Resumen del argumento: HabÃ−a una vez, una niña llamada Alicia, que estaba con su hermana junto al rÃ−o. Su hermana estaba leyendo un libro, mientras que Alicia empezaba a sentirse cansada sin nada que hacer. AsÃ− que se levanto y comenzó a recoger flores, cuando de pronto vio a un Conejo Blanco que llevaba un reloj de bolsillo, y Alicia muerta de curiosidad fue tras él. El conejo se metió dentro de una grande madriguera, que era como un pozo, Alicia iba cayendo mientras miraba las paredes del pozo eran armarios y estanterÃ−as. Paso un buen rato hasta que cayera, y cuando al fin cayó, cayó encima de un montón de ramitas y hojas secas, y en frente se encontraba un pasillo donde se veÃ−a el Conejo Blanco. Alicia se puso a perseguirlo, pero de pronto perdió al conejo de vista, en donde se encontraba en un vestÃ−bulo, rodeada de puertas, pero todas estaban cerradas. Alicia se preguntaba como iba a salir de allÃ−, y de pronto, tropo con una mesita de cristal, que habÃ−a una diminuta llave dorada. Pero esa llave no habrÃ−a ninguna de esas puertas. Sin embargo, al hacer un segundo vistazo al vestÃ−bulo, dio con una cortina, y allÃ− se encontraba una puertecita, metió la llavecita en la cerradura, y Alicia abrió la puerta. A través de la puerta se veÃ−a un hermoso jardÃ−n. Alicia querÃ−a a atravesar la puertecita, pero ella era demasiado grande para pasar por esa diminuta puerta. Y entonces, en la mesa de cristal apareció un frasco con una etiqueta que ponÃ−a “BEBà ME”. Alicia tuvo alguna duda si ese frasco tenia alguna sustancia de veneno, pero no vio ninguna etiqueta que advirtiera, asÃ− que Alicia probó el contenido del frasco, que sabia a una mezcla de tarta de cerezas…, y le gusto tanto que se lo acabó. Y de pronto, Alicia iba encogiendo como un catalejo, al pensar que tenÃ−a la medida perfecta para atravesar la puertecita para ir al jardÃ−n. Cuando Alicia llego a la puerta, recordó que se le habÃ−a olvidado la llavecita para abrir la puerta, y cuando volvió a la mesa a por ella, se dio cuenta que no podÃ−a alcanzarla. Y cuando al fin se cansó de intentar alcanzar la llave se echó a llorar. Al poco rato encontró una cajita de cristal que habÃ−a debajo la mesa, la abrió y habÃ−a un diminuto pastel, sobre cual se leÃ−a la palabra “Cà MEME”. Y Alicia le dio un mordisquito, pero no pasaba nada, seguÃ−a con el mismo tamaño, asÃ− que se acabó todo el pastel. Después de unos minutos, Comenzó a crecer, y pudo alcanzar la llave para abrir esa puertecita, pero no podÃ−a ir al otro lado de la puerta, porque era demasiado grande. Y al cabo de un rato, oyó unos pasitos a lo lejos, era el Conejo Blanco, que estaba de vuelta, iba trotando con mucha prisa. Cuando el conejo vio a Alicia se escabullo en la oscuridad. Después de unos minutos, Alicia resbaló i se encontró hundida en agua salada, eso era por que Alicia habÃ−a llorado mucho. Y cuando iba nadando para encontrar una salida, se encontró con un ratón. El ratón y Alicia empezaron a ir hacia la orilla, y allÃ− se encontró con animales muy raros. Alicia les explicó a todos los animales que habÃ−a allÃ− en la orilla, lo buena que era su gata Dinah. Y todos se fueron y Alicia se quedo sola, en poco rato oyó unos pasitos, era el Conejo Blanco, que parecÃ−a que estaba buscando sus guantes blancos y su abanico, el conejo blanco gritó Alicia como si fuera su doncella, para que fuera a su casa a buscarle un par de guantes y un abanico, y Alicia se asustó y salió corriendo para la dirección que le habÃ−a indicado el conejo. Enseguida encontró una casita, que en la placa de latón ponÃ−a “C. Blanco”. Alicia entró a la casa, y rápidamente encontró el abanico y un par de guantes. Y allÃ− mismo habÃ−a un frasquito, pero no ponÃ−a nada de “bébeme”, entonces se lo bebo, y fue creciendo. Y cuando finalmente paro de crecer, ella estaba muy incómoda porque estaba apretujada y no podÃ−a salir de esa situación. y en pocos minutos, Alicia escuchaba al conejo blanco, diciéndole que le trajera rápidamente los guantes y el abanico. El conejo blanco entro a la casa, iba subiendo por las escaleras, cuando el Conejo abrió la puerta de la habitación, no podÃ−a abrir la puerta porque Alicia tenÃ−a el codo allÃ− apoyado, entonces el conejo dijo que entrarÃ−a por al ventana, el conejo vio que estaba