DOSSIER TEMÁTICO AGOSTO 2011 CENTRO DE DOCUMENTACIÓN (CEDOC) INSTITUTO NACIONAL DE FORMACIÓN DOCENTE MINISTERIO DE EDUCACIÓN DE LA NACIÓN 1 El Dossier que aquí presentamos está enfocado al tema de la poesía. Es un muestrario escueto de poetas tras una búsqueda intensiva que exigió cierta rigurosidad selectiva, aunque no sabemos si logramos evitar el predominio de los gustos personales. La selección se hizo teniendo en cuenta la claridad expresiva ante la difícil condición humana y los ojos abiertos ante la realidad histórica que le tocó vivir. No se lleva a cabo ningún tipo de análisis y clasificación. Al final se incluye una presentación de cada uno de los poetas escogidos, para que ustedes, si les interesa, puedan continuar leyendo más allá del poema presentado. Los autores y autoras escogidos, por orden alfabético, son: José Carlos Becerra, Gioconda Belli, Sabina Berman, Charles Bukowski, Constantino Cavafis, Humberto Constantini, Emily Dickinson, Carlos Drummond de Andrade, Elsa Fenoglio, José Agustín Goytisolo, Hamlet Lima Quintana, Gabriela Mistral, José Luis Pacheco, José Pedroni, Nicanor Parra, Sergio Raimondi, Jaime Sabines, Alfonsina Storni, Luis O. Tedesco, César Vallejo y Walt Whitman. “Nadie pudo nunca ni podrá jamás cortar el hilo humano de la poesía, ése que nos continúa desde el fondo de los siglos como nuestra belleza posible.” Juan Gelman La poesía es un viejo oficio que no se priva de nada. Carente de reglas, sin un estilo único, sólo sensible a los valores del lenguaje. Con la libertad suficiente para encargarse sin pudor de las terribles verdades de la vida, potenciar lo fantástico, sensibilizarse ante las pequeñas cosas diarias. Sin la poesía como que falta algo que ayuda a vivir. Una que otra ilusión, uno que otro dolor, una que otra ternura, uno que otro recuerdo educando nuestras emociones. En este Dossier, la materia es el regocijo de la maternidad, el amor apasionado, la palabra amigo, los afectos familiares, el trabajo y el festejo, la invención de un ídolo popular, la patria como un sentimiento, los peligros del paso del tiempo, la intolerancia, la guerra y la muerte, el servir como una inmensa alegría, los golpes y el buen humor de Dios, el valor de la libertad. El CEDOC los invita, pues, a este festín de ideas y emociones, un placer y un privilegio que, una vez más, hemos querido compartir con ustedes. 2 INDICE 20 POEMAS DE AUTOR MATERNIDAD, JOSÉ PEDRONI SENCILLOS DESEOS, GIOCONDA BELLI MANOS JUNTAS, CARLOS DRUMOND DE ANDRADE ESOS LOCOS FURIOSOS INCREÍBLES, JUAN AGUSTÍN GOYTISOLO LA CIUDAD, CONSTANTINO CAVAFIS CON RABIA, AMOR, SABINA BERMAN TENDAL, LUIS O. TEDESCO ALTA TRAICIÓN, JOSÉ EMILIO PACHECO SIEMPRE NOS PIDEN QUE ENTENDAMOS, CHARLES BUKOWSKI POEMA 1467, EMILY DICKINSON GENTE, HAMLET LIMA QUINTANA EL VINO, NICANOR PARRA ME ENCANTA DIOS, JAIME SABINES ¿QUÉ DIRÍA?, ALFONSINA STORNI SUEÑO Y REPARACIÓN, SERGIO RAIMONDI GARDEL, HUMBERTO CONSTANTINI LOS AMIGOS, ELSA FENOGLIO LOS HERALDOS NEGROS, CÉSAR VALLEJO EL PLACER DE SERVIR, GABRIELA MISTRAL PALABRA OSCURA, JOSÉ CARLOS BECERRA Y UNA CANCIÓN ESPERANZADA NO TE DETENGAS, WALT WHITMAN 3 MATERNIDAD (Fragmento) Mujer: en un silencio que me sabrá a ternura, durante nueve lunas crecerá tu cintura; y en el mes de la siega tendrás color de espiga, vestirás simplemente y andarás con fatiga -El hueco de tu almohada tendrá un olor a nido, y a vino derramado nuestro mantel tendido-, Si mi mano te toca, tu voz, con vergüenza, se romperá en tu boca lo mismo