COLEGIO CRISTIANO DE QUILLOTA Solange Olivares Forton Profesora de Biología y Ciencias Evolución de los primates Objetivos: Caracterizar las distintas especies de primates Reconocer y explicar el proceso evolutivo de los primates Los primeros mamíferos se originaron a partir de un grupo de reptiles primitivos hace aproximadamente 200 millones de años y coexistieron con los dinosaurios durante 130 millones de años. La extinción de los dinosaurios fue seguida por una rápida radiación adaptativa de los mamíferos. La evolución de los primates comenzó cuando un grupo de pequeños mamíferos, semejantes a las musarañas, trepó a los árboles. La mayoría de las tendencias en la evolución de los primates parecen estar relacionadas con adaptaciones a la vida arbórea. Los mamíferos primitivos, tenían el tamaño de un ratón. Se ramificaron en tres linajes principales: Los monotremas (como el actual ornitorrinco) son ovíparos pero nutren con leche a la progenie luego del nacimiento. Los marsupiales (como los actuales canguros) son vivíparos, pero sus crías nacen diminutas y crecen en una bolsa Los placentarios (la mayoría de los mamíferos actuales) llamados así por su conexión nutritiva (la placenta) entre el útero y el embrión. Luego del final de la extinción Cretácica, hace 65 millones de años, época en la cual los dinosaurios fueron eliminados (eliminación repentina en la escala de tiempo geológico, existiendo varias teorías respecto a sus causas) los mamíferos, como uno de los grupos sobrevivientes, experimentaron una explosiva radiación adaptativa durante el periodo terciario. Entre los placentarios esta radiación originó: los carnívoros, los ungulados, los roedores y grupos tales como ballenas, delfines, murciélagos, los insectívoros (como las musarañas actuales) y los primates. Los mayores órdenes de los mamíferos se desarrollaron en este período, incluyendo a los Primates a los cuales pertenecemos los humanos. Nosotros somos mamíferos, placentarios y miembros del orden de los primates. Los primates se dividen generalmente en dos grupos: prosimios (lemures, loris, tarseros ) antropoides (monos, gorilas y humanos) Todos los primates, incluido el ser humano, comparten al menos una serie de características que les distinguen de otros mamíferos. Muchas de estas características fueron evolucionando para adaptarse a su vida en los árboles, entorno en el que se desarrollaron los primeros primates. COLEGIO CRISTIANO DE QUILLOTA Solange Olivares Forton Profesora de Biología y Ciencias Entre ellas cabe citar: mayor utilización de la vista frente al olfato solapamiento de campos de visión para obtener una visión estereoscópica (tridimensional) miembros inferiores y manos prensiles, capacidad de agarrar y balancearse en troncos y ramas de los árboles, uso de herramientas estructura social dientes versátiles y postura erecta capacidad de sostener y manipular objetos pequeños (utilizando dedos con uñas en lugar de garras) grandes cerebros en relación con el tamaño corporal, así como vidas sociales complejas. Entre los mamíferos, los primates pueden torcer el hueso radio por encima del cúbito, lo que les confiere gran flexibilidad, a diferencia de los mamíferos y reptiles primitivos. Los primates tienen modificaciones en el antebrazo, sus dos huesos largos son el radio (del mismo lado que el pulgar) y el cúbito. Pueden moverse en tal forma, que el radio rota por encima del cúbito permitiendo a la mano describir un semicírculo sin necesidad de mover el codo ni el brazo. Muchos primates pueden también rotar libremente el brazo en la articulación del hombro. Estas dos adaptaciones ofrecen ventajas para la vida en los árboles. Los primates tienen cinco dígitos en sus extremidades. Están capacitados para asir objetos con sus dedos en lo que se conocer como movimiento prensil. Una segunda modificación produjo uno de los dígitos oponibles (el pulgar), permitiendo que las puntas de los dedos y el pulgar se toquen. La colocación de los ojos en el frente de la cabeza incrementó la percepción de la profundidad de campo, una adaptación ventajosa para los primates arborícolas. Los cambios en los conos y bastones en los ojos adaptaron a