PROGRAMA: LA LECTURA

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PROGRAMA: LA LECTURA
Objetivo del Programa: Lograr que nuestros jóvenes piensen en los temas de la buena
y la mala literatura. Existe mucha información que viene en formas muy variadas.
Debemos hacer decisiones inteligentes cuando elegimos lo que vamos a poner a
nuestras mentes. Los jóvenes tienen ante sí la opción entre leer o no cuando tienen un
libro abierto. ¿Con qué alimentas tu mente?
Karen estaba a un año de terminar la secundaria. Asistía a clases y trabajaba como
cualquier otro joven. Llevaba todos los cursos posibles de matemáticas y ciencias
porque quería ingresar a la escuela de medicina. Trabajaba arduamente para sacar
buenas calificaciones.
Poco después del inicio del año escolar, Karen descubrió novelas románticas. Al
principio sólo leyó un poquito aquí y otro poquito allá, durante el recreo y antes de
acostarse. No fue mucho después hasta que se dio cuenta que ese no era tiempo
suficiente. Pronto comenzó a leer las obras románticas cada minuto libre que podía
encontrar.
Al vivir en un mundo de fantasía, Karen comenzó a pensar que su vida era aburrida. No
tenía más interés en su puesto en los equipos de gimnasia o de basketball; todas sus
amistades parecían muy infantiles, el colegio parecía no tener importancia y sus
calificaciones comenzaron a bajar.
Karen continuó leyendo los libros, aunque sus amigos le dijeron que esos libros la
estaban haciendo cambiar. Finalmente se salió del colegio y se casó. Su flamante esposo
no encajó en las expectativas irreales de Karen. Ella buscaba un hombre que nunca
había existido. Con el paso del tiempo, la fricción entre ellos los llevó al divorcio.
Karen se volvió a casar y se divorció dos veces. Nunca llegó a ser una doctora. Hoy
realiza cualquier trabajo que esté al alcance de sus manos. No ha encontrado al hombre
perfecto y nunca lo encontrará. Haciendo una lista de cualidades deseables partiendo de
personajes ficticios, Karen creó en su mente un hombre con las características perfectas
que había leído en las historias. Sus hábitos de lectura habían hecho que casi fuera
imposible tener un matrimonio de éxito.
Infelizmente esta no es una historia ficticia. Se repite una y otra vez en las vidas de
muchas personas a diario. Karen aprendió que la vida real tiene sus subidas y bajadas.
La vida tiene sueños rotos y personas que no son perfectas. Pero nunca aprendió a
manejar la realidad.
G. M. Trevelyan escribió: "La educación... ha producido una vasta población capaz de
leer pero incapaz de distinguir lo que vale la pena leer". ¿En qué parte de la población
estás tú? ¿Lees todo o eliges el tipo de libros y revistas que agarras? ¿Es importante
pensar en lo que lees?
Como cristianos, nos estamos preparando para vivir por la eternidad con Dios. También
tenemos que vivir el hoy. La educación nos proporciona las capacidades físicas,
mentales y espirituales. Aprendemos aunque el material que estudiemos sea bueno o
malo. La adquisición de conocimiento nos da oportunidades. Como hijos de Dios, la
elección de buen material de lectura fortalece nuestras mentes y nuestra amistad con
Jesús.
La industria publicadora quiere que creamos que todo bestseller es algo sin lo cual no
podemos vivir. Esa industria invierte millones en publicidad para hacer que compremos
la última novela. Pero, ¿cuán a menudo se vuelve un bestseller un instrumento de
muerte?
La lectura hace surcos en nuestras mentes. Las neuronas transmiten aquello con lo que
están programadas. Cuando leemos, estamos dejando que los pensamientos y las ideas
de otra persona entren a nuestra mente. Las palabras y los cuadros mentales se
almacenan por siempre en nuestro subconsciente. Repentinamente un evento o palabra
estimula nuestras memorias. Recordamos las piezas reunidas durante semanas y años de
lectura. ¿Debemos almacenar información que no es de la mejor calidad? ¿Quisiéramos
ser afectados por siempre con las historias de terror o las historias de amor y de
fantasía?
¿Cómo se decide lo que es digno de leer? Primero, piensa en lo que vas a leer. Haz una
lista e incluye algunas de estas razones: para aprender algunos hechos, para obtener
información y para entretenimiento. ¿Qué otras cosas puedes añadir?
Una vez que hayas decidido lo que vas a leer, compila otra lista con categorías. ¿Qué
tipos de cosas lees? Siendo estudiante, tienes materiales de lectura requeridos para la
escuela. Esos materiales posiblemente incluyan biografías, literatura, ciencia, etc.
¿Cuál es tu elección dentro de la categoría de la lectura recreativa? ¿Biografías, viajes,
información sobre computadoras, técnicas, arte? ¿Forman parte regular de tu dieta de
lectura asuntos tales como ciencia ficción, terror, fantasía, romance y cómicos?
Una vez que hayas terminado tu lista, mira las categorías. ¿Estás leyendo una variedad
de materiales? ¿Te estás dejando apabullar en un área y estás descuidando otras? Leer
todo el tiempo sobre computadoras y nunca leer sobre el Monte Kilimanjaro es como
comer pan y agua y nunca aventurarse a comer una pizza o empanadas. Elige una
variedad de temas para ampliar tus intereses. Puede ayudar si haces una lista a la que no
te hayas expuesto mucho. Haz un plan de lectura sobre temas diferentes.