que una copa. El cielo de tus ojos será un cielo nublado. Tu cuerpo todo entero, como un vaso rajado que pierde un agua limpia. Tu mirada un rocío. Tu sonrisa la sombra de un pájaro en el río... Y un día, un dulce día, quizá un día de fiesta para el hombre de pala y la mujer de cesta; el día que las madres y la recién casadas vienen por los caminos a las mismas cantadas; el día que la moza luce su cara fresca, y el cargador no carga, y el pescador no pesca... -tal vez el sol deslumbre; quizá la luna grata tenga catorce noches y espolvoree plata sobre la paz del monte; tal vez el villaje llueva calladamente; quizá yo esté de viaje...Un día un dulce día con manso sufrimiento, te romperás cargada como una rama al viento, y será el regocijo de besarte las manos, y de hallar en el hijo tu misma frente simple, tu boca, tu mirada, y un poco de mis ojos, un poco, casi nada... JOSE PEDRONI 4 SENCILLOS DESEOS Hoy quisiera tus dedos escribiéndome historias en el pelo Y quisiera besos en la espalda Acurrucos Que me dijeras las más grandes verdades O las más grandes mentiras Que me dijeras por ejemplo Que soy la mujer más linda del mundo Que me querés mucho Cosas así Tan sencillas Tan repetidas, Que me delinearas el rostro Y me quedaras viendo a los ojos Como si tu vida entera dependiera de que los míos sonrieran Alborotando todas las gaviotas en la espuma. Cosas quiero como que andes mi cuerpo Camino arbolado y oloroso, Que seas la primera lluvia del invierno Dejándote caer despacio Y luego en aguacero. Cosas quiero como una gran ola de ternura Deshaciéndome Un ruido de caracol Un cardumen de peces en la boca Algo de eso Frágil y desnudo Como una flor a punto de entregarse a la primera luz de la mañana O simplemente una semilla, un árbol Un poco de hierba Una caricia que me haga olvidar El paso del tiempo La guerra Los peligros de la muerte. GIOCONDA BELLI 5 MANOS JUNTAS No seré el poeta de un mundo caduco. Tampoco cantaré al mundo futuro. Estoy aferrado a la vida y miro a mis compañeros. Se los ve taciturnos pero nutren grandes esperanzas. Junto a ellos considero la enorme realidad. El presente es tan grande, pero no nos apartemos. No nos apartemos mucho, vayamos tomados de la mano. No seré el cantor de una mujer, de una historia, no diré los suspiros al anochecer, el paisaje observado desde la ventana, no distribuiré estupefacientes o cartas de suicida, no huiré a las islas ni seré raptado por serafines. El tiempo es mi materia, el tiempo presente, los hombres presentes, la vida presente. CARLOS DRUMMOND DE ANDRADE 6 ESOS LOCOS FURIOSOS INCREÍBLES Llegan apresurados y nunca dicen para qué ni de dónde proceden y enseguida te piden dos mil francos que casi siempre te han de devolver o te quitan la toalla sin respeto cuando te estás duchando se ponen la colonia los polvos el masaje la loción de tu novio o de tu hija te arrastran a lugares espantosos o bellos y ni siquiera piden tu opinión y beben prodigiosamente se ponen a cantar en cualquier parte o arman la del gran dios en un bar miserable y por motivos nimios siempre siempre avasallan te compran un sombrero o unas flores y un día salen al galope quizá hacia los infiernos qué desastre. Señora caballero muchachita asustada militante de un partido ecologista: si se tropieza usted con uno de esos locos furiosos increíbles no le deje escapar llévelo a casa son tiernos como niños a veces tienen frío quién sabe si es porque les han pegado duro duermen poco se lavan todo el rato y son muy besucones