ERRADICACIÓN DEL TRABAJO INFANITL: UN CAMINO PARA LA CONSTRUCCIÓN DEL SUJETO DE DERECHOS María de los Ángeles Páez Salvador Asesora para Trabajo Infantil Ministerio de Trabajo y Empleo Sumario Marco legal de referencia Consideraciones conceptuales básicas para trabajo infantil Origen del trabajo infantil Causas del Trabajo Infantil Consecuencias del Trabajo Infantil en el desarrollo integral de los niños, niñas y adolescentes Erradicación del Trabajo Infantil Procedimiento administrativo de protección de derechos para la erradicación del trabajo infantil Resultados de la Gestión del Ministerio de Trabajo y Empleo en la Erradicación del Trabajo Infantil. Proyectos en Marcha Desafíos Marco legal de referencia • Convención sobre los derechos del Niño – 1990. Establece los principios de la doctrina de protección integral que garantizan el conjunto de derechos humanos de niñez y adolescencia, partiendo del reconocimiento del niño, niña o adolescente como sujeto de derechos; reconoce a la familia como espacio principal de desarrollo del niño, niña o adolescente y asigna la corresponsabilidad de la Sociedad y del Estado en la protección integral y desarrollo de la infancia. Establece además los principios de prioridad absoluta, ejercicio progresivo de derechos y del interés superior del niño, como criterio jurídico para la toma de decisiones respecto de un hecho o situación por la que atraviesa un niño, niña o adolescente tomando en cuenta la opinión del niño. En lo pertinente al trabajo infantil, la Convención reconoce en el Art. 32 la obligatoriedad de los estados de proteger al niño contra la explotación económica y contra el desempeño de cualquier trabajo que pueda ser peligroso o entorpecer su educación, o que sea nocivo para su salud o para su desarrollo físico, mental, espiritual moral o social. • Convenio Nº 138 suscrito con OIT, para control de la edad mínima para el Trabajo, los 15 años, su adoptado en 1973 y ratificada por el Ecuador el 19 de junio de 1976. Aplicable a todos los sectores de la economía, determina la edad mínima para el trabajo por relación de dependencia p o por cuenta propia en los 15 años. • Convenio Nº182 suscrito con OIT, que determina las peores formas de Trabajo Infantil. Se lo adoptó en 1999 y entre y entrada en vigor para el Ecuador desde 19 de noviembre del 2000 reconoce como las peores formas de trabajo infantil a : a) todas las formas de esclavitud o las prácticas análogas a la esclavitud, como la venta y el tráfico de niños, la servidumbre por deudas y la condición de siervo, y el trabajo forzoso u obligatorio, incluido el reclutamiento forzoso u obligatorio de niños para utilizarlos en conflictos armados; b) la utilización, el reclutamiento o la oferta de niños para la prostitución, la producción de pornografía o actuaciones pornográficas; c) la utilización, el reclutamiento o la oferta de niños para la realización de actividades ilícitas, en particular la producción y el tráfico de estupefacientes, tal como se definen en los tratados internacionales pertinentes, y d) el trabajo que, por su naturaleza o por las condiciones en que se lleva a cabo, es probable que dañe la salud, la seguridad o la moralidad de los niños. Este convenio exhorta a los estados partes a adoptar de manera urgente, medidas inmediatas para la prohibición y abolición de las peores formas de trabajo infantil. • Constitución de la República del Ecuador 2008, Art. 46 reconoce la “protección especial contra cualquier tipo de explotación laboral o económica. Se prohíbe el trabajo de menores de quince años, y se implementarán políticas de erradicación progresiva del trabajo infantil. El trabajo de los adolescentes y los adolescentes será excepcional, y no podrá conculcar su derecho a la educación ni realizarse en situaciones nocivas o peligrosas para su salud o su desarrollo personal. Se respetará, reconocerá y respaldará su trabajo y las demás actividades siempre que no atenten a su formación y a su desarrollo integral” • Código de la Niñez y la Adolescencia 2004, Recoge los principios de la doctrina de protección integral, consagra todos los derechos humanos de los niños, niñas y adolescentes , entre ellos la protección contra toda forma de trabajo infantil, establece los 15 años como edad mínima para el trabajo; especifica los trabajos prohibidos y peligrosos; establece el procedimiento administrativo para protección de derechos, las medidas de protección para este tipo de violación de derechos, establece las sanciones por trabajo infantil; diseña el Sistema Nacional Descentralizado de Protección Integral de Niñez y Adolescencia que garantiza procesos de restitución de derechos; establece los mecanismos de registro y autorización del trabajo adolescente. • Código de Trabajo, establece la edad mínima para el trabajo; prohíbe el trabajo infantil en las peores formas de trabajo infantil. Establece la jornada laboral de 6 horas diarias, máximo 5 días a la semana, descanso los fines de semana y feriados, el ejercicio a la educación; establece las actividades permitidas tomando en cuenta consideraciones de seguridad y salud laborales, la obligatoriedad de un contrato de trabajo y de la igualdad de salario de un adolescente con un adulto, a más del cumplimiento de todos los beneficios de ley y la necesaria afiliación al Seguro Social. Establece además las sanciones por trabajo infantil o incumplimiento de las obligaciones patronales. Consideraciones conceptuales básicas para trabajo infantil Para abordar el tema de trabajo