UNA INQUIETANTE PROPUESTA DEL GOBIERNO RUSO QUE HABLA SOBRE
NUESTRO FUTURO
https://elrobotpescador.com/2016/07/07/una-inquietante-propuesta-del-gobierno-ruso-quehabla-sobre-nuestro-futuro/
Los riesgos para la economía internacional según el Banco Central de Rusia
Los representantes de los Bancos Centrales de ocho países, entre ellos Rusia y China,
comentan cómo los acontecimientos económicos y políticos imprevistos han influido en su
política financiera
http://es.rbth.com/economia/2016/07/08/los-riesgos-para-la-economia-internacional-segunel-banco-central-de-rusia_609965
Rusia y Uruguay estudian la renovación de la central hidroeléctrica de Salto
Grande
http://mundo.sputniknews.com/entrevistas/20160701/1061456824/rusia-uruguaysaltogrande-energia.html
La izquierda debería atreverse a advertir que el futuro global es oscuro
Rómulo Pardo Silva
https://www.rebelion.org/noticia.php?id=214361
Chile: Unánime rechazo a la reforma educativa
http://www.surysur.net/chile-unanime-rechazo-a-la-reforma-educativa/
"De la guerra fría a la caliente": Gorbachov critica las decisiones de la OTAN
en Varsovia
https://actualidad.rt.com/actualidad/212679-gorbachov-varsovia-criticar-otan-varsovia
Una versión distinta sobre Corea del Norte.
https://actualidad.rt.com/actualidad/210244-detienen-embajador-corea-norte-espanatrafico-armas
12
El único occidental que trabaja en Pionyang: "Los norcoreanos son como los
latinos"
Es imposible imaginarse otra nación del mundo tan hermética como Core del Norte. Sin
embargo, en Pionyang trabaja un español que defiende su Gobierno y adora el país.
https://actualidad.rt.com/actualidad/210233-corea-norte-espanol-unico-extranjero-trabajar
México envejece y carece de infraestructura
http://www.contralinea.com.mx/archivo-revista/index.php/2016/07/07/mexico-envejece-yno-hay-infraestructura-para-los-adultos-mayores/
Trump se proclama como ‘el candidato de la ley y el orden’
http://www.jornada.unam.mx/ultimas/2016/07/11/trump-se-proclama-como-2018elcandidato-de-la-ley-y-el-orden2019
Chilenos, árabes y brasileiros se apoderan de la línea aérea mas exitosa.
http://www.cronista.com/negocios/Qatar-Airways-comprara-el-10-de-Latam-por-us-600millones--20160712-0053.html
Venezuela: traspaso de presidencia no está sujeta a "consenso" ni "votación"
La canciller de Venezuela, Delcy Rodríguez, defendió hoy que el traspaso de la
presidencia rotatoria del Mercosur a su país no debe estar sujeto a "ningún tipo de
consenso" ni "condicionamiento
http://www.elpais.com.uy/informacion/venezuela-traspaso-presidencia-no-sujetavotacion.html
No salir a la calle, no trabajar ni estudiar: el fenómeno 'hikikomori' que cobra
fuerza en el mundo
No salir de casa, no tener amigos salvo algunos contactos virtuales. Esta es la realidad de
cientos de miles de personas que han optado por abandonar la vida social.
https://actualidad.rt.com/sociedad/212708-hikikomoris-trastorno-aislamientosocial?utm_source=Email-Message&utm_medium=Email&utm_campaign=Email_weekly
¿Habrá Mercosur? Paraguay y Brasil siguen bombardeando
http://www.surysur.net/habra-mercosur-paraguay-y-brasil-siguen-bombardeando/
Uruguay desoye socios del Mercosur y quiere entregar presidencia a Maduro
El gobierno ratificó su intención de concretar el traspaso de la presidencia pro tempore a
Venezuela, pero "teniendo en cuenta las diferencias existentes",…
http://www.elpais.com.uy/informacion/uruguay-superar-diferencias-presidenciamercosur.html
Estimados Colegas y amigos les enviamos el Boletín de Barómetro.
Atentamente Barómetro Internacional
13
Estamos siendo víctimas de permanentes de ataques y bloqueos bien por los hackers o por Google sino
recibe en su bandeja de correo el Boletin de Barometro los días Lunes y Jueves por favor hacernos saber
por los siguientes correos: [email protected] /[email protected] y si no
desea recibir por favor hacernos saber aquí Gracias
En este boletín encontrará:
Por: Eduardo Contreras Chile: No a la Impunidad La noticia del procesamiento y detención de Luis Emilio
Cheyre, ex comandante en jefe del ejército chileno por los crímenes de la llamada “Caravana de la Muerte”
de 1973, episodio de la ciudad de La Serena, Chile, no sólo ha dado la vuelta al mundo sino que ha
conmovido fuertemente el escenario político nacional y puesto a la orden del día el gran tema de las
relaciones cívico militares, el papel de las fuerzas armadas, su vinculación con el poder económico y su
triste historial represivo. En particular por su protagonismo en el golpe de Estado de 1973 contra el
presidente Salvador Allende y el genocidio perpetrado contra los sectores populares durante todos los años
de la tiranía. Valiente decisión del juez Mario Carroza que no aceptó presiones. …. Sigue leyendo copia y
pega el enlace….
http://www.barometrointernacional.com.ve/2016/07/11/chile-no-la-impunidad/
Por Bruno Lima Rocha y Júlia Klein Con los militantes aún vinculados a gobierno depuesto- Parte
3 Una crítica de Izquierda Este artículo se presenta como tercera parte de una serie de críticas a los
partidos de centro - izquierda y movimientos de izquierda sociales que son base deapoyo del partido
de gobierno derrocado (Partido de los Trabajadores / PT) y sus aliados. No tomamos como objetivo de esta
crítica el “lulismo” (término creado para designar el periodo de gobierno del ex-presidente Lula) en sí, como
fenómeno electoral de pacto conservador conmayorías concretas, pero si los grupos organizados que
dentro de este “paraguas” de la gobernabilidad coexistían pacíficamente dentro del "gobierno en
disputa." Reconozco la delicadeza del tema. En este trabajo, presento conceptos operacionales, del manual
de la política, y propongo debate franco. …. Sigue leyendo copia y pega el enlace….
http://www.barometrointernacional.com.ve/2016/07/11/los-militantes-aun-vinculados-gobiernodepuesto-3/
Por: Alberto Beto González -Venezuela Del sujeto histórico al consumo masivo Cuando Karl Mark
introdujo el concepto del Sujeto Histórico en sus interpretaciones sociales, lo hizo sobre la base de la
necesidad que tiene todo proceso emancipador, de redención o de justa causa social, de contar con la
participación activa de quienes se benefician de tales acciones, ya sea de manera directa o indirecta, eso
si, partiendo del hecho que para el logro de las mismas se requiere de un verdadero esfuerzo colectivo y
que este a su vez eche por tierra el egoísmo humano convertido en individualidad, y que por ende, de no
ser así pondría en riesgo cualquier esfuerzo común en busca de la felicidad, elemento éste motivador de
los seres humanos. Sin embargo cuando Mark escribió el Capital lo hizo evidentemente en tiempos donde
la modernidad solo se remitía al desarrollo de las grandes corporaciones europeas al cual se le
denominó…. Sigue leyendo copia y pega el enlace….
http://www.barometrointernacional.com.ve/2016/07/11/del-sujeto-historico-al-consumo-masivo/
Por: Antonio Guillermo García Danglades La “Masacre de Curuguaty” y el golpe de Estado en
Paraguay – PARTE II La importancia geoestratégica que representa Paraguay para la dominación de
Estados Unidos en la región va mucho más allá del control de las tierras paraguayas. En 2005, el Senado
paraguayo había aprobado la entrada de un contingente militar de 400 marines a su territorio y le otorgó
total inmunidad. Estados Unidos respondió, duplicando el financiamiento al Paraguay en la “lucha contra el
terrorismo”, y bajo el programa del Comando Sur (US Southern Command) denominado “Nuevos
14
Horizontes”, impartió operaciones de entrenamiento y ejercicios, supuestamente en el área de la medicina,
pero que de acuerdo a diversos activistas de derechos humanos, estaban más bien dirigidas a identificar
“lideres rurales peligrosos”. Si bien la preocupación de algunos representantes del congreso condujo a la
recisión de la inmunidad para los marines norteamericanos que se vieron forzados a dejar el país, la
cooperación militar se mantuvo fortalecida con el equipamiento y entrenamiento de tropas
paraguayas… Sigue leyendo copia y pega el enlace….
http://www.barometrointernacional.com.ve/2016/07/11/la-masacre-curuguaty-golpe-estadoparaguay-parte-ii/
Por: Carolina Vásquez Araya Retroceso sin retorno- Pienso en la Humanidad, así con mayúsculas,
como un ideal fallido. Debieron suceder muchos asesinatos, innumerables abusos y millones de
violaciones de niñas, niños, adolescentes y mujeres adultas para que los medios de prensa comenzaran a
ceder sus privilegiados espacios a una de las mayores amenazas contra la vida y la integridad de más de
la mitad de la población del continente. No era noticia. De hecho, la violencia intrafamiliar y las violaciones
sexuales se consideraron, hasta hace pocos años, “un asunto privado” en el cual nadie tenía por qué
intervenir. Sin embargo y aun cuando se reconoce el gran valor de la apertura de esta línea noti ciosa y de
investigación, se observa un enfoque estereotipado en la forma -y patriarcal en el fondo- cuya perspectiva
retrógrada se consolida. … Sigue leyendo copia y pega el enlace….
http://www.barometrointernacional.com.ve/2016/07/11/retroceso-sin-retorno/
Este infográfico muestra cómo las marcas usan los colores para detonar
emociones en nosotros:
La relación entre colores, emociones y logos de las grandes marcas (INFOGRAFÍA)
Aprovechando la psicología del color las marcas buscan inducir en ti, su potencial
consumidor, el deseo de sus productos o servicios.
http://pijamasurf.com/2016/07/la-relacion-entre-colores-emociones-y-logos-de-las-grandesmarcas-infografia/
ANALISTA ADVIERTE QUE EEUU ESTÁ AL BORDE DE UNA INSURRECCIÓN
https://elrobotpescador.com/2016/07/11/analista-advierte-que-eeuu-esta-al-borde-de-unainsurreccion/
TLC, para explotarte mejor
Cortesía de Ruben Montedonico Rodriguez [email protected]
La decisión del Reino Unido de salir de la Unión Europea generó turbulencias en los mercados
y algunas tribulaciones en el Mercosur, que ve alejarse un tratado de libre comercio (TLC) que
lo relacione con aquel grupo de países. En la gira de Mauricio Macri –escaso de ideas y tacto
político- ruega patéticamente una pronta decisión que una a las partes, como demandan los
empresarios regionales.
Más allá de la decisión británica, lo cierto es que los problemas de la economía son una
consecuencia prolongada de ajustes en Estados Unidos, la propia Eurozona y Japón, que
derivan en la retracción del consumo y produce caídas en la adquisición de materias primas de
países productores (periféricos del capitalismo central), agudizando el extendido decaimiento
del comercio internacional: la fragilidad de los precios de los commodities que determinan los
mercados "disgustan" a los exportadores con menores ganancias que en el pasado.
15
Asimismo, en lo financiero no se registran tasas de interés tan reducidas en los países centrales
por mucho tiempo -como ahora-, aunque se prevé el regreso de los valores especulativos. Los
niveles de corrección de la Fed –sin correlatos en Europa occidental y Japón– devolvieron
solidez al dólar como divisa y dado que Estados Unidos exporta un 11% en relación con su PIB,
con base en ello compra barato con su moneda, no sólo insumos, sino plantas productivas de
otros países, para lo cual presiona por la concreción que ensanche esa práctica mediante
tratados tipo TPP y TTIP (Transpacífico, uno, y Transatlántico para el Comercio y la Inversión,
con la UE, el segundo) y para servicios (TISA). Le Monde Diplomatiquerefiriéndose al TTIP lo
define así: “Una OTAN de la economía”.
Frente a la pregunta de qué intereses tiene la UE y la Eurozona, José Luís Fiori –coordinador
del Programa de Post-Grado en Economía Política Internacional de la Universidad Federal de
Río de Janeiro– interpreta: “(La) falta de un poder central capaz de definir e imponer objetivos
y prioridades estratégicas comunes se ve exacerbada por la sumisión militar de los europeos a
la OTAN y a Estados Unidos, que fue quien impuso la expansión apresurada en dirección al
Este, a partir de 1991, para ocupar estados que habían pertenecido al Pacto de Varsovia (…)
Atrapado dentro de esta camisa de fuerza, la Unión Europea es hoy un ente político débil, con
una moneda falsamente fuerte y muy poca capacidad de iniciativa autónoma dentro del
sistema mundial”. Da razón a lo anterior el Informe Chilcot sobre la invasión a Irak en 2003, al
sostener que el premier Tony Blair llevó a Gran Bretaña a la guerra por la decisiva influencia de
Estados Unidos y su presidente, George W. Bush.
Para el caso del TTIP el propósito no pasa por reducir los bajos niveles arancelarios sino por la
modificación de la regulación en las relaciones comerciales entre espacios económicos,
favoreciendo a grandes empresas trasnacionales, las verdaderas beneficiadas. La Comisión
Europea se encerró en más de 100 encuentros con cabilderos y multinacionales para negociar
contenidos del tratado. Resultó evidente que los países delegaron su soberanía en ella y ésta la
traspasó a corporaciones multinacionales –en particular financieras–, con lo cual la Comisión
pondrá su firma de conformidad al calce de acuerdos cuyas cláusulas le llegarán redactadas.
Debe entenderse que lo que se aprueba en todas las reuniones secretas sobre reglas de
tratados impide legislar de acuerdo con las necesidades ciudadanas.
Una mirada hacia el empleo, en cambio, nos alerta que las aplicaciones tecnológicas de los
avances científicos eliminan más empleos que los que crean y, en ese sentido, se da como
referencia las cadenas mayores de producción automovilística estadunidense, que en 1990 –
con la ocupación de más de un millón de personas– ingresaron 36 mil millones de dólares de la
época, mientras en 2015, con 137 mil trabajadores, Apple, Facebook y Google tuvieron ventas
por más de un billón de dólares. Si revisamos el sector agroalimentario, los números nos
ofrecen cifras dramáticas: en el caso del Tratado de Libre Comercio de América del Norte
(Tlcan o Nafta) en una década Estados Unidos perdió cerca de un millón de empleos directos.
Los tratados orientados por y desde Estados Unidos marginan a las grandes potencias
emergentes, aunque con ello se debilite la estructura de la Organización Mundial de Comercio
(OMC): de lo que se trata es de aislar eventuales mercados alternativos. Allí donde se intente,
los agrupamientos centrales del capitalismo persiguen toda forma del “estado de bienestar”
que algún día practicaron los europeos, para lo cual no dudan en exigir la eliminación de
puestos de trabajo, precarizar empleos y privatizar servicios públicos. En palabras de
Boaventura de Sousa Santos “es volver a la política de clase pura y dura, o sea, al siglo XIX”, un
regreso de 200 años al liberalismo de los ingleses en tiempos de David Ricardo.
La actualidad nos está manifestando que el capitalismo monopólico-financiero globalizado
hace más compleja la batalla que deberá dar el movimiento obrero. El empresariado
trasnacional se ha fortalecido de tal forma que fragmenta y condiciona mundialmente al
trabajo, apoyando la reducción salarial, obteniendo mayores ganancias mediante la extracción
de más plusvalía. Para esos logros incidieron en su favor los cambios intercapitalistas, que
derivaron en la recomposición del conjunto hegemónico. A partir de la última postguerra y
hasta nuestros días –sorteando diversas crisis– Estados Unidos ejerce preeminencia mundial,
16
haciendo depender lo financiero de sus aspiraciones y apetencias. Asimismo, ampara a las
trasnacionales radicadas en su territorio aplicando las normas que más les convienen,
manteniendo la delantera en sectores tecnológicos de punta y ejerciendo un papel conductor
en agencias internacionales, que “hacen trajes a la medida” para recetar a terceros países.
En América Latina las experiencias del neoliberalismo se han asociado con dictaduras militares
y el Consenso de Washington. Chile, en su momento, fue puesto como ejemplo. Hoy en la
región nos encontramos con que en los hechos quienes la componen tienen historias
conocidas y relevantes de disparidades económicas y sociales en lo interno y entre sí. Hasta
hace poco, Brasil, junto con Argentina y Venezuela mantenían –con distinta intensidad– el
protagonismo con respecto a la integración. Sin embargo, en 2016 para nadie es un misterio
que la situación cambió y que el protagonismo pasó de la tibieza integracionista –demasiados
discursos y pocas acciones– a partir de la constitución de una mayoría opositora en el
legislativo venezolano; el acceso de Mauricio Macri a la presidencia argentina; la extensión del
intento de impeachmentcontra Dilma Rousseff a la desarticulación de sus alianzas políticas y el
ataque contra Lula da Silva; el golpeteo persistente al casco popular de Bolivia; la aquiescencia
de las autoridades paraguayas –influidas por la derecha brasileña–; la deriva sinuosa de
Uruguay –que antepone el sólo ser “un pequeño país” librado a su suerte entre dos gigantes–,
y toda suerte de tentaciones que ofrecen los miembros sudamericanos de la Alianza del
Pacífico, encabezados por un gobierno dicho progresista: Chile.
De acuerdo con lo visto, debe entenderse que la concentración propuesta engendra
necesariamente capitalismo de monopolio, que al fusionarse con fuerzas económicamente
dominantes (Estados Unidos o la UE) dan a éstas normas que las vuelven policías encargadas
de maximizar la viabilidad del plan dominador.
Ruben Montedónico, integrante de la REDIU.
El territorio argentino en venta
Alejandro Teitelbaum
https://lahistoriadeldia.wordpress.com/2016/07/13/el-territorio-argentino-en-venta/
Alainet.org
Lectura recomendada:
–Ley 26.737 Régimen de Protección al Dominio Nacional sobre la Propiedad, Posesión o
Tenencia de las Tierras Rurales.
http://www.mininterior.gov.ar/fronteras/pdf/ley-26737.pdf
–La ley de tierras aprobada en 2011 no impedía globalmente dichas ventas
http://argentina.indymedia.org/news/2011/09/794040.php
El territorio argentino en venta
El actual Gobierno argentino dictó hace poco un decreto “flexibilizando” la ley de tierras de
2011 a fin de facilitar aún más la compra de tierras por capitalistas extranjeros.
Según la Federación Agraria Argentina unos 300 mil kilómetros cuadrados (el 10% del territorio
nacional) están en manos de extranjeros (equivalente a la superficie de toda la Provincia de
Buenos Aires). Hay por lo menos dos aeropuertos extranjeros construidos en la Patagonia, sin
que puedan ser detectados por los radares argentinos, ya que éstos o son obsoletos o no
existen en la región.
Un aeropuerto construido por Lewis, que está a nombre de un argentino de apellido Van
Ditmar , cuya pista es tan larga como la de Aeroparque de Buenos Aires, desde donde se
17
puede entrar y sacar del territorio cualquier tipo de material. Lewis posee 14000 hectáreas en
Chubut, que incluyen el Lago Escondido.
El terrateniente más grande es en grupo familiar italiano y multinacional Benetton, que posee
900 mil hectáreas. Desde hace 15 años, cada vez son más numerosos los extranjeros que
compran vastas extensiones de tierras, desplazando a las familias tradicionales de la oligarquía
argentina. “Tenemos tierra en exceso”, declaró en los años ’90 el Presidente Carlos Menem,
invitando a corporaciones extranjeras y a particulares a invertir. Desde 2002, la devaluación
del peso, otrora vinculado al dólar, implicó un cambio favorable, acelerando un proceso de
venta desenfrenado y sin control.
“En las provincias de Santiago del Estero y el Chaco, la hectárea cuesta lo mismo que una
hamburguesa”, decían los periodistas Andrés Klipphan y Daniel Enz, autores de “Tierras, S.A.”,
una investigación realizada durante tres años por todo el país. “Se puede comprar lo que
quiera, en cualquier lugar, si se tiene el capital suficiente, incluso en los parques nacionales”,
asegura Gonzalo Sánchez, autor de “La Patagonia vendida”, que entrevistó a la mayoría de los
extranjeros que han comprado tierras en el sur, que representa la tercera parte del territorio
nacional y contiene sus principales riquezas: energía hidroeléctrica, 80% del petróleo y gas
natural y una de las grandes reservas de agua dulce del planeta. Esta región se ha convertido
en el paraíso de millonarios extranjeros que, según los autores de “Tierras, S.A.”, “se han
beneficiado de la actitud flexible de los diferentes gobiernos nacionales y provinciales para
adquirir millones de hectáreas y recursos no renovables, sin restricciones y a precios módicos”.
El vicepresidente de AOL Time Warner y fundador de la cadena CNN, Ted Turner, posee 45 mil
hectáreas en la región. El belga Huber Grosse compró 11 mil hectáreas en la provincia de Río
Negro, donde los turistas ricos van a jugar polo y golf.
“La Patagonia me recuerda al Texas de los años’50”, asegura Ward Lay, magnate de las papas
fritas y amigo de George W. Bush, que se compró miles de hectáreas en esa provincia y
viñedos en Mendoza.
El cantante Florent Pagny vive parte del año entre sus dos estancias de la provincia de Chubut.
Estos nuevos terratenientes tienen frecuentes altercados con las comunidades indígenas, que
los acusan de apropiarse de las tierras de sus ancestros. Los habitantes de la Patagonia se
quejan también de no tener acceso libre a algunos lagos y senderos en las montañas donde se
encuentran las propiedades privadas.
Los actores Robert Duvall, Richard Gere y Matt Damon son propietarios de varias estancias en
las provincias norteñas de Tucumán, Salta y Jujuy. Grandes grupos vinícolas franceses,
españoles e italianos se han instalado en Mendoza, al pie de la cordillera de los Andes, que
ofrece tierras y un clima excepcional para el cultivo de la vid. Ahí, la hectárea vale diez veces
menos que en California. Grandes grupos mineros, en su mayoría canadienses, explotan minas
de oro y plata en las provincias de San Juan, La Rioja y Santa Cruz. Entre los inversionistas
figura Bill Gates. Los nuevos ricos argentinos, principalmente estrellas del espectáculo y del
deporte, pero también políticos, constituyen a su vez una nueva burguesía terrateniente. El
jugador de básquetbol Emanuel Ginobili, estrella de los Spurs de San Antonio en la NBA,
invirtió más de dos millones de dólares en proyectos turísticos de gran lujo en las costas del río
Negro y en la ribera del lago Correntoso, en la Patagonia. El futbolista Gabriel Batistuta, ex
delantero de la Fiorentina, se ha convertido en uno de los grandes terratenientes de la fértil
provincia de Santa Fe.
18
Lista (publicada en 2008 por Marcelo Mangiante) de la cantidad de territorio argentino
vendido a extranjeros:
Mendoza: 250.000 hectáreas (equivalente a 12 veces la superficie de la Capital Federal),
compradas por empresarios de Malasia, con gente adentro, además de miles vendidas y
ofrecidas a capitales chinos y españoles. Vendidas: 500.000 hectáreas. En venta: 800.000
hectáreas.
San Luis: 40.000 hectáreas compradas por empresarios italianos. En venta: 850.000 hs.
San Juan: 2.000.000 de hectáreas en venta, más del 20% de la provincia incluyendo la frontera
con Chile.
Catamarca: Se venden campos del tamaño de la Isla Gran Malvina a U$S 8.- la hectárea (el
precio de un ‘Big Mac’ en EEUU) Vendidas: 100.000 hectáreas a un grupo holandés. En venta:
1.600.000 hectáreas.
Misiones: 172.000 hectáreas de la selva Paranaense (única en el mundo), taladas por la
empresa Alto Paraná, propiedad del grupo Arauco de Chile.
Formosa, Chaco y Corrientes: 1.400.000 hectáreas en manos de capitales australianos.
Santa Fe: tierras compradas por EEUU. Entre Ríos: Vendidas 100.000 hectáreas. En venta
150.000 hectáreas.
Santiago del Estero, Tucumán y La Rioja: Vendidas: 120.000 hectáreas. En venta: 1.300.000
hectáreas.
Salta: 2.400.000 hectáreas en venta, entre ellas se encuentra la finca Jasimana en el corazón
de los valles calchaquíes, equivalente a 65 veces la superficie de la Capital Federal. En total, en
venta y vendidas 13.000.000 de hectáreas.
En Patagonia se vendieron tierras que incluyen lagos, ríos, fronteras, animales, aún en zonas
fronterizas de seguridad.
Tierra del Fuego, 100.000 hectáreas de bosque (el más austral del mundo), compradas por una
corporación de EEUU que intenta talarlas. Cada planta tarda decenas de años en crecer debido
a las condiciones climáticas.
Chubut: 20.000 hectáreas compradas y cercadas por alemanes, que incluían la reserva de
Mapuches más grande del país, que fue desplazada y despojada de las mejores pasturas para
alimentar ganado.
Santa Cruz: las estancias (80.000 hectáreas), Monte León, Don Aike, El Rincón, y Sol de Mayo
(cordillera), comprada por el terrateniente Douglas Tompkins de EEUU, quién pretende
apoderarse de las reservas de agua potable más puras del planeta, formadas por la cuenca de
los hielos continentales patagónicos, que desembocan en su mayoría en el río más caudaloso
de Patagonia, el Rio Santa Cruz.
Artículo tomado de: http://www.alainet.org/
19
Barack Obama resucita la doctrina Monroe
x Vicky Peláez
El régimen de EEUU está usando la variante "suave" de la neo-doctrina Monroe, aprovechando
la nueva coyuntura política que se vive en América Latina
http://www.lahaine.org/mundo.php/barack-obama-resucita-la-doctrina
América para los americanos
(James Monroe, 1823)
Desde hace más de cinco años, el Gobierno norteamericano ha estado tratando de convencer
a la opinión pública latinoamericana y caribeña de que la "era de la doctrina de Monroe
terminó" y que EEUU y Latinoamérica ahora son "socios" con iguales derechos, como lo
anunció el secretario de Estado, John Kerry, en 2013 y, posteriormente, lo confirmó Barack
Obama en 2015, en el Fórum de la Sociedad Civil, declarando que EEUU ya no puede
"intervenir con impunidad" en el continente.
Sin embargo, aquellos "días del pasado" han sido restaurados por el mismo autor de esta frase,
el señor Obama, quien hizo resucitar la vieja doctrina de Monroe (1823), le sacudió el polvo y
la adoptó para deshacerse de todos los gobiernos progresistas en el continente sin necesidad
de una intervención militar.
En condiciones del actual nivel de globalización que confirmó el rol de los países
latinoamericanos como simples extractores y exportadores de recursos naturales en el Sistema
Económico Mundial, la manipulación del mercado internacional por Wall Street y por el
Sistema Financiero Mundial es suficiente para poner de rodillas a cualquier país
latinoamericano y poner fin al populismo y progresismo. Como dijo el recientemente elegido
presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, quien asumirá sus funciones el próximo 28 de julio,
"lo que necesita la gente no son ideas y promesas, sino billetes" (dinero).
Precisamente, esta idea de "falta de billetes para el pueblo latinoamericano", la lanzó el
departamento de Estado norteamericano bajo la dirección de Hillary Clinton (2009-2013),
aprovechándose de la crisis económica mundial que hizo bajar drásticamente el precio de la
materia prima y haciendo "chillar" a las economías latinoamericanas. Aquella consigna fue
acogida inmediatamente por los medios de comunicación globalizados, tanto norteamericanos
como internacionales, en especial los latinoamericanos a su servicio, que intensificaron la
20
guerra mediática contra los gobiernos progresistas en la región, acusándolos de corrupción y
de incapacidad para ofrecer el prometido bienestar a su pueblo.
En este contexto, el Gobierno de Barack Obama está usando la variante "suave" de la neodoctrina Monroe, aprovechando la nueva coyuntura política que se vive en América Latina
debido, según The New York Times, a la "pérdida de popularidad de los gobiernos de
izquierda". Este periódico constata que "el cambio en el panorama político abrió la puerta para
que una nueva generación de líderes definan un discurso distinto para América Latina. Esto
ofrece una buena oportunidad a EEUU para reiniciar su relación con varios vecinos que,
históricamente, han considerado a Washington como la intervención imperial".
Lo que no quiere reconocer The New York Times, como el resto de los medios de comunicación
globalizados, es que "el cambio del panorama político en América Latina" fue propiciado
precisamente por el Gobierno norteamericano por medio de la "agresión interna y externa",
como lo denunció Evo Morales. Esta operación ha sido dirigida y financiada por Washington
para desprestigiar, debilitar, desestabilizar y tratar de sacar del poder a los presidentes de los
países progresistas legítimamente elegidos por su pueblo, refiriéndose a Cristina Fernández de
Argentina, Dilma Rousseff de Brasil, Nicolás Maduro de Venezuela, Rafael Correa de Ecuador,
Daniel Ortega de Nicaragua y sin olvidar al boliviano Evo Morales.
Los intentos de estos golpes de Estado "blandos", como los definió el papa Francisco, fueron
ensayados sin lograr el éxito esperado en Bolivia en el 2008, Ecuador en el 2010, Venezuela en
2002, 2014-2015. El principal patrón para el golpe fue llevado a cabo en Honduras, donde el
presidente Manuel Zelaya, por promover un referéndum a favor de los más necesitados, fue
arrestado por los militares y llevado a Costa Rica. Inmediatamente después de esta
intervención, el Parlamento hondureño aprobó una resolución de la renuncia de Zelaya
nombrando con la venia de Washington al presidente del Congreso, Roberto Micheletti, un
nuevo jefe del Gobierno. Posteriormente, organizaron las nuevas elecciones presidenciales y
eligieron en 2010 a un hombre de Washington, Porfirio Lobo como el nuevo presidente.
Así de simple, Hillary Clinton, quien organizó aquel golpe "blando" de Estado a través de su
hombre de confianza, Lanny Davis, de la Trident DMG, mandó un mensaje a Latinoamérica
indicando que Washington siempre defenderá los intereses de sus transnacionales y lo que
tanto les gusta repetir a los políticos estadounidenses, actuarán siempre para proteger su
seguridad nacional inventando los peligros que en realidad nunca han existido. Los nuevos
tipos de golpe para sustituir a los presidentes progresistas o populistas recibieron el nombre
de "cambios constitucionales". Tres años después, en 2012, el presidente de Paraguay,
Fernando Lugo, que era un exsacerdote católico y seguidor de la Teología de la Liberación,
sufrió "un golpe constitucional" violando los golpistas impunemente el orden constitucional
también a instancias del departamento de Estado norteamericano.
El periodista norteamericano Wayne Madsen escribió en 'Intrepid Report' que el "neofascista
Mauricio Macri", protegido de EEUU, venció a Daniel Scioli en las elecciones cuya "votación se
vio empañada por reportes de fraude electoral en Buenos Aires. Enseguida adoptó una
drástica política neoliberal de ajuste estructural, implantación de tarifazos y reducción de los
programas sociales. Ya es de conocimiento público también la interferencia de EEUU en las
elecciones en la Asamblea Nacional de Venezuela, donde la oposición de extrema derecha
ganó la mayoría con el apoyo abierto de la empresa del clan Clinton, Greenberg Carville
Shrum, sin olvidar las donaciones de las fundaciones dirigidas por Álvaro Uribe, José María
Aznar y las de los disidentes venezolanos en Miami.
21
Durante el referéndum en Bolivia, celebrado en febrero pasado y que perdió Evo Morales,
numerosas Organizaciones No Gubernamentales, el Instituto Open Society de George Soros y
la agencia para el Desarrollo internacional (USAid), usaron la tecnología virtual para
desinformar a la opinión pública boliviana. En Ecuador, el presidente Rafael Correa declaró
hace poco que "las campañas de desinformación son parte del nuevo Plan Cóndor. Sabemos
quiénes eran comprados por la CIA y ahora son políticos que van a las marchas. Hay
financiamiento para grupos opositores, hay estrategias articuladas, redes sociales y supuestos
analistas e investigadores para generar escándalo".
En total, la Fundación Nacional para la Democracia (NED) gastó, en 2015, para fomentar la
oposición en Ecuador 1.052.818 dólares y, en especial, financió, según el secretario de
Comunicación, Patricio Barriga, plataformas digitales "con el único propósito de desprestigiar
mediáticamente al actual Gobierno". La Fundación Freedom House y la Sociedad
Interamericana de Prensa (SIP) también están participando activamente en la desestabilización
de la revolución Ciudadana ecuatoriana.
La oposición brasileña recibió un fuerte apoyo financiero y moral de la Fundación Albright
Stonebridge Group, de la exsecretaria de Estado, Madeleine Albright (1997-2001), para
destituir a la presidenta legítimamente elegida Dilma Rousseff. Madeleine Albright se convirtió
en una persona tristemente famosa cuando declaró que la muerte de 500.000 niños iraquíes
durante la guerra de EEUU contra Irak fue un "precio que valía la pena de pagar". Hilary Clinton
siempre ha sido su seguidora y admiradora. Los líderes opositores brasileños estaban
permanentemente consultando a Washington como proseguir con la destitución de la
presidenta. No le importó a la Casa Blanca la participación de la mayoría de los golpistas en las
redes de corrupción y el lavado de dinero. Lo que valía era terminar con el populismo de Lula
da Silva y Dilma Rousseff para asegurar el acceso de las transnacionales norteamericanas a los
recién descubiertos 100.000 millones de barriles de petróleo.
La neo-doctrina Monroe, incorporada por Barack Obama para América Latina, tiene también
su parte militar dura, que fue definida por el exjefe del Comando Sur, general John F. Kelly
(2012-enero 2016), en los siguientes términos: "EEUU tiene nuevas amenazas en
Latinoamérica, como el narcotráfico, terrorismo, la migración, la ayuda humanitaria y la
protección de los recursos naturales. Todo esto justifica la intervención del Pentágono en
cualquier lugar". Para este general, Honduras, El Salvador y Guatemala se aproximan a la
categoría de estados fallidos y, como no son capaces de gobernarse por sí mismos, necesitan
ayuda de EEUU. Para los líderes norteamericanos, esta 'ayuda' no puede ser otra que la
instalación de bases militares.
Se calcula que, actualmente, el Pentágono tiene más de 70 bases militares conocidas en
América Latina y no menos de 20 bases clandestinas, especialmente en Amazonía. Brasil y
Venezuela están prácticamente rodeados por estas instalaciones militares estadounidenses.
Actualmente, el nuevo presidente de Argentina, Mauricio Macri, está negociando la instalación
de dos bases militares norteamericanas en zonas estratégicas de gran importancia de
Argentina. Una se edificará en la provincia sureña de Tierra del Fuego para apoyar "tareas
científicas" en la Antártida, según anunció el presidente de Argentina. Pero es de conocimiento
público que las bases militares en el extranjero no tienen nada que ver con las tareas
científicas, sino con el control geoestratégico y geoeconómico de la zona de su interés.
La otra base se instalará en la Triple Frontera (Argentina, Paraguay y Brasil), donde está
ubicado uno de los acuíferos más grandes del mundo, Acuífero Guaraní. Tanto los presidentes
Néstor Kirchner como Cristina Fernández jamás permitieron la instalación de las bases
norteamericanas en su territorio. Ahora están corriendo tiempos nuevos en América Latina,
22
donde las élites están logrando dominar a las "masas ignorantes", en expresión de James
Traub, del Consejo de Relaciones Exteriores (CFR), quien alguna vez llamó a las élites a
"sublevarse contra las masas ignorantes", simplemente aplicando la neo-doctrina de Monroe.
Después de intentar desmontar los gobiernos progresistas, los globalizadores tratarán de
desintegrar al MERCOSUR, la UNASUR, la CELAC, la CARICOM y el ALBA. Para cumplir con sus
metas, los 'iluminados' globalizadores siempre encontrarán políticos prestos a ser sus
servidores, como fue alguna vez Alan García, de Perú, quien lanzó en 2010 la idea
norteamericana como si fuera la suya de que "no hay que crecer para adentro, como soñaron
en el Pacto Andino y el Mercosur. Hay que hacer el bloque para crecer hacia afuera", afirmó al
revelar que "quisiera que la historia me recuerde como promotor de la Alianza del Pacífico
(AP)". Es cierto que el expresidente de Perú fue uno de los promotores de la AP por encargo de
EEUU, pero no su creador, pues AP fue la obra de Washington para facilitar la creación de la
TPP (Acuerdo Transpacífico de la Cooperación Económica), cerrando el pase al avance
comercial de China tanto en América Latina como en Asia y Oceanía.
Así funciona la neo-doctrina de Monroe, que combina la fuerza "blanda" y la brutal para
proteger y expandir los intereses norteamericanos en América Latina, haciendo retornar poco
a poco a sus "hijos" extraviados y desinformados por completo a su "patio trasero".
Sputnik.com
Texto completo en: http://www.lahaine.org/barack-obama-resucita-la-doctrina
Colombia. “TERMINARAN EN UNA CARCEL O UNA TUMBA”, DICE SANTOS
Un frente rebelde resiste en Colombia
http://www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/4-303666-2016-07-08.html
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, le advirtió a un sector de las Fuerzas Armadas
Revolucionarias de Colombia (FARC), que amenaza con no acogerse a los acuerdos de paz que
se negocia en La Habana, que serán combatidos. El frente primero Armando Ríos de la guerrilla
colombiana entrega en zonas del oriente del país panfletos en los que advierte que no se
desmovilizará porque considera que no hay solución a los problemas económicos y sociales del
país.
Desde la localidad de El Retorno, en el departamento del Guaviare, el presidente Santos le dijo
al sector de la guerrilla colombiana que están ante la última oportunidad de acogerse al
acuerdo, y advirtió que si no lo hacen, “les aseguro que terminarán en una cárcel o en una
tumba”, reprodujo radio Caracol. El mandatario indicó que Colombia tiene Fuerzas Armadas
más fuertes y contundentes que se concentrarán en combatir a aquellos grupos que se queden
por fuera del proceso de paz.
Santos visitó El Retorno para cumplir una de las tantas charlas públicas que viene realizando
con sus colaboradores sobre “pedagogía para la paz”.
El ultimátum lanzado por Santos contrasta con el optimismo y el apoyo de los colombianos al
proceso de paz. Según el último sondeo de la firma Gallup, un 53 por ciento de los
colombianos cree que se logrará un acuerdo en la negociación que sostienen en Cuba el
Gobierno y las FARC, un aumento de ocho puntos porcentuales frente a la encuesta de
diciembre. El apoyo a la decisión del Gobierno de negociar con la guerrilla más antigua del
continente subió 10 puntos porcentuales a un 72 por ciento. Un 69 por ciento se declaró a
favor de insistir en el diálogo en vez de la opción militar, un alza de 11 puntos porcentuales. La
23
mayoría de los colombianos se niega a que los líderes de las FARC participen en política sin
pagar con la cárcel. Los comandantes rebeldes insisten en que no están dispuestos a pasar un
sólo día en prisión.
Ellos no representan a las Farc”: Pastor Alape sobre guerrilleros disidentes
http://www.elespectador.com/noticias/paz/ellos-no-representan-farc-pastor-alape-sobreguerriller-articulo-642128
El negociador de paz de la guerrilla aseguró que enviará una comisión al Frente Primero, que
se niega a entregar las armas, para averiguar qué está sucediendo.
Por: Redacción Paz
“Ellos no representan a las Farc”: Pastor Alape sobre guerrilleros disidentes
Luego de que el Frente Primero de las Farc anunciara este miércoles que se aparta del proceso
de paz entre el Gobierno y esa guerrilla, y que no está dispuesto a entregar las armas y
desmovilizarse, alias Pastor Alape, negociador del grupo subversivo, aseguró a la agencia
Reuters que enviará una comisión para recolectar información de lo que está sucediendo y
poder tomar una decision al respecto. (Leer aquí: Frente de las Farc dice que no entregará las
armas)
Sin embargo, aseguró que el líder de esa estructura, Néstor Gregorio Fernández, alias Iván
Mordisco, es un hombre que estaría en “proceso de descomposición” y que buscarán hablar
con él. “Lo que entendemos es que es un grupo de personas que dice yo no le jalo a esto y
queremos que gente que está cerca vaya hasta allá y aclare qué es lo que está pasando, ellos
son del frente primero de las Farc pero no representan al frente primero y mucho menos a las
Farc”, afirmó Alape. (Leer aquí: Radiografía del frente de las Farc que se declara rebelde a la
paz)
Ese mismo día, el presidente Juan Manuel Santos les advirtió a los guerrilleros que no se
quieran desmovilizar que este proceso de paz es “su última oportunidad…porque de otra
forma terminarán en una tumba o en una cárcel". (Leer: "Es su última oportunidad": Santos a
guerrilleros que no quieren desmovilizarse)
A la par de que se conocía la posición de este frente disidente (ubicado en el Guaviare), el
equipo de paz del Gobierno informó yaer que dirigentes de las Farc viajarán a Colombia para
participar en visitas técnicas de preparación de las zonas de concentración de la guerrilla
previstas en el acuerdo sobre el fin del conflicto.
Según Humberto de la Calle, jefe negociador del Gobierno, no se trata de una concesión a las
Farc sino un "escenario necesario para preparar la implementación de los acuerdos de cese al
fuego y dejación y para que los hombres y mujeres de las Farc conozcan los términos de lo que
se acordó y solidifiquen una decisión colectiva de asegurar el cumplimiento de los acuerdos".
Un grupo de miembros de las Farc también viajará desde Colombia a La Habana para
entrenarse como integrantes del mecanismo de verificación del proceso de paz. Los
guerrilleros recibirán en la isla preparación en las tareas que deberán cumplir como
observadores del fin del conflicto colombiano, junto a representantes del Gobierno, la ONU y
varios países de la región.
Además, el próximo 10 de julio comenzará en el municipio colombiano de Briceño, en el
estado de Antioquia, "un esfuerzo conjunto de sustitución voluntaria de cultivos de uso ilícito".
24
Tras pactar las condiciones del fin del conflicto, las delegaciones de Gobierno y guerrilla han
seguido trabajando en La Habana para resolver temas pendientes antes de la firma del
acuerdo definitivo de paz, cuya fecha aún no se ha anunciado.
Entre esos temas pendientes se incluyen los flecos de los otros cuatro puntos acordados desde
que comenzaron las negociaciones (desarrollo rural, participación política, narcotráfico y
víctimas) además del punto sobre implementación y refrendación del acuerdo de paz.
*Con información de EFE
'Timochenko' ordena a las Farc suspender la extorsión
El líder guerrillero argumentó que el propósito de los cobros ilegales era cubrir la alimentación
y dotación de los subversivos.
http://www.elespectador.com/noticias/paz/timochenko-ordena-farc-suspender-extorsionarticulo-641501
El jefe máximo de las Farc, "Timochenko", anunció que ordenó suspender el reclutamiento de
guerrilleros y el cobro de "impuestos" o extorsión en sus zonas de influencia por la cercanía de
un acuerdo de paz.
"Hace más de tres meses suspendimos el reclutamiento de hombres y mujeres para las filas de
las Farc", dijo el líder rebelde en una entrevista con la Agencia Prensa Rural.
"Y acabo de dar la orden a todas las estructuras de las Farc de que suspendan todos los
impuestos a toda la actividad económica legal que hay en las regiones, impuestos que le
tenemos a los ganaderos, a las distintas fuentes de financiación, al gran comercio", aseguró
"Timochenko", detallando que ese dinero era para cubrir la alimentación y dotación de los
guerrilleros.
Las Farc y el gobierno de Juan Manuel Santos negocian desde noviembre de 2012 en Cuba para
poner fin a más de medio siglo de conflicto armado.
En el marco de esos diálogos, el pasado 23 de junio las partes sellaron las condiciones del cese
al fuego bilateral y la entrega de armas de los rebeldes, que se concretarán una vez firmada la
paz.
Por avances como esos, que hacen vislumbrar la pronta firma de un acuerdo definitivo, el líder
guerrillero dijo que había tomado las decisiones de acabar con el reclutamiento de nuevos
rebeldes y el cobro de extorsiones.
"Consideramos que es el momento y de todas maneras no lo hacíamos no por falta de
voluntad sino porque nosotros tenemos que comer y no es la comida para una dos o tres
personas, son cientos, miles de guerrilleros", explicó.
"Creemos que ya falta poco, que con lo que tenemos ahí (de recursos) logramos llegar al final
del acuerdo", aseguró también "Timochenko", quien pidió a sus hombres irse estudiando los
acuerdos que han alcanzado hasta ahora con el gobierno de cara a una próxima conferencia
guerrillera en la que los discutirán y aprobarán internamente.
Las Farc, surgidas en 1964 de una sublevación campesina, son la guerrilla más grande de
Colombia con unos 7.000 combatientes, según cifras oficiales.
25
Colombia vive un conflicto armado que ha enfrentado durante más de 50 años a guerrillas,
paramilitares y agentes del Estado, dejando un saldo de alrededor de 260.000 muertos, 45.000
desaparecidos y 6,9 millones de desplazados.
OBISPOS Y SACERDOTES VINCULADOS CON CRÍMENES DEL
PARAMILITARISMO EN COLOMBIA
http://www.rebelion.org/docs/214314.pdf
Entrevista a Enrique Santiago, asesor jurídico de las FARC en los Acuerdos de
Paz
“Hay militares en Colombia que intentan desestabilizar la paz”
https://www.rebelion.org/noticia.php?id=214355
Gorka Castillo
Público
Este abogado español, militante del PCE y una de las piezas claves del
departamento de derechos humanos de Izquierda Unida, representa la cuota
internacional que las FARC debían de poner sobre la mesa de la comisión
jurídica que negocia la paz en Colombia. Antiguo secretario general de CEAR,
Enrique Santiago (Madrid, 1964) conoce con precisión las dificultades de
megaprocesos similares tras formar parte del equipo que redactó la querella
contra Augusto Pinochet en 1998 y que, al menos, sirvió para meter el miedo
en el cuerpo del dictador chileno. Ahora, en las negociaciones entre las FARC
y el gobierno de Juan Manuel Santos de La Habana, su papel ha resultado
clave para acercar la paz, algo que para los colombianos siempre ha sido una
especie de sueño.
Su aportación técnica al nuevo marco jurídico que reparará las heridas de la
guerra, incluidas las competencias penales de los tribunales transicionales, han
revolucionado la forma de encarar la solución de conflictos armados
enquistados como es el de Colombia.
-¿Puede asegurar que ha terminado el conflicto armado más antiguo de
América Latina?
-Puede decirse que ha concluido el enfrentamiento militar. Creo que es
irreversible pero aún hay riesgos de que el conflicto social continúe si las
partes involucradas, especialmente las instituciones colombianas, no son
26
capaces de implementar los acuerdos ya alcanzados en la mesa de
conversaciones de La Habana.
-¿Qué obligaciones impone esta primera fase?
-En primer lugar, el cese de hostilidades bilateral y definitivo. Además, se ha
firmado un acuerdo para un proceso de pacificación que, en el caso de las
FARC, contempla la entrega física de las armas pero que al Estado
colombiano le obliga a modificar su doctrina militar en beneficio de la política
y a desmantelar el paramilitarismo que aún existe.
-¿Quién ha cedido para que este acuerdo se haya producido?
-Ambas partes. Por el lado de la insurgencia el esfuerzo ha sido muy elevado.
En primer lugar, porque ha aceptado un marco institucional y legal que ha
combatido durante 50 años y ahora lo reconoce como el escenario en el que
realizar la reincorporación de sus militantes a la vida civil sin obligar al
Estado a abrir un proceso constituyente. Eso no significa que las FARC hayan
renunciado a esta premisa, pero sí que acepta las normas que establece la
Constitución actual. El Estado colombiano, por su parte, ha cedido en la
inclusión de un nuevo ámbito de justicia para la paz que establece que los
máximos responsables del conflicto no son sólo los oficiales de la junta mayor
del ejército sino que puede extenderse a presidentes, ministros, dirigentes
políticos y miembros de empresas multinacionales que financiaron el
paramilitarismo.
-A la espera de que empiecen a aparecer nombres simbólicos, ¿hay riesgos
de que embarranque este proceso?
-No lo creo, sinceramente. El mayor problema, como indica un preciso
informe de la Corte Penal Internacional (CPI) sobre Colombia, es desatar la
inmensa bolsa de impunidad que históricamente ha protegido a los agentes del
estado y a los grupos paramilitares pero no a la guerrilla. Un ejemplo de esto
es la actitud de la fiscalía general cuando creó una unidad especial destinada a
contextualizar los crímenes de las FARC, y que procesó más de 50.000
conductas delictivas, pero no los asesinatos cometidos por las fuerzas del
estado y el paramilitarismo.
-Este proceso también tiene sus detractores. Un sector político importante
del país ha anunciado su oposición a los acuerdos de La Habana.
-Así es, aunque intuyo que esa resistencia, que hoy capitanean el expresidente
Álvaro Uribey el procurador general de la Nación Alejandro Ordóñez, irá
cambiando a medida que la realidad se imponga. Cuando llegue el momento
de la verdad, es decir, cuando el pueblo colombiano tenga que refrendar los
27
acuerdos definitivos en las urnas, el Centro Democrático de Uribe no podrá
mantener su oposición porque sería como pedir a las FARC que no se
desarmen. Lo importante ahora es que la gran mayoría de los mandos de las
Fuerzas Armadas colombianas apoyan el proceso de paz.
-¿También hay divergencias entre los militares?
-Algún sector no sólo es contrario al acuerdo sino que, y lo digo claramente,
conspira para desestabilizarlo junto a grupos paramilitares. Y es aquí donde el
papel de EEUU, que ha actuado como acompañante en las negociaciones de
La Habana, va adquirir un protagonismo relevante aportando todo el potencial
de información e inteligencia que tienen para evitar que el proceso de paz no
descarrile.
-¿Es el mayor peligro al que se enfrentan?
-Hay otro aún mayor. Se trata de que las inversiones reclamadas para acabar
con la desigualdad estructural que afecta, sobre todo, a las zonas rurales de
Colombia y que desencadenaron el conflicto hace más de medio siglo se
realicen. Si ese dinero no llega, si no se reinvierte buena parte del presupuesto
que el Estado destinaba a la guerra, y que llegó a ser el 7% del PIB, cundirá la
insatisfacción y habrá problemas.
-¿Podría producirse una escisión en las FARC, como le sucedió al IRA en
Irlanda?
-No lo creo. Mi impresión es que se trata de una organización muy
cohesionada. Por La Habana ha pasado la práctica totalidad de su secretariado,
la comandancia máxima de la guerrilla, y todo lo acordado con el gobierno
estaba ya consensuado entre ellos. Esto no significa que no puede haber
miembros de las FARC que al final decidan optar por salidas individuales
pero la realidad es que si se producen, algo que no lo creo ni deseo, será un
número anecdótico si lo comparamos con la estructura militar conjunta de este
grupo armado.
-Por delante está la entrega del armamento y su verificación, una tarea
difícil y polémica teniendo en cuenta la dimensión de las FARC. ¿Cuál es la
garantía de que se realizará con transparencia?
-El mecanismo de verificación ha sido aprobado de forma bilateral. Las FARC
entregarán su armamento a las Naciones Unidas, cuyo equipo estará
compuesto por representantes de la CELAC, y no a las instituciones del
Estado colombiano, que se limitarán a estudiar los informes que reciban. Pero
28
antes de iniciar este proceso se deberán cerrar algunos temas pendientes muy
importantes para el proceso de paz.
-¿Cuáles?
-Los programas de reincorporación de la guerrilla a la vida civil, la definición
de los territorios donde se asentarán los guerrilleros, los programas de
desarrollo económico y social de las comunidades rurales afectadas por el
conflicto y la norma de amnistía e indulto para todas las personas que han sido
penalizadas por cultivos ilícitos, no por el tráfico, de coca. Y, por supuesto,
aún falta por acordar un calendario estricto para el cumplimiento de los
acuerdos. Si no se avanza en estos puntos será difícil alcanzar la solución
definitiva.
-¿Cómo repercutirá este acuerdo en la estabilización de la región?
-La base de la ley de amnistía incluye a las personas que tuvieron que huir de
Colombia bajo la acusación de colaborar con la insurgencia. También
contempla programas específicos de retorno acompañado, es decir, del regreso
de los exiliados bajo condiciones que garanticen su reintegración y
reincorporación a la sociedad. Es el modelo que viene desarrollando ACNUR
en otros lugares del mundo y que se aplicó con éxito en los países del cono sur
latinoamericano, los que sufrieron la represión y persecución de las dictaduras
militares.
Sorprende descubrir que el principal asesor de las FARC en La Habana es
Álvaro Leyva, jurista y miembro del Partido Conservador.
Y ministro de minas y energía con Belisario Betancur.
-Su perfil es antagónico al ideario de las FARC. ¿Quién es Álvaro Leyva?
-Es un hombre de profundas convicciones conservadoras y un demócrata
integral. Hablamos de una persona que desde hace más de 40 años se implicó
a fondo para conseguir la paz con el enorme sacrificio que eso supone en un
país como Colombia. Es admirable, un ser polifacético convencido de que la
paz sólo se construye acabando con las desigualdades sociales y cuya
aportación al acuerdo alcanzado es la mayor contribución jamás realizada por
un político colombiano. Creo que todos hemos contraído una inmensa deuda
con él.
-¿Qué papel ha desempeñado España en este proceso?
-Nulo. Y es triste si lo comparamos con su papel de acompañamiento jugado
en los tres anteriores procesos. En realidad, se autoinvalidó debido al
29
seguidismo que desde la época de José María Aznar hizo a los gobiernos
colombianos. España rompió su neutralidad a raíz del fracaso de las
negociaciones de paz del Caguán en 2002 y se posicionó a favor del ejecutivo
de Álvaro Uribe cuyas sombras son muy alargadas. En La Habana no ha
habido presencia española y podía haber apoyado el proceso como lo han
hecho Alemania, la UE y EEUU pero no ha sido el caso. Cabe la posibilidad
de que ahora forme parte del grupo de verificación internacional.
Fuente original: http://www.publico.es/internacional/hay-militarescolombia-desestabilizar-paz.html
Naciones Unidas destaca 'arquitectura financiera para el posconflicto'
http://www.elespectador.com/noticias/paz/naciones-unidas-destaca-arquitectura-financierael-posc-articulo-641759
"Esperamos movilizar por lo menos en una primera fase 100 millones de dólares", señaló
Arnaud Peral, director del programa de Naciones Unidas para el Desarrollo.
Por: Redacción Economía y Negocios
Arnaud Peral director de País del programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Un escenario que reunió a las empresas proveedoras de servicios públicos fue el más propicio
para hablar de paz y posconflicto a escasos días de rubricar una negociación de varios años.
Naciones Unidas estima que en el país se ha creado toda una arquitectura financiera para la
posguerra. Arnaud Peral director del programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD)
considera que la negociación de paz entre el gobierno del presidente Santos y las Farc "es uno
de los procesos mejor desarrollados y diseñados que hemos visto alrededor del mundo".
En reciente evento organizado por Andesco en Cartagena (gremio que agrupa a empresas de
servicios públicos) se destacó la importancia de articular los planes de desarrollo y posconflicto
con la Agenda 2030. "Hay una articulación muy fuerte entre lo que se ha discutido en la
Habana en el proceso de paz y la misma Agenda 2030", dijo Peral.
"Queremos poner mucho énfasis en la implementación de los servicios públicos, en particular
de agua, alcantarillado y todas las Tic (Tecnologías de la información y la comunicación),
porque son temas que están muy presentes en esta agenda global; hay metas específicas para
estos sectores de provisión de servicios públicos", dice el representante de las Naciones
Unidas.
¿Cuáles son las metas a cumplir dentro de la Agenda?
Son 17 objetivos y más de 230 indicadores. Se plantea llegar a 2030 con cobertura universal en
acceso al agua, alcantarillado y electricidad. En el caso de esas metas sabemos que existe
todavía algunas brechas importantes a pesar de los avances importantes en Colombia, pero
todavía hay brechas en el sector rural. Sabemos que se plantean avances significativos en el
plan nacional y desarrollo actual. Hay un gran compromiso del gobierno actual de las
empresas, pero tenemos que generar esos pactos para avanzar más rápidamente.
30
Cuando se está firmando el proceso de paz, ¿ve que hay más posibilidad de que el Estado haga
más presencias en sitios donde nunca estuvo?
Creo que el acuerdo de paz va a permitir dar acceso (a servicios públicos) en dos sentidos: de
un lado a tener mayor presencia del Estado de llegar a eso territorios con temas de salud,
educación y alcantarillado. Yo creo que se abre la posibilidad de hacer más presencia en
provisión de servicios y bienes públicos que es al final lo que quiere la gente; tener más
oportunidades de acceder a esos servicios. También se va a generar confianza para que
empresas internacionales inviertan en esos territorios.
¿Desde la ONU se ve que el proceso de paz en Colombia tiene una meta final, que caminamos
hacia allá?
Confiamos (en) que se está avanzando de la manera correcta. Siempre estuvimos a favor de
una solución negociada para el fin del conflicto. Después de un proceso que se ha adelantado
de manera muy juiciosa, vemos que estamos llegando a la recta final y solamente faltando
pocas semanas para la firma definitiva, yo creo que es uno de los procesos mejor desarrollados
y diseñados que hemos visto alrededor del mundo, entonces confiamos de que luego su
implementación va a tener la misma calidad.
¿Cómo va a hacer la presencia de Naciones Unidas en esta etapa?
Naciones Unidas va a estar implicada de diferentes maneras. Como se sabe va a ver una misión
política para la verificación del cese bilateral y dejación de armas, pero las agencias del sistema
ONU van seguir haciendo su trabajo, ayudando a generar los pactos, ayudando en el caso que
se requiera en la implementación de ciertos aspectos de políticas públicas que van a favorecer
la confianza en el posconflicto. Estamos ayudando al ministerio del posconflicto en programas
como Manos a la Paz, Manos a la Obra, programas de acción comunal y de acceso a la justicia.
Yo creo que se está planificando bien a nivel nacional entre la comunidad internacional y el
Gobierno. Con una participación muy amplia de la sociedad civil, de los actores del territorio se
van a poder implementar programas que va a realmente cambiar la vida de las personas.
¿El aporte económico de la ONU para ayudar en el posconflicto de cuánto va a ser?
Se ha creado toda una arquitectura financiera para el posconflicto a través de diferentes
fondos que ha establecido el gobierno con entidades territoriales . Hay un fondo con el Banco
Interamericano (de Desarrollo) para temas de sostenibilidad, está el fondo de la Unió Europea
que va a tener un capitalización importante. Esta el fondo de Naciones Unidas que hemos
creado y esperamos a movilizar por lo menos en una primera fase 100 millones de dólares; hay
muchas manifestaciones de países que han mostrado interés en capitalizar este fondo. Países
como Suecia, Inglaterra y Canadá han mostrado interés y capitalizado el Fondo de Naciones
Unidas y esperamos que después de la firma se puedan aumentar las contribuciones.
¿Qué otro tipo de aporte hacen distinto a lo financiero?
Están aportando desde el punto de vista político de respaldo y unanimidad alrededor de este
proceso y de los acuerdos de paz de toda la comunidad internacional. La presencia de nuestro
secretario general (Ban Ki-moon) en la Habana, es una señal importante.
¿Naciones Unidas ve nubarrones que puedan afectar la marcha del proceso?
31
En este momento tenemos que enfocarnos en el optimismo. Hacer mucha pedagogía, explicar
de qué se trata y ayudar a acelerar el paso hacia la implementación de los acuerdos que al final
es una agenda de reconciliación nacional. Es una agenda de desarrollo; una agenda de
profundización y mejoría de los mecanismo de la democracia participativa colombiana. Hay
que explicarlo y mostrar resultados concretos por el momento, obviamente va a ver
dificultades, en ciertos aspectos y seguramente nos vamos a enfrentar con varios desafíos,
pero hay que enfocarnos en el optimismo y en la ejecución.
Una frase para calificar este momento que vive Colombia con el proceso de paz
Es un momento histórico que la comunidad internacional, que el pueblo colombiano y que las
víctimas estaban esperando desde hace 50 años, y aquí estamos para pasar a este momento
histórico.
El Índice de Agua ubica a la CdMx en el lugar 43 de 50 urbes que buscan ser
vistas como “sustentables”
http://www.sinembargo.mx/09-07-2016/3063303
En trabajo ¿Cuál es el país más 'trabajador' del mundo? Más explotados
será!
http://mundo.sputniknews.com/mundo/20160709/1061749259/pais-mas-trabajadormundo.html
LA “CASTA DORADA” GOBIERNA DESDE 1942 EL EDOMEX; ¿PODRÁ EL PRI DE
PEÑA RETENER EL BASTIÓN EN 2017?
POR LINALOE R. FLORES
http://www.sinembargo.mx/09-07-2016/3063810
Fábrica de pobreza y asistencia social en México
Parte 1. http://www.sinembargo.mx/04-07-2016/3054983
Parte 2. http://www.sinembargo.mx/05-07-2016/3062354
Parte 3. http://www.sinembargo.mx/06-07-2016/3055019
Partee 4. http://www.sinembargo.mx/07-07-2016/3060541
El PRI fincó su monopolio en el Edomex alentando la pobreza y el asistencialismo: especialistas
Me gusta797 Twittear
mail reddit meneame googleplus
Por Daniela Barragán julio 7, 2016 - 12:05 am • 1 Comentario
“El Estado de los contrastes”, así define un investigador al Estado de México. En la tierra del
actual Presidente de la República son comunes las colonias que tienen una zona para ricos y
otra para los muy pobres, sólo divididos por unas cuantas calles pero con una realidad que es,
por completo, diferente; que tiene grandes territorios industriales, de los principales del país, y
por otro lado pueblos donde comunidades indígenas apenas sobreviven a la pobreza.
32
El Estado de México es la entidad del país donde el número de pobres crece con mayor
rapidez. Foto: Cuartoscuro
CUARTA PARTE | Ver aquí PRIMERA PARTE | Ver aquí SEGUNDA PARTE | Ver aquí TERCERA
PARTE
Ciudad de México, 7 de julio (SinEmbargo).– A pesar de la riqueza que el Estado de México
tiene, al ser una región en la que comulgan grandes zonas industriales, múltiples actividades
económicas y el mayor número de habitantes del país, las personas en condiciones de pobreza
aumentan año con año, de acuerdo con las cifras del Consejo Nacional de Evaluación de la
Política de Desarrollo Social (Coneval).
Los últimos resultados presentados por este organismo, hasta el cierre de 2014, revelan que el
Estado de México fue la entidad del país que generó más pobres. Hoy está dentro de las 10
entidades con el mayor número de habitantes en pobreza y pobreza extrema a nivel nacional.
Actualmente hay un total de 8 millones 269 mil 852 pobres, y de las ocho carencias medibles
por el Coneval la población mexiquense presenta seis: rezago educativo, seguridad social,
servicios de salud, calidad y espacios de vivienda, servicios básicos en la vivienda y la
alimentación. En lo que respecta a los ingresos, más de un millón de personas pasaron a estar
por debajo de la línea de bienestar mínimo.
Sólo el 17.4 por ciento de la población no es pobre y no es vulnerable a serlo. Tanto la
población con ingreso inferior a la línea de bienestar como la población con ingreso inferior a
la línea de bienestar mínimo han aumentado 22.96 por ciento y 79.46 por ciento,
respectivamente, en seis años; es decir, el incremento de las personas en situación de pobreza
extrema es la que se ha recrudecido en ese periodo.
Por otro lado, la entidad es la que más aporta al Producto Interno Bruto (PIB) Nacional,
después de la Ciudad de México, con 9.3 por ciento del total.
El Estado de México es la entidad más poblada del país; en 2016 se contabilizaron 17 millones
026 mil 314 habitantes. En él, habitan 724 personas por kilómetro cuadrado, cuando a nivel
nacional el número es de 61 personas por kilómetro cuadrado. Es una entidad formada en gran
parte por migrantes, el 38.8 por ciento de sus pobladores nació en otro estado.
Eso es el Estado de México: un territorio de contrastes, dice Enrique Moreno Sánchez,
académico de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM) y miembro del Sistema
Nacional de Investigadores (SIN), en entrevista con SinEmbargo.
El especialista explica que en la entidad existen varios elementos que provocan la persistencia
en los altos índices de pobreza y el poco bienestar con el que los mexiquenses viven: Está, por
un lado, la falta de identidad de quienes habitan más cerca de la Ciudad de México y, por el
otro, el poco conocimiento que se tiene de comunidades de origen indígena que aún habitan
ahí.
La Ley de Derechos y Cultura Indígena del Estado de México reconoce la existencia de cinco
pueblos originarios: Matlatzinca, Mazahua, Nahua, Otomí y Tlahuica. A raíz de movimientos
migratorios, en la región también habitan 25 mil mixtecos, 14 mil mazatecos, 12 mil zapotecos,
9 mil totonacos y 6 mil mixes, la mayoría provenientes de estados como Guerrero, Hidalgo,
Oaxaca y Veracruz.
33
Pero Moreno Sánchez menciona una causa más: el poder que ahí ha cimentado, durante más
de 80 años, el Partido Revolucionario Institucional (PRI).
“Lo que el PRI ha hecho en el Estado de México es tomar decisiones en función de intereses
políticos y eso no puede estar por encima de las necesidades de la mayoría de las personas; no
puedes gobernar a partir de cierto interés político, ni sólo para medir cuánto vas a ofrecer con
la gente para saber cuánto obtendrás […] No se puede vivir bajo el sistema del asistencialismo
toda la vida”, comenta el académico.
POBREZA Y CARENCIAS A LA ALZA
Los cinco municipios más pobres del Estado de México tienen hasta al 84.1 por ciento de su
población en pobreza. Son Zumpahuacán, San José del Rincón, Sultepec, Ixtapan del Oro y
Luvianos.
En contraste, los cinco municipios “más ricos” de la entidad tienen sólo al 22 por ciento de sus
pobladores en condiciones de pobreza. Esos ayutamientos son Coacalco de Berriozábal,
Cuautitlán, Cuautitlán Izcalli, Metepec y Atizapán de Zaragoza, que si bien son los lugares
donde menos se padece ese indicador, son sitios en que en los últimos años se han acumulado
otros problemas graves: la violencia y la inseguridad.
“El Estado de México es de contrastes. Tenemos altos índices de pobreza y marginación, pero
también zonas que son consideradas caras. Hay municipios que tienen un índice de calidad de
vida estable, bueno, y otros no, como Nezahualcóyotl o Ecatepec, donde la pobreza y la
marginación aún es elevada. Hay otros municipios como San José del Rincón o Ixtapan del Oro
donde los índices de pobreza y marginación son elevados. En la periferia de la gran ciudad [la
Ciudad de México] hay esta problemática […] Hay avances, pero no son los deseados. Han
aumentado los servicios para reducir esta marginación, pero también el número de gente
pobre se ha incrementado”, agrega el investigador.
Más ejemplos de esta situación son Ecatepec de Morelos, que tiene casi el 40 por ciento de su
población en condiciones de pobreza, y Nezahualcóyotl, con el mismo rango; les siguen
Toluca, capital del estado, que tiene el 41 por ciento, y Chimalhuacán, con un 62 por ciento de
sus habitantes en condiciones de pobreza.
A POBREZA COMO HERRAMIENTA POLÍTICA
El Gobernador Eruviel Ávila durante un evento con comunidades indígenas. Foto: Cuartoscuro
El Gobernador Eruviel Ávila durante un evento realizado con comunidades indígenas. Foto:
Cuartoscuro
Según cifras del Coneval, el 41.5 por ciento de la población mexiquense tenía en sus viviendas
algún nivel de hacinamiento; el 41.2 por ciento de la población ocupada percibía un ingreso de
hasta 2 salarios mínimos y el 16.2 por ciento de la población mayor de 15 años no tenía la
primaria completa.
En 2005, en el último año del Gobierno de Enrique Peña Nieto en esa entidad, sólo dos de cada
10 jóvenes recién egresados de la educación superior lograban emplearse.
El Índice de Desarrollo Humano Municipal en México (PNUD), concluyó que “El nivel de
desarrollo humano del Estado de México se calcula mediante los logros de la entidad, en salud
(0.826), educación (0.696) e ingreso (0.710), alcanzados en relación con los parámetros
34
observados a nivel internacional. El resultado global para el desarrollo es un IDH de 0.742 en
2010, que es comparable con el nivel de desarrollo de países como República Islámica de Irán y
Dominica.
“Si se compara el desempeño de los municipios con mayor y menor desarrollo, es posible
reconocer que en el Estado de México coexisten condiciones de desarrollo similares a las de
Qatar y Ghana”.
Del total de la población mexiquense, 12 millones 495 mil 225 están en edad de trabajar, pero
sólo 7 millones 008 mil 772, tienen un trabajo, según cifras de la Secretaría del Trabajo y
Previsión Social (STPS). La principal actividad de ocupación es el comercio y en la industria
manufacturera.
El grueso de la Población Económicamente Activa, gana de 1 a 5 salarios mínimos y la tasa de
informalidad se mantiene en el rango de 55 a 60 por ciento desde 2005.
El ingreso promedio de la población ocupada es de 6 mil 008 pesos para los hombres y de 4 mil
633 pesos para mujeres.
Moreno Sánchez, sostuvo que en el Estado de México, una región con grandes atrasos, se le ha
dado mucha importancia a la parte política pero no a los problemas de la sociedad.
“No se puede vivir dando despensas, gorras, camisetas, ayudas mensuales. Es necesario que
cambie el diseño institucional, ya que un partido puede tener buenas ideas, pero hay mucha
distancia en la traducción de los beneficios que la sociedad espera, que es la superación de la
pobreza, la marginación y mejores índices de desarrollo humano”.
Agregó que el Estado de México no puede perder el control en decisiones tan importantes
como la seguridad, la procuración y la impartición de justicia, “se le está yendo de las manos”.
“Mientras no haya decisiones que involucren el control, al desafío de organizar un nuevo
orden de gobierno que permita una estrategia política a largo plazo, no temporal, seguiremos
con los problemas que hoy se tienen”, puntualizó.
Siete de cada 10 personas considera insegura la ciudad donde vive, indica
sondeo del Inegi
http://www.jornada.unam.mx/2016/07/07/politica/017n1pol
Cambia 61.4% de encuestados sus hábitos para llevar joyas, dinero o tarjetas de crédito,
apunta
Roberto González Amador
Siete de cada 10 personas mayores de 18 años considera que la vida en su ciudad es insegura.
La proporción se eleva a 95 por ciento en Villahermosa, Tabasco, y rangos similares se
registran en Coatzacoalcos, Veracruz, y Acapulco, Guerrero, revelaron los resultados de una
encuesta elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Prácticamente
dos de cada tres personas manifestaron haber modificado sus hábitos respecto a llevar cosas
de valor, como joyas, dinero o tarjetas de crédito por temor a sufrir algún delito.
El sitio percibido como más inseguro, donde es más probable ser víctima de un crimen, es el
cajero automático de banco localizado en la vía pública (hay algunos dentro de centros
comerciales). Así lo considera prácticamente ocho de cada 10 (78.6 por ciento de la población)
encuestados por el Inegi. El segundo lugar lo ocupa el transporte público, el tercero sucursales
bancarias y el cuarto las calles por donde usualmente transitan las personas.
35
Los datos corresponden a la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU), levantada
trimestralmente por el instituto. El ejercicio muestra que la percepción sobre inseguridad no
ha mejorado en comparación con los levantamientos previos, incluso ha empeorado.
En junio pasado, 70 por ciento de los encuestados a escala nacional mayores de 18 años
consideró que vivir en su ciudad es inseguro. La cifra no muestra mejoría respecto del
trimestre inmediato anterior, donde la opinión en ese sentido era compartida por 69.9 por
ciento de los participantes en la muestra, de acuerdo con los datos del Inegi. En diciembre de
2015, el porcentaje fue de 67.7; en septiembre de ese año, 68 por ciento, y en junio de 2015,
69 por ciento, según los datos divulgados ayer por el instituto.
Las ciudades que fueron consideradas por sus habitantes como las más inseguras fueron, en
junio pasado, Villahermosa, Tabasco, con una proporción de 95 por ciento de residentes que
comparte esa opinión. La siguió Coatzacoalcos, Veracruz, con 94 por ciento, y Acapulco,
Guerrero, con 93.5 por ciento. En la región oriente de la Ciudad de México, que incluye las
delegaciones Iztapalapa, Milpa Alta, Tláhuac y Xochimilco, tienen esa percepción de
inseguridad 91.2 por ciento de los habitantes.
En cambio, las ciudades con la menor percepción de inseguridad entre sus habitantes son:
Mérida, Yucatán, con 30 por ciento de habitantes que se decanta por esa opinión; Tepic,
Nayarit, con 30.4 por ciento; Campeche capital, con 36 por ciento; Saltillo, Coahuila, con 43.8,
y Durango capital, con 46.4 por ciento, , reportó el organismo.
Factores de desconfianza
La sensación de inseguridad por temor al delito y las expectativas que tiene la población sobre
la seguridad pública se generan por la influencia de diversos factores, como ser testigo de
conductas delictivas o antisociales que ocurren en el entorno donde se desenvuelve la
población, según el instituto.
Añadió que el temor a ser víctima de un delito puede hacer cambiar rutinas y hábitos, así como
la percepción que se tiene sobre el desempeño de la policía.
En este sentido, 45.2 por ciento de la población tuvo de manera directa, durante el segundo
trimestre del año, algún conflicto o enfrentamiento con familiares, vecinos, compañeros de
trabajo o escuela, en algún establecimiento o con autoridades de gobierno.
Mientras tanto, casi dos de cada tres personas en el país (61.4 por ciento de la población)
manifestó que en el segundo trimestre del año modificó sus hábitos respecto a llevar cosas de
valor, como joyas, dinero o tarjetas de crédito por temor a sufrir algún delito; mientras que
55.6 por ciento reconoció haber modificado hábitos sobre permitir que sus hijos menores
salgan de su vivienda; 49.3 por ciento transformó costumbres en cuanto a caminar por los
alrededores de su vivienda pasadas las ocho de la noche, y 31.4 por ciento alteró rutinas
relacionadas con visitar parientes o amigos.
Los porcentajes de la población de 18 años y más que identificó a las diversas corporaciones
policiales y que percibió su desempeño como muy o algo efectivo en sus labores para prevenir
y combatir la delincuencia, fueron: Gendarmería Nacional (62.2 por ciento), Policía Federal
(58.2), policía estatal (46.2) y policía Preventiva Municipal (42.8 por ciento).
36
Francisco Toledo: “El Gobierno de México no sabe en qué país vive ”
Incluye vídeo
http://internacional.elpais.com/internacional/2016/07/06/mexico/1467826079_432956.html
El pintor oaxaqueño critica al gobierno y a los maestros y dice que una intervención policial
añadiría más descontentos a las protestas
JACOBO GARCÍA
El pintor vivo más cotizado de México llega a la entrevista con tres cuadernos bajo el brazo de
chicas rubias en ropa interior.
Aparece con el pelo alborotado, la camisa arrugada y el rostro preocupado. Sin embargo, de
los tres pliegues, sólo el último es novedad.
La situación en Oaxaca, su tierra, es convulsa “y así es difícil vivir, trabajar y llevar una vida
normal” dice Francisco Toledo (Juchitán, Oaxaca, 1940) bajo las buganvillas de la que fuera su
antigua casa, hoy un museo donado a la ciudad.
En Oaxaca hay un gran descontento social y no sólo de los maestros
“Hay una gran tensión a raíz de los muertos, la represión policial, el intento de desalojo y la
falta de diálogo…estamos viviendo algo que ya sufrimos en 2006 y es preocupante” lamenta.
¿Está a favor de una intervención policial para despejar las carreteras? VÍDEO ALBA MORA
ROCA
Los maestros disidentes del sindicato (CNTE) agrupados en la Sección 22- que aúna los
docentes de Chiapas, Oaxaca y Guerrero- se han levantado contra la reforma educativa
impulsada por Enrique Peña Nieto. A las protestas y plantones en plazas públicas han añadido
bloqueos de carreteras que asfixian los estados de Oaxaca y Chiapas. Por el momento hay una
tibia mesa de negociación puesta en marcha pero el gobierno amenaza con actuar si siguen los
bloqueos.
¿Está a favor de una intervención policial para despejar las carreteras?
“Sería un gran error porque hay un gran descontento social y no sólo de los maestros. Una
actuación violenta de la policía uniría toda la inconformidad de la gente que además se
extiende por varios Estados” contesta.
Estamos viviendo lo mismo que ya sufrimos en 2006
Según Toledo, “la intervención policial de 2006 sólo sirvió para calmar la situación
brevemente" pero luego reaparecieron los problemas” recuerda. El artista zapoteco atribuye
gran parte de la culpa de este nuevo conflicto a la cerrazón del Gobierno y las autoridades
mexicanas “que no saben en qué país viven y que cree que el DF es todo México”.
En apenas unas frases el maestro Toledo, como todos lo conocen, repite dos veces una misma
fecha: 2006, un año que se clava como una sombra dolorosa en el inconsciente de los
oaxaqueños.
Aquel año se vivió la crisis política y social más grave del Estado de Oaxaca y para muchos
analistas es el origen de la revuelta que se vive hoy.
37
Todo comenzó en junio con una frustrada intervención policial en contra de los maestros
acampados en el zócalo de Oaxaca. A partir de ahí, comenzó una revuelta popular contra el
gobernador Ulises Ruíz que sumió durante más de cinco meses la entidad en una anarquía
delirante.
De junio a noviembre de 2006 el gobernador y el Congreso local sesionaron en la
clandestinidad, la policía desapareció de las calles y había barricadas en cada esquina
controladas por el movimiento insurgente. Las emisoras de radio y televisión fueron ocupadas
y la seguridad estaba a cargo de la APPO que detenía, juzgaba y condenaba a los delincuentes
en la misma farola de la plaza. La capital oaxaqueña entró en un total desgobierno que se
extendió por otros puntos del Estado, hasta que todo terminó con una intervención policial
por tierra y aire, pocos días antes de la llegada de Felipe Calderón al poder.
Diez años después la tensión tiene forma de mensaje de WhatsApp y circula frenéticamente de
celular en celular: “compañeros, hoy intervendrá la Federal” dice un mensaje anónimo.
“Alerta, no salgan hoy de casa porque habrá enfrentamientos en la calles” dice otro.
“La gente está temerosa y nerviosa. Y lo que nos falta aún…” responde enigmáticamente el
pintor.
Por el momento el gobierno dice que no negociará ni una coma de la ley que obligará a
examinarse a los maestros y ha pedido permiso al Senado para emplear al ejército si fracasa la
mesa de negociación puesta en marcha. Los maestros llevan en pie de lucha tres años, pero la
muerte a tiros de 8 civiles segun el Gobierno - 11 segun los maestros- tras una intervención
policial, ha tensado más la situación.
¿Tienen razón los maestros en sus demandas?
Es complicado. A ellos los han pintado como los malos de la película, pero hoy son una fuerza
política que ha llegado hasta donde el Estado les ha permitido. Durante años, como si fueran
parte del folclore, acampaban en el zócalo de Oaxaca para protestar. Y cada año se iba
solucionando el problema sin que la sociedad civil supiera en qué consisten esos acuerdos”
explica. “El propio Estado creó sindicatos como el de la SNTE -dirigida por la polémica Elba
Esther Gordillo, hoy encarcelada- a la que le dieron de todo a cambio de fuerza política y votos,
pero igual sucede con sindicatos petroleros o mineros que están coptados por el Estado”
resume.
Toledo no es una opinión más. A unos días de cumplir 76 años, no sólo es el máximo
exponente de la escuela oaxaqueña de arte, de la que han salido pintores como Rufino
Tamayo o Luis Zárate, sino que es símbolo vivo de la defensa de las tradiciones y la cultura
indígena tanto en la calle como en el estudio.
En la obra de Toledo su tierra zapoteca es el centro de su creación. De ella emanan las
criaturas primitivas y fantásticas que salen de su paleta. Paralelamente ha puesto en pie una
activa red de centros culturales y medioambientales en Oaxaca desde los que difunde el arte
entre los jóvenes y da apoyo a las causas que considera justas. Una de las más conocidas fue su
movilización, tamal en mano, en contra de la instalación de un McDonal’s en el Zócalo hasta
que logró que la cadena estadounidense tirara la toalla.
38
En el caso de los maestros, Toledo reconoce que es muy difícil tener una opinión clara. Sin
embargo, hay dos cosas que le irritan sobremanera del mundo que vive; “el desprecio a la
enseñanza en lenguas indígenas y la comida chatarra que invade las comunidades”.
Actualmente Toledo "apadrina" a 16 hijos de campesinos que estudian en la Normal de
Tlacochahuaya pero su última aportación a la causa ha sido editar cuadernos escolares en
lengua indígena elaborados con papel reciclado e ilustrados con animales autóctonos,
grabados del cuerpo humano o plantas dibujadas por los primeros dominicos españoles que
recorrieron la sierra en el S.XVII.
”Estos cuadernos construyen y forman y no esa porquería", dice lanzando las libretas de
blancas modelos californianas que traía bajo el brazo y que utilizan la mayoría de niños
indígenas de Oaxaca.
Si algo le cabrea más que el conflicto magisterial en sí mismo es descubrir que está sólo en su
cruzada. "No hay nada en zapoteco: la unica manera de la que la lengua siga viva es teniendo
radios, perfiódicos, publciaciones, revistas; hay que hacerlo y el Estado no se ocupa de eso" se
lamenta.
Entrevista a Alberto Acosta /La década desperdiciada del progresismo
https://www.rebelion.org/noticia.php?id=214237
Vitor Taveira
Rebelión
- ¿Cuáles son los principales avances y limitaciones del llamado “ciclo
progresista” en América Latina? ¿Se puede decir que este ciclo se ha
agotado?
Es complejo dar una respuesta amplía y generalizable para todos los países.
Cada proceso tiene especificidades. Pero, cabría delinear algunos elementos
gruesos. Empecemos anotando que los “progresismos” en realidad no han sido
gobiernos de izquierda, pues no han afectado las estructuras de producción ni
la propiedad de medios de producción, ni siquiera fomentaron una verdadera
reforma agraria. Tampoco han asegurado las libertades de expresión, de
organización y movilización popular, de vida sexual, y hasta han mantenido
una perspectiva utilitarista con la Naturaleza.
Son gobiernos que intentaron impulsar políticas post-neoliberales, aunque sin
llegar a cuestionar en la práctica al capitalismo. La recuperación del papel del
Estado en la economía sirvió simplemente para la modernización capitalista
de sus economías, al tiempo que se disciplinan sus sociedades para conseguir
los avances modernizadores propuestos. Su preocupación por una mejor
atención a las demandas sociales es inocultable, pero sus resultados no son
satisfactorios.
39
Estas gestiones se apuntalaron en crecientes ingresos gracias a elevados
precios de las materias primas y, en algunos casos, en una mejor repartición
de la renta minera o petrolera a favor de los Estados. El problema es que, para
sostener las políticas sociales, optaron por ampliar los extractivismos:
petrolero, minero, agrario… En definitiva, luego de tantos años de
“progresismo”, no hay señales de transformaciones ni en las estructuras
productivas (a veces nombradas tecnocráticamente como “transformación de
la matriz productiva”) ni en las relaciones sociales de producción. Se
mantuvo, e incluso profundizó, la modalidad de acumulación primario
exportadora, fortaleciendo las lógicas rentistas, las prácticas clientelares y se
consolidaron gobiernos autoritarios, es decir caudillezcos. Estos gobiernos
incluso empiezan a volverse peligrosos por su tendencia, cada vez más
marcada, a irrespetar los propios procesos democráticos que los vieron nacer.
- ¿Considera que ante la disminución de la renta, sobre todo por la caída de
los precios de los commodities, que sostenían parte importante de las
políticas sociales, los gobiernos progresistas se quedaron sin respuestas
contundentes ante la nueva realidad? ¿Por qué?
Considerando que los “progresismos” no cambiaron las estructuras
productivas, no cuestionaron al capitalismo, y solo plantearon meras reformas
sostenidas con rentas extractivistas, entonces no es de extrañar que, al caer los
precios de los commodities, ya no tengan recursos para sostener su manejo
económico expansivo y “benefactor”. En realidad, ya hace mucho tiempo
estos gobiernos perdieron la iniciativa de cambio. Sus respuestas innovadoras
duraron muy poco. Por ejemplo, Ecuador avanzó hasta en transformaciones
civilizatorias en su proceso constituyente de los años 2007 y 2008: tenemos la
definición de la Naturaleza como sujeto de derecho o la misma propuesta del
Buen Vivir o sumak kawsay, en tanto alternativa al desarrollo y hasta al propio
capitalismo; conceptos que luego, con la práctica gubernamental, fueron
vaciados de su contenido revolucionario y se volvieron dispositivos a favor
del poder hegemónico burgués que se esconde detrás de la fachada
“progresista”.
En realidad estos gobernantes no estaban para impulsar utopías como las
orientadas por el Buen Vivir. Esto explica la adhesión a un extractivismo
exacerbado, sostenido bajo un discurso seudo revolucionario que dice
necesitar esos recursos para sostener las políticas sociales, cuando estas
políticas deberían financiarse, por ejemplo, con mayores cargas tributarias y
redistributivas sobre los grupos más acomodados.
Así las cosas, el desarrollismo, la eficacia tecnocrática, la provisión de
infraestructura y el incremento del consumo solo son emulaciones de modelos
anclados en viejos patrones de raigambre colonial. El Estado se recuperó en
desmedro del fortalecimiento de la sociedad, inclusive a través del
40
debilitamiento de los propios movimientos sociales que elevaron al poder a
los gobiernos “progresistas”. Y a la postre podemos decir que estamos frente a
por lo menos una década o más desperdiciada desde una perspectiva histórica.
- ¿Qué factores internos y externos contribuyen para este “giro a la
derecha” que se observa en diversos países del subcontinente?
Repito lo dicho. Cada caso concreto merece su propio estudio. Lo que sí debe
quedar claro, incluso para la memoria histórica, es que el actual “giro a la
derecha” empezó de la mano de los propios “progresismo” con el abandono de
sus propuestas iniciales. Es más, la “derecha” ya vive en las entrañas del
“progresismo” de los últimos años. Lo que ahora sucede es que ese “giro” se
vuelve cada vez más explícito con nuevos y viejos actores. Por eso tenemos
que aceptar que el “giro a la derecha” empezó cuando los “progresismos”,
hace tiempo, dejaron de representar a la verdadera izquierda.
Por tanto, asumir, sin una severa y profunda autocrítica, que dicho giro es el
producto de viejos grupos oligárquicos y sus emporios mediáticos, del
Imperio o la CIA, es casi tautológico: la oposición a procesos que puedan
conllevar cambios en las estructuras de poder, inclusive de mano de los tibios
“progresismos”, es su función. Es más, haber forzado los exctractivismos, los
gobiernos “progresistas” terminaron por consolidar viejas y nuevas alianzas
con las grandes empresas transnacionales y sus recaderos criollos.
Aquí cabría destacar, por otro lado, los efectos desmovilizadores que han
provocado el clientelismo de las políticas sociales y el consumismo que alentó
el manejo económico expansivo sin transformaciones estructurales, que han
facilitado el establecimiento de una suerte de conservadurismo en sociedades
que aceptan liderazgos autoritarios a cambio de (pocos) logros sociales y
económicos y de la idea de que se marcha hacia la modernidad a través del
desarrollismo...
Como saldo, entonces, tenemos que en gran medida los “progresismos” son
responsables directos de su fracaso, sobre todo -digámoslo sin rodeos- porque
no intentaron enfrentar al capitalismo, sin que esto signifique que este reto
puede ser resuelto en el corto plazo.
De alguna manera también cargan con algo de responsabilidad aquellos
aplaudidores oficiosos de los “progresismos”, sobre todo europeos, incapaces
de formular críticas oportunas cuando empezaron a presentarse profundas
desviaciones de las propuestas originales. Inclusive callaron ante los
reiterados atropellos a los Derechos Humanos y Derechos de la Naturaleza,
argumentando –torpemente, por cierto- que no se debía hacer el juego a la
derecha. Ese respaldo acrítico y su silencio cómplice no puede ser olvidado.
41
- ¿Se puede considerar realmente que hay una "nueva derecha" como
algunos dicen? ¿Qué tiene de nueva?
Con el tiempo sabremos cuáles son aquellos elementos nuevos, si es que los
hay. Lo que nos consta es que la derecha siempre ha sido muy hábil, y más en
la actualidad. Luego de un primer desconcierto, grupos conservadores y hasta
oligárquicos se insertaron en los “progresismos” o convivieron con ellos,
haciendo estupendos negocios. Ese el caso de Brasil, Argentina, Ecuador,
Bolivia, para mencionar unos cuantos casos. Incluso hoy vivimos nuevas
formas de imperialismo, como la que se experimenta de la mano de la
expansión china en América Latina, frente a la cual el propio “progresismo”
se ha vuelto cómplice.
Por otro lado, otros grupos de derecha aprendieron sobre la marcha. Luego del
golpe de Estado contra Chávez en 2003 y de haberse marginado de la
institucionalidad electoral creada por los “progresismos” -sobre todo en
Venezuela- estos grupos incursionan dentro de dichas instituciones inclusive
con éxito, al aprovechar las artimañas electorales que en su momento los
propios “progresistas” armaron para enquistarse en el poder.
- ¿Podrá la derecha que llega al poder hacer los ajustes que plantea y
mantener las políticas sociales y la ampliación democrática de los últimos
años como suele prometer? ¿O los avances de los últimos años están en
riesgo?
Antes que nada tengamos claro que, sean los “progresismos” o la derecha
explícita, tarde o temprano todos tendrán que hacer ajustes en función de los
intereses de la acumulación capitalista. Ahora, en el caso de las derechas
explícitas, si estas pretenden instrumentar un manejo económico abiertamente
neoliberal, con enormes impactos sociales, entonces su estabilidad puede
verse seriamente afectada; en este momento se puede analizar lo que sucede
en la Argentina del neoliberal presidente Macri. De todas formas la situación
será aún más compleja en medio de la crisis de los precios de las materias
primas y de la consiguiente disminución de recursos fiscales para sostener las
políticas sociales.
Actualmente dudamos que las sociedades estén mejor preparadas ahora que
antes de los gobiernos “progresistas” para defender algunos logros sociales
conseguidos. Bien sabemos que gracias a la gestión autoritaria de los
“progresismos” los movimientos sociales han sido duramente golpeados o aún
desmantelados. Hasta diera la impresión, en cierta medida, que en términos
políticos el propio “progresismo” implícitamente está dejando la mesa servida
42
para un nuevo y masivo ajuste neoliberal, en especial al debilitar aquellas
fuerzas que lideraban la lucha popular.
- La corrupción ha sido un argumento frecuente utilizado por la derecha
política y la prensa que afecta a la opinión pública y desacredita a gobiernos
progresistas. ¿Cómo analiza el tema de la corrupción en estos gobiernos de
izquierda?
Aceptémoslo, ya no son gobiernos de izquierda. Quizá lo fueron en su
momento, pero cuando actuaron sin cuestionar las estructuras capitalistas orgánicamente corruptas y corruptoras- que actualmente rigen en nuestras
sociedades, terminaron siendo absorbidos por la podredumbre del juego de
intereses del capital. La izquierda en esos gobiernos murió hace tiempo, y solo
queda una careta tras la cual se esconde muchas veces un nido de ratas.
La gran prensa –alineada con la derecha explícita- pretende presentar a los
“progresismos” como izquierda y lo está logrando, gracias a la misma
indefinición y tibieza de gobiernos que ponen direccionales a la izquierda,
pero curvan a la derecha… Si bien reconocemos que la corrupción no es un
invento de los “progresismos”, lo lamentable es que los gobiernos
“progresistas”, que ganaron las elecciones levantando la bandera de la anticorrupción, hayan caído en las redes de la misma.
¿Pero qué podíamos esperar de quienes solo querían “domar al capital” sin
recordar que este esconde fuerzas inmanejables para los individuos? Por eso
parece hasta incomprensible como el gobierno del PT se alió con aquellos
grupos políticos corruptos que ahora impugnan a la presidenta Rousseff, cuyo
partido también está directamente envuelto en el entramado corrupto del
Mensalao y con el turbio manejo del Petrolao.
Debe quedar claro, por lo demás, que si no hay acciones concretas orientadas
a superar el horizonte capitalista necesariamente se aceptan sus reglas del
juego, en donde la corrupción y la impunidad conforman un dúo inseparable.
Para superar al capitalismo la experiencia histórica nos ha enseñado, hasta la
saciedad, que no bastan las buenas intenciones.
- En el actual momento político, ¿cómo usted cree que la izquierda pueda
actuar para contraponer este avance de la derecha?
Las izquierdas tienen ante sí una tarea muy compleja. En muchos casos
enfrentan desde hace rato a los caudillos progresistas sea en las urnas o en las
calles, al mismo tiempo que combaten a las derechas fuera o dentro de los
gobiernos progresistas, procurando recuperar un espacio propio en
condiciones muy adversas. A eso sumemos que, gracias incluso a los grandes
medios, la imagen de la izquierda nuevamente se va deteriorando: la izquierda
43
se muestra como inviable en base a ejemplos de la vieja Unión Soviética o de
la actual Venezuela.
No queda la menor duda, las izquierdas están abocadas a empezar una vez
más aprendiendo de las lecciones de estos años de “progresismos”,
recuperando la visión utópica de futuro que pasa por enfrentar el capitalismo.
Y, así mismo, la izquierda debe replantearse el papel que le da al liderazgo.
¿Acaso hay una persona capaz de dirigir el proceso revolucionario con su
ilustre intelecto? Por más de izquierda que sea esa persona, la respuesta
debería ser contundente: ningún individuo puede enfrentar al sistema, por más
“iluminado” que se crea... es una tarea que recae en la organización popular,
no pensada desde la cúpula estatal.
Entonces, la tarea es revertir el dominio capitalista actual y crear un poder
desde los intereses de toda la sociedad, así como repensar el Estado desde lo
comunitario, democratizando la democracia. Esto demanda una democracia
directa en todos los ámbitos posible de la sociedad; la intervención directa de
la propia sociedad organizada, sobre todo desde los ámbitos comunitarios y,
todo esto, plantea la necesidad de crear espacios de autogestión desde los
propios territorios. En síntesis, como proponemos desde Monstecristi Vive, la
solución no está en el Estado -mucho menos en el mercado-, aunque este, sin
ser una herramienta de dominación, si podría contribuir a la construcción de
una sociedad no jerarquizada y autoritaria, siempre que esté controlado desde
lo comunitario.
Desde esa perspectiva, el planteamiento de un nuevo Estado debe incorporar
otros elementos clave: el Buen Vivir o sumak kawsay; los Derechos de la
Naturaleza, que incluye su desmercantilización, tanto como la de los bienes
comunes; la descolonización y la despatriarcalización. Desde la lógica de los
derechos colectivos se abre la puerta a ciudadanías colectivas y comunitarias.
Por igual, desde la lógica de los Derechos de la Naturaleza se necesita otro
tipo de ciudadanía, que se construye también en lo ambiental. Ese nuevo tipo
de ciudadanía es plural.
En suma, asegurar la vida de los seres humanos y de la Naturaleza es el
clamor generalizado que demanda una democracia real y participativa, así
como una economía que liquide el abuso del capital financiero y extractivista.
Ese es el primer paso para una transición hacia una economía comunitaria y
sustentable sustentada en la solidaridad, la cooperación y la reciprocidad,
sobre bases de equidad en la distribución del ingreso y de redistribución de la
riqueza. Desde esa perspectiva la atención económica prioritaria debe
centrarse en el ser humano como parte de la Naturaleza; es decir en la
reproducción de la vida antes que en la reproducción del capital.
44
Esto demanda un gran esfuerzo y mucha creatividad. Si aceptamos que la
igualdad de los ingresos y la riqueza incrementa la libertad, la igualdad del
poder político hace aún mayor esa libertad. A la inversa, donde no hay
libertad, la igualdad carece de sentido. La igualdad está ligada a la libertad y
la justicia. Sin igualdad perecen todas las garantías y todos los derechos. Y la
libertad será siempre la libertad de quien piensa diferente, como planteaba
Rosa Luxemburg.
- Por último, ¿cómo analiza la situación de Ecuador en este contexto?
Ecuador grafica mucho de lo arriba expuesto. De las propuestas iniciales del
año 2006 a la práctica gubernamental hay un gran trecho. Inclusive las
acciones progresivas de los primeros años están en franco retroceso. Ejemplos
sobran: el gobierno empezó desmontando los esquemas de flexibilización
laboral, hoy los vuelve a introducir; se opuso a firmar un TLC, hoy está a
punto de firmar uno con la Unión Europea; alienta las privatizaciones, a las
que se cerró la puerta en sus primeros años de gestión. Se llega hasta a niveles
realmente perversos. Ha utilizado como pretexto el terremoto de Pedernales
del 16 de abril de este año para financiar los enormes déficits públicos
recurriendo a impuestos indirectos -regresivos- como el IVA y tributos a
cigarrillos, bebidas azucaradas y alcohólicas, y hasta entregando grandes
campos petroleros en explotación -campos maduros- a empresas
transnacionales, lo que el propio Correa en 2005 consideraba una “traición a
la patria”; en este recuento no puede faltar la promoción activa del
extractivismo por parte del correísmo: explotación de petróleo en el centro sur
de la Amazonía, la apertura de la mega minería o el fomento de los agro
negocios a través de grandes plantaciones.
Lo que si debe quedar claro es que, en casi todos estos países, pero
concretamente en Ecuador la pobreza se redujo en tanto hubo dinero
excedentario de las exportaciones petroleras, mientras los sectores
empresariales más grandes sacaban la gran tajada de una economía en
expansión. Tan es así, que en un documento interno del gobierno ecuatoriano
se reconoció que, “en síntesis, nunca antes los grupos económicos poderosos
estuvieron mejor, nunca antes los más excluidos de la Patria estuvieron
menos peor.”
Por tanto, si en Ecuador se establece la derecha explícita, sobre todo la
derecha del siglo XX -la derecha del siglo XXI en realidad ya la lidera el
propio Correa, pero manteniendo la imagen y el discurso de izquierda- en el
ámbito económico ya es bastante lo que se ha avanzado desde la perspectiva
del librecambio con esta suerte de neoliberalismo transgénico: el Estado
fortalecido ha servido para cristalizar muchos de los objetivos neoliberales,
que no se avanzaron antes gracias a la resistencia popular. Es más, en tanto
que dichos sectores -sobre todo movimientos sociales- han sido debilitados
45
por el progresismo caudillista, no habrá actores con la fortaleza de antaño para
enfrentar una derecha que se avizora incluso revanchista. Es más, un gobierno
de la derecha tradicional, que podría incluso haber aprendido a no ser tan
dogmática, dispone de todo un instrumental jurídico represivo desarrollado
por el correísmo, con el que se ha reprimido y criminalizado la protesta
popular.
Ahí está pues la gran tarea de las izquierdas: reaccionar frente a esta
embestida de las múltiples “derechas” que hoy viven en nuestra región y, de
esa lucha, atreverse por fin a cuestionar a la propia civilización del capital,
civilización que no debe ser “domada”, sino superada en base a un proceso de
transiciones múltiples que exige mucha responsabilidad y siempre más
democracia.
Vitor Taveira es comunicador social brasileiro, periodista y máster en
Estudios Latinoamericanos.
FELIPE PIGNA | HISTORIADOR/ “Argentina no pudo ser EEUU por su
burguesía”
Felipe Pigna (Mercedes, Buenos Aires, 1959) es el historiador más conocido de Argentina
CARLOS E. CUÉ
http://internacional.elpais.com/internacional/2016/07/07/argentina/1467920169_804575.ht
ml
Pregunta. ¿Cómo han sido estos primeros 200 años de independencia?
Respuesta. Han sido 200 años complejos, algunos de los sueños de Tucumán se fueron
realizando, sobre todo los de Belgrano, el primer hombre que habló de industria, igualdad de
la mujer, educación popular. Ellos aprovecharon la caída de la monarquía española. Había
mucha presión británica para que no declarasen la independencia, lo frenaron hasta la caída
de Napoléon, en 1815.
P. No pensaban en Argentina aún.
R. Eran las provincias unidas de Sudamérica. Cuando se firma la independencia había salida a
los dos océanos, todo Bolivia, Uruguay, parte del sur de Brasil. Tucumán también es el inicio de
la guerra civil argentina porque no se ponen de acuerdo sobre la forma de gobierno. Belgrano
propone una monarquía con un inca como Rey, Juan Bautista Tupac Amaru, hermano de Tupac
Amaru, el gran líder de la mayor rebelión antiespañola. Pero no triunfó.
P. ¿Como era Argentina entonces? ¿Se podía hablar de pueblo?
R. No, ni mucho menos. Era un territorio enorme, disperso, con grandes problemas de
comunicación, extrema pobreza.
P. ¿Era una sociedad feudal?
R. No, era estancieril. Es muy diferente. En el feudalismo hay semiesclavitud, es un mundo
cerrado. La estancia es una institución capitalista, hay reglas de trabajo, pago en metálico, un
producto exportable: cuero, lana, tasajo, una grasa para comida de los esclavos en Brasil, Cuba
46
y EEUU. Buenos Aires ya entonces era una zona muy rica pero a la vez con mucha pobreza. Por
eso llega la revolución, la burguesía la apoya para sacarse de encima a España que cobraba
impuestos enormes.
P. ¿Cuándo llega la época dorada?
R. La guerra civil argentina fue larguísima. Solo en 1862 llega la unidad. Empieza el sueño
moderno de un gran Estado impulsado por la educación, que promovió Sarmiento. Logró una
ley moderna a nivel mundial en 1884: educación gratuita obligatoria a cargo del Estado. Había
que unificar a esa mezcla que traía la inmigración. Italianos, españoles, rusos, polacos,
alemanes. Era una torre de Babel. La educación común era la unificación. En 1869 teníamos un
71% de analfabetos. Sarmiento sueña un país de gente culta, dice que las clases americanas
son atrasadas, un concepto muy de la época. Hubo grandes masacres de indios justificadas en
base a la civilización.
P. ¿Argentina competía de igual a igual con EEUU?
R. En ese momento estábamos cabeza a cabeza con EEUU, eran los dos gigantes de América.
En 1901, en la Conferencia Panamericana, Roque Sáenz Peña, delegado argentino, logra frenar
un proyecto de EEUU de moneda única y derribar barreras aduaneras. Ese poder tenía
Argentina.
P. ¿Por qué Argentina se quedó atrás?
R. EEUU despegó a partir de 1900 porque EEUU se dio cuenta muy tempranamente de que el
campo debía ser el motor de la industria. Fue modélico en eso. Tomaron una decisión que era
la antítesis de Argentina: distribuir la tierra que se iba ganando al indio de forma equitativa en
terrenos de no más de 30 hectáreas. Eso hizo que los farmers tuvieran que tecnificar el campo,
promovió la inventiva y la industria. Hubo una integración social muy horizontal. En Argentina
se entregó la tierra a grandes latifundistas que no la poblaron y se dedicaron a especular con
los campos. Argentina no fue EEUU porque su burguesía, su clase dirigente, elige el modelo
agroexportador. Solo apuesta por la industria a partir de 1930. Pero tuvo épocas de esplendor,
a partir de 1935 se vive gran crecimiento industrial. Y ya era una potencia intelectual, no por
nada García Lorca estuvo más de un año en Buenos Aires.
P. ¿Y cuándo se torció?
R. Es un error atribuirle al peronismo, como hacen los liberales, la caída de Argentina. Al
contrario, había un país muy injusto y el peronismo intenta poner un poco en caja. Desde ese
momento hay un boicot de las clases altas al modelo industrial peronista. Perón amplía
salarios, por primera vez hay una inflación por demanda.
P. ¿Y cuándo empieza la decadencia?
R. Con la dictadura militar de los 70 y un poco antes, con el rodrigazo, un plan de ajuste
salvaje, que acaba con el modelo de distribución peronista. Era un gobierno peronista agotado,
muerto Perón, en plena crisis del petróleo. Y con la dictadura, además del desastre de los
desaparecidos, que llega porque había mucha resistencia –hubo 200 paros en los dos primeros
años de dictadura-. El peronismo había logrado una distribución del 51% para los trabajadores
y el 49% para el empresariado. Hasta los 70, Argentina tenía índices de pobreza extrema
bajísimos para Latinoamérica, índices de educación de niveles europeos e incluso superiores.
Mejores que España, por ejemplo. Tenía una muy buena escuela pública a la que iba el 90% de
47
la población, todas las clases sociales. Era una sociedad igualitaria que se truncó en los 70 y
apareció una pobreza estructural que se mantiene hasta hoy con algunos momentitos en los
2000 de recuperación. Argentina no se recuperó de los 70 porque el kirchnerismo cometió
errores como no atacar la pobreza estructural, no generar condiciones de trabajo genuinas. A
los que mejor les fue en los años del kirchnerismo fue a los que no lo votaron, algo similar a lo
que pasó en Brasil.
P. ¿Si vivieran los congresistas de Tucumán ahora cómo verían esta Argentina?
R. Como historiador no puedo poner en su boca qué dirían. Sí sabemos que era gente muy
preocupada por la industria, por las libertades públicas, por la justicia. Argentina llega a sus
200 años complicada, en un franco retroceso con un Gobierno de derecha más preocupado
con la venganza que con la justicia y con una impresionante falta de sensibilidad social. Soy
optimista porque tengo mucha fe en la gente de este país, se amaña frente a las circunstancias
adversas. Todo se cayó en 2001 y salimos. En el último pueblo de este país vas a encontrar una
escuela de teatro, de títeres, por la importancia que el argentino le da a la cultura. Es un país
casi imposible de gobernar, parecido a Italia. Alberdi decía “el argentino es un celoso
cumplimiento de la ley… por el otro”. Es cierto que pudimos haber sido una enorme potencia,
éramos la quinta potencia, pero la gente se moría de hambre. Brasil ahora es la novena, andá
al norte de Brasil a ver cómo están. Andá a ver cómo viven ahora mismo en Detroit. Este país
siempre puede recuperarse porque tiene productos que siempre va a necesitar la humanidad
como alimentos. Pero cada crisis tiene unos costes enormes. Y queda la herida. Mejor no
volver a practicar.
LUIS ALBERTO ROMERO | HISTORIADOR/ “La pobreza es una novedad en
Argentina”
Luis Alberto Romero (Buenos Aires, 1944) es uno de los historiadores más respetados de
Argentina
http://internacional.elpais.com/internacional/2016/07/07/argentina/1467918807_491934.ht
ml
CARLOS E. CUÉ
Luis Alberto Romero es una referencia a la hora de estudiar la historia argentina.Ampliar foto
Luis Alberto Romero es una referencia a la hora de estudiar la historia argentina. RICARDO
CEPPI
Pregunta. ¿Cómo recorrió Argentina estos 200 años?
Respuesta. Hay que pensar en la enorme apuesta al vacío que hicieron los hombres que
decretaron la independencia, no sabían ni qué territorio iban a tener. Todo surge a partir del
hundimiento del imperio español, e inmediatamente después la guerra civil. Y luego el
proyecto de Fernando VII de reconquistar esto empezando por Venezuela. Todos cayeron
salvo esta zona del Río de La Plata. España intentó devolver las cosas a antes de Napoleón.
1816 era un momento muy incierto. San Martín no quería hacer la guerra sin tener el respaldo
de un estado, para no parecer un pirata. En Tucumán había mucha gente de bajo perfil. Desde
la independencia durante 70 años hubo guerras constantes. Hasta 1880 no hubo paz.
P. Y ahí comienza el esplendor.
R. Ahí Argentina descubre las enormes posibilidades del mercado mundial sobre la base de un
Estado consolidado y la educación pública. En 1816 no existía Argentina y no existió durante
mucho tiempo. Eran las provincias unidas del sur, un cheque abierto para ver quién se sumaba.
El nosotros estaba por definirse. Por eso la educación fue clave. La gran fábrica de argentinos
48
es la escuela. Todos los nacionalismos son inventos, hubo que hacerlo sobre todo para
incorporar a los inmigrantes. Si vemos cómo está ahora Europa hay que decir que a los
argentinos nos gusta hablar mal de nosotros pero ese fue un ejemplo muy exitoso de
asimilación e integración. En épocas más recientes vivimos migraciones de paraguayos,
peruanos, bolivianos y nadie plantea que ese sea un gran problema. Argentina triunfó en eso.
En la primera etapa hasta 1888 hay nacionalismo liberal, como Mazzini en Italia. Son
argentinos todos los que quieren vivir en Argentina. Es una idea roussoniana. Si acepta las
reglas es argentino. El giro es a principios del siglo XX cuando empieza a tener éxito la idea
alemana de nación como pueblo culturalmente homogéneo. El ser argentino. Y todo se
complica cuando intervienen en esta discusión el ejército, la iglesia, el radicalismo y el
peronismo. Cada uno tira para su lado. El ejército por la tierra, la iglesia por la nación católica,
que en los años 30 fue importante y una rama de ese nacionalcatolicismo lleva al peronismo. El
radicalismo despreciaba al resto.
P. ¿Cuándo se complica?
R. Desde el punto de vista económico la curva argentina tiene una primera flexión después de
la primera guerra mundial, ya no es tan fácil todo, y después a partir de 1930 con la crisis
económica. Pero la crisis fuerte es la de 1970. Ahí es donde Argentina empieza a venirse abajo.
Pero desde el punto de vista ideológico la quiebra viene antes, cuando la élite empieza a
entusiasmarse con la idea de la grandeza argentina, que lleva al nacionalismo duro. Hasta la
escuela pública cambia y se vuelve más adoctrinadora. Antes la idea era una Argentina
cosmopolita, liberal, abierta al mundo, como EEUU.
Mucha gente se pregunta si uno de los problemas de argentina no está en una
democratización demasiado rápida. De la idea de la igualdad unida a la de achatemos para ser
todos iguales y barramos con cualquier élite talentosa. Antes en Argentina la igualdad estaba
asociada a la movilidad ascendente. Pero después el peronismo instaló otras ideas. El primer
peronismo, en 1945, repartió igualdad sin producir grandes trastornos. Pero era un régimen
político autoritario con apoyo de masas. Uno de los frutos de la democratización rápida es que
lleva a movimientos totalitarios con gran base de apoyo, como pasó en Europa con Hitler o
Mussolini. En EEUU o Reino Unido las instituciones eran más fuertes y aguantaron.
P. ¿Por qué Argentina tuvo tantas dictaduras?
R. Los militares intervinieron porque eran llamados por la facción perdedora en la política.
Todo tiene que ver con la cultura nacionalista y la política facciosa que apela a los militares. No
existe la dictadura sin alguien que la apoye en la sociedad. Todo tiene que ver con la dificultad
de tener instituciones solidas que permitan que se haga política y no guerra civil.
P. ¿Qué pensarían los congresistas de 1816 si vieran la Argentina actual?
R. Es inimaginable. Habrían dicho probablemente que Fernando VII no estaba tan mal, jaja. Si
hubieran vivido durante la última dictadura militar lo habrían pensado. Con la inmigración
masiva la Argentina se hace de nuevo. Creo que los líderes de 1880, los que pensaron la nueva
Argentina, habrían visto esto como una tremenda decadencia. Creo que todavía en 1960 la
habrían reconocido como su Argentina, antes del golpe de Onganía. Pero después no. Hasta el
66 los obreros soñaban con el socialismo, los actuales solo piensan en cortar en la calle para
poder subsistir. El quiebre es en los 70. La pobreza es una novedad en Argentina. En enero del
66 una desocupación mayor del 6% parecía gravísima. No existía esta percepción de ahora de
que son dos mundos distintos, los pobres viven en otro y no tienen posibilidad de salir. Antes
había un camino de mejora. Tengo un amigo profesor de historia en la universidad de Buenos
49
Aires cuyo padre era analfabeto. Era el sueño argentino, el de los inmigrantes. Eso se ha roto.
Nadie cree que tenga un mérito especial trabajar.
P. ¿Cómo llega Argentina a 2016?
R. Depende de la perspectiva política de cada uno. Hay una gran división. Lo que diferencia a
Argentina es el enorme peso de las corporaciones, especialmente los sindicatos y los
empresarios que viven del Estado. Yo formo parte del grupo que cree que tenemos una
oportunidad, chiquita, que requiere mucho talento político y mucha suerte. Pero creo que se
puede cambiar, por ejemplo la corrupción instalada en el Estado. No es fácil. No es seguro que
este Gobierno no termine en lo mismo. Pero se puede hacer. Si el Estado pudiera lograr que
las escuelas en barrios pobres dejaran de dedicarse a alimentar a los chicos y volvieran a lo que
fueron cambiaría mucho.
P. ¿Hay una nostalgia de lo que pudo ser?
R. Eso es de gente mayor. Los jóvenes no tienen esa percepción. El tema de la dictadura que
para nosotros es clave para ellos es algo ajeno. Lo de la vieja grandeza no funciona mucho. No
creo que sea verdad que la Argentina debiera jugar en ligas mayores, yo me conformo con ser
un país mediano razonable. Pero estamos muy lejos de eso.
No fue el 9 sino el 19 de Julio. Una visión alternativa de la declaración de la
independencia de la Argentina
(Por Atilio A. Boron)
El proceso emancipatorio que se desataría con fuerza en el Río de la Plata luego de la derrota
de las dos invasiones inglesas a Buenos Aires, en 1806 y 1807, enfrentó desde su nacimiento a
dos formaciones sociopolíticas muy claramente definidas. Por un lado, un bloque oligárquicocolonial que a través de sucesivas mutaciones llega hasta la actualidad y que hoy se encarna en
el macrismo como su expresión sociopolítica; enfrentándolo había un sector de inspiración
jacobina que concebía a la emancipación como un paso hacia la construcción de un nuevo tipo
de sociedad, liberada de las lacras del viejo orden colonial. Figuras sobresalientes en este
grupo eran Mariano Moreno, Juan José Castelli y Bernardo de Monteagudo, todos graduados
de la Universidad de Chuquisaca, la segunda universidad creada en suelo americano después
de la de Santo Domingo y situada en lo que hoy es la ciudad de Sucre. De esta suerte de
Harvard hispanoamericana de la época colonial salieron algunos de los cuadros intelectuales
más importantes de los procesos independentistas de Sudamérica. Además de los arriba
mencionados deberíamos agregar los nombres de José Ignacio Gorriti, José Mariano Serrano,
Manuel Rodríguez de Quiroga, uno de los líderes de la gesta independentista del Ecuador;
Mariano Alejo Álvarez, precursor de ese mismo proceso en el Perú y Jaime de Zudáñez, que
desempeñó igual papel en el Alto Perú. No es un dato menor recordar que esa magna
universidad fue el foco que precipitó la Revolución de Chuquisaca el 25 de Mayo de 1809,
exactamente un año antes que la revolución de Mayo en Buenos Aires. A este notable grupo se
le unió, en el Río de la Plata, la figura gigantesca de Manuel Belgrano, un auténtico “hombre
del Renacimiento.” Belgrano fue un refinado intelectual, un lúcido economista que todavía hoy
sorprende con sus premonitorios análisis y audaces propuestas reformistas, periodista de fina
pluma, político y estratega militar, todo eso aparte de su profesión de abogado. Un hombre,
como Bolívar, que nació en una familia adinerada y que puso toda su fortuna al servicio de la
revolución y la independencia. Y como el caraqueño, murió también él sumido en la pobreza.
