La menstruación es parte del ciclo ovárico normal en una mujer

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CICLO MENSTRUAL
La menstruación es parte del ciclo ovárico normal en una mujer sana en edad
fértil. Como la manifestación más clara del ciclo ovárico es la menstruación,
fácilmente podemos hablar de ciclo menstrual como sinónimo.
El ciclo menstrual dura unos 28 días, aunque se considera normal también
entre los 21 y los 35.
El ciclo empieza el primer día del sangrado (de lo que entendemos por la regla)
y finaliza el día anterior a la siguiente regla. Para determinar cuántos días dura
tu ciclo menstrual tienes que contar desde el primer día de regla hasta el día
anterior al siguiente periodo.
¿Por qué se produce?
Los ovarios son las glándulas que producen los óvulos o células con capacidad
para la reproducción. En cada ciclo menstrual, uno de los ovarios libera un
óvulo (esto es lo que se conoce como ovulación).
La ovulación ocurre por lo general 14 días antes del periodo menstrual o regla.
En mujeres con un ciclo regular de 28 días, la ovulación ocurre el día 14. Sin
embargo, estos cálculos son difíciles de aplicar en mujeres con un ciclo
menstrual irregular, es decir, el intervalo promedio entre periodos no es
constante sino variable.
Cabe mencionar que en casos muy raros, algunas mujeres pueden ovular
durante cualquier día del ciclo, aun durante la menstruación.
El óvulo desciende por las trompas de Falopio hasta llegar al útero. Durante
este trayecto, el óvulo puede ser fertilizado si se encuentra con un
espermatozoide (célula reproductora masculina hallada en el esperma o semen)
dando origen a un huevo o cigoto que se queda alojado en el revestimiento del
Espermatozoide perfora la "corona radiata"
útero (endometrio).
Fecundación del óvulo
Para que se produzca la fecundación humana es necesario perforar la “corona
radiata” que envuelve al ovocito secundario (óvulo que se desplaza a las
trompas de Falopio).
Par cumplir esta finalidad, numerosos espermatozoides liberan pequeñas
cantidades de enzimas que ayudan a dispersar esas células foliculares (las que
forman la corona radiata).
Después, un espermatozoide se adhiere al gameto femenino y lo penetra,
determinando en la membrana celular de éste un rápido cambio eléctrico,
seguido de un cambio químico más lento, lo que impide la entrada de otros
espermatozoides. Por lo tanto, la fecundación se produce con un solo espermio.
(Ver: Reproducción sexuada en mamíferos).
Menstruación
Si el óvulo no es fertilizado saldrá despedido, junto con el endometrio, fuera del
cuerpo a través de la vagina. Esto es lo que se conoce como menstruación o
regla.
Una mujer puede quedar embarazada si tiene relaciones hasta 5 días
antes de la ovulación. Esto se debe a que los espermatozoides pueden
vivir en el cuerpo de la mujer por 3 a 5 días y esperar hasta el día de la
ovulación para fertilizar el óvulo.
Entonces, el periodo fértil de la mujer comprende el día de la ovulación,
y entre 3-5 días antes y 1-2 después de la ovulación (el óvulo tiene un
tiempo de vida de aproximadamente 24 a 48 horas).
Ciclo ovárico o ciclo menstrual
del periodo fértil o periodo de ovulación.
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Hormonas
La regulación del ciclo menstrual depende principalmente del hipotálamo, la
hipófisis y los ovarios.
En todo este ciclo (ovulación, pre y postovulación, regla) están implicadas una
serie de hormonas. (Ver: Hormonas sexuales)
El Hipotálamo: es parte del Sistema Nervioso Central. Produce una hormona
(GnRH) que es capaz de estimular la liberación de las hormonas hipofisiarias
para que secreten las hormonas gonadotrofinas FSH y LH.
La Hipófisis: es una glándula ubicada en la base del cerebro que libera las
hormonas hipofisiarias gonadotróficas. Estas son la hormona foliculoestimulante
(FSH) y la hormona luteinizante (LH). Ambas ejercen su acción en los ovarios.
- Hormona foliculoestimulante (FSH): segregada por la hipófisis. La FSH
estimula la maduración del óvulo en el ovario (que a su vez se encuentra
envuelto en una capa de tejido llamada folículo) y en el hombre regula la
maduración de los espermatozoides.
Hormona luteinizante (LH): producida en la hipófisis, regula la ovulación e
induce el desarrollo del cuerpo lúteo en la mujer y la maduración del folículo
(capa que envuelve al óvulo). Con esta hormona, el óvulo se libera del ovario e
inicia su descenso por las trompas de Falopio hasta el útero. En el hombre
estimula la producción de testosterona.
