2014/2015 ¿IGUALES, PERO DIFERENTES? ANÁLISIS DE LA BRECHA SALARIAL DE GÉNERO EN ESPAÑA 1995-2013 Gabriela Alexandra Monge Sarango Grado de Sociología Profesora: Olga Salido Cortés 2014/2015 [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] 2014/2015 Contenido 1. Introducción ............................................................................................................... 3 2. Objetivos ................................................................................................................... 4 2.1 Objetivo general ................................................................................................. 4 2.2 Objetivos específicos ......................................................................................... 4 3. Metodología............................................................................................................... 4 4. Delimitación del concepto de brecha salarial de género ........................................... 6 5. Factores explicativos de la desigualdad salarial ........................................................ 7 5.1 Características personales .................................................................................. 7 5.2 Segregación en el mercado laboral .................................................................... 9 5.3 Infravaloración social, económica y profesional del trabajo de las mujeres ... 10 5.4 Otros factores que influyen en la brecha salarial entre hombres y mujeres..... 11 6. Referencias normativas ........................................................................................... 13 7. La brecha salarial en España ................................................................................... 16 7.1 Evolución de la Brecha salarial de género en España 1995-2013 ................... 16 7.2 Características que influyen en la brecha salarial de género en España .......... 16 7.2.1 Brecha salarial de género y características personales ............................. 17 7.2.2 Características laborales ........................................................................... 19 7.2.3 Brecha salarial de género y características de la empresa ........................ 22 8. La brecha salarial de España en comparación con la UE ........................................ 24 9. Conclusiones ........................................................................................................... 24 10. Bibliografía .............................................................................................................. 28 UCM | Introducción 2 2014/2015 [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] 1. Introducción La igualdad entre hombres y mujeres es un principio fundamental de la Unión Europea de la que participa la sociedad española. A lo largo de los años, se han puesto en marcha numerosos mecanismos para avanzar hacia una sociedad y un mercado de trabajo caracterizado por la igualdad entre hombres y mujeres. Sin embargo, a día de hoy, todavía se perciben desigualdades entre sexos, generalmente en detrimento de la mujer. Dentro de este contexto nos centraremos en la brecha salarial de género. Este trabajo tiene como objetivo principal analizar la brecha salarial de género en España y conocer los factores que influyen en la misma; además, también se pretende conocer dónde nos situamos en comparación con la Unión Europea. Todo esto nos ayudará a ofrecer una evidencia empírica, que nos puede arrojar algo más de luz sobre el tema en cuestión. En este estudio, se pretende abordar el tema de la brecha salarial de género en España desde 1995 al 2013 desde un punto de vista teórico y desde un punto de vista empírico. El primero, nos ayudará a explicar el concepto de brecha salarial de género y delimitarlo de forma correcta; además, nos permitirá conocer desde la óptica teórica los factores que influyen en ella. Por otro lado, también se ha considerado importante conocer las diferentes medidas que se han puesto en marcha para hacer frente a este problema tanto en la Unión Europea como en España. Desde el punto de vista empírico, se pretende explorar cuantitativamente el fenómeno, tomando en cuenta las diversas características que la literatura considera relevantes (características personales, laborales y de las empresas) para el estudio de este problema. También, se considera interesante comparar la brecha salarial en España con la de la Unión Europea, para conocer dónde se sitúa España y cuál ha sido la tendencia que ha seguido. Todo esto a grosso modo nos permitirá realizar un diagnóstico de la situación de la brecha salarial de género en España y nos dará pistas de cómo abordar este tema en el futuro y saber si las medidas adoptadas por parte de los organismos tanto nacionales como internacionales, han cumplido o están cumpliendo con el objetivo principal: reducir la brecha salarial entre hombres y mujeres y caminar hacia una igualdad salarial. 3 Introducción | UCM [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] 2014/2015 2. Objetivos 2.1 Objetivo general Analizar la brecha salarial entre hombres y mujeres en España y conocer cuáles son y cómo los factores que influyen en ella, además de comparar su situación en relación con la de la Unión Europea en el periodo de 1995-2013. 2.2 Objetivos específicos Profundizar en el concepto de brecha salarial. Conocer los diversos factores que influyen en ella. Conocer las iniciativas políticas llevadas a cabo en la Unión Europea y en España para reducir la brecha salarial entre hombres y mujeres Cuantificar la brecha salarial de género en España: cuál es su magnitud, cómo influyen las características personales, laborales, de las empresas en la brecha salarial, y cómo ha evolucionado ésta desde 1995-2013. Comparar la brecha salarial en España con la Unión Europea entre 1995-2013 3. Metodología La metodología llevada a cabo en este estudio se divide en dos fases: fase documental y fase cuantitativa. La fase documental orientada a delimitar el concepto de brecha salarial y determinar los factores que influyen en la misma, así como las teorías que intentan explicar dicho fenómeno. Para recopilar esta información se usaron fuentes secundarias como: diversos estudios llevados a cabo sobre el tema, informes de varias instituciones, periódicos, revistas y artículos académicos entre otros. En lo que se refiere a la fase cuantitativa también se usaron fuentes secundarias. Por un lado se tomó en cuenta la Encuesta de Estructura Salarial cuatrienal (EES) y la Encuesta Anual de Estructura Salarial (EAES) llevada a cabo por el INE. Y por otro lado, los datos ofrecidos por Eurostat. Para el estudio de la brecha salarial de género se tomó como variable dependiente la ‘ganancia por hora normal de trabajo’, se utilizó esta variable porque ésta toma en cuenta las horas trabajadas, esto es relevante porque, generalmente las UCM | Objetivos 4 2014/2015 [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] mujeres trabajan menos horas y esto se refleja en el tipo de contrato y jornada; de manera que, ésta variable se acera más a la realidad. La ‘ganancia por hora normal de trabajo’ se construye a partir de la información facilitada por la EES con la fórmula usada por el INE. El cálculo de la ganancia salarial en 1995 y 2002 tuvo cambios, porque tras la publicación de la EES de 1995 se inició el estudio y discusión por parte de Eurostat y países miembros de la UE, y por eso se introdujeron cambios en el tratamiento de las variables, entre ellas la ganancia por hora1. Para el cálculo de la brecha salarial, se ha usado la fórmula usada por el INE: Por otro lado, para el estudio de la brecha salarial de género en España se ha tomado en cuenta variables independientes que hacen referencia a las características personales, laborales y de empresa de los/as trabajadores/as. Finalmente, también se usaron los datos ofrecidos por Eurostat, que hace un seguimiento periódico de uno de sus índices estructurales, la brecha salarial de género (Gender Pay Gap), que expresa la diferencia entre los ingresos brutos medios por hora de hombres y mujeres. 