AMPARO DIRECTO 2985/2012. QUEJOSO: **********. EN REVISIÓN PONENTE: MINISTRA OLGA SÁNCHEZ CORDERO GARCÍA VILLEGAS. SECRETARIO: OCTAVIO JOEL FLORES DÍAZ. DE México, Distrito Federal. Acuerdo de la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, correspondiente al veintiuno de noviembrede dos mil doce. VISTOS,y; RESULTANDO: PRIMERO. Mediante escrito presentado el dieciocho de abril de dos mil doce, ante la Oficina de Correspondencia Común de los Tribunales Unitarios en Materia Penal del Primer Circuito, **********, por derecho propio, solicitó el amparo y protección de la Justicia Federal en contra de las autoridades y por el acto que a continuación se señala: AUTORIDADES RESPONSABLES: Quinto Tribunal Unitario en Materia Penal del Primer Circuito. Juez Décimo Segundo de Distrito de Procesos Penales Federales en el Distrito Federal. ACTO RECLAMADO: AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 La sentencia de cuatro de enero de dos mil doce, dictada por el Tribunal responsable, en el toca penal 277/2011. En la demanda de garantías se estimaron violados los artículos 1º, 8, 14, 16, 17, 18, 19 y 20, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. SEGUNDO. Por cuestión de turno, correspondió conocer de la demanda al Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Penal del Primer Circuito, en donde su Presidenta, mediante acuerdo de veinticinco de abril de dos mil doce, la admitió a trámite, la registró con el número D.P. 181/2012; seguidos los trámites correspondientes, en sesión de veintitrés de agosto de dos mil doce, el Pleno de ese órgano jurisdiccional dictó la sentencia que concluyó con el punto resolutivo siguiente: “ÚNICO. La JUSTICIA DE LA UNIÓN NO AMPARA NI PROTEGE a **********, contra los actos que reclamó del Quinto Tribunal Unitario en Materia Penal del Primer Circuito y Juez Décimo Segundo de Distrito de Procesos Penales Federales en el Distrito Federal, precisados en el resultando primero de esta ejecutoria.” TERCERO. Inconforme con la sentencia de amparo, la parte quejosa interpuso recurso de revisión mediante escrito presentado el veintiuno de septiembre de dos mil doce, ante la Oficina de Correspondencia Común de los Tribunales Colegiados en Materia Penal del Primer Circuito. 2 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 Al respecto, por auto de veintiséis de septiembre dos mil doce, la Magistrada Presidenta del Tribunal Colegiado del conocimiento, tuvo por interpuesto el medio de impugnación mencionado y ordenó su envío a la Suprema Corte de Justicia de la Nación para la substanciación del mismo. CUARTO. Una vez recibidos los autos en esta Suprema Corte de Justicia de la Nación, mediante proveído de Presidencia de dos de octubre del presente año, se ordenó formar el toca de amparo directo en revisión 2985/2012; notificar al Procurador General de la República por conducto del Agente del Ministerio Público Federal adscrito a este Alto Tribunal; turnar el expediente a la Ministra Olga Sánchez Cordero de García Villegas para la elaboración del proyecto de resolución respectivo y enviar los autos a la Sala a la que se encuentra adscrita. Mediante acuerdo de diecisiete de octubre de dos mil doce, esta Primera Sala se avocó al conocimiento del asunto. C O N S I D E R A N D O: PRIMERO. Competencia. Esta Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación es legalmente competente para conocer del presente recurso de revisión, en términos de lo dispuesto por los artículos 107, fracción IX, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; 84, fracción II, de la Ley de Amparo; y, 21, fracción III, inciso a), de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación; así como en los puntos Segundo, Tercero y Cuarto del Acuerdo General 5/2001, emitido 3 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 por el Pleno de este Alto Tribunal, publicado en el Diario Oficial de la Federación, el veintinueve de junio de dos mil uno, toda vez que el recurso fue interpuesto en contra de una sentencia dictada por un Tribunal Colegiado en amparo directo; y, su resolución no requiere la intervención del Tribunal Pleno. SEGUNDO. Oportunidad. De la sentencia recurrida el ahora recurrente dice haber tenido conocimiento el viernes siete de septiembre de dos mil doce, según se desprende de la razón actuarial que obra a foja 313 del cuaderno de amparo, surtiendo efectos el lunes diez siguiente, por lo que el término de diez días a que se refiere el artículo 86 de la Ley de Amparo, transcurrió del martes once al martes veinticinco de septiembre de dos mil doce, descontándose los días ocho, nueve, quince, dieciséis, veintidós y veintitrés del mes y año citados, por ser sábados y domingos; así como catorce de septiembre de dos mil doce, todos de conformidad con los artículos 23 de la Ley de Amparo y 163 de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación. En ese sentido, si el escrito por el que se interpone el recurso de revisión se presentó ante la Oficina de Correspondencia Común de los Tribunales Colegiados en Materia Penal del Primer Circuito, el veintiuno de septiembre de dos mil doce, es evidente que se hizo dentro del plazo de diez días que establece el artículo 86 de la Ley de Amparo. TERCERO. Legitimación. Esta Primera Sala advierte que el presente recurso fue hecho valer por parte legítima, toda vez que lo interpone **********, por derecho propio, quien es la parte 4 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 promovente en el juicio de amparo D.P. 181/2012 del índice del Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Penal del Primer Circuito, del cual deriva el presente amparo directo en revisión 2985/2012. CUARTO. Antecedentes. Para mejor resolución del asunto, conviene relacionar los antecedentes principales, que informan lo siguiente. 1.- El treinta de junio de dos mil once, el Juez Décimo Segundo de Distrito de Procesos Penales Federales en Distrito Federal, dictó sentencia condenatoria dentro de la causa penal 256/2010, en contra de **********, por el delito de Robo de Hidrocarburos. 2.- Inconforme con la resolución anterior, el sentenciado interpuso recurso de apelación, que por razón de turno tocó conocer al Quinto Tribunal Unitario en Materia Penal del Primer Circuito, mismo que lo registró bajo el toca penal número 277/2011; ulteriormente, previo los trámites de ley, el cuatro de enero de dos mil doce pronunció la resolución por la que modificó la de primera instancia y consideró al sentenciado **********, penalmente responsable del delito de Robo de Hidrocarburos, previsto y sancionado en el artículo 368 Quáter del Código Penal Federal, con la agravante prevista en el segundo párrafo del citado numeral (hipótesis: el sujeto activo sea servidor público de la industria petrolera). La modificación consistió en que la responsable, para fijar la multa correspondiente y ante la imprecisión de los ingresos del justiciable, atendiera al salario 5 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 mínimo vigente en el lugar y época de los hechos –nueve de diciembre de dos mil nueve, Distrito Federal–. 