Para estos radicales rioplatenses como para Bolívar y Miranda en el norte de Sudamérica, la
derrota del imperio español no podía ni debía limitarse a la abolición del régimen político
50
colonial y su sustitución por otro independiente sino que debía también acabar con las
opresivas y arcaicas estructuras e instituciones económico-sociales impuestas por el
conquistador ibérico. La propuesta de esta ala radical del proceso independentista no se
limitaba, como en el caso del bloque conservador, a sustituir unas autoridades por otras sino
que apuntaban a la construcción de una nueva sociedad. Tal como lo anotara el historiador
Felipe Pigna, Moreno lo expresó con todas las letras en su “Prólogo” a El Contrato Social de
Jean-Jacques Rousseau: “Si los pueblos no se ilustran … si cada uno no conoce lo que puede, lo
que vale o lo que debe, nuevas ilusiones sucederán a las antiguas, y luego de vacilar algún
tiempo entre mil incertidumbres será tal vez nuestra suerte mudar de tiranos, sin destruir
jamás la tiranía.” Un siglo después sería Lenin quien manifestaría su preocupación por la suerte
de aquellos, en este caso el proletariado, que luchan contra el esclavista sin pretender acabar
con la esclavitud. Al igual que Bolívar, San Martín y Artigas, aquel grupo de geniales jacobinos
sudamericanos que anhelaba construir un nuevo orden pos-colonial fue aplastado por la
reacción oligárquico-colonial. Pero dejaron sembradas unas semillas que fecundarían
vigorosamente tiempo después y cuyos frutos serían recogidos y multiplicados por Martí,
Mariátegui, Fidel, el Che y Chávez, entre tantos otros.
En este sentido, la realización del Congreso de Tucumán que declararía solemnemente la
independencia de las Provincias Unidas del Río de la Plata sería apenas una primera floración
de aquellas semillas. En ese momento, 1816, el escenario internacional había cambiado para
mal. Los vientos huracanados de la Revolución Francesa y las cruzadas napoleónicas habían
amainado. La derrota de Napoleón en Waterloo precipitó, con el Congreso de Viena, la
restauración de las monarquías y la reconstrucción de las viejas fronteras europeas que habían
sido borradas del mapa por el arrollador empuje de los ejércitos de Napoleón, firmando con
premura el certificado de defunción del ciclo revolucionario abierto por la Revolución
Francesa. Sin embargo, la dialéctica de la historia demostró con elocuencia que aquel ciclo
distaba mucho de haber sido clausurado. Gramsci observó con sagacidad que su culminación
efectiva tuvo lugar en Octubre de 1917 en Rusia, cuando los bolcheviques tomaron el cielo por
asalto y clausuraron, entonces sí que definitivamente, el ciclo abierto por la revuelta parisina
de julio del 14 de Julio de 1789 para abrir otro, con un contenido de clase y un horizonte
político radicalmente distinto: la era de las revoluciones socialistas.
En el caso concreto del imperio español en América los acuerdos gestados entre Metternich y
Teyllerand en el marco del Congreso de Viena decepcionaron a la monarquía ibérica porque no
contemplaban el apoyo europeo para recuperar sus levantiscos territorios allende el Atlántico.
Pese al desaire de sus socios europeos, cuyos principales actores y sobre todo el Reino Unido
veían como beneficioso para sus intereses la desintegración del otrora imponente imperio
español en América, el re-entronizado Fernando VII lanzó una violenta y masiva ofensiva
militar destinada a reconquistar sus posesiones americanas. Era, como lo confirmó la historia,
una empresa destinada al fracaso. Las noticias que llegaban a América luego de la derrota de
Napoleón movilizaron a los patriotas en el Río de la Plata. Quien primero reaccionó fue José
Gervasio de Artigas, que ni lerdo ni perezoso convocó al Congreso de los Pueblos Libres en la
ciudad entrerriana de Concepción del Uruguay, mismo que culminó el 29 de Junio de ese año
con la presencia de delegados de la Banda Oriental (hoy República Oriental del Uruguay),
Corrientes, Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y Misiones. Artigas reaccionó de este modo en
respuesta a la actitud del muy oligárquico Directorio instalado en Buenos Aires luego de la
Asamblea del Año XIII. Desconfiaba el caudillo oriental del proyecto que aquél tenía para el
antiguo Virreinato del Río de la Plata. La clara admiración del Directorio y sus principales
figuras, Pueyrredón y Rivadavia entre otros, por las monarquías europeas, y muy
especialmente por la británica, y su exacerbado unitarismo contrariaba los ideales
republicanos, democráticos y federales de la Liga Oriental. Fue por eso que con la excepción de
Córdoba las demás provincias de la Liga no enviaron representantes al Congreso de Tucumán,
51
algo que la historiografía oficial de la Argentina mucho se cuida en revelar. Los líderes de
aquellas provincias ya daban por sentada la Independencia de las Provincias Unidas y, además,
desconfiaban de los planes urdidos por la oligarquía porteña. El más audaz había sido
pergeñado y llevado a la práctica por Carlos María de Alvear, a la sazón Director Supremo de
las Provincias Unidas del Río de la Plata. En tal carácter le había enviado al embajador británico
en Río de Janeiro, Lord Strangford, una carta en la que, entre otras cosas, decía que “Estas
provincias desean pertenecer a Gran Bretaña, recibir sus leyes, obedecer su gobierno y vivir
bajo su influjo poderoso. Ellas se abandonan sin condición alguna a la generosidad y buena fe
del pueblo inglés y yo estoy resuelto a sostener tan justa solicitud para librarlas de los males
que las afligen. … Inglaterra no puede abandonar a su suerte a los habitantes del Río de la
Plata en el acto mismo que se arrojan en sus brazos generosos...” Como puede comprobarse,
el servilismo del actual Ministro de Hacienda de Mauricio Macri, Alfonso de Prat Gay, quien le
pidió perdón a los inversionistas españoles por los “maltratos” que le infligiera el gobierno de
Cristina Fernández tiene raíces profundas que como decíamos al principio de esta nota se
remontan a dos siglos atrás.
San Martín estaba al tanto de estas ignominiosas maniobras dirigidas a ahogar la revolución y
la independencia en su cuna. Mientras preparaba al Ejército Libertador en Cuyo seguía tan de
cerca como pudiera las deliberaciones que tenían lugar en Tucumán. Era consciente que todo
el proceso emancipatorio americano pendía de un hilo. En México y los países del Istmo la
rebelión popular estaba a punto de ser aplastada a sangre y fuego. Bolívar había sido
derrotado, Miranda agonizaba en su mazmorra en Cádiz y Nueva Granada (Colombia) y
Venezuela fueron arrasadas por los realistas. El virreinato de Perú seguía siendo un baluarte de
la reacción ibérica al cual Chile estaba encadenado. El futuro de la independencia quedaba en
las manos de las Provincias Unidas y de sus dos grandes dispositivos militares: el Ejército de los
Andes, comandado por San Martín, presto a cruzar la cordillera, liberar a Chile y desde allí
atacar al Perú. Y las guerrillas de Martín Miguel de Güemes en el Norte, para contener a las
huestes realistas que desde Perú se descolgaban para sofocar el último bastión de la rebelión:
el Río de la Plata. Por eso cuando el 9 de Julio de 1816 los delegados al Congreso aprobaron
una declaración en la que se comunicaba “solemnemente a la faz de la tierra, que es voluntad
unánime e indubitable de estas provincias romper los vínculos que las ligaban a los Reyes de
España, recuperar los derechos de que fueran despojadas e investirse del alto carácter de
nación independiente del Rey Fernando VII, sus sucesores y metrópoli” un sabor amargo se
apoderó de algunos diputados. Uno de ellos, Pedro Medrano, anticipando la furiosa reacción
que tendría San Martín al enterarse de la insoportable ambigûedad de una declaración como
la del 9 de Julio, que dejaba abierta las puertas a la entronización de una dominación colonial,
logró que en la sesión del Congreso que tuvo lugar el 19 de Julio se aprobara el siguiente texto
que debía ser agregado a continuación de ‘sus sucesores y metrópoli’. Decía, ya sin ambages,
‘de toda dominación extranjera’. Por eso, la fecha genuina de la declaración de la
independencia es el 19 de Julio, y no la que consagrara la muy conservadora historiografía
oficial de la Argentina. Es el 19, no el 9, el momento en que las Provincias Unidas se internan
en el camino sin retorno de la independencia nacional, declarándose ya sin eclecticismo ni
oportunismo algunos independientes no sólo de la corona española sino de cualquier otra
dominación extranjera. Dos siglos después esa aspiración sigue en pie, y la lucha iniciada por
aquellos gigantescos patriotas sudamericanos dos siglos atrás continúa con toda su fuerza para
lograr que, por fin, podamos sacudirnos el yugo del sucesor del viejo imperio español: el
imperialismo norteamericano.
52
Un final muy largo
Entrevista al economista Jorge Beinstein/ "El capitalismo se encuentra en su
hora final"
https://www.rebelion.org/noticia.php?id=214274
Arnaldo Pérez Guerra
Rebelión
Destacado economista marxista, especializado en prospectiva y economía
global, Jorge Beinstein es Doctor en Ciencias Económicas de la Universidad
de Franche Comté-Besançon, Francia, y actualmente profesor emérito de la
Universidad Nacional de La Plata, Argentina, donde dirige el Centro
Internacional de Información Estratégica y Prospectiva (CIIEP). Ha sido
académico en importantes universidades de Europa y América Latina, donde
también ha dirigido relevantes proyectos de investigación. Entre sus últimos
libros destacan: Comunismo o Nada, La ilusión del metacontrol imperial del
caos: La mutación del sistema militar de los Estados Unidos, Capitalismo del
siglo XXI, y Crónica de la decadencia: Economía global 1999-2009. Sus
trabajos se pueden leer en la web beinstein.lahaine.org.
-¿Cuál es su opinión sobre Chile? Vivimos la doctrina del shock impuesta
por la dictadura, el neoliberalismo salvaje, el extractivismo y
endeudamiento, la despolitización…
-Creo que Chile nunca ha podido superar la tragedia del 11 de Septiembre. La
dictadura remodeló a la sociedad chilena. No es el único caso, también en
Argentina la dictadura cívico-militar instaurada en 1976 produjo
degradaciones culturales y estructurales que han perdurado hasta hoy.
Después de Pinochet ustedes han pasado a una suerte de democracia limitada
comprimida por el modelo neoliberal que pudo instalarse y reproducirse como
parte de una división internacional (colonial) del trabajo, de una economía
global hegemonizada por los Estados Unidos pero que actualmente se está
deteriorando rápidamente. Caen los precios de las materias primas sin
perspectivas de repunte significativo y durable, eso afecta de manera decisiva
al modelo neoliberal chileno.
La burguesía chilena creía que la masacre pinochetista y sus prolongaciones
económicas y culturales ‘democráticas’ extirparían por completo la memoria
histórica popular, bloquearían para siempre el surgimiento de alternativas
antisistema. Es la eterna ilusión de los contrarrevolucionarios siempre
desmentida por la realidad. América Latina vive actualmente una época
oscura, de arremetidas derechistas, pero también de putrefacción capitalista,
entonces lo que parecía imposible, las aspiraciones revolucionarias, puede
53
reaparecer. Las latencias, las memorias subterráneas que se reproducen de
manera invisible pueden converger con nuevas formas de crítica teórica y de
lucha práctica hasta conformar una avalancha social. Dicha posibilidad no
debe ser descartada sino más bien alentada. La evolución de la crisis global y
regional abre esa perspectiva”.
Zarpazos de la lumpenburguesía
-¿Qué ocurre en Argentina tras la llegada de Macri al gobierno y cómo
caracterizaría sus decisiones?
-Ha significado un violento giro hacia la derecha más extrema del arco
político argentino. A los pocos días de asumir se produjeron transferencias de
ingresos hacia las elites económicas que por su magnitud y velocidad no
tienen precedentes en la historia económica argentina. Esto ha causado una
fuerte contracción del mercado interno y en consecuencia la llegada de la
recesión. El FMI pronosticó a comienzos de año una caída real del Producto
Interno Bruto para 2016 del orden del 1%, aunque viendo lo que ya ha
ocurrido en el primer cuatrimestre podemos hablar de un descenso superior al
3%, más allá de lo que anuncie en el futuro el gobierno a partir de cifras
manipuladas. Desde la llegada de Macri, se ha producido un apagón
estadístico. No se suministran más las cifras oficiales de desocupación,
inflación y otros indicadores. No descarto la posibilidad de una suerte de
híper-recesión si el gobierno no llega a controlar la dinámica depresiva que ha
generado.
Entre los especialistas se discutía en los primeros meses acerca de cual era
realmente el modelo económico macrista. Las decisiones económicas han sido
tan salvajes, las contradicciones tan evidentes, el desastre tan grande que no
cabe pensar que estamos ante un plan estratégico coherente apuntando a una
reconversión capitalista de largo plazo, aunque sea oligárquica, sino ante un
saqueo donde cada grupo dominante saca su tajada sin importarle lo que vaya
a ocurrir en el futuro. Marchamos hacia una crisis de gobernabilidad
impulsada por fuerzas entrópicas que se han desatado al derrumbarse el
kirchnerismo. Las clases dominantes argentinas operan como una suerte de
lumpenburguesía, de burguesía depredadora altamente destructiva. El
fenómeno forma parte de un proceso global del mismo signo”.
-Háblenos de la “lumpenburguesía global dominante”…
-Tendríamos que arrancar desde los 70 cuando a partir de la estanflación la
recuperación posterior se produjo con tasas de crecimiento económico global
declinantes. Esa tendencia de largo plazo fue acompañada por una expansión
de los negocios financieros que terminaron por financierizar al sistema
mundial de tal manera que hacia 2008 la masa financiera mundial
54
representaba unas veinte veces el Producto Bruto Global (PBG), solo los
productos financieros derivados equivalían a unas 11 veces el PBG. El
fenómeno forma parte de un proceso más amplio de ascenso del parasitismo
como componente hegemónica del sistema capitalista mundial que por
supuesto incluye también a la hipertrofia militar, a la narco-economía, al
consumo suntuario de las élites globales y su plataforma productivocomunicacional, etcétera. Se trata de un fenómeno originado hace casi medio
siglo pero que en el siglo XXI se manifiesta como una mutación integral del
sistema, como la transformación de su núcleo central dominante en una casta
parasitaria. En ese sentido es posible establecer paralelismos con otras
decadencias civilizatorias como por ejemplo la del Imperio Romano, etapa
superior y final de la llamada civilización greco-romana.
La lumpenburguesía -hoy dominante a escala global con centro en el Imperio
estadounidense-, es decir, una burguesía degenerada, parasitaria, marca un
salto cualitativo en la trayectoria universal del capitalismo, así como la
aristocracia militar-consumista de la decadencia imperial fue el resultado de la
mutación terminal de Roma.
-Usted señala una crisis de la financierización de la economía mundial y
que el Imperialismo despliega como último recurso la “Guerra de Cuarta
Generación”: destruir las sociedades periféricas para convertirlas en
zonas de saqueos. ¿Podría caracterizar esto y ampliar su visión?
-La crisis de 2008 marcó el fin de la expansión acelerada de la trama
financiera global, la misma fue una suerte de droga que permitió endeudarse a
estados, empresas y consumidores de los capitalismos centrales, pero el ciclo
del endeudamiento impune llegó al límite, la explosión de la mega burbuja
inmobiliaria fue el punto de inflexión del sistema. Entonces los estados
imperialistas realizaron enormes transferencias de fondos hacia los grupos
financieros tratando, con éxito, de evitar su derrumbe. Pero no fue más que un
parche y no la superación de la crisis.
En 2001, por ejemplo, los negocios con productos financieros derivados, la
columna vertebral de la red especulativa global, acumulaban unos 95 billones
(millones de millones) de dólares equivalentes a unas 2,8 veces el PBG. En
2005, llegaban a unos 280 billones (unas 6 veces el PBG), y a mediados de
2008, poco antes de la crisis alcanzaban cerca de 680 billones (11 veces el
PBG). Se trataba de un crecimiento exponencial, pero a partir de ese momento
esa masa especulativa dejo de expandirse, se volvió inestable y desde 2014 se
fue desinflando velozmente. Entre fines de diciembre de 2013 y fines de
diciembre de 2015 la contracción fue del orden del 30%. En 24 meses se
esfumaron unos 220 billones de dólares... ¡Equivalentes a casi tres veces el
PBG!
55
Hasta la crisis de 2008 la expansión financiera operó como una suerte de
impulsor inflacionario de la economía mundial. Desde 2014 la contracción
financiera opera como un motor deflacionario que empuja hacia abajo a la
economía. Dicho de otra manera, en una primera etapa se desarrolló un círculo
aparentemente virtuoso (en realidad perverso) donde las deudas crecientes y
las ganancias especulativas inflaban el consumo de los países ricos, sus gastos
estatales (especialmente los gastos militares), sus innovaciones tecnológicas,
sus actividades productivas, lo que a su vez engordaba a la especulación
financiera. Pero el funcionamiento de dicho mecanismo produjo finalmente un
círculo vicioso depresivo donde la sobrecarga financiera comprime a la
economía lo que a su vez deteriora y desinfla a la especulación. Nos
encontramos ante la declinación turbulenta de un ciclo parasitario, la más
grave crisis de toda la historia del capitalismo.
Si observamos lo sucedido con otras civilizaciones, vuelvo al caso romano,
comprobaremos que cuando la pérdida de dinámica llega a un cierto punto la
elite dominante trata de utilizar al máximo su último recurso: la fuerza militar.
En nuestra civilización burguesa el Imperio -Estados Unidos y sus aliados
vasallos occidentales-, intenta saquear al resto del planeta para así postergar su
caída. El objetivo es apoderarse y agotar los recursos naturales de la periferia,
marginar completamente a sus habitantes o súper explotarlos según los casos.
Se trata de un megaproyecto estratégico tendiente a reducir drásticamente sus
costos periféricos (mano de obra, insumos mineros y agrícolas, etcétera).
Libia, Irak, Ucrania, Afganistán, Siria… nos muestran al Imperio destruyendo
sociedades pero sin poder remplazar lo destruido por un nuevo orden colonial,
lo que se instala es el caos porque lo que emerge no es una nueva división
internacional del trabajo sino la decadencia global. La crisis del Imperio
acentúa su locura belicista la que a su vez agrava la crisis”.
Progresismos y capas medias
-Los “progresismos” latinoamericanos parecen desgastados. ¿Cuál es su
opinión sobre lo que ocurre en Honduras, Paraguay, Bolivia, Ecuador,
Venezuela, la caída del kirchnerismo, las negociaciones de paz en
Colombia y la “normalización” de relaciones diplomáticas entre Cuba y
Estados Unidos?
-Los progresismos latinoamericanos, desde sus versiones más conservadoras
como la del Frente Amplio de Uruguay hasta las más radicalizadas como la de
Venezuela intentaron reformar los sistemas capitalistas existentes, en algunos
casos para humanizarlos, mejorarlos socialmente y en otros para superarlos
gradualmente, no se produjeron revoluciones sino reformas más o menos
audaces. Esas experiencias pudieron aprovechar la efímera mejora del
comercio internacional de materias primas para combinarla casi siempre con
ampliaciones de los mercados internos, sobre todo expandiendo el consumo
56
popular. También aprovecharon el retroceso geopolítico del Imperio para
construir políticas relativamente autónomas. Pero eso se fue agotando al
profundizarse la crisis global a partir de 2008 y sobre todo desde 2014 cuando
cayeron los precios de las materias primas a lo que se agregó una ofensiva
muy fuerte de los Estados Unidos reconquistando su patio trasero
latinoamericano. La misma comenzó desde la llegada de Obama a la Casa
Blanca desplegando un complejo y flexible abanico de intervenciones, desde
los ‘golpes blandos’ como en Brasil, Honduras, Paraguay y Argentina hasta
acciones desestabilizadoras como en Venezuela pasando por el intento de
abrazo-de-oso a Cuba y siguiendo por el plan de desarme de la guerrilla
colombiana. En este último caso los Estados Unidos intentan lograr la
rendición negociada de la insurgencia a través de una sofisticada trama
envolvente de presiones directas e indirectas, anzuelos seductores y golpes
bajos. Se trata de un juego típico de la llamada Guerra de Cuarta Generación
destinada a someter a la insurgencia a una dinámica aparentemente de
asimilación al sistema, realmente de destrucción, empezando por sus
fundamentos ideológicos revolucionarios hasta llegar a su extinción
estructural.
En su ofensiva contra el progresismo los Estados Unidos cuentan con la
colaboración de las burguesías latinoamericanas completamente
transnacionalizadas. Lumpenburguesías periféricas arrastrando a importantes
segmentos de las capas medias.
-¿Se derechizan las capas medias latinoamericanas? ¿Neofascismo?
¿Contrarrevolución? ¿Qué ha contribuido a que el fenómeno ocurra?
-Lo que muestran países como Brasil, Argentina, Bolivia o Venezuela en su
primera etapa próspera es que la prosperidad y la gobernabilidad del sistema
no solo reanimaron la voracidad de las elites locales sino que además
‘aburguesó’ a las capas medias ascendentes, ayudó a su integración ideológica
con la cima, depredadora, lumpenburguesa, del capitalismo local buscando al
mismo tiempo diferenciarse de la clases bajas también ascendentes. Los
medios de comunicación concentrados cumplieron un rol decisivo en ese
proceso inyectando odio social en un espacio fértil para eso, asociando justicia
social con despilfarro, democratización del poder político con corrupción,
etcétera. Este brote de irracionalidad pequeñoburguesa forma parte de un
fenómeno más amplio, global, de fascistización, que se extiende por Europa e
incluye fenómenos como el del llamado ‘Estado Islámico’ en Oriente Medio.
Los neofascismos centrales y periféricos aparecen como respuestas
reaccionarias a la crisis produciendo a veces contrarrevoluciones no porque
hayan existido tentativas revolucionarias reales sino precisamente por la
ausencia de revoluciones antisistema capaces de superar la degradación
capitalista.
57
De todos modos la instalación de regímenes reaccionarios no significa el
comienzo de una nueva gobernabilidad de tipo elitista y colonial sino la
instalación de mecanismos de saqueo que profundizan las crisis. Es lo que se
constata en casos como los de Argentina, Brasil o Paraguay y en lo que podría
llegar a ser una victoria neofascista en Venezuela.
BRICS y petróleo
-¿Estados Unidos va por el BRICS?
-Evidentemente sí, y acaba de obtener su primer éxito en Brasil. Pero su
mega-estrategia global apunta contra China y Rusia. Ambas potencias han
constituido una alianza estratégica de largo alcance que va desplazando a los
Estados Unidos de Asia, estableciendo puentes importantes con Africa y
América Latina. La intervención de la OTAN en Libia y otras en el resto de
Africa así como la ofensiva imperialista en Latinoamérica pretenden entre
otras cosas frenar la creciente influencia de China y Rusia. El problema del
Imperio es que no tiene qué ofrecer a cambio del mercado chino a países
como Brasil o Argentina, solo ofrece promesas de ‘inversiones’ mientras
realiza o trata de realizar saqueos.
-Estados Unidos intenta apoderarse de las reservas de petróleo y gas
mundiales: Afganistán, Irak, Siria, Libia, Ucrania, Yemen... ¿Venezuela?
-Uno de los temas decisivos de la disputa geopolítica euroasiática es el de la
guerra energética donde las reservas de gas y petróleo ocupan un lugar central,
el control de esas reservas pero también el del transporte: gasoductos y
oleoductos, canales, estrechos y otras posiciones estratégicas. Por ejemplo en
Asia, y sobre todo en la zona del Golfo Pérsico y de la Cuenca del Mar
Caspio, está algo más del 65% de las reservas petroleras globales. Esa pelea se
extiende hacia Africa en Nigeria y Angola y hacia América Latina, donde
Venezuela ocupa un lugar decisivo con el 20% de las reservas mundiales de
petróleo.
Aunque el precio del petróleo está bajo también es verdad que la producción
global de petróleo convencional está planchada desde hace casi una década.
La irrupción del petróleo de esquisto de Estados Unidos amplió el volumen
extraído pero se trata de recursos limitados que en pocos años más -a
comienzos de la próxima década- llegará a su máximo nivel y empezará a
declinar. Obviamente el dominio de las principales fuentes energéticas
permitiría a los Estados Unidos ponerle un pie en el pescuezo de China y otro
en el de Europa y jugar al gato y el ratón con el competidor ruso haciendo
subir y bajar los precios según su voluntad. Pero Estados Unidos no está
ganando esa guerra: no pudo doblegar a Irán, gran exportador energético, no
58
pudo desestabilizar a Rusia, otro gran productor, haciendo saltar por el aire la
convergencia ruso-china, y hasta ahora no ha sometido a Venezuela.
-¿Qué piensa que ocurrirá con China y Rusia en las próximas décadas?
-Tanto China como Rusia pudieron emerger como grandes potencias
aprovechando el último gran auge de la economía capitalista global. Rusia
como potencia energética-militar y China como potencia industrial. En ambos
casos las exportaciones hacia los países ricos fueron los motores de la
prosperidad. Pero esa etapa global ha concluido. Los mercados desarrollados
se comprimen y los Estados Unidos -liderando a la OTAN- acosa a esas
naciones emergentes tratando de capturar grandes reservas de materias primas
y quebrar el poderío militar en el caso ruso, y en el caso chino intentando
esclavizar a la más grande clase obrera industrial del planeta: 250 millones de
trabajadores, y subordinar a ese temible competidor financiero e industrial
pero también tecnológico y con cada vez mayor capacidad militar. Liquidar la
alianza estratégica ruso-china es el objetivo mayor de Occidente.
Pero por otra parte los capitalismos ruso y chino no están fuera de la crisis
global, forman parte de ella, son afectados por sus turbulencias, sus
contracciones comerciales. Tratan de desacoplarse parcialmente de la
decadencia mundial atrincherándose en el espacio euroasiático. El proyecto de
la Nueva Ruta de la Seda, una gigantesca red de transporte marítimo y
terrestre uniendo a los países de la región, constituye una de sus más grandes
esperanzas. Lo que muestra la realidad es que no pueden escapar del desorden
global, después de todo esas dos naciones protagonizaron en el siglo XX las
dos más grandes tentativas de superación del capitalismo. La inviabilidad
histórica del nacionalismo burgués en la era del capitalismo globalizado,
aunque se trate de grandes países, abre allí la posibilidad de reintentar
nuevamente tomar el cielo por asalto”.
¿El fin del capitalismo?
https://www.rebelion.org/noticia.php?id=214255
Luis González Reyes
Rebelión
¿Qué es el capitalismo?
El capitalismo es un sistema económico que persigue la reproducción del
capital. Esta reproducción se realiza mediante la inversión de dinero (D) en
mercancías, maquinaria, materias primas, energía y fuerza de trabajo que
generan bienes y servicios (M), con el objeto de conseguir con su venta más
dinero (D'). Por lo tanto es obvio que, para que exista reproducción del
59
capital, tiene que haber materia, energía y trabajadoras/es por una lado [1] y
consumidoras/es por el otro.
Otra posible circulación sería D-D', en la que el dinero se invertiría en
operaciones financieras para conseguir un beneficio mayor. En realidad, la
circulación D-D' se apoya sobre la D-M-D'. La economía financiera lo que
hace es detraer parte de la plusvalía de la economía productiva y multiplicarla
aparentemente (crea más dinero, pero no más capital).
La cantidad que D' excede a D es la plusvalía. La primera forma de obtenerla
es consiguiendo que los/as empleados/as trabajen produciendo más ingresos
que los gastos. El capitalismo consigue esto por cuatro vías: alargar la jornada
laboral, reducir los salarios, aumentar la cantidad de personas que trabajan e
incrementar la productividad. Como las tres primeras tienen límites claros (los
cuerpos humanos), el elemento central a largo plazo es el aumento de la
productividad.
El incremento de la productividad se consigue con una mejor organización de
los/as trabajadores/as (lo que podemos hacer en colectivo es mucho más que
lo que conseguimos de forma individual y, por lo tanto, genera más
plusvalor). También cuenta la intensidad/eficiencia del proceso de trabajo.
Finalmente, es fundamental el uso de máquinas, que requieren consumos
crecientes de materia y energía. Nuevamente, los cuerpos humanos ponen
límites a las dos primeras formas de incremento de la productividad, por lo
que históricamente ha sido imprescindible un incremento del uso de
máquinas.
Hay otras formas de conseguir plusvalía que no es el trabajo asalariado. Se
puede robar el trabajo ajeno mediante lo que se ha denominado “acumulación
por desposesión”. En este caso, el capitalismo no crearía el valor de forma
interna, sino que se lo arrancaría a quienes lo han creado fuera del sistema.
Por ejemplo, el patentado de conocimientos colectivos y la apertura a los
mercados capitalistas de economías que funcionaban bajo otras lógicas serían
formas de acumulación por desposesión. Esto implica una extensión del
capitalismo a más territorios y ámbitos de la vida.
El trabajo humano produce valor porque modifica la materia usando energía y
conocimiento. Esto también lo hace la naturaleza produciendo por tanto valor.
Así, la plusvalía también se consigue mediante la apropiación del trabajo de la
naturaleza. Por ejemplo, el trabajo de fotosíntesis es enajenado por el
propietario de la plantación de caña, o el de concentración de minerales es
usurpado a través de la minería.
Para que todo esto sea posible es necesario que los seres humanos puedan
trabajar en la reproducción del capital. Es decir, que las sociedades sean
60
capaces de sostener la vida. Esto supone una ingente cantidad de trabajos de
cuidados (higiene, alimentación, sostén emocional, crianza) que en muchos
casos no generan plusvalía, pero sin los cuales es imposible que esta se
produzca. El grueso de estas labores las realizan las mujeres en nuestro
sistema patriarcal. Además, este sostenimiento de la vida requiere de unos
ecosistemas que puedan realizar sus funciones (depuración del agua,
sostenimiento del equilibrio climático, fertilización del suelo). Estos trabajos,
además, son imposibles de retribuir por el capital [2].
De este modo, se pueden resaltar cinco condicionantes para el funcionamiento
del capitalismo: i) materia y energía por un lado y consumidores/as por otro;
ii) aumento de la productividad, lo que requiere un incremento del uso de
máquinas, que a su vez necesita un mayor consumo de materia y energía; iii)
extensión continuada del capitalismo; iv) explotar el trabajo realizado por la
biosfera; y v) tener garantizada la reproducción de la vida.
¿Se está deteniendo la reproducción del capital?
Como se aprecia en la figura, se está produciendo un descenso en la tasa de
ganancias mundial, lo que señala dificultades crecientes para sostener la
reproducción del capital.
Evolución de la tasa de beneficios mundial. Roberts, M. (2015): “Revisiting a
world rate of profit”.
https://thenextrecession.files.wordpress.com/2015/11/revisiting-a-worldrate-of-profit-june-2015.pdf
61
Hasta los años 80, la ralentización de los incrementos de productividad había
sido la causa principal del descenso en la tasa de beneficios. Esto se produjo
por un periodo de exitosas luchas sociales en todo el mundo y,
coyunturalmente, por el alza del precio del petróleo. Después, durante la fase
neoliberal, el capitalismo logra sostener la tasa de beneficio aumentando la
explotación en el trabajo asalariado (reducción de sueldos, aumento de la
jornada, impuestos regresivos, desmantelamiento de servicios públicos,
incorporación de más personas al mundo asalariado) y de la naturaleza (lo que
incluye su mayor mercantilización). También fue determinante la fagocitación
de más territorios en el sistema-mundo (entre los que destacaron Rusia y
China), la inclusión de más facetas de la vida en la lógica del mercado
capitalista, y la extensión de los ámbitos de actuación a nuevos espacios [3] y
más funciones ecosistémicas.
Además, el sostenimiento de los beneficios requirió de una expansión
gigantesca del crédito (de la deuda) para conseguir que el consumo siguiese
aumentando. Esto permitió también crear la ilusión de que todo iba cada vez
menor gracias al encadenamiento de burbujas especulativas. Pero, en realidad,
esta especulación financiera no creó capital.
A pesar de todo, la productividad continuó descendiendo. En parte, porque la
actividad empresarial se desvió a la compra de activos financieros y el pago
de dividendos, en lugar de en maquinaria, pues esto era cada vez menos
rentable. Pero también porque, desde 2005, se ha alcanzado el pico del
petróleo convencional y esto ha conllevado un dificultad creciente de
conseguir materia y energía abundante y barata.
¿Es posible una reactivación de la creación de valor?
La crisis del 2007/2008, que abre la Gran Recesión y que tiene como
trasfondo central la creciente incapacidad de reproducir el capital, se ha
encarado con cuatro estrategias fundamentales que están chocando con límites
insoslayables.
El intento neoliberal de extender el capitalismo a más ámbitos de la vida y a
más territorios está llegando a su máximo, pues no quedan espacios
suficientemente significativos que meter dentro de la lógica del capital. El
“capitalismo de los pobres” [4] o tratados como el TPP, el TTIP, el CETA o el
TISA se pueden leer como un desesperado intento de introducir dentro de la
rueda de reproducción del capital los últimos reductos que quedan fuera. Aún
si llegasen a tener éxito, no significarían un alivio real, pues el volumen del
62
problema excede con mucho a las posibilidades de negocio que estas vías
podrían abrir [5]. Además, para que exista un mercado globalizado hace falta
petróleo abundante, barato y ligero, tres características que, está dejando de
tener el crudo[6]. Un mercado global es central para permitir una mayor
reproducción del capital, pues permite tener una economía de escala, y
aumentar la especialización, la explotación laboral, el consumo y la capacidad
de financiación.
Una medida característica de la Gran Recesión está siendo la creación ingente
de dinero (deuda) mediante políticas como la quantitative easing. Lo que se
persigue es sostener los niveles de consumo de las clases altas y de los
grandes capitales. Pero esta medida está llegando a su límite. Primero porque,
después de la creación de una cantidad nunca vista de dinero (deuda), no solo
no se ha conseguido la reactivación, sino que las medidas están terminándose,
pues no está nada claro que tenga sentido bajar los tipos de interés por debajo
de 0%, que es básicamente donde están. Segundo, porque la deuda ha
adquirido un volumen tan grande que es imposible que puedan generarse
nichos de negocio suficientes para restituir una parte significativa [7]. De
manera profunda, esto no es posible porque estamos en un “mundo saturado”,
donde la biosfera ha sido ya ampliamente colonizada. Por lo tanto, lo que hay
por delante es el sonoro estallido de nuevas burbujas.
Una tercera estrategia está siendo el aumento de los grados de explotación de
las personas mediante una rebaja mayor en las condiciones laborales. Esto está
produciendo la laminación de la clase consumista. Es decir, se aumentaría la
productividad a costa de reducir el consumo, lo que impide recuperar la tasa
de beneficios.
El cuarto grupo de medidas consiste en recrudecer la explotación de la
naturaleza. Sin embargo, esto es cada vez más complicado pues, por ejemplo,
los petróleos que quedan son los que están en el ártico, embebidos en rocas
duras, en aguas ultraprofundas y/o de peor calidad. El capitalismo ya se ha
apropiado de gran parte del trabajo realizado por la naturaleza.
Finalmente, una vía que no está explorando el capitalismo global más que
parcialmente en China e India es la creación de un nuevo “Estado del
Bienestar” que sostenga a otra clase consumista. Y no lo está haciendo
porque esto es imposible. La construcción del “Estado del Bienestar” se
produjo en un contexto de fuertes luchas sociales y, sobre todo, de un
incremento fuerte de la productividad gracias a la explotación masiva de
petróleo (pero no solo). Así, pudo haber altas tasas de benéfico y que parte de
él recayera en las clases medias de los Estados centrales. Esto ahora es
imposible.
63
Por si todo esto fuera poco, los mecanismos de reproducción de la vida están
seriamente comprometidos. Estamos viviendo una crisis de los cuidados como
consecuencia de la incorporación masiva de las mujeres al mundo asalariado
en sociedades patriarcales (entre otros factores). También se está produciendo
una pérdida de funciones ecosistémicas básicas.
¿Cuáles son los posibles escenarios futuros?
Por lo tanto, si el capitalismo se caracteriza por la reproducción del capital y
esta puede detenerse en un futuro cercano, los sistemas socioeconómicos que
tengamos por delante podrían ser otros. En ellos, no habrá casi creación de
riqueza y la base de la acumulación será el despojo. En todo caso, también
serían factibles (aunque difíciles) nuevos capitalismos regionales.
En este escenario poscatpitalista, las estrategias de sostenimiento social de
tipo “goteo” no son posibles. Estas abogan por un crecimiento y concentración
de la riqueza y que, por efecto goteo, esto acabe redundando en toda la
sociedad. Tampoco lo son las que buscan aumentar el tamaño de la tarta y
remodelar algo el reparto de los trozos para conseguir una mejora social.
Solo hay dos opciones factibles en un contexto de fuerte reducción de la tarta.
Una es que unas pocas personas consigan la fuerza suficiente para arrebatar a
grandes masas los bienes de supervivencia básicos. Sería una opción que
requiere un genocidio. La segunda es conseguir una redistribución real y
profunda de la riqueza desposeyendo de ella a las clases altas.
Notas
[1] No existe nada parecido a la economía desmaterializada. Todos los datos
empíricos muestran como el crecimiento económico requiere un incremento
del consumo material y energético.
[2] El trabajo humano no pagado de sostenimiento de la vida puede rondar el
70-80% del PIB mundial. El de la biosfera podría ascender al 70-250% del
PIB mundial.
[3] Como la estratosfera, las aguas ultraprofundas, los genes o la
nanotecnología.
[4] En este paquete entrarían, por ejemplo, los microcréditos.
[5] Entre otras cosas, porque muchas (como los servicios públicos) ya están en
gran parte dentro de la lógica del mercado capitalista.
64
[6] El transporte depende en un 95% del petróleo y es una fuente
prácticamente imposible de sustituir en este sector.
[7] Desde 2007, la acumulación de deuda en el mundo ha crecido al 5,3%
(mucho más que el PIB). Para recuperar una tasa de crecimiento del 3%, en
2010, 1,6 billones de dólares debían encontrar nichos de mercado. En cambio,
en 1950 esta cifra era de 150.000 millones y en 1973 de 420.000 millones.
Dialéctica y marxismo: Antonio Labriola y el método genético
http://www.laizquierdadiario.com/Dialectica-y-marxismo-Antonio-Labriola-y-el-metodogenetico
El marxista italiano Antonio Labriola realizó aportes teóricos muy importantes para la
comprensión de la dialéctica y el marxismo. En estas líneas, algunos apuntes sobre sus ideas.
Dialéctica y marxismo: Antonio Labriola y el método genético Juan Dal Maso
[email protected]
Luego de la introducción realizada en el primer artículo de esta serie, deberíamos avanzar en
explicar en términos generales qué es la dialéctica. Podríamos decir que es un modo de pensar
que en lugar de considerar la realidad y los conceptos como fijos e inmutables, los considera
sujetos a un proceso de cambio.
Si este proceso de cambio quisiéramos resumirlo en formas totalmente abstractas podríamos
indicar las famosas "leyes" de la dialéctica, que serían como formas puramente lógicas del
movimiento (la expresión es de Marx): la unidad de los contrarios (que propone una relación
intrínseca entre elementos a primera vista contradictorios), la transformación de la cantidad
en calidad (que explica que la acumulación de cambios cuantitativos genera un cambio
cualitativo) la negación de la negación (que explica el proceso de determinaciones de un
objeto a través de un peculiar modo de superación de las contradicciones, donde lo superado
se considera un momento necesario y no un "error"). Fin de la historia.
Pero no es tan sencillo. Sucede que definir la dialéctica como un conjunto de criterios externos
a sus contenidos es algo que la propia dialéctica cuestionaría. El marxista checo Karel Kosik
decía que la dialéctica trata de la "cosa misma", pero se aproxima a ella dando un rodeo. Un
rodeo similar hay que hacer para hablar de la dialéctica, empezando por comprender sus
orígenes históricos.
De todas maneras, para poder hacer este recorrido es necesario tener algunas definiciones
provisionales.
La dialéctica no nace con el marxismo, ni con Hegel. Hay distintas variantes de pensamiento
dialéctico en toda la historia de la filosofía anterior a Hegel y Marx. Hay variantes de
pensamiento dialéctico en el pensamiento occidental y oriental. Como el tema es tan amplio
que resultaría imposible de tratar en un artículo o serie de artículos, nos limitaremos a
considerar una primera definición general de la dialéctica marxista para luego, en próximas
entregas, ir destacando algunos aspectos específicos, teóricos e históricos.
En segundo lugar entonces, intentaremos resumir una idea de lo que es la dialéctica marxista a
partir de los aportes de Antonio Labriola.
Antonio Labriola (1843-1904) fue el primer marxista italiano. Heredero de la tradición filosófica
del intelectual hegeliano Bertrando Spaventa, hizo un recorrido filosófico similar al que unas
65
décadas antes habían realizado Marx y Engels en Alemania. Se acercó de Hegel a Feuerbach y
por esa vía al socialismo y el marxismo. Intercambió cartas con Engels y fue el autor de
destacados ensayos sobre la concepción materialista de la historia. Labriola dio una pelea
ideológica muy fuerte contra aquellas variantes del socialismo italiano que proponían
entender el marxismo como una variante del evolucionismo positivista, es decir que buscaban
explicar la sociedad en base a un “darwinismo” mal entendido, sin comprender la crítica del
marxismo a las relaciones sociales capitalistas ni su método de comprensión de la historia.
Labriola destacaba en este contexto la importancia de la independencia del materialismo
histórico respecto de las distintas teorías burguesas, así como la idea del marxismo como una
filosofía de la praxis "inmanente a las cosas sobre las que se filosofa." y definía el comunismo
de Marx y Engels como un "comunismo crítico" contra las interpretaciones cientificistas, a las
que hacíamos referencia. Sus ensayos sobre la concepción materialista de la historia
terminaron de ganar a Trotsky para el marxismo durante una de sus temporadas en la cárcel
zarista y fueron también punto de referencia para las reflexiones de Antonio Gramsci en otras
cárceles, las del fascismo.
Fue el propio Labriola quien propuso comprender la dialéctica marxista como un "método
genético". Es decir un método que busca explicar su objeto de estudio, en este caso la
sociedad capitalista, a partir de las condiciones históricas concretas que le dieron origen, tanto
como de la “dilucidación de su proceso”, es decir la explicación del proceso histórico objetivo
en atención a los intereses materiales derivados de la compleijzación de la vida en sociedad,
más allá de las formas en que el género humano (incluidos los historiadores) se lo
representaron.
Este método genético tenía para Labriola dos momentos. Un primer momento de “análisis y
reducción” es decir de descomposición de los distintos aspectos de la realidad histórica, en el
que se podían tomar como objeto de análisis planos específicos como la economía, las formas
de representación ideológica o religiosa predominantes en un período histórico, las
instituciones políticas, etc., para comprender cada uno en su singularidad; y un segundo
momento de “mediación y composición” es decir de reconstrucción de las relaciones entre los
distintos elementos antes seccionados por el análisis para comprender la realidad histórica en
su carácter unitario.
Precisamente la idea de “mediación” es una de las claves del pensamiento dialéctico. La
mediación expresa en el análisis concreto aquellos movimientos que las formas puramente
lógicas abstractas popularizadas como “leyes de la dialéctica” presentan como leyes generales.
Desde el punto de vista de la teoría, la “mediación” consiste en establecer relaciones de
interdependencia de distintos aspectos de la realidad, así como reconocer las formas
específicas del proceso de desarrollo de los objetos investigados.
Por este motivo, el marxismo se caracteriza por la construcción de dialécticas concretas que
explican relaciones sociales a través de conceptos específicos, que por un lado superan el
carácter abstracto de las “leyes” mencionadas más arriba, aunque por otro, si le quitáramos
sus determinaciones específicas, terminarían coincidiendo con estas. Podemos tomar como
ejemplos la idea de la lucha de clases como motor de la historia, la contradicción entre el
desarrollo de las fuerzas productivas y las relaciones de producción como origen de una época
de revolución social, la teoría del desarrollo desigual y combinado como explicación del
desarrollo histórico de los países rezagados, por nombrar aquellas más generales. Todas estas
teorías tienen una base dialéctica, es decir suponen una lógica de desarrollo basada en
contradicciones, en saltos cualitativos y en la conformación de nuevas estructuras que
contienen aquellos elementos que sobrevivieron al cambio revolucionario.
66
El proceso social, político e intelectual a través del cual Marx construyó su propia
interpretación de la dialéctica es extremadamente complejo por varios motivos, pero sobre
todo porque su relación con la filosofía de Hegel (que presentaba su filosofía como el punto
más alto de toda dialéctica y toda filosofía) es también una relación dialéctica, de ruptura y
reapropiación. De crítica y reformulación de sus aportes, no sólo desde el punto de vista de un
método abstracto de análisis sino también desde el rescate de ciertas intuiciones de Hegel que
le sirvieron a Marx para reelaborar la propia tradición materialista. Y lo que Marx “usa” de
Hegel varía según los distintos momentos de su propia elaboración teórica.
Será tema de un próximo artículo.
El papel político de la mentira moderna
Juan Andrés Muñoz Arnau
http://www.elespanol.com/opinion/20160624/135106490_12.html
En el año 1945 Alexandre Koyré (1892-1962), francés de origen ruso, publicó una pequeña
obra titulada El papel político de la mentira moderna. Filósofo e historiador de la ciencia,
admirado por Lacan o Foucault, mereció este elogio de Raymond Aron en sus Memorias: “[…]
había combatido en la Primera Guerra (aunque jamás hablaba de ello). Admirable historiador
de la filosofía y de la ciencia, abarcaba un inmenso terreno, desde la mística alemana hasta el
pensamiento ruso del siglo XIX y los estudios sobre Galileo, con justicia clásicos en todos los
países. […] jamás se dejó tentar por el comunismo, ni siquiera cuando la Gran Depresión
parecía confirmar las previsiones de Marx. Brillaba entre los espíritus excepcionales no tanto
por el talento, sino por la modestia, por la búsqueda escrupulosa y paciente de la verdad, por
el rigor moral”.
Koyré afirmaba en aquel libro que los regímenes totalitarios “se fundan sobre la primacía de la
mentira”. Esto, que es del todo cierto, puede aplicarse también a partidos que, en el contexto
de una democracia pluralista, aspiran a establecer un régimen político de aquella naturaleza
cuya orientación última queda velada por una propaganda política que utiliza como arma la
mentira.
La mentira totalitaria se basa, en definitiva, en un desprecio de la moral, donde el fin siempre
justifica los medios
Se me dirá que en dosis más o menos fuertes la mentira está presente también en las
formulaciones teóricas y en la praxis de los partidos que, para entendernos, podemos llamar
democráticos. Pero en este último caso se trata de mentiras -tan reprobables como las otrasque tienen un carácter “circunstancial”, por llamarlo de alguna manera, pero no forman parte
de una “mentira orgánica”, producto de un pensamiento globalmente engañoso.
Esa mentira totalitaria se basa en definitiva en un desprecio de la moral. Este desprecio es
patente en Lenin que, en su Discurso a las Juventudes Comunistas afirmaba: “nuestra moral
está enteramente subordinada a los intereses de la lucha de clases del proletariado”; o “es
moral lo que sirve para destruir la antigua sociedad explotadora y para agrupar a todos los
trabajadores alrededor del proletariado, creador de la nueva sociedad comunista”; o “la base
de la moral comunista está en la lucha por consolidar y llevar a su término el comunismo”. El
fin siempre justifica los medios.
Esa moralidad ajena a cualquier exigencia de base antropológica requiere la utilización
cotidiana de la mentira
67
Esta moralidad circunstancial, utilitaria, ajena a cualquier exigencia de base antropológica,
requiere la utilización cotidiana de la mentira para su existencia: la mentira resulta ser
necesaria para la implantación de la moral leninista y el correspondiente régimen político. En
este sistema de pensamiento, las verdades parciales que utilizan sus dirigentes -la existencia
de corrupción, desigualdades o injusticias concretas, por poner solo unos ejemplos-, están al
servicio de una mentira total y las verdades parciales sirven para dar apariencia de una
veracidad que sirve para ocultar la ideología real.
Decía Koyré: “la mentirá será [se entiende para esos sujetos] más que una virtud. Será la
condición de su existencia, su modo de ser cotidiano, fundamental, primordial”. Y añade que lo
propio de esta mentalidad totalitaria es “ocultar lo que se es y, para poder hacerlo, simular lo
que no se es[…]”.
Los medios deben tener en cuenta que no es cierto que todas las ideas contribuyan a la
existencia de la democracia
Esa mentira totalitaria es más dañina cuando vive en el contexto de un democracia, como
sucede en España. La irresponsabilidad de algunos medios de comunicación -que
malentienden lo que significa la libertad de expresión-, les hace erigirse en voceros de esa
ideología totalitaria porque con ello crecen en índice de audiencia o aumentan el número de
lectores de sus periódicos. No es verdad que todas las ideas contribuyan a la existencia de la
democracia y el Estado de Derecho.
La libertad de expresión, en efecto, no puede impedir la circulación de esas ideas, pero los
medios de comunicación, que tienen una dimensión institucional, no pueden ser neutrales
ante la mentira que sustenta las ideologías que persiguen acabar con la democracia y el Estado
de Derecho. Se produce, en las actuales circunstancias, un extraño maridaje, un entramado
negocial, entre la ideología totalitaria y los medios de comunicación capitalistas que cambian
audiencia por propaganda. El dinero corrompe el sentido de responsabilidad social que
debería animar a los medios al convertir el espacio de la opinión pública en un espectáculo de
demagogia ajena a cualquier exigencia del bien común.
Las ideologías ocultas que mantienen algunos partidos van contra la idea de Estado social y
democrático de Derecho
Las ideologías ocultas que mantienen esos partidos o coaliciones van contra la idea de Estado
social y democrático de Derecho; desconocen los derechos fundamentales y atentan contra la
dignidad humana al violentar la inteligencia con la mentira. A esto se añade un ejercicio
autoritario del poder -antidemocracia-, por mucho que las decisiones políticas se presenten
como un producto asambleario.
Esto no es una afirmación gratuita. Basta observar algunos comportamientos concretos de
quienes en España se mueven en este ámbito ideológico oculto para corroborar lo que digo:
las informaciones muestran que han desconocido la debida protección de la juventud y la
infancia; se han mofado de las creencias religiosas de la mayoría de la población; han
mostrado un profundo desprecio por las exigencias del Derecho y han sacrificado el bien
común en favor de los objetivos políticos que les animan.
*** Juan Andrés Muñoz Arnau es profesor de Derecho Constitucional en la Universidad de La
Rioja.
68
Si Rusia y China mantienen firmeza, EEUU puede ser arrojado de todas las
regiones donde provoca
Podrá EEUU con la estrategia China-Rusia? los pueblos hablan.org
https://www.facebook.com/enrique.munozgamarra/posts/1709359115982436
Bien sabemos que los cambios mundiales han sido enormes, incluso, ahora son
extremadamente visibles ante los propios ojos del mundo, sobre todo, aquellos
referidos al resquebrajamiento de la hegemonía mundial estadounidense. Cambios
que, por supuesto, exigen una nueva estructura de poder (multipolar imperialista) que
el grupo de poder fascista de Washington simplemente no la acepta. Enajenado en sus
antiguos idilios retrasa cualquier acuerdo, en este caso, con Rusia respecto a Siria y
Sudeste de Ucrania.
Sin embargo la dura confrontación que vive el planeta (pugnas y colusiones interimperialistas) no está referida solo a estas dos regiones, sino, al conjunto del planeta,
por lo que cada contendiente (China, Estados Unidos y Rusia) tiene su propia visión
estratégica. Algunos de ellos son: los Balcanes con Macedonia de reciente pretendida
desestabilización. También el Cáucaso donde la arena movediza está en Georgia y
Azerbaiyán (Actualmente, se encuentra en guerra contra la República de Armenia por
el territorio de Nagorno Karabaj). En Asia central, casi toda la región. Sin olvidar lo que
hay en el mar meridional de China, donde Filipinas, en caso de conflicto armado,
puede constituirse de forma inmediata en una cabecera de playa a favor del viejo
ejército estadounidense. El presidente filipino, Benigno Aquino III, es un acérrimo antichino. Además, por supuesto, el sudeste asiático donde los vientos de guerra están
dirigidos contra la RPDC (la última provocación está referida a la guerra bacteriológicaÁntrax) que en las actuales circunstancias cuenta con un equipamiento nuclear muy
importante con el que somete a raya a Estados Unidos y Corea del sur. En América
Latina los peligros de devastación pesan muy fuertemente, en particular, contra
Venezuela.
Entonces esta es la razón de la actual desesperación estadounidense por imponer
acuerdos que extralimiten lo que es incapaz de lograr con las provocaciones actuales
de su viejo ejército que Rusia simplemente no las acepta. En principio Estados Unidos
no está en condiciones de sostener por más tiempo dos o tres guerras al mismo
tiempo, su bancarrota económica lo impide, máxime si se tiene cuenta su enorme
gasto militar (más de mil bases militares, además, numerosos contingentes de
paramilitarismo desplegado en casi todas las regiones del planeta que no viven, por
supuesto, del aire, necesitan presupuestos enormes). No exagero si digo que este
asunto es peor que Vietnam. Estados Unidos está empantanado hundiéndose en esta
vorágine de gastos militares. Aunque China sigue subvencionándola con la compra de
los bonos, aunque ya ahora en menor escala, que, entre otras, explican su status
defensivo en el arquetipo de la confrontación geopolítica actual. Consecuentemente
este país (Estados Unidos) no puede darse el lujo de abrir nuevos frentes de guerra e ir
más allá de estas regiones (Sudeste de Ucrania y Siria) bajo cargo de la implosión del
edificio del sistema imperialista occidental. Si, como hemos sostenido en anteriores
notas, Rusia mantiene firmeza y China pasa a la ofensiva militar, Estados Unidos puede
69
ser arrojado de todas las regiones donde provoca. Entonces esto obligaría a reforzar su
estrategia en los entornos de América Latina.
Hay que tener en cuenta siempre las cuatro características fundamentales de la actual
coyuntura histórica: estructura multipolar, equiparación de fuerzas, carrera
armamentística y guerra informativa. Son las bases de cualquier análisis internacional.
Aquí nos interesa la guerra informativa. Esto en Siria ahora está presente como una
guerra psicológica. Es de grandes proporciones. En realidad una grotesca adulteración
de la realidad objetiva, no solo de Oriente Medio, sino, del mundo entero. Y es parte
de su oposición a los cambios en los niveles de los poderes imperialistas que está
operándose en este mismo momento en el mundo. Los centros de contra información
y anti subversión del ejército estadounidense están indudablemente muy atareados. El
demiurgo Nazi-estadounidense “Miente, miente que algo queda”, es lo central para
este grupo. En realidad, una comedia fachosa del que resulta un mundo fantasioso
donde lo negro es blanco y la mentira es verdad. Ofuscaciones de baja monta
disparadas contra casi ocho mil millones de personas que viven en el planeta.
Veamos esto:
Ante todo, la grotesca adulteración de la realidad que los centros de contra
información del viejo ejército estadounidense imponen con el 90-95 % de las noticias
que se emiten a escala mundial:
Primero, Estados Unidos está regocijado hasta el extremo al imponer que el Estado
Islámico (EI) es “un grupo de ¿románticos?” que se ¿autofinancian? y que nada tienen
que ver con su ejército. El Pentágono esta rebosante de alegría por haber impuesto
esta farsa. Pero, ¿Alguien, en su sano juicio, puede creer esto? No. Son grupos
criminales, mercenarios y paramilitares reclutados en las principales ciudades de
Europa, África, Asia Central, los Balcanes y América Latina. Por cierto, hablamos aquí
de las fuerzas sin rango militar que componen este Estado Islámico (EI), máxime si se
tiene en cuenta la gran población desocupada, sobre todo, lumpen proletariado,
emergida como consecuencia de la gran crisis que se vive desde 2008 y que esperan
desesperadamente cada mes sus míseros sueldos, $ 1200 dólares que envía el
Pentágono por aviones y helicópteros que sobrevuelan los lugares donde han sido
destacados estos carnes de cañón, cuyos líderes tienen vinculaciones directas con el
ejército estadounidense (su engranaje).
Segundo, la manipulación informativa también está referida a mostrar a Estados
Unidos como un país que busca la “democracia” y no un país que quiere destruir el
planeta devastando ciudades, incluso con terremoto (sobre esto está pendiente la
investigación) y cometiendo genocidios contra la humanidad.
Tercero, de igual modo presentan a Siria como un país antidemocrático que protesta
(ojo no debe protestar) cuando los misiles estadounidense o de la coalición
Internacional impactan en su territorio destruyendo sus infraestructuras y asesinando
a sus indefensas poblaciones. La demonización del presidente sirio, Bashar Al Assad, es
demoledora.
Cuarto, difunden la farsa que Siria está al borde del colapso y derrotado, para facilitar
la ocupación nazi estadounidense.
Quinto, publicitan utilizando a sus demagogos, que grupos de poder regionales, sobre
todo de Oriente Medio, absolutamente irrelevantes en el poder mundial y apéndices
suyos (vasallos), como que en algunos momentos estos se vuelven
antiestadounidenses, como el de Turquía siendo el primer portavoz militar de la OTAN,
70
Egipto, segundo receptor de ayuda militar estadounidense, Arabia Saudita, primer
receptor de protección militar estadounidense y sionismo israelita, primer receptor de
ayuda militar estadounidense.
Pero veamos lo concreto de lo anterior:
Empiezo observando la grosera manipulación en la ocupación de la ciudad Al Ramadi
de Irak por el Estado islámico, es decir, ejército estadounidense (Ojo siempre cuando
hablamos del criminal Estado Islámico hablamos del viejo ejército estadounidense).
¿Recuerdan cómo se produjo la ocupación de la ciudad de Mosul en Irak? Pues
debemos saber que la ocupación de la ciudad Al Ramadi (Irak) se produjo casi en
similares condiciones.
La ocupación de la ciudad Mosul. Ante todo recordemos lo que sucedió el 10 de junio
de 2014. Ese día fue ocupada esta ciudad. En lo central, hay que destacar en esto que
800 fanáticos “hicieron huir” a dos divisiones del ejército iraquí compuesta por 30.000
soldados que defendía la ciudad de Mosul poblada por 1,5 millones de personas. Un
hecho más que suficiente para demostrar lo bien que estuvo planificado la operación
militar para entregar esta ciudad (Mosul) a estas bandas criminales. Es decir, la
interrelación habida entre esta banda paramilitar (Estado Islámico, en realidad el viejo
ejército estadounidense) y el ejército del corrupto, Nuri al-Maliki, por aquellos días aún
presidente de este país, era una cuestión a plena luz del día. Es decir, sumamente
escandalosa. Además, es de sobra conocido que el cielo iraquí es cielo de los cazas F18 estadounidenses desde 2003.
La ocupación de la ciudad Al Ramadi. Esta ciudad es la capital de la provincia de Al
Anbar, situada a unos 100 kilómetros al oeste de Bagdad, por el criminal “Estado
Islámico”, ocurrida el 17 de mayo de 2015 después que el ejército que lo defendía la
abandonará y prácticamente la entregará a estas bandas famélicas. El ejercito que lo
protegía se llamaba “División de oro”, una unidad de fuerzas especiales del ejército
iraquí entrenado por Estados Unidos.
Veamos esto:
“Salim al-Jabouri, el presidente del Parlamento de Irak y más prominente político
sunita en el régimen de Bagdad, dijo a CNN que las tropas iraquíes abandonaron
Ramadi como resultado de "una decisión clara para dar la orden de retirarse - y
después de eso Ramadi cayó”. Al-Jabouri, dijo que el primer ministro Abadi, instalada
el año pasado con el apoyo de Washington, no había sido informado de la orden de
retirada de la ciudad. El colapso de las fuerzas de seguridad en Ramadi ocurrió, agregó,
después de la llamada División de oro - una unidad de fuerzas especiales entrenado
por Estados Unidos - de repente salió de la ciudad” (1).
También Cubadebate hizo algunas averiguaciones sobre esto: “Informe revela vínculos
directos entre EEUU y el Estado Islámico. El Estado Islámico y sus victorias en Mosul y
Ramadi serían obra de EE.UU., según revela un informe secreto de la organización
militar estadounidense Agencia de Inteligencia de Defensa (Defense Intelligence
Agency, DIA). El informe de la agencia, obtenido por la organización Judicial Watch,
grupo de vigilancia del gobierno no partidista y políticamente conservador, revela el
origen del Estado Islámico y las razones por las que cayeron en manos terroristas las
ciudades de Mosul y Ramadi. (2).
Entre tanto han seguido utilizando el Observatorio Sirio de Derechos Humanos
(OSDH) para desacreditar a Siria:
71
El 26 de mayo de 2015 se denunció al “Observatorio Sirio para los Derechos Humanos”
como un centro anti-sirio y de manipulación informativa. De plano este “observatorio”
estaba descalificado como fuente de cualquier información sobre Siria. Sin embargo
han seguido utilizando a este centro como fuente de manipulación contra Siria, pues el
asunto, de la guerra psicológica continuaba febrilmente. En efecto el 30 de mayo de
2015 Sputnik hizo público el siguiente comunicado (con esto no estoy en contra de
Sputnik, como algunos puedan suponer, las prensas occidentales son los que están
febrilmente en esto y a ellos me refiero cuando hablo de “febrilmente”. Rusia Today y
Sputnik son mis mayores fuentes de información. Ojo con esto): “Más de 40 civiles
murieron y varias decenas de personas resultaron heridas a raíz de un ataque con
bombas de barril en la ciudad de Alepo, en el norte de Siria, comunicó este sábado el
Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH). Según la entidad, las bombas fueron
lanzadas por las fuerzas gubernamentales. Los explosivos cayeron en una zona al este y
noreste de Alepo. Fue atacada también la ciudad de Al Bab, controlada por el grupo
yihadista Estado Islámico (EI). (3).
Y, entre estos hechos, ocurren los siguientes posicionamientos:
Primero, la exigencia para que Rusia encabece una nueva coalición internacional en
Siria. Sobre esto hay dos hechos:
A.- El 27 de mayo de 2015 el embajador sirio en Moscú, Riad Haddad insto a crear una
coalición apoyada por Rusia para luchar contra el Estado Islámico. En concreto dijo: "El
Gobierno sirio llama a crear una coalición apoyada, ante todo, por Rusia y los países
amigos para luchar realmente contra el terrorismo internacional", ha dicho en una
entrevista a RIA Novosti” (4).
B.- El 30 de mayo de 2015 también el ministro de relaciones exteriores de Rusia,
Serguéi Lavrov, en una entrevista con la televisión rusa Rossiya 24, dijo que era
imposible combatir al Estado Islámico sin la asistencia de Damasco. Además reitero
que la denominada coalición liderada por Estados Unidos contra el Estado Islámico
debería coordinar sus bombardeos con el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas
(CSNU). La coalición internacional logrará neutralizar al Estado Islámico (EI) solo si
coopera con las autoridades sirias, reiteró el ministro. Según el ministro: “Según el
ministro, EEUU usa doble rasero al rechazar la cooperación con las autoridades sirias y
al no reconocer su legitimidad” (5).
Segundo, China sigue en la defensiva estratégica:
China ha hecho público el 26 de mayo de 2015 un libro blanco donde habla de una
estrategia militar de defensa activa. Allí se menciona que el ataque será solo defensivo,
todo ello en un contexto de crecientes tensiones con sus vecinos y Estados Unidos en
el mar de China Meridional” Agrega, entre otros, "No atacaremos a no ser que seamos
atacados, pero con toda seguridad contratacaremos si somos atacados", asegura el
documento.
Veamos esto:
“Las fuerzas armadas de China implementan la directriz militar estratégica militar de
defensa activa en la nueva coyuntura, según un libro blanco hecho público hoy martes
por la Oficina de Información del Consejo de Estado (gabinete chino). China seguirá
inquebrantablemente el camino del desarrollo pacífico y llevará a término una política
exterior independiente de paz y una política de defensa nacional que es defensiva por
naturaleza, según el libro blanco titulado "Estrategia Militar de China"(6).
72
Por otra parte fueron preocupantes las declaraciones del vicepresidente de la
Comisión Militar Central de China, Fan Changlong, expresadas el 11 de junio de 2015
en el Pentágono (EEUU) frente al secretario norteamericano de Defensa, Ashton Carter
y que al parecer ratifican la posición defensiva de China en la presente coyuntura.
Veamos esto:
“Anotó que las dos partes han logrado muchos éxitos importantes en los últimos años
en la construcción de un nuevo modelo de relaciones entre grandes potencias gracias a
los esfuerzos personales de los dos jefes de Estado. La relación entre los dos ejércitos
ha mantenido, en general, un impulso de desarrollo estable, como se demostró con la
firma de dos mecanismos de confianza mutua, con los nuevos avances en materia de
intercambio de visitas de alto nivel, con la celebración de consultas y diálogos
institucionalizados y con la realización de ejercicios y entrenamientos militares
conjuntos, señaló el general”.
“Fan propuso que los dos ejércitos establezcan un nuevo tipo de relación militar
caracterizada por "la confianza mutua, la cooperación, el no conflicto y la
sostenilidad". Expresó su esperanza de que ambas partes trabajen conjuntamente para
aumentar contactos, impulsar la confianza mutua estratégica, fortalecer la
cooperación pragmática y abordar de manera efectiva las crisis y los riesgos” (7).
Mientras esto ocurre los BRICS tienen enormes esperanzas en China. Cierto el
viceministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Riabkov, dijo lo siguiente:
“los BRICS —Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica- serán capaces de "contrarrestar
presiones arbitrarias, politizadas e ilegales" gracias a la creación del Banco de
Desarrollo y el Fondo Contingente de Reservas. Una vez que se haga operativo el
banco, se intensificará el desarrollo de proyectos de infraestructura y de inversión,
agregó Riabkov” (8).
Y tercero, en la XIV Cumbre Internacional de Seguridad de Asia que viene desde el año
2002 y llamado como ‘Diálogo de Shangri-La”, efectuada el 29 de mayo de 2015 en
Singapur no hubo seriedad en el análisis de las bandas paramilitares que el viejo
ejército estadounidense implementa en el mundo. Allí Estados Unidos se mostró
víctima de su propio ejército que es el Estado islámico y nadie fue capaz de decirle que
es su ejército y no un simple movimiento cualquiera.
En esto fueron elocuentes las palabras del presidente del Comité de Servicios Armados
del Senado de Estados Unidos, John McCain, cuando dijo: “"Estamos perdiendo porque
no estamos ganando. No significa que no estemos haciendo nada, lo que sucede es
que nada de lo que estamos haciendo diplomática, económica, o militarmente revierte
el impulso del EI", expresó. Por lo tanto pidió a todos los países trabajar juntos en la
lucha contra el terrorismo”
"El Estado Islámico recluta a jóvenes de todo el mundo, con rapidez y más
ampliamente que ningún otro movimiento terrorista antes. Las perspectivas de los
jóvenes para dejar su país y entrenarse y combatir con el EI y luego regresar a sus casas
y llevar a cabo ataques terroristas podría ser la más inmediata amenaza que todos
enfrentamos" (9).
Y, bajo estos hechos, continua el mundo en vilo permanente desde finales de 2010
cuando el viejo ejército estadounidense inició sus operativos en el norte de África. Es
un despliegue que avanza entre periodos de terror fascista, incluso, con traslado de
tropas y armamentos prácticamente hasta las fronteras de Rusia y búsqueda de
acuerdos que algunos llaman “cumbres de paz” que no satisface a ninguna de las
73
partes y es como una especie de círculo vicioso que atormenta a la humanidad
entera:
Aquí una apretada periodización de estos hechos, como acostumbro, en realidad, un
pequeño resumen de la confrontación ruso-estadounidense desde febrero a junio de
2015. Como observaran es un cuadro zigzagueante entre fuertes enfrentamiento y,
búsquedas de acuerdos, pero, principalmente de duros enfrentamientos que se dan
incluso en los llamados periodos de búsqueda de acuerdos, ocasionados por el viejo
ejército estadounidense.
Primero, de febrero a abril de 2015. Un periodo de relativa tranquilidad aunque
siempre con provocaciones del régimen fascista de ucrania (Kiev). Esto se inició tras la
firma del acuerdo de cese el fuego el pasado 12 de febrero de 2015 en Minsk
(Bielorrusia) por el Grupo Tripartito para el Donbass (Sudeste de Ucrania). Y, en Irán,
tras el 02 de abril de 2015 por el tema nuclear, como dice la prensa internacional,
después de ocho días de maratonianas conversaciones en la ciudad suiza de Lausana.
Segundo, todo el mes de mayo de 2015. Este periodo indica combates directos: muy
fuertes en el Donbass y fuerte guerra informativa contra Irán.
En este mismo cuadro Siria estuvo en medio de un completo arreciamiento paramilitar
combinado con bombardeos criminales de la fuerza aérea estadounidense
encabezando la llamada “Coalición internacional” formada por más de cuarenta países,
además de una intensa guerra psicológica. En realidad muy grave para la integridad
territorial de este país. Incluso a finales de mayo de 2015 Estados Unidos casi había
completado, a través de sus prensas y el terror de sus fantoches, las bases para una
intervención militar. Esto se resumía en la farsa de que con la captura de la ciudad
Palmira el 50 % de territorio sirio, supuestamente, ya habría estado en poder del viejo
ejército estadounidense vía sus escuadrones de la muerte paramilitares (Estado
Islámico).
Y, tercero, todo el mes de junio de 2015. Es de conocimiento público la firma de
acuerdo Iraní sobre armamento nuclear antes del 30 de junio de 2015. Pero en lo
esencial este corto periodo, expresa el retorno a las cumbres:
Veamos:
A.- Del 29 al 31 de mayo de 2015 se efectuó la XIII Cumbre de Seguridad de Asia
conocida como Diálogo de Shangri-La (seguridad regional), con asistencia de altos
oficiales militares y funcionarios políticos de unos 30 países organizado en Singapur.
B.- El 5 de junio de 2015 se reunieron los ministros del Interior de los Estados
miembros de la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS) en Dushambé, capital
de Tayikistán.
C.- Entre el 7 y 8 de junio de 2015 se celebró en Baviera (Alemania) la cumbre del G7
2015. Bien sabemos que el G8 se convirtió así cuando Rusia se unió al grupo en 1998 y
en G7 cuando Alemania, Canadá, EE.UU., Francia, Italia, Japón y Reino Unido
decidieron no acudir a la cumbre de Sochi (Rusia) prevista para junio de 2014 y, en su
lugar, se reunieron en Bruselas.
D.- Mientras escribo este breve apunte el grupo Bilderberg estaba conspirando contra
el mundo desde el 10 y hasta el 14 de junio de 2015 en Austria.
Por otra parte no hay que olvidar que hay varias cumbres en espera, el más
importante, la que debe darse antes del 30 de junio de 2015, entre Irán y el Grupo 5+1
(EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania), por el asunto nuclear
de este país. También es muy importante la 7ª cumbre de los jefes de los BRICS en la
74
ciudad rusa de Ufá capital de la república de Bashkortostan, prevista para el 9 y el 10
de julio de 2015.
Y, con esto, estamos a la espera de hechos gravitantes para la humanidad entera.
Probablemente a partir de julio de 2015 la confrontación estará agudizada. En
principio nadie está en un estado de capitulación. Con esto me refiero a Rusia, Irán,
incluso, China. La equiparación de fuerzas es baluarte en esta situación. Estados
Unidos deberá retroceder. Necesariamente. Salvo Rusia y China no presenten la batalla
(ni siquiera política) y, consecuentemente, Rusia pase a la defensiva y China refuerce
su colusión con Estados Unidos, entonces, este país (Estados Unidos) se habrá
impuesto en todas las líneas de la geoestratégia mundial y cuyas consecuencias la
tendrán que pagar muy caro Rusia y China, esto es, incluso, cuando Rusia se quede con
Crimea y, cuando China, de hecho, perderá toda su objetividad ascendente con el
asunto de la Rutas de la Seda, también en Europa y sobre todo en Oriente Medio en el
que Estados Unidos habrá recuperado la confianza de sus aliados, por supuesto, será
un retroceso de largo plazo muy difícil de superar para ambos países (Rusia y China). Y
esto ocurre, no lo olvidemos, cuando el espectro de la gran crisis económica mundial
iniciada en 2008 empieza a agitarse fuertemente contra Estados Unidos, Europa e
incluso, contra China, por lo que esta sería la razón fundamental, no otra, de la
Cumbre del grupo criminal de Bilderberg, también del colapsado G-7.
Cierto, retomando la cumbre de Irán y el Grupo 5+1 (EE.UU., el Reino Unido, Francia,
Rusia y China, más Alemania), por el asunto nuclear de este país, esta cumbre es muy
importante. Es una cumbre absolutamente decisiva para el Medio Oriente y toda la
geoestratégica mundial. Su sola firma indicará el retroceso de Estados Unidos en toda
su línea geoestratégica. Ya hemos estado observando esto en estos últimos días con
las reticencias del presidente, Barack Obama y su congreso.
Y con esto estamos a la expectativa de lo que se viene.
NOTAS.
1.- “Con la Guerra Aérea de Estados Unidos en el mes décimo, ISIS avances en Irak y
Siria”. Autor: Bill Van Auken. Nota publicada el 02 de junio de 2015, en: Gllobal
Reserach y World Socialist Web Site.
2.- “Informe revela vínculos directos entre EEUU y el Estado Islámico”. Nota publicada
el 04 de junio de 2015, en: cubadebate. Con información de Rusia Today”.
3.- “Más de 40 civiles mueren en Siria a causa de un ataque con bombas de barril,
según ONG”. Nota publicada el 30 de mayo de 2015, en: Sputnik.
4.- “Damasco llama a crear una coalición apoyada por Rusia para luchar contra el EI”.
Nota publicada el 27 de mayo de 2015, en: Sputnik.
5.- “Lavrov ve imposible combatir al Estado Islámico sin la asistencia de Damasco”.
Nota publicada el 30 de mayo de 2015, en: Sputnik.
6.- “China implementa estrategia militar de defensa activa, según libro blanco”. Nota
publicada el 26 de mayo de 2015, en: Spanish. xinhuanet. Com.
7.- “.China insta a EEUU a reducir actividades militares en Mar Meridional de China”.
Nota publicada el 12 de junio de 2015, en: Spanish. xinhuanet. Com.
8.- “BRICS no pretende ser una alianza militar, afirma viceministro ruso de Exteriores”.
Nota publicada el 27 de mayo de 2015, en: Sputnik).
9.- “Diálogo Shangri-La: Acuerdan países fortalecer colaboración contra terrorismo en
Asia” Nota publicada el 31 de mayo de 2015, en: Spanish. xinhuanet. Com.
75
Bien sabemos que los cambios mundiales han sido enormes, incluso, ahora son
extremadamente visibles ante los propios ojos del mundo, sobre todo, aquellos
referidos al resquebrajamiento de la hegemonía mundial estadounidense. Cambios
que, por supuesto, exigen una nueva estructura de poder (multipolar imperialista) que
el grupo de poder fascista de Washington simplemente no la acepta. Enajenado en sus
antiguos idilios retrasa cualquier acuerdo, en este caso, con Rusia respecto a Siria y
Sudeste de Ucrania.
Sin embargo la dura confrontación que vive el planeta (pugnas y colusiones interimperialistas) no está referida solo a estas dos regiones, sino, al conjunto del planeta,
por lo que cada contendiente (China, Estados Unidos y Rusia) tiene su propia visión
estratégica. Algunos de ellos son: los Balcanes con Macedonia de reciente pretendida
desestabilización. También el Cáucaso donde la arena movediza está en Georgia y
Azerbaiyán (Actualmente, se encuentra en guerra contra la República de Armenia por
el territorio de Nagorno Karabaj). En Asia central, casi toda la región. Sin olvidar lo que
hay en el mar meridional de China, donde Filipinas, en caso de conflicto armado,
puede constituirse de forma inmediata en una cabecera de playa a favor del viejo
ejército estadounidense. El presidente filipino, Benigno Aquino III, es un acérrimo antichino. Además, por supuesto, el sudeste asiático donde los vientos de guerra están
dirigidos contra la RPDC (la última provocación está referida a la guerra bacteriológicaÁntrax) que en las actuales circunstancias cuenta con un equipamiento nuclear muy
importante con el que somete a raya a Estados Unidos y Corea del sur. En América
Latina los peligros de devastación pesan muy fuertemente, en particular, contra
Venezuela.
Entonces esta es la razón de la actual desesperación estadounidense por imponer
acuerdos que extralimiten lo que es incapaz de lograr con las provocaciones actuales
de su viejo ejército que Rusia simplemente no las acepta. En principio Estados Unidos
no está en condiciones de sostener por más tiempo dos o tres guerras al mismo
tiempo, su bancarrota económica lo impide, máxime si se tiene cuenta su enorme
gasto militar (más de mil bases militares, además, numerosos contingentes de
paramilitarismo desplegado en casi todas las regiones del planeta que no viven, por
supuesto, del aire, necesitan presupuestos enormes). No exagero si digo que este
asunto es peor que Vietnam. Estados Unidos está empantanado hundiéndose en esta
vorágine de gastos militares. Aunque China sigue subvencionándola con la compra de
los bonos, aunque ya ahora en menor escala, que, entre otras, explican su status
defensivo en el arquetipo de la confrontación geopolítica actual. Consecuentemente
este país (Estados Unidos) no puede darse el lujo de abrir nuevos frentes de guerra e ir
más allá de estas regiones (Sudeste de Ucrania y Siria) bajo cargo de la implosión del
edificio del sistema imperialista occidental. Si, como hemos sostenido en anteriores
notas, Rusia mantiene firmeza y China pasa a la ofensiva militar, Estados Unidos puede
ser arrojado de todas las regiones donde provoca. Entonces esto obligaría a reforzar su
estrategia en los entornos de América Latina.
Hay que tener en cuenta siempre las cuatro características fundamentales de la actual
coyuntura histórica: estructura multipolar, equiparación de fuerzas, carrera
armamentística y guerra informativa. Son las bases de cualquier análisis internacional.
Aquí nos interesa la guerra informativa. Esto en Siria ahora está presente como una
guerra psicológica. Es de grandes proporciones. En realidad una grotesca adulteración
de la realidad objetiva, no solo de Oriente Medio, sino, del mundo entero. Y es parte
76
de su oposición a los cambios en los niveles de los poderes imperialistas que está
operándose en este mismo momento en el mundo. Los centros de contra información
y anti subversión del ejército estadounidense están indudablemente muy atareados. El
demiurgo Nazi-estadounidense “Miente, miente que algo queda”, es lo central para
este grupo. En realidad, una comedia fachosa del que resulta un mundo fantasioso
donde lo negro es blanco y la mentira es verdad. Ofuscaciones de baja monta
disparadas contra casi ocho mil millones de personas que viven en el planeta.
Veamos esto:
Ante todo, la grotesca adulteración de la realidad que los centros de contra
información del viejo ejército estadounidense imponen con el 90-95 % de las noticias
que se emiten a escala mundial:
Primero, Estados Unidos está regocijado hasta el extremo al imponer que el Estado
Islámico (EI) es “un grupo de ¿románticos?” que se ¿autofinancian? y que nada tienen
que ver con su ejército. El Pentágono esta rebosante de alegría por haber impuesto
esta farsa. Pero, ¿Alguien, en su sano juicio, puede creer esto? No. Son grupos
criminales, mercenarios y paramilitares reclutados en las principales ciudades de
Europa, África, Asia Central, los Balcanes y América Latina. Por cierto, hablamos aquí
de las fuerzas sin rango militar que componen este Estado Islámico (EI), máxime si se
tiene en cuenta la gran población desocupada, sobre todo, lumpen proletariado,
emergida como consecuencia de la gran crisis que se vive desde 2008 y que esperan
desesperadamente cada mes sus míseros sueldos, $ 1200 dólares que envía el
Pentágono por aviones y helicópteros que sobrevuelan los lugares donde han sido
destacados estos carnes de cañón, cuyos líderes tienen vinculaciones directas con el
ejército estadounidense (su engranaje).
Segundo, la manipulación informativa también está referida a mostrar a Estados
Unidos como un país que busca la “democracia” y no un país que quiere destruir el
planeta devastando ciudades, incluso con terremoto (sobre esto está pendiente la
investigación) y cometiendo genocidios contra la humanidad.
Tercero, de igual modo presentan a Siria como un país antidemocrático que protesta
(ojo no debe protestar) cuando los misiles estadounidense o de la coalición
Internacional impactan en su territorio destruyendo sus infraestructuras y asesinando
a sus indefensas poblaciones. La demonización del presidente sirio, Bashar Al Assad, es
demoledora.
Cuarto, difunden la farsa que Siria está al borde del colapso y derrotado, pa ra facilitar
la ocupación nazi estadounidense.
Quinto, publicitan utilizando a sus demagogos, que grupos de poder regionales, sobre
todo de Oriente Medio, absolutamente irrelevantes en el poder mundial y apéndices
suyos (vasallos), como que en algunos momentos estos se vuelven
antiestadounidenses, como el de Turquía siendo el primer portavoz militar de la OTAN,
Egipto, segundo receptor de ayuda militar estadounidense, Arabia Saudita, primer
receptor de protección militar estadounidense y sionismo israelita, primer receptor de
ayuda militar estadounidense.
Pero veamos lo concreto de lo anterior:
Empiezo observando la grosera manipulación en la ocupación de la ciudad Al Ramadi
de Irak por el Estado islámico, es decir, ejército estadounidense (Ojo siempre cuando
hablamos del criminal Estado Islámico hablamos del viejo ejército estadounidense).
¿Recuerdan cómo se produjo la ocupación de la ciudad de Mosul en Irak? Pues
77
debemos saber que la ocupación de la ciudad Al Ramadi (Irak) se produjo casi en
similares condiciones.
La ocupación de la ciudad Mosul. Ante todo recordemos lo que sucedió el 10 de junio
de 2014. Ese día fue ocupada esta ciudad. En lo central, hay que destacar en esto que
800 fanáticos “hicieron huir” a dos divisiones del ejército iraquí compuesta por 30.000
soldados que defendía la ciudad de Mosul poblada por 1,5 millones de personas. Un
hecho más que suficiente para demostrar lo bien que estuvo planificado la operación
militar para entregar esta ciudad (Mosul) a estas bandas criminales. Es decir, la
interrelación habida entre esta banda paramilitar (Estado Islámico, en realidad el viejo
ejército estadounidense) y el ejército del corrupto, Nuri al-Maliki, por aquellos días aún
presidente de este país, era una cuestión a plena luz del día. Es decir, sumamente
escandalosa. Además, es de sobra conocido que el cielo iraquí es cielo de los cazas F18 estadounidenses desde 2003.
La ocupación de la ciudad Al Ramadi. Esta ciudad es la capital de la provincia de Al
Anbar, situada a unos 100 kilómetros al oeste de Bagdad, por el criminal “Estado
Islámico”, ocurrida el 17 de mayo de 2015 después que el ejército que lo defendía la
abandonará y prácticamente la entregará a estas bandas famélicas. El ejercito que lo
protegía se llamaba “División de oro”, una unidad de fuerzas especiales del ejército
iraquí entrenado por Estados Unidos.
Veamos esto:
“Salim al-Jabouri, el presidente del Parlamento de Irak y más prominente político
sunita en el régimen de Bagdad, dijo a CNN que las tropas iraquíes abandonaron
Ramadi como resultado de "una decisión clara para dar la orden de retirarse - y
después de eso Ramadi cayó”. Al-Jabouri, dijo que el primer ministro Abadi, instalada
el año pasado con el apoyo de Washington, no había sido informado de la orden de
retirada de la ciudad. El colapso de las fuerzas de seguridad en Ramadi ocurrió, agregó,
después de la llamada División de oro - una unidad de fuerzas especiales entrenado
por Estados Unidos - de repente salió de la ciudad” (1).
También Cubadebate hizo algunas averiguaciones sobre esto: “Informe revela vínculos
directos entre EEUU y el Estado Islámico. El Estado Islámico y sus victorias en Mosul y
Ramadi serían obra de EE.UU., según revela un informe secreto de la organización
militar estadounidense Agencia de Inteligencia de Defensa (Defense Intelligence
Agency, DIA). El informe de la agencia, obtenido por la organización Judicial Watch,
grupo de vigilancia del gobierno no partidista y políticamente conservador, revela el
origen del Estado Islámico y las razones por las que cayeron en manos terroristas las
ciudades de Mosul y Ramadi. (2).
Entre tanto han seguido utilizando el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH)
para desacreditar a Siria:
El 26 de mayo de 2015 se denunció al “Observatorio Sirio para los Derechos Humanos”
como un centro anti-sirio y de manipulación informativa. De plano este “observatorio”
estaba descalificado como fuente de cualquier información sobre Siria. Sin embargo
han seguido utilizando a este centro como fuente de manipulación contra Siria, pues el
asunto, de la guerra psicológica continuaba febrilmente. En efecto el 30 de mayo de
2015 Sputnik hizo público el siguiente comunicado (con esto no estoy en contra de
Sputnik, como algunos puedan suponer, las prensas occidentales son los que están
febrilmente en esto y a ellos me refiero cuando hablo de “febrilmente”. Rusia Today y
Sputnik son mis mayores fuentes de información. Ojo con esto): “Más de 40 civiles
78
murieron y varias decenas de personas resultaron heridas a raíz de un ataque con
bombas de barril en la ciudad de Alepo, en el norte de Siria, comunicó este sábado el
Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH). Según la entidad, las bombas fueron
lanzadas por las fuerzas gubernamentales. Los explosivos cayeron en una zona al este y
noreste de Alepo. Fue atacada también la ciudad de Al Bab, controlada por el grupo
yihadista Estado Islámico (EI). (3).
Y, entre estos hechos, ocurren los siguientes posicionamientos:
Primero, la exigencia para que Rusia encabece una nueva coalición internacional en
Siria. Sobre esto hay dos hechos:
A.- El 27 de mayo de 2015 el embajador sirio en Moscú, Riad Haddad insto a crear una
coalición apoyada por Rusia para luchar contra el Estado Islámico. En concreto dijo: "El
Gobierno sirio llama a crear una coalición apoyada, ante todo, por Rusia y los países
amigos para luchar realmente contra el terrorismo internacional", ha dicho en una
entrevista a RIA Novosti” (4).
B.- El 30 de mayo de 2015 también el ministro de relaciones exteriores de Rusia,
Serguéi Lavrov, en una entrevista con la televisión rusa Rossiya 24, dijo que era
imposible combatir al Estado Islámico sin la asistencia de Damasco. Además reitero
que la denominada coalición liderada por Estados Unidos contra el Estado Islámico
debería coordinar sus bombardeos con el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas
(CSNU). La coalición internacional logrará neutralizar al Estado Islámico (EI) solo si
coopera con las autoridades sirias, reiteró el ministro. Según el ministro: “Según el
ministro, EEUU usa doble rasero al rechazar la cooperación con las autoridades sirias y
al no reconocer su legitimidad” (5).
Segundo, China sigue en la defensiva estratégica:
China ha hecho público el 26 de mayo de 2015 un libro blanco donde habla de una
estrategia militar de defensa activa. Allí se menciona que el ataque será solo defensivo,
todo ello en un contexto de crecientes tensiones con sus vecinos y Estados Unidos en
el mar de China Meridional” Agrega, entre otros, "No atacaremos a no ser que seamos
atacados, pero con toda seguridad contratacaremos si somos atacados", asegura el
documento.
Veamos esto:
“Las fuerzas armadas de China implementan la directriz militar estratégica militar de
defensa activa en la nueva coyuntura, según un libro blanco hecho público hoy martes
por la Oficina de Información del Consejo de Estado (gabinete chino). China seguirá
inquebrantablemente el camino del desarrollo pacífico y llevará a término una política
exterior independiente de paz y una política de defensa nacional que es defensiva por
naturaleza, según el libro blanco titulado "Estrategia Militar de China"(6).
Por otra parte fueron preocupantes las declaraciones del vicepresidente de la
Comisión Militar Central de China, Fan Changlong, expresadas el 11 de junio de 2015
en el Pentágono (EEUU) frente al secretario norteamericano de Defensa, Ashton Carter
y que al parecer ratifican la posición defensiva de China en la presente coyuntura.
Veamos esto:
“Anotó que las dos partes han logrado muchos éxitos importantes en los últimos años
en la construcción de un nuevo modelo de relaciones entre grandes potencias gracias a
los esfuerzos personales de los dos jefes de Estado. La relación entre los dos ejércitos
ha mantenido, en general, un impulso de desarrollo estable, como se demostró con la
firma de dos mecanismos de confianza mutua, con los nuevos avances en materia de
79
intercambio de visitas de alto nivel, con la celebración de consultas y diálogos
institucionalizados y con la realización de ejercicios y entrenamientos militares
conjuntos, señaló el general”.
“Fan propuso que los dos ejércitos establezcan un nuevo tipo de relación militar
caracterizada por "la confianza mutua, la cooperación, el no conflicto y la
sostenilidad". Expresó su esperanza de que ambas partes trabajen conjuntamente para
aumentar contactos, impulsar la confianza mutua estratégica, fortalecer la
cooperación pragmática y abordar de manera efectiva las crisis y los riesgos” (7).
Mientras esto ocurre los BRICS tienen enormes esperanzas en China. Cierto el
viceministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Riabkov, dijo lo siguiente:
“los BRICS —Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica- serán capaces de "contrarrestar
presiones arbitrarias, politizadas e ilegales" gracias a la creación del Banco de
Desarrollo y el Fondo Contingente de Reservas. Una vez que se haga operativo el
banco, se intensificará el desarrollo de proyectos de infraestructura y de inversión,
agregó Riabkov” (8).
Y tercero, en la XIV Cumbre Internacional de Seguridad de Asia que viene desde el año
2002 y llamado como ‘Diálogo de Shangri-La”, efectuada el 29 de mayo de 2015 en
Singapur no hubo seriedad en el análisis de las bandas paramilitares que el viejo
ejército estadounidense implementa en el mundo. Allí Estados Unidos se mostró
víctima de su propio ejército que es el Estado islámico y nadie fue capaz de decirle que
es su ejército y no un simple movimiento cualquiera.
En esto fueron elocuentes las palabras del presidente del Comité de Servicios Armados
del Senado de Estados Unidos, John McCain, cuando dijo: “"Estamos perdiendo porque
no estamos ganando. No significa que no estemos haciendo nada, lo que sucede es
que nada de lo que estamos haciendo diplomática, económica, o militarmente revierte
el impulso del EI", expresó. Por lo tanto pidió a todos los países trabajar juntos en la
lucha contra el terrorismo”
"El Estado Islámico recluta a jóvenes de todo el mundo, con rapidez y más
ampliamente que ningún otro movimiento terrorista antes. Las perspectivas de los
jóvenes para dejar su país y entrenarse y combatir con el EI y luego regresar a sus casas
y llevar a cabo ataques terroristas podría ser la más inmediata amenaza que todos
enfrentamos" (9).
Y, bajo estos hechos, continua el mundo en vilo permanente desde finales de 2010
cuando el viejo ejército estadounidense inició sus operativos en el norte de África. Es
un despliegue que avanza entre periodos de terror fascista, incluso, con traslado de
tropas y armamentos prácticamente hasta las fronteras de Rusia y búsqueda de
acuerdos que algunos llaman “cumbres de paz” que no satisface a ninguna de las
partes y es como una especie de círculo vicioso que atormenta a la humanidad
entera:
Aquí una apretada periodización de estos hechos, como acostumbro, en realidad, un
pequeño resumen de la confrontación ruso-estadounidense desde febrero a junio de
2015. Como observaran es un cuadro zigzagueante entre fuertes enfrentamiento y,
búsquedas de acuerdos, pero, principalmente de duros enfrentamientos que se dan
incluso en los llamados periodos de búsqueda de acuerdos, ocasionados por el viejo
ejército estadounidense.
Primero, de febrero a abril de 2015. Un periodo de relativa tranquilidad aunque
siempre con provocaciones del régimen fascista de ucrania (Kiev). Esto se inició tras la
80
firma del acuerdo de cese el fuego el pasado 12 de febrero de 2015 en Minsk
(Bielorrusia) por el Grupo Tripartito para el Donbass (Sudeste de Ucrania). Y, en Irán,
tras el 02 de abril de 2015 por el tema nuclear, como dice la prensa internacional,
después de ocho días de maratonianas conversaciones en la ciudad suiza de Lausana.
Segundo, todo el mes de mayo de 2015. Este periodo indica combates directos: muy
fuertes en el Donbass y fuerte guerra informativa contra Irán.
En este mismo cuadro Siria estuvo en medio de un completo arreciamiento paramilitar
combinado con bombardeos criminales de la fuerza aérea estadounidense
encabezando la llamada “Coalición internacional” formada por más de cuarenta países,
además de una intensa guerra psicológica. En realidad muy grave para la integridad
territorial de este país. Incluso a finales de mayo de 2015 Estados Unidos casi había
completado, a través de sus prensas y el terror de sus fantoches, las bases para una
intervención militar. Esto se resumía en la farsa de que con la captura de la ciudad
Palmira el 50 % de territorio sirio, supuestamente, ya habría estado en poder del viejo
ejército estadounidense vía sus escuadrones de la muerte paramilitares (Estado
Islámico).
Y, tercero, todo el mes de junio de 2015. Es de conocimiento público la firma de
acuerdo Iraní sobre armamento nuclear antes del 30 de junio de 2015. Pero en lo
esencial este corto periodo, expresa el retorno a las cumbres:
Veamos:
A.- Del 29 al 31 de mayo de 2015 se efectuó la XIII Cumbre de Seguridad de Asia
conocida como Diálogo de Shangri-La (seguridad regional), con asistencia de altos
oficiales militares y funcionarios políticos de unos 30 países organizado en Singapur.
B.- El 5 de junio de 2015 se reunieron los ministros del Interior de los Estados
miembros de la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS) en Dushambé, capital
de Tayikistán.
C.- Entre el 7 y 8 de junio de 2015 se celebró en Baviera (Alemania) la cumbre del G7
2015. Bien sabemos que el G8 se convirtió así cuando Rusia se unió al grupo en 1998 y
en G7 cuando Alemania, Canadá, EE.UU., Francia, Italia, Japón y Reino Unido
decidieron no acudir a la cumbre de Sochi (Rusia) prevista para junio de 2014 y, en su
lugar, se reunieron en Bruselas.
D.- Mientras escribo este breve apunte el grupo Bilderberg estaba conspirando contra
el mundo desde el 10 y hasta el 14 de junio de 2015 en Austria.
Por otra parte no hay que olvidar que hay varias cumbres en espera, el más
importante, la que debe darse antes del 30 de junio de 2015, entre Irán y el Grupo 5+1
(EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania), por el asunto nuclear
de este país. También es muy importante la 7ª cumbre de los jefes de los BRICS en la
ciudad rusa de Ufá capital de la república de Bashkortostan, prevista para el 9 y el 10
de julio de 2015.
Y, con esto, estamos a la espera de hechos gravitantes para la humanidad entera.
Probablemente a partir de julio de 2015 la confrontación estará agudizada. En
principio nadie está en un estado de capitulación. Con esto me refiero a Rusia, Irán,
incluso, China. La equiparación de fuerzas es baluarte en esta situación. Estados
Unidos deberá retroceder. Necesariamente. Salvo Rusia y China no presenten la batalla
(ni siquiera política) y, consecuentemente, Rusia pase a la defensiva y China refuerce
su colusión con Estados Unidos, entonces, este país (Estados Unidos) se habrá
impuesto en todas las líneas de la geoestratégia mundial y cuyas consecuencias la
81
tendrán que pagar muy caro Rusia y China, esto es, incluso, cuando Rusia se quede con
Crimea y, cuando China, de hecho, perderá toda su objetividad ascendente con el
asunto de la Rutas de la Seda, también en Europa y sobre todo en Oriente Medio en el
que Estados Unidos habrá recuperado la confianza de sus aliados, por supuesto, será
un retroceso de largo plazo muy difícil de superar para ambos países (Rusia y China). Y
esto ocurre, no lo olvidemos, cuando el espectro de la gran crisis económica mundial
iniciada en 2008 empieza a agitarse fuertemente contra Estados Unidos, Europa e
incluso, contra China, por lo que esta sería la razón fundamental, no otra, de la
Cumbre del grupo criminal de Bilderberg, también del colapsado G-7.
Cierto, retomando la cumbre de Irán y el Grupo 5+1 (EE.UU., el Reino Unido, Francia,
Rusia y China, más Alemania), por el asunto nuclear de este país, esta cumbre es muy
importante. Es una cumbre absolutamente decisiva para el Medio Oriente y toda la
geoestratégica mundial. Su sola firma indicará el retroceso de Estados Unidos en toda
su línea geoestratégica. Ya hemos estado observando esto en estos últimos días con
las reticencias del presidente, Barack Obama y su congreso.
Y con esto estamos a la expectativa de lo que se viene.
NOTAS.
1.- “Con la Guerra Aérea de Estados Unidos en el mes décimo, ISIS avances en Irak y
Siria”. Autor: Bill Van Auken. Nota publicada el 02 de junio de 2015, en: Gllobal
Reserach y World Socialist Web Site.
2.- “Informe revela vínculos directos entre EEUU y el Estado Islámico”. Nota publicada
el 04 de junio de 2015, en: cubadebate. Con información de Rusia Today”.
3.- “Más de 40 civiles mueren en Siria a causa de un ataque con bombas de barril,
según ONG”. Nota publicada el 30 de mayo de 2015, en: Sputnik.
4.- “Damasco llama a crear una coalición apoyada por Rusia para luchar contra el EI”.
Nota publicada el 27 de mayo de 2015, en: Sputnik.
5.- “Lavrov ve imposible combatir al Estado Islámico sin la asistencia de Damasco”.
Nota publicada el 30 de mayo de 2015, en: Sputnik.
6.- “China implementa estrategia militar de defensa activa, según libro blanco”. Nota
publicada el 26 de mayo de 2015, en: Spanish. xinhuanet. Com.
7.- “.China insta a EEUU a reducir actividades militares en Mar Meridional de China”.
Nota publicada el 12 de junio de 2015, en: Spanish. xinhuanet. Com.
8.- “BRICS no pretende ser una alianza militar, afirma viceministro ruso de Exteriores”.
Nota publicada el 27 de mayo de 2015, en: Sputnik).
9.- “Diálogo Shangri-La: Acuerdan países fortalecer colaboración contra terrorismo en
Asia” Nota publicada el 31 de mayo de 2015, en: Spanish. xinhuanet. Com.
(*) ENRIQUE MUÑOZ GAMARRA:
Sociólogo peruano, especialista en geopolítica y análisis internacional. Autor del libro:
“Coyuntura Histórica. Estructura Multipolar y Ascenso del Fascismo en Estados
Unidos”. Su Página web es:
www.enriquemunozgamarra.org
Zona
Sociólogo peruano, especialista en geopolítica y análisis internacional. Autor del libro:
“Coyuntura Histórica. Estructura Multipolar y Ascenso del Fascismo en Estados
Unidos”. Su Página web es:
www.enriquemunozgamarra.org
82
El Nuevo Paradigma de la Educación para el siglo
Inés Aguerrondo
http://campus-oei.org/administracion/aguerrondo.htm
“Lejos de la resignación distinguida y la utopía encantatoria, sigue siendo posible otro camino.
Hoy hay lugar para la redefinición de un verdadero reformismo, radical en sus análisis y
ambicioso en sus objetivos que, al mismo tiempo, vuelva a dar un sentido positivo a una parte
necesaria de utopía en la política. Nada obliga a contentarse con un discurso gerencial que
equivale a negar transformaciones profundas, o con un discurso de rechazo nostálgico o
soñador. Sí, las tensiones actuales resultan de la dinámica fundamental de las sociedades
modernas y la economía de mercado. Pero esas tensiones deben ser dominadas. Y pueden
serlo. Si se quiere recuperar su papel, la política debe consagrarse a formalizar este diagnóstico
y las perspectivas que conduce.”
Jean - Paul Fitoussi y Pierre Rosanvallon, La nueva era de las desigualdades, Editorial
Manantial, Buenos Aires, 1997
En la nueva sociedad del conocimiento, la educación hace diferencia.
De las reformas a la transformación: un nuevo paradigma
De los saberes a las competencias.
Una nueva competencia: el saber tecnológico.
Los sistemas educativos no generan empleo, hacen empleable a la
gente.
Mejor educación con menores costos.
Estado o mercado para el servicio educativo.
Un Estado profesional y responsable por los resultados.
De las declaraciones a los hechos: las dificultades de las reformas de
segunda generación.
La transformación debe ser integral y consensuada.
En la nueva sociedad del conocimiento, la educación hace la diferencia.
La nueva ciudadanía
En las últimas décadas de este siglo asistimos a una serie de procesos que
configuran lo que indudablemente puede reconocerse como un cambio de
era. La era industrial nacida a la luz de la Revolución Francesa, de la
revolución científica y de la revolución industrial, está dando paso a otra era
¿posmoderna? ¿posindustrial?. Hoy el problema es cómo se construye una
opción superadora, cómo se construye la nueva democracia. ¿Qué nueva
forma debe adoptar hoy “el gobierno del pueblo para el pueblo”? ¿Qué
condiciones humanas deben desarrollar quienes serán los ciudadanos de esta
nueva sociedad?
Surge así una nueva ciudadanía. Y serán nuestras escuelas, nuestro sistema
de educación pública, el que tendrá que hacerse cargo de esta tarea.
La sociedad del conocimiento
Un rasgo indudable de esta nueva era es la importancia sin precedentes que
adquiere el saber científico tecnológico. Son claras las tendencias que indican
83
que ingresamos en la “era del conocimiento”. Como dicen los Toffler: “Todos
los sistemas económicos descansan sobre una ‘base de conocimientos’.
Todas las empresas dependen de la existencia previa de este recurso, de
construcción social. A diferencia del capital, el trabajo y la tierra, aquél suele
ser desdeñado por economistas y ejecutivos cuando determinan las
aportaciones precisas para la producción. Y, sin embargo, este recurso es el
más importante de todos.” (Toffler, 1995)
Es el más importante porque es el más humano. Porque sólo conoce
(aprende) el ser humano, pero también porque “el conocimiento tiene
virtudes intrínsecamente democráticas. A diferencia de las fuentes de poder
tradicionales (la fuerza, el dinero, la tierra) el conocimiento es infinitamente
ampliable. Su utilización no lo desgasta sino que, al contrario, puede producir
más conocimiento. Un mismo conocimiento, puede ser utilizado por muchas
personas y su producción exige creatividad, libertad de circulación,
intercambios, críticas constructivas, diálogo. Todas ellas condiciones propias
de una sociedad democrática” (Tedesco, 1995)
Una “sociedad del conocimiento” se perfila, entonces, como una forma social
superadora de las actuales, a condición de que el conocimiento - que es la
base - sea un bien que está disponible para todos. Esta es la nueva sociedad.
Mucho conocimiento al alcance de todos, distribuido de tal manera que
garantice igualdad de oportunidades.
¿Cómo se logra? A través de un sistema escolar que sea el encargado de
garantizarlo, al cual toda la sociedad le dé no solamente el mandato de
hacerlo, sino también los recursos para lograrlas.
La ética de la solidaridad
Pero no se trata del conocimiento como valor último, ya que este tipo de
prácticas está desnudando rápidamente sus falencias en temáticas tan
actuales como la clonación. Conocimiento dentro de una sociedad ética, con
altos valores que construyan lo ‘público’ como un espacio donde se
resguarde realmente el bien común y la dignidad de todo ser humano.
Una sociedad ética y solidaria, ya que solidaridad es lo mismo que
responsabilidad, y ésta se traduce en compromiso ético ante la historia. Una
sociedad ética es una sociedad regida por la solidaridad. La solidaridad
expresa la condición ética de la vida humana. La regla de oro que constituye
la norma moral básica, no es más que el desarrollo enunciativo de la
solidaridad: “Haz por los demás, lo que quisieras que hicieran por ti”.
A lo largo del desarrollo de la humanidad, el instrumento pacífico más
potente para lograr esto ha sido la educación. La educación rompe el círculo
vicioso de la pobreza, ya que es el determinante fundamental del empleo y
desde allí, del acceso a todos los bienes materiales y culturales que la
sociedad ofrece.
La nueva educación
84
Las dos condiciones básicas que parecen importantes frente al futuro:
conocimiento y valores, se distribuyen desde el sistema educativo, desde las
escuelas.
Es así que “la profundidad del proceso de cambio social que tiene lugar
actualmente nos obliga a reformular las preguntas básicas sobre los fines de
la educación, sobre quiénes asumen la responsabilidad de formar a las
nuevas generaciones y sobre qué legado cultural, qué valores, qué
concepción del hombre y de la sociedad deseamos transmitir” (Tedesco,
1995).
Esto es lo que hace hoy a la escuela democrática. Una escuela que ponga al
alcance de todos los habitantes del país, sin distinción de riqueza, raza o
religión, el conocimiento y los valores necesarios para participar en una
sociedad competitiva y solidaria.
La educación hace hoy la diferencia porque su doble función apoya los dos
requerimientos importantes de la futura sociedad: el conocimiento
resguarda la competitividad; la equidad resguarda la integración.
Más educación significa por ello mayor competitividad y mayor integración
social.
2. De las reformas a la transformación: un nuevo paradigma
De las reformas a la transformación
Como consecuencia de las transformaciones económicas, de los cambios en
los modos de producción, de los procesos de globalización de la economía y
de la cultura, una respuesta común que aparece en todas las latitudes son las
reformas de la educación. Pero los frutos no han sido los esperados. Su
común denominador está siendo su dificultad para abrirse paso, cuando no
su fracaso
¿A qué se debe esto? Las fuertes transformaciones de la sociedad global
están dejando en claro que este fin de siglo está suponiendo un cambio total
de reglas de juego, un cambio de paradigma. En el caso de la educación
quizás el fracaso se deba a que las respuestas tienden a sostener una mirada
retrospectiva más que a inventar una propuesta prospectiva. Y esto es grave
ya que a pesar de que estas respuestas prospectivas existen en otras áreas,
en la educación parece que se prefiriera una respuesta que se acerca a más
de lo mismo. Nos limitamos a expandir y replicar el modelo clásico de la
escuela del siglo pasado (más bien del siglo ante-pasado, del siglo XVIII, que a
esta altura, ya casi es del siglo ante-ante-pasado!), modernizándolo con
materiales didácticos y, sobre todo, incluyendo la mayor cantidad de
computadoras posible. Esta solución es por demás ingenua y denota muy
poca capacidad de mirada prospectiva.
Se requiere un nuevo paradigma educativo que pueda acompañar los nuevos
paradigmas que surgen en las demás áreas de la sociedad. Otro paradigma
que, superando las restricciones del actual, sea capaz tanto de saldar las
85
deudas del pasado cuanto de dar respuestas más adecuadas a las
necesidades del futuro.
Necesidad de un cambio de paradigma
Creo que esto es lo que está pasando en el campo de la educación. Las
imágenes se nos aparecen claras porque expresan una típica mirada desde el
pasado. Pero esta mirada no responde a las necesidades actuales -y menos a
las futuras- de la educación. Frente a un mundo en el que el problema son los
cambios de paradigma en todos los aspectos de la sociedad, las reformas
educativas se esfuerzan por respetar el modelo clásico escolar
introduciéndole nuevos elementos que, al no formar parte del modelo
original, no tienen suficiente fuerza como para transformarlo.
Lo que se ha hecho habitualmente, y se está haciendo, es tratar de llevar a su
máximo rendimiento el modelo de educación conocido en occidente a partir
de los comienzos de la era moderna, sin tratar de encontrar una propuesta
superadora.
Por esto las estrategias que se llevan a cabo no están siendo suficientes para
dar respuestas diferentes para una sociedad que se perfila como diferente,
ya que apuestan a mejorar este sistema educativo, nacido de las necesidades
de la revolución francesa y de la revolución industrial, hoy superadas.
Es necesario situarse fuera de esta óptica, para plantearse un nuevo sistema
educativo. Es necesario un cambio de paradigma.
3. De los saberes a las competencias
Las bases de un nuevo paradigma
El nuevo paradigma implica cambiar básicamente la ecuación conocimientoà
docenteà alumno pasando de los saberes a las competencias. Esto solo será
posible si tomamos conciencia, rediscutimos y redefinimos los ejes básicos
que subyacen al actual modelo de educación (Aguerrondo, 1993).
Los elementos que definen la estructura básica del sistema educativo son de
diferente orden, pero pueden distinguirse a partir de diferentes niveles de
análisis un conjunto de principios vertebradores y estructurantes (formas
soportantes) que rigen la organización de sus distintas instancias. (Matus,
1976)
Los varios ejes subyacentes funcionan como organizadores de la estructura
básica de la educación, y determinan aspectos específicos de su
organización. Estos principios vertebradores se agrupan en tres grandes
niveles de análisis. Un primer nivel político-ideológico, un segundo
nivel técnico-pedagógico, y un tercer nivelorganizacional. Cada uno de ellos
implica al otro. Es decir, el nivel político-ideológico, que es el que da el
‘sentido’ al sistema educativo, determina el campo de posibilidades del nivel
técnico-pedagógico. A su vez, el técnico-pedagógico, que se refiere a las
decisiones estrictamente ‘educativas’, determina qué forma debe tener la
organización concreta de la educación.
86
Las definiciones que se asumen en estos tres niveles de análisis en una
formación social determinada, definen un ‘paradigma’
educativo. Actualmente está en crisis el paradigma clásico de la educación o
sea los acuerdos sociales básicos aceptados en la sociedad en relación con las
definiciones implicadas en estos tres niveles.
Aunque existen elementos que permiten atisbar algunas redefiniciones,
éstos no han crecido todavía lo suficiente ni están lo suficientemente
sistematizados y organizados, como para plasmarse en decisiones que
afecten medularmente a los sistemas educativos. Las decisiones se toman,
todavía, desde las miradas retrospectivas del futuro. Frente a la crisis del
paradigma clásico no se vislumbran respuestas alternativas. Son propuestas
de ‘reforma’ y no de transformación estructural.
Quizás porque resulta demasiado extraña a nuestro léxico, al campo de la
educación no ha llegado todavía la idea de ‘reingeniería’, es decir de volver a
pensar una organización en todas sus dimensiones para que pueda cumplir
mejor su función. En nuestro caso cumplir mejor la función sería dar
educación de mejor calidad, a más cantidad de gente, con menores costos.
¿Una utopía? Sencillamente, un cambio de paradigma. Una mirada
prospectiva.
El nivel político-ideológico
El sistema educativo existe dentro de una sociedad concreta que, por
supuesto, también es un ‘sistema complejo’. La educación como tal es uno
de los múltiples subsistemas del todo social, fuertemente conectados. Este
primer nivel de análisis hace referencia a cuáles son las definiciones
exógenas al propio sistema educativo que expresan los requerimientos que
le hacen los otros diferentes subsistemas de la sociedad a la educación.
Normalmente se expresan como ‘fines y objetivos de la educación”.
Partimos del reconocimiento de que el aporte fundamental de los sistemas
educativos (en tanto aparatos escolares) al todo social, es la distribución
amplia de las competencias socialmente válidas para participar en la
sociedad, incluyendo en la idea de competencia no sólo su dimensión
cognitiva sino también los procedimientos mentales, valores, actitudes,
normas, y elementos conductuales que revierten sobre la realidad. Supone
una demanda general o básica referida a que el sistema educativo debe
distribuir los conocimientos y los valores y actitudes adecuados para sostener
una sociedad determinada, y las competencias individuales para que cada
individuo pueda encontrar un lugar propio dentro del contexto social.
Esto, que es la demanda general, se especifica a partir de tres áreas
concretas: el área de la cultura, la político-institucional y la de la producción.
El sistema cultural demanda lo que en términos generales podemos llamar la
formación de la identidad nacional, o sea la transmisión de los valores que
aseguren la continuidad de la sociedad. El sistema político-institucional
87
demanda actitudes y formación de conductas básicas para funcionar dentro
del modelo institucional y de distribución y ejercicio del poder que la
sociedad ha definido como el adecuado. El sistema productivo requiere dos
componentes principales: la formación de las capacidades y las actitudes y
conductas acordes con lo que requiera el aparato productivo de la sociedad y
el aporte de ciencia y tecnología para el crecimiento.
El proceso actual hacia el desarrollo de una sociedad global cuestiona
fuertemente desde dónde deben gestarse las definiciones políticoideológicas que informan un sistema educativo en particular, aspecto
absolutamente importante y pertinente, pero que sobrepasa el foco
específico de este artículo. En todo caso, hay algunos temas que aparecen
sistemáticamente en las reflexiones más conocidas sobre estas temáticas.
Desde el punto de vista de la demanda cultural, las discusiones actuales
parecen orientar hacia el hecho de que la nueva sociedad requiere un
replanteo de la formación de la identidad del individuo y de las naciones, lo
cual tiene consecuencias muy directas, por ejemplo, sobre los contenidos de
la enseñanza, o sobre los rituales frente a los símbolos patrios, por no
agregar también, sobre la misma idea de ‘patria’. En paralelo, se subraya la
importancia de formar ciudadanos con capacidad para enfrentar la
incertidumbre. “La sociedad del futuro, sometida a un ritmo acelerado y
constante de cambio, debería dotarse de instituciones capaces de manejar la
incertidumbre sin apelar a la supresión del debate. La experimentación,
admitida hasta hoy solamente como pauta de la investigación científica,
debería comenzar a ser admitida en la reflexión teórica y en la práctica
política” (Tedesco, 1995)
Los procesos que se desarrollan en el tránsito hacia esta sociedad global
abren fuertes demandas también desde la política. En algunos contextos,
estas demandas suponen formación para la participación, conocimiento para
poder optar, actitudes solidarias y tolerantes, pero en otros contextos se
incrementan justamente las contrarias de intolerancia, rigidez o
discriminación. Estas opciones tienen consecuencias directas por ejemplo
sobre el tipo de oferta educativa que se da (igual para todos, mejor para
algunos), las decisiones sobre quiénes pueden concurrir a ellas
preferencialmente (por ejemplo, exclusión de las mujeres o atención especial
a los sectores más carenciados), los modos de ‘hacer las cosas’ dentro de las
escuelas, por ejemplo aceptar y/o promover la divergencia de opiniones
entre profesores y alumnos para generar el aprendizaje de conductas de
disidencia democrática.