Los Ovarios: son los encargados de producir el gameto femenino y de secretar
las hormonas sexuales femeninas estrógeno y progesterona.
- Estrógenos: hormonas producidas por los ovarios, que estimulan al útero
para que construya un fino revestimiento o forro (endometrio) para poder
alojar al óvulo fecundado e iniciar así el embarazo. Sin el endometrio, el óvulo
fecundado no quedaría alojado en el útero y no podría crecer. Los estrógenos
se producen durante la fase de maduración del óvulo (cuando aún está dentro
del ovario).
- Progesteronas: tras la ovulación estas hormonas hacen que el revestimiento
del útero crezca más (con el objeto de alojar al óvulo fecundado). Si el óvulo no
es fertilizado, descienden los niveles de progesterona, lo que provoca la
descamación o desprendimiento del endometrio (menstruación).
- Prostaglandinas: estas hormonas incrementan las contracciones del útero
para ayudarle a expulsar el óvulo no fecundado y el endometrio con la
menstruación.
Síntomas en cada fase
Cuando las mujeres empiezan a familiarizarse con la regla aprenden a
distinguir, aunque sea vagamente, los signos de cada fase del ciclo menstrual.
Estos son algunos de los síntomas más frecuentes atendiendo a la fase en la
que se encuentre el ciclo menstrual:
- Fase de preovulación (días posteriores a la regla)
• Sensación de plenitud, de energías& renovadas y fuerza
• Te sientes capaz de hacer cualquier cosa
- Fase de ovulación (unas dos semanas después de la regla)
• Dolor punzante en un lado de la parte baja del vientre
• Aumento de la secreción vaginal (flujo)
- Fase de postovulación (unos días antes de la regla) Es la fase más prolija en
cambios físicos y también psíquicos, hasta el punto que algunas mujeres
pueden sufrir el Síndrome Premenstrual. Los síntomas más comunes en la
postovulación son un sentimiento de tristeza y melancolía, falta de
concentración, hinchazón en el bajo vientre y aumento de la grasa en piel y
cabellos.
- Menstruación o sangrado
La hemorragia es la característica principal de esta fase, que puede durar entre
3 y 7 días. La cantidad de flujo perdido varía dependiendo de cada mujer (de 9
a 350 g), aunque la media de sangrado perdido es de unos 70-80 g, lo que
equivale al volumen de una taza de té. El 90 por ciento se expulsa durante los
primeros 3 días de regla. Otros síntomas propios de la menstruación son:
• Dolores en el bajo vientre (parecidos a los retortijones)
• Dolor de espalda y piernas
• Mareos
• Náuseas y vómitos
• Diarrea
Síndrome premenstrual
No todas las mujeres sufren el síndrome premenstrual, aunque tengan
molestias los días previos a la regla. Para que se considere un síndrome, tienen
que ser molestias concretas además de la sensación de tristeza y de tensión
propias de este periodo premenstrual. Síntomas físicos:
• Tensión mamaria
• Hinchazón (cara, abdomen, dedos)
• Dolor de cabeza (migrañas)
• Cambio de apetito (antojo de dulces)
• Acné o urticaria
• Estreñimiento o diarrea
• Palpitaciones
• Cambios en el interés sexual
• Cambios en el sueño
• Rigidez muscular
• Dolor de espalda
• Asma
• Rinitis
Cambios psicológicos:
• Depresión
• Sentimiento de tristeza, melancolía
• Cansancio y fatiga
• Tensión o intranquilidad
• Ansiedad
• Irritabilidad y agresividad
• Dificultad de concentración
Si sufres alguno de estos síntomas durante los días previos a la menstruación
(unas dos semanas antes) y desaparecen con la hemorragia o poco después,
entonces sufres el síndrome premenstrual.
Es más frecuente entre las mujeres treintañeras y las que ya tienen hijos,
aunque no se sabe bien por qué aparece.
En los casos más acusados del síndrome, puede ser necesario recibir un
tratamiento médico. Para otras mujeres pueden ser útiles los siguientes
remedios. Ante cualquier duda, consulta con tu médico.
- Alimentación: procura hacer una dieta sana, rica en verduras y frutas.
Reduce el consumo de sal para evitar el hinchazón y come un poco más de
azúcar de lo habitual, pues puede ayudarte a regular tu nivel de glucosa si te
sientes falta de energía. No favorecen las altas dosis de cafeína o el alcohol, al
afectar ambos a la circulación sanguínea.