3.- En contra de dicho fallo, ********** promovió en su contra juicio de amparo directo que se radicó en el Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Penal del Primer Circuito, bajo el número D.P. 181/2012, órgano jurisdiccional que en sesión de veintitrés de agosto de dos mil doce lo resolvió en el sentido de negar el amparo; sentencia que constituye la materia del presente recurso de revisión. QUINTO. Demanda de amparo. En los conceptos de violación, la parte quejosa expuso, en síntesis, lo siguiente: Concepto de violación primero. a) Que se violaron las formalidades esenciales del procedimiento, ya que las autoridades responsables no cumplieron con los principios de legalidad, exacta aplicación de la ley penal, in dubio pro reo, presunción de inocencia, inmediatez procesal, fundamentación y motivación, igualdad y seguridad jurídica, pues de la sentencia reclamada se advierte que no cumple con las formalidades procesales que la legislación adjetiva penal vigente establece, invocando en apoyo a su dicho las tesis de rubro: “EXACTA APLICACIÓN DE LA LEY EN MATERIA PENAL, GARANTÍA DE. SU CONTENIDO Y ALCANCE ABARCA TAMBIÉN A LA LEY MISMA.”, “APLICACIÓN EXACTA DE LA LEY PENAL, GARANTÍA DE LA, EN RELACIÓN AL DELITO DE VIOLACIÓN A LA SUSPENSIÓN.”, y “LEYES, APLICACIÓN 6 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 INEXACTA DE LAS, EN MATERIA PENAL (ARTÍCULO 14 CONSTITUCIONAL.”. b) Que el procedimiento está viciado de origen, ya que cuando se le detuvo con motivo de los hechos no se le puso inmediatamente a disposición del Ministerio Público, lo cual conculca sus garantías de defensa e inmediatez procesal; de ahí que no pueda considerarse el dictamen volumétrico, la inspección ministerial y el dicho de los testigos de cargo, dado que dichas pruebas no se realizaron inmediatamente, aunado a que como consecuencia de no haber sido puesto a disposición en forma inmediata ante la representación social no se pudo determinar si la mancha en el piso de el lugar donde ocurrieron los hechos era orina o gasolina. c) le dictó Que no se encuentra acreditado el delito por el cual se sentencia condenatoria, pues las responsables únicamente se basaron en suposiciones, como lo es que la mancha en el lugar donde ocurrieron los hechos era gasolina y no orina. Concepto de violación segundo. d) Que las autoridades responsables realizaron una inexacta valoración del material probatorio. e) Que las responsables indebidamente consideraron lo expuesto por los testigos de cargo, pues es notorio su aleccionamiento, debido a que se expresaron en forma idéntica, 7 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 aunado a que transcurrió demasiado tiempo antes de que rindieran su deposado; además de que es absurdo que no se hayan quedado con un garrafón que mencionaron haber visto o con el embudo que dicen sirvió como instrumento para lograr la comisión del ilícito. f) Que las autoridades responsables no observaron que nunca opuso resistencia, pues lo único que hizo en el momento en que ocurrieron los hechos fue bajar del camión a orinar. g) Que resulta incongruente que en el escrito de denuncia se refiera a bidones de treinta litros, en tanto, la responsable y los elementos de seguridad de PEMEX asumen que son de cuarenta litros. h) Que no puede concedérsele valor probatorio al video que obra en autos, dado que el mismo fue editado y manipulado, más aun cuando no existió cadena de custodia del aparato con el que se filmó dicho video; aunado a que en él no se aprecian ni los bidones de plástico ni el embudo necesario para la sustracción del hidrocarburo. i) tesis En apoyo a sus argumentos, la parte quejosa citó las de rubro: “TESTIGOS SOSPECHOSOS.”, “PRUEBA TESTIMONIAL. PRINCIPIOS QUE RIGEN LA INMEDIATEZ PROCESAL PARA SU VALORACIÓN.”. Concepto de violación tercero. 8 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 j) Que las responsables debieron ordenar el desahogo de las pruebas indispensables para lograr el conocimiento de la verdad histórica, como lo es que especialistas en la materia explicaran y exhibieran los documentos necesarios para tal efecto, el funcionamiento de seguridad del sello o cintillo denominado “cola de ratón”, la inviolabilidad de los mismos y si es factible o no utilizar la misma pieza en varias ocasiones. k) Que se violó en su perjuicio, lo dispuesto en los artículos 180, primer párrafo y 181, del Código Federal de Procedimientos Penales, pues no se agotaron los medios de prueba necesarios para demostrar la responsabilidad del quejoso en la comisión del ilícito por el que se le sentenció, siendo que sólo se consideraron meras suposiciones. l) Que resultan aplicables a su dicho, las tesis de tituladas: “PRUEBAS EN EL PROCESO PENAL. SU VALORACIÓN EN LA SENTENCIA DEFINITIVA PUEDE VARIAR EN RELACIÓN A LA REALIZADA EN EL AUTO DE FORMAL PRISIÓN.”, “CUERPO DEL DELITO. CUANDO FALTA ALGUNO DE SUS ELEMENTOS (LEGISLACIÓN DEL ESTADO DE PUEBLA).”, “DUDA ABSOLUTORIA.”, “DUDA, INDICIOS CONTRADICTORIOS.”, “TESTIGOS. INEFICACIA PROBATORIA DE LA DECLARACIÓN DE LOS.”, “TESTIGO SINGULAR.”, “TESTIGO DE OÍDAS.”, “AUTO DE PRISIÓN PREVENTIVA. EL DICHO DE UN TESTIGO DE OÍDAS NO PUEDE TOMARSE COMO DECLARACIÓN BAJO PROTESTA DE PERSONA DIGNA DE FE PARA LOS EFECTOS DE DICTAR UN. (LEGISLACIÓN DEL ESTADO DE CHIAPAS).”, “DOLO, CARGA DE LA PRUEBA 9 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 DE SU ACREDITAMIENTO.”, “DOLO DIRECTO. SUS ELEMENTOS.”, y “DOLO GENÉRICO. SU ANÁLISIS DEBE HACERSE AL EXAMINARSE LA CULPABILIDAD (LEGISLACIÓN DEL DISTRITO FEDERAL).”. Concepto de violación cuarto. m) Que el Tribunal Unitario responsable inexactamente da por acreditado que se manipuló el sello y que se retiró para la sustracción de gasolina, sin ser roto o maltratado para después ser colocado nuevamente, pues tal hecho resulta imposible de realizarse, aunado a que no se ordenó el dictamen pericial sobre el funcionamiento y seguridad de dicho instrumento. n) El quejoso invocó en apoyo a lo anterior, las tesis de rubro: “PRUEBA PRESUNTIVA.”, “PRUEBA PRESUNTIVA EN MATERIA PENAL.”, “PRUEBA CIRCUNSTANCIAL, INTEGRACIÓN DE LA.”, “DOLO, CARGA DE LA PRUEBA CONTRA LA PRESUNCIÓN DE.”, “PRUEBAS EN EL PROCESO PENAL. SU VALORACIÓN EN LA SENTENCIA DEFINITIVA PUEDE VARIAR EN RELACIÓN A LA REALIZADA EN EL AUTO DE FORMAL PRISIÓN.”, “PRUEBA PERICIAL EN MATERIA PENAL. OBJETO QUE PERSIGUEN LOS PERITOS AL CONSIDERAR EN SUS DICTÁMENES LAS DECLARACIONES RENDIDAS TANTO POR LOS PARTICIPANTES EN EL EVENTO COMO POR LOS TESTIGOS.”, y “PRUEBA PERICIAL EN MATERIA PENAL. LA VALORACIÓN DE LOS DICTÁMENES EMITIDOS POR PERITOS CIENTÍFICOS Y OFICIALES, QUEDA SUJETA A LAS REGLAS DE LA SANA CRÍTICA Y A LOS 10 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 PRINCIPIOS QUE LE SON INHERENTES, EN FUNCIÓN DE LA INTEGRACIÓN DE LA PRUEBA CIRCUNSTANCIAL Y EN ACATAMIENTO AL PRINCIPIO DE ESTRICTA APLICACIÓN DE LA LEY, EN CONGRUENCIA CON LAS CONSTANCIAS DE AUTOS.”