infantil es necesario partir de una conceptualización básica: Entendemos como trabajo infantil a toda actividad sistemática, remunerada o no, realizada por niños, niñas y adolescentes, que forzados por personas o circunstancias, tienden a solventar su autoabastecimiento o al sostenimiento familiar, lo que impide su desarrollo físico, mental e intelectual y el ejercicio pleno de todos sus derechos. Cuando un niño, niña o adolescente trabaja, automáticamente pierde su condición de niño/a, merecedor /a de protección y satisfacción de todas sus necesidades por los adultos y adultas. Se convierte de forma inmediata en adulto y su propio sostenedor e inclusive en el sostenedor de su familia. Esta condición de autosuficiencia queda registrada a nivel psicológico como un trauma profundo, expresado en un dolor emocional muy fuerte y en sentimientos de baja autoestima, depresión severa, soledad, vergüenza, venganza, agresividad, rabia, resentimiento, abandono, impotencia; emociones tan fuertes que al surgir en la niñez definen la vida futura de una persona. A este trauma que deja de por sí el trabajo infantil, se presentan traumas asociados originados por la situación de violencia y de degradación humana en la que muchas de las veces realizan sus actividades laborales. Muchos niños y niñas son víctimas de redes de trata de personas, viven en condición de esclavos, están solos, sufren malos tratos, muchas veces son utilizados como objetos sexuales o son comercializados con este fin; reciben insultos permanentes, son ignorados y silenciados. Son tratados como cosas. El Trabajo Infantil es uno de los peores hechos de violación de derechos de niñez y adolescencia, tan igual como por ejemplo, la presencia de niños, niñas y adolescentes en conflictos armados o el tráfico de órganos. Las actividades laborales, principalmente las actividades nocivas y peligrosas o denominadas también por la OIT como “las peores formas de trabajo infantil” entre ellas, minas, basurales, camales, canteras, prostíbulos, plantaciones agrícolas, ladrilleras, lugares de juegos de azar, son aquellas que conducen a la muerte a millones de niños en el mundo, por el severo deterioro que ocasionan a la integridad personal. Por ejemplo, cuando un niño, una niña o un adolescente trabaja en un basural, recuperando objetos que puedan ser reciclados, están expuestos a sufrir un accidente o contraer todas las enfermedades existentes, a más de a nivel psicológico, sentirse tan igual a la basura que recolecta, a ello se suma que tiene que dejar sus estudios para concentrar sus pocas energías en esta actividad. Para ubicarnos en otro escenario, por ejemplo, los niños, niñas y adolescentes que trabajan en un camal, todo el tiempo están en contacto con las formas de dar muerte a un ser vivo y con el dolor que ello ocasiona. Los impactos psicológicos son enormes y podrían inclusive degenerar en distorsiones de su personalidad a futuro. Por consiguiente, el trabajo infantil es un hecho que destruye a un ser humano, lo enajena de su condición de sujeto de derechos y lo conduce a un escenario de anulación personal y muchas veces, de muerte. Origen del trabajo infantil Para ubicar el origen del trabajo infantil, necesariamente tenemos que remontarnos a las sociedades que fundamentaron su economía en formas crueles de explotación de la mano de obra. En el territorio Ecuatoriano ubicaremos a la época colonial como el momento histórico en el cual se posiciona y legitimiza la presencia de los niños y niñas actividades productivas. Una de las primeras formas de explotación era el peonaje por deudas, que era un privilegio propio del terrateniente mediante el cual podía retener a los peones y obligarles a trabajar gratuitamente en sus haciendas hasta la completa cancelación de las deudas que hubiesen contraído. Estos empeños, pagaderos con el trabajo futuro, eran, además, transmisibles de padres a hijos, lo que de hecho los convertía en una forma de servidumbre. El peonaje se convirtió en constante fuente de abusos ya que, por lo general, era el propio hacendado quien fijaba el valor del trabajoi. Además en las haciendas, apareció la figura del Huasicama, palabra quichua compuesta por dos vocablos: huasi: casa y cama: cuidar. El huasicama era el mayordomo de la hacienda, encargado de cuidar los bienes del terrateniente. Tenía vivienda para él y su familia quien debía ayudarle en su trabajo. Su esposa e hijos se incorporaban a las actividades domésticas de la familia terrateniente, por cuyo trabajo no percibían en absoluto ninguna cantidad, únicamente la comida y la vivienda, que por lo general era muy pequeña y de mala calidad, provocando el hacinamiento. Todo niño que nacía en aquella época, heredaba una deuda. Aprendía a caminar y a hablar en las chacras; en la cosecha, en el obraje, en las mitas o en la cocina de la hacienda. Así también aprendía el oficio desde muy pequeño, como algo natural y sus padres así lo asumían como normal y natural, pues ellos eran parte de esta misma historia. Para tener una referencia real de lo que sucedía por ejemplo en el siglo XIX, citaré a Hassaurek Friedrich, un extranjero que visitó Quito y en las memorias de su viaje relata lo que observó respecto de la servidumbre en Quito: “ …otra clase de sirvientes que se los puede encontrar en toda familia quiteña, incluso en los más pobres. Estoy hablando de las longas o guambras, como se los llama generalmente. Son chicos y chicos indios, cholos, negros o mulatos, desde cinco a ocho y doce años de edad, que los