Parece estar más claro, o tener más acuerdo, el perfil que supone la nueva
demanda desde el sector productivo. Una serie de autores se han
pronunciado sobre este tema(1) a la vez que existe una serie de trabajos de
investigación y consulta a los sectores directamente implicados(2) que
88
muestran una amplia coincidencia. Las demandas del subsistema productivo
de la sociedad parecen estar centradas en la necesidad de desarrollar
competencias para la resolución de problemas, la capacidad de
protagonismo, de ser creativo, de trabajar en equipo. Ha variado el concepto
de ‘inteligente’, que hoy incluye las tradicionales capacidades cognitivas,
pero también otras como emociones, creatividad, intuiciones, imaginación.
El nivel técnico-pedagógico
Este segundo nivel de definiciones se centra en lo propiamente educativo,
dentro del aparato escolar. Para organizarlo existe una serie de opciones
técnicas o pedagógicas a partir de las cuales se toman las decisiones
concretas que permiten alcanzar las deseadas definiciones políticoideológicas. Estas opciones estructuran y subyacen al aparato escolar
concreto que conforma el sistema educativo. Modelan una forma específica
de cómo se organiza y cómo es el sistema educativo. Expresan el
compromiso concreto del aparato escolar para responder o no a las
demandas de los demás sectores de la sociedad, expresadas en el nivel
anterior.
Podríamos decir que un sistema educativo se organiza en torno a tres
grandes definiciones: qué se entiende por conocimiento, qué se entiende
por aprendizaje, y qué se entiende por contenido de la educación. Un cambio
de paradigma educativo consiste básicamente en que, a partir de nuevas
opciones político-ideológicas, una sociedad sea capaz de redefinir qué
entiende por cada uno de estos ejes subyacentes o principios básicos que
estructuran el sistema educativo. Pero no alcanza solo con discutirlos, con
que sean un tema en la agenda social. Tienen que ser redefinidos de tal
modo que esto se exprese en la práctica, o sea en la organización y la gestión
de todas las instancias educativas.
Los sistemas educativos actuales, nacidos como consecuencia de la
industrialización, se encuentran organizados sobre la base de las definiciones
de ciencia (conocimiento), de aprendizaje y de contenidos vigentes en el
momento en que se generaron. Para cumplir con este objetivo se
desarrollaron instituciones (las escuelas y los sistemas escolares) cuyos ejes
organizadores son definiciones pedagógicas que postulan cómo garantizar
que una serie de conocimientos válidos seanaprendidos por toda la
población.
La definición de estos supuestos es importante porque determina la forma
concreta de organización de la propuesta de enseñanza, o sea los elementos
materiales específicos que deben existir para que se lleve adelante el
proceso de aprendizaje, y por lo tanto los insumos materiales y los recursos
humanos para ello.
a. el conocimiento
89
En el paradigma de organización del sistema escolar que hemos heredado, se
entiende por ‘conocimiento’ la actividad humana que tiene como objetivo la
descripción y explicación de los fenómenos de la realidad, con el fin de
generar teoría que permita predecir su comportamiento. El conocimiento se
orienta hacia la producción de teoría, y por lo tanto el objetivo de la escuela
será la adquisición de “saberes” que se definen fundamentalmente desde su
dimensión teórica.
Un sistema educativo orientado hacia las necesidades del siglo XXI debe
incorporar una definición de ciencia (conocimiento) que la entienda con el
enfoque de Investigación y Desarrollo, o sea como la actividad humana que
explica los diferentes campos de la realidad y genera teoría, tratando de
producir cambios en ellos. En este enfoque, el fin fundamental de la ciencia
es operar sobre la realidad para transformarla. Este no es un cambio menor,
porque supone pasar de una actitud pasiva y contemplativa, a una activa y de
intervención sobre la realidad. Es la redefinición que subyace y da razón a la
idea de que la escuela no se debe centrar ya sólo en los ‘saberes’, sino que
debe poder dar cuenta de la formación de las ‘competencias’ para el hacer.
b. el aprendizaje
El paradigma de educación que hemos heredado, define el ‘aprendizaje’
como la resultante de un proceso de estímulo-respuesta, en el que tiene un
papel preponderante el esfuerzo individual, el estímulo de los textos y la
acción de transmisión del docente sobre el alumno. Es decir, la relación
docente-alumno debe ser directa, personal, y permanente.
Un sistema educativo orientado hacia las necesidades del siglo XXI debe
entender el aprendizaje como el resultado de la construcción activa del
sujeto sobre el objeto de aprendizaje. Supone un aprendiz activo, que
desarrolla hipótesis propias acerca de cómo funciona el mundo, que deben
ser puestas a prueba permanentemente. Supone la generación de
operaciones mentales y procedimientos prácticos que permitan seguir
aprendiendo solo, durante el tiempo de vida que está dentro del sistema
educativo y también una vez que egresó del sistema educativo formal.
Supone también que el maestro y el alumno exploran y aprenden juntos,
pero que esta exploración y aprendizaje mutuo puede revestir diferentes
formas, desde las más presenciales hasta las más remotas.
c. los contenidos
Finalmente, en el paradigma clásico de organización del sistema escolar se
supone que lo que se debe enseñar, los ‘contenidos’, son ciertos elementos
conceptuales de las disciplinas, que llegan a ser muchas veces sólo los datos
descriptivos singulares (fechas, datos, nombres).
Un sistema educativo orientado hacia las necesidades del siglo XXI debe
incorporar una definición de contenido de la enseñanza “mucho más amplia
de lo que es habitual en las discusiones pedagógicas. En realidad,
90
los contenidos designan el conjunto de saberes o formas culturales cuya
asimilación y apropiación por los alumnos y alumnas se considera esencial
para su desarrollo y socialización.” (Coll y otros, 1994). O sea que la escuela
debe enseñar, por supuesto, todos los elementos conceptuales que el avance
de la ciencia y las necesidades de resolver problemas determine pero, y con
igual nivel de compromiso, es tarea del sistema escolar enseñar los
procedimientos mentales que permitan actualizar los conceptos y aplicarlos
a la realidad, y las actitudes y valores que entran en juego cuando dicha
aplicación tiene lugar.
Las opciones que se toman en torno a qué definición de conocimiento, de
aprendizaje y de contenido es válida para una sociedad, determinan desde
los planes de estudio hasta la forma organizativa y las prácticas cotidianas
concretas del sistema educativo: qué se enseña y en qué contexto
organizacional se enseña. Por esto una transformación educativa, para ser
estructural, debe proponer cambios fuertes en estos tres aspectos y no
atender única, o básicamente, a uno de ellos sin ocuparse de manera
sustantiva de los demás.
El nivel organizacional
Se asume que los contenidos científicos, los procedimientos, los valores, las
actitudes, las normas, se aprenden en la escuela a través de la rutina diaria
de la clase o del funcionamiento institucional. Esta transmisión no es ingenua
sino que está relacionada con la manera en que se definen las opciones
técnico-pedagógicas.
La definición de conocimiento, de aprendizaje y de contenido que adopta un
sistema educativo concreto, justifica sus modelos de organización y sus
prácticas rutinarias así como la cultura institucional, tanto a nivel de aula, de
la institución escolar, de la supervisión, o de la conducción nacional. Es decir
que la forma externa concreta de un sistema educativo - el funcionamiento
del aula, la organización de la escuela, los modelos de supervisión - deberán
ser diferentes si se varían las definiciones técnico-pedagógicas.
Consecuencias organizativas de la opción tradicional o clásica de definición
de ciencia (conocimiento, saber) son, por ejemplo, la organización del
aprendizaje centrado básicamente en textos y manuales o, más adelante en
la historia, la decisión de resolver la relación educación-trabajo a través de la
existencia de un tipo de escuelas (las técnicas), yuxtaponiendo a la oferta
educativa clásica un complemento de práctica (el taller) cuya organización
responde no a lógicas pedagógicas sino a lógicas empresariales (Gallart,
1988) .
Consecuencias organizativas de la opción tradicional o clásica de la definición
de aprendizaje es, por ejemplo, la propuesta organizativa que predetermina
la cantidad de alumnos por docente, suponiendo que un determinante
absoluto de la calidad del proceso de enseñanza es el pequeño número de
91
alumnos por grupo escolar. Implica también la disposición de los alumnos en
pupitres individuales, en los cuales deben realizar su tarea de manera
solitaria y aislada. No se puede conversar, no se puede trabajar con el
compañero, es decir el alumno trabaja para sí mismo sin jugar un rol grupal.
Consecuencias organizativas de la opción tradicional o clásica de definición
de contenido ha llevado a enfatizar el papel de la memoria en detrimento del
razonamiento, a suponer que sólo se aprende dentro de la escuela, y a
entender por “conocimiento válido” sólo lo que se define como contenidos
escolares.
El nuevo paradigma educativo
La transformación educativa requiere un nuevo contrato social acerca de la
educación. Para esto, es necesario redefinir los ejes anteriores para pasar de
las reformas educativas a procesos de transformación. ¿Qué es entonces la
transformación educativa? Para decirlo de manera simple, el nuevo
paradigma educativo significa EDUCACIÓN PARA TODOS, CON CALIDAD, CON
EQUIDAD Y MÁS COSTO EFICIENTE.
Universalidad de la educación
EDUCACION PARA TODOS fue la idea fuerza del paradigma anterior (todavía
vigente) y se desarrolló con singular importancia en la historia
latinoamericana. Gracias a esta idea, y a las leyes que la instrumentaron,
hemos avanzado mucho en este aspecto del paradigma. Nos queda, por
supuesto la deuda de la repetición y la deserción que son producto del viejo
paradigma. Ese, que fue bueno para algunos chicos (los de clase media,
urbana, con una base cultural determinada) no lo fue para muchos otros (los
que no tenían estas condiciones). En aras de creer que lo más democrático
era igual educación para todos, dimos a todos lo mismo, sin atender a las
necesidades de cada uno. Nos queda también la deuda de la calidad.
Pero, ¿qué significa en el nuevo paradigma EDUCACION PARA TODOS? Este
es uno de los pocos aspectos del viejo paradigma que se ha redefinido
mundialmente.
Hoy, ‘educación para todos’ quiere decir, básicamente, MAS educación para
todos o, quizás, la cantidad de educación que la sociedad necesita que todos
tengan. Y esta cantidad es hoy indudablemente bastante mayor que hace un
siglo o un siglo y medio.
Ya desde hace tiempo la gran mayoría de los países del mundo ha ampliado a
diez o doce años la cuota obligatoria de educación para toda su población,
por supuesto reconociendo que a lo largo de estos diez años los alumnos
pasan por distintas edades evolutivas que deben ser reconocidas por el
sistema educativo.
Calidad de la educación
Más educación para todos, CON CALIDAD, dice el nuevo paradigma de la
educación para el Siglo XXI. Desde la puesta en marcha de nuestros sistemas
92
educativos, con el paradigma del Siglo XIX, nuestra educación sin dudas ha
perdido calidad. Pocas personas hoy dudarían en decir que esto es cierto;
pero también muy pocas podrían hoy decir con claridad en qué asientan sus
afirmaciones porque lo primero que surge es la pregunta ¿qué es calidad de
la educación?, bastante difícil de contestar unívocamente porque la gran
(¿)ventaja(?) de este término es que es sumamente subjetivo y cambia con
las épocas históricas y los contextos sociales.
Hoy calidad en educación se puede definir por lo que se llaman los 7
lenguajes de la modernidad. Calidad de la educación es que TODOS los
chicos, al llegar a la terminación de su educación obligatoria hayan logrado:
Altas competencias en lectura y escritura. Saber comunicar usando palabras,
números, imágenes...navegar diestramente por las superautopistas de
información a través de redes electrónicas, porque saber leer y escribir ya no
es un simple problema de alfabetización; es un auténtico problema de
supervivencia. El reto es que todos los chicos aprendan a leer y escribir bien
en 1º, 2º y 3º grado.
Altas competencias en cálculo matemático y resolución de problemas.
Aprender a resolver problemas. Para hacerlo se necesitan estrategias y
métodos adecuados, que se basan en lógicas distintas según la naturaleza del
problema. Cada área de problemas debe ser resuelto con un método
específico. Y éstos se aprenden y deben ser enseñados en cada uno de los
campos del saber: matemática, geografía, lengua, relaciones humanas. Esto
también es un compromiso de la escuela elemental.
Altas competencias en expresión escrita. Saber describir. analizar, comparar,
es decir saber exponer con precisión el pensamiento por escrito. No es
posible participar activamente en la vida de la sociedad-mundo si no se es
capaz de manejar signos, símbolos, datos, códigos, manuales, directorios,
bibliotecas, archivos. Para ser productivos en el trabajo hay que saber operar
equipos computarizados y para hacerlo se necesita precisión en el lenguaje
escrito.
Capacidad para analizar el entorno social y comportarse éticamente. Ser
democrático. Saber intervenir y participar en el ejercicio de la ciudadanía. Ser
ciudadano significa ser una persona crítica, capaz de convertir los problemas
en oportunidades; ser capaz de organizarse para defender intereses y
solucionar problemas sin violencia a través de la deliberación y la
concertación, respetando las reglas y las leyes establecidas.
Capacidad para la recepción crítica de los medios de comunicación social. Los
medios de comunicación no son un simple pasatiempo. Producen y
reproducen nuevos saberes, éticas y estilos de vida. Ignorarlos es vivir de
espaldas al espíritu del tiempo. Todos tienen que ser receptores activos de
los medios de comunicación (cine, televisión, radio, revistas..) para poder
analizarlos y para expresarse en sus lenguajes.
93
Capacidad para planear, trabajar y decidir en grupo. Saber asociarse, saber
trabajar y producir en equipo, saber concertar, son saberes estratégicos para
la productividad y fundamentales para la democracia. La capacidad de
planear, trabajar y decidir en grupo se forma cotidianamente a través de un
modelo de autoestudio y autoaprendizaje cooperativo, con el apoyo de guías
técnicamente elaboradas, que le permiten al niño y al joven ir produciendo
conocimiento.
Capacidad para ubicar, acceder y usar mejor la información acumulada. En el
futuro próximo será imposible ingresar al mercado de trabajo sin saber
ubicar datos, personas, experiencias... y menos aun sin saber cómo usar esa
información para resolver problemas. Hace falta saber consultar en las
bibliotecas, hemerotecas y videotecas, centros de información y
documentación, museos, revistas científicas, bases de datos, redes
electrónicas. Se requiere también saber describir experiencias, sistematizar
conocimientos, publicar y difundir trabajos. Todos tienen que aprender a
manejar información.
De los saberes a las competencias
Los siete ‘lenguajes de la modernidad’ definen los nuevos ‘contenidos’ de la
educación. Lo que hay que aprender; lo que hay que enseñar. El problema es
que ya no alcanza solo con modificar los programas de estudio. Para
competir en la sociedad del conocimiento no basta con saber las reglas de
ortografía, el teorema de Pitágoras o las fechas fundamentales de la historia.
Ni siquiera basta con escribir bien, manejar las operaciones matemáticas y
conocer los procesos históricos.
La sociedad del Siglo XXI requiere de algo más complejo que los meros
‘saberes’ o conocimientos. Requiere COMPETENCIAS. El viejo paradigma
centraba sus esfuerzos en que los chicos ‘supieran’. Una buena escuela era
aquella capaz de garantizar conocimientos a todos sus alumnos. Hoy
pedimos a la escuela no solo saberes, sino ‘competencias’.
¿Qué son las competencias? Una competencia es un ‘saber hacer’, con
‘saber’ y con ‘conciencia”. El término ‘competencia’ hace referencia a un
conjunto de propiedades de cada uno de nosotros que se están modificando
permanentemente y que tienen que someterse a la prueba de la resolución
de problemas concretos, ya sea en la vida diaria o en situaciones de trabajo
que encierran cierta incertidumbre y cierta complejidad técnica. La gran
diferencia es que la competencia no proviene solamente de la aprobación de
un curriculum (plan de estudios), sino de la aplicación de conocimientos en
circunstancias prácticas. Los conocimientos necesarios para poder resolver
problemas no se pueden transmitir mecánicamente; son una mezcla de
conocimientos tecnológicos previos y de la experiencia que se consigue con
la práctica, muchas veces conseguida en los lugares de trabajo.
94
Las competencias están en el medio entre los ‘saberes’ y las ‘habilidades’.
Entonces, las competencias, como conjunto de propiedades inestables de las
personas, que deben someterse a prueba permanentemente, se oponen a
las calificaciones que se medían por un diploma y por la antigüedad en la
tarea. Lo importante hoy es SER COMPETENTE, que quiere decir saber hacer
cosas, resolver situaciones. Pero como las situaciones son cada vez más
complejas, ser competente requiere por un lado de muchos saberes, teóricos
y prácticos, y por otro de mucha imaginación y creatividad.
Por esto no alcanza con reformas que cambien los programas de estudio que,
como todos sabemos, es absolutamente imperativo, y se está haciendo;
también hay que cambiar los enfoques de las disciplinas que se enseñan,
incluir nuevos campos disciplinarios (como tecnología, inglés o computación),
y cambiar las metodologías de enseñanza. Pasar de los saberes a las
competencias como meta de la enseñanza es realmente importante no
solamente porque en una democracia todos tienen derecho al conocimiento
válido, sino también porque la buena formación de todos los ciudadanos es
hoy el mejor pasaporte hacia una sociedad productiva e integrada
socialmente.
Equidad en educación
Más educación para todos, CON EQUIDAD, dice el nuevo paradigma de la
educación para el Siglo XXI. Desde la puesta en marcha de nuestros sistemas
educativos, nuestra educación sin dudas ha generado equidad, pero también,
simultáneamente, ha sido la causa de desigualdades. Para decirlo
simplemente, dar ‘igual educación a todos’, como era el ideal igualitario del
siglo pasado, significó mantener (y a veces agrandar) las diferencias con que
los chicos entraban a la escuela.
Una propuesta de enseñanza pensada para la clase media (lo que supone
que los chicos tienen libros, diarios, revistas, en la casa; que la mamá puede
ayudar con los deberes; que en la casa hay un lugar cómodo para estudiar;
que los chicos no tienen obligaciones fuera de las del colegio que les tomen
su tiempo libre) no funcionó cuando le tocó el turno de incorporarse
masivamente a la escuela a los sectores populares.
Por esto hay más repetidores y más desertores entre los chicos pobres que
entre los de clase media. No porque ‘no les dé la cabeza’ - como se dice
muchas veces - sino porque la manera en que se les enseña supone
condiciones de vida y capital cultural típico de clase media y no de otros
sectores. Es claro que si para aprobar un grado hay que ir a la escuela todos
los días desde marzo a noviembre, pero porque deben trabajar en tareas del
campo, hay chicos que no pueden cumplir este requisito, la ‘culpa’ del
fracaso escolar o del mal rendimiento no es del chico o de su familia sino de
cómo se organizan las cosas para hacer posible el aprendizaje.
95
A partir de la década del 30, nos dimos cuenta de que había muchos chicos
que repetían los primeros grados y que, finalmente, terminaban yéndose.
Por esto, se empezaron a pensar formas de encararlo, pero las respuestas
clásicas frente a estos problemas fueron siempre pensadas desde el viejo
paradigma. Es decir, siempre se pensó en el fracaso como en un problema de
‘carencias’, y por lo tanto, se buscó cómo llenarlas.
Frente a las carencias socioeconómicas, se inventó el comedor escolar, el
reparto de útiles, la asistencia médica. Frente a los ‘problemas de
aprendizaje’ se inventaron los gabinetes psicopedagógicos escolares, las
maestras niveladoras, los grados recuperadores. Siempre más de algo, para
cubrir las carencias, lo que por supuesto, aumentaba los costos (que no
teníamos en cuenta).
¿Cuál es la respuesta desde el nuevo paradigma? El secreto es reconocer que
existen públicos diferentes. Esto, que es hoy universalmente reconocido por
cualquier conocedor de marketing que desee incrementar la eficacia de su
negocio, es todavía difícil de aceptar en el campo de las políticas públicas y
mucho más si se trata de políticas sociales. Públicos diferentes quiere decir
precisamente eso: los chicos de los sectores populares no son mejores ni
peores que los de clase media. Son diferentes. Fracasan frente al paradigma
de enseñanza clásica porque no se les ofrece un ‘producto’ diferente, una
forma de aprender diferente, a la medida de sus necesidades.
Esto es lo que propone el nuevo paradigma: diversas respuestas
EQUIVALENTES (esto es MUY importante), que tengan en cuenta las
características propias de cada sector. Diversas respuestas que supongan
también entre las muchas cosas diferentes, las que son una carencia. Pero no
en función de una oferta homogénea, para la cual todos los ‘carenciados’ son
iguales, sino atendiendo a las necesidades específicas de manera específica.
En todo esto es imprescindible no perder de vista una cosa: no sirven
respuestas de primera y respuestas de segunda, deben ser EQUIVALENTES.
Porque armar dos (o varios) circuitos de calidad diferente implica preparar
ciudadanos de calidades diferentes. Esto no es bueno ni desde el punto de
vista democrático, ni desde el punto de vista económico. Una sociedad
competitiva es aquélla en la cual TODOS sus ciudadanos son empleables, y en
este tipo de sociedad esto solo se logra con todos sus recursos humanos
capacitados (o sea educados) en las ‘competencias’ de la modernidad.
4. Una nueva competencia: el saber tecnológico
Hacia el humanismo tecnológico
El saber tecnológico es el centro de la nueva cultura de la sociedad del
conocimiento. No se trata de tecnologías duras solamente, que pareciera
que se oponen a la mirada clásica del humanismo. Se trata de una manera de
pensar. Por esto, no se trata de despreciar o dejar de lado la cultura
96
humanista, cuna de nuestra civilización, se trata de redefinirla teniendo en
cuenta las necesidades de la nueva sociedad.
El pensamiento tecnológico supone modos específicos de operar de la
mente. Tishman presenta un resumen interesante de sus características
(Tishman, 1994). Para este autor existen siete disposiciones del pensamiento
tecnológico, cada una con sus propósitos y movimientos clave.
1. La disposición a ser amplio y aventurero
Propósito: ir más allá de lo obvio y hacia una concepción más rica de un
tópico o hacia una serie más amplia de opiniones.
Movimientos clave: sea audaz!; vaya más allá de lo obvio; busque otros
puntos de vista; tenga en cuenta lo opuesto, lo contrario; cuestione los
supuestos; explore territorios nuevos, vaya más allá de los límites.
2. La disposición a tener capacidad de asombro, a la búsqueda de problemas
y a la investigación.
Propósito: encontrar y definir enigmas, misterios e inseguridades; estimular
la capacidad de inquisición.
Movimientos clave: sea curioso!; identifique problemas, preguntas y
enigmas; busque lo que está escondido, lo que falta; pregúntese sobre los
temas profundos, haga preguntas difíciles; identifique senderos intrigantes
de investigación.
3. La disposición a construir explicaciones y comprensiones.
Propósito: construir comprensiones profundas de tópicos, ideas, objetos y
eventos a través del uso activo del conocimiento.
Movimientos clave (3 áreas):
Area 1 - Describir y clasificar: descríbalo claramente!; mire los detalles;
identifique los diferentes aspectos o dimensiones; clarifique lo que es raro o
poco claro.
Area 2 – Explicar y demostrar: explíquelo claramente!; identifique los
aspectos centrales; compárelo con otras cosas; identifique las causas; de un
ejemplo.
Area 3 – Conectar e integrar: haga conexiones!; encuentre conexiones con
otras cosas que ya sabe; transfiera lo que ha aprendido a otros contextos;
encuentre aplicaciones nuevas e inunsuales a su conocimiento; pregunte qué
puede hacer para llevar más allá su conocimiento.
4. La disposición a hacer planes y a ser estratégico.
Propósito: establecer estándares y metas y perseguirlas estratégicamene.
Movimientos clave: sea organizado!; identifique metas; establezca
estándares; pronostique, prevea, anticipe obstáculos; use estrategias de
pensamiento.
5. La disposición a ser intelectualmente cuidadoso.
Propósito: hacer que el pensamiento se organice y enfoque en lo que es
importante.
97
Movimientos clave: sea preciso!; preste atención a los detalles importantes;
haga listas, haga diagramas, use organizadores gráficos; sea meticuloso;
prevea errores costosos.
6. La disposición a buscar y evaluar razones.
Propósito: explorar y evaluar las redes de razones que subyacen las
creencias, las teorías y las acciones.
Movimientos clave: pregunte por qué!; busque justificaciones, razones a
favor y en contra; demande y provea pruebas; identifique las razones que
cuentan más y las que cuentan menos; busque las consecuencias y las
implicancias.
7. La disposición a ser metacognitivo.
Propósito: ser conciente del propio pensamiento, desarrollar y aplicar
estándares a su pensamiento, ser responsable del la gestión y de la
evaluación del propio pensamiento.
Movimientos clave: 2 áreas.
Area 1 – Describir el propio pensamiento: sea conciente de sí mismo!;
describa su pensamiento en dibujos y en palabras; note las regularidades y
tendencias en su pensamiento y en su proceso de aprendizaje.
Area 2 – Evaluar el pensamiento: sea autoevaluativo!; critique su propio
pensamiento, identifique fortalezas y áreas de mejoramiento; aplique
estándares a su pensamiento; desarrolle criterios para pensar
correctamente.
El saber tecnológico dentro del sistema educativo no se agota con la
necesaria introducción de las nuevas tecnologías de la información (NTI). No
se trata de la vieja escuela con computadoras, ni del modelo clásico con un
área que se llame educación tecnológica. Este estilo de pensamiento supone
modos específicos de operar de la mente, y también modos de aprender. Es
la base que redefine la manera de entender el aprendizaje en el paradigma
clásico y también la base que hace posible el desarrollo de competencias.
Requiere, también, el desarrollo de adecuadas propuestas de enseñanza y de
organización de la tarea de aprendizaje dentro y fuera de la escuela.
5. Los sistemas educativos no generan empleo, hacen empleable a la gente.
Los nuevos empleos y la educación
El Siglo XX es el siglo de la ciencia y de la tecnología. Más ciencia y tecnología
en nuestra vida cotidiana (en los aparatos domésticos, en los medicamentos,
en las comunicaciones, en los entretenimientos) no ha significado, sin
embargo, más ciencia y tecnología en la institución que prepara a las
generaciones jóvenes para insertarse en la sociedad, o sea en la escuela.
Esto no fue grave mientras nuestro aparato productivo tampoco basaba su
productividad en la inclusión de ciencia y tecnología. Pero lo está generando
ahora. ¿Por qué? Porque avanzar en el crecimiento y resituarse frente al
mercado mundial significa, entre otras cosas, formar parte de un mercado
98
laboral internacional. En este mercado mundial de trabajo, la competitividad
de los habitantes de un país depende no solo de la prosperidad de las
compañías, sino de las tareas o funciones que lleven a cabo - o sea del valor
que se pueda agregar - dentro de la economía mundial.
Las naciones afrontan una competencia mundial cada vez más directa e
inmediata y su competitividad se reconsidera hoy desde el punto de vista de
la competitividad de la fuerza de trabajo. Según Richard Reich (Reich,1993)
se perfilan para el Siglo XXI tres amplias categorías de trabajo, que
corresponden a las tres diferentes posiciones en que estarán las personas.
Las llama servicios rutinarios de producción, servicios personales y servicios
simbólico-analíticos.
Los servicios rutinarios de producción son una etapa en una secuencia.
Aunque eran la base de la línea de producción clásica, no han dejado de
existir. Un buen ejemplo son los ‘data entry’ (ingresadores de datos) en la
industria de la informática. Los servicios personales son los que se
proporcionan de persona a persona, como los vendedores, o los peluqueros.
Como los anteriores, deben ser competentes en su tarea pero, además,
tienen que ser afables, corteses y serviciales. Losservicios simbólicoanalíticos, incluyen las actividades expertas y suponen la capacidad de
identificar y resolver problemas. Son los que realmente agregan valor y
suponen alta calidad, originalidad, destreza y oportunidad. El trabajo en
equipo es, por lo general, un aspecto crítico.
Los analistas simbólicos hacen de intermediarios, identifican y resuelven
problemas valiéndose de símbolos. Para ello utilizan instrumentos de análisis
variados como algoritmos matemáticos, argumentos legales, tácticas
financieras, principios científicos, observaciones psicológicas acerca de cómo
persuadir o entretener, métodos inductivos o deductivos, o cualquier otro
tipo de técnica para resolver problemas.
Lo más importante es que cuanto mayor sea la proporción de analistas
simbólicos que exista en la fuerza de trabajo, más valor agregado existe. Esto
depende de la cantidad y calidad de los puestos de trabajo que se generen,
pero mucho más de cuáles son las competencias generales que tiene la
población. En otras palabras, por más que crezca la oferta de trabajo que
requiera competencias de analista simbólico, si no existen en la población,
no será posible llenarlos.
Para el crecimiento de la competitividad hay una condición básica: se debe
garantizar que exista, además del capital financiero y de la tecnología, el
capital humano adecuado para avanzar en el proceso de crecimiento. Esta es
una de las funciones centrales del nuevo sistema educativo. Por esto todos
los países están haciendo fuertes esfuerzos para transformarlos: las clásicas
escuelas que conocimos no alcanzan para formar masivamente las
competencias adecuadas para enfrentar los requerimientos del Siglo XXI.
99
Finalmente, hay que tener en cuenta que las transformaciones
socioeconómicas ocurridas en las últimas décadas obligan a redefinr la
relación entre educación y trabajo. “Las ‘nuevas’ empresas requieren
‘nuevos’ trabajadores...Hay fáciles acuerdos acerca de qué caracteriza a esos
nuevos trabajadores: una sólida formación básica el dominio de algunas
aptitudes. Ya no su conocimiento o su información, ya que ésta se devalúa
rápidamente y ya no tiene sentido económico transmitirla” (Ferraro, 1995).
Así como la educación no tiene como misión generar empleo sino hacer
empleable a la gente, tampoco la educación tiene ya como misión formar
para un puesto de trabajo específico. La vieja definición de las escuelas
vocacionales o técnicas tiene que ser reemplazada por otra más amplia en la
que el compromiso sea igual al del resto del sistema educativo: en paralelo
con las competencias generales que todos tienen que tener, dar las
competencias correspondientes a un campo amplio del mundo del trabajo.
6. Mejor educación con menores costos.
Un sistema más costo-eficiente
Educación para todos, pero MAS COSTO-EFICIENTE. El nuevo conocimiento y
la nueva forma de aprender permiten modificar los parámetros organizativos
sin perder calidad. Necesitamos abaratar costos, sin bajar calidad.
Una educación de calidad para todos es la condición de sustentabilidad de
una sociedad competitiva para el Siglo XXI. Planteado así el problema, la
situación es descorazonante porque cuando se quiere expandir y generalizar
la educación y se miran los marcos presupuestarios de los países de la región
latinoamericana encontramos que hay poca flexibilidad para llevar adelante
estos propósitos.
Dar educación, del modo en que hoy se hace, es sumamente costoso.
Nuestros sistemas escolares arrastran también en sus patrones de
organización la consecuencia de haber nacido en un momento histórico
dado, en sociedades con características concretas. Como surgieron con el
desarrollo de la sociedad industrial, en la Europa anglosajona, las
características de su organización fueron construidas a partir de las
realidades de ese entorno.
Eran sociedades en un proceso de acelerada concentración de población. Se
verificaba en esos momentos un proceso de urbanización, paralelo al de
industrialización, que significaba una particular concentración de la
población. Por eso la organización clásica de los sistemas educativos supone
poblaciones concentradas, con alta densidad demográfica. De hecho, en
América Latina, ha funcionado más o menos bien (hasta donde pudo) en las
zonas urbanizadas, con alta densidad de población, pero no ha sido lo mismo
en las zonas de alta dispersión de población.
Eran territorios no demasiado extendidos, lo cual supone posibilidades de
traslado determinadas, complejidades determinadas para la comunicación,
100
etc. Esta condición tampoco se cumple en todos los casos en América Latina
donde los territorios son muy extensos y las comunicaciones bastante
complejas y difíciles.
Eran (y siguen siendo) economías dinámicas cuyo crecimiento permitió
sostener e incrementar las inversiones educativas en infraestructura,
personal, equipamiento y gastos operativos a medida que los requerimientos
de la población lo fueron reclamando. Tercera condición diferente de la
realidad latinoamericana donde la economía se caracterizó por profundos
desequilibrios estructurales.
Esto ha dado como consecuencia un modelo de organización de las escuelas
y del sistema educativo muy difícil de sostener en sociedades como las
características en América Latina, en la que los techos presupuestarios de
sus economías hacen imposible financiar educación de alta calidad para
toda la población sobre la base del modelo occidental clásico de
organización de la educación.
Si esto es así, nuestra región tiene una real desventaja comparativa frente a
la ‘sociedad del conocimiento’ que hasta ahora no ha sido demasiado
evidente porque ya hemos dicho que en educación son poco frecuentes las
miradas realmente prospectivas. Un cambio del paradigma tradicional debe
tener como condición la reingeniería de la escuela y del sistema educativo
para lograr mejor educación para más gente con menores costos.
Esto quiere decir que hoy, generar un cambio de paradigma educativo, para
América Latina no es solo una cuestión de interés teórico o académico, sino
que es una cuestión en la que está implicada nuestra misma supervivencia.
Redefiniendo la organización
Otro modo de organizar la educación debería partir de plantear una nueva
organización del nudo del tema, o sea una nueva organización del
triángulo alumno-docente-conocimiento del que se desprenda la necesidad
correspondiente de reordenar los aspectos organizativos del resto de las
instancias que arman el sistema educativo.
Por ejemplo, redefinir el conocimiento insertando un enfoque de R&D
supone la necesidad de pensar en otra manera de utilizar los espacios físicos
de adentro y de afuera de las escuelas. Pero también supone la necesidad de
que el alumno no trabaje más preponderantemente de manera individual
sino que el trabajo interactivo sea una de las condiciones más frecuentes de
organización de las actividades de enseñanza.
Redefinir el modelo de aprendizaje supone también una serie de
consecuencias en términos organizativos. Por ejemplo, la necesidad de
´aprendizaje interactivo´ que surge de la redefinición del concepto de
aprendizaje implica el incremento de la actividad del alumno por un lado y la
necesidad del trabajo en grupo, lo que tiene consecuencias para la
organización y para los costos. Por un lado, un alumno protagonista de su
101
aprendizaje absorbe muchas de las tareas que hoy hace el docente (nutrirse
de información, tener un papel activo en la organización de sus tareas, poder
autoevaluarse y autocorregirse, etc.).
Por otro lado, el trabajo de los alumnos en grupo abre posibilidades
múltiples de utilización de los espacios y los tiempos escolares y permite al
docente realizar en los mismos tiempos y espacios muchas otras actividades.
Por ejemplo, se puede trabajar con alumnos/grupos diferentes las mismas
consignas, en grupos de diferente dificultad, lo que libera al docente para
ocuparse de los alumnos con mayores dificultades; o puede trabajar con
diferentes consignas que supongan repaso de diferentes asignaturas en el
mismo momento según las necesidades de los alumnos. Ambas posibilidades
son estrategias eficaces y probadas contra el fracaso escolar. Esto evidencia
que cambiando el enfoque de la tecnología central de la enseñanza, sin
incrementar las inversiones, puede conseguirse una mayor efectividad de la
tarea docente, lo que, al reducir el fracaso, reducirá los costos
considerablemente.
Llevando estos razonamientos un poco más lejos, sería posible un ejercicio
teórico en el que se empezara a replantear desde las bases la actual lógica de
organización de la educación. Un nuevo pensamiento en este sentido
requiere poder asumir que los tabúes de hoy pueden ser violados, y las
recetas del ajuste modificadas. Por ejemplo, se impone rever el monto del
salario docente; pero también, entre otras cosas, reconsiderar el tamaño del
grupo escolar tipo. (Aguerrondo, 1997)
7. Estado o mercado para el servicio educativo
Dos visiones subyacen hoy a los cambios educativos, enmarcadas en dos
discursos que se escuchan con frecuencia. Uno es el que proviene de una
visión “librecambista”, otro es el que tiene, todavía, resabios sesentistas. La
primera responde a una concepción bien restringida del liberalismo, que
afirma que el Estado destina suficientes recursos a la educación, pero que los
administra mal. Promueve, por consiguiente, la privatización total de los
servicios detrás de diferentes fórmulas, entre las que sugiere el
financiamiento de la demanda.
Estas ideas conciben un Estado prescindente, desvinculado de sus funciones
básicas: garantizar la igualdad de posibilidades para todos a través de la
educación. Falsean la realidad al suponer que existe un “mercado” (ni
siquiera digamos ‘perfecto’), que hay ofertas equivalentes que compiten en
él, y que la información circula de manera transparente de modo de que
realmente todas las personas por igual pueden moverse en ese ‘mercado’ y
acceder a la oferta que deseen, después de una prolija elección.
En educación, así como en otros servicios sociales, la realidad no funciona
así, sobre todo para las familias de escasos recursos o para amplios sectores
medios que, al momento de elegir la escuela para sus hijos, no tienen
102
parámetros ni información para evaluar las escuelas, ni pueden mudarse de
barrio o de localidad para acceder a una mejor oferta. No hay duda de que
esos miles de familias dependen de la calidad del servicio educativo que les
debe garantizar el Estado, a través de escuelas públicas o privadas.
Como dice Ratinoff: “La transferencia de ‘metáforas’ explicativas desde otros
campos del conocimiento tiene la ventaja de poner al descubierto la
importancia de algunas variables estratégicas, pero tiene también la
desventaja de introducir simplificaciones que distorsionan las prioridades y
las soluciones. La metáfora del mercado ilumina el papel insustituible que
tienen las motivaciones y el uso de los recursos; sin embargo, esperar que la
competencia de los productores de bienes educativos reduzca los costos,
incentive la innovación y abra el acceso de quienes están marginados, parece
ser más bien una hipérbole retórica que contradice los propios aportes
hechos por este enfoque analítico. En efecto, ni los bienes educativos son
comparables, ni la información contribuye a hacer transparente el vínculo
entre las calidades y los precios, ni quienes en teoría tienen el mayor
potencial de beneficiarse de la adquisición de una cultura escolar habilitante
poseen las motivaciones y los medios para participar en el ‘mercado’ de las
calificaciones. Todo indica que la economía política de la educación es
considerablemente más compleja”.(Ratinoff, 1996). Esta posición no es
nueva. Ya Benedetto Croce, filósofo liberal, llamaba ‘liberismo’ a la posición
economicista que no asumía todas las consecuencias del pensamiento
liberal, esto es la democratizacián creciente de todos los bienes y servicios
que produce una sociedad y la compensación, por parte del Estado, de las
desigualdades más flagrantes sin lo cual no hay mercado real que se
sustente.
Por otro lado está la visión de quienes, en nombre de un supuesto
progresismo, banalizan las acciones que se puedan hacer en cualquier
ámbito de la educación, porque todas ellas son avances de las ideologías
‘neoconservadoras’ sustentadas por el gran capital internacional. No se
reconoce como tal el valor de actualizar los contenidos de la enseñanza, de
capacitar a los docentes, de invertir en infraestructura, de mejorar las
condiciones de la administración, de construir sistemas de información o de
evaluación de resultados.
Todo lo que se haga se desvaloriza en aras de un progresismo abstracto que
niega entonces su razón de ser y resulta, finalmente, perfectamente
funcional a los planes privatistas de la otra visión. Ambas visiones encierran
una idea particular y reduccionista del Estado. Para los privatistas, el ‘Estado
mínimo”; para los supuestos progresistas, el “Estado con recursos infinitos”
donde hablar de eficiencia y evaluación en educación es mercantilizar la
escuela.
103
Lo que importa es que estos dos discursos, que existen adentro y afuera de
los países, perturban las acciones que se desarrollan desde el Estado, cuyo
objetivo es mejorar cada vez más la utilización de los recursos promoviendo
reformas y transformaciones educativas tanto en los aspectos sustantivos de
contenidos y organización de la escuela, pero también en lo administrativo y
laboral, temas aún pendientes en la mayoría de los países.
Hoy hay un discurso dominante en este ámbito lleno de confusiones. El
supuesto fracaso del sistema de bienestar y de las políticas sociales en
relación con la pobreza ha conducido a la aparición de un movimiento a favor
de la ‘reprivatización del Estado’. Peter Drucker resume claramente las
razones de esta reprivatización ya que “el gobierno, especialmente el central
o federal, es demasiado grande, burocrático, rígido, demasiado alejado de los
ciudadanos, muy poco sensible a las demandas de los consumidores y a los
derechos del bienestar, excesivamente costoso, monolítico e inadaptable”
(Drucker, 1969). Por esto, todas las funciones gubernamentales que no
afecten al ámbito de la defensa deben ser reprivatizadas o devueltas al
mercado. Así, deberían ser delegadas a, o contratadas por, organizaciones
autónomas privadas o cuasi públicas. Drucker llega a la conclusión de que el
Estado es incapaz en sí mismo de suministrar de un modo efectivo bienes y
servicios y, por lo tanto, debería liberársele de esta carga a fin de concentrar
su actividad en una función de dirección. Se pretende introducir en el
servicio educativo una lógica de mercado, creando el ‘mercado’ a través
de vouchers dirigidos a los padres.
Nuevamente reconocemos en este tipo de propuestas la mirada
retrospectiva. Incapaces de pensar para adelante, se otorga valor sustantivo
a uno de los factores de apoyo de la educación como es el modo en que ésta
se financia. Una propuesta educativa superada (como lo es la de las escuelas
que todavía funcionan dentro del viejo paradigma) será ineficaz
independientemente de cuál sea la manera de financiarla. A pesar de ello, no
negamos que puede ser válida la necesidad de repensar los modelos de
financiamiento de la educación pública, pero nunca dando a este factor
secundario la potencialidad de ser el gran transformador de la educación.
8. Un Estado profesional y responsable
Los gobiernos, al igual que los demás sistemas sociales, se encuentran
relacionados con las transformaciones del entorno. En paralelo con la
necesidad de una transformación de la educación, hoy estamos presenciando
un cambio estructural en las instituciones políticas y en las administraciones
públicas. Estos cambios se dan en múltiples dimensiones a la vez, entre ellas
el diseño institucional, los sistemas organizacionales y las tecnologías de
gestión (Schweinheim,1998).
La complejidad de los procesos de dirección y gestión involucrados en una
transformación como se propone, son imposibles de llevar adelante sin dicha
104
modernización. Frente a las propuestas de minimización o desaparición del
Estado es urgente reorganizarlo. Esto implica en primer término
profesionalizarlo es decir, incluir en él las competencias necesarias para
llevar adelante su cometido.
Un Estado pequeño pero fuerte, que pueda regular y controlar para hacer
frente a los necesarios procesos de descentralización que colaboren con la
construcción de una democracia más participativa. Un Estado eficaz,
profesionalizado, que pueda dar cuenta de sus acciones y se pueda hacer
responsable de los resultados del accionar del sistema educativo.
Las competencias implicadas en este proceso son de orden político y de
orden técnico. En el orden técnico, se requiere el desarrollo de sistemas
modernos de planeamiento y toma de decisiones; sistemas de evaluación y
monitoreo de la calidad; sistemas de información educativa; sistemas de
control, que se están desarrollando paulatinamente en el ámbito de la
región.
Más difícil se presenta la construcción de otros sistemas, absolutamente
necesarios para la transformación educativa porque son las herramientas
imprescindibles para avanzar en los cambios. Me refiero al desarrollo de
fuertes sistemas de apoyo gerencial para la toma de decisiones, como son los
sistemas de administración financiera, los de administración de recursos
humanos y los sistemas de información operativa. Manejar estas
dimensiones de la gestión es la gran diferencia entre gerenciar una reforma
educativa y conducir una transformación ya que ésta supone medidas de alto
riesgo político, pero también de alta complejidad técnica.
9. De las declaraciones a los hechos: las dificultades de las reformas de segunda
generación
Las reformas de segunda generación
El discurso del cambio educativo, en cualquiera de sus vertientes, tiene larga
historia. Desde los Planes de Desarrollo de la educación de los años ’60 hasta
la actualidad se han sucedido incontables versiones, todas coincidentes en la
necesidad del cambio. Frente a esta realidad, vale preguntarse por qué estos
cambios no se producen.
Durante el 15 y el 16 de diciembre de 1997, el Banco Mundial organizó en
Washington un Seminario llamado: ‘Argentine week. Second generation
reforms’ que reunió a unas treinta personas entre funcionarios del Banco y
del gobierno argentino. El documento de base, llamado “¿Qué son las
reformas de segunda generación?” fue presentado por Moisés Naim, ex
Secretario de Hacienda de su país, Venezuela, y hoy parte del Carnegie
Endowment, un equipo de pensadores (think tank) financiado por la
Fundación Carnegie. ¿Cuáles son sus tesis principales?
1. El cambio institucional (de las instituciones) es el eslabón perdido de las
reformas económicas.
105
Durante las décadas del 80/90 lo macroeconómico tapó dos temas centrales
que hay que volver a retomar: el problema del subdesarrollo y la importancia
del sector público.
Las decisiones iniciales para salir del ‘subdesarrollo’ fueron sólo de reformas
macroeconómicas, y se centraron sobre todo en modificar las reglas de juego
que determinaban el comportamiento macroeconómico.
Aunque hay excepciones, como la Argentina, se produjeron sólo con la
intervención del Poder Ejecutivo de los países, en relativo aislamiento frente
al resto del sistema político y fueron administrativamente sencillas de poner
en práctica.
Las nuevas medidas de política económica entrañaban
el desmantelamiento de muchos organismos públicos existentes, sin que
tuvieran que ser reemplazados de inmediato por nuevos organismos.
2. Ahora falta lo más difícil: pasar del shock macroeconómico a la
quimioterapia institucional.
Será imposible consolidar las reformas iniciadas si no se mejora
sustancialmente el funcionamiento de las instituciones públicas. Entramos en
una etapa más lenta, más imprevisible y en general más difícil, de creación y
rehabilitación de la instituciones sociales.
El programa de reformas pendientes por los gobiernos de toda la región
tiene como denominador común la necesidad de llevar a cabo una serie de
sofisticadas tareas de administración pública en condiciones donde a una
creciente impaciencia popular ante la lentitud o ausencia de resultados
tangibles se une una desvastación de los entes públicos más críticos para la
generación de dichos resultados.
Los gobiernos tendrán que concentrarse en el desarrollo de la infraestructura
organizativa del Estado para modernizar el financiamiento, la producción y la
distribución de los servicios públicos en muchas áreas: educación, sanidad,
transporte, justicia y seguridad ciudadana, por nombrar solo las más
evidentes.
3. Las exigencias en cuanto a capacidad gubernamental, habilidad política y
talento administrativo para estas reformas de segunda fase son mucho
mayores que las exigidas para la primera.
Por la menor experiencia y mayor complejidad de estos cambios, hay mucho
menos acuerdo entre los especialistas sobre qué es lo que se debe hacer.
En los países que han entrado en esta segunda fase, aumentaron las voces y
los intereses que pugnan por moldear los nuevos cambios porque, a
diferencia de lo que ocurre en la primera fase, el costo de los cambios
institucionales recae de manera más concentrada en grupos específicos que,
a partir de las reformas, pueden perder para siempre ventajas y privilegios.
4. Tanto los gobiernos como los organismos de financiamiento internacional
deberán destinar recursos para realizar las reformas de seguda generación
106
rescatando a las instituciones. Estos recursos deberán ser equivalentes a los
que se invierten en las reformas macroeconómicas.
· Los héroes de la siguiente ola de reformas ya no serán unos pocos
tecnócratas versados en las complejidades de la macroeconomía; debrán ser,
más bien, un gran número de gerentes públicos de nivel medio capaces de
desarrollar las estructuras organizativas, los procesos administrativos y la
logística indispensable para que el sector público funcione.
Esto explica por qué cuesta tanto pasar de las declaraciones a los hechos.
Producir los cambios que necesitamos toca centros neurálgicos de la
organización básica de la sociedad, y por lo tanto tiene fuertes costos
políticos. Claro que no producirlos tiene, a largo plazo, muchos más costos
tanto sociales como políticos. Tomemos sólo dos ejemplos.
1. Hay que cambiar los modelos de organización de las escuelas, tendiendo a
modelos de ‘círculos de calidad’: gente que pueda pensar (docentes y
alumnos) y aportar las soluciones para sus problemas. Esto quiere decir,
modelos flexibles de escuelas que puedan funcionar con horarios distintos,
en espacios distintos, con programas distintos.
Por supuesto que esto implica entonces procedimientos administrativos
distintos y, lo que es todavía más complejo, una distribución del poder
distinta.
Si el docente con el alumno ahora decide, ¿dónde queda la autoridad del
director? ¿y la del supervisor? Si lo que importa son los resultados del
aprendizaje, que se miden a través de un sistema nacional ¿se justifica que
haya supervisores? Pero si los hay ¿tienen que seguir haciendo lo mismo?
Cambiar los modelos de organización de las escuelas, paso absolutamente
imprescindible para lograr un nuevo paradigma, contiene decisiones de alto
poder explosivo.
2. Hay que redefinir la tarea de los docentes, sus roles, etc. Esto, que puede
aceptarse fácilmente en una discusión teórica, en el momento de tomar
decisiones quiere decir, entre otras cosas, redefinir los puestos de trabajo. O
sea, que algunos sigan, redefinidos; que otros nuevos se creen; pero también
que algunos dejen de ser. Por eso, a la hora de pensar en los necesarios
cambios educativos, por ejemplo en la (no) decisión de enseñar o no
dactilografía o latín, ha pesado más qué va a pasar con los profesores que
cuánto se daña o se beneficia a los alumnos, o a la sociedad.
10. La transformación debe ser integral y consensuada
La generacíón del consenso
Llevar a la práctica cambios tan profundos es un problema complejo que
implica mucho más que hacer reformas de segunda generación. Se necesita
prever la estrategia que se llevará a cabo. Dos rasgos centrales parecen
importantes: construir la viabilidad y respetar las características de
integralidad del proceso
107
a. Premisas para construir viabilidad
Como los cambios sociales no siempre encuentran su justificación en la
bondad o la justicia, las reformas sociales, y mucho más si son estructurales,
necesariamente producen resistencias porque desorganizan las formas
instituidas. Para que sean realidad, su viabilidad debe ser construida. Por
esto, tan importante como plantear con claridad las líneas básicas del
cambio, es armar una estrategia adecuada para conducir y gestionar la
transformación.
Las premisas para construir la viabilidad de los cambios suponen construir el
consenso como la única base firme para el cambio, incorporando prácticas de
negociación para avanzar en logros progresivos; entender el cambio como un
proceso que, partiendo de lo posible en un momento dado, debe ser
permanente, para ir profundizándose constantemente; incorporar suficiente
capacidad técnica como para contar con las respuestas adecuadas en el
momento adecuado; y ser capaz de anticiparse a las resistencias, localizando
los grupos desde donde partirán.
1. Simultaneidad entre el corto y el largo plazo. Toda acción de gobierno se
enfrenta con la tensión entre el corto y el largo plazo. Esto es
particularmente problemático en el campo de la educación en el cual se
requiere un tiempo considerable para poder presentar resultados. Los
'tiempos de la educación' no son los 'tiempos políticos' y esto afecta
sustancialmente las posibilidades de un proceso de transformación. Adoptar
la estrategia de la simultaneidad implica construir la posibilidad del largo
plazo a partir de señales claras dadas en el corto plazo.
2. Una estrategia masiva, gradual y permanente. Muchas reformas
educativas han ensayado modos diversos de implantación de los cambios.
Frecuentemente se han iniciado con experiencias limitadas, "piloto", para
luego ampliar progresivamente el ámbito de la aplicación. Una breve mirada
a estas estrategias ha demostrado que es difícil que una experiencia piloto se
generalice. Más bien parecería que llevan implícitas condiciones tan
especiales desde su nacimiento que esta misma modalidad determina la
imposibilidad de su generalización. Conviene optar por una estrategia
masiva, gradual y permanente. generando las condiciones para que todos se
involucren y para que, una vez iniciado el proceso, éste no se detenga. Esto
implica reconocer capacidades diferentes en los actores comprometidos;
ritmos distintos; niveles de aceptación y de resistencia disímiles. Para que la
transformación pueda ser masiva, gradual y permanente, es necesario
atender a diferentes necesidades institucionales y regionales. Por ello, la
estrategia debe suponer un ritmo en la expansión que puede ser graduado
por las autoridades locales o institucionales.
3. Construcción de la credibilidad. La construcción de la viabilidad de la
propuesta incluye también un trabajo sistemático para construir la
108
credibilidad en las acciones de gobierno en educación, muy deteriorada
como resultado de décadas de un Estado cada vez menos eficiente, con poca
capacidad de decisión y escaso espacio para actuar.
b. Integralidad del proceso de cambio.
La particular constelación de factores que incluye el servicio educativo, y su
entrelazamiento, son la base de la extraordinaria complejidad del problema.
Frente a esta situación, es una discusión abierta las opciones alternativas de
adoptar una estrategia de transformación factor por factor o encarar un
cambio simultáneo. Muchos son los argumentos en pro del cambio integral.
La opinión generalizada señala la necesidad de producir cambios
simultáneamente en tres elementos básicos: * hay que cambiar los
contenidos de la enseñanza, o sea qué tienen que saber los alumnos (o qué
necesita la sociedad que ellos sepan); * hay que cambiar y mejorar la calidad
de los docentes; * hay que mejorar la cantidad y la calidad de los materiales
de enseñanza, el equipamiento y la infraestructura.
O sea contenidos, docentes, materiales. En ese orden y no en otro. Llamo la
antención acerca de que, en todas las opiniones, ‘mejorar’ implica, también y
de manera imprescindible, gastar más.
La integralidad del proceso de cambio debe tener una meta básica: cambiar
la ‘tecnologia central’ de producción de la educacion. El ‘cómo se hace’. Esto
es lo más difícil porque es lo más intangible. Pero, con Saint Exupéry diremos
que ‘lo importante es invisible a los ojos’, sobre todo a los ojos
acostumbrados a mirar con los anteojos (mejor, con las anteojeras) de los
viejos modos de hacer educación.
¿Qué nueva ‘tecnología central para la producción’ de educación? Una que
suponga:
Una redefinicion de lo que le pedimos a la escuela (curriculum).
Mejorar los ‘contenidos’ supone, por supuesto, enseñar otras cosas. ¿Cuáles?
Aquéllas que sean útiles hoy para entender el mundo que nos rodea. Esto va
desde saber qué es el rayo láser, para qué se usa cómo se genera; o qué
causó la caída del muro de Berlín y qué procesos culturales, económicos y
políticos está generando tanto en Europa como en el resto del mundo,
incluida América Latina; hasta saber seguir aprendiendo, poder enfrentar
situaciones nuevas; o sentirse cómodo y poder trabajar en equipo. Pero
además de esto, implica poder sostener de manera permanente equipos de
académicos y pedagogos que actualicen los contenidos; poder traer
consultores internacionales para temas específicos; hacer crecer el sistema
nacional de evaluación de la calidad para poder ayudar a los gobiernos
locales, a las escuelas o a los grupos de chicos que no logren el estándar
nacional, generar estándares nacionales, etc. Ni qué decir que otros temas,
que pueden parecer secundarios a la hora de pensar en un presupuesto
109
educativo, como alentar y sostener experiencias de mejoramiento de la
enseñanza, pagar viajes de estudio, alentar la participación en certámenes
internacionales, etc. Generar los mecanismos y disponer del financiamiento
para mejorar los contenidos permanentemente es un imperativo de un
nuevo paradigma educativo.
Un docente que no sea más el capitán del equipo, sino que sea un ‘director
técnico’. Es decir, no está dentro del campo de juego como un jugador más
(aunque lo esté con un rol diferenciado) sino que está afuera aconsejando,
entrenando, orientando. Alguien que sabe reconocer las capacidades
potenciales de cada uno y le ayuda a desarrollarlas, que puede proponer y
acordar actividades diferenciadas para cada jugador para balancear su
formación e incrementar sus competencias.
Desde siempre, y hasta donde puede verse también en el futuro, el docente
es el alma del proceso de enseñanza. De él depende en gran medida la
calidad del proceso educativo ya que su tarea profesional es decisiva. Pero en
este tema estamos con problemas. En la gran mayoría de los países de
América Latina, el crecimiento de los sistemas escolares para la
universalización tuvo una consecuencia no querida pero real: por un lado se
depreciaron los salarios de los docentes, y por el otro se abrieron las
compuertas de un sistema de trabajo demasiado permisivo que, de todos
modos, incrementó el gasto del sector. Hoy está claro que no hay
transformación educativa a largo plazo sin docentes con mejor sueldo, pero
con condiciones de trabajo mucho más rigurosas que, por sobre todo,
incrementen la responsabilidad por los resultados del aprendizaje.
También está el tema de la formación y capacitación de los docentes. Es
cierto que los docentes de hoy no están preparados para enseñar los
contenidos del Siglo XXI entre otras razones porque no fueron formados para
ello. Se requiere un esfuerzo fuerte de capacitación masiva (que cuesta su
buen dinero) y cambiar la carrera docente. Esto es costoso y largo. Actualizar
todos los docentes en servicio no es tarea de un año o dos, y requiere de una
política sostenida a lo largo de por lo menos dos lustros por conducciones
educativas de diferentes signos políticos. Pero, por otro lado, esto no es más
que lo que se está haciendo en muchos otros sectores de la sociedad, que
también están encarando procesos de transformación estructural.
Un alumno que no sea más un escucha y un escriba sino que sea
protagonista de su proceso de aprendizaje. Es quien hace, y a través de eso,
quien aprende. Desarrolla competencias, para pensar y para hacer. Tiene un
compromiso con sus propios resultados.
Una infraestructura de edificios, comodidades, materiales, mucho más
diferenciada y completa. Así como no creemos que una fábrica pueda
110
producir sin insumos, tampoco podemos pensar que un docente y los
alumnos pueden trabajar sin materiales. No hay manera de dar buena
educación sin pensar las escuelas y las aulas como ‘centros de recursos de
aprendizaje’. Esto incluye computadoras sí, pero aunque son un elemento
imprescindible hoy, no son el elemento más importante. Conseguir mejores
espacios para enseñar y aprender y laboratorios, computadoras, bibliotecas,
pero también y básicamente, procedimientos administrativos y
características de organización modernos y eficientes es lo más duro de
lograr, porque supone pelear no sólo con el viejo paradigma de organización
de la educación sino también con el de la burocracia pública.
Para concretar estos compromisos se debe cambiar también: la escala de los
servicios:
No podemos continuar con la receta ciega de que ‘no se pueden cerrar
escuelas’. Lo que no se puede es dejar chicos sin educación que no es lo
mismo. Pero si la población se corre, hay que cerrar en un lado y abrir en
otro, cosa que nunca hacemos. Abrimos donde hay nueva población, pero no
cerramos donde merma. Resultado: incremento de costos
Se debe revisar la relación docentes/directivos: en la Argentina en la escuela
primaria tenemos un directivo cada 7 docentes; en media y terciaria, uno
cada cinco. Esto incrementa los gastos de conducción. Aceptemos que fue
una solución para dar mayores sueldos, pero que es una situación que debe
superarse. Ninguna organización soporta los costos de un gerente cada cinco
o siete empleados.
El tamaño de los grupos de alumnos: aunque la gente y los docentes crean lo
contrario, la verdad es que hay muchísima investigación sobre este tema que
asegura que no hay relación entre calidad de aprendizaje y tamaño del grupo
escolar. Todo depende de la propuesta didáctica y de la calidad de la
formación del docente. LO que es cierto es que si seguimos manejando la
educación con recetas (paradigmas) del siglo pasado, no podremos aumentar
la cantidad de alumnos en cada clase. Si nos largamos a trabajar con
metodologías más modernas, esto es perfectamente posible sin afectar la
calidad del aprendizaje ni la del trabajo docente.
Finalmente debemos agregar que uno de los problemas principales que
acarrea la incapacidad de mirada prospectiva es que la comunidad no
visualiza cómo puede darse educación desde otros parámetros de
organización. Y esto es gravísimo, porque las decisiones que hay que tomar
no son solo si se enseña esto o lo otro, sino que se refieren a cuántos meses
al año tiene que trabajar un docente, cómo deben ser sus licencias, cuándo
debe jubilarse, con qué criterio debe ascender (¿antigüedad o capacidad?), o
sea enfrentar el reto de cambiar las regulaciones laborales del docente. Todo
esto está implicado en las decisiones necesarias para poner en marcha un
nuevo paradigma.
111
Transparentar las reformas que se necesitan en la organización de la
educación para discutirlas a fondo es la etapa que falta para asegurarnos que
podemos marchar hacia un nuevo paradigma. Esta discusión tiene que
terminar en una serie de acuerdos por encima de los partidos políticos, que
permita que la educación y su transformación, sea una política de Estado que
trascienda las gestiones de gobierno.
Lo importante es que el tema se transforme en un ‘issue’ de toda la sociedad.
Tiene sentido que toda la sociedad se ocupe de la educación, pero desde una
mirada de largo plazo, de cambio de paradigma. Porque apostar a cambiar la
educación es una apuesta fuerte y no es un problema que atañe sólo a los
docentes. Es un problema de supervivencia del modelo de nueva sociedad
que se está gestando.
Buenos Aires, 12 de junio de 1999
BIBLIOGRAFIA
AGUERRONDO, Inés: “La calidad de la educación, ejes para su definición y
evaluación”, La educación. Revista Interamericana de Desarrollo Educativo,
Nº116, III, 1993, OEA, Wash. DC
AGUERRONDO, Inés: “¿Es posible impartir educación de calidad con menores
costos?”, en Perspectivas, Revista trimestral de Educación Comparada, Vol
XXVII, nº2, junio 1997.
ALBERT Michel, Capitalismo contra capitalismo, Ed. Paidós, Buenos Aires,
1992;
COLL César; POZO, Juan Ignacio; SARABIA, Bernabé y VALLS, Enrique: Los
contenidos en la Reforma. Enseñanza y aprendizaje de conceptos,
procedimientos y actitudes, Ed.Santillana/AulaXXI, Buenos Aires, 1994
DRUCKER, Peter: The Age of Dicontinuity,Heinemann, Londres, 1969.
EDUCATIONAL STATE COMMISSION DE LOS ESTADOS UNIDOS: Informe
SCANS, Washington, 1988
FEIJOÓ, María del Carmen: ‘Inglés más computación’, en E. Villanueva
(coord), Empleo y globalización. La nueva cuestión social en la Argentina,
Quilmes, Universidad Nacional de Quilmes, 1997
FERRARO, Ricardo: Educados para competir, Editorial Sudamericana, Buenos
Aires, 1995
GALLART, María Antonia: La escuela técnica: lógica pedagógica vs. lógica
empresaria, Buenos Aires, 1988, mimeo.
GORZ, André: Métamorphoses du travail, Ed. Galilée, Paris, 1988;
MATUS, Carlos: Planficación de Situaciones, Caracas, CENDES, 1976
RATINOFF, Luis: “Devaluación y privatización de la enseñanza en América
Latina”, en Boletín dl Proyecto Principal de Educación en América Latina y el
Caribe, Nº39, OREALC-UNESCO, Abril de 1996.
REICH,Richard: El trabajo de las naciones, Editorial Vergara, Buenos
Aires,1993
112
SCHWEINHEIM, Guillermo, “Innovación en administración, gestión y políticas
públicas ¿es idéntico a modernización?” en Revista de Investigaciones del
INAP, Nueva época, nº0, Argentina, segundo semestre 1998.
TEDESCO, Juan Carlos: El nuevo pacto educativo, Grupo Anaya SA, Madrid,
1995
TISHMAN, Steven: Seven Thinking dispositions, Purposes and Key
moves, Harvard Universitiy, 1994 (mimeo)
TITMUSS, Richard: Política Social, Editorial Ariel, Barcelona, 1981
TOFFLER Alvin, El cambio del poder, Ed. Plaza y Janés, Barcelona, 1990.
TOFFLER, Alvin y Heidi: La creación de una nueva civilización, Plaza y Janes
Editores, SA, Barcelona, 1995
Notas
(1) Algunos de ellos son: Michel Albert, Capitalismo contra capitalismo, Ed.
Paidós, Buenos Aires, 1992; André Gorz, Métamorphoses du travail, Ed.
Galilée, Paris, 1988; Robert Reich, El trabajo de las naciones, Ed. Vergara,
Buenos Aires, 1993; Alvin Toffler, El cambio del poder, Ed. Plaza y Janés,
Barcelona, 1990.
(2) Solo a título de ejemplo citamos el conocido informe SCANS (1988)
producto de un Taller organizado por la Educational State Commission de los
Estados Unidos con representantes de las empresas más importantes.
EEUU desembarca en la tierra del fin del mundo
http://www.rebelion.org/noticia.php?id=214107
Walter Goobar
Público.es
En ese mítico extremo de Suramérica que inspiró a Julio Verne a escribir en 1905 la novela El
faro del fin del mundo, Estados Unidos quiere emplazar ahora una base militar camuflada
como base logística para apoyar las tareas científicas en la Antártida.
Las excusas que han permitido a Washington desplegar más de un centenar de bases
militares en Latinoamérica, que se extienden desde Guatemala y el Caribe hasta la
Patagonia, son siempre altruistas: ayuda humanitaria, apoyo ante catástrofes, combate al
narcotráfico o apoyo al desarrollo y la investigación científica, pero la realidad indica que
tanto la base que EEUU pretende emplazar en Tierra del Fuego, la zona más austral de la
Argentina; como otra ubicada en la zona limítrofe entre Argentina, Brasil y Paraguay —
conocida como la Triple Frontera—, están destinadas a asegurar a Estados Unidos un recurso
estratégico cada vez más escaso: el agua potable. Las bases —que el Pentágono
eufemísticamente denomina "centros de apoyo para movimientos militares"—, están en
proceso de negociación entre Washington y el gobierno de Mauricio Macri.
Acuífero Guaraní
"Estados Unidos mantienen la 4ª Flota navegando en el Atlántico Sur, cerca de las reservas de
petróleo que están debajo del “pré-sal”, el conjunto de formaciones rocosas ubicadas en la
zona marítima de buena parte del litoral de Suramérica, con un gran potencial de generación
y acumulación de petróleo"
Para el politólogo y diplomático brasileño, Alberto Moniz Bandeira, uno de los máximos
especialistas en las tormentosas relaciones de Washington con sus vecinos del Sur, no son los
piratas ni los náufragos que cautivaron la imaginación de Verne lo que lleva a Washington a
apostar tropas del Comando Sur del Pentágono, allí donde se confunden los océanos Atlántico
y Pacífico y en la zona de la Triple Frontera, que conforma el límite entre Argentina, Brasil y
Paraguay. Moniz Bandeira, autor de La formación del Imperio Americano, afirmó al
113
matutino Página12 que "Estados Unidos mantienen la 4ª Flota navegando en el Atlántico Sur,
cerca de las reservas de petróleo que están debajo del “pré-sal”, el conjunto de formaciones
rocosas ubicadas en la zona marítima de buena parte del litoral de Suramérica, con un gran
potencial de generación y acumulación de petróleo", al tiempo que subraya que la victoria de
Mauricio Macri en Argentina y el desplazamiento del poder de Dilma Rousseff en Brasil aumentó
el apetito de inversiones de Estados Unidos en la región. Éste es posiblemente uno de los
factores que llevan a Estados Unidos a entablar negociaciones para la implantación de una
base militar en la Patagonia, en la zona cercana a la Antártida, donde está emplazado el famoso
faro del fin del mundo de Julio Verne.
Desde el Gobierno argentino aseguraron: “Queremos que la ciudad de Ushuaia se convierta en
una base logística para apoyar las tareas científicas en la Antártida”. El discurso de los
funcionarios de Cambiemos es el mismo que ha permitido que Washington genere una red de
bases que rondan el centenar.
El mayor manantial de agua dulce del mundo
La otra base estaría emplazada en la Triple Frontera, donde está parte del Acuífero Guaraní,
el mayor manantial subterráneo de agua dulce del mundo, con un total de 1.200.000 km². Es
un manantial transfronterizo, que abarca a Brasil (840.000 Km²), Paraguay (72.500 km²),
Uruguay (58.500 km²) y Argentina (225.000 km²).
En la jerga del Pentágono, las bases tienen una tipología común. Se llaman “quasi-bases”,
módulos que puedan servir en caso de emergencia. En Paraguay empezaron con la
construcción una gran pista de aeropuerto en Mariscal Estigarribia. Esa “quasi-base” fue
empezada en 1980, con la construcción de módulos para alojamiento de 16.000 soldados, y
después ampliada con la pista del aeropuerto, radares y hangares. Luego frenaron en gran
medida debido a presiones de Brasil y no estacionaron ningún contingente militar, aunque ya
tenían la garantía de inmunidad a los soldados por parte del Senado de Paraguay desde 2005.
Hay un diseño geopolítico y estratégico de Washington en la instalación de una base en la
ciudad de Ushuaia, capital de Tierra del Fuego, y otra en la Triple Frontera: su objetivo es
recuperar y aumentar la presencia militar en América del Sur, que parece haberse reducido
desde que perdieron la base de Manta, en Ecuador, y desde que la Corte en Colombia consideró
inconstitucional la instalación de siete bases. Bases reconocidas como tales existen en El
Salvador (Comalpa), Cuba (Guantánamo), Aruba, Curaçao y Puerto Rico. Al mismo tiempo los
Estados Unidos mantienen en América Latina bases informales y legalmente ambiguas. El
Pentágono las llama quasi-bases para evitar tanto el escrutinio del Congreso como la reacción
de los países que las albergan. Las quasi-bases están en Perú, Honduras, Costa Rica, Panamá,
Ecuador y Colombia, entre otros países, a lo largo del litoral del Pacífico.
Elsa Bruzzone, especialista en temas de geopolítica, estrategia y defensa nacional y miembro
del Centro de Militares para la Democracia Argentina (CEMIDA), asegura: “Lo que buscan es
cerrar el cerco a todos los recursos naturales que tenemos en nuestra América. Las bases
militares, cubiertas y encubiertas, que ha instalado en Centroamérica y el Caribe, sumadas a
las que tienen en Colombia, Perú, Chile, Paraguay, junto a la base militar de la OTAN en
Malvinas, más el destacamento británico en las Georgias cierran el cerco a todos nuestros
recursos naturales y reafirman su presencia en la Antártida que es la mayor reserva de agua
dulce congelada en el mundo".
En ese sector se disputan soberanía Argentina, Chile y Gran Bretaña. En la Península Antártica
se encuentran los mayores yacimientos de hidrocarburos de la región, y hay minerales
altamente estratégicos que son indispensables para la industria militar y la aeroespacial.
El politólogo argentino, Atilio Borón enfatiza que la imperiosa necesidad de Estados Unidos es
asegurarse el agua y no el petróleo: "El petróleo va a desaparecer y la humanidad va seguir
su curso. Pero si no hay agua se acaba la especie humana. Y acá está casi la mitad del agua
dulce del planeta Tierra. Las estimaciones van del 42 al 45% según como se midan los
acuíferos subterráneos. Con el 7% de población mundial se tiene casi el 50% del agua dulce
del mundo y ellos tienen un problema grave de desertificación".
"En Estados Unidos ya piensan cómo se van a llevar el agua de esta región y ya hay propuestas.
Sobre todo porque piensan primero llevarse el agua de la zona de Mesoamerica y el sur de
México. De América Latina les importa el agua, el petróleo, los minerales estratégicos, la
biodiversidad", dice Borón.
En las páginas de la revista Contexto, Borón afirma que una de las grandes mentiras que
circulan es que América Latina no es una prioridad para Estados Unidos: "Muy por el contrario,
América Latina es la región que más les importa. La doctrina para América Latina (la Doctrina
Monroe) es de 1823, la doctrina que hacen para Europa es de 1918, casi un siglo después.
Cuando llega la reorganización global del Ejército norteamericano el primer comando que
arman es el Sur, después piensan en el Europeo y el de Asia, pero primero el de América
114
Latina. Cuando firman los famosos tratados para la contención del comunismo, el primero que
firman es el TIAR (Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca) en 1947, recién en 1949
crean la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte)".
Según Borón, lo primero que le interesaba a ellos era asegurar esta parte del mundo. Esto
tiene que ver con las concepciones geopolíticas que plantean la tesis que Estados Unidos tiene
una posibilidad de defensa en la medida que controle lo que ellos llaman “la gran isla
americana”, que según esta concepción va desde Alaska a Tierra del Fuego. Desde esa mirada
se cree que si esa “isla americana” cae en la parte sur en manos enemigas, tarde o temprano
la seguridad de la superpotencia va a estar en riesgo.
Putin ajusta las clavijas en Rusia
Las leyes aprobadas cercenan drásticamente los derechos humanos y aumentan el poder de
vigilancia del Estado sobre la sociedad civil. Las compañías de Internet y telefonía deben
almacenar al menos seis meses de datos de usuarios.
http://www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/4-303788-2016-07-09.html
Por Agustín Fontenla
Página/12 En Rusia
Desde Moscú
Vladímir Putin aprobó el polémico “paquete Yarovaya” de legislación antiterrorista, que toma
nombre de una de las legisladoras más conservadoras de Rusia. Se trata de una serie de leyes
que cercena drásticamente los derechos humanos y aumenta el poder de vigilancia del Estado
sobre la sociedad civil. Aún no se conocen los efectos directos y la letra chica de algunos
artículos debe ser decidida por el gobierno, pero lo más destacado es que las compañías de
internet y telefonía rusas deberán almacenar información sobre las llamadas, mensajes de
texto, imágenes, audios y videos de sus clientes. Además, se incrementan las penas por
“terrorismo online”, un delito que castiga con penas de hasta siete años a aquellas personas
que justifiquen o inciten el extremismo en internet. Una categoría no muy clara, que puede
darle un amplio margen de acción al gobierno respecto de sus oponentes políticos.
El ex empleado de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) estadounidense, Edward Snowden,
que develó el enorme aparato de espionaje de Estados Unidos y que todavía permanece
asilado en Rusia, apodó la medida “Gran Hermano” y afirmó que “no solo viola los derechos
humanos sino también el sentido común”. Después de que la Duma Estatal (cámara de
diputados) y el Consejo de la Federación(senado), aprobaran el “paquete Yarovaya”, el
informático revelador alertó al Kremlin que la ley “nunca debería ser firmada” (por Putin).
El presidente del Consejo para el Desarrollo de la Sociedad Civil y los Derechos Humanos del
país, por su parte, solicitó al mandatario su anulación por la “inconstitucionalidad,
inconsistencia e incertidumbre legal de algunos de sus artículos”. Ni uno ni otro pedido
modificaron el pensamiento del líder ruso.
Los principales operadores de telefonía móvil clamaron que la ley arruinaría su negocio. Según
lo aprobado, estos deben almacenar la información durante al menos seis meses. En una carta
dirigida a la presidenta del Consejo de la Federación Rusa, Valentina Matvienko, adujeron que
es “técnica y económicamente impracticable”. Según sus cálculos, cumplir con la ley les
costaría más de 30 mil millones de dólares, y les obligaría a aumentar tarifas y –de paso–
brindar un servicio deficiente.
115
Incluso, estas compañías deberán proveer al Servicio Federal de Seguridad ruso (FSB) los
códigos de encriptación para acceder a los mensajes de servicios populares de conversación,
del tipo Whats- App, Telegram y otros.
En el caso de las compañías de internet, la medida les obliga a guardar el contenido sobre
llamadas hechas y recibidas, mensajes de texto, audio, imágenes y videos de sus clientes por
seis meses, en tanto que el registro simple de estas actividades, será almacenado por un año.
El gigante ruso Yandex, similar a Google, afirmó que el nuevo marco legal significa “una
excesiva limitación de los derechos de las compañías y los usuarios”.
Posteriormente a la firma del “paquete Yarovaya”, el vocero del presidente ruso, Dmitri
Peskov, salió a calmar las aguas. Afirmó que el presidente Putin está familiarizado con los
pedidos de rechazo y anulación que han hecho distintas personas e instituciones. Sin embargo,
aseguró que la la nueva legislación no será dañina. “La ley ha sido pasada con una lista de
recomendaciones al gobierno diseñadas para minimizar el potencial riesgo financiero”, señaló.
“Estamos predispuestos a trabajar en conjunto (con los operadores) y si la ley produce algún
resultado indeseado, el gobierno introducirá medidas apropiadas mediante decreto
presidencial”.
En los despachos de la Duma quedó archivada una de las cláusulas más controvertidas del
paquete, que promovía revocar la ciudadanía rusa a personas de doble ciudadanía acusadas
por terrorismo o de trabajar para servicios de inteligencia foráneos, así como también
bloquear temporalmente la posibilidad de realizar viajes a los condenados por acciones
terroristas.
El “paquete Yarovaya” se puede colocar en un marco más amplio de medidas que incluye la
creación de la Guardia Nacional en abril pasado. Un órgano de seguridad enorme (se estima
que está conformado por unos 400 mil hombres) comandado por el exjefe de la seguridad
personal presidencial, Viktor Zolotov. El Kremlin afirmó tras su creación que la Guardia
Nacional lucharía contra el terrorismo, aunque también podría tener a su cargo la seguridad
durante actos masivos no autorizados, o sea protestas. “Este es un intento de las autoridades
para protegerse ellos mismos de las protestas”, denunció la líder del partido liberal Yabloko,
Emilia Slabunova .
Una y otra medidas aparecen como una sombra que planea lentamente sobre las próximas
elecciones legislativas de septiembre, que serán los primeros comicios de importancia desde
que Vladímir Putin accedió a su tercer mandato como presidente en el 2012. El líder ruso, que
ha emprendido un giro en su política exterior para recomponer su relación con las potencias
de Occidente, espera que la economía encuentre nuevamente la senda del crecimiento, que le
permita llegar con apoyos y fuerza suficiente a las elecciones presidenciales de 2018, tan solo
unos meses antes de que suene el silbato de inicio para el Mundial de Fútbol que se jugará en
la Federación.
NICARAGUA.- A 37 años de la revolución nicaragüense: de la dictadura de
Somoza al bonapartismo corporativo de Ortega
www.elsoca.org
@elsocca
Por José Rene Tamariz
El 17 de julio del año 1979 el último dictador de la dinastía de la familia Somoza,
Anastasio Somoza Debayle, huye de Nicaragua hacia Miami debido al inminente
116
triunfo de la insurrección popular y la contundente derrota de la guardia nacional
(GN), cuerpo militar represivo y sanguinario, creado por el imperialismo yanqui
en el año 1927. La destrucción del ejército y los demás cuerpos represivos
significó, prácticamente la destrucción del Estado burgués en Nicaragua.
El 19 de julio de ese mismo año, entraban triunfante a Managua las tropas
guerrilleras y masas revolucionarias y la dictadura de los Somozas, hija del
imperio estadounidense, había sido destruida por una poderosa y violenta
insurrección, acaudillada hábilmente por el Frente Sandinista de Liberación
Nacional (FSLN), organización guerrillera formada en el año 1961.
Nicaragua y las intervenciones imperialistas
La historia de Nicaragua del siglo pasado, en gran parte, está determinada por
las diferentes formas de intervenciones del imperialismo estadounidense en los
asuntos internos del país. La posición geopolítica de la Nación; los permanentes
conflictos intestinos entre liberales y conservadores, élites oligárquicas-burguesas
entreguistas de la soberanía nacional y la extrema debilidad del proletariado
nicaragüense, posibilitaron las ocupaciones del imperio yanqui.
Las características de las clases dominantes de esa época son el producto de las
debilidades estructurales del desarrollo del capitalismo nicaragüense. Los
intentos y medidas del régimen del general y cafetalero liberal, José Santos
Zelaya (1893-1909), por promover cierto desarrollo nacional y modernizar
Nicaragua, obtuvo la virulenta oposición de los conservadores, porque esas
medidas favorecían el fortalecimiento de la facción liberal en detrimento de la
fracción conservadora.
A finales del año 1909, renuncia el general Zelaya, producto del alzamiento militar
de los conservadores en la zona atlántica y las presiones imperialistas.
Entonces,“La era Zelaya llegó a su fin como resultado de una revuelta del Partido
Conservador, en alianza con un grupo de liberales desafectos, y apoyados por el
gobierno de los Estados Unidos. El intento de Zelaya de impulsar la construcción
del canal sin participación estadounidense, la negociación de importantes
préstamos con consorcios europeos, sumados a su intromisión en los asuntos
internos de Honduras, motivó al secretario de estado Philander Knox a apoyar a
los enemigos políticos del dictador liberal para lograr su derrocamiento…”. (Knut,
2004: 32).
El derrocamiento del régimen de Zelaya, marca el inicio de las sucesivas
intervenciones militares y de todo tipo de intromisión del imperialismo yanqui en
Nicaragua. De esta forma, la nación se transforma de un país semicolonial
a neocolonial, mejor conocido en la historia nacional como “protectorado”
(1910-1932). Cuenta Pío Bolaños, quien fue secretario personal del general
Zelaya y cónsul en Nueva York, que en octubre de 1910 llegó a Managua, el
agente del imperialismo yanqui, Thomas Dawson, a suscribir convenios de
sujeción de los gobernantes de turno a los dictados de los Estados Unidos de
América. Nuevamente en noviembre del año 1911 llegó a Nicaragua, el agente
117
financiero imperialista Ernest Wands, para profundizar la entrega de Nicaragua
al imperio estadounidense. De esa forma “Prácticamente, hoy día, los banqueros
Brown Bros y J. & W. Seligman & Co., de Nueva York, son los dueños de las
rentas y propiedades de la República de Nicaragua…”. (Bolaños, 1984: 17).
Entonces, a partir del año 1910, se inicia la formación del protectorado del
gobierno de los Estados Unidos sobre Nicaragua, el cual asume el control total
del país: financiero, fiscal, económico, político y gubernamental.
Para mantener el control del nuevo colonialismo en Nicaragua, el imperialismo
yanqui, realiza sucesivas intervenciones militares, además de las anteriores
señaladas, en los años 1912-1925 y 1926-32. Contra esta última intervención
imperialista es la que lucha el general Cesar Augusto Sandino. Al retirarse las
tropas estadounidenses en el año 1925, se inicia una revuelta militar de los
liberales en contra del gobierno de Adolfo Díaz, gobierno que le fue transferido a
este por el golpista, general conservador, Emiliano Chamorro, que había
derrocado al gobierno libero-conservador de Sacasa-Solórzano.
El general Augusto Cesar Sandino, militar liberal, luchaba al lado del ejército
liberal para restituir a ese gobierno, electo mediante elecciones. Producto de esta
sublevación militar, regresan nuevamente las tropas imperialistas a poner el
orden en su protectorado. Imponen la rendición al ejército liberal mediante el
pacto Stimson-Moncada en 1927, mejor conocido como pacto del espino negro.
A esta rendición se opone el General Sandino. No entrega las armas y comienza
la lucha guerrillera en las montañas del norte de Nicaragua en contra de las
tropas ocupantes.
Surgimiento de la dictadura de la familia Somoza
La dictadura de Anastasio Somoza García (1936-1956), surge como el producto
de la combinación de varios factores. En primer lugar, el desarme de los ejércitos
de las fracciones burguesas, liberales y conservadores, producto del pacto del
espino negro, la conformación de la guardia nacional y el posterior nombramiento
de Anastasio Somoza García, como jefe director de las fuerzas armadas,
contribuyen a darle mucho poder a este testaferro del imperialismo yanqui.
En segundo lugar, el fusilamiento del General Sandino y de sus seguidores, que
habían negociado un acuerdo de paz con el Presidente Sacasa, a manos de la
guardia nacional, facilitan que Somoza se erija como única fuerza militar decisiva
en el escenario nacional. En tercer lugar, el hábil manejo por parte de Somoza
de las divisiones entre liberales y conservadores, así como el débil gobierno de
Sacasa, sumado al deterioro de la situación económica de esa época, su suman
como elementos que, al final, conducen a Somoza a dar el golpe de estado contra
Sacasa y, posteriormente, erigirse como candidato presidencial único en las
elecciones del año 1936.
De ese modo surge la dictadura de la familia Somoza que se perpetúa a lo largo
de 43 años. EL viejo Somoza García, padre de la dictadura dinástica, es ejecutado
por Rigoberto López Pérez en el año 1956. Siendo su hijo mayor, Luis Somoza
118
Debayle, presidente del Congreso, es electo Presidente interino y,
posteriormente, mediante unas elecciones fraudulentas en el año 1957, se hizo
Presidente de Nicaragua por el periodo 1957-1963. Una vez terminado su
mandato, Luis Somoza que se presentaba como un “modernizador” y
“reformista”, hizo elegir a un títere, René Schick, como candidato a la Presidencia
de la República la cual ganó, mediante fraude electoral.
Para las próximas elecciones, el tercer dictador de la familia dinástica, Anastasio
Somoza Debayle, se hizo nombrar candidato a la Presidencia, la cual,
nuevamente, mediante fraude electoral, ganó en el año 1967, manteniéndose,
mediante la represión sanguinaria y elecciones fraudulentas sucesivas con la
complicidad del partido conservador, en el poder hasta su derrocamiento violento
en 1979.
El triunfo de la revolución
El 19 de julio del año 1979 triunfa la revolución nicaragüense. La victoria de la
insurrección y revolución nicaragüense fue el producto de la combinación de
factores nacionales e internacionales que, la dirección sandinista, logró
comprender y aprovechar para colocarse a la cabeza y dirigir ese poderoso y
glorioso ascenso del movimiento de masas. Para finales de los años 70, la
dictadura de la familia Somoza se encontraba en franca crisis económica, pero,
principalmente, en una terrible crisis política.
La dictadura se encontraba agotada y las masas la odiaban. Las familias
consideraban a la dictadura una amenaza para la sobrevivencia de sus familias,
ya que la guardia somocista y sus demás organismos de represión asesinaban a
diestra y siniestra a todos los jóvenes, por considerarlos potenciales guerrilleros,
independientemente de que fueran o no sandinistas. Aquí el factor social y
político se convirtió en un elemento objetivo. Por otro lado, los hijos de las
familias de clases medias y ricas, se incorporaban masivamente a las filas de
diferentes tendencias del sandinismo porque se habían radicalizado, en parte,
por las contradicciones económicas que esas familias tenían con los sectores
burgueses surgido del somocismo. Este factor explica las grandes movilizaciones
cotidianas, tomas de iglesias, huelgas estudiantiles en secundaria,
enfrentamientos armados e insurrecciones espontaneas que se produjeron a lo
largo de los años 1976, 1977, 1978 y 1979.
Sobre este poderoso movimiento espontáneo de masas, la dirigencia del FSLN
logró cabalgar y dirigir para encuadrarlo bajo su conducción. He aquí,
precisamente, donde se encuentra la habilidad política y comprensión correcta
de los fenómenos sociales y políticos, por parte de la dirigencia del FSLN,
principalmente de la tendencia insurrecional, que se producían en Nicaragua. A
su vez, estos factores nacionales coincidieron a nivel internacional con cierta
debilidad del imperialismo yanqui, producto de su contundente e histórica derrota
en Vietnam en el año 1975, lo cual condujo al imperio yanqui a variar su política
de apoyo incondicional a la dictadura de la familia Somoza.
119
A su vez, la socialdemocracia internacional y otros gobiernos latinoamericanos,
comenzaron a dar apoyo político, económico y militar al FSLN, pero obviamente,
con la intención de influir y decidir sobre el curso y final de los acontecimientos
y la inminente caída de la dictadura somocista. Es importante destacar, en este
apartado, para hacer honor a la verdad que la organización del FSLN fue un
enemigo irreconciliable de la dictadura de los Somoza, de la cual siempre buscó
su destrucción, por la vía armada.
No obstante, se debe señalar claramente los límites de la conducción del FSLN,
en sus distintas variantes. El sandinismo combinaba a nivel político-ideológico el
nacionalismo del general Cesar Augusto Sandino con algunas nociones del
socialismo burocrático y deformado del stalinismo y el castrismo. Esta amalgama
contradictoria, confusa y equivocada, combinada con el carácter y composición
social de las clases medias y altas de la dirigencia de las distintas corrientes del
sandinismo, aunque tuviera una base plebeya, la condujo finalmente a lo que
conocemos del sandinismo actual, tanto del FSLN en el poder actualmente,
convertido en una burguesía emergente, como del MRS que se encuentra en la
oposición, pero totalmente a la derecha y en alianza con las fuerzas más
reaccionarias del país.
La conversión de una organización revolucionaria en un partido burgués y una
nueva burguesía, no es nueva en la historia. Sin embargo, la transformación del
FSLN como ejemplo histórico más moderno es importante y educativo para
preparar a las nuevas generaciones de revolucionarios en lo que no se debe
hacer. Sin duda alguna, forzando a la genética humana en una explicación social
y política, podríamos decir que la transformación del FSLN en partido burgués y
nueva burguesía, se encontraba en los “genes” del FSLN, pero que en su etapa
ascendente eran “genes recesivos” que se ocultaban y enmascaraban y, en su
fase decadente, esos “genes” se manifestaron y transformaron en “genes
dominantes”.
La revolución nicaragüense y su influencia en Centroamérica
Dado que los países centroamericanos, constituyen en los hechos, una unidad
geográfica, económica y cultural, ese triunfo revolucionario en Nicaragua abre
una situación revolucionaria a nivel de toda la región centroamericana,
combinados con los factores económicos de relativa crisis internacional. El triunfo
revolucionario en Nicaragua estimula y fortalece al movimiento popular y sus
organizaciones a nivel regional. El Salvador en el 1979 también se encontraba en
una profunda situación de crisis política con fuertes oleadas de huelgas,
movilizaciones, acciones guerrilleras y todo tipo de acciones. Prácticamente, ese
país estaba al borde de la guerra civil a inicios del año 1980.
Es por ello, que cientos de combatientes nicaragüenses con sus armas cruzan las
fronteras y se dirigen a apoyar militarmente la revolución en El Salvador, para
extender la revolución. Obviamente este es un proceso espontaneo y que se
produce por fuera de la línea oficial del FSLN. Es por esta razón que la dirigencia
sandinista reprime ese proceso espontaneo y luego lo canaliza de forma
120
burocrática. A su vez, Guatemala, también se encontraba en una situación de
fuertes enfrentamientos militares entre el ejército y las organizaciones
guerrilleras, movilizaciones y huelgas. Sin embargo, en este país las fuerzas
represivas del ejército logran tener una política de tierra arrasada y un combate
más efectivo en contra de la guerrilla a la cual logran golpear.
Sin embargo, es evidente que, en Centroamérica, entre los años 79 y 81 el orden
establecido por el imperialismo yanqui, mediante dictaduras militares, se
encontraba en proceso de derrumbamiento y colapso. Si todo ese orden, al final,
no se viene totalmente abajo se debe a la conducción del castrismo y el
sandinismo que, producto de una política nacionalista, no tienen una política de
extensión de la revolución región centroamericana. Castro aconseja a la dirección
del FSLN no seguir el ejemplo de Cuba de expropiación total de la burguesía y, a
su vez, la dirección sandinista no apoya totalmente, con hombres y armas, a las
organizaciones de El Salvador y Guatemala, evitando con ello el triunfo
revolucionario en esos países y, por ende, que termine imponiéndose la
contrarrevolución y el imperialismo. Al final, esta política se vuelve en contra de
la revolución nicaragüense que, en términos de 10 años, termina siendo
derrotada por la política imperialista.
Las conquistas de la revolución nicaragüense
En el año 1979 y 1982 se emiten una serie de decretos y medidas altamente
progresivos por parte de la Junta de Gobierno de Reconstrucción Nacional
(JGRN), integrada por mayoría sandinista, Daniel Ortega, Sergio Ramírez y
Moisés Hassan y dos representantes burgueses, Violeta de Chamorro y Alfonso
Robelo. Se disuelve formalmente, aunque ya estaba destruida por la insurrección
triunfante, la guardia nacional; se confisca todos los bienes de la familia Somoza
que constituían el 20% de las tierras, explotaciones agrícolas, fábricas y otros
negocios; se nacionaliza el sistema financiero; se nacionaliza el comercio exterior;
se abole la pena de muerte; se reducen drásticamente los alquileres de casas,
asestando un duro golpe a los dueños de casas; se declara la gratuidad de la
educación universitaria; se realiza la alfabetización masiva de la población a lo
largo y ancho del territorio nacional y muchos otros de gran importancia.
En el terreno de la salud, Nicaragua era el ejemplo a seguir en el tercer mundo
sino también de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Leamos lo que se
decía en aquella época: “Nicaragua es un caso especial. Los adelantos en la
atención de salud realizado por el actual gobierno han mejorado
significativamente las vidas de muchos nicaragüenses. En 1982, la Organización
Mundial de la Salud designó a Nicaragua como el “país modelo” del Tercer Mundo
en atención de la salud. En agosto de 1979, un sistema nacional de salud único
unió a las 23 instituciones separadas existentes bajo el gobierno
prerrevolucionario, y el sistema en su conjunto ha llegado a ser más eficiente y
extensivo. El presupuesto de salud del país subió un 50% en el primer año
después de la revolución…”. (Freiberger, 1989: 227). Obviamente, actualmente
ninguna de esas conquistas existe, sino que más bien lo que existe es un
121
profundo retroceso en todos los terrenos, a pesar de una relativa mejoría en
relación a años anteriores.
Por otro lado, la sindicalización de los trabajadores entre julio del año 1979 a
diciembre del año 1982 fue espectacular, pasando el número de sindicatos de
138 a 1200. ¡Un incremento de casi el 900 por ciento!! Pero, no solo se trataba
del aumento numérico, sino que dentro de muchas fábricas se establecía un
poder dual, ya sean que los dueños fueron privados o bien los gerentes fueran
representantes del gobierno sandinistas. Los trabajadores en las fábricas
sancionaban y despedían a los jefes, sometiéndolos a los dictados y resoluciones
de las asambleas de los trabajadores que, a mano alzadas, imponían sus
posiciones. En las fábricas y empresas existían de forma generalizada
comisariatos que vendían a precios bien baratos los productos básicos a todos
los trabajadores. Así sucesivamente, también sucedía en los barrios, haciendas y
otros lugares.
Es importante destacar que, dentro de este proceso revolucionario altamente
móvil e inestable, la izquierda revolucionaria se desarrolló e impulsaba la
revolución hacia adelante, exigiendo la expropiación de todos los grandes
capitalistas, la ruptura de las alianzas gubernamentales del FSLN con burguesía
y el apoyo de los procesos revolucionarios en los demás países centroamericanos
como una forma de fortalecer y extender la revolución nicaragüense.
La contrarrevolución y su desarrollo
Desde el año 1981, fecha en que asume la presidencia de los Estados Unidos,
Ronald Reagan, comienza un ataque de este hacia la revolución nicaragüense.
Este gobierno suspende préstamos tanto de ellos como de instituciones
multilaterales, se desarrollan campamentos contrarrevolucionarios en la Florida;
se autorizan operaciones militares encubiertas contra el gobierno sandinista; en
el año 1983 se realiza ataque contra puerto Corinto y para los años posteriores,
inician sus operaciones militares la guerrilla contrarrevolucionaria en contra de la
revolución nicaragüense.
En esos años, el gobierno sandinista instaura el servicio militar obligatorio
conocido patriótico (SMP). Producto de la guerra, la mayor parte del presupuesto
de la República se destina a gastos de guerra; los EE.UU imponen el bloqueo
económico a Nicaragua; se produce el desabastecimiento generalizado; se
produce una gigantesca hiperinflación del 14 mil por ciento, la más grande del
mundo; los ataques contrarrevolucionarios destruyen la infraestructura en
diversos poblados; miles de jóvenes combatientes mueren los frentes de guerra
y se producen otros males producto de la guerra contrarrevolucionaria. En
síntesis, los efectos de la guerra someten a la población a una gran penuria,
escasez, pobreza, miseria, hambre y muerte. Es un panorama dantesco el que
produce la guerra contrarrevolucionaria.
El surgimiento de la contrarrevolución como la contraparte de la revolución era
un fenómeno inevitable, sin embargo, el desarrollo de la contrarrevolución como
122
un fenómeno de masas era evitable con políticas sociales, económicas y
estructurales hacia sectores sociales claves, como eran el campesinado y las
minorías nacionales de la costa atlántica. Debido a la naturaleza social y política
de la dirigencia del FSLN, se cometen graves errores contra estos sectores como
el reasentamiento forzado de los misquitos, la violación de sus costumbres, de
su lengua y sus tierras, así como la no entrega de la tierra al campesinado pobre.
Entonces, el crecimiento de la contrarrevolución con estas fuerzas sociales muy
importantes, minorías nacionales y campesinado, trasforma las operaciones y
actividades contrarrevolucionarias de las huestes somocistas en una guerrilla de
masas que, posteriormente, conllevan a capitulaciones en las negociaciones y a
la derrota de la revolución en las elecciones del año 1990.
La derrota de la revolución nicaragüense
La derrota electoral del FSLN a manos de la derechista y pro-imperialista Unión
Nacional Opositora (UNO) en el año 1990 es el resultado y producto de una
combinación de factores. La guerra civil contrarrevolucionaria de los últimos años
de la década de los 80 diezmó no solo la capacidad económica para sostener el
país, sino también la energía y los recursos humanos, los combatientes, para
enfrentar exitosamente a la contrarrevolución.
Las familias y la población ya no aguantaban más los estragos de la guerra,
estaban cansadas de la guerra. Las masas hambrientas, empobrecidas y con uno
o varios hijos muertos en los combates, encontró, por la vía de las elecciones del
año 1990, la forma de detener la guerra y votó masivamente en contra del FSLN.
Este proceso subterráneo y soterrado, el FSLN no logró entenderlo y se
confundían con las encuestas que le daban el triunfo y con las grandes
movilizaciones que lograban en las ciudades y poblados, a pesar de la guerra.
Fue un fenómeno político y social altamente contradictorio. Lo que pasa en las
calles no se corresponde con lo que está pasando en la conciencia de las amplias
masas que no se movilizan.
La derrota de la revolución condujo a graves retroceso a todos los niveles. Miles
de nicaragüenses, producto del crecimiento de la pobreza, emigraron a Costa
Rica, los Estados Unidos y otros países. Se desmontaron todas las conquistas
sociales, políticas, sindicales y demás que aún quedaban, a pesar de las políticas
de reacción de la dirigencia sandinista.
De aquella dorada época no queda nada, solo viejos personajes políticos y
empresarios, muchos de ellos transformados en nuevos ricos y políticos
burgueses, otros convertidos en tránsfugas políticos, viejos empresarios y
millonarios, como los Pellas, que de ser expropiado en 1988 de su insigne
empresa el Ingenio San Antonio, ahora es consultado y tomado en cuenta, junto
con empresarios del COSEP, en la mayoría de las tomas de decisiones por el
gobierno de Ortega. Continua intacto el sistema capitalista, a pesar de los duros
ataques que sufrió en el proceso revolucionario. Este sistema ha demostrado su
capacidad de sobrevivencia y su capacidad de fagocitar a los que, en algún
tiempo, fueron revolucionarios.
123
El Bonapartismo corporativo de Ortega y el FSLN
Actualmente, después de 37 de la poderosa insurrección y revolución
nicaragüense, se encuentra en el poder el FSLN. En los discursos oficiales todavía
se habla de la revolución. Sin embargo, esas son palabras nada más. El FSLN es
un partido y su régimen es uno de los pocos en América Latina que cumple al pie
de la letra los dictados y las políticas oficiales de los organismos financieros
internacionales como el FMI, el BM y otros.
El FSLN y un sector de sus miembros, representan hoy una nueva burguesía con
intereses económicos en diversas actividades empresariales, agropecuaria,
energía, finanzas y otras. Muchos acusan al régimen de Ortega, incluido el MRS,
como una dictadura. Otros como el politólogo José Dávila como un régimen de
“híbridocracia”. Sin embargo, nosotros caracterizamos al régimen de Ortega
como bonapartista, pero de tipo corporativistas.
Bonapartista porque es un “régimen personal” que pretende elevarse por encima
de la sociedad, pero que al final defiende y protege los intereses de las clases
dominantes. El término corporativo se le asigna, porque en la Constitución Política
en uno de sus artículos incorpora a los empresarios como órgano de consulta y
toma de decisiones para su régimen político. Lo anterior, no significa para nada
que no tengan contradicciones con el sector corporativo de su régimen, los
capitalistas y sus cámaras empresariales.
Las lecciones de la revolución nicaragüense
A nuestro juicio, existe una enseñanza fundamental para construir una teoría de
la revolución centroamericana a partir de la revolución nicaragüense. No es
posible sostener una revolución victoriosa en uno de los países centroamericanos
en los estrechos marcos nacionales. La existencia y sobrevivencia de esta
revolución solo sería viable si se extiende al resto de los países centroamericanos
y se convierte en una revolución a escala regional.
Dado los lazos económicos, vasos comunicantes y la interdependencia entre los
países centroamericanos la revolución en Centroamérica será centroamericana o
no será posible sostenerla, incluso si la revolución triunfa siendo dirigida por un
partido revolucionario socialista. Es cierto que la dirección sandinista con sus
desaciertos y sus políticas colaboracionistas y la contrarrevolución imperialista
condujeron a la derrota de la revolución, sin embargo, las posibilidades de resistir
la ofensiva contrarrevolucionaria se hubieran compensado con el apoyo de los
demás países, así como poder haber resistido al bloqueo económico y demás
efectos negativos provocados por la guerra contrarrevolucionaria.
Neurociencia aplicada a la educación del siglo XXI
http://educrea.cl/neurociencia-aplicada-a-la-educacion-del-siglo-xxi/
Contexto
124
Este sigo XXI, época marcada por grandes contrastes donde el florecimiento de la ciencia y la
tecnología coexiste con el incremento de conflictos emocionales la tarea de formar y educar a
las nuevas generaciones requiere cada vez más de planteamientos pedagógicos que se sitúen
en le punto de encrucijada de la mundialización de los conocimientos y la particularidad de los
procesos de aprendizaje.
Modificar el modelo sobre cómo se desarrolla la vida de las escuelas respecto de la
construcción del saber, y a partir de la comprensión de cómo aprende, cómo guarda
información nuestro cerebro, y cuáles son los procesos biológicos que facilitan el aprendizaje,
es una tarea que demanda urgente implementación en los tiempos actuales.
Los grandes avances de la neurociencia ayudan a develar los mecanismos cerebrales que
hacen posible el aprender, des-aprender, re-aprender, el recordar y el grabar información en el
cerebro, lo que tiende a mejorar todo lo que abarca el Enseñaje (Enseñanza-Aprendizaje), a
modo personal, un proceso muy necesario de implementar en los distintos ámbitos educativos
actuales.
Teniendo presente que la educación ha experimentado un cambio negativo porque se ha
perdido la importancia del aprendizaje reemplazándolo por hojas, textos, exámenes, etc.,
siendo un sistema rígido que ocasiona problemas en los niños, la neurociencia aplicada al
ámbito educativo puede generar resultados altamente positivos.
Actualmente, el estudio de las conductas a partir de la comprensión del funcionamiento
cerebral por medio de técnicas de neuroimagen, que exploran la actividad cerebral en tiempo
real y en vivo (las más populares son Tomografía por Emisión de Positrones -PET en inglés- y la
Resonancia Magnética Funcional -fMRI en inglés-), han permitido encontrar algunas
respuestas, y sin duda están colaborando con una mejor implementación en el campo
educativo.
Situaciones presentes en el acto cotidiano escolar encuentran su origen en la actividad
cerebro-mental humana. Por ello el conocimiento que el docente tenga sobre sus
características, potencialidades y sobre las implicaciones en el aprendizaje le permitirán
ampliar las fuentes para la toma de decisiones en los procesos pedagógicos. El cerebro
humano es un sistema estructural y funcional diseñado para recibir información, integrarla de
modo flexible y creativo y elaborar conductas destinadas a la adaptación. Para ello, está
configurado en forma de módulos funcionales altamente dinámicos, constituidos por células
interconectadas que realizan una sofisticada mensajería química y física dentro del cerebro y
con el resto del organismo. Aprender es un proceso innato del ser humano, siempre estamos
en constante aprendizaje. Este proceso adquiere mayor relevancia cuando se traduce en el
plano educativo. La capacidad de educabilidad que nos caracteriza como seres humanos reside
en la capacidad compleja del cerebro que tenemos. Sin embargo durante el proceso de
aprendizaje los individuos enfrentan algunas dificultades.
¿Por qué considerar el estudio de las funciones cerebrales en los procesos educativos?
La respuesta parece obvia, si se considera que la labor pedagógica es inminentemente humana
y esto significa que se debe considerar su integralidad, pero aún así, podemos esbozar como
argumento que en un acto educativo, existen diversos procesos comunicativos, y además, que
toda percepción implica una elaboración, una interpretación, una representación, una
construcción del individuo.
125
Esto nos indica que la actividad mental y la cultural interactúan. Florez (1995) indica que no se
puede separar ninguna de estas dimensiones (la mental y neuronal), ni reducir una en
detrimento de la otra; se trata de una unidad dual (cerebro- mente) en constante interacción.
Asimismo, el aprendizaje cambia la estructura física del cerebro, es decir, que se fortalece con
el ejercicio mental. Aún más, estudiar organiza y reorganiza la mente, por tanto, el ejercicio
mental cambia nuestro modo de percibir y comprender la realidad.
Aún hay un largo el camino por recorrer para poder llegar a las transformaciones “de fondo”,
que los paradigmas educativos vigentes necesitan realizar para ser “verdaderamente útiles” a
los niños y jóvenes; importante es replantearse cuáles son las herramientas, metodología y
valores que les posibilitarán adquirir las necesarias competencias para adaptarse ante los
desafíos que este siglo XXI les seguirá exigiendo cuando se hayan convertido en ciudadanos
adultos (del futuro). Dotarlos de herramientas integrales, óptimas y efectivas es nuestra
responsabilidad y debiera ser un compromiso compartido por tod@s.
Neurociencia y Educación
Para Judy Willis, neurocientúífica e investigadora de la relación neurociencia-educación hay
dos puntos focales relevantes para un óóptimo aprendizaje:
–En primera instancia, el estado de ánimo del “alumno” ó la predisposición que éste tenga
hacia la captación de una información novedosa. Si el alumno está ,destilen calidad contento,
la información recepcionada será aprendida con mayor facilidad .en situaciáón contraria de
nada valdrán las explicaciones del profesor
–En segundo lugar está la metodología empleada muy importante en la enseññanza porque
depende en gran parte de la manera cóñmo el estudiante se predisponga para aprender.
Asimismo, se sabe que son las emociones las que conducen la memoria, esto significa que si
las emociones son placenteras, el rechazo a información novedosa será menor, y por ende, el
aprendizaje más efectivo.
Para la neurociencia al cerebro se le agiliza el aprendizaje cuando se incorpora mediante
esquemas, mapas, gráficos y cualquier otra herramienta que permita la formalidad y el orden.
La información mostrada de forma organizada y estructurada incorpora una actitud positiva
para captar la atención del alumno. Dicha información se maximiza cuando ésta se relaciona
con aprendizajes previos, es decir, vivencias personales que los alumnos tienen y que permiten
entender mejor lo aprendido.
Aprendizaje Relacional
La neurociencia continúa desenredando los mecanismos del cerebro y actualmente se ha
podido concluir que la educación memorística ha sido correcta, pese a haber sido satanizada
por mucho tiempo.
Según el neurocientífico Ignacio Morgado, el memorismo resulta la mejor forma de aprender
muchos conceptos que se determinan por hábitos o formas de hacer las cosas. Una suma
siempre será la misma, por eso se repite hasta memorizarla.
Sin embargo, existen otras formas de aprendizaje, como el relacional, que consiste en
aprender hechos, episodios y circunstancias en la vida que, más que repetir, requiere
126
relacionar cosas. Cuanto más cosas comparamos, cuanto más relacionamos, más y mejor
aprendemos.
Memorizar no está mal, porque es como trabaja el cerebro, pero el aprendizaje actual no se
sirve de una única fuente, hoy en día los alumnos tienen la posibilidad de contrastar la
información nueva con otras fuentes que le permitan ampliar el conocimiento y corroborarlo.
Por eso el aprendizaje necesita de una estrategia cognitiva que lo guíe.
El repetir la información hasta memorizarla sirve como guía de aprendizaje, pero si lo que se
quiere es aprender hechos y conocimientos, episodios que han ocurrido, el memorismo no
será insuficiente. Entonces es más efectivo aprender por contraste, utilizando las diversas
fuentes de información.
El proceso de Aprendizaje
El aprender es un proceso por el cual se adquiere una determinada información y se almacena
para poder usarla cuando haga falta. El aprendizaje se produce comoconsecuencia de una
serie de procesos químicos y eléctricos.
Luego de ser captados por medio de los sentidos todos los estímulos que recibe un individuo
se dirigen al cerebro, pero parte de éstos no llegan a él.¿Por qué ocurre esto? Según la
investigadora Judy Willis el cerebro tiene ciertos “guardianes”, que funcionan como obstáculos
previos e impiden alcanzar el aprendizaje total y completo, es decir, existen una serie de filtros
que protegen al cerebro de la ¨sobrecarga¨ de información a la que está expuesto diariamente,
permitiendo el ingreso, laasimilación, sólo de la información que al cerebro le interesa.
Estos filtros favorecen la discriminación y la atención del cerebro a lo que realmente “le
importa” absorber como aprendizaje. Los filtros están presentes en el sistema de aprendizaje
RAD: el sistema reticular de activación (RAS), el filtro positivo de la Amígdalay la intervención
de Dopamina. Cada uno de ellos se determina por las emociones, si son positivas, el acceso de
la novedad al cerebro se realizará con mayor rapidez.
El neurocientífico Ignacio Morgado, agrega a lo expuesto, que las emociones son de relevante
importancia para el aprendizaje, porque determinan finalmente la decisión del ser humano al
elegir entre varias opciones. El uso de la razón se mantiene limitado al análisis de las
probabilidades, pero es en la decisión final que las emociones determinan la elección según las
sensaciones que nos producen.
Asimismo, si el cerebro detecta estrés puede combatir y bloquear la información.Se ha
demostrado que el nivel elevado de estrés provoca que los Lóbulos Prefrontales (LPF – áreas
más evolucionadas de nuestro cerebro) implicados en la funciones cognitivas y en las
ejecutivas, se bloquen. Las neuronas se “deprimen”, se “achican” lo que deviene en un mal
funcionamiento.
En otras palabras, si el niño está en una clase en la que se ve expuesto a un impacto fuerte de
estrés, sus Unidad Cerebro-Mente (UCM) no responderá al 100 %.
Esto significa que, cuando mejor sea el ambiente para aprender, mejor será el aprendizaje. Por
eso es importante la didáctica en el proceso educativo. Está claro que no sólo el memorismo
resulta beneficioso, sino que también existen ciertas maneras según sea el caso de lo que se
requiere aprender. Cada vez los niñños son más hábiles y más veloces en su pensamiento, por
eso es necesario mejorar las herramientas para capturar su atención.
127
Conclusiones
Neurocientíficamente hablando, aprender mediante la experiencia puede resultar lo mejor,
mediante las sensaciones de un específico hecho, sobre un evento en especial. Así, cada vez
que se repita la situación estaremos mejor preparados para afrontarla, porque dejará de ser
nueva para nosotros y reaccionaremos más rápido y mejor.
Integrar experiencias valiosas en las que participen adultos, puede estimular la producción de
dopamina en los niños y adolescentes y, de esta manera, ayudarlos a encontrar placer en sus
acciones.
El maestro que conoce los principios neurobiológicos que rigen el funcionamiento cerebral, su
maduración cognitiva y emocional, tiene en sus manos un recurso espléndido para diseñar su
praxis docente, identificando ritmos y modalidades madurativas en sus ¨alumnos¨ y eligiendo
recursos de enseñanza sobre bases científicas que le garantizan óptimos resultados.
Conocer el sustrato neurobiológico de las dificultades de aprendizaje, las bases del desarrollo
cognitivo-afectivo y la influencia que ejerce el contexto en su enriquecimiento y potenciación,
provee al docente de herramientas para ¨detectar¨ los talentos de cada alumno y la
oportunidad de potenciarlos demanera armónica.
Fuente:
• www.neurocapitalhumano.com.ar
Francia/ Del BDS a la CGT: crónica de una criminalización a través de una
política del miedo
Saïd Bouamama
https://www.rebelion.org/noticia.php?id=214373
Investig'Action
Traducido del francés por Beatriz Morales Bastos
La campaña política y mediática de criminalización de la CGT [siglas en
francés de Confederación General del Trabajo] y el intento de prohibir una
manifestación sindical son unas características importantes de este periodo.
El principal sindicato obrero de Francia ha sido acusado explícitamente por un
prefecto e implícitamente por un ministro de complicidad cuanto menos
pasiva con los llamados «incontrolados». La lógica que hay detrás de ello no
es nueva. Tanto en el pasado como en el presente se utilizó ampliamente
contra los militantes y organizaciones que apoyan la lucha del pueblo
palestino o contra los militantes y organizaciones surgidos de la inmigración.
En ambos casos se trata de producir política y mediáticamente un «enemigo
público» que autoriza unas medidas de excepción duraderas con el pretexto
de proteger a la sociedad y sus «valores republicanos».
Del enemigo civilizacional…
128
Los sistemas de dominación necesitan de forma consustancial suscitar miedo
y escenificar un peligro. Al no poder presentarse como lo que son están
obligados a legitimarse por medio de esta amenaza construida y de la que
afirman preservarnos. Como tienen que ocultar su violencia estructural y
sistémica, necesitan la figura de la amenaza para justificar la represión contra
la resistencia a esta primera violencia. Cuanto más en dificultades está la
legitimidad de un poder de Estado más se necesita producir uno o varios
enemigos públicos. En este sentido la multiplicación de los discursos de
designación de enemigos es revelador de una crisis de legitimidad.
A escala internacional la ausencia de legitimidad de las nuevas guerras
coloniales por el petróleo, el gas y los minerales estratégicos es lo que ha
llevado a producir un «enemigo civilizacional» con la figura del «musulmán».
De El choque de las civilizaciones de Samuel Huntington al «eje del mal» de
Georges Bush este proceso de producción de un enemigo civilizacional ha
pasado del ámbito teórico al ámbito de la propaganda.
Samuel Huntington teoriza desde las primeras líneas del prefacio de El choque
de las civilizaciones: «Los conflictos entre grupos surgidos de diferentes
civilizaciones están a punto de convertirse en el elemento básico de la política
global». (1)
Georges Bush traduce esta tesis al lenguaje de la propaganda: «Estados como
esos [Irán e Iraq] y sus aliados terroristas constituyen en eje del mal, que se
arma para amenazar al mundo». (2)
El filósofo Marc Crépon puso en evidencia el objetivo principal de la
demostración «científica» de Huntington: «Saber de qué debemos tener
miedo». (3)
Una vez designado el enemigo se puede desplegar la cadena de relevos cuyo
objetivo es transformar esta tesis en «aroma ideológico inmediato», por
retomar la expresión de Antonio Gramsci. Por supuesto, los medios de
comunicación son el relevo de difusión. Veamos algunos ejemplos:
1) Le Nouvel Observateur titula uno de sus números fuera de serie «La guerra
de los Dioses» (4), con tres subtítulos «¿Es inevitable el conflicto de valores?