1 Se toma en cuenta el mes de Octubre porque es el mes que no tiene pagos extraordinarios 5 Metodología | UCM [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] 2014/2015 4. Delimitación del concepto de brecha salarial de género Para empezar a abordar el tema de la brecha salarial, es necesario definir qué se entiende por brecha salarial y a qué hace referencia. Según la Comisión Europea, la brecha salarial es: “La diferencia existente entre los salarios percibidos por los trabajadores de ambos sexos, calculada sobre la base de la diferencia media entre los ingresos brutos por hora de todos los trabajadores” (Comisión Europea, 2014, p. 2). Esta diferencia, se ha mantenido a lo largo del tiempo, a pesar de los esfuerzos por parte de las autoridades para corregirla, por tanto, se considera un fenómeno aún por resolver. La continua incorporación de la mujer al mercado laboral, ha dejado de ser un hecho aislado y ha puesto de manifiesto ciertos fenómenos que se dan como consecuencia de esta incorporación, entre ellos la brecha salarial (De Lucio, et al., 2012, p. 12). El aspecto relevante de este fenómeno, es que, en su cuantificación muestra una distancia negativa para las mujeres y positiva para los hombres. De forma universal, los hombres perciben de media más salario (Anker 1997 en Sallé, et al., 2010, p. 17). Para llevar a cabo un análisis de la brecha salarial entre hombres y mujeres, es necesario distinguir entre ‘brecha salarial de género explicada’ y ‘brecha salarial de género inexplicada’ (Organización Internacional del Trabajo, 2015). Para hablar de la parte de la brecha salarial explicada, se toma en cuenta el punto de vista económico, se piensa que dos personas realizan el mismo trabajo si aportan, por unidad de tiempo el mismo valor añadido a la empresa, es decir, si su productividad laboral es la misma o parecida (De la Rica, 2012). Para definir la productividad laboral es necesario tomar en cuenta tanto las condiciones por parte de la oferta, el trabajador, en donde se habla del capital humano; como por parte de la demanda, la empresa, en donde se habla de su condición tecnológica. Por parte de la oferta, es decir, del trabajador existen algunas variables observables como la experiencia, la educación, la categoría profesional, que ayudan a aproximarse a la productividad laboral (De la Rica, 2012). Cuando se habla de brecha salarial de género inexplicada, se toman en cuenta las características restantes después del ajuste de las características observables en relación con el mercado laboral (Organización Internacional del Trabajo, 2015). Otro aspecto a tomar en consideración al hablar de la brecha salarial, es la distinción entre desigualdad salarial (brecha salarial) y discriminación salarial (Sallé & De Cabo, 2010, p. 18). Cuando se habla de la primera, ésta puede estar causada por las diferentes características y cualificaciones entre un trabajador y una trabajadora, los puestos de UCM | Delimitación del concepto de brecha salarial de género 6 2014/2015 [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] trabajo que ocupan o las empresas en las que trabajan, lo que constituye una diferencia salarial fundamentada. En el segundo caso, cuando se habla de discriminación salarial, se habla de que la diferencia salarial puede estar fundamentada en la razón género (De Lucio, et al., 2012, p. 14). 5. Factores explicativos de la desigualdad salarial En la actualidad para el estudio de la brecha salarial de género es necesario identificar y medir las dimensiones y los factores que la determinan. Las relaciones entre los factores son diversas y clasifican en cuatro grandes grupos (De Cabo, et al., 2010): 1. Características personales 2. Segregación en el mercado laboral 3. Infravaloración social, profesional y económica del trabajo de las mujeres 4. Otros factores explicativos. 5.1 Características personales Entre las teorías que han intentado explicar el fenómeno de la brecha salarial de género destacan las teorías económicas y del capital humano. Estas teorías plantean que los trabajadores y los empleadores son racionales y que los mercados laborales funcionan con eficiencia. Según esta teoría, los trabajadores luchan por conseguir los empleos más rentables tras evaluar tanto sus propias características personales como sus limitaciones que los condicionan y sus preferencias (Anker, 1997). Los empleadores tratan de maximizar sus beneficios incrementando la productividad y reduciendo los costos. Al hablar de la oferta de la mano de obra, esta teoría resalta que el capital humano femenino es inferior, por tanto, las mujeres aportan menos instrucción y cualificaciones menos aprovechables; además, cuando se incorporan al mercado laboral tienen menos experiencia que los hombres debido al matrimonio y las responsabilidades domésticas o la crianza de los niños interrumpen su vida laboral (Anker, 1997). En definitiva, es teoría justifica el salario inferior de las mujeres en relación con el de los hombres, porque su productividad es inferior a la de ellos (Anker, 1997). Tomando en cuenta el planteamiento de esta teoría, se han llevado a cabo numerosas investigaciones, entre ellas la de la Comisión Europea, enfocadas a conocer hasta qué punto el capital humano o las características personales influyen en las diferencias salariales. Este informe en 2006 señaló que las diferencias en las características individuales influyen poco en la brecha salarial de género (Comisión Europea, 2006). 7 Factores explicativos de la desigualdad salarial | UCM [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] 2014/2015 Estudios posteriores han establecido cuáles son las características personales que influyen más en la desigualdad salarial entre hombres y mujeres, y son (De Cabo, et al., 2010): Nivel de cualificación: generalmente, a la hora de hablar de la brecha salarial entre hombres y mujeres, la teoría del capital humano ha afirmado que las mujeres perciben menores ingresos porque entran a formar parte del mercado laboral teniendo menos nivel de cualificación (Anker, 1997); esta premisa ha sido falseada a través de numerosos estudios, como el de Gema de Cabo, Maite Rodríguez y Marcelo Segales en 2010. Este estudio que determina que la brecha salarial se reduce al ascender desde niveles muy bajos de formación hasta niveles medios, en donde se incrementa la brecha salarial de género (De Cabo, et al., 2010). Esto se explica a través de la precariedad, que es mayor en los puestos de trabajo ocupados por mujeres dentro del grupo de trabajadores no cualificados; dentro de este grupo, las ocupaciones feminizadas tienen salarios menores que las masculinizadas (De Cabo, et al., 2010). Finalmente, superados los niveles de educación medios, la brecha salarial entre hombres y mujeres se vuelve a incrementar (De Cabo, et al., 2010). Algo que llama la atención es que, en todos los niveles de cualificación, las tasas de empleo de los hombres son mayores que el de las mujeres y éstas requieren un nivel de cualificación más alto que el de ellos para acceder al empleo o percibir los mismos salarios (Revilla & Escapa, 2003). Edad: la brecha salarial se incrementa con la edad, a pesar de que el salario tanto de hombres como de mujeres se incrementa con la edad, los salarios de los hombres son mayores por la experiencia laboral adquirida. Por otro lado el desarrollo profesional de ambos sexos es diferencial y favorable para el sexo masculino (De Lucio, et al., 2012) Antigüedad: la brecha salarial entre hombres y mujeres se incrementa cuanto menor es la antigüedad de las mujeres en un empleo (De Cabo, et al., 2010). Algunos estudios llevados a cabo, como el de Sebastián Sarasola