tiene en parte como compañeros de juego y como sirvientes de los niños, en parte también para que hagan tantas cosas cosillas como su edad lo permita. Se los tiene en la casa con el propósito de educarlos para sirvientes del hogar cuando lleguen a edad apropiada. Cuando se los cría en la familia desde muy niños se los llama guiñazhiscas. Esta palabra y el término guambra son de origen quichua; …los padres de estas longas o guambras tienen la costumbre de venderlas a precios irrisorios… Recuerdo una ocasión en la que la madre, una india, me ofreció una de sus hijas si le daba dinero para comprar un puerco….”ii El trabajo infantil en la época colonial era un fenómeno normal que servía de aprendizaje para las actividades que a futuro desarrollarían los adultos. Así también lo era el maltrato, el abuso, las violaciones, como por ejemplo el derecho de pernada que era aquel derecho que tenía el patrón de ser el primer hombre en la vida sexual de la india que contraía matrimonio, des luego antes que pasara la primera noche con su esposo. Muchas de estas formas de explotación se han superado en la actualidad, no así el trabajo infantil, que permanece como un rezago histórico de las formas de explotación colonial por la valoración positiva que de él existe como un proceso necesario para el desarrollo y adquisición de aprendizajes y destrezas para el trabajo futuro en el mundo adulto e inclusive al verlo como un hecho “normal” e inclusive un fenómeno “cultural”. Causas del Trabajo Infantil El factor económico, es el principal desencadenante para el trabajo infantil, en familias que viven en situaciones de pobreza extrema y que buscan reforzar los ingresos percibidos por los adultos con los aportes económicos que deja el trabajo de sus hijos. Sin embargo muy de la mano con esta causa, aparentemente incuestionable, está la valoración positiva del trabajo infantil como una actividad formadora del ser humano. El miedo que los niños o las niñas se pierdan en el mundo de la delincuencia, cuando no están vinculados al sistema educativo o cuando no tienen actividades en qué ocupar su tiempo libre, o el hecho que aprendan a ser responsables y a ganar su propio dinero para satisfacer sus caprichos de consumo de moda, son las razones por las cuales los progenitores, aún sin ser pobres, conducen a sus hijos al trabajo infantil. Inclusive dentro de las causas del trabajo infantil, se puede también mencionar en cierto tipo de actividades económicas, el afán acumulación de riqueza, a través del ahorro del pago de mano de obra y la utilización de la mano de obra familiar. Por ejemplo en actividades como la minería, en donde el azar tiene es un factor predominante, el descubrimiento de una beta de oro, por ejemplo, puede conducir a que un trabajador incorpore a sus personas de confianza en la extracción de esta beta; incluidos entre ellos, niños de todas las edades, sin tomar en cuenta las graves repercusiones para la salud física y psicológica que deja esta actividad, como la contaminación con mercurio o cianuro, metales pesados utilizados en el procesamiento manual de grandes moles de cuarzo en los cuales se encuentra incrustado el oro y la sensación de claustrofobia que deja el permanecer al interior de una mina por largo tiempo y casi sin oxígeno. La costumbre y la repetición histórica del trabajo infantil como una práctica de servidumbre o trabajo forzoso, reconocidas socialmente como normales, son factores que forman parte de esa cosmovisión que sostiene que el trabajo infantil es formador del ser humano, que hace a una persona responsable de su vida desde su niñez y que la hace madurar más rápido. Un niño o niña que trabaja pierde su inocencia, madura de forma temprana, al trabajar, este niño o niña se adentra en un mundo voraz que le obliga a desarrollar capacidades y destrezas de sobrevivencia que le alejan cada vez más de su condición de niño o niña – merecedor o merecedora de protección y cuidado. Una causa que merece una atención especial constituye las prácticas docentes del sistema educativo ecuatoriano, que dan prioridad al desarrollo del conocimiento y de destrezas para el aprendizaje, dentro de modalidades verticales e impositivas de conocimiento que excluyen del proceso de aprendizaje, a niños, niñas o adolescentes que atraviesan por situaciones personales o familiares especiales y que requieren de una educación personalizada o simplemente demandan de afecto para poder continuar con sus estudios. El fracaso escolar es otra de las causas que expulsan mano de obra infantil a las actividades laborales. La destrucción familiar, las migraciones, el abandono, son situaciones que convocan a los niños, niñas y adolecentes a trabajar y ser sus propios sostenedores. El desconocimiento de la ley e inclusive la búsqueda de evasión de compromisos legales de contratación de mano de obra, es otra de las causas para que ese hecho de violación de derechos se produzca de manera permanente en la sociedad ecuatoriana. Como se puede observar este es un fenómeno multicausal y por consiguiente sus consecuencias son también diversas y la intervención para su solución demanda un enfoque integral e interdisciplinario. Consecuencias del Trabajo Infantil en el desarrollo integral de los niños, niñas y adolescentes A nivel físico, las consecuencias del trabajo infantil son diversas y varían según el tipo de actividad desarrollada. En términos generales se puede identificar alteraciones en el normal crecimiento, deformaciones corporales, intoxicaciones por