TODAS_SON_IGUALES

RUBÉN CASTAÑO
CORTO ARGUMENTAL
TITULO (optativo):
TODAS SON IGUALES
TEMA: la búsqueda del amor.
IDEA: El amor impide ver a otras personas como individuos.
SINOPSIS. Juan es un joven con pocas responsabilidades, poco sociable y amante del
ambiente nocturno. Una noche se encuentra, junto a un amigo, en un bar en el que
intenta trabar amistad con alguna de las mujeres que allí se encuentran. Sus poco
esforzados intentos fracasan inicialmente hasta que la inminencia del éxito le hacen
tener un repentino cambio de parecer.
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ARGUMENTO
De noche Juan camina por la calle, se acerca a una casa roja de dos plantas. Se detiene,
toca la puerta con tres golpes. Mira hacia una ventana de arriba. Frente él pasan carros
en ambas direcciones. Toca cuatro veces y espera. Se acaricia la barbilla. Agita la
cabeza a lado y lado y arranca de golpe a caminar. Cruza la calle en diagonal entre los
carros y se pierde en medio de ellos.
Frente a un bar pequeño Juan se detiene y desde la puerta echa un vistazo hacia adentro.
Ve, cerca a la puerta, dos mujeres en una mesa Más al fondo se destaca una mujer de
negro cerca de la barra.
Un vendedor de cigarrillos pasa frente a la puerta. Juan compra un cigarrillo y pregunta
la hora. El vendedor pone el encendedor frente a la cara de Juan pero éste lo rechaza
mientras se guarda el cigarrillo en el bolsillo trasero del pantalón. Se sienta contra la
pared junto a la puerta.
La mujer de negro se toma un trago en copa pequeña.
Un policía pasa junto al a pared y despierta a Juan con pequeños empujoncitos en el
hombro. Aún sentado mira al interior del bar, ahora muy lleno de gente. Palpa el
bolsillo trasero del pantalón.
Juan entra y va directo a la barra, muy cerca de la mujer de negro. La mujer de negro
(parece una gata) abanica el aire con sus pestañas. Tiene ojos grandes y negros como
caricatura japonesa que resaltan sobre la tez pálida. Su boca ni grande ni pequeña, ni
rosada, ni roja ni nada. Aunque sí tiene boca. Y esta boca le sonríe a Juan reclamándole
un trago con la promesa del posible beso. Y su mano acaricia la copa vacía.
Una voz de mujer desde las mesas le llama por su nombre. Juan sin mirar a la mujergata se acerca a la mesa. Ella le pregunta con tono de quinceañera que “y qué más?”. El
se encoge de hombros y responde con un “como vamos vamos bien…”. Y la mujer-gata
de negro pasa por un lado, muy cerca. La mujer de la mesa tiene la piel clara y unos
ojos como de caricatura china. Juan se sienta y cuando apenas lleva una frase empezada
se sienta un tipo muy cerca a la mujer de la mesa. Ésta le dice (ya que tiene boca) que
“que peinado tan bacano” que “donde te lo hicistes”. Juan se toca la cabeza y baja la
mano hasta la nuca. El tipo nunca ha mirado a Juan.
Juan se para y se despide mirando los de la mesa, y los de la mesa están mirándose el
uno al otro.
La mujer-gata baila junto a la barra y Juan le sonríe. El bar-tender sirve dos tragos y
Juan empuja uno hacia ella. Mientras ella baila le coge una mano para hacerlo bailar y
él se resiste. Ella gira bailando y le da la espalda. Juan apura un trago. Al subir la
mirada ella está bailando con sujeto con mucho pelo y algo de mugre. Cerca de la mesa
un amigo le hace señas de que se acerque a su mesa. Juan se sienta con el amigo y su
cerveza. Juan enciende el cigarrillo mientras un mesero les pide la mesa y la retira.
Contra una pared hay tres sillas. Ellos van hacia ellas pero no se sientan. Otro mesero
quita una de las sillas. Pronto vuelve por otra.
Juan mira su cerveza y estira la mano ofreciéndole la botella. Aún con la mano estirada
derrama lo que le queda en el piso y dice:”vámonos”.
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Sentados en el andén, cada uno con su cerveza se quedan mirando una mujer que pasa.