y Estíbaliz García, han explicado que la menor antigüedad de las mujeres en un empleo en relación con la de los hombres, se debe a su incorporación tardía en el mercado laboral y sus interrupciones a lo largo de su carrera profesional (Sarasola & García, 2012). Algo reseñable es que a medida que se asciende en los intervalos de la antigüedad, se recogen grupos de asalariados más homogéneos en términos de condiciones laborales menos precarias e inestables y esto hace que la brecha salarial se reduzca (De Cabo, et al., 2010, p. 15). UCM | Factores explicativos de la desigualdad salarial 8 2014/2015 [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] 5.2 Segregación en el mercado laboral La segregación laboral de mujeres y hombres es otro elemento que explica la brecha salarial de género y lo hace desde una óptica previa al fenómeno (De Cabo, et al., 2010). Existen una variedad de teorías que tratan de explicar la segregación en el mercado laboral entre hombres y mujeres, pero ninguna puede explicarla de forma completa, es por ello, que se toman en cuenta varias teorías para explicarlo (Nicolás, et al., 2009). Dentro de las teorías que explican la segregación laboral entre sexos, destaca la teoría del capital humano, que considera que las mujeres invierten menos que los hombres en su educación, y esto se explica porque, la participación de las mismas en el mercado de trabajo no será continua. Por tanto, ellas optan por titulaciones y ocupaciones en las que el capital humano se deprecie menos y por eso, los empleos femeninos se concentran en determinadas actividades y el exceso de oferta y concentración de la demanda originan salarios bajos (Gil, 2005, p. 64). Este planteamiento lleva a que autores como Randall Filer y Mark Killingsworth en la teoría de las diferencias compensatorias o igualadoras a considerar que, las mujeres eligen puestos de trabajo de menor riesgo porque el salario de las mismas es secundario dentro de la renta familiar. Eso explica que las mujeres se concentran en determinadas ocupaciones (Nicolás, et al., 2009). Otra de las teorías que explica la segmentación del mercado laboral entre hombres y mujeres es la teoría de la segmentación del mercado laboral. Esta teoría a su vez ayuda a comprender la influencia que esta segmentación tiene en la brecha salarial entre hombres y mujeres. Esta teoría dice que, a medida que las mujeres se concentran en pocos puestos de trabajo y ocupaciones, el salario de ellas será más bajo. Mientras que el de los hombres será más alto porque no se concentran en ciertos puestos de trabajo y las ocupaciones son más variadas (Nicolás, et al., 2009). Otra de las teorías que trata de explicar la segregación en el mercado laboral entre hombres y mujeres, son las teorías no económicas o feministas, estas teorías hacen uso de factores ajenos al mercado de trabajo y comportamientos no económicos. Esta teoría dice que la posición inferior que ocupa la mujer en el mercado de trabajo, es un reflejo de la posición subordinada que la sociedad y la familia le asignan. Esto influye en el hecho de que las mujeres acumulan menor capital humano respecto a los hombres antes de incorporarse al mercado laboral. Sin embargo, en los últimos años, el nivel de estudios de las mujeres se ha incrementando respecto a periodos anteriores, pero no ha hecho que la segregación laboral de género se reduzca (Nicolás, et al., 2009). 9 Factores explicativos de la desigualdad salarial | UCM [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] 2014/2015 La teoría sociosexual, hace referencia a los obstáculos culturales y económicos que deben superar las mujeres (Anker 1997 en Nicolás, et al., 2009). Esta teoría considera que las ocupaciones feminizadas reproducen en el mercado laboral los estereotipos que la sociedad asigna a las mujeres y estas ocupaciones tienen un salario inferior que en las que se emplean los hombres (Nicolás, et al., 2009). Dentro de la segregación laboral se distingue segregación horizontal y vertical. Esto está muy ligado con la desigualdad de remuneración entre hombres y mujeres (Gil, 2005, p. 64). Cuando se habla de segregación horizontal en el mercado de trabajo, se refiere a los empleos ocupados mayoritariamente por las mujeres que tienen peor remuneración que los ocupados por los hombres (Valdés & Quintanilla, 2008, p. 123). Las mujeres desempeñan tareas o profesiones relacionadas con las tareas propias del hogar familiar, de carácter administrativo, la hostelería, la limpieza, la enseñanza o el cuidado de los niños, enfermos, ancianos (Valdés & Quintanilla, 2008, p. 123). Por otro lado, se habla de segregación vertical, y se habla de las dificultades que las mujeres tienen para acceder a los empleos situados en las altas posiciones de las categorías de las empresas y que están mejor remunerados (Valdés & Quintanilla, 2008, p. 124). 5.3 Infravaloración social, económica y profesional del trabajo de las mujeres La infravaloración del trabajo de las mujeres constituye otro de los determinantes que explican la brecha salarial entre hombres y mujeres (Sarasola & García, 2012); las competencias y capacidades de las mujeres generalmente son infravaloradas en relación con la de los hombres. (Comisión Europea, 2014). Al hablar de infravaloración profesional, se toman en cuenta varios aspectos. En primer lugar las ocupaciones. En general, los hombres ganan de media más que las mujeres en todas las categorías profesionales (Sallé & De Cabo, 2010). Se localiza un incremento de la brecha salarial en las ocupaciones más y menos cualificadas, en donde las mujeres desempeñan tareas en las que no es necesario un alto nivel de cualificación y en tareas que por lo contrario sí lo necesitan (De Cabo & Garzón, 2007). Por otro lado, investigaciones como la de Carlos Martín y Luis Zarapuz, afirman que los sectores y ramas de actividad donde mayormente se emplean las mujeres tienen una brecha salarial más alta. Por el contrario, los sectores en donde se concentran más hombres, la brecha salarial es inferior a la media (Martín & Zarapuz, 2000). En segundo lugar, tomando en cuenta el tipo de contrato, se ve que las mujeres por promedio perciben una retribución inferior respecto a la de los hombres (Sallé & De UCM | Factores explicativos de la desigualdad salarial 10 2014/2015 [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] Cabo, 2010). Además, se determina que la brecha salarial varía de acuerdo con el tipo de contrato. En el contrato a tiempo parcial la brecha salarial de género es mayor que la del contrato a tiempo completo (De Lucio, et al., 2012). Además, también se ha podido comprobar que cuanto mejores son las condiciones de trabajo, la brecha salarial también se incrementa (Sallé & De Cabo, 2010). En lo que se refiere a la infravaloración social, muchos sectores profesionales y laborales que contaban con un alto reconocimiento social y económico cuando eran desempeñados por hombres, lo han ido perdiendo según se han ido feminizando (Magadán, 2008). Estos empleos se han considerado aptos para las mujeres y han dado lugar a lo que se denomina ‘gueto de terciopelo’, término introducido en 1978 por la revista ‘Business Week’, con la intención de reconocer las áreas profesionales y ocupacionales que se han ido feminizando y explicar que esta feminización ha acarreado una disminución de la calidad, de salarios y empeoramiento de las condiciones de trabajos y posibilidades de ascenso a posiciones ejecutivas. Debido al impacto que esta feminización ha tenido muchos autores han llegado a considerar que ese ‘gueto de terciopelo’ se ha convertido en un ‘gueto de poliéster’ (Magadán, 2008). En lo que se refiere a la infravaloración económica, se relaciona con tareas tradicionalmente llevadas a cabo, en el ámbito privado, por mujeres (Fundación directa, 2007), y por tanto se ha considerado un trabajo invisible pero muy importante para el desarrollo correcto de las sociedades (Revilla & Escapa, 2003). Estas tareas han entrado a formar parte del mercado laboral, pero con un valor inferior en comparación con otras que tradicionalmente han pertenecido al ámbito público (Fundación directa, 2007). En definitiva, la distinta valoración de las competencias femeninas en relación con las masculinas tiene como consecuencia que, aquellos trabajos que requieren de capacidades similares sean menos valorados social y económicamente si son desempeñados por las mujeres. Por lo contrario, los trabajos en donde mayormente se ocupan los hombres poseen mejores condiciones tanto salariales como laborales (Comisión Europea, 2014, p. 6). 