y mirones pero cuidan los libros sacan todas las noches el cubo de basura a la escalera y están sólo pendientes de tener siempre un cenicero al lado. Tienen por fin el gran inconveniente: se van mas vuelven pronto duran toda la vida. JUAN AGUSTÍN GOYTISOLO 7 LA CIUDAD Dijiste: “Iré a otro país, veré otras playas; buscaré una ciudad mejor que ésta. Todos mis esfuerzos son fracasos y mi corazón, como muerto, está enterrado. ¿Por cuánto tiempo más estaré contemplando estos despojos? A donde vuelvo la mirada, veo sólo las negras ruinas de mi vida, aquí, donde tantos años pasé, destruí y perdí”. No encontrarás otro país ni otras playas, llevarás por doquier y a cuestas tu ciudad; caminarás las mismas calles, envejecerás en los mismos suburbios, encanecerás en las mismas casas. Siempre llegarás a esta ciudad; no esperes otra, no hay barco ni camino para ti. Al arruinar tu vida en esta parte de la tierra la has destrozado en todo el universo. CONSTANTINO CAVAFIS 8 CON RABIA, AMOR Con rabia, amor casi casi a muerte desclávate con un puñal entre los dientes rájame la boca Con rabia, amor párteme la roca con todo tu animal desesperado hasta que salten chispas; me duele más lo intacto que lo roto con rabia, amor, con rabia SABINA BERMAN 9 TENDAL Entre el paredón del fondo y la galería, perpendicular a las medianeras, el tendal, mi pantalón de ayer y el pulóver de Juanca, la blusa de mamá, las medias borrosas de papá, y en riguroso rectángulo, aquella sábana, inmensidad blanca de la luz, húmedos sus contornos colosales, majestad inicial de la pobreza, rozándose, abrazándose, casi nube su forma de ser vuelo. LUIS O. TEDESCO 10 ALTA TRAICIÓN No amo mi patria. Su fulgor abstracto es inasible. Pero (aunque suene mal) daría la vida por diez lugares suyos, cierta gente, puertos, bosques de pinos, fortalezas, una ciudad deshecha, gris, monstruosa, varias figuras de su historia, montañas - y tres o cuatro ríos. JOSÉ EMILIO PACHECO 11 UNA RAZÓN SUFICIENTE Hubo un tiempo feliz En que mi tiempo era un aljibe de alondras. El horizonte una línea fuera del renglón. La goma de borrar un utensilio diario. Una caja de madera de dos pisos, mi cofre de secretos. El barco de papel, una fragata en que surqué los mares y aprendí jugando en fantasía toda la geografía. Me propuse ser hombre de repente y no quise matar mi último niño. Yo quería volver de otra manera, sin repetir el grito o la amenaza. Sin naufragar los barcos, ni violar secretos encofrados. Yo quería volver de otra manera, pero jugar de nuevo, ser grumete en lo alto y divisar dragones y arrecifes. Dormir en un iglú hasta la aurora grande. Olvidar el rincón, la penitencia. El mal, el visto. Llegar a la ternura de los niños, que hablan con su sombra en los recreos. Por eso me afilié a la ternura de esa raza tenaz, que sigue andando en el amor, en la verdad primera, y se olvida de reglas de naufragio, para llegar soñando con sus niños, en barcos de papel y miguitas de pan en los bolsillos. HUGO DITARANTO 12 SIEMPRE NOS PIDEN QUE ENTENDAMOS Siempre nos piden que entendamos El punto de vista de los otros Sin importar si es anticuado Necio Asqueroso. A uno le piden Que entienda Amablemente Todos los errores de los otros, Sus vidas desperdiciadas, Sobre todo si son de edad avanzada. Pero su edad es lo único En lo que nos fijamos. Han envejecido mal Porque han vivido sin enfoque Se han negado a ver ¿Que no es culpa suya? Se me pide que oculte Mi opinión ante ellos Por miedo a su miedo. La edad no es un