exposición a sustancias o gases tóxicos; envenamientos, mutilaciones, pérdidas de sensibilidad o deterioro en los sentidos; degeneración de órganos, alteraciones genéticas, malformaciones en los embarazos futuros, insomnio, cansancio extremo, entre otras. A nivel psicológico el trabajo infantil queda registrado emocionalmente como un trauma profundo, difícilmente de superar que por lo general está asociado con otros traumas derivados del abandono y situaciones de violencia presentes en el trabajo infantil A nivel del desarrollo social del ser humano, los niños y niñas que trabajan y estudian, presentan bajo rendimiento escolar o no estudian. Sus posibilidades futuras de acceder a actividades laborales remuneradas que les asegure condiciones de vida dignas para ellos/as o sus familias, son mínimas o inexistentes. La nula o deficiente capacitación de su mano de obra, es también una condena para vivir en condiciones de pobreza y seguir reproduciendo esta cadena de explotación humana. Qué hacer??? Erradicación del Trabajo Infantil “Los Niños, niñas y adolescentes, tienen derecho a que el Estado, la Sociedad y la familia les protejan contra la explotación laboral y económica y cualquier forma de esclavitud, servidumbre, trabajo forzoso o nocivo para su salud, su desarrollo físico, mental, espiritual, moral o social, o cualquiera que pueda entorpecer el ejercicio de su derecho a la educación” Art. 81 CNA Para asegurar el ejercicio pleno de este derecho, consagrado en el Código de la Niñez y Adolescencia, el Estado Ecuatoriano a través del Ministerio de Trabajo y Empleo, ha emitido como política pública la Erradicación Progresiva del Trabajo Infantil, principalmente aquel que se realiza en las formas nocivas y peligrosas, en los ámbitos de la prevención, control, erradicación y monitoreo del trabajo infantil. Para ejecutar esta política ha creado el Sistema Nacional de Inspección de Trabajo Infantil, integrado por 30 autoridades provinciales, especializadas en esta área, bastamente capacitados en derechos de niñez y adolescencia, facultados para hacer cumplir la ley a través de la implementación de un procedimiento administrativo legalmente reconocido, para la detección, registro y sanción, así como para la garantía de la restitución integral de los derechos de los niños, niñas y adolecentes afectados por el trabajo infantil. El Ministerio de Trabajo y Empleo tiene competencia de intervención en las actividades laborales que se realizan bajo relación de dependencia, interviniendo para la Erradicación del trabajo Infantil o para la Regularización del Trabajo Adolescente excepcional, en actividades permitidas. Procedimiento administrativo de protección de derechos para la erradicación del trabajo infantil Es necesario partir de la consideración que el trabajo infantil, es un fenómeno oculto, difícil de detectar, por lo que es necesario realizar estudios especializados en cada una de las actividades productivas para identificar la presencia y magnitud del trabajo infantil y tener información referencial para la intervención. Sin embargo, no es suficiente. Se requiere además una investigación in situ, para encontrar niños, niñas y adolescentes en situación de trabajo infantil. 1. Identificación de Niñas, niños y adolescentes en situación de trabajo infantil. Esta actividad puede efectuarse por dos vías: por denuncia o de oficio, que es cuando el Inspector/a actúa ante la presunción o difusión de la presunta situación de trabajo infantil y visita la empresa o unidad productiva (UP) para a través de la observación identificar niños, niñas o adolescentes trabajando. Esta actividad tiene límites en su aplicación y eficiencia, debido a que los patronos muchas de las veces conocen que están infringiendo la ley y proceden a ocultar a los niños, niñas y adolescentes, Demanda por consiguiente de una estrategia de intervención eficiente y con un equipo de intervención que asegure la identificación de los niños en situación de trabajo infantil, proceda con su registro y asegure el proceso de restitución de todos sus derechos. En el Ecuador avanzamos hacia el fortalecimiento de esta metodología de intervención. 2.- Inspección de Campo El Inspector o Inspectora de Trabajo visita una UP y en ella detecta en primer lugar la presencia de niños, niñas o adolescentes en actividades laborales, observa todo el proceso productivo, tomando en cuenta las condiciones de seguridad y salud en las que se desarrolla. Posteriormente procede al levantamiento de información, de forma prioritaria de los niños, niñas y adolescentes encontrados, llevando un registro individualizado de cada uno de ellos, recopilando datos sobre su identidad, domicilio, escolaridad, salud, etc, de manera de poder ubicarlo fácilmente. Acto seguido se recopila información sobre las condiciones laborales de todos los trabajadores incluidos los adultos, se revisa la documentación legal reglamentaria y en caso de transgresiones a la ley y haber encontrado trabajo infantil, se convoca a una Audiencia. El Inspector o Inspectora de Trabajo Infantil, si bien tiene focalizada su intervención en trabajo infantil, está legalmente facultado para realizar inspecciones integrales, lo cual significa que puede conocer cualquier tipo de irregularidad que pudiera presentarse con trabajadores adultos, en los ámbitos del cumplimiento de los derechos laborales, condiciones de seguridad y salud de la empresa, cumplimiento de normativa legal para discapacidades; cumplimiento de derechos de género, etc. Es necesario puntualizar que la observancia del cumplimiento de todos los derechos laborales de un trabajador/a adulto/a, le asegura condiciones laborales dignas y por consiguiente es otro de los mecanismos desde los cuales se actúa para la prevención y erradicación del trabajo infantil, especialmente en el caso de las mujeres trabajadoras con quienes el cumplimiento de sus derechos por maternidad y lactancia, la protección para el manejo de sustancias químicas o tóxica o peso de las carga que pueden soportar, están vinculados directamente con su capacidad reproductiva y el respecto de los derechos de sus hijos e hijas. 