¿Son universales los derechos humanos? El choque de las ocho civilizaciones
principales». Incluso el nombre de civilizaciones se toma de Huntington.
2) El semanario Le Point le hace eco con un número titulado «Los cristianos
frente al Islam, investigación sobre un choque mundial». (5) La repetición de
la palabra «choque» y el adjetivo calificativo «mundial» tienen relación
directa con al teoría de Huntington.
129
3) Por su parte, el semanario Valeurs actuelles saca unas conclusiones
belicosas: «Francia en guerra, contra la barbarie en nombre del Islam,
contra la barbarie antisemita, contra la ceguera de las elites». (6)
La referencia al «eje del mal» de Bush es evidente. Así, están presentes las
tres etapas de la teoría del choque de las civilizaciones: el anuncio del peligro,
la designación del enemigo y la llamada a la acción viril y guerrera. Por
supuesto, la designación del enemigo se puede modular en función de las
preocupaciones tácticas. Si globalmente el Islam es el enemigo, los «países
moderados» aportan unos matices.
La distinción binaria entre «moderados» y «radicales» abarca enteramente los
intereses económicos y geoestratégicos estadounidenses. Así, Arabia Saudí y
las monarquías se consideran moderadas, mientras que se sitúa a Siria e Irán
en el eje del mal.
La prensa europea en general y la francesa en particular han tomado el relevo
de la teoría del choque de las civilizaciones y de la producción del enemigo
que la acompaña. Al reproducir los esquemas, las lógicas, los leitmotiv de los
grandes medios de comunicación estadounidenses ha contribuido a producir
un «choque de las representaciones»:
Después de los atentados del 11 de septiembre de 2001 las cadenas
estadounidenses, a través de sus redes dominantes de cobertura y de
difusión, se impusieron como referentes de los demás grandes medios
occidentales según el esquema inapropiado, inadaptado y fabricado
ideológicamente del «choque de las civilizaciones»: el mal absoluto venía
de Oriente Próximo y Medio, y, por consiguiente, había que protegerse
volviendo a los etnotipos del orientalismo más manido. Transpuesto al
plano de la fabricación de imágenes, este imperativo ideológico ha
contribuido en gran medida a la fabricación de un «choque de las
representaciones». (7)
1. …al enemigo sindical
Aunque se designa a los Estados, el enemigo civilizacional no se limita a ellos
y así se incluye en el «eje del mal» a organizaciones políticas como Hizbola y
Hamas. Más ampliamente todavía, todas aquellas personas que se oponen a
las políticas exteriores occidentales son sospechosas de complicidad, activa o
pasiva, objetiva o subjetiva, consciente o no, etc., con los «terroristas», los
«islamistas», etc. La geometría variable del eje del mal permite así adaptarlo a
todas las prioridades tácticas.
Veamos algunos ejemplos recientes. En una tribuna publicada en su cuenta de
Facebook el delegado interministerial de la lucha contra el racismo y el
130
antisemitismo (DILCRA) Gilles Clavreul acusa a mi organización (Front Uni
des Immigrations et des Quartiers Populaires- FUIQP [Frente Unido de las
Inmigraciones y de los Barrios Populares]) y también al Parti des Indigènes de
la République (PIR) [Partido de los Indígenas de la República] y al Collectif
Contre l’Islamophobie en France (CCIF) [Colectivo contra la Islamofobia en
Francia] de ser «antidemocráticos, racistas y antisemitas»: «con el pretexto de
un antirracismo pervertido, el objetivo de esta ofensiva es únicamente
legitimar el islamismo, defender a unos predicadores fundamentalistas y hacer
caer a la juventud de los barrios en una radicalidad sin salida». (8)
Criticar la política del gobierno para con los gitanos, la política de
intervención militar en África y Oriente Medio, la islamofobia, etc., basta para
convertirle a uno en un «antidemocrático, racista y antisemita».
Otro ejemplo que es un objetivo similar: los militantes de la campaña Boicot,
Desinversión y Sanciones [a Israel] (BDS). Esta vez es [el primer ministro
francés] Manuel Valls quien se lanza a la palestra: «Tomaremos todas las
medidas necesarias para condenar estas campañas », anuncia a la Asamblea
Nacional el 6 de diciembre 2015. Respondía en apoyo a la intervención del
diputado sionista del partido Unión de Demócratas e Independientes Meyer
Habib que acusa al BDS de crear un clima de odio en Francia. «¿Hemos
olvidado que el objetivo de Coulibaly [en los atentados de París] en enero fue
un Hyper Cacher [supermercado kosher] ? Se estigmatiza antes de
matar». (9)
Unos militantes que se oponen a las prácticas coloniales de un Estado se
convierten así en cómplices directos del terrorismo.
El 27 de abril de 2016 le toca a la ministra de Educación Najat VallaudBelkacem declarar a la Asamblea Nacional en una crítica de la iniciativa de
una «campamento de verano decolonial»reservado a las «personas que sufren
a título personal el racismo del Estado en el contexto francés» que «estas
iniciativas […] refuerzan una visión racizada y racista de la sociedad». (10)
La voluntad de reunir a personas que viven la misma injusticia se convierte en
boca de la ministra en una visión racista del mundo. De la misma manera los
movimientos feministas que organizan reuniones no mixtas pronto serán
calificados de «sexistas».
Desde la llegada de este gobierno a la dirección del país son incontables las
declaraciones de ministros o delegados ministeriales que anuncian el peligro
«comunitarista» y designan a un enemigo al que hay que reprimir
urgentemente. El relevo mediático garantiza la difusión masiva de cada una de
estas declaraciones, lo que permite acreditar la veracidad del peligro. Una vez
que se ha preparado a la opinión pública, ya solo queda un pretexto para
131
desencadenar un cuestionamiento del derecho de manifestación. Le toca
entonces a un prefecto o al ministro del Interior entrar en escena invocando el
riesgo de violencia. Así, la manifestación prevista en París el 19 de julio de
2014 en apoyo del pueblo palestino se prohibió «ante el grave riesgo de
problemas de orden público que provocaría su celebración en un contexto de
aumento de la tensión». (11)
Es necesario recordar estas declaraciones y hechos para calibrar el escenario
desplegado con el fin de tratar de prohibir una manifestación sindical el
pasado 23 de junio alegando que las manifestaciones anteriores«dieron lugar
a importantes desbordamientos y graves violencias». (12)
Por consiguiente, el pretexto desencadenante es similar. Se presenta después
del mismo escenario en tres fases: anuncio de un peligro, designación de un
objetivo enemigo y relevo mediático.
La utilización del miedo como herramienta política no es una práctica nueva.
Ya a principios del pasado siglo el periodista estadounidenses Henry Louis
Mencken declaraba que «el objetivo de la política es mantener a la población
inquieta y, por consiguiente, que pida seguridad amenazándola con una serie
ininterrumpida de monstruos». (13)
Desde la «amenaza judía» y el «peligro rojo» de los nazis al «peligro
amarillo» de quienes justificaban las intervenciones imperialistas en China a
principios del siglo XX, pasando por las «armas de destrucción masiva» de
Sadam Husein y por el peligro de una «invasión migratoria», la política del
miedo es una realidad innegable.
En el entorno de las manifestaciones contra la Ley [de reforma laboral] El
Khomri no ha faltado la comunicación gubernamental generadora de ansiedad.
El peligro aquí es de naturaleza económica. Abandonar la ley llevaría a
cuestionar la recuperación de la economía francesa ideada por Hollande y que
repiten en todos los medios de comunicación.
Curiosamente, este peligro es exactamente el mismo que el que el FMI pone
de relieve en boca de su presidenta Christine Lagarde, la cual anima a Francia
a ir más lejos con las reformas.
L a evaluación del FMI para el año 2015 indica que «la economía francesa se
está recuperando, pero siguen siendo necesarios unos esfuerzos importantes
para reforzar la creación de empleo y situar las finanzas públicas en una vía
más sostenible». Los esfuerzos suplementarios necesarios se citan
explícitamente: «reformar las normas del subsidio del paro», «alargar el
periodo mínimo de cotización que actualmente es de cuatro meses», «reforzar
el apoyo a la búsqueda de empleo», «facilitar la regulación para las
132
empresas recién creadas y los autoempresarios», «reducir el déficit
presupuestario para garantizar que la deuda, que sigue en alza, pasar a una
trayectoria firme a la baja». (14)
Con semejantes objetivos el derecho al trabajo se convierte en un
obstáculo que hay que eliminar totalmente para abrir camino a unos
acuerdos empresa por empresa. Mantener una regulación, aunque sea
mínima, sería un peligro para una economía frágil. Quienes niegan esta
evidencia ultraliberal son unos inconscientes, unos irresponsables o unos
egoístas que defienden sus propios intereses. Así [el presidente de la
patronal francesa, MEDEF] Pierre Gattaz considera que «el emblema
CGT es igual a paro». (15)
2. La designación del enemigo cegetista
El libro La construction de l’ennemi [La construcción del enemigo] precisa en
su descripción de la fabricación de un enemigo en tiempos de guerra: «La
figura del enemigo prepara, acompaña y apoya el esfuerzo de guerra. Unas
retóricas y unas escenografías la construyen. Unos saberes con pretensiones
científicas o religiosas la legitiman. Unos medios de comunicación la
transmiten».(16)
Hay que constatar que la misma lógica se puede apreciar en los discursos
políticos y mediáticos referentes a la CGT en el actual movimiento social. Es
cierto que para este gobierno estamos en guerra desde el 11 de enero.
Así, el 30 de mayo el presidente del MEDEF pide en el diario Le Monde que
no se ceda «al chantaje, a las violencias, a la intimidación, al terror» y que se
resista a unas «minorías que se comportan un poco como gamberros, como
terroristas». (17)
El 15 de junio el primer ministro denuncia la actitud «ambigua» de servicio de
orden de la CGT respecto a unos «incontrolados que sin duda quieren
matar». (18)
El 19 de junio le toca al ministro del Interior Bernard Cazeneuve acusar: «El
martes 14 de junio unos militantes de la CGT atraparon violentamente a
parte de las fuerzas del orden en el punto de dispersión que, sin embargo, se
había acordado con los organizadores». (19)
El 21 de junio es el sindicato de policía Alliance quien exige «el aplazamiento
de esta manifestación y de todas las concentraciones estáticas porque
nuestros colegas están en todos los frentes y están agotados, extenuados y
cansados. Viven tanto peor estas manifestaciones cuanto que son repetitivas y
muy violentas». (20)
133
La designación del enemigo CGT ha ido precedida de una cobertura mediática
casi consensuada cuyo objetivo era apoyar la ley de reforma laboral como
necesaria e inevitable para luchar contra el paro. Se repitió una y otra vez el
argumento clave recurrente en cualquier medio: el paro se debe en gran parte
a la «rigidez» y a la «carga» del código laboral.
Desde el 9 de septiembre de 2015 Arnaud Leparmentier pide en Le
Monde «aprobar [la ley] por la fuerza». Describe su «esperanza» de la
siguiente manera: «Como ocurre a menudo, esperamos. Con el informe
Combrexelle, la Francia socialista lucha contra el Código Laboral. ¡Por fin
un movimiento para luchar contra esta preferencia nacional que es el
paro! […] Francia lucha contra él, queremos esperar, como han hecho todas
las socialdemocracias sosegadas de la vieja Europa, aprobándolo por la
fuerza, valientemente». (21)
El argumento del MEDEF se retoma sin crítica alguna. En efecto, su
presidente, Pierre Gattaz, considera que «las expectativas suscitadas por la
Ley El Khomri son grandes, a medida de los bloqueos que viven los
empresarios y de la crisis del mercado de empleo». (22)
El segundo acto de la obra mediática consiste en explicar las oposiciones a la
ley. Por supuesto, estas no se abordan como una defensa de los intereses de
los asalariados. Son obra de un corporativismo sindical, obra de una
incomprensión y, por último, obra de una minoría que ni siquiera estaría
concernida, como los «jóvenes» y los «funcionarios».
El tercer acto consiste en centrar la cobertura en las catastróficas
consecuencias para los usuarios, es decir, la opción de abordar los sujetos
desde el ángulo de las consecuencias del movimiento eludiendo casi
completamente el de las causas. En este aspecto el lenguaje de los periodistas
hace gala de una gran diversidad: desmadre, pesadilla, caos, etc. Siempre
desde el ángulo de las consecuencias, el foco se centra en los «incontrolados»
y las «violencias», lo que permite silenciar la magnitud de las movilizaciones.
Solo queda sacar las conclusiones en un último acto con la imagen de Nathalie
Saint-Cricq en el telediario de las 20:00 h de France 2 acusando doctamente a
la CGT de «apostar por la implosión social y asumir finalmente la
responsabilidad de que haya un accidente, un herido o un muerto». (23)
Demos la última palabra al semanario Le Point que el 26 de mayo lanza una
encuesta por internet con una pregunta significativa: «¿Es la CGT un
sindicato anticuado y peligroso para Francia?».(24)
Por supuesto, la respuesta es acorde: 47.473 sí frente a 4.851 no.
134
Tanto para la casi totalidad de la prensa como para el gobierno hay un peligro
indudable, un enemigo designado y la necesidad de una respuesta firme y
viril.
La necesidad de enemigos revela una crisis de autoridad que da pie una
tentación totalitaria que no hay que subestimar. Según el balance del
ministerio del Interior, desde que se inició el movimiento de protesta se ha
detenido a 1.300 manifestantes, 819 de los cuales permanecen en detención
preventiva y «51 han sido condenadas tras una comparecencia inmediata, a
menudo a fuertes penas». (25)
Estas cifras están a la altura de la deslegitimación de la política
económica llevada a cabo por el gobierno, animado por el MEDEF, la
Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional. Anteriormente y de
forma paralela se construyeron otros «enemigos», en particular contra los
movimientos de apoyo al pueblo palestino y contra las asociaciones que
denuncian la violencia policial. Si no se entienden los vínculos que unen
las diferentes categorías criminalizadas, se debilita la capacidad de
resistencia común. No nos engañemos, la noción de enemigo es extensiva.
Notas:
(1) Samuel Huntington, Le Choc des civilisations, Odile Jacob, París, 1997, p.
9. [Traducción al castellano, El choque de civilizaciones y la reconfiguración
del orden mundial, Barcelona, Paidós Ibérica, 1997; traducción de José Pedro
Tosaus Abadía].
(2) Georges Bush, discurso del 29 de enero de 2002, https://georgewbushwhitehouse.archives.gov/news/releases/2002/01/20020129-11.html ,
consultado el 1 de julio a las 14:00 h y traducido [al francés] por el autor.
(3) Marc Crépon, L’imposture du Choc des civilisations, Pleins feux, París,
2002, p. 66.
(4) Le Nouvel Observateur, La guerre des Dieux, fuera de serie, n° 46, enero
de 2002.
(5) Le point, Les chrétiens face à l’Islam. Enquête sur un choc mondial, n°
2217, 5 de marzo de 2015.
(6) Valeurs actuelles, n° 4077, del 15 al 21 de enero de 2015.
(7) Richard Labévière, Choc des civilisations, choc des représentations et
ruses de la raison médiatique, Hermès la Revue, n° 55, 2009/3, p. 172.
135
(8) Fouad Bahri, Gilles Clavreul tacle les associations antiracistes
décoloniales, https://www.zamanfrance.fr/article/gilles-clavreul-tacleassociations-antiracistes-decoloniales-19890.html,consultado el 1 de julio a
las 16:00 h.
(9) Manuel Valls, repuesta a las preguntas al gobierno en la Asamblea
Nacional, 16 de diciembre de 2015, http://www.lcp.fr/la-politique-envideo/mouvement-bds-manuel-valls-condamne-toutes-les-campagnes-deboycott-legard-des, consultado el 1 de julio a las 17:30 h.
(10) Najat Valaud Belkacem, repuesta a las preguntas al gobierno en la
Asamblea Nacional, 27 de abril de 2016, http://www.lcp.fr/la-politique-envideo/camp-dete-decolonial-vallaud-belkacem-condamne-absolument-desinitiatives, consultado el 1 de julio a las 19:00 h.
(11) Un tribunal prohíbe en París la manifestación de apoyo a Gaza, Le
Monde, 18 de julio de
2014, http://www.lemonde.fr/politique/article/2014/07/18/cazeneuve-prone-linterdiction-de-la-manifestation-propalestinienne-a-parissamedi_4459324_823448.html, consultado el 1 de julio a las 08:00 h.
(12) Catherine Gasté, Loi Travail: la préfecture interdit la manifestation…
durant quelques heures, http://www.leparisien.fr/economie/loi-travail-laprefecture-interdit-la-manifestation-de-jeudi-22-06-2016-5904335.php,
consultado el 1 de julio a las 10:00 h.
(13) Henry Louis Mencken, Mencken Chresthomathy: His own Selection of
his Choicest Writing, Vintage, New-York, 1982, p. 29. (traducción al francés
del autor).
(14) Christine Lagarde, Pour le FMI, la loi El Khomri n’est pas
suffisante, Valeurs actuelles, 26 de mayo de
2016, http://www.valeursactuelles.com/economie/pour-le-fmi-la-loi-elkhomri-nest-pas-suffisante-62032, consultado el 2 de julio a las 11:15 h.
(15) Pierre Gattaz, Le sigle CGT égale à chômage, Entrevista en Le Monde,
30 de mayo de 2016, http://www.lemonde.fr/economiefrancaise/article/2016/05/30/la-charge-de-pierre-gattaz-contre-la-cgt-ils-secomportent-comme-des-voyous_4928844_1656968.html, consultado el 2 de
julio a las 13:00 h.
(16) Reinhard Johler, Freddy Raphaël y Patrick Schmoll (dir), La construction
de l'ennemi, Néothèque, Estrasburgo, 2009, contraportada.
136
(17) Pierre Gattaz, Le sigle CGT égale à chômage, Entrevista en Le Monde,
30 de mayo de 2016, op. cit.
(18) Manuel Valls, La CGT «ambigüe», les casseurs veulent «tuer des
policiers», http://www.valeursactuelles.com/societe/valls-la-cgt-ambigue-lescasseurs-veulent-tuer-des-policiers-62677, consultado el 2 de julio a las 15:00
h.
(19) Bernard Cazeneuve, comunicado de prensa, 19 de junio de
2016, http://www.leparisien.fr/economie/cazeneuve-des-militants-cgt-ontpris-violemment-a-partie-la-police-19-06-2016-5897699.php, consultado el 2
de julio a las 15:30 h.
(20) Entrevista a Frédéric Lagache en Le Monde, 21 de junio de
2016, http://www.lemonde.fr/police-justice/article/2016/06/21/loi-travail-lesyndicat-alliance-demande-un-report-de-la-manifestation-dejeudi_4954711_1653578.html, consultado el 2 de julio a las 15:00 h.
(21) Arnaud Leparmentier, «Chiffons rouges» sociaux, Le Monde, 9 de
septiembre de 2015, http://www.lemonde.fr/idees/article/2015/09/09/chiffonsrouges-sociaux_4749623_3232.html, consultado el 2 de julio a las 17:45 h.
(22) Pierre Gattaz, http://www.medef-gironde.fr/soyons-ambitieux-sur-la-loiel-khomri-pour-enfin-faire-baisser-le-chomage.html, consultado el 2 de julio a
las 18:15 h.
(23) Nathalie Saint-Cricq, telediario de las 20:00 h de France 2, 23 de mayo
de 2016, http://television.telerama.fr/television/pour-france-2-laradicalisation-de-la-cgt-est-vouee-a-l-echec,143019.php, consultado el 2 de
julio a las 19:00 h.
(24) Encuesta por internet del semanario Le
Point, http://www.lepoint.fr/sondages-oui-non/la-cgt-est-elle-un-syndicatdepasse-et-dangereux-pour-la-france-26-05-2016-2042145_1923.php,
consultado el 1 de julio a las 19:45 h.
(25) Declaraciones de Bernard Cazeneuve en
Rennes, http://www.20minutes.fr/rennes/1845859-20160515-loi-travailcazeneuve-annonce-1300-interpellations-depuis-debut-manifestations,
consultado el 2 de julio a las 20:30 h.
Fuente: http://www.investigaction.net/de-bds-a-la-cgt-chronique-dunecriminalisation-par-une-politique-de-la-peur/
137
EN PARAGUAY, EL STRONISMO ESTA VIGENTE EN TODOS LOS ESTAMENTOS
Curuguaty fue la excusa para el golpe contra Lugo en 2012
http://www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/4-303928-2016-07-11.html
La herencia de Stroessner es “la matriz enquistada en la sociedad paraguaya”, dice Delia
Ramírez, miembro del movimiento 138, comunicóloga y una de las dirigentes de la
campaña por la absolución de los campesinos de Curuguaty.
Por Adrián Pérez
En la mañana del 15 de junio de 2012, una lluvia de balas cayó sobre un grupo de paraguayos
en un predio ubicado en Campos Morombi, en el departamento de Canindeyú. Once
campesinos que reclamaban una porción de tierra para vivir fueron asesinados. Seis policías
que habían sido trasladados para desalojar a los ocupantes también perdieron la vida. El juicio
por la masacre de Curuguaty, que desembocó en un golpe parlamentario contra el presidente
Fernando Lugo, llega a su tramo final. Para hoy está previsto que se dé a conocer la sentencia
contra los únicos acusados: doce trabajadores rurales. Los fiscales Liliana Alcaraz, Nelson Ruiz
y Leonardi Guerrero pidieron penas de entre cinco y cuarenta años de prisión.
Por pedido de la empresa Campos Morombí, el juez penal de garantías de la ciudad de
Curuguaty, José Benítez, ordenó el 14 de junio de 2012 que se allanara un predio de dos mil
hectáreas, conocido como Marina Kue. La empresa, sin embargo, nunca pudo demostrar
titularidad sobre esas tierras, que habían sido propiedad de la Industrial Paraguaya Sociedad
Anónima, una empresa latifundista de principios de siglo pasado que donó a mediados de los
60 a la dictadura de Alfredo Stroessner. El dictador puso el predio a nombre de la marina
paraguaya porque tenía un proyecto propio de reforma agraria. Campesinos organizados
comenzaron en 2004 a hacer gestiones para acceder al predio. En 2005, el presidente Nicanor
Duarte Frutos firmó un decreto para que las dos mil hectáreas fueran utilizadas para la reforma
agraria.
Delia Ramírez, magister en Ciencias Sociales de la Universidad de General Sarmiento e
integrante del movimiento 138, colectivo de resistencia cultural Paraguay-Argentina, habla de la
masacre de Curuguaty. La organización tomó el nombre del artículo de la Constitución guaraní
que autoriza a los paraguayos “a resistir a los usurpadores” del poder público, “por todos los
medios a su alcance”.
“Cuando ocurrió el juicio a (Fernando) Lugo, nosotros estábamos absolutamente
desorganizados, algunos ni nos conocíamos. Y ahora tenemos una organización que está
convocando a ver la sentencia del lunes en FM La Tribu”, afirma Ramírez, hija de migrantes
paraguayos que llegaron en los 70 a Buenos Aires para radicarse finalmente en Misiones.
Señala que el motor que la empujó a encontrarse con sus compañeros en el espacio público
para empezar a organizarse fue el golpe parlamentario del 22 de junio de 2012 contra el
138
presidente Lugo. El movimiento giró, en un principio, en torno de una organización antigolpista
parecida a algunas de las organizaciones que surgieron en Brasil a partir del impeachment
impulsado contra la presidenta Dilma Rousseff. Con estrategias creativas y desde la migración,
la comunicóloga y sus compañeros buscaron mostrar que estaban observando, participando y
que eran sensibles a la problemática de los campesinos de Curuguaty.
Si bien para los denunciantes el proceso de Curuguaty nunca fue considerado legal y legítimo,
en el último tramo del debate comenzó a entenderse –desde la estrategia de la defensa– que
no era posible anular el juicio: entonces se pidió la absolución de los doce acusados. Con ese
objetivo, y para visibilizar el caso, se lanzó “¡Es tiempo de libertad! Curuguaty #AbsoluciónYa”,
campaña emprendida este año, en el cuarto aniversario de la masacre. Comenzaron a circular
imágenes por las redes, se realizaron spot radiales y una producción audiovisual de la que
participaron, por la representación argentina, el premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel;
Nora Cortiñas, Madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora; el juez de la Corte Interamericana
de Derechos Humanos Raúl Zaffaroni; el periodista Atilio Borón; y el músico Juan Falú.
Por Paraguay fueron convocados los periodistas Leo Rubín y Mercedes “Menchi” Barriocanal,
una mujer muy conocida en el país vecino. Su apoyo a la campaña resultó fundamental. “Si
bien es una persona que tiene mucha sensibilidad, nunca se había comprometido con algo tan
fuerte. Hay mucha gente que tiene miedo de pegarse con esta causa en Paraguay”, sostiene
Ramírez.
–¿A qué se debe ese temor? –pregunta Página/12.
–A la cultura stronista que está muy vigente; la cultura del perseguir al que es diferente, del
anticomunismo acérrimo; de ponerle la etiqueta de terrorista a todo aquel que no es funcional al
juego de la derecha o de un gobierno. Esa lógica que después del golpe se evidenció con toda
furia, con toda expresión. Por eso decimos que somos un movimiento de resistencia cultural,
porque sostenemos que no va a servir de nada que suba el mejor presidente del mundo si la
sociedad sigue pronunciándose y tratando a los otros de esta manera.
–¿Qué elementos ayudaron a moldear esa continuidad en la cultura paraguaya?
–Después de la caída de (Alfredo) Stroessner, con los gobiernos colorados hubo una
impunidad: no hubo juicio y castigo; no hubo un proceso de reparación, de verdad y justicia; de
revisión; de construcción de la memoria y de las memorias populares. Por eso decimos que
para nosotros, en Paraguay, la democracia comienza en 2008.
–¿Qué cambia a partir de ese momento?
139
–Recién ahí es posible revisar cuestiones que tienen que ver, más que nada, con la
institucionalidad, con la posibilidad de conquista de derechos de determinados sectores
sociales que toda la vida estuvieron vedados. No voy a decir que se rompió ese sistema de
privilegios que continuó después de la caída de la dictadura, pero estaba siendo observado,
cuestionado. En realidad, el Partido Colorado, en el momento que pierde, es por una crisis de
legitimidad y una crisis al interior del partido. Conflictos que terminaron favoreciendo el ascenso
de Fernando Lugo en 2008, y que no se pudo sostener. En el caso Curuguaty, como en el
gobierno de Nicanor (Duarte Frutos) y de (Horacio) Cartes es fundamental entender que las
clases dominantes están compuestas por una oligarquía ganadera-exportadora, y que son ellas
las que deciden los destinos del país. En Paraguay ni siquiera se puede hacer un censo para
saber quién tiene qué cosa.
–Esa oligarquía anida en sectores que tuvieron un rol fundamental en la caída del
presidente Lugo y que hicieron buenas migas con la dictadura stronista.
–Hay una cantidad de títulos fraudulentos que tienen los mismos empresarios que se han
favorecido por los regalos de Stroessner. Si sumamos los títulos de quienes dicen ser
propietarios de la tierra, Paraguay tendría un 30 por ciento más de su superficie. Lo que ha
ocurrido es lo que llamamos la acumulación escandalosa: no ha habido un proceso de
reparación, ni de distribución ni de revisión de la condición de esas tierras. Los empresarios no
quieren la regularización de esos títulos. En el momento en el que se quisieron tocar esos
intereses, el resultado fue el golpe parlamentario.
Algunas cifras sobre uso y acceso a la tierra. Ramírez afirma que si durante el gobierno de
Fernando Lugo se daba un evento transgénico, con el gobierno de Horacio Cartes son más de
diez. Según estadísticas de la Federación Nacional Campesina guaraní, 300 mil campesinos
no cuentan con terrenos para cultivar en Paraguay. Menos del 3 por ciento de los paraguayos
es dueño del 85 por ciento de la tierra. Curuguaty puso también otro tema en agenda: la
conflictividad social derivada de la lucha por la tierra. Para la Coordinadora de Derechos
Humanos de Paraguay (Codehupy), desde la caída de Stroessner hasta la actualidad, al
menos 117 referentes campesinos fueron asesinados o desaparecidos. Ninguno de esos
crímenes fue esclarecido por la Justicia.
Jalil Rachid, funcionario que se desempeñó como fiscal de la causa Curuguaty desde sus
inicios hasta que fue nombrado viceministro de Seguridad en el gobierno de Horacio Cartes, es
hijo de Bader Rachid Lichi, abogado, empresario y ex senador colorado, amigo personal de
Blas Riquelme, supuesto propietario que pidió el desalojo de las tierras, operativo policial que
desembocó en las diecisiete muertes. En un texto difundido al conocerse el desembarco del ex
fiscal en el gabinete de Cartes, el Frente Guasú, partido que llevara a Lugo a la presidencia,
señaló: “Hoy este mismo personaje es nombrado como viceministro de Seguridad, y los
140
policías que tienen que dar su testimonio en la causa, como pruebas del Ministerio Público,
serán subordinados directos del Señor Jalil Rachid, desde su nuevo cargo como autoridad de
seguridad del Poder Ejecutivo”. Ramírez asegura que hay relaciones muy íntimas entre el
actual gobierno y los responsables de investigar la masacre de Curuguaty. “Rachid estuvo
cuatro años a cargo de la causa y luego Cartes lo lleva como funcionario. Es un signo claro de
reconocimiento. ‘Gracias, cumpliste. Ahora te vas a otro lugar donde vas a estar más
tranquilo’,” sostiene la militante del movimiento 138.
Con la salida de Rachid del Ministerio Público, Liliana Alcaraz se hizo cargo de la Fiscalía y
pidió penas de hasta 40 años para Rubén Villalba, dirigente territorial del Partido Comunista.
Se lo acusó de usar su ideología para manipular a los campesinos; de arrearlos; de practicar el
comunismo, algo que está en su mente, en su ADN. Para las mujeres pidió ocho años de
prisión. Por estar con sus bebés en brazos, fueron acusadas de encubrimiento. “El simple
hecho de ser mujer y de tener un hijo te convierte en una encubridora, una criminal. Es una
lógica machista propia de una fiscala mujer. Eso también es stronismo”, dispara Ramírez.
–¿Por qué?
–La figura del gobierno de Stroessner es sumamente patriarcal, donde el gran hombre
aseguraba todos los beneficios de la población. Además de ir a todas las recepciones de quinto
año del país, Stroessner pedía listados de persecución a homosexuales. Eran operativos muy
macabros. Son una serie de lógicas perversas, de persecución y de no consideración y
reconocimiento al otro, que es diferente. Eso es el stronismo. Es la matriz que quedó
enquistada en la sociedad paraguaya, que es profundamente homofóbica. Las mujeres de la
Conamuri (Coordinadora Nacional de Organizaciones de Mujeres Trabajadoras Rurales e
Indígenas), los estudiantes, los campesinos organizados, los movimientos homosexuales de
gays, lesbianas y travestis, muchas organizaciones tratan de desarmar esa lógica que lo que
produce es sufrimiento.
–¿Cuáles son las expectativas de su organización respecto del desenlace del juicio?
–Nosotros, como militantes, siempre vamos a ser optimistas. Siempre vamos a esperar, desear
y soñar la libertad de nuestros compañeros y nuestras compañeras. Y aunque así no se
produzca, vamos a seguir comprometidos hasta que el último esté en libertad. La realidad es
que en el juicio a Fernando Lugo no se respetó ninguna de las garantías del derecho. ¿Qué
pueden esperar los campesinos o cualquiera de nosotros si esa es la forma en la que se
maneja la justicia paraguaya? Es la justicia del mbareté (“hombre fuerte”, en guaraní), del más
fuerte, del que se impone por la fuerza, por la violencia. Es una valoración positiva, del sentido
común, vinculada a los hombres. Pero a veces es una figura que estigmatiza, porque el que no
tiene fuerza, no tiene lugar, no tiene espacio, ni derechos. A partir del martes, nuestro discurso
141
va a cambiar. Hace cuatro años que venimos con la misma causa. Estamos ante un escenario
que nos llena de incertidumbre, pero a la vez nos entusiasma bastante.
–Además de dar difusión al caso Curuguaty, ¿qué otros objetivos persigue el
movimiento 138?
–Nuestra lucha es contra el stronismo, que está dentro y fuera del Paraguay. Un obrero de la
construcción que viene a Buenos Aires, trabaja, llega a su casa y golpea a su mujer, mantiene
esa matriz autoritaria, de opresión, que aprendió en su casa. El objetivo de la organización es
trabajar por la erradicación del stronismo en los diferentes niveles. El stronismo está vigente en
el espacio judicial cuando un juez falla en un desalojo absolutamente irregular a favor de un
sojero stronista. En el ámbito político, cuando el nieto de Stroessner se reivindica en el
Parlamento como heredero de los ideales de su abuelo. A principio de su gobierno, Cartes lo
proponía como representante de Paraguay en la ONU. En lo económico, desde Stroessner y
hasta la fecha, lo único que se ha hecho fue concentrar. Stroessner regaló un montón de tierra
a sus amigos y esa matriz de desigualdad, que tiene como elemento fundamental la tierra, fue
profundizada. La violación de los derechos humanos del stronismo y poststronismo se entiende
por los conflictos vinculados con la tierra.
¿Qué pensadores definirán nuestro futuro?
http://nuso.org/articulo/que-pensadores-definiran-nuestro-futuro/
El antiguo orden no acaba de morir y no lo hará fácilmente. ¿Con qué pensadores debemos
contar para mirar al futuro?
Por J. Bradford DeLong
Julio 2016
Hace varios años, se me ocurrió plantear que todos los politólogos contemporáneos están
parados sobre los hombros de gigantes como Nicolás Maquiavelo, John Locke, Adam Smith,
Alexis de Tocqueville, Max Weber y Émile Durkheim. Algo que todos ellos tienen en común es
que su principal foco era la composición social, política y económica del mundo europeo
occidental entre 1450 y 1900. Lo que equivale a decir que ofrecen un kit de herramientas
intelectuales para analizar, digamos, el mundo occidental de 1840, pero no necesariamente el
mundo occidental de 2016.
¿Qué se enseñará en los cursos de teoría social de 2070, por ejemplo? ¿Qué canon –ya escrito
o por escribirse– desearán haber utilizado al inicio de sus carreras profesionales, a fines de la
década de 2010, quienes las estén terminando en los años 2070?
Después de darle vueltas a este interrogante en los últimos años, reduje mi elección a los
escritos de tres personas: Tocqueville, que escribió en los años 1830 y 1840, John Maynard
Keynes, que escribió en los años 1920 y 1930, y Karl Polanyi, que escribió en los años 1930 y
1940.
Las preocupaciones centrales de Keynes para su época hoy suenan sinceras. Le preocupaba la
fragilidad de nuestra prosperidad colectiva y las graves tensiones entre el nacionalismo y las
actitudes cosmopolitas desarraigadas que apuntalan una sociedad global pacífica y floreciente.
Se centraba en cómo organizar nuestras actividades y usar nuestra prosperidad para crear un
mundo apto para la buena vida. Quería exponer la bancarrota de panaceas ideológicas en
ascenso: el laissez-faire, el orden espontáneo, la cooperación colectiva, la planificación central.
142
Y pensaba profundamente en los problemas tecnocráticos de la gestión económica –y en los
desastres sociales, morales y políticos que resultarían si no se intentaba resolverlos.
Después de la Segunda Guerra Mundial, los problemas que preocupaban a Keynes pasaron a
segundo plano, en tanto una prosperidad renovada en Occidente llevó a muchos a creer que
se habían solucionado de manera permanente. Inclusive durante la estanflación (crecimiento
lento y precios en aumento) en los años 1970, se decía que el problema era una
extralimitación socialdemócrata, no algún defecto fundamental en la economía política de
Occidente.
Ese argumento allanó el camino para que la primera ministra británica Margaret Thatcher y el
presidente norteamericano Ronald Reagan redujeran el papel económico del Estado y dieran
rienda suelta a las fuerzas de mercado. La corrección de Thatcher-Reagan fue un éxito
incuestionado entre las clases adineradas que prosperaron a partir de ahí. Creó un consenso
ideológico que dominaría la esfera pública de 1980 a 2010.
La prosperidad de posguerra también eclipsó los problemas centrales que Polanyi trataba de
resolver en los años 1930 y 1940. Polanyi aceptaba que una sociedad de mercado podía en
verdad generar mucha prosperidad material, pero le preocupaba que sólo pudiera hacerlo si
convertía a las personas en marionetas y juguetes de fuerzas de mercado irracionales.
También le preocupaba que la gente no se adaptara bien a este nuevo rol. El objetivo, para
Polanyi, era alcanzar la prosperidad que genera una economía de mercado, sin sufrir los
riesgos de pobreza, destrucción creativa y erosión comunitaria que conlleva la operación de las
fuerzas de mercado.
Polanyi esencialmente advertía que si el orden burgués moderno fracasaba en esta tarea, los
movimientos políticos autoritarios y totalitarios resultarían beneficiados. Durante el período
de posguerra, el argumento de tiempos de vacas gordas, según el cual la prosperidad
impulsada por el mercado justifica cualquier sufrimiento social colateral, fue dado como un
hecho. También llegó a definir la opinión consensuada entre la clase adinerada y sus
partidarios ideológicos.
Esto nos lleva a Tocqueville, que escribió hace casi dos siglos, pero cuyas preocupaciones
centrales nunca desaparecieron. Tocqueville se centraba en las consecuencias de la
destrucción de la casta como un principio de orden social y político. Todas las grandes castas –
desde los nobles de la espada y los nobles de la toga, supuestamente fráncicos, hasta los
comerciantes protoburgueses y los villanos galo-romanos– conferían a sus miembros
pequeñas libertades y una dosis de autonomía personal a cambio de obligaciones para con el
Estado. (Y, por supuesto, cuanto más baja la condición social, mayores las obligaciones).
Tocqueville veía que este mundo ordenado de manera estricta estaba siendo reemplazado por
la democracia y una igualdad social formal, en la que todos serían igualmente libres, pero
también estarían a merced de la sociedad por igual. En este nuevo contexto, ningún privilegio
o libertad servía de protección si uno no encontraba una contraparte en el mercado o se
enfrentaba a la tiranía de la mayoría, o simplemente buscaba alguna suerte de dirección en su
intento por decidir quién se suponía que era.
En el mundo de Tocqueville, la destrucción de la casta era sólo parcial. El escribía para
hombres blancos que conocían su nacionalidad, que sabían lo que significaba pertenecer a una
casta y que conocían los privilegios de esa pertenencia.
En nuestro tiempo, la destrucción de la casta y el privilegio de las castas están dando otro paso
hacia adelante. El período del dominio político de los machos blancos en las democracias
occidentales está llegando a su fin. Y lo hace en un momento en el que el populismo
económico está sustituyendo a la gestión tecnocrática, y en el que muchas veces los machos
blancos se vuelcan al nativismo en respuesta a la destrucción de sus empleos y estilos de vida a
manos de las fuerzas impersonales de la globalización.
Como podemos ver siglo tras siglo, el antiguo orden no se rendirá sin presentar pelea. Ningún
antiguo orden lo hace. Pero el privilegio de casta de los machos blancos está predestinado al
fracaso. El desafío al que nos enfrentamos ahora es cómo materializar mejor las nuevas
143
oportunidades a nuestro alcance para el mejoramiento humano, en beneficio de todos. No se
me ocurren muchas guías más útiles para ese desafío que Keynes, Polanyi y Tocqueville.
Debilidades de izquierda y ascensos neoconservadoresExplicaciones para el
declive del progresismo
http://nuso.org/articulo/debilidades-de-izquierda-y-ascensos-neoconservadores-nuevo/
La llegada al poder de los neoconservadores se explica, en buena medida, por problemas
propios de los progresismos y las izquierdas.
Por Esteban De Gori
Julio 2016
El triunfo de Macri en las elecciones presidenciales argentinas del año 2015 produjo una onda
expansiva sobre la región. Sin embargo, la política muestra que el de la irreversibilidad es solo
un mito. El «sí se puede», coreado por los adherentes deCambiemos como por los propios
candidatos, se convirtió en un impulso para erosionar las miradas continuistas y para
desinstalar políticas públicas anteriores. Y, pese a su voluntad, Macri se transformó en un
referente regional para espacios neoconservadores lanzados a confrontar con los gobiernos
progresistas. «Más Macri, menos Maduro», indicaban algunas pancartas de manifestantes
brasileños meses atrás. La propia Lilian Tintori –esposa del dirigente opositor venezolano
Leopoldo López– participó en el festejo electoral de Macri. La regionalización de la victoria
macrista permitió la resignificación de otros sucesos, como la derrota del chavismo en las
elecciones legislativas, la de Evo Morales en su referéndum y el acceso de Temer a través de
un impeachment contra Dilma Rousseff. Pero lo que parece una «bola de nieve» no responde
ni a un camino necesario ni a un «viento de cola» del neoconservadurismo regional, sino a
dilemas o contrariedades generales que han atravesado a todos los gobiernos y,
principalmente, a aquellos que buscaron ampliar los horizontes de bienestar. Tampoco
debemos restar importancia a la acción política de los espacios neoconservadores que han
logrado interpretar más eficazmente las transformaciones sociales, económicas y subjetivas de
los últimos años que los propios progresismos desde el poder. Recordando a Wright Mills, es
dable afirmar que tuvieron una imaginación sociológica más potente al «calibrar» mejor al
individuo en el conjunto de transformaciones que la posmodernidad y la globalización habían
introducido. Aprovecharon el impacto fiscal sobre los gobiernos progresistas que trajo la
reducción de los precios de los commodities y del petróleo, ciertas políticas públicas que
erosionaron el apoyo ciudadano y, fundamentalmente, lo que denominaría una
desestabilización del precario equilibrio entre el Estado y la globalización, así como entre el
orden estatal y el individuo, que los mismos progresismos habían logrado antes de la crisis
internacional.
En definitiva, los neoconservadores parecen haber construido una lectura más aguda sobre las
transformaciones operadas en la subjetividad tras el ciclo posneoliberal. Comprendieron –
sobre todo, en su pugna por acceder al poder–el impacto de las transformaciones globales y
posmodernas en las ciudades latinoamericanas, así como las crisis que estas provocaron en los
gobiernos. En términos generales, es posible indicar que los gobiernos progresistas hicieron,
tomando el concepto de Daniel Bensaïd, una «apuesta melancólica» por la modernidad, por el
Estado-nación, por sus memorias y sus relatos. Intentaron resolver la disminuida capacidad de
sus Estados para establecer medidas económicas con cierta autonomía –frente a las
corporaciones y al capital financiero global– y acrecentar políticas públicas que integren a
individuos que en sus GPS imaginarios reconocían la derrota del comunismo y de los Estados
de Bienestar.
La reactualización del soberanismo (nacional, popular y estatal) en el espacio progresista
sudamericano se intentó expresar en políticas concretas: la apropiación de la renta por parte
de los Estados para establecer una mayor distribución y el pago de las obligaciones con el
Fondo Monetario Internacional, la ampliación del consumo como una suerte de «pasaporte» a
144
la expansión de derechos sociales y civiles y la instalación de un vocabulario que ponía en el
escenario la idea de pueblo, las memorias bienestaristas o revolucionarias. Las viejas derrotas
políticas fueron transformadas en victorias discursivas para fundamentar un nuevo rumbo
político.
Pero tal vez la máxima expresión de esta reactualización soberanista fue el intento de
«romper» las rutinas y legitimidades de la estructura económica latinoamericana,
fundamentada en una alianza policlasista. Las clases medias, los sectores populares y una
parte del empresariado construyeron y sostienen esa estructura y se socializan en ella. El
imaginario industrialista y neodesarrollista habitó las agendas económicas del progresismo
latinoamericano, aún cuando la economía acabara en un proceso de reprimarización y
transnacionalización. Por tanto, las grandes promesas de reparación debieron ser
administradas entre la tensión que suscitaba el neodesarrollismo y el peso de las rutinas
históricas, siempre avalado por el mercado mundial. Nunca existió –y esta fue una interesante
lectura interna del progresismo– un «margen» real de libertad o de posibilidad para salir de
esta tensión en este contexto global.
Los gobiernos intentaron plantear una hoja de ruta moderna en un territorio posmoderno y
establecieron así una disputa hacia el interior de los Estados, así como con otros gobiernos e
instituciones internacionales. El gran logro de estas ingenierías gubernamentales –dirigidas por
Néstor Kirchner, «Lula» da Silva, Hugo Chávez, Evo Morales, Pepe Mujica y Rafael Correa–fue
una suerte de equilibrio precario con la globalización. Incluso, este equilibrio tuvo cierta
legitimación y apoyo en una «rentabilidad» para todos los actores sociales (empresarios,
trabajadores formales e informales), y contribuyó a una suerte de pax romana y a un
continuismo ganador. Pero esto no se mantendría por mucho tiempo. El pacto saltaría por los
aires no bien se hicieran presentes la crisis financiera de 2008 y la reducción del precio de
loscommodities y del petróleo.
Sin embargo, no existió un solo pacto. Al provisorio equilibrio entre Estado y globalización, le
siguió otro entre el orden estatal y el individuo. Las izquierdas y los progresismos llevaron
adelante una «operación durkheimiana». Intuyeron que de la crisis neoliberal podía salirse
reestructurando dicho vínculo, tonificando el lazo entre el individuo y el Estado a partir de una
propuesta gubernamental y económica en la que uno y el otro acrecentasen sus capacidades.
Que el Estado ganase en «soberanismo» frente al «mundo» y a su sociedad, y que el individuo
ganase en capacidades de consumo y de acceso a lo público. Pero la estatalidad
latinoamericana no resistió el embate. La crisis de 2008 le recordó su histórica posición en el
mercado internacional y lanzó a esos ciudadanos a exigir la realización de su propia
posmodernidad e individuación. El consumo –disparado por los propios gobiernos
progresistas– se volvió un derecho civil, una forma de presentarse en la ciudad (gusto, estatus
y distinción) y de mostrar sus distancias y semejanzas con otras clases. A su vez, el consumo
reactualizó la potente cultura política liberal de nuestra región. El «individuo» consumió la
política progresista –como modelo societal que le ofrecía la clase política y como practica
erosiva– con la misma virulencia que lo hicieron las presiones corporativas. La crisis descolocó
al Estado y a los individuos. Los puso en un nuevo lugar y los gobiernos progresistas no
supieron qué hacer ante este suceso. La respuesta moral los atravesó. Los nuevos reclamos y la
sustracción de adhesión política fue interpretada, en diversas ocasiones, de manera reactiva.
«Egoístas», «desconsiderados», «llegaron a clase media y se volvieron conservadores»; estas
fueron algunas de las expresiones empleadas, en las que no faltó la declaración de «traidores».
Caídas las garantías iniciales, el individuo se rebeló (reveló) en su propia condición
posmoderna. Sin barreras. Y como «emprendedor de sí mismo» –como advierte Wendy
Brown–, arremetió contra el Estado, contra la política y contra lo público. Mientras dominaban
la explicación moral y la búsqueda de los culpables internos, los espacios neoconservadores
«tocaban timbre». Iban en búsqueda del individuo y de su potente eticidad: cálculo económico
y más vida.
145
Tres pasos hacia una antropología histórica del neoliberalismo real
Autor(es): Wacquant, Loïc
http://www.herramienta.com.ar/revista-herramienta-n-49/tres-pasos-hacia-una-antropologiahistorica-del-neoliberalismo-real
Wacquant, Loïc . Profesor en la Universidad de California, Berkeley, e investigador en el
Centro europeo de sociología y ciencias politicas de París. Premio MacArthur Fellow, es autor
de numerosos trabajos sobre desigualdad urbana, dominación etno-racial, el estado penal, y
la teoría social, traducido a mas de una docena de idiomas. Algunos de sus libros en español
son: Entre las cuerdas. Cuadernos etnográficos de un aprendiz de boxeador (Siglo 21, 2004),
Repensar los Estados unidos (Anthropos, 2005), Una Invitación a la sociología reflexiva (con
Pierre Bourdieu, Siglo XXI, 2005), El misterio del Ministerio. Pierre Bourdieu y la Política
Democrática (Gedisa, 2005), Los Condenados de la ciudad. Gueto, periferias, Estado (Siglo
XXI, 2007), Las dos caras de un gueto (Siglo XXI, 2009), un Castigar los Pobres. El Gobierno
neoliberal de la Inseguridad social (Gedisa, 2010) y Las Cárceles de la miseria (Manantial,
nueva edición ampliada de 2011). Informamos a los lectores que el sitio web:
http://loicwacquant.net/ tendrá proximamente una versión en español.
(english version)
La antropología del neoliberalismo se ha polarizado entre un modelo económico hegemónico
anclado por variantes del dominio del mercado y un enfoque insurgente, alimentado por
derivaciones del concepto foucaultiano de gubernamentalidad. Ambas concepciones
oscurecen qué es lo “neo” del neoliberalismo: el rediseño y redespliegue del estado como el
actor central que impone las leyes y construye las subjetividades, las relaciones sociales, y
las representaciones colectivas adecuadas para hacer realidad los mercados. Basado en dos
décadas de investigaciones de campo en la estructura, en la experiencia, y en el tratamiento
político de la marginalidad urbana en la sociedad avanzada, propongo una vía media entre
estos dos enfoques, que interpreta al neoliberalismo como una articulación del estado, el
mercado y la ciudadanía que emplea al primero para imponer el sello del segundo sobre la
tercera. El concepto de campo burocrático de Bourdieu nos ofrece una herramienta poderosa
para diseccionar la renovación del estado como un aparato de estratificación y clasificación
conduciendo la revolución neoliberal desde arriba y sirve para proponer tres tesis: 1) el
neoliberalismo no es un régimen económico sino un proyecto político de creación de un
estado que ponga al “workfare” disciplinario, el “prisonfare”[1] neutralizador y la
“responsabilidad individual” al servicio de la mercantilización; 2) el neoliberalismo implica
una inclinación derechista de las agencias burocráticas que definen y distribuyen los bienes
públicos y genera un estado-centauro que practica el liberalismo en la cumbre de la
estructura de clases y el paternalismo punitivo en base; 3) el crecimiento y la glorificación
del ala penal del estado es un componente integral del Leviatán neoliberal, de modo que en
la antropología política del dominio neoliberal se deberá introducir a la policía, los tribunales
y las cárceles.
146
Hace unos veinte años emprendí una serie de investigaciones de campo en la estructura, en
la experiencia, y en el tratamiento político de la pobreza urbana en la sociedad avanzada,
centrada en la suerte del gueto negro americano luego del reflujo del movimiento por los
derechos civiles y en la transferencia de las periferias de la clase obrera de la metrópolis
europeas occidentales, como se ilustra con la decadencia de las banlieues del “cinturón rojo”
de Francia, bajo la presión de la desindustrialización. Llevé a cabo un estudio etnográfico en
medio de una verdadera desolación del histórico lado sur de Chicago y en los difamados
proyectos habitacionales de La Courneuve, con el telón de fondo del paisaje dualizador de la
periferia parisiense. Y desplegué las herramientas de la comparación analítica para
desentrañar el surgimiento de un nuevo régimen de “marginalidad avanzada”, impulsado por
la fragmentación del trabajo asalariado, el retroceso del estado social, y la propagación de la
estigmatización territorial. No tenía entonces la menor idea de que esta investigación sobre
la situación verdaderamente crucial de los Los Condenados de la Ciudad del nuevo siglo
(Wacquant, 2008a) me llevaría desde las calles del hipergueto al interior profundo de las
entrañas del gargantuesco sistema carcelario de Norteamérica y de ahí a la controvertida
cuestión del neoliberalismo y la creación del estado a una escala global (Wacquant, 2009a).
En este texto vuelvo sobre mis pasos resumidamente en este recorrido intelectual desde la
micro-etnografía de los empleos precarios postindustriales hacia la macro-sociología del
Leviatán neoliberal a principios del siglo XXI para proponer las tesis de una antropología
histórica del neoliberalismo realmente existente.
Para elucidar las determinaciones y modalidades de la relegación en las metrópolis
americanas a fines del siglo XX, tuve que hallar la solución para dos importantes obstáculos
epistemológicos: el mito académicamente coaligado de la “underclass”, esa nueva
subcategoría de los negros pobres que supuestamente asolarían el centro la ciudad, y la
antigua retórica de la “desorganización” heredada de la escuela ecológica de la sociología
urbana (ver Wacquant, 1996 y 1997 para críticas detalladas de estos dos conceptos). Para
eludirlos, llevé a cabo un trabajo de campo sobre las estrategias de vida de jóvenes
afroamericanos en Woodlawn, un sector de los vestigios del “Bronzeville” de Chicago (Drake
and Cayton [1945], 1993). Mediante una serie de circunstancias narradas en otros lugares,
ingresé a un gimnasio de box local, aprendí el arte del boxeo profesional, y utilicé el club
como trampolín para aventurarme en el vecindario (Wacquant, [2000] 2004) y reconstruí mi
comprensión del gueto desde la base y desde adentro.[2]
Estudiando las historias de vida de mis compañeros del cuadrilátero, pronto descubrí que
casi todos ellos habían pasado por la cárcel, de modo que, para explicar sus trayectorias,
tuve que comprender el “gran salto penal hacia atrás” que transformó a los Estados Unidos,
que era un modelo del penalismo progresivo durante la década de 1960, en el campeón
mundial de la encarcelación y exportador mundial de las políticas de control agresivo de la
delincuencia hacia la década de 1990 (Wacquant, 2009b). Describiendo el auge carcelario de
Norteamérica luego de 1973, se evidenció que el acelerado retroceso del bienestar social,
que llevaría a la tristemente célebre “reforma del bienestar” de 1996, y la explosiva
expansión de la justicia penal, donde dos cambios hacia la regulación punitiva de la pobreza
racializada convergentes y complementarios; el workfaredisciplinario y el prisonfare punitivo
vigilan a las mismas poblaciones desposeídas y desahuciadas, desestabilizadas por la
disolución del pacto fordista-keynesiano y concentradas en los barrios menospreciados de la
147
ciudad polarizadora; y que poniendo a las fracciones marginadas de la clase obrera
postindustrial bajo un tutelaje severo guiado por el conductismo moral ofrece un escenario
teatral principal en el que las elites gobernantes pueden proyectar la autoridad del estado y
apuntalar el déficit de legitimidad que sufren cada vez que abandonan las encomendadas
misiones de protección social y económica.
Esto se confirmó en los noventa, cuando a lo largo de Europa Occidental un gobierno de
izquierda tras otro elevó a la lucha contra el delito callejero al rango prioritario nacional en
las mismas zonas urbanas donde la inseguridad social y la contaminación espacial se iban
profundizando al ritmo de la normalización de la desocupación y el empleo precario.
Siguiendo las trayectorias internacionales de la vigilancia de “tolerancia cero” y las diversas
consignas y panaceas penales “made in USA” (la llamada teoría de las ventanas rotas,
sentencias mínimas obligatorias, campos de reclutamiento militar para delincuentes
juveniles, negociaciones extrajudiciales, para que el acusado acepte cierto grado de
culpabilidad a cambio de no ser juzgado por un delito más grave, etc.) revelaron un modelo
característico de propagación sucesiva y una interconexión funcional por la que las políticas
de desregulación económica, workfare vigilado, y una justicia penal punitiva, tienden a
caminar y florecer juntas (Wacquant, 2011). En suma, la penalización de la pobreza surgió
como un elemento central para implementar localmente y propagar a través de las fronteras
al proyecto neoliberal; el “puño de hierro” del estado penal asociándose con la “mano
invisible” del mercado, mientras se erosiona la red de seguridad social. Lo que comenzó
como una investigación en las duras condiciones cotidianas del sector del empleo urbano
precario a nivel básico en el área céntrica y degradada de Chicago y las afueras de Paris
terminó de este modo con el enigma teórico del carácter y de los elementos constituyentes
del neoliberalismo a escala planetaria.
Dominio del mercado versus gubernamentalidad
Esta peregrinación intelectual, entonces, ¿cómo nos sugiere que manejemos la categoría
escurridiza, confusa y polémica del neoliberalismo, a la que algunos de sus más sagaces
analistas llaman un “concepto tramposo”, buscando ansiosamente una especificidad y
legitimidad analíticas?[3] Mientras que Hilgers (2011) define la antropología del
neoliberalismo como configurada tríadicamente por los enfoques culturales, de
gubernamentalidad y sistémicos (ver también Hoffman et al. [2006] y Richland [2009] para
descripciones alternativas), yo la considero como polarizada entre una concepción económica
hegemónica anclada por variantes (neoclásicas y neo-marxistas) del dominio del mercado,
por un lado, y un enfoque insurgente alimentado por derivaciones libres del concepto
foucaultiano de gubernamentalidad, por el otro. Estas dos concepciones han generado
programas de investigación ricos y productivos, pero sufren de defectos paralelos: el primero
es excesivamente estrecho, despojado de instituciones, y raya en lo apologético cuando
acepta al discurso del neoliberalismo tal como aparenta ser; el segundo es abiertamente
amplio y promiscuo, superpoblado por instituciones que proliferan, todas aparentemente
infectadas por el virus neoliberal, y tiende hacia el solipsismo crítico. Para el primero, el
neoliberalismo es la imposición lisa y llana de la economía neoclásica como el modo supremo
de pensar y el mercado como el artilugio óptimo aunque inflexible para organizar todos los
intercambios (por ej., Jessop 2002, Saad-Filho y Johnston 2005); para el último, es una
racionalidad política maleable y mutable que se asocia con muchas clases de regímenes y se
148
insinúa en todas las esferas de la vida, sin que haya ningún fundamento firme exterior sobre
el cual oponerse a ella (por ej., Barry y Osborne 1996, Brown 2005). Curiosamente, estas
dos concepciones coinciden en oscurecer qué es lo “neo” en el neoliberalismo, es decir,
la recreación y redespliegue del estadocomo la institución central que crea las
subjetividades, las relaciones sociales y las representaciones colectivas adecuadas para
hacer real y relevante la ficción de los mercados.
El dominio de la concepción económica (no economicista) del neoliberalismo está bien
probada (por ejemplo Campbell and Pedersen, 2001; Edelman/Haugerud, 2005; Gamble,
2006; Cerny, 2008). Para la vasta mayoría, de los defensores como de los críticos, el
término designa al renaciente “imperio del capital”, para evocar el título de Ellen Meiksins
Wood (2005), una reconstrucción materialista histórica de la sucesión de proyectos de origen
territorial, comerciales y capitalistas del dominio imperial, siendo lo característico de este
último que busca imponer los imperativos del mercado no sólo en todos los territorios, sino
también en todas las actividades humanas. Esta visión soberana iguala al neoliberalismo con
la idea del “mercado autorregulado”, y define al estado como encerrado en una relación
enfrentada y equilibrada con él. Lógica e históricamente, la llegada del “fundamentalismo de
mercado” implica la reducción de gastos, la retirada o la impugnación del estado, descrito
como un impedimento para la eficiencia o como un mero instrumento que sirve para
estimular la recuperada supremacía del capital. De este modo, de acuerdo a Colin Crouch
(1997), la simultánea disminución de la clase obrera manual, el ascenso del capital
financiero, la propagación de nuevas tecnologías de comunicación, y la liberalización de los
movimientos económicos a través de las fronteras nacionales han abierto las puertas a una
“forma de capitalismo cortoplacista y de mercado puro, libre de restricciones”. Las
emergentes “condiciones del consenso neoliberal” incluyen el “abandono universal de las
políticas keynesianas” y provocan “el vaciamiento del estado y la privatización cada vez
mayor de sus funciones”. En forma similar, para David Harvey (2005: 3-4), “el
neoliberalismo es en primer lugar una teoría de las prácticas económico-políticas que afirma
que el bienestar humano puede lograrse mejor liberando las libertades y habilidades
empresariales individuales en una estructura institucional caracterizadas por poderosos
derechos a la propiedad privada, los mercados libres y el comercio libre. El papel del estado
es crear y preservar una estructura institucional apropiada para dichas prácticas”. El giro
hacia el neoliberalismo implica la combinación trinitaria de la “desregulación, la privatización
y la retirada del estado de muchas áreas de prestaciones”. En la práctica, los estados sólo se
desvían de las pautas doctrinarias del “gobierno pequeño” para alentar un clima favorable a
los negocios para los esfuerzos capitalistas, para custodiar las instituciones financieras, y
para reprimir la resistencia popular a la ofensiva neoliberal hacia la “acumulación por el
despojo”.
Gran parte de la antropología del neoliberalismo consiste en trasladar este esquema a
distintos países a lo largo del mundo o en llevarlo a la escala continental para controlar los
aparatos culturales del (y las reacciones sociales contra el) dominio del mercado (por
ejemplo, Comaroff/Comaroff, 2001; Greenhouse, 2009). América Latina es un lugar favorito,
seguido por los países del antiguo bloque soviético y de África. En su generalizador relato de
“África en el orden mundial neoliberal”, James Ferguson (2006: 11) caracteriza como de
costumbre al neoliberalismo como la retracción del estado en forma simultánea con la
149
ampliación del mercado: “Coincidiendo con la filosofía económica del ‘neoliberalismo’, se
predicaba que la eliminación de las ‘distorsiones’ estatales de los mercados crearían las
condiciones para el crecimiento económico, mientras que la rápida privatización provocaría
una afluencia de nuevas inversiones de capital privado”. Aquí la idea es sinónimo de las
medidas económicas de “ajuste estructural” “que supuestamente harán retroceder a los
estados opresivos y despóticos y liberarán a una nueva y vital ‘sociedad civil’ que será más
democrática y económicamente más eficiente” (Ferguson, 2006: 38-39). Se trata de un
término encubierto que se refiere a los cambios sociales acarreados, a la resistencia popular
y a las adaptaciones cotidianas a la austeridad y a los programas privatizadores conocidos
también como “el consenso de Washington” (Williamson, 1993).
Contra esta visión “nítida” del neoliberalismo como un todo coherente, si no monolítico, los
estudiosos de la gubernamentalidad ofrecen una visión “desordenada” del neoliberalismo
como un conglomerado fluido y flexible de ideas calculadoras, estrategias, y tecnologías, con
el objeto de influenciar a las poblaciones y las personas.[4] Bajo esta óptica, el
neoliberalismo no es una ideología económica ni una propuesta política sino una
“normatividad generalizada”, una “racionalidad global” que “tiende a estructurar y organizar,
no sólo las acciones de los que gobiernan, sino también la conducta de los mismos
gobernados” y hasta su auto-imagen de acuerdo a los principios de la competencia, la
eficiencia y la utilidad (Dardot/Laval, 2007: 13). Los académicos de la gubernamentalidad
insisten en que los mecanismos de dominio no están localizados en el estado sino que
circulan a lo largo de la sociedad, así como a través de las fronteras nacionales. En
consecuencia, trabajan transversalmente para rastrear la propagación y la concatenación de
las técnicas neoliberales para “conducir conductas” a través de los múltiples sitios de
autorrealización, incluyendo el cuerpo, la familia, la sexualidad, el consumo, la educación, las
profesiones, el espacio urbano, etc. (Larner 2000). También les gusta mucho destacar la
contingencia, la especificidad, la multiplicidad, la complejidad y las combinaciones
interactivas (calificadas de maravillosas por el latiguillo (que parece deleuziano) de
“assemblages”): no hay un Neoliberalismo con N mayúscula sino una cantidad indefinida de
neoliberalismos con n minúscula nacidos de la hibridación en curso de prácticas e ideas
neoliberales con las condiciones y formas locales. Este enfoque es llevado a un extremo por
Aihwa Ong en su influyente serie de ensayos sobre Neoliberalism as Exception en el este
asiático, en el que ella sugiere “estudiar el neoliberalismo no como una ‘cultura’ o una
‘estructura’ sino como técnicas móviles y calculadoras de gobierno que pueden ser
descontextualizadas de sus fuentes originales y re-contextualizadas en constelaciones de
relaciones mutuamente constitutivas y contingentes” (Ong 2007: 13).
La tendencia analítica a extenderse más allá del estado y pasar por encima de los dominios
institucionales es fructífera, como lo es la idea de que la neoliberalización es un proceso
productivo, más que sustractivo, que se extiende desde la economía. Pero localizar este
proceso en la migración de tecnologías “maleables” de conducta que son “realineadas” y
“transformables” constantemente mientras se desplazan es algo problemático.
Primeramente, no está claro qué hace una tecnología de conducción neoliberal: ciertamente,
esas técnicas burocráticas como la inspección, los parámetros de desempeño, y puntos de
referencia (favoritos de la antropología neo-foucaultiana del neoliberalismo) pueden ser
usadas para fortalecer o fomentar otras lógicas. En forma similar, no hay nada sobre las
150
normas de transparencia, responsabilidad y eficiencia que las haga necesariamente
propulsoras de la mercantilización: en China, por ejemplo, han sido desarrolladas para
perseguir fines no lucrativos y para reinscribir ideales socialistas (Kipnis, 2009). El problema
con el enfoque de la gubernamentalidad es que su caracterización operativa del
neoliberalismo como “dominio calculador” (Ong, 2007: 4) es tan poco específica como para
que sea coetánea de cualquier régimen mínimamente competente o con las fuerzas de la
racionalización e individualización características de la modernidad occidental in globo.[5] Por
último, a medida que las tecnologías de conducción “migran” y “mutan”, se halla que el
neoliberalismo está en todos lados y al mismo tiempo en ninguno. Se convierte en un todo
proceso sin ningún contenido; se halla en una forma fluida sin sustancia, patrón ni dirección.
Finalmente, entonces, la escuela de la gubernamentalidad nos ofrece una concepción del
neoliberalismo tan endeble como la que ofrece la ortodoxia económica, a la que aspira a
superar.
El neoliberalismo como la forja de un estado que impone al mercado
Mi sugerencia es trazar una via media entre estos dos polos, que reconoce que, desde su
incubación intelectual por el Colloque Lippman en Paris 1938 y el “colectivo de pensamiento”
transnacional anclado por la Société du Mont-Pélerin luego de 1947 (Denord. 2007), a sus
distintas encarnaciones históricas durante las décadas finales del siglo XX, hasta su
paradójica reafirmación luego de la crisis financiera del otoño de 2008, “el neoliberalismo ha
sido siempre un proyecto de final abierto, plural y adaptable” (Peck, 2008: 3), pero que sin
embargo tiene un núcleo institucional que lo distingue y hace reconocible.[6]Este núcleo
consiste en una articulación del estado, el mercado y la ciudadanía que controla al primero
para imponer el sello del segundo sobre la tercera. De modo que debemos introducir estas
tres instituciones en nuestro ámbito analítico. No estoy de acuerdo con las concepciones del
neoliberalismo centradas en el mercado porque priorizo los medios (políticos) sobre los fines
(económicos); pero me diferencio de la estructura de la gubernamentalidad porque priorizo
la elaboración estatal por encima de las tecnologías y las lógicas no estatales, y me
concentro en la forma en que el estado rediseña con efectividad los límites y el sentido de la
ciudadanía a través de sus políticas. De acuerdo a ello, recomiendo que efectuemos un triple
desplazamiento para anclar la antropología del neoliberalismo, comprendido no como una
doctrina económica invasiva o técnicas de dominio que se propagan sino como una
constelación política concreta: de una “endeble” concepción económica centrada en el
mercado a una “sustancial” concepción sociológica centrada en el estado que especifica la
maquinaria institucional implicada cuando se establece la dominación del mercado y su
impacto operativo sobre los miembros reales de la sociedad. Afirmo que el escasamente
conocido concepto de campo burocrático de Bourdieu ([1993] 1994) ofrece una herramienta
flexible y poderosa para comprender la recreación del estado como una máquina de
estratificación y clasificación que está conduciendo a la revolución neoliberal desde arriba.
Este cambio puede ser explicado en tres tesis.
Tesis 1: El neoliberalismo no es un proyecto económico sino político; no implica el
desmantelamiento del estado sino su reconstrucción.Esto es por tres razones básicas.
Primero, en todos lados los mercados son y siempre han sido creaciones políticas: son
151
sistemas de intercambio basados en los precios que siguen las reglas que deben ser
establecidas y arbitradas por autoridades políticas enérgicas y apoyadas por amplias
maquinarias legales y administrativas, que en la era moderna equivalen a las instituciones
estatales (Polanyi, [1957] 1971; Fligstein, 1996; Macmillan, 2003). Segundo, como lo
demostró la historia social y fue elaborado por la teoría social desde Emile Durkheim y Marcel
Mauss a Karl Polanyi y Marshall Sahlins, las relaciones sociales y las concepciones culturales
necesariamente sustentan los intercambios económicos y las personas normalmente
negocian bajo las leyes del mercado: de este modo el estado debe intervenir para superar la
oposición y reprimir las estrategias evasivas. Tercero, la historiografía de
la Geistkreis[7] transnacional que la generó revela explícitamente que desde sus orígenes en
la crisis de la década de 1930, el neoliberalismo no ha procurado restaurar el liberalismo de
fines del siglo XIX sino superar la equivocada concepción del estado de este último (Denord,
2007; Mirowski/Plehwe: 2009). El neoliberalismo se origina en una doble oposición: por un
lado, contra las soluciones colectivistas (primero socialistas y más tarde keynesianas) de los
problemas económicos y por el otro, contra la visión minimalista y negativa del “estado
vigilante” del liberalismo clásico. Desea reformar y redireccionar al estado de modo de
alentar activamente y fortalecer al mercado como una creación política en curso.[8]
En otro lugar he caracterizado esta recreación como la articulación de cuatro lógicas
institucionales (Wacquant, 2010a):
(I)
La mercantilización como la ampliación del mercado o de mecanismos
similares, basada en la concepción de esos mecanismos son medios universalmente óptimos
para asignar eficientemente los recursos y recompensas.
(II)
La política social disciplinaria, con el cambio desde el bienestar protector,
concedido categóricamente como una cuestión de derecho, hacia el workfare correctivo, bajo
el cual la asistencia social está condicionada a la sumisión al empleo flexible e implica
mandatos específicos de conductas (entrenamiento, pruebas, búsqueda de empleo, y
trabajar hasta por salarios de subpobreza, pero también limitación de la fertilidad,
acatamiento a la ley, etc.).
(III)
La política penal expansiva y pornográfica con el objetivo de limitar los
desórdenes generados por la difundida inseguridad social en las zonas urbanas impactadas
por el trabajo flexible y representar la soberanía del estado en la estrecha ventana de la vida
cotidiana que ahora afirma controlar.
(IV)
La “responsabilidad individual” como un discurso motivador y como un
pegamento cultural que une estos distintos componentes de la actividad estatal.
Esta concepción va más allá de la perspectiva del dominio del mercado, no sólo porque
concede un papel dinámico al estado en todos los cuatro frentes: económico, social, penal y
cultural. Para considerar sólo al primero, el estado re-regula activamente, antes que
“desregular”, la economía a favor de las empresas (Vogel, 1996) y toma medidas amplias
“correctivas” y “constructivas” para apoyar y expandir los mercados (Levy, 2006). Esta
concepción también ofrece contenidos institucionales duros a la noción blanda de la
“racionalidad política” invocada por los foucaltianos especificando los medios que emplea el
estado para ampliar y sostener la mercantilización frente a la oposición.
152
Tesis 2: El neoliberalismo implica un giro derechista del campo burocrático y genera un
estado-centauro: Si el estado no está siendo “removido” o “vaciado” sino verdaderamente
reconstruido y redesplegado, ¿cómo podemos comprender esta remodelación? Aquí es donde
el concepto de campo burocrático de Bourdieu ([1993] 1994), interpretado como el conjunto
de organizaciones que monopolizan eficazmente la definición y la distribución de bienes
públicos, demuestra ser crucial.[9] Una gran virtud de este concepto, minuciosamente
concebido mediante un análisis histórico de la transición multisecular desde el modo
dinástico de reproducción del gobierno al burocrático, anclado en la creciente potencia del
capital cultural institucionalizado (ver Bourdieu, 2012), es que nos recuerda que “el estado”
no es un actor monolítico, coherente (ya sea operando en forma autónoma o como el
diligente sirviente de las clases dominantes), o una simple palanca susceptible de ser
controlada por intereses o movimientos especiales provenientes de la sociedad civil. Más
bien, es un espacio de fuerzas y luchassobre el mismo perímetro, prerrogativas y prioridades
de la autoridad pública, y en particular sobre qué “problemas sociales” merecen su atención
y cómo deben ser tratados.
Bourdieu, ([1993] 1998) además sugiere que el estado contemporáneo está atravesado por
dos batallas internas que son homólogas con los choques que se desatan en forma
turbulenta a través del espacio social: la batalla vertical (entre dominantes y dominados) que
es el enfrentamiento entre la “alta nobleza estatal” de los responsables políticos seducidos
por los conceptos neoliberales, que desean fomentar la mercantilización, y la “baja nobleza
estatal” de los ejecutantes que defienden las misiones protectoras de la burocracia pública; y
la batalla horizontal (entre las dos clases de capital, el económico y el cultural, compitiendo
por la supremacía interna) involucra a la “mano derecha” del estado (el ala económica que
pretende imponer las restricciones fiscales y la disciplina del mercado), y la “mano izquierda”
del estado (el ala social que protege y apoya a las categorías despojadas de capital
económico y cultural). En Castigar a los pobres, adapto este concepto para introducir en una
sola estructura analítica los cambios punitivos en las políticas de bienestar y penal que han
convergido para establecer la “doble regulación” de la marginalidad avanzada mediante
el workfare y el prisonfare punitivo. Y agrego el brazo de la justicia penal - la policía, los
tribunales, la cárcel y sus prolongaciones: la libertad condicional, las bases de datos
judiciales, las obligaciones civiles y burocráticas unidas a las sanciones penales, etc.- como
un componente esencial de la mano derecha del estado, junto a los ministerios de Hacienda
y de Economía (Wacquant, 2009a: 3-20, 304-313).
Usando este esquema, se puede diagramar al neoliberalismo como el vuelco sistemático de
las prioridades y acciones estatales desde la mano izquierda hacia la mano derecha, o
sea, desde el polo protector (femenino) hacia el polo disciplinario (masculino) del campo
burocrático. Esto se lleva a cabo a través de dos vías complementarias: (i) la transferencia
de recursos, programas y poblaciones desde el ala social hacia el ala penal del estado (como
cuando los pacientes de enfermedades mentales son “des-institucionalizados” con el cierre
de hospitales y “re-institucionalizados” en cárceles luego de transitar por la carencia de
vivienda); (ii) la colonización del bienestar, la atención médica, la educación, la construcción
de viviendas para quienes tienen bajos ingresos, los servicios infantiles, etc., por las técnicas
y metáforas panópticas y disciplinarias de la mano derecha (como cuando en los hospitales
153
públicos se prioriza la preocupación por el presupuesto por sobre los preocupaciones médicas
y en las escuelas se pone la reducción de la inasistencia escolar y la violencia en las clases
por delante de la pedagogía y la contratación de guardias de seguridad por encima de los
psicólogos). Como resultado de esta inclinación hacia la derecha, el Leviatán neoliberal no se
parece al estado minimalista del liberalismo del siglo XIX ni al estado efímero que se quejan
los críticos del neoliberalismo , ya sean provenientes de la economía o de la
gubernamentalidad, , sino un estado-Centauro que despliega rostros opuestos en los dos
extremos de la estructura de clase: es edificante y “emancipador” en la cumbre, donde actúa
para proveer los recursos y ampliar las opciones vitales de los dueños de capital económico y
cultural, pero es punitorio y restrictivo en la base, cuando se trata de administrar las
poblaciones desestabilizadas por la profundización de la desigualdad y la propagación de la
inseguridad del trabajo y la inseguridad étnica. El neoliberalismo realmente existente exalta
el “laissez faire et laissez passer” para el dominante, pero se presenta paternalista e
intrusivo para el subalterno, y especialmente para los trabajadores urbanos precarios, a
quienes restringe sus parámetros vitales mediante el engranaje combinado
del workfarevigilador y la supervisión judicial.
Tesis 3: El crecimiento y la glorificación del ala penal del estado son un componente integral
del Leviatán neoliberal:Atrapados en la visión ideológica que lo describe como guiando el fin
del “gran gobierno”, los analistas sociales del neoliberalismo han pasado por alto la
imponente rehabilitación y la enorme expansión del aparato penal del estado que ha
acompañado a la ola del dominio del mercado. Desmintiendo las profecías, hechas entre
1945 y 1975 por los penalistas de la corriente dominante así como los teóricos radicales del
castigo, de que era una organización desacreditada destinada a marchitarse (Tonry, 2004),
la cárcel ha hecho un espectacular regreso a la vanguardia a través del primer y el segundo
mundos a lo largo de las tres últimas décadas. Con muy escasas excepciones (Canadá,
Alemania, Austria y partes de Escandinavia en Occidente), la encarcelación ha emergido en
todas las sociedades postindustriales occidentales, ha crecido rápidamente en las naciones
post-autoritarias en Latinoamérica, y estallado en los estado-naciones surgidos del colapso
del bloque soviético mientras se transformaban de economías dirigidas a economías de
mercado. La población carcelaria no sólo ha aumentado rápidamente en las tres regiones
(Walsmley 2011) junto a la precarización del trabajo y el retroceso del estado benefactor;
está en todos lados compuesta en forma desproporcionada por los pobres urbanos, los parias
étnicos y nacionales, los sin techo y los enfermos mentales indigentes, y diversos desechos
del mercado laboral (Wacquant, 2009a: 69-75).
El implacable aumento en la población carcelaria es además sólo una manifestación
superficial y burda de la expansión y exaltación del estado penal en la era del mercado
triunfante. Otros indicadores incluyen el despliegue agresivo de la policía en y alrededor de
los vecindarios de los relegados; la ampliación de la red judicial a través de las sanciones
alternativas, los planes de control post-carcelarios, y el desarrollo exponencial de los bancos
de datos judiciales digitalizados; la proliferación de los centros de retención administrativa
para acorralar y expulsar a inmigrantes irregulares; la hiperactividad de las legislaturas
sobre el frente penal (han multiplicado y endurecido las sanciones penales a una velocidad
jamás vista), y el auge de un sector de los medios de comunicación que comercian con
154
imágenes catastróficas del peligro criminal; la promoción de la lucha contra los delitos en las
calles encabezando la agenda gubernamental (al mismo tiempo que se despenalizaban los
delitos empresarios) y la prominencia de la “inseguridad” en las campañas electorales; y el
sometimiento de la política penal a parámetros emotivos y simbólicos, con un ostensible
menosprecio de la experiencia penológica.
El fortalecimiento y la ampliación del sector penal del campo burocrático no es una respuesta
al delito, el cual ha declinado en los países occidentales en las dos últimas décadas y
generalmente fluctúa sin relación con los niveles y las tendencias del castigo (Young/Brown,
1993). Tampoco es el embrión del advenimiento de “la sociedad excluyente”, el ascenso de
una “cultura del control”, o el deterioro de la confianza en el gobierno y la adhesión a la
“sociedad del riesgo”,[10] y aún menos el engendro de especuladores, como en la
demonología militante del “complejo industrial-carcelario” (Wacquant, 2010b). Es unladrillo
en el edificio del Leviatán neoliberal. Por esto es que se correlaciona íntimamente, no con las
vagas “ansiedades ontológicas” de la “modernidad tardía”, sino con cambios específicos que
imponen el mercado en la política económica y social que ha desatado la desigualdad de
clases, profundizado la marginalidad urbana, y atizado el resentimiento étnico al mismo
tiempo que erosiona la legitimidad de los políticos. Al examinar las tendencias en una docena
de sociedades avanzadas distribuidas entre cuatro tipos de economía política, Cavadino y
Dignan (2006: 450) informan de “una tendencia general haciacambios en los niveles de
castigo de estos países, para adecuarse al mismo modelo. A medida que una sociedad se
desplaza en dirección al neoliberalismo, sus castigos se vuelven más severos”. Reelaborando
los mismos datos desde un ángulo diferente, Lacey (2009: 111) revela, a pesar de su deseo
de refutar la tesis de la convergencia penal, que el mejor indicador de la tasa de
encarcelación de estos países es el “grado de coordinación” de la economía, o sea, un índice
opuesto a la neoliberalización. El análisis estadístico de Lappi-Seppälä(2011) de treinta
países europeos confirma que la moderación penal tiene sus raíces en una “cultura política
consensual y solidaria, en altos niveles de confianza social y legitimidad política, y en un
fuerte estado de bienestar”, o sea en rasgos sociopolíticos contradictorios a los del
neoliberalismo. Más aún, el patrón temporal y geográfico de difusión de la penalidad punitiva
y pornográfica en todo el mundo sigue las huellas de la propagación de las políticas de
desregulación económica y disciplinamiento del bienestar (Wacquant, 2009b y 2011).
No es por fruto del azar que los Estados Unidos se volvieron superpunitivos luego de
mediados de la década de 1970, justo cuando se precarizó el trabajo, se abandonó el apoyo
al bienestar, implosionó el gueto negro, y se endureció la pobreza en las metrópolis
dualizadoras. No fue de pura casualidad que a principios de los ochenta, Chile se convirtió en
el principal encarcelador en Latinoamérica y el Reino unido en la locomotora penal de la
Unión Europea a fines de los noventa, cuando ambos estados viraban su política de
clientelar-solidaria a neoliberal. Pues existe una profunda relación estructural y funcional
entre el dominio del mercado y el castigo luego del cierre de la era keynesianofordista.[11] El estado penal se ha presentado en los países que han elegido el camino
neoliberal, porque promete ayudar a resolver los dos dilemas que crea la mercantilización
para el mantenimiento del orden social y político: primero, reprime los crecientes trastornos
y rupturas causados por la normalización de la inseguridad social en la base de la estructura
social y urbana; y en segundo lugar, restaura la autoridad de la elite gobernante,
155
reafirmando la “ley y el orden” justamente cuando esta autoridad está siendo socavada por
los acelerados flujos del dinero, el capital, las comunicaciones y las personas a través de las
fronteras nacionales, y las restricciones a la acción estatal por parte de las instituciones
supranacionales y el capital financiero. El concepto del campo burocrático nos ayuda a
comprender estas misiones gemelas del castigo, en la medida en que nos lleva directamente
a prestar igual atención a los momentos materiales y simbólicos de la política pública, o sea,
el papel instrumental del disciplinamiento de clase y la misión comunicativa de proyectar
soberanía que supone la justicia penal.[12] Esto también nos invita a trasladarnos de una
concepción represiva de la penalidad a una productiva, que pone el acento en su cualidad
performativa (Wacquant, 2008b), de modo que podemos apreciar que los aumentos de los
presupuestos, del personal y de las prioridades que se han dado a las instituciones policiales
y judiciales en todas las sociedades transformadas por el neoliberalismo como programa
económico no son una herejía, una anomalía, o un fenómeno transitorio, sino componentes
integrales del estado neoliberal.
Para presentar una antropología histórica del neoliberalismo tal como éste evoluciona
realmente en los países en donde ha enraizado, opuesta a la descripción de sí mismo (el
modelo del dominio de mercado) o al relato de cómo se disipa cuando no logra cristalizar en
un régimen coherente (el modelo de la gubernamentalidad), debemos reconocer que
pertenece al registro de la formación estatal. En forma muy similar a cómo vio el “largo siglo
XVI” al nacimiento del Leviatan moderno en Europa Occidental (Ertman, 1997), incluyendo la
invención de la ayuda a los pobres y la cárcel penal, como parte de la accidentada transición
del feudalismo al capitalismo mercantilista, el comienzo de nuestro siglo ha sido testigo de la
remodelación de un nuevo tipo de estado que pretende amparar los mercados e incluir la
libertad, pero en realidad reserva al liberalismo y sus beneficios para los de arriba, mientras
aplica el paternalismo punitivo sobre los de abajo. En lugar de ver a la policía, los tribunales,
y la cárcel como apéndices técnicos para combatir el delito, debemos reconocer que
constituyen las capacidades políticas centrales mediante las que el Leviatán gobierna el
espacio físico, recorta el espacio social, dramatiza las divisiones simbólicas, y representa la
soberanía. Y así debemos colocarlos en el centro de una antropología política renovada, con
leyes que puedan comprender cómo identifica y administra el estado los territorios y
categorías problemáticos en su empresa de crear mercados y de moldear ciudadanos que se
ajusten a ellos, les guste o no.
Reconocimientos: Este trabajo creció a partir la discusión que siguió a mi intervención en la
conferencia sobre “Marginalité, pénalité et division ethnique dans la ville à l’ère du
néolibéralisme triomphant: journée d’études autour de Loïc Wacquant,”, Université Libre de
Bruxelles, Bruselas, 15 de octubre de 2010. Estoy muy agradecido a Mathieu Hilgers, el
Laboratoire d’anthropologie des mondes contemporains, el Institut de Sociologie y el Groupe
d’études sur le racisme, les migrations et l’exclusion, por un vívido día de discusiones; a
Aaron Benavidez por su sobresaliente investigación y asistencia bibliográfica; y a Megan
Comfort, François Denord, Zach Levenson, y Dilan Riley por su perspicaces sugerencias
editoriales y analíticas.
156
Bibliografía
Barry, Andrew / Osborne, Thomas / Rose, Nikolas (eds.), Foucault and Political Reason:
Liberalism, Neo-Liberalism, and Rationalities of Government. University of Chicago Press:
Chicago, 1996.
Bourdieu, Pierre, “Rethinking the State: On the Genesis and Structure of the Bureaucratic
Field”. En: Sociological Theory 12/1 (marzo de 1994), págs. 1-19.
Bourdieu, Pierre “The Abdication of the State”. En: –, The Weight of the World: Social
Suffering in Contemporary Society. Polity Press: Cambridge, 1998, págs. 181-188.
Bourdieu, Pierre, Sur l’État. Seuil / Raisons d’agir Editions: París, 2012.
Brenner, Neil / Peck, Jamie / Nik, Theodore, “Variegated Neoliberalization: Geographies,
Modalities, Pathways”. En: Global Networks 10/2 (abril de 2010), págs. 182-222.
Brown, Wendy, “Neoliberalism and the End of Liberal Democracy”. En: –, Edgework: Critical
Essays on Knowledge and Politics. Princeton University Press: Princeton, 2005, págs. 37-59.
Campbell, John / Pedersen, Ove (eds.), The Rise of Neoliberalism and Institutional Analysis.
Princeton University Press: Princeton, N. J., 2001.
Carruthers, Bruce G. / Nelson Espeland, Wendy,“Accounting for Rationality: Double-Entry
Bookkeeping and the Rhetoric of Economic Rationality”. En: American Journal of
Sociology97/1 (julio de 1991), págs. 31-69.
Cerny, Philip G., “Embedding Neoliberalism: The Evolution of a Hegemonic Paradigm”.
En: The Journal of International Trade and Diplomacy 2/1 (primavera de 2008), págs. 1-46.
Comaroff, Jean / Comaroff, John L. (eds.), Millennial Capitalism and the Culture of
Neoliberalism. Duke University Press: Durham, 2001.
Crouch, Colin, “The Terms of the Neoliberal Consensus”. En: The Political Quarterly 68/4
(1997), págs. 352-360.
Dardot, Pierre / Laval, Christian, La Nouvelle raison du monde. Essai sur la société
néolibérale. La Découverte: París, 2007.
Dean, Mitchell, Governmentality: Power and Rule in Modern Society. Sage: Londres. 1999.
Denord, François, Néo-libéralisme version française. Histoire d’une idéologie politique.
Démopolis: París, 2007.
Drake, St. Clair / Cayton, Horace, Black Metropolis: A Study of Negro Life in a Northern City.
University of Chicago Press: Chicago, [1945, 1962, 1969] 1993.
Edelman, Marc / Haugerud, Angelique (eds.), The Anthropology of Development and
Globalization: From Classical Political Economy to Contemporary Neoliberalism. WileyBlackwell: Cambridge, 2005.
157
Ertman, Thomas, Birth of the Leviathan: Building States and Regimes in Medieval and Early
Modern Europe. Cambridge University Press: Cambridge, 1997.
Ferguson, James, Global Shadows: Africa in the Neoliberal World Order. Duke University
Press: Durham, 2006.
Fligstein, Neil, “Markets as Politics: A Political-Cultural Approach to Market Institutions”.
En: American Sociological Review 61/4 (agosto de 1996), págs. 656-673.
Foucault, Michel, Naisssance de la biopolitique. Cours au Collège de France, 1978-1979.
Seuil/Gallimard: París, 1994.
Greenhouse, Carol J. (ed.), Ethnographies of Neoliberalism. University of Pennsylvania Press:
Filadelfia, 2009.
Harcourt, Bernard E., The Illusion of Free Markets: Punishment and the Myth of the Natural
Order. Harvard University Press: Cambridge, 2011.
Harvey, David, A Brief History of Neoliberalism. Oxford University Press: Nueva York, 2005.
Hilgers, Mathieu, “Les trois approches anthropologiques du néolibéralisme”. En: International
Social Science 62/20 (2011).
Hoffman, Lisa / DeHart, Monica / Collier, Steven J., “Notes on the Anthropology of
Neoliberalism”. En: Anthropology News 47/6 (septiembre de 2006), págs. 9-10.
Kipnis, Andrew B., “Audit Cultures: Neoliberal Governmentality, Socialist Legacy, or
Technologies of Governing?”. En: American Ethnologist 35/2 (mayo de 2008), págs. 275289.
Lacey, Nicola, The Prisoners’ Dilemma: Political Economy and Punishment in Contemporary
Democracies. Cambridge University Press: Cambridge, 2008.
Lappi-Seppälä, Tapio, “Explaining imprisonment in Europe”. En: European Journal of
Criminology 8/4 (julio de 2011), págs. 303-328.
Larner, Wendy, “Neo-liberalism: Policy, Ideology, Governmentality”. En: Studies in Political
Economy 63 (2000).
Levy, Jonah D. (ed.), The State after Statism: New State Activities in the Age of
Liberalization. Harvard University Press: Cambridge, 2006.
McMillan, John, Reinventing the Bazaar: A Natural History of Markets. W. W. Norton: Nueva
York, 2003.
Meiksins Wood, Ellen, Empire of Capital. Verso: Londres, 2005.
Mudge, Stephanie Lee, “State of the Art: What is neo-liberalism?”. En: Socioeconomic
Review 6/4 (2008), págs. 703-731.
Peck, Jamie, Constructions of Neoliberal Reason. Oxford University Press: Nueva York, 2010.
Pratt, John, Penal Populism. Routledge: Londres, 2007.
158
Mirowski, Philip / Plehwe, Dieter (eds.), The Road from Mont Pelerin: The Making of the
Neoliberal Thought Collective. Harvard University Press: Cambridge, 2009.
Ong, Aihwa, Neoliberalism as Exception: Mutations in Citizenship and Sovereignty. Duke
University Press: Durham, 2006.
–, “Neoliberalism as a Mobile Technology”. En: Transactions of the Institute of British
Geographers 32/1 (enero de 2007), págs, 3-8.
Richland, Justin B. 2009. “On Neoliberalism and Other Social Diseases: The 2008
Sociocultural Anthropology Year in Review”.American Anthropologist 111, no. 2 (June): 170176.
Robison, Richard (ed.), The Neoliberal Revolution: Forging the Market State. Palgrave
Macmillan: Basingstoke, 2006.
Saad-Filho, Alfredo/ Johnston, Deborah (eds.), Neoliberalism: A Critical Reader. Pluto,
Londres, 2005.
Tonry, Michael H., “Has the Prison a Future”. En: – (ed.), The Future of Imprisonment.
Oxford University Press: Nueva York, 2004, págs. 3-25.
Vogel, Steven K., Freer Markets, More Rules: Regulatory Reform in Advanced Countries.
Cornell University Press: Ithaca, Nueva York, 1996.
Wacquant, Loïc, “L’‘underclass’ urbaine dans l’imaginaire social et scientifique américain”.
En: Paugam, Serge (ed.),L’Exclusion: l’état des savoirs. La Découverte: París, 1996, págs.
248-262.
–, “Three Pernicious Premises in the Study of the American Ghetto”. En: International
Journal of Urban and Regional Research21-2 (junio de 1997), págs. 341-353.
–, Body and Soul: Notebooks of an Apprentice Boxer. Oxford University Press: Nueva York,
[2000] 2004.
–, Urban Outcasts: A Comparative Sociology of Advanced Marginality. Polity Press:
Cambridge, 2008a.
–, “Ordering Insecurity: Social Polarization and the Punitive Upsurge”. En: Radical Philosophy
Review 11 (primavera de 2008), págs. 9-27. 2008b.
–, Punishing the Poor: The Neoliberal Government of Social Insecurity. Duke University
Press: Durham y Londres, “Politics, Culture, and History” series, 2009a.
–, Prisons of Poverty. Edición revisada y aumentada. University of Minnesota Press:
Mineápolis, 2009b.
–, “The Body, the Ghetto and the Penal State” Qualitative Sociology 32/1 (marzo de 2009),
págs. 101-129, 2009c.
– (ed.), Pierre Bourdieu and Democratic Politics: The Mystery of Ministry. Polity Press:
Cambridge, 2005.
159
–, “Crafting the Neoliberal State: Workfare, Prisonfare and Social Insecurity”. Sociological
Forum 25/2 (junio de 2010), págs. 197-220, 2010a.
–, “Prisoner Reentry as Myth and Ceremony”. En: Dialectical Anthropology 34/4 (diciembre
de 2010), págs. 604-620, 2010b.
–, “The Global Firestorm of Law and Order: On Neoliberalism and Punishment”. En: Thesis
Eleven 105 (otoño de 2011): en prensa (seguido de un comentario de John Pratt y una
respuesta del autor.
Walmsley, Roy, World Prison Population List. 9ª ed. International Center for Prison Studies:
Londres, 2001.
Weber, Max [1918-20], Economy and Society: An Outline of Interpretive Sociology. 2 vols.
Ed. de Günther Roth y Claus Wittich. University of California Press: Berkeley, 1978.
Williamson, John, “Democracy and the ‘Washington Consensus’ ”. En: World
Development 21/8 (1993), págs. 1329-1336.
Young, W. / Brown, M., “Cross-National ComParísons of Imprisonment”. En: Crime & Justice:
A Review of Research 17 (1993), págs. 1-49.
Publicado inicialmente en Social Anthropology (noviembre de 2011), en un foro sobre
neoliberalismo, tema de un debate en curso en dicha publicación. Agradecemos la
autorización de dicha revista y del autor para su publicación en Herramienta. Traducción del
inglés de Francisco T. Sobrino.
[1] Workfare: designa programas de asistencia pública a los pobres que hacen de la
recepción de la ayuda un beneficio personal condicionado a la aceptación de trabajos con
bajos salarios o al compromiso en una actividad dirigida al empleo, tal como un
entrenamiento laboral o búsqueda de empleos. Prisonfare es un término que introduje por
analogía con “workfare” para designar programas de penalización de la pobreza mediante la
elección preferencial de ésta como objetivo principal, y el despliegue activo de la policía, los
tribunales penales, y las cárceles (y sus prolongaciones: la libertad bajo palabra, las bases
de datos penales y diversos sistemas de vigilancia) en (y alrededor de) los vecindarios
marginalizados, donde se coaliga el proletariado postindustrial.
[2] Ver Wacquant (2009c) para una disección retrospectiva de las vinculaciones analíticas y
los engranajes biográficos entre “El cuerpo, el gueto, y el estado penal”.
[3] “Desde la década de 1980, una perpleja mezcla de extralimitación y sub-especificación
ha acompañado al inquieto dominio del concepto de neoliberalismo en la economía política
160
heterodoxa. Al mismo tiempo, el concepto se convertido en un foco terminológico para los
debates sobre la trayectoria de las transformaciones regulatorias posteriores a la década de
1980 y una expresión de los profundos desacuerdos y confusiones que caracterizan esos
debates. En consecuencia, el “neoliberalismo” se ha convertido en algo así como un concepto
tramposo, indiscriminadamente penetrante, aunque inconsistentemente definido,
empíricamente impreciso y frecuentemente impugnado” (Brenner/Peck/Theodore, 2010:
283-284).
[4] Esta opinión se deduce de los escritos de Foucault y el curso de 1978-1979 en el Collége
de France sobre The Birth of Biopolitics [Naissance de la biopolitique] (Foucault, 2004), que
han inspirado un programa de investigación general sobre “gubernamentalidad” como el arte
de formar a las poblaciones (sometimiento) y el yo (subjetivación). Los términos
“gobernanza postsocial” y “liberal tardío” son usados a menudo como sinónimos de
neoliberal (ver Dean [1999] para una supervisión y Rose / O’Malley / Valverde, 2006 para
una defensa paradójica de un enfoque teórico que no se reconoce como tal). No hay lugar
aquí para tratar los problemas en las propias formulaciones de Foucault sobre la
gubernamentalidad y el neoliberalismo, y/o de su asociación, y mucho menos de sus
derivaciones y su relevancia para los cambios históricos que se desarrollaron después de su
muerte.
[5] Si el neoliberalismo es un conjunto variado de “tecnologías calculadoras” originadas en la
economía que migraron a otras esferas de la vida social, entonces su fecha de nacimiento
datan de 1494 con la invención de la contabilidad por partida doble (Carruthers/Espeland,
1991), y el gran teórico del neoliberalismo no es Ludwig von Mises, Friedrich von Hayek o
Milton Friedman sino Max Weber ([1918-20], 1978: 85-113, 212-226) para quien el dominio
de la racionalidad instrumental ha separado a Occidente del resto, y aún más puesto que
Weber le adjudica gran énfasis al concepto relacionado deLebensführung, “régimen de vida”,
en su sociología comparada de la religión.
[6] Esta es una exigencia lógica: para que las diversificadas especies locales de
neoliberalismos surjan a través de la “mutación”, debe haber un género común del que
derivan todos. Se deduce entonces que toda concepción de múltiples “neoliberalismos con n
minúscula” necesariamente presupone, aunque sea implícitamente, un “Neoliberalismo con N
mayúscula”, y a todo ejemplo periférico y parcial del fenómeno se lo puede caracterizar
como tal sólo por referencia, abierta o encubierta, a un centro original más completo.
[7] El Geistkreis o “Círculo espiritual” era un seminario vienés informal de ciencia e ideas,
fundado por Friedrich Hayek y Herbert Furth a principios de la década de 1920 (N. del T.).
[8] Esto lo subrayan Denord (2007) y Jamie Peck (2009: 3), quien rescata un temprano
texto muy poco conocido de Milton Friedman (publicado en 1951 solamente en sueco) en el
que el economista de Chicago explica: “el error básico fundamental del liberalismo del siglo
XIX [fue que] apenas si le dio otra tarea al estado que la de mantener la paz, y prever que
se mantengan los contratos. Era una ideología ingenua. Afirmaba que el estado sólo podía
hacer daño [y que] el laissez-faire debía ser la regla”. Contra esta opinión, la “doctrina [del]
neoliberalismo” afirma que “hay funciones verdaderamente positivas asignadas al estado,”
entre ellas asegurar los derechos de propiedad, impedir el monopolio, asegurar la estabilidad
monetaria y (lo más notable), “aliviar la pobreza y el sufrimiento agudos”. Peck (2009: 9)
161
tiene razón en señalar que “el neoliberalismo, en sus distintos disfraces, siempre ha tratado
de controlar y reutilizar el estado, a favor de la reforma de un ‘orden del mercado’ a favor de
las corporaciones y de libre comercio,” pero no llega a hallar el factor endógeno de los
medios institucionales recurrentes por los que el estado efectúa esta reforma.
[9] El campo burocrático es uno de los tres conceptos que forja Bourdieu para repensar el
gobierno; no debe ser confundido con el campo político (que atraviesa) y el campo del poder
(en cuyo interior se localiza). Ver Wacquant (2005: 13-18) para una explicación de sus
relaciones y Wacquant (2010a) para una reelaboración del campo burocrático adaptado a la
especificación del carácter del estado neoliberal. En la astuta caracterización de Mudge
(2008: 705), el neoliberalismo tiene tres caras, la intelectual (una doctrina), la burocrática
(las políticas estatales de liberalización, desregulación, privatización, despolitización y
monetarismo), y la política (las luchas por la autoridad estatal), que “comparten un núcleo
común y distintivo: la elevación del mercado por encima de todos los demás modos de
organización”. Pero otorga un peso analítico insostenible al campo político, en lugar de
desplegar el campo burocrático como el principal lugar en el que se libra la batalla sobre las
misiones y los medios de la acción pública.
[10] Como lo sugieren, respectivamente, Jock Young (2000), David Garland (2001), y John
Pratt (2007) y Jonathan Simon (2007), para alertar sobre las principales macro teorías
enfrentadas sobre el cambio penal reciente.
[11] Aquí es donde disiento con Bernard Harcourt (2010), quien atribuye esta relación a la
invención del siglo XVIII de los mitos gemelos del “mercado libre” y la “policía diligente”: el
estado penal creciente es la creación distintiva del neo-liberalismo, y no una herencia o
resurgimiento del liberalismo clásico. Surge luego del período fordista-keynesiano porque
este último ha alterado decisivamente los parámetros institucionales y las expectativas
colectivas de la actividad estatal (para más discusiones, ver Wacquant 2009a: 227-228).
[12] Deducimos que para conceptualizar apropiadamente al estado penal, no solo debemos
repatriar la justicia penal al centro de la antropología política. Debemos poner un punto final
a la mutua hostilidad (o deliberada ignorancia) entre las dos líneas de la criminología, la
marxista y la durkheiminiana, que han elaborado las lógicas materiales y simbólicas del
castigo en forma aislada, y hasta opuestas, entre sí.
Sobre la corrupción y el socialismo: una mirada crítica y esperanzada. Por
Carlos Luque Zayas Bazán
https://lapupilainsomne.wordpress.com/2016/07/12/sobre-la-corrupcion-y-el-socialismo-unamirada-critica-y-esperanzada-por-carlos-luque-zayas-bazan/
Un comentarista, autodenominado Maño, opina en La Pupila Insomne que “el grado de
corrupción en la isla (de Cuba) es un “niño de pecho” comparada con la corrupción realmente
existente en otros mucho países”.
Ese comentario, y sobre todo el valiente artículo de Esteban Morales sobre el tema de la
corrupción en Cuba, a propósito del cual comenta el forista Maño, motivó estas notas, que
sólo pretenden estimular el pensamiento, el análisis y el debate ante la complejidad y las
muchas variables que gravitan alrededor de este flagelo mundial y que tanto daño le hace a la
ingente tarea de construir el socialismo y al prestigio mismo de ese ideal.
162
Se puede suscribir la afirmación de Maño, sobre todo la corrupción en Cuba con la endémica
existente en países donde los poderes representan, legislan y favorecen al mundo empresarial
privado, mientras se declaran sin rubor democráticos. El tipo de corrupción característico de
muchos países capitalistas – clasificado por Transparencia Internacional, precisamente, con la
taxonomía de Gran Corrupción, es, según la define ese organismo, la “corrupción conformada
por actos cometidos en el alto nivel de gobierno que distorsionan las políticas o el
funcionamiento central del estado para propiciar que sus líderes de beneficien a expensas del
bien público” (1) – y esta, efectivamente, no es una realidad frecuente ni predominante en
Cuba.
Si para tener una referencia persistimos en atenernos a la taxonomía de Transparencia
Internacional, que aplican, por demás muy dudosamente, el siguiente nivel inmediatamente
inferior en grado a la Gran Corrupción, es un nivel que denomina la “petty”, la pequeña
corrupción, o corruptela, aquella que sería la “cometida por funcionarios medios o bajos en
sus interacciones con el ciudadano común cuando estos acceden a los bienes básicos o a los
servicios de hospitales, escuelas, departamentos de policía, u otros organismos” (2)
Finalmente, la corrupción política, tal como es conceptuada en ese organismo, tampoco es la
característica en Cuba, pues se define como la manipulación de políticas, o del funcionamiento
de instituciones, o de las reglas de procedimiento en la asignación de recursos o
financiamientos, cometidos por responsables políticos en el ejercicio de un abuso de poder
para mantener estatus y riqueza personal.
Sin embargo, en opinión de este comentarista, toda corrupción tiene un componente político,
y es un daño gravísimo no sólo económico, sino lo que quizás es más gravoso en sociedades
como Cuba, es una lesión espiritual, cultural e ideológica, a la vez que un debilitamiento en la
lucha contra las dominaciones.
Pero hay una gran, aunque aparente, paradoja sólo aparente: la corrupción es consustancial al
capitalismo, la corrupción en las sociedades capitalistas son funcionales al sistema, es una
propiedad que las define, por cuanto la desigualdad fundada en la explotación del trabajo por
el capital es el pecado capital original y la más grave corrupción de todas. Por cierto,
Transparencia Internacional no incluye el carácter capitalista de un sistema como la corrupción
por antonomasia, lo que hace en ellas endémicos sus primeros y terceros conceptos de
corrupción aquí citados. Los resultados del índice de corrupción que se muestran por esa
entidad para el 2015 son más que dudosos pero no es el caso ahora analizarlos aquí. El
interesado lo puede consultar en: http://www.transparency.org/cpi2015).
La existencia de la enorme brecha entre la minoría rica y la gran mayoría sometida a las deudas
eternas de los créditos bancarios, la privatización de la salud, la educación; el desempleo o el
subempleo parcial y precario, la amenaza constante del despido laboral, la pérdida o hipoteca
de sus condiciones mínimas de vida, la desprotección social, las pensiones miserables
sometidas al casino financiero, el empobrecimiento de la vida espiritual rehén de la
desinformación y la subcultura televisiva y publicitaria, el flagelo de las drogas que destruye
enormes capacidades entre sus juventudes, el saqueo de los recursos nacionales cuyas
ganancias fluyen en mayor proporción hacia sus explotadores transnacionales, la fundamental
mentira que son sus aparentes democracias donde al poder político sólo se accede mediante
el poder del dinero, y luego en el gobierno, después de ser legitimadas por las elecciones, se
legisla y gobierna para las élites, todo ello es una corrupción en sí misma que define y explica,
a la vez que es fundamento sobre el que se sostiene la hegemonía capitalista.
163
Hay que reconocer, por demás, que la corrupción se persigue en algunos países porque no
todos los funcionarios se corrompen por igual y en las sociedades capitalistas también florecen
las cualidades humanas virtuosas. Por ejemplo, el aparato fiscal en Chile funciona con relativa
independencia en la persecución de los múltiples casos de corrupción política y colusión entre
parlamentarios, políticos, partidos y grupos empresariales que se han producido en los últimos
años, aunque después el aparato penal -creado y manipulado por los mismos parlamentarios –
es sumamente benigno, y en muchos casos las sanciones no se corresponden con el grado que
merecería el dolo. Pero en esas sociedades cuando se combate la corrupción, muchas veces
devienen en ajustes de cuentas entre los que se reparten el pastel económico y el poder de un
estado, que cumple así una función clientelar de la clase empresarial. La persecución de los
que violan las reglas del sistema al interior de las naciones, tiene su correlación global en la
repartición del mundo en áreas de influencia, oportunidad de rapiña y lucha por los recursos
ajenos, que es el objetivo del gran capital transnacional en las guerras intercapitalistas.
Aparentemente este tipo de corrupción capitalista puede definirse sólo como política, pero esa
calificación es limitada, porque puede afirmarse que la corrupción política es la gran
corrupción económica por otros medios, está directamente relacionada con ella, la propicia y
forma parte de una misma entidad con vasos comunicantes entre los actores corruptos.
Pero en una sociedad que se propone el ideal de la convivencia socialista, y la propiedad social
sobre la riqueza nacional y los medios de producción, la corrupción tiene otro origen, y otro
significado, y por tanto amerita otro análisis del que puede hacerse de la corrupción
capitalista. Y exige, por lo tanto, encontrarle otras soluciones, adecuadas a su índole.
En primer lugar la corrupción en Cuba no tiene un entramado sistémico en la colusión que se
teje entre la legislación, la ejecución política, la aplicación de la justicia, la alta dirección
política y el mundo empresarial. No hay ni puede haber puerta giratoria en Cuba, tal como es
habitual este tipo de corrupción en el mundo capitalista, porque ningún parlamentario y
miembro del gobierno accede a sus funciones a partir de sus recursos privados, ni para
favorecer los suyos o de terceros, ni existe el lobby a favor de las empresas, ni después de
cumplir sus funciones los gobernantes son retribuidos en el mundo empresarial como pago de
sus servicios.
Aunque eso es obvio para muchos que se informan, o han visitado Cuba sin la vista epidérmica
del turista, o no se dejan engañar por la leyenda negra de la propaganda anticubana, hay que
subrayarlo, porque los lectores extranjeros que no conocen bien esa realidad, cuando oyen
hablar de corrupción en Cuba, se imaginan, como le dicen o preguntan a este autor, o lo
expresan en las redes sociales, que es la misma que ellos conocen: es decir,
fundamentalmente la corrupción de la gran política coludida con el empresariado.
Se explica la distinta condición de la corrupción cuando ocurre en Cuba porque los miembros
del parlamento a ningún nivel, ni del estado, ni del gobierno, ni del partido, legislan o
gobiernan representando y favoreciendo a una gran propiedad privada que no existe, a un
mundo empresarial que lograra posicionarse o verse representado en los estamentos del
gobierno. Se explica, además, porque las políticas inclusivas en favor de las mayorías, que son
aspiraciones frustradas constantemente en tantos pueblos y motivo de sus luchas, son regla
en Cuba.
Por el contrario, la gran corrupción, cuando ha ocurrido y se ha detectado en el desempeño
de funcionarios burocráticos del alto nivel económico o político, se ha juzgado y
ejemplarmente castigado, incluso aunque sus figuras hayan sido personas de trayectorias
164
meritorias anteriores. No puede afirmarse con razón que ese tipo de corrupción goce de
impunidad.
¿Cuál es la corrupción prevaleciente y más frecuente en Cuba, si no es la de la gran política, y si
no es la de los más altos niveles de los funcionarios del gobierno y la economía? ¿Cuál es su
motivación, su origen, sus causas, y cómo podría prevenirse, aumentando las probabilidades
de éxito?
En Cuba no existe la gran propiedad privada capitalista. La gran corrupción, como ha sido
definida más arriba, y la corrupción política, son infrecuentes; la primera, perseguida y
castigada, no goza de impunidad estatal, y prácticamente nula la segunda. El tipo de
corrupción más frecuente en Cuba es la que atenta contra la propiedad social gestionada por
los niveles administrativos de base del aparato estatal, y raramente, aunque ha ocurrido, por
los niveles administrativos superiores. Es propiciada por la indisciplina, la negligencia, o el dolo
administrativo. Ocurre en empresas u organismos estatales y consiste fundamentalmente en el
desvío de recursos deficitarios para su venta ilícita en el mercado informal subterráneo, o para
consumo directo y suntuario de los corruptos más inmorales abusando de la confianza y el
poder. También como intercambio o pago de favores de los administradores o funcionarios
económicos o contables que se corrompen o cometen cohecho. En ocasiones surgen del
cohecho en las sociedades de economía mixta, por sus relaciones con las administraciones de
la parte extranjera.
La corrupción en Cuba es un atentado a la propiedad social, porque afecta los intereses
comunes a la sociedad y no daña a propietarios privados. Se propicia por el descontrol y la
indisciplina administrativa. Su raíz más profunda está, sin embargo, de un lado, en la demanda
existente por el desabastecimiento eventual de productos básicos y otros no tan
imprescindibles, y a veces, por la demanda de lujos de los individuos más inescrupulosos, y, del
otro lado, por la oferta de los que tienen acceso al control de los recursos y se corrompen
sustrayéndolo, o desviándolos de sus fines legales, o por aquellas personas, en ocasiones
obreros, que se procuran el acceso, el robo o el desvío, por la falta de control, o la complicidad
entre directivos y subordinados. Puede decirse que el trabajador, obrero simple, funcionario
menor, o administrativo, se roba a así mismo, o se otorga a sí mismo, lo que pertenece a toda
la sociedad. Es la gran diferencia con respecto a la corrupción de todo tipo en las sociedades
capitalistas, y la ínsita y consustancial a ese sistema económico y político, en que el robo de
mayor envergadura no es precisamente el que se hacen los poseedores entre sí, sino el que se
comete contra el erario público o el dinero de los contribuyentes.
Según el último informe de la Contraloría General de la República, correspondiente a los
resultados del año 2015 “los recursos más afectados en la mayoría de los sectores son los
medios informáticos, el combustible, los materiales de construcción, las piezas y neumáticos.”,
es decir, los más deficitarios, caros y demandados. Asimismo “el mayor número de implicados
se concentra en el comercio, la gastronomía, y el sector agroalimentario”.
En un resumen del año 2012, la Contralora general de la República afirmaba que “hay dos
elementos esenciales que siempre coinciden, independientemente de las maneras en que se
manifiesten: uno es la falta de control, el incumplimiento de lo que está dispuesto,
indisciplinas, violaciones, irresponsabilidad; y el otro es la pérdida de valores, ética y vergüenza
de las personas.” (3)
Esta segunda razón se refiere al que quizás sea el reto más difícil, no sólo de la ética socialista,
sino de la humanidad toda: el predominio de los valores y las virtudes superiores ciudadanas
en la conducta pública y privada del ser humano.
165
(Una disculpa por la pequeña digresión. Robespierre, el gran revolucionario francés, en el
discurso pronunciado el 18 Pluvioso, año II (5 de feberero de 1794), conocido como SOBRE LOS
PRINCIPIOS DE MORAL POLITICA, declaraba “En nuestro país queremos sustituir el egoísmo por
la moral, el honor por la honradez, las costumbres por los principios, las conveniencias por los
deberes, la tiranía de la moda por el dominio de la razón, el desprecio de la desgracia por el
desprecio del vicio, la insolencia por el orgullo, la vanidad por la grandeza de ánimo, el amor al
dinero por el amor a la gloria, la buena sociedad por las buenas gentes, la intriga por el mérito,
la presunción por la inteligencia, la apariencia por la verdad, el tedio del placer voluptuoso por
el encanto de la felicidad, la pequeñez de los “grandes” por la grandeza del hombre; y un
pueblo “amable”, frívolo y miserable por un pueblo magnánimo, poderoso y feliz; es decir,
todos los vicios y todas las ridiculeces de la Monarquía por todas las virtudes y todos los
milagros de la República.” Esas aspiraciones, en esencia, son las del socialismo.
