LA LEGISLATURA DE LA PROVINCIA SANCIONA CON FUERZA DE LEY: SISTEMA PROVINCIAL DE GESTION INTEGRAL DE LOS RESIDUOS DOMICILIARIOS CAPITULO 1 – OBJETIVOS Y DEFINICIONES Articulo 1) Créase el Sistema Provincial de Gestión Integral de Residuos Domiciliarios. Artículo 2) Son objetivos de la presente Ley: a) Establecer los lineamientos básicos en la gestión de los residuos urbanos orgánicos e inorgánicos domiciliarios en todas las Comunas y los Municipios de la Provincia, mediante la sistematización de su generación, disposición inicial, recolección, transporte, tratamiento, reciclado, reutilización y / o disposición final. b) Disminuir en forma progresiva la generación de residuos por el aprovechamiento más eficiente de los productos orgánicos e inorgánicos en los domicilios. c) Anular o disminuir al mínimo la afectación que esos residuos puedan producir al ambiente y la calidad de vida de las actuales y futuras generaciones. d) Aprovechar al máximo posible el potencial económico y energético de los residuos domiciliarios mediante procesos naturales de conversión y procesos de industrialización para el reciclado, la reutilización o la venta de los subproductos generados. e) Promover la coordinación entre Distritos vecinos o que formen parte de Áreas Metropolitanas, para la aplicación más eficaz y eficiente del nuevo Sistema de Gestión Integral de Residuos Domiciliarios. f) Procurar la inclusión de las personas que realicen en forma individual o grupal la recolección y recuperación de residuos inorgánicos, al nuevo Sistema de Gestión Integral de Residuos Domiciliarios. Artículo 3) Adóptanse las siguientes denominaciones y definiciones de los procesos y elementos constitutivos del Sistema: a) Residuos domiciliarios: elementos, objetos o sustancias que como consecuencia de los procesos de consumo y el desarrollo de actividades humanas, son desechados. b) Residuos orgánicos: son los derivados de las materias de origen animal o vegetal utilizadas o no en la alimentación humana y animal. c) Residuos inorgánicos inocuos: son los derivados de elementos o productos que en el estado en que se utilizan no pueden producir daños a las personas y al ambiente en general. d) Residuos inorgánicos peligrosos: los que por su constitución o por su interacción o mezcla con otras materias pueden producir daños a la salud humana y al ambiente en general; especificados en el siguiente listado no excluyente: - Pilas y baterías. Lámparas de bajo consumo. Tintas, colorantes, pigmentos, pinturas, lacas y barnices. Cauchos. Resinas, látex, plastificantes, colas y adhesivos. Solventes, aceites minerales, mezclas o emulsiones de aceites y agua o de hidrocarburos y agua. Productos químicos de cualquier tipo. Biocidas y productos fitosanitarios. Desechos que puedan resultar de carácter explosivo por sí mismo o por contacto con otras materias. e) Residuos patológicos domiciliarios: cualquier tipo de material o elemento que haya estado en contacto con fluidos o tejidos humanos o animales, y los restos de medicamentos y productos farmacéuticos y / o elementos utilizados en su preparación. f) Disposición final: depósito permanente de desechos resultantes de los procesos de tratamientos. g) Reciclado: utilización de elementos contenidos en los residuos inorgánicos inocuos en nuevos procesos productivos. h) Reutilización: retorno de los residuos inorgánicos inocuos a la utilización sin cambio alguno de forma y composición. i) Digestor: aparato donde por medio de microorganismos anaeróbicos se produce la descomposición intensiva de los desechos orgánicos con liberación de gases útiles como combustible. j) Unidad Ejecutora: dentro del Sistema implementado por la presente Ley, entidad representativa del conjunto de las Comunas y los Municipios a los que sirve cada “Planta Integral de Tratamiento””. k) Planta Integral de Tratamiento: conjunto de tierras, superficies cubiertas y abiertas, máquinas, herramientas, medios de transporte y personal necesario para desarrollar todos y cada uno de los procesos propios del Sistema implementado por la presente Ley. CAPITULO 2 – DE LA AUTORIDAD DE APLICACIÓN Artículo 4) Será Autoridad de aplicación de la presente Ley la Secretaría de Estado de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable. Artículo 5) Las funciones de la Autoridad de aplicación serán: a) Fiscalizar las obligaciones de todas y cada una de las personas físicas y jurídicas que tengan intervención en el Sistema creado por esta Ley. b) Controlar la calidad de los procesos y los sitios donde se desarrollen y sus adecuaciones a la presente Ley y a la Legislación ambiental vigente. c) Participar en la elaboración y la aplicación de Programas de educación y difusión para la población en general destinados a su adaptación al nuevo Sistema creado por la presente Ley. d) Promover la participación de las industrias y los comercios para la mejor gestión del nuevo Sistema. e) Realizar relevamientos y / o encuestas que resulten útiles para la más eficiente aplicación del nuevo Sistema Provincial de Gestión Integral de los Residuos Domiciliarios. CAPITULO 3 – DE LA GESTION Artículo 6) Con el objetivo de dar cumplimiento a la aplicación del nuevo Sistema Provincial de Gestión Integral de Residuos Domiciliarios, la totalidad de los Municipios y las Comunas de cada Departamento de la Provincia, conformarán un “Ente Autárquico Departamental”, cada uno de los cuales tendrá la siguiente estructura y características: a) Cada Ente Autárquico Departamental estará regido por un Directorio integrado con un representante por cada “Unidad Ejecutora”. b) Cada Ente Autárquico Departamental elegirá de entre sus miembros un “Director General”, quien tendrá a su cargo la administración general y la coordinación de todas las Unidades Ejecutoras del respectivo Departamento. c) Los Entes Autárquicos tendrán sus sedes en las Ciudades cabeceras de sus respectivos Departamentos. d) Cada Unidad Ejecutora se integrará con un representante por cada uno de los Distritos que la componen. e) Cada Unidad Ejecutora elegirá de entre los representantes de las Comunas y los Municipios que la integren, un “Director de Unidad Ejecutora”, quien estará a cargo de la totalidad de la gestión del Sistema en la respectiva Planta Integral de Tratamiento. f) Las Unidades Ejecutoras, en los casos de los Departamentos de mayor concentración poblacional, podrán disponer la existencia de más de una Planta Integral de Tratamiento. Artículo 7) La conformación de las Unidades Ejecutoras se hará por la decisión conjunta de los representantes de la totalidad de los Municipios y las Comunas de cada Departamento, reunidos en Asambleas constitutivas previas al inicio de la aplicación del nuevo Sistema Provincial de Gestión Integral de residuos Domiciliarios. Artículo 8) Las Unidades Ejecutoras deberán integrarse por Municipios y Comunas cuyas cercanías entre sí permitan establecer la respectiva Planta Integral de Tratamiento a distancias a cada uno de ellos que asegure la logística de transporte más eficiente. Artículo 9) Las Plantas Integrales de Tratamiento no podrán ubicarse a menos de 5 (cinco) kilómetros de cualquier centro urbanizado. Artículo 10) Cada Unidad Ejecutora determinará, luego de evaluar la cantidad y la composición media de los residuos generados entre todos los Distritos que la integren, la cantidad de Plantas Integrales de Tratamiento, y en ellas, las superficies de tierras, espacios abiertos y cerrados para clasificación y depósitos previos y posteriores, locales de servicios, oficinas, máquinas, herramientas, medios de transporte y personal, necesarios para la gestión de la totalidad del Sistema. Artículo 11) La totalidad de la gestión administrativa y operacional del Sistema estará a cargo directo y exclusivo de cada Ente Autárquico Departamental, y solo podrán concesionarse los servicios de recolección y transporte. Artículo 12) La totalidad de las empresas de cualquier carácter (Pública, privada, cooperativa, ONG.) que se dediquen al reciclado de cualquier tipo de residuos urbanos orgánicos o inorgánicos, en cualquier Distrito de la Provincia, actuando en forma individual o formando parte de algún programa especial estatal o privado, deberán integrarse al nuevo Sistema Provincial de Gestión Integral de Residuos Domiciliarios, para establecer incumbencias, áreas de acción, especializaciones y utilización eficiente de los recursos. Artículo 13) Las personas que hasta el momento de la puesta en vigencia de la presente Ley, obtengan ingresos mediante el trabajo de recuperación de residuos inorgánicos, serán incluidas en el Nuevo Sistema para la intervención en las distintas etapas y lugares de desarrollo del mismo, individualmente o a través de la formación de Cooperativas de Trabajo, con el asesoramiento y capacitación de los respectivos gobiernos de los Distritos de origen o asentamiento. Los emprendimientos cooperativos actuales continuarán trabajando de la misma forma que hasta el momento, con la adecuación a lo ordenado por el Artículo anterior. CAPITULO 4 – DE LOS RECURSOS Y UTILIDADES Artículo 14) El Estado Provincial tendrá a su cargo la provisión de los recursos necesarios para: a) La adquisición por licitación