. Concepto de violación quinto. o) Que los dictámenes periciales en materia de cuantificación volumétrica y avalúo de los hidrocarburos, de video y de criminalística de campo, se llevaron a cabo con demasiada posterioridad a los hechos, por lo que resultan desajustadas a derecho dada su extemporaneidad, pues debieron llevarse a cabo inmediatamente a que sucedieron los hechos delictuosos investigados, para que dichas pruebas tuvieran eficacia y certeza plena. Concepto de violación sexto. p) Que la responsable no consideró que en los dictámenes periciales se determinó la fácil evaporación del combustible denominado gasolina magna, aunado a que el auto tanque en el que se transportaba dicho combustible estuvo expuesto a la intemperie durante treinta y seis días, de ahí que el faltante sea por dicha circunstancia y no por el robo del mismo. Concepto de violación séptimo. 11 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 q) Que en el caso, no se cumple con el requisito de procedibilidad de la querella formulada por la parte agraviada, en virtud de que el propietario del hidrocarburo no lo era PEMEX, sino el dueño de la estación de servicio E00222 de Amecameca, Estado de México. Respecto de los conceptos de violación restantes (octavo, noveno, décimo, decimoprimero, decimosegundo, decimotercero y decimocuarto), es de señalarse que los mismos consisten en reiteraciones de los argumentos ya expuesto en párrafos anteriores, en el sentido de que se violaron las formalidades esenciales del procedimiento, que el acto reclamado carece de fundamentación y motivación, que la responsable valoró de manera inexacta el acervo probatorio que obra en autos, así como que se vulneró en su perjuicio el principio de presunción de inocencia; por lo que se estima innecesario su síntesis. SEXTO. Sentencia recurrida. Por su parte, el Tribunal Colegiado al realizar el estudio de los conceptos de violación hechos valer por la parte impetrante, consideró, en la parte que interesa, lo siguiente. I. Que el argumento expuesto por el quejoso en el sentido de que la responsable no atendió el principio de presunción de inocencia, es infundado, en virtud de que dicha garantía consiste en reconocer que no es el gobernado quien debe demostrar su inocencia de la comisión de un hecho que le es atribuido, sino por el contrario, la culpabilidad (en sentido 12 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 amplio del término) le corresponde acreditarla al Estado, a través de la institución del Ministerio Público; y, en el caso, la autoridad responsable ordenadora correctamente estimó, con base en las pruebas que obran en autos, que se encontraban acreditados los presupuestos del delito y la plena responsabilidad penal del quejoso en su comisión, por lo que quedó completamente desvirtuada la presunción de inocencia que durante todo el procedimiento operó a favor del impetrante. II. Que a lo expuesto anteriormente, resultaba aplicable, en lo conducente, la tesis aislada 1a. I/2012 (10a.), emitida por la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, publicada en la página 2917, del Libro IV, Enero de 2012, Tomo 3, del Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Décima Época, de rubro: “PRESUNCIÓN DE INOCENCIA. EL PRINCIPIO RELATIVO ESTÁ CONSIGNADO EXPRESAMENTE EN LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS, A PARTIR DE LA REFORMA PUBLICADA EN EL DIARIO OFICIAL DE LA FEDERACIÓN EL 18 DE JUNIO DE 2008.”. Por otra parte, se estima innecesario hacer una narrativa de las consideraciones restantes en la que se basó el Tribunal Colegiado para estimar que los conceptos de violación eran infundados, pues están encaminados a dirimir cuestiones de mera legalidad, a saber: violaciones a las formalidad esenciales del procedimiento, estudio insuficiente e inexacto de los medios probatorios, inexacta aplicación de la ley penal y carencia de fundamentación y motivación. 13 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 SÉPTIMO. Agravios. En el recurso de revisión interpuesto en contra de las consideraciones anteriores, el recurrente expuso, en síntesis, los agravios siguientes: Agravio primero. 1. Que se vulneran en su perjuicio los artículos 192 y 193 de la Ley de Amparo, toda vez que el Tribunal Colegiado no observó las jurisprudencias y tesis que hizo valer en su demanda de amparo. Agravio segundo. 2. Que el Órgano Colegiado, al igual que las autoridades responsables, no valoró objetiva y adecuadamente los medios probatorios que obran en autos, ya que resulta físicamente imposible que haya cometido la conducta delictiva que se le imputa sin haber alterado el mecanismo del cintillo de seguridad denominado “cola de ratón”, realizando conclusiones inexactas de hecho y de derecho, por lo que la sentencia recurrida se encuentra fuera del marco normativo, carente de medios de convicción probatoria. Agravio tercero. 3. Que el órgano jurisdiccional no atendió los principios constitucionales de igualdad, legalidad y seguridad jurídica, contenidos en los artículos 16, 17, 19, 20 y 21, de la Constitución Federal, dado que únicamente pretendió justificar la ilegalidad de 14 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 los actos reclamados a las autoridades responsables, razón por la que deben declararse nulos al estar viciados desde su origen. Agravio cuarto. 4. Que la sentencia recurrida se encuentra fuera del marco legal y constitucional, en virtud de que al realizar el Tribunal Colegiado el análisis de los conceptos de violación únicamente se limitó a declararlos inoperantes e insuficientes, sin haber entrado al estudio del fondo de los mismos, pues dicho estudio no es concienzudo ni pormenorizado. 5. Que no existen razonamientos lógico jurídicos contundentes que demuestren la ineficacia e inoperancia de los conceptos de violación esgrimidos en el escrito de demanda, dado que de las probanzas que existen en autos con las que se acreditó su plena responsabilidad penal en la comisión del delito, se desprenden notorias inconsistencias. Agravio quinto. 6. Que el Órgano Colegiado no observó los principios de exacta aplicación de la ley penal y de legalidad previstos en el numeral 14 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, debido a que en forma analógica y deduciendo situaciones que no obran en constancias de autos, estimó que se encontraba demostrada la plena responsabilidad en la comisión del tipo penal. 