5.4 Otros factores que influyen en la brecha salarial entre hombres y mujeres Además de las características mencionadas anteriormente, es también necesario hacer referencia a las características empresariales que influyen en la brecha salarial de género (De Cabo, et al., 2010, p. 16). Entre las características de la empresa destacan: 11 Factores explicativos de la desigualdad salarial | UCM [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] 2014/2015 El tamaño y titularidad de la empresa: Al hablar de la titularidad de la empresa, se determina que las remuneraciones son mayores en las empresas públicas que en las privadas. En lo que se refiere a la brecha salarial de género, se ve que ésta es mayor en términos absolutos en las empresas públicas que en las empresas privadas y en términos relativos, es superior en las empresas privadas que en las empresas públicas (De Lucio, et al., 2012). Si en las empresas con titularidad pública nos centramos en las administraciones públicas, la brecha salarial entre sexos es bastante significativa; y eso se explica porque en gran parte de las categorías ocupacionales las mujeres perciben una menor retribución y por otro lado, porque están sobrerrepresentadas en las categorías peor pagadas (Gil, et al., 2002). Al hablar del tamaño de la empresa (medido por el número de trabajadores), se ve que en las empresas de mayor tamaño el salario medio de los trabajadores es mayor, y además, es donde en mayor medida se concentran los hombres (Martín & Zarapuz, 2000). Por tanto al hablar de brecha salarial, ésta es más evidente en este tipo de empresas (De Cabo, et al., 2010). Por el contrario, la presencia de las mujeres es mayor en las empresas pequeñas, donde el nivel salarial es más bajo (Martín & Zarapuz, 2000). Las políticas de recursos humanos y los criterios de selección de personal llevadas a cabo por las empresas, muestran la preferencia por la contratación de hombres, sobre todo para cubrir puestos de responsabilidad o que requieren determinadas características. Estas políticas inciden en menor o mayor medida en la brecha salarial en detrimento de las mujeres (De Cabo, et al., 2010). Características del mercado laboral: para tratar de explicar la brecha salarial entre sexos, es inevitable dejar de lado aquellos factores de género específicos, como los déficits femeninos en el capital humano, discriminación salarial por sexos, entre otros. Sin embargo, Juhn, Murphy y Pierce en 1991 reconocieron que la estructura de los salarios en general es la que otorga a las habilidades un valor y estos valores influyen en los diferentes subgrupos en el mercado laboral (Blau & Kahn, 2001). Al igual que la estructura salarial, la oferta laboral femenina y los esquemas de negociación colectiva también tienen un impacto directo en la brecha salarial (Blau & Kahn, 2001). La estructura salarial española vista desde una perspectiva internacional muestra que, las características concretas que poseen la fuerza laboral y las empresas aumentan la brecha salarial entre sexos en relación con otros países (Simón, 2009). Algunas autoras como Platenga y Remery, afirman que actualmente la respuesta a la necesidad de incrementar la flexibilidad del empleo se ha traducido en un intento por UCM | Factores explicativos de la desigualdad salarial 12 2014/2015 [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] crear sistemas salariales más descentralizados, siendo estos responsables del incremento de la brecha salarial de género (Plantenga y Remery 2006 en Sallé, et al., 2010). Al hablar de la oferta laboral femenina, estudios llevados a cabo como el de Elvira y Graham, consideran que la composición de los salarios y la presencia de las mujeres en un sector ocupacional son aspectos que influyen directamente en el incremento de la brecha salarial (Elvira y Graham 2002 en Sallé, et al., 2010). Finalmente, en lo que se refiere a la negociación colectiva autores como Simón, han determinado que ésta ejerce un impacto importante en la desigualdad salarial en España; de manera que, si la negociación colectiva tiene un buen resultado eso daría lugar a una reducción en la brecha salarial entre hombres y mujeres (Simón, 2009). Si a esto añadimos la estabilidad de los rendimientos salariales que presentan a lo largo del tiempo, sobre todo los asociados a los atributos de las empresas, se podría decir que la negociación colectiva es un factor que favorece la estabilidad de la estructura salarial en España (Simón, 2009). El papel principal de este instrumento se ha visto reflejado en los convenios colectivos, en donde se ha abogado por unas condiciones salariales que faciliten el acceso a la igualdad retributiva (De Cabo, et al., 2010). 6. Referencias normativas El fenómeno de la brecha salarial de género ha sido abordada tanto por organismos internacionales como a nivel nacional para reducirla e incluso prevenirla. La Organización Internacional del Trabajo en 1951 firmó el Convenio sobre igualdad de remuneración. Recogió por primera vez en un texto normativo la igualdad salarial entre hombres y mujeres y puso de manifiesto el concepto de trabajo de igual valor (Sallé & De Cabo, 2010, p. 113). En el contexto de la Unión Europea se ha tomado en cuenta el principio de igualdad retributiva tanto en sus Tratados fundamentales como en distintas directrices y actos vinculantes (Sallé & De Cabo, 2010, p. 113). En 1957 en el Tratado de Roma, se reconoció el derecho de igualdad de remuneración entre hombres y mujeres pero lo limita a por el mismo trabajo (Ministerio de Agricultura, s.f.). En 1997 en el Tratado de Ámsterdam se consolida el principio de igualdad de remuneración entre hombres y mujeres en su Artículo 141, en donde recoge que: 13 Referencias normativas | UCM [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] 2014/2015 ‘Cada Estado miembro garantizará la aplicación del principio de igualdad de retribución entre trabajadores y trabajadoras para un mismo trabajo o para un trabajo de igual valor’ (Comunidades Europeas , 1997). En este tratado se hizo alusión al trabajo de igual valor (Sallé & De Cabo, 2010, p. 113). En 2007 en el Tratado de Lisboa, se reconoció este principio en el Artículo 157. Estas medidas legislativas se han creado para de defender el principio de igualdad de retribución por igual trabajo o por un trabajo de igual valor (RED DIE, 2014). Dentro del Tratado Constitutivo de la Comunidad Europea, se destaca el artículo 141 y varias Directivas, modificadas en la Directiva 2006/54/CE del Parlamento Europeo y del Consejo relacionado con la aplicación del principio de igualdad de oportunidades y del trato entre hombres y mujeres en asuntos de empleo y ocupación (De Cabo, et al., 2010, p. 9). Las últimas iniciativas llevadas a cabo dentro de este terreno son, la Resolución del Parlamento Europeo de noviembre de 2008, sobre la aplicación del principio de igualdad de retribución entre hombres y mujeres, donde se incluyen acciones específicas para prevenir la discriminación en los Estados Miembros. También se destaca la Resolución del Parlamento Europeo de mayo de 2012, que recoge las recomendaciones de la Comisión sobre la aplicación del principio de igualdad de retribuciones entre hombres