3.- Medidas de Protección Al identificar niños, niñas o adolecentes menores de 15 años en situación de trabajo infantil e inclusive en caso de detectar la presencia de adolescentes mayores de 15 años, en actividades prohibidas y peligrosas, es menester proceder de manera inmediata y urgente a la disposición de Medidas de Protección. El Inspector o Inspectora de Trabajo están facultados a actuar en base al mandato del Art. 94 num. 1 y 2 del Código de la Niñez y Adolescencia (CNA), por consiguiente podrán disponer: “1. La orden de separar al niño, niña o adolescente de la actividad laboral; 2. La inserción del niño, niña o adolescente y/o su familia, en un programa de protección; y, Se adoptarán las providencias necesarias para que la aplicación de estas medidas no afecte los derechos y garantías de los niños, niñas y adolescentes, más allá de las restricciones inherentes a cada una de ellas; y para asegurar el sustento diario del niño, niña o adolescente, de una manera compatible con su derecho a una vida digna” Art 94 CNA. En caso de presumir o verificar la presencia de algún otro tipo de violación de derechos, como por ejemplo, maltrato, abuso, violación, trata de personas, explotación sexual, esclavitud, los Inspectores e Inspectoras de Trabajo, en cumplimiento de los art 17 y 72 del CNA, ponen en conocimiento de las autoridades competentes estas situaciones, a fin de obtener la asignación de otras medidas de protección, abarcativas hacia la protección integral o iniciar los procedimientos legales correspondientes. Esta acción se cumple mediante la emisión de providencias. Los casos se remiten a las Juntas Cantonales de Protección de Derechos o en su ausencia a los Juzgados de Niñez y Adolescencia; además a la Fiscalía, a los Centros Especializados en Protección Especial y a otras entidades prestadoras de servicios educativos o de salud. Este paso es fundamental en la garantía del conjunto de derechos de niñez y adolescencia, pues el que viabiliza el proceso de restitución de derechos. Requiere por consiguiente del funcionamiento de instituciones locales prestadoras de servicios de niñez y adolescencia y de protocolos establecidos de atención a población en situaciones de crisis. Este camino se ve fortalecido con las actividades de sensibilización familiar, destinadas a hacer conciencia en las familias sobre los efectos nocivos del trabajo infantil para el desarrollo integral de sus hijos e hijas y garanticen el éxito del proceso de restitución de derechos, a través de la permanencia de sus hijos e hijas en el sistema educativo, su adecuado estado de salud física y emocional; el desarrollo de actividades recreativas, el respeto a la opinión y participación de los niños y niñas en la toma de decisiones que tienen que ver con su vida, así como también el respeto a su tiempo de descanso, entre otros derechos. El proceso de restitución de derechos es muy importante porque asegura que el Retiro de los Niños, Niñas y Adolescentes del trabajo infantil pueda sostenerse y no sea simplemente un cambio de actividad productiva. Así también es un proceso complejo y difícil, pues intervienen muchos actores. Su éxito radica en la capacidad institucional, en este caso del Ministerio de Trabajo y Empleo, de monitorear su cumplimiento. 4.- Audiencia. Es una reunión convocada por el Inspector de Trabajo, para que las partes puedan expresar sus alegatos, frente al incumplimiento de la ley por parte de la empresa, ya sea por la presencia de trabajo infantil o por incumplimiento de las obligaciones patronales con los trabajadores adultos; o por transgredir la normativa respecto de las condiciones de seguridad y salud o cualquier otro mandato en materia laboral. Las Audiencias se realizan en la Inspectoría de Trabajo de cada provincia ante la Autoridad que previno el conocimiento del caso. Las partes exponen sus alegatos y presentan la documentación solicitada por la autoridad, por ejemplo, Reglamento Interno, aportes al IESS; Reglamento de Seguridad y Salud, nómina de trabajadores, etc. En el caso de trabajo infantil el Inspector requerirá documentación relativa al cumplimiento del ejercicio de su derecho a la educación, certificación del estado de salud, documentos de identificación, contrato de trabajo legalizado, afiliación al IESS, pago de sueldo conforme a la ley (igual a un adulto por el mismo tipo de trabajo); registro de horario de trabajo (6 horas diarias por 5 días a la semana), descanso de sábados y domingos, pago de sobresueldos, bonificaciones, vacaciones. En la Audiencia el niño, niña o adolescente identificado en situación de trabajo infantil es escuchado únicamente por el Inspector / Inspectora de Trabajo en absoluta reserva y confidencialidad. Esta es una oportunidad para verificar la violación o no de derechos laborales y conocer la magnitud en que esta situación se ha producido. 5.