15 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 7. Que de conformidad con el artículo 14 constitucional, por una parte, no podrá considerarse delictuoso un hecho sino por expresa declaración de la ley (Nullum Crimen Sine Lege) y, por otra, que para todo delito la ley debe señalar con precisión la pena correspondiente, ya que dicho numeral prohíbe aplicar una sanción si no existe disposición legal alguna que expresamente la imponga por la comisión de un hecho determinado que esté considerado como delito. 8. Que el principio de legalidad en materia penal tiene como razón de ser, el permitir la defensa de los particulares que en un momento determinado se coloquen en los supuestos de un tipo penal, entendido éste como la descripción que se hace en la ley de una conducta que se considera delictuosa, por lo que de no describirse exactamente la conducta reprochable en tipo penal, se corre el riesgo de que se sancione a los gobernados por diversas conductas que en concepto del órgano jurisdiccional se ubican en el tipo penal; citando en apoyo a dicho argumento la tesis de rubro: “TIPICIDAD Y AUSENCIA DEL TIPO.”. 9. Que no es óbice al argumento que antecede, el criterio emitido por la Suprema Corte de Justicia de la Nación en el sentido de que no constituye un problema de constitucionalidad de leyes la falta de definición de los vocablos en ellas utilizados, dado que en precepto alguno que integran la Constitución General de la República, se establece como requisito que el legislador en cada uno de los ordenamiento secundarios, entre ellos los de la materia penal, defina los vocablos o locuciones utilizados, pues las leyes no son diccionarios y la exigencia de un 16 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 requisito así tornaría imposible la función legislativa; el cual se desprende de la tesis de rubro: “LEYES. SU INCONSTITUCIONALIDAD NO PUEDE DERIVAR DE LA FALTA DE DEFINICIÓN DE LOS VOCABLOS O LOCUCIONES AHÍ UTILIZADOS, EN QUE EL LEGISLADOR PUEDA INCURRIR.”. 10. Por último, el recurrente solicita sea suplida la deficiencia de la queja. OCTAVO. Procedencia. Establecido lo anterior, deberá analizarse si es o no procedente el recurso de revisión que nos ocupa y además, si se acreditan los requisitos de importancia y trascendencia a que hace alusión el artículo 107, fracción IX, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, así como el punto Primero del Acuerdo General Plenario 5/1999, publicado en el Diario Oficial de la Federación el veintidós de junio de dicho año. Para tal fin, es necesario tener en cuenta lo previsto por la fracción IX del artículo 107 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, que establece: “Artículo 107. Las controversias de que habla el artículo 103 de esta Constitución, con excepción de aquellas en materia electoral, se sujetarán a los procedimientos que determine la ley reglamentaria, de acuerdo con las bases siguientes: (...) IX. En materia de amparo directo procede el recurso de revisión en contra de las sentencias que resuelvan sobre la constitucionalidad de normas generales, establezcan la interpretación directa de un precepto de esta Constitución u omitan decidir sobre tales 17 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 cuestiones cuando hubieren sido planteadas, siempre que fijen un criterio de importancia y trascendencia, según lo disponga la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en cumplimiento de los acuerdos generales del Pleno. La materia del recurso se limitará a la decisión de las cuestiones propiamente constitucionales, sin poder comprender otras.” Ahora bien, conforme a la exposición de motivos de la reforma constitucional al artículo 107, fracción IX, publicada en el Diario Oficial de la Federación el once de junio de mil novecientos noventa y nueve, se advierte que las facultades discrecionales otorgadas a la Suprema Corte de Justicia de la Nación para resolver sobre la procedencia del recurso de revisión interpuesto contra sentencias dictadas por los Tribunales Colegiados de Circuito, tienen por objeto que este Alto Tribunal deje de conocer de aquellos asuntos en los que no deba entrar al fondo para fijar un criterio de importancia y trascendencia; por lo cual, el precepto legal in examine pretende fortalecer el carácter de máximo órgano jurisdiccional de la Suprema Corte de Justicia de la Nación en congruencia con el carácter uni-instancial del amparo directo, a fin de que sólo por excepción, pueda ser tramitada y resuelta dicha segunda instancia, pero acotada sólo a aquellos casos que resulte imprescindible la intervención de este Máximo Tribunal. Esto es, tratándose de juicios de amparo directo, por regla general, no procede el recurso de revisión, y sólo por excepción éste será procedente. Con base en lo anterior, el Tribunal Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación emitió el Acuerdo 5/1999, publicado 18 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 en el Diario Oficial de la Federación el veintidós de junio de mil novecientos noventa y nueve, cuyo punto PRIMERO establece que para la procedencia del recurso de revisión en amparo directo, se requiere que se reúnan los supuestos siguientes: a) La existencia en la sentencia recurrida de un pronunciamiento sobre la constitucionalidad de una ley, tratado internacional o reglamento, o bien, que se hubiera establecido la interpretación directa de un precepto constitucional; o que habiéndose planteado alguna de esas cuestiones en la demanda de amparo, se hubiera omitido su estudio; y, b) Que dicho problema de constitucionalidad entrañe la fijación de un criterio jurídico de importancia y trascendencia, a juicio de la Sala respectiva. Luego, en ningún otro caso a los antes enunciados, procederá el recurso de revisión en contra de una sentencia dictada por un Tribunal Colegiado de Circuito en amparo directo. Ahora, en lo relativo a los referidos requisitos de importancia y trascendencia, el punto PRIMERO del Acuerdo Plenario 5/1999 antes invocado, señala que no se surten tales requisitos si existe jurisprudencia sobre el problema de constitucionalidad hecho valer en la demanda de garantías; cuando no se hayan expresado agravios; o, de haberse expresado, éstos resulten ineficaces, inoperantes, inatendibles o insuficientes, y no exista obligación de suplir la queja deficiente; o bien, en casos análogos. 