Un joven con guitarra terciada se acerca para saludar al amigo y sin darse cuenta con el
pié empuja la cerveza de Juan. La botella apenas se mantiene en pié. El músico alardea
de su voz ronca. Cuando empieza a rasgar la guitarra -y su voz- Juan y su amigo se
ponen de pie y desde tres pasos de distancia se despiden del guitarrista.
Entran a un café. Hay varias personas, ninguna música y muchos pájaros pintados en las
paredes.
Tres nenas y dos hombres están sentados en una mesa. Uno de los hombres está
hablando por celular. El compañero de mesa saca su celular y se dedica a apretar las
teclas con el pulgar derecho.
En un rincón está la única mesa disponible, justo al lado del baño. Después de echar un
vistazo alrededor se dirigen a la mesa y se sientan. Un tipo va al baño por entre el
pequeño espacio entre silla y la pared con lo que Juan debe correrse un poco para no
rozarlo. Una fuerte luz proveniente del baño lo obliga a protegerse los ojos mirando
hacia la pared. La mirada sonriente que Juan intenta lanzarle a la mujer bella se arruina
con el sonido del baño, la luz encegecedora y la corpulencia que saliendo del baño se
interpone. Juan se pone de pie para apagar la luz del baño y se queda mirando una
sombra nítida y alargada de un pájaro sobre la pared. Busca el origen de la sombra pero
además de la bombilla solo encuentra paredes amarillentas y constata con el tacto que la
silueta está pintada sobre la pared.
La bella muy sonriente cuando Juan sale del baño. Éste, serio y confiado, se dirige a la
barra. La mujer, muda, se queda mirando la bragueta de Juan quien después de mirarla
baja la cabeza y así da los dos pasos que le restan para llegar a la barra. Con el codo
sobre la tabla y la mano sobre la frente habla con el bartender.
La mujer habla a su amiga y se ríe. Juan al volver esboza una sonrisa apenada que es
respondida con benevolencia. Juan se ríe ahora más abiertamente.
En la mesa hay una botella de licor a medio tomar. Juan y su amigo están ahora
sentados con las mujeres. Charlan animadamente. La bella se pone de pie e invita a Juan
a bailar. Él muy de prisa se para. La música se para. La botella se estrella contra el piso.
Una copa rodando sobre la mesa. El bar en pleno mira a Juan y escucha la copa
finalmente caer.
La persiana del bar se cierra con gran estruendo. Juan se acerca a la casa roja de dos
plantas. La calle está desierta. Toca cuatro veces y espera. Toca la puerta con un golpe.
Otro golpe. Completa cinco golpes pausados. Se recuesta en la puerta.
FIN
ESCALETA
1.
EXT. CALLE. NOCHE.
Juan camina por la calle, se acerca a una casa roja de dos plantas. Se
detiene, toca la puerta con tres golpes. Mira hacia una ventana de arriba.
Frente él pasan carros en ambas direcciones. Toca cuatro veces y
espera. Se acaricia la barbilla. Agita la cabeza a lado y lado y arranca de
golpe a caminar. Cruza la calle en diagonal entre los carros y se pierde
en medio de ellos.
2.
EXT. CALLE. NOCHE.
Frente a un bar pequeño Juan se detiene y desde la puerta echa un
vistazo hacia adentro. Ve, cerca a la puerta, dos mujeres en una mesa
Más al fondo se destaca una mujer de negro cerca de la barra.
Un vendedor de cigarrillos pasa frente a la puerta. Juan compra un
cigarrillo y pregunta la hora. El vendedor pone el encendedor frente a la
cara de Juan pero éste lo rechaza mientras se guarda el cigarrillo en el
bolsillo trasero del pantalón. Se sienta contra la pared junto a la puerta.
3.
INT. EXT. BAR. CALLE. NOCHE.
La mujer de negro se toma un trago en copa pequeña.
Un policía pasa junto al a pared y despierta a Juan con pequeños
empujoncitos en el hombro. Aún sentado mira al interior del bar, ahora
muy lleno de gente. Palpa el bolsillo trasero del pantalón.
4.
INT. BAR. NOCHE.
Juan entra y va directo a la barra, muy cerca de la mujer de negro. La
mujer de negro (parece una gata) abanica el aire con sus pestañas.
Tiene ojos grandes y negros como caricatura japonesa que resaltan
sobre la tez pálida. Su boca ni grande ni pequeña, ni rosada, ni roja ni
nada. Aunque sí tiene boca. Y esta boca le sonríe a Juan reclamándole
un trago con la promesa del posible beso. Y su mano acaricia la copa
vacía.