o expropiación de los inmuebles rurales y / o urbanos que requiera el Sistema, según lo determine cada Ente Autárquico Departamental. b) La construcción o mejora y el mantenimiento de los caminos de acceso a las plantas de tratamiento que formen parte del Sistema. Artículo 15) A los fines del artículo anterior, el Estado provincial podrá: a) Asignar nuevas partidas específicas en los Presupuestos de los periodos inmediatos subsiguientes a la sanción de la presente Ley. b) Gestionar y tomar fondos de Entidades y / u organismos crediticios nacionales o internacionales. c) Solicitar subvenciones al Estado nacional. d) Aceptar donaciones o legados de personas físicas o jurídicas. Artículo 16) Los Entes Autárquicos Departamentales, con recursos provistos por los Municipios y la Comunas que los integren, en forma proporcional a la cantidad de habitantes de cada localidad, tendrán a su cargo: a) Los estudios, proyectos, construcción y mantenimiento de las obras de todo tipo necesarias para la puesta en orden de funcionamiento de todas las plantas destinadas a la selección, tratamiento, reciclado, reutilización, venta y disposición final. b) La adquisición y / o alquiler de máquinas y herramientas. c) La contratación del personal necesario para la gestión de todas y cada una de las etapas del proceso, individualmente o mediante convenios con cooperativas de trabajo. d) La contratación por licitación de las empresas para la recolección y el transporte. Artículo 17) A los fines del Artículo precedente, los Municipios y las Comunas y el Ente Autárquico que integren, podrán: a) Asignar nuevas partidas específicas en los Presupuestos de los períodos inmediatos subsiguientes a la sanción de la presente Ley. b) Gestionar y tomar fondos de Entidades y / u organismos crediticios nacionales o internacionales. c) Solicitar subvenciones a los Estados Provincial y Nacional. d) Aplicar al mantenimiento del Sistema las utilidades que el mismo produzca. Artículo 18) Los saldos positivos o negativos que resultasen como producto de la aplicación del Sistema en cada Ente Autárquico, serán distribuidos entre los Municipios y las Comunas en forma proporcional a la cantidad de habitantes de cada localidad. CAPITULO 5 – EDUCACIÓN Y DIFUSIÓN Artículo 19) El Ministerio de Educación y Cultura, con la colaboración de la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable, deberá desarrollar un programa especial de educación y concientización de la población, sobre los alcances y requerimientos del nuevo Sistema de Gestión Integral de Residuos Domiciliarios, incluyéndolo en el desarrollo curricular anual de las Escuelas estatales y privadas en todos sus niveles, implementándose: a) Capacitación especial a los Docentes. b) Participación eventual o periódica de especialistas en ecología. c) Participación de los alumnos en la difusión y concientización familiar y social. Artículo 20) El Estado Provincial, y cada Municipio y Comuna, deberán implementar campañas previas y permanentes de difusión del nuevo Sistema, poniendo especial énfasis en la necesidad de disminuir progresivamente la generación de residuos, y en las formas de la disposición inicial selectiva por parte de la población, a través de: a) Medios masivos de comunicación escritos, orales y audiovisuales. b) Comercios de abastecimiento diario de la población. c) Oficinas de las Administraciones Públicas y Empresas de Servicios Públicos. CAPITULO 6 – ESTRUCTURA OPERATIVA Capítulo 21) La aplicación del nuevo Sistema de Gestión Integral de Residuos Domiciliarios se llevará a cabo por etapas, con las siguientes características: a) Se determinará, mediante estadísticas existentes o a realizarse, y a través de pruebas pilotos en cada Distrito, el volumen, el peso y la composición relativa de los residuos generados en promedio por habitante y por día. b) Sobre la base de los datos obtenidos de acuerdo al inciso anterior, se dividirán los Distritos integrantes de cada Ente Autárquico en sectores o unidades de aplicación del nuevo Sistema. c) Cada sector o unidad de aplicación se irá sumando al Sistema a medida que avance el proceso de educación y concientización de la población, y la adecuación de las empresas encargadas de la recolección y el transporte a las nuevas exigencias. d) Se formalizarán nuevos convenios con las empresas que a la entrada en vigencia de la presente Ley estuvieran a cargo de las recolecciones y los transportes, para la adecuación al nuevo Sistema. Artículo 22) La disposición inicial selectiva se realizará mediante la separación por la población en sus domicilios, de acuerdo a las siguientes categorías: a) Residuos orgánicos. b) c) d) e) f) Residuos inorgánicos inocuos Residuos inorgánicos peligrosos. Residuos patológicos domiciliarios. Residuos de podas y césped. Residuos de grandes dimensiones. Artículo 23) La recolección y el transporte deberán realizarse en forma diferenciada, con las siguientes características: a) Residuos orgánicos, con compactación. b) Residuos inorgánicos inocuos, sin compactación. c) Residuos inorgánicos peligrosos, en compartimentos estancos y sin compactar ubicados en los mismos transportes de inorgánicos inocuos, con hermética separación entre sí y con el exterior. d) Residuos patológicos domiciliarios, en compartimentos estancos y sin compactar ubicados en los mismos transportes de inorgánicos inocuos, con hermética separación con los otros compartimentos y con el exterior. e) Residuos de poda y césped. f) Residuos de grandes dimensiones. Artículo 24) La selección, los tratamientos y los almacenajes previos a las respectivas derivaciones para el reciclado, la reutilización, la venta o la disposición final, se llevarán a cabo en espacios abiertos o cerrados, acondicionados según los tipos y las características de los residuos que en forma separada y exclusiva se dispondrán para cada uno de ellos. Artículo 25) En las plantas destinadas a los residuos orgánicos se realizarán procesos de tratamientos con los siguientes objetivos: a) Producción de humus o compostaje, con las siguientes características: 1) Mediante la lombricultura. 2) Con tratamiento biológico en lagunas depuradoras de las aguas residuales y los líquidos lixiviados. 3) El producto obtenido se ensilará y envasará para su venta a productores agrícolas, forestales, hortícolas, floricultores y comercios. 4) Cuando por cualquier causa no pueda asegurarse que los residuos utilizados y tratados no contengan productos potencialmente peligrosos para la salud humana, el humus generado solo podrá ser autorizado para utilizar en floricultura y forestación. b) Producción de biogás, con las siguientes características: 1) Mediante la descomposición intensiva en forma anaeróbica. 2) Se destinará a la generación de energía eléctrica. 3) Los Entes Autárquicos Departamentales adquirirán el equipamiento que requieran estas plantas por licitación. 4) La producción de energía se destinará prioritariamente al consumo de las propias plantas que formen parte del Sistema de Gestión Integral de Residuos Domiciliarios. 5) Los excedentes de la energía generada por este método se derivaran a los destinos que cada Ente Autárquico decida. c) Solo se destinará a la producción de biogás los residuos que excedan la capacidad de las plantas de compostaje. Artículo 26) Los restos vegetales domiciliarios, producto de podas y cortes de césped, serán destinados al proceso de compostaje. Artículo 27) Los troncos y ramas gruesas de árboles de la vía pública, parques y plazas, extraídos o abatidos por efectos meteorológicos, se destinarán a la venta a industrias madereras. Artículo 28) Las ramas producto de las podas realizadas por los Municipios y las Comunas, se derivarán a los viveros públicos más cercanos para su utilización en la generación de nuevos ejemplares, los que se destinarán a futuras forestaciones dentro de los Distritos integrantes de cada Ente Autárquico. Artículo 29) En las plantas destinadas a los residuos inorgánicos inocuos, se realizarán los siguientes procesos y tratamientos, para posibilitar su reciclado, reutilización, venta o disposición final: a) Los residuos inorgánicos inocuos se seleccionarán y clasificarán en: 1) Papeles y cartones, diferenciados por calidades. 2) Bolsas y filmes plásticos. 3) Botellas plásticas con PVC. 4) Botellas plásticas sin PVC. 5) Otros envases o elementos plásticos. 6) Envases y restos de vidrios. 7) Maderas. 8) Metales: 8.a) Latón. 8.b) Hierros / aceros. 8.c) Bronce / cobre. 8.d) Aluminio. 