Texto catálogo 25 aniversario Museo de Dibujo Julio Gavín - Castillo de Larrés

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25 años del Museo de Dibujo Julio Gavín – Castillo de Larrés
El 19 de mayo de 2006, la Real Academia de Nobles y Bellas Artes de San
Luis celebró la solemne Sesión de Clausura de Curso en el Castillo de Larrés con
ocasión del vigésimo aniversario de la creación de su Museo de Dibujo. Me cupo
la honra de tomar la palabra en nombre de la Real Academia para hacer la laudatio
de Amigos del Serrablo y de su Presidente Julio Gavín Moya, que estuvo presente
en el acto.
Menos de un mes después, el 12 de junio, fallecía Julio Gavín, por lo que
sonaban todavía en sus oídos las palabras que le dirigí, calificándolo de
“personaje de leyenda” y aplicándole lo que se lee en la Historia verdadera de la
Conquista de la Nueva España escrita por Bernal Díez del Castillo, uno de sus
conquistadores: “Como si hubiera en el mundo cosa tan dificultosa que hombres
de seso y esfuerzo no pudieran realizar”. Lo que me llevó a afirmar que “seso y
esfuerzo es lo que ha tenido que derrochar Don Julio Gavín para conseguir unos
logros épicos”.
Celebramos hoy los 25 años de la fundación del Museo y los 40 de la
asociación Amigos del Serrablo. El solo hecho de que, tras su óbito, se haya dado
el nombre de Julio Gavín al Museo es prueba palmaria de que todo el mundo
conoce que sin él ni Amigos del Serrablo ni este Museo hubieran existido. No es,
pues, necesario que repita su elogio.
Sí que diré, en cambio, que las magníficas realizaciones de Amigos del
Serrablo, y muy especialmente este Museo del Dibujo, han sido posibles gracias a
numerosas colaboraciones, que supo aunar de manera magistral Julio Gavín.
“Porque el ser agradecido/ la obligación mayor es/ para el hombre bien nacido”,
como escribió el Duque de Rivas, conviene manifestar nuestro reconocimiento a
todos los que han participado en tamaña empresa.
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En primer lugar, a los maestros constructores de las bellísimas iglesias
mozárabes de la zona, así como al canónigo de Huesca Don Antonio Durán
Gudiol, que animó a Julio Gavín a crear Amigos del Serrablo, con el objetivo de
restaurar y mantener los templos creados para servir la liturgia hispano-mozárabe,
anterior a la implantación de la liturgia romana en tiempos del rey de Aragón
Sancho Ramírez.
Evidentemente, a los centenares de componentes de la asociación creada y
presidida muchos años por Julio Gavín. Treinta y cuatro iglesias mozárabes han
sido salvadas de la ruina por ellos, llegando algunos a pasar muchas veces los
fines de semana arrastrando carretillas y manejando mazas y cinceles, con la
ayuda fervorosa de los habitantes de los pueblos. Y siguen ocupándose de su
conservación y mantenimiento.
Sabemos que el entusiasmo que Julio Gavín Moya supo infundir a los
socios de Amigos de Serrablo se ha traducido en otras realizaciones, como la
restauración de edificios civiles, entre otros la Casa Batanero de El Puente, en la
que crea el Museo de Artes Populares de Serrablo, o la del Castillo de Larrés, sede
del Museo de Dibujo.
El arte de integrar voluntades para alcanzar un objetivo lo realizó Julio
Gavín de manera excepcional en este Museo de Dibujo. Llevaba el dibujo metido
en el alma desde pequeño y toda la vida trabajó en la sala de dibujo de una gran
empresa en Sabiñánigo. Cuando decidió crear el Museo, la falta de medios era
absoluta. Si consiguió transformar su sueño en realidad fue pidiendo colaboración
a los artistas, artistas hoy honrados en esta exposición que conmemora las bodas
de plata del Museo. Hablando con Julio Gavín me dijo “Siempre que he
necesitado de los artistas, he tenido una respuesta fantástica”.
Más de 3.000 obras posee en su archivo el Museo, rotándolas para exponer
unas 350 en sus salas, que causan la admiración de las doce mil personas que
pagan cada año la entrada para visitarlo. Todos los artistas españoles de este
último siglo están prácticamente representados, y lo están gracias a la generosidad
de los autores de las obras, de sus causahabientes o de terceros poseedores de
dibujos que aceptaron donarlos.
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Y me referiré en último lugar a las personas que continúan hoy la labor
comenzada por Julio Gavín. Según Julio Baroja, “todo lo que no cuente con el
tiempo tiene el peligro de ser estéril”. Ver la magnífica realidad de este Museo,
único en el mundo, nos permite constatar que los Amigos del Serrablo cuentan
con el tiempo, y no sólo para las multiseculares iglesias mozárabes de las que
cuidan con tanto esmero, sino también para el Museo de Dibujo Julio Gavín –
Castillo de Larrés, que tan bien ha sabido aprovechar este primer cuarto de siglo
de su existencia.
La exposición que hoy conmemora los veinticinco primeros años refleja la
universalidad del Museo. Todas las técnicas del dibujo, todos los estilos, todos los
artistas que han ejercido en nuestro país tan noble arte están representados en él.
Quiero subrayar la presencia en esta muestra de quienes llevan ya años con
obras colgadas en el Museo: han sido siempre sus mejores embajadores,
subrayando en sus notas biográficas la presencia de obras suyas en Larrés,
invitando a otros artistas a donar dibujos, elogiando a diestro y siniestro esta
magnífica realización.
Pero también debo poner de relieve a los nuevos artistas que se incorporan
al Museo con esta exposición. Es muy importante que hayan colgado sus obras en
los muros de este viejo Castillo: así se demuestra que estamos ante una institución
viva, que sigue siendo el reflejo del dibujo español hoy.
Y no concluiré sin dar las gracias a los que han aceptado el reto de tomar
el relevo de Julio Gavín y, muy especialmente, a Jesús Montuenga, como
Presidente de Amigos del Serrablo, y a Alfredo Gavín, como Director del Museo.
Ramón J. Sender proclamó que “lo mejor que ha hecho Dios es un día después de
otro”. La mayor alabanza a quien dirige este Museo es decir que va consiguiendo
que cada día que pasa sea la acertada continuación de la brillantísima trayectoria
de los días anteriores, de los días de Julio Gavín.
Juan Antonio Cremades Sanz-Pastor
de la Real Academia de Nobles y Bellas Artes de San Luis
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