5.
INT. BAR. NOCHE.
Una voz de mujer desde las mesas le llama por su nombre. Juan sin
mirar a la mujer- gata se acerca a la mesa. La mujer de la mesa le
pregunta con tono de quinceañera que “y qué más?”. El se encoge de
hombros y responde con un “como vamos vamos bien…”. Y la mujer-
gata de negro pasa por un lado, muy cerca. La mujer de la mesa tiene la
piel clara y unos ojos
como de caricatura china. Juan se sienta y cuando apenas lleva una
frase empezada se sienta un tipo muy cerca de ella. Ésta le dice al
recién llegado que “que peinado tan bacano” que “donde te lo hicistes”.
Juan se toca la cabeza y baja la mano hasta la nuca. El tipo nunca ha
mirado a Juan.
Juan se para y se despide mirando los de la mesa, Ellos están
mirándose unos a otros y no se despiden.
6.
INT. BAR. NOCHE.
La mujer-gata baila junto a la barra y Juan le sonríe. El bar-tender sirve
dos tragos y Juan empuja uno hacia ella. Mientras ella baila le coge una
mano para hacerlo bailar y él se resiste. Ella gira bailando y le da la
espalda. Juan apura un trago. Al subir la mirada ella está bailando con
sujeto con mucho pelo y algo de mugre.
7.
INT. BAR. NOCHE.
Cerca de la mesa un amigo le hace señas de que se acerque a su mesa.
Juan se sienta con el amigo y su cerveza. Juan enciende el cigarrillo
mientras un mesero les pide la mesa y la retira.
Contra una pared hay tres sillas. Ellos van hacia ellas pero no se
sientan. Otro mesero quita una de las sillas. Pronto vuelve por otra.
Juan mira su cerveza y estira la mano ofreciéndole la botella. Aún con la
mano estirada derrama lo que le queda en el piso y dice:”vámonos”.
8.
EXT. BAR. NOCHE.
Sentados en el andén, cada uno con su cerveza se quedan mirando una
mujer que pasa.
Un joven con guitarra terciada se acerca para saludar al amigo y sin
darse cuenta con el pié empuja la cerveza de Juan. La botella apenas se
mantiene en pié. El músico alardea de su voz ronca. Cuando empieza a
rasgar la guitarra -y su voz- Juan y su amigo se ponen de pie y desde
tres pasos de distancia se despiden del guitarrista.
9.
INT. BAR. NOCHE.
Entran a un café. Hay varias personas, ninguna música y muchos
pájaros pintados en las paredes.
Tres nenas y dos hombres están sentados en una mesa. Uno de los
hombres está hablando por celular. El compañero de mesa saca su
celular y se dedica a apretar las teclas con el pulgar derecho.
En un rincón está la única mesa disponible, justo al lado del baño.
Después de echar un vistazo alrededor se dirigen a la mesa y se
sientan. Un tipo va al baño por entre el pequeño espacio entre silla y la
pared con lo que Juan debe correrse un poco para no rozarlo. Una fuerte
luz proveniente del baño lo obliga a protegerse los ojos mirando hacia la
pared. La mirada sonriente que Juan intenta lanzarle a la mujer bella se
arruina con el sonido del baño, la luz encegecedora y la corpulencia que
saliendo del baño se interpone. Juan se pone de pie para apagar la luz
del baño y se queda mirando una sombra nítida y alargada de un pájaro
sobre la pared. Busca el origen de la sombra pero además de la
bombilla solo encuentra paredes amarillentas y constata con el tacto que
la silueta está pintada sobre la pared.
10.
INT. BAR. NOCHE.
La bella está muy sonriente cuando Juan sale del baño. Éste, serio y
confiado, se dirige a la barra. La mujer se pone seria y se queda mirando
la bragueta de Juan quien después de verla baja la cabeza y así da los
dos pasos que le restan para llegar a la barra. Con el codo sobre la tabla
y la mano sobre la frente habla con el bartender.
La mujer habla a su amiga y se ríe. Juan al volver esboza una sonrisa
apenada que es respondida con benevolencia. Juan se ríe ahora más
abiertamente.
11.
INT. BAR. NOCHE.