y mujeres para un mismo trabajo o para un trabajo de igual valor. Otra iniciativa relevante es la adopción de las conclusiones de las evaluaciones anuales de la aplicación de la Plataforma de Acción Pekín por parte del Consejo en 2010, encaminadas a combatir la desigualdad de remuneración entre hombres y mujeres (De Cabo, et al., 2010, p. 9). A estas estrategias, se añaden otras iniciativas como la Comunicación de la Comisión de septiembre de 2010, Estrategia Europea para la igualdad entre mujeres y hombres 2010-2015, que recoge las peticiones expuestas en la Carta de la Mujer y describe las labores necesarias que se deben llevar a cabo entre 2010 y 2015. En esta estrategia también se establece una base para la cooperación entre la Comisión, otras instituciones europeas, los Estados miembros y el resto de partes interesadas en el marco del Pacto Europeo por la Igualdad de Género (Comisión Europea, 2010a). Otra iniciativa importante es la Estrategia Europea 2020, es una estrategia de crecimiento que ha planteado la Unión Europea para los próximos diez años, para que ésta tenga una economía inteligente, sostenible e integradora. Estas UCM | Referencias normativas 14 2014/2015 [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] prioridades, favorecerán a que la Unión Europea y sus Estados miembros proporcionen altos niveles de empleo, productividad y cohesión social (Comisión Europea, 2010b). Para que ese crecimiento sea efectivo, Europa debe hacer uso pleno del potencial laboral para enfrentar los desafíos de una población envejecida y el crecimiento de la competencia mundial. Es necesario políticas que promuevan la igualdad entre sexos para incrementar la participación de la población en edad laboral, favoreciendo de esta manera el crecimiento y la cohesión social (Comisión Europea, 2010b). En el contexto español, en la Constitución de 1978, en el artículo 14 se pone de manifiesto el principio de igualdad de todas las personas y la no discriminación por razón de sexo. Dentro de este documento, en el artículo 35 se contempla la posibilidad regular el Estatuto de los Trabajadores, donde se concreta la igualdad de retribución entre ambos sexos (Sallé & De Cabo, 2010, p. 128). En 1994, la reforma laboral modificó el artículo 28 del Estatuto de los Trabajadores, el cuál estableció la obligación del empresario a pagar por un trabajo de igual valor el mismo salario, entendiendo por salario el salario base y los complementos salariales (Agencia Estatal, 1994). En esta ocasión se habló de trabajos de igual valor. En lo referente a la legislación específica en materia de igualdad entre mujeres y hombres, la Ley Orgánica 3/2007 supuso un paso decisivo en la igualdad en las esferas política, civil, económica, social y cultural (Agencia Estatal, 2007). Esta ley no habla directamente de la igualdad de retribución; pero, al establecer la obligatoriedad de implantar planes de igualdad en las empresas y las pautas generales de actuación que se deben tomar en cuenta en el marco de la negociación colectiva, se hace referencia a la reducción de la brecha salarial entre sexos (Valdés & Quintanilla, 2008, p. 144). El reciente Real-Decreto-ley 3/2012, del 10 de febrero, en el artículo 8 establece un nuevo modelo de sistema de clasificación profesional a través de grupos profesionales, la definición de estos grupos profesionales se ceñirán a los criterios y sistemas que tengan el objetivo de garantizar la desaparición de la discriminación directa e indirecta de género (Agencia Estatal , 2012). 15 Referencias normativas | UCM [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] 2014/2015 7. La brecha salarial en España 7.1 Evolución de la Brecha salarial de género en España 1995-2013 La evolución de la brecha salarial en España desde 1995 hasta 2013, como se muestra en el Gráfico 1, ha seguido una tendencia de descenso significativo a lo largo de los años. Desde 1995 hasta el año 2013 la brecha salarial de género ha pasado de 30,72% a 16,76%. El descenso fue más pronunciado Gráfico 1. Evolución de la Brecha Salarial de género en España 1995-2013 entre 1995 y 2002. 30,72 Entre 2002 y 2007 la brecha 19,28 19,82 18,78 18,77 19,09 15,73 15,87 14,91 16,33 17,25 16,76 experimentó pocas variaciones. Entre 2013 2012 2011 2010 2009 2008 2007 2006 2005 2004 2002 2007 1995 salarial y 2008 la brecha salarial de género experimentó el último descenso Fuente: Elaboración propia a partir de los datos de la EES y EAES significativo. A partir de 2008, año en el que se inició la crisis económica en España, la brecha salarial género se incrementó paulatinamente hasta el 2012. Esto se podría explicar como consecuencia de la congelación salarial y la reducción de las retribuciones anuales y la moderación salarial, pactada en la negociación colectiva, que dan como resultado una reducción de salarial y un incremento de la brecha salarial entre hombres y mujeres (UGT, 2015). En el año 2013 la brecha salarial se redujo en relación con el año anterior. 7.2 Características que influyen en la brecha salarial de género en España En este trabajo, uno de los objetivos que se pretende alcanzar es la cuantificación de la brecha salarial entre hombres y mujeres atendiendo a las características personales, laborales y de las empresas en las que desempeñan su labor las trabajadoras y los trabajadores. UCM | La brecha salarial en España 16 2014/2015 7.2.1 [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] Brecha salarial de género y características personales 7.2.1.1 Brecha salarial de género según la edad En el Gráfico 2 se ha tomado en cuenta la brecha salarial según la edad de 1995 y de 2010, con el objetivo de conocer cómo ha variado la diferencia salarial en15 años, en qué grupos de edad se concentra y cuál es la tendencia que sigue. En primer lugar, se ve Gráfico 2. Comparación de la brecha salarial por edad 1995 y 2010 Brecha salarial 1995 que la brecha salarial se ha reducido de forma Brecha salarial 2010 49,30 general en éstos 15 años 45,93 30,98 25,94 13,04 11,85 8,82 9,44 11,18 34,25 26,46 20,16 11,49 31,34 13,20 16,14 17,50 33,03 28,27 20,55 en todos los grupos de edad. Los grupos de edad en donde más se ha 7,55 reducido la brecha salarial menos 20 a 24 25 a 29 30 a 34 35 a 39 40 a 44 45 a 49 50 a 54 55 a 59 60 a 64 más de de 20 65 en estos 15 años son 35- Fuente: elaboración propia a partir de la EES y EAES 39 años y 45-49 años. También hay que señalar que los grupos de edad con mayor y menor diferencia salarial coinciden en los dos periodos. Por otro lado, se observa de manera general que la tendencia de la brecha salarial de género se va incrementando con la edad, en concreto a partir de los 55 años. Cabe destacar también un incremento bastante pronunciado de la brecha salarial entre los grupos de edad de 25 a 29 años y 30-34 años en 1995 y en 2010 en los grupos de edad de 40-44 años y 45-49. 7.2.1.2 Brecha salarial de género según la antigüedad En el Gráfico 3, se presenta la evolución que ha seguido la brecha salarial de género según la antigüedad. Gráfico 3. Brecha salarial de género según la antigüedad 30 En 25 observa una general de la salarial en todos grupos de antigüedad, Menos de 1 año 20 primer lugar, se reducción brecha De 1 a 2 años 15 De 3 a 5 años De 6 a 10 años 10 Más de 10 años 5 los salvo en 2006, en donde 0 1995 2002 2006 2010 se observa un incremento Fuente: elaboración propia a partir de datos de EES 1995, 2002, 2006, 2010 importante en el grupo de 17 La brecha salarial en España | UCM [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] 2014/2015 personas empleadas más de 10 años en una empresa, este incremento llama bastante la atención porque llegó a valores semejantes a los de 1995. En 2010, se observa un descenso general de la brecha salarial. Otro aspecto reseñable es que la brecha salarial se incrementa a la vez que el tiempo de permanencia en la empresa es mayor, por lo que se puede decir que hay relación directa entre antigüedad y brecha salarial. 