Las especialidades antropológicas, sociológicas, de la ciencia política, las económicas y
psicológicas que estudian este tema desde sus respectivos métodos y enfoques, no han podido
aun dar una respuesta medianamente esclarecedora de cómo lograr el mejoramiento de la
conducta ética humana, pero es de esperar que cuando la desigualdad no sea el rasgo
predominante en las modernas sociedades, cuando la precariedad no sea la condición de vida
de tantos millones de seres humanos, y cuando las élites de las naciones ricas no saqueen a
mansalva los recursos de los países que empobrecen con la desmedida ambición del
capitalismo por el aumento de sus tasas de ganancias, las probabilidades del mejoramiento
humano aumenten considerablemente. No se ha podido establecer, sin embargo, para que
mientras tanto esa sea la tendencia predominante, si son esenciales primero las condiciones
materiales de vida como caldo propicio de las virtudes espirituales, o si es la existencia de una
masa crítica mínima y suficiente de hombres probos y ciudadanos virtuosos, la condición de
base para que esas premisas puedan establecerse y generalizarse. Seguramente es una
interrelación compleja de uno y otro, y múltiples factores, pero se hace evidente que un
planeta donde la mayoría de sus pobladores viven en constante lucha por la sobrevivencia, no
es el mejor caldo de cultivo para que las virtudes florezcan en esa masa crítica suficiente y se
convierta en tendencia predominante.
La teoría al respecto siempre pensó que las relaciones que establecen los hombres en la
sociedad, que el sistema en que vivan, a la postre daría lugar al surgimiento de hombres de
conducta éticamente superior, pero se está lejos de poder falsear con seguridad esa variable.
Mientras tanto, será necesario insistir en encontrar un equilibrio entre la coerción que haga
respetar la ley por el temor al justo castigo, el control donde el juez no sea parte, combinado
con la confianza humana comprobada. El pensamiento de Martí es justo al decir: “¿quién no
ha querido pertenecer a la fila de los nobles”? Y la básica confianza en el mejoramiento
humano es la más noble cualidad de un revolucionario, aunque ella sea vea decepcionada
muchas veces no se puede cejar en ese empeño.)
En las empresas y entidades cubanas se realizan durante el año múltiples controles
administrativos y contables, al punto que muchas veces las administraciones se quejan de su
frecuencia, a veces verdaderamente excesiva. Los resultados que muestran las contralorías de
la República y las fiscalías económicas, demuestran que los equipos de controladores y fiscales
no se coluden con las administraciones, pero los controles externos a la empresa son reactivos,
o como se dice en Cuba, le hacen la autopsia al cadáver en vez de impedir la enfermedad, no
son proactivos, detectan la corrupción cuando ya ha sucedido, y de lo que se trata es de
prevenirlos e impedir que florezcan las causas que lo propician.
166
Es innegable entonces que parte de la solución, mientras no vayan desapareciendo las
dificultades económicas que crean la demanda en el mercado negro, y la oferta de los recursos
que se desvían, tendría que estar en la efectividad del control interno preventivo.
En las empresas cubanas existen departamentos de control interno administrativo, y de
control de la calidad, pero la experiencia, acotada naturalmente a su limitado entorno de la
vida laboral de este autor, es que los primeros padecen de un funcionamiento casi puramente
formal en algunas entidades, de lo contrario, no se explican las causas del descontrol en ellas
como el caldo de cultivo de la corrupción. Muchas veces los controles externos son esperados,
y las empresas se preparan para ellos. No se puede negar que muchas deficiencias reveladas
por las contralorías se detectan y se resuelven, pero indudablemente no los neurálgicos y
aquellas que propician la corrupción en las empresas o entidades donde ello ocurre.
Es plausible suponer que mientras no exista, al interior de las empresas, una contraparte de la
administración que sea inmune a la cooptación y la complicidad en el delito, – a no confiar sólo
en las virtudes de la espontánea honestidad, tan precaria todavía a la humana condición como
para considerarla generalizada o espontáneas – y cuyo interés esté precisamente en evitar las
pérdidas en que la empresa incurriera cuando se desvían recursos, no se estará cerca de una
solución de raíz.
Pero para que lo anterior sea posible y tenga probabilidades de funcionar, ese interés más
fuerte y opuesto al interés de ser cooptado y absorbido por una administración
potencialmente en condiciones de corromperse en ausencia de contraparte, esta última tiene
que superar un difícil escollo, según indica la experiencia: tiene que formar parte de la entidad,
no puede ser ajeno a ella, y a la vez, gozar de una independencia e inmunidad relativa con
protección legal operativa con respecto a posibles excesos de la administración. Ese escollo
sólo puede superarse si la entidad contraparte está formada y colegiada y auto regulada por
un grupo de trabajadores seleccionados por el colectivo, y con un liderazgo merecido en la
ejecución proba y eficaz de sus funciones. A la vez, los resultados económicos de la probidad
administrativa que resultara del éxito del control, tendrán que reflejarse positivamente en las
condiciones de trabajo, en los salarios, y los estímulos a los trabajadores, o al menos, en el
equilibrio de los resultados que se hayan logrado. Tanto ese organismo de control interno y la
administración deben ser removidos por el voto de las asambleas de trabajadores cuando el
caso lo amerite, es decir, cuando ocurran casos de corrupción y también deben pagar
sanciones pecuniarias y morales cuando se compruebe negligencia o incumplimiento de los
deberes que hayan propiciado el acto corrupto.
Se supone que esa función corresponde a los sindicatos y a los núcleos del partido en las
entidades, pero es obvio que en esos organismos, en los que durante el año 2015 se produjo el
desvío de recursos por 132 millones en moneda nacional, ni la función sindical ni la partidaria,
en ese aspecto, funcionaron. El examen profundo de esa arista de la cuestión es
imprescindible para atacar exitosamente una de las raíces de la corrupción.
En el fondo de las causas de la corrupción, importantes analistas han señalado la dificultad que
tienen los intentos socialistas para hacer sentir verdadero dueño a los trabajadores de sus
propios recursos productivos. Nada hay de difícil en eso para la pequeña, o cualquier
dimensión de la propiedad privada. Pero la propiedad social socialista ha tenido dificultades de
honduras teóricas y hasta filosóficas para lograr que efectivamente el obrero se sienta y sepa
dueño de los recursos sin que ello sea una propiedad privada sustentada en la explotación.
El destacado jurista cubano Julio Fernández Bulté, ya fallecido, al referirse en una de sus obras
a las causas de la implosión del campo socialista, señalaba que nunca se pudo hacer efectiva la
167
condición de propietarios sociales de los medios de producción a los trabajadores de esas
naciones, pese a que sus recursos no pertenecían en puridad jurídica a privados. Eso influye en
el cuidado de la propiedad social, y en el hecho de que cuando el trabajador atenta contra lo
que no le pertenece sino a sí mismo pero también a la sociedad, no tenga la percepción de que
se roba y produce un daño social. Es también un éxito de la cultura capitalista individualista y
un fracaso en la formación social de virtudes ciudadanas superiores. Es también una
contradicción entre lo que se entiende tradicionalmente como propiedad en el sentido de que
se espera de ella un beneficio directo, y el hecho de la que la riqueza común tiene que ser
justamente redistribuida entre todos los propietarios sociales. Es una consecuencia de no
poder todavía exigir de cada cuál según sus capacidades, y dar a cada cuál según su trabajo en
el ámbito social todo, si cada empresa se hace dueña de sus trabajadores, exige que las
ganancias, como propiedad social les pertenezcan, y a la vez, la necesidad de la planificación
nacional de la satisfacción de las necesidades sociales. ¿Cómo lograrlo? He allí el dilema
mayor, porque todo ello hay que resolverlo en medio de las injustas relaciones internacionales
de explotación del capital global ante el trabajo, y en el caso de Cuba, frente al antagonismo
esencial del capitalismo ante lo que ha significado su ejemplo de que con muy escasos recursos
se hayan podido mantener con diferentes niveles de satisfacción, pero sin renunciar a ello tras
largas décadas, derechos tan fundamentales al ser humano como la salud, la educación, y la
protección social de los más desfavorecidos, todo ello junto a la soberanía bajo ataque
constante.
La experiencia histórica socialista ha ensayado variantes todas más o menos fallidas, e incluso
la autogestión obrera, poner en manos de los trabajadores la propiedad de las empresas, la
elección de sus directivos y, como pedía el Che, hasta decidir lo que va al consumo y lo que va
a la inversión a nivel de las entidades.
También el fracaso de esas variantes se ha debido en buena medida al imperio global del
mercado capitalista y a la necesidad insoslayable de conjugar la autogestión con la
planificación territorial y nacional, y eso en medio de múltiples dificultades por la
interdependencia mundial de las economías y las sucesivas crisis económicas del sistema. No
se puede decir con justicia que el fracaso de esos intentos se deba sólo y principalmente a
causas internas. Sin embargo, y en medio de esas condiciones, es que tiene que resolverse la
cuestión de la efectiva propiedad social sobre los medios de producción como uno de los
resortes que hagan desaparecer el fenómeno de la corrupción. Las posibilidades de los medios
coercitivos son limitadas y casi siempre reactivas. Por otra parte, el hecho de que el colectivo
de trabajadores sea dueño directo de sus empresas por medio del otorgamiento de derechos
ampliados para su conducción, tampoco es una garantía absoluta de la desaparición de las
causas de la corrupción. A su interior se darían en menor escala, pero de igual esencia, las
necesidades del control administrativo efectivo, y la misma necesidad de independencia de sus
órganos de control con respecto a las administraciones. Pero es presumible que al ser dañados
directamente por las consecuencias de los desvíos, o robos, o la mala administración de los
recursos, podrían reaccionar con más interés y eficacia. No se ve otro camino más directo para
la efectiva concreción de la propiedad social de los medios de producción en el intento de la
construcción de las sociedades socialistas y la paulatina creación de una moral comunista. Las
dificultades a resolver son gigantescas pero se hace evidente que mientras no exista ese
hombre nuevo de altas virtudes de honestidad ciudadana, el control, la coerción, la sanción
tiene que equilibrarse con la creación de la pertenencia social allí donde se quiera distanciar la
sociedad del estímulo al egoísmo individualista, que es la madre moral de la corrupción. Es una
vez más, la tremenda y desigual lucha entre el capitalismo y la noble utopía socialista
Finalmente, puede suponerse, con plausible poco margen de error, que en una sociedad
económica y espiritualmente próspera, que haya logrado una hipotética educación socialista
168
de la mayoría de sus ciudadanos, sin carencias básicas, y con relativa sana igualdad y
posibilidades de ascenso social según el mérito y el esfuerzo empeñado, aún no desaparecería
del todo la corrupción, aunque sea razonable imaginar que disminuirían sus probabilidades de
ocurrencia. Pero lo que sí es indudable, es que en países subdesarrollados, a los que se
imponen enormes dificultades para su ascenso económico, no sólo el intercambio mundial
desigual y el saqueo de sus recursos, sino las agresiones continuas a su economía, y que tiene
delante el paradigma cultural del consumismo y la riqueza relativa de los gobiernos de las
naciones explotadoras como el modo válido de autorrealización personal, a la vez que, como
Cuba, recorre una dura senda de más de medio siglo pretendiendo un modo de vivir inédito
que no tiene un origen espontáneo, como el egoísmo, el individualismo, y el instinto de
sobrevivencia naturales, sino que debe lograrse en el difícil cincelado de las virtudes humanas
superiores en medio de carencias, todo ello combinado aumenta y maximizan las
probabilidades para crear un caldo de cultivo más propicio a la aparición de la corrupción que
se basa tanto en la búsqueda de recursos para paliar los sufrimientos de la escasez, como el
estímulo para los que ven en propiciarlo un modo ilícito de vida fácil y sin sacrificios.
Con esta reflexión no se justifica la corrupción, pero es de justicia elemental considerar estas
variables en su análisis. Las probabilidades para el florecimiento de las virtudes humanas están
relacionadas proporcionalmente, o al menos maximizadas, con la sana prosperidad, material y
espiritual, como dejara apuntado Martí en sabia observación, aunque tampoco ello es garantía
de que las virtud surja por generación espontánea.
Puede ser inmensamente incalculable el tiempo que tenga que recorrer la humanidad hasta el
momento en que la corrupción sea un raro fenómeno, pero al menos hasta hoy no hay razón
ninguna para imaginar que ello pueda ocurrir en los sistemas de vida basados en el interés
individual y mucho menos en las condiciones de escandalosa desigualdad del mundo que
llamamos moderno. Es una de las razones por seguir luchando por el socialismo. Sólo el
socialismo mayoritaria y conscientemente aceptado por un pueblo, puede ser el camino que
un día nos conduzca a la esperanza de lograr una sociedad donde la corrupción sea una rara
patología social y una excepción que confirme la regla.
http://www.transparency.org/what-is-corruption/#define
Ídem.
http://cgr.jovenclub.cu/documentos/menucapacitacion/EntrevistaCGporJR1ra.pdf
Entrevista al sociólogo Jorge Moreira sobre el golpe de estado en Brasil (I)
"La corrupción es la realidad inexorable de todos los países capitalistas"
https://www.rebelion.org/noticia.php?id=214429
Catherine Bryan
catoverde-cmbryan.blogspot.com/
Traducida del portugués para Rebelión por la propia autora.
Jorge de Brito Vital Moreira es profesor, escritor, sociólogo, filósofo y músico.
Sus áreas de trabajo son el marxismo, la filosofía, la música y la crítica
cultural (literatura, cine y música) de inspiración filosófica marxista (Manuel
169
Sacristán, Fredric Jameson, Terry Eagleton, David Harvey, Darcy Ribeiro y
Glauber Rocha).
-Catherine Bryan. ¿Qué le parece si vamos directamente a la primera
pregunta? ¿Cuál es su opinión acerca de la eliminación de Dilma Rousseff
como presidenta de Brasil?
-Jorge Moreira. Dilma Rousseff fue reelegida presidenta de Brasil por la
voluntad y deseo de 54 millones de brasileños. Por lo tanto, el alejamiento de
Dilma de la presidencia por una banda de políticos ladrones y por
organizaciones políticas mafiosas, es, sin duda, una nueva forma de golpe de
estado contra el pueblo brasileño.
-C. B. ¿Un nuevo tipo de golpe de estado?
-J.M. Sí. Para aquellos que todavía no están informados del golpe militar de
1964 impuesto al Brasil por el gobierno de Estados Unidos y sus súbditos
brasileños, les debo aclarar: el entonces presidente de Brasil, João Goulart,
constitucionalmente elegido por la mayoría de la población brasileña, fue
depuesto y sometido al exilio político por un golpe de estado que estableció
una dictadura militar en beneficio de los intereses económicos y políticos del
imperio americano y de la élite brasileña antinacionalista. Esta dictadura,
planificada y programada por los EE.UU., duró más de 20 años (1964 a 1986)
e implementó en Brasil, la tortura, la desaparición y el asesinato de
trabajadores del campo y la ciudad, maestros, estudiantes, líderes sindicales y
políticos de la oposición, así como el cierre del Congreso brasileño, colocando
sin efecto la constitución de Brasil.
-C. B. ¿Cuál es la diferencia entre el golpe militar de 1964 y este golpe de
2016?
-J. M. En el plano estructural (bajo las apariencias de la superficie), no hay
diferencias significativas entre los dos golpes. En ambos casos, se trataba y se
trata, por un lado, de dar continuidad al proyecto del imperialismo de los
EE.UU., para saquear las riquezas de Brasil para el beneficio de las empresas
multinacionales estadounidenses; y por otro lado, se trataba y se trata de
imponer un modelo de dominación política para seguir defendiendo los
intereses de la minoría privilegiada (en la actualidad, una oligarquía nacional e
internacional de menos del 1% de la población) que domina y controla la
mayor parte de la riqueza del planeta.
170
-C.B. Pero, ¿qué papel ha jugado la corrupción del Partido dos
Trabalhadores (PT) y del ex presidente Luis Inácio da Silva (Lula) en el
golpe de estado?
-J.M. La real corrupción del PT y de Lula es sólo uno de los factores del
proceso que resultó en el golpe. La corrupción del PT es una especie de
pretexto para el golpe articulado por los políticos corruptos del Partido do
Movimento Democrático Brasileiro, PMDB (Michel Temer, Eduardo da
Cunha, Renan Calheiros, el ex presidente José Sarney, etc.), del Partido da
Social Democracia Brasileira, PSDB (Aécio Neves, José Serra, Geraldo
Alckmin, el ex presidente Fernando Henrique Cardoso, etc.), por la
Federación de las Industrias del Estado de São Paulo (FIESP), por la Red Globo
de Televisión (de propiedad de la familia de Roberto Marinho), por la prensa
corporativa de Brasil como las revistas Veja, Isto é, además del diario Folha
de São Paulo . C.B. ¿Cuáles otros grupos participaron en el golpe de estado
actual?
El golpe también fue articulado por la mafia de los juristas asociada con el
golpe y por el fundamentalismo protestante (los evangélicos) con el fin de
cancelar, como ya he mencionado, la decisión de 54 millones de brasileños
que votaron por la presidenta, Dilma Rousseff.
-C.B. Sí, he sido informada de que el Departamento de Justicia de Brasil
está siendo cuestionado por sectores vinculados a los trabajadores del
país por ser un instrumento para el beneficio de este golpe. ¿Qué opina de
esta declaración?
-J.M. Creo que el cuestionamiento de los trabajadores del campo y de la
ciudad (y de organizaciones vinculadas al trabajo) sobre el carácter corrupto y
partidario de la "justicia brasileña” es algo esencial, necesario y fundamental.
Las preguntas son: ¿Por qué las acusaciones y las pruebas contra el Aécio
Neves (candidato del PSDB, que perdió las elecciones contra Dilma Rousseff)
y contra el senador del PSDB, Antonio Anastasia, no son tomadas en cuenta
por la Procuradoria Federal de la República (PFR) o por el Supremo Tribunal
Federal (STF) de Brasil? ¿Por qué los fiscales y los jueces de la "Operación
Jato" son incapaces de detener y poner en la cárcel a Eduardo Cunha y Aécio
Neves, los símbolos de la corrupción en Brasil? ¿Por qué solamente los
políticos del PT son castigados por el "sistema judicial brasileño"? ¿Cómo
podemos creer en la “justicia brasileña”? Recientemente, Emanuel Cancella
publicó un importante artículo sobre este tema en el periódico
brasileño Tribuna da Imprensa ... (1)
171
-C.B. ¿Tiene usted respuesta a esa pregunta que acaba de plantear: ¿Por
qué solamente los políticos del PT son castigados por el "sistema judicial
brasileño"?
-J.M. Por supuesto. Para mí, la respuesta es muy clara:
1) es debido a que el PT (a pesar de la corrupción y de la política reformista a
favor del neoliberalismo), estaba a favor de mantener la propiedad estatal y
nacional de la Petrobras y del Pré-Sal;
2) es debido a que el PT defendía la participación e integración de Brasil en el
gobierno de los países que conforman los BRICS (la asociación económica,
comercial e financiera entre Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica);
3) y es debido a que el gobierno del PT defendía la política de las
organizaciones regionales anti-USA y anti-OEA, como el MERCOSUR, y las
organizaciones articuladas por el presidente venezolano fallecido Hugo
Chávez como la red de televisión regional (TELESUR), la Unión de Naciones
Suramericanas (UNASUR), el Banco del Sur y otros.
Por lo tanto, debo repetir: el golpe ha sido implementado para el beneficio y
el poder económico de la clase política nacional e internacional dominante
(una minoría de menos del 1% de la población mundial). Creo que este es el
momento apropiado para informar/recordar al público de esta entrevista
que una de las noticias más censuradas entre 2014-2015 fue la siguiente: El
1% más rico del mundo tiene 50% de la riqueza mundial. Es decir, el 1% más
rico de la población mundial ya tiene tanta riqueza como el resto combinado
del 99%, según las proyecciones para el año 2016 de un estudio publicado
por Oxford Committee for Famine Relief , Oxfam (Comité de Oxford de Ayuda
contra el Hambre) una organización sin fines de lucro que tiene como
objetivo eliminar la pobreza en el mundo (2). Así, afirmo que la lucha de
clases en Brasil por la apropiación de la riqueza social en beneficio de esta
minoría internacional y nacional es la noción marxista fundamental para
revelar las verdaderas motivaciones para el golpe actual en Brasil. La lucha
de clases sociales (o la guerra entre clases) es la piedra de toque para, por
una parte, explicar la lucha del gobierno de Estados Unidos (Barack Obama)
para desestabilizar el Brasil con el fin de tomar posesión de Petrobras y del
Pré-Sal; por otra parte, para explicar el plan de Estados Unidos para destruir
los BRICS y el MERCOSUR, TELESUR, etc. Para ampliar este punto, me
gustaría argumentar que el concepto de lucha de clases (o guerra de clases)
172
tiene la capacidad de explicar, por ejemplo, la razón de la complicidad y
sumisión del gobierno de derecha del presidente Mauricio Macri, de la
Argentina, para defender los objetivos antinacionalistas y antidemocráticos
de la administración de Barack Obama contra el pueblo de Argentina y de
América Latina; para explicar, por ejemplo, la subordinación y la complicidad
del gobierno servil del presidente Juan Manuel Santos de Colombia (y la
subordinación de la Organización de Estados Americanos, OEA), para
beneficiar los intereses geopolíticos de los EE.UU., o sea, para destruir el
proceso de estabilización económica, social y política del gobierno popular
del presidente Nicolás Maduro en Venezuela. Como podemos observar, un
objetivo fundamental de la geopolítica de los Estados Unidos es apropiarse
del petróleo de Venezuela para entregar a las multinacionales tales como
Chevron y otras del sector petrolero. El caso venezolano es aun más
complejo que otros países, ya que el gobierno de Estados Unidos no podría
tomar el poder político en Venezuela a través de un golpe de estado
"blando" como se hizo contra el pueblo de Paraguay, o en contra de la
población brasileña. En Venezuela, tendría que ser más parecido al golpe de
estado llevado a cabo por los EE.UU. con la ayuda de los militares
hondureños contra el gobierno del presidente Manuel Zelaya y contra el
pueblo de Honduras. Sin embargo, creo que sería aun más difícil para el
Departamento de Estado que sus ONGs sean capaces de corromper a los
militares venezolanos para apoyar un golpe militar contra el pueblo de
Venezuela.
-C.B. Volviendo a Brasil, usted ha mencionado que la corrupción del PT
fue solo uno de los factores y un pretexto para el golpe de estado
ejecutado por el PMDB, el PSDB, los grandes medios corporativos de
información, y otros. Pero ¿cuáles son otros factores que cree usted que
jugaron un papel decisivo en este proceso golpista?
-J.M. En el plano interno, el alejamiento de la presidenta Dilma está
conectado, por un lado, al hecho de que el grupo de los políticos, de las
organizaciones brasileñas y de hombres de negocios corruptos, quería cancelar
la "Operación Lava Jato" debido a que continuar con la operación podría
resultar en el encarcelamiento de ciertos miembros de esos grupos.
Por otro lado, los políticos corruptos del PMDB, del PSDB, la mafia de
juristas asociada y los evangélicos no consiguieron evidencia para demostrar
que Dilma estuvo involucrada en el caso de corrupción del PT. En cambio, los
políticos que alejaron a Dilma de la presidencia y que ahora están
“gobernando” el Brasil ilegalmente, tienen expedientes judiciales que
demuestran cómo todos ellos estaban y están involucrados en corrupción
173
activa y/o pasiva. Podemos mencionar, por ejemplo, las relaciones ilegales
entre esos políticos y el conglomerado del estado de Bahía conocido como la
OAS (la organización corrupta fundada por el ex gobernador Antônio Carlos
Magalhães, el famoso “Toninho Perversidad" del partido Aliança Renovadora
Nacional, ARENA); entre ellos y el conglomerado Norbert Odebrecht,
incluyendo las empresas constructoras Camargo Correa y Andrade Gutierrez
(3). Como lo demuestran los testimonios documentados contra estos políticos
corruptos de la derecha, el golpe de estado se llevó a cabo con agenda secreta
para evitar, como ya mencioné, que la "Operación Lava Jato" revelara sus
crímenes y que la justicia pudiera castigarlos por los delitos de corrupción que
cometieron.
-C.B. Bueno, ahora que usted ha mencionado factores internos, ¿cuáles
son los factores externos del golpe de estado actual?
-J.M. Externamente (y ya lo he mencionado anteriormente), el actual golpe de
estado de 2016 en Brasil fue, como el golpe militar en Brasil de 1964,
planificado y coordinado por el gobierno de Estados Unidos, con la
participación de la derecha brasileña, con el objetivo fundamental, en los dos
casos, de apropiarse de la riqueza material y energética de Brasil.
Entre los indicadores de la asociación espuria actual están los datos sobre la
conexión entre el vicepresidente Michel Temer (PMDB) y el abogado Sergio
Moro (PSDB) con la Central Intelligence Agency (CIA), la tenebrosa
organización estadounidense famosa por su participación sistemática en los
delitos políticos tales como la organización de sabotaje y la promoción de los
golpes de estado contra Brasil y los países de América Latina y del “Tercer
Mundo” (4). Pero eso no es nuevo en la historia política de Brasil. En el
pasado muy reciente, el ex presidente de Brasil, Fernando Henrique Cardoso,
del PSDB, recibió dinero de la CIA, a través de la Organización Ford, para
fundar y financiar el famoso Centro Brasileño de Análisis y Planificación
(CEBRAP). Los datos de las relaciones entre Fernando Henrique Cardoso y la
CIA se pueden encontrar en dos excelentes libros: el de Frances Stonor
Saunders, y el de Brigitte Leoni Hersant (5).
También podríamos hacer referencia al plan interno brasileño y mencionar
algunas de las pruebas de la corrupción que existen en contra de Fernando
Henrique Cardoso durante el período en que él era el presidente de Brasil. Por
ejemplo, el periodista Fernando Rodrigues publicó una brillante investigación
sobre la compra de votos que llevó a la reelección de Fernando Henrique
Cardoso. Después de la denuncia de este periodista, varios diputados (que
vendieron sus votos) dimitieron de sus mandatos (6).
Por lo tanto, externamente, la novedad de este golpe de estado se encuentra en
su asociación con las actuales estrategias geopolíticas de los Estados Unidos:
174
contar con la complicidad y la traición de la derecha política brasileña para
destruir el MERCOSUR y todas las instituciones autónomas e independientes
que habrían sido inspiradas y organizadas por el liderazgo del difunto
presidente Hugo Chávez y por el movimiento popular de izquierda de
América Latina.
En resumen, podemos también observar que entre los objetivos económicos y
geopolíticos de los EE.UU. de este golpe de estado en Brasil, se encuentra el
desarrollo de una política estratégica para destruir la asociación de los países
del BRICS. Entonces, en un sentido amplio, el plan de Estados Unidos es
derrotar a los gobiernos de izquierda en América Latina a través de golpes
(“blandos o duros”) como ya se ha visto en los golpes contra Honduras y
contra Paraguay en este siglo XXI. También podríamos mencionar que los dos
golpes de estado anteriores, implementados por los EE.UU en contra del
gobierno del ex presidente Hugo Chávez, no tuvieron éxito.
Actualmente, los EE.UU. estaría planeando (con la activación del Comando
Sur y con la ayuda del gobierno de Juan Manuel Santos de Colombia) invadir
a Venezuela para destruir el gobierno nacionalista y popular del presidente
Nicolás Maduro. Esta nueva forma de guerra de los EE.UU. contra los
gobiernos de izquierda (o gobiernos "enemigos") se puede nombrar, de
acuerdo al periodista Pepe Escobar (y otros intelectuales internacionalistas
lúcidos), de "guerra híbrida". (7)
-C.B. En este punto, me gustaría preguntar ¿cómo se posiciona usted
políticamente, considerando no solo la distancia sino su doble
nacionalidad (brasileña y estadounidense), en relación a los partidos
políticos brasileños: ¿Está usted afiliado al PT y se identifica con los
gobiernos de Lula y/o de Dilma?
-J.M Antes de responder a su pregunta, debería colocar ciertas coordenadas
espaciales y temporales, informándole que como brasileño, que estudió y
vivió en México, y después, estudió y está viviendo en los Estados Unidos,
nunca di mi voto a los candidatos de los partidos políticos brasileños como el
PMDB, PSDB o el PT. En pocas palabras, nunca voté, en el pasado o en el
presente, por Fernando Henrique Cardoso, del PSDB, ni por Lula del PT, ni
por Dilma Rousseff.
También le informo que, como ciudadano estadounidense, nunca voté por
candidatos del Partido Republicano o del Partido Demócrata, ya que la
mayoría de sus representantes (los que son elegidos a la presidencia de
Estados Unidos, al Senado, o a la Cámara de Representantes), tiene sus
campañas políticas subvencionadas por el dinero de Wall Street, por el dinero
de los grandes bancos estadounidenses, por el dinero de las grandes empresas
y organizaciones tales como The American Israel Public Affairs Committee,
175
el AIPAC (el Comité de Asuntos públicos Estados Unidos-Israel) y otras. Así,
desde el punto de vista objetivo, casi todos los funcionarios del gobierno de
Estados Unidos están a servicio de los intereses del gran capital que financian
sus elecciones.
Debo resumir este punto declarando que estoy en contra de cualquier tipo de
corrupción. Pienso que toda autoridad política corrupta de Brasil, de los
EE.UU. o de cualquier otro país capitalista, debería ser punida criminalmente
por un sistema legal verdaderamente democrático e igualitario.
Sin embargo, también soy forzado a reconocer que la corrupción es la realidad
inexorable de todas las sociedades capitalistas; la corrupción es una realidad
sistemática entre todas las clases dominantes, entre todos los partidos políticos
de todos los países del sistema capitalista del planeta tierra.
En la España capitalista de hoy, por ejemplo, el rey Juan Carlos de Borbón, su
familia real, sus instituciones franquistas, su iglesia católica, sus partidos
políticos tradicionales, (como el PP, el PSOE y otros) han sido denunciados
sistemáticamente por estar involucrados en escándalos de corrupción masiva.
Pero la monarquía española, borbónica, franquista (con sus instituciones y sus
medios corporativos capitalistas) y sus partidos políticos de derecha siguen
viviendo en la misma impunidad de siempre.
Los Estados Unidos de América (EE.UU.) es uno de los extraordinarios
ejemplos del sistema de corrupción y corruptor que modela el mundo
contemporáneo. Los Estados Unidos es actualmente uno de los países donde
hay uno de los mayores niveles de corrupción en todo el mundo. Y sin
embargo, la media corporativa, las instituciones tradicionales y las autoridades
gubernamentales de EE.UU. no permiten que la mayoría del pueblo
estadounidense tome consciencia de lo que está pasando, por lo que seguirá
promocionando la mitología que “los EE.UU. es la mayor democracia del
mundo”, “los EE.UU. es el país que más respeta los derechos humanos de los
individuos”...
Todo esto es mitología política como vemos, recientemente en el artículo del
periodista David DeGraw titulado, “The Wall Street’s Pentagon Papers:
Biggest Financial Scam In World History”, donde demuestra que el banco
central de Estados Unidos (la Reserva Federal, FED) realizó un “backdoor
bailout” (rescate secreto) con el dinero de los impuestos de los contribuyentes
estadounidenses. Es decir, la Reserva Federal (FED) ha distribuido en secreto
$12.3 TRILLION tax dollars, del dinero de los contribuyentes
estadounidenses a un pequeño grupo de banqueros. (8)
Este gigantesco fraude ya fue denunciado anteriormente por el senador Bernie
Sanders, (el actual candidato a la presidencia de los Estados Unidos). En
176
diciembre de 2012, Sanders denunció la Reserva Federal y su presidente
(Chairman), Ben Bernanke, al Senado de Estados Unidos, además de
informarnos de lo ocurrido (de este gigantesco proceso de corrupción
financiera) en su artículo “A Real Jaw-Dropper at the Federal Reserve” en
el Huffington Post (9).
En Brasil, la corrupción ha existido desde los tiempos de la colonización
portuguesa y también ha sido ampliamente practicada en el siglo XX-XXI por
los partidos políticos tradicionales, tales como la antigua Unión Democrática
Nacional (UDN), y ARENA (el partido de la dictadura militar de 1964), por el
PSDB, por el PMDB y muchas otras organizaciones, políticas, económicas,
militares y religiosas del país.
En Brasil, la corrupción no es una característica única y exclusiva del Partido
dos Trabajadores (PT). ¿Cómo olvidar, por ejemplo, que el ex presidente
Fernando Collor de Mello fue elegido a la presidencia por una campaña
política contra la corrupción (contra los "marajás" contra las "mordomias" en
Brasil) y luego, finalmente, fue sometido a juicio político
e impeached (impedido) por ser uno de los políticos más corruptos de nuestro
país?
No tengo ninguna duda que el PT, Lula, y sus representantes políticos han
practicado y promovido la corrupción y que se han beneficiado de la
corrupción que han promovido. Sin embargo, estoy del lado de todos los
analistas que han argumentado que hasta ahora, los líderes del golpe no han
podido demostrar ni probar nada que sea legalmente sustancial contra la
presidenta, Dilma Rousseff; y que todo lo que los estafadores afirman en
contra de Dilma ha sido solo propaganda para justificar y legitimar el golpe de
estado a través del proceso anti-constitucional de destitución de la presidenta.
Notas (organizadas por Catherine Bryan)
1) Véase el artículo de Emanuel Cancella, JANOT, O QUE O PAÍS QUER É
JUSTIÇA PARA TODOS! publicado en el diario brasileño Tribuna da
Imprensa, en el
enlace:http://www.tribunadaimprensasindical.com/2016/06/janot-o-que-opais-quer-e-justica-para.html
2) Oxafam revela los siguientes datos: “A día de hoy, 62 personas acumulan la
misma riqueza que la mitad de la población más pobre de nuestro planeta. Ver
el enlace:https://www.oxfam.org/es/informes/riqueza-tenerlo-todo-y-querermas
177
3) Véase, por ejemplo, el papel de los contratistas en el caso de corrupción en
el artículo “As quarto irmãs: Odebrecht, OAS, Camargo Corrêa e Andrade
Gutierrez.” en el enlace: http://antigo.brasildefato.com.br/node/ 29039.
4) Recientemente, Wikileaks reveló que el vicepresidente golpista Michel
Temer es informante de la CIA y el diario Folha de Sao Paulo (aunque de
mala gana) tuvo que publicar esta importante noticia. Ver el enlace,
http://www1.folha.uol.com.br/poder/2016/05/1771016-wikileaks-diz-quemichel-temer-atuou-como-informante-dos-eua.shtml. Y el reciente artículo,
“Sérgio Moro, um juiz a serviço da TV Globo e do PSDB” muestra que el
principal interesado en la "Operación Lava Jato" es el PSDB y las
multinacionales del petróleo. Ambos son clientes de la esposa de Sergio
Moro. Ver el enlace:http://cartamaior.com.br/?/Editoria/Politica/Sergio-Moroum-juiz-a-servico-da-TV-Globo-e-do-PSDB/4/33770.
5) El conocido periodista Sebastião Nery escribió un artículo para el periódico
Tribuna da Imprensa denunciando las relaciones escabrosas entre Fernando
Henrique Cardoso y la CIA. Nery resume: “ Esta história, assim
aparentemente inocente, era a ponta de um iceberg. Está contada na página
154 do livro Fernando Henrique Cardoso, o Brasil do possível , da jornalista
francesa Brigitte Hersant Leoni” (Editora Nova Fronteira, Rio, 1997, tradução
de Dora Rocha). Ver el artículo completo en el
enlace:http://acertodecontas.blog.br/atualidades/dinheiro-da-cia-para-fhc/
6) Véase el reciente testimonio del periodista Fernando Rodrigues sobre la
corrupción del gobierno de Fernando Henrique Cardoso en el
enlace, https://www.youtube.com/watch?v=BkGGWSHlO8g
7) Véase el artículo de Pepe Escobar, “ Brasil e Rússia sob ataque de Guerra
Híbrida" en el enlace, http://blogdoalok.blogspot.com/2016/03/pepe-escobarbrasil-e-russia-sob-ataque.html
8) Véase la traducción del artículo del periodista David DeGraw en el
enlace, http://thoth3126.com.br/a-maior-fraude-financeira-da-historiamundial/
9) El artículo del senador Bernie Sanders, “A Real Jaw-Dropper at the Federal
Reserve”, se puede ver en el enlace: http://www.huffingtonpost.com/repbernie-sanders/a-real-jaw-dropper -at-the_b_791091.html
Catherine Bryan es profesora de literatura y cultura latinoamericana.
178
Retroceso regional desde el Mercosur/ La integración amenazada
https://www.rebelion.org/noticia.php?id=214438
Basem Tajeldine y Laila Tajeldine
Rebelión
La victoria electoral del Comandante Hugo Chávez en 1998, de Luis Ignacio
Lula Da Silva en 2002, de Nestor Kirchner en 2003, de Evo Morales en 2005 y
de Rafael Correa en 2007 abrieron los caminos hacia la creación de nuevos
espacios de integración regional, esta vez, basado la cooperación y la
solidaridad mutua, bajo criterios NO puramente mercantiles y de respeto a
las asimétricas económicas. La visión de aquellos gobernantes visionarios era
de allanar los caminos con miras a la unión de nuestros países.
El eje conformado entre los gobiernos revolucionarios y progresistas
(Venezuela, Brasil y Argentina, Bolivia y Ecuador) logró enterrar durante la
Cumbre de las Américas celebrada en 2005 en Mar de Plata, Argentina, al
más ambiciosos y lesivo proyecto estadounidense que pretendía socavar las
soberanías de todos los países de la región y someterlos a los intereses de sus
transnacionales: El Área de Libre Comercio para las Américas, mejor
conocido como el ALCA.
La prioridad de los gobiernos progresistas y revolucionarios liderizados por
Venezuela, Brasil y Argentina pasó a ser la integración regional y el
intercambio Sur-Sur. Estos constituyeron un bloque opuesto de forma frontal
al ALCA y los Tratados de Libre Comercio (TLC) bilaterales (o por separado)
que desarrollaron Estados Unidos y Europa con países como Perú, Chile,
Colombia y México.
En el caso del Mercado Común del Sur (MERCOSUR) que había nacido en
1991 y adoptado políticas económicas influenciadas por las tesis neoliberales,
lo cual le trajo serios problemas, con la llegada al poder de los gobiernos
progresistas y revolucionarios, este organismo subregional logró colocar "los
caballos de la política y al ser humano por delante de las carretas
económicas"[1].Sin embargo, la respuesta del hegemon que vio perder a su
histórico "patio trasero" no tardó en llegar.
Para hacer frente a las nuevas realidades de la región, Estados Unidos
promovió junto a sus países satélites-vasallos un conjunto de políticas
destinadas a socavar al bloque suramericano. Por lo que se constituyó la
Alianza del Pacífico con Estados Unidos para hacer frente al MERCOSUR.
En el campo diplomático y las relaciones multilaterales, estos países
presionaron por darle mayor peso a la Organización de Estados Americanos
(OEA) con el propósito de hacer frente a la Unión de Naciones Suramericanas
179
(UNASUR) fundada en 2008 y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y
Caribeños (CELAC) creada en 2010, al tiempo que era reactivado el Comando
Sur de EE.UU. y la 4ta Flota estadounidense en 2008 encargada de "velar por
la seguridad del hemisferio y los intereses nacionales de Estados Unidos" y
poner en marcha un nuevo Plan Condor 2.0, esta vez, por medio de acciones
encubiertas y métodos de guerra no -convencional, orquestados a través de
ONG's (la USAID y la NED) que incrementaron el financiamiento a los
medios privados opositores, partidos y movimientos políticos con el propósito
de desestabilizar aquellos gobiernos.
La derrota electoral del Kirchnerismo en Argentina en diciembre de 2015, la
consumación del golpe de Estado "institucional" en Paraguay 2012 y Brasil
2016, y el revés político del 6D ocurrido en Venezuela crearon un panorama
político complejo de retrocesos en toda América Latina. Los días de gloria
suramericana, en que la región se levantaba al unísono, en bloque, con
posiciones propias y desafiantes al imperialismo están quedado atrás. No
existen dudas que Ecuador, Bolivia, Venezuela, Nicaragua, El Salvador y
Cuba resisten estoicamente a los éxitos de la arremetida imperialistas y de sus
parásitas burguesía locales, pero los reveses políticos ocurridos en los países
cuyas economías ejercían un peso específico de importancia en mecanismos
como el MERCOSUR (Brasil y Argentina) significaron un duro golpe para la
continuidad de los procesos integracionistas.
Hoy nadie duda de que la región atraviesa por un proceso de restauración
neoliberal que amenaza a todos sus pueblos.
Restauración neoliberal en el continente y la agresión a Venezuela
Recientemente, el actual ministro de economía de Argentina, Alfonso PratGay, develó los verdaderas propósitos que mueven la política exterior de los
gobiernos de Mauricio Macri y al de su vecino usurpador Michel Temer.
Frente a varios medios, Prat-Gay declaró en relación de los cambios políticos
en Brasil que su país era muy "respetuoso del proceso institucional y, desde el
punto de vista económico, quizás Brasil entienda que su integración al mundo
no puede ser de manera individual, por lo tanto será una buena
oportunidad para refundar el Mercosur" [2].
Los mismos gobiernos que plantean el restablecimiento del modelo neoliberal
y su realineamiento a Estados Unidos, en esta oportunidad pretenden demoler
los procesos de integración regional que tanto esfuerzo costaron a nuestros
pueblos y su vanguardia.
Años atrás, con el fortalecimiento del MERCOSUR, gracias a la prótesis
colada por los gobiernos progresistas de Brasil y Argentina y la entrada de
Venezuela al organismo, se pudo avanzar hacia la fundación de UNASUR,
180
con su Consejo Suramericano de Defensa, el Banco del Sur, entre otros
organismos. Al calor de aquellos procesos de integración nacieron otros
organismos, unos más temprano como la Alianza Bolivariana el ALBA y
Petrocaribe en 2004 y la CELAC en 2010, espacios que derrotaron la Doctrina
Monroe impuesta por Estados Unidos en toda la región.
Desde la independencia de nuestros países, nunca el imperio estadounidense
había estado tan aislado de todo el continente. La UNASUR y la CELAC espacios multilaterales en los que no participa Estados Unidos- fueron
organismos creados para contrarrestar la influencia negativa de Estados
Unidos en la región y generar la necesaria independencia política.
América Latina había comenzado a desarrollar relaciones soberanas con otras
potencias emergentes en el mundo, especialmente con China, país que
prometió la inversión de 250 mil millones de dólares para los próximos años
en el continente. Además, la región pasó a tener vos propia en los espacios
internacionales para denunciar las pretensiones imperiales y combatir el
modelo neoliberal que se pretendía imponer desde el norte a través de sus
agentes políticos y las burguesías parásitas.
Al respecto, el reconocido intelectual brasileño, Emir Sader, comentaba en su
más reciente y certero artículo titulado "El desmontaje de la integración
regional" que "el intercambio regional, la intensificación del comercio con
China y la extensión y profundización del mercado interno de consumo
popular fueron claves en esa resistencia a la recesión, que en otras condiciones
nos habría llevado a la peor recesión de nuestra historia". Y que "el cambio de
gobierno en Argentina y ahora en Brasil es la oportunidad tan aguardada por
los EEUU para la ruptura de su aislamiento en América Latina" [3].
¿Qué significa “refundar el Mercosur”?
La derecha siempre ha querido, sin terminar con el Mercosur, abrir espacios
para acuerdos bilaterales de libre comercio con la Unión Europea y Estados
Unidos y su acercamiento con la Alianza del Pacífico. Es decir, se pretende
imponer el TLC de golpe a todos el bloque regional, lo que en otras palabras
sería, en efectos prácticos, el replanteamiento del ALCA para toda América
Latina. Es ese el objetivo central de esa “refundación” a la que se refería el
argentino Alfonso Prat-Gay, que resultaría en el comienzo del desmonte de los
procesos de integración regional, debilitando al MERCOSUR, UNASUR y la
CELAC, tal como reconoce Emir Sader en su citado escrito.
La estrategia actual de los gobiernos neoliberales es arreciar el cerco contra
Venezuela, Bolivia, Ecuador, Nicaragua, El Salvador y Cuba. Para ello, han
intentado utilizar a la OEA para justificar una intervención militar
181
estadounidense contra Venezuela bajo el falso pretexto de "crisis
humanitaria".
Ahora Paraguay, Argentina, Brasil y Uruguay pretenden evitar que Venezuela
asuma la presidencia protempore del MERCOSUR, tal como corresponde
según los estatutos del organismo de rotación alfabética. Para ello, esgrimen la
falsedad de que en Venezuela se ha "roto con el hilo constitucional" y por
tanto, aplicaría la declaración de Ushuaia que justificaría suspender al país de
ese organismo.
La restauración neoliberal no dispone del apoyo de las grandes mayoría de los
pueblos de la región. Los movimientos y partidos de izquierda deberán asumir
un papel más combativo para el rescate de los procesos de integración
regional y el intercambio Sur Sur, para dejar de ser el “patio trasero” del
Imperio.
¿Podrán las derechas bastardas de la región volver a reinstaurar el mismo
modelo neoliberal que había fracasado estrepitosamente 20 años atrás?
Después de tantos logros y conquistas sociales alcanzados por nuestros
pueblos; después de haberse recuperado la dignidad y la soberanía de la región
será muy difícil que se imponga el neoliberales en paz y sin resistencia. El
jugo no ha terminado.
Fuentes
[1] Palabras del Comandante Hugo Chávez en el marco de la incorporación de
Venezuela al MERCOSUR como país observador en 2006.
[2] Declaraciones del ministro PratGay: http://www.telam.com.ar/notas/201605/147132-prat-gay-blanqueocapitales-moratoria-ordenamiento-economia.html
[3] Emir Sader. http://www.alainet.org/es/articulo/177453
Observaciones sobre ciencia, poder político-militar y cuentas insaciables de
resultados (y II)
Eduard Rodríguez Farré y Salvador López Arnal
Papeles de relaciones ecosociales y del cambio global
https://www.rebelion.org/noticia.php?id=214430
182
3. Si de pensar y no olvidar se trata
La dependencia que los grupos de investigación tienen de la financiación
pública y privada es tema conocido. Desgraciadamente esta última, que suele
buscar resultados inmediatos en términos mercantiles y gananciales, está
adquiriendo un protagonismo creciente que puede entrañar –y entraña ya de
hecho- graves peligros que no nos son desconocidos. A ellos debemos
enfrentarnos, frente a ellos debemos permanecer alertados y resistentes; sin
duda, por supuesto que sí. Un ámbito más –muy importante y a veces
olvidado- del necesario combate y de la imprescindible participación crítica de
la ciudadanía, de las propias comunidades científicas y de sociedades que
aspiran a otro orden de cosas.
Ilustremos este punto. La vacuna, la VSV-EBOV, que llega un año y medio
después del anuncio oficial de la epidemia del Ebola, ha sido desarrollada por
la Agencia de Salud Pública de Canadá. La licencia, en cambio, está en manos
de la farmacéutica estadounidense Merck. Este es un ejemplo, no el único
desde luego, de investigación e innovación pública y producción y beneficio
crematístico privado al que antes nos hemos referido. De acuerdo.
Pero hay otros escenarios muy alejados que a veces se olvidan desde algunas
perspectivas críticas. Un ejemplo. A mediados de 2006, la OMS lanzó un SOS
internacional: se necesitaba la producción masiva, al coste más reducido, de la
vacuna contra la meningitis A y C, con destino a los 23 países del llamado
“cinturón de la meningitis” africano. Sólo una multinacional -“Sanofi
Pasteur”- fabricaba la vacuna pero, dada la baja rentabilidad económica de su
comercialización, había reducido drásticamente sus volúmenes de producción.
África estaba al borde de la emergencia sanitaria. El color del dinero lo
impregna todo, incluso la vida (es decir, la muerte en este caso) de millones de
seres humanos.
La OMS pidió entonces a laboratorios públicos y privados de todo el mundo
que dieran un paso al frente y encontrasen la manera de fabricar millones de
vacunas a bajo coste. Ninguna multinacional respondió; las cuentas no
cuadraban. Sí lo hicieron, en cambio, dos laboratorios públicos de sendas
naciones del Tercer Mundo. El Instituto Finlay de Cuba y el Instituto BioManguinhos de Brasil se asociaron para la creación de la vacuna vax-MENAC, específica para los tipos de meningitis que afectan a la región africana.
En Cuba se produce el principio biológico y en Brasil se desarrolla el resto del
proceso de producción, incluyendo la liofilización y el envasado. El precio
final de cada dosis se redujo más de veinte veces. De los casi 20$ USA de la
vacuna comercializada por la multinacional se pasó a un precio inferior a los
95 centavos. Desde entonces, la alianza Brasil-Cuba ha permitido fabricar
vacunas para África, que son adquiridas y distribuidas por entidades como la
propia OMS, UNICEF, Médicos Sin Fronteras y la Cruz Roja Internacional.
183
Por esta misma senda, otra ilustración No hay en nosotros, por supuesto,
ninguna idealización cegada de la Unión Europea marcadamente neoliberal,
que poco a poco, con resistencias que no deben ser olvidadas, se está
intentando imponer a la ciudadanía. Pero de esta crítica consideración no
puede colegirse sin más que todas las instituciones de esta Unión se
manifiesten siempre serviles a las órdenes de los grandes mandatarios
europeos y a los objetivos, crematísticamente insaciables, de las grandes
corporaciones de la UE. No es así. Sirva el ejemplo de algunas actuaciones del
Defensor, defensora en estos momentos, del Pueblo Europeo [1]:
Un ciudadano irlandés pidió a la Agencia Europa de Medicamentos (EMA por
sus siglas en inglés) acceder a una serie de documentos que contenían detalles
de todas las potencias reacciones adversas graves relacionadas con un
medicamento contra el acné. Su hijo se había quitado la vida después de tomar
ese medicamento. La EMA rechazó la solicitud con el argumento de que las
normas de la UE relativas al acceso a los documentos no se podía aplicar a los
informes sobre posibles reacciones adversas graves a los medicamentos.
Recurrió al Defensor del Pueblo. Tras su investigación, la Defensora concluyó
que las normas de la UE sobre el acceso a los documentos sí podían aplicarse
a todos los documentos en poder de la EMA. La Defensora recomendó, no
puede imponer u ordenar, a la Agencia que revisara su negativa a permitir el
acceso a los informes sobre reacciones adveras y, además, instó a EMA, en el
marco de la política de información, a dar explicaciones adicionales para que
la ciudadanía pudiera comprender con mayor facilidad los datos y su
importancia.
La EMA aceptó, tuvo que aceptar finalmente, la recomendación del Defensor
del Pueblo y anunció la publicación de los informes. Adoptó, se comprometió
a adoptar, una política de información más activa, dirigida a mejorar la
transparencia en asuntos relativos al acceso a los documentos en su poder.
No hay duda de que las prácticas pueden estar alejadas de los acuerdos y
compromisos. También en este caso. No estamos ante en los compases
iniciales de una rupturista revolución social, por supuesto que no. Pero las
reformas alcanzadas en ocasiones tras movilizaciones ciudadanas pueden
ayudar y algunas instituciones, incluso las de una UE muy amiga de la idea de
un capitalismo como única alternativa económica e incluso civilizatoria,
pueden conquistar algunas posiciones en una lucha prolongada y, desde luego,
desigual.
Se dirá, se podrá pensar tal vez: idealismo pueril bienintencionado,
pensamiento desiderativo, olvido o incomprensión del decisivo papel de las
gélidas aguas del cálculo egoísta, desconocimiento de la militarización de la
ciencia, humanismo trasnochado, alejamiento o embellecimiento de las
prácticas reales de las investigaciones, ignorancia de la competitividad
184
desalmada de las comunidades científicas realmente existentes, buenismo
epistemológico, deseos afables frente a la suciedad de la ingrata y dura
realidad.
Nada de eso, no vivimos en el Edén. Conocemos el lado oscuro de la fuerza,
las inhumanas e injustas prácticas económico-sociales de los poderes políticos
y de las multinacionales. No nos es desconocido en absoluto el corazón impío
de estas tinieblas. Existen, además, ejemplos que nos ubican en coordenadas
no menos admisibles donde la tecnociencia contemporánea ha jugado un papel
nada marginal y en el puesto de mando... Aunque con algún matiz por
supuesto.
4. Si de denunciar y criticar se trata
Además de ilustraciones atómicas hay ejemplos, más recientes, que nos sitúan
en ámbitos científicos aparentemente más pacíficos e inocuos. Pero la realidad
no se identifica siempre con la apariencia, tampoco en este caso.
The Minerva Research Iniciative es un programa diseñado por el ex Secretario
de Defensa norteamericano Robert M. Gates en 2008. Su prioridad es lograr
“una comprensión más profunda de las dinámicas sociales, culturales y
políticas que dan forma a las regiones de interés estratégico alrededor del
mundo”. Existen antecedentes; los jasones [2] por ejemplo.
El programa fue dotado de un fondo inicial de 50 millones de dólares que se
ha ido incrementando. Académicos estadounidenses, “expertos” que trabajan
como analistas en temas relacionados con las políticas de seguridad, se
financian con él. Los amplios recursos disponibles se concentran en las
grandes universidades usamericanas. Defensa busca definir y desarrollar
conocimiento básico sobre las fuentes de conflictos presentes y futuros con
atención especial a la comprensión de las trayectorias históricas de territorios
clave. Se apuesta por una “ciencia social de vanguardia” y por estudios
interdisciplinarios de destacados científicos en estos campos.
Dos ejemplos de los temas seleccionados [3] en la lista de los catorce
ganadores elegidos entre las más de 300 candidaturas que se presentaron para
el período 2013-16: “La fortaleza de las normas sociales a través de las
culturas: implicaciones para el conflicto y la cooperación intercultural.”
(Michele Gelfand, Departamento de Psicología, Universidad de Maryland),
“La Geografía Humana de la Resiliencia y del cambio; los derechos de la
tierra y la estabilidad política en las sociedades indígenas de América Central”
(Jerome Dobson, Kansas, presidente de la American Geographical Society).
Este segundo aspira a dilucidar el impacto de estos factores en “las
capacidades del Ministerio y las implicaciones generales para la defensa
nacional de los EEUU”. Dobson no identifica los países en los que
185
incursionará ni los pueblos indígenas que serán “objetos de estudio”. Pretende
definir, digitalizar cartográficamente y evaluar, los regímenes del uso de la
tierra de las municipalidades indígenas. Con sus datos y resultados, los
militares tendrán “nuevas capacidades para realizar la investigación
geográfica humana, comparables con (pero más avanzadas que) aquellas que
se emplearon extensivamente durante las dos guerras mundiales”.
Minerva organiza conferencias con paneles de universitarios y de miembros
del Departamento encargados de elaborar estrategias. También con
responsables de operaciones militares. En ellas se habla de las investigaciones
en marcha y de los impactos del programa en las ciencias sociales. En 2013, la
reunión (que suele ser anual) tuvo lugar en la Universidad de California.
Contó con la presencia de su Comité Directivo, del subsecretario para
Estrategia de Defensa, Daniel Chiu, y del coordinador del Consejo Nacional
de Inteligencia, Christopher Kojm. Entre los asuntos tratados destacaron:
“Tecnología, poder y seguridad en China”, “Movilización para el cambio.
¿Quién se hace terrorista?”, “Cambio climático, acceso a los recursos y
seguridad”.
No falta en la lista de proyectos los de la antropóloga Montgomery McFate, la
iniciadora del programa de científicos empotrados en las brigadas de combate
de las guerras de Irak y Afganistán. La doctora McFate dirige el programa
“Conocimiento cultural y Seguridad Nacional” y en Antropología
militar intenta responder al siguiente interrogante: qué podemos aprender de
la experiencia de vida y del legado intelectual de los científicos sociales que
contribuyen directamente a las operaciones militares [4].
No se trata sólo de ciencias físicas, químicas y afines y del uso bélico de los
sofisticados desarrollos técnicos que posibilitan. Cabe hablar, es necesario
hablar, de las ciencias sociales y de su contribución al diseño y realización de
las operaciones militares. No hay duda. Las terribles dimensiones son ésas.
Pero también existen hay otras perspectivas que exigen más matices.
5. Si de señalar escenarios más humanos y justos se trata
A finales de julio de 2012, Annie Thébaud-Mony [ATM] no aceptó la Legión
de Honor que la entonces ministra del gobierno Cécile Duflot quería
concederle. En una carta abierta dirigida a la entonces responsable de
Igualdad, Territorios y Vivienda de la República francesa, esta investigadora
de unos 70 años de edad explicaba que con su rechazo quería denunciar “la
indiferencia” de la que es objeto la salud laboral y la “impunidad” de los
“crímenes industriales”. Era indecente aceptar la condecoración después de
llevar décadas y décadas trabajando sobre muertes obreras, tiempo en el que
ella había dado “la señal de alarma sobre la situación en la que trabajan los
186
obreros, los peligros que corren para su salud, los peligros industriales a los
que son expuestos”, sin que se hubiera producido ninguna mejora real,
efectiva, en sus condiciones laborales. Las recomendaciones que ha ido
realizando a lo largo de su dilatada carrera científica nunca han sido tenidas en
cuenta por poderes públicos de muy diferente signo político.
En una entrevista con Terra eco [5], ATM añadió algunas razones
complementarias para explicar su actitud.
Hace más de quince años que el amianto ha sido prohibido en Francia; en
España se prohibió años después, en 2002 [6]. Se pensaba que a esta
excelente, aunque muy tardía decisión, se sumaría la prohibición de otros
productos industriales cancerígenos. Pero no ha sido así. Los “industriales”
saben perfectamente que “ciertos productos que obligan a sus empleados a
utilizar son peligrosos y que las condiciones de trabajo son patógenas”. Es una
exposición dañina y deliberada de la vida ajena. “Las modificaciones del
derecho del trabajo protegen más a los industriales y a los empleadores que a
los asalariados”, denuncia ATM. En Francia y, desgraciadamente, en casi
todos los países del mundo.
El cuadro de enfermedades profesionales del régimen general de la Seguridad
Social francesa enumera la mayor parte de los problemas músculoesqueléticos (PME por sus siglas). En 2009, un gobierno presidido por
Sarkozy revisó este cuadro y endureció los criterios de reconocimiento de los
PME y, con ello, la indemnización de los asalariados. Deben trabajar entonces
los ciudadanos-obreros hasta quedar impedidos, pregunta la científica y
humanista francesa.
En lo concerniente a la exposición de los trabajadores asalariados a los
productos cancerígenos, “ninguna medida se ha llevado a cabo a pesar de las
alertas”. En Montluçon, en el departamento francés de Allier, Adisseo, una
empresa que produce la vitamina A de síntesis para la alimentación animal,
utiliza desde los noventa un cancerígeno potente, el cloracetal C5. Desde hace
unos diez años la molécula ha aparecido en la cadena de producción de la
empresa. Algunos trabajadores han desarrollado cáncer de riñón y ello “a
pesar de que existen productos alternativos que permiten fabricar la vitamina
A sin usar el cloracetal C5”. Pero Adisseo no quiere ni siquiera oír hablar de
ello. ¿Por qué? Porque los cambios en la línea de producción tendrían costes,
disminuiría la acumulación de capital, descendería la rentabilidad empresarial,
les haría, proclaman horrorizados, menos competitivos. De este modo, sin
introducir modificación alguna, ubicando siempre los cálculos costesbeneficios en un lugar destacado del puesto de mando y dirección, las
trabajadoras se ven expuestos al peligro de sustancias tóxicas. “Esto es un
crimen industrial”, afirma, sin eufemismos encubridores, la comprometida
científica francesa.
187
Los asalariados del país de Jean Jaurès no trabajan en condiciones adecuadas.
En los sectores de la química, la petroquímica, el automóvil, la metalurgia y,
por supuesto, en la industria nuclear, la situación laboral es frecuentemente
nociva. No tanto en la fase de producción, aunque también en ocasiones,
donde “las medidas de confinamiento son sobre todo eficaces y muchos
procesos son automatizados”, sino en la fase de mantenimiento y en la
limpieza y gestión de residuos. Es en estos procesos cuando los trabajadores
entran directamente en contacto con productos cancerígenos.
La directiva REACH (Registro, Evaluación y Autorización de Sustancias
Químicas) de la UE, donde se calcula que cada año fallecen por cáncer de
origen laboral más de 30 mil trabajadores, está vacía de sentido. La
observación crítica de ATM, a la que probablemente se sumaría complacido el
científico y activista Jorge Riechmann, apunta a que la Reach ha introducido
un principio positivo, ya que los industriales tienen que efectuar pruebas de no
toxicidad del producto que van a utilizar… pero hay un retraso abismal. “Sólo
algunas decenas de productos son examinados y ninguno ha sido prohibido en
esta etapa”.
Existe una verdadera “epidemia de cáncer” entre los trabajadores en su
opinión. No es una exageración, vivimos un fuerte agravamiento de las
desigualdades tóxicas. En 1980, un trabajador industrial “tenía cuatro veces
más riesgo de morir de un cáncer antes de los 65 años que un mando
superior”. En 2000, veinte años después, la proporción es diez veces superior,
más del doble. Estos cánceres están relacionados con la exposición en el
puesto de trabajo y durante un largo período de tiempo a múltiples sustancias
cancerígenas y no, por el contrario, a las especificidades biológicas de cada
trabajador, el nudo que la industria y sus científicos y políticos asalariados y
serviciales suelen señalar.
La paradoja social y científica que ATM denuncia puede formularse así: los
riesgos se incrementan al mismo tiempo que aumenta nuestro conocimiento de
ellos. Adquiere también una importancia decisiva el hecho de que los
trabajadores no tengan posibilidades reales de elección. En numerosos
sectores, “el modo de funcionamiento dominante es la subcontrata del
trabajo”, con la correspondiente subcontrata de los riesgos. La servidumbre
salarial causa estragos.
Los “emprendedores” industriales, al igual que los financieros o los ejecutivos
de fondos de inversión, se burlan de los poderes públicos. A pesar de las
numerosas informaciones científicas contrastadas, “ponen constantemente en
duda los peligros que sus empleados corren”. La ciencia, los conocimientos
científicos, no son en este caso amigos serviles. Por si faltara algún detalle
más falsario, cínico y cruel en el paisaje, tienden a presentar estos peligros
profesionales como inevitables y normales. Es lo que hay, dicen, se dice, se
188
afirma, se repite… pero no es de ninguna de las maneras lo que debería y
podría existir. Es una gran estafa política y sociocultural su supuesta y falsa
inexorabilidad. Además, denuncia ATM, cuando hay un accidente de trabajo
se indemniza mal y sin examinar la causa del peligro industrial responsable de
lo sucedido. No hay ciencia sino existe consciencia
La comprometida científica francesa pone finalmente énfasis en la señalada
creciente subcontratación de asalariados (práctica más que extendida en la
citada industria nuclear, también en la nipona o en la española) y en “las
instituciones representativas del personal que sistemáticamente son
silenciadas en las empresas de subcontrata”. El arma prioritaria, la condición
necesaria (aunque no suficiente) para la mejora real, para la dignificación de
las condiciones laborales, es la información -veraz y contrastada- a los
trabajadores y trabajadoras de los peligros que corren en el desempeño de sus
tareas. Cuanto más clara, concisa y documentada, mejor que mejor; contra
mejor buena ciencia, mayor humanismo crítico se abre ante nuestros ojos y
prácticas. La acción y las protestas alocadas, sin solidez, aunque
comprensibles en numerosas ocasiones dada la más que justa indignación que
las mueve, no conducen a ninguna parte, a ningún lugar en el que podamos
asirnos con confianza.
“Indignación y lucha documentada”, rebeldía, protesta y ciencia crítica, éste
es el lema central en opinión de Annie Thébaud-Mony. También es el nuestro
Notas
1) Por la misma senda. En 2014, la Defensora del Pueblo, la iniciativa
AllTrials y multitud de organizaciones se opusieron frontalmente a la EMA
cuando la agencia propuso que los datos de los ensayos clínicos se pudieran
consultar únicamente en un formato de solo lectura, en una pantalla, sin poder
descargarlos, grabarlos y estudiarlos. Tras la polémica, la EMA dio marcha
atrás, aunque permitirá que la industria elimine de sus ensayos información
que considere confidencial por motivos comerciales (además, los ensayos
clínicos anteriores a 2015 no se harán públicos de manera proactiva sino
previa petición). Pero muchas organizaciones médicas ya han puesto en
duda la necesidad de algunas de estas censuras.
2) Los jasones eran grandes científicos del mundo académico norteamericano
(Eugene Wigner, Charles Townes, Hans Bethe, Luis Álvarez, Murray GellMann, Steven Weinberg, Val Fitch, Leon Lederman, y Henry Kendall) que,
durante la guerra fría, asesoraron directamente al Departamento de Defensa
del gobierno (véase Ann Finkbeiner, Los jasones. La historia secreta de los
científicos de la guerra fría. Paidos, Barcelona, 2007, traducción de Albino
189
Santos Mosquera).. El Pentágono, probablemente, es la principal fuente de
investigación mundial en los temas más diversos que tengan interés para sus
objetivos (desde la física nuclear hasta la antropología cultural pasando por la
toxicología).
3) http://minerva.dtic.mil
4) A partir de Gilberto López y Rivas , “Los académicos al servicio del
imperio: The Minerva Research
Iniciative”. www.jornada.unam.mx/2014/04/11/index.php?section=opinion&a
rticle=025a2pol
5) http://www.terraeco.net/Les-industriels-mettent,45726.html (traducción
castellana de Carmen García Flores
en http://www.rebelion.org/noticia.php?id=155395).
6) Véase el excelente e imprescindible estudio: Francisco Báez
Baquet, Amianto: un genocidio impune , Málaga, Ediciones del Genal, 2013.
Fuente: Papeles ecosociales y del cambio global , n.º 133, primavera de 2016.
Chile / DDHH: “No tenemos otro camino que crear un movimiento amplio
por los DDHH y Sociales”
Andrés Figueroa Cornejo [email protected]
 Hablan Roberto D’Orival y Verónica de Negri
“Cuando ardió la ciudad, cuando el tanque arrasó y su pueblo cayó traicionado otra vez, la vi mucho a
través de los meses actuar, trabajar, ayudar, desgarrarse los pies”
Patricio Manns
Andrés Figueroa Cornejo
El invierno de Santiago de Chile, desde la perspectiva de las resistencias populares, se combina
dinámicamente entre el Pueblo Mapuche, el movimiento estudiantil, la lucha por la salud
pública, la vivienda social digna, las huelgas desagregadas del pueblo trabajador y las batallas
del ambientalismo consecuente. Sin embargo, las iniciativas por los derechos humanos, en sus
diversas manifestaciones, no duermen.
Roberto D’Orival Briceño es el coordinador del Colectivo 119 de DDHH (por las 119 personas
detenidas y desaparecidas hace 41 años por la tiranía (1) y en pleno accionar de la Operación
Cóndor o asociación criminal de las policías políticas de varios Estados de América Latina). La
pasada tarde-noche del 6 de julio, el Colectivo 119 realizó una actividad en la comuna de
Recoleta de Santiago de Chile.
Roberto D’Orival (hermano del detenido desaparecido Jorge D’Orival Briceño en el marco del
‘caso de los 119’) señala que como organización“Desde siempre hemos establecido un paralelo
entre la lucha que dieron las y los caídos, las luchas que nosotros/as hemos dado, y las luchas
190
actuales que están ofreciendo los diversos territorios, sectores, grupos, colectivos en contra
del capitalismo a lo largo de este lugar llamado Chile. Reconocemos a las y los que luchan hoy
a nuestros/as muertos. Ese es, quizás, el motor menos científico y más emotivo de porqué
queremos imperiosamente ligarnos a las reflexiones y las luchas del presente.”
“PARA NOSOTROS/AS LA CONTRADICCIÓN ES EL CAPITAL VERSUS LA VIDA EN TODA SU
RIQUEZA”
-¿Cuáles son los quehaceres principales del Colectivo 119 aquí y ahora?
“El 2016 queremos abocarnos a tocar dos grandes temas. El primero tiene que ver con los
derechos de la Madre Naturaleza, de la cual nosotros/as somos bendecidos y favorecidos. Ella
nos ha permitido la generación de la cultura. ¡Y mira el pago que se le ha dado por el
capitalismo y por el Estado chileno sometido por el capital! Por eso hoy convocamos a un
excelente foro-participativo con tres expositoras y lideresas de las luchas medioambientales
como son Francisca Fernández Droguett por la batalla del agua, Nathalie Joignant que es parte
de una coordinación en lucha por el No Alto Maipo, y Lucía Sepúlveda quien participa
protagónicamente en un colectivo contra el engendro imperialista del TPP (o Alianza del
Pacífico). Estas problemáticas nos indican claramente que no sacamos nada con enfrentar
ámbitos de política institucional, sacar constituciones, elegir alcaldes y diputados, si tenemos
territorios, mar y afluentes acuíferos devastados. O sea, el cambio cultural respecto de nuestra
relación con el medioambiente es incluso anterior al cambio político. Aquí estamos hablando
de la sobrevida de la especie. Para nosotros/as la contradicción es el capital versus la vida en
toda su riqueza. Ahora mismo, los habitantes de la cuenca de Santiago de Chile estamos
consumiendo minerales pesados en el agua sólo porque unos pocos tenían un superávit de
esos elementos dañinos y les convino venderlos a los ‘huevones’ de los chilenos para ser
combinados con el agua potable. Asimismo, estamos respirando pésimo. Los propios índices
que las instituciones del Estado entregan son catastróficos. Estamos matándonos, secando
nuestros pulmones, nuestros riñones y corazones.”
-¿Cómo calificas las realidades que acabas de mencionar?
“Este cuadro constituye un verdadero conflicto de baja intensidad en contra de la población,
con el fin de controlar al ser humano y a las organizaciones en resistencia mediante un
sinnúmero de agresiones. Como si fuera poco, vivimos en metrópolis que se van
conurbanando, asimilando y que cada día nos alejan más de ese derecho que es el Buen Vivir.”
EL PATRIARCADO Y LA VIOLENCIA EN CONTRA DE LAS MUJERES
-¿Cuál es la segunda línea de trabajo que están ejecutando?
“Asimismo, queremos relevar este año a una de las instituciones chilenas rectoras desde
siempre y que se expresan con brutalidad hoy y antes a través del abandono del Estado: el
patriarcado y la violencia en contra de las mujeres. Por ello presentaremos una obra de
teatro/debate que se llama “Cuerpo quebrado” que dirige Natalia Cuéllar. La obra se basa en
los testimonios de tres mujeres detenidas desaparecidas: Michelle Peña, del Partido Socialista
(2); Cecilia Labrín, militante del MIR (3); y Reinalda del Carmen Pereira, del Partido Comunista
(4). Son tres mujeres embarazadas, como muchas militantes y no militantes de este país que
cayeron durante la dictadura cívico-militar, y que siguen cayendo en el presente en medio de
la resistencia Mapuche. No sólo son violados sus derechos políticos, sino que sus cuerpos son
territorio de captura y de la violencia política y sexual, que es donde enfatizan (o condensan)
las fuerzas militares del Estado y la policía política, el crimen y la tortura patriarcal.”
-La violencia patriarcal está mucho más extendida en las sociedades…
191
“Por eso desde allí deseamos trasladarnos al ámbito de la cotidianidad en un Chile donde no
pasa una semana en que no se produzca un caso de alguna mujer agredida o torturada por su
pareja, por el medio social, porque es negra, porque es mapuche, porque es pobre, porque es
analfabeta, porque no tiene consciencia de su ser ni de sus derechos. Hoy la lucha por los
DDHH no pasa sólo por los desaparecidos/as, los/as muertos, los/as torturados de la dictadura.
El mundo de los DDHH no quiere asumir un debate, al menos en Chile, que tiene que ver con
los derechos de la mujer y con las justicieras demandas de los feminismos.”
“¿SERÁ QUE NUESTRAS PRÁCTICAS EXPRESAN LA COLONIZACIÓN DE LA IDEOLOGÍA
DOMINANTE?”
-¿Qué otras debilidades adviertes en la lucha por los DDHH en el país?
“Dentro de las carencias de la lucha de las distintas organizaciones por los DDHH, no es posible
que no estemos gritando ¿Dónde está José Huenante (5)?, ¿dónde está José Vergara (6)? El
primero desaparecido durante el gobierno de Lagos Escobar, y el segundo bajo este gobierno
de Bachelet. ¿Cómo es posible que hoy los defensores/as de los DDHH en dictadura seamos
incapaces de decir basta a la militarización y represión, al acoso y el genocidio en contra del
Pueblo Mapuche?, ¿cómo es posible que no acompañemos la lucha del movimiento estudiantil
cuando los DDHH contemplan la educación?, ¿será que nuestras prácticas expresan la
colonización de la ideología dominante?, ¿hasta cuándo reproduciremos estas especies de
barreras y parcelas infranqueables entre cada uno de los dolores del otro/a? Para destruir
estas fronteras impuestas y autoimpuestas por el conjunto de movimientos sociales y
populares no tenemos otro camino que construir una suerte de movimiento amplio por los
derechos humanos y sociales que tenga la capacidad de revertir el actual proceso de
devastación y muerte.”
A 30 AÑOS DEL ASESINATO DE RODRIGO ROJAS, HABLA SU MADRE,
VERÓNICA DE NEGRI
El mismo 6 de julio de 2016 al mediodía, en la Plaza de la Constitución, a metros del palacio de
La Moneda envallada como un cuartel, distintas agrupaciones, personas, artistas y
comunicadores sociales conmemoraron los 30 años del espantoso asesinato del joven
fotógrafoRodrigo Rojas, quemado vivo por militares el 2 de julio de 1986, en medio de una
jornada de protesta contra la tiranía y reprimida por un operativo conjunto.
En el acto evocativo, un grupo de fotógrafos y camarógrafos independientes revelaron como
un puzle de la memoria, una gran fotografía cuadriculada que retrata a Rodrigo Rojas.
Verónica de Negri (7), madre de Rodrigo Rojas, afirmó que “Para mí es conmovedor este acto.
No hay año en que las y los fotógrafos y los movimientos sociales no estén pidiendo justicia. Y
los que hace 30 años no habían nacido, también están. ¿Qué nos dice eso? Que las y los
jóvenes quieren justicia, y si el gobierno es incapaz de escucharlos, está perdido.”
-¿Qué piensas del sistema de partidos políticos dominante?
“Que dominante sigue la derecha porque son los dueños del dinero.”
-Los gobiernos civiles pos-dictadura hablan de tu hijo como un caso emblemático…
“Yo me niego a que Rodrigo sea un caso “emblemático”. Todas las víctimas valen exactamente
lo mismo. La estrategia de los casos “emblemáticos” fue la forma más cruel y premeditada
para dividirnos.”
“¿EL DINERO SILENCIA A LA GENTE?”
192
-Hoy estamos en medio de una campaña institucional de dejar en libertad a los pocos
genocidas de la dictadura que están presos (8)…
“Simplemente es una política de cobardes y vendidos/as. ¿Cómo se puede permitir que los
violadores de DDHH, criminales de lesa humanidad, salgan libres y pasen a convertirse en
víctimas de quienes fuimos víctimas? ¿Y qué la Presidenta Bachelet no habrá la boca al
respecto? ¿El dinero silencia a la gente? Porque a mí el dinero no me sirve. Yo quiero justicia
para mi hijo. A mi familia, como a miles de familias, el golpe de Estado de 1973 nos quitó la
vida.”
“TODOS/AS LOS GOLPISTAS TIENEN RESPONSABILIDAD EN LA MUERTE DE MI HIJO, COMO
EN LO QUE A MÍ ME HICIERON”
-¿No crees que ya sería hora de que las distintas agrupaciones de DDHH se unieran como una
sola fuerza?
“Eso es lo que estoy pidiendo durante años. Sin embargo, esta actividad, por ejemplo, ha
logrado reunir a varias organizaciones ligadas a los DDHH. Porque finalmente sólo en la medida
en que nos unamos, lograremos conseguir lo que buscamos. Y no se trata sólo de justicia, sino
de la construcción de un país. Recuerdo que en el exilio nos reunimos en torno al Chile
Democrático donde trabajábamos todos juntos para desplomar a la dictadura. Otro tanto pasó
dentro de Chile, hasta que, claro, vinieron las negociaciones con Estados Unidos y el español
Felipe González con la Democracia Cristiana chilena y sectores del Partido Socialista de Chile
para la llamada “salida pactada” del régimen militar, que incluyó el plebiscito de 1988. Incluso
recuerdo que entonces se estaba candidateando para primer Presidente civil del país el
democristiano (DCCh) Gabriel Valdés, pero los norteamericanos y Felipe González impusieron a
Patricio Aylwin (DCCh), que era más “vendido” que Valdés. Todos/as saben que Patricio
Aylwin, como Presidente de la Democracia Cristiana durante la Unidad Popular de Salvador
Allende, fue uno de los artífices del golpe de Estado de 1973. De hecho, aunque haya muerto,
yo lo continúo responsabilizando por el asesinato de mi hijo Rodrigo. Todos/as los golpistas
tienen responsabilidad en la muerte de mi hijo, como en lo que a mí me hicieron. Porque yo no
me olvido de las violaciones sexuales y torturas que sufrí en manos de los agentes de la
dictadura.”
Notas
1. http://www.memoriaviva.com/Desaparecidos/119.htm
2. http://www.memoriaviva.com/Desaparecidos/D-P/pen-her.htm
3. http://www.memoriaviva.com/Desaparecidos/D-L/labrin_lazo__reinas.htm
4. http://www.memoriaviva.com/Desaparecidos/DP/reinalda_del_carmen_pereira_plaz.htm
5. http://www.ceiboproducciones.cl/?product=la-vida-breve-de-jose-huenante-historiadel-primer-detenido-desaparecido-en-democracia
6. http://www.radiovillafrancia.cl/reportaje-el-caso-de-jose-vergara-detenido-porcarabineros-y-hasta-ahora-un-desaparecido-en-democracia
7. http://www.rebelion.org/noticia.php?id=202286
8. http://kaosenlared.net/chile-agrupaciones-de-ddhh-en-contra-de-libertad-degenocidas-de-la-dictadura-carta-a-presidencia/
193
Entrevista a Pedro Brieger, periodista argentino y director del portal de
noticias Nodal.am/ La restauración conservadora en América Latina
https://www.rebelion.org/noticia.php?id=214441
Tarik Bouafia
Investig Action
Mientras América Latina vive fuertes convulsiones y hace frente a nuevos
desafíos, Investig’Action ha tenido el honor de entrevistar a Pedro Brieger,
eminente periodista argentino y director del portal de noticias Nodal.am,
analista internacional y gran conocedor del continente latinoamericaino.
Resistencias populares en Brasil, hegemonía de la derecha en Perú,
agresiones contra Venezuela… todos los temas candentes han sido
abordados con el fin de permitir a nuestros lectores hacerse una idea un
poco más clara sobre el presente y el futuro del continente
Latinoamericano.
-¿Qué análisis hace de las manifestaciones de los profesores mexicanos y
de la terrible situación que han sufrido?
-México tiene una estructura estatal represiva que no se ha desmontado sino
que se ha incrementado justamente por el tema complicado del narcotráfico,
del vínculo con Estados Unidos… Hay en ese país movimientos sociales muy
poderosos. Pero hay ver que pasó exactamente en Oaxaca como para poder
determinar a que se debió esta represión.
-¿Ve una relación con lo que pasó con los estudiantes de Ayotzinapa en
2014?
-Es muy probable que haya una relación entre esos dos aontecimientos, si.
Oaxaca ha sido también un punto importante de protesta estudiantil y de
docentes. México es un país con muy poca tolerancia hacia los movimientos
sociales, eso se verificó con el movimiento zapatista en su momento que era
un moviento social muy particular que surgió en Chiapas. Pero México tiene
altos niveles de pobreza y para mi el tema de los movimientos sociales tiene
mucho que ver con zonas de alto nivel de pobreza.
-Sobre Brasil, estamos a más de un mes de la suspensión de Dilma Rousseff.
¿Cuál es su análisis sobre este golpe en Brasil y cómo ve el futuro próximo
del país a nivel económico y político?
194
-Por lo general, yo no lo defino como golpe de Estado. En efecto, la definición
«Golpe de Estado» remite a militares destituyendo a presidentes, cerrando el
parlamento, prohibiendo partidos politicos, sindicatos, movilizaciones… Creo
que una de las características de la derecha latinoamericana en estos últimos
tiempos es acusar a los gobernantes progresistas de violar la constitución o en
el caso brasileño de ir en contra de la legalidad. Asi que esa derecha apela a la
legalidad, a la institucionalidad y tratan de mantener una gran cuota de
legalidad combinado con los métodos «tradicionales». Por ejemplo, en
Honduras, en 2009, se destituye a Manuel Zelaya, se lo saca del país pero se
mantiene la legalidad al poner a quien corresponde efectivamente a la
sucesión: Roberto Micheletti, que era el presidente de la Asamblea Nacional.
En el caso de Fernando Lugo en 2012 en Paraguay, hay claramente un golpe
de Estado parlamentario. No le dan la posibilidad de defenderse, en 24 horas
lo destituyen… pero también mantienen la legalidad. En esos dos casos, la
derecha afirma que fueron los gobernantes quienes violaron la legalidad.
El caso de Brasil es más complejo. Se vota primero en la Cámara de
Diputados, luego en el Senado, y la presidenta Dilma Rousseff sigue en
ejercicio. Hay que recordar que ella sigue siendo la presidenta de Brasil, no se
la destituyó, se la suspendió provisionalmente hasta que vote definitivamente
el Senado. Asi que también se trata de mantener un manto de
legalidad…acusándola de haber violado la legalidad. Esto es un desafío
intelectual también para entender cómo act a la derecha latinoamericana hoy
en día, acusando a los gobiernos progresistas de violar la legalidad. Dilma
Rousseff habla de golpe de Estado y es lógico que lo haga porque eso tiene un
sentido político. Pero me parece que la complejidad de la situación combinada
en Honduras, en Paraguay o en Brasil muestra que la derecha latinoamericana
está apelando a otros recursos y no a los tradicionales métodos de golpes de
Estado.
-¿Cuál es el papel que ha podido desempeñar Estados Unidos en ese golpe
parlamentario?
-Es difícil saberlo. Habría que tener acceso a documentos que prueben el rol
de Estados Unidos en lo que ha pasado en Brasil. Esta claro que Estados
Unidos tenía un gran proyecto para América Latina para el siglo XXI, que era
el Acuerdo de Libre Comercio de las Américas (ALCA), y que fracasó en
2005 en Mar del Plata porque no se pudo implementar. Pero eso no significa
que Estados Unidos se ha quedado quieto. Esta claro que frente a la ofensiva
de los gobiernos progresistas en el sentido más amplio de la palabra, ha
tratado de debilitar cualquier iniciativa de esos gobiernos progresistas como el
Mercosur, el UNASUR, la Celac.
Yo no sé si Estados Unidos está detrás de lo que está sucediendo en Brasil.
Pero eso no implica que Estados Unidos no haya ayudado a sectores
195
opositores en Brasil, en Venezuela, en Ecuador o en la Argentina… Ahora
bien, creo que en el caso brasileño, el aspecto de la corrupción estructural va
mucho más allá de los Estados Unidos. Por eso creo que hay que tener acceso
a los documentos para poder determinar el rol de los Estados Unidos. Pero
está claro que Estados Unidos sigue mirando a la región como su gran área de
influencia y no va a quedarse quieto sin destabilizar a los gobiernos
progresistas.
-Desde que asumió Temer como presidente interino, se ha dejado de hablar
de Brasil. Sin embargo, siguen las protestas contra el golpe parlamentario…
-En el portal que dirijo, Nodal, precisamente todos los dias mostramos las
marchas que hay en contra del gobierno del presidente interino Michel Temer.
Efectivamente, todos los dias hay movilizaciones. Pero al mismo tiempo, es
verdad que las grandes agencias de noticias no hablan de eso, para dar una
imagen de normalidad en Brasil, lo que no es así.
-El 5 de junio pasado, Pablo Kuczinsky, un ex-banquero ganó la elección
presidencial en Perú. Pero lo que ha llamado particularmente la atención,
es el resultado de Keiko Fujimori que perdió con muy poca diferencia.
¿Cómo se puede explicar ese arraigamiento del fujimorismo en la sociedad
peruana, mientras que Alberto Fujimori, que gobernó de 1990 a 2000, fue
condenado por corrupción y violación de los derechos humanos?
-Creo que hay dos elementos. En primer lugar, la descomposición de la
Alianza Popular Revolucionaria America (APRA), un partido histórico, como
consecuencia de la represión hacia las fuerzas de izquierda que después del
Sendero Luminoso tuvieron serias dificultades para articularse en el escenario
politico. Y en segundo lugar, debido a que el gobierno de Alberto Fujimori
llevó adelante algunas medidas positivas para las clases populares, más allá de
las prácticas neoliberales y la gran apertura de los mercados. De todas formas,
también hay que tomar en cuenta que Veronika Mendoza con el Frente
Amplio (izquierda) salió en tercera posición. Tiene la segunda bancada mas
importante en el parlamento detrás del fujimorismo, que tiene mayoria
absoluta. Pero bueno, lo que es cierto es que la represión del fujimorismo
desarticuló en gran medida a los sectores opositores.
-¿Cuál es su punto de vista sobre las recientes declaraciones del secretario
general de la Organización de los Estados Americano (OEA), Luis Almagro y
más generalmente de la campaña internacional puesta en marcha contra
Venezuela?
196
-Creo que la disputa a nivel continental, o como bien dice el economista
español Alfredo Serrano Mancilla, en este «continente en disputa», se refleja
muy bien en Venezuela con los organismos regionales. Porque quien tenía una
muy fuerte impronta era la UNASUR. Pero el cambio de gobierno en
Argentina y la suspensión de Dilma Rousseff le dio mucho más fuerza a los
sectores conservadores que prefieren que cualquier intervención en América
Latina se de a través de la OEA, tras la cual está Estados Unidos. Y creo que
ese empuje se ve claramente reflejado con la postura del secretario general de
la OEA, Luis Almagro, quien presentó un documento abiertamente a favor de
la oposición en Venezuela, tomando prácticamente todos los puntos que
plantea la oposición venezolana con respecto a la consulta popular o al
referéndum revocatorio que se puede aplicar.
Y creo que esa disputa es muy visible porque intervinieron a través de la
OEA. Es por un lado un triunfo para la oposicion venezolana meter a la OEA
en el pais, pero también es un triunfo para el gobierno de Venezuela evitar que
la OEA siga avanzando y que se haga por el intermedio de la UNASUR.
-En efecto, hoy en dia, hay claramente dos bloques que se enfrentan en el
continente. Por un lado, el bloque conservador con Brasil, Argentina, Perú ,
Colombia… abiertamente a favor de los tratados de libre-comercio y de las
politicas neoliberales. Y por otro lado el bloque progresista, con Venezuela,
Bolivia, Ecuador, Cuba… que apuestan por una mayor integración regional.
¿Será esa disputa la que hoy caracteriza a América Latina?
-Si y por eso es correcto lo de un continente en disputa. Esta claro que desde
que Chávez ganó las elecciones en 1998, se desarrolló una corriente
progresista muy fuerte en Argentina, Brasil, Uruguay, Ecuador, Bolivia,
Venezuela… Los sectores conservadores se encontraron debilitados por ese
avance progresista. Sin embargo, las situaciones que vivimos en estos últimos
tiempos marcan un cambio. El triunfo electoral de Macri en Argentina es el
primer triunfo electoral de la derecha latinoamericana por sobre un gobierno
progresista. Esto es un cambio. Esto por supesto que le da fuerza a la corriente
liberal-conservadora, más aún si tomamos en cuenta la situacion en Brasil, el
triunfo de la oposición en las elecciones legislativas en Venezuela, el fracaso
del referéndum en Bolivia. Esto le da mayor posibilidades a la derecha
latinoamericana de avanzar con su propio proyecto de tratado de libre
comercio, de reforzar a la OEA, de reforzar a la Alianza del Pacifico, Alianza
que nació para debilitar al Mercosur y a la UNASUR.
-Pero ¿como explica esa contraofensiva tan rapida y brutal de la derecha
latinoamericana en tan poco tiempo contra gobiernos que, más allá de los
errores que cometieron, tuvieron un apoyo popular importante?
197
-Hay muchos factores. Desgastes, influencia de los medios de comunicación
muy poderosos, aparato político-jurídico que no fueron transformados de raíz,
aparatos juridicos que están en profunda relación con medios de
communicación. No hay que olvidar que las naciones latinoamericanas fueron
creadas por clases sociales a sus imágenes y semejanzas con aparato juridicospoliticos y mediáticos a su servicio. Lo que encontraron en esos últimos años
fue una corriente progresista que trató de revertir esta situación de manera más
o menos radical según los casos. No es fácil cambiar estructuras sociales,
politicas, económicas de décadas… más aún cuando hubo golpes de Estado,
cuando hubo represión.
-Fue en ese sentido que algunos analistas reprocharon a Dilma, Lula y al PT
de no haber cambiado la estructura política de Brasil que sigue siendo
afectada por la corrupción…
-Yo escribí un articulo hace unos años, precisamente señalando que había una
corriente en Ecuador o Bolivia que había decidido refundar los paises en base
a la movilización popular, y que había otros como en el caso de Brasil que
habian decidido pactar y negociar. Bueno, esto marca claramente una
diferencia.
-Y la derecha recuperó el tema de la corrupción a su favor…
-Por supuesto. El tema de la corrupción es un tema muy serio. El Partido de
los Trabajadores (PT) es un ejemplo muy claro de movimiento social que
surgió con el lema de la lucha contra la corrupción, que se presentaba como
un partido diferente y sin embargo terminó cayendo en la misma corrupción
que el resto de los partidos politicos. Por eso hoy, se lo ve al PT como parte
delestablishment justamente por no haber cambiado la estructura politicaeconómica y también por haber caído en casos de corrupción.
-Vamos a terminar con el tema de Argentina. ¿Cómo interpretas ese
cambio de rumbo en la politica exterior de Argentina?
-Lo que está haciendo el presidente Macri está en sintonía con lo que dijo
siempre. Apoyó la oposición en Venezuela, siempre estuvo a favor de las
políticas neoliberales y está tomando una postura coherente con lo que venía
diciendo desde siempre. Creo que lo importante a nivel latinoamericano es
que es la primera vez que la derecha en estos últimos quince años logra un
triunfo sobre un gobierno progresista en el sentido más amplio de la palabra.
Y por supuesto que Macri ha tejido los vínculos con la derecha
latinoamericana, con la derecha europea y además está claro que busca
destruir todo aquello que se construyó con el kirchnerismo, del mismo modo
que la derecha brasileña claramente quiere destruir todo aquello que construyó
198
el PT. Por eso cuando votaba el 17 de abril en la Cámara de Diputados,
decía Fora Dilma, Fora Lula, Fora PT. El objetivo de la derecha
latinoamericana frente a los procesos progresistas es destruir toda aquella
política de inclusión que se llevó adelante. Toman el tema de la corrupción
como un tema importante pero en realidad el objetivo es destruir todo lo que
ha sido construido. La corrupción no nació en América Latina con los sectores
progresistas, la pobreza tampoco, todo lo contrario. Los sectores progresistas
lo que trataron de hacer es incluir a millones que estaban fuera del sistema.
Tarik Bouafia, Periodista y coresponsal en Argentina para Investig’Action.
Fuente original: http://www.investigaction.net/es/la-restauracionconservadora-en-america-latina/
Política y crítica de las armas
Raúl Prada Alcoreza
http://www.bolpress.com/art.php?Cod=2016071302
Vamos a tocar un tema escasamente debatido, mucho menos analizado críticamente, pues
también se ha vuelto como un fetiche asumido, desde la exaltación de la “violencia
revolucionaria”, como si la violencia en la revolución le diera a ésta radicalidad. Es como si
la furia diera radicalidad al discurso denunciativo o interpelador. Esto es como dejarse llevar
por el sensacionalismo de los significantes y de las formas simbólicas, sin atender a la única
cuestión que da radicalidad al enunciado, al discurso y a la posición política; ésta es la raíz del
problema, la raíz de la cuestión. Lo que importa es la crítica al poder; la crítica, interpelación y
acción contra las dominaciones; la crítica de la “ideología”, la crítica, la desconstrucción y el
desmantelamiento del sistema-mundo capitalista; las consecuencias prácticas de esta crítica.
En este sentido, la cuestión de las armas fue un tema fundamental en los debates de
las corrientes revolucionarias. En estas posiciones había desde las tendencias pacifistas hasta
los fundamentalismos violentos. Resumiendo el mapa de estos debates, podemos decir, que
la cuestión de las armas giraba, en un principio, por lo menos, en tres tópicos: el de la defensa
de las organizaciones, del proletariado, del pueblo; el de la conquista del poder; el de la
defensa de la revolucióntriunfante. En una segunda etapa, los tópicos aumentaron; entre
estos, se abrió al debate la irradiación de la revolución por medio de la expansión de las armas,
usando al “ejército revolucionario”. Hubo una variante, la guerrillera, que se planteó
estairradiación como foco, que se instalaba en el territorio de un país; esperando que el focose
convierta en guerra de guerrillas a mayor escala. También debemos citar, en esta lista,
incorporando un tópico, de la misma manera, poco discutido; éste es el del uso de la
violencia del “Estado revolucionario”, contra la propia sociedad; tanto para efectuar las
“transformaciones”, así como mantener el orden, de la misma manera, para desterrar a la
“oposición conspiradora”. Este último punto es de suma importancia, tomando en cuenta,
la experiencia social política de los “Estados revolucionarios” del socialismo real.
Raúl Prada Alcoreza
La pregunta es: ¿La revolución triunfante debe usar la violencia para transformar la sociedad?
Vamos a dar sobreentendida la necesidad de organizar la defensa, recurriendo a las armas; así
como, dependiendo de lascondiciones de posibilidad histórica-política y circunstancias
coyunturales, hacer uso crítico de las armas para efectuar el desenlace revolucionario; lo
mismo, suponemos que es menester defender la revolución triunfante. Empero,
¿la revolución se exporta de un país a otro, sobre todo, usando la “violencia revolucionaria”,
recurriendo a la expansión de la guerra, transfiriendo la “revolución” con el uso de las armas?
199
Por otra parte, ¿cuándo se usa la violencia en la propia sociedad para “transformarla”, sigue
siendo unarevolución? ¿No es este fenómeno la reiteración recurrente del uso de la
violencia del Estado burgués, que ejerce la violencia para mantener el orden o, si se quiere,
para lograr el desarrollo?
Cuando no se discuten estos temas y tópicos problemáticos es que se asume, mecánicamente,
acríticamente, que por tratarse de un “gobierno revolucionario” o un “Estado revolucionario”,
por el hecho que así se los concibe o se los llame, se autodenominen, todo lo que hagan, este
gobierno y esta Estado, es por generalización “revolucionario”. Tomando en cuenta el balance
de la historia política de las revoluciones en la modernidad, que tocamos en otros ensayos[1],
podemos decir que el recurso a la violenciaes la patente muestra del fracaso de
la revolución misma triunfante. El recurrir a la violencia contra la sociedad misma es la
consecuencia de haber clausurado laderivación radical de la revolución misma, lademocracia
radical, el autogobierno y el dar la palabra al pueblo. Las transformaciones estructurales e
institucionales, que implican la revolución, es decir, laliberación y la emancipación múltiple,
plural y, diremos, metafóricamente, absolutas, solo pueden ser producto de la praxis de la
sociedad misma. Nunca de la “violencia revolucionaria”, que no es otra cosa, en estas
circunstancias y condiciones, la de la imposición estatal, la de la usurpación de la democracia,
del autogobierno y la palabra del pueblo. La “violencia revolucionaria”, en estas condiciones,
no es más que una frase rimbombante, que encubre, la misma violencia reaccionaria y
represora del Estado, como instrumento de dominación.
Con esta ponderación y apreciación de la violencia estatal, no se excluye, ni se niega, la
necesidad de ladefensa, tampoco de la organización del contra-poderen forma de crítica de las
armas, incluyendo, en determinadas circunstancias, coyunturas, contextos, ladestrucción del
poder. Esto abarca la defensa del país, de la Patria Grande, de la solidaridad fraternal con
pueblos sublevados, que luchan por la liberación y emancipación. Empero, cuando la propia
armada, el propio “ejército revolucionario” se usa como amenaza, como máquina de
guerra, cayendo, de este modo, enjuegos geopolíticos, es decir, de dominación mundial, no se
hace otra cosa que hacer lo mismo que las armadas y ejércitos imperiales, de las máquinas de
poder, delsistema-mundo capitalista. En otras palabras, son otrasmáquinas de guerra de
la geopolítica mundial, que se disputan la dominación del mundo. Esto nada tiene que ver con
la revolución, con la emancipación, con laliberación; lo que connota que no tiene nada que ver
con el comunismo, con el socialismo. Que se lleve el nombre de “ejército revolucionario”, no
convierte semejanteestrategia geopolítica en acción revolucionaria, en, para
contrastar, geografía emancipadora[2]. Ningún ejército, ninguna armada, por más nombres
rimbombantes que se ponga, por más “revolucionario” que se crea, puede sustituir a
las voluntades singularesde los pueblos. En la era de las simulaciones delsistema-mundo
capitalista, del sistema-mundo político,del sistema-mundo cultural, estas comedias y
usurpaciones se han dado. Se trata de mecanismos delegitimación de acciones y estrategias
que no son otra cosa que la continuidad de las formas de dominación, con distintos discursos,
personajes, guiones, nombres y símbolos.
En consecuencia, la contra-violencia revolucionaria, del contra-poder popular, que es el
recurso a la crítica de las armas, es la herramienta necesaria, en defensa de la marcha, del
camino, hacia el autogobierno del pueblo; es obligado uso, debido a la ofensiva militar
delpoder, en su forma estatal conservadora, liberal o neoliberal, en su forma imperialista, en
su forma imperial. Nunca de la restauración estatal, con otros nombres. Cuando esto ocurre,
se marca ya el ingreso a laregresión, a la decadencia, sobre todo, a la usurpaciónde la potestad
del pueblo, por parte de una nueva élite depoder; aparezca en forma de una nueva burocracia
absoluta o en formas gubernamentales barrocas.
La violencia estatal puede camuflarse en discursos que demandan la “defensa de la
revolución”, cuando, en realidad, se trata de la defensa de la nueva élite del poder, de
la burocracia absoluta, de la impostura grotesca correspondiente a la usurpación de la
potestad popular. La defensa de la revolución es decisión colectiva de
200
la democracia, del autogobierno; es elconsenso popular, que hace converger las voluntades
singulares, uniendo las fuerzas sociales para la defensa.
Ahora bien, el recurso a la crítica de las armas, a la organización militar popular, no
corresponde a ninguna improvisación. El hecho militar de la contra-violencia revolucionaria,
del contra-poder popular, requiere de latecnología, de las estrategias, mas ingeniosas,
inventivas y audaces que se puedan elaborar. El enfrentamiento militar es
un acontecimiento que exige la disponibilidad total de las fuerzas populares, se juega, por así
decirlo, suser mismo. Vencer a las máquinas de guerra estatales, imperialistas e imperiales,
requiere de la capacidad organizativa de contra-máquinas de guerra, que vayan más allá de lo
que pueden las máquinas de guerra. La ventaja, por lo menos, teórica, de las contra-máquinas
de guerra es que no son solamente corporaciones y complejos tecnológicos, no son
solamente sistemas-mecánicos, que por más eficientes que fueran, no pueden contra
la potencia social liberada, que libera, a su vez, la ciencia y tecnologías restringidas,
subsumidas a la dominación, al poder y a la acumulación del capital. La destrucción de la
vida tiene desventajas grandes respecto a la potencia creativa de la vida. Estas capacidades
organizativas, estratégicas, tecnológicas, solo pueden realizarse cuando se libera la potencia
social, cuando se da la palabra al pueblo, cuando se ejerce el autogobierno.
La coyuntura actual mundial, en la crisis estructural y orgánica del sistema-mundo
capitalista, en la etapa de ladecadencia del sistema-mundo político y del sistema-mundo
cultural, es decir, de la civilización moderna, es indispensable tener claridad sobre estos temas
y tópicos; hacer inteligible la complejidad del sistema-mundo, las amenazas y alcances de las
amenazas del sistema-mundo capitalista, de sus máquinas de guerra, de sus máquinas de
poder, incluyendo a sus máquinas extractivistas y máquinas de comunicación de masas. En la
medida que está amenazada la vida en el planeta, la sobrevivencia humana, los pueblos del
mundo están convocados existencialmente a actuar, a detener la locomotora desbocada de
todas las máquinas de destrucción de la vida. Que lo hagan o no, depende de su capacidad de
liberarse de la “ideología”, de los fetichismos diversos, de las capturas institucionales, que
hacen de mallas del poder mundial del sistema-mundo capitalista. --- NOTAS
[1] Ver Paradojas de la revolución y Crítica de la ideología: http://dinamicasmoleculares.webnode.es/news/paradojas-de-la-revolucion/. http://dinamicasmoleculares.webnode.es/news/critica-de-la-ideologia/.
[2] Ver Guerras periféricas; también Genealogía de la guerra: http://dinamicasmoleculares.webnode.es/news/guerras-perifericas/. http://dinamicasmoleculares.webnode.es/news/genealogia-de-la-guerra/.
la democracia más allá del mito liberal
http://www.hemisferioizquierdo.uy/#!Editorial-la-democracia-más-allá-del-mitoliberal/nnsaa/577178240cf249bc2451f2ee
A mediados del siglo pasado, en plena vigencia del relato de la Suiza de América, Mario
Benedetti impugnó con “El país de la cola de paja” a la mitología democrática nacional.
Visualizó sus dobleces, corrupciones y complicidades, y la llamó ”cascarodemocracia”
sostenida por “la solidaridad de los cola de paja”. La generación de izquierdas revolucionarias
que surgió en nuestro país algunos años después, sostuvo que capitalismo y (verdadera)
democracia eran dos pares irreconciliables, y la democracia era algo a conquistar ya sea contra
la pseudodemocracia, o por vía de conquistas progresivas desde las instituciones de la
democracia. Lo que pasó luego lo sabemos: las (heroicas) luchas contra la dictadura se
articularon como luchas por la democracia, y luego las luchas por la democracia se sintetizaron
como luchas por la reinstalación de las instituciones de la democracia liberal. La democracia
como conquista se instaló como nuevo sentido dominante en el pensamiento de la izquierda, y
progresivamente dicho sentido fue hegemonizado de acuerdo al pensamiento liberal.
201
Desde entonces, el credo del buen demócrata (expresado en la prédica sanguinettista)
sustituyó a las cartas de fe democrática de la dictadura, continuando simbólicamente aquel
papel policial: demarcar un adentro y un afuera de lo político. Así, en su proceso de ascenso al
gobierno, la izquierda progresista fue incorporando el credo democrático liberal hasta
asumirlo como propio. La caída del muro de Berlín y la sucesión de derrotas históricas de las
izquierdas del siglo XX hicieron lo suyo. El imperialismo norteamericano desplegó su estrategia
intervencionista en torno al discurso de “defensa de la democracia”. Y la racionalidad
tecnocrática neoliberal redujo a la democracia a una serie de procedimientos administrativos
donde el poder está siempre en otra parte, configurando una era que Slavoj Zizek llamó
“pospolítica”. Desde entonces, “democracia” ha quedado ideológicamente definida en nuestro
país como lo opuesto de “dictadura”, y pragmáticamente reducida a votar cada cinco años en
elecciones (la “fiesta de la democracia”) cada vez más concebidas y realizadas como campañas
de mercadeo.
Así las cosas, reflexionar críticamente en torno a “la democracia uruguaya más allá del mito
liberal” puede parecer un anacronismo. Tanto más en plena era progresista de indudable
avance en materia de derechos sociales. Sin embargo, en momentos en que en todo el
continente las empresas de comunicación de masas tienen cada vez mayor influencia fáctica
en decisiones (y cambios) de gobiernos, y en nuestro país se perpetúa un oligopolio mediático.
Cuando la impunidad muestra sus ribetes más cínicos en las cómodas prisiones domiciliarias
del puñado de militares torturadores procesados, contrastando con el hacinamiento infernal
de los presos “comunes”. Cuando se nos presenta a la inclusión financiera como un avance
democrático y a la macroeconomía como una externidad inalcanzable para la política. En
momentos en que los avances en legislación consagratoria de nuevos derechos se combinan
con el avance de la sociedad de control hipervigilante, la política del miedo y la criminalización
de la pobreza. En momentos en que la economía (la desigualdad, las clases, la propiedad)
aparece como el gran ausente en la reflexión democrática. En momentos como los actuales,
entonces, vale la pena volver a impugnar, como Benedetti hace medio siglo, a nuestra
“cascarodemocracia”. Mostrar sus sótanos inconfesables, sus impensados y sus impensables.
Es que preguntarse por la democracia tiene sentido siempre que se interrogue por los otros de
la democracia. Siempre que se convoque a los expulsados y a los convidados de piedra del
“gobierno del pueblo”. Siempre que se enuncie (politice) a los impensados y a los impensables
del discurso democrático, y se busque con ello la re-politizacion democratizante de la
democracia. Se trata de relanzar el problema de la democracia como un problema de izquierda
anticapitalista. Sin omitir el registro estratégico del problema: ¿cómo orientar una acción
política de izquierda transformadora (en, ante, desde, por fuera de) los escenarios y reglas de
juego de la democracia liberal realmente existente? Sobre estos temas convocamos a
reflexionar al hemisferio de las izquierdas.
La democracia en el pensamiento de las izquierdas en Uruguay: diálogo con
Aldo Marchesi*
http://www.hemisferioizquierdo.uy/#!La-democracia-en-el-pensamiento-de-las-izquierdas-enUruguay-diálogo-con-Aldo-Marchesi/nnsaa/577202660cf2f8d6d10dec38
Hemisferio Izquierdo (HI)- ¿Qué lugar ha ocupado la cuestión de la democracia en las
izquierdas uruguayas pre-dictadura?
Aldo Marchesi (AM)- Durante los años sesenta existieron dos posicionamientos que pueden
ser leídos como relativamente contradictorios en las izquierdas uruguayas. Por un lado
sectores que gradualmente comenzaron a desarrollar una crítica a la democracia liberal y que
202
se expresaron a través de un discurso revolucionario y por otro, sectores que intentaron
rescatar ciertos valores de la democracia liberal frente al creciente autoritarismo civil estatal
desarrollado desde mediados de los sesentas.
Antes de explicar con mayor profundidad ambos posicionamientos resulta necesario
mencionar algunos aspectos contextuales de la región para entender los significados que la
democracia liberal adquirió en el contexto de la guerra fría.
Desde fines de los cuarentas se desarrolló un liberalismo de la guerra fría que admitía límites al
funcionamiento democrático vinculados al riesgo de la amenaza comunista. El riesgo de la
amenaza comunista legitimaba la suspensión de aspectos esenciales del funcionamiento
democrático. La amenaza comunista podía ser equiparada a lo que hoy es el terrorismo en la
visión de organismos internacionales como la OEA. Experiencias políticas tan diversas como la
de Guatemala en 1954, y las de República Dominicana y Brasil en 1964 fueron leídas de esa
manera por Estados Unidos y sus aliados que promovieron reacciones autoritarias para
derrocar gobiernos elegidos democráticamente. La democracia liberal de la guerra fría
defendida por Estados Unidos era una democracia restringida a sus amigos en el contexto de la
propia guerra fría.
Por otro lado a mediados de los sesentas, luego del fracaso de los intentos reformistas
promovidos en el contexto de la Alianza para el progreso, comenzó a desarrollarse entre
ciertas elites tecnocráticas la idea que el único camino para salir de la crisis que enfrentaban
las economías latinoamericanas era el desarrollo de regímenes militares con una pretensión
modernizadora. Brasil en 1964 se mostró como un ejemplo de dicho camino.
Frente a todo esto Cuba se mostró como una alternativa democrática a la democracia liberal
de la guerra fría. El viraje de un discurso democrático liberal a un pensamiento leninista
implicó una redefinición de democracia. En la visión de los cubanos lo que se estaba logrando
era una democracia más verdadera, con la efectiva participación de los sectores populares a
través de diversos mecanismos de democracia directa, pero donde ciertos derechos liberales
resultaban suspendidos.
En resumen, en la Latinoamérica de los sesentas aunque la palabra democracia era reclamada
por todos los actores políticos como parte de su identidad, la realidad de los regímenes
políticos existentes parecía muy alejada a cualquier modelo democrático.
El Uruguay de fines de los cincuentas y principios de los sesentas que fue halagado por Ernesto
Guevara en 1961, era una excepción que gradualmente estaba dejando de serlo. Desde la
mitad de los cincuentas el país comenzó a enfrentar un estancamiento y luego una crisis
económica estructural que duró dos décadas. La progresiva incapacidad de los partidos para
resolver la crisis fue interpretada como una crisis política de legitimación de los partidos
políticos tradicionales, que incluso para algunos ensayistas expresaba una crisis moral de la
sociedad uruguaya, marcada por años de clientelismo y paternalismo estatal.
Desde el Estado las respuestas al crecimiento de la movilización sindical frente a la crisis
fueron el incremento de la represión y el control policial. Entre 1960 y 1963 ciertos sectores
del gobierno del Partido Nacional así como de la oposición colorada, emprendieron una
campaña anticomunista especialmente enfocada en la amenaza que la revolución cubana
representaba. Dicha campaña procuró sin éxito la proscripción del Partido Comunista, la
reglamentación de la actividad sindical y la ruptura de relaciones con la Unión Soviética y Cuba.
Entre 1962 y 1963 apareció una oleada de ataques de grupos de extrema derecha (algunos de
ellos violentos) que desarrollaron atentados contra militantes políticos, sociales, exiliados y
203
judíos. En 1963 se propusieron medidas prontas de seguridad para detener la huelga de los
trabajadores estatales de la electricidad (UTE). Durante 1965 las presiones ejercidas por
sectores conservadores se expresaron en abril y octubre en los decretos de medidas prontas
de seguridad que habilitaron el encarcelamiento de cientos de activistas sindicales y en
algunos casos el desarrollo de prácticas de tortura sistemática nuevas en el contexto uruguayo.
El golpe de los militares brasileros en marzo de 1964 agregó un componente regional al
incremento autoritario alentado desde sectores conservadores uruguayos.
Ese es el contexto regional y local que habilitó una gradual radicalización de ciertos sectores de
la izquierda uruguaya que se fueron inclinando hacia una visión que cuestionaba qué tan
democrática era la democracia uruguaya. El encuentro de diversos militantes en el llamado
"Coordinador" (la organización que antecedió a la creación del MLN-T) donde participaban
socialistas, anarquistas, ex comunistas y otros grupos menores, es un ejemplo del malestar con
la democracia liberal que se expresaba en importantes sectores de la izquierda. La experiencia
de movilización social de los cañeros de Bella Unión será usada por estos militantes como un
ejemplo que evidenciaba que los derechos liberales y sociales de la democracia uruguaya no
llegaban a todos, que había otro Uruguay que estaba muy lejano del país modelo defendido
por las elites políticas. Por otro lado, la lectura de las sucesivas medidas prontas de seguridad,
las medidas de persecución contra la izquierda y los sindicatos y los rumores de golpe de
estado a partir de lo ocurrido en Brasil los llevó a predecir un futuro negativo para la
democracia uruguaya. En su visión frente al avance de la movilización social e incluso electoral
las respuestas de las elites tradicionales en alianza con Estados Unidos culminarían en un
régimen autoritario. Dicha lectura del proceso político local irá distanciando a estos sectores
de los valores democráticos liberales que serán vistos como una farsa para mantener un orden
de cosas que poco tenía que ver con el gobierno del pueblo.
Simultáneamente a este proceso también otros sectores de la izquierda y el movimiento social
comenzaron a preocuparse con la amenaza autoritaria que asomaba desde Brasil. El Congreso
del Pueblo de 1965 advertía que: "el pueblo enfrenta una sistemática represión tendiente a
reprimir los derechos individuales, sociales y sindicales". Además de soluciones para la crisis
económica el congreso se planteó como objetivo detener cualquier amenaza de golpe
antipopular.
Estas reacciones políticas y sociales frente al creciente autoritarismo estatal continuaron
frente al incremento autoritario del pachequismo. Fue en la crítica a las medidas prontas de
seguridad, las torturas, los excesos policiales, las proscripciones y prohibiciones en las que
diversos políticos de centro izquierda e izquierda, varios de los cuales venían de los partidos
tradicionales, se terminaron encontrando para concretar la creación del Frente Amplio. Fue en
ese contexto fuertemente polarizado y confuso de comienzos de los setentas donde el
liderazgo de Seregni y la mayoría de los sectores políticos del FA apostaron a una
revalorización democrática liberal como camino de solución a la crisis y reconciliación entre los
uruguayos. Además de ser una respuesta al autoritarismo civil, el FA se creó en un momento
donde la novedad del gobierno de la Unidad Popular en Chile proponía conciliar lo mejor de los
dos mundos de la guerra fría: Democracia Liberal y socialismo.
Estas dos caras de las izquierdas: la que impulsaba caminos revolucionarios y la que intentaban
revalorizar los derechos liberales, se encontraron en el Frente Amplio. Aunque conscientes de
su contradicción trabajaron conjuntamente en un contexto de profunda incertidumbre política
donde las estrategias de todos los actores tuvieron cierto nivel de ambigüedad. Los tupamaros
apostaron a una estrategia revolucionaria pero por momentos se adecuaron a la estrategia del
FA. De hecho el MLN-T apoyó la creación del FA, tuvo contactos cercanos con varios de sus
fundadores, hizo una tregua electoral, proveyó información para denuncias parlamentarias y
204
judiciales, etc. Por otro lado se podría decir que aquellos que apostaban al mantenimiento de
una institucionalidad democrática como el Partido Comunista o el General Seregni, apostaron
a la salida militar en febrero de 1973 como un camino para resolver la crisis política de un
presidente sobre el que habían denuncias de fraude en las elecciones y que en el año 1972
había desarrollado una política represiva de inusitado alcance en la historia de Uruguay.
HI- ¿Qué cambios al respecto pueden observarse en las izquierdas post-dictadura?
AM- Las consecuencias de la represión dictatorial tuvieron un impacto importante en la
manera que los militantes de izquierda analizaron aspectos vinculados con la violencia estatal.
Vania Markarian ha mostrado como la lucha por la defensa de los derechos humanos llevó a
que los militantes uruguayos fueran adquiriendo gradualmente una nueva visión acerca del
valor de ciertos derechos liberales clásicos en detrimento del lenguaje revolucionario de los
sesentas. Esto trajo aparejado una revalorización de la democracia liberal por parte de varios
de aquellos que inspirados en la experiencia cubana habían abandonado la dimensión liberal
de la democracia.
Asimismo comenzaron a surgir otros asuntos vinculados con la tensión entre democracia y
autoritarismo. En el contexto de la primavera democrática de los ochentas, donde la
democracia y los derechos humanos fueron palabras asociadas a las demandas de los
movimientos sociales y donde el autoritarismo dictatorial era el antónimo contra el cual se
construían las nuevas ideas políticas, comenzaron a emerger críticas a diversas facetas
autoritarias de la propia izquierda. El vanguardismo de los militantes frente a los movimientos
sociales, el machismo, las estructuras gerontes de la izquierda fueron asuntos que se
empezaron a hablar dentro de las organizaciones políticas de la izquierda y en los movimientos
sociales durante ese período. Esta revalorización democrática no implicó abandonar la
reflexión acerca de la posibilidad de articular diversas formas de democracia liberal con el
socialismo.