los primates para la visión en colores así como a la visión periférica en la penumbra. La mayoría de los primates tienen en la retina una zona llamada fóvea de conos concentrados que produce imágenes nítidas. La postura erguida permitió a los primates tanto la observación de sus alrededores como la utilización de las manos para otros propósitos. Los homínidos, el linaje que lleva a los humanos, cambiaron la forma y tamaño de la pelvis, fémur y rodillas lo que permitió el bipedalismo (caminar en dos piernas). El cambio de cuadrúpedo a bípedo procedió en estadios, culminando el proceso en los humanos, que pueden caminar o correr en dos piernas. La clasificación científica de los primates refleja las relaciones evolutivas entre las diferentes especies y grupos de especies. Los primates que constituyen el suborden Prosimios —entre cuyos representantes actuales se encuentran los lémures, los loris y los tarseros, entre otras especies— fueron los primeros en evolucionar y representan la forma más antigua de primates. Otros sistemas de clasificación agrupan a los tarseros con los antropoideos, ya que comparten algunos rasgos fundamentales desde un punto de vista genético. Monos, simios y hombres —que comparten muchas características que no se encuentran en otros primates— constituyen el suborden Antropoideos. Simios y hombres forman la superfamilia Hominoideos, clasificación que pone de relieve la estrecha relación entre los individuos de estos dos grupos. El suborden Prosimios incluye a los primates menos evolucionados. Los últimos antepasados comunes de los prosimios y otros mamíferos evolucionaron hace al menos 65 millones de años. Los primeros primates evolucionaron hace unos 55 millones de años mientras que las especies fósiles similares a los lémures evolucionaron durante el eoceno (hace unos 56,5 y 35,4 millones de años). Los prosimios comparten COLEGIO CRISTIANO DE QUILLOTA Solange Olivares Forton Profesora de Biología y Ciencias todas las características básicas de los primates, aunque sus cerebros no son especialmente grandes ni complejos y presentan un sentido del olfato más fino y sensible que el de otros primates. 1. LEMURES: Viven actualmente en África y Asia tropicales y son abundantes en la isla de Madagascar. Son seres pequeños, nocturnos, arborícolas, con ciertas semejanzas a las ardillas de hocico largo, Ojos laterales y cola muy desarrollada. Aunque alguno de los dedos terminan en garras los pulgares y dedos gordos poseen uñas y están muy separados de los otros dedos. 2. LORIS: Habitan continente africano y asiático. Las coyunturas de los pies y las manos, los tobillos y las muñecas, tienen gran flexibilidad El dedo pulgar lo tienen bien opuesto a los otro cuatro, que le permiten permanecer sujeto a una rama, por largo tiempo. La cola en todos ellos es corta o se ausenta. Todos ellos son relativamente solitarios, arborícolas y nocturnos. Usualmente se mueven con lentitud entre el follaje usando las cuatro extremidades, no brincan ni saltan como muchos otros primates aunque sí pueden ser rápidos si la situación lo demanda. Se orientan por el sentido del olfato. La vocalización es bien limitada, en cada especie narrándose a tres o cuatro sonidos diferentes que se pueden describir como silbidos y gruñidos. 3. TARSARIOS: Todos ellos son naturales de las islas al sureste de Asia, desde las Filipinas hasta Sumatra Tiene el tamaño de una rata, el más grande no sobrepasa los 16 centímetros, con extremidades posteriores largas, que se desplaza a saltos. Se caracteriza por sus enormes ojos dirigidos hacia delante dotados de visión estereoscópica (capacidad de integrar 2 imágenes en 1) y por su cerebro relativamente grande. El hocico es corto, su labio superior no está adherido a la encía, sus dedos son largos, gráciles provistos de cojines adhesivos. Tarseros porque tienen el tarso (en las patas) bien desarrollados, adaptación que les facilita saltar entre las ramas de los árboles con gran facilidad. De hábitos nocturnos y reclusos, son naturales de las selvas tropicales donde la vegetación crece abundante y espesa. se alimentan de insectos, lagartos y otros animalitos pequeños. Los tarseros no