- Ejercicio: practica de forma regular ejercicio, además de servir para mejorar
tu condición física general, puede ayudar a suavizar los síntomas.
- Relajación: evita en lo que puedas situaciones estresantes. Aprende
métodos de relajación, como el yoga, la meditación, ejercicios de respiración y
practícalos si los necesitas. También ayuda leer un buen libro o dar un paseo.
Menstruaciones dolorosas
Un tercio de las mujeres sufre dismenorrea o reglas muy dolorosas. El dolor es
parecido al de un retortijón, pero más intenso y puede llegar a acompañarse de
náuseas, vómitos o mareos. Consulta con tu médico si sufres este tipo de
reglas dolorosas, para que determine qué tratamiento es el más adecuado en
tu caso.
Algunos estudios indican que la dismenorrea puede estar relacionada con un
exceso de producción de prostaglandinas. Estas hormonas que acentúan las
contracciones de los músculos uterinos podrían explicar el dolor intenso.
¿Tiene tratamiento?
En los casos de dolor muy fuerte, es preciso que consultes con tu médico,
porque puedes requerir algún tipo de tratamiento hormonal. Esto es
especialmente importante si no acostumbras a tener reglas dolorosas y de
repente aparecen. En estos casos, la causa puede ser alguna alteración en el
endometrio, fibromas o por una enfermedad inflamatoria pélvica.
Algunas mujeres encuentran cierto alivio dándose un baño caliente y relajante
o con un masaje relajante en el abdomen, en cuanto aparecen las primeras
señales de dolor.
Menstruaciones irregulares
No son muchas las mujeres que tienen un periodo “de libro”, es decir, de 28
días. De hecho, muchas tienen ciclos menstruales de más o menos días, por lo
que se considera normal la oscilación entre los 21 y los 35.
Cuando el ciclo supera las seis semanas de duración ya se considera irregular,
aunque no es preocupante en los primeros años de la menstruación, porque
pasa algún tiempo hasta que los ciclos se regulan.
Estos ciclos inusualmente largos pueden ser oligomenorreas (un número
excesivamente bajo de reglas al año) o bien amenorreas (ausencia de regla).
Las oligomenorreas pueden deberse a algún trastorno de tipo hormonal o
simplemente obedecer al propio ciclo natural. Para descartar posibles
enfermedades que lo causen es necesario acudir al ginecólogo, que realizará los
análisis y exámenes pertinentes.
La razón más habitual de amenorrea, si siempre has tenido un periodo regular,
es el embarazo. Pero también se relaciona con los cambios en la dieta, un
exceso de actividad física o estrés muy acusado. Por eso debes acudir al
ginecólogo para que estudie cuál es la causa en tu caso.
Reglas muy abundantes
Algunas mujeres sufren periodos o reglas muy abundantes. Un sangrado
excesivo no tiene que significar que algo vaya mal, a veces se produce cuando
se ha dejado de tomar la píldora anticonceptiva o tras un parto o en mujeres
próximas a la menopausia.
Si la regla abundante aparece de forma repentina y sin razones obvias, es
motivo de consulta al médico. Además, si junto con la menstruación excesiva te
sientes especialmente cansada, puede que estés sufriendo anemia. En estos
casos, acude al ginecólogo.
Mitos y verdades
No debes bañarte, ducharte y lavarte el pelo durante la regla
Falso. Cuando estás menstruando es más importante que nunca mantener la
higiene y sentirte limpia y fresca.
Si te quedas muy delgada, dejas de menstruar
Verdadero. Una fuerte pérdida de peso puede paralizar tus periodos. Si esto
ocurriera consulta a tu médico.
Si tengo la regla, no puedo regar las plantas ni hacer mayonesa
Falso. La menstruación no tiene por qué afectar a las actividades cotidianas, a
menos que tus síntomas te impidan llevar una vida normal durante esos días.
No puedes usar tampón con la primera regla
Falso. El támpax puede emplearse como protector higiénico desde la primera
regla hasta la última.
Los tampones no afectan la virginidad
Verdadero. Si se entiende por virginidad la existencia de un himen intacto, los
estudios realizados confirman que el tampón no afecta al diámetro del himen.
En los últimos días de la menstruación no tienes que cambiarte de tampón con
la misma frecuencia que al principio de la regla
Falso. Existen distintos tampones dependiendo de su capacidad de absorción.
Para seleccionar el adecuado según el día de regla en que te encuentres, tienes
que tener en cuenta que hay que cambiar el tampón más o menos cada 5
horas. Si lo cambias antes de 4 horas es que precisas otro de mayor absorción.
Nunca pases más de 8 horas con el mismo támpax
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