Los ochentas fueron un momento muy fermental en las posibilidades de radicalizar las
nociones vinculadas a la democracia liberal. En este sentido se puede decir que la izquierda a
la salida de la dictadura comenzó a proponer una nueva visión de la democracia que tendrá
implicancias en el presente. La idea de la democracia participativa que reivindica el
involucramiento de actores sociales y locales en los procesos de decisión surgió al calor de los
movimientos sociales de esa década. Lo mismo se puede decir acerca de las críticas a la
supuesta igualdad legal del liberalismo que ocultaba las diferentes formas de discriminación
existente (género, edad, raza) en la política cotidiana.
Sin embargo, a principios de los noventas esa voluntad de asumir críticamente la democracia
liberal y buscar ampliarla con otras dimensiones emancipadoras pareció ceder a una mera
aceptación acrítica. La democracia liberal pasó a ser la única forma de democracia: la
democracia sin adjetivos, sin historia, una esencia indiscutible. Dos asuntos tuvieron que ver
con esta claudicación. La caída del muro de Berlín terminó de confirmar que las democracias
que tenían otros adjetivos no solo tenían muy poco de liberales, sino también de populares ya
que las mayorías en Europa oriental no se identificaban con dichos regímenes que habían
devenido en estructuras autoritarias y/o totalitarias. Por otra parte la derrota plebiscitaria en
torno a la ley de caducidad, además de cerrar la posibilidad de verdad y justica, terminó
consolidando una narrativa sobre los sesentas donde una democracia idílica había entrado en
crisis por la responsabilidad de la izquierda y el movimiento social. La izquierda no tuvo la
suficiente energía para dar la lucha sobre aquel pasado y eso tuvo consecuencias sobre las
maneras de concebir la democracia del presente.
205
* Doctor en Historia (New York University), Profesor de la Universidad de la República, director
del Centro de Estudios Interdisciplinarios Uruguayos (CEIU). Autor de numerosos trabajos
sobre la historia reciente de Uruguay y el Cono Sur.
Democracia bajo la lupa violeta: una crítica feminista
Maru Casanova*
http://www.hemisferioizquierdo.uy/#!Democracia-bajo-la-lupa-violeta-una-críticafeminista/nnsaa/57731b9f0cf2f8d6d10f008a
Cuando nos referimos al término democracia lo primero que pensamos es en su acepción más
clásica: la que define como principios rectores la igualdad y posibilidad de ejercicio de
derechos, tanto civiles, políticos como sociales. Si partimos de esta concepción y observamos
el marco normativo vigente podríamos afirmar que nos encontramos frente a un sistema
democrático, en Uruguay las mujeres podemos votar, tener propiedades, ser elegibles, ir a la
universidad y desempeñar cargos, entre otras muchas cosas. Implicó un largo camino de lucha
el que hoy podamos notar una diferencia entre nosotras y aquellas que no eran consideradas
ciudadanas.
Sin embargo no podemos reducir nuestro análisis a la igualdad en términos formales. Cuando
una profundiza cuales son las posibilidades reales de ejercicio de cada uno de los derechos
reseñados se encuentra que la posibilidad no es tal.
La mirada feminista diluye necesariamente las fronteras de lo privado y lo público trayendo la
histórica (y nunca vieja) consigna de lo personal es político. Así, en el análisis de qué
implicancias tiene el ser mujer para el ejercicio de derechos, el trabajo no remunerado ocupa
un elemento central. Si bien es un trabajo necesario para el funcionamiento de la sociedad, se
encuentra invisibilizado bajo su asignación a las mujeres como cuestión natural. Este
panorama no excluye a Uruguay, donde independientemente de la situación laboral, las
uruguayas dedican muchas más horas a las tareas de cuidado y el hogar con respecto a sus
pares masculinos(1).
No es difícil inferir cómo este rol pueda afectar el que las mujeres se encuentren en posiciones
de desventaja con respecto a los hombres. En primer lugar por el hecho en sí mismo: debemos
dedicarle más horas de nuestra vida a una tarea que se nos fue asignada por el sexo con el que
nacimos. Esto es menos tiempo que le podemos dedicar a otras tareas tales como trabajar,
militar, estudiar, etc. Luego, por la construcción social y cultural que implica este rol del ser
mujer.
Al participar políticamente, las mujeres se enfrentan a lo que se conoce como la triple jornada
(trabajo remunerado, trabajo no remunerado y militancia), lo que supone un límite para
ocupar lugares en los espacios de toma de decisión, ya sea a nivel de partido o de gobierno.
Por ejemplo, en estudios sobre trayectorias políticas se desprende que las mujeres en edad
reproductiva optan muchas veces por disminuir su actividad política para conciliarlas con el
trabajo no remunerado, a diferencia de los hombres que no ven afectadas sus carreras(2).
¿Podemos entonces hablar de que una mujer se encuentra en igualdad de condiciones que un
hombre para participar políticamente cuando tiene muchas menos horas para dedicarle?
¿Podemos asegurar que están dadas las condiciones para que las mujeres participen en pie de
igualdad en la toma de decisiones?
206
Trasladémonos al plano de las candidaturas para ser parlamentarias: las mujeres que logran
ser candidatas no solo vencieron los obstáculos de la triple jornada y la invisibilidad a la interna
de los partidos, sino que también desafiaron numerosas pautas culturales que establecen que
el ámbito de lo público no es para ellas. Una vez adentro, tienen que hacerle frente a formas
masculinas de hacer política y esforzarse más que sus pares varones en su actuación
legislativa, ya que sienten una constante necesidad de justificar que pueden desempeñarse
como legisladoras al igual que ellos. En el Uruguay de hoy estas mujeres solo representan el
20% del parlamento. Son demasiadas si consideramos que pensarse como política desafía los
modelos actuales de liderazgo y una historia narrada sin heroínas.
Pero supongamos que contamos con igual número de mujeres y varones en el parlamento,
¿alcanza con esto para que las feministas podamos hablar de democracia? Sin lugar a dudas
esto implicaría un avance representativo en términos simbólicos, pero que lo haga en términos
sustantivos es cuestión de debate: la participación de más mujeres en ámbitos de decisión no
significa necesariamente que más personas representen los intereses y demandas de las
mujeres. Sobre este punto basta con recordar todas las parlamentarias que votaron en contra
a la ley de interrupción voluntaria del embarazo.
Esta discusión es honda y llena de aristas, desde el preguntarse si es posible este tipo de
representación hasta si hay algo llamado “los intereses de las mujeres”, cuestionando los
enfoques esencialistas. Lo que es posible afirmar es que la representación simbólica es
importante por lo que significa en términos de mensaje: hay mujeres que hacen política y
tienen el derecho a hacerlo. Esto a su vez construye otros modelos de ser mujer que tiene que
ver con el ejercicio de poder y de ocupar el espacio público.
En este sentido la democracia en Uruguay se encuentra en un debe. Los porcentajes de
mujeres ocupando cargos de decisión son bajos y reflejan las múltiples dificultades que deben
atravesar si desean participar e incidir en la toma de decisiones.
Por otra parte el discutir sobre democracia desde un enfoque feminista no se reduce a las
dificultades para la igualdad de oportunidades. Las feministas buscamos la erradicación del
sistema patriarcal, entendiendo al mismo como un sistema de dominación que nos margina y
oprime. Es para nosotras por lo tanto, una falacia hablar de democracia cuando existen
relaciones de dominación. Esta es la base de la crítica a la teoría clásica sobre democracia,
entendida como una teoría de la democracia liberal: con igualdad de derechos y
oportunidades entre hombres y mujeres, pobres y ricos, heterosexuales y homosexuales(3) la
democracia sería posible.
La crítica a la democracia liberal no proviene solo de las feministas y también las hay
feministas liberales. El análisis marxista sobre la democracia burguesa señala lo mismo: no se
puede pensar en democracia cuando existen relaciones de dominación. En el caso de las
relaciones inequitativas de poder entre hombres y mujeres: ¿Cómo podemos las mujeres
ejercer nuestros derechos cuando no contamos con autonomía de ningún tipo? ¿Cómo se
puede hablar de democracia cuando las mujeres aún somos tuteladas? ¿Cuándo las
instituciones del Estado implementan política que responde a una visión patriarcal?
Como mujeres nuestra autonomía se ve soslayada a expensas de situaciones de control y
tutelaje por parte del sistema que opera en distintos niveles y a través de diversas formas.
Pensemos en las situaciones de violencia basada en género a las que estamos expuestas, que
parten de una visión en las que somos propiedad (de nuestra pareja o de un desconocido que
nos aborda por la calle), en las que somos inferiores al otro (frente al profesional de la salud en
consulta y que ejerce violencia obstétrica), por poner algunos ejemplos. De nuestras parejas
207
escuchamos “así no podes salir” y de nuestros médicos “no estás preparada para la ligadura de
trompas”.
Recordemos las declaraciones que se expresaron en el parlamento a la hora de votar una ley
de interrupción voluntaria del embarazo. Uno de los argumentos más escuchados refería a la
preocupación de legisladores por la baja tasa de nacimientos y el envejecimiento poblacional
de Uruguay. En este marco, legalizar el aborto supondría menos nacimientos y por lo tanto
empeoraría este panorama. Bajo el grito de “se precisan niños para amanecer” nuestros úteros
son objeto de política poblacional.
Somos excluidas de tomar decisiones con respecto a nuestras vidas y nuestros cuerpos, ya sea
porque se alude a que no somos capaces de hacerlo, porque somos vistas como objeto o
porque somos consideradas inferiores a otros. Se hace imposible hablar de democracia cuando
ni siquiera se nos considera a las mujeres como sujetas de derecho.
En otro plano, democracia también es participación en términos colectivos. El contar con
organizaciones sociales que demanden de acuerdo a sus intereses y que luchen por las
transformaciones necesarias es uno de los pilares básicos de la democracia participativa. En
este sentido, el movimiento feminista uruguayo se encuentra desde hace unos años en
dificultades. La creciente institucionalización de organizaciones y feministas supone un riesgo a
la autonomía del movimiento. El intento de reducción del Estado en la gestión de política
pública supuso un involucramiento de organizaciones sociales (entre ellas feministas o de
mujeres) para su gestión. Asimismo, con la asunción del Frente Amplio al gobierno numerosas
feministas ingresaron al Estado.
Esto ha generado un debilitamiento en el accionar del movimiento. En primer lugar por contar
con menos compañeras con acumulado y capacidades al frente del mismo. En segundo, por la
pérdida de autonomía para la reivindicación de demandas. ¿Qué capacidad de demanda hacia
el Estado tiene una organización que implementa políticas públicas? ¿No depende su sustento
de aquel mismo aparato al cual cuestiona? Lo mismo sucede con las feministas en cargos
políticos en el gobierno. Parece difícil marchar exigiendo los cambios y ser responsable a la
vez.
Existen intentos actuales de lucha feminista que parecen fortalecer un movimiento autónomo.
El Primer Encuentro de Feminismos uruguayo autoconvocado en el año 2014 y la posterior
formación de la Coordinadora de Feminismos del Uruguay son reflejo de una pujante
necesidad desde una pluralidad de organizaciones y feministas independientes de buscar un
lugar desde donde hacer política feminista.
Volver a ocupar las calles un 8 de marzo, bajo la consigna “Día de Lucha” y movilizarnos
multitudinariamente por el “Ni una Menos” son algunas de las acciones que se han llevado a
cabo y que buscan ocupar el espacio público con banderas autónomas de reivindicación.
Por último, si tratamos el tema de democracia y feminismo no se puede dejar de mencionar la
problemática existente entre el respeto a la multiculturalidad y la defensa de los derechos de
las mujeres. Queda claro que la democracia implica el respeto por la pluralidad de
pensamientos, culturas, religiones y manifestaciones, pero el límite entre esto y la vulneración
del ejercicio de los derechos de las mujeres es un tema en debate. Hay puntos en donde no
puede existir duda: la mutilación genital femenina es una práctica cultural pero que resulta
inconcebible y que debe ser erradicada. Sin embargo existen otras prácticas culturales o
religiosas donde la cuestión de si avasalla los derechos de las mujeres o si su rechazo reside en
una mirada colonizadora entra en tensión.
208
La utilización de los velos en la religión musulmana es un ejemplo de ello. Son muchas las
feministas que afirman que el velo es un símbolo de opresión de las mujeres y que no deberían
usarlo. Otras cuestionamos estas miradas de tutelaje de las feministas occidentales afirmando
que también puede ser una decisión. En este sentido es necesario recordar las nuevas
estrategias impulsadas por algunos Estado-nación: implementar en nombre de los derechos de
las mujeres o de la comunidad LGBTI políticas xenofóbicas(4). La prohibición del uso del velo
en varios países de Europa (sobre todo Francia) y las propuestas de medidas islamofóbicas
como primera respuesta a la tragedia de Orlando son algunos ejemplos.
No es necesario ir tan lejos: en Uruguay se hicieron múltiples referencias en medios de
comunicación sobre refugiados sirios que golpeaban a sus parejas uruguayas, señalando lo
“barbárico” de su cultura. Resulta increíble pensar que con los índices de violencia basada en
género y más concretamente con los casos de feminicidios que ocurren en Uruguay podamos
atribuir responsabilidades de estas situaciones a una cultura determinada, que de casualidad
pertenece a pueblos con inmigrantes en el país.
Las feministas tenemos aquí uno de los desafíos más importantes de los próximos tiempos: el
no permitir que utilicen nuestras reivindicaciones para justificar las bases de dominación de
unos pueblos sobre otros y de unas personas sobre otras. Recordando que el sistema de
dominación opera en diversos ejes sociales y que si solo cuestionamos uno de ellos, nos
encontramos luchando contra el sistema que afecta a las mujeres blancas, heterosexuales, no
pobres de occidente. Para alcanzar la democracia en tanto poder del pueblo,
indefectiblemente es necesario combatir cualquier grupo que pretende ejercer el poder sobre
otro.
En la transición democrática el sentir común del movimiento feminista y de otros movimientos
sociales se encontraba representado en la lucha antidictatorial. Hoy el panorama no está tan
claro. Si bien algunas identificamos en la figura de un sistema que es capitalista,
heteropatriarcal, racista y xenófobo el enemigo a combatir, otras personas y organizaciones
mantienen el pensamiento fragmentario de las luchas.
El feminismo uruguayo no escapa a este debate, pero ya sea porque no existen las garantías de
igualdad en el marco de una democracia liberal o en el plan de desafiar todo el sistema, todos
los feminismos cuestionan la afirmación de que vivimos en democracia. Tal como plantea
Carole Pateman “para las feministas la democracia no ha existido jamás”(5) y el intento por
hacerlo es lo que nos mantiene en lucha.
*Maru Casanova es politóloga, feminista e integrante de las organizaciones Mujer y Salud en
Uruguay (MYSU) y Colectiva Amatista.
(1) Ver Encuestas sobre uso de tiempo del Instituto Nacional de Estadística (INE).
(2) Pérez, Verónica (2011): Entre lo público y lo privado. Género y ambición política en el Cono
Sur. Tesis deMaestría en Ciencia Política. UDELAR.
(3) Utilizo términos dicotómicos para reflejar que no se cuestionan las categorías en sí.
(4) Los términos utilizados para describir estas acciones son “purplewashing” y “pinkwashing”
respectivamente.
(5) Pateman, Carole (1990: 7): Feminismo y democracia. En “Debate feminista”, Vol 1.
209
La riqueza y el poder. ¿Dónde está la oligarquía?*
Martín Buxedas**
http://www.hemisferioizquierdo.uy/#!La-riqueza-y-el-poder-¿Dónde-está-laoligarquía/nnsaa/5771ce460cf2bcae6e413173
“Oligarquía a la americana”, es el título de un artículo que sintetiza la visión de Paul Krugman,
premio Nobel de Economía, sobre la relación entre quienes concentran la riqueza y el poder
político en los Estados Unidos[1]. ¿Existe una “oligarquía a la uruguaya”?
Los partidos marxistas y los documentos fundacionales del Frente Amplio (FA) de Uruguay no
dejaban lugar a dudas: un pequeño núcleo de familias minuciosamente identificadas,
asociadas a inversores extranjeros, controlaba el Estado. Ese control se ejercía por medio de su
participación directa en los elencos de gobierno, el financiamiento de las campañas electorales
y eficaces influencias desplegadas por las cámaras empresariales. La oligarquía, finalmente, era
la responsable de la crisis económica que, indiscutiblemente, atravesaba el país y de los
problemas sociales del Uruguay[2].
Con el tiempo, la izquierda, incluyendo al Frente Amplio, dejó de mencionar la concentración
de la riqueza y a la oligarquía. Paralelamente, el tema no fue abordado por los investigadores
en ciencias sociales, cada vez más abundantes[3].
El silencio ha sido tan grande que seguramente una o más generaciones de adultos ni siquiera
sintió hablar del tema que unas décadas atrás convocaba a la izquierda. Hasta podría pensarse
que no hay concentración de la riqueza y del poder o, como sostienen algunos estudios, que la
izquierda dejó de lado sus antiguas banderas como parte de una estrategia de ablandamiento
orientada a conseguir el apoyo de un mayor número de ciudadanos y acercarse así al gobierno
por la vía electoral. Y cuánto más una vez que llegó a ese objetivo.
Una excepción a la ausencia de estudios sobre la concentración de la riqueza es la obra de
Bértola, Stolovich y Rodríguez (1989) en la que se identifican los principales grupos
económicos que operaban en el Uruguay hacia 1985[4]. En 2010 un valioso estudio elaborado
por un equipo interdisciplinario de investigadores de la Universidad de la República (UDELAR)
incluye una revisión de los aspectos conceptuales relacionados con la concentración de la
riqueza e identifica los requisitos estadísticos para estudiar la concentración de la riqueza,
pero no aporta información original ni alcanzó el objetivo de promover la discusión del tema
(V. Amarante y otros, 2010)[5].
En ausencia de referencias recientes, este artículo se limita a contrastar la situación actual con
la de 1960 en dos aspectos: el eje latifundio-banca y la participación de los inversores
extranjeros en la propiedad de la riqueza.
¿SE ESFUMÓ LA OLIGARQUÍA?
Aunque la concentración de la tierra aumentó, no hay vínculos entre los propietarios de la
tierra y la banca, y una parte importante de la gran propiedad agraria cambió de dueño.
No hay banqueros privados nacionales. En 1960 operaban nueve bancos extranjeros y 68
nacionales; dentro de estos últimos, la mayor parte de los privados estaban controlados por
familias con grandes propiedades agropecuarias. Las sucesivas crisis terminaron con todos los
210
bancos privados nacionales, no sin dejar tras de sí un enorme costo al erario público y muy
pocos propietarios empobrecidos.
Actualmente la actividad bancaria se ha concentrado en dos instituciones estatales y nueve
extranjeras. La participación de los propietarios nacionales es baja o simplemente nula en los
otros segmentos del sector financiero, como los seguros, las casas financieras y las
instituciones que operan en el exterior.
Nuevos propietarios y más concentración. En ausencia de información sobre la participación
de los mayores propietarios en la propiedad de la tierra es necesario recurrir a estimaciones
basadas en otras fuentes.
El indicador más importante del proceso de concentración de la tierra es la compra por parte
de inversores extranjeros de unos dos millones de hectáreas: un 12% de la superficie total. Se
ha estimado que 27 inversores extranjeros concentraban 1,6 millones de hectáreas según un
estudio divulgado en 2014[6], unas décadas atrás Trías se alarmaba porque había identificado
que los capitales extranjeros explotaban 90.000 hectáreas[7].
Los inversores extranjeros se interesaron por negocios agropecuarios a gran escala, por lo que
su primera opción de compra fueron los establecimientos de mayor dimensión, que hasta ese
momento eran propiedad de terratenientes nacionales[8].
Para analizar la concentración lo más frecuente es el uso de los censos agropecuarios, una
fuente que, como se mencionó, no releva la propiedad. Según los censos agropecuarios el
número de explotaciones agropecuarias censadas se ha mantenido estable entre 1961 y 2011.
En ese lapso unos 1.200 establecimientos de más de 2.500 hectáreas explotaron el 33% de la
superficie[9].
Las inversiones extranjeras se concentraron en las dos ramas cuyo dinamismo impulsaron: la
forestal y la agrícola. En cuanto a la actividad forestal, diez empresas forestales extranjeras
disponen de un millón de hectáreas, y dos de ellas controlan la mitad de esa superficie.
Los inversores extranjeros también fueron los protagonistas del extraordinario crecimiento del
cultivo de soja y otros granos. Al mismo tiempo que la actividad se concentraba, la mayor
parte de los plantadores nacionales se retiraron de la actividad. La evidencia de ese proceso
está bien documentada. Las chacras de más de mil hectáreas cultivadas con soja y otros granos
disponían del 20% de la superficie en 2001 y del 66% en 2015. En 2012 cada una de las 15
mayores empresas agrícolas explotaban 25.000 hectáreas en promedio, la mayor parte en
régimen de arrendamiento. Simultáneamente, el número de productores se redujo de 7.500
en 2005 a 2.900 en 2015[10].
La tendencia a la concentración de la tierra observada a partir del año 2000 no fue
compensada por las importantes medidas que adoptaron los gobiernos del Frente Amplio,
entre ellas la distribución de tierras. Entre 2005 y 2014 se incorporaron al régimen de
colonización 100.000 hectáreas pero la empresa Union Agricole Group (UAG), un fondo
privado de inversiones, controla en 2016, apenas seis años después de su creación, 181.000
hectáreas de las cuales 130.000 son de su propiedad.
Un indicio más de los cambios en la propiedad de la tierra es la reducción del número de
explotaciones de menor tamaño comenzada en la década del sesenta. Las 86.000
explotaciones con actividad agropecuaria censadas en 1961 se habían reducido a 57.000 en
2000 y a 45.000 en 2011.
211
Otro aspecto a tener en cuenta es la pérdida de importancia del PBI agropecuario en las
últimas décadas; es un indicador de la menor participación de las rentas de la tierra y los
beneficios sectoriales en el total de ingresos. La participación del sector agropecuario en el PBI
descendió de 13% en el trienio 1956-1958 a 8,6% en 2011-2013, al final del boom
agropecuario[11].
EL AUGE DE INVERSIÓN EXTRANJERA IMPULSA LA CONCENTRACIÓN DE LA RIQUEZA[12]
A partir de mediados de la década anterior un creciente flujo de inversión externa directa (IED)
se aplicó a controlar empresas nacionales existentes o a ampliar la capacidad de producción.
Por esa vía adquirieron mayor protagonismo los inversores extranjeros, un agente con
características propias y vínculos internacionales distintos a los empresarios nacionales.
El nuevo siglo trajo novedades importantes en materia de inversión extranjera. Antes del año
2000 la inversión externa dominante era la destinada a obtener ganancias financieras por
medio de instrumentos como la compra de valores públicos o las colocaciones en bancos de
los que el inversor podía deshacerse rápidamente, tal como lo hicieron en 1982 y 2002,
contribuyendo de ese modo a generar, o por lo menos a agudizar, las dos mayores crisis de la
economía en cincuenta años. En el nuevo siglo aumentó la inversión externa destinada a
controlar empresas que producen bienes o servicios en Uruguay.
Entre 2005 y 2013 la inversión externa directa (IED) se multiplicó por ocho, alcanzando al 30%
de la inversión privada total, y fue la responsable de gran parte del aumento de la inversión en
la economía uruguaya.
La extraordinaria afluencia de fondos del exterior condujo a que “el Uruguay presente una de
las relaciones entre la inversión externa directa acumulada y el PBI más altas de la región. En el
2014 el stock de IED en Uruguay se estimaba en 22.000 millones de dólares, equivalente al
40% del PIB, proporción superior a la de Argentina (18%), Brasil (34%), Colombia (35%) y Perú
(38%)”.
Un rasgo importante de la IED es que el 40% de las inversiones se destinaron a controlar
empresas propiedad de uruguayos (tierras, fábricas, supermercados y otros)[13]. Corresponde
mencionar, de paso, que la adquisición de empresas existentes no debería ser considerada una
inversión por cuanto no aumenta o mantiene la capacidad de producción del país que las
recibe.
La inversión externa se orientó a sectores dinámicos de la economía. En 2013 participaban con
el 63% de las exportaciones totales y, dentro de ellas, con más del 75% de las de celulosa y
papel, arroz, vehículos y autopartes y cebada malteada, y entre 50% y 75% de soja, carne
bovina, madera, trigo, cuero y productos farmacéuticos.
En varias cadenas de base agropecuaria los inversores extranjeros integran negocios en la fase
comercial e industrial más concentrada, y aun en la agropecuaria, como se observa en las de
base forestal y granos.
Un indicador de la concentración de la propiedad de la riqueza en Uruguay es la observada en
los ingresos originados en ella. Se ha estimado que la parte de la renta captada por el 1% de la
población de mayores ingresos en Uruguay (14%) es mayor que en otros 17 países con
información, y menor que en cuatro: Estados Unidos, Colombia, Ecuador y Sudáfrica[14].
212
EL ESTADO
Las principales empresas del sector financiero y no financiero se mantuvieron bajo el dominio
estatal pero su importancia en la economía no varió sustancialmente en las últimas décadas.
El repliegue del Estado uruguayo de las actividades productivas de las tres décadas anteriores
a 2005 se concretó por medio de cierres de empresas (pesca, frigorífico, transporte urbano),
reducción de actividad (AFE) y tercerizaciones (puerto y otros) y la pérdida de mercado cuando
compiten con el sector privado. La reducción de la actividad de las empresas públicas y una
política ocupacional más ajustada explican la disminución de sus empleados de 64.400 en 1973
a 24.200 en 2005.
A partir de 2005 el gobierno adoptó una política de fortalecimiento de las empresas estatales
del sector financiero y de los otros sectores, sin expandir significativamente los mercados en
que ellas operan y muy lejos de las nacionalizaciones prometidas por el FA en 1971. En 2015
las empresas estatales representan algo menos del 2% de la ocupación total de mano de obra
y probablemente algo menos del 10% del valor agregado neto de la economía.
***
En definitiva, el corazón económico de la oligarquía, tal como se lo describía hace cincuenta
años, no está presente en el Uruguay actual. Paralelamente se procesó otro cambio
trascendente: la concentración de la riqueza impulsada por los inversores extranjeros,
protagonistas importantes del boom de la economía en la década que culminó en 2013.
La interrogante pendiente de respuesta es: ¿será que “los molinos ya no están pero el viento
sigue soplando”? Por ahora al mutis en el partido de gobierno se agrega el de los académicos,
quienes no han considerado de interés generar conocimientos sobre las características
actuales de la distribución de la riqueza y su relación con el poder.
* Fue Profesor de Economía Agraria y Director de la OPYPA (2005-2010) del Ministerio de
Ganadería, Agricultura y Pesca. Funcionario de FAO y OIT y consultor en temas agrarios de
varias instituciones.
** Publicado originalmente en la Revista Digital Vadenuevo nº 93. Reproducido con
autorización del autor.
Referencias
[1] Joseph Stiglitz, premio Nobel de Economía, sostiene que el principal instrumento de las
empresas y personas ricas en Estados Unidos para influir en el poder político es el
financiamiento de las cada vez más costosas campañas electorales.
[2] La principal referencia sobre el tema es la obra de Vivian Trías, Reforma Agraria en el
Uruguay, publicada originalmente en 1961 y reimpresa dentro de la compilación, V. Trías (s.f.),
La crisis agraria y el socialismo en Uruguay, Cámara de Representantes, Ed. Banda Oriental.
213
[3] Siguiendo el diagnóstico de la izquierda de la década del sesenta del siglo XX, un
documento de 1971 del Frente Amplio señala: “La profunda crisis estructural que el país
padece desde hace décadas, su dependencia del extranjero y el predominio de una oligarquía
en directa connivencia con el imperialismo, han ido creando, por un lado, hondas tensiones
sociales y por otro, un clima de preocupación colectiva sobre el destino mismo de la
nacionalidad oriental”.
[4] Luis Stolovich, Juan Manuel Rodríguez y Luis Bértola (1987): El poder económico en el
Uruguay actual, CUI, Montevideo.
[5] V. Amarante y otros (2010) La concentración de la riqueza en Uruguay. Elementos para el
debate. Universidad de la República.
[6] Oyhantçabal, G, Narbondo, I y Areosa, P. (2014): ¿Acaparamiento de tierras en Uruguay?
En: 2º Congreso de Ciencias Sociales Agrarias. Salto, Uruguay, agosto de 2014.
[7] Los censos agropecuarios no recogen información sobre la propiedad de la tierra y por lo
tanto no permiten conocer el conjunto de explotaciones pertenecientes a un mismo grupo
familiar o empresa. Las grandes empresas que se desarrollaron a partir de 2000 son
propietarias de varios establecimiento, tal es el caso del fondo de inversiones UAG, que
controla 105 establecimientos distribuidos en 17 departamentos del país. Para conocer la
concentración de la propiedad sería necesario reunir el conjunto de las empresas controladas
por un mismo grupo familiar o empresa, tal como lo hizo Trías para 250 familias.
[8] Estimación propia basada en información sobre el valor de las inversiones extranjeras en
tierras del Banco Central del Uruguay, las transacciones de compraventa de tierras (DIEAMGAP) y otras fuentes.
[9] Las empresas más grandes tienen una participación más alta en la mayor parte de los
sectores que la sugerida por esa información. El caso del sector bancario ya fue mencionado,
en el industrial, las 50 empresas mayores eran responsables del 45% del PBI. M. Buxedas
(1989): Concentración global en la industria: nuevas evidencias y significados, en M. Buxedas y
R. Jacob, Industria uruguaya: dos perspectivas, FCU, Montevideo.
[10] DIEA-MGAP, Anuario Estadístico Agropecuario, varios números.
[11] Aunque la importancia del sector agropecuario disminuyó durante el boom agropecuario
2004 – 2013 el precio de la hectárea de tierra se multiplicó por ocho y el valor comercial del
stock de tierras alcanzó a unos 58.000 millones de dólares (unas 19 veces mayor que la
inversión en las dos plantas de celulosa). También el valor de la renta de la tierra (el
arrendamiento o la renta implícita en el retorno de los propietarios-productores) aumentó.
Según una estimación, la renta de la tierra en 2000 alcanzó a 284 millones de dólares y a 1.831
millones en 2013, año en que equivalía al 38% del PBI agropecuario. Gabriel Oyhantçabal y
Martín Sanguinetti (2014), El agro en Uruguay: transformaciones recientes, impactos y
distribución.
[12] La fuente de información de este apartado es Uruguay XXI (2014): Comportamiento
Exportador de las Empresas Extranjeras en Uruguay, y Uruguay XXI (2015): Inversión externa
directa en Uruguay.
[13] En 2014, entre las compras de inversores extranjeros a firmas nacionales se destacan las
siguientes; Pagnifique por parte de un grupo chileno; Matadero Carrasco, adquirida por una
214
compañía brasilera; Fármaco Uruguay S.A. y Laboratorio Santa Elena por firmas peruana y
francesa respectivamente; y Los Nietitos por una firma chilena.
[14] Burdín, G., De Rosa, M., Vigorito, A. (2015) “Sectores de altos ingresos en Uruguay:
participación relativa y patrones de movilidad en el período 2009-2012”. Serie Documentos de
Trabajo, DT 03/2015. Instituto de Economía, Facultad de Ciencias Económicas y
Administración, Universidad de la República, Uruguay. Citado en Buxedas, M. ¿Cuán desiguales
son los ingresos en Uruguay?, vadenuevo nº 92.
Democracia y justicia social: tenaces desafíos para la izquierda
Fernando Lizárraga*
http://www.hemisferioizquierdo.uy/#!Democracia-y-justicia-social-tenaces-desafíos-para-laizquierda/nnsaa/5772fdc10cf249bc245369a4
Es bien sabido que Abraham Lincoln, presidente de Estados Unidos durante la Guerra Civil
entre el Norte y el Sur (1861-1865), fue quien con más vehemencia apuntaló los pilares
constitutivos del proyecto de la burguesía norteamericana. En su Discurso de Gettysburg, en
1863, Lincoln sostuvo que el ideal de los fundadores de la república se basaba en la promoción
de la libertad, en la defensa de la vida, y en la creencia de que todas las personas son creadas
iguales. Pero además, en este brevísimo y extraordinario mensaje, definió a la democracia en
una frase que ha quedado para la historia: “gobierno del pueblo, por el pueblo y para el
pueblo”. Quizás sea menos conocido el hecho de que Karl Marx, junto a otros líderes de la
Primera Internacional, escribió y firmó una enfática declaración de apoyo a Lincoln luego de
que éste proclamara la emancipación de los esclavos en todo el territorio de los Estados
Unidos, a principios de aquel mismo año, y que utilizó parte de la fórmula democrática para
describir al gobierno de los comuneros de París: “gobierno del pueblo y para el pueblo”,
sintetizó el creador del materialismo histórico en un pasaje de La Guerra Civil en Francia.
El apoyo de Marx al presidente republicano de Estados Unidos era una demostración de su
certeza de que no sólo la emancipación de los esclavos sino también la subsecuente liberación
de las fuerzas productivas del Norte industrial redundarían en favor de los intereses del
proletariado y, en consecuencia, allanarían la senda hacia el socialismo. De hecho, poco
después de terminada la guerra civil, hubo un extraordinario crecimiento del movimiento
obrero en Estados Unidos, permitido, entre otras cosas, por las propias instituciones de la
república liberal norteamericana. Como ha recordado acertadamente Robin Blackburn, Lincoln
consideraba que los trabajadores eran más importantes que el capital, y en el contexto
favorable de la posguerra –que, cabe decirlo, duró poco– las organizaciones sindicales y
políticas norteamericanas fueron pioneras en romper las barreras de color y de género; esto
es, de ampliar las bases de la democracia.
A esta altura de los acontecimientos, ya ubicados bien adentro del siglo XXI, parece una
trivialidad tener que sostener que el socialismo presente y futuro ha(brá) de ser democrático,
o no habrá de ser en absoluto. Del mismo modo, cabe afirmar, como cuestión de principio, que
el socialismo (presente) debe impugnar al capitalismo como injusto y debe darse, por lo menos
como boceto, algún diseño institucional para después de la revolución –o comoquiera que sea
el proceso o momento del cambio hacia el post-capitalismo. Y este diseño no puede ser una
mera ingeniería institucional, sino que debe fundarse en valores claramente identificados y
especificados. La democracia y la justicia social no pueden estar ausentes en este boceto; es
decir: es indispensable pensar al socialismo del porvenir como una sociedad que realiza, entre
otros, valores tales como la libertad, alguna forma de igualdad, la auto-realización, la
215
fraternidad, etcétera. Como dijera magníficamente Ernesto Che Guevara: “El socialismo
económico sin la moral comunista no me interesa. […] Si el comunismo descuida los hechos de
conciencia puede ser un método de repartición, pero deja de ser una moral revolucionaria”.
Esto significa que no alcanza con las instituciones correctas si las actitudes de las personas no
son congruentes con tales instituciones.
Existe en nuestros días un dato difícilmente discutible. Las repúblicas democráticas burguesas
han demostrado ser mucho más persistentes de lo que se imaginó alguna vez, y han cumplido
cabalmente su rol en asegurar la hegemonía de la clase capitalista. En este marco, con esta
constatación en mente, es preciso pensar y repensar el lugar de la democracia, la justicia, la
libertad, entre otros valores, al interior de la tradición socialista y de las organizaciones
anticapitalistas. Hay un año que, para esta reflexión, resulta muy significativo: 1867. Todos
sabemos que fue entonces cuando se publicó el primer volumen de El Capital. Pero además
fue el año en que, también en Inglaterra, se sancionó la Ley de Reforma que otorgaba el
sufragio universal masculino (el cual se extendería a las mujeres recién en 1928). Así, mientras
Marx revelaba la anatomía y el metabolismo del capital, la clase obrera inglesa conseguía una
conquista particularmente importante, luego de años de luchas a través del movimiento
cartista, que Engels y Marx celebraron como primer movimiento auténticamente clasista en
tiempos de la gran industria y como antecedente del partido de la clase obrera. “El sufragio
universal en Inglaterra será una medida por lejos mucho más socialista que cualquier otra cosa
que se haya denominado así en el continente” y “su resultado inevitable, aquí, es la
supremacía política de la clase trabajadora”, escribía Marx en una nota para el New York Daily
Tribune. Y lo hacía en 1852, mientras en Francia se experimentaban las derrotas de la vía
insurreccional iniciada en 1848. Al mismo tiempo, un contemporáneo de Marx, el liberal –y
finalmente devenido socialista– John Stuart Mill, elogiaba al gobierno representativo como
uno de los hallazgos más notables de la historia.
El entusiasmo de Marx y Engels con el cartismo y su lucha por el sufragio universal no tardó en
verse ensombrecido, cuando ya en las primeras elecciones posteriores a su implementación,
pudo observarse que un gran número de trabajadores habían votado al partido conservador y
no a los candidatos de la Liga Reformista. Un corolario inmediato de este fenómeno fue que
los fundadores del materialismo histórico –siempre dispuestos a la auto-crítica (una verdadera
rareza en nuestros días) – advirtieron la necesidad de un partido de la clase trabajadora,
totalmente independiente de los partidos burgueses. Es decir, Marx y Engels vieron
tempranamente que las repúblicas democráticas y las monarquías parlamentarias –esto es, los
sistemas representativos– brindaban posibilidades para la auto-organización de la clase
trabajadora al mismo tiempo que aseguraban firmemente los intereses de las clases
dominantes. Por eso, ni Marx ni Engels abandonaron –como quisieron hacernos creer los jefes
de la Segunda Internacional– la opción de la vía insurreccional. No hay inconsistencia entre la
adhesión de Marx y Engels al sufragio universal en Inglaterra y su elogio de la lucha
insurreccional de la comuna, en la siempre convulsionada Francia.
El capitalismo, como dice Gerald Cohen, “no es un agente” capaz de adaptarse casi
automáticamente ante aquello que parece o puede efectivamente amenazar su existencia. Al
interior del sistema sí hay agentes –clases–, que actúan más o menos estratégicamente. Así, la
clase política inglesa vio sin demora que debía canalizar la oposición creciente de los cartistas y
ceder ante algunas de sus demandas. El sufragio universal significó una ampliación de la
competencia electoral, pero en los términos y las condiciones fijadas por la propia burguesía y
sus dispositivos estatales. Y precisamente porque nunca hubo, salvo contadísimas
excepciones, un fair play en la competencia electoral, las cartas siempre estuvieron marcadas a
favor de los partidos del orden. “En el Estado” –escribía el joven Marx en Sobre la Cuestión
Judía– “el hombre es considerado como un ser genérico [un ciudadano]; es el miembro
216
imaginario de una imaginaria soberanía”. Esta ciudadanía meramente formal, esta pertenencia
al cielo político –a una “imaginaria soberanía”, a una comunidad ficticia–, no anulaba sino que
presuponía (y aún presupone) las enormes desigualdades existentes en la sociedad civil. La
condición de mayoría de la clase trabajadora no alcanzaba para asegurarle el poder político.
Tampoco, cabe decirlo, se verificaba una relación lineal entre el crecimiento cuantitativo de la
clase y el crecimiento de su conciencia de clase, lo cual llevó a que muchos abrazaran el
desafortunado concepto de falsa conciencia, como si los trabajadores fueran meras víctimas
de engaños sistemáticos orquestados por los astutos burgueses.
La democracia burguesa, con todo su formalismo, supone competencia electoral y, en este
campo, la cancha tiende a estar siempre inclinada. O para decirlo en un lenguaje un poco más
prolijo: en ausencia de mínimas garantías de igualdad o equidad social, se obturan
irremediablemente las plenas libertades políticas. En este punto podemos observar la
inextricable relación entre la justicia social y la democracia, ya que no puede haber una
democracia mínimamente aceptable en presencia de enormes desigualdades sociales. Deben
darse varias condiciones para una democracia pueda ser reputada como genuina, pero la
igualdad económico-social es una condición necesaria. Una buena forma de hacerse una idea
sobre esto es recordar aquella famosa frase de Jean-Jacques Rousseau –un burgués partidario
de la democracia directa–, quien en El Contrato Social sostenía que, la igualdad no debía
entenderse como igual poder e igual riqueza para todos, pero sí, por lo menos, como la
situación en la que el poder se ejerce según las leyes y que, en cuanto a la riqueza, “ningún
ciudadano [es] lo bastante opulento para poder comprar a otro, y ninguno lo bastante pobre
para ser constreñido a venderse”. He aquí una clásica fórmula republicana que entiende a la
libertad como no dominación; y para que no haya dominación –en tanto poder arbitrario de
unos sobre otros– se precisan leyes y, fundamentalmente, que las desigualdades económicas
no obliguen a nadie a venderse. Una vez más: lo que Rousseau tenía en mente es algo que otro
pensador burgués, John Rawls, ha denominado “justa igualdad de las libertades políticas”.
Para empezar a hablar sin prejuicios sobre este asunto, hay que tener presentes al menos dos
consideraciones que Marx hiciera acerca de la democracia y la república burguesa. En primer
lugar, que el derecho burgués, especialmente en lo que concierne a la distribución del ingreso
y los bienes de consumo, no ha de superarse sino hasta bien entrado el comunismo; esto es,
hasta que existan condiciones subjetivas y objetivas que permitan no sólo la superación del
derecho burgués sino la extinción del Estado como cuerpo sobreimpuesto a la sociedad civil.
En segundo lugar, que para Marx la existencia del Estado político y la ciudadanía –con toda su
formalidad, su condición imaginaria, etcétera– ya suponía un importante avance histórico que,
a su vez, habría de ser trascendido. Decía Marx en Sobre la Cuestión Judía: “No cabe duda de
que la emancipación política representa un gran progreso, y aunque no sea la forma última de
la emancipación humana en general, sí es la última de la emancipación humana dentro del
orden humano actual”. Los derechos conquistados por la burguesía y el pueblo durante las
revoluciones contra el orden feudal, si bien terminaban reducidos a la futilidad en la
legislación, mantenían –como los ideales de igualdad y libertad– un gran potencial disruptivo y
emancipador.
Volvamos por un momento en el pensamiento de John Rawls, el filósofo igualitarista-liberal
que ha restituido la discusión sobre la justicia social en la agenda contemporánea. No vamos a
exponer aquí los pormenores de su teoría sobre la equidad. Sólo diremos que incluso para un
pensador tan profundamente liberal como él, las desigualdades del mundo contemporáneo
son del tal gravedad que afectan de manera fatal a las libertades políticas. En su obra más
famosa, Teoría de la Justicia, este profesor de Harvard sostiene que para que existan justas
libertades políticas es preciso que los ciudadanos alcancen efectivamente ciertas condiciones
materiales mínimas. Aunque no logra distanciarse totalmente de la muy burguesa escisión
217
entre el cielo político igualitario y el mundo terrenal no-igualitario, Rawls advierte que por
debajo de cierto umbral es imposible hablar seriamente de ciudadanía. Por eso, afirma que
“históricamente, uno de los defectos principales del gobierno constitucional ha sido que no ha
sabido proteger el justo valor de la libertad política” y que “las diferencias en la distribución de
propiedad y riqueza que exceden lo que es compatible con la igualdad política han sido
generalmente toleradas por el sistema legal”. Peor aún, con el tiempo, la ecuación inicial se
invierte y, de este modo, quienes detentan posiciones de mayor poder político adquieren
también mayor poder económico. En consecuencia, añade Rawls, “las desigualdades en el
sistema socioeconómico pueden minar cualquier igualdad política que hubiese existido en
condiciones históricas más favorables”.
En resumidas cuentas, concluye Rawls, cuando no existe financiamiento público de las
organizaciones políticas, los partidos dominantes salen a recaudar fondos de los sectores
económicos más aventajados “y, cuando esto ocurre, los miembros menos favorecidos de la
sociedad, que no pueden ejercer su justo ámbito de influencias a causa de su falta de medios,
caen en la apatía y el resentimiento”. Lo notable de Rawls y otros igualitaristas-liberales, en
comparación con el común de los liberales y conservadores que abundan en nuestras
latitudes, es que no se hacen los distraídos frente a la íntima relación que existe entre las
condiciones materiales y la ciudadanía. Por eso mismo, en su libro Liberalismo Político, Rawls
sostiene que una plena ciudadanía y un consenso constitucional estable requieren, como
mínimo, los siguientes elementos: el financiamiento público de las elecciones, que asegure
disponibilidad de información en materia de políticas públicas; una cierta equitativa igualdad
de oportunidades, especialmente en educación y capacitación; una distribución digna de la
riqueza para que todos los ciudadanos tengan asegurados los medios necesarios para
aprovechar inteligente y efectivamente sus libertades básicas; que la sociedad sea empleador
de último recurso a través del gobierno local o central, u otras políticas sociales y económicas;
y cuidado básico de la salud asegurado para todos.
Los pensadores igualitaristas-liberales como Rawls son herederos del ala radical de la
burguesía que encabezó las revoluciones modernas. Basta pensar solamente en Thomas Paine,
uno de los promotores de la revolución norteamericana, quien ya en 1791 proponía una
especie de ingreso básico universal para asegurar la plena ciudadanía. O en el mismísimo
Robespierre quien, pese a sus idas y vueltas retóricas, no vacilaba en sostener la necesidad de
que el derecho a la existencia digna estuviera públicamente garantizado. Como señala Antoni
Domènech, para los jacobinos “la libertad política o republicana era eso, y nada menos que
eso: no tener que pedir cotidianamente permiso a nadie para poder subsistir”. Los líderes y
pensadores burgueses más honestos han admitido que no puede haber ciudadanía –entendida
no sólo como ejercicio electoral sino como autonomía para conducirse en la vida cotidiana– en
presencia de profundas desigualdades sociales.
Va de suyo que, mientras perdure el capitalismo, la igualdad de condiciones será una simple
quimera. Es casi una obviedad afirmar, en una revista como Hemisferio Izquierdo, que la
relación de explotación capitalista lesiona irremediablemente cualquier intento de igualar
totalmente las condiciones de vida. Mientras haya capitalismo, no podrán realizarse en
plenitud los ideales revolucionarios de libertad, igualdad y fraternidad. Escribe Alex Callinicos
en su ensayo “Igualdad y capitalismo”: “la aspiración a la igualdad fue uno de los ideales
constitutivos de la modernidad capitalista desde el momento en que triunfaron las grandes
revoluciones burguesas”, desafiando las jerarquías de la sociedad anterior y desencadenando,
de este modo, “una dinámica que continúa hasta el presente, conforme nuevos grupos –
trabajadores, esclavos, mujeres, súbditos coloniales, negros, lesbianas y gays, entre muchos
otros– han reafirmado sus demandas de igualdad. Sin embargo, aunque el capitalismo es el
218
suelo sobre el que el ideal de la igualdad cobró forma por primera vez, este ideal solamente
puede realizarse más allá de sus fronteras”.
Con todo, la certeza de que los grandes ideales modernos sólo pueden concretarse más allá
del capitalismo, no implica sentarse a esperar a que el sistema caiga como fruta madura al
influjo de las inexorables leyes de la historia. La libertad, la igualdad y la fraternidad deben ser,
a un mismo tiempo, metas revolucionarias, herramientas de lucha, y rasgos constitutivos de
las propias organizaciones socialistas (ya sean partidos, movimientos, sindicatos, etc.). Gerald
Cohen, un marxista analítico que devino igualitario radical al calor de las polémicas
contemporáneas sobre la justicia social y la igualdad, ha sostenido –con acierto a nuestro
juicio– que buena parte de la tradición socialista más ortodoxa se quedó conforme con sus
formidables triunfos explicativos y confió en que, tarde o temprano, por un camino u otro, el
capitalismo colapsaría y sería reemplazado por un mundo social –el comunismo– que
necesariamente sería superior. Esta ortodoxia tiene por lo menos dos problemas: por un lado,
la tesis de inevitabilidad del socialismo ya no goza de buena salud y, por otro, omite
argumentar sobre la deseabilidad del comunismo. ¿En qué sentido lo que venga después del
capitalismo habrá de ser mejor? ¿Por qué debería ser mejor? ¿Sólo porque viene después? Es
posible, por caso, imaginar una sociedad sin propiedad privada de los medios de producción
pero gobernada por una élite burocrática que rige los destinos de todos y cada uno con mano
de hierro; o un sistema que establece una tiranía sobre las necesidades y sobre las opciones
personales; o un esquema de planificación centralizada sin control por parte de los
productores directos, etc. También es posible imaginar la barbarie.
El punto es que, sin emancipación humana, tal como la entendía Marx, no puede haber
socialismo. Cuando el autor de El Capital elogiaba a Lincoln, pensaba concretamente que la
senda abierta por el presidente norteamericano y la victoria de la Unión inauguraba “una
nueva era para la emancipación del trabajo”. Como señala Blackburn, “para Marx, el
trabajador asalariado sólo era libre parcialmente ya que debía vender su fuerza de trabajo a
otro para poder sobrevivir él y su familia”, pero “dado que no era un esclavo, el trabajador
libre podía organizarse y agitar, por ejemplo, por una jornada limitada de trabajo y una
educación libre”. Así, apunta Blackburn, bajo el liderazgo de Joseph Weydemeyer –amigo de
Marx que luchó durante la Guerra de Secesión en las filas del Norte– un grupo de trabajadores
fundó la American Labor Federation, una organización obrera “abierta a todos, ‘sin importar la
ocupación, el idioma, el color o el sexo’”. Estas organizaciones obreras fueron, en los hechos y
no sólo de palabra, fieles a la concepción marxiana según la cual, como ha señalado el filósofo
hispano-mexicano Adolfo Sánchez Vázquez, la “emancipación humana” implica re-unir lo
particular con lo universal; equivale a la verdadera democracia”.
Al respecto, Sánchez Vázquez enfatiza que en sus escritos juveniles Marx consideraba a las
libertades burguesas como meras formalidades, pero más adelante, con la irrupción del
proletariado en la escena política, pudo darse cuenta de que tales libertades “–por su origen y
naturaleza– responden también […] a los intereses reales del pueblo”, más allá de la obvias
limitaciones inherentes al Estado burgués. Por eso, con esta mirada juvenil “un tanto
ahistórica”, Marx se negaba a sí mismo “la posibilidad de advertir en sus propios derechos y
libertades los valores democráticos (en cuanto que tienen cierto contenido real, popular)
arrancados a la burguesía”. Por ello, años más tarde, en sus escritos sobre la Comuna de París
y sobre el cartismo –como ya hemos visto– habría de recuperar la noción de representatividad
a través del sufragio universal, pero ahora enriquecida por elementos tales como la
responsabilidad y revocabilidad, sobre la base de un mundo material donde ha sido abolida la
propiedad privada.
219
En suma: el socialismo contemporáneo no puede seguir pensándose como dueño de todas las
verdades; ni permanecer ajeno a las discusiones teóricas de los pensadores igualitaristas,
liberales, republicanos, comunitaristas, entre otros; ni quedar aislado de los desarrollos
institucionales de las repúblicas democráticas burguesas. Como ha dicho con singular agudeza
Ariel Petruccelli en su artículo “Dilemas y desafíos del socialismo en nuestro tiempo”: “no
parece descabellado prever que en nuestros países y en los países capitalistas centrales la
democracia ha llegado para quedarse, y que las izquierdas deberán aprender a combatir
dentro y contra ellas. […] La auténtica democracia sigue siendo una aspiración, lo cual –
insistimos– no debería impedirnos ver los méritos de las democracias liberales. […]. Así como
la monarquía fue compatible con distintos modos de producción (hubo monarquías esclavistas,
feudales y capitalistas), bien podría ser que la democracia liberal –garantías individuales,
libertad de prensa, representación popular, multipartidismo– sea compatible también con el
socialismo, y no meramente la encarnación superestructural del mercado o la frutilla del
postre capitalista”. Lejos de ser una mirada desalentadora, la afirmación de que hay que luchar
dentro y contra las democracias burguesas, implica a la vez una aguda indicación para la
agenda teórica –¡hay que estar atentos y polemizar con lo mejor del pensamiento burgués!– y
para la estrategia política. Marx no fue menos marxista por celebrar el triunfo y lamentar la
muerte de un presidente tan profundamente burgués como Abraham Lincoln.
* Investigador del Conicet y profesor de Teoría Política en la Universidad Nacional del
Comahue, Argentina. Autor de El Marxismo y la justicia social: la idea de igualdad en Ernesto
Che Guevara (2011) y Marxistas y liberales: la justicia, la igualdad y la fraternidad en la teoría
política contemporánea (2016).
El culto a Evo llega a sus padres
http://internacional.elpais.com/internacional/2016/07/14/america/1468450971_178867.html
Una estatua en honor a la familia del presidente de Bolivia se une a los muchos homenajes
oficiales que recibe en todo el país
El culto a la personalidad de Evo Morales alcanzó a los padres del presidente boliviano,
sencillos campesinos que son recordados con una estatua erigida hace poco en la ciudad de
Punata, en los valles centrales del país. La escultura de Dionisio y María, progenitores de
Morales, se encuentra en un edificio municipal de cuatro millones de dólares que se llama,
como decenas de otras infraestructuras públicas, “Evo Morales”.
Fueron pagados por el programa Evo Cumple, que es ejecutado por los alcaldes, pero que
financia el gobierno nacional. En varias oportunidades este programa, que comenzó con
fondos donados por Venezuela, ha sido acusado de tener como principal objetivo el
enaltecimiento de la imagen del presidente.
El culto a la personalidad de Morales, el primer mandatario indígena y el primer gobernante de
Bolivia durante más de 10 años continuos, ha crecido paulatinamente desde su llegada al
poder hasta considerarse normal. Un hecho anterior a este de la estatua fue el del Himno Evo
Morales, que compusieron las Fuerzas Armadas en honor de su comandante en jefe, que
incluye un verso que, dirigiéndose a él, le dice: “Tú tienes la luz”.
Además existe un pequeño pueblo que se llama Puerto Evo y en 2013 hubo un serio conflicto
en Oruro, una ciudad de medio millón de habitantes, entre los partidarios y los contrarios a
que el aeropuerto fuera bautizado con el nombre del presidente.
220
La escultura de Dionisio y María, progenitores de Morales, se encuentra en un edificio
municipal
El Gobierno señala permanentemente que estos homenajes no son solicitados por Morales,
sino que son gestos de cariño de la población y los cargos inferiores de la burocracia estatal. Al
mismo tiempo, no desarrolla ninguna política para aplacar los deseos de los partidarios de
Morales de congraciarse con él. Al contrario, en este momento el Gobierno está construyendo
un museo de casi 4.000 metros cuadrados y un coste de seis millones de dólares en Orinoca, el
pueblo de 638 habitantes en el que Dionisio Morales, pastor de llamas, y María Ayma,
agricultora, se enamoraron y concibieron a Evo. Se llamará Museo de la Revolución
Democrática y Cultural y estará dedicado a la “resistencia indígena”, una historia de vejaciones
y luchas que concluye con la llegada de este niño al poder, como ocurre en la película
Insurgentesdel realizador Jorge Sanjinés, la que hace tres años fue filmada y estrenada con
apoyo oficial.
Insurgentes es el más monumental de los varios filmes hechos en homenaje a Morales, que
también cuenta con biografías laudatorias y con títulos honoris causade decenas de
universidades nacionales y extranjeras.
Cuando Evo irrumpió como líder alternativo en medio de la corrupta sociedad neoliberal de los
años noventa, actuaba con la tradicional sencillez de un dirigente sindical. Recién electo como
presidente en 2005, en una gira promocional por el mundo se presentó ante el Rey Juan Carlos
I con un jersey, lo que le granjeó simpatía y algunas críticas. Con el tiempo, sin embargo, este
hombre se fue acostumbrando a la celebridad y llegó a extremos como pedir a uno de sus
asistentes que le atara las agujetas, algo por lo que ulteriormente pidió disculpas. Su actitud lo
distanció de los sectores urbanos, que hicieron que el “no” a la autorización constitucional a su
cuarta reelección ganara en el referendo del pasado 21 de febrero.
A Evo Morales le han dedicado el nombre de un pueblo, un monumento, un programa social y
el himno de las FFAA
A pesar de esta derrota, los partidarios de Morales buscan organizar una nueva consulta, pues
si el “jefazo” (así lo llaman sus allegados) dejara el poder, acabaría su propia preminencia
política. Parte de esta estrategia es mostrar a Evo como ser excepcional, un hombre de esos
que, como dijo hace poco Gabriela Montaño, presidenta de la Cámara de Diputados, “nacen
cada 150 años”.
Entramos en el barrio más peligroso del país más violento, Honduras
La Rivera Hernández, en la segunda ciudad de Honduras, vive en guerra constante. Con cinco
pandillas enfrentadas y un ritmo de tres cadáveres de media al día, la rutina es un ejercicio de
supervivencia
http://www.elconfidencial.com/mundo/2016-06-28/paseo-por-el-barrio-mas-peligroso-delpais-mas-violento-honduras_1224379/
ALBERTO G. PALOMO. SAN PEDRO SULA (HONDURAS)
El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández Alvarado, convoca una rueda de prensa
inaudita. Hace tiempo que no se recordaba un San pedro Sula sin homicidios en 72 horas. En
esta ciudad industrial, la segunda de Honduras, resulta atípico amanecer sin sangre en las
noticias. Hoy el día luce soleado, como de costumbre en esta tierra tropical. La loma del
Merendón, límite occidental, vigila a los 437.000 habitantes de la que acabó 2015 como la
segunda ciudad más violenta del mundo, con una tasa de 111 muertes por cada 100.000
221
personas. En la Rivera Hernández, su barrio más bravo, las calles se muestran desiertas. "Los
chicos están tranquilos", suspira Daniel Pacheco.
Este líder religioso de 36 años es de los pocos que no tiene problemas en caminar por todos
sus rincones. Nos guía entre sus calles de tierra y polvo. En este barrio se refugian cerca de
100.000 vecinos bajo el custodio de 12 patrullas de policía que suelen necesitar refuerzos.
Cinco maras (pandillas) se disputan el territorio: las dos principales, Mara Salvatrucha (MS)y
Barrio 18, y otras pequeñas como Vatos Locos, Tercereños o Los Holanchanos. No es nuevo en
la nación: cuartel del narcotráfico y nido de bandas, todo Honduras es un polvorín en la ya
difícil situación centroamericana. Vaso comunicante de un Caribe con corrientes de droga
colombianas y del embudo guatemalteco hacia México, este terreno de 112.500 kilómetros
cuadrados se encuentra en una encrucijada de violencia. Jóvenes que se matan entre ellos,
cárteles que buscan su sendero al mercado norteamericano y civiles condenados al encierro.
Pero volvamos a la Rivera Hernández. Una estación de policía nos recibe en la entrada, al lado
de lo que se han empeñado en llamar El Parque. Celebran que por las noches haya gente que
se atreva a caminar por él. Apostados en varios furgones, con chalecos y escopetas, todos se
muestran precavidos: "Ahí dentro es muy peligroso", advierten, como si hablaran de un jaula
con bestias. El oficial Corrales, de 27 años y con uno de experiencia en el cargo, recita un
proverbio local: "El único delincuente que no delinque es el delincuente muerto". Sonríe. Lleva
tres días de reposo en comparación con su ajetreo diario. Presume de su papel: "Elegí esto
porque es la mejor manera de servir a mi país", concede, "y estamos logrando acabar con la
inseguridad. Hace dos meses que los niños juegan por la noche. Antes era impensable: esto era
una ciudad muerta".
En una de las casas próximas, la de la familia Fernández, dan un testimonio diferente. El hijo,
de 29 años y con tres niños a su vez, cuenta la odisea de llegar al cole. Como en todo el terreno
hondureño o salvadoreño, cada calle está controlada por una Mara, y el cruce de alguna de
ellas procediendo de otras resulta fatal. "Las balas se oyen como zumbidos. Suena feo, pero se
puede decir que nos estamos acostumbrando a ello", narra, enseñando agujeros en la uralita
que cubre el patio. Su madre, María, asiente a sus 51 años. "Los niños tiene dificultad de ir a la
escuela. Hay que elegir las privadas del barrio, y no hay plata", añade con tristeza.
Varios miembros dela mara Barrio 18 posan frente a la virgen de la Guadalupe en una casa del
barrio Rivera Hernández (Javier Arcenillas)Varios miembros dela mara Barrio 18 posan frente a
la virgen de la Guadalupe en una casa del barrio Rivera Hernández (Javier Arcenillas)
Nos adentramos a continuación en una de las zonas controladas por Barrio 18. Cristian, Rango
y Fresa, de 22, 16 y 24 años, aguardan en un porche. El líder les ha dejado compartir tabaco y
refrescos con nosotros. En camiseta de tirantes y zapatillas de marca se asoman a la explanada
que marca la frontera con sus rivales. El viento empieza a cargar de humedad el césped
desigual que crece en los descampados. Una gotas se filtran por las costuras de la mesa y
convierten el polvo en barro. Hablan poco. Bagatelas. Cada cierto tiempo "les mueven" a otras
ciudades. ¿La familia? Olvidada. "La de sangre no existe; nuestra familia ya es la pandilla",
esgrimen en medio de una espera densa. Con las armas en reposo. No tienen una estructura
estable y luchan sin grandes contingentes. En las denominadas 'clicas' o grupúsculos repartidos
por las zonas rurales y urbanas de Honduras, El Salvador y Guatemala.
Su origen se remonta a finales del siglo pasado. Tras una historia de guerras civiles, golpes de
estado e inestabilidad política, muchos de sus parientes emigraron a Estados Unidos. Allí se
juntaron entre ellos y formaron guetos donde la supremacía se batía en pandillas de latinos sin
arraigo cultural ni social. Cuando el gobierno decidió deportarles se encontraron en un país
desconocido. Sin tejido social y con una pobreza extrema que hoy en día alcanza el 20%.
Hicieron lo que habían aprendido en Los Angeles y otras urbes del gigante norteamericano:
pelearse entre ellos y coaccionar a los residentes para mantenerse. Es lo que se conoce como
'renteo': cada habitante paga un "impuesto de guerra" a cambio de su seguridad.
222
"Hasta la comida más popular se llama 'baleada", explica Claudio Hernández, pastor de una
iglesia evangélica de 39 años. Ahora ejerce de mecánico, pero antes cató las mieles del crimen
robando coches. Intentó huir de 'mojado' (emigrantes que viajan ilegalmente a Estados
Unidos). Da clases de ebanistería o trabajos manuales. "Muchos 'cipotes' (niños) quieren
aprender mecánica, pintura, restauración... lo que les falta son oportunidades", asegura frente
a la antigua residencia de un antiguo líder al que asesinaron a quemarropa y que se sujeta
entre metralla y dibujo de homenaje.
La comunidad se vuelca en una competición de fútbol entre solteros y casados. Cualquier
actividad es válida para olvidar el poso de muerte y violencia que les amenaza las 24 horas. En
una pared se exhiben murales por la paz. Lo llaman "el pasaje de la bendición". Se ve a unos
niños correteando. "Es algo positivo. A mí me encanta. La gente empieza a percibirlo como
distinto, y es bueno. Antes esto estaba caliente", comenta Pacheco. Mientras, Marlon
Fernando Mercado, de 15 años, vende fruta en un carro. "No me metieron en ninguna banda",
responde, "pero uno no puede salir de aquí".
Un componente de los Vatos Locos posa con el gesto de la pandilla y una pistola en la calle que
dominan de Rivera Hernández (Javier Arcenillas).Un componente de los Vatos Locos posa con
el gesto de la pandilla y una pistola en la calle que dominan de Rivera Hernández (Javier
Arcenillas).
A pocos metros, ya de noche, Daniel Pacheco nos introduce en otra de las pandillas. Son los
Vatos Locos. No llegan a 20 miembros. De ahí que su lema sea 'Pocos, pero locos". Han
aceptado una cena de tortillas de maíz y cocacola gracias al 'patrón', Estasio de Armendía,
antiguo componente de la banda. A sus 50 años y retirado, sigue dando órdenes a los chicos.
"Uno lo que quiere es que los muchachos cambien. Y se puede. Es feo ver a un hijo muerto",
reflexiona. Con su mirada contesta a las preguntas que le hacen los 'vatos' que no están
posteando (vigilando). Casi nadie da información. Solo uno de ellos, de 26 años, se atreve a
contar que ha pasado tres años y medio en la cárcel y que intentó salir de Honduras "harto de
ser pobre". Los otros deambulan de un lado a otro o fuman hierba. Solo se juntan cuando uno
de ellos saca una pistola para mostrarla bajo el parvo brillo de una farola. Posan colocando las
manos con el símbolo de la banda. "No tenemos ni miedo ni nada". Es de noche y la salida del
barrio cada vez se vuelve más peligrosa. Atravesar el kilómetro y medio hasta el cuartel del
principio se transforma en una fuga arriesgada.
San Pedro Sula duerme sin sobresaltos. Parece que los buenos augurios del presidente siguen
funcionando. Pero sale el sol. Y con él, una llamada de la policía. El oficial Corrales da las
coordenadas. Paralelo al campo de fútbol, el cuerpo de un taxista de 45 años luce tronchado
en el asiento con dos disparos en pecho y cabeza. Su empresa acababa de resistirse a pagar la
'renta' a las pandillas y él ha sido el primer represaliado. Sus tres hijos -de 3, 15 y 20 años- y el
resto de una familia descompuesta lloran desconsolados a su vera. El contador de homicidios
en el país inicia de nuevo su tétrico marcador habiendo finalizado con 885 asesinatos. No ha
habido más discursos gubernamentales. "Aquí le matan a uno como animal, como si fuera una
gallina", solloza la madre del taxista.
“El marxismo o la teoría científica no pueden existir sin criticar
permanentemente”/ Conferencia de Etienne Balibar
Etienne Balibar
https://www.topia.com.ar/articulos/marxismo-o-teoria-cientifica-no-pueden-existir-criticarpermanentemente
Etienne Balibar, filósofo francés, discípulo de Canguilhem y Althusser, visitó Argentina entre el
21 y el 24 de abril de 2015. Es profesor emérito de Filosofía Política y Moral en la Universidad
París X Nanterre, docente de la Universidad de California en Irvine y uno de los más
prestigiosos filósofos políticos contemporáneos.
223
Entre sus ensayos traducidos al castellano podemos mencionar: Para leer El Capital (1969, en
coautoría con Louis Althusser), La filosofía de Marx (1984), Nosotros, ¿ciudadanos de Europa?:
Las fronteras, el Estado, el pueblo (2003), Derecho de ciudad: Cultura y política en democracia
(2004), Spinoza y la política (2011), Ciudadano Sujeto, Vol. 1 y 2 (2010-2012) y La propuesta de
la igualibertad (2015, en preparación).
La visita de Balibar coincidió con el 50º aniversario de la publicación de Para leer El Capital
(1965), escrito en colaboración con Louis Althusser.
En la oportunidad, recibió el Doctorado Honoris Causa por la Universidad Nacional de San
Martín. En el marco del ciclo “¿Qué hacer con Marx?”, dictó la conferencia “Teoría y crítica
después del estructuralismo” y participó de un taller coorganizado con la Escuela de
Humanidades y el IDAES de la Universidad.
Además, invitado por el Programa de Estudios Políticos de la Facultad de Ciencias Sociales,
dictó una conferencia en esa casa de estudios. Allí aprovechamos para solicitarle una
entrevista para Topía, pero debido a la brevedad de su estadía, nos sugirió grabarla y
publicarla con su autorización.
Mario Hernandez
“El marxismo o la teoría científica no pueden existir sin criticar
permanentemente”
Amigos, colegas, compañeros y compañeras tengo que hacer dos aclaraciones preliminares,
primero agradecer inmensamente la invitación a Buenos Aires y la recepción que me hacen,
adonde vuelvo luego de algunos años y, debo decir con emoción, que es un honor y un placer
estar aquí esta noche. Lo más importante, no tengo en mi propio lenguaje ni la décima parte
del humor y del estilo que tiene mi amigo Emilio de Ipola y, por lo tanto, tampoco lo tengo en
español, así que después de una ponencia brillante, humorística e inteligente de Emilio, van a
escuchar algo mucho más aburrido.
Habría que preguntarse a título de qué estoy aquí hoy, en cierto sentido ustedes tienen por
delante a dos personas diversas, hay un joven de 23 años coautor de “Para leer El Capital”,
sobreviviente por milagro de aquella época, y debo decir que para mí, la otra persona que está
aquí, es un viejo profesor meritorio de varias universidades. Primero, es una sorpresa increíble
tener que reconocer que después de la escritura de este libro han pasado 50 años, dos
generaciones, y hemos pasado, como bien sabemos, de una época histórica a otra casi
completamente diferente.
Naturalmente, al joven de quien estaba hablando, yo no lo conozco muy bien, sinceramente,
tratando de contestar a preguntas sobre “Para leer El Capital”, el texto que había escrito, no
bajo la dictadura de mi maestro, sino en cierta comunión de intenciones y de ideas de las que
voy a hablar en unos momentos, ahora casi no lo entiendo.
Eso también da una posibilidad de ser un poco más objetivo, es decir, releer todo esto y tratar
en modo más o menos incierto o vacilante, de ocupar diversos lugares intelectuales y acaso
morales acerca del objeto, no de la reliquia del mismo. Según me decía Natalia al entrar en la
sala, aquí todos son althusserianos y si seguimos a Emilio ustedes probablemente no tendrían
224
que existir, porque los althusserianos no existen. Pero, probablemente yo sería el único no
althusseriano, de todas formas eso no me priva de la necesidad de enseñar a Althusser.
Quisiera tratar de hacer dos cosas, primero quisiera no destruir al mito, deconstruir al objeto
del que estaba hablando que ustedes conocen mejor que yo, sino más sencillamente introducir
algunos elementos históricos y factuales para mejor comprender el modo de producción de
este libro y, como consecuencia, ciertos de sus aspectos extraños, que no se ven
inmediatamente. Todos ustedes tienen en sus manos un libro que se llama “Para leer El
Capital”, con los dos nombres de sus autores, Louis Althusser y Étienne Balibar, su discípulo.
¿Alguien me lo podría prestar? Este es el objeto material, pero es engañoso y no es puramente
una cuestión de narcisismo o coquetería, hay verdaderamente hoy en día después de 50 años,
algunos de los enigmas que se ocultan debajo de él. También voy a tratar de decir algunas
cosas acerca del contenido y de su valor actual.
Primero, ¿qué fue “Para leer El Capital” originalmente? Fue la transcripción de las ponencias
presentadas en un seminario organizado en la Escuela Normal Superior que es el corazón más
prestigioso, más elitista, del sistema académico francés, en el Departamento de Filosofía, por
un grupo de estudiantes dirigidos por su maestro, Louis Althusser, un joven profesor de
filosofía.
En Francia había una jerarquía muy fuerte en estos establecimientos e institutos académicos
en aquellos años, antes del ´68, y de hecho, Althusser no era un profesor de alto nivel, era un
ayudante, pero en este lugar elitista y prestigioso. Los que participaron en el seminario, lo
hacían en diversos modos, es muy importante recordar que se trataba de un trabajo colectivo
y voy a indicar algunas consecuencias de eso.
Hubo alumnos de Althusser que jugaron un papel muy importante en la fase de preparación
del seminario. Si queremos tomar el proceso de preparación en su conjunto, habría que
empezar cuatro años antes del Seminario sobre El Capital, es decir, en 1961, cuando yo,
totalmente desconocido en todo el mundo, porque jamás había escrito una línea, fui en cierto
modo el espíritu inspirador junto a Jacques-Alain Miller, un poco más tarde el famoso
lacaniano y su amigo, Jean-Claude Milner, vinimos a encontrar a nuestro profesor de filosofía,
de poco más de 40 años, que nos enseñaba a Platón, Spinoza, Rousseau y otros. Obviamente,
tenía un interés especial por la filosofía política clásica. Se sabía que era miembro del Partido
Comunista y el mismo año él había publicado un primer artículo, luego inserto en el volumen
“Por Marx”, traducido por Marta Harnecker bajo el título “La revolución teórica de Marx” que
se llamaba “Sobre el joven Marx”, no voy a contar lo que todos ustedes ya conocen acerca de
la importancia que tuvo.
Ese artículo había provocado un efecto notable, inclusive cierto escándalo en el espacio
intelectual francés porque, por un lado, atacaba cierta controversia del comunismo oficial y
desde lo interno del partido y, por otro lado, atacaba al marxismo humanista especialmente a
su versión más hegeliana la que precisamente un año antes, el filósofo francés más prestigioso
de toda la época, el propio Jean Paul Sartre, había desarrollado en un libro inacabado, casi
imposible de leer, porque lo había publicado como lo había escrito, o sea, sin puntuación, sin
subtítulos, una frase única de 700 páginas, que se llamaba “La crítica de la razón dialéctica”.
Nosotros tratamos de leerlo con enormes dificultades, pero en la Introducción había una
fórmula que tuvo una resonancia enorme; todos ustedes la conocen: “El marxismo es el
horizonte insuperable de su época”. Luego Sartre decía que había que añadir algunas cosas,
porque según él al marxismo le faltaba alguna doctrina del sujeto y de la experiencia humana,
una antropología filosófica. Para nosotros esa declaración fue absolutamente indiscutible, las
225
razones que tomamos en cuenta, aún una vez más simplificando, no por razones puramente
especulativas o teóricas, sino más bien por razones políticas e históricas.
Entramos en una nueva estación revolucionaria
Añadamos otra fecha. Sartre publica este libro con esta frase y un año antes triunfa la
Revolución Cubana en La Habana que rápidamente se transformó en una revolución socialista.
La Revolución Cubana, con otros aspectos de la situación en el momento, tuvo una fuertísima
repercusión en la juventud francesa porque estábamos en medio de la guerra de Argelia, por
lo tanto, el problema de la lucha antiimperialista y de sus perspectivas, no solamente
nacionales sino socialistas, se imponía a nosotros con una fuerza enorme, naturalmente había
todo tipo de divergencias y conflictos al interior del movimiento estudiantil de apoyo a la
independencia argelina en el que todos nosotros nos inscribimos con entusiasmo.
Para resumir, diría que una parte importante de esa generación, no solo jóvenes intelectuales
burgueses formando parte de esa elite de la que estaba hablando, se imaginaron, se soñaron
como revolucionarios y algunos de ellos lo fueron en diversos modos, pero sí fuimos
convencidos de que estábamos entrando en algo que yo llamaría una nueva estación
revolucionaria.
Quería tomar la palabra que todos ustedes tan bien conocen, la fórmula que uno de nosotros,
no directamente althusseriano, pero alumno y amigo de Althusser, Régis Debray, después de
haber viajado a Cuba para encontrarse con el Che Guevara, la fórmula que él adoptó, tal vez
bajo la influencia de alguno de sus amigos cubanos, no sé si fue sugerida por alguno de ellos de
alto nivel, de “la revolución en la revolución” y esa es la idea que nosotros teníamos
exactamente.
Entramos en una nueva estación revolucionaria y se va a caracterizar por una revolución, es
decir, un cambio en las formas, los métodos, no los objetivos pero sí los modos de
organización, de hacer y combinar la teoría y la táctica. Eso produjo un efecto no secundario
que hay que mencionar, y estoy hablando de los jóvenes, no estoy hablando de Althusser
porque él es otro caso que no tenía la misma historia ni era de la misma generación.
Los acontecimientos trágicos, antiguos o recientes de la historia del socialismo real, no es que
no los consideramos o los ignoramos completamente, pero sí los consideramos como una
contradicción secundaria, un aspecto secundario de la contradicción. Tal vez el caso más
significativo, pensando en mi experiencia, pienso en conversaciones que tuvimos cuando entré
primero a la organización juvenil comunista en 1960 y luego en el partido en 1961, había un
acontecimiento reciente que cumple un papel muy importante en las controversias acerca de
la naturaleza del comunismo como movimiento histórico y es la revolución húngara del ´56.
Recuerdo muy bien discusiones, no con Althusser, otro punto ciego del cual nunca hablamos,
sino con otros comunistas que nos convencieron que había habido que elegir entre el
socialismo con todos sus errores y desviaciones ante el imperialismo en pleno período de
agresividad, el mismo año del golpe de Suez.
Le dijimos a Althusser que sus clases sobre Platón eran muy interesantes pero que más nos
interesaba Marx
Dejando todo esto de lado nos dijimos que estábamos entrando en una nueva estación de la
revolución. Pero para estar a la altura de la situación había que conocer el marxismo y en la
misma escuela en la que estábamos había un comunista marxista que empezaba a hacerse
conocido, Louis Althusser; lo citamos y le dijimos que sus clases sobre Platón eran muy
226
interesantes pero que había algo que nos interesaba más que era Marx, entonces le pedimos
que nos hiciera trabajar sobre él.
Es importante tener en claro que nosotros lo buscamos, él nos dijo esencialmente dos cosas a
lo largo de los 3 o 4 años que siguieron, “primero, ustedes me preguntan acerca del marxismo
y el marxismo no existe, existe solo en fragmentos, algunos de ellos como El Capital son
fragmentos enormes, pero la idea de marxismo como sistema como ha sido impuesto por el
materialismo histórico y dialéctico de Stalin y de otros, no existe”.
Tengo que aclarar que él no conocía ciertas corrientes críticas, o no las quería conocer por
diversas razones, lo cual hubiera hecho más interesantes las discusiones o hacer estudios
comparativos. El segundo aspecto del efecto encantador de Althusser fue decirnos que no
podía inventarnos el marxismo, que teníamos que inventarlo juntos, con trabajo colectivo, y
así se creó algo que seguramente tiene otros ejemplos equivalentes, es decir, un grupo de
compañeros intelectuales compuesto de jóvenes ávidos de lecturas sin experiencia y otro un
poco más viejo pero que no se comportaba como maestro.
Althusser pertenecía a otra generación y tenía intenciones no diría secretas pero tampoco
explícitas y una cierta parte de eso ahora se hace más visible y se puede entender, porque hay
documentos que han sido publicados durante este último tiempo que son reveladores.
Algunos de ustedes probablemente recuerden que en su escrito autobiográfico, texto muy
complejo lleno de relaciones interesantes y de enormes errores voluntarios o involuntarios,
algunos debidos al aspecto autodestructor de lo que escribe acerca de su propia experiencia.
En ese libro hay un momento en que Althusser vuelve al inicio del trabajo del que estaba
hablando, el que pertenece al período que él más tarde definiera como teoricista que incluye
naturalmente a “Para leer El Capital” como su elemento central, y dice que para los miembros
del movimiento comunista francés, así como para los del movimiento comunista internacional,
la teoría de Marx era considerada científica, para el Partido Comunista Francés (PCF) era algo
casi sagrado.
Entonces, en sus “Memorias”, presenta su empresa como una tentativa de superación interna,
de transformación subversiva y escribe que era necesario adoptar el lenguaje, la postura y el
punto de vista del discurso científico para atacar a la doctrina del partido desde el interior,
adoptando el lenguaje que el partido no podía rechazar. Cuando leí este pasaje en las
“Memorias”, y como la editorial me consideraba un buen discípulo de Althusser, me pidieron
que escribiera un prefacio para la nueva edición de “La revolución teórica de Marx” y al final
del mismo me enojé un poco y dije que no podía aceptar esa presentación manipuladora y
desprovista de lo que hicimos en 1965, puedo equivocarme, naturalmente, o haber sido
víctima de una manipulación inconscientemente, pero esa presentación desprovista de toda la
historia, es una especie de versión melancólica y retrospectiva.
El hecho es que en aquel momento los que creían en la verdad y la importancia teórica, desde
un punto de vista científico y en la verdad de la teoría de Marx fuimos nosotros, no el PCF,
tampoco los burócratas del partido, que no se preocupaban de la teoría en ese sentido.
Algunos meses después se publicó un documento interesante que pueden encontrar en
internet en francés con fecha del 25 de febrero de 1965, de 40 páginas que tiene la extraña
forma y ficticia en cierto sentido de algo como una relación para el Comité Central del partido
dirigida a un importante dirigente, el responsable de los intelectuales.
Saben ustedes que en los partidos comunistas soviéticos había un responsable cada dos
intelectuales. Después de una conversación que ellos tuvieron, Althusser le manda una carta
227
que habla de la relación del partido y los intelectuales en general, del nuevo tipo de
intelectuales que existe en la sociedad científica y técnica, y explica que el partido se equivoca
completamente si imagina poder influenciar a los intelectuales explicándoles que hay que
someterse y considerarse fuerza de apoyo de la clase obrera, la vieja idea de que los
intelectuales tienen que insertarse en el movimiento obrero porque ellos tienen sus razones
para ser comunistas.
Pero para transformar la teoría del partido y su lenguaje, explica Althusser, hace falta un
esfuerzo enorme en el campo de la filosofía marxista, el materialismo dialéctico del lenguaje
de la época, y para eso el partido francés, escribe tal vez un poco vanidoso, está muy mal
preparado porque los intelectuales y filósofos que tiene son nulos, no tienen ningún valor. En
un momento le explica a la dirección del partido que está preparando una nueva generación
de nuevos jóvenes filósofos marxistas que van a ser mucho mejores que los que tienen
ustedes.
Fuimos manipulados
Después de este acontecimiento, sí hubo una especie de manipulación en cierto sentido,
fuimos manipulados, no con intenciones absurdas. La impresión que tengo es que Althusser
tenía, y se podría explicar en términos maquiavelianos, que él usó más tarde, según pienso
hoy, dos ideas en mente: primero, pensaba que el movimiento comunista internacional, lo que
él llamaba con mayúsculas la fusión de la teoría y del movimiento obrero, era una cosa única
en la historia, algo radicalmente nuevo y único en la historia, una práctica política que
necesariamente contenía e integraba en su propia práctica un momento de teoría y de ciencia
en sentido fuerte. En consecuencia, había algo como un punto de honor, para un partido
comunista o marxista, estar a la altura de su propia pretensión teórica, algo que naturalmente
los partidos comunistas de la época no lograban.
Existía también la idea de cambiar el tipo de relación entre la teoría y la dirección política; eso
tocaba al corazón del sistema del comunismo oficial como había sido teorizado por Stalin y que
daba la regla.
Recordemos que Althusser escribió frases llenas de admiración a los dirigentes comunistas y
marxistas que en la historia combinaron la capacidad teórica con la capacidad de dirección
política, y los nombres que nos vienen a la mente son Lenin y Mao Tse Tung.
Otra idea más implícita que me tienta llamar con un término más propio de la historia de la
Iglesia y del catolicismo, la idea de la protesta indirecta. Hay que establecer una especie de
distancia entre la dirección política y la práctica teórica o el trabajo teórico, para que la
organización política no pudiera seguir utilizando a la teoría como servidora de la dirección
política, que era exactamente lo que hacían los partidos comunistas y que de hecho siguen
haciendo muchas organizaciones políticas. Decidimos una línea, un día es clase contra clase,
otro día es frente popular u otra táctica, y eso aumenta el prestigio de la función intelectual. La
palabra intelectual orgánico en Gramsci tiene ciertas ambivalencias en este aspecto y nosotros
los dirigentes políticos les pedimos a los intelectuales hacer un discurso teórico para explicar
por qué nuestra línea política es justa y es la única posible, aún si es distinta a la que tuvimos
en otro período. Esto es lo que Althusser quería destruir.
Althusser nos dijo que para renovar al marxismo había que hacer un gran “rodeo” por la teoría,
y fue a través de muchas cosas, del estructuralismo, de la lectura de Lacan, muy importante
para todos nosotros ya que teníamos la idea de que entre marxismo y psicoanálisis, aunque se
228
diferencian, era imprescindible la complementariedad. Hicimos ese rodeo y luego hicimos el
seminario.
Quisiera insistir en que el libro “Para leer El Capital” fue publicado el mismo año, con dos
meses de diferencia, que la colección de los escritos del propio Althusser, “La revolución
teórica de Marx” (“Por Marx”), el resultado de esto, que yo considero negativo, fue que ambos
libros se consideraron inmediatamente como piedras angulares y fundamentales de una nueva
escuela marxista y un nuevo discurso marxista. La gente empezó a leer “Para leer El Capital” en
los términos que se encontraban en “Por Marx” y a leer “Por Marx” con ayuda de “Para leer El
Capital”.
Pero por las razones que indicaba hace un momento, “Por Marx” es un libro únicamente de
Althusser, que aunque cambió sus ideas, el libro nunca dejó de ser el producto de su
inteligencia. La comparación que yo hago en la historia del marxismo y que también
demuestra, según pienso, la relevancia y la importancia del libro en este aspecto, es con la
famosa obra de juventud de Lukacs, “Historia y conciencia de clase”. Son libros del mismo
tamaño, organizados como una colección de textos, con un gran ensayo central, sobre la
dialéctica que es la conciencia de clase y el proletariado en el caso de Luckas. También hay
aspectos estéticos y políticos.
La comparación es aún más interesante porque los dos tipos son de diversas épocas. Uno es
del período inicial del comunismo, el otro, Althusser, aunque no lo sabía, del comienzo del
período legal. Las posiciones son muy opuestas, pero a nivel de estructura y estilo la
comparación tiene sentido.
Mientras, “Para leer El Capital” es una obra, digamos, más híbrida y heterogénea; eso no lo
entendimos en la época, pero para mí ahora está claro.
En este punto hay que decir, primero, que fuimos nosotros, en cierto sentido, los responsables
del llamado “teoricismo”, naturalmente Althusser lo sabía y nos empujó y aconsejó leer a los
epistemólogos franceses famosos y otros, Lacan, etc., en ese sentido tiene la responsabilidad
inicial, pero nosotros como buenos estudiantes fuimos completamente entusiastas.
La autocrítica de Althusser es en verdad una crítica a lo que sus alumnos habían escrito y que
no completamente concordaba con su visión.
El segundo aspecto, que no es una confesión al estilo católico, un arrepentimiento, pero sí veo
al grupo con un sentimiento de terrible vergüenza porque la primera edición de “Para leer El
Capital”, la edición completa, está hecha de ensayos de cinco autores. Empieza con la
introducción general de Althusser, que naturalmente fue escrita después de la redacción de las
ponencias, contiene un ensayo de Jacques Ranciere que se llama “El concepto de crítica en
Marx”, sigue un ensayo más breve sin mayor interés porque su mayor contribución al trabajo
althusseriano de aquella época fue sobre la producción literaria, sobre teoría de la literatura;
luego viene la contribución del mismo Althusser como miembro del seminario, luego viene mi
propia contribución y finalmente una contribución de otro miembro de nuestro grupo que no
fue ponencia del seminario.
Se editaron dos volúmenes en 1965, tres años después, en 1968, tras muchos
acontecimientos, el desarrollo del movimiento maoísta, en el que muchos jóvenes
althusserianos tuvieron un papel decisivo, el propio Althusser jugando una especie de doble
juego muy complicado entre el Partido Comunista de un lado y los maoístas del otro, con la
consecuencia de que finalmente terminó cautivo en medio de los tiros de ambos campos, el
229
partido acusándolo de ser maestro de los maoístas y los maoístas acusándolo de ser un
revisionista que no quería tomar sus responsabilidades con consecuencias dramáticas para su
estado psíquico y mental.
En 1968, antes de la movilización estudiantil, Althusser nos dice que el libro había tenido un
éxito enorme, pero que para ser aún más útil para militantes de base, había que reducirlo a un
tamaño más pequeño y para hacer eso había dos soluciones, o bien elegimos algunos textos y
eliminamos los otros, o hacemos una redacción resumida de todos las contribuciones.
Nosotros le preguntamos qué prefería hacer él, a lo que nos respondió que prefería la primera
solución, inmediatamente le preguntamos qué íbamos a mantener y qué íbamos a eliminar, a
lo que respondió que íbamos a mantener el texto de Balibar porque es un texto muy claro que
la mayoría de los lectores consideran muy útil en términos de aplicación a las ciencias sociales,
la economía, la antropología, y vamos a dejar de lado los demás porque son mucho más
complicados, filosóficos y difíciles de comprender para los militantes.
Yo como un cretino absoluto no vi la trampa en esa solución, esa versión reducida fue utilizada
como base de las traducciones en todo el mundo, así se creó el libro de Althusser y Balibar, en
el cual la cara invisible era la declinación de los otros y en particular de Jacques Ranciere.
Dejo de lado explicar el conflicto que se produjo algunos años después entre Ranciere y
Althusser, más bien consecuencia de la evolución de aquél y segundo, aunque naturalmente él
no lo reconoce, pero para mí ahora está claro que estaba muy implicado en el movimiento
maoísta de esos años y que Althusser, por el contrario, había abandonado al menos
visiblemente toda inclinación en esa dirección y trabajaba críticamente.
Voy a dejar el aspecto teórico de lado, solo voy a decir algo. Al hacer estas modificaciones tuve
que releer mi propio texto, el de Ranciere y el prefacio que Althusser escribió. El caso no es
que uno haya sido más estructuralista que otro, todos lo éramos, como lo sabe muy bien
Emilio; este libro cambió mucho mi comprensión de todo ese proceso, para simplificar, la
orientación de Ranciere es crítica en un sentido casi kantiano, hace referencias permanentes a
Kant, su problema es como el problema de Kant con la dialéctica trascendental, explicar la
posibilidad e incluso la necesidad de una ilusión trascendental, la ilusión del sujeto ideológico
como consecuencia inevitable del juego de las categorías centrales del pensamiento, que son
las categorías de la economía política, una cosa que Marx decía cuando hablaba de las formas
del pensamiento objetivas que producen un efecto de ilusión subjetiva, así Ranciere se
mantiene a nivel filosófico de una tentativa de tipo crítico.
Mientras que yo tomo el punto de vista exactamente opuesto y escribo un texto
esencialmente positivista, esa fue la razón por la que, yo no los quiero insultar, pero los
llamados militantes, y sobre todo economistas, antropólogos, historiadores marxistas influidos
por la revolución teórica anunciada por Althusser encontraron en mi texto un instrumento útil;
porque yo decía que la crítica ya estaba acabada, que habíamos entrado en el campo de la
ciencia y en él podíamos definir conceptos que no tienen ninguna relación con las ideologías o
las ilusiones ideológicas del pasado, sino que explican objetos reales de la historia presente.
El problema que como buen militante comunista me interesaba era el problema de la
revolución y yo lo reformulé en términos de transición, una cosa que en ese momento jugaba
un papel muy importante esencialmente en los países subdesarrollados donde se
desarrollaban las luchas antiimperialistas.
230
Todo el mundo estaba interesado en cómo analizar los fenómenos y procesos de transición,
pero la transición como yo la describía, en términos positivistas, se presentaba como una
combinación contradictoria de dos tipos de estructuras, las capitalistas y las socialistas o tal
vez comunistas. Lo extraño en este sentido es que unas existen en la realidad mientras que las
otras, naturalmente, son intelectuales. Lo interesante también es que yo tenía una cuestión en
común a nivel formal que era el poner las estructuras intermedias impuras, excepto que para
Althusser el concepto central era cómo entender la posibilidad de un discurso como la
economía política que el propio Marx consideraba semi científico y semi ideológico, una
especie de contradicción interna; mientras yo me ocupaba de una “contradicción real” en la
historia.
En la nueva edición, la que ustedes tienen, tanto en mi texto como en el de Althusser, fueron
eliminadas las fórmulas que tenían un sabor demasiado estructuralista. Althusser y yo, pero
también otros althusserianos habíamos decidido no solo que el estructuralismo no era útil
para refundar el marxismo, sino que además era una ideología peligrosa. De tal manera la
genealogía profunda que Emilio discute y explica muy bien en su libro, acerca de la
combinación paradójica naturalmente, pero también muy productiva intelectualmente, entre
estructuralismo y marxismo, en el sentido intelectual, esa combinación está más o menos
acordada y escondida en el texto final.
Si ustedes toman los textos de Althusser más el mío, ¿qué tienen en sus manos? Tienen un
equivalente, no digo en todos los aspectos del contenido, del libro de Stalin “Materialismo
dialéctico y materialismo histórico”; el propio Althusser lo dijo. El texto de Althusser
“Materialismo dialéctico” y el texto de Balibar “Materialismo histórico”, uno es la fundación
del otro, el segundo es la ilustración de las capacidades científicas del primero. Habría que
reflexionar sobre la larga influencia del esquema estaliniano en el pensamiento de Althusser.
Tiene razón Emilio cuando lo llama esotérico, más político el lector de Maquiavelo e inventor
de esa palabra extraña “materialismo aleatorio”, con carga negativa, no es solamente el
materialismo que tiene el azar como su contenido, se puede entender también como un
materialismo muy improbable. Lo cierto es que tiene muy poco de materialismo estaliniano y
probablemente no tiene nada de marxista, de hecho no tiene nada que ver con él, es una
invención filosófica.
Quisiera matizar esta presentación muy negativa y muy autocrítica en cierto sentido, porque
en los dos textos que Althusser introduce en el Prefacio hay dos cosas que no se deducen de
esto. La primera es la idea de la lectura sintomal, que es una primera tentativa de rectificación
de las orientaciones opuestas que tuvimos en el texto. Es una idea dialéctica en cierto sentido,
hay una interpretación, la interpelación restringida de la idea de lectura sintomal que está de
acuerdo con el famoso tema del corte epistemológico, la lectura sintomal fue lo que hizo Marx
para criticar la economía política y el método que usó para producir el corte epistemológico.
Althusser propuso otra interpelación, la idea del corte epistemológico continuado. Pero no
llevó la idea del corte epistemológico hasta las consecuencias que, en cierto sentido, el
concepto de lectura sintomal contiene. Si leen el texto van a ver que es la mejor
interpretación, es decir, se trata de un proceso infinito, no acabado; lo que quiere decir que el
marxismo o la teoría científica no pueden existir sin criticar permanentemente, no solo a una
ideología pre existente, sino más bien a la ideología que su propia actividad teórica recrea y
reproduce en su relación con los movimientos políticos. Hay que aplicar la lectura sintomal a sí
mismo, hay que añadir otro nivel de transferencia y de control.
El otro elemento imprescindible, es un elemento que hay que reconstruir tomando algo de
“Por Marx” y algo de “Para leer El Capital”, en el párrafo final del Prefacio aparece la formula
231
sencilla que dice que habría que estudiar el efecto de sociedad; fórmula muy extraña porque
da la impresión de ser una cosa nueva que el texto no contiene, de hecho lo contiene, el efecto
de sociedad no es otra cosa que la sobredeterminación y ésta no es otra cosa que la unidad de
contrarios, lo cual es muy difícil de pensar y conceptualizar entre estructuras y coyunturas en
la práctica política.
El corazón de todo esto, para mí, la parte más bella de “Para leer El Capital” porque es el cristal
filosófico, es el capítulo de Althusser que se llama “Esbozo de un concepto de tiempo
histórico”, es interesante porque es vecino de un capítulo atroz que se llama “El marxismo no
es un historicismo”, el ataque a Lukacs y a Gramsci, que es una ilustración casi perfecta del
método estalinista llamado leninista de criticar a las desviaciones de izquierda de Lukacs y a las
de derecha de Gramsci, explicando que tienen el mismo contenido, que es la misma
incapacidad de comprender la dialéctica. Es horrendo, pero la contrapartida positiva e
inacabada es el esbozo de un concepto que yo llamaría no vulgar, no lineal, no evolucionista,
no teológico de la historicidad como no contemporaneidad estructural del presente.
Es aquí que Althusser puede ser comparado con otras grandes figuras del marxismo del siglo
XX que estaba mencionando antes. Esto no es para explicar que uno es mejor o superior, es
para decir que estamos aquí en el corazón del problema filosófico y que Althusser
verdaderamente lo tocó en esta época. Muchas gracias.
Desgrabación: Ana Laura Xiques
Revisión y edición: Mario Hernandez
Hay un vínculo directo entre el Plan Colombia, EE. UU. y 5.500 jóvenes
colombianos asesinados/ Entrevista a Renán Vega Cantor, , Bogotá,
Colombia
Mario Hernández
https://www.topia.com.ar/articulos/hay-un-vinculo-directo-plan-colombia-ee-uu-y-5500jovenes-colombianos-asesinados
Renán Vega Cantor es historiador. Profesor titular de la Universidad Pedagógica Nacional de
Bogotá, Colombia. Doctor de la Universidad de París VIII. Diplomado de la Universidad de París
I, en Historia de América Latina. Autor y compilador de los libros Marx y el siglo XXI (2
volúmenes), Editorial Pensamiento Crítico, Bogotá, 1998-1999; El Caos Planetario, Ediciones
Herramienta, 1999; Gente muy Rebelde (4 volúmenes), Editorial Pensamiento Crítico, Bogotá,
2002; Neoliberalismo: mito y realidad. Entre sus últimos trabajos podemos mencionar: Los
economistas neoliberales, nuevos criminales de guerra: El genocidio económico y social del
capitalismo contemporáneo (2010). La República Bolivariana de Venezuela le entregó en 2008
el Premio Libertador por su obra Un mundo incierto, un mundo para aprender y enseñar.
Dirige la revista CEPA (Centro Estratégico de Pensamiento Alternativo).
M.H.: Un momento muy especial para la vida política colombiana, el pasado jueves 4 de
febrero se encontraron en Washington los Presidentes Obama y Santos, encuentro en el que
también estuvo presente el ex Presidente Pastrana, en la conmemoración de los 15 años del
“Plan Colombia”, realizada en la Casa Blanca. ¿Cuál es tu visión respecto del “Plan Colombia”?
Tanto Santos como Obama lo dieron como un plan que tuvo resultados positivos. El ex
Presidente Andrés Pastrana también, pero fue crítico de los acuerdos de paz a los que luego
haremos referencia. Comencemos con el Plan Colombia.
232
R.V.C.: Cuando se analiza un hecho del presente uno tiene que pensar si se habla de resultados
favorables o desfavorables, para quién o para quienes. Por supuesto que para Estados Unidos
los resultados del Plan Colombia han sido absolutamente favorables y para las clases
dominantes de Colombia y el que nosotros llamamos bloque de poder contrainsurgente
también. Pero para el grueso de la población no solo colombiana, sino andino latinoamericana
los resultados del Plan son terriblemente negativos. Me atrevería a decir que el Plan Colombia
se podría catalogar como plan de muerte, porque en estos 15 años lo que se ha dado es una
recolonización de Colombia, se ha convertido en el territorio donde las clases dominantes han
feriado todo y se ha iniciado un proceso de convertir a nuestro país en la base más
incondicional de los Estados Unidos.
Desde ese punto de vista uno se pregunta qué se puede celebrar.
¿Se puede acaso celebrar la muerte? Y no hablo en términos metafóricos, sino en términos
reales fundados en hechos que se han dado recientemente. Tal vez en Argentina, como en
otros lugares del mundo, se ha escuchado hablar de un término absolutamente banal pero que
oculta muchas cosas, que es el de “falsos positivos”. Ese término significa asesinatos de
Estado, que se han cometido durante estos 15 años, en una práctica sistemática que se
generalizó durante el Plan Colombia, no nacieron con él pero sí durante su vigencia se
convirtieron en una práctica organizada y continua que ha tenido como resultado alrededor de
5.500 asesinatos.
Durante los gobiernos de Álvaro Uribe Vélez, entre 2002 y 2010, pero principalmente entre el
2002 y el 2008, cuando estalló el escándalo, se recurrió a la práctica de asesinar a jóvenes
colombianos que mediantes distintos artificios eran engañados y se los llevaba a distintas
zonas a donde ellos vivían, se les vestía con traje camuflado, se los asesinaba y se los
presentaba como guerrilleros dados de baja.
Esa práctica tiene como resultado la cifra de 5.500 muertos, una cifra que las ONG consideran
la más alta de asesinatos políticos en todo el mundo en lo que va del siglo XXI. Son crímenes de
Estado que están relacionados con el Plan Colombia. Estamos hablando de que en el gobierno
de Uribe Vélez, cuando fue Ministro de Defensa del actual Presidente de la República de
Colombia, Juan Manuel Santos, se dieron directivas oficiales, en las que se comienza a poner
precio sobre las cabezas de los miembros de la insurgencia, de acuerdo a su importancia
dentro de la organización. Por ejemplo, para los mandos superiores, como el Secretariado de
las FARC ofrecían 5.000a 10.000 millones de pesos, y de ahí para abajo se empezaba a ofrecer
hasta los combatientes rasos. Aparte se daban otro tipo de incentivos, como mandos militares,
altos o medios que estuvieran involucrados en el asesinato de insurgentes tenían algunas
remuneraciones adicionales como vacaciones, premios económicos o se les ascendía. Eso fue
convirtiéndose en un incentivo para matar colombianos. Se trataba además
propagandísticamente de decir que el Ejército colombiano estaba matando guerrilleros a
diestra y siniestra, cuando en realidadse trataba de jóvenes colombianos humildes que eran
engañados y asesinados.
Esos son los “falsos positivos”, es interesante de donde surge ese nombre. En el Ejército
colombiano se acostumbra que cuando un oficial da una orden y el subalterno le contesta
“positivo”, quiere decir que la orden se acató. En este caso quiere decir que la orden de
asesinar colombianos se cumplió. Pero en cuanto la prensa del mundo en vez de sacar un
titular que diga “Cinco mil colombianos asesinados por el Ejército”, dicen “Cinco mil falsos
positivos asesinados” se atenúa el crimen, y eso es lo que ha sucedido. Esto está relacionado
233
con el Plan Colombia porque hay ONG de EE. UU.y Europa que han hecho investigaciones de la
responsabilidad de unidades militares colombianas de altos mandos, en la realización de los
llamados “falsos positivos” y la relación con los Estados Unidos, es decir que se ha investigado
cuál es la formación de esos militares y dónde tomaron sus cursos. En la mayoría de los lugares
donde se llevaron a cabo esos falsos positivos, los comandantes de las unidades militares,
fundamentalmente con cargos superiores, en un 80/90% habían recibido instrucción de
Estados Unidos en la Escuela de Las Américas, por ejemplo.
Hay un vínculo directo entre el Plan Colombia, la participación de USA y los asesinatos. Pero
este es tan solo un elemento del Plan Colombia que de por sí ya es escandaloso. Otro
elemento es que durante el Plan Colombia se acentúa el uso del glifosato como químico para
destruir las matas de hoja de coca, pero eso ha llevado a la destrucción de economías
campesinas, indígenas, la enfermedad y muerte de muchos colombianos en zonas campesinas.
Un país tan dependiente, tan sometido como Afganistán se negó en un momento determinado
a usar este tipo de químicos para fumigar los cultivos de amapola, en cambio, en Colombia esa
práctica se ha seguido llevando a cabo hasta el día de hoy, aunque hace unos meses se dijo
que se iba a suspender.
Un tercer elemento en el que se demuestra que este es un plan de muerte, tiene que ver con
el asesinato, en un país en el que no existe la pena de muerte, de altos miembros de la
insurgencia con la participación directa de tropas de los Estados Unidos. El crimen de guerra
del 1° de marzo del 2008 en Sucumbíos, Ecuador, donde fueron asesinadas 26 personas, entre
ellos el segundo comandante de las FARC, Raúl Reyes, 4 estudiantes mexicanos y ciudadanos
ecuatorianos. Hace unos dos años un periódico de EE. UU.dio a conocer que ese operativo
había corrido por cuenta directa de las fuerzas de USA.
Entonces, cuando se celebran los 15 años de este Plan, están celebrando la muerte,
persecución, el exilio y represión de miles de colombianos. Me parece que es cinismo, más
cuando estamos hablando de un Presidente que supuestamente está interesado en lograr la
paz. Podemos decir que se trata de la paz de los sepulcros la que está celebrando.
Por supuesto, si miramos el Plan Colombia desde una óptica diferente, ha sido nefasto no solo
para Colombia sino para los países de la región. Ha significado la militarización creciente de
toda la región, la construcción de nuevas bases militares, injerencia de los Estados Unidos,
construcción y manejo de radares en zonas estratégicas como el Mar Caribe y la Amazonía;
bases militares norteamericanas en territorio colombiano desde donde se puede agredir,
controlar y vigilar a todos los territorios de la nación. Esos son algunos de los resultados del
Plan Colombia.
Hay otro elemento que resulta paradójico. El debate por este Plan comenzó en el Senado de
los Estados Unidos entre 1999 y el 2001 en un momento en el que había dialogo entre las
FARC y el gobierno de Pastrana. En ese momento se dijo que el Plan no era contrainsurgente,
sino que era para combatir el narcotráfico. Cuando se rompieron las conversaciones y luego de
los atentados de septiembre de 2001, abiertamente se dijo que era un plan contrainsurgente
encubierto como un plan antinarcóticos.
En términos de narcóticos el plan es un absoluto fracaso. Colombia no ha dejado de ser
proveedor mundial de cocaína, a pesar de que México cumple un papel significativo. No se ha
reducido notablemente el número de tierras sembradas, inclusive si se hubiera reducido, la
productividad por hectárea es mayor que la que existía hace 15 o 20 años. Por lo tanto, la
cantidad de cocaína que sale de Colombia al mercado mundial, incluso ha aumentado. Desde
234
ese punto de vista el Plan ha sido un fracaso, pero obviamente el objetivo del Plan no era ése,
siempre fue concebido como plan contrainsurgente.
El Estado colombiano tuvo que aportar U$S 120.000 millones para el Plan Colombia
M.H.: He recabado algunos datos de distintas publicaciones que indican que de los U$S 9.000
millones que Estados Unidos entregó como parte del Plan Colombia, el 71% fue destinado a las
fuerzas armadas y de policía. Antes te comentaba sobre una entrevista que realiza la revista La
Semana a Andrés Pastrana, donde reconoce que las FARC ya no son la guerrilla arrolladora de
hace unos años, que han sido fuertemente golpeadas por el fortalecimiento de las Fuerzas
Armadas debido al Plan Colombia. Según el Pentágono, el Plan Colombia redujo el tamaño de
las FAR en 2/3 en 15 años, alejando la guerrilla de los alrededores de las ciudades y carreteras
principales. Sin embargo, el ex Presidente Andrés Pastrana, firmante originario del Plan
Colombia, refiriéndose a las negociaciones de paz en La Habana, considera que son un triunfo
para las FARC. “Lo triste es que una vez en la mesa, la guerrilla logró arrodillar al gobierno por
la vía insólita de las concesiones del fuerte al débil. Lo que la guerrilla logró en la mesa es el
lavado de su cartel”,dijo Pastrana, y agregó una frase muy fuerte, que me gustaría que
pudieras aclararnos: “La guerrilla cambió el Diario del Che por El Padrino”.
R.V.C.: Primero tengo que decir que el personaje del cual usted me habla es un personaje
absolutamente despreciable, por el nivel de postración frente a los Estados Unidos porque
cuando hablamos de este proceso de recolonización, en el cual intervienen las facciones de las
clases dominantes y el Estado colombiano, se personifica en individuos. Estamos hablando de
un proyecto de clase en el cual hay individuos sobresalientes. Y en ese proceso de entrega, de
conversión de Colombia en una nueva colonia de los EE. UU., Pastrana ha cumplido un papel
absolutamente nefasto.
Cuando se inicia el Plan Colombia hace 15 años, el gobierno de Pastrana estaba sentado en
una mesa de negociación con las FARC y en medio de esto, comienza una ingeniería para
fortalecer las Fuerzas Armadas, lo cual significa que nunca estuvo interesado en una solución
dialogada del conflicto armado. Mientras hablaba de paz con las FARC, estaba reorganizando el
Ejército y las Fuerzas Armadas que habían sufrido durísimos golpes militares durante los ´90. Y
lo que se puede ver en la perspectiva que dan los años, es que el Estado colombiano y las
Fuerzas Armadas se vieron obligadas a sentarse en una mesa a negociar para ganar tiempo
para rearmarse, pero no estaban interesados realmente en que se avanzara en el proceso de
paz.
Mientras se dialogaba, el Estado colombiano firmaba acuerdos con los Estados Unidos, entre
esos el Plan Colombia, pero también hubo otros menos conocidos, inclusive acuerdos secretos
de intervención directa de los EE. UU. en términos militares. ¿Qué autoridad moral tiene un
individuo como éste de dar lecciones si él es un personaje que encarna esa claudicación de las
clases dominantes en Colombia, que en lugar de impulsar reformas sustanciales en la
235
estructura social y económica del país, prefiere recurrir a la vía militar pensando que iban a
ganar la guerra?
Lo que hemos visto durante estos 15 años es que el Estado no pudo ganar la guerra por la vía
militar, aunque haya debilitado a las FARC, no las ha podido destruir y por eso tuvieron que
volver a sentarse a dialogar. Porque el Estado apostó a la destrucción total de la insurgencia.
Hay un costo del Plan Colombia, pero está minimizado, la inversión directa de los Estados
Unidos fue una cifra de aproximadamente 10.000 millones de dólares, pero los costos reales
aproximados, son de 130.000 millones de dólares,es decir, que el Estado colombiano tuvo que
aportar 120.000 millones de dólares. ¿De dónde salió este capital? De reformas tributarias,
nuevos impuestos, invirtiendo en el presupuesto militar y reduciendo la inversión en el sector
social, en educación, en cultura; privatizando y creando todas las condiciones para firmar
Tratados de libre comercio. Por lo tanto, hay todo eso detrás del aspecto militar del Plan
Colombia, del que no habla Pastrana.
Él hace unas afirmaciones absolutamente nefastas que reproducen la lógica colonial de los
Estados Unidos, que considera a las FARC como un cártel de la droga. Ese es un invento
norteamericano, de un embajador de los Estados Unidos en Colombia, Lewis Tamp, que acuñó
el nombre de “narcoguerrilla” en 1982. Desde ese entonces el término narcoguerrilla se ha
venido utilizando para varias cosas, primero para desprestigiar a la insurgencia, para decir que
no tiene proyecto político, que es un cartel más; y para legitimar la lucha contrainsurgente del
Estado colombiano y plegarse a los Estados Unidos en la lucha contra el narcotráfico. De allí se
desprende que no hay necesidad para ellos de ninguna reforma, ni de ninguna transformación
porque para ellos están muy bien, porque estamos hablando de una lucha puramente contra
el narcotráfico y no de una lucha contrainsurgente, contra un movimiento que tiene
reivindicaciones políticas.
Colombia es un país que se precia de ser democrático, pero ni en las peores dictaduras hay
registros tan negativos
M.H.: ¿Cuáles son los daños causados a la población civil por la aplicación del Plan Colombia?
R.V.C.: Los daños han sido terribles. Por eso decía que cuando uno habla de los logros o
fracasos de cualquier proyecto social, tiene que fijarse quiénes se benefician y quiénes se
perjudican. En términos negativos, podríamos nombrar algunos de los efectos más dañinos
para la población, un primer elemento profundamente nefasto es la militarización de la
sociedad colombiana. El Ejército colombiano en estos últimos años ha tenido un crecimiento
espectacular, hasta llegar a ser uno de los 15 ejércitos más grandes del mundo.
236
M.H.: Con 500.000 efectivos.
R.V.C.: Sin contar su influencia indirecta. Incide indirectamente en alrededor de 3 millones de
personas, hablando de los familiares de los miembros de las Fuerzas Armadas colombianas. La
vida cotidiana, el hecho de negarse a reconocer reivindicaciones sociales, militarizar todos los
aspectos de la vida, solucionar todos los conflictos por la vía de la represión. Estamos hablando
de la expulsión de entre 6 y 7 millones de campesinos de sus tierras, en un proceso que se
inició antes del Plan Colombia pero que se radicalizó durante. Hoy por hoy Colombia está entre
los primeros países con el más alto índice de expulsión interna. Estamos hablando del
acaparamiento de tierras por parte de nuevos y viejos terratenientes. Los campesinos eran
echados por la represión y la paramilitarización y esas tierras quedaron en manos de viejos y
nuevos terratenientes.
El efecto negativo que ha tenido el uso del glifosato al destruir los cultivos, destruye todo tipo
de cultivo y no solo los mal llamados cultivos ilícitos. La represión indiscriminada.
Desapariciones y asesinatos de sindicalistas, de defensores de derechos humanos. Es un
listado enorme en un país que se precia de ser democrático, pero incluso a veces en las peores
dictaduras no hay registros tan negativos como lo que pasa en Colombia.
M.H.: ¿Es imaginable un papel diferente de las Fuerzas Armadas colombianas una vez firmados
los acuerdos de La Habana?
R.V.C.: Este es uno de los elementos centrales de cualquier proceso de desmovilización e
incorporación del movimiento insurgente a la vida civil, porque hay que decir que las Fuerzas
Armadas colombianas han sido formadas en la Doctrina de la Seguridad Nacional, de la
contrainsurgencia y del anticomunismo, mucho antes del comienzo del Plan Colombia.
Estamos hablando de unas Fuerzas Armadas que fueron educadas en esa lógica en los últimos
70 años,es decir, que todos los miembros de las Fuerzas Armadas, desde la alta oficialidad
hasta los soldados rasos, han sido formados en la doctrina del enemigo interno.
El enemigo interno no es solamente el miembro armado de la insurgencia que pertenece a
éste o a aquél movimiento guerrillero; enemigo interno es lo que aquí se ha llamado, con un
término muy negativo, como “guerrilleros desarmados” que son (o somos) los profesores
críticos del sistema, investigadores independientes, profesores de cualquier nivel educativo,
dirigentes sindicales, dirigentes campesinos, prácticamente cualquier organización no armada
que tenga consideraciones en contra del régimen era o es considerado como guerrillero
desarmado, a los que se les aplica el mismo tratamiento que a los guerrilleros armados y el
Ejército y las Fuerzas Armadas han sido los sujetos más activos de esa práctica contra la
población civil.
Si queremos construir otro país es obvio que las Fuerzas Armadas tienen que modificarse en
muchísimas cosas, primero tienen que reducir su tamaño, porque actualmente es exagerado y
no solo por el número de miembros sino por el gasto económico que significa para el Estado
colombiano. En pocos años la carga fiscal de un ejército tan grande, cuyos efectivos se
pensionan desde muy jóvenes, desde los 40 años aproximadamente, precisamente por la
cuestión de la guerra, va a ser inmanejable.
237
Desde el punto de vista puramente económico eso tiene que modificarse, pero el otro punto
tiene que ver con su función, la necesidad de que vuelvan a sus cuarteles para proteger las
fronteras del país y abandonen la idea de que el enemigo está aquí, en cualquier ciudadano
que habita en las ciudades o los campos colombianos. Eso requiere de una ingeniería cultural e
ideológica que va a necesitar mucho tiempo, porque estas Fuerzas Armadas son terriblemente
anticomunistas y cuando hablamos de anticomunismo no es que se persiga solamente a
quienes se denominan como tales, sino a cualquier persona que piense diferente. Eso requiere
una modificación de esa mentalidad castrense y va a necesitar muchas décadas, no será de un
momento a otro.
Por eso mismo es que gran parte de las Fuerzas Armadas no están de acuerdo conque se firme
un acuerdo con el movimiento insurgente, porque pierden muchos de sus privilegios, que son
muchísimos, por ejemplo, en el manejo del Plan Colombia, una cantidad de manejos corruptos
en donde distintos sectores militares se han quedado con millones de dólares, pero resulta
que se les facilita porque son un poder independiente sin ningún nivel de control ni auditoría,
entonces pueden hacer lo que quieran con esos dineros sin que tenga consecuencias
investigativas o penales. Obviamente, que al cambiar la situación se va a producir un cambio
en el seno de esa conducta de las Fuerzas Armadas.