pueden mover los ojos, siempre mirando hacia adelante. Compensan esta limitación al poder girar la cabeza casi los 360 grados. Peculiar también es que su forma primordial de locomoción es trepar verticalmente los troncos de los árboles y saltar de rama en rama. ANTROPOIDES Los monos aparecieron, probablemente, como una ramificación del tronco prosimio, durante la época Eocena. Comprenden a los monos del Nuevo Mundo (Platirrinos o de nariz ancha) y a los monos del Viejo Mundo (Catarrinos, o de nariz hacia abajo). Los Platirrinos evolucionaron en Sudamérica y los Catarrinos en África, durante el período Oligoceno separados como consecuencia de la ruptura de Gondwana. PLATIRRINOS CEBIDOS (MONOS DEL NUEVO COLEGIO CRISTIANO DE QUILLOTA Solange Olivares Forton Profesora de Biología y Ciencias MUNDO): Se encuentran en América central y del sur, tienen ventanas nasales muy separadas, dirigidas hacia delante y los lados, dando a la nariz aspecto aplanado. Tienen un molar bicúspide más a cada lado de ambos maxilares. Entre los cébidos superiores destacan el mono aullador, el tití o mono ardilla, el mono capuchino y el mono araña, todos viven en bosques tropicales y muestran una serie de adaptaciones. La mayor parte posee una larga cola prensil como quinta mano para agarrar objetos y colgarse de las ramas además en la punta de la cola existen una serie de rebordes de piel, como impresiones digitales para mejorar la captación. CATIRRINOS 1. CERCOPITHECUS (MONOS DEL VIEJO MUNDO): Tiene la nariz estrecha con las ventanas nasales más cerca y dirigidas hacia abajo (Catarrinos). Es un grupo grande que incluye macacos, mandriles, mangabes, babuinos, langures, cinocéfalos, colobos, papiones, entre otros. Se sientan con el cuerpo erguido sobre las nalgas protegidas por callosidades isquiáticas, algunas veces de color brillante azul o rojo. Los mandriles y babuinos se han inclinado a vivir en el suelo en lugar de árboles, caminan en cuatro patas, su hocico es prolongado y están armados de largos caninos, suelen trasladarse en grupos y colaborar para la obtención de alimento y protección de las hembras y crías, tienen colas pero no son prensiles y las usan para mantener el equilibrio. 2. HOMINOIDES Los antropomorfos, junto con los humanos (Homo sapiens) conforman el grupo de los hominoides y son parientes de los monos del Viejo Mundo. La línea de los homínidos parte de antecesor todavía desconocido. Faltante la evidencia fósil, la evidencia bioquímica y el ADN sugieren una separación de los homínidos de los hominoides algo así como 6 a 8 millones de años atrás. Los hominoides evolucionaron durante el mioceno (hace entre 23,3 y 5,2 millones de años). Entre los hominoides más antiguos conocidos se encuentra un grupo de primates cuyo nombre genérico es Proconsul. Esta especie presentaba características que sugerían una estrecha relación con un antepasado común de simios y hombres como, por ejemplo, la ausencia de cola. Los individuos de la especie Proconsul heseloni, que vivieron en los árboles de espesos bosques de África oriental hace unos 20 millones de años, eran ágiles saltadores y presentaban características como una columna flexible y un tórax estrecho, típicas de los monos, aunque también tenían una amplia movilidad en caderas y dedo pulgar, típicas de simios y hombres. Hace unos 23 o 22 millones de años se desarrollaron en África especies de grandes simios. Hace 15 millones de años algunas de estas especies migraron a Asia y Europa a través de un istmo de tierra que se había formado entre los continentes afroárabes y eurasiáticos, anteriormente separados entre sí. Después del Proconsul, hace unos 18 millones de años evolucionó en Arabia y África el género de simios Afropithecus para posteriormente diversificarse en varias especies. Un poco más tarde, evolucionaron otros tres géneros de simios: hace unos 15 millones de años el Keniapithecus de África y el género similar Griphopithecus de Asia occidental y hace unos 12 millones de años el Dryopithecus de Europa. Los científicos todavía no han podido determinar cuál de estos grupos de simios fue el que dio lugar al antepasado común de los simios africanos modernos y los