7.2.1.3 Brecha salarial de género según el nivel de estudios En el Gráfico 4, a primera vista se ve un Gráfico 4. Brecha salarial de género según el nivel de estudios 50 45 40 35 30 25 20 15 10 5 0 descenso general de la brecha salarial en todos Sin estudios Primarios Secundarios Universitarios los niveles de estudios; sin embargo, puede no establecer se una relación directa entre el nivel de estudios y la Brecha brecha brecha brecha salarial 1995 salarial 2002 salarial 2006 salarial 2010 brecha salarial, puesto Fuente: elaboración propia a partir de datos de la EES 1995, 2002, 2006, 2010 que la influencia de la variable ha variado sobre la brecha salarial a lo largo de los 4 periodos estudiados. En 1995 la brecha salarial se incrementaba en personas con nivel de cualificación muy bajo, se estrechaba cuando adquirían cierta cualificación y nuevamente se incrementaba a partir de los estudios secundarios. En el año 2002, la brecha salarial disminuyó drásticamente en las personas que no tenían estudios y con estudios universitarios. Siguió disminuyendo a un ritmo constante en las personas con estudios primarios y la brecha salarial de las personas con estudios secundarios, era la más alta de 2002. En el año 2006, la brecha salarial se redujo en las personas con nivel de estudios bajos (sin estudios y con estudios primarios) y la de las personas con cualificación secundaria y universitaria mantuvo valores similares a los de 2002. Finalmente, en 2010, salvo la brecha salarial del grupo de personas sin estudios, la de los demás niveles de estudios se redujeron; a pesar de esta reducción, ésta fue superior en los estudios secundarios. UCM | La brecha salarial en España 18 2014/2015 7.2.2 [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] Características laborales 7.2.2.1 Brecha salarial según la ocupación En lo referente a la ocupación, debido a la complicación que existe para comparar los datos de los diferentes períodos, se ha llevado a cabo un diagnóstico de la situación de la brecha salarial según la ocupación en 2010. En primer lugar, resulta interesante Gráfico 5. Porcentaje de ocupación de hombres y mujeres Mujeres 1,01 Trabajadores no cualificados en servicios (excepto… Conductores y operadores de maquinaria móvil hombres y las mujeres 3,70 5,49 1,77 0,17 1,13 En el Gráfico 5, se 2,75 0,97 Trabajadores cualificados de las industrias … en las ocupaciones. 4,55 Operadores de instalaciones y maquinaria fijas, y… Trabajadores cualificados de la construcción, … cómo se distribuyen los Hombres Peones de la agricultura, pesca, construcción, … recogen las principales 7,83 0,10 4,54 ocupaciones en 2010 y Trabajadores cualificados en el sector agrícola, … 0,05 0,32 Trabajadores de los servicios de salud y el cuidado … Trabajadores de los servicios de restauración y … 8,65 4,39 Empleados de oficina que no atienden al público 6,25 2,06 0,72 porcentaje de hombres y mujeres que 5,62 3,23 Técnicos, profesionales de apoyo Directores y gerentes el 4,88 1,42 Técnicos y profesionales científicos e intelectuales … conocer 4,87 1,55 Fuente: Elaboración propia a partir de los datos de EES 2010 8,44 se emplean en ellas. A primera vista se ve que hay ocupaciones masculinizadas y otras feminizadas. Dentro de las masculinizadas destacan: los trabajadores cualificados de las industrias manufactureras; técnicos profesionales de apoyo entre otros. Dentro de las ocupaciones más feminizadas destacan: trabajadores de los servicios de restauración y comercio; empleados de oficina que no atienden al público, entre otros. 19 La brecha salarial en España | UCM [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] 2014/2015 Tabla 1. Brecha salarial de género por ocupación Al hablar de la brecha salarial BRECHA SALARIAL 17,88 Directores y gerentes Técnicos y profesionales científicos e intelectuales de la salud y la enseñanza 17,13 Técnicos, profesionales de apoyo 19,76 Empleados de oficina que no atienden al público Trabajadores de los servicios de restauración y comercio Trabajadores de los servicios de salud y el cuidado de personas Trabajadores cualificados en el sector agrícola, ganadero, forestal y pesquero (Tabla 1) de género, se observa que en las ocupaciones más 21,09 feminizadas y más masculinizadas, 15,85 ésta es alta. Otro aspecto a tener en 14,70 cuenta es que la brecha salarial 9,92 entre sexos es superior en ocupaciones donde el nivel salarial Trabajadores cualificados de las industrias manufactureras, excepto operadores de instalaciones y máquinas 25,16 Operadores de instalaciones y maquinaria fijas, y montadores Trabajadores no cualificados en servicios (excepto transportes) Peones de la agricultura, pesca, construcción, industrias manufactureras y transportes es elevado, como son: directores y 28,28 gerentes; técnicos y profesionales 16,96 científicos e intelectuales de la 9,64 salud y la enseñanza, entre otros. Y Fuente: elaboración propia a partir de datos de EES 2010 es menor en ocupaciones con nivel salarial bajo como son: trabajadores en el sector agrícola, ganadero, forestal y pesquero; peones de la agricultura, pesca, construcción, industrias manufactureras y transportes. 7.2.2.2 Brecha salarial según el tipo de contrato En el Gráfico 6 en primer lugar, muestra que la brecha salarial del contrato indefinido a lo largo del periodo Gráfico 6. Brecha Salarial de género según tipo de contrato Brecha salarial contrato indefinido estudiado Brecha salarial contrato determinado ha sido superior que la del contrato determinado, esto podría explicarse 30,17 21,00 23,11 porque 22,50 15,90 18,76 18,08 17,00 18,45 11,53 4,99 3,34 2002 2006 2010 más hombres que mujeres empleados con este 8,67 1995 hay 2011 2012 Fuente: elaboración propia a partir de EES y EAES 3,13 2013 tipo de contrato, ya que éste les da más estabilidad en el empleo, lo que favorece una carrera profesional más larga, posibilidad de ascensos y perciben mejores salarios (CCOO, 2012). La evolución que ha seguido la brecha salarial de género según el contrato indefinido, se ve un claro descenso desde 1995 hasta el año 2013. Por otro lado, se ve UCM | La brecha salarial en España 20 [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] 2014/2015 que ha experimentado varios ritmos de decrecimiento y crecimiento. Desde 1995 hasta 2002 descendió a un ritmo muy rápido. Desde el 2002 hasta 2006, la brecha salarial apenas varió y en 2010, se observa un descenso notable. Entre 2010 y 2012, se observa un incremento a un ritmo muy lento, llegando a su punto más alto en el año 2012, pero no superó los valores de 2010. Este incremento podría explicarse como consecuencia de la segunda recesión económica que sufrió España en ese año (Agencia Efe, 2012). En el año 2013, se observa un descenso poco significativo. Por otro lado, la brecha salarial según el contrato con duración determinada, también ha experimentado un descenso general y ha tenido más variaciones a lo largo del tiempo. El descenso más notable se dio el periodo de 1995 y 2002, este descenso vino seguido en el siguiente periodo por un incremento y desde 2006 hasta 2011 se fue reduciendo, llegando a valores más bajos desde 1995. Entre 2011 y 2013 también hubo variaciones en brecha salarial, en 2012 ésta se incrementó y en 2013 nuevamente se aprecia un leve descenso de la misma. 