19 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 Es aplicable por identidad de razón, la jurisprudencia 2a./J. 64/20011, sustentada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, cuyo criterio se comparte y que es del tenor literal siguiente: “REVISIÓN EN AMPARO DIRECTO. REQUISITOS PARA SU PROCEDENCIA. Los artículos 107, fracción IX, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, 83, fracción V, 86 y 93 de la Ley de Amparo, 10, fracción III, de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación y el Acuerdo 5/1999, del 21 de junio de 1999, del Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que establece las bases generales para la procedencia y tramitación de los recursos de revisión en amparo directo, permiten inferir que un recurso de esa naturaleza sólo será procedente si reúne los siguientes requisitos: I. Que se presente oportunamente; II. Que en la demanda se haya planteado la inconstitucionalidad de una ley o la interpretación directa de un precepto de la Constitución Federal y en la sentencia se hubiera omitido su estudio o en ella se contenga alguno de esos pronunciamientos; y III. Que el problema de constitucionalidad referido entrañe la fijación de un criterio de importancia y trascendencia a juicio de la Sala respectiva de la Suprema Corte; en el entendido de que un asunto será importante cuando de los conceptos de violación (o del planteamiento jurídico, si opera la suplencia de la queja deficiente) se advierta que los argumentos o derivaciones son excepcionales o extraordinarios, esto es, de especial interés; y será trascendente cuando se aprecie la probabilidad de que la resolución que se pronuncie establezca un criterio que tenga efectos sobresalientes en materia de constitucionalidad; por el contrario, deberá considerarse que no se surten los requisitos de importancia y trascendencia cuando exista jurisprudencia sobre el tema de constitucionalidad planteado, cuando no se hayan expresado agravios o 1 Novena Época, Registro: 188101, Instancia: Segunda Sala, Jurisprudencia, Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, XIV, Diciembre de 2001, Materia(s): Constitucional, Común, Tesis: 2a./J. 64/2001, Página: 315. 20 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 cuando, habiéndose expresado, sean ineficaces, inoperantes, inatendibles o insuficientes, siempre que no se advierta queja deficiente que suplir y en los demás casos análogos a juicio de la referida Sala, lo que, conforme a la lógica del sistema, tendrá que justificarse debidamente.” Con base en lo expuesto, debe decirse que en el caso concreto, no se surten los requisitos de procedencia del juicio de amparo directo en revisión que han sido precisados, ya que del escrito inicial de demanda se advierte que la parte quejosa no impugnó la constitucionalidad de una ley, de un tratado internacional o bien de un reglamento, ni tampoco planteó en los conceptos de violación la interpretación directa de un precepto de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; en consecuencia, el Tribunal Colegiado de Circuito al dictar la sentencia correspondiente, no decidió sobre la constitucionalidad de la ley, tratado internacional o reglamento impugnado, ni tampoco estableció la interpretación directa de un precepto de la Constitución Federal, por tanto, tampoco omitió el estudio y decisión de estas cuestiones, pues no existía razón para que se pronunciara al respecto. Lo anterior es así, ya que de la simple lectura de los conceptos de violación que fueron esgrimidos en su inicial demanda de amparo, claramente se advierte que dichas argumentaciones lógico-jurídicas están dirigidas a combatir aspectos de mera legalidad del acto de autoridad reclamado; vinculados esencialmente con los siguientes tópicos: 21 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 Se violaron las formalidades esenciales del procedimiento, así como que la autoridad responsable no fundó ni motivo correctamente el acto reclamado. Los medios de prueba no fueron debidamente justipreciados y no son suficientes para acreditar el ilícito de Robo de Hidrocarburo. Se vulneró en perjuicio del quejoso, los principios de exacta aplicación de la ley penal, de legalidad, de seguridad jurídica, de fundamentación y motivación, de defensa y de presunción de inocencia. Luego, siguiendo con la línea de estudio respecto a la procedencia del presente recurso de revisión, debe decirse que del análisis pormenorizado de los agravios esgrimidos por la ahora recurrente, se arriba a la conclusión que no existe reclamo alguno relativo a que el Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Penal del Primer Circuito haya interpretado directamente algún precepto Constitucional, o que la sentencia combatida contenga algún pronunciamiento sobre la constitucionalidad de una ley, tratado internacional o reglamento, o bien, que habiéndose planteado alguna de esas cuestiones en la demanda de amparo, se hubiera omitido su estudio. Empero, por acuerdo de dos de octubre de dos mil doce, emitido por la Presidencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, al admitir el recurso de revisión que nos ocupa, se estimó que el Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Penal del Primer 22 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 Circuito realizó una interpretación de los artículos 14, párrafo segundo; 16, párrafo primero; 19, párrafo primero; 21, párrafo segundo y 102, Apartado A, párrafo segundo, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, como se advierte de la siguiente transcripción: “(…) como en el caso el solicitante de amparo hace valer recurso de revisión en contra de la sentencia dictada el veintitrés de agosto de dos mil doce, por el Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Penal del Primer Circuito, en el juicio de amparo directo 181/2012, resolución en la cual se estima que el Tribunal Colegiado del conocimiento realizó la interpretación de los artículos 14, párrafo segundo; 16, párrafo primero; 19, párrafo primero; 21, párrafo segundo y 102, Apartado A, párrafo segundo, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, al pronunciarse sobre la constitucionalidad de la sentencia penal impugnada en el respectivo juicio de garantías, aduciendo que: ‘…Finalmente, aduce el quejoso que la responsable no atendió el principio de presunción de inocencia, lo cual resulta infundado. Se afirma lo anterior, pues la garantía de presunción de inocencia consiste en reconocer que no es el gobernado quien debe demostrar su inocencia de la comisión de un hecho que le es atribuido, sino por el contrario, la culpabilidad (en sentido amplio del término) le corresponde acreditarla al Estado, a través de la institución del Ministerio Público; sin embargo, debe decirse que la autoridad responsable ordenadora correctamente determinó con las pruebas referidas que se encontraban acreditados los presupuestos del delito y la plena responsabilidad penal del quejoso en su comisión, por lo que quedó completamente desvirtuada la presunción de inocencia que durante todo el procedimiento operó a favor del amparista. Sobre el tema resulta aplicable, en lo conducente, la Tesis Aislada 1a. I/2012 (10a.), emitida por la Primera Sala de la 23 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 Suprema Corte de Justicia de la Nación, publicada en la página 2917, del libro IV, Enero de 2012, Tomo 3, del Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Décima Época, cuyo rubro y texto son: ‘PRESUNCIÓN DE INOCENCIA. EL PRINCIPIO