¿Van a poder las FARC hacer política sin armas?
M.H.: En este contexto, cómo podríamos interpretar la afirmación del Comandante
Timochenko, que yo pondría entre signos de interrogación: ¿Van a poder las FARC hacer
política sin armas?
R.V.C.: Ese es uno de los grandes interrogantes porque aparte de ese carácter anticomunista
de las Fuerzas Armadas, las clases dominantes de Colombia también son profundamente
anticomunistas y contrainsurgentes y lo son para mantener sus privilegios y la desigualdad que
caracteriza a la sociedad colombiana, que es una de las más desiguales del mundo y lo dicen
las Naciones Unidas, no solo las organizaciones de izquierda. Incluso Piketty, el economista
francés, lo señaló hace unos 20 días en una conferencia que dictó en una Universidad de
Bogotá, que solamente el 1% de la población concentra el 20% del ingreso, y creo que se
quedó corto.
Pero esto lo dice un economista que no conoce nada de la realidad colombiana, que
simplemente consultó datos macroeconómicos, los confrontó con la realidad de otros países
del capitalismo mundial y llega a la conclusión de que Colombia es un país terriblemente
desigual.
Entonces, en realidad la cuestión de la guerra y el asesinato de los oponentes tienen que ver
con mantener la desigualdad. Obviamente, los sectores políticos que quieran actuar para
238
contrarrestar esa realidad, van a enfrentarse al hecho o al dilema de si se les va a permitir
hacer política en ese sentido, o se los va a matar. Es un dilema que aumenta si uno recuerda
algunos hechos históricos de los últimos 60 años en Colombia, donde distintos procesos de
amnistía y desmovilización han terminado con el asesinato de guerrilleros. Como sucedió en la
década del ´50 y ´60, y como sucedió después de 1984 con la Unión Patriótica. Por lo tanto, es
uno de los interrogantes que genera la firma de un posible acuerdo que le ponga fin al
conflicto armado.
Y hay que agregarle una cuestión fundamental, qué pasa con el paramilitarismo. Si
efectivamente el Estado colombiano va a tomar medidas para desmontarlo, porque es como el
brazo parainstitucional no reconocido del Estado y las clases dominantes para hacer las labores
sucias que a ellos les quedan más difíciles.
M.H.:Días pasados, visitó en La Habana a las FARC una delegación del Centro Democrático,
partido de Álvaro Uribe. ¿Cuál es la posición de Uribe respecto de este proceso de paz que se
está llevando adelante en La Habana?
R.V.C.: Yo creo que para poder darle un manejo amplio a esa pregunta tendríamos que
situarnos en un contexto un poco más amplio que el actual. Tendríamos que situarnos en el
año 2002, cuando Uribe Vélez gana las elecciones bajo un programa absolutamente militarista
y represivo. Incluso dijo que iba a exterminar a las FARC en dos meses, luego amplía los plazos
en la medida que la misma situación de la guerra demuestra que eso no es posible.
Álvaro Uribe representa la línea más militarista, derechista y más plegada al gobierno
estadounidense que se ha vivido en la historia de Colombia. Él siempre apostó a la derrota de
la insurgencia por la vía militar, pero eso no se logró, a pesar de la terrible inversión
económica, compra de armas, modernización de las Fuerzas Armadas y la militarización de la
sociedad colombiana. Entonces, aparece como un perdedor de firmarse un acuerdo que le
ponga fin al conflicto armado, porque se demuestra en la práctica que lo que pretendía, que
era la derrota de la insurgencia, no se pudo lograr.
Él es el principal opositor de los diálogos que se llevan a cabo en La Habana, recurriendo a todo
tipo de mentiras y embustes, inclusive diciendo estupideces como que Juan Manuel Santos es
un representante del castro-chavismo en Colombia. O diciendo que el gobierno de Santos ha
hecho una entrega del país en todos los terrenos, cosa que no tiene el más mínimo elemento
real. Lo que pasa es que se siente sumamente frustrado y representantedeun sector de las
clases dominantes, al cual ni siquiera hoy Estados Unidos respalda.
Su momento pasó, ahora estamos hablando de un bloque de poder contrainsurgente
remozado con la hegemonía del capital financiero y no de los terratenientes y ganaderos que
representaba Uribe, que ven la necesidad de que se termine rápido el conflicto para tener
abierto el territorio colombiano para las inversiones de las multinacionales.
A ese mismo proyecto apuntan las dos vías, la de Uribe y la de Santos, lo que pasa es que la vía
uribista significaría la continuidad de una tierra arrasada en una guerra prolongada que puede
durar otras 4 o 5 décadas. Con un agravante que no lee Uribe Vélez, probablemente por su
carácter derechista y reaccionario, que en este momento hay una crisis de la economía
239
colombiana que se puede prolongar durante mucho tiempo, que puede significar que
necesariamente se tenga que invertir cada vez menos en la guerra.
El santismo ha comprendido esa situación y considera que es el mejor momento para ponerle
fin al conflicto armado. El uribismo logró mantener la guerra durante 8 años porque
estábamos en un ciclo ascendente de la economía colombiana, con el aumento de precios de
las materias primas, el aumento de las exportaciones de petróleo, carbón y otros minerales
permitieron direccionar dinero hacia el aparato de guerra.Hoy ese contexto económico está
cambiando.
M.H.: Ha quedado por fuera de los acuerdos de paz, el Ejército de Liberación Nacional (ELN), el
pasado 8 de febrero, el Presidente Santos ordenó intensificar operaciones en su contra, tras un
ataque de una brigada militar. Y el día posterior se conoció un mensaje difundido por el Obispo
de Cali, Darío de Jesús Monsalve, a través del cual el jefe del ELN ofreció abrir una tregua
bilateral para iniciar un diálogo de paz. ¿Qué nos podés comentar al respecto?
R.V.C.: Evidentemente si se llega a un acuerdo en el cual solamente firmen las FARC y el Estado
colombiano, va a ser muy limitado desde el terreno estrictamente militar, de la guerra
propiamente dicha, porque para que la guerra interna termine en Colombia es necesario que
todas las partes de la insurgencia participen, incluyendo al ELN. Lo que sucede es que por
múltiples razones, el Estado ha demorado el comienzo de diálogos de verdad y ha estado
solamente en la agenda exploratoria con un objetivo básico y clásico “divide y vencerás”, se
trata de dividir al movimiento insurgente y en la medida que pase más el tiempo las
condiciones de negociación del ELN van a ser mas difíciles.
En la medida en que se acerque la firma o se firme un acuerdo en La Habana, las negociaciones
van a ser más complicadas para el ELN, porque es difícil pensar que el Estado va a abrir una
mesa paralela en la cual va a llegar a los mismos acuerdos que con las FARC, es decir, llegar a
un acuerdo paralelo de justicia transicional con el ELN que no sea parecido al que firme con las
FARC. Es difícil pensar eso. Es difícil pensar que vaya a nombrar una comisión especial para el
ELN.
El régimen santista siempre fue claro en dialogar en medio de la guerra, lo ha hecho con las
FARC y veo muy difícil que acepte la propuesta de una tregua bilateral, porque el incremento
de las acciones militares tiene como objetivo debilitar las condiciones de negociación.
Entonces el incremento de la fuerza destinada a reprimir al ELN tiene el objetivo de que los
términos del diálogo sean más favorables al régimen y al gobierno.
Camilo Torres tiene mucho que decirles a los colombianos de hoy, aunque muchos de ellos no
lo conozcan ni sepan quién fue
M.H.: Se cumplen 50 años de la caída en combate de Camilo Torres Restrepo, el cura que había
nacido 37 años antes, un 3 de febrero, en el seno de una familia distinguida de Bogotá. Camilo
Torres era sociólogo, sacerdote, político, cursó sus estudios en la Universidad de Lovaina
240
donde tuvo la oportunidad de conocer a los curas obreros franceses que inspiraron el Concilio
Vaticano II y la Doctrina Social de la Iglesia. De regreso a Colombia conoce a Rolando Fals
Borda y juntos fundan el Departamento de Sociología en la Universidad Nacional. En el
Ministerio de Educación impulsa el Movimiento de acción comunal que buscaba promover la
autogestión y organización comunitaria y en el INCORA impulsó la reforma agraria. ¿Qué
significado tiene en la actualidad, a 50 años de su caída en combate, la figura de Camilo
Torres?
R.V.C.: Camilo Torres es un personaje que ha trascendido las fronteras colombianas. Se podría
decir que es patrimonio del movimiento revolucionario y anticapitalista del mundo. En el
momento en que muere en combate, hace 50 años, él se anticipa a muchas cosas de su época,
vive en los turbulentos años ´60 que tanto transformaron al mundo y que en Colombia
también tienen incidencia. Se anticipa a la Teología de la liberación, al diálogo entre marxistas
y cristianos, a empuñar las armas como una decisión ejemplar para demostrar cómo se
combatía al capitalismo.
Estos son hechos muy importantes, además de toda la agitación social que realiza, porque la
decisión que toma de empuñar las armas es casi obligada, es resultado de la persecución a la
que se ve sometido cuando se convierte en un agitador muy importante en el año ´65. Moviliza
masas en todos los lugares a los que va en Colombia y esto empieza a ser visto con
preocupación por las clases dominantes y el Estado que lo empiezan a acosar e incluso a
amenazar. Pero también es perseguido por las jerarquías católicas de Colombia que son
profundamente retrógradas y en los años ´60 eran uno de los puntales de la dominación.
Cuando muere, demuestra en la práctica lo que él llamaba “amor eficaz”, término que inventó
para hacer referencia al compromiso verdadero de un cristiano. Camilo decía que un cristiano
no era discursivo ni retórico, sino que era real, participando en las luchas de los pobres,
construyendo la solución de sus problemas, señalando las causas de las desigualdades.
Entonces, Camilo Torres tiene una agenda muy radical para la década de los ´60 que lo lleva a
tomar la decisión que tomó.
Además, es el primer sacerdote que muere en América Latina empuñando las armas y
participando en el movimiento guerrillero. De ahí en adelante Camilo se convierte en un
símbolo que guía y alimenta luchas populares en Colombia en distintos órdenes y en un
referente para el resto del mundo.
Cincuenta años después lo que habría que examinar es el legado y la vigencia del mensaje
teórico y práctico de Camilo Torres, cuánto ha cambiado Colombia. Me atrevería a decir que
prácticamente nada, hoy la sociedad colombiana en términos estructurales, de desigualdad,
injusticia, de polarización entre pobres y ricos, vive en las mismas condiciones que conoció
Camilo a mediados de la década del ´60. Tenemos una desigualdad marcada, tenemos el poder
de los grandes medios de comunicación que calumniaron y desprestigiaron a Camilo Torres,
tenemos las fuerzas represivas del Estado, la organización de grupos paramilitares. Todo eso
ya se empezaba a vivir en la época de Camilo Torres. La intolerancia que caracteriza a la
sociedad colombiana y a sus clases dominantes, la intolerancia religiosa, todas esas cosas
siguen presentes en la sociedad colombiana de hoy, por lo cual podemos decir que el mensaje
de Camilo Torres es muy actual, tiene mucho que decirles a los colombianos de hoy, aunque
muchos de ellos no lo conozcan ni sepan quién fue Camilo Torres Restrepo.
241
M.H.: Al respecto un tema específico, ¿qué fue el Frente Unido del Pueblo vinculado a la labor
política y teórica de Camilo Torres?
R.V.C.:El Frente Unido del Pueblo fue una propuesta muy importante y muy original de Camilo
Torres. Como dijo usted al principio, Camilo venía de una familia burguesa, estudió en colegios
aristocráticos, fue seminarista y luego sacerdote, en una formación ideológica, política y
cultural bastante conservadora. Pero Camilo tenía una increíble sensibilidad social y eso lo
llevó casi por sus propios medios a relacionarse con otros sectores, y a comprender en la
década del ´60 el carácter injusto y antidemocrático del capitalismo existente en Colombia. A
raíz de eso se dio cuenta de que era necesario aglutinar a las fuerzas afectadas por ese
capitalismo y esa estructura desigual de la sociedad colombiana y eso lo llevó a proponer la
creación del Frente Unido del Pueblo. Con una plataforma mínima pero muy importante,
donde decía que debían participar todos los sectores sociales para crear un frente de unidad
que enfrentara al boque de poder, al Frente Nacional, como se llamaba a la estructura
dominante de Colombia de ese momento donde liberales y conservadores se turnaban en el
manejo de la política.
En 1965 hace la propuesta, funda un periódico que lleva ese nombre “Frente Unido del
Pueblo” y publica varios números. Genera una movilización sin precedentes en la sociedad
colombiana, que solo se puede comparar con lo sucedido en la década del ´40 con Jorge
Eliecer Gaitán. Y esto asusta realmente a las clases dominantes de este país, que un sacerdote
pudiera tener ese carisma, llegar tan directamente a importantes sectores de la población.
Camilo le habla a todos los sectores sociales, les da un mensaje a los estudiantes, a los
comunistas, incluso a las Fuerzas Armadas, a distintos sectores sociales, con la perspectiva de
armar un frente unido donde se incorporaran todos los sectores sociales golpeados por el
Frente Nacional. Ese proyecto de unidad se dirige principalmente a las izquierdas de esa época
y debería ser recogido por las izquierdas de nuestro tiempo, rompiendo con sectarismos para
llegar a acuerdos sobre aspectos fundamentales, más allá de diferencias tácticas o
coyunturales.
Esta es una oportunidad histórica
M.H.: El pasado viernes 21 de enero hubo un encuentro aquí en Bogotá de representantes del
Polo Democrático, la Unión Patriótica, el Partido Alianza Verde y progresistas, entre otros, que
se reunieron con la idea de construir un frente común de cara a la coyuntura y a las próximas
elecciones. ¿Qué opinión te merece este encuentro?
242
R.V.C.: Con independencia de las apreciaciones que algún sector político pueda tener sobre la
eventual firma de un acuerdo que le ponga fin al conflicto armado entre el Estado y las FARC,
hay que decir que esta es una oportunidad histórica, no es algo que se presente todos los días
y crea nuevas condiciones de lucha política, potencia la acción política alternativa. Pero para
que esa potencia se convierta en realidad, es necesario que los sujetos sociales que
representan voces alternativas o disidentes, se organicen y aprovechen esa coyuntura. Me
parece una oportunidad para que las izquierdas de Colombia dejen de lado muchas
diferencias, que suelen ser puramente electorales y ponerse a pensar en la construcción de un
programa más de fondo, más sustancial en estas nuevas condiciones.
Uno desearía ser optimista, que las izquierdas históricas existentes aprovecharan esta
coyuntura, pero eventos recientes me hacen dudar por las rencillas que se repiten en la
mayoría de los casos, son terriblemente limitadas porque son principalmente de tipo electoral.
No creo que en una coyuntura como la que se está presentando y las nuevas condiciones que
genera, simplemente tengan como objetivo fundamental lo electoral. No digo que lo electoral
no pueda ser un instrumento, pero estamos pensando en construir un bloque de poder
alternativo que va más allá, que requiere volver a pensar en las reivindicaciones de distintos
sectores, volver a pensar en el sindicalismo, en el movimiento campesino, en las luchas de los
estudiantes. Que la o las izquierdas tengan mucho que decir frente a eso y participen en esas
luchas, porque lo que ha sucedido en Colombia durante los últimos años es una terrible
disociación entre lo social y lo político.
M.H.: El pasado 2 de febrero se reunieron 46 organizaciones sociales para plantear la iniciativa
de un paro nacional, criticando la próxima reforma tributaria y a las privatizaciones,
principalmente centrándose en el acueducto de Bogotá, en la situación de la industria
petroquímica y en el sector educativo de la capital del país. ¿Es posible que esta iniciativa se
concrete en lo inmediato?
R.V.C.: Hay condiciones muy favorables para la lucha social en estos momentos en Colombia.
Precisamente como decía antes, está cambiando el ritmo de la economía colombiana, en
términos macroeconómicos formales, la economía colombiana tuvo muchas divisas
provenientes principalmente de su modelo minero exportador. Dado el cambio mundial, por la
caída de los precios de esas materias primas, tenemos una situación contraria a lo que hay que
agregarle que el gobierno de Santos que tanto habla de paz, en la vida real es una
continuación y una radicalización del modelo neoliberal que en Colombia ya lleva un cuarto de
siglo.
Esto se da en todos los terrenos, por ejemplo, respecto a las privatizaciones, las del gobierno
de Santos son la continuación de lo que ha sucedido en estos últimos años, y la privatización
de una empresa como Isagén se inició durante el gobierno de Uribe, no se pudo completar y se
culmina durante el de Santos.
Esto sucede en todos los frentes, la neoliberalización de la educación es otro ejemplo, el
gobierno de Santos impulsa proyectos que favorecen la educación privada, por ejemplo, de la
educación superior universitaria. Hay un proyecto que se llama “Ser pilo paga” que significa la
transferencia de recursos del Estado a las universidades privadas en lugar de darle ese dinero a
las públicas. Son millones de pesos que serán transferidos a las universidades privadas del país.
243
Con respecto a las tierras se acaba de firmar un decreto para las llamadas “zonas
agroindustriales” para favorecer al capital agrario de las multinacionales y del capital
financiero nacional, en contra de los campesinos, pese a que uno de los elementos centrales
de cualquier proceso de paz en Colombia es el de la reforma agraria.
Están creadas todas las condiciones objetivas para una movilización, pero también se necesita
pensar en las condiciones subjetivas, en los niveles de organización y de movilización de los
sectores populares. Y si se llegase a cuajar algo en ese sentido, podría pensarse en la
posibilidad de un paro, porque todos los elementos están, desde el punto de vista de la
situación económica y social.
M.H.: Inclusive un dato estadístico señala que la movilización de los trabajadores colombianos
en la actualidad es cuatro veces mayor que hace diez años. Al mismo tiempo esto se vincula a
que en días recientes hubo una represión contra trabajadores judiciales en el centro de Bogotá
y con otras estadísticas que señalan que desde 1997 se han producido casi 14.000 violaciones
a la vida, a la libertad, a la integridad contra sindicalistas y de esas violaciones, 3.089 son
homicidios. Al menos esto es lo que se señaló en el Encuentro contra la criminalización de la
protesta sindical y social que se realizó en noviembre del año pasado aquí en Bogotá. A lo que
se agrega una guerra jurídica en el sentido de la declaración de ilegalidad de las huelgas, de las
1.623 protestas registradas desde 2010 el 41,5%, o sea, 675 han sido entorpecidas por
medidas judiciales que las han declarado ilegales. Dicho esto, ¿cuál es la situación actual que
atraviesa el movimiento sindical y obrero en Colombia?
R.V.C.: Ese movimiento es víctima, como ningún otro, de la represión y el asesinato. Nosotros
tenemos el dudoso mérito de ser el primer país del mundo en asesinato a dirigentes sindicales.
La cifra que usted señala es producto de investigaciones ligadas a los trabajadores, y es una
realidad cotidiana que nosotros vivimos. Ser aquí dirigente sindical es un peligro público para
la persona que ejerce esa actividad y se ha convertido casi en sentido común el asesinato de
dirigentes sindicales. El modo de ver esto es esa contrainsurgencia de la que hablaba al
principio de esta entrevista, y es que no se permite ni se tolera ninguna reivindicación social,
cualquiera sea la reivindicación y por limitada que fuese, inmediatamente es calificada como
producto de acciones terroristas y desestabilizadoras, incluso hay todo un lenguaje codificado
que se utiliza para calificar a todo este tipo de protestas. Eso en el gobierno de Santos, a pesar
de que tanto se habla de paz, no ha cambiado.
Tal vez uno de los momentos represivos que más se dio a conocer a nivel internacional fue lo
que sucedió en el año 2013, cuando fue brutalmente reprimido el Paro nacional agrario, que
incluso Santos llegó a decir en una afirmación cantinflesca que no había paro mientras el país
estaba paralizado casi como en ningún otro momento. Aquí hay una política contrainsurgente,
de rechazo a la protesta social, de rechazo a los trabajadores y desde el Estado se da desde
varios frentes, por un lado, la represión directa y brutal que siempre deja heridos, muertos y
personas detenidas; pero también hay una persecución jurídica que consiste en colocarle
trabas legales a la protesta.
Prohibir la protesta en los servicios públicos, siendo éstos aquello que se considera vital sin
importar la propiedad, entonces un periódico como El Tiempo o un canal de televisión como
Caracol, son considerados servicios públicos, por lo tanto, en ellos no podrían haber huelgas, si
244
existieran trabajadores organizados y sindicatos, porque sería calificado por los jueces como
una actividad ilegal.
Es bueno para que sea estudiado por sindicatos y abogados laborales en otros países, cómo ha
evolucionado de manera negativa la legislación laboral en Colombia. Desde 1918 cuando se
presentó una primera oleada de huelgas el Estado colombiano emite los primeros decretos en
su contra, y ahí ya aparece la idea del servicio público que en ese momento estaba restringido
a los lugares donde se estaban dando huelgas, que eran los puertos, los ferrocarriles, las
empresas de transportes. Pero desde ese año hasta el día de hoy, esa idea de servicio público
se ha ido generalizando y cubre prácticamente todos los sectores de la actividad económica
del país. En la realidad es imposible hacer huelga porque todo es considerado servicio público,
así sea de propiedad privada, como sucede con empresas petroleras porque el petróleo es
considerado un servicio público esencial. Si ese negocio lo usufructúa una multinacional y los
trabajadores hacen paro, lo más seguro es que de manera inmediata se declare prohibida por
ser servicio público.
Otro elemento que conspira contra la organización y que hace más difícil a lucha en Colombia
es la paramilitarización, no es solamente la represión por parte del Estado, sino las amenazas,
el acecho, el acoso y también las acciones criminales por parte de sectores organizados por las
empresas, por los terratenientes y comerciantes para impedir la organización de obreros,
campesinos y trabajadores. Es tristemente célebre la intervención de empresas como Coca
Cola, Nestlé y otras multinacionales directamente responsables en el asesinato de dirigentes
sindicales, ellos han financiado y organizado grupos paramilitares para que maten a los
trabajadores.
Todo este es un contexto que debe transformarse a la hora de hablar del fin del conflicto
armado en Colombia, porque la lucha social debe desenvolverse por muchas causas en donde
se rompa con esa lógica represiva del Estado colombiano de prohibir la movilización, aunque
formalmente en la ley exista su autorización y se diga que este es un país democrático en el
que se respeta la libertad de pensamiento y de organización.
M.H.: Al respecto estaba consignando el caso de Húbert de Jesús Ballesteros Gómez, que en
agosto de 2013 integraba la comisión de negociación del Paro nacional agrario y popular, la
movilización agraria más importante que se ha dado en los últimos 30 años en Colombia y
luego fue detenido.
R.V.C.: Detenido y está condenado a 15 años de cárcel.
Estamos llegando al fin de un ciclo de ficticia prosperidad para la clase media
245
M.H.: Hiciste referencia en dos oportunidades a la situación económica del país. Hay algunos
datos preocupantes, la caída del precio del petróleo ha afectado fuertemente la caída del
presupuesto fiscal, 5.45 billones de pesos de los cuales el presupuesto en regiones bajará en
3.4 billones, lo que representa un 30.8% del presupuesto asignado.
Otro dato es el descenso de las ventas externas durante 2015 que se ha conocido por estos
días, casi un 35%. Frente a lo cual el gobierno prepara una reforma tributaria, entre otros
aspectos que han trascendido de esta reforma, se habla del aumento del IVA, e inclusive
dentro de esta visita que se hizo a Estados Unidos, donde se reunieron los Presidentes Obama
y Santos también hubo reuniones con funcionarios económicos por parte de las principales
calificadoras de riesgo, que amenazan con bajar la nota crediticia de Colombia en la medida
que el gobierno no equilibre las cuentas fiscales. Este fue el mensaje que dejaron claro en
Washington, al Ministro de Hacienda Mauricio Cárdenas Santa María, las calificadoras de
riesgo. ¿Qué podés agregar a estos elementos que tienen que ver con la situación económica
que atraviesa Colombia?
R.V.C.: Me parece que esa es una exposición bastante completa de los indicadores. Lo que
puedo agregar es que esta situación coyuntural es el resultado de una decisión de mediano y
largo plazo que se tomó hace ya 25 a 30 años y que significó desindustrializar al país y optar
por convertirlo en un país exportador de materias primas.
En términos estructurales de largo plazo, creo que esa es la explicación básica para entender lo
que está pasando en el momento actual. Aquí, como ha sucedido en varios países de América
Latina, incluso en países con distintos regímenes políticos, se consolidó la venta de materias
primas, en nuestro caso principalmente mineras. La balanza comercial de Colombia, encuentra
que los productos que más generaban y generan ingresos a la economía son el petróleo y el
carbón; el café que durante mucho tiempo fue el principal producto, hoy es el tercero o cuarto
en esa balanza comercial.
Ese crecimiento que se presentó entre 2001 y 2010 se debió a los altos precios de las materias
primas. Cuando caen los precios de las materias primas, inmediatamente se ve el efecto
negativo que produce que un país dependa del sector exportador más tradicional, el primario.
El ejemplo del petróleo es crucial, hoy se cotiza a menos de 25 dólares el barril de petróleo
colombiano, mientras que en un momento llegó a cotizarse a 90 dólares, estamos hablando de
una caída catastrófica que se va a intensificar en las próximas semanas. Gran parte de lo que
se había presupuestado para los años por venir, estaba relacionado con el sostenimiento de
esos ingresos con un precio del petróleo elevado, pero no solamente sucede con el petróleo,
también con el precio del carbón, del níquel, que han caído internacionalmente. Colombia es
el principal exportador de carbón de Latinoamérica, los principales compradores son Estados
Unidos y Canadá. Entonces, esto va a afectar a la economía colombiana, pero hay un factor
adicional que en el listado que usted señala no se nombra y es el de la devaluación.
Resulta que el peso colombiano estuvo revaluado de manera artificial durante casi el mismo
período de aparente prosperidad económica que estábamos señalando. Lo que permitió la
revaluación del peso colombiano fue que este país se inundara de mercancías y tecnología
producida por el capitalismo mundial, lo que incluso permitió darle cierta base social al modelo
neoliberal en las ciudades, porque la clase media empezó a tener acceso al automóvil, que era
un bien suntuario en otra época, a todo tipo de artefactos electrónicos. Colombia es un país
inundado de celulares, es el país de América Latina en el que más celulares hay. Esa
mercadería ingresó al país a un relativo bajo precio, un precio artificial que ahora está
246
desapareciendo, entonces ahora todos esos aparatos, automóviles y todo lo que el país
compró en el exterior, que es casi todo, porque aquí se compra casi el 90% de los productos
agrícolas que se consumen, ahora está llegando encarecido.
Hace un año el precio del dólar era de 2.600 pesos, hoy está a 3.400. Es decir que estamos
llegando al fin de un ciclo de ficticia prosperidad para la clase media. Esta clase media, además
de no poder comprar más por la suba de precios, está terriblemente endeudada. Este es otro
elemento de la coyuntura importante de resaltar, no solo por sus implicaciones económicas,
sino porque sabemos que tiene implicaciones políticas, sociales y culturales también. Esa clase
media que nunca ha sido fuerte en Colombia, pero que tuvo un momento de despegue en los
últimos 12 años, ha llegado a un límite; entonces habrá que ver qué sucede con esos sectores
cuando ya no tengan cómo pagar la tarjeta de crédito, la cuota del automóvil, la del
departamento o no tengan cómo cambiar de celular, etc. Es un impacto que no se ha
estudiado con suficiente énfasis, porque pone en discusión el agotamiento de un modelo que
había dado algunas migajas a esa clase media.
El ser humano nunca renuncia a la lucha y la esperanza sirve para buscar salidas
M.H.: En uno de tus últimos trabajos, de diciembre, publicado en Rebelión.org, te referís a una
categoría que entiendo es de tu autoría, que es la de “tecno-fascismo”.
R.V.C.: Este término lo he venido usando durante los últimos años en distintas publicaciones,
muy preocupado por el impacto que la tecnología tiene en el mundo contemporáneo sobre la
gente. Me importa analizar a la tecnología no como una fuerza neutra, como generalmente se
suele hacer, sino como un componente más de nuevas formas de dominación. A partir de esa
preocupación, me llama la atención que diversas clases sociales se hayan rendido
acríticamente a la tecnología, incluyendo a grandes sectores de la izquierda mundial, partiendo
de una consideración bastante discutible de las fuerzas productivas, hablando en terminología
marxista. Y siendo que las fuerzas productivas nos vayan a conducir finalmente a la liberación y
a un desarrollo humano teniendo en cuenta nuevas investigaciones y nuevos productos en el
ámbito de la tecnología.
Sin embargo, viendo la realidad uno se encuentra con que hay sectores profundamente
retrógrados en términos políticos que utilizan las tecnologías más desarrolladas para sus
proyectos. Y en ese sentido es que refuerzo la idea del tecno-fascismo, que supone pensar a
ese sector no solo como completamente retrógrado, conservador y reaccionario, que lo es, sin
estar desligado del uso de las tecnologías más modernas y sofisticadas, incluso como nuevas
formas de control.
Sería importante volver a estudiar el mismo nazismo, porque cuando se lo estudia hay una
tendencia que dice que era lo más opuesto a la ciencia y a la modernidad, pero investigaciones
contemporáneas muy serias han demostrado que el nazismo ha sido la variante más radical de
247
la modernización capitalista, incluso en el ámbito tecnológico, a punto de que la tecnología se
aplicó a la muerte de millones de personas en los campos de concentración, por ejemplo, el
trabajo allí era la muerte industrial, la muerte programada. Los hornos crematorios usados
para matar personas estaban programados industrialmente. El mismo fascismo supuso una
particular utilización de la tecnología, por eso pensadores como Benjamin y su crítica al
fascismo, a la socialdemocracia y a distintos sectores de la izquierda de la época que decían
que había que romper con ese culto acrítico a las fuerzas productivas, que había que ver a la
tecnología como un elemento contradictorio de lucha y de combate.
A mí me llama hoy la atención cómo la tecnología es un dispositivo de control absoluto de la
población y vigilancia las 24 horas por medio de distintos mecanismos. Las ciudades están
llenas de cámaras de video que registran todos los movimientos de las personas, en el
transporte público pasa lo mismo, el teléfono celular es un elemento de control. Así
sucesivamente podríamos enumerar muchos ejemplos y por eso digo que la izquierda debe
repensar la tecnología.
M.H.: ¿Hay lugar para la esperanza?
R.V.C.: Digamos que por supuesto, yo creo que el ser humano nunca renuncia a la lucha y creo
que eso es lo que nos diferencia de los demás animales, a pesar de tener nuestra parte de
animalidad.
La búsqueda de nuevos caminos y soluciones a los problemas tiene que seguir siendo parte del
horizonte humano. Recuerdo lo que decía Eduardo Galeano cuando le preguntaban para qué
servía la utopía y decía que servía para caminar. Me parece que lo mismo podemos decir de la
esperanza, el principio del que tanto hablaba el filósofo Ernst Bloch es que la esperanza, a
pesar de las condiciones duras en las que nos encontremos, sirve para buscar salidas. Lo que
pasa es que a uno le toca el papel más difícil, que es el de mostrar los problemas, esa es una
característica fundamental del pensamiento crítico, pero también bosqueja y postula salidas a
pesar de las dificultades.
M.H.: ¿Algo para agregar?
R.V.C.: Simplemente saludar a los medios con los que usted trabaja y a los lectores y oyentes
que lo siguen. Porque me parece muy importante la labor que realiza. Si hay algo que
necesitamos hoy es abrir nuevos espacios de pensamiento y de crítica ante el monopolio
abrumador que tienen los medios de comunicación mundial y a escala nacional. Este también
es un problema que estamos afrontando y vamos a afrontar en Colombia en el futuro
inmediato, porque uno de los grandes responsables de la guerra y la tragedia que los
colombianos hemos vivido en las últimas décadas, son los grandes monopolios de la
información. Ellos se oponen al proceso de paz, viven una diabolización permanente de las
voces disidentes, que necesitan poder expresarse si queremos construir un país decente,
donde podamos hablar y se nos permita pensar distinto. En esa labor los medios de
248
comunicación alternativos son fundamentales, por eso creo que el papel que usted realiza
Mario, en Buenos Aires y en Argentina, tiene mucho valor.
AGENDA SETTING: Legitimación y gestión. Dos elementos para evaluar la
comunicación política por Mario Riorda
http://www.voces.com.uy/articulos1/agendasettinglegitimacionygestiondoselementosparaevaluarlacomunicacionpoliticapormari
oriorda
Hay por lo menos dos tipos de comunicaciones que, en la región (y quizás en buena
parte del mundo occidental), aparecen simultáneamente en el marco de la política,
especialmente para los gobiernos. Pero no siempre se las visualiza, analiza o
implementa unidas. Una más clásica, tradicional, pero que ha tomado formas y
dimensiones inusitadas; y otra novedosa, atravesada y conmovida por los desafíos de
lo digital.
Una visión legitimante de la política
El mito de gobierno es la comunicación de tipo simbólica que tiene la función de
generar esperanza y que, una vez instalada, puede alimentarse a sí misma siempre y
cuando exista coherencia entre la narrativa esbozada y las políticas públicas
implementadas. Relato, a secas, es el nombre vulgar con el que se lo conoce.
Viene a representar el ejercicio coherente de lo propuesto discursivamente como
contrato de gestión en la faz electoral y la actualización de lo mejorable o aggiornable
de ese contrato, una vez que se es gobierno. Y no es menor su tarea. Hace varias
décadas ya, David Easton pregonaba que lo que permite un sistema político exitoso,
es aquello que resulta de dar cumplimiento a dos funciones: la tarea de asignar
valores en una sociedad dada; y el intento de conseguir que la mayoría de dicha
sociedad acepte esa asignación valorativa la mayor cantidad del tiempo posible.
Y encima esos valores que toman forma de relato, se dan entre dos contrastes muy
marcados y una serie de grises (o versiones menos espectaculares) entre ambos
extremos que representan ideologías y estilos de la representación política.
El contraste entre lo refundacional: una relativa independencia para “el pueblo” todos- en desmedro del país para “ellos” -los pocos-. Vigente en algunos países, ha
venido cayendo como un efecto dominó en varias elecciones en estos dos años.
Frente a la idea restauradora de un país normal, el que crece y le va mejor ocupando
un rol en el mundo. Mientras mejor nos vean de afuera, mejor estaremos los de
adentro y con más desarrollo. Depende de las inversiones. Daría la sensación que es
el modelo en boga en estos días, pero su eficacia no ha podido ser comprobada, ni en
los países que hace tiempo están en este modelo, ni en el interrogante que por ahora
representa Argentina.
El primer modelo incluye, el segundo modelo hace crecer.
En el primer modelo la institucionalidad sirve siempre que no frene ni complique el
empoderamiento ciudadano. La igualdad es la guía.
En el segundo modelo la institucionalidad lo es todo, porque ella es el faro de la
libertad.
Y en ese marco juegan los ciudadanos también, y en el medio, los medios “median”
para un lado y para el otro. Y, aunque no se lo aprecie, los ciudadanos no fluctúan de
un día para el otro. Tampoco las ideologías encarnadas en líderes que no aparecen
tan claras en una versión dicotómica del siglo XX pero son constitutivas del
pensamiento de aquellos.
249
Entre estos dos contrastes sucede la política, y por ende, la política comunicacional
de América Latina.
Una visión de gestión de la comunicación
Pero hay otro abordaje a gran escala desde la comunicación, en donde los gobiernos
envejecen. Algunas tendencias -que además mutan aceleradamente y
probablemente queden viejas mañana-: respecto al tiempo promedio que un usuario
de servicios está dispuesto a esperar para obtener una respuesta en redes sociales,
más del 70% afirma que no debiera superar los 15 minutos según muestra en redes. Y
sólo el 7% aceptaría entre una hora y 3 horas. Los usuarios de smartphones ya
superan holgadamente en 200 veces la cantidad de chequeos que hacen diariamente
a su celular. Y encima la población digitalizada, a medida que baja de edad, deja de
usar los correos como modo de interacción y son las redes -incluso públicas o
grupales- el ámbito de diálogo.
¿Y qué hacen los gobiernos frente a esta realidad? Publicitan. Del mismo modo que lo
harían por TV. Y gastan. Mucho. Y hablan. Mucho. Pero dialogan poco, responden
poco, gestionan poco -como interacción de políticas o servicios públicos-. Y gran
parte de la publicidad tiene que ver con mantener la comunicación legitimante por
encima de la gestión de políticas propiamente dichas.
Hay una excesiva inversión en pauta publicitaria, en tecnologías, pero a los gobiernos
les cuesta entender a las redes como medios de gestión. Les cuesta entender que los
ciudadanos acuden a las redes para ser atendidos como si fuera una gran mesa de
entrada en un edificio público. Más del 87% de los ciudadanos recurrió a internet
para plantear dudas o quejas en algún momento según Lithium. ¿Por qué no lo haría
con un gobierno?.
Por ende, frente a las redes, el modelo de gestión atrasa, envejece. No obstante, el
modelo de representación que los gobiernos proponen no ha cambiado tanto. En las
cuentas personales de los gobernantes, el híper-personalismo es extremo, como si
fueran nuevos celebrities sin intercambio ni horizontalidad.
Y en la cuentas -llamadas institucionales- de gobierno, hay publicidad y en el mejor
de los casos información, no interacción. Aparece un ecosistema de nuevas
posibilidades y ello exige más convergencia, pero no se destrona el reinado de
Twitter, Facebook y You Tube.
No se muestran avances hacia instancias de gobierno abierto y transparencia
colaborativa. En el estudio Gobernauta del BID, en promedio, los gobiernos sólo
dedican el 1% de acciones focalizadas en la agenda de participación, transparencia o
gobierno abierto. No se propicia desde ellos nuevas acciones de fiscalización y
rendición de cuentas ciudadanas, vale decir, mejorar las chances de ser monitoreado,
escrutado.
No se avanza hacia acciones de microsegmentación, es decir, cuando cada acto
comunicacional es “uno a uno” en la relación gobierno/ciudadano, pero más que ello,
cuando cada comunicación es también un servicio. ¿A que equivale esto? A
comunicar más que publicitar.
No se alientan instancias colaborativas participativas sobre políticas públicas bajo la
premisa de escuchar y ser condicionado por esa escucha. Sólo el 2,2% de los tuits de
los alcaldes de ciudades de más de un millón de habitantes en América latina están
dedicados a algo tan básico como preguntar algo. Vale decir, cuentan con modestos
signos de interrogación sobre alguna temática.
Síntesis: nuevos rockstars, estéticamente controlados, publicitados las 24 horas y casi
nula interacción. De gestión y hacer la vida un poco más fácil a los ciudadanos, ni
250
hablar. La legitimidad, siempre un poco más lejos y todavía permanece en una visión
estática y dicotómica donde no tiene por qué haber verdades últimas. La legitimidad
y los consensos también se gestionan en el sentido más literal del término, y las redes
pueden colaborar en ese cometido. pero mientras se avanza en la gestión, casi a un
nivel estratosférico, todo el día todo los días hay una batalla por la significación, por
el rumbo de un gobierno, por el modelo que se da en las palabras, que se da en los
estilos, que se representa en las ideologías de las políticas, pero donde las redes
siguen publicitando, más que hacerle la vida más fácil a los ciudadanos.
Todavía el pensamiento político y los gobiernos (de un lado y del otro en las posturas
legitimantes), cargan con una herencia del siglo pasado en donde, desde la
comunicación, sobra la retórica, pero falta más adaptación para la gestión.
George Steiner: "Me asquea la educación de hoy, que es una fábrica de
incultos"
http://www.lanacion.com.ar/1917059-george-steiner-me-asquea-la-educacion-de-hoy-que-esuna-fabrica-de-incultos
A los 88 años, el filósofo y ensayista está preocupado por el futuro pero, a la vez, es optimista;
imagina que la poesía leída en papel no morirá nunca y cree que Homero "habría entendido" a
Mohammed Ali
CAMBRIDGE.- Primero fue un fax. Nadie respondió a la arqueológica intentona. Luego, una
carta postal (sí, aquellas reliquias consistentes en un papel escrito y metido en un sobre). "No
les contestará, está enfermo", previno alguien que le conoce bien. A los pocos días llegó la
respuesta. Carta por avión con el matasellos del Royal Mail y el perfil de la Reina de Inglaterra.
En el encabezado ponía: Churchill College. Cambridge. El breve texto decía así: "Querido Señor,
el año 88 y una salud incierta. Pero su visita sería un honor. Con mis mejores deseos.George
Steiner". Dos meses después, el viejo profesor había dicho "sí", poniendo provisional coto a su
proverbial aversión a las entrevistas.
El catedrático de literatura comparada, el lector de latín y griego, la eminencia de Princeton,
Stanford, Ginebra y Cambridge; el hijo de judíos vieneses que huyeron del nazismo primero a
París y luego a Nueva York; el filósofo de las cosas del ayer, del hoy y del mañana; el Premio
Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades en 2001, el polemista y mitólogo
políglota y el autor de libros capitales del pensamiento moderno, la historia y la semiótica
como Nostalgia del absoluto o La idea de Europa abría las puertas de su preciosa casita de
Barrow Road. Es una mañana de lluvia en la campiña de Cambridge. Zara, la encantadora
esposa de George Steiner (París, 1929), trae café y pastas. El profesor y sus 12.000 libros miran
de frente al visitante.
-Profesor Steiner, la primera pregunta es, ¿cómo está su salud?
-Oh, muy mal, por desgracia. Tengo ya 88 años y la cosa no va bien, pero no pasa nada. He
tenido y tengo mucha suerte en la vida y ahora la cosa va mal, aunque todavía paso algunos
días buenos.
-Cuando uno se siente mal... ¿es inevitable sentir nostalgia de los días felices? ¿Huye usted de
la nostalgia o puede ser un refugio?
251
-No, lo que uno tiene es la impresión de haber dejado de hacer muchas cosas importantes en
la vida. Y de no haber comprendido del todo hasta qué punto la vejez es un problema, ese
debilitamiento progresivo. Lo que me perturba más es el miedo a la demencia. A nuestro
alrededor el Alzhéimer hace estragos. Así que yo, para luchar contra eso, hago todos los días
unos ejercicios de memoria y de atención.
-¿Y en qué consisten?
-Lo que le voy a contar lo va a divertir. Me levanto, voy a mi estudio de trabajo y elijo un libro,
no importa cuál, al azar, y traduzco un pasaje a mis cuatro idiomas. Lo hago sobre todo para
mantener la seguridad de que conservo mi carácter políglota, que es para mí lo más
importante, lo que define mi trayectoria y mi trabajo. Trato de hacerlo todos los días... y desde
luego parece que ayuda.
-¿Sigue leyendo a Parménides cada mañana?
-Parménides, claro... bueno, u otro filósofo. O un poeta. La poesía me ayuda a concentrarme,
porque ayuda a aprender de memoria, y yo siempre, como profesor, he reivindicado el
aprendizaje de memoria. Lo adoro. Llevo dentro de mí mucha poesía; es, cómo decirlo, las
otras vidas de mi vida.
-La poesía vive... o mejor dicho, en este mundo de hoy sobrevive. Algunos la consideran casi
sospechosa.
-Estoy asqueado por la educación escolar de hoy, que es una fábrica de incultos y que no
respeta la memoria. Y que no hace nada para que los niños aprendan las cosas de memoria. El
poema que vive en nosotros vive con nosotros, cambia como nosotros, y tiene que ver con una
función mucho más profunda que la del cerebro. Representa la sensibilidad, la personalidad.
-¿Es optimista con respecto del futuro de la poesía?
-Enormemente optimista. Vivimos una gran época de poesía, sobre todo en los jóvenes. Y
escuche una cosa: muy lentamente, los medios electrónicos están empezando a retroceder. El
libro tradicional vuelve, la gente lo prefiere al Kindle... prefiere agarrar un buen libro de poesía
en papel, tocarlo, olerlo, leerlo. Pero hay algo que me preocupa: los jóvenes ya no tienen
tiempo... de tener tiempo. Nunca la aceleración casi mecánica de las rutinas vitales ha sido tan
fuerte como hoy. Y hay que tener tiempo para buscar tiempo. Y otra cosa: no hay que tener
miedo al silencio. El miedo de los niños al silencio me da miedo. Solo el silencio nos enseña a
encontrar en nosotros lo esencial.
-El ruido y la prisa... ¿No cree que vivimos demasiado deprisa? Como si la vida fuera una
carrera de velocidad y no una prueba de fondo? ¿No estamos educando a nuestros hijos
demasiado deprisa?
-Déjeme ensanchar esta cuestión y decirle algo: estamos matando los sueños de nuestros
niños. Cuando yo era niño existía la posibilidad de cometer grandes errores. El ser humano los
cometió: fascismo, nazismo, comunismo... pero si uno no puede cometer errores cuando es
joven, nunca llegará a ser un ser humano completo y puro. Los errores y las esperanzas rotas
nos ayudan a completar el estado adulto.
-No se sabe bien por qué el error tiene tan mala prensa, pero el caso es que en estas
sociedades exacerbadamente utilitarias y competitivas la tiene.
252
-El error es el punto de partida de la creación. Si tenemos miedo a equivocarnos jamás
podremos asumir los grandes retos, los riesgos. ¿Es que el error volverá? Es posible, es posible,
hay algunos atisbos. Pero ser joven hoy no es fácil. ¿Qué les estamos dejando? Nada. Incluida
Europa, que ya no tiene nada que proponerles. El dinero nunca ha gritado tan alto como
ahora. El olor del dinero nos sofoca, y eso no tiene nada que ver con el capitalismo o el
marxismo. Cuando yo estudiaba la gente quería ser miembro del Parlamento, funcionario
público, profesor... hoy incluso el niño huele el dinero, y el único objetivo ya parece que es ser
rico. Y a eso se suma el enorme desdén de los políticos hacia aquellos que no tienen dinero.
Para ellos, solo somos unos pobres idiotas. Y eso Karl Marx lo vio con mucha anticipación. En
cambio, ni Freud ni el psicoanálisis, con toda su capacidad de análisis de los caracteres
patológicos, supieron comprender nada de todo esto.
-¿Establece diferencias entre "alta" y "baja" cultura, como han hecho algunos intelectuales,
visiblemente incómodos ante formas de cultura popular como los cómics, el arte urbano, el
pop o el rock, a los que se llegó a poner la etiqueta de "civilización del espectáculo"?
-Yo le digo una cosa: Shakespeare habría adorado la televisión. Habría escrito para la
televisión. Y no, no hago esas distinciones. A mí lo que de verdad me entristece es que las
pequeñas librerías, los teatros de barrio y las tiendas de discos cierren. Eso sí, los museos están
cada día más llenos, la muchedumbre colapsa las grandes exposiciones, las salas de conciertos
están llenas... así que atención, porque estos procesos son muy complejos y diversos como
para establecer juicios globales. Mohammed Ali era también un fenómeno estético. Era como
un dios griego. Homero habría entendido a la perfección a Mohammed Ali.
-El creciente desdén político por las humanidades es desolador. Al menos en España. La
filosofía, la literatura o la historia son progresivamente ninguneadas en los planes educativos.
-En Inglaterra también pasa, aunque quedan algunas excepciones en escuelas privadas para
elites. Pero el sentido de la élite es ya inaceptable en la retórica de la democracia. Si usted
supiera cómo era la educación en las escuelas inglesas antes de 1914... pero es que entre
agosto de 1914 y abril de 1945 unos 72 millones de hombres, mujeres y niños fueron
masacrados en Europa y el oeste de Rusia. ¡Es un milagro que todavía exista Europa! Y le diré
algo respecto a eso: una civilización que extermina a sus judíos no recuperará nunca lo que
fue.
-Profesor Steiner, ¿qué es ser judío?
-Un judío es un hombre que, cuando lee un libro, lo hace con un lápiz en la mano porque está
seguro de que puede escribir otro mejor.
-¿Qué momentos o hechos cree que forjaron más su forma de ser? Entiendo que tener que
huir del nazismo junto a sus padres y saltar de París a Nueva York es uno de los fundamentales
teniendo en cuenta que?
-Le diré algo que le impactará: ¡Yo le debo todo a Hitler! Mis escuelas, mis idiomas, mis
lecturas, mis viajes... todo. En todos los lugares y situaciones hay cosas que aprender. Ningún
lugar es aburrido si me dan una mesa, buen café y unos libros. Eso es una patria. "Nada
humano me es ajeno". ¿Por qué Heidegger es tan importante para mí? Porque nos enseña que
somos los invitados de la vida. Y tenemos que aprender a ser buenos invitados. Y, como judío,
tener siempre la maleta preparada y si hay que partir, partir. Y no quejarse.
253
La confianza en un futuro dominado por miedos inimaginables
Diálogo con Marc Augé. El autor de “Los no lugares” es la estrella de La Noche de la Filosofía.
Estudia un mundo con síntomas complejos; escribió una fábula sobre el Papa.
http://www.revistaenie.clarin.com/ideas/confianza-futuro-dominado-miedosinimaginables_0_1601839814.html
POR MARCH MAZZEI ENVIADA A PARIS
Ilusión. Augé subraya que la ilusión de instantaneidad y ubicuidad constituyen problemas
porque las relaciones entre unos y otros ocurren en el tiempo y el espacio.
Ilusión. Augé subraya que la ilusión de instantaneidad y ubicuidad constituyen problemas
porque las relaciones entre unos y otros ocurren en el tiempo y el espacio.
Etiquetado como:Especial Filosofía insomne
Marc Augé básico
No es casual que haya elegido el café Select, uno de los más tradicionales del Montparnasse
parisino. Aquí el antropólogo Marc Augé llega directo desde su casa en bus –imprescindible en
un día de lluvia. Célebre entre otros hallazgos por el concepto de “no-lugares”, aplicable a
supermercados, aeropuertos y otros espacios donde se disuelven las identidades de las
personas, sostiene que “en los cafés siempre hay un encuentro posible”. También alrededor de
la identidad y el cuerpo tratan las dos conferencias que ofrecerá este sábado durante La Noche
de la Filosofía , invitado por el Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos, la Embajada
de Francia en la Argentina y el Centro Franco Argentino. Su impresionante trabajo se mantiene
vigente desde mediados de los 70, cuando viajó al Africa. Luego, sus investigaciones
etnológicas en lugares urbanos específicos (como el subterráneo, los jardines de Luxemburgo,
etc.) le dieron relevancia global. Marc Augé hace etnología sobre la actualidad, oscila entre
diferentes motivos, en una tensión constante, que hace de su obra un concentrado de
impulsos dinámicos que iluminan este tiempo. Sobre ellos ahondó en los últimos libros aquí
publicados: ¿Qué pasó con la confianza en el futuro?
(Siglo veintiuno editores) y El tiempo sin edad (Adriana Hidalgo). Y la vida cotidiana cruzada
con la política, por supuesto, lo siguen conmoviendo, como por ejemplo la consolidación del
Frente Nacional (FN) en el horizonte.
–¿Cree que la ultraderecha llegará al poder en Francia?
–Las elecciones están próximas pero no soy profeta. Lo más probable es que gane la derecha,
pero no Marine Le Pen. Estamos en un período interesante y es posible que aparezcan
fórmulas nuevas, otras soluciones. Pero creo que el FN no puede ganar, entonces, ¿cuál será la
fórmula?
–¿Y este panorama se vincula con los problemas que atraviesa el país?
–En Europa estamos muy preocupados por la violencia, el terrorismo, pero a nivel más general
creo que es por la desigualdad en el mundo, desde el punto de vista económico y a nivel
político. Cuando Francis Fukuyama hablaba del fin de la historia decía que todo el mundo
estaba de acuerdo en pensar que la solución es el liberalismo económico y la democracia
representativa. Pero hay muchas naciones económicamente importantes que no son
democráticas. Por otra parte, un mercado liberal no significa que la política lo sea. Bajo la
palabra “democracia” no se entiende siempre lo mismo. Es un problema importante pero no
sé si soy optimista o pesimista porque los dos aspectos están juntos.
–¿Puede ver a las migraciones desde Siria y el terrorismo, como consecuencias directas de
estas desigualdades?
254
–Son algunas de las consecuencias. Las migraciones por la fuerza son un problema para las
democracias de Europa, porque tienen que organizarlas, pero es un problema más grave para
los migrantes. Hay problemas de migración en todos los continentes. Yo estuve en Africa y en
América Latina, pero hoy toma un aspecto más trágico en Europa debido a la situación de
Medio Oriente. Y hay una sobredeterminación debido al hecho de que a través de las
migraciones hay gente que también impone el terrorismo. Es una situación compleja y difícil.
–Europa ha sido un territorio de libertades. ¿Está reemplazando el anhelo de libertad por el de
seguridad?
–Espero que los ideales de libertad sean más fuertes, pero es un período difícil. No sé cómo se
va a superar. La historia parece por momentos rápida pero existen otros ritmos. Hay un ritmo
más lento, y a largo plazo no soy pesimista, aunque haya problemas.
–Su enorme trabajo se caracteriza por objetos de estudio diversos, anclados en lo cotidiano,
como los subterráneos, el fútbol, las bicicletas...
–Intento hacer pequeños estudios, con ejemplos de la vida actual, siempre tomando en cuenta
el contexto, que es lo que vale. Pero hoy cambiamos de contexto y eso es un problema, incluso
a nivel local. Porque no hay pequeños problemas, todo es total. Es una cosa interesante para el
antropólogo, porque en nuestro trabajo tenemos que tomar en cuenta el contexto local y hoy
no existe tal cosa.
–¿Cómo es que el mundo se ha globalizado de forma definitiva?
–Así es, por ejemplo, debido a las imágenes de la TV o de las computadoras. Incluso en el
hecho de que un pequeño grupo de indios en la Amazonia sabe muy bien que pertenece al
mundo. Pero para nosotros no es solamente una cosa de conocimiento sino de imagen:
cotidianamente tenemos frente a los ojos una visión del mundo entero que nos puede dar
miedo. Si se produce una catástrofe en un lugar lejano, lo sabemos. Todas las cosas se
convierten en muy cercanas a nosotros. No es bueno ni malo, es así. Lo que es un problema es
esta ilusión de instantaneidad y ubicuidad, porque las relaciones entre los unos y los otros
ocurren en el tiempo y el espacio, los necesitamos aunque podamos tener millones de
relaciones. Los medios de comunicación son medios y no finalidades. Son fantásticos,
importantes, pero hay que reflexionar a propósito de ellos.
–¿A eso se refiere cuando habla de “los nuevos miedos”?
–Claro, los nuevos miedos son los de antes pero presentados de manera nueva. Cuando
ponemos la TV y vemos que hubo un terremoto en Japón o una revuelta en Oriente, y es tan
cerca... Pero hay miedos nuevos también, debido al aspecto económico financiero que se
apoderó del planeta. Hay suicidios en las empresas en Francia. No sé si has oído hablar de esta
perspectiva de la asignación universal que se vota en Suiza. Se trata de que cada uno que nace
allí tiene una asignación de dinero, por el solo hecho de nacer. La consecuencia es que si tú
quieres puedes trabajar, pero no es obligatorio.
–Hay trabajos que han sido reemplazados por máquinas.
–Porque faltan empleos, es una idea interesante, revolucionaria, fascinante. Y más allá de lo
que pase en Suiza ( N. de R.: finalmente se votó en contra ) tiene futuro porque no es de la
255
derecha ni de la izquierda: hay capitalistas y economistas que la apoyan. Seguramente en Suiza
sea más fácil de llevar adelante pero hay experiencias en países subdesarrollados también.
–Una experiencia que cambia la concepción del trabajo como un derecho o algo constitutivo
del ser humano.
–Sí, tenemos esa idea cristiana y comunista de que “el hombre tiene que trabajar”. No, no, no.
No es que no van a trabajar pero ¡es menos grave si de todas maneras no hay suficientes
empleos! Estoy interesado en esa idea. Muchos grupos la impulsan pero en Finlandia ya ha
sido experimentada.
Una ficción con el Papa Francisco
Augé escribió una nouvelle . Allí, un día, milagrosamente, el Papa se asoma al balcón de la
plaza de San Pedro del Vaticano y frente a la multitud aturdida, con voz de ultratumba, grita:
“¡Dios no murió porque nunca existió!”. La escena aparece en La semana sagrada en la que
cambió el mundo , una fábula de 80 páginas –editada por ahora solo en francés–, en la que
Augé imagina a la humanidad liberada de sus creencias religiosas. “Hace mucho tiempo que
hago ficciones, las llamo etno-ficciones, una mezcla entre ficción y etnografía”, explica. “Y hay
dos tipos: una se trata de comenzar un libro con unas páginas de ficción, para hacer entender
al lector cuál es el problema, como en Los no lugares . Pero esta es realmente una ficción que
propone una pregunta fundamental: de qué Dios hablamos cuando hablamos de Dios. Lo
importante es hacer la distinción entre lo que yo digo como analista y todo lo que puedo
desear. A través de la literatura hay muchas cosas que se pueden decir”.
–¿Qué lo motivó a escribir un libro como El tiempo sin edad?
–Hay muchos aspectos pero lo interesante es descubrir qué es la edad. Es algo que no
sabemos. La edad es social por una parte, como la edad de la jubilación, pero el tiempo es otra
cosa. Es algo que puedo recordar o imaginar. Y puedo disfrutar del tiempo,
independientemente de la edad. Cada uno hace su propia experiencia. Esa es la razón por la
cual he escrito esto. La idea de felicidad me parece a la vez personal y general, y por ende
antropológica.
–¿Será una próxima indagación?
–Sí, estoy reflexionando sobre la idea de felicidad, la bonheur en francés, que no es solo
felicidad. Está vinculada a la noción de fortuna, de suerte. Y tengo una idea de que la felicidad
se concibe como una continuidad, mientras que la palabra bonheur sugiere instantes,
momentos.
–En El tiempo sin edad sostiene que finalmente los recuerdos son una percepción de algo
indefinido, sin tanta exactitud...
–Cada uno tiene su propia poesía. En la poesía hay poiesis , hacer. Y hablando de la edad
podemos hablar del pasado o del futuro, o del deseo. Es el imposible presente. Esa es la
materia primera de la poesía. No hay fronteras absolutas.
–¿Podría ahondar en “el imposible presente”?
–Ahora estamos hablando pero hemos empezado hace más de 40 minutos, que es el pasado.
Lo bueno es que hay una sutil conciencia del tiempo. Y diría que los medios nos dan la ilusión
porque hay un aspecto mágico en la instantaneidad que es aparentemente más rico pero
256
finalmente ilusorio. El mundo en el que vivimos asimila mensajes que aseguran que nos dan la
llave del presente pero solo para deshacerse del pasado, la historia.
–Suena desesperanzado, pero escribió un libro titulado ¿Qué pasó con la confianza en el
futuro?...
–El problema con el futuro es que por un lado tenemos un sentido de que el futuro es ya, pero
no lo es. Y podemos imaginar futuros muy diversos. Las utopías del siglo XIX imaginaron un
mundo utópico donde había que concebir a la humanidad como tal. Mientras vemos muy bien
que no podemos imaginar cuál será el futuro de todas esas fuerzas. Pero yo creo en la ciencia,
que va a cambiar completamente el futuro de la humanidad. Sabemos muy bien que dentro de
50 años no habrá más enfermedades y es otra humanidad la que hay que imaginar. Pero, al
mismo tiempo, tenemos que pensar el universo.
–¿Por qué tanta confianza en la ciencia?
–La ciencia es el único dominio donde se puede hablar de progreso, porque produce un guion
que no fluye mecánicamente de lo que lo precede. Hace 50 años no podíamos imaginar todo lo
que conocemos hoy en día, y no podemos imaginar ahora cuáles serán los conocimientos
dentro de 50 años. Puede dar miedo. De vez en cuando hablo de una utopía de la educación,
porque creo que es la única impopular que hay que desarrollar. Soy optimista en la medida en
que pienso que de todas maneras conoceremos muchas cosas que ignoramos ahora. Estamos
condenados a conocer.
–En El tiempo... escribe que se puede identificar la edad de una persona por las palabras que
utiliza, y pensé en la palabra “porvenir”, que ya nadie usa.
–La idea del porvenir no existe más en Francia. Y creo que en todo el planeta. Pero a mí me
parece que los países de América latina tienen que tener confianza en el futuro. Por lo que yo
he visto en la Argentina, en Chile, etc., pienso que hay una perspectiva fuerte de futuro, y de
conocimiento en las universidades, etc. En cambio, creo que en Europa se han estado haciendo
ciertas cosas de manera demasiado rápida, sin pensar en el continente. Aunque la
Organización Europea para la Investigación Nuclear es una cosa bella donde existe una real
colaboración entre la gente. Creo que el ideal de Europa está ahí.
FICHA
Marc Augé en La Noche de la Filosofía
La identidad individual y los derechos
humanos.
CCK, Sala Argentina, 23.30 hs.
El ser humano y su cuerpo. CCK, Sala
Argentina, 1.30 hs.
la democracia más allá del mito liberal
http://www.hemisferioizquierdo.uy/#!Editorial-la-democracia-más-allá-del-mitoliberal/nnsaa/577178240cf249bc2451f2ee
A mediados del siglo pasado, en plena vigencia del relato de la Suiza de América, Mario
Benedetti impugnó con “El país de la cola de paja” a la mitología democrática nacional.
257
Visualizó sus dobleces, corrupciones y complicidades, y la llamó ”cascarodemocracia”
sostenida por “la solidaridad de los cola de paja”. La generación de izquierdas revolucionarias
que surgió en nuestro país algunos años después, sostuvo que capitalismo y (verdadera)
democracia eran dos pares irreconciliables, y la democracia era algo a conquistar ya sea contra
la pseudodemocracia, o por vía de conquistas progresivas desde las instituciones de la
democracia. Lo que pasó luego lo sabemos: las (heroicas) luchas contra la dictadura se
articularon como luchas por la democracia, y luego las luchas por la democracia se sintetizaron
como luchas por la reinstalación de las instituciones de la democracia liberal. La democracia
como conquista se instaló como nuevo sentido dominante en el pensamiento de la izquierda, y
progresivamente dicho sentido fue hegemonizado de acuerdo al pensamiento liberal.
Desde entonces, el credo del buen demócrata (expresado en la prédica sanguinettista)
sustituyó a las cartas de fe democrática de la dictadura, continuando simbólicamente aquel
papel policial: demarcar un adentro y un afuera de lo político. Así, en su proceso de ascenso al
gobierno, la izquierda progresista fue incorporando el credo democrático liberal hasta
asumirlo como propio. La caída del muro de Berlín y la sucesión de derrotas históricas de las
izquierdas del siglo XX hicieron lo suyo. El imperialismo norteamericano desplegó su estrategia
intervencionista en torno al discurso de “defensa de la democracia”. Y la racionalidad
tecnocrática neoliberal redujo a la democracia a una serie de procedimientos administrativos
donde el poder está siempre en otra parte, configurando una era que Slavoj Zizek llamó
“pospolítica”. Desde entonces, “democracia” ha quedado ideológicamente definida en nuestro
país como lo opuesto de “dictadura”, y pragmáticamente reducida a votar cada cinco años en
elecciones (la “fiesta de la democracia”) cada vez más concebidas y realizadas como campañas
de mercadeo.
Así las cosas, reflexionar críticamente en torno a “la democracia uruguaya más allá del mito
liberal” puede parecer un anacronismo. Tanto más en plena era progresista de indudable
avance en materia de derechos sociales. Sin embargo, en momentos en que en todo el
continente las empresas de comunicación de masas tienen cada vez mayor influencia fáctica
en decisiones (y cambios) de gobiernos, y en nuestro país se perpetúa un oligopolio mediático.
Cuando la impunidad muestra sus ribetes más cínicos en las cómodas prisiones domiciliarias
del puñado de militares torturadores procesados, contrastando con el hacinamiento infernal
de los presos “comunes”. Cuando se nos presenta a la inclusión financiera como un avance
democrático y a la macroeconomía como una externidad inalcanzable para la política. En
momentos en que los avances en legislación consagratoria de nuevos derechos se combinan
con el avance de la sociedad de control hipervigilante, la política del miedo y la criminalización
de la pobreza. En momentos en que la economía (la desigualdad, las clases, la propiedad)
aparece como el gran ausente en la reflexión democrática. En momentos como los actuales,
entonces, vale la pena volver a impugnar, como Benedetti hace medio siglo, a nuestra
“cascarodemocracia”. Mostrar sus sótanos inconfesables, sus impensados y sus impensables.
Es que preguntarse por la democracia tiene sentido siempre que se interrogue por los otros de
la democracia. Siempre que se convoque a los expulsados y a los convidados de piedra del
“gobierno del pueblo”. Siempre que se enuncie (politice) a los impensados y a los impensables
del discurso democrático, y se busque con ello la re-politizacion democratizante de la
democracia. Se trata de relanzar el problema de la democracia como un problema de izquierda
anticapitalista. Sin omitir el registro estratégico del problema: ¿cómo orientar una acción
política de izquierda transformadora (en, ante, desde, por fuera de) los escenarios y reglas de
juego de la democracia liberal realmente existente? Sobre estos temas convocamos a
reflexionar al hemisferio de las izquierdas.
258
La democracia en el pensamiento de las izquierdas en Uruguay: diálogo con
Aldo Marchesi*
http://www.hemisferioizquierdo.uy/#!La-democracia-en-el-pensamiento-de-las-izquierdas-enUruguay-diálogo-con-Aldo-Marchesi/nnsaa/577202660cf2f8d6d10dec38
Hemisferio Izquierdo (HI)- ¿Qué lugar ha ocupado la cuestión de la democracia en las
izquierdas uruguayas pre-dictadura?
Aldo Marchesi (AM)- Durante los años sesenta existieron dos posicionamientos que pueden
ser leídos como relativamente contradictorios en las izquierdas uruguayas. Por un lado
sectores que gradualmente comenzaron a desarrollar una crítica a la democracia liberal y que
se expresaron a través de un discurso revolucionario y por otro, sectores que intentaron
rescatar ciertos valores de la democracia liberal frente al creciente autoritarismo civil estatal
desarrollado desde mediados de los sesentas.
Antes de explicar con mayor profundidad ambos posicionamientos resulta necesario
mencionar algunos aspectos contextuales de la región para entender los significados que la
democracia liberal adquirió en el contexto de la guerra fría.
Desde fines de los cuarentas se desarrolló un liberalismo de la guerra fría que admitía límites al
funcionamiento democrático vinculados al riesgo de la amenaza comunista. El riesgo de la
amenaza comunista legitimaba la suspensión de aspectos esenciales del funcionamiento
democrático. La amenaza comunista podía ser equiparada a lo que hoy es el terrorismo en la
visión de organismos internacionales como la OEA. Experiencias políticas tan diversas como la
de Guatemala en 1954, y las de República Dominicana y Brasil en 1964 fueron leídas de esa
manera por Estados Unidos y sus aliados que promovieron reacciones autoritarias para
derrocar gobiernos elegidos democráticamente. La democracia liberal de la guerra fría
defendida por Estados Unidos era una democracia restringida a sus amigos en el contexto de la
propia guerra fría.
Por otro lado a mediados de los sesentas, luego del fracaso de los intentos reformistas
promovidos en el contexto de la Alianza para el progreso, comenzó a desarrollarse entre
ciertas elites tecnocráticas la idea que el único camino para salir de la crisis que enfrentaban
las economías latinoamericanas era el desarrollo de regímenes militares con una pretensión
modernizadora. Brasil en 1964 se mostró como un ejemplo de dicho camino.
Frente a todo esto Cuba se mostró como una alternativa democrática a la democracia liberal
de la guerra fría. El viraje de un discurso democrático liberal a un pensamiento leninista
implicó una redefinición de democracia. En la visión de los cubanos lo que se estaba logrando
era una democracia más verdadera, con la efectiva participación de los sectores populares a
través de diversos mecanismos de democracia directa, pero donde ciertos derechos liberales
resultaban suspendidos.
En resumen, en la Latinoamérica de los sesentas aunque la palabra democracia era reclamada
por todos los actores políticos como parte de su identidad, la realidad de los regímenes
políticos existentes parecía muy alejada a cualquier modelo democrático.
El Uruguay de fines de los cincuentas y principios de los sesentas que fue halagado por Ernesto
Guevara en 1961, era una excepción que gradualmente estaba dejando de serlo. Desde la
mitad de los cincuentas el país comenzó a enfrentar un estancamiento y luego una crisis
económica estructural que duró dos décadas. La progresiva incapacidad de los partidos para
259
resolver la crisis fue interpretada como una crisis política de legitimación de los partidos
políticos tradicionales, que incluso para algunos ensayistas expresaba una crisis moral de la
sociedad uruguaya, marcada por años de clientelismo y paternalismo estatal.
Desde el Estado las respuestas al crecimiento de la movilización sindical frente a la crisis
fueron el incremento de la represión y el control policial. Entre 1960 y 1963 ciertos sectores
del gobierno del Partido Nacional así como de la oposición colorada, emprendieron una
campaña anticomunista especialmente enfocada en la amenaza que la revolución cubana
representaba. Dicha campaña procuró sin éxito la proscripción del Partido Comunista, la
reglamentación de la actividad sindical y la ruptura de relaciones con la Unión Soviética y Cuba.
Entre 1962 y 1963 apareció una oleada de ataques de grupos de extrema derecha (algunos de
ellos violentos) que desarrollaron atentados contra militantes políticos, sociales, exiliados y
judíos. En 1963 se propusieron medidas prontas de seguridad para detener la huelga de los
trabajadores estatales de la electricidad (UTE). Durante 1965 las presiones ejercidas por
sectores conservadores se expresaron en abril y octubre en los decretos de medidas prontas
de seguridad que habilitaron el encarcelamiento de cientos de activistas sindicales y en
algunos casos el desarrollo de prácticas de tortura sistemática nuevas en el contexto uruguayo.
El golpe de los militares brasileros en marzo de 1964 agregó un componente regional al
incremento autoritario alentado desde sectores conservadores uruguayos.
Ese es el contexto regional y local que habilitó una gradual radicalización de ciertos sectores de
la izquierda uruguaya que se fueron inclinando hacia una visión que cuestionaba qué tan
democrática era la democracia uruguaya. El encuentro de diversos militantes en el llamado
"Coordinador" (la organización que antecedió a la creación del MLN-T) donde participaban
socialistas, anarquistas, ex comunistas y otros grupos menores, es un ejemplo del malestar con
la democracia liberal que se expresaba en importantes sectores de la izquierda. La experiencia
de movilización social de los cañeros de Bella Unión será usada por estos militantes como un
ejemplo que evidenciaba que los derechos liberales y sociales de la democracia uruguaya no
llegaban a todos, que había otro Uruguay que estaba muy lejano del país modelo defendido
por las elites políticas. Por otro lado, la lectura de las sucesivas medidas prontas de seguridad,
las medidas de persecución contra la izquierda y los sindicatos y los rumores de golpe de
estado a partir de lo ocurrido en Brasil los llevó a predecir un futuro negativo para la
democracia uruguaya. En su visión frente al avance de la movilización social e incluso electoral
las respuestas de las elites tradicionales en alianza con Estados Unidos culminarían en un
régimen autoritario. Dicha lectura del proceso político local irá distanciando a estos sectores
de los valores democráticos liberales que serán vistos como una farsa para mantener un orden
de cosas que poco tenía que ver con el gobierno del pueblo.
Simultáneamente a este proceso también otros sectores de la izquierda y el movimiento social
comenzaron a preocuparse con la amenaza autoritaria que asomaba desde Brasil. El Congreso
del Pueblo de 1965 advertía que: "el pueblo enfrenta una sistemática represión tendiente a
reprimir los derechos individuales, sociales y sindicales". Además de soluciones para la crisis
económica el congreso se planteó como objetivo detener cualquier amenaza de golpe
antipopular.
Estas reacciones políticas y sociales frente al creciente autoritarismo estatal continuaron
frente al incremento autoritario del pachequismo. Fue en la crítica a las medidas prontas de
seguridad, las torturas, los excesos policiales, las proscripciones y prohibiciones en las que
diversos políticos de centro izquierda e izquierda, varios de los cuales venían de los partidos
tradicionales, se terminaron encontrando para concretar la creación del Frente Amplio. Fue en
ese contexto fuertemente polarizado y confuso de comienzos de los setentas donde el
liderazgo de Seregni y la mayoría de los sectores políticos del FA apostaron a una
260
revalorización democrática liberal como camino de solución a la crisis y reconciliación entre los
uruguayos. Además de ser una respuesta al autoritarismo civil, el FA se creó en un momento
donde la novedad del gobierno de la Unidad Popular en Chile proponía conciliar lo mejor de los
dos mundos de la guerra fría: Democracia Liberal y socialismo.
Estas dos caras de las izquierdas: la que impulsaba caminos revolucionarios y la que intentaban
revalorizar los derechos liberales, se encontraron en el Frente Amplio. Aunque conscientes de
su contradicción trabajaron conjuntamente en un contexto de profunda incertidumbre política
donde las estrategias de todos los actores tuvieron cierto nivel de ambigüedad. Los tupamaros
apostaron a una estrategia revolucionaria pero por momentos se adecuaron a la estrategia del
FA. De hecho el MLN-T apoyó la creación del FA, tuvo contactos cercanos con varios de sus
fundadores, hizo una tregua electoral, proveyó información para denuncias parlamentarias y
judiciales, etc. Por otro lado se podría decir que aquellos que apostaban al mantenimiento de
una institucionalidad democrática como el Partido Comunista o el General Seregni, apostaron
a la salida militar en febrero de 1973 como un camino para resolver la crisis política de un
presidente sobre el que habían denuncias de fraude en las elecciones y que en el año 1972
había desarrollado una política represiva de inusitado alcance en la historia de Uruguay.
HI- ¿Qué cambios al respecto pueden observarse en las izquierdas post-dictadura?
AM- Las consecuencias de la represión dictatorial tuvieron un impacto importante en la
manera que los militantes de izquierda analizaron aspectos vinculados con la violencia estatal.
Vania Markarian ha mostrado como la lucha por la defensa de los derechos humanos llevó a
que los militantes uruguayos fueran adquiriendo gradualmente una nueva visión acerca del
valor de ciertos derechos liberales clásicos en detrimento del lenguaje revolucionario de los
sesentas. Esto trajo aparejado una revalorización de la democracia liberal por parte de varios
de aquellos que inspirados en la experiencia cubana habían abandonado la dimensión liberal
de la democracia.
Asimismo comenzaron a surgir otros asuntos vinculados con la tensión entre democracia y
autoritarismo. En el contexto de la primavera democrática de los ochentas, donde la
democracia y los derechos humanos fueron palabras asociadas a las demandas de los
movimientos sociales y donde el autoritarismo dictatorial era el antónimo contra el cual se
construían las nuevas ideas políticas, comenzaron a emerger críticas a diversas facetas
autoritarias de la propia izquierda. El vanguardismo de los militantes frente a los movimientos
sociales, el machismo, las estructuras gerontes de la izquierda fueron asuntos que se
empezaron a hablar dentro de las organizaciones políticas de la izquierda y en los movimientos
sociales durante ese período. Esta revalorización democrática no implicó abandonar la
reflexión acerca de la posibilidad de articular diversas formas de democracia liberal con el
socialismo.
Los ochentas fueron un momento muy fermental en las posibilidades de radicalizar las
nociones vinculadas a la democracia liberal. En este sentido se puede decir que la izquierda a
la salida de la dictadura comenzó a proponer una nueva visión de la democracia que tendrá
implicancias en el presente. La idea de la democracia participativa que reivindica el
involucramiento de actores sociales y locales en los procesos de decisión surgió al calor de los
movimientos sociales de esa década. Lo mismo se puede decir acerca de las críticas a la
supuesta igualdad legal del liberalismo que ocultaba las diferentes formas de discriminación
existente (género, edad, raza) en la política cotidiana.
Sin embargo, a principios de los noventas esa voluntad de asumir críticamente la democracia
liberal y buscar ampliarla con otras dimensiones emancipadoras pareció ceder a una mera
261
aceptación acrítica. La democracia liberal pasó a ser la única forma de democracia: la
democracia sin adjetivos, sin historia, una esencia indiscutible. Dos asuntos tuvieron que ver
con esta claudicación. La caída del muro de Berlín terminó de confirmar que las democracias
que tenían otros adjetivos no solo tenían muy poco de liberales, sino también de populares ya
que las mayorías en Europa oriental no se identificaban con dichos regímenes que habían
devenido en estructuras autoritarias y/o totalitarias. Por otra parte la derrota plebiscitaria en
torno a la ley de caducidad, además de cerrar la posibilidad de verdad y justica, terminó
consolidando una narrativa sobre los sesentas donde una democracia idílica había entrado en
crisis por la responsabilidad de la izquierda y el movimiento social. La izquierda no tuvo la
suficiente energía para dar la lucha sobre aquel pasado y eso tuvo consecuencias sobre las
maneras de concebir la democracia del presente.
* Doctor en Historia (New York University), Profesor de la Universidad de la República, director
del Centro de Estudios Interdisciplinarios Uruguayos (CEIU). Autor de numerosos trabajos
sobre la historia reciente de Uruguay y el Cono Sur.
Democracia bajo la lupa violeta: una crítica feminista
Maru Casanova*
http://www.hemisferioizquierdo.uy/#!Democracia-bajo-la-lupa-violeta-una-críticafeminista/nnsaa/57731b9f0cf2f8d6d10f008a
Cuando nos referimos al término democracia lo primero que pensamos es en su acepción más
clásica: la que define como principios rectores la igualdad y posibilidad de ejercicio de
derechos, tanto civiles, políticos como sociales. Si partimos de esta concepción y observamos
el marco normativo vigente podríamos afirmar que nos encontramos frente a un sistema
democrático, en Uruguay las mujeres podemos votar, tener propiedades, ser elegibles, ir a la
universidad y desempeñar cargos, entre otras muchas cosas. Implicó un largo camino de lucha
el que hoy podamos notar una diferencia entre nosotras y aquellas que no eran consideradas
ciudadanas.
Sin embargo no podemos reducir nuestro análisis a la igualdad en términos formales. Cuando
una profundiza cuales son las posibilidades reales de ejercicio de cada uno de los derechos
reseñados se encuentra que la posibilidad no es tal.
La mirada feminista diluye necesariamente las fronteras de lo privado y lo público trayendo la
histórica (y nunca vieja) consigna de lo personal es político. Así, en el análisis de qué
implicancias tiene el ser mujer para el ejercicio de derechos, el trabajo no remunerado ocupa
un elemento central. Si bien es un trabajo necesario para el funcionamiento de la sociedad, se
encuentra invisibilizado bajo su asignación a las mujeres como cuestión natural. Este
panorama no excluye a Uruguay, donde independientemente de la situación laboral, las
uruguayas dedican muchas más horas a las tareas de cuidado y el hogar con respecto a sus
pares masculinos(1).
No es difícil inferir cómo este rol pueda afectar el que las mujeres se encuentren en posiciones
de desventaja con respecto a los hombres. En primer lugar por el hecho en sí mismo: debemos
dedicarle más horas de nuestra vida a una tarea que se nos fue asignada por el sexo con el que
nacimos. Esto es menos tiempo que le podemos dedicar a otras tareas tales como trabajar,
militar, estudiar, etc. Luego, por la construcción social y cultural que implica este rol del ser
mujer.
262
Al participar políticamente, las mujeres se enfrentan a lo que se conoce como la triple jornada
(trabajo remunerado, trabajo no remunerado y militancia), lo que supone un límite para
ocupar lugares en los espacios de toma de decisión, ya sea a nivel de partido o de gobierno.
Por ejemplo, en estudios sobre trayectorias políticas se desprende que las mujeres en edad
reproductiva optan muchas veces por disminuir su actividad política para conciliarlas con el
trabajo no remunerado, a diferencia de los hombres que no ven afectadas sus carreras(2).
¿Podemos entonces hablar de que una mujer se encuentra en igualdad de condiciones que un
hombre para participar políticamente cuando tiene muchas menos horas para dedicarle?
¿Podemos asegurar que están dadas las condiciones para que las mujeres participen en pie de
igualdad en la toma de decisiones?
Trasladémonos al plano de las candidaturas para ser parlamentarias: las mujeres que logran
ser candidatas no solo vencieron los obstáculos de la triple jornada y la invisibilidad a la interna
de los partidos, sino que también desafiaron numerosas pautas culturales que establecen que
el ámbito de lo público no es para ellas. Una vez adentro, tienen que hacerle frente a formas
masculinas de hacer política y esforzarse más que sus pares varones en su actuación
legislativa, ya que sienten una constante necesidad de justificar que pueden desempeñarse
como legisladoras al igual que ellos. En el Uruguay de hoy estas mujeres solo representan el
20% del parlamento. Son demasiadas si consideramos que pensarse como política desafía los
modelos actuales de liderazgo y una historia narrada sin heroínas.
Pero supongamos que contamos con igual número de mujeres y varones en el parlamento,
¿alcanza con esto para que las feministas podamos hablar de democracia? Sin lugar a dudas
esto implicaría un avance representativo en términos simbólicos, pero que lo haga en términos
sustantivos es cuestión de debate: la participación de más mujeres en ámbitos de decisión no
significa necesariamente que más personas representen los intereses y demandas de las
mujeres. Sobre este punto basta con recordar todas las parlamentarias que votaron en contra
a la ley de interrupción voluntaria del embarazo.
Esta discusión es honda y llena de aristas, desde el preguntarse si es posible este tipo de
representación hasta si hay algo llamado “los intereses de las mujeres”, cuestionando los
enfoques esencialistas. Lo que es posible afirmar es que la representación simbólica es
importante por lo que significa en términos de mensaje: hay mujeres que hacen política y
tienen el derecho a hacerlo. Esto a su vez construye otros modelos de ser mujer que tiene que
ver con el ejercicio de poder y de ocupar el espacio público.
En este sentido la democracia en Uruguay se encuentra en un debe. Los porcentajes de
mujeres ocupando cargos de decisión son bajos y reflejan las múltiples dificultades que deben
atravesar si desean participar e incidir en la toma de decisiones.
Por otra parte el discutir sobre democracia desde un enfoque feminista no se reduce a las
dificultades para la igualdad de oportunidades. Las feministas buscamos la erradicación del
sistema patriarcal, entendiendo al mismo como un sistema de dominación que nos margina y
oprime. Es para nosotras por lo tanto, una falacia hablar de democracia cuando existen
relaciones de dominación. Esta es la base de la crítica a la teoría clásica sobre democracia,
entendida como una teoría de la democracia liberal: con igualdad de derechos y
oportunidades entre hombres y mujeres, pobres y ricos, heterosexuales y homosexuales(3) la
democracia sería posible.
La crítica a la democracia liberal no proviene solo de las feministas y también las hay
feministas liberales. El análisis marxista sobre la democracia burguesa señala lo mismo: no se
263
puede pensar en democracia cuando existen relaciones de dominación. En el caso de las
relaciones inequitativas de poder entre hombres y mujeres: ¿Cómo podemos las mujeres
ejercer nuestros derechos cuando no contamos con autonomía de ningún tipo? ¿Cómo se
puede hablar de democracia cuando las mujeres aún somos tuteladas? ¿Cuándo las
instituciones del Estado implementan política que responde a una visión patriarcal?
Como mujeres nuestra autonomía se ve soslayada a expensas de situaciones de control y
tutelaje por parte del sistema que opera en distintos niveles y a través de diversas formas.
Pensemos en las situaciones de violencia basada en género a las que estamos expuestas, que
parten de una visión en las que somos propiedad (de nuestra pareja o de un desconocido que
nos aborda por la calle), en las que somos inferiores al otro (frente al profesional de la salud en
consulta y que ejerce violencia obstétrica), por poner algunos ejemplos. De nuestras parejas
escuchamos “así no podes salir” y de nuestros médicos “no estás preparada para la ligadura de
trompas”.
Recordemos las declaraciones que se expresaron en el parlamento a la hora de votar una ley
de interrupción voluntaria del embarazo. Uno de los argumentos más escuchados refería a la
preocupación de legisladores por la baja tasa de nacimientos y el envejecimiento poblacional
de Uruguay. En este marco, legalizar el aborto supondría menos nacimientos y por lo tanto
empeoraría este panorama. Bajo el grito de “se precisan niños para amanecer” nuestros úteros
son objeto de política poblacional.
Somos excluidas de tomar decisiones con respecto a nuestras vidas y nuestros cuerpos, ya sea
porque se alude a que no somos capaces de hacerlo, porque somos vistas como objeto o
porque somos consideradas inferiores a otros. Se hace imposible hablar de democracia cuando
ni siquiera se nos considera a las mujeres como sujetas de derecho.
En otro plano, democracia también es participación en términos colectivos. El contar con
organizaciones sociales que demanden de acuerdo a sus intereses y que luchen por las
transformaciones necesarias es uno de los pilares básicos de la democracia participativa. En
este sentido, el movimiento feminista uruguayo se encuentra desde hace unos años en
dificultades. La creciente institucionalización de organizaciones y feministas supone un riesgo a
la autonomía del movimiento. El intento de reducción del Estado en la gestión de política
pública supuso un involucramiento de organizaciones sociales (entre ellas feministas o de
mujeres) para su gestión. Asimismo, con la asunción del Frente Amplio al gobierno numerosas
feministas ingresaron al Estado.
Esto ha generado un debilitamiento en el accionar del movimiento. En primer lugar por contar
con menos compañeras con acumulado y capacidades al frente del mismo. En segundo, por la
pérdida de autonomía para la reivindicación de demandas. ¿Qué capacidad de demanda hacia
el Estado tiene una organización que implementa políticas públicas? ¿No depende su sustento
de aquel mismo aparato al cual cuestiona? Lo mismo sucede con las feministas en cargos
políticos en el gobierno. Parece difícil marchar exigiendo los cambios y ser responsable a la
vez.
Existen intentos actuales de lucha feminista que parecen fortalecer un movimiento autónomo.
El Primer Encuentro de Feminismos uruguayo autoconvocado en el año 2014 y la posterior
formación de la Coordinadora de Feminismos del Uruguay son reflejo de una pujante
necesidad desde una pluralidad de organizaciones y feministas independientes de buscar un
lugar desde donde hacer política feminista.
264
Volver a ocupar las calles un 8 de marzo, bajo la consigna “Día de Lucha” y movilizarnos
multitudinariamente por el “Ni una Menos” son algunas de las acciones que se han llevado a
cabo y que buscan ocupar el espacio público con banderas autónomas de reivindicación.
Por último, si tratamos el tema de democracia y feminismo no se puede dejar de mencionar la
problemática existente entre el respeto a la multiculturalidad y la defensa de los derechos de
las mujeres. Queda claro que la democracia implica el respeto por la pluralidad de
pensamientos, culturas, religiones y manifestaciones, pero el límite entre esto y la vulneración
del ejercicio de los derechos de las mujeres es un tema en debate. Hay puntos en donde no
puede existir duda: la mutilación genital femenina es una práctica cultural pero que resulta
inconcebible y que debe ser erradicada. Sin embargo existen otras prácticas culturales o
religiosas donde la cuestión de si avasalla los derechos de las mujeres o si su rechazo reside en
una mirada colonizadora entra en tensión.
La utilización de los velos en la religión musulmana es un ejemplo de ello. Son muchas las
feministas que afirman que el velo es un símbolo de opresión de las mujeres y que no deberían
usarlo. Otras cuestionamos estas miradas de tutelaje de las feministas occidentales afirmando
que también puede ser una decisión. En este sentido es necesario recordar las nuevas
estrategias impulsadas por algunos Estado-nación: implementar en nombre de los derechos de
las mujeres o de la comunidad LGBTI políticas xenofóbicas(4). La prohibición del uso del velo
en varios países de Europa (sobre todo Francia) y las propuestas de medidas islamofóbicas
como primera respuesta a la tragedia de Orlando son algunos ejemplos.
No es necesario ir tan lejos: en Uruguay se hicieron múltiples referencias en medios de
comunicación sobre refugiados sirios que golpeaban a sus parejas uruguayas, señalando lo
“barbárico” de su cultura. Resulta increíble pensar que con los índices de violencia basada en
género y más concretamente con los casos de feminicidios que ocurren en Uruguay podamos
atribuir responsabilidades de estas situaciones a una cultura determinada, que de casualidad
pertenece a pueblos con inmigrantes en el país.
Las feministas tenemos aquí uno de los desafíos más importantes de los próximos tiempos: el
no permitir que utilicen nuestras reivindicaciones para justificar las bases de dominación de
unos pueblos sobre otros y de unas personas sobre otras. Recordando que el sistema de
dominación opera en diversos ejes sociales y que si solo cuestionamos uno de ellos, nos
encontramos luchando contra el sistema que afecta a las mujeres blancas, heterosexuales, no
pobres de occidente. Para alcanzar la democracia en tanto poder del pueblo,
indefectiblemente es necesario combatir cualquier grupo que pretende ejercer el poder sobre
otro.
En la transición democrática el sentir común del movimiento feminista y de otros movimientos
sociales se encontraba representado en la lucha antidictatorial. Hoy el panorama no está tan
claro. Si bien algunas identificamos en la figura de un sistema que es capitalista,
heteropatriarcal, racista y xenófobo el enemigo a combatir, otras personas y organizaciones
mantienen el pensamiento fragmentario de las luchas.
El feminismo uruguayo no escapa a este debate, pero ya sea porque no existen las garantías de
igualdad en el marco de una democracia liberal o en el plan de desafiar todo el sistema, todos
los feminismos cuestionan la afirmación de que vivimos en democracia. Tal como plantea
Carole Pateman “para las feministas la democracia no ha existido jamás”(5) y el intento por
hacerlo es lo que nos mantiene en lucha.
265
*Maru Casanova es politóloga, feminista e integrante de las organizaciones Mujer y Salud en
Uruguay (MYSU) y Colectiva Amatista.
(1) Ver Encuestas sobre uso de tiempo del Instituto Nacional de Estadística (INE).
(2) Pérez, Verónica (2011): Entre lo público y lo privado. Género y ambición política en el Cono
Sur. Tesis deMaestría en Ciencia Política. UDELAR.
(3) Utilizo términos dicotómicos para reflejar que no se cuestionan las categorías en sí.
(4) Los términos utilizados para describir estas acciones son “purplewashing” y “pinkwashing”
respectivamente.
(5) Pateman, Carole (1990: 7): Feminismo y democracia. En “Debate feminista”, Vol 1.
La riqueza y el poder. ¿Dónde está la oligarquía?*
Martín Buxedas**
http://www.hemisferioizquierdo.uy/#!La-riqueza-y-el-poder-¿Dónde-está-laoligarquía/nnsaa/5771ce460cf2bcae6e413173
“Oligarquía a la americana”, es el título de un artículo que sintetiza la visión de Paul Krugman,
premio Nobel de Economía, sobre la relación entre quienes concentran la riqueza y el poder
político en los Estados Unidos[1]. ¿Existe una “oligarquía a la uruguaya”?
Los partidos marxistas y los documentos fundacionales del Frente Amplio (FA) de Uruguay no
dejaban lugar a dudas: un pequeño núcleo de familias minuciosamente identificadas,
asociadas a inversores extranjeros, controlaba el Estado. Ese control se ejercía por medio de su
participación directa en los elencos de gobierno, el financiamiento de las campañas electorales
y eficaces influencias desplegadas por las cámaras empresariales. La oligarquía, finalmente, era
la responsable de la crisis económica que, indiscutiblemente, atravesaba el país y de los
problemas sociales del Uruguay[2].
Con el tiempo, la izquierda, incluyendo al Frente Amplio, dejó de mencionar la concentración
de la riqueza y a la oligarquía. Paralelamente, el tema no fue abordado por los investigadores
en ciencias sociales, cada vez más abundantes[3].
El silencio ha sido tan grande que seguramente una o más generaciones de adultos ni siquiera
sintió hablar del tema que unas décadas atrás convocaba a la izquierda. Hasta podría pensarse
que no hay concentración de la riqueza y del poder o, como sostienen algunos estudios, que la
izquierda dejó de lado sus antiguas banderas como parte de una estrategia de ablandamiento
orientada a conseguir el apoyo de un mayor número de ciudadanos y acercarse así al gobierno
por la vía electoral. Y cuánto más una vez que llegó a ese objetivo.
Una excepción a la ausencia de estudios sobre la concentración de la riqueza es la obra de
Bértola, Stolovich y Rodríguez (1989) en la que se identifican los principales grupos
económicos que operaban en el Uruguay hacia 1985[4]. En 2010 un valioso estudio elaborado
por un equipo interdisciplinario de investigadores de la Universidad de la República (UDELAR)
incluye una revisión de los aspectos conceptuales relacionados con la concentración de la
riqueza e identifica los requisitos estadísticos para estudiar la concentración de la riqueza,
pero no aporta información original ni alcanzó el objetivo de promover la discusión del tema
(V. Amarante y otros, 2010)[5].
266
En ausencia de referencias recientes, este artículo se limita a contrastar la situación actual con
la de 1960 en dos aspectos: el eje latifundio-banca y la participación de los inversores
extranjeros en la propiedad de la riqueza.
¿SE ESFUMÓ LA OLIGARQUÍA?
Aunque la concentración de la tierra aumentó, no hay vínculos entre los propietarios de la
tierra y la banca, y una parte importante de la gran propiedad agraria cambió de dueño.
No hay banqueros privados nacionales. En 1960 operaban nueve bancos extranjeros y 68
nacionales; dentro de estos últimos, la mayor parte de los privados estaban controlados por
familias con grandes propiedades agropecuarias. Las sucesivas crisis terminaron con todos los
bancos privados nacionales, no sin dejar tras de sí un enorme costo al erario público y muy
pocos propietarios empobrecidos.
Actualmente la actividad bancaria se ha concentrado en dos instituciones estatales y nueve
extranjeras. La participación de los propietarios nacionales es baja o simplemente nula en los
otros segmentos del sector financiero, como los seguros, las casas financieras y las
instituciones que operan en el exterior.
Nuevos propietarios y más concentración. En ausencia de información sobre la participación
de los mayores propietarios en la propiedad de la tierra es necesario recurrir a estimaciones
basadas en otras fuentes.
El indicador más importante del proceso de concentración de la tierra es la compra por parte
de inversores extranjeros de unos dos millones de hectáreas: un 12% de la superficie total. Se
ha estimado que 27 inversores extranjeros concentraban 1,6 millones de hectáreas según un
estudio divulgado en 2014[6], unas décadas atrás Trías se alarmaba porque había identificado
que los capitales extranjeros explotaban 90.000 hectáreas[7].
Los inversores extranjeros se interesaron por negocios agropecuarios a gran escala, por lo que
su primera opción de compra fueron los establecimientos de mayor dimensión, que hasta ese
momento eran propiedad de terratenientes nacionales[8].
Para analizar la concentración lo más frecuente es el uso de los censos agropecuarios, una
fuente que, como se mencionó, no releva la propiedad. Según los censos agropecuarios el
número de explotaciones agropecuarias censadas se ha mantenido estable entre 1961 y 2011.
En ese lapso unos 1.200 establecimientos de más de 2.500 hectáreas explotaron el 33% de la
superficie[9].
Las inversiones extranjeras se concentraron en las dos ramas cuyo dinamismo impulsaron: la
forestal y la agrícola. En cuanto a la actividad forestal, diez empresas forestales extranjeras
disponen de un millón de hectáreas, y dos de ellas controlan la mitad de esa superficie.
Los inversores extranjeros también fueron los protagonistas del extraordinario crecimiento del
cultivo de soja y otros granos. Al mismo tiempo que la actividad se concentraba, la mayor
parte de los plantadores nacionales se retiraron de la actividad. La evidencia de ese proceso
está bien documentada. Las chacras de más de mil hectáreas cultivadas con soja y otros granos
disponían del 20% de la superficie en 2001 y del 66% en 2015. En 2012 cada una de las 15
mayores empresas agrícolas explotaban 25.000 hectáreas en promedio, la mayor parte en
267
régimen de arrendamiento. Simultáneamente, el número de productores se redujo de 7.500
en 2005 a 2.900 en 2015[10].
La tendencia a la concentración de la tierra observada a partir del año 2000 no fue
compensada por las importantes medidas que adoptaron los gobiernos del Frente Amplio,
entre ellas la distribución de tierras. Entre 2005 y 2014 se incorporaron al régimen de
colonización 100.000 hectáreas pero la empresa Union Agricole Group (UAG), un fondo
privado de inversiones, controla en 2016, apenas seis años después de su creación, 181.000
hectáreas de las cuales 130.000 son de su propiedad.
Un indicio más de los cambios en la propiedad de la tierra es la reducción del número de
explotaciones de menor tamaño comenzada en la década del sesenta. Las 86.000
explotaciones con actividad agropecuaria censadas en 1961 se habían reducido a 57.000 en
2000 y a 45.000 en 2011.
Otro aspecto a tener en cuenta es la pérdida de importancia del PBI agropecuario en las
últimas décadas; es un indicador de la menor participación de las rentas de la tierra y los
beneficios sectoriales en el total de ingresos. La participación del sector agropecuario en el PBI
descendió de 13% en el trienio 1956-1958 a 8,6% en 2011-2013, al final del boom
agropecuario[11].
EL AUGE DE INVERSIÓN EXTRANJERA IMPULSA LA CONCENTRACIÓN DE LA RIQUEZA[12]
A partir de mediados de la década anterior un creciente flujo de inversión externa directa (IED)
se aplicó a controlar empresas nacionales existentes o a ampliar la capacidad de producción.
Por esa vía adquirieron mayor protagonismo los inversores extranjeros, un agente con
características propias y vínculos internacionales distintos a los empresarios nacionales.
El nuevo siglo trajo novedades importantes en materia de inversión extranjera. Antes del año
2000 la inversión externa dominante era la destinada a obtener ganancias financieras por
medio de instrumentos como la compra de valores públicos o las colocaciones en bancos de
los que el inversor podía deshacerse rápidamente, tal como lo hicieron en 1982 y 2002,
contribuyendo de ese modo a generar, o por lo menos a agudizar, las dos mayores crisis de la
economía en cincuenta años. En el nuevo siglo aumentó la inversión externa destinada a
controlar empresas que producen bienes o servicios en Uruguay.
Entre 2005 y 2013 la inversión externa directa (IED) se multiplicó por ocho, alcanzando al 30%
de la inversión privada total, y fue la responsable de gran parte del aumento de la inversión en
la economía uruguaya.
La extraordinaria afluencia de fondos del exterior condujo a que “el Uruguay presente una de
las relaciones entre la inversión externa directa acumulada y el PBI más altas de la región. En el
2014 el stock de IED en Uruguay se estimaba en 22.000 millones de dólares, equivalente al
40% del PIB, proporción superior a la de Argentina (18%), Brasil (34%), Colombia (35%) y Perú
(38%)”.
Un rasgo importante de la IED es que el 40% de las inversiones se destinaron a controlar
empresas propiedad de uruguayos (tierras, fábricas, supermercados y otros)[13]. Corresponde
mencionar, de paso, que la adquisición de empresas existentes no debería ser considerada una
inversión por cuanto no aumenta o mantiene la capacidad de producción del país que las
recibe.
268
La inversión externa se orientó a sectores dinámicos de la economía. En 2013 participaban con
el 63% de las exportaciones totales y, dentro de ellas, con más del 75% de las de celulosa y
papel, arroz, vehículos y autopartes y cebada malteada, y entre 50% y 75% de soja, carne
bovina, madera, trigo, cuero y productos farmacéuticos.
En varias cadenas de base agropecuaria los inversores extranjeros integran negocios en la fase
comercial e industrial más concentrada, y aun en la agropecuaria, como se observa en las de
base forestal y granos.
Un indicador de la concentración de la propiedad de la riqueza en Uruguay es la observada en
los ingresos originados en ella. Se ha estimado que la parte de la renta captada por el 1% de la
población de mayores ingresos en Uruguay (14%) es mayor que en otros 17 países con
información, y menor que en cuatro: Estados Unidos, Colombia, Ecuador y Sudáfrica[14].
EL ESTADO
Las principales empresas del sector financiero y no financiero se mantuvieron bajo el dominio
estatal pero su importancia en la economía no varió sustancialmente en las últimas décadas.
El repliegue del Estado uruguayo de las actividades productivas de las tres décadas anteriores
a 2005 se concretó por medio de cierres de empresas (pesca, frigorífico, transporte urbano),
reducción de actividad (AFE) y tercerizaciones (puerto y otros) y la pérdida de mercado cuando
compiten con el sector privado. La reducción de la actividad de las empresas públicas y una
política ocupacional más ajustada explican la disminución de sus empleados de 64.400 en 1973
a 24.200 en 2005.
A partir de 2005 el gobierno adoptó una política de fortalecimiento de las empresas estatales
del sector financiero y de los otros sectores, sin expandir significativamente los mercados en
que ellas operan y muy lejos de las nacionalizaciones prometidas por el FA en 1971. En 2015
las empresas estatales representan algo menos del 2% de la ocupación total de mano de obra
y probablemente algo menos del 10% del valor agregado neto de la economía.
***
En definitiva, el corazón económico de la oligarquía, tal como se lo describía hace cincuenta
años, no está presente en el Uruguay actual. Paralelamente se procesó otro cambio
trascendente: la concentración de la riqueza impulsada por los inversores extranjeros,
protagonistas importantes del boom de la economía en la década que culminó en 2013.
La interrogante pendiente de respuesta es: ¿será que “los molinos ya no están pero el viento
sigue soplando”? Por ahora al mutis en el partido de gobierno se agrega el de los académicos,
quienes no han considerado de interés generar conocimientos sobre las características
actuales de la distribución de la riqueza y su relación con el poder.
* Fue Profesor de Economía Agraria y Director de la OPYPA (2005-2010) del Ministerio de
Ganadería, Agricultura y Pesca. Funcionario de FAO y OIT y consultor en temas agrarios de
varias instituciones.
269
** Publicado originalmente en la Revista Digital Vadenuevo nº 93. Reproducido con
autorización del autor.
Referencias
[1] Joseph Stiglitz, premio Nobel de Economía, sostiene que el principal instrumento de las
empresas y personas ricas en Estados Unidos para influir en el poder político es el
financiamiento de las cada vez más costosas campañas electorales.
[2] La principal referencia sobre el tema es la obra de Vivian Trías, Reforma Agraria en el
Uruguay, publicada originalmente en 1961 y reimpresa dentro de la compilación, V. Trías (s.f.),
La crisis agraria y el socialismo en Uruguay, Cámara de Representantes, Ed. Banda Oriental.
[3] Siguiendo el diagnóstico de la izquierda de la década del sesenta del siglo XX, un
documento de 1971 del Frente Amplio señala: “La profunda crisis estructural que el país
padece desde hace décadas, su dependencia del extranjero y el predominio de una oligarquía
en directa connivencia con el imperialismo, han ido creando, por un lado, hondas tensiones
sociales y por otro, un clima de preocupación colectiva sobre el destino mismo de la
nacionalidad oriental”.
[4] Luis Stolovich, Juan Manuel Rodríguez y Luis Bértola (1987): El poder económico en el
Uruguay actual, CUI, Montevideo.
[5] V. Amarante y otros (2010) La concentración de la riqueza en Uruguay. Elementos para el
debate. Universidad de la República.
[6] Oyhantçabal, G, Narbondo, I y Areosa, P. (2014): ¿Acaparamiento de tierras en Uruguay?
En: 2º Congreso de Ciencias Sociales Agrarias. Salto, Uruguay, agosto de 2014.
[7] Los censos agropecuarios no recogen información sobre la propiedad de la tierra y por lo
tanto no permiten conocer el conjunto de explotaciones pertenecientes a un mismo grupo
familiar o empresa. Las grandes empresas que se desarrollaron a partir de 2000 son
propietarias de varios establecimiento, tal es el caso del fondo de inversiones UAG, que
controla 105 establecimientos distribuidos en 17 departamentos del país. Para conocer la
concentración de la propiedad sería necesario reunir el conjunto de las empresas controladas
por un mismo grupo familiar o empresa, tal como lo hizo Trías para 250 familias.
[8] Estimación propia basada en información sobre el valor de las inversiones extranjeras en
tierras del Banco Central del Uruguay, las transacciones de compraventa de tierras (DIEAMGAP) y otras fuentes.
[9] Las empresas más grandes tienen una participación más alta en la mayor parte de los
sectores que la sugerida por esa información. El caso del sector bancario ya fue mencionado,
en el industrial, las 50 empresas mayores eran responsables del 45% del PBI. M. Buxedas
(1989): Concentración global en la industria: nuevas evidencias y significados, en M. Buxedas y
R. Jacob, Industria uruguaya: dos perspectivas, FCU, Montevideo.
[10] DIEA-MGAP, Anuario Estadístico Agropecuario, varios números.
[11] Aunque la importancia del sector agropecuario disminuyó durante el boom agropecuario
2004 – 2013 el precio de la hectárea de tierra se multiplicó por ocho y el valor comercial del
270
stock de tierras alcanzó a unos 58.000 millones de dólares (unas 19 veces mayor que la
inversión en las dos plantas de celulosa). También el valor de la renta de la tierra (el
arrendamiento o la renta implícita en el retorno de los propietarios-productores) aumentó.
Según una estimación, la renta de la tierra en 2000 alcanzó a 284 millones de dólares y a 1.831
millones en 2013, año en que equivalía al 38% del PBI agropecuario. Gabriel Oyhantçabal y
Martín Sanguinetti (2014), El agro en Uruguay: transformaciones recientes, impactos y
distribución.
[12] La fuente de información de este apartado es Uruguay XXI (2014): Comportamiento
Exportador de las Empresas Extranjeras en Uruguay, y Uruguay XXI (2015): Inversión externa
directa en Uruguay.
[13] En 2014, entre las compras de inversores extranjeros a firmas nacionales se destacan las
siguientes; Pagnifique por parte de un grupo chileno; Matadero Carrasco, adquirida por una
compañía brasilera; Fármaco Uruguay S.A. y Laboratorio Santa Elena por firmas peruana y
francesa respectivamente; y Los Nietitos por una firma chilena.
[14] Burdín, G., De Rosa, M., Vigorito, A. (2015) “Sectores de altos ingresos en Uruguay:
participación relativa y patrones de movilidad en el período 2009-2012”. Serie Documentos de
Trabajo, DT 03/2015. Instituto de Economía, Facultad de Ciencias Económicas y
Administración, Universidad de la República, Uruguay. Citado en Buxedas, M. ¿Cuán desiguales
son los ingresos en Uruguay?, vadenuevo nº 92.
Democracia y justicia social: tenaces desafíos para la izquierda
Fernando Lizárraga*
http://www.hemisferioizquierdo.uy/#!Democracia-y-justicia-social-tenaces-desafíos-para-laizquierda/nnsaa/5772fdc10cf249bc245369a4
Es bien sabido que Abraham Lincoln, presidente de Estados Unidos durante la Guerra Civil
entre el Norte y el Sur (1861-1865), fue quien con más vehemencia apuntaló los pilares
constitutivos del proyecto de la burguesía norteamericana. En su Discurso de Gettysburg, en
1863, Lincoln sostuvo que el ideal de los fundadores de la república se basaba en la promoción
de la libertad, en la defensa de la vida, y en la creencia de que todas las personas son creadas
iguales. Pero además, en este brevísimo y extraordinario mensaje, definió a la democracia en
una frase que ha quedado para la historia: “gobierno del pueblo, por el pueblo y para el
pueblo”. Quizás sea menos conocido el hecho de que Karl Marx, junto a otros líderes de la
Primera Internacional, escribió y firmó una enfática declaración de apoyo a Lincoln luego de
que éste proclamara la emancipación de los esclavos en todo el territorio de los Estados
Unidos, a principios de aquel mismo año, y que utilizó parte de la fórmula democrática para
describir al gobierno de los comuneros de París: “gobierno del pueblo y para el pueblo”,
sintetizó el creador del materialismo histórico en un pasaje de La Guerra Civil en Francia.
El apoyo de Marx al presidente republicano de Estados Unidos era una demostración de su
certeza de que no sólo la emancipación de los esclavos sino también la subsecuente liberación
de las fuerzas productivas del Norte industrial redundarían en favor de los intereses del
proletariado y, en consecuencia, allanarían la senda hacia el socialismo. De hecho, poco
después de terminada la guerra civil, hubo un extraordinario crecimiento del movimiento
obrero en Estados Unidos, permitido, entre otras cosas, por las propias instituciones de la
república liberal norteamericana. Como ha recordado acertadamente Robin Blackburn, Lincoln
consideraba que los trabajadores eran más importantes que el capital, y en el contexto
271
favorable de la posguerra –que, cabe decirlo, duró poco– las organizaciones sindicales y
políticas norteamericanas fueron pioneras en romper las barreras de color y de género; esto
es, de ampliar las bases de la democracia.
A esta altura de los acontecimientos, ya ubicados bien adentro del siglo XXI, parece una
trivialidad tener que sostener que el socialismo presente y futuro ha(brá) de ser democrático,
o no habrá de ser en absoluto. Del mismo modo, cabe afirmar, como cuestión de principio, que
el socialismo (presente) debe impugnar al capitalismo como injusto y debe darse, por lo menos
como boceto, algún diseño institucional para después de la revolución –o comoquiera que sea
el proceso o momento del cambio hacia el post-capitalismo. Y este diseño no puede ser una
mera ingeniería institucional, sino que debe fundarse en valores claramente identificados y
especificados. La democracia y la justicia social no pueden estar ausentes en este boceto; es
decir: es indispensable pensar al socialismo del porvenir como una sociedad que realiza, entre
otros, valores tales como la libertad, alguna forma de igualdad, la auto-realización, la
fraternidad, etcétera. Como dijera magníficamente Ernesto Che Guevara: “El socialismo
económico sin la moral comunista no me interesa. […] Si el comunismo descuida los hechos de
conciencia puede ser un método de repartición, pero deja de ser una moral revolucionaria”.
Esto significa que no alcanza con las instituciones correctas si las actitudes de las personas no
son congruentes con tales instituciones.
Existe en nuestros días un dato difícilmente discutible. Las repúblicas democráticas burguesas
han demostrado ser mucho más persistentes de lo que se imaginó alguna vez, y han cumplido
cabalmente su rol en asegurar la hegemonía de la clase capitalista. En este marco, con esta
constatación en mente, es preciso pensar y repensar el lugar de la democracia, la justicia, la
libertad, entre otros valores, al interior de la tradición socialista y de las organizaciones
anticapitalistas. Hay un año que, para esta reflexión, resulta muy significativo: 1867. Todos
sabemos que fue entonces cuando se publicó el primer volumen de El Capital. Pero además
fue el año en que, también en Inglaterra, se sancionó la Ley de Reforma que otorgaba el
sufragio universal masculino (el cual se extendería a las mujeres recién en 1928). Así, mientras
Marx revelaba la anatomía y el metabolismo del capital, la clase obrera inglesa conseguía una
conquista particularmente importante, luego de años de luchas a través del movimiento
cartista, que Engels y Marx celebraron como primer movimiento auténticamente clasista en
tiempos de la gran industria y como antecedente del partido de la clase obrera. “El sufragio
universal en Inglaterra será una medida por lejos mucho más socialista que cualquier otra cosa
que se haya denominado así en el continente” y “su resultado inevitable, aquí, es la
supremacía política de la clase trabajadora”, escribía Marx en una nota para el New York Daily
Tribune. Y lo hacía en 1852, mientras en Francia se experimentaban las derrotas de la vía
insurreccional iniciada en 1848. Al mismo tiempo, un contemporáneo de Marx, el liberal –y
finalmente devenido socialista– John Stuart Mill, elogiaba al gobierno representativo como
uno de los hallazgos más notables de la historia.
El entusiasmo de Marx y Engels con el cartismo y su lucha por el sufragio universal no tardó en
verse ensombrecido, cuando ya en las primeras elecciones posteriores a su implementación,
pudo observarse que un gran número de trabajadores habían votado al partido conservador y
no a los candidatos de la Liga Reformista. Un corolario inmediato de este fenómeno fue que
los fundadores del materialismo histórico –siempre dispuestos a la auto-crítica (una verdadera
rareza en nuestros días) – advirtieron la necesidad de un partido de la clase trabajadora,
totalmente independiente de los partidos burgueses. Es decir, Marx y Engels vieron
tempranamente que las repúblicas democráticas y las monarquías parlamentarias –esto es, los
sistemas representativos– brindaban posibilidades para la auto-organización de la clase
trabajadora al mismo tiempo que aseguraban firmemente los intereses de las clases
dominantes. Por eso, ni Marx ni Engels abandonaron –como quisieron hacernos creer los jefes
272
de la Segunda Internacional– la opción de la vía insurreccional. No hay inconsistencia entre la
adhesión de Marx y Engels al sufragio universal en Inglaterra y su elogio de la lucha
insurreccional de la comuna, en la siempre convulsionada Francia.
El capitalismo, como dice Gerald Cohen, “no es un agente” capaz de adaptarse casi
automáticamente ante aquello que parece o puede efectivamente amenazar su existencia. Al
interior del sistema sí hay agentes –clases–, que actúan más o menos estratégicamente. Así, la
clase política inglesa vio sin demora que debía canalizar la oposición creciente de los cartistas y
ceder ante algunas de sus demandas. El sufragio universal significó una ampliación de la
competencia electoral, pero en los términos y las condiciones fijadas por la propia burguesía y
sus dispositivos estatales. Y precisamente porque nunca hubo, salvo contadísimas
excepciones, un fair play en la competencia electoral, las cartas siempre estuvieron marcadas a
favor de los partidos del orden. “En el Estado” –escribía el joven Marx en Sobre la Cuestión
Judía– “el hombre es considerado como un ser genérico [un ciudadano]; es el miembro
imaginario de una imaginaria soberanía”. Esta ciudadanía meramente formal, esta pertenencia
al cielo político –a una “imaginaria soberanía”, a una comunidad ficticia–, no anulaba sino que
presuponía (y aún presupone) las enormes desigualdades existentes en la sociedad civil. La
condición de mayoría de la clase trabajadora no alcanzaba para asegurarle el poder político.
Tampoco, cabe decirlo, se verificaba una relación lineal entre el crecimiento cuantitativo de la
clase y el crecimiento de su conciencia de clase, lo cual llevó a que muchos abrazaran el
desafortunado concepto de falsa conciencia, como si los trabajadores fueran meras víctimas
de engaños sistemáticos orquestados por los astutos burgueses.