En la mesa hay una botella de licor a medio tomar. Juan y su amigo
están ahora sentados con las mujeres. Charlan animadamente. La bella
se pone de pie e invita a Juan a bailar. Él muy de prisa se para. La
música se para. La botella se estrella contra el piso. Una copa rodando
sobre la mesa. El bar en pleno mira a Juan y escucha la copa finalmente
caer.
12.
EXT. CALLE. NOCHE.
La persiana del bar se cierra con gran estruendo. Juan se acerca a la
casa roja de dos plantas. La calle está desierta. Toca cuatro veces y
espera. Toca la puerta con un golpe. Otro golpe. Completa cinco golpes
pausados. Se recuesta en la puerta.
FIN
GUIÓN
1.
EXT. CALLE. NOCHE.
Juan camina por la calle, se acerca a una casa blanca de dos plantas.
Se detiene, toca la puerta con tres golpes. Mira hacia una ventana de
arriba. Frente él pasan carros en ambas direcciones. Toca cuatro veces
y espera. Se acaricia la barbilla mientras mira hacia la calle. La cortina
se mueve. Juan agita la cabeza a lado y lado y arranca de golpe a
caminar. Cruza la calle en diagonal entre los carros y se pierde en medio
de ellos.
2.
EXT. CALLE. NOCHE.
Frente a un bar pequeño Juan se detiene y desde la puerta echa un
vistazo hacia adentro.
Ve, cerca a la puerta, dos mujeres en una mesa Más al fondo se destaca
una mujer de negro cerca de la barra, quien hace el gesto de arañar al
aire.
Un vendedor de cigarrillos pasa frente a la puerta. Juan compra un
cigarrillo y pregunta la hora. El vendedor pone el encendedor frente a la
cara de Juan pero éste lo rechaza mientras saca una caja de fósforos
del bolsillo trasero y se lo enciende él mismo. Se sienta contra la pared
junto a la puerta Guarda los fósforos y del mismo bolsillo saca un papel
doblado, lo abre y traza algo el papel.
3.
INT. EXT. BAR. CALLE. NOCHE.
La mujer de negro se toma un trago en copa pequeña.
Un muchacho alto se acerca y despierta a Juan con pequeñas pataditas
en el trasero de Juan. Aún sentado mira al interior del bar, ahora muy
lleno de gente.
ANDRÉS:
Entoes qué? Cervecita?.
JUAN:
Hágale.
Cuando se pone de pie Andrés lo coge del hombro.
4.
INT. BAR. NOCHE.
Juan entra y va directo a la barra, muy cerca de la mujer de negro. La
mujer de negro (parece una gata) abanica el aire con sus pestañas.
Tiene ojos grandes y negros como caricatura japonesa que resaltan
sobre la tez pálida. Su boca ni grande ni pequeña, ni rosada, ni roja ni
nada. Y esta boca le sonríe a Juan. Y su mano acaricia la copa vacía.
5.
INT. BAR. NOCHE.
Una mujer bonita, desde las mesas le mira con insistencia. Tiene la piel
clara y unos ojos como de caricatura japonesa. Es la misma cara de la
mujer gata, pero ésta tiene un aire más juvenil e inocente. Juan sin mirar
a la mujer- gata se acerca a la mesa. Se queda de pie.
MUJER BONITA:
y qué mas?
Juan se encoge de hombros
JUAN:
Como vamos... vamos bien.
Y la mujer-gata de negro pasa por un lado, muy cerca.
JUAN:
Oíste, será que me pued..
Cuando apenas lleva la frase empezada se sienta un tipo muy cerca de
ella.
MUJER BONITA:
que peinado tan bacano... donde te lo hicistes?
Juan se despide moviendo la mano a la pareja, Ellos están mirándose
uno a otro y no se despiden.
6.
INT. BAR. NOCHE.
La mujer-gata baila junto a la barra y Juan le sonríe.
El bar-tender sirve dos tragos y Juan empuja uno hacia ella.
Mientras ella baila le coge una mano para hacerlo bailar y él se resiste.
Ella gira bailando y le da la espalda.
Juan apura un trago.
Al subir la mirada ella está bailando con sujeto con mucho pelo y algo de
mugre.
7.
INT. BAR. NOCHE.
Andrés le hace señas de que se acerque a su mesa. Juan se sienta con
una cerveza en la mano.