8.e) Plomo. b) Cada uno de los tipos de materiales separados según el inciso anterior será compactado, o prensado, o embolsado, para su almacenamiento y posterior venta a las industrias que lo requieran para su reciclado o reutilización. c) Los escombros y restos de demoliciones se derivarán a molienda para su reutilización por los mismos municipios y comunas integrantes del respectivo Ente Autárquico, o su venta a terceros. Artículo 30) Los residuos inorgánicos peligrosos deberán colocarse en envases especiales, herméticos y estancos, para posibilitar su almacenamiento seguro y derivación a los lugares de tratamiento o de disposición final, propios o de empresas públicas o privadas que brinden esos servicios. Artículo 31) Los residuos patológicos domiciliarios deberán ser derivados, en envases herméticos y estancos, a plantas de tratamiento propias o de empresas públicas o privadas donde se utilicen únicamente procesos térmicos sin incineración o procesos químicos sin cloro. Artículo 32) Los establecimientos rurales, y las viviendas ubicadas en caseríos dispersos distantes de los centros urbanos, sistematizarán la gestión de sus residuos mediante un régimen especial con las siguientes características: a) Los residuos orgánicos serán depositados en un digestor, provisto por el Ente Autárquico Departamental correspondiente, el que estará destinado al aprovechamiento energético de los desechos mediante la producción de biogás. b) Los residuos inorgánicos inocuos, los peligrosos y los patológicos domiciliarios, serán separados en envases específicos para cada uno de ellos, provistos por el Ente Autárquico correspondiente, para su derivación a las Plantas Integrales de Tratamiento mediante recolecciones periódicas. Artículo 33) Queda prohibida la incineración por cualquier método de todos los tipos de residuos y en cualquier etapa del proceso de tratamiento o disposición final. CAPITULO 7 – DE LOS PLAZOS Artículo 34) Se establece un plazo máximo de 2 (dos) años a partir de la puesta en vigencia de la presente Ley para la conformación de los Entes Autárquicos Departamentales y de las correspondientes Unidades Ejecutoras. Artículo 35) Se establece un plazo máximo de 3 (tres) años posteriores al plazo máximo de conformación de los Entes Autárquicos Departamentales para la realización de todos los estudios, proyectos y obras que demanden la puesta en orden de funcionamiento de la totalidad de los procesos requeridos por el nuevo Sistema de Gestión Integral de Residuos Domiciliarios. Artículo 36) Transcurridos 8 (ocho) años a partir de la fecha de puesta en vigencia de la presente Ley, queda prohibido, en todo el ámbito jurisdiccional de la Provincia, cualquier tipo de gestión de residuos domiciliarios que no cumpla con la totalidad de las disposiciones expresadas en la presente Norma. CAPITULO 8 – DISPOSICIONES COMPLEMENTARIAS Artículo 37) El Poder Ejecutivo establecerá en la Reglamentación de la presente Ley, las sanciones por el incumplimiento en cualquier etapa y por cualquier actor del Sistema, de las obligaciones que demande la misma, basándose en lo dispuesto por el Capítulo 8 de la Ley Nacional 25916 y / o por el Capítulo 10 de la Ley Provincial 11717. Artículo 38) La presente Ley es de orden público, y entrará en vigencia a los 180 (ciento ochenta) días de su promulgación, plazo dentro del cual el Poder Ejecutivo deberá reglamentarla. Artículo 39) Comuníquese al Poder Ejecutivo. FUNDAMENTOS Sr. Presidente: La Humanidad, como fruto amargo de su incesante desarrollo científico y tecnológico, y su aplicación en la producción de bienes de consumo en cantidades que se elevan exponencialmente año a año, ha llevado al Planeta a una situación límite para su existencia y la de todo tipo de vida en él. Las ambiciones de inacabables dimensiones de los poderosos grupos económicos transnacionales solo ven como objetivo el aumento incesante de sus ganancias, sin importarles el precio altísimo que el resto de los humanos debemos sufrir por ello, sacrificando incluso a sus propias descendencias, como signo indudable de la sinrazón de esas actitudes homicidas para con sus congéneres. Las actividades de esos grupos no se limitan a producir y vender, sino que, con tanta inteligencia como cinismo y desprecio, utilizan un arma superior a cualquier otra para lograr sus despiadados fines: la cultura. La penetración de sus falsos pero atractivos paradigmas de vida en las conciencias de los millones de ilusos habitantes del mundo, como un medio inmejorable para la conquista de sus voluntades, logra convencer y obtener la reproducción permanente y transgeneracional de sus perversas “formas de vida”, a las que sacralizan como único objetivo de la raza humana. El resultado de toda esta innoble acción, es la degradación no solo del ambiente, sino de la propia conciencia que sus habitantes debieran por lógica tener, en cuanto a la protección del único lugar que hasta el momento la humanidad tiene para su existencia. El aire, el agua y la tierra han venido sufriendo procesos acumulativos de contaminaciones, como saldo del uso irracional de los medios utilizados en las explotaciones y producciones de todo tipo. Entre los procedimientos utilizados con tanta desaprensión, se encuentra el de la disposición de los residuos que resultan de la vida y la producción de bienes de consumo. Montañas de basura, en las que se depositan materias orgánicas e inorgánicas, son dejadas al libre destino que sus descomposiciones y mezclas con la tierra y el agua provocarán. Toneladas diarias de innumerables tipos de restos de productos de consumo diario por la población se acumulan en lugares cercanos a los asentamientos humanos, a sabiendas del daño directo y potencial que ello genera. Sin embargo, la humanidad, gracias a la actividad concientizadora de aquellos que aún mantienen con firmeza sus convicciones de superación de tan injustas pautas de vida a los que hemos sido conducidos, ha comenzado a producir alternativas para las formas de aprovechamiento eficiente de sus actividades y producciones. El tratamiento de los residuos urbanos ya ha dejado de ser solo una intencionalidad manifestada solo en discursos, para convertirse en realidad palpable e imprescindible para el verdadero desarrollo que todos ambicionamos, pero que hasta el momento pocos lo hacen pensando con seriedad en la sustentabilidad de las acciones humanas que se realizan con esos objetivos. Nuestro País, y nuestra Provincia en particular, también sufren como el resto del Mundo, de este despiadado sistema de disposición contaminante de los residuos de todo tipo, y de los domiciliarios en especial. Las enormes y crecientes cantidades de residuos orgánicos e inorgánicos domiciliarios que se generan en todas y cada una de las Ciudades y de los Pueblos de nuestra Provincia, especialmente en los grandes conglomerados urbanos como Rosario y Santa Fe, hacen imprescindible la aplicación de nuevos sistemas para su gestión, con el claro y principal objetivo de terminar o disminuir al mínimo que las tecnologías conocidas permitan, el proceso de contaminación del ambiente en general que los actuales sistemas provocan. Hasta el momento estos residuos son “eliminados” simplemente mediante su enterramiento, con poco o nulo tratamiento o aprovechamiento, y a pesar del mayor cuidado que pueda tenerse en la preparación de las bases de los terrenos destinados a ese fin, los residuos terminan por producir la contaminación directa de las napas de aguas subterráneas, provocar la aparición y proliferación de innumerables vectores transmisores de peligrosas enfermedades a la población, además de generar gases propios de la descomposición de las materias orgánicas allí depositadas. (1) Como resultado de la utilización de este tipo de disposición de los residuos, se pierden importantes cantidades de subproductos que podrían derivarse de su tratamiento, conversión e industrialización, como así también del potencial energético que esas materias en descomposición poseen. Otro evidente inconveniente del actual sistema de disposición de la basura urbana es la necesidad creciente y permanente de nuevas tierras destinadas a los enterramientos, al agotarse rápidamente las existentes. Esto trae, a su vez, constantes conflictos entre Distritos y aún entre Barrios de las grandes Ciudades, pues todos sus habitantes desean permanecer alejados de las áreas de enterramientos que se necesitan. (2) Junto a estas consecuencias objetivas, hay que señalar que los habitantes en general mantienen actitudes desaprensivas ante el necesario cuidado en la generación de residuos, lo que sin dudas colabora para crear los nefastos resultados que después terminará por provocarles daños y perjuicios a ellos mismos, como parte de una sociedad devenida insolidaria con su propia descendencia, a la que condena, de seguir con esas actitudes, a poner en riesgo la vida misma de esos futuros Ciudadanos. La falta de solidaridad de la sociedad se manifiesta también, y dolorosamente, con la actividad diaria de miles de conciudadanos que, víctimas de la marginación económica y social, se ven obligados a realizar penosas y peligrosas tareas de búsqueda en los residuos de aquellos elementos que le permitan, mediante su venta, subsistir, aún cuando solo sea en forma degradante; cuando no tomar restos de alimentos para saciar su verdadero hambre. Solo la existencia vergonzante de estos hechos debe generar en quienes tenemos la responsabilidad otorgada por, entre otros, esos mismos degradados Ciudadanos, a tomar medidas y promover acciones que ayuden a permitir la inclusión de esos marginados a la sociedad de la que forman parte por derecho. En ese sentido, la participación de esas mismas personas en renovados sistemas de gestión de los residuos, permitirían dignificar sus tareas, y obtener los beneficios propios de cualquier trabajador, incluida la seguridad social para sus familias. Puede