INTERVENCION DE UNICEF EN EL MARCO DE LA CONMEMORACIÓN DEL DÍA MUNDIAL DEL AGUA 24 Marzo de 2003 “EL DERECHO DE LAS NIÑAS Y LOS NIÑOS AL SUMINISTRO DE AGUA POTABLE” La Convención sobre los Derechos del Niño, en su artículo 24 obliga a los Estados a adoptar las medidas apropiadas para que ningún niño sea privado del suministro de agua potable, teniendo en cuenta los peligros y riesgos de contaminación ambiental. El agua potable y el saneamiento adecuado son elementos indispensables para el bienestar de la niñez. El Secretario General de las Naciones Unidas en su Informe “Nosotros los Niños y Niñas”, en el marco de la Sesión Especial en Favor de la Infancia de Mayo 2002, que trata sobre el cumplimiento de los compromisos de 1 la Cumbre Mundial en Favor de la Infancia de 1990, refiere que: “….. la falta de agua potable y saneamiento deficiente figuran entre las principales causas de muerte, enfermedades y malnutrición de niños.” En ese sentido señala además que “….el abastecimiento de agua potable, en especial en lo que concierne al saneamiento y la higiene, pueden reducir en un 22% la incidencia de enfermedades diarréicas y en un 65% las muertes provocadas por estas enfermedades”. En la ultima década se logró un avance relativo en el esfuerzo por asegurar la universalidad de la cobertura de agua potable a nivel mundial, al pasar de una cobertura del 77% en el año de 1990 a una cobertura del 82% en el año 2000. En el Informe Mundial sobre el Desarrollo de Recursos Hídricos de las Naciones Unidas se menciona que “…en la actualidad 1200 millones de personas carecen de agua potable y diariamente se descargan 2 millones de toneladas de deshechos en ríos, lagos y arroyos.” 2 Como se puede observar por los datos anteriores, a doce años de la firma de Convención de los Derechos del Niño, aún quedan tareas pendientes en materia de cobertura y calidad del servicio. Por otra parte, la cobertura en zonas de menores ingresos sigue siendo insuficiente, especialmente en asentimientos espontáneos, cuya población, dadas las características socio demográficas de las familias que los habitan, son fundamentalmente niños y niñas. México no es la excepción en esta problemática, ya que el o país se encuentra en la escala internacional de baja disponibilidad de este recurso y si no se toman medidas urgentes parra preservar el agua, nuestra capacidad de abastecimiento podría disminuir hasta tres veces respecto de los niveles actuales. La cobertura de agua potable en las grandes ciudades, oscila alrededor del 97%, de 90% en las ciudades de tamaño medio y apenas de 65% en las áreas rurales. 3 Ello es una clara muestra de la exclusión a que se ve expuesta una importante proporción de la niñez, así como de los esfuerzos que se requerirán para garantizar este derecho a todos y todas. En consecuencia y dado que la Convención propugna por el Interés Superior del Niño, es necesario realizar acciones que no sólo aseguren la cobertura universal al agua potable sino que también garanticen la disponibilidad de este recurso, en cantidades suficientes para su edad adulta. Afortunadamente, hay numerosas propuestas para solucionar los problemas relacionados con el agua; éstas abarcan desde lo dicho en los foros internacionales, hasta la participación activa de niños y niñas en su espacio comunitario. Como ideas destacables, cabe señalar lo dicho en el Tercer Foro Mundial del Agua, celebrado recientemente en Kyoto, Japón. En él se anunció la propuesta de establecer una Carta de Deberes y Derechos sobre el uso 4 de este recurso, considerado ya como un factor para mantener la paz mundial en el próximo siglo. Así mismo, se hizo un llamado a los gobiernos del mundo para asumir como un reto, la preservación del agua para generaciones venideras. Por otra parte, en la Sesión Especial de las Naciones Unidas en favor de la Infancia realizada en el año 2002, los países ratificaron su compromiso con la niñez, estableciendo una serie de metas que deberán ser cumplidas de acuerdo a planes de acción que se deberán implementar en cada país. En ese sentido, se estableció el compromiso de “Reducir al menos en un tercio el número de hogares que no tienen acceso a servicios higiénicos de saneamiento y de agua potable a precios asequibles”. México retoma este compromiso en el “Programa de Acción 2002 – 2010 Un México apropiado para la Infancia y la Adolescencia”, recientemente lanzado, estableciendo 5 una meta de 90% de cobertura de agua potable para el año 2010. Por lo tanto, si queremos garantizar el bienestar de los niños y niñas de México, no son suficientes los gastos de inversión pública que se han efectuado, en la construcción y mejoramiento de las infraestructuras hidráulicas. En virtud de consecuencias que de los la Estados escasez ya del conocen las agua se y comprometieron a asegurar que ningún niño de su población se encontraría privado de este recurso; se requieren planes ambientales a más largo plazo, mayor voluntad política y la colaboración de todos los sectores de la sociedad, para lograr esta meta. En el marco de la conmemoración del Día Mundial del Agua, debemos recordar, que si bien el mundo cambia vertiginosamente y existen eventos mundiales fuera de nuestro control, tenemos a la humanidad como denominador común y como tal somos responsables del 6 desarrollo o la pobreza de las próximas generaciones; ya que como afirma Capra: “La supervivencia de la humanidad dependerá de nuestra Alfabetización Ecológica.” 7