La democracia burguesa, con todo su formalismo, supone competencia electoral y, en este
campo, la cancha tiende a estar siempre inclinada. O para decirlo en un lenguaje un poco más
prolijo: en ausencia de mínimas garantías de igualdad o equidad social, se obturan
irremediablemente las plenas libertades políticas. En este punto podemos observar la
inextricable relación entre la justicia social y la democracia, ya que no puede haber una
democracia mínimamente aceptable en presencia de enormes desigualdades sociales. Deben
darse varias condiciones para una democracia pueda ser reputada como genuina, pero la
igualdad económico-social es una condición necesaria. Una buena forma de hacerse una idea
sobre esto es recordar aquella famosa frase de Jean-Jacques Rousseau –un burgués partidario
de la democracia directa–, quien en El Contrato Social sostenía que, la igualdad no debía
entenderse como igual poder e igual riqueza para todos, pero sí, por lo menos, como la
situación en la que el poder se ejerce según las leyes y que, en cuanto a la riqueza, “ningún
ciudadano [es] lo bastante opulento para poder comprar a otro, y ninguno lo bastante pobre
para ser constreñido a venderse”. He aquí una clásica fórmula republicana que entiende a la
libertad como no dominación; y para que no haya dominación –en tanto poder arbitrario de
unos sobre otros– se precisan leyes y, fundamentalmente, que las desigualdades económicas
no obliguen a nadie a venderse. Una vez más: lo que Rousseau tenía en mente es algo que otro
pensador burgués, John Rawls, ha denominado “justa igualdad de las libertades políticas”.
Para empezar a hablar sin prejuicios sobre este asunto, hay que tener presentes al menos dos
consideraciones que Marx hiciera acerca de la democracia y la república burguesa. En primer
lugar, que el derecho burgués, especialmente en lo que concierne a la distribución del ingreso
y los bienes de consumo, no ha de superarse sino hasta bien entrado el comunismo; esto es,
hasta que existan condiciones subjetivas y objetivas que permitan no sólo la superación del
derecho burgués sino la extinción del Estado como cuerpo sobreimpuesto a la sociedad civil.
En segundo lugar, que para Marx la existencia del Estado político y la ciudadanía –con toda su
formalidad, su condición imaginaria, etcétera– ya suponía un importante avance histórico que,
a su vez, habría de ser trascendido. Decía Marx en Sobre la Cuestión Judía: “No cabe duda de
que la emancipación política representa un gran progreso, y aunque no sea la forma última de
273
la emancipación humana en general, sí es la última de la emancipación humana dentro del
orden humano actual”. Los derechos conquistados por la burguesía y el pueblo durante las
revoluciones contra el orden feudal, si bien terminaban reducidos a la futilidad en la
legislación, mantenían –como los ideales de igualdad y libertad– un gran potencial disruptivo y
emancipador.
Volvamos por un momento en el pensamiento de John Rawls, el filósofo igualitarista-liberal
que ha restituido la discusión sobre la justicia social en la agenda contemporánea. No vamos a
exponer aquí los pormenores de su teoría sobre la equidad. Sólo diremos que incluso para un
pensador tan profundamente liberal como él, las desigualdades del mundo contemporáneo
son del tal gravedad que afectan de manera fatal a las libertades políticas. En su obra más
famosa, Teoría de la Justicia, este profesor de Harvard sostiene que para que existan justas
libertades políticas es preciso que los ciudadanos alcancen efectivamente ciertas condiciones
materiales mínimas. Aunque no logra distanciarse totalmente de la muy burguesa escisión
entre el cielo político igualitario y el mundo terrenal no-igualitario, Rawls advierte que por
debajo de cierto umbral es imposible hablar seriamente de ciudadanía. Por eso, afirma que
“históricamente, uno de los defectos principales del gobierno constitucional ha sido que no ha
sabido proteger el justo valor de la libertad política” y que “las diferencias en la distribución de
propiedad y riqueza que exceden lo que es compatible con la igualdad política han sido
generalmente toleradas por el sistema legal”. Peor aún, con el tiempo, la ecuación inicial se
invierte y, de este modo, quienes detentan posiciones de mayor poder político adquieren
también mayor poder económico. En consecuencia, añade Rawls, “las desigualdades en el
sistema socioeconómico pueden minar cualquier igualdad política que hubiese existido en
condiciones históricas más favorables”.
En resumidas cuentas, concluye Rawls, cuando no existe financiamiento público de las
organizaciones políticas, los partidos dominantes salen a recaudar fondos de los sectores
económicos más aventajados “y, cuando esto ocurre, los miembros menos favorecidos de la
sociedad, que no pueden ejercer su justo ámbito de influencias a causa de su falta de medios,
caen en la apatía y el resentimiento”. Lo notable de Rawls y otros igualitaristas-liberales, en
comparación con el común de los liberales y conservadores que abundan en nuestras
latitudes, es que no se hacen los distraídos frente a la íntima relación que existe entre las
condiciones materiales y la ciudadanía. Por eso mismo, en su libro Liberalismo Político, Rawls
sostiene que una plena ciudadanía y un consenso constitucional estable requieren, como
mínimo, los siguientes elementos: el financiamiento público de las elecciones, que asegure
disponibilidad de información en materia de políticas públicas; una cierta equitativa igualdad
de oportunidades, especialmente en educación y capacitación; una distribución digna de la
riqueza para que todos los ciudadanos tengan asegurados los medios necesarios para
aprovechar inteligente y efectivamente sus libertades básicas; que la sociedad sea empleador
de último recurso a través del gobierno local o central, u otras políticas sociales y económicas;
y cuidado básico de la salud asegurado para todos.
Los pensadores igualitaristas-liberales como Rawls son herederos del ala radical de la
burguesía que encabezó las revoluciones modernas. Basta pensar solamente en Thomas Paine,
uno de los promotores de la revolución norteamericana, quien ya en 1791 proponía una
especie de ingreso básico universal para asegurar la plena ciudadanía. O en el mismísimo
Robespierre quien, pese a sus idas y vueltas retóricas, no vacilaba en sostener la necesidad de
que el derecho a la existencia digna estuviera públicamente garantizado. Como señala Antoni
Domènech, para los jacobinos “la libertad política o republicana era eso, y nada menos que
eso: no tener que pedir cotidianamente permiso a nadie para poder subsistir”. Los líderes y
pensadores burgueses más honestos han admitido que no puede haber ciudadanía –entendida
274
no sólo como ejercicio electoral sino como autonomía para conducirse en la vida cotidiana– en
presencia de profundas desigualdades sociales.
Va de suyo que, mientras perdure el capitalismo, la igualdad de condiciones será una simple
quimera. Es casi una obviedad afirmar, en una revista como Hemisferio Izquierdo, que la
relación de explotación capitalista lesiona irremediablemente cualquier intento de igualar
totalmente las condiciones de vida. Mientras haya capitalismo, no podrán realizarse en
plenitud los ideales revolucionarios de libertad, igualdad y fraternidad. Escribe Alex Callinicos
en su ensayo “Igualdad y capitalismo”: “la aspiración a la igualdad fue uno de los ideales
constitutivos de la modernidad capitalista desde el momento en que triunfaron las grandes
revoluciones burguesas”, desafiando las jerarquías de la sociedad anterior y desencadenando,
de este modo, “una dinámica que continúa hasta el presente, conforme nuevos grupos –
trabajadores, esclavos, mujeres, súbditos coloniales, negros, lesbianas y gays, entre muchos
otros– han reafirmado sus demandas de igualdad. Sin embargo, aunque el capitalismo es el
suelo sobre el que el ideal de la igualdad cobró forma por primera vez, este ideal solamente
puede realizarse más allá de sus fronteras”.
Con todo, la certeza de que los grandes ideales modernos sólo pueden concretarse más allá
del capitalismo, no implica sentarse a esperar a que el sistema caiga como fruta madura al
influjo de las inexorables leyes de la historia. La libertad, la igualdad y la fraternidad deben ser,
a un mismo tiempo, metas revolucionarias, herramientas de lucha, y rasgos constitutivos de
las propias organizaciones socialistas (ya sean partidos, movimientos, sindicatos, etc.). Gerald
Cohen, un marxista analítico que devino igualitario radical al calor de las polémicas
contemporáneas sobre la justicia social y la igualdad, ha sostenido –con acierto a nuestro
juicio– que buena parte de la tradición socialista más ortodoxa se quedó conforme con sus
formidables triunfos explicativos y confió en que, tarde o temprano, por un camino u otro, el
capitalismo colapsaría y sería reemplazado por un mundo social –el comunismo– que
necesariamente sería superior. Esta ortodoxia tiene por lo menos dos problemas: por un lado,
la tesis de inevitabilidad del socialismo ya no goza de buena salud y, por otro, omite
argumentar sobre la deseabilidad del comunismo. ¿En qué sentido lo que venga después del
capitalismo habrá de ser mejor? ¿Por qué debería ser mejor? ¿Sólo porque viene después? Es
posible, por caso, imaginar una sociedad sin propiedad privada de los medios de producción
pero gobernada por una élite burocrática que rige los destinos de todos y cada uno con mano
de hierro; o un sistema que establece una tiranía sobre las necesidades y sobre las opciones
personales; o un esquema de planificación centralizada sin control por parte de los
productores directos, etc. También es posible imaginar la barbarie.
El punto es que, sin emancipación humana, tal como la entendía Marx, no puede haber
socialismo. Cuando el autor de El Capital elogiaba a Lincoln, pensaba concretamente que la
senda abierta por el presidente norteamericano y la victoria de la Unión inauguraba “una
nueva era para la emancipación del trabajo”. Como señala Blackburn, “para Marx, el
trabajador asalariado sólo era libre parcialmente ya que debía vender su fuerza de trabajo a
otro para poder sobrevivir él y su familia”, pero “dado que no era un esclavo, el trabajador
libre podía organizarse y agitar, por ejemplo, por una jornada limitada de trabajo y una
educación libre”. Así, apunta Blackburn, bajo el liderazgo de Joseph Weydemeyer –amigo de
Marx que luchó durante la Guerra de Secesión en las filas del Norte– un grupo de trabajadores
fundó la American Labor Federation, una organización obrera “abierta a todos, ‘sin importar la
ocupación, el idioma, el color o el sexo’”. Estas organizaciones obreras fueron, en los hechos y
no sólo de palabra, fieles a la concepción marxiana según la cual, como ha señalado el filósofo
hispano-mexicano Adolfo Sánchez Vázquez, la “emancipación humana” implica re-unir lo
particular con lo universal; equivale a la verdadera democracia”.
275
Al respecto, Sánchez Vázquez enfatiza que en sus escritos juveniles Marx consideraba a las
libertades burguesas como meras formalidades, pero más adelante, con la irrupción del
proletariado en la escena política, pudo darse cuenta de que tales libertades “–por su origen y
naturaleza– responden también […] a los intereses reales del pueblo”, más allá de la obvias
limitaciones inherentes al Estado burgués. Por eso, con esta mirada juvenil “un tanto
ahistórica”, Marx se negaba a sí mismo “la posibilidad de advertir en sus propios derechos y
libertades los valores democráticos (en cuanto que tienen cierto contenido real, popular)
arrancados a la burguesía”. Por ello, años más tarde, en sus escritos sobre la Comuna de París
y sobre el cartismo –como ya hemos visto– habría de recuperar la noción de representatividad
a través del sufragio universal, pero ahora enriquecida por elementos tales como la
responsabilidad y revocabilidad, sobre la base de un mundo material donde ha sido abolida la
propiedad privada.
En suma: el socialismo contemporáneo no puede seguir pensándose como dueño de todas las
verdades; ni permanecer ajeno a las discusiones teóricas de los pensadores igualitaristas,
liberales, republicanos, comunitaristas, entre otros; ni quedar aislado de los desarrollos
institucionales de las repúblicas democráticas burguesas. Como ha dicho con singular agudeza
Ariel Petruccelli en su artículo “Dilemas y desafíos del socialismo en nuestro tiempo”: “no
parece descabellado prever que en nuestros países y en los países capitalistas centrales la
democracia ha llegado para quedarse, y que las izquierdas deberán aprender a combatir
dentro y contra ellas. […] La auténtica democracia sigue siendo una aspiración, lo cual –
insistimos– no debería impedirnos ver los méritos de las democracias liberales. […]. Así como
la monarquía fue compatible con distintos modos de producción (hubo monarquías esclavistas,
feudales y capitalistas), bien podría ser que la democracia liberal –garantías individuales,
libertad de prensa, representación popular, multipartidismo– sea compatible también con el
socialismo, y no meramente la encarnación superestructural del mercado o la frutilla del
postre capitalista”. Lejos de ser una mirada desalentadora, la afirmación de que hay que luchar
dentro y contra las democracias burguesas, implica a la vez una aguda indicación para la
agenda teórica –¡hay que estar atentos y polemizar con lo mejor del pensamiento burgués!– y
para la estrategia política. Marx no fue menos marxista por celebrar el triunfo y lamentar la
muerte de un presidente tan profundamente burgués como Abraham Lincoln.
* Investigador del Conicet y profesor de Teoría Política en la Universidad Nacional del
Comahue, Argentina. Autor de El Marxismo y la justicia social: la idea de igualdad en Ernesto
Che Guevara (2011) y Marxistas y liberales: la justicia, la igualdad y la fraternidad en la teoría
política contemporánea (2016).
El culto a Evo llega a sus padres
http://internacional.elpais.com/internacional/2016/07/14/america/1468450971_178867.html
Una estatua en honor a la familia del presidente de Bolivia se une a los muchos homenajes
oficiales que recibe en todo el país
El culto a la personalidad de Evo Morales alcanzó a los padres del presidente boliviano,
sencillos campesinos que son recordados con una estatua erigida hace poco en la ciudad de
Punata, en los valles centrales del país. La escultura de Dionisio y María, progenitores de
Morales, se encuentra en un edificio municipal de cuatro millones de dólares que se llama,
como decenas de otras infraestructuras públicas, “Evo Morales”.
Fueron pagados por el programa Evo Cumple, que es ejecutado por los alcaldes, pero que
financia el gobierno nacional. En varias oportunidades este programa, que comenzó con
276
fondos donados por Venezuela, ha sido acusado de tener como principal objetivo el
enaltecimiento de la imagen del presidente.
El culto a la personalidad de Morales, el primer mandatario indígena y el primer gobernante de
Bolivia durante más de 10 años continuos, ha crecido paulatinamente desde su llegada al
poder hasta considerarse normal. Un hecho anterior a este de la estatua fue el del Himno Evo
Morales, que compusieron las Fuerzas Armadas en honor de su comandante en jefe, que
incluye un verso que, dirigiéndose a él, le dice: “Tú tienes la luz”.
Además existe un pequeño pueblo que se llama Puerto Evo y en 2013 hubo un serio conflicto
en Oruro, una ciudad de medio millón de habitantes, entre los partidarios y los contrarios a
que el aeropuerto fuera bautizado con el nombre del presidente.
La escultura de Dionisio y María, progenitores de Morales, se encuentra en un edificio
municipal
El Gobierno señala permanentemente que estos homenajes no son solicitados por Morales,
sino que son gestos de cariño de la población y los cargos inferiores de la burocracia estatal. Al
mismo tiempo, no desarrolla ninguna política para aplacar los deseos de los partidarios de
Morales de congraciarse con él. Al contrario, en este momento el Gobierno está construyendo
un museo de casi 4.000 metros cuadrados y un coste de seis millones de dólares en Orinoca, el
pueblo de 638 habitantes en el que Dionisio Morales, pastor de llamas, y María Ayma,
agricultora, se enamoraron y concibieron a Evo. Se llamará Museo de la Revolución
Democrática y Cultural y estará dedicado a la “resistencia indígena”, una historia de vejaciones
y luchas que concluye con la llegada de este niño al poder, como ocurre en la película
Insurgentesdel realizador Jorge Sanjinés, la que hace tres años fue filmada y estrenada con
apoyo oficial.
Insurgentes es el más monumental de los varios filmes hechos en homenaje a Morales, que
también cuenta con biografías laudatorias y con títulos honoris causade decenas de
universidades nacionales y extranjeras.
Cuando Evo irrumpió como líder alternativo en medio de la corrupta sociedad neoliberal de los
años noventa, actuaba con la tradicional sencillez de un dirigente sindical. Recién electo como
presidente en 2005, en una gira promocional por el mundo se presentó ante el Rey Juan Carlos
I con un jersey, lo que le granjeó simpatía y algunas críticas. Con el tiempo, sin embargo, este
hombre se fue acostumbrando a la celebridad y llegó a extremos como pedir a uno de sus
asistentes que le atara las agujetas, algo por lo que ulteriormente pidió disculpas. Su actitud lo
distanció de los sectores urbanos, que hicieron que el “no” a la autorización constitucional a su
cuarta reelección ganara en el referendo del pasado 21 de febrero.
A Evo Morales le han dedicado el nombre de un pueblo, un monumento, un programa social y
el himno de las FFAA
A pesar de esta derrota, los partidarios de Morales buscan organizar una nueva consulta, pues
si el “jefazo” (así lo llaman sus allegados) dejara el poder, acabaría su propia preminencia
política. Parte de esta estrategia es mostrar a Evo como ser excepcional, un hombre de esos
que, como dijo hace poco Gabriela Montaño, presidenta de la Cámara de Diputados, “nacen
cada 150 años”.
277
Entramos en el barrio más peligroso del país más violento, Honduras
La Rivera Hernández, en la segunda ciudad de Honduras, vive en guerra constante. Con cinco
pandillas enfrentadas y un ritmo de tres cadáveres de media al día, la rutina es un ejercicio de
supervivencia
http://www.elconfidencial.com/mundo/2016-06-28/paseo-por-el-barrio-mas-peligroso-delpais-mas-violento-honduras_1224379/
ALBERTO G. PALOMO. SAN PEDRO SULA (HONDURAS)
El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández Alvarado, convoca una rueda de prensa
inaudita. Hace tiempo que no se recordaba un San pedro Sula sin homicidios en 72 horas. En
esta ciudad industrial, la segunda de Honduras, resulta atípico amanecer sin sangre en las
noticias. Hoy el día luce soleado, como de costumbre en esta tierra tropical. La loma del
Merendón, límite occidental, vigila a los 437.000 habitantes de la que acabó 2015 como la
segunda ciudad más violenta del mundo, con una tasa de 111 muertes por cada 100.000
personas. En la Rivera Hernández, su barrio más bravo, las calles se muestran desiertas. "Los
chicos están tranquilos", suspira Daniel Pacheco.
Este líder religioso de 36 años es de los pocos que no tiene problemas en caminar por todos
sus rincones. Nos guía entre sus calles de tierra y polvo. En este barrio se refugian cerca de
100.000 vecinos bajo el custodio de 12 patrullas de policía que suelen necesitar refuerzos.
Cinco maras (pandillas) se disputan el territorio: las dos principales, Mara Salvatrucha (MS)y
Barrio 18, y otras pequeñas como Vatos Locos, Tercereños o Los Holanchanos. No es nuevo en
la nación: cuartel del narcotráfico y nido de bandas, todo Honduras es un polvorín en la ya
difícil situación centroamericana. Vaso comunicante de un Caribe con corrientes de droga
colombianas y del embudo guatemalteco hacia México, este terreno de 112.500 kilómetros
cuadrados se encuentra en una encrucijada de violencia. Jóvenes que se matan entre ellos,
cárteles que buscan su sendero al mercado norteamericano y civiles condenados al encierro.
Pero volvamos a la Rivera Hernández. Una estación de policía nos recibe en la entrada, al lado
de lo que se han empeñado en llamar El Parque. Celebran que por las noches haya gente que
se atreva a caminar por él. Apostados en varios furgones, con chalecos y escopetas, todos se
muestran precavidos: "Ahí dentro es muy peligroso", advierten, como si hablaran de un jaula
con bestias. El oficial Corrales, de 27 años y con uno de experiencia en el cargo, recita un
proverbio local: "El único delincuente que no delinque es el delincuente muerto". Sonríe. Lleva
tres días de reposo en comparación con su ajetreo diario. Presume de su papel: "Elegí esto
porque es la mejor manera de servir a mi país", concede, "y estamos logrando acabar con la
inseguridad. Hace dos meses que los niños juegan por la noche. Antes era impensable: esto era
una ciudad muerta".
En una de las casas próximas, la de la familia Fernández, dan un testimonio diferente. El hijo,
de 29 años y con tres niños a su vez, cuenta la odisea de llegar al cole. Como en todo el terreno
hondureño o salvadoreño, cada calle está controlada por una Mara, y el cruce de alguna de
ellas procediendo de otras resulta fatal. "Las balas se oyen como zumbidos. Suena feo, pero se
puede decir que nos estamos acostumbrando a ello", narra, enseñando agujeros en la uralita
que cubre el patio. Su madre, María, asiente a sus 51 años. "Los niños tiene dificultad de ir a la
escuela. Hay que elegir las privadas del barrio, y no hay plata", añade con tristeza.
Varios miembros dela mara Barrio 18 posan frente a la virgen de la Guadalupe en una casa del
barrio Rivera Hernández (Javier Arcenillas)Varios miembros dela mara Barrio 18 posan frente a
la virgen de la Guadalupe en una casa del barrio Rivera Hernández (Javier Arcenillas)
Nos adentramos a continuación en una de las zonas controladas por Barrio 18. Cristian, Rango
y Fresa, de 22, 16 y 24 años, aguardan en un porche. El líder les ha dejado compartir tabaco y
refrescos con nosotros. En camiseta de tirantes y zapatillas de marca se asoman a la explanada
que marca la frontera con sus rivales. El viento empieza a cargar de humedad el césped
278
desigual que crece en los descampados. Una gotas se filtran por las costuras de la mesa y
convierten el polvo en barro. Hablan poco. Bagatelas. Cada cierto tiempo "les mueven" a otras
ciudades. ¿La familia? Olvidada. "La de sangre no existe; nuestra familia ya es la pandilla",
esgrimen en medio de una espera densa. Con las armas en reposo. No tienen una estructura
estable y luchan sin grandes contingentes. En las denominadas 'clicas' o grupúsculos repartidos
por las zonas rurales y urbanas de Honduras, El Salvador y Guatemala.
Su origen se remonta a finales del siglo pasado. Tras una historia de guerras civiles, golpes de
estado e inestabilidad política, muchos de sus parientes emigraron a Estados Unidos. Allí se
juntaron entre ellos y formaron guetos donde la supremacía se batía en pandillas de latinos sin
arraigo cultural ni social. Cuando el gobierno decidió deportarles se encontraron en un país
desconocido. Sin tejido social y con una pobreza extrema que hoy en día alcanza el 20%.
Hicieron lo que habían aprendido en Los Angeles y otras urbes del gigante norteamericano:
pelearse entre ellos y coaccionar a los residentes para mantenerse. Es lo que se conoce como
'renteo': cada habitante paga un "impuesto de guerra" a cambio de su seguridad.
"Hasta la comida más popular se llama 'baleada", explica Claudio Hernández, pastor de una
iglesia evangélica de 39 años. Ahora ejerce de mecánico, pero antes cató las mieles del crimen
robando coches. Intentó huir de 'mojado' (emigrantes que viajan ilegalmente a Estados
Unidos). Da clases de ebanistería o trabajos manuales. "Muchos 'cipotes' (niños) quieren
aprender mecánica, pintura, restauración... lo que les falta son oportunidades", asegura frente
a la antigua residencia de un antiguo líder al que asesinaron a quemarropa y que se sujeta
entre metralla y dibujo de homenaje.
La comunidad se vuelca en una competición de fútbol entre solteros y casados. Cualquier
actividad es válida para olvidar el poso de muerte y violencia que les amenaza las 24 horas. En
una pared se exhiben murales por la paz. Lo llaman "el pasaje de la bendición". Se ve a unos
niños correteando. "Es algo positivo. A mí me encanta. La gente empieza a percibirlo como
distinto, y es bueno. Antes esto estaba caliente", comenta Pacheco. Mientras, Marlon
Fernando Mercado, de 15 años, vende fruta en un carro. "No me metieron en ninguna banda",
responde, "pero uno no puede salir de aquí".
Un componente de los Vatos Locos posa con el gesto de la pandilla y una pistola en la calle que
dominan de Rivera Hernández (Javier Arcenillas).Un componente de los Vatos Locos posa con
el gesto de la pandilla y una pistola en la calle que dominan de Rivera Hernández (Javier
Arcenillas).
A pocos metros, ya de noche, Daniel Pacheco nos introduce en otra de las pandillas. Son los
Vatos Locos. No llegan a 20 miembros. De ahí que su lema sea 'Pocos, pero locos". Han
aceptado una cena de tortillas de maíz y cocacola gracias al 'patrón', Estasio de Armendía,
antiguo componente de la banda. A sus 50 años y retirado, sigue dando órdenes a los chicos.
"Uno lo que quiere es que los muchachos cambien. Y se puede. Es feo ver a un hijo muerto",
reflexiona. Con su mirada contesta a las preguntas que le hacen los 'vatos' que no están
posteando (vigilando). Casi nadie da información. Solo uno de ellos, de 26 años, se atreve a
contar que ha pasado tres años y medio en la cárcel y que intentó salir de Honduras "harto de
ser pobre". Los otros deambulan de un lado a otro o fuman hierba. Solo se juntan cuando uno
de ellos saca una pistola para mostrarla bajo el parvo brillo de una farola. Posan colocando las
manos con el símbolo de la banda. "No tenemos ni miedo ni nada". Es de noche y la salida del
barrio cada vez se vuelve más peligrosa. Atravesar el kilómetro y medio hasta el cuartel del
principio se transforma en una fuga arriesgada.
San Pedro Sula duerme sin sobresaltos. Parece que los buenos augurios del presidente siguen
funcionando. Pero sale el sol. Y con él, una llamada de la policía. El oficial Corrales da las
coordenadas. Paralelo al campo de fútbol, el cuerpo de un taxista de 45 años luce tronchado
en el asiento con dos disparos en pecho y cabeza. Su empresa acababa de resistirse a pagar la
'renta' a las pandillas y él ha sido el primer represaliado. Sus tres hijos -de 3, 15 y 20 años- y el
resto de una familia descompuesta lloran desconsolados a su vera. El contador de homicidios
en el país inicia de nuevo su tétrico marcador habiendo finalizado con 885 asesinatos. No ha
279
habido más discursos gubernamentales. "Aquí le matan a uno como animal, como si fuera una
gallina", solloza la madre del taxista.
“El marxismo o la teoría científica no pueden existir sin criticar
permanentemente”/ Conferencia de Etienne Balibar
Etienne Balibar
https://www.topia.com.ar/articulos/marxismo-o-teoria-cientifica-no-pueden-existir-criticarpermanentemente
Etienne Balibar, filósofo francés, discípulo de Canguilhem y Althusser, visitó Argentina entre el
21 y el 24 de abril de 2015. Es profesor emérito de Filosofía Política y Moral en la Universidad
París X Nanterre, docente de la Universidad de California en Irvine y uno de los más
prestigiosos filósofos políticos contemporáneos.
Entre sus ensayos traducidos al castellano podemos mencionar: Para leer El Capital (1969, en
coautoría con Louis Althusser), La filosofía de Marx (1984), Nosotros, ¿ciudadanos de Europa?:
Las fronteras, el Estado, el pueblo (2003), Derecho de ciudad: Cultura y política en democracia
(2004), Spinoza y la política (2011), Ciudadano Sujeto, Vol. 1 y 2 (2010-2012) y La propuesta de
la igualibertad (2015, en preparación).
La visita de Balibar coincidió con el 50º aniversario de la publicación de Para leer El Capital
(1965), escrito en colaboración con Louis Althusser.
En la oportunidad, recibió el Doctorado Honoris Causa por la Universidad Nacional de San
Martín. En el marco del ciclo “¿Qué hacer con Marx?”, dictó la conferencia “Teoría y crítica
después del estructuralismo” y participó de un taller coorganizado con la Escuela de
Humanidades y el IDAES de la Universidad.
Además, invitado por el Programa de Estudios Políticos de la Facultad de Ciencias Sociales,
dictó una conferencia en esa casa de estudios. Allí aprovechamos para solicitarle una
entrevista para Topía, pero debido a la brevedad de su estadía, nos sugirió grabarla y
publicarla con su autorización.
Mario Hernandez
“El marxismo o la teoría científica no pueden existir sin criticar
permanentemente”
Amigos, colegas, compañeros y compañeras tengo que hacer dos aclaraciones preliminares,
primero agradecer inmensamente la invitación a Buenos Aires y la recepción que me hacen,
adonde vuelvo luego de algunos años y, debo decir con emoción, que es un honor y un placer
estar aquí esta noche. Lo más importante, no tengo en mi propio lenguaje ni la décima parte
del humor y del estilo que tiene mi amigo Emilio de Ipola y, por lo tanto, tampoco lo tengo en
español, así que después de una ponencia brillante, humorística e inteligente de Emilio, van a
escuchar algo mucho más aburrido.
Habría que preguntarse a título de qué estoy aquí hoy, en cierto sentido ustedes tienen por
delante a dos personas diversas, hay un joven de 23 años coautor de “Para leer El Capital”,
sobreviviente por milagro de aquella época, y debo decir que para mí, la otra persona que está
280
aquí, es un viejo profesor meritorio de varias universidades. Primero, es una sorpresa increíble
tener que reconocer que después de la escritura de este libro han pasado 50 años, dos
generaciones, y hemos pasado, como bien sabemos, de una época histórica a otra casi
completamente diferente.
Naturalmente, al joven de quien estaba hablando, yo no lo conozco muy bien, sinceramente,
tratando de contestar a preguntas sobre “Para leer El Capital”, el texto que había escrito, no
bajo la dictadura de mi maestro, sino en cierta comunión de intenciones y de ideas de las que
voy a hablar en unos momentos, ahora casi no lo entiendo.
Eso también da una posibilidad de ser un poco más objetivo, es decir, releer todo esto y tratar
en modo más o menos incierto o vacilante, de ocupar diversos lugares intelectuales y acaso
morales acerca del objeto, no de la reliquia del mismo. Según me decía Natalia al entrar en la
sala, aquí todos son althusserianos y si seguimos a Emilio ustedes probablemente no tendrían
que existir, porque los althusserianos no existen. Pero, probablemente yo sería el único no
althusseriano, de todas formas eso no me priva de la necesidad de enseñar a Althusser.
Quisiera tratar de hacer dos cosas, primero quisiera no destruir al mito, deconstruir al objeto
del que estaba hablando que ustedes conocen mejor que yo, sino más sencillamente introducir
algunos elementos históricos y factuales para mejor comprender el modo de producción de
este libro y, como consecuencia, ciertos de sus aspectos extraños, que no se ven
inmediatamente. Todos ustedes tienen en sus manos un libro que se llama “Para leer El
Capital”, con los dos nombres de sus autores, Louis Althusser y Étienne Balibar, su discípulo.
¿Alguien me lo podría prestar? Este es el objeto material, pero es engañoso y no es puramente
una cuestión de narcisismo o coquetería, hay verdaderamente hoy en día después de 50 años,
algunos de los enigmas que se ocultan debajo de él. También voy a tratar de decir algunas
cosas acerca del contenido y de su valor actual.
Primero, ¿qué fue “Para leer El Capital” originalmente? Fue la transcripción de las ponencias
presentadas en un seminario organizado en la Escuela Normal Superior que es el corazón más
prestigioso, más elitista, del sistema académico francés, en el Departamento de Filosofía, por
un grupo de estudiantes dirigidos por su maestro, Louis Althusser, un joven profesor de
filosofía.
En Francia había una jerarquía muy fuerte en estos establecimientos e institutos académicos
en aquellos años, antes del ´68, y de hecho, Althusser no era un profesor de alto nivel, era un
ayudante, pero en este lugar elitista y prestigioso. Los que participaron en el seminario, lo
hacían en diversos modos, es muy importante recordar que se trataba de un trabajo colectivo
y voy a indicar algunas consecuencias de eso.
Hubo alumnos de Althusser que jugaron un papel muy importante en la fase de preparación
del seminario. Si queremos tomar el proceso de preparación en su conjunto, habría que
empezar cuatro años antes del Seminario sobre El Capital, es decir, en 1961, cuando yo,
totalmente desconocido en todo el mundo, porque jamás había escrito una línea, fui en cierto
modo el espíritu inspirador junto a Jacques-Alain Miller, un poco más tarde el famoso
lacaniano y su amigo, Jean-Claude Milner, vinimos a encontrar a nuestro profesor de filosofía,
de poco más de 40 años, que nos enseñaba a Platón, Spinoza, Rousseau y otros. Obviamente,
tenía un interés especial por la filosofía política clásica. Se sabía que era miembro del Partido
Comunista y el mismo año él había publicado un primer artículo, luego inserto en el volumen
“Por Marx”, traducido por Marta Harnecker bajo el título “La revolución teórica de Marx” que
se llamaba “Sobre el joven Marx”, no voy a contar lo que todos ustedes ya conocen acerca de
la importancia que tuvo.
281
Ese artículo había provocado un efecto notable, inclusive cierto escándalo en el espacio
intelectual francés porque, por un lado, atacaba cierta controversia del comunismo oficial y
desde lo interno del partido y, por otro lado, atacaba al marxismo humanista especialmente a
su versión más hegeliana la que precisamente un año antes, el filósofo francés más prestigioso
de toda la época, el propio Jean Paul Sartre, había desarrollado en un libro inacabado, casi
imposible de leer, porque lo había publicado como lo había escrito, o sea, sin puntuación, sin
subtítulos, una frase única de 700 páginas, que se llamaba “La crítica de la razón dialéctica”.
Nosotros tratamos de leerlo con enormes dificultades, pero en la Introducción había una
fórmula que tuvo una resonancia enorme; todos ustedes la conocen: “El marxismo es el
horizonte insuperable de su época”. Luego Sartre decía que había que añadir algunas cosas,
porque según él al marxismo le faltaba alguna doctrina del sujeto y de la experiencia humana,
una antropología filosófica. Para nosotros esa declaración fue absolutamente indiscutible, las
razones que tomamos en cuenta, aún una vez más simplificando, no por razones puramente
especulativas o teóricas, sino más bien por razones políticas e históricas.
Entramos en una nueva estación revolucionaria
Añadamos otra fecha. Sartre publica este libro con esta frase y un año antes triunfa la
Revolución Cubana en La Habana que rápidamente se transformó en una revolución socialista.
La Revolución Cubana, con otros aspectos de la situación en el momento, tuvo una fuertísima
repercusión en la juventud francesa porque estábamos en medio de la guerra de Argelia, por
lo tanto, el problema de la lucha antiimperialista y de sus perspectivas, no solamente
nacionales sino socialistas, se imponía a nosotros con una fuerza enorme, naturalmente había
todo tipo de divergencias y conflictos al interior del movimiento estudiantil de apoyo a la
independencia argelina en el que todos nosotros nos inscribimos con entusiasmo.
Para resumir, diría que una parte importante de esa generación, no solo jóvenes intelectuales
burgueses formando parte de esa elite de la que estaba hablando, se imaginaron, se soñaron
como revolucionarios y algunos de ellos lo fueron en diversos modos, pero sí fuimos
convencidos de que estábamos entrando en algo que yo llamaría una nueva estación
revolucionaria.
Quería tomar la palabra que todos ustedes tan bien conocen, la fórmula que uno de nosotros,
no directamente althusseriano, pero alumno y amigo de Althusser, Régis Debray, después de
haber viajado a Cuba para encontrarse con el Che Guevara, la fórmula que él adoptó, tal vez
bajo la influencia de alguno de sus amigos cubanos, no sé si fue sugerida por alguno de ellos de
alto nivel, de “la revolución en la revolución” y esa es la idea que nosotros teníamos
exactamente.
Entramos en una nueva estación revolucionaria y se va a caracterizar por una revolución, es
decir, un cambio en las formas, los métodos, no los objetivos pero sí los modos de
organización, de hacer y combinar la teoría y la táctica. Eso produjo un efecto no secundario
que hay que mencionar, y estoy hablando de los jóvenes, no estoy hablando de Althusser
porque él es otro caso que no tenía la misma historia ni era de la misma generación.
Los acontecimientos trágicos, antiguos o recientes de la historia del socialismo real, no es que
no los consideramos o los ignoramos completamente, pero sí los consideramos como una
contradicción secundaria, un aspecto secundario de la contradicción. Tal vez el caso más
significativo, pensando en mi experiencia, pienso en conversaciones que tuvimos cuando entré
primero a la organización juvenil comunista en 1960 y luego en el partido en 1961, había un
282
acontecimiento reciente que cumple un papel muy importante en las controversias acerca de
la naturaleza del comunismo como movimiento histórico y es la revolución húngara del ´56.
Recuerdo muy bien discusiones, no con Althusser, otro punto ciego del cual nunca hablamos,
sino con otros comunistas que nos convencieron que había habido que elegir entre el
socialismo con todos sus errores y desviaciones ante el imperialismo en pleno período de
agresividad, el mismo año del golpe de Suez.
Le dijimos a Althusser que sus clases sobre Platón eran muy interesantes pero que más nos
interesaba Marx
Dejando todo esto de lado nos dijimos que estábamos entrando en una nueva estación de la
revolución. Pero para estar a la altura de la situación había que conocer el marxismo y en la
misma escuela en la que estábamos había un comunista marxista que empezaba a hacerse
conocido, Louis Althusser; lo citamos y le dijimos que sus clases sobre Platón eran muy
interesantes pero que había algo que nos interesaba más que era Marx, entonces le pedimos
que nos hiciera trabajar sobre él.
Es importante tener en claro que nosotros lo buscamos, él nos dijo esencialmente dos cosas a
lo largo de los 3 o 4 años que siguieron, “primero, ustedes me preguntan acerca del marxismo
y el marxismo no existe, existe solo en fragmentos, algunos de ellos como El Capital son
fragmentos enormes, pero la idea de marxismo como sistema como ha sido impuesto por el
materialismo histórico y dialéctico de Stalin y de otros, no existe”.
Tengo que aclarar que él no conocía ciertas corrientes críticas, o no las quería conocer por
diversas razones, lo cual hubiera hecho más interesantes las discusiones o hacer estudios
comparativos. El segundo aspecto del efecto encantador de Althusser fue decirnos que no
podía inventarnos el marxismo, que teníamos que inventarlo juntos, con trabajo colectivo, y
así se creó algo que seguramente tiene otros ejemplos equivalentes, es decir, un grupo de
compañeros intelectuales compuesto de jóvenes ávidos de lecturas sin experiencia y otro un
poco más viejo pero que no se comportaba como maestro.
Althusser pertenecía a otra generación y tenía intenciones no diría secretas pero tampoco
explícitas y una cierta parte de eso ahora se hace más visible y se puede entender, porque hay
documentos que han sido publicados durante este último tiempo que son reveladores.
Algunos de ustedes probablemente recuerden que en su escrito autobiográfico, texto muy
complejo lleno de relaciones interesantes y de enormes errores voluntarios o involuntarios,
algunos debidos al aspecto autodestructor de lo que escribe acerca de su propia experiencia.
En ese libro hay un momento en que Althusser vuelve al inicio del trabajo del que estaba
hablando, el que pertenece al período que él más tarde definiera como teoricista que incluye
naturalmente a “Para leer El Capital” como su elemento central, y dice que para los miembros
del movimiento comunista francés, así como para los del movimiento comunista internacional,
la teoría de Marx era considerada científica, para el Partido Comunista Francés (PCF) era algo
casi sagrado.
Entonces, en sus “Memorias”, presenta su empresa como una tentativa de superación interna,
de transformación subversiva y escribe que era necesario adoptar el lenguaje, la postura y el
punto de vista del discurso científico para atacar a la doctrina del partido desde el interior,
adoptando el lenguaje que el partido no podía rechazar. Cuando leí este pasaje en las
“Memorias”, y como la editorial me consideraba un buen discípulo de Althusser, me pidieron
que escribiera un prefacio para la nueva edición de “La revolución teórica de Marx” y al final
del mismo me enojé un poco y dije que no podía aceptar esa presentación manipuladora y
283
desprovista de lo que hicimos en 1965, puedo equivocarme, naturalmente, o haber sido
víctima de una manipulación inconscientemente, pero esa presentación desprovista de toda la
historia, es una especie de versión melancólica y retrospectiva.
El hecho es que en aquel momento los que creían en la verdad y la importancia teórica, desde
un punto de vista científico y en la verdad de la teoría de Marx fuimos nosotros, no el PCF,
tampoco los burócratas del partido, que no se preocupaban de la teoría en ese sentido.
Algunos meses después se publicó un documento interesante que pueden encontrar en
internet en francés con fecha del 25 de febrero de 1965, de 40 páginas que tiene la extraña
forma y ficticia en cierto sentido de algo como una relación para el Comité Central del partido
dirigida a un importante dirigente, el responsable de los intelectuales.
Saben ustedes que en los partidos comunistas soviéticos había un responsable cada dos
intelectuales. Después de una conversación que ellos tuvieron, Althusser le manda una carta
que habla de la relación del partido y los intelectuales en general, del nuevo tipo de
intelectuales que existe en la sociedad científica y técnica, y explica que el partido se equivoca
completamente si imagina poder influenciar a los intelectuales explicándoles que hay que
someterse y considerarse fuerza de apoyo de la clase obrera, la vieja idea de que los
intelectuales tienen que insertarse en el movimiento obrero porque ellos tienen sus razones
para ser comunistas.
Pero para transformar la teoría del partido y su lenguaje, explica Althusser, hace falta un
esfuerzo enorme en el campo de la filosofía marxista, el materialismo dialéctico del lenguaje
de la época, y para eso el partido francés, escribe tal vez un poco vanidoso, está muy mal
preparado porque los intelectuales y filósofos que tiene son nulos, no tienen ningún valor. En
un momento le explica a la dirección del partido que está preparando una nueva generación
de nuevos jóvenes filósofos marxistas que van a ser mucho mejores que los que tienen
ustedes.
Fuimos manipulados
Después de este acontecimiento, sí hubo una especie de manipulación en cierto sentido,
fuimos manipulados, no con intenciones absurdas. La impresión que tengo es que Althusser
tenía, y se podría explicar en términos maquiavelianos, que él usó más tarde, según pienso
hoy, dos ideas en mente: primero, pensaba que el movimiento comunista internacional, lo que
él llamaba con mayúsculas la fusión de la teoría y del movimiento obrero, era una cosa única
en la historia, algo radicalmente nuevo y único en la historia, una práctica política que
necesariamente contenía e integraba en su propia práctica un momento de teoría y de ciencia
en sentido fuerte. En consecuencia, había algo como un punto de honor, para un partido
comunista o marxista, estar a la altura de su propia pretensión teórica, algo que naturalmente
los partidos comunistas de la época no lograban.
Existía también la idea de cambiar el tipo de relación entre la teoría y la dirección política; eso
tocaba al corazón del sistema del comunismo oficial como había sido teorizado por Stalin y que
daba la regla.
Recordemos que Althusser escribió frases llenas de admiración a los dirigentes comunistas y
marxistas que en la historia combinaron la capacidad teórica con la capacidad de dirección
política, y los nombres que nos vienen a la mente son Lenin y Mao Tse Tung.
Otra idea más implícita que me tienta llamar con un término más propio de la historia de la
Iglesia y del catolicismo, la idea de la protesta indirecta. Hay que establecer una especie de
284
distancia entre la dirección política y la práctica teórica o el trabajo teórico, para que la
organización política no pudiera seguir utilizando a la teoría como servidora de la dirección
política, que era exactamente lo que hacían los partidos comunistas y que de hecho siguen
haciendo muchas organizaciones políticas. Decidimos una línea, un día es clase contra clase,
otro día es frente popular u otra táctica, y eso aumenta el prestigio de la función intelectual. La
palabra intelectual orgánico en Gramsci tiene ciertas ambivalencias en este aspecto y nosotros
los dirigentes políticos les pedimos a los intelectuales hacer un discurso teórico para explicar
por qué nuestra línea política es justa y es la única posible, aún si es distinta a la que tuvimos
en otro período. Esto es lo que Althusser quería destruir.
Althusser nos dijo que para renovar al marxismo había que hacer un gran “rodeo” por la teoría,
y fue a través de muchas cosas, del estructuralismo, de la lectura de Lacan, muy importante
para todos nosotros ya que teníamos la idea de que entre marxismo y psicoanálisis, aunque se
diferencian, era imprescindible la complementariedad. Hicimos ese rodeo y luego hicimos el
seminario.
Quisiera insistir en que el libro “Para leer El Capital” fue publicado el mismo año, con dos
meses de diferencia, que la colección de los escritos del propio Althusser, “La revolución
teórica de Marx” (“Por Marx”), el resultado de esto, que yo considero negativo, fue que ambos
libros se consideraron inmediatamente como piedras angulares y fundamentales de una nueva
escuela marxista y un nuevo discurso marxista. La gente empezó a leer “Para leer El Capital” en
los términos que se encontraban en “Por Marx” y a leer “Por Marx” con ayuda de “Para leer El
Capital”.
Pero por las razones que indicaba hace un momento, “Por Marx” es un libro únicamente de
Althusser, que aunque cambió sus ideas, el libro nunca dejó de ser el producto de su
inteligencia. La comparación que yo hago en la historia del marxismo y que también
demuestra, según pienso, la relevancia y la importancia del libro en este aspecto, es con la
famosa obra de juventud de Lukacs, “Historia y conciencia de clase”. Son libros del mismo
tamaño, organizados como una colección de textos, con un gran ensayo central, sobre la
dialéctica que es la conciencia de clase y el proletariado en el caso de Luckas. También hay
aspectos estéticos y políticos.
La comparación es aún más interesante porque los dos tipos son de diversas épocas. Uno es
del período inicial del comunismo, el otro, Althusser, aunque no lo sabía, del comienzo del
período legal. Las posiciones son muy opuestas, pero a nivel de estructura y estilo la
comparación tiene sentido.
Mientras, “Para leer El Capital” es una obra, digamos, más híbrida y heterogénea; eso no lo
entendimos en la época, pero para mí ahora está claro.
En este punto hay que decir, primero, que fuimos nosotros, en cierto sentido, los responsables
del llamado “teoricismo”, naturalmente Althusser lo sabía y nos empujó y aconsejó leer a los
epistemólogos franceses famosos y otros, Lacan, etc., en ese sentido tiene la responsabilidad
inicial, pero nosotros como buenos estudiantes fuimos completamente entusiastas.
La autocrítica de Althusser es en verdad una crítica a lo que sus alumnos habían escrito y que
no completamente concordaba con su visión.
El segundo aspecto, que no es una confesión al estilo católico, un arrepentimiento, pero sí veo
al grupo con un sentimiento de terrible vergüenza porque la primera edición de “Para leer El
Capital”, la edición completa, está hecha de ensayos de cinco autores. Empieza con la
285
introducción general de Althusser, que naturalmente fue escrita después de la redacción de las
ponencias, contiene un ensayo de Jacques Ranciere que se llama “El concepto de crítica en
Marx”, sigue un ensayo más breve sin mayor interés porque su mayor contribución al trabajo
althusseriano de aquella época fue sobre la producción literaria, sobre teoría de la literatura;
luego viene la contribución del mismo Althusser como miembro del seminario, luego viene mi
propia contribución y finalmente una contribución de otro miembro de nuestro grupo que no
fue ponencia del seminario.
Se editaron dos volúmenes en 1965, tres años después, en 1968, tras muchos
acontecimientos, el desarrollo del movimiento maoísta, en el que muchos jóvenes
althusserianos tuvieron un papel decisivo, el propio Althusser jugando una especie de doble
juego muy complicado entre el Partido Comunista de un lado y los maoístas del otro, con la
consecuencia de que finalmente terminó cautivo en medio de los tiros de ambos campos, el
partido acusándolo de ser maestro de los maoístas y los maoístas acusándolo de ser un
revisionista que no quería tomar sus responsabilidades con consecuencias dramáticas para su
estado psíquico y mental.
En 1968, antes de la movilización estudiantil, Althusser nos dice que el libro había tenido un
éxito enorme, pero que para ser aún más útil para militantes de base, había que reducirlo a un
tamaño más pequeño y para hacer eso había dos soluciones, o bien elegimos algunos textos y
eliminamos los otros, o hacemos una redacción resumida de todos las contribuciones.
Nosotros le preguntamos qué prefería hacer él, a lo que nos respondió que prefería la primera
solución, inmediatamente le preguntamos qué íbamos a mantener y qué íbamos a eliminar, a
lo que respondió que íbamos a mantener el texto de Balibar porque es un texto muy claro que
la mayoría de los lectores consideran muy útil en términos de aplicación a las ciencias sociales,
la economía, la antropología, y vamos a dejar de lado los demás porque son mucho más
complicados, filosóficos y difíciles de comprender para los militantes.
Yo como un cretino absoluto no vi la trampa en esa solución, esa versión reducida fue utilizada
como base de las traducciones en todo el mundo, así se creó el libro de Althusser y Balibar, en
el cual la cara invisible era la declinación de los otros y en particular de Jacques Ranciere.
Dejo de lado explicar el conflicto que se produjo algunos años después entre Ranciere y
Althusser, más bien consecuencia de la evolución de aquél y segundo, aunque naturalmente él
no lo reconoce, pero para mí ahora está claro que estaba muy implicado en el movimiento
maoísta de esos años y que Althusser, por el contrario, había abandonado al menos
visiblemente toda inclinación en esa dirección y trabajaba críticamente.
Voy a dejar el aspecto teórico de lado, solo voy a decir algo. Al hacer estas modificaciones tuve
que releer mi propio texto, el de Ranciere y el prefacio que Althusser escribió. El caso no es
que uno haya sido más estructuralista que otro, todos lo éramos, como lo sabe muy bien
Emilio; este libro cambió mucho mi comprensión de todo ese proceso, para simplificar, la
orientación de Ranciere es crítica en un sentido casi kantiano, hace referencias permanentes a
Kant, su problema es como el problema de Kant con la dialéctica trascendental, explicar la
posibilidad e incluso la necesidad de una ilusión trascendental, la ilusión del sujeto ideológico
como consecuencia inevitable del juego de las categorías centrales del pensamiento, que son
las categorías de la economía política, una cosa que Marx decía cuando hablaba de las formas
del pensamiento objetivas que producen un efecto de ilusión subjetiva, así Ranciere se
mantiene a nivel filosófico de una tentativa de tipo crítico.
286
Mientras que yo tomo el punto de vista exactamente opuesto y escribo un texto
esencialmente positivista, esa fue la razón por la que, yo no los quiero insultar, pero los
llamados militantes, y sobre todo economistas, antropólogos, historiadores marxistas influidos
por la revolución teórica anunciada por Althusser encontraron en mi texto un instrumento útil;
porque yo decía que la crítica ya estaba acabada, que habíamos entrado en el campo de la
ciencia y en él podíamos definir conceptos que no tienen ninguna relación con las ideologías o
las ilusiones ideológicas del pasado, sino que explican objetos reales de la historia presente.
El problema que como buen militante comunista me interesaba era el problema de la
revolución y yo lo reformulé en términos de transición, una cosa que en ese momento jugaba
un papel muy importante esencialmente en los países subdesarrollados donde se
desarrollaban las luchas antiimperialistas.
Todo el mundo estaba interesado en cómo analizar los fenómenos y procesos de transición,
pero la transición como yo la describía, en términos positivistas, se presentaba como una
combinación contradictoria de dos tipos de estructuras, las capitalistas y las socialistas o tal
vez comunistas. Lo extraño en este sentido es que unas existen en la realidad mientras que las
otras, naturalmente, son intelectuales. Lo interesante también es que yo tenía una cuestión en
común a nivel formal que era el poner las estructuras intermedias impuras, excepto que para
Althusser el concepto central era cómo entender la posibilidad de un discurso como la
economía política que el propio Marx consideraba semi científico y semi ideológico, una
especie de contradicción interna; mientras yo me ocupaba de una “contradicción real” en la
historia.
En la nueva edición, la que ustedes tienen, tanto en mi texto como en el de Althusser, fueron
eliminadas las fórmulas que tenían un sabor demasiado estructuralista. Althusser y yo, pero
también otros althusserianos habíamos decidido no solo que el estructuralismo no era útil
para refundar el marxismo, sino que además era una ideología peligrosa. De tal manera la
genealogía profunda que Emilio discute y explica muy bien en su libro, acerca de la
combinación paradójica naturalmente, pero también muy productiva intelectualmente, entre
estructuralismo y marxismo, en el sentido intelectual, esa combinación está más o menos
acordada y escondida en el texto final.
Si ustedes toman los textos de Althusser más el mío, ¿qué tienen en sus manos? Tienen un
equivalente, no digo en todos los aspectos del contenido, del libro de Stalin “Materialismo
dialéctico y materialismo histórico”; el propio Althusser lo dijo. El texto de Althusser
“Materialismo dialéctico” y el texto de Balibar “Materialismo histórico”, uno es la fundación
del otro, el segundo es la ilustración de las capacidades científicas del primero. Habría que
reflexionar sobre la larga influencia del esquema estaliniano en el pensamiento de Althusser.
Tiene razón Emilio cuando lo llama esotérico, más político el lector de Maquiavelo e inventor
de esa palabra extraña “materialismo aleatorio”, con carga negativa, no es solamente el
materialismo que tiene el azar como su contenido, se puede entender también como un
materialismo muy improbable. Lo cierto es que tiene muy poco de materialismo estaliniano y
probablemente no tiene nada de marxista, de hecho no tiene nada que ver con él, es una
invención filosófica.
Quisiera matizar esta presentación muy negativa y muy autocrítica en cierto sentido, porque
en los dos textos que Althusser introduce en el Prefacio hay dos cosas que no se deducen de
esto. La primera es la idea de la lectura sintomal, que es una primera tentativa de rectificación
de las orientaciones opuestas que tuvimos en el texto. Es una idea dialéctica en cierto sentido,
hay una interpretación, la interpelación restringida de la idea de lectura sintomal que está de
287
acuerdo con el famoso tema del corte epistemológico, la lectura sintomal fue lo que hizo Marx
para criticar la economía política y el método que usó para producir el corte epistemológico.
Althusser propuso otra interpelación, la idea del corte epistemológico continuado. Pero no
llevó la idea del corte epistemológico hasta las consecuencias que, en cierto sentido, el
concepto de lectura sintomal contiene. Si leen el texto van a ver que es la mejor
interpretación, es decir, se trata de un proceso infinito, no acabado; lo que quiere decir que el
marxismo o la teoría científica no pueden existir sin criticar permanentemente, no solo a una
ideología pre existente, sino más bien a la ideología que su propia actividad teórica recrea y
reproduce en su relación con los movimientos políticos. Hay que aplicar la lectura sintomal a sí
mismo, hay que añadir otro nivel de transferencia y de control.
El otro elemento imprescindible, es un elemento que hay que reconstruir tomando algo de
“Por Marx” y algo de “Para leer El Capital”, en el párrafo final del Prefacio aparece la formula
sencilla que dice que habría que estudiar el efecto de sociedad; fórmula muy extraña porque
da la impresión de ser una cosa nueva que el texto no contiene, de hecho lo contiene, el efecto
de sociedad no es otra cosa que la sobredeterminación y ésta no es otra cosa que la unidad de
contrarios, lo cual es muy difícil de pensar y conceptualizar entre estructuras y coyunturas en
la práctica política.
El corazón de todo esto, para mí, la parte más bella de “Para leer El Capital” porque es el cristal
filosófico, es el capítulo de Althusser que se llama “Esbozo de un concepto de tiempo
histórico”, es interesante porque es vecino de un capítulo atroz que se llama “El marxismo no
es un historicismo”, el ataque a Lukacs y a Gramsci, que es una ilustración casi perfecta del
método estalinista llamado leninista de criticar a las desviaciones de izquierda de Lukacs y a las
de derecha de Gramsci, explicando que tienen el mismo contenido, que es la misma
incapacidad de comprender la dialéctica. Es horrendo, pero la contrapartida positiva e
inacabada es el esbozo de un concepto que yo llamaría no vulgar, no lineal, no evolucionista,
no teológico de la historicidad como no contemporaneidad estructural del presente.
Es aquí que Althusser puede ser comparado con otras grandes figuras del marxismo del siglo
XX que estaba mencionando antes. Esto no es para explicar que uno es mejor o superior, es
para decir que estamos aquí en el corazón del problema filosófico y que Althusser
verdaderamente lo tocó en esta época. Muchas gracias.
Desgrabación: Ana Laura Xiques
Revisión y edición: Mario Hernandez
Hay un vínculo directo entre el Plan Colombia, EE. UU. y 5.500 jóvenes
colombianos asesinados/ Entrevista a Renán Vega Cantor, , Bogotá,
Colombia
Mario Hernández
https://www.topia.com.ar/articulos/hay-un-vinculo-directo-plan-colombia-ee-uu-y-5500jovenes-colombianos-asesinados
Renán Vega Cantor es historiador. Profesor titular de la Universidad Pedagógica Nacional de
Bogotá, Colombia. Doctor de la Universidad de París VIII. Diplomado de la Universidad de París
I, en Historia de América Latina. Autor y compilador de los libros Marx y el siglo XXI (2
volúmenes), Editorial Pensamiento Crítico, Bogotá, 1998-1999; El Caos Planetario, Ediciones
Herramienta, 1999; Gente muy Rebelde (4 volúmenes), Editorial Pensamiento Crítico, Bogotá,
288
2002; Neoliberalismo: mito y realidad. Entre sus últimos trabajos podemos mencionar: Los
economistas neoliberales, nuevos criminales de guerra: El genocidio económico y social del
capitalismo contemporáneo (2010). La República Bolivariana de Venezuela le entregó en 2008
el Premio Libertador por su obra Un mundo incierto, un mundo para aprender y enseñar.
Dirige la revista CEPA (Centro Estratégico de Pensamiento Alternativo).
M.H.: Un momento muy especial para la vida política colombiana, el pasado jueves 4 de
febrero se encontraron en Washington los Presidentes Obama y Santos, encuentro en el que
también estuvo presente el ex Presidente Pastrana, en la conmemoración de los 15 años del
“Plan Colombia”, realizada en la Casa Blanca. ¿Cuál es tu visión respecto del “Plan Colombia”?
Tanto Santos como Obama lo dieron como un plan que tuvo resultados positivos. El ex
Presidente Andrés Pastrana también, pero fue crítico de los acuerdos de paz a los que luego
haremos referencia. Comencemos con el Plan Colombia.
R.V.C.: Cuando se analiza un hecho del presente uno tiene que pensar si se habla de resultados
favorables o desfavorables, para quién o para quienes. Por supuesto que para Estados Unidos
los resultados del Plan Colombia han sido absolutamente favorables y para las clases
dominantes de Colombia y el que nosotros llamamos bloque de poder contrainsurgente
también. Pero para el grueso de la población no solo colombiana, sino andino latinoamericana
los resultados del Plan son terriblemente negativos. Me atrevería a decir que el Plan Colombia
se podría catalogar como plan de muerte, porque en estos 15 años lo que se ha dado es una
recolonización de Colombia, se ha convertido en el territorio donde las clases dominantes han
feriado todo y se ha iniciado un proceso de convertir a nuestro país en la base más
incondicional de los Estados Unidos.
Desde ese punto de vista uno se pregunta qué se puede celebrar.
¿Se puede acaso celebrar la muerte? Y no hablo en términos metafóricos, sino en términos
reales fundados en hechos que se han dado recientemente. Tal vez en Argentina, como en
otros lugares del mundo, se ha escuchado hablar de un término absolutamente banal pero que
oculta muchas cosas, que es el de “falsos positivos”. Ese término significa asesinatos de
Estado, que se han cometido durante estos 15 años, en una práctica sistemática que se
generalizó durante el Plan Colombia, no nacieron con él pero sí durante su vigencia se
convirtieron en una práctica organizada y continua que ha tenido como resultado alrededor de
5.500 asesinatos.
Durante los gobiernos de Álvaro Uribe Vélez, entre 2002 y 2010, pero principalmente entre el
2002 y el 2008, cuando estalló el escándalo, se recurrió a la práctica de asesinar a jóvenes
colombianos que mediantes distintos artificios eran engañados y se los llevaba a distintas
zonas a donde ellos vivían, se les vestía con traje camuflado, se los asesinaba y se los
presentaba como guerrilleros dados de baja.
Esa práctica tiene como resultado la cifra de 5.500 muertos, una cifra que las ONG consideran
la más alta de asesinatos políticos en todo el mundo en lo que va del siglo XXI. Son crímenes de
Estado que están relacionados con el Plan Colombia. Estamos hablando de que en el gobierno
de Uribe Vélez, cuando fue Ministro de Defensa del actual Presidente de la República de
Colombia, Juan Manuel Santos, se dieron directivas oficiales, en las que se comienza a poner
precio sobre las cabezas de los miembros de la insurgencia, de acuerdo a su importancia
dentro de la organización. Por ejemplo, para los mandos superiores, como el Secretariado de
las FARC ofrecían 5.000a 10.000 millones de pesos, y de ahí para abajo se empezaba a ofrecer
289
hasta los combatientes rasos. Aparte se daban otro tipo de incentivos, como mandos militares,
altos o medios que estuvieran involucrados en el asesinato de insurgentes tenían algunas
remuneraciones adicionales como vacaciones, premios económicos o se les ascendía. Eso fue
convirtiéndose en un incentivo para matar colombianos. Se trataba además
propagandísticamente de decir que el Ejército colombiano estaba matando guerrilleros a
diestra y siniestra, cuando en realidadse trataba de jóvenes colombianos humildes que eran
engañados y asesinados.
Esos son los “falsos positivos”, es interesante de donde surge ese nombre. En el Ejército
colombiano se acostumbra que cuando un oficial da una orden y el subalterno le contesta
“positivo”, quiere decir que la orden se acató. En este caso quiere decir que la orden de
asesinar colombianos se cumplió. Pero en cuanto la prensa del mundo en vez de sacar un
titular que diga “Cinco mil colombianos asesinados por el Ejército”, dicen “Cinco mil falsos
positivos asesinados” se atenúa el crimen, y eso es lo que ha sucedido. Esto está relacionado
con el Plan Colombia porque hay ONG de EE. UU.y Europa que han hecho investigaciones de la
responsabilidad de unidades militares colombianas de altos mandos, en la realización de los
llamados “falsos positivos” y la relación con los Estados Unidos, es decir que se ha investigado
cuál es la formación de esos militares y dónde tomaron sus cursos. En la mayoría de los lugares
donde se llevaron a cabo esos falsos positivos, los comandantes de las unidades militares,
fundamentalmente con cargos superiores, en un 80/90% habían recibido instrucción de
Estados Unidos en la Escuela de Las Américas, por ejemplo.
Hay un vínculo directo entre el Plan Colombia, la participación de USA y los asesinatos. Pero
este es tan solo un elemento del Plan Colombia que de por sí ya es escandaloso. Otro
elemento es que durante el Plan Colombia se acentúa el uso del glifosato como químico para
destruir las matas de hoja de coca, pero eso ha llevado a la destrucción de economías
campesinas, indígenas, la enfermedad y muerte de muchos colombianos en zonas campesinas.
Un país tan dependiente, tan sometido como Afganistán se negó en un momento determinado
a usar este tipo de químicos para fumigar los cultivos de amapola, en cambio, en Colombia esa
práctica se ha seguido llevando a cabo hasta el día de hoy, aunque hace unos meses se dijo
que se iba a suspender.
Un tercer elemento en el que se demuestra que este es un plan de muerte, tiene que ver con
el asesinato, en un país en el que no existe la pena de muerte, de altos miembros de la
insurgencia con la participación directa de tropas de los Estados Unidos. El crimen de guerra
del 1° de marzo del 2008 en Sucumbíos, Ecuador, donde fueron asesinadas 26 personas, entre
ellos el segundo comandante de las FARC, Raúl Reyes, 4 estudiantes mexicanos y ciudadanos
ecuatorianos. Hace unos dos años un periódico de EE. UU.dio a conocer que ese operativo
había corrido por cuenta directa de las fuerzas de USA.
Entonces, cuando se celebran los 15 años de este Plan, están celebrando la muerte,
persecución, el exilio y represión de miles de colombianos. Me parece que es cinismo, más
cuando estamos hablando de un Presidente que supuestamente está interesado en lograr la
paz. Podemos decir que se trata de la paz de los sepulcros la que está celebrando.
Por supuesto, si miramos el Plan Colombia desde una óptica diferente, ha sido nefasto no solo
para Colombia sino para los países de la región. Ha significado la militarización creciente de
toda la región, la construcción de nuevas bases militares, injerencia de los Estados Unidos,
construcción y manejo de radares en zonas estratégicas como el Mar Caribe y la Amazonía;
bases militares norteamericanas en territorio colombiano desde donde se puede agredir,
controlar y vigilar a todos los territorios de la nación. Esos son algunos de los resultados del
Plan Colombia.
290
Hay otro elemento que resulta paradójico. El debate por este Plan comenzó en el Senado de
los Estados Unidos entre 1999 y el 2001 en un momento en el que había dialogo entre las
FARC y el gobierno de Pastrana. En ese momento se dijo que el Plan no era contrainsurgente,
sino que era para combatir el narcotráfico. Cuando se rompieron las conversaciones y luego de
los atentados de septiembre de 2001, abiertamente se dijo que era un plan contrainsurgente
encubierto como un plan antinarcóticos.
En términos de narcóticos el plan es un absoluto fracaso. Colombia no ha dejado de ser
proveedor mundial de cocaína, a pesar de que México cumple un papel significativo. No se ha
reducido notablemente el número de tierras sembradas, inclusive si se hubiera reducido, la
productividad por hectárea es mayor que la que existía hace 15 o 20 años. Por lo tanto, la
cantidad de cocaína que sale de Colombia al mercado mundial, incluso ha aumentado. Desde
ese punto de vista el Plan ha sido un fracaso, pero obviamente el objetivo del Plan no era ése,
siempre fue concebido como plan contrainsurgente.
El Estado colombiano tuvo que aportar U$S 120.000 millones para el Plan Colombia
M.H.: He recabado algunos datos de distintas publicaciones que indican que de los U$S 9.000
millones que Estados Unidos entregó como parte del Plan Colombia, el 71% fue destinado a las
fuerzas armadas y de policía. Antes te comentaba sobre una entrevista que realiza la revista La
Semana a Andrés Pastrana, donde reconoce que las FARC ya no son la guerrilla arrolladora de
hace unos años, que han sido fuertemente golpeadas por el fortalecimiento de las Fuerzas
Armadas debido al Plan Colombia. Según el Pentágono, el Plan Colombia redujo el tamaño de
las FAR en 2/3 en 15 años, alejando la guerrilla de los alrededores de las ciudades y carreteras
principales. Sin embargo, el ex Presidente Andrés Pastrana, firmante originario del Plan
Colombia, refiriéndose a las negociaciones de paz en La Habana, considera que son un triunfo
para las FARC. “Lo triste es que una vez en la mesa, la guerrilla logró arrodillar al gobierno por
la vía insólita de las concesiones del fuerte al débil. Lo que la guerrilla logró en la mesa es el
lavado de su cartel”,dijo Pastrana, y agregó una frase muy fuerte, que me gustaría que
pudieras aclararnos: “La guerrilla cambió el Diario del Che por El Padrino”.
R.V.C.: Primero tengo que decir que el personaje del cual usted me habla es un personaje
absolutamente despreciable, por el nivel de postración frente a los Estados Unidos porque
cuando hablamos de este proceso de recolonización, en el cual intervienen las facciones de las
clases dominantes y el Estado colombiano, se personifica en individuos. Estamos hablando de
un proyecto de clase en el cual hay individuos sobresalientes. Y en ese proceso de entrega, de
conversión de Colombia en una nueva colonia de los EE. UU., Pastrana ha cumplido un papel
absolutamente nefasto.
Cuando se inicia el Plan Colombia hace 15 años, el gobierno de Pastrana estaba sentado en
una mesa de negociación con las FARC y en medio de esto, comienza una ingeniería para
291
fortalecer las Fuerzas Armadas, lo cual significa que nunca estuvo interesado en una solución
dialogada del conflicto armado. Mientras hablaba de paz con las FARC, estaba reorganizando el
Ejército y las Fuerzas Armadas que habían sufrido durísimos golpes militares durante los ´90. Y
lo que se puede ver en la perspectiva que dan los años, es que el Estado colombiano y las
Fuerzas Armadas se vieron obligadas a sentarse en una mesa a negociar para ganar tiempo
para rearmarse, pero no estaban interesados realmente en que se avanzara en el proceso de
paz.
Mientras se dialogaba, el Estado colombiano firmaba acuerdos con los Estados Unidos, entre
esos el Plan Colombia, pero también hubo otros menos conocidos, inclusive acuerdos secretos
de intervención directa de los EE. UU. en términos militares. ¿Qué autoridad moral tiene un
individuo como éste de dar lecciones si él es un personaje que encarna esa claudicación de las
clases dominantes en Colombia, que en lugar de impulsar reformas sustanciales en la
estructura social y económica del país, prefiere recurrir a la vía militar pensando que iban a
ganar la guerra?
Lo que hemos visto durante estos 15 años es que el Estado no pudo ganar la guerra por la vía
militar, aunque haya debilitado a las FARC, no las ha podido destruir y por eso tuvieron que
volver a sentarse a dialogar. Porque el Estado apostó a la destrucción total de la insurgencia.
Hay un costo del Plan Colombia, pero está minimizado, la inversión directa de los Estados
Unidos fue una cifra de aproximadamente 10.000 millones de dólares, pero los costos reales
aproximados, son de 130.000 millones de dólares,es decir, que el Estado colombiano tuvo que
aportar 120.000 millones de dólares. ¿De dónde salió este capital? De reformas tributarias,
nuevos impuestos, invirtiendo en el presupuesto militar y reduciendo la inversión en el sector
social, en educación, en cultura; privatizando y creando todas las condiciones para firmar
Tratados de libre comercio. Por lo tanto, hay todo eso detrás del aspecto militar del Plan
Colombia, del que no habla Pastrana.
Él hace unas afirmaciones absolutamente nefastas que reproducen la lógica colonial de los
Estados Unidos, que considera a las FARC como un cártel de la droga. Ese es un invento
norteamericano, de un embajador de los Estados Unidos en Colombia, Lewis Tamp, que acuñó
el nombre de “narcoguerrilla” en 1982. Desde ese entonces el término narcoguerrilla se ha
venido utilizando para varias cosas, primero para desprestigiar a la insurgencia, para decir que
no tiene proyecto político, que es un cartel más; y para legitimar la lucha contrainsurgente del
Estado colombiano y plegarse a los Estados Unidos en la lucha contra el narcotráfico. De allí se
desprende que no hay necesidad para ellos de ninguna reforma, ni de ninguna transformación
porque para ellos están muy bien, porque estamos hablando de una lucha puramente contra
el narcotráfico y no de una lucha contrainsurgente, contra un movimiento que tiene
reivindicaciones políticas.
Colombia es un país que se precia de ser democrático, pero ni en las peores dictaduras hay
registros tan negativos
292
M.H.: ¿Cuáles son los daños causados a la población civil por la aplicación del Plan Colombia?
R.V.C.: Los daños han sido terribles. Por eso decía que cuando uno habla de los logros o
fracasos de cualquier proyecto social, tiene que fijarse quiénes se benefician y quiénes se
perjudican. En términos negativos, podríamos nombrar algunos de los efectos más dañinos
para la población, un primer elemento profundamente nefasto es la militarización de la
sociedad colombiana. El Ejército colombiano en estos últimos años ha tenido un crecimiento
espectacular, hasta llegar a ser uno de los 15 ejércitos más grandes del mundo.
M.H.: Con 500.000 efectivos.
R.V.C.: Sin contar su influencia indirecta. Incide indirectamente en alrededor de 3 millones de
personas, hablando de los familiares de los miembros de las Fuerzas Armadas colombianas. La
vida cotidiana, el hecho de negarse a reconocer reivindicaciones sociales, militarizar todos los
aspectos de la vida, solucionar todos los conflictos por la vía de la represión. Estamos hablando
de la expulsión de entre 6 y 7 millones de campesinos de sus tierras, en un proceso que se
inició antes del Plan Colombia pero que se radicalizó durante. Hoy por hoy Colombia está entre
los primeros países con el más alto índice de expulsión interna. Estamos hablando del
acaparamiento de tierras por parte de nuevos y viejos terratenientes. Los campesinos eran
echados por la represión y la paramilitarización y esas tierras quedaron en manos de viejos y
nuevos terratenientes.
El efecto negativo que ha tenido el uso del glifosato al destruir los cultivos, destruye todo tipo
de cultivo y no solo los mal llamados cultivos ilícitos. La represión indiscriminada.
Desapariciones y asesinatos de sindicalistas, de defensores de derechos humanos. Es un
listado enorme en un país que se precia de ser democrático, pero incluso a veces en las peores
dictaduras no hay registros tan negativos como lo que pasa en Colombia.
M.H.: ¿Es imaginable un papel diferente de las Fuerzas Armadas colombianas una vez firmados
los acuerdos de La Habana?
R.V.C.: Este es uno de los elementos centrales de cualquier proceso de desmovilización e
incorporación del movimiento insurgente a la vida civil, porque hay que decir que las Fuerzas
Armadas colombianas han sido formadas en la Doctrina de la Seguridad Nacional, de la
contrainsurgencia y del anticomunismo, mucho antes del comienzo del Plan Colombia.
Estamos hablando de unas Fuerzas Armadas que fueron educadas en esa lógica en los últimos
70 años,es decir, que todos los miembros de las Fuerzas Armadas, desde la alta oficialidad
hasta los soldados rasos, han sido formados en la doctrina del enemigo interno.
El enemigo interno no es solamente el miembro armado de la insurgencia que pertenece a
éste o a aquél movimiento guerrillero; enemigo interno es lo que aquí se ha llamado, con un
término muy negativo, como “guerrilleros desarmados” que son (o somos) los profesores
293
críticos del sistema, investigadores independientes, profesores de cualquier nivel educativo,
dirigentes sindicales, dirigentes campesinos, prácticamente cualquier organización no armada
que tenga consideraciones en contra del régimen era o es considerado como guerrillero
desarmado, a los que se les aplica el mismo tratamiento que a los guerrilleros armados y el
Ejército y las Fuerzas Armadas han sido los sujetos más activos de esa práctica contra la
población civil.
Si queremos construir otro país es obvio que las Fuerzas Armadas tienen que modificarse en
muchísimas cosas, primero tienen que reducir su tamaño, porque actualmente es exagerado y
no solo por el número de miembros sino por el gasto económico que significa para el Estado
colombiano. En pocos años la carga fiscal de un ejército tan grande, cuyos efectivos se
pensionan desde muy jóvenes, desde los 40 años aproximadamente, precisamente por la
cuestión de la guerra, va a ser inmanejable.
Desde el punto de vista puramente económico eso tiene que modificarse, pero el otro punto
tiene que ver con su función, la necesidad de que vuelvan a sus cuarteles para proteger las
fronteras del país y abandonen la idea de que el enemigo está aquí, en cualquier ciudadano
que habita en las ciudades o los campos colombianos. Eso requiere de una ingeniería cultural e
ideológica que va a necesitar mucho tiempo, porque estas Fuerzas Armadas son terriblemente
anticomunistas y cuando hablamos de anticomunismo no es que se persiga solamente a
quienes se denominan como tales, sino a cualquier persona que piense diferente. Eso requiere
una modificación de esa mentalidad castrense y va a necesitar muchas décadas, no será de un
momento a otro.
Por eso mismo es que gran parte de las Fuerzas Armadas no están de acuerdo conque se firme
un acuerdo con el movimiento insurgente, porque pierden muchos de sus privilegios, que son
muchísimos, por ejemplo, en el manejo del Plan Colombia, una cantidad de manejos corruptos
en donde distintos sectores militares se han quedado con millones de dólares, pero resulta
que se les facilita porque son un poder independiente sin ningún nivel de control ni auditoría,
entonces pueden hacer lo que quieran con esos dineros sin que tenga consecuencias
investigativas o penales. Obviamente, que al cambiar la situación se va a producir un cambio
en el seno de esa conducta de las Fuerzas Armadas.
¿Van a poder las FARC hacer política sin armas?
M.H.: En este contexto, cómo podríamos interpretar la afirmación del Comandante
Timochenko, que yo pondría entre signos de interrogación: ¿Van a poder las FARC hacer
política sin armas?
R.V.C.: Ese es uno de los grandes interrogantes porque aparte de ese carácter anticomunista
de las Fuerzas Armadas, las clases dominantes de Colombia también son profundamente
anticomunistas y contrainsurgentes y lo son para mantener sus privilegios y la desigualdad que
294
caracteriza a la sociedad colombiana, que es una de las más desiguales del mundo y lo dicen
las Naciones Unidas, no solo las organizaciones de izquierda. Incluso Piketty, el economista
francés, lo señaló hace unos 20 días en una conferencia que dictó en una Universidad de
Bogotá, que solamente el 1% de la población concentra el 20% del ingreso, y creo que se
quedó corto.
Pero esto lo dice un economista que no conoce nada de la realidad colombiana, que
simplemente consultó datos macroeconómicos, los confrontó con la realidad de otros países
del capitalismo mundial y llega a la conclusión de que Colombia es un país terriblemente
desigual.
Entonces, en realidad la cuestión de la guerra y el asesinato de los oponentes tienen que ver
con mantener la desigualdad. Obviamente, los sectores políticos que quieran actuar para
contrarrestar esa realidad, van a enfrentarse al hecho o al dilema de si se les va a permitir
hacer política en ese sentido, o se los va a matar. Es un dilema que aumenta si uno recuerda
algunos hechos históricos de los últimos 60 años en Colombia, donde distintos procesos de
amnistía y desmovilización han terminado con el asesinato de guerrilleros. Como sucedió en la
década del ´50 y ´60, y como sucedió después de 1984 con la Unión Patriótica. Por lo tanto, es
uno de los interrogantes que genera la firma de un posible acuerdo que le ponga fin al
conflicto armado.
Y hay que agregarle una cuestión fundamental, qué pasa con el paramilitarismo. Si
efectivamente el Estado colombiano va a tomar medidas para desmontarlo, porque es como el
brazo parainstitucional no reconocido del Estado y las clases dominantes para hacer las labores
sucias que a ellos les quedan más difíciles.
M.H.:Días pasados, visitó en La Habana a las FARC una delegación del Centro Democrático,
partido de Álvaro Uribe. ¿Cuál es la posición de Uribe respecto de este proceso de paz que se
está llevando adelante en La Habana?
R.V.C.: Yo creo que para poder darle un manejo amplio a esa pregunta tendríamos que
situarnos en un contexto un poco más amplio que el actual. Tendríamos que situarnos en el
año 2002, cuando Uribe Vélez gana las elecciones bajo un programa absolutamente militarista
y represivo. Incluso dijo que iba a exterminar a las FARC en dos meses, luego amplía los plazos
en la medida que la misma situación de la guerra demuestra que eso no es posible.
Álvaro Uribe representa la línea más militarista, derechista y más plegada al gobierno
estadounidense que se ha vivido en la historia de Colombia. Él siempre apostó a la derrota de
la insurgencia por la vía militar, pero eso no se logró, a pesar de la terrible inversión
económica, compra de armas, modernización de las Fuerzas Armadas y la militarización de la
sociedad colombiana. Entonces, aparece como un perdedor de firmarse un acuerdo que le
ponga fin al conflicto armado, porque se demuestra en la práctica que lo que pretendía, que
era la derrota de la insurgencia, no se pudo lograr.
Él es el principal opositor de los diálogos que se llevan a cabo en La Habana, recurriendo a todo
tipo de mentiras y embustes, inclusive diciendo estupideces como que Juan Manuel Santos es
un representante del castro-chavismo en Colombia. O diciendo que el gobierno de Santos ha
hecho una entrega del país en todos los terrenos, cosa que no tiene el más mínimo elemento
295
real. Lo que pasa es que se siente sumamente frustrado y representantedeun sector de las
clases dominantes, al cual ni siquiera hoy Estados Unidos respalda.
Su momento pasó, ahora estamos hablando de un bloque de poder contrainsurgente
remozado con la hegemonía del capital financiero y no de los terratenientes y ganaderos que
representaba Uribe, que ven la necesidad de que se termine rápido el conflicto para tener
abierto el territorio colombiano para las inversiones de las multinacionales.
A ese mismo proyecto apuntan las dos vías, la de Uribe y la de Santos, lo que pasa es que la vía
uribista significaría la continuidad de una tierra arrasada en una guerra prolongada que puede
durar otras 4 o 5 décadas. Con un agravante que no lee Uribe Vélez, probablemente por su
carácter derechista y reaccionario, que en este momento hay una crisis de la economía
colombiana que se puede prolongar durante mucho tiempo, que puede significar que
necesariamente se tenga que invertir cada vez menos en la guerra.
El santismo ha comprendido esa situación y considera que es el mejor momento para ponerle
fin al conflicto armado. El uribismo logró mantener la guerra durante 8 años porque
estábamos en un ciclo ascendente de la economía colombiana, con el aumento de precios de
las materias primas, el aumento de las exportaciones de petróleo, carbón y otros minerales
permitieron direccionar dinero hacia el aparato de guerra.Hoy ese contexto económico está
cambiando.
M.H.: Ha quedado por fuera de los acuerdos de paz, el Ejército de Liberación Nacional (ELN), el
pasado 8 de febrero, el Presidente Santos ordenó intensificar operaciones en su contra, tras un
ataque de una brigada militar. Y el día posterior se conoció un mensaje difundido por el Obispo
de Cali, Darío de Jesús Monsalve, a través del cual el jefe del ELN ofreció abrir una tregua
bilateral para iniciar un diálogo de paz. ¿Qué nos podés comentar al respecto?
R.V.C.: Evidentemente si se llega a un acuerdo en el cual solamente firmen las FARC y el Estado
colombiano, va a ser muy limitado desde el terreno estrictamente militar, de la guerra
propiamente dicha, porque para que la guerra interna termine en Colombia es necesario que
todas las partes de la insurgencia participen, incluyendo al ELN. Lo que sucede es que por
múltiples razones, el Estado ha demorado el comienzo de diálogos de verdad y ha estado
solamente en la agenda exploratoria con un objetivo básico y clásico “divide y vencerás”, se
trata de dividir al movimiento insurgente y en la medida que pase más el tiempo las
condiciones de negociación del ELN van a ser mas difíciles.
En la medida en que se acerque la firma o se firme un acuerdo en La Habana, las negociaciones
van a ser más complicadas para el ELN, porque es difícil pensar que el Estado va a abrir una
mesa paralela en la cual va a llegar a los mismos acuerdos que con las FARC, es decir, llegar a
un acuerdo paralelo de justicia transicional con el ELN que no sea parecido al que firme con las
FARC. Es difícil pensar eso. Es difícil pensar que vaya a nombrar una comisión especial para el
ELN.
El régimen santista siempre fue claro en dialogar en medio de la guerra, lo ha hecho con las
FARC y veo muy difícil que acepte la propuesta de una tregua bilateral, porque el incremento
de las acciones militares tiene como objetivo debilitar las condiciones de negociación.
296
Entonces el incremento de la fuerza destinada a reprimir al ELN tiene el objetivo de que los
términos del diálogo sean más favorables al régimen y al gobierno.
Camilo Torres tiene mucho que decirles a los colombianos de hoy, aunque muchos de ellos no
lo conozcan ni sepan quién fue
M.H.: Se cumplen 50 años de la caída en combate de Camilo Torres Restrepo, el cura que había
nacido 37 años antes, un 3 de febrero, en el seno de una familia distinguida de Bogotá. Camilo
Torres era sociólogo, sacerdote, político, cursó sus estudios en la Universidad de Lovaina
donde tuvo la oportunidad de conocer a los curas obreros franceses que inspiraron el Concilio
Vaticano II y la Doctrina Social de la Iglesia. De regreso a Colombia conoce a Rolando Fals
Borda y juntos fundan el Departamento de Sociología en la Universidad Nacional. En el
Ministerio de Educación impulsa el Movimiento de acción comunal que buscaba promover la
autogestión y organización comunitaria y en el INCORA impulsó la reforma agraria. ¿Qué
significado tiene en la actualidad, a 50 años de su caída en combate, la figura de Camilo
Torres?
R.V.C.: Camilo Torres es un personaje que ha trascendido las fronteras colombianas. Se podría
decir que es patrimonio del movimiento revolucionario y anticapitalista del mundo. En el
momento en que muere en combate, hace 50 años, él se anticipa a muchas cosas de su época,
vive en los turbulentos años ´60 que tanto transformaron al mundo y que en Colombia
también tienen incidencia. Se anticipa a la Teología de la liberación, al diálogo entre marxistas
y cristianos, a empuñar las armas como una decisión ejemplar para demostrar cómo se
combatía al capitalismo.
Estos son hechos muy importantes, además de toda la agitación social que realiza, porque la
decisión que toma de empuñar las armas es casi obligada, es resultado de la persecución a la
que se ve sometido cuando se convierte en un agitador muy importante en el año ´65. Moviliza
masas en todos los lugares a los que va en Colombia y esto empieza a ser visto con
preocupación por las clases dominantes y el Estado que lo empiezan a acosar e incluso a
amenazar. Pero también es perseguido por las jerarquías católicas de Colombia que son
profundamente retrógradas y en los años ´60 eran uno de los puntales de la dominación.
Cuando muere, demuestra en la práctica lo que él llamaba “amor eficaz”, término que inventó
para hacer referencia al compromiso verdadero de un cristiano. Camilo decía que un cristiano
no era discursivo ni retórico, sino que era real, participando en las luchas de los pobres,
construyendo la solución de sus problemas, señalando las causas de las desigualdades.
Entonces, Camilo Torres tiene una agenda muy radical para la década de los ´60 que lo lleva a
tomar la decisión que tomó.
Además, es el primer sacerdote que muere en América Latina empuñando las armas y
participando en el movimiento guerrillero. De ahí en adelante Camilo se convierte en un
símbolo que guía y alimenta luchas populares en Colombia en distintos órdenes y en un
referente para el resto del mundo.
297
Cincuenta años después lo que habría que examinar es el legado y la vigencia del mensaje
teórico y práctico de Camilo Torres, cuánto ha cambiado Colombia. Me atrevería a decir que
prácticamente nada, hoy la sociedad colombiana en términos estructurales, de desigualdad,
injusticia, de polarización entre pobres y ricos, vive en las mismas condiciones que conoció
Camilo a mediados de la década del ´60. Tenemos una desigualdad marcada, tenemos el poder
de los grandes medios de comunicación que calumniaron y desprestigiaron a Camilo Torres,
tenemos las fuerzas represivas del Estado, la organización de grupos paramilitares. Todo eso
ya se empezaba a vivir en la época de Camilo Torres. La intolerancia que caracteriza a la
sociedad colombiana y a sus clases dominantes, la intolerancia religiosa, todas esas cosas
siguen presentes en la sociedad colombiana de hoy, por lo cual podemos decir que el mensaje
de Camilo Torres es muy actual, tiene mucho que decirles a los colombianos de hoy, aunque
muchos de ellos no lo conozcan ni sepan quién fue Camilo Torres Restrepo.
M.H.: Al respecto un tema específico, ¿qué fue el Frente Unido del Pueblo vinculado a la labor
política y teórica de Camilo Torres?
R.V.C.:El Frente Unido del Pueblo fue una propuesta muy importante y muy original de Camilo
Torres. Como dijo usted al principio, Camilo venía de una familia burguesa, estudió en colegios
aristocráticos, fue seminarista y luego sacerdote, en una formación ideológica, política y
cultural bastante conservadora. Pero Camilo tenía una increíble sensibilidad social y eso lo
llevó casi por sus propios medios a relacionarse con otros sectores, y a comprender en la
década del ´60 el carácter injusto y antidemocrático del capitalismo existente en Colombia. A
raíz de eso se dio cuenta de que era necesario aglutinar a las fuerzas afectadas por ese
capitalismo y esa estructura desigual de la sociedad colombiana y eso lo llevó a proponer la
creación del Frente Unido del Pueblo. Con una plataforma mínima pero muy importante,
donde decía que debían participar todos los sectores sociales para crear un frente de unidad
que enfrentara al boque de poder, al Frente Nacional, como se llamaba a la estructura
dominante de Colombia de ese momento donde liberales y conservadores se turnaban en el
manejo de la política.
En 1965 hace la propuesta, funda un periódico que lleva ese nombre “Frente Unido del
Pueblo” y publica varios números. Genera una movilización sin precedentes en la sociedad
colombiana, que solo se puede comparar con lo sucedido en la década del ´40 con Jorge
Eliecer Gaitán. Y esto asusta realmente a las clases dominantes de este país, que un sacerdote
pudiera tener ese carisma, llegar tan directamente a importantes sectores de la población.
Camilo le habla a todos los sectores sociales, les da un mensaje a los estudiantes, a los
comunistas, incluso a las Fuerzas Armadas, a distintos sectores sociales, con la perspectiva de
armar un frente unido donde se incorporaran todos los sectores sociales golpeados por el
Frente Nacional. Ese proyecto de unidad se dirige principalmente a las izquierdas de esa época
y debería ser recogido por las izquierdas de nuestro tiempo, rompiendo con sectarismos para
llegar a acuerdos sobre aspectos fundamentales, más allá de diferencias tácticas o
coyunturales.
Esta es una oportunidad histórica
298
M.H.: El pasado viernes 21 de enero hubo un encuentro aquí en Bogotá de representantes del
Polo Democrático, la Unión Patriótica, el Partido Alianza Verde y progresistas, entre otros, que
se reunieron con la idea de construir un frente común de cara a la coyuntura y a las próximas
elecciones. ¿Qué opinión te merece este encuentro?
R.V.C.: Con independencia de las apreciaciones que algún sector político pueda tener sobre la
eventual firma de un acuerdo que le ponga fin al conflicto armado entre el Estado y las FARC,
hay que decir que esta es una oportunidad histórica, no es algo que se presente todos los días
y crea nuevas condiciones de lucha política, potencia la acción política alternativa. Pero para
que esa potencia se convierta en realidad, es necesario que los sujetos sociales que
representan voces alternativas o disidentes, se organicen y aprovechen esa coyuntura. Me
parece una oportunidad para que las izquierdas de Colombia dejen de lado muchas
diferencias, que suelen ser puramente electorales y ponerse a pensar en la construcción de un
programa más de fondo, más sustancial en estas nuevas condiciones.
Uno desearía ser optimista, que las izquierdas históricas existentes aprovecharan esta
coyuntura, pero eventos recientes me hacen dudar por las rencillas que se repiten en la
mayoría de los casos, son terriblemente limitadas porque son principalmente de tipo electoral.
No creo que en una coyuntura como la que se está presentando y las nuevas condiciones que
genera, simplemente tengan como objetivo fundamental lo electoral. No digo que lo electoral
no pueda ser un instrumento, pero estamos pensando en construir un bloque de poder
alternativo que va más allá, que requiere volver a pensar en las reivindicaciones de distintos
sectores, volver a pensar en el sindicalismo, en el movimiento campesino, en las luchas de los
estudiantes. Que la o las izquierdas tengan mucho que decir frente a eso y participen en esas
luchas, porque lo que ha sucedido en Colombia durante los últimos años es una terrible
disociación entre lo social y lo político.
M.H.: El pasado 2 de febrero se reunieron 46 organizaciones sociales para plantear la iniciativa
de un paro nacional, criticando la próxima reforma tributaria y a las privatizaciones,
principalmente centrándose en el acueducto de Bogotá, en la situación de la industria
petroquímica y en el sector educativo de la capital del país. ¿Es posible que esta iniciativa se
concrete en lo inmediato?
R.V.C.: Hay condiciones muy favorables para la lucha social en estos momentos en Colombia.
Precisamente como decía antes, está cambiando el ritmo de la economía colombiana, en
términos macroeconómicos formales, la economía colombiana tuvo muchas divisas
provenientes principalmente de su modelo minero exportador. Dado el cambio mundial, por la
caída de los precios de esas materias primas, tenemos una situación contraria a lo que hay que
agregarle que el gobierno de Santos que tanto habla de paz, en la vida real es una
continuación y una radicalización del modelo neoliberal que en Colombia ya lleva un cuarto de
siglo.
Esto se da en todos los terrenos, por ejemplo, respecto a las privatizaciones, las del gobierno
de Santos son la continuación de lo que ha sucedido en estos últimos años, y la privatización
de una empresa como Isagén se inició durante el gobierno de Uribe, no se pudo completar y se
culmina durante el de Santos.
299
Esto sucede en todos los frentes, la neoliberalización de la educación es otro ejemplo, el
gobierno de Santos impulsa proyectos que favorecen la educación privada, por ejemplo, de la
educación superior universitaria. Hay un proyecto que se llama “Ser pilo paga” que significa la
transferencia de recursos del Estado a las universidades privadas en lugar de darle ese dinero a
las públicas. Son millones de pesos que serán transferidos a las universidades privadas del país.
Con respecto a las tierras se acaba de firmar un decreto para las llamadas “zonas
agroindustriales” para favorecer al capital agrario de las multinacionales y del capital
financiero nacional, en contra de los campesinos, pese a que uno de los elementos centrales
de cualquier proceso de paz en Colombia es el de la reforma agraria.
Están creadas todas las condiciones objetivas para una movilización, pero también se necesita
pensar en las condiciones subjetivas, en los niveles de organización y de movilización de los
sectores populares. Y si se llegase a cuajar algo en ese sentido, podría pensarse en la
posibilidad de un paro, porque todos los elementos están, desde el punto de vista de la
situación económica y social.
M.H.: Inclusive un dato estadístico señala que la movilización de los trabajadores colombianos
en la actualidad es cuatro veces mayor que hace diez años. Al mismo tiempo esto se vincula a
que en días recientes hubo una represión contra trabajadores judiciales en el centro de Bogotá
y con otras estadísticas que señalan que desde 1997 se han producido casi 14.000 violaciones
a la vida, a la libertad, a la integridad contra sindicalistas y de esas violaciones, 3.089 son
homicidios. Al menos esto es lo que se señaló en el Encuentro contra la criminalización de la
protesta sindical y social que se realizó en noviembre del año pasado aquí en Bogotá. A lo que
se agrega una guerra jurídica en el sentido de la declaración de ilegalidad de las huelgas, de las
1.623 protestas registradas desde 2010 el 41,5%, o sea, 675 han sido entorpecidas por
medidas judiciales que las han declarado ilegales. Dicho esto, ¿cuál es la situación actual que
atraviesa el movimiento sindical y obrero en Colombia?
R.V.C.: Ese movimiento es víctima, como ningún otro, de la represión y el asesinato. Nosotros
tenemos el dudoso mérito de ser el primer país del mundo en asesinato a dirigentes sindicales.
La cifra que usted señala es producto de investigaciones ligadas a los trabajadores, y es una
realidad cotidiana que nosotros vivimos. Ser aquí dirigente sindical es un peligro público para
la persona que ejerce esa actividad y se ha convertido casi en sentido común el asesinato de
dirigentes sindicales. El modo de ver esto es esa contrainsurgencia de la que hablaba al
principio de esta entrevista, y es que no se permite ni se tolera ninguna reivindicación social,
cualquiera sea la reivindicación y por limitada que fuese, inmediatamente es calificada como
producto de acciones terroristas y desestabilizadoras, incluso hay todo un lenguaje codificado
que se utiliza para calificar a todo este tipo de protestas. Eso en el gobierno de Santos, a pesar
de que tanto se habla de paz, no ha cambiado.
Tal vez uno de los momentos represivos que más se dio a conocer a nivel internacional fue lo
que sucedió en el año 2013, cuando fue brutalmente reprimido el Paro nacional agrario, que
incluso Santos llegó a decir en una afirmación cantinflesca que no había paro mientras el país
estaba paralizado casi como en ningún otro momento. Aquí hay una política contrainsurgente,
de rechazo a la protesta social, de rechazo a los trabajadores y desde el Estado se da desde
varios frentes, por un lado, la represión directa y brutal que siempre deja heridos, muertos y
300
personas detenidas; pero también hay una persecución jurídica que consiste en colocarle
trabas legales a la protesta.
Prohibir la protesta en los servicios públicos, siendo éstos aquello que se considera vital sin
importar la propiedad, entonces un periódico como El Tiempo o un canal de televisión como
Caracol, son considerados servicios públicos, por lo tanto, en ellos no podrían haber huelgas, si
existieran trabajadores organizados y sindicatos, porque sería calificado por los jueces como
una actividad ilegal.
Es bueno para que sea estudiado por sindicatos y abogados laborales en otros países, cómo ha
evolucionado de manera negativa la legislación laboral en Colombia. Desde 1918 cuando se
presentó una primera oleada de huelgas el Estado colombiano emite los primeros decretos en
su contra, y ahí ya aparece la idea del servicio público que en ese momento estaba restringido
a los lugares donde se estaban dando huelgas, que eran los puertos, los ferrocarriles, las
empresas de transportes. Pero desde ese año hasta el día de hoy, esa idea de servicio público
se ha ido generalizando y cubre prácticamente todos los sectores de la actividad económica
del país. En la realidad es imposible hacer huelga porque todo es considerado servicio público,
así sea de propiedad privada, como sucede con empresas petroleras porque el petróleo es
considerado un servicio público esencial. Si ese negocio lo usufructúa una multinacional y los
trabajadores hacen paro, lo más seguro es que de manera inmediata se declare prohibida por
ser servicio público.
Otro elemento que conspira contra la organización y que hace más difícil a lucha en Colombia
es la paramilitarización, no es solamente la represión por parte del Estado, sino las amenazas,
el acecho, el acoso y también las acciones criminales por parte de sectores organizados por las
empresas, por los terratenientes y comerciantes para impedir la organización de obreros,
campesinos y trabajadores. Es tristemente célebre la intervención de empresas como Coca
Cola, Nestlé y otras multinacionales directamente responsables en el asesinato de dirigentes
sindicales, ellos han financiado y organizado grupos paramilitares para que maten a los
trabajadores.
Todo este es un contexto que debe transformarse a la hora de hablar del fin del conflicto
armado en Colombia, porque la lucha social debe desenvolverse por muchas causas en donde
se rompa con esa lógica represiva del Estado colombiano de prohibir la movilización, aunque
formalmente en la ley exista su autorización y se diga que este es un país democrático en el
que se respeta la libertad de pensamiento y de organización.
M.H.: Al respecto estaba consignando el caso de Húbert de Jesús Ballesteros Gómez, que en
agosto de 2013 integraba la comisión de negociación del Paro nacional agrario y popular, la
movilización agraria más importante que se ha dado en los últimos 30 años en Colombia y
luego fue detenido.
R.V.C.: Detenido y está condenado a 15 años de cárcel.
Estamos llegando al fin de un ciclo de ficticia prosperidad para la clase media
M.H.: Hiciste referencia en dos oportunidades a la situación económica del país. Hay algunos
datos preocupantes, la caída del precio del petróleo ha afectado fuertemente la caída del
301
presupuesto fiscal, 5.45 billones de pesos de los cuales el presupuesto en regiones bajará en
3.4 billones, lo que representa un 30.8% del presupuesto asignado.
Otro dato es el descenso de las ventas externas durante 2015 que se ha conocido por estos
días, casi un 35%. Frente a lo cual el gobierno prepara una reforma tributaria, entre otros
aspectos que han trascendido de esta reforma, se habla del aumento del IVA, e inclusive
dentro de esta visita que se hizo a Estados Unidos, donde se reunieron los Presidentes Obama
y Santos también hubo reuniones con funcionarios económicos por parte de las principales
calificadoras de riesgo, que amenazan con bajar la nota crediticia de Colombia en la medida
que el gobierno no equilibre las cuentas fiscales. Este fue el mensaje que dejaron claro en
Washington, al Ministro de Hacienda Mauricio Cárdenas Santa María, las calificadoras de
riesgo. ¿Qué podés agregar a estos elementos que tienen que ver con la situación económica
que atraviesa Colombia?
R.V.C.: Me parece que esa es una exposición bastante completa de los indicadores. Lo que
puedo agregar es que esta situación coyuntural es el resultado de una decisión de mediano y
largo plazo que se tomó hace ya 25 a 30 años y que significó desindustrializar al país y optar
por convertirlo en un país exportador de materias primas.
En términos estructurales de largo plazo, creo que esa es la explicación básica para entender lo
que está pasando en el momento actual. Aquí, como ha sucedido en varios países de América
Latina, incluso en países con distintos regímenes políticos, se consolidó la venta de materias
primas, en nuestro caso principalmente mineras. La balanza comercial de Colombia, encuentra
que los productos que más generaban y generan ingresos a la economía son el petróleo y el
carbón; el café que durante mucho tiempo fue el principal producto, hoy es el tercero o cuarto
en esa balanza comercial.
Ese crecimiento que se presentó entre 2001 y 2010 se debió a los altos precios de las materias
primas. Cuando caen los precios de las materias primas, inmediatamente se ve el efecto
negativo que produce que un país dependa del sector exportador más tradicional, el primario.
El ejemplo del petróleo es crucial, hoy se cotiza a menos de 25 dólares el barril de petróleo
colombiano, mientras que en un momento llegó a cotizarse a 90 dólares, estamos hablando de
una caída catastrófica que se va a intensificar en las próximas semanas. Gran parte de lo que
se había presupuestado para los años por venir, estaba relacionado con el sostenimiento de
esos ingresos con un precio del petróleo elevado, pero no solamente sucede con el petróleo,
también con el precio del carbón, del níquel, que han caído internacionalmente. Colombia es
el principal exportador de carbón de Latinoamérica, los principales compradores son Estados
Unidos y Canadá. Entonces, esto va a afectar a la economía colombiana, pero hay un factor
adicional que en el listado que usted señala no se nombra y es el de la devaluación.
Resulta que el peso colombiano estuvo revaluado de manera artificial durante casi el mismo
período de aparente prosperidad económica que estábamos señalando. Lo que permitió la
revaluación del peso colombiano fue que este país se inundara de mercancías y tecnología
producida por el capitalismo mundial, lo que incluso permitió darle cierta base social al modelo
neoliberal en las ciudades, porque la clase media empezó a tener acceso al automóvil, que era
un bien suntuario en otra época, a todo tipo de artefactos electrónicos. Colombia es un país
inundado de celulares, es el país de América Latina en el que más celulares hay. Esa
mercadería ingresó al país a un relativo bajo precio, un precio artificial que ahora está
desapareciendo, entonces ahora todos esos aparatos, automóviles y todo lo que el país
302
compró en el exterior, que es casi todo, porque aquí se compra casi el 90% de los productos
agrícolas que se consumen, ahora está llegando encarecido.
Hace un año el precio del dólar era de 2.600 pesos, hoy está a 3.400. Es decir que estamos
llegando al fin de un ciclo de ficticia prosperidad para la clase media. Esta clase media, además
de no poder comprar más por la suba de precios, está terriblemente endeudada. Este es otro
elemento de la coyuntura importante de resaltar, no solo por sus implicaciones económicas,
sino porque sabemos que tiene implicaciones políticas, sociales y culturales también. Esa clase
media que nunca ha sido fuerte en Colombia, pero que tuvo un momento de despegue en los
últimos 12 años, ha llegado a un límite; entonces habrá que ver qué sucede con esos sectores
cuando ya no tengan cómo pagar la tarjeta de crédito, la cuota del automóvil, la del
departamento o no tengan cómo cambiar de celular, etc. Es un impacto que no se ha
estudiado con suficiente énfasis, porque pone en discusión el agotamiento de un modelo que
había dado algunas migajas a esa clase media.
El ser humano nunca renuncia a la lucha y la esperanza sirve para buscar salidas
M.H.: En uno de tus últimos trabajos, de diciembre, publicado en Rebelión.org, te referís a una
categoría que entiendo es de tu autoría, que es la de “tecno-fascismo”.
R.V.C.: Este término lo he venido usando durante los últimos años en distintas publicaciones,
muy preocupado por el impacto que la tecnología tiene en el mundo contemporáneo sobre la
gente. Me importa analizar a la tecnología no como una fuerza neutra, como generalmente se
suele hacer, sino como un componente más de nuevas formas de dominación. A partir de esa
preocupación, me llama la atención que diversas clases sociales se hayan rendido
acríticamente a la tecnología, incluyendo a grandes sectores de la izquierda mundial, partiendo
de una consideración bastante discutible de las fuerzas productivas, hablando en terminología
marxista. Y siendo que las fuerzas productivas nos vayan a conducir finalmente a la liberación y
a un desarrollo humano teniendo en cuenta nuevas investigaciones y nuevos productos en el
ámbito de la tecnología.
Sin embargo, viendo la realidad uno se encuentra con que hay sectores profundamente
retrógrados en términos políticos que utilizan las tecnologías más desarrolladas para sus
proyectos. Y en ese sentido es que refuerzo la idea del tecno-fascismo, que supone pensar a
ese sector no solo como completamente retrógrado, conservador y reaccionario, que lo es, sin
estar desligado del uso de las tecnologías más modernas y sofisticadas, incluso como nuevas
formas de control.
Sería importante volver a estudiar el mismo nazismo, porque cuando se lo estudia hay una
tendencia que dice que era lo más opuesto a la ciencia y a la modernidad, pero investigaciones
contemporáneas muy serias han demostrado que el nazismo ha sido la variante más radical de
la modernización capitalista, incluso en el ámbito tecnológico, a punto de que la tecnología se
aplicó a la muerte de millones de personas en los campos de concentración, por ejemplo, el
trabajo allí era la muerte industrial, la muerte programada. Los hornos crematorios usados
para matar personas estaban programados industrialmente. El mismo fascismo supuso una
303
particular utilización de la tecnología, por eso pensadores como Benjamin y su crítica al
fascismo, a la socialdemocracia y a distintos sectores de la izquierda de la época que decían
que había que romper con ese culto acrítico a las fuerzas productivas, que había que ver a la
tecnología como un elemento contradictorio de lucha y de combate.
A mí me llama hoy la atención cómo la tecnología es un dispositivo de control absoluto de la
población y vigilancia las 24 horas por medio de distintos mecanismos. Las ciudades están
llenas de cámaras de video que registran todos los movimientos de las personas, en el
transporte público pasa lo mismo, el teléfono celular es un elemento de control. Así
sucesivamente podríamos enumerar muchos ejemplos y por eso digo que la izquierda debe
repensar la tecnología.
M.H.: ¿Hay lugar para la esperanza?
R.V.C.: Digamos que por supuesto, yo creo que el ser humano nunca renuncia a la lucha y creo
que eso es lo que nos diferencia de los demás animales, a pesar de tener nuestra parte de
animalidad.
La búsqueda de nuevos caminos y soluciones a los problemas tiene que seguir siendo parte del
horizonte humano. Recuerdo lo que decía Eduardo Galeano cuando le preguntaban para qué
servía la utopía y decía que servía para caminar. Me parece que lo mismo podemos decir de la
esperanza, el principio del que tanto hablaba el filósofo Ernst Bloch es que la esperanza, a
pesar de las condiciones duras en las que nos encontremos, sirve para buscar salidas. Lo que
pasa es que a uno le toca el papel más difícil, que es el de mostrar los problemas, esa es una
característica fundamental del pensamiento crítico, pero también bosqueja y postula salidas a
pesar de las dificultades.
M.H.: ¿Algo para agregar?
R.V.C.: Simplemente saludar a los medios con los que usted trabaja y a los lectores y oyentes
que lo siguen. Porque me parece muy importante la labor que realiza. Si hay algo que
necesitamos hoy es abrir nuevos espacios de pensamiento y de crítica ante el monopolio
abrumador que tienen los medios de comunicación mundial y a escala nacional. Este también
es un problema que estamos afrontando y vamos a afrontar en Colombia en el futuro
inmediato, porque uno de los grandes responsables de la guerra y la tragedia que los
colombianos hemos vivido en las últimas décadas, son los grandes monopolios de la
información. Ellos se oponen al proceso de paz, viven una diabolización permanente de las
voces disidentes, que necesitan poder expresarse si queremos construir un país decente,
donde podamos hablar y se nos permita pensar distinto. En esa labor los medios de
comunicación alternativos son fundamentales, por eso creo que el papel que usted realiza
Mario, en Buenos Aires y en Argentina, tiene mucho valor.
304
AGENDA SETTING: Legitimación y gestión. Dos elementos para evaluar la
comunicación política por Mario Riorda
http://www.voces.com.uy/articulos1/agendasettinglegitimacionygestiondoselementosparaevaluarlacomunicacionpoliticapormari
oriorda
Hay por lo menos dos tipos de comunicaciones que, en la región (y quizás en buena
parte del mundo occidental), aparecen simultáneamente en el marco de la política,
especialmente para los gobiernos. Pero no siempre se las visualiza, analiza o
implementa unidas. Una más clásica, tradicional, pero que ha tomado formas y
dimensiones inusitadas; y otra novedosa, atravesada y conmovida por los desafíos de
lo digital.
Una visión legitimante de la política
El mito de gobierno es la comunicación de tipo simbólica que tiene la función de
generar esperanza y que, una vez instalada, puede alimentarse a sí misma siempre y
cuando exista coherencia entre la narrativa esbozada y las políticas públicas
implementadas. Relato, a secas, es el nombre vulgar con el que se lo conoce.
Viene a representar el ejercicio coherente de lo propuesto discursivamente como
contrato de gestión en la faz electoral y la actualización de lo mejorable o aggiornable
de ese contrato, una vez que se es gobierno. Y no es menor su tarea. Hace varias
décadas ya, David Easton pregonaba que lo que permite un sistema político exitoso,
es aquello que resulta de dar cumplimiento a dos funciones: la tarea de asignar
valores en una sociedad dada; y el intento de conseguir que la mayoría de dicha
sociedad acepte esa asignación valorativa la mayor cantidad del tiempo posible.
Y encima esos valores que toman forma de relato, se dan entre dos contrastes muy
marcados y una serie de grises (o versiones menos espectaculares) entre ambos
extremos que representan ideologías y estilos de la representación política.
El contraste entre lo refundacional: una relativa independencia para “el pueblo” todos- en desmedro del país para “ellos” -los pocos-. Vigente en algunos países, ha
venido cayendo como un efecto dominó en varias elecciones en estos dos años.
Frente a la idea restauradora de un país normal, el que crece y le va mejor ocupando
un rol en el mundo. Mientras mejor nos vean de afuera, mejor estaremos los de
adentro y con más desarrollo. Depende de las inversiones. Daría la sensación que es
el modelo en boga en estos días, pero su eficacia no ha podido ser comprobada, ni en
los países que hace tiempo están en este modelo, ni en el interrogante que por ahora
representa Argentina.
El primer modelo incluye, el segundo modelo hace crecer.
En el primer modelo la institucionalidad sirve siempre que no frene ni complique el
empoderamiento ciudadano. La igualdad es la guía.
En el segundo modelo la institucionalidad lo es todo, porque ella es el faro de la
libertad.
Y en ese marco juegan los ciudadanos también, y en el medio, los medios “median”
para un lado y para el otro. Y, aunque no se lo aprecie, los ciudadanos no fluctúan de
un día para el otro. Tampoco las ideologías encarnadas en líderes que no aparecen
tan claras en una versión dicotómica del siglo XX pero son constitutivas del
pensamiento de aquellos.
Entre estos dos contrastes sucede la política, y por ende, la política comunicacional
de América Latina.
Una visión de gestión de la comunicación
305
Pero hay otro abordaje a gran escala desde la comunicación, en donde los gobiernos
envejecen. Algunas tendencias -que además mutan aceleradamente y
probablemente queden viejas mañana-: respecto al tiempo promedio que un usuario
de servicios está dispuesto a esperar para obtener una respuesta en redes sociales,
más del 70% afirma que no debiera superar los 15 minutos según muestra en redes. Y
sólo el 7% aceptaría entre una hora y 3 horas. Los usuarios de smartphones ya
superan holgadamente en 200 veces la cantidad de chequeos que hacen diariamente
a su celular. Y encima la población digitalizada, a medida que baja de edad, deja de
usar los correos como modo de interacción y son las redes -incluso públicas o
grupales- el ámbito de diálogo.
¿Y qué hacen los gobiernos frente a esta realidad? Publicitan. Del mismo modo que lo
harían por TV. Y gastan. Mucho. Y hablan. Mucho. Pero dialogan poco, responden
poco, gestionan poco -como interacción de políticas o servicios públicos-. Y gran
parte de la publicidad tiene que ver con mantener la comunicación legitimante por
encima de la gestión de políticas propiamente dichas.
Hay una excesiva inversión en pauta publicitaria, en tecnologías, pero a los gobiernos
les cuesta entender a las redes como medios de gestión. Les cuesta entender que los
ciudadanos acuden a las redes para ser atendidos como si fuera una gran mesa de
entrada en un edificio público. Más del 87% de los ciudadanos recurrió a internet
para plantear dudas o quejas en algún momento según Lithium. ¿Por qué no lo haría
con un gobierno?.
Por ende, frente a las redes, el modelo de gestión atrasa, envejece. No obstante, el
modelo de representación que los gobiernos proponen no ha cambiado tanto. En las
cuentas personales de los gobernantes, el híper-personalismo es extremo, como si
fueran nuevos celebrities sin intercambio ni horizontalidad.
Y en la cuentas -llamadas institucionales- de gobierno, hay publicidad y en el mejor
de los casos información, no interacción. Aparece un ecosistema de nuevas
posibilidades y ello exige más convergencia, pero no se destrona el reinado de
Twitter, Facebook y You Tube.
No se muestran avances hacia instancias de gobierno abierto y transparencia
colaborativa. En el estudio Gobernauta del BID, en promedio, los gobiernos sólo
dedican el 1% de acciones focalizadas en la agenda de participación, transparencia o
gobierno abierto. No se propicia desde ellos nuevas acciones de fiscalización y
rendición de cuentas ciudadanas, vale decir, mejorar las chances de ser monitoreado,
escrutado.
No se avanza hacia acciones de microsegmentación, es decir, cuando cada acto
comunicacional es “uno a uno” en la relación gobierno/ciudadano, pero más que ello,
cuando cada comunicación es también un servicio. ¿A que equivale esto? A
comunicar más que publicitar.
No se alientan instancias colaborativas participativas sobre políticas públicas bajo la
premisa de escuchar y ser condicionado por esa escucha. Sólo el 2,2% de los tuits de
los alcaldes de ciudades de más de un millón de habitantes en América latina están
dedicados a algo tan básico como preguntar algo. Vale decir, cuentan con modestos
signos de interrogación sobre alguna temática.
Síntesis: nuevos rockstars, estéticamente controlados, publicitados las 24 horas y casi
nula interacción. De gestión y hacer la vida un poco más fácil a los ciudadanos, ni
hablar. La legitimidad, siempre un poco más lejos y todavía permanece en una visión
estática y dicotómica donde no tiene por qué haber verdades últimas. La legitimidad
y los consensos también se gestionan en el sentido más literal del término, y las redes
pueden colaborar en ese cometido. pero mientras se avanza en la gestión, casi a un
306
nivel estratosférico, todo el día todo los días hay una batalla por la significación, por
el rumbo de un gobierno, por el modelo que se da en las palabras, que se da en los
estilos, que se representa en las ideologías de las políticas, pero donde las redes
siguen publicitando, más que hacerle la vida más fácil a los ciudadanos.
Todavía el pensamiento político y los gobiernos (de un lado y del otro en las posturas
legitimantes), cargan con una herencia del siglo pasado en donde, desde la
comunicación, sobra la retórica, pero falta más adaptación para la gestión.
307
Descargar