crimen Pero la vergüenza de una vida Deliberadamente desperdiciada Entre tantas vidas Deliberadamente desperdiciadas Sí lo es. CHARLES BUKOWSKI 13 GENTE Hay gente que con sólo decir una palabra enciende la ilusión y los rosales; que con sólo sonreír entre los ojos nos invita a viajar a otras zonas nos hace recorrer toda la magia. Hay gente que con sólo dar la mano rompe la soledad pone la mesa sirve el puchero coloca las guirnaldas que con sólo empuñar una guitarra hace una sinfonía de entre casa Hay gente que con sólo abrir la boca llega hasta los límites del alma, alimenta una flor inventa sueños hace cantar el vino en las tinajas y se queda después como si nada. Y uno se va de novio con la vida desterrando una muerte solitaria pues sabe que a la vuelta de la esquina hay gente que es así tan necesaria. HAMLET LIMA QUINTANA 14 POEMA 1467 La pequeña palabra desbordante de la que nadie, oyéndola, diría que esconde ardor o lágrimas. Pero aunque pasen las generaciones, maduren las culturas y decaigan, sigue diciendo. EMILY ELIZABETH DICKINSON 15 El Vino Nervioso, pero sin duelo a toda la concurrencia por la mala voz suplico perdón y condescendencia. Con mi cara de ataúd y mis mariposas viejas yo también me hago presente en esta solemne fiesta. ¿Hay algo, pregunto yo más noble que una botella de vino bien conversado entre dos almas gemelas? El vino tiene un poder que admira y que desconcierta transmuta la nieve en fuego y al fuego lo vuelve piedra. El vino es todo, es el mar las botas de veinte leguas la alfombra mágica, el sol el loro de siete lenguas. Algunos toman por sed otros por olvidar deudas y yo por ver lagartijas y sapos en las estrellas. El hombre que no se bebe su copa sanguinolenta no puede ser, creo yo cristiano de buena cepa. El vino puede tomarse en lata, cristal o greda pero es mejor en copihue en fucsia o en azucena. El pobre toma su trago para compensar las deudas que no se pueden pagar con lágrimas ni con huelgas. Si me dieran a elegir 16 entre diamantes y perlas yo elegiría un racimo de uvas blancas y negras. el ciego con una copa ve chispas y ve centellas y el cojo de nacimiento se pone a bailar la cueca. El vino cuando se bebe con inspiración sincera sólo puede compararse al beso de una doncella. Por todo lo cual levanto mi copa al sol de la noche y bebo el vino sagrado que hermana los corazones. NICANOR PARRA 17 ¿QUÉ DIRÍA? ¿Qué diría la gente recortada y vacía, si en un día fortuito por ultra fantasia, me tiñera el cabello de plateado y violeta, usara peplo griego, cambiara la peineta por cintillo de flores: miosotis o jazmines, cantara por las calles al compás de violines, o dijera mi verso recorriendo las plazas libertado mi gusto de mortales mordazas? ¿Irían a mirarme temblando en las aceras? ¿Me quemarían como quemaron hechiceras? ¿Rogarían en coro, escuchando misa? En verdad que pensarlo me da un poco de risa. ALFONSINA STORNI 18 SUEÑO Y REPARACIÓN Como ciertos motores de nafta, el operario se alimenta de sopa, una porción de papas hervidas, un sangúche de milanesa y dos frutas que pueden ser naranjas o manzanas. Todo esto sobre una bandeja de telgopor envuelto en nylon. Además un vaso plástico y una serie de jarras con jugo o agua en forma regular dispersas sobre la mesa. Si bien el menú no se repite en forma exacta día a día, semana a semana, mes a mes, ciertas vitaminas dominan la composición. El paladar de cada uno de los comensales se adapta a un sistema de sabores y pesos que varía según el grado de