- Resolución Una vez que el Inspector o Inspectora de Trabajo dispone de todos los fundamentos de hecho y de derecho respecto de la presencia de trabajo infantil o de cualquier otro tipo de violación de derechos a nivel laboral, procede a elaborar el proyecto de resolución con las sanciones previstas por el Código de la Niñez y Adolescencia, para trabajo infantil bajo relación de dependencia, las mismas que están consagradas en el Art. 95 num. 3 y 4 “Multa de doscientos a mil dólares, si se trata del empleador o cualquier persona que se beneficie directa o indirectamente del trabajo del niño, niña o adolescente; y, Clausura del establecimiento donde se realiza el trabajo, en caso de reincidencia” Art. 95 CNA Así también toma en cuenta el conjunto de sanciones previstas en Código de Trabajo en materia laboral. Finalmente esta resolución emitida por el Director Regional del Trabajo, autoridad competente y su cumplimiento es obligatorio, así como el incumplimiento es sancionado conforme lo previsto por el Código de Trabajo. 6.- Cobro de Multas Las multas impuestas son consignadas en el Ministerio de Trabajo y Empleo, institución que a su vez realiza el reembolso respectivo de este valor al niño, niña o adolescente que estuvo en situación de trabajo infantil, en cumplimiento con el Mandato del Código del Trabajo. 7.- Seguimiento y Monitoreo. Esta es la última fase del Procedimiento Administrativo de Protección de Derechos para Erradicación del Trabajo Infantil. Consiste en volver a visitar de forma sorpresiva la empresa inspeccionada a fin de verificar la ausencia de trabajo infantil y el cumplimiento de las sanciones impuestas. Esta actividad se realiza además con campañas de sensibilización a los empresarios y trabajadores sobre los efectos nocivos del trabajo infantil en el desarrollo integral de los niños, niñas y adolescentes, procurando con ello garantizar el cumplimiento de la ley y el sostenimiento de la erradicación del trabajo infantil. Así también se realiza un seguimiento al Niño, niña o adolescente retirado del trabajo infantil y a su familia, a fin de verificar la vigencia del proceso de restitución de derechos y el funcionamiento del sistema local de prestación de servicios en los casos remitidos. PROCEDIMIENTO ADMINISTRATIVO DE PROTECCIÓN DE DERECHOS PARA LA ERRADICACIÓN DEL TRABAJO INFANITL bajo relación de dependencia 1. Identificar Zonas con Posible TI 2. Inspección De Campo Recepción de Denuncias Audiencias Disposición 4. 5. Medidas Protección y Escucha de remisión de casos Alegatos de las partes Revisión de Providencias Documentación 3. • Detección presencia de NNA – 18 años • Observación Proceso Productivo • Llenado de formularios: Acta de visita Registro de NNA -18ª • Notificación Resolución Sanciones Regularización de adolescentes mayores a 15 años 6. Multas Cobro y Reembolso a NNA 7. Seguimiento Coordinación interinstitucional Resultados de la Gestión del Ministerio de Trabajo y Empleo en la Erradicación del Trabajo Infantil. Hitos de Gestión Año 1997 Mediante Decreto Ejecutivo se creó el CONEPTI, organismo tripartito, integrado por el Estado, Empresarios y Trabajadores, para la definición de políticas pública para la Erradicación Progresiva del Trabajo Infantil Año 2003 Creación el Foro Social Bananero para la Erradicación del Trabajo Infantil en banano Año 2006 Creación del Sistema de Inspección de Trabajo Infantil a nivel nacional y designación de 30 Inspectores/as de trabajo infantil a nivel nacional en cada provincia. Creación al interior del Ministerio de Trabajo y Empleo, la Unidad de Prevención y Erradicación de Trabajo Infantil UPETI, como instancia de apoyo y soporte técnico a las Inspectorías de Trabajo Infantil Año 2007 El sistema de inspección de trabajo infantil retiró del trabajo infantil a 221 niños, niñas y adolescentes en diversas áreas productivas. Se realizaron 2586 Inspecciones 198 Inspectores de Trabajo Infantil y Veedores Sociales capacitados Creación del Foro Social Florícola, con énfasis en la intervención de la Erradicación del Trabajo Infantil Año 2008 Retiro del trabajo infantil de 2264 niños, niñas y adolescentes e incorporación a procesos de restitución de derechos en instituciones locales prestadoras de servicios. Realización de 3089 Inspecciones Integrales de Trabajo 262 Inspectores de Trabajo Infantil y actores sociales capacitados Implementación del Proyecto de Erradicación de Trabajo Infantil en basurales de 12 cantones del país. Se logró erradicar del trabajo infantil a 449 NNA de basurales y asegurarles procesos integrales de restitución de derechos, con becas escolares, modalidades educativas especializadas, atención en salud física y psicológica, sensibilización a las familias sobre los efectos nocivos del trabajo infantil, desarrollo de actividades recreativas. Desde el CONEPTI se formula el Plan para la Erradicación del Trabajo Infantil - Plan PETI. Proyectos en Marcha Erradicación de Trabajo Infantil en Basurales Es increíble el solo pensar que existen seres humanos que viven de la recolección de desechos de la basura que pueden ser vendidos y reutilizados. En el Ecuador el reciclaje de la basura se realiza en los lugares de depósito de la basura. Muy pocas ciudades han implementado sistemas eficientes de reciclaje en la fuente y además existen muy pocas experiencias de aprovechamiento de los desechos sólidos. El problema es grave cuando se ha detectado la presencia de alrededor de 2.000 niños, niñas y adolescentes que trabajan en el minado de basura. La Organización Internacional del