WORLD HEALTH ORGANIZATION ORGANISATION MONDIALE DE LA SANTE Declaración de la segunda reunión de la Red Internacional de Fundaciones para la Promoción de la Salud∗ Bangkok, 4 a 6 de marzo de 2002 La Declaración Ministerial de la Quinta Conferencia Mundial de Promoción de la Salud, celebrada en México en junio de 2000, reconoce que la promoción del desarrollo sanitario y social es un deber primordial y una responsabilidad de los gobiernos, que comparten todos los demás sectores de la sociedad. La promoción de la salud es una forma eficaz en relación con el costo de mejorar la salud pública, aumentar la calidad de vida y reducir los costos económicos de la enfermedad. Se ocupa de los factores sociales, políticos, económicos, culturales y ambientales fundamentales que determinan la salud de una población, además de fortalecer las capacidades y los conocimientos de las personas para que alcancen y mantengan un buen estado de salud. Nos encontramos ahora en un momento crucial en el que los gobiernos nacionales están estudiando nuevos mecanismos para elaborar planes de acción en la esfera de la promoción de la salud después de la Conferencia de México. Del mismo modo, a medida que cobra impulso la labor en favor del Convenio Marco para la Lucha Antitabáquica, resulta evidente que uno de los requisitos indispensables para la aplicación del Convenio en el nivel local y de los países es la existencia de estructuras sostenibles para la promoción de la salud. Aunque la promoción sanitaria resulta eficaz en relación con el costo, muchos países necesitan nuevos recursos para promover la salud y buscar soluciones a sus problemas de salud prioritarios. El establecimiento de fundaciones para la promoción de la salud es una forma innovadora de movilizar nuevos recursos con este fin y puede servir para apoyar las investigaciones, la innovación y el fortalecimiento de las capacidades de promoción en el sector sanitario y en otros, como el deporte, las artes, el medio ambiente y el comercio. Las fundaciones para la promoción de la salud complementan con su labor la de los ministerios de salud y otros ministerios pertinentes. Hoy en día existen en varios países modelos eficaces de infraestructuras de promoción sanitaria (Suiza, Tailandia, Australia, Austria y Corea). La Red Internacional de Fundaciones para la Promoción de la Salud fue creada en 1999 para impulsar el funcionamiento de las fundaciones existentes en ese campo y para ayudar en la creación de nuevas fundaciones. La Red ha preparado la presente declaración para subrayar el enorme potencial de esas fundaciones, en países tanto desarrollados como en desarrollo, a la hora de facilitar nuevos recursos para hacer frente a los principales retos sanitarios de los países y sus grandes factores determinantes. Así pues, los participantes en la reunión afirman enérgicamente lo siguiente: • • • A fin de conseguir una capacidad y una infraestructura sostenibles para la promoción sanitaria, todos los países requieren, entre muchas otras cosas, una financiación suficiente. Existen modelos fiscales adaptables y de eficacia demostrada que funcionan en países tanto desarrollados como en desarrollo. Entre los mecanismos para conseguir mayor capacidad en la promoción sanitaria mediante el establecimiento de fundaciones autónomas de promoción de la salud en el nivel de los países figuran los siguientes: • • • • Un impuesto especial sobre el tabaco, como en los casos de VicHealth y Healthway en Australia antes de 1996, o el Fondo de Promoción de la Salud de Corea; La combinación de impuestos especiales sobre el tabaco y el alcohol, como en ThaiHealth; Un gravamen de los seguros de enfermedad, como en Health Promotion Switzerland; Una asignación con cargo a los presupuestos nacionales, como el Fonds Gesundes Österreich [Fundación para la Promoción de la Salud de Austria], VicHealth y Healthway después de 1996. Habida cuenta de que en muchos países y en la Asamblea Mundial de la Salud se está debatiendo el Convenio Marco para la Lucha Antitabáquica, indicamos un mecanismo para financiar la adquisición de nueva capacidad en la esfera de la promoción sanitaria, mediante la aplicación de un impuesto especial (con imputación específica de los ingresos correspondientes al impuesto) sobre un producto dañino como el tabaco. Esto tiene la ventaja de aumentar el precio de los productos del tabaco y con ello reducir el consumo. Según los datos, no parece haber ningún caso documentado de disminución de los ingresos del gobierno tras el aumento de los impuestos sobre el tabaco. Los gobiernos disponen de mucho margen para incrementar los impuestos sobre el tabaco: se trata de una medida que cuenta con la aprobación del público y de la que se beneficia toda la sociedad si sirve para financiar la labor de las fundaciones de promoción sanitaria. La imputación específica del impuesto sobre el tabaco permite, por un lado: • • • Financiar un programa nacional amplio de lucha antitabáquica; Reemplazar el perjudicial patrocinio de eventos deportivos, artísticos y culturales por empresas tabaqueras por otros patrocinios que promuevan la salud; Realizar actividades de asesoramiento para dejar de fumar, campañas de comunicación e investigaciones para aumentar la base de conocimientos que necesitan las políticas de lucha antitabáquica, así como para la promoción de la salud en general. Por otro lado, este mecanismo fiscal permite también apoyar una gama de acciones de promoción de la salud en programas como los siguientes: • • • Lucha contra el VIH/SIDA y contra las enfermedades transmisibles; Prevención del cáncer, los traumatismos y el abuso de sustancias; Promoción de una alimentación sana, el ejercicio físico y la salud mental. Los ministerios de salud pueden desempeñar un papel sumamente constructivo en el inicio y el establecimiento de fundaciones para la promoción de la salud legalmente constituidas. Esta segunda reunión de la Red Internacional de Fundaciones para la Promoción de la Salud pide a todos los países que examinen de forma detallada y positiva la posibilidad de establecer fundaciones de promoción sanitaria debidamente financiadas de conformidad con la Declaración Ministerial de México.