asegurarse entonces que el aprovechamiento integral de los residuos orgánicos e inorgánicos domiciliarios logra generar, con una eficaz y eficiente gestión, beneficios directos e indirectos en lo económico, lo social y lo ambiental. Existen innumerables ejemplos de ciudades en nuestro País y el Mundo que han logrado solucionar o apaciguar el problema de la basura urbana por la aplicación de procesos de conversión e industrialización. (3) Es imprescindible entonces que el Estado Provincial, conjuntamente con las Autoridades de las Comunas y los Municipios de toda la Provincia, terminen por comprender y aceptar la necesidad urgente de proteger el ambiente de cualquier tipo de ataque producto de la contaminación que los actuales sistemas de disposición de los residuos urbanos están provocando, en pos de impedir, mediante la acción conjunta y la concientización ciudadana, la degradación de la vida de las actuales y futuras generaciones. Con esos objetivos, es necesario obtener también el máximo provecho de las cualidades positivas de la división política de la Provincia en Departamentos, concentrando administrativamente en ellos, y descentralizando operativamente en los Municipios y las Comunas la gestión de los procesos que se deban implementar para concretar con eficacia las metas ambientales perseguidas, y con ellas, las sociales y económicas, que seguramente terminan por lograrse por la mayor eficiencia que estos sistemas de aprovechamiento de las intrínsecas potencialidades de los residuos poseen. El tiempo es, en los temas ambientales, el peor enemigo. Ha llegado la hora, entonces, de dar un salto cualitativo en la trascendente lucha por una nueva cultura solidaria e inclusiva, que tenga al ser humano como su insoslayable destinatario final. (1) A modo de ejemplo se transcriben a continuación algunos artículos periodísticos: Fuente: DIARIO EPOCA DIGITAL – CORRIENTES 26/12/2007 Basurales a cielo abierto, un problema común de todos los municipios Especialistas en el tema consideran que esta situación no hace ningún tipo de distinciones en cantidad de habitantes ni nivel económico. Alertan sobre las consecuencias para la salud pública. “El principal problema que hay en Argentina es que el 98% de los municipios no tienen ningún sistema de disposición final adecuado, la mayoría son basurales a cielo abierto, los que traen una serie de inconvenientes medioambientales, de la salud y otros tantos que no han sido resueltos adecuadamente”, aseguran dos especialistas más importantes en el tema -a nivel nacional-Carlos Barbieri y Eduardo Venini de la Facultad de Ciencias Exactas, Ingeniería y Agrimensura de la Universidad Nacional de Rosario. Estas reflexiones es el resultado de muchos años de experiencias y fueron pronunciadas en el seminario sobre “Aprovechamiento y disposición final de Residuos sólidos Urbanos” realizado semanas atrás en la Facultad de Ciencias Exactas, Naturales y Agrimensura de la UNNE. Por otra parte, consideran que esta situación no es una problemática exclusiva de las grandes ciudades. “Hemos trabajado con poblaciones de 5000 habitantes hasta poblaciones de 300 mil habitantes y lo único que cambia es la metodología, pero básicamente, la resolución del problema es el mismo. Cambia la magnitud, cambia el volumen de la cantidad de residuos que se manejan, nada más, remarcó Eduardo Venini. Afirman que en la masa de residuos hay mucha energía puesta en juego que se desperdicia. “Paralelo a la disposición final que siempre hay que tenerla, se pueden hacer campañas a fin de reducir la masa de residuos, es decir, hay determinados elementos que no deberían ir a parar a la disposición final, por ejemplo: papeles, plásticos, metales, aluminios, entre otros. Todo eso tiene que volver a la parte industrial como elemento recuperado y ser reciclado, de la misma manera o con otro fin, pero de ningún modo ser desechado. Buscando la raíz del problema Pero estas tareas posibles no se llevan a cabo en el país. “Uno de los motivos es el económico. Para cualquier campaña que se precie de tal, para que llegue a buen término, hay que invertir. Tenemos vasta experiencia de ver cosas que se inician y no se continúan, por falta de dinero fundamentalmente o por falta de voluntad política”. “Son muchos los factores a tener en cuenta, pero el fundamental es la decisión política para hacerlo, si eso se consigue, sólo hay que ver cuál de todos los programas que uno pueda desarrollar es más factible de realizar en el municipio en cuestión a un costo razonable”, coinciden. Impactos y consecuencias Los desechos sólidos abandonados constituyen una molestia pública. Obstruyen los desagües y drenajes abiertos; invaden los caminos, restan estética al panorama, y emiten olores desagradables y polvos irritantes. Generalmente, un proyecto para desechos sólidos incluirá el mejoramiento de su recolección, disminuyendo de esta manera la cantidad de desechos abandonados. Sin embargo, si un proyecto no es diseñado apropiadamente para adecuarse a las necesidades y patrones de comportamiento de los residentes locales, puede resultar en mayores impactos relacionados con los desperdicios abandonados. En tanto que la salud pública puede ser afectada cuando los desechos sólidos no son correctamente contenidos y recolectados en el ambientes vital y de trabajo. Es más, existe un contacto directo cuando carecen de una inadecuada protección los trabajadores de recolección y eliminación. Como resultado, el diseño de un proyecto de desechos sólidos necesita considerar los costos económicos de la contención de la basura y protección de los trabajadores, relativas a los potenciales impactos en la salud pública, a fin de obtener un nivel apropiado de diseño. También afecta a la salud pública la incorrecta eliminación de los desechos sólidos en un basurero a cielo abierto. Aunque varios proyectos de desechos sólidos han contemplado el cerrado de basureros abiertos e implementación de prácticas alternativas de eliminación sanitaria, pocos proyectos han tenido éxito en implementar este componente del proyecto debido a problemas en la adquisición de tierras y financiación local, así como presiones para la recirculación por parte del sector informal. Por todo esto, resulta necesario proporcionar a la comunidad, un ambiente sano, libre de gérmenes, deshechos y vectores, un escenario paisajístico agradable y habitacional. ------------------GRAVE SITUACIÓN POR EL BASURAL DE VILLA GOBERNADOR GÁLVEZ FUENTE: DIARIO LA CAPITAL 26/03/2006 Pertenece a la Municipalidad y no está habilitado para recibir residuos urbanos pero se usa igual y contamina Villa Gobernador Gálvez.- En los vertederos a cielo abierto de disposición final de residuos sólidos urbanos denominados basurales frecuentemente suceden hechos que ponen en riesgo la salud de la población, comprometiendo seriamente la calidad de vida de los ciudadanos y destruyendo los recursos naturales que son fuentes de vida para el futuro. El caso del basural de la Municipalidad de Villa Gobernador Gálvez es emblemático en ese sentido ya que en él se vuelcan residuos urbanos y en algunos casos industriales, y ya se produjeron problemas de trascendencia provincial. El basural de Villa Gobernador Gálvez no cuenta con habilitación para operar como receptor de residuos urbanos propios ni ajenos pero esto no impide que se vuelque la basura directamente sobre la tierra, en cercanías del arroyo Saladillo. Esta situación produce contaminación de sus aguas por doble efecto, a través de la absorción del suelo y del deslizamiento superficial de líquidos, que en este caso se agrava ya que no cuenta con coberturas de tierra que impidan el desplazamiento de los residuos hacia la zonas más bajas, lo que facilita el lavado y escurrimiento de las aguas sucias hacia el cauce del arroyo. Esto es muy grave sobre todo si se tiene en cuenta que se encuentra ubicado a escasos metros del Parque Sur y las Quebradas del Saladillo. En este basural también se producen incendios periódicos y las humaredas con diferentes contaminantes afectan las condiciones de visibilidad de la autopista Rosario?Buenos Aires y otras vías de acceso, poniendo en riesgo el tránsito vehicular, tal como fue denunciado en diversas oportunidades. La quema clandestina provoca también el desprendimiento de diversas partículas que el viento transporta en distintas direcciones, afectando con olores ofensivos a las poblaciones cercanas. Pero tal vez el mayor impacto sobre la sociedad y el ambiente esté radicado en las situaciones anexas al basural. El descontrol en el que se encuentra actualmente el depósito de residuos de Villa Gobernador Gálvez ha ocasionado situaciones que implican consecuencias irremediables sobre la salud de toda la población. Se trata de la cría de porcinos dentro del basural, donde proliferan roedores, entre otros vectores, que son el factor más importante de transmisión de la trichinella spiralis, responsable de la triquinosis. Estos cerdos criados y engordados con basura, luego son consumidos por la población. Esto sucede dentro del predio municipal de Villa Gobernador Gálvez y las autoridades no pueden desconocer que muchas familias se han radicado dentro de los terrenos, viven de la basura y desarrollan sus actividades de porcicultura de manera absolutamente informal, sometiendo a la población a contraer la mortal enfermedad de triquinosis, aún no erradicada de la provincia. (2) A modo de ejemplo se transcriben a continuación algunos artículos periodísticos: UN BASURAL AFECTA SERIAMENTE EL DESARROLLO DE RICARDONE FUENTE: DIARIO LA CAPITAL 17 / 08 / 2006 Graves daños ambientales comprometen a un pueblo que tenía el mayor crecimiento demográfico de la provincia Ricardone.