NAVEGACION ANONIMA

Los servicios de navegación anónima, vía de escape hacia las
páginas censuradas en Internet
Fuente: ABC.es (20 Noviembre 2002)
La navegación anónima total no es posible porque siempre dejamos la estela de
nuestro ciberviaje, aunque hay varios recursos para preservar la privacidad
MADRID. Los servicios para navegar en el anonimato por la Red están siendo la
alternativa a lo que cada día más países ejercen sobre Internet: la censura. El caso más
flagrante es el de China que ha llegado incluso a bloquear los buscadores Google y
Altavista. Pero los gobiernos de muchos otros países -hasta 58 ha contabilizado la
organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) en su última lista publicada en febrero, y
espera ampliarla con 40 países más cuando emita la próxima en enero- impiden con filtros
el acceso a contenidos, considerados ponzoñosos, de esa ventana al mundo que es la Red.
Una manera cada vez más utilizada de evadir esos filtros, por su sencillez y comodidad de
uso, es utilizar alguno de los muchos los servicios que facilitan la navegación sin dejar
huellas evidentes de nuestro ciberviaje. Hay que matizar que la navegación anónima en
sentido estricto no existe, nuestra travesía siempre será rastreable, pues quedará
registrada en servidores.
Cuando nos adentramos en la Red dejamos un rastro preciso de nuestro recorrido a través
de ella. Los proveedores de servicios de Internet (ISP) asignan a sus usuarios una
dirección IP (un código formado por cuatro números separados por puntos, por ejemplo
«194.179.16.5»), que nos identifica en todas las web que visitemos. Los correos
electrónicos también indican nuestra IP. Los servicios de navegación anónima
proporcionan la privacidad interponiéndose entre nuestro navegador y los sitios visitados.
Cuando uno se conecta a uno de estos «anonimizadores» sólo hay que introducir la URL a
la que se desea ir y nos mostrará la página. Es decir, que accedemos a la página a través
del servidor del servicio de navegación anónima que es que el quedará registrado al
acceder a la web.
Algunos inconvenientes
Pero estos servicios de navegación anónima presentan algunos inconvenientes: no
funcionan con todos los sitios ni con los servidores seguros; desactivan los programas en
Java, JavaScript, ActiveX o similares por lo que habrá páginas que no podamos ver
correctamente (ventaja para algunos internarnautas ya que evita que se habran ventanas
o programas no deseados); no se reciben «cookies» por lo que en las web que las utilicen
pueden no visualizar algún tipo de información (también puede ser una ventaja);
ralentizan la navegación porque se realiza la comunicación a través de un servidor que
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actúa como intermediario; para un servicio óptimo hay que pagar; en algunos casos
introducen publicidad en la página consultada; por último, pueden obtener todos los datos
personales del internauta.
Otra opción para navegar de forma anónima por la Red es a través de servidores «proxy»
anónimos. que actúan de manera semejante a los «anonimizadores» aunque presentan
algunas limitaiones frente a éstos. Además, no siempre aseguran la privacidad y hay que
actualizarlos continuamente. Al utilizarlos, debemos modificar en el navegador los
parámetros para que reconozca el nuevo «proxy». En esta web se encuentra un listado de
«proxies» anónimos (www.proxys4all.com).
También hay programas para la navegación mediante «proxies» como por ejemplo
Anonymity 4 Proxy (www.inetprivacy.com/a4proxy/), disponible en español pero por el
que hay que pagar aunque se puede descargar una versión de prueba en la web. El
programa asigna una IP en cada conexión.
Correo anónimo
Se pueden usar repetidores de correo anónimos («remailers») gratuitos como Riot que se
encuentra en esta web (www.all-nettools.com/tools4.htm). Los «remailers» eliminan el
remitente. El correo llega en un lapso aleatorio (en Riot, entre 2 y 48 horas), sin saber
quien lo envía y sin poder contestar.
Más seguro para preservar la intimidad al enviar correos electrónicos es instalar el
programa Private Idaho (www.itech.net.au/pi/), el más popular. Esta aplicación además
de asegurar la privacidad en el correo electrónico, también permite enviar correo
totalmente anónimo y el envío y recepción de mensajes cifrados.
Recuerde que los servicios y aplicaciones citados protegen su intimidad pero no aseguran
el anonimato total. Cuando entra en Internet siempre deja un rastro, la estela de su viaje
a través del ciberespacio.
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