Otro asunto que debes considerar en tu material de lectura, es saber cuál es el objetivo
del autor. ¿Por qué escribió la historia? ¿Qué ideas o que decisiones de cambio de vida
quiere el escritor que aceptes cuando hayas leído sus palabras?
Proverbios 14:7, dice: "Vete de delante del hombre necio, porque en él no hallarás
labios de ciencia". Si el autor no profesa creer en Dios, ¿será que tiene algún
conocimiento o ciencia que necesitemos? ¿Podemos confiar en sus puntos de vista,
cuando no basa sus opiniones de la Palabra de Dios?
Asegúrate de preguntarte: "Si leo esto, ¿seré un mejor amigo de Jesús? ¿O hará que
evite que hable con él? ¿Me separará de su amistad?"
¿Qué en cuanto a la Biblia? ¿Está en tu horario de lectura? Como hijo de Dios eso debe
estar en primer lugar. Muchas personas dicen no tener tiempo para leer la Biblia. Pero
encuentran tiempo para leer muchas otras cosas, incluyendo periódicos y revistas
diariamente. El descuido de la lectura de la Biblia produce un cambio negativo en
nosotros. Ella tiene una respuesta para cada necesidad de la vida. No siempre hace una
lista específica de lo que sí hay que hacer y de lo que no hay que hacer. Dios escribió
principios para nosotros. El quiere que estudiemos aquellos principios y aprendamos a
aplicarlos en nuestras vidas. Si nunca los leemos, no los podemos aplicar.
Si piensas que la Biblia es aburrida, es una demostración de que tus otros hábitos de
lectura están probablemente dando cuenta de tí. La Biblia contiene algunas de las
mejores historias de acción, aventura y misterio jamás escritas. Prueba algo nuevo
cuando leas la Biblia. Toma una historia y usa tus cinco sentidos mientras la lees.
Escucha el sonido que envuelve a los personajes. Huele a los animales o a la comida
que podría ser parte de la historia. Observa la mirada agonizante y de desesperación en
los ojos de Adán y Eva mientras entierran a Abel, o el gozo del padre cuando su hijo
pródigo regresa al hogar. El uso de esta técnica hace que las historias bíblicas sean vivas
y emocionantes.
Elena de White escribió muchas cosas sobre los materiales de lectura. Ella deja bien en
claro que tenemos que pensar cuidadosamente en lo que vamos a leer. El 9 de octubre
de 1902, en una revista llamada The Youth´s Instructor [El Instructor de los Jóvenes],
escribió: "Satanás sabe que en gran grado la mente es afectada por lo que se alimenta. El
anda buscando llevar a los jóvenes y a los adultos a leer historietas, cuentos y otra
literatura. Los lectores de tal literatura se vuelven ineptos para las responsabilidades que
están ante ellos. Viven en una vida irreal, y no tienen el deseo de buscar las Escrituras,
de alimentarse del maná celestial".
Si Satanás estuvo luchando esta batalla en 1902, ¿piensas que ya no sigue hoy? El sabe
que si puede controlar nuestras mentes, ganará la guerra por nuestra vida. La lectura de
los bestsellers puede ser que te esté haciendo vulnerable a la muerte. Satanás no quiere
nada menos que tu vida. El usará todo medio posible para quitarte el don que Jesús te ha
dado: la vida eterna.
Dios promete que podemos tener toda la sabiduría que necesitamos. En Santiago 1:5,
dice: "Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos
abundantemente y sin reproche, y le será dada".
Podemos pedir sabiduría en cualquier momento. Si estamos muy ocupados llenando
nuestras mentes y pensamientos con el mensaje del mundo, tendremos dificultad para
escuchar la voz de Dios. La próxima vez que tomes un libro, lee por tu vida - tu vida
eterna.
Preguntas de discusión:
1. En la historia mencionada, ¿en qué manera la lectura de novelas afectó la vida de
Karen y su percepción de la realidad? ¿Por qué tuvo ese efecto la lectura de novelas en
su vida? ¿Se trata de un caso especial o podría sucederle a cualquiera? Usa ejemplos
para apoyar tu respuesta.
2. Algunas personas piensan que no importa lo que leen. Creen que sus mentes se
expandirán mientras están leyendo algo, ¿Estás de acuerdo o en desacuerdo?
3. ¿Cuáles son algunos lineamientos para la elección del material de lectura? Haz una
lista de ellos y discútelos en un grupo.
4. ¿Cuáles son algunos peligros de la lectura de material escrito por autores no
cristianos? ¿Está bien leer su material en tanto que parezca ser buena información? ¿Por
qué si o por qué no? Si la respuesta es sí, ¿cómo determinas lo que está bien y lo que no
lo está?
5. En esta era ocupada, muchas personas encuentran poco tiempo para leer. Si tuvieras
que hacer una decisión en cuanto a qué leer y a qué sacar de tu lista de lectura, ¿qué
eliminarías y qué cosas estarían en tu lista de lectura?
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