- Una situación sin retorno padecen los vecinos de esta localidad a raíz de una serie de nefastos factores relacionados con un basural que diariamente emana un olor nauseabundo y que compromete la calidad de vida. Si bien Ricardone resultó en la década del 90 la localidad de mayor crecimiento demográfico en la provincia -según el censo del Indec creció a una tasa del 8,91%, muy superior a la regional que no alcanzó 0,37%-, lo cual se tradujo en diversos proyectos urbanísticos y de desarrollo, el nuevo paisaje hizo que éstos se diluyeran y se alejaran las inversiones, al igual que muchas propuestas para emprendimientos habitacionales que reflejaban la demanda existente en ese momento en el distrito. A principios de esta década la comuna local, que contaba con un espacio verde conformado por una añeja arboleda de eucaliptos de una especial belleza, decidió permitir la tala de algunos ejemplares para depositar en ese lugar la basura de Ricardone. Conforme fue pasando el tiempo se incorporaron los residuos de localidades vecinas que fueron comprometiendo lentamente la calidad ambiental del sector, y hace pocos años la Municipalidad de Rosario decidió involucrar la basura de esa metrópolis en el volcadero, cuyas dimensiones hasta ese momento no eran comprometedoras. Se continuó talando la arboleda y comenzó el crecimiento desmedido de la montaña de basura a tal punto que superó los espacios que habían dispuesto a priori para esta actividad. El bosque se redujo a una mera cortina vegetal que pasó a cumplir la función de mantener el fenómeno fuera de la visual. La gravedad del caso no reside tal vez en el hecho de que en la actualidad ese gran basural sobrepasó las copas de los añejos eucaliptos, sino en el incorrecto manejo de sus externalidades. En su primera etapa, cuando sólo se volcaban los residuos de la zona, las trincheras estaban excavadas directamente en la tierra sin impermeabilización alguna. Esta situación se modificó cuando la basura ingresada ascendió a 600 toneladas diarias. Se procedió entonces a la impermeabilización de las celdas y en consecuencia a la acumulación de líquidos lixiviados (agua que pasa por la basura y la lava lentamente, produciendo el arrastre de los contaminantes). Malos olores Por otra parte los malos olores derivan de dos situaciones inconexas, aunque también responden al mal manejo de la operación. La primera está directamente relacionada con la superficie de basura expuesta que emana el característico olor a residuos en proceso de descomposición. La segunda está vinculada al sector donde se almacenan los líquidos lixiviados y concretamente a su operación y las medidas de seguridad que aplican para evitar el rebase. Es justamente aquí donde reside el riesgo de daño ambiental, ya que si estos fluidos no son retirados de las celdas en tiempo y forma, terminan rompiendo la cobertura, alcanzando el suelo y filtrándose hasta los acuíferos subterráneos. Si bien los efluentes son retirados y almacenados en piletas, éstos deben ser tratados para descontaminarlos y poder volcarlos al cuerpo rector, con los cuidados necesarios para que estas piletas no desborden por agentes externos, como las abundantes precipitaciones. Todos estos factores generan finalmente un daño ambiental irreversible y si bien puede pensarse en un remedio, la contaminación del agua pone en extremas condiciones de riesgo a los seres vivos. Al respecto cabe recordar que la ley nacional de medio ambiente, que establece los presupuestos mínimos para el logro de una gestión sustentable y adecuada del ambiente, la preservación y protección de la diversidad biológica y la implementación del desarrollo sustentable, reza en su artículo 4º sobre el "principio precautorio: cuando haya peligro de daño grave o irreversible, la ausencia de información o certeza científica, no deberá utilizarse como razón para postergar la adopción de medidas eficaces, en función de los costos, para impedir la degradación del medio ambiente." ------------------LA BASURA, UN PROBLEMA DE FONDO / Fuente: La Nación (Argentina) En los debates preelectorales, el problema de la basura aparece concentrado en la discusión de la limpieza. Cómo lograr retirar la basura de las calles y los domicilios es un debate que pasa del problema del prestador (concesión privada o servicios propios) al problema de la medición: si el pago de ese trabajo debe realizarse según la tonelada de basura, como sucede actualmente, o si debe hacerse mediante el reconocimiento de un canon por "zona limpia". Pero la realidad es que la recolección es la parte menor del problema de la basura. Su fase crítica se encuentra antes y después de la recolección: en la producción y en la disposición de la basura. Lo más inmediato parece ahora la disposición de la basura, porque la provincia de Buenos Aires, que la recibe en el Cinturón Ecológico (en su momento ingeniosamente así bautizado) descubre que está pagando un alto costo ambiental y, según las palabras de su gobernador, Felipe Solá (LA NACION, 17 de abril), no debería seguir recibiéndola sin una compensación por ese daño, con lo que se cuestiona el esquema Ceamse de recepción de la basura capitalina diseñado en 1977. El tema emerge a la agenda de los candidatos a jefe de gobierno por la simple razón que el Cinturón Ecológico ha completado en gran parte su capacidad de recepción de basura. Su diseño contemplaba básicamente el relleno de las cuencas inundables, zonas que por esa misma razón no se encontraban urbanizadas. Consecuencias geográficas La política en cuanto a residuos urbanos no ha cambiado demasiado desde tiempos inmemoriales. Puede resumirse en un único concepto: llevarlos a otro lado. Sin embargo, como lo recuerda el Testaccio, monte de Roma frente al antiguo puerto, constituido por la acumulación de las vasijas rotas durante la época imperial, en el caso de las grandes aglomeraciones urbanas la acumulación de basura rápidamente toma dimensiones geográficas. Y tiene también consecuencias geográficas. A las más conocidas de la emanación de olores y gases debe agregarse la peligrosa contaminación de cursos de agua (como ya están contaminados, absurdamente no nos preocupa tanto) y la todavía peor contaminación de las napas subterráneas, verdadera reserva estratégica y fuente de agua potable para muchas poblaciones. En el caso del Cinturón Ecológico, estas nuevas colinas, tapizadas por una piadosa aunque delgada alfombra de césped, agregan a la geografía pampeana no sólo su visible elevación, también la invisible ausencia de las antiguas cuencas de los ríos de llanura, que funcionaban como vasos de expansión de las crecidas producidas por las copiosas lluvias repentinas. Cegados esos bajos, las crecidas de los ríos no tienen por dónde expandirse sino aumentando la cota dinámica de una inundación que llega adonde antes no llegaba: a terrenos que antes habían sido seguros, principalmente en el conurbano. La propia Capital Federal contempla incrédula el indetenible aumento de la cota de inundación y se apresura a construir vasos de expansión artificiales. De modo que el problema de la disposición de la basura no se resume a la morosa ecuación de cuán lejos podemos llevarla con el dinero que estamos dispuestos a pagar, sino en contemplar debidamente todos los efectos de una ecuación de dimensiones geográficas, cuyos perjuicios difusos no se circunscriben al ámbito inmediato del vaciadero, sino que se expanden en múltiples formas. Nada fácil será cuantificarlos para la provincia de Buenos Aires. Si las soluciones después de la recolección y limpieza no son sencillas, las soluciones antes de la recolección son al menos más racionales y económicas. Estas se centran en disminuir la producción de basura. Mientras el servicio de recolección y limpieza ha mejorado sensiblemente en las últimas décadas, tanto o más ha progresado la capacidad de la sociedad para producir basura. La población de la ciudad de Buenos Aires no ha aumentado en medio siglo, pero la producción de basura se ha multiplicado por dos o por tres. La razón está en un sistema de producción y comercialización que promueve un descarte exacerbado, principalmente de envases. Lujos insensatos Mientras su recolección siga pesando exclusivamente sobre los hombros de los vecinos, los fabricantes de productos y envases descartables nunca incorporarán al precio su costo más alto: su recolección y deposición final. Mientras reciban este subsidio, sólo se verán incentivados a regalar envases que ven como baratos. Los campos vecinos del conurbano se encuentran inundados de bolsas de nailon que vuelan al azar y que se multiplican al mismo ritmo con que generosamente se regalan todos los días. La antigua bolsa de