7.2.2.3 Brecha salarial según el tipo de jornada Gráfico 7. Brecha salarial de género según el tipo de jornada Brecha salarial tiempo completo Brecha salarial tiempo parcial En el Gráfico 7, en primer lugar se aprecia un descenso general en 36,66 33,28 29,59 29,53 la brecha salarial según la jornada a tiempo 23,40 17,63 completo y según la 13,60 9,30 jornada a tiempo parcial. Cabe destacar 1995 2002 2006 2010 que la brecha salarial Fuente: elaboración propia a partir de datos de la EES 1995, 2002, 2006, 2010 según la jornada a tiempo parcial es superior que la de la jornada a tiempo completo. Esto se explica a través del peso que cada sexo tiene en relación con el tipo de jornada; por tanto, una parte de la brecha salarial se puede atribuir a la mayor presencia de las mujeres en puestos de trabajo a tiempo parcial (CCOO, 2012). Esto se podría explicar porque las mujeres tienden a escoger una reducción de horario laboral o un trabajo a tiempo parcial para compaginar el trabajo con el tiempo destinado para ejercer de cuidadoras (European Trade Union Confederation, 2011). Los puestos de trabajo cuya jornada 21 La brecha salarial en España | UCM [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] 2014/2015 laboral es parcial se caracterizan por tener remuneraciones bajas y las oportunidades de formación y promoción profesional son limitadas (CCOO, 2012). La brecha salarial de la jornada parcial, ha tenido más variaciones, entre 1995 y 2002 experimentó un descenso a un ritmo lento y entre 2002 y 2006 ese descenso fue pronunciado. A partir de 2006 hasta 2010 ésta se incrementó, periodo que coincidió con el inicio de la crisis económica en España 2008. La brecha salarial de la jornada completa ha tenido un descenso constante desde 1995 hasta el año 2010 y ha experimentado menos variaciones. El descenso más pronunciado se dio durante el periodo de 1995-2002, a partir de ahí, ha continuado descendiendo pero a un ritmo más lento. 7.2.3 Brecha salarial de género y características de la empresa 7.2.3.1 Brecha salarial de género según el tamaño de la empresa Gráfico 8. Brecha salarial de género según tamaño de la empresa En el Gráfico 8, se ve que la brecha salarial ha 40 De 1 a 9 trabajadores 35 30 25 De 10 a 19 trabajadores 20 15 De 20 a 49 trabajadores 10 5 0 Brecha Brecha Brecha Brecha Salarial 1995 Salarial 2002 Salarial 2006 Salarial 2010 De más de 50 trabajadores tenido un descenso generalizado. La brecha salarial ha sido superior en las empresas con más de 50 trabajadores a lo largo de los 4 Fuente: elaboración propia a partir de datos de EES 1995, 2002, 2006, 2010 periodos. Entre 1995 y 2002 tuvo un descenso brusco, en el siguiente periodo se mantuvo constante y en el periodo de 2006-2010 tuvo otro descenso brusco. La brecha salarial en las empresas de 20-49 trabajadores ha experimentado un descenso a un ritmo rápido desde 1995 hasta 2006. A partir de 2006 la brecha salarial se ha incrementado en este tipo de empresas. Las empresas de 10-19 trabajadores han experimentado un descenso brusco de la brecha salarial en el periodo de 1995-2002, a partir de ese año, ésta se ha mantenido invariable hasta 2010. Finalmente, los datos de empresas con menos de 10 trabajadores aportan poca información porque se tomaron en cuenta a partir de la EES de 2006. UCM | La brecha salarial en España 22 2014/2015 [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] 7.2.3.2 Brecha salarial de género y la titularidad de la empresa En el Gráfico 9, a primera vista se observa que se ha producido un descenso de la brecha salarial tanto en las empresas públicas como en las empresas privadas. En lo que se refiere a la empresa Gráfico 9. Brecha salarial de género según la titularidad de la empresa 35,00 privada, se observa que 30,00 el descenso se produjo 25,00 a un ritmo constante Público 20,00 hasta 15,00 el año 2006; Privada 10,00 desde ese año hasta el 5,00 2010 se ha continuado 0,00 reduciendo, pero a un Brecha Salarial Brecha Salarial Brecha Salarial Brecha Salarial 1995 2002 2006 2010 ritmo más lento. Fuente: elaboración propia a partir de datos de la EES 1995, 2002, 2006, 2010 En la empresa pública el descenso de la brecha salarial ha sido brusco entre 19952002, en el siguiente periodo 2002-2006 experimentó un leve incremento y finalmente a partir de 2006 hasta 2010 ha experimentado nuevamente un descenso brusco. 7.2.3.3 Brecha salarial de género y el tipo de mercado El Gráfico 10 en primer lugar Gráfico 10. Brecha salarial de género según el mercado en el que opera la empresa 120,00 100,00 Internacional 80,00 se observa que la brecha salarial ha experimentado un descenso en todos los tipos de mercado. 60,00 Nacional La brecha salarial es 40,00 Local o regional 20,00 0,00 Brecha Brecha Brecha Brecha Salarial 1995 Salarial 2002 Salarial 2006 Salarial 2010 Fuente: elaboración propia a partir de datos de la EES 1995, 2002, 2006, 2010 superior según se van ampliando los mercados en los que desarrollan sus actividades las empresas, de esta manera, es superior en las empresas que operan en mercados internacionales, seguido de las empresas que operan en el ámbito nacional y en el ámbito local. Otro aspecto que llama la atención es que la brecha salarial de los tres mercados analizados ha seguido la misma tendencia y han descendido casi al mismo ritmo. El 23 La brecha salarial en España | UCM [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] 2014/2015 descenso fue más pronunciado durante el periodo de 1995-2002, a partir de ese año continúo descendiendo a un ritmo más lento. 8. La brecha salarial de España en comparación con la UE En el Gráfico11 se presenta una comparación de la brecha salarial de género entre España y el conjunto de la Unión Europea desde 1995 hasta 2013. Evolución de la Brecha salarial euro/hora de España en relación con la UE (27 países) Unión Europea (27 paÍses) España Fuente: elaboración propia a partir de datos de Eurostat y de la Comisión de las Comunidades Europeas A primera vista se observa que la brecha salarial en el caso de UE a penas ha descendido a lo largo del tiempo estudiado, aunque sí se observan variaciones. El periodo en el que experimentó un mayor descenso fue 2003-2005, a partir de ese año la brecha salarial aumentó y se mantuvo más o menos constante hasta 2010. Finalmente, a partir de entonces ésta ha experimentado un leve descenso y se ha mantenido constante hasta 2013. La brecha salarial en España en comparación con la de la UE ha experimentado un incremento. En 1995, la brecha salarial en España era inferior a la de la UE, pero ésta se incrementó lentamente y en 2002 llegó al máximo. En 2005 la brecha salarial española tuvo un descenso pronunciado y se situó por debajo de la UE. A partir del 2007 la brecha salarial española se incrementó y se mantuvo constante hasta 2010, a partir de entonces se ha ido incrementando hasta 2013 en relación con la de la UE. 9. Conclusiones La investigación llevada a cabo sobre la brecha salarial de género en España ha mostrado resultados interesantes que, en algunas ocasiones, han corroborado la información de otros estudios ya abordados en la parte teórica, pero no deja de aportar nuevas perspectivas en el estudio de la brecha salarial entre hombres y mujeres. UCM | La brecha salarial de España en comparación con la UE 24 2014/2015 [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] La brecha salarial de género, en términos generales, se define como la diferencia de salarios percibidos por hombres y mujeres. La brecha salarial de género en España desde 1995-2013, ha descendido notablemente. Un aspecto reseñable en la evolución es, el incremento de la brecha salarial entre 2008-2013 que coincide con el inicio de la crisis económica y en 2012 con la segunda recesión económica que sufrió España. En un principio, cuando se empezó a elaborar la investigación, se consideró que la brecha salarial sólo se explicaba a través de factores objetivos, es decir, a través de diversas características relacionadas con el ámbito individual, laboral y empresarial. Sin embargo, parece que éste fenómeno no sólo se puede explicar a través de la estas características, sino que hay otros factores relacionados con aspectos culturales y estructurales, denominados subjetivos, que también influyen de manera directa en la brecha salarial de género. Dicho esto se considera que, además de tratar de dar respuesta a los objetivos propuestos al inicio de