RELATIVO ESTÁ CONSIGNADO EXPRESAMENTE EN LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS, A PARTIR DE LA REFORMA PUBLICADA EN EL DIARIO OFICIAL DE LA FEDERACIÓN EL 18 DE JUNIO DE 2008. […transcribe…]…’.” De dicho acuerdo admisorio también se desprende una salvedad o reserva, pues será un estudio integral y pormenorizado el que determine si efectivamente la autoridad responsable efectuó una interpretación a algún precepto constitucional. En ese tenor, interpretar una norma jurídica es esclarecer su sentido y precisamente, aquel sentido que es decisivo para la vida jurídica, por tanto, también para la resolución judicial. Al respecto, existe criterio en el sentido de que el requisito de procedencia del recurso de revisión en contra de las sentencias dictadas por los Tribunales Colegiados de Circuito vía amparo directo, relativo a que en las mismas se establezca la interpretación directa de un precepto de la Constitución, debe entenderse, de acuerdo con las normas de la hermenéutica jurídica, que en tales sentencias se haga un análisis del contenido del precepto constitucional, para determinar su sentido, alcance e inteligencia, lo que en la especie, se reitera, no aconteció. 24 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 Apoya a la anterior consideración la siguiente tesis aislada2 emitida por la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, cuyo sentido y alcance comparte esta Primera Sala, que textualmente establece: “REVISIÓN CONTRA SENTENCIAS DE TRIBUNAL COLEGIADO. INTERPRETACIÓN DIRECTA DE UN PRECEPTO DE LA CONSTITUCIÓN. El requisito de procedencia del recurso de revisión en contra de las sentencias dictadas por los Tribunales Colegiados de Circuito previsto por la fracción V del artículo 83 de la Ley de Amparo, consistente en que establezcan la interpretación directa de un precepto de la Constitución, debe entenderse, de acuerdo con las normas de la hermenéutica jurídica, que tales sentencias hagan un análisis del contenido del precepto constitucional, para determinar su sentido, alcance e inteligencia.” Sobre ello, el Pleno de este Alto Tribunal ha precisado en qué consiste la interpretación directa de un precepto fundamental, por lo cual, no basta que el Tribunal Colegiado de Circuito lo invoque o lo aplique en su sentencia, sino que es necesario que el Tribunal desentrañe y explique el contenido de la norma constitucional, determinando su sentido y alcance con base en un análisis gramatical, histórico, lógico o sistemático. Tal criterio se encuentra contenido en la tesis P./J. 46/91, sustentada por el Pleno de esta Suprema Corte de Justicia de la Nación, que literalmente señala: 2 Séptima Época, Registro: 238249, Instancia: Segunda Sala, Tesis Aislada, Fuente: Semanario Judicial de la Federación, 91-96 Tercera Parte, Materia(s): Común, Página: 97. Genealogía: Apéndice 1917-1985, Octava Parte, primera tesis relacionada con la jurisprudencia 251, página 427. 25 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 “REVISIÓN EN AMPARO DIRECTO. LA INTERPRETACIÓN DIRECTA DE UN PRECEPTO CONSTITUCIONAL, COMO SUPUESTO DE PROCEDENCIA, EXISTE CUANDO A TRAVÉS DE ELLA SE DETERMINAN EL SENTIDO Y EL ALCANCE JURÍDICOS DE LA NORMA CONSTITUCIONAL SOBRE LA BASE DE UN ANÁLISIS GRAMATICAL, HISTÓRICO, LÓGICO O SISTEMÁTICO. Para determinar si en la sentencia de un juicio de amparo directo se efectúa la interpretación directa de un precepto constitucional, no basta que el Tribunal Colegiado de Circuito lo invoque o lo aplique en su sentencia, sino que es necesario que dicho Tribunal desentrañe y explique el contenido de la norma constitucional, determinando su sentido y alcance con base en un análisis gramatical, histórico, lógico o sistemático. Por consiguiente, si la sentencia recurrida no contiene ninguna interpretación en estos términos, no se da el presupuesto necesario para la procedencia del recurso de revisión en el amparo directo.”3 En ese contexto, se advierte que el Tribunal Colegiado del conocimiento en la sentencia recurrida, no realizó una interpretación directa de un precepto constitucional, mediante la aplicación de los métodos gramatical, histórico, lógico o sistemático; por lo que en este sentido, tampoco se cumple con tal hipótesis necesaria para la procedencia del recurso de revisión. Sin que sea óbice a lo anterior que al contestar el argumento planteado por el quejoso en el sentido de que debió operar a su favor el principio de presunción de inocencia, al no estar probado el ilícito por el cual se le acusó; el Tribunal Colegiado afirmara que 3 Octava Época, Registro: 205755, Instancia: Pleno, Jurisprudencia, Fuente: Semanario Judicial de la Federación, VIII, Noviembre de 1991, Materia(s): Común, Tesis: P./J. 46/91, Página: 39. Genealogía: Gaceta número 47, Noviembre de 1991, página 15. 26 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 en la presunción de inocencia se impone la carga probatoria al órgano acusador, quien deberá probar los elementos constitutivos del delito y la responsabilidad del acusado; al satisfacerse esa exigencia constitucional, esto es, al aportarse suficientes indicios para desvirtuar la presunción de inocencia, es al acusado a quien corresponde probar su versión excluyente del delito o su no participación, mediante medios de convicción eficaces. Argumento que de manera alguna implica la interpretación directa de normas constitucionales, sino la expresión de la razón del por qué en el caso específico del quejoso está comprobado el ilícito, así como su plena responsabilidad, a lo cual se llegó con base en la valoración de pruebas existentes, al no quedar desvirtuada desde el ámbito de legalidad. De la misma manera, no obsta a lo concluido, el hecho de que el Tribunal Colegiado del conocimiento haya invocado la tesis 1a. I/20124, emitida por esta Primera Sala en la cual se advierte la 4 Décima Época, Registro: 2000124, Instancia: Primera Sala, Tesis Aislada, Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Libro IV, Enero de 2012, Tomo 3, Materia(s): Constitucional, Tesis: 1a. I/2012 (10a.), Página: 2917. “PRESUNCIÓN DE INOCENCIA. EL PRINCIPIO RELATIVO ESTÁ CONSIGNADO EXPRESAMENTE EN LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS, A PARTIR DE LA REFORMA PUBLICADA EN EL DIARIO OFICIAL DE LA FEDERACIÓN EL 18 DE JUNIO DE 2008. La Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha reiterado en diversos asuntos que el principio de presunción de inocencia es un derecho universal que se traduce en que nadie puede ser condenado si no se comprueba plenamente el delito que se le imputa y la responsabilidad penal en su comisión, lo que significa que la presunción de inocencia la conserva el inculpado durante la secuela procesal hasta que se dicte sentencia definitiva con base en el material probatorio existente en los autos. Por otra parte, el Tribunal en Pleno sustentó la tesis aislada