hombres. El grupo Homínidos está constituido por el ser humano, aunque algunos científicos también incluyen en él a los grandes simios. Tradicionalmente el ser humano era el único que pertenecía a la familia de los Homínidos (Hominidae). Actualmente, sin embargo, estudios genéticos apoyan la clasificación conjunta de grandes simios y hombres. Los monos africanos —chimpancés y gorilas— se clasificarían junto con el hombre en un nivel inferior o subfamilia. De acuerdo con este razonamiento, la rama evolutiva de los simios asiáticos que conduce a los orangutanes, que se separaron de las demás ramas homínidas hace aproximadamente 13 millones de años, pertenece a la subfamilia Ponginae, mientras que los representantes de las ramas de simios africanos y de hombres pertenecen a la subfamilia de los Homininos (Homininae). 2.a) ANTROPOMORFOS Hilobátidos (GIBÓN): Todos los gibones que existen hoy en día son naturales del Asia, su distribución se extiende desde la India hasta las islas de Borneo, Sumatra y Java. Los científicos estiman que provienen de una misma rama en la evolución que radió, o separó, de la de los grandes simios hace unos 22 millones de años. El aspecto físico de los gibones se asemeja mucho al de los monos pero no tiene cola. COLEGIO CRISTIANO DE QUILLOTA Solange Olivares Forton Profesora de Biología y Ciencias Gracias a sus largos brazos, estos primates son sumamente ágiles colgando y brincando entre las ramas de los árboles, con ellas alcanzan el suelo al caminar en posición erguida, su forma de locomoción se denomina braquiante ya que se balancean por las ramas de los árboles lo que permite salvar distancias de hasta 13 metros Suelen ser herbívoros pero a veces comen insectos, huevos e incluso aves, viven en parejas con sus crías y defendiendo sus territorios. Póngidos (ORANGUTAN): El Orangután (Pongo pygmaeus) es natural del Asia. Hoy en día sólo lo encontramos en un área relativamente reducida al noroeste de Sumatra y en regiones aisladas en la isla de Borneo. Hace unos 10 mil años su distribución comprendía toda la extensión geográfica de estas dos islas, toda Indochina extendiéndose su distribución hacia el norte hasta el centro de China, habita las selvas húmedas. De los grandes simios, el Orangután es el más arborícola. Las hembras y los jóvenes pasan la mayor parte del día en los árboles. Aunque los machos adultos cuando ya logran cierto peso prefieren permanecer en la tierra o no muy alto entre las ramas debido a su peso (hasta 175 Kg). Son los más solitarios. Los machos se mantienen solos y las hembras no forman grupos entre ellas. Normalmente las madres tienen un sólo hijo en cada embarazo, aunque es posible que sean dos. El período de gestación toma de 250 a 270 días. Los recién nacidos pesan de 0.9 a 1.8 kg. Tienen un hijo cada siete u ocho años. Las hembras logran la madurez de los 7 a 12 años, los machos son adultos a los 15 años. En la naturaleza se le estima una longevidad de unos 50, tal vez 60 años La alimentación del orangután consiste principalmente de frutas, brotes vegetales y hojas. Ocasionalmente es posible que atrape y se coma algún invertebrado, huevos de aves o un vertebrado pequeño. A esta especie se le considera en peligro de extinción. Gorilla (GORILA): El Gorila es natural del continente africano. Su distribución comprende al menos tres regiones aisladas en África Ecuatorial. Una de estas regiones, donde habita el Gorila Occidental (Gorilla gorilla), es al oeste del continente en los bosques costeros de tierras bajas; al sureste de Nigeria, Camerún, Guinea Ecuatorial, Gabón y al norte del Congo. Otra población, no tan numerosa, se encuentra al este del continente; en los bosques de tierras bajas de la República Democrática del Congo. El tercer grupo, que se estima no llegue a los mil gorilas, es constituido por los gorilas montañeses. Estos últimos viven al suroeste de Uganda y norte de Ruanda. Estos dos grupos, por el momento, se consideran de la especie del Gorila Oriental (Gorilla beringei). El gorila es de hábitos diurnos y terrestre, debido a que sus pies están mejor adaptados para andar que para balancearse, sus extremidades inferiores son cortas y