pan, de tela y dos varillas de madera, no producía residuo alguno, pero nuestros padres y abuelos no eran más racionales que nosotros: simplemente no podían permitirse el derroche. Cuando se llenen todos los vaciaderos, descubriremos que nosotros tampoco. Sólo cuando la ciudad imponga un precio a la recolección y a la disposición de la basura en el momento de su fabricación, ese costo se incorporará al precio de los productos, y cada uno de nosotros podrá actuar antes de producir la basura, o sabrá al menos cuál es el precio que está pagando por ese insensato lujo. Por Fernando Diez arquitecto, especialista en desarrollo urbano y medio ambiente. Profesor en las Universidades de Buenos Aires y Palermo. (3) A modo de ejemplo se transcriben a continuación algunos artículos periodísticos: CIUDADES QUE SACAN PROVECHO DE SUS RESIDUOS Fuente: La Voz del Interior (Córdoba - 20/01/2008) El aprovechamiento de los recursos que van a parar a la basura es, en los países desarrollados, un verdadero negocio. Desde el reciclado hasta la generación de energía, se obtiene menos basura y una fuente energética sustentable. De los enterramientos sanitarios se puede extraer biogás, que se compone de principalmente de metano –uno de los principales culpables del efecto invernadero–, dióxido de carbono, hidrógeno, nitrógeno y ácido sulfúrico, que se liberan durante el proceso de fermentación anaeróbica de residuos orgánicos y que se puede emplear como fuente energética. Las bacterias consumen el carbono y el nitrógeno y como resultado se produce una combinación de gases formado por un 70 por ciento de metano, 20 por ciento de anhídrido carbónico y un poco de monóxido de carbono y anhídrido sulfuroso. En muchas ciudades del mundo, el metano se envía a redes domiciliarias o es utilizado para la generación de energía eléctrica. En otros casos, se lo quema para convertirlo en dióxido de carbono, 21 veces menos contaminante. Suiza trata más del 50% de los residuos urbanos y recicla hasta el 95% de materiales Suiza es uno de los países que más basura genera en toda Europa –715 kilogramos anuales por habitante–, pero también es el que mejor trata los residuos urbanos. Según los organismos de medio ambiente de ese país, el tratamiento de la basura de las ciudades alcanza el 50 por ciento. Y el reciclaje de algunos materiales –el vidrio por ejemplo–, hasta el 95 por ciento. Con el resto se produce energía eléctrica. Existen grandes incineradores de basura que en 2006 generaron una producción de 1.823 gigavatios/hora. Sólo va a los enterramientos una pequeña fracción de los residuos. Alemania hace punta en el estímulo a la producción de biogás Con una legislación que estimula la producción de energía eléctrica a partir del gas metano, Alemania está posicionada como líder a nivel mundial en el uso del biogás. Existen más de tres mil plantas instaladas en todo el país, con una capacidad de generación de unos 1.100 megavatios, casi el doble que la central nuclear de Embalse, que tiene una capacidad de 600 megavatios. Las plantas se instalan en granjas, que reciben desechos orgánicos que son tratados en biodigestores. Luego, al biogás tratado se lo usa para generar electricidad o se inyecta a la red domiciliaria. Más de seis mil familias reciben electricidad en Sevilla El Centro de Tratamiento de Residuos Montemarta-Cónica es el mayor centro de tratamiento de residuos urbanos de Andalucía y uno de los más grandes de España. Allí se lleva a cabo la captación del biogás en la zona de vertido controlado, generándose a partir del mismo energía eléctrica que se utiliza para el abastecimiento del centro, comercializándose el excedente. Según los cálculos, unas seis mil viviendas de Sevilla reciben la energía eléctrica que produce el centro. Otra planta, la de Sasieta, en el País Vasco, produce energía para 3.500 habitantes de la zona. En Buenos Aires, se produce energía y bonos de carbono en un enterramiento del Ceamse El Centro de Disposición Final Norte III-B es un enterramiento ubicado en el partido bonaerense de San Martín, propiedad de la Coordinadora Ecológica Área Metropolitana Sociedad del Estado (Ceamse). En ese enterramiento, la empresa Ecoayres, propiedad del grupo Roggio, realizó las obras necesarias para la extracción del biogás, producto de los desechos que por años recibió el predio. Las cañerías conducen una parte del biogás hacia un quemador, que lo convierte en dióxido de carbono. Otra parte va a una generadora eléctrica de 330 kilovatios, que provee de energía a la planta. En Rosario y en otras localidades de la provincia de Santa Fe, las experiencias se multiplicaron Desde 2005, el enterramiento sanitario de Puente Gallego produce biogás que se quema, produciendo dióxido de carbono, 21 veces menos contaminante que el metano, y se obtienen bonos de carbono. Allí se realizó una inversión importante, con unos 60 pozos de extracción: se utilizan caños perforados en un lecho de piedra y con una cabeza con material especial, conectados a una central de extracción, que es donde se succiona el gas que se lleva por seis kilómetros de cañería hasta un quemador de llama oculta. Por su parte, la localidad santafesina de Emilia fue la primera del país en producir biogás, que es utilizado por una escuela. Los restos orgánicos se usan en una plantación de frutales. Alta Gracia espera la aprobación de su proyecto de reciclado La ciudad de Alta Gracia, a 38 kilómetros al sudoeste de Córdoba capital, espera todavía que el Banco Mundial apruebe su proyecto para la instalación de una planta de procesamiento de basura. El proyecto consta de una etapa en la que se separa los materiales reciclables, y de una segunda en que los desechos orgánicos son compactados y dispuestos en digestores anaeróbicos. El metano generado se destinará a la producción de energía eléctrica para la planta, y los restos orgánicos se dispondrán en pozos para que lombrices lo terminen de procesar, y así obtener fertilizante natural. Bonos de carbono: el incipiente negocio del aire limpio Las emisiones que provocan el efecto invernadero están compuestas por seis gases: dióxido de carbono, metano, óxido nitroso, perfluoro de carbono, hidrofluoro carbono y hexafluoruro de azufre. Su potencial de calentamiento global oscila entre uno (dióxido de carbono) hasta 23.900 veces (hexafluoruro de azufre). De los enterramientos de basura emana principalmente gas metano, que es 21 veces más contaminante que el dióxido de carbono. El Protocolo de Kioto promueve que los países desarrollados se comprometan a reducir o limitar esas emisiones respecto a los niveles que se registraban en 1990, a través de mecanismos de reducción o secuestro de dióxido de carbono. A tal fin, pueden emprender acciones nacionales o participar en proyectos que persigan esos objetivos en otros países. Con ese propósito nace el Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL). En ese contexto, se crearon los bonos de carbono o Certificados de Reducción de Emisiones, que son una herramienta para que las industrias más contaminantes de los países desarrollados paguen una penalidad por sus emisiones de dióxido de carbono. Las empresas tienen que respetar un límite de emisión. Si lo sobrepasan, deben comprar bonos a empresas que los obtengan gracias a inversiones que cuidan el ambiente (forestación, energía limpia, métodos industriales menos contaminantes, etcétera). Por ello, cada vez hay más interesados en producir aire puro con los MDL, entre ellos la Municipalidad de Córdoba. “Vamos a suponer que un proyecto que agotó el proceso, de MDL y genera certificados. Cuando se genera bonos, se genera capital”, explicó José Luis Rodríguez Bosco, de la comisión asesora en medio ambiente del Consejo Profesional de Ciencias Económicas. Los que están en el mercado, esperan que con la entrada de Estados Unidos en el Protocolo de Kyoto, el valor de los bonos de carbono puede multiplicarse. AGD, pionera en la provincia de Córdoba. El único ejemplo de peso en la provincia de Córdoba de producción de energía eléctrica con basura es el que en marzo pondrá en marcha Aceitera General Deheza (AGD) en su planta de refinación de aceite, en General Deheza. Se trata del primer proyecto cordobés que cuenta con la certificación de bonos de carbono de la Organización de las Naciones Unidas. Consta de la generación de energía mediante la incineración de cáscaras de maní y de girasol. La incineración produce vapor, que será utilizado en parte para la generación de electricidad por una turbina, y para el secado de semillas, refinación o producción de aceite. “Tenemos una turbina de origen brasileño, que producirá 10 megavatios de energía. Eso cubre el consumo del 50 por ciento de la aceitera”, comentó Miguel Ferrero, vocero de la empresa, que no descartó que en algunos períodos de baja productividad se pueda vender la energía sobrante al mercado mayorista nacional. ------------------El Este se une para terminar con los basurales a cielo abierto Fuente: Diario Los Andes - Mendoza Con una planta de tratamiento común, las municipalidades evitarán basurales en cada departamento. El departamento de San Martín se sumó a la propuesta de sus vecinos para formar en el Este un consorcio