el brazo de Alicia, y dio un manotazo en el aire, pero se cayó dentro del invernadero, allÃ− se encontraba con Pat, y el conejo del explicó que por al ventana se veÃ−a un brazo, y entonces pasó una lagartija con una escalera y 1 entonces Bill, la lagartija entró por la chimenea, pero Alicia como escuchó que alguien entrarÃ−a por la chimenea, y entonces Alicia bajó el pie por la chimenea y esperó a que oyera a alguien, y entonces cuando escuchó algo dio un brusco puntapié. Entonces el Conejo y Pat, y hicieron una lluvia de pequeños guijarros y algunos le golpeaban, pero de pronto Alicia observó, que todos los guijarros se estaban convirtiendo en pastelillos según caÃ−an al suelo. Y entonces Alicia tuvo una idea, que se tenÃ−a que comer alguno de esos pastelillos para cambiar su estatura. Cuando empezó a encogerse, salió corriendo de la casa, hasta que llegó a un bosque. Y allÃ− lo primero que tenÃ−a que hacer, era comer algo, para recuperar su estatura original. Cuando Alicia estaba buscando algo para comer…se encontró con una enorme seta. Alicia querÃ−a mirar que habÃ−a debajo la seta, pero también querÃ−a mirar lo que habÃ−a en lo alto de la gran seta. Se puso de puntillas y echó un vistazo, y de pronto apareció una enorme oruga azul que estaba sentada en la seta, y fumando. Alicia empezó hablar con la oruga, y Alicia le explicaba que querÃ−a crecer un poco más, y la oruga le dijo que comiera un trozo de seta, pero que un lado le hará crecer y el otro lado le hará encoger, y cuando dijo esas palabras la oruga desapareció. Alicia cogió un trozo por cada lado, probó un trozo, pero le izo encoger, y después comió el otro y la hizo crecer tanto que no veÃ−a sus hombros ni sus manos. Entonces Alicia cogió los dos trozos de las setas, e iba mordiendo uno y luego el otro, y asÃ− hasta que consiguiera su estatura normal. Pero entonces llegó a una pequeña casita, y comenzó a comer un poco de la seta para ser algo más pequeña. Alicia fue hasta la casa, y allÃ− en la entrada habÃ−a dos “lacayos”. Cuando Alicia se atrevió a hablar con ellos, uno ya se habÃ−a ido por el otro seguÃ−a allÃ− sentado en el suelo. Alicia hablo con ellos pero no sirvió de nada, asÃ− que abrió a puerta de la casa, y daba directamente a la cocina, que allÃ− habÃ−a un gato con una enorme sonrisa. Y la Duquesa se hallaba en el centro, sentada con un niño en brazos. Alicia comenzó a hablar con la Duquesa. De pronto la Duquesa se levanto y dejo al niño a los brazos de Alicia, ella tenÃ−a que irse a jugar al cróquet con la Reina. Y entonces Alicia vio que el niño no era un bebe, sino un cerdo (por eso gruñÃ−a tanto). Alicia se canso de tener el cerdo en las manos y lo dejo allÃ−. Cuando de pronto Alicia vio al Gato de Cheshire sentado en la rama de un árbol. Entonces Alicia comenzó ha hablar con él. Alicia le pregunto que dirección tenia que tomar para ir a algún lado, el Gato le dijo que por la derecha vive un Sombrero, y por la izquierda vive una Liebre de Marzo. Y entonces el gato desapareció. Y entonces Alicia fue a visitar a la Liebre de Marzo. No habÃ−a caminado mucho más cuando vio la casa de la Liebre de Marzo, habÃ−a una mesa bajo un árbol frente a la casa, y la Liebre de Marzo y el Sombrerero y un Lirón estaban tomando té allÃ−. La Liebre de Marzo y el Sombrerero vieron a Alicia, y la pusieron en un sillón. Entonces empezaron hablar de adivinanzas, pero entonces el Lirón comenzó a contar un cuento. Alicia no aguanto más de estar allÃ−, con tanta groserÃ−a que le deba el Sombrerero, asÃ− que se fue disgustada. Alicia retomaba su camina por el bosque, y de pronto, observó uno de los árboles tenÃ−a una puerta para entrar en él, y Alicia entró. Una vez dentro, se hallo en el largo vestÃ−bulo, cerca de la mesita de cristal, cogió la llavecita dorada que habÃ−a allÃ−, y abrir la puerta que daba al jardÃ−n. Luego mordisqueo la seta que habÃ−a guardado para encoger unos centÃ−metros. Entonces por fin se encontró en el hermoso jardÃ−n. En el jardÃ−n habÃ−an grandes rosas blancas, pero tres jardineros las estaban pintando de rojo, porque la Reina las querÃ−a rojas. Cuando Alicia estaba hablando con los jardineros, apareció la Reina y el Rey de corazones. La Reina se puso a hablar con Alicia, y mientras estaba hablando con ella, observó las rosas que estaban pintadas de rojo, y los tres jardineros que estaban al lado de los arbustos, la Reina los decapito. Después de unos minutos, la Reina le preguntó a Alicia si sabia jugar al cróquet, y Alicia dijo que si. Entonces Alicia se unió al cortejo, y observó que estaba el Conejo Blanco. En el campo de cróquet, las pelotas eran erizos vivos, y los mazos flamencos. 