Juan enciende un cigarrillo
Se acerca un mesero
MESERO:
Muchachos, qué pena pero necesito la mesa
ANDRES:
Huy hermano, como así...
Andrés y el amigo se paran.
Contra una pared hay tres sillas. Ellos van hacia ellas pero no se
sientan.
La mano de Juan está apoyada sobre el respaldo de una de las sillas
El mesero quita una de las sillas.
Pronto vuelve por otra.
Juan mira su cerveza y estira la mano mostrando la botella.
Aún con la mano estirada derrama lo que le queda en el piso
JUAN:
Vámonos parce.
8.
EXT. BAR. NOCHE.
Sentados en el andén, se quedan mirando una mujer que pasa.
Un joven con guitarra terciada se acerca para saludar al amigo y sin
darse cuenta con el pié empuja la cerveza de Juan.
La botella apenas se mantiene en pié.
MÚSICO:
Hey muchachos, les voy a cantar una canción..
Cuando empieza a rasgar la guitarra -y su voz- Juan y su amigo se
ponen de pie y desde tres pasos de distancia se despiden del guitarrista.
9.
INT. BAR 2. NOCHE.
Entran a un bar. Hay varias personas, ninguna música y muchos pájaros
pintados en las paredes.
Dos hombres están sentados en una mesa. Uno de los hombres está
hablando por celular. El compañero de mesa saca su celular y se dedica
a apretar las teclas con el pulgar derecho.
En otra mesa dos nenas charlan. Una de ellas, rubia, tiene el rostro
igual a la mujer gata y a la mujer bonita.
En un rincón está la única mesa disponible, justo al lado del baño.
Después de echar un vistazo alrededor se dirigen a la mesa y se
sientan.
Un tipo va al baño por entre el pequeño espacio entre silla y la pared por
lo que Juan debe correrse un poco para no rozarlo.
Un fuerte chorro de luz proveniente del baño lo obliga a protegerse los
ojos mirando hacia la pared.
La mirada sonriente que Juan intenta lanzarle a la mujer rubia se arruina
con el sonido del baño, la luz encegecedora y la corpulencia que
saliendo del baño se interpone.
Juan se pone de pie para apagar la luz del baño y se queda mirando una
sombra nítida y alargada de un pájaro sobre la pared. Busca el origen de
la sombra pero además de la bombilla solo encuentra paredes
amarillentas y constata con el tacto que la silueta está pintada sobre la
pared.
10.
INT. BAR 2. NOCHE.
La mujer rubia está muy sonriente
Juan sale del baño.
Serio, se dirige a la barra.
La mujer se pone seria y se queda mirando la bragueta de Juan
Juan se detiene. baja la cabeza. Aún con la cabeza abajo da los dos
pasos que le restan para llegar a la barra.
Con el codo sobre la tabla y la mano sobre la frente habla con el bartender.
La mujer rubia habla a su amiga y se ríe.
Juan al volver esboza una sonrisa apenada.
La mujer rubia sonríe con benevolencia.
Juan se ríe ahora más abiertamente.
11.
INT. BAR. NOCHE.
En la mesa hay una botella de licor a medio tomar. Juan y su amigo
Andrés están ahora sentados con las mujeres.
ANDRÉS:
Entonces qué. Se queda?
JUAN:
Pues, si
Andrés se pone de pie, pone su mano sobre el hombro de Juan.
La mujer que está junto a Andrés se pone de pié.
Andrés y su compañera salen.
La mujer rubia pone su mano sobre el brazo de Juan.
Repentinamente ella le besa en la mejilla.
Juan pone la mano sobre el bolsillo de la camisa.
Se escucha el sonido de una botella estrellándose sobre el piso.
La mujer busca con la mirada el origen del sonido.
Juan duda pero finalmente se pone de pié, como un resorte.
JUAN:
Chao...
MUJER RUBIA:
Diana!
JUAN:
Diana.
12.
EXT. CALLE. NOCHE.
La persiana del bar se cierra con gran estruendo.
Juan camina en las calles desiertas hasta llegar a la casa blanca de dos
pisos.
Saca el papel del bolsillo de la camisa.
Escribe algo en él.
Vemos un rostro igual al de las mujeres anteriores dibujado a lápiz.
Una mano escribe:
"no puedo dejar de pensar en usted"
La mano de Juan pasa el papel doblado debajo de la puerta.
La cortina de la ventana permanece inmóvil.
FIN