entre las cinco municipalidades, que resuelva el problema de la basura domiciliaria. Con la venia dada ayer por el Concejo Deliberante de San Martín, quedó allanado el camino para tramitar la personería jurídica de la entidad, lo que permitirá llamar a licitación para la construcción de una planta de tratamiento de residuos, ubicada en la zona de Vizcacheras, al norte de Rivadavia. Aunque el proyecto original tiene ya varios años, recién ahora, después de unas cuantas idas y vueltas, las comunas están consiguiendo ponerse de acuerdo (en realidad faltaba que San Martín se entusiasmara con la idea) para administrar de manera conjunta, el transporte y tratamiento de la basura. La idea principal es terminar con los basurales a cielo abierto y que los residuos generados por los cinco departamentos, terminen en Vizcacheras (lugar en el que Rivadavia descarga su basura), donde se construirá una planta para su tratamiento. Al mismo tiempo, habrá dos estaciones de transferencia ubicadas en San Martín y Santa Rosa-, desde donde se transportará la basura hasta su destino final. "Para abaratar costos, los departamentos más alejados de Vizcacheras llevarán sus residuos a esas plantas secundarias, y a partir de allí, el consorcio se hará cargo del transporte, usando camiones más grandes", explicó Gerardo del Río, secretario de Gobierno de Rivadavia. Actualmente, y según comentó Del Río, hay en el presupuesto provincial una partida de 1,5 millones de pesos destinada a ese emprendimiento, "y aunque el costo total de la planta ronda los 6 millones, el dinero que ya está presupuestado nos sirve para licitar una primera etapa que, esperamos, se haga antes de fin de año". Consultado por Los Andes, Bartolomé Robles, secretario de Gobierno de San Martín, explicó que "nuestro departamento produce más del 60% de los residuos que genera el Este. Con ese volumen resulta importante tener un proyecto que nos permita controlar el problema". Efectivamente, con cerca de cien toneladas diarias de desechos, un basural que se está saliendo de control (ya hay residuos que cubren una de sus calles laterales), y una proyección de más de 135 toneladas diarias para el 2015, a San Martín le interesa encontrar una rápida solución, y si con ella termina sacando los residuos del departamento, mucho mejor. Junín recolecta cerca de 20 toneladas de basura por día, a un costo mensual cercano a los 100.000 pesos, y la idea de formar un consorcio intermunicipal seduce a sus funcionarios. "Aunque controlado, nuestro basural está cerca de su límite y eso nos obliga a pensar en una alternativa", opinó José Luis Maíz, jefe de Servicios Públicos. Y completó: "El consorcio sería ideal ya que nos permitiría erradicar nuestro basural". El proyecto prevé que cada departamento aporte al consorcio un monto que estará determinado por las toneladas de residuos que genera. Así, por sus 30 toneladas de desechos diarios, Rivadavia deberá aportar una suma mayor que la de Santa Rosa, cuyo volumen no llega a las 5 toneladas. "Todavía quedan detalles por resolver, pero lo más importante es que las cinco comunas queremos solucionar el problema de la basura", concluyó Del Río. Detalles Problema: a diario, San Martín genera 102 toneladas de basura, Rivadavia unas 30, Junín cerca de 20, Santa Rosa poco menos de cinco y La Paz seis. Consorcio: ayer se sumó San Martín y ahora los cinco departamentos están de acuerdo en administrar la basura en conjunto. El próximo paso es tramitar la personería jurídica. Planta: el tratamiento de los residuos de la zona Este estará en Rivadavia. Allí se construirá una planta cuyo costo ronda los 6 millones de pesos. Ya hay 1,5 millones en el presupuesto de la provincia. ------------------Entre Ríos: Respaldo provincial al plan de tratamiento regional de la basura || Fuente: 08 de febrero de 2008 (Uno-ei) [08/02/2008 | 06:27 ] La iniciativa involucra al departamento Uruguay y a ciudades vecinas en un proyecto común. En oportunidad de la visita de la presidenta Cristina Fernández a Concepción del Uruguay, el director de Medio Ambiente de esa ciudad, Sergio Bravo, se reunió con el secretario provincial del área, Fernando Raffo, luego del primer encuentro mantenido al comenzar el actual gobierno provincial. Raffo destacó que en los próximos días se reunirá con la Secretaria de Medio Ambiente de la Nación para interiorizarse sobre el avance del Proyecto de Tratamiento Regional de Residuos Sólidos Urbanos, encabezado por La Histórica y con adhesión de las localidades de la Microregión. Una vez que se cuente con definiciones y las necesidades que plantee la Nación, el funcionario provincial convocaría a los intendentes de estas ciudades para ponerlos al tanto y definir pasos a seguir. Esta propuesta regional es una de las más avanzadas en la provincia a través de un proyecto que tuvo su origen en Concepción del Uruguay y generó réplicas en otras microregiones entrerrianas. La iniciativa ya cuenta con el aval de los demás municipios involucrados y que padecen los mismos problemas debido a que el acopio actual se hace a cielo abierto y en la periferia de cada planta urbana. El plan regional permitirá un acopio común de los residuos sólidos en un espacio equidistante a todos y con un sistema de depósitos que permitirán resguardar el medio ambiente a través de un tratamiento especial. Previo al almacenamiento final, se ha dispuesto un sistema de selección y reciclado a través de una planta dispuesta en el mismo lugar. Cabe recordar que la gran mayoría de las grandes ciudades entrerrianas utilizan hoy los volcaderos a cielo abierto como metodología de acopio de los residuos sólidos urbanos, sistema que genera cada vez mayores inconvenientes para su ordenamiento y mantenimiento. A esto se suma que en épocas estivales los continuos incendios provocan humos que se propagan hacia las plantas urbanas con el consiguiente mal olor que muchas veces envuelve a gran parte de las ciudades. ------------------Trenque Lauquen, sin basurales a cielo abierto Trenque Lauquen (Télam). La inauguración en 1994 de una Planta de Procesamiento y Recuperación de Residuos en la ciudad de Tranque Lauquen fue el certificado de defunción de los basurales a cielo abierto en esa comunidad donde el 90 por ciento de la población, adhirió a la consigna de separar en origen los residuos orgánicos de los inorgánicos. Según el director de la planta de procesamiento de residuos (PROLIM), Fabio Oliverio, cada día ingresan treinta toneladas de basura que los operarios reciben para una nueva clasificación. El 67 por ciento de esos residuos, que corresponden a los biodegradables, se transforman en “compost” o lombricompuesto, y los inorgánicos, que conforman el 33 por ciento restante, se dividen en vidrios, cartón, plásticos, papel, y metales, que luego se prensan en fardos y se dividen en bolsones para su comercialización. “El sistema de recolección diferenciada está organizada por días y sectores. En las zonas urbanas, entre lunes y sábado se recogen los residuos orgánicos, el miércoles y el domingo los inorgánicos. Para zonas residenciales o quintas de veraneo hay una recolección alternada los lunes, miércoles y viernes. En cambio, para hospitales, consultorios y demás centros generadores de residuos patológicos se recolectan dos veces al día” explicó Oliverio. Las pilas, uno de los residuos considerados más peligrosos por el mercurio y el cadmio que liberan al ambiente, también reciben un tratamiento diferenciado. En los centros comerciales de la ciudad hay dispuestos expendedores de pilas botón (relojes, control remoto, juguetes), y baterías varias para facilitar la tarea de los recolectores del PROLIM. Los denominados “residuos peligrosos”, como por ejemplo pañales descartables, medicamentos y jeringas, son separados e incinerados en hornos pirolíticos que tienen la capacidad de albergar hasta 3 toneladas por quema. El director del PROLIM aseguró que “a estos hornos se los usa dos veces al día y trabajan con diferentes grados de temperatura hasta llegar a alcanzar los 1200 grados”. Esta tecnología tiene dos cámaras de combustión y recuperación de gases que evita la contaminación de la atmósfera y que se adecua a la reglamentación vigente en la ley provincial 11.347 sobre Residuos patogénicos, tratamiento, manipuleo, transporte y disposición final). El efecto NIMBY, por sus siglas en inglés “Not in mi back yard”, que se puede traducir como: “No en mi patio trasero”, se convirtió en la denominación de un síndrome de rechazo de las poblaciones locales a la ubicación en su zona de actividades nocivas para su salud y ambiente. El PROLIM evitó esta disconformidad y evaluó distintas alternativas para su localización, ubicando sus instalaciones en la misma región de la planta depuradora de líquidos cloacales y centralizando un mismo predio de tratamiento integral de residuos urbanos. De esta forma, a 2 kilómetros de la ciudad se depositan por día todos los desechos que generan los 40.181 habitantes de la ciudad (INDEC, 2001), en una planta que está equipada con una prensa hidráulica, una trituradora de vidrio, una picadora de plástico y otra de escombros, una moledora de orgánicos, carros especiales y demás herramientas de uso