2 Cuando Alicia ya estaba un poco incómoda, la sonrisa del Gato de Cheshire apareció, y cuando apareció toda la cabeza del gato, Alicia empezó hablar con él, y entonces apareció el Rey. Al rey no le cayó viene ese gato y entonces llamo a la Reina para que lo echara o decapitara. El Rey, la Reina y el verdugo, tenÃ−an una pelea sobre decapitar el gato. El verdugo comentaba que no se podÃ−a cortar una cabeza a menos que hubiera un cuerpo del que cortarla. El Rey comentaba que cualquier cosa que tuviera una cabeza podÃ−a decapitarse, y la Reina decÃ−a que si no se resolvÃ−a la cuestión en menos de un minuto, harÃ−a ejecutar a todo el mundo. Y entonces los tres acudieron a Alicia, y Alicia les dijo que el gato pertenecÃ−a a la Duquesa, y lo mejor serÃ−a preguntarle a ella. Pero la Duquesa estaba en prisión, y la Reina dijo que la traerla aquÃ−, y cuando llego la Duquesa el Gato ya habÃ−a desaparecido. Cuando la Duquesa vio a Alicia, se cogieron cariñosamente, y se alejaron un poco para hablar. Cuando estaban hablando de moralejas, apareció al Reina. La Reina le dijo a la Duquesa que desapareciera ella, o su cabeza, asÃ− que la Duquesa desapareció como un periquete. Y entonces la Reina y Alicia volvieron al juego. Durante todo el tiempo que estuvieron jugando la Reina nuca dejaba de discutir con los otros jugadores, y entonces la Reina abandonó el partido, casi sin aliento, y le dijo a Alicia que si habÃ−a visto la Falsa Tortuga. Alicia nunca habÃ−a escuchado hablar de ella, y entonces la reina y Alicia se fueron a que la Tortuga le contará su historia. Muy pronto toparon con un Grifo y entonces la Reina le dijo al Grifo que la llevara a ver a la Falsa Tortuga. Cuando llegaron la Falsa Tortuga estaba sentada en una roca, triste y solitaria…entonces el Grifo le dijo a la Tortuga que Alicia querÃ−a saber su historia, y entonces la Falsa Tortuga se la contó a los dos. Mientras la Falsa Tortuga estaba cantando una canción, el Grifo escuchó desde lejos que decÃ−an que habÃ−a empezado el juicio, de ¿quién robó las tartas? y entonces cogió Alicia y se marcharon. Cuando llegaron, el Rey y la Reina, estaban senados en su trono. En el centro habÃ−a una mesa, con una enorme fuente de tartas encima. El Rey era el juez, porque llevaba una peluca, y encima la corona. El juicio comenzó, y trajeron el primer testigo, que era el Sombrerero. El sombrerero estaba confuso y dio un mordisco a la taza en lugar del trozo de pan con mantequilla, y justo entonces Alicia comenzó a crecer de nuevo. Al final el sombrerero se pudo ir, porque nombró a los conejillos de indias, y entonces apareció el segundo testigo, que era la cocinera de la Duquesa. Cuando la cocinera contestó de que eran las tartas, dijo que eran de pimienta, y entonces al lirón se le escapó decir que era de Melaza, y entonces cogieron al lirón, y la cocinera habÃ−a desaparecido. Pero después llamaron el otro testigo, que era Alicia. Mientras que Alicia estaba declarándose, entonces llego un papel, que ponÃ−a unos versos. Pero no se sabÃ−a si tenÃ−a algún significado o algo. Después de unos minutos Alicia y la Reina se pusieron a discutir, y entonces como Alicia dijo que era solo una baraja, le lanzó al aire una baraja entera, Alicia soltó un gritito, y entonces se halló echada a las orillas del rÃ−o, con la cabeza en el regazo de su hermana, que apartaba unas hojas secas que habÃ−an caÃ−do de los árboles. Entonces su Hermana le dijo que se levantara, y Alicia le explicó que tuvo un sueño muy curioso, y le intento contar todas las aventuras de las que pudo recordar. Entonces su hermana le dijo que fuera a tomarse el té, y entonces Alicia se fue corriendo y su hermana se puso a soñar a su manera. Finalmente trató de imaginar cómo serÃ−a Alicia cuando se convirtiera en una mujer adulta, y cómo se sentirÃ−a con sus simples penas y cómo gozarÃ−a recordando su propia infancia, y los felices dÃ−as de verano. 1 3