importancia de la empresa y la calidad de la licitación. Quienes se dedican a proveer las raciones saben sin duda que no conviene generar somnolencia (usualmente modorra o fiaca), aunque es posible que un sueño limitado de entre veinte o treinta minutos, la cabeza caída sobre el respaldar, sueltos los brazos a ambos lados de la silla, permita renovar las fuerzas del cuerpo con un plus de eficacia. Con una pala en la mano a punto de ser hundida en el montón de tierra, el operario se asemeja desde muy lejos a la máquina que hace lo mismo aunque con rapidez mayor y en mayor cantidad. El sol, la lluvia y la acción constante también debilitan el artefacto e imprimen marcas notables no sólo en la carrocería sino en el sistema de transmisión y aún en el motor mismo; su siempre inminente vejez, sin embargo, se mide menos por progresivas deficiencias que por la aparición de un nuevo modelo de funcionalidad más amplia y costo más bajo. SERGIO RAIMONDI 19 GARDEL Para mí, lo inventamos seguramente fue una tarde de domingo, con mate, con recuerdos, con tristeza, con bailables bajito en la radio, después de los partidos. Seguramente nos dolía una foto en la pared, algún no tengo ganas, algún libro. Yo creo que andaríamos así, sonsos de aburrimiento, solitariando viejos para qués, sin mujer o sin plata, y desabridos. Seguramente nos sentimos de golpe terriblemente solos, muy huérfanos, muy niños. Tal vez tocamos fondo. Tal vez alguien pensó en el amasijo. Entonces, que sé yo, nos pasó algo rarísimo. Nos vino como un ángel desde adentro, nos pusimos proféticos, nos despertamos bíblicos. Miramos hacia las telarañas del techo, nos dijimos: "Hagamos pues un Dios a semejanza de lo que quisimos ser y no pudimos. Démosle lo mejor, lo más sueño y más pájaro de nosotros mismos. Inventémosle un nombre, una sonrisa, una voz que perdure por los siglos, un plantarse en el mundo, lindo, fácil como pasándole ases al destino." 20 Y claro, lo deseamos y vino. y nos salió morocho, glorioso, engominado, eterno como un Dios o como un disco. Se entreabrieron los cielos de costado y su voz nos cantaba: Mi Buenos Aires querido... Eran como las seis, esa hora en que empiezan los bailables y ya acabaron todos los partidos. HUMBERTO CONSTANTINI 21 LOS AMIGOS Aquí está la casa profunda donde los guardo. Estas antípodas, transitorias o permanentes que me empujan a sobrevivir luego de los viajes sin realizar, de los reinos esfumados, estos cálices interiores que riegan los límites de mi playa, son mis aproximaciones más perfectas. En el atril de los simulacros ellos dan la gran llamada para apuntar a la verdad, sus palabras las incorporo a mi propiedad más auténtica, a mis mejores armas. aquí es donde correspondo a sus claves mínimas. aquí, en el medio del pecho, donde se habla de cosas sencillas, los amigos son los hechos consumados. ELSA FENOGLIO 22 LOS HERALDOS NEGROS Hay golpes en la vida, tan fuertes… ¡Yo no sé! Golpes como el odio de Dios; como si ante ellos, la resaca de todo lo sufrido se empozara en el alma… ¡Yo no sé! Son pocos; pero son… Abren zanjas oscuras en el rostro más fiero y en el lomo más fuerte. Serán tal vez los potros de bárbaros atilas; o los heraldos negros que nos manda la Muerte. Son las caídas hondas de los Cristos del alma, de alguna fe adorable que es Destino blasfema. Esos golpes sangrientos son las crepitaciones de algún pan que en la puerta del horno se nos quema. Y el hombre… Pobre… ¡pobre! Vuelve los ojos, como cuando por sobre el hombro