esta investigación, se encontrarán igualmente otras conclusiones interesantes que pueden ampliar nuestra perspectiva y conocimiento de los factores que influyen en la brecha salarial de género. Si se atiende al objetivo general de esta investigación sobre cuáles son los factores que configuran la brecha salarial y cómo lo hacen, se observa que, existen varios elementos que influyen en este fenómeno e interactúan con mayor o menor intensidad, haciendo que la explicación sea diferente en cada caso. Así pues, se ha podido ver que la brecha salarial según las características personales, ha disminuido a lo largo del periodo de estudio, por lo que se puede afirmar que éstas influyen poco en la brecha salarial de género como resultado de la continua incorporación de la mujer en el mercado laboral y la gradual homogeneización de las características personales entre hombres y mujeres a lo largo de los años. Dentro de las características personales analizadas, también se han podido extraer algunos resultados interesantes que muestran la tendencia de la brecha salarial de género. En lo referente a la edad, se observa que la brecha salarial de género se incrementa con la edad, esto se puede interpretar porque la experiencia diferencial adquirida y el desarrollo profesional han sido favorables al sexo masculino. En cuanto a la antigüedad se observa que la brecha salarial se incrementa cuanto mayor es la antigüedad en la empresa. En cuanto al nivel de estudios, no se puede establecer una relación directa entre éste y la brecha salarial, porque este factor personal ha variado su influencia a lo largo del tiempo y no se puede hacer una lectura clara de los resultados. 25 Conclusiones | UCM [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] 2014/2015 En cuanto a las características laborales, la investigación llevada a cabo muestra que éstas influyen profundamente en la brecha salarial de género, a pesar de haber experimentado un descenso a lo largo del periodo analizado, porque en ellas influyen a su vez factores relacionados con la segregación laboral que se manifiesta en la existencia de trabajos feminizados, donde se concentran muchas mujeres y la infravaloración profesional, social y económica de un trabajo que requiere capacidades similares si es realizado por las mujeres. Al hablar de la ocupación los datos muestran la existencia de puestos de trabajo masculinizados y feminizados. Estos puestos feminizados poseen unos salarios bajos en comparación con los masculinizados. Otro aspecto interesante es que, las ocupaciones feminizadas están relacionadas con tareas propias del hogar. Estas tareas se caracterizan por tener un valor económico inferior porque tradicionalmente, han sido llevadas a cabo en el ámbito privado por mujeres. Esto favorece el incremento de la brecha salarial en este tipo de ocupaciones. En las ocupaciones situadas en las altas categorías de la empresa y que están mejor remunerados, la presencia de las mujeres es menor. Esto también explica una parte de la brecha salarial y la posición subordinada de la mujer respecto al hombre. A todo esto hay que sumar, que la valoración social es menor en las ocupaciones llevadas a cabo por las mujeres y esto se evidencia en los salarios. Cuando se habla de la brecha salarial según el tipo de contrato y de jornada, ésta se incrementa en el contrato indefinido y en la jornada a tiempo parcial. Esto se podría explicar como consecuencia del peso que ambos sexos tienen en estos puestos de trabajo. En el contrato indefinido la presencia de las mujeres es inferior a la de los hombres. Además, este contrato ofrece mejores condiciones laborales y esto también favorece el incremento de la brecha salarial de género. En la jornada parcial generalmente se empelan más mujeres que hombres, porque esta jornada les permite conciliar trabajo y vida familiar. En estos empleos se perciben salarios más bajos y las oportunidades profesionales son limitadas, esto influye en el aumento de la brecha salarial de género. En cuanto a las características de las empresas, su contribución en la brecha salarial de género es importante; aunque se ha podido observar un descenso general a lo largo del tiempo de la brecha salarial en cada una de las características de la empresa analizadas, también se observa que ésta se incrementa según determinados aspectos. UCM | Conclusiones 26 2014/2015 [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] La brecha salarial se incrementa en las grandes empresas (más de 50 trabajadores), esto podría deberse a que, en estas empresas se empleas más hombres que mujeres y los puestos de trabajo en estas empresas se caracterizan por tener unos niveles salariales más elevados. Por otro lado, la brecha salarial se incrementa en las empresas privadas y en aquellas que ejercen actividad en el mercado internacional. En último lugar, dentro del objetivo principal también se incluye una comparación de la brecha salarial de género en España con la de la Unión Europea. En primer lugar, se observó que la brecha salarial en la Unión Europea ha experimentado un descenso a lo largo de los años. Sin embargo, esto no es del todo cierto, porque el porcentaje del conjunto europeo no muestra las diferentes tendencias que han seguido cada uno Estados miembro. En lo que se refiere a la brecha salarial de España en comparación con la de la UE, se observan algunas variaciones a lo largo del tiempo, de manera que, en ciertos periodos, ésta se ha situado por encima de la UE y en otras por debajo. Desde 2010 hasta 2013, la brecha salarial en España se situó en valores superiores a los de la UE. Todos estos factores denominados objetivos influyen en la tendencia de la brecha salarial de género en España. Sin embargo, como se señaló anteriormente, la investigación también ha puesto de manifiesto la influencia de factores subjetivos relacionados con la posición subordinada que tradicionalmente se le ha asignado a la mujer y los estereotipos que, tanto la familia como la sociedad le han otorgado a ella. La brecha salarial de género se ha tratado desde el ámbito legislativo, jurídico y político con el objetivo de reducirla. Desde la Unión Europea y en España, la igualdad salarial entre sexos se considera un derecho fundamental de la ciudadanía, y se refleja en las diversas medidas puestas en marcha, aunque los resultados no son los deseados, lo que indica que hay que seguir trabajando en ella. Para terminar creo que todo lo dicho se puede resumir en 6 ideas importantes: La brecha salarial es la diferencia de salarios percibidos por hombres y mujeres. Desde 1995-2013 ésta se ha ido reduciendo a ritmo diferentes. Los factores objetivos que más influyen en ella son las características laborales y de la empresa. Los factores subjetivos que influyen en la brecha salarial están relacionados con aspectos tradicionalmente culturales y estructurales. Desde 2010 la brecha salarial en España se sitúa por encima de la UE. 27 Conclusiones | UCM [¿IGUALES, PERO DIFERENTES?] 2014/2015 A pesar de haberse puesto en marcha diversas medidas, aún queda mucho por hacer para conseguir la igualdad salarial entre hombres y mujeres. 10.Bibliografía Agencia Efe, 2012. España regresa a la recesión con una caída de la economía del 0,4%. El Mundo, 23 Abril. Agencia Estatal , 2012. Boletín Oficial del Estado (BOE). [En línea] Disponible en : http://www.boe.es/boe/dias/2012/02/11/pdfs/BOE-A-2012-2076.pdf [Último acceso: 6 Julio 2015]. Agencia Estatal, 1994. Boletín Oficial del Estado (BOE). [En línea] Disponible en : http://www.boe.es/boe/dias/1994/05/23/pdfs/A15805-15831.pdf [Último acceso: 6 Julio 2015]. Agencia Estatal, 2007. Boletín Oficial del Estado (BOE). [En línea] Disponible en : http://www.boe.es/buscar/doc.php?id=BOE-A-2007-6115 [Último acceso: 5 Mayo 2015]. Anker 1997 en Nicolás, C., López, M. & Riquelme, P., 2009. 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