aleatorio. Un plantel de 54 empleados se hace responsable de llevar adelante un sistema integral de residuos que también cuenta con un área destinada al vuelco de camiones atmosféricos que colectan los líquidos cloacales de algunos pozos negros de la ciudad. Este sector se conecta a la planta depuradora a través de un sistema de cañerías para finalmente recibir un tratamiento adecuado. ------------------Tecnología renovable y limpia BIODIGESTORES, LA OTRA SOLUCION A LA BASURA Fuente: Diario El Litoral, Santa Fe 2 marzo 2007 La conocida experiencia de Emilia, una localidad ubicada 75 kilómetros al norte de esta capital, es un ejemplo en la producción de combustibles renovables y limpios. Desde hace cuatro años, funciona allí un biodigestor capaz de reciclar 250 kilos de basura orgánica (toda aquella que puede descomponerse: restos de comida, cáscaras de verduras) por día y transformarla en unos 25 metros cúbicos de biogás, equivalentes a 12 kilos de gas envasado. Exactamente la cantidad que usa la escuela agrotécnica Monseñor Zazpe de esa localidad cada jornada. Si los números se multiplican según la cantidad de habitantes de nuestra ciudad, la cifra resulta elocuente: con 500.000 habitantes, Santa Fe podría producir 12.500 metros cúbicos de biogás todos los días y, a la vez, tratar los residuos orgánicos que genera la población. Todo, sin gastar otra energía que la que produciría la propia planta en base a la biodigestión. El Grupo de Energías No Convencionales que funciona en la Facultad de Ingeniería Química (FIQ) de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) se encargó de asesorar en la construcción del biodigestor de Emilia y de muchos otros similares en el país. “Nosotros hacemos el aporte tecnológico: los proyectos y la asistencia para la puesta en marcha”, dijo el Ing. Eduardo Groppelli, responsable del área de Biogás en ese grupo. En Humberto Primo y La Criolla -también en esta provincia- se llevan a cabo experiencias similares a las de Emilia, con singular éxito; y este año volverá a funcionar un biodigestor en Gobernador Crespo. Un centro de capacitación A fines de 2004, se puso en marcha en la Fundación PROTEGER un biodigestor que abastece las necesidades de su sede, así como un Centro de Capacitación en Tecnologías Socialmente Apropiadas, donde periódicamente se realizan cursos sobre esta temática, también con el asesoramiento técnico de los especialistas de la FIQ. “Los desarrollos crecerán en magnitud en la medida en que se logre financiamiento para mayores emprendimientos”, indicó Groppelli. Y aprovechó para subrayar que la alternativa de la biodigestión puede ser llevada a grandes conglomerados, como ya ha ocurrido en grandes centros urbanos del mundo. “En Barcelona -contó Groppelli-, funcionan los llamados Ecoparques, donde están instalados biodigestores que reciclan la basura de toda el área metropolitana”. Si bien en la ciudad de Santa Fe sólo funcionan hasta ahora “tres o cuatro experiencias demostrativas, el sistema puede funcionar a gran escala. Muchos creen que sólo puede emplearse en comunidades chicas, pero no es así: cuanto más grande es la escala de aplicación, más se mecaniza, más se automatiza y más conviene”, agregó el especialista. Gestión Integral de Residuos Además de resolver el problema de los residuos, el equipo que funciona en Emilia abastece de biogás a la escuela agrotécnica (produce 12 metros cúbicos por día) y genera abono que se utiliza en una plantación de frutales, ubicada al lado de estas instalaciones. “Si uno lo analiza, el círculo cierra perfectamente: se recicla la basura, el biogás es utilizado por la escuela y el abono va a los árboles”, contó Groppelli. Los gastos de instalación (unos 45 pesos por habitante) se amortizan después de 6 años de la instalación del equipo, que casi no tiene mantenimiento. Lo que sí se requiere es que la población separe los residuos según sean orgánicos e inorgánicos. “Eso es parte de una buena gestión de residuos y no es nada complicado -dijo Groppelli. Así como la gente se acostumbró a parar en el semáforo rojo, se puede acostumbrar a separar los residuos”. Cómo se hace Los biodigestores son grandes tanques cerrados (su tamaño depende de la cantidad de basura a tratar) que trabajan con una tecnología sencilla. Por una boca de entrada se introduce la basura (sólo orgánica) y las salidas son dos, una para el abono y otra para el biogás. En el interior del biodigestor hay algo más que basura: también existen millones de bacterias, que son las que “trabajan” para la descomposición de los residuos. Estas bacterias son anaerobias porque “funcionan” sin oxígeno; su mecanismo de respiración genera una mezcla de gases conocida como biogás (compuesto p etano, combustible, y dióxido de carbono) y, además, un efluente líquido rico en nutrientes y materia orgánica estabilizada, que se utiliza como abono de plantas. “Estas bacterias están en la naturaleza, en el fondo de los pantanos, en los intestinos de los mamíferos... Y pueden utilizarse para el tratamiento de nuestros residuos, contribuyendo al saneamiento del ambiente y a la producción de energía limpia y renovable”, concluyó Groppelli. ------------------Vos sos tu basura / Clarín.com ¿Tenés idea de cuánta basura generás por día? Cerca de 2 kilos, que multiplicado por casi 3 millones de porteños superan las 5 mil toneladas de residuos en la Ciudad. Esto sin contar los 9 millones que diariamente se desplazan por Buenos Aires y generan su propia basura itinerante. Esta cifra viene creciendo en forma constante y sin embargo todos parecemos desentendernos de lo que consumimos o producimos. Roberto Maldonado es delegado del Tren Blanco, que diariamente transporta a los cartoneros y sus carros desde José León Suárez hacia la Ciudad, donde recogen materiales que pueden ser recuperados. Con su venta, garantizan un ingreso para sus casas y contribuyen a un aprovechamiento productivo de lo que otros desechan. Al menos un 30% de la basura diaria podría reciclarse, aunque sólo un 11% –alrededor de 600 toneladas- tendrá algún otro destino que no sea el basural o el relleno sanitario. Y esto se debe fundamentalmente a la tarea de los 12.000 cartoneros que recorren cada noche la Ciudad y parecerían ser los principales impulsores del reciclado. El costo para la Ciudad de enterrar una tonelada de basura en el CEAMSE es de 55 pesos. Esto significa que a partir del trabajo realizado por los recuperadores, Buenos Aires se ahorra 32.863 pesos por día. “Una cosa es juntar basura y otra es reciclar”, afirma Jorge Olmedo tras quedarse desocupado en 2001 y formar, junto a un grupo de vecinos de Liniers, la Cooperativa del Oeste. “Todavía no hay conciencia sobre la importancia de reciclar”, reflexiona. La experiencia de la Cooperativa del Oeste demuestra, en pequeña escala, que si a los vecinos y comerciantes se les explica cómo separar los residuos para reincorporarlos al circuito productivo y contribuir a un medio ambiente más sano, responden y se comprometen con el reciclado. “Fuimos casa por casa a los vecinos que nos conocen de toda la vida y combinamos con ellos y los comercios de la zona pasar un determinado día y hora. Recogemos vidrio, trapo, goma espuma, telgopor, todo lo que sea papel y plástico. Los vecinos tiran la basura orgánica y todo lo demás lo juntan para nosotros ya que el 90 % es reciclable”, cuenta Olmedo. Y el sistema funciona. Olmedo explica orgulloso que el éxito se debe a la calidad del servicio que prestan: “No fallamos nunca y pasamos el día y la hora acordados. Algunos además entienden que no sólo están colaborando con nosotros sino ayudando a la protección del medio ambiente, por ejemplo, al evitar que el plástico tape las alcantarillas”. Los recuperadores recorren las calles y son el primer eslabón de la cadena de reciclado. Otra experiencia exitosa es la de la Cooperativa Ecológica Reciclando Sueños , que agrupa a 70 familias de Villa Soldati, en la zona sur de la Ciudad. También se formó a partir de la crisis del 2001 cuando el desempleo hizo estragos en una de las zonas más carenciadas de Buenos Aires. “Desde hace un año y medio se nos ocurrió hacer una campaña y empezamos a recorrer el barrio Samoré, en Villa Lugano, para pedirles a los vecinos que separen la basura en sus casas. Nadie tenía una cultura del reciclado ni éramos cartoneros antes de la crisis”, relata Valentín Herrera, presidente de la Cooperativa. “Les entregamos un folleto que dice qué juntamos y qué hacemos con lo que ellos separan, les dejamos un teléfono y los invitamos a visitar el galpón donde hacemos la separación de materiales, los acondicionamos y después los vendemos. El galpón es de un compañero que lo cede a la Cooperativa”, explica. El folleto fue impreso por el Gobierno de la Ciudad, pero el texto fue escrito por ellos mismos. Como la respuesta de los vecinos fue positiva, decidieron llevar esta campaña a la escuela del barrio, con el apoyo de las autoridades porteñas. “Participamos de charlas en la escuela donde se les explica a los chicos y docentes cómo cuidar el medioambiente y lo que hacemos con los desechos que juntamos. Por ejemplo, les decimos cuánto tarda en degradarse una botella enterrada”, agrega Herrera.