nos llama una palmada; vuelve los ojos locos, y todo los vivido se empoza, como charco de culpa, en la mirada. Hay golpes en la vida, tan fuertes… ¡Yo no sé! CÉSAR VALLEJO 23 EL PLACER DE SERVIR Toda la naturaleza es un acto de servir. Sirve la nube, sirve el viento, sirve el surco. Donde haya un árbol que plantar, plántalo tú: Donde haya un error que enmendar, enmiéndalo tú; Donde haya un esfuerzo que todos esquivan, acéptalo tú. Sé el que aparta la piedra del camino, el odio de los corazones y las dificultades del problema Hay una alegría del ser sano y la de ser justo, pero hay, sobre todo, la hermosa, la inmensa alegría de servir. Que triste sería el mundo si todo estuviera hecho, si no hubiera un rosal que plantar, una empresa que emprender. Que no te llamen solamente los trabajos fáciles ¡Es tan bello hacer lo que otros esquivan! Pero no caigas en el error de que sólo se hace mérito con los grandes trabajos; hay pequeños servicios que son buenos servicios: adornar una mesa, ordenar unos libros, peinar una niña. Aquel que critica, éste es el que destruye, tú sé el que sirve. El servir no es faena de seres inferiores. Dios que da el fruto y la luz, sirve. Pudiera llamarse así: "El que Sirve". Y tiene sus ojos fijos en nuestras manos y nos pregunta cada día: ¿Serviste hoy? ¿A quién? ¿Al árbol, a tu amigo, a tu madre? GABRIELA MISTRAL 24 HOY ESTOY TAN ALEGRE Hoy estoy tan alegre, qué me dicen, Me miro el pecho y río, miro me La estatura, el reloj, los pantalones, tan alegre y me río, la camisa me miro a carcajadas, vea usted, este asunto comienza en mi esqueleto (perdón por la palabra) estoy tan alegre compañero, le digo, cuello arriba y cuello abajo río, qué es no sé, me levanté tan simple como siempre y tan Juan como suelo entré a la calle, salud, ciudad, le dije, acaricié la mañana de paso, fui hasta el hombre más triste y le di un sueño. JUAN GELMAN 25 PALABRA OSCURA A mis hermanas MÉLIDA RAMOS DE BECERRA † 6 de septiembre de 1964 (Fragmentos) Te oigo ir y venir por tus sitios vacíos, por tu silencio que reconozco desde lejos, antes de abrir la puerta de la casa cuando vuelvo de noche. Te oigo en tus sueños y en las ventanas nubladas del alcanfor. Te oigo cuando escucho otros pasos por el corredor, otra voz que no es la tuya. Todavía reconozco tus manos de amaranto y pluma gastadas, aquí, a la orilla de tu océano baldío. Me has dado una cita pero tú no has venido, y me has mandado a decir con alguien que no conozco, que te disculpe, que no puedes verme ya. Y ahora, me digo yo abriendo tu ropero, mirando tus vestidos; ¿ahora qué les voy a decir a las rosas que te gustan tanto, qué le voy a decir a tu cuarto, mamá? ¿Qué les voy a decir a tus cosas, si no puedo pasarles la mano suavemente y hablarles en voz baja? Te oigo caminar por el corredor y sé que no puedes voltear a verme por que la puerta, sin querer, se cerró con este viento que toda la tarde estuvo soplando. Yo sé que por alguna causa que no conozco estás de viaje, un océano más poderoso que la noche te lleva entre sus manos como una flor dispersa. Tu retrato me mira desde donde no estás, desde donde no te conozco ni te comprendo. Allí donde todo es mentira dejas tus ojos para mirarme. Deposita entonces en mí algunas de esas flores que te han dado, alguna de esas lágrimas que cierta noche guiaron mis ojos al amanecer; también en mí hay algo tuyo que no puede ver nadie. Yo sé que por alguna causa que no conozco te has ido de viaje, y es como si nunca hubieras estado