los brazos con manos cortas y anchas, anda con toda la planta del pie apoyada con dedos extendidos; pasa la mayor parte del día comiendo y descansando. Tanto los machos como las hembras preparan un “nido” o cama donde duermen. La unidad familiar consiste de un macho dominante, es posible que hayan uno o dos machos adultos subordinados, y una o varias hembras y sus hijos. Usualmente el macho dominante es un adulto que ya tiene la espalda plateada (silver back). Algunos machos viven solitarios. Las madres tienen un hijo en cada embarazo. Es posible que sean dos pero en la naturaleza usualmente sólo uno sobrevive. Normalmente las madres sólo tienen un hijo cada cinco o seis años. La menstruación es cada 28 días y son capaces de procrear durante todo el año. El período de gestación toma unos ocho meses, aproximadamente unos 250 días. Al nacer el pequeñuelo pesa unos dos kilogramos. Las hembras alcanzan la madurez a los 7 u 8 años, los machos son adultos a los 12 años. En la naturaleza a los gorilas se les estima una longevidad de unos 40 años. La alimentación del gorila consiste de frutas y hojas. En algunas regiones demuestran preferencias por las frutas, en otros lugares por las hojas. Los gorilas machos llegan a pesar entre 120 y 182 kilogramos, alcanzando una altura de 1.6 a 2 metros. Las hembras son más pequeñas, las más grandes pesan unos 90 kilogramos. Existe diferencia en el tamaño y el pelaje entre las dos especies y aun entre las subespecies. El esqueleto es más masivo que el de los seres humanos. COLEGIO CRISTIANO DE QUILLOTA Solange Olivares Forton Profesora de Biología y Ciencias Las extremidades superiores son más largas que las extremidades inferiores. El gorila tiene la parte posterior del pie, el calcañal, adaptado para caminar en dos pies, locomoción bípeda. En su cabeza presenta una cresta ósea donde se insertan poderosos músculos cervicales y mandibulares, la marcha usual es en cuatro patas pero se yerguen al momento del ataque. A estas especies, todas las poblaciones, se les considera en peligro de extinción Pan (CHIMPANCÉ): El Chimpancé (Pan troglodytes) es natural del continente africano. Su distribución comprende África ecuatorial desde Guinea hasta Tanzania. Este primate demuestra preferencia por las selvas lluviosas, los bosques montañosos y las sabanas. El Chimpancé pasa gran parte del tiempo en el suelo Construyen un “nido” o cama de hojas y ramas. La locomoción y posturas son cuadrúpeda y bípeda. Se mantienen en grupos o comunidades. Las hembras usualmente sólo tienen un sólo hijo en cada embarazo. El período de gestación toma unos 230 días. Cuando nacen, los pequeños pesan alrededor de 1.8 kg. Las hembras adultas normalmente tienen un hijo cada cinco o seis años. Las hembras logran la madurez a los 8 años, los machos a los 10 años. Se le estima una longevidad en la naturaleza de unos 50 años. La alimentación del chimpancé consiste de frutas, siendo complementada con brotes vegetales y hojas. También come hormigas y otros invertebrados, huevos de aves y miel. Caza y se come a los monos, otros primates inferiores y pequeños mamíferos. Un chimpancé macho puede alcanzar un peso máximo de unos 50 Kg, las hembras logran hasta 39 kg. Caminan sobre los nudillos los labios no están unidos a la encía con lo que pueden realizar muchas muecas y expresiones faciales. A esta especie se le considera en peligro de extinción. 2.b) HOMINIDOS El hombre es más a fin al chimpancé y gorila que otros primates, pero difieren en muchos caracteres que forman una familia aparte, Hominidae. Dentro de estas adaptaciones es posible nombrar la existencia terrestre más que la arbórea. Sin embargo, el hombre moderno difiere de los simios en muchos aspectos significativos. Así, por ejemplo, a pesar de la gran inteligencia de éstos, el ser humano tiene un cerebro mucho mayor y más complejo, presenta una capacidad intelectual única y elabora formas de cultura y comunicación. Además, sólo él anda habitualmente erguido, puede manipular con precisión objetos muy pequeños y tiene una estructura de garganta que le permite hablar. COLEGIO CRISTIANO DE QUILLOTA Solange Olivares Forton Profesora de Biología y Ciencias