P. XXXV/2002, publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo XVI, agosto de 2002, página 14, con el rubro: ‘PRESUNCIÓN DE INOCENCIA. EL PRINCIPIO RELATIVO SE CONTIENE DE MANERA IMPLÍCITA EN LA CONSTITUCIÓN FEDERAL.’, en la que estableció que en la Ley Suprema, vigente en ese entonces, no estaba expresamente establecido el principio de presunción de inocencia, pero de la interpretación armónica y sistemática de sus artículos 14, segundo párrafo, 16, primer párrafo, 19, primer párrafo, 21, primer párrafo, y 102, apartado A, segundo párrafo, se advertía que los principios constitucionales del debido proceso legal y el acusatorio resguardaban implícitamente el diverso de presunción de inocencia. De ahí que el perfeccionamiento de la justicia penal en nuestro país ha incidido en que este principio se eleve expresamente a rango constitucional a partir de la reforma publicada en el Diario Oficial de la Federación el 18 de junio de 2008, para quedar ahora contenido en el artículo 20, apartado B, denominado: ‘De los derechos de 27 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 interpretación de los artículos 14, 16, 19, 21, y 102 constitucionales; a fin de sustentar su dicho, esto es, que en el caso concreto, no se advirtió ninguna transgresión al principio de presunción de inocencia en perjuicio de la parte quejosa; toda vez que tal proceder jurisdiccional, tampoco implica la procedencia del recurso de revisión en contra de dicha sentencia, pues en esta hipótesis no es el Tribunal Colegiado el que realiza esa interpretación, sino que simplemente acoge, como refuerzo de su sentencia, la establecida por la Suprema Corte. La anterior consideración, se desprende de la jurisprudencia 2a./J. 54/20035, pronunciada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal y que esta Primera comparte, cuyo rubro y contenido son los siguientes: “INTERPRETACIÓN DIRECTA DE LA CONSTITUCIÓN PARA EFECTOS DEL AMPARO DIRECTO. NO SE ACTUALIZA POR LA SOLA INVOCACIÓN DE UNA TESIS DE LA SUPREMA CORTE EN QUE SE INTERPRETE UN PRECEPTO CONSTITUCIONAL. La invocación de un criterio que haya sustentado la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en que establezca el significado y alcance jurídico de algún precepto de la Constitución Federal, para apoyar los conceptos de violación de la demanda de garantías expresados por el quejoso, o bien los razonamientos de la sentencia dictada por el Tribunal Colegiado de Circuito, no implica, en ninguno de los dos casos, la procedencia del recurso de revisión en contra de dicha sentencia, pues en esta hipótesis no es el Tribunal Colegiado el que realiza esa interpretación, sino que simplemente acoge, como refuerzo de su toda persona imputada’, que en su fracción I, establece: ‘I. A que se presuma su inocencia mientras no se declare su responsabilidad mediante sentencia emitida por el juez de la causa’.” 5 Novena Época, Registro: 183798, Instancia: Segunda Sala, Jurisprudencia, Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, XVIII, Julio de 2003, Materia(s): Común, Tesis: 2a./J. 54/2003, Página: 199. 28 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 sentencia, la establecida por la Suprema Corte, con lo que no se da la razón de la procedencia excepcional del recurso de revisión en amparo directo, a saber, que sea la Suprema Corte el órgano terminal que se pronuncie sobre la cuestión de constitucionalidad respecto de la que el Tribunal Colegiado de Circuito se ocupó de modo original.” Por tanto, como en el caso no se combatió la constitucionalidad de una ley, de un tratado internacional o de un reglamento expedido por el Presidente de la República o por el Gobernador de algún Estado, así como tampoco se planteó la interpretación directa de un precepto constitucional, y por consecuencia, tampoco se realizó dicho ejercicio exegético por parte del Tribunal Colegiado del conocimiento, procede desechar el presente recurso de revisión. No es obstáculo a la conclusión que se ha arribado, el hecho de que la Presidencia de la Suprema Corte haya admitido el recurso, toda vez que se trata de una resolución de trámite que no causa estado. Sirve de apoyo a lo anterior, la jurisprudencia P./J. 19/98 6, sustentada por el Pleno de este Alto Tribunal, cuyo rubro y texto son del tenor literal siguiente: “REVISIÓN EN AMPARO. NO ES OBSTÁCULO PARA EL DESECHAMIENTO DE ESE RECURSO, SU ADMISIÓN POR EL PRESIDENTE DE LA SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN. La admisión del recurso de revisión por el presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación constituye una 6 Novena Época, Registro: 196731, Instancia: Pleno, Jurisprudencia, Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, VII, Marzo de 1998, Materia(s): Común, Tesis: P./J. 19/98, Página: 19. 29 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 resolución que no es definitiva, ya que el Tribunal Pleno está facultado, en la esfera de su competencia, para realizar el estudio a fin de determinar la procedencia del recurso y, en su caso, resolver su desechamiento.” Tampoco es óbice a lo anterior, la circunstancia de que en el asunto que nos ocupa se encuentre involucrada una sentencia que impone una pena privativa de libertad, pues ese solo hecho no determina la procedencia de un recurso que es notoriamente improcedente, según quedó demostrado. En efecto, en el análisis de la procedencia del recurso no obstante de estar en presencia de un asunto de naturaleza penal, no opera la suplencia de la deficiencia de la queja que prevé el artículo 76 bis de la Ley de Amparo, en virtud de que dicha suplencia se ha instaurado para que proceda cuando el juzgador advierta que la queja es deficiente, abarcando en la materia penal, incluso la omisión de expresión de conceptos de violación o agravios, pero no hasta el extremo de modificar el régimen que ha establecido la Constitución Federal y las leyes respectivas, en cuanto a la procedencia del recurso de revisión en amparos directos. Así es, conforme al artículo 76 bis, fracción II, de la Ley de Amparo las autoridades que conozcan del juicio de amparo deberán suplir la deficiencia de los conceptos de violación de la demanda, así como de los agravios formulados en los recursos que esta ley establece, en materia penal, aun ante la ausencia de conceptos de violación o de agravios; término –suplir– que implica en este caso integrar lo que falta o subsanar una imperfección, 30 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 completar lo parcial o incompleto y únicamente opera sobre conceptos de violación o agravios en el caso que éstos sean materia de estudio ante la inexistencia de una causa de improcedencia, por lo que la suplencia sólo opera una vez que es procedente el juicio o recurso, pero no implica actuar al margen de la ley declarando procedente lo que no lo es. Se estima aplicable por identidad