Trabajo OIT y el Centro de Desarrollo y Autogestión DYA, en el año 2002, elaboraron una Línea de Base, sobre la presencia de trabajo infantil en basurales, en 20 ciudades de más de 50.000 habitantes. Los resultados de este estudio revelaron la existencia de 487 NNA en situación de trabajo infantil en 13 de las 20 ciudades investigadas. A partir de esta información, las instituciones mencionadas, decidieron impulsar un proyecto piloto de Erradicación de Trabajo Infantil, en el basural de Santo Domingo de los Colorados, con el apoyo del INNFA y del Municipio de esta ciudad. Los resultados obtenidos y la metodología utilizada determinó que entre los años 2004 2006, el DyA con el apoyo de UNICEF, intervengan en 4 ciudades más, como Quito, Manta, Esmeraldas y Atacames y convoquen a los Municipios a formar parte de este proyecto e incorporen en su fase final a la Fundación Proniño, para beneficiar con becas escolares a la población atendida y lograr su sostenimiento en el sistema educativo. En total desde el 2002 hasta el 2006 se retiraron del trabajo infantil en basurales a cerca de 1.000 niños, niñas y adolecentes. Para el año 2007, el Estado Ecuatoriano a través del Ministerio de Trabajo y Empleo, organismo definidor y emisor de las políticas públicas en materia de Trabajo Infantil, determinó como política pública la Erradicación del Trabajo Infantil, principalmente aquel que se desarrolla en las “Peores formas” o denominadas también “Formas nocivas o peligrosas de trabajo infantil” y consagró en la Agenda Social de la Niñez y Adolescencia 2007 – 2010, la ejecución del Programa Nacional de Erradicación de Trabajo Infantil en Basurales. Con esta decisión, en diciembre de 2007, mediante convenio suscrito entre el Ministerio de Trabajo y Empleo y el Instituto de la Niñez y la Familia – INNFA y la participación del Centro de Desarrollo y Autogestión DyA, la Fundación Proniño de Telefónica y el apoyo de UNICEF, se proyectó una nueva intervención en 12 cantones de más de 20.000 habitantes, de 3 provincias del país, esperando atender a 325 niños, niñas y adolescentes e incorporarlos al sistema educativo y garantizar adecuadas condiciones de salud. La ejecución de esta primera fase del proyecto concluyó en abril del 2009, dejando como resultados el retiro definitivo del trabajo infantil en basurales de 449 NNA y su incorporación a procesos de restitución de derechos en educación, salud y recreación. En el ámbito de la educación se ha logrado a través de las becas escolares y la creación de programas alternativos de educación especializada para población con retraso escolar o sin escolaridad, el sostenimiento de estos niños, niñas y adolescentes en el sistema educativo. Con las familias se han realizado acciones de sensibilización sobre los efectos nocivos del trabajo infantil para el desarrollo de sus hijos e hijas y se ha acercado los servicios estatales de asistencia social como el Bono de Desarrollo Humano o se ha promovido actividades económicas productivas y asociativas que les asegure mejores condiciones de vida. Para el año 2009, el Ministerio de Trabajo y Empleo, conjuntamente con las instituciones aliadas: INFA; DyA, Fundación Proniño y UNICEF, con el apoyo de otras instituciones públicas invitadas como los Ministerios de Salud, Educación, Inclusión Económico Social, Ambiente, Vivienda, Municipios, Consejo Nacional de la Niñez y Adolescencia, Concejos Cantonales de Niñez y Adolescencia, Juntas cantonales de Protección de Derechos y la OIT, intervendremos en 37 cantones de menos de 10.000 habitantes, que registran la presencia de trabajo infantil en basurales, esperando atender a cerca de 500 niños, niñas y adolescentes y restituir integralmente todos sus derechos, además de impulsar proyectos de mejoramiento del manejo de los desechos sólidos en las ciudades intervenidas. En junio del 2010, habremos intervenido en 60 ciudades donde los estudios han revelado la presencia de trabajo infantil en basurales, lo cual permitirá al gobierno de la revolución ciudadana, declarar al territorio ecuatoriano como Libre de Trabajo Infantil en Basurales y entregar al mundo una propuesta metodológica de intervención para la eliminación de una de las peores formas de trabajo infantil y de degradación humana. Proyecto de Erradicación de Trabajo Infantil en Servicio Doméstico. El rezago de la servidumbre colonial se encuentra expresado en el trabajo doméstico, así como también recoge los rezagos de formas de esclavitud y de trata de personas. Miles de niñas principalmente, son traídas desde sus comunidades rurales a las grandes ciudades a trabajar en actividades de servicio doméstico. Es difícil cuantificarlas, pues por lo general las mantiene ocultas y dentro de las viviendas, lugar del ámbito privado donde es muy difícil acceder. Se estima que son alrededor de 25.000 niñas quienes trabajan en esta actividadiii y que fluctúan entre los 10 a los 18 años. Inclusive es posible encontrar niñas y niños menores a esta edad que han sido “criados” por otra familia, por haber sido un “regalo” ofrecido por los padres a esta familia receptora, para brindarle “mejores” oportunidades de vida que las que a criterio de ellos podría ofrecer su familia de origen, sumida en la miseria. Salen de sus hogares con el consentimiento de sus padres, dentro de una costumbre de encargar a los hijos a una familia que pueda darle educación, vivienda, alimento, a cambio de los servicios de las niñas que van al servicio doméstico. Esta costumbre es vista y valorada como una