de razón la tesis 1a./J. 13/947, sustentada por esta Primera Sala, cuyo contenido es el siguiente: “PROCEDENCIA DE RECURSOS. NO OPERA LA SUPLENCIA DE LA QUEJA EN LA. Tratándose del análisis de la procedencia del recurso, la regla general es que no debe operar la suplencia de la queja deficiente, que ordena el artículo 76 bis de la Ley de Amparo, no obstante que se trate de la materia penal (artículo 76 bis, fracción II de la Ley Reglamentaria de los artículos 103 y 107 constitucionales), porque esta suplencia se ha instaurado, para que proceda cuando advierta el juzgador que la queja es deficiente, abarcando en la materia penal, incluso la omisión de expresión de conceptos de violación o agravios, pero no hasta el extremo de modificar el régimen que ha establecido la Constitución Federal y la propia Ley de Amparo, respecto de la procedencia del recurso de revisión en amparos directos.” De igual manera, se estima aplicable la diversa tesis jurisprudencial 1a./J. 50/988, emitida por esta Primera Sala, de título y texto: 7 Octava Época, Registro: 206106, Instancia: Primera Sala, Jurisprudencia, Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de la Federación, 78, Junio de 1994, Materia(s): Común, Tesis: 1a./J. 13/94, Página: 25. 8 Novena Época, Registro: 195585, Instancia: Primera Sala, Jurisprudencia, Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, VIII, Septiembre de 1998, Materia(s): Penal, Tesis: 1a./J. 50/98, Página: 228. 31 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 “SUPLENCIA DE LA DEFICIENCIA DE LA QUEJA EN MATERIA PENAL, NO IMPLICA EL HACER PROCEDENTE UN RECURSO QUE NO LO ES. La suplencia de la deficiencia de la queja que existe en la materia penal sólo tiene como fin resolver sobre la cuestión efectivamente planteada y sobre la legalidad o constitucionalidad del acto impugnado, no obstante las imperfecciones o ausencia de conceptos de violación o agravios, para evitar que por una defensa inadecuada o insuficiente, se prive de la libertad de manera injustificada a una persona, pero de ninguna manera llega al extremo de admitir juicios o recursos no permitidos por la Constitución General de la República y las leyes que de ella emanan. Conforme al artículo 76 bis, fracción II, de la Ley de Amparo, las autoridades que conozcan del juicio de amparo deberán suplir la deficiencia de los conceptos de violación de la demanda, así como de los agravios formulados en los recursos que esta ley establece, en materia penal, aun ante la ausencia de conceptos de violación o de agravios. Suplir implica en este caso integrar lo que falta o subsanar una imperfección, completar lo parcial o incompleto, y únicamente opera sobre conceptos de violación o agravios en el caso de que éstos sean materia de estudio ante la inexistencia de una causa de improcedencia, por lo que la suplencia sólo opera una vez que es procedente el juicio o recurso, pero no significa actuar al margen de la ley declarando procedente lo improcedente.” NOVENO. Por último, como el recurso de revisión interpuesto se desecha por improcedente, procede analizar si de conformidad con lo dispuesto en los artículos 3º bis y 90 de la Ley de Amparo, debe imponerse una multa al aquí recurrente. El artículo 90 de la Ley de Amparo, establece que siempre que el recurso de revisión interpuesto en contra de una sentencia de amparo directo sea desechado, por no contener dicha sentencia decisión sobre la constitucionalidad de una ley o no 32 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 establecer la interpretación directa de un precepto de la Constitución Federal, debe imponerse al recurrente o a su apoderado, o a su abogado, o a ambos, una multa de treinta a ciento ochenta días de salario. Sin embargo, esta Sala estima que en el presente caso no debe imponerse al recurrente la multa referida, en razón de que lo que impugnó en su demanda de amparo fue una sentencia privativa de libertad por la comisión de los delitos de Robo de Hidrocarburos, por lo que es evidente que la interposición del recurso de revisión obedece a la pretensión de recuperar ese bien jurídico superior que es la libertad. Es aplicable al respecto, por analogía, la jurisprudencia 2a./J. 91/20059 sustentada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, que esta Primera Sala comparte, que sustenta lo siguiente: “MULTA EN EL RECURSO DE RECLAMACIÓN. NO DEBE IMPONERSE CUANDO QUIEN LO INTERPONE, AUN CUANDO NO SE ENCUENTRE PRIVADO DE LA LIBERTAD, LO HACE CON LA FINALIDAD DE TUTELAR ESE BIEN JURÍDICO. De acuerdo con los artículos 3o. bis y 103 de la Ley de Amparo, debe imponerse multa al recurrente o a su representante, o a su abogado, o a ambos, cuando de las circunstancias del caso se adviertan elementos suficientes para considerar que el recurso de reclamación fue interpuesto sin motivo y de mala fe. Ahora bien, si quien interpone ese medio de defensa no se encuentra privado de la libertad, pero busca 9 Novena Época, Registro: 177574, Instancia: Segunda Sala, Jurisprudencia, Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, XXII, Agosto de 2005, Materia(s): Común, Tesis: 2a./J. 91/2005, Página: 327. 33 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 preservar ese bien jurídico, dado que de confirmarse el proveído presidencial controvertido se concretaría en su perjuicio la afectación que genera a su libertad personal la resolución judicial reclamada en el respectivo juicio de garantías, debe concluirse que el recurrente no actuó de mala fe, aun cuando la reclamación resulte notoriamente improcedente, por lo que no debe imponerse la referida sanción pecuniaria.” Por lo expuesto y fundado se resuelve. PRIMERO. Se desecha el recurso de revisión a que este toca se refiere. SEGUNDO. Queda firme la sentencia recurrida. Notifíquese; con testimonio de esta resolución, vuelvan los autos al Tribunal Colegiado de origen y, en su oportunidad archívese el expediente como asunto concluido. Así, lo resolvió la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, por unanimidad de cinco votos de los señores Ministros: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Guillermo I. Ortiz Mayagoitia, Olga Sánchez Cordero de García Villegas (Ponente), y Presidente Jorge Mario Pardo Rebolledo. Firman el Presidente de la Sala y la Ministra Ponente con el Secretario de Acuerdos, que autoriza y da fe. 34 AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 2985/2012 PRESIDENTE DE LA PRIMERA SALA MINISTRO JORGE MARIO PARDO REBOLLEDO PONENTE MINISTRA OLGA SÁNCHEZ CORDERO DE GARCÍA VILLEGAS SECRETARIO DE ACUERDOS LIC. HERIBERTO PÉREZ REYES En términos de lo previsto en los artículos 3°, fracción II, 13, 14 y 18 de la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental en esta versión publica se suprime la información considerada legalmente como reservada o confidencial que encuadra en estos supuestos normativos. 35