oportunidad para ambas partes. La familia de la niña tendrá una boca menos que alimentar y la familia receptora, tendrá mano de obra barata o gratuita para los quehaceres de la casa. Lejos de sus hogares, solas, en una cultura y sociedad diferentes, con cosmovisiones y formas de entender la vida y de relacionamiento humano, urbanos, en lugares lúgubres, estrechos, antihigiénicos, sin afecto, con frio, con llanto, con soledad, con grandes y eternos silencios, viven las niñas en sus nuevos “hogares”. A veces sin ganar un solo centavo, reciben únicamente a cambio de su trabajo, ropa, alimentación, vivienda, educación, religión. Muchas de ellas, son tratadas con malos tratos, insultos, ofensas e inclusive son violadas o abusadas sexualmente. Trabajan hasta 16 horas diarias, desde el amanecer hasta el anochecer, sin contrato de trabajo, sin sueldo, sin beneficios de ley, sin aportes al Seguro Social, sin vacaciones, sin su familia. Quién escuchará sus sueños? Quién las cobijará si tienen frío? Quién las abrazará si están con miedo? Quién enjugará sus lágrimas?, Quién compartirá sus risas?, Quién las mimará y cuidará si están enfermas? Quién les regalará una caricia tierna, un beso en la frente? Quién las respetará? Son seres humanos negados en su condición de sujetos. Son tratados como objetos al servicio de cualquier otra persona, son víctimas de la trata de personas, un delito penado por la ley. El Ministerio de Trabajo y Empleo, conjuntamente con el Programa del Muchacho Trabajador del Banco Central, en el año 2009 iniciarán el Proyecto de Erradicación de Trabajo Infantil en Servicio Doméstico, en coordinación con las Instituciones locales y nacionales prestadoras de servicios y administradoras de justicia, a fin de lograr un adecuado manejo de los casos y garantizar procesos integrales de restitución de derechos, de las niñas y niños que han sufrido este tipo de situación de violación de derechos. Se espera en el 2009 erradicar del trabajo infantil en servicio doméstico a 500 niñas y niños; sensibilizar a sus familias e incidir en la sociedad para provocar la denuncia y la intervención oportuna de las autoridades. Desafíos: El Ministerio de Trabajo y Empleo, ha realizado importantes esfuerzos para posicionar la política de Erradicación de trabajo infantil en la sociedad ecuatoriana; en generar protocolos de intervención fundamentados en la doctrina de protección integral; en generar proyectos que permitan focalizar de manera prioritaria la gestión, en las áreas prohibidas y peligrosas del trabajo infantil y en fortalecer la gestión institucional para mejorar los niveles de oportunidad, eficiencia y eficacia en la intervención. Es necesario continuar en estos propósitos pero también posicionar al trabajo infantil dentro de las formas de violación de derechos humanos de niñez y adolescencia y convocar a la sociedad en general al combate contra el trabajo infantil. Es una tarea titánica, que el gobierno de la revolución ciudadana ha asumido como un reto. Es también una tarea de todos los actores sociales, pero sobre todo es una tarea nacida de una actitud amorosa para con los niños, niñas y adolescentes pobres del país, hoy al fin reconocidos por la ley, como sujetos de derechos. Resumen Cuando un niño, niña o adolescente trabaja, todos sus derechos son violentados, su niñez e inocencia le son arrebatados. La erradicación del trabajo infantil es un camino hacia la construcción de un nuevo escenario individual y social, de respeto y ejercicio pleno de su condición de sujeto de derechos. El Estado Ecuatoriano, la sociedad y la familia tienen una responsabilidad legalmente establecida y compartida para enfrentar al trabajo infantil, cada uno desde su ámbito de competencia. Es indispensable contar con políticas públicas para la prevención, control, erradicación y monitoreo de trabajo infantil; con sistemas de control eficientes; con instituciones locales prestadoras de servicios de calidad accesibles a la población atendida; con familias comprometidas con la felicidad de sus hijos y con niños, niñas y adolescentes concientes de sus derechos y actuando por su respeto y ejercicio. Prevención, Control, Monitoreo del Trabajo Infantil y Restitución Integral de derechos de niñez y adolescencia, son indispensables en la Erradicación del trabajo infantil. Bibliografía: Constitución de la República del Ecuador 2008 Convención sobre los derechos del Niño – 1990 Convenio Nº 138 suscrito con OIT Convenio Nº182 suscrito con OIT Código de la Niñez y la Adolescencia Código de Trabajo HASSAUREK FRIEDRICH. La servidumbre doméstica. 1861 – 1865, en compilación de ESPINOSA APOLO MANUEL, Quito según los extranjeros. La ciudad, su paisaje, gentes y costumbres, observadas por los visitantes extranjeros. Siglos XVI – XX, Centro de Estudios Felipe Guamán Poma, Quito – Ecuador, 1996 GALEANO EDUARDO, Las venas abiertas de América Latina, 1990 BANCO CENTRAL DEL ECUADOR. Programa del Muchacho Trabajador. Proyecto de erradicación de Trabajo Infantil en Servicio Doméstico. 2008 i Fuente: mx.encarta.msn.com/enciclopedia HASSAUREK FRIEDRICH. La servidumbre doméstica. 1861 – 1865. Relato compilado en ESPINOSA APOLO MANUEL, Quito según los extranjeros. La ciudad, su paisaje, gentes y costumbres, observadas por los visitantes extranjeros. Siglos XVI – XX, Centro de Estudios Felipe Guamán Poma, Quito – Ecuador, 1996 ii iii Fuente. BANCO CENTRAL DEL ECUADOR. Programa del Muchacho Trabajador. Proyecto de erradicación de Trabajo Infantil en Servicio Doméstico. 2008