aquí, como si sólo fueras -tan pronto- uno de esos cuentos que alguna vieja criada me contó en la cocina de pequeño. Mienten las cosas que hablan de ti tu rostro último me mintió al inclinarme sobre él, porque no eras tú y yo sólo abrazaba aquello que el infinito retiraba poco a poco, como cae a veces el telón en el teatro, 26 y algunos espectadores no comprendemos que la función ha terminado y es necesario salir a la noche lluviosa. Más acá de esas aguas oscuras que golpean las costas de los hombres, estoy yo hablando de ti como de una historia que tampoco conozco. JOSÉ CARLOS BECERRA 27 NO TE DETENGAS No dejes que termine el día sin haber crecido un poco, sin haber sido feliz, sin haber aumentado tus sueños. No te dejes vencer por el desaliento. No permitas que nadie te quite el derecho a expresarte, que es casi un deber. No abandones las ansias de hacer de tu vida algo extraordinario. No dejes de creer que las palabras y las poesías sí pueden cambiar el mundo. Pase lo que pase nuestra esencia está intacta. Somos seres llenos de pasión. La vida es desierto y oasis. Nos derriba, nos lastima, nos enseña, nos convierte en protagonistas de nuestra propia historia. Aunque el viento sople en contra, la poderosa obra continúa: Tu puedes aportar una estrofa. No dejes nunca de soñar, porque en sueños es libre el hombre. No caigas en el peor de los errores: el silencio. La mayoría vive en un silencio espantoso. No te resignes. Huye. "Emito mis alaridos por los techos de este mundo", dice el poeta. Valora la belleza de las cosas simples. Se puede hacer bella poesía sobre pequeñas cosas, pero no podemos remar en contra de nosotros mismos. Eso transforma la vida en un infierno. Disfruta del pánico que te provoca tener la vida por delante. Vívela intensamente, sin mediocridad. Piensa que en ti está el futuro y encara la tarea con orgullo y sin miedo. Aprende de quienes puedan enseñarte. Las experiencias de quienes nos precedieron de nuestros "poetas muertos", te ayudan a caminar por la vida La sociedad de hoy somos nosotros: Los "poetas vivos". No permitas que la vida te pase a ti sin que la vivas ... WALT WHITMAN 28 DATOS DE LOS AUTORES José Pedroni (Argentina 1899-1968). En 1923 aparece su primer libro: “La gota de agua”. Al que le siguieron “Gracia Plena” (1925), “Diez mujeres” (1937), “El pan nuestro” (1941), “Nueve cantos” (1944), “Monsieur Jaquín” (1956), “Cantos del hombre” y “Canto a Cuba” (1960), 1961 “La hoja voladora” (1961) y “El nivel y su lágrima” (1963). Gioconda Belli (Nicaragua 1948). Poetisa, ensayista y narradora. En 1972 obtuvo el Premio de Poesía Mariano Fiallos Gil y en 1978 el Casa de las Américas. Escribió “Línea de fuego” (1978), “Truenos y arco iris” (1982). Toda su obra se ha recogido en “El ojo de la mujer” (1986). Drummond de Andrade (Brasil 1902-1987). Poeta, cuentista, novelista y cronista. Publicó en 1930 "Algunos poemas”; “Sentimiento del mundo” (1940), “Claro enigma” (1951), “Antología poética” (1962), “Obra completa” (1964). José Agustin Goytisolo (Barcelona 1928-1999). Entre sus obras más conocidas figuran “El retorno” (1955), “Salmos al viento” (1957), “Años decisivos” (1960), “Algo sucede” (1968), “Bajo tolerancia” (1974), “Taller de arquitectura” (1977) y “Palabras para Julia y otras canciones” (1979), “Los pasos del cazador” (1980), “A veces gran amor” (1981). Tras meses de depresión, se arrojó desde una ventana de su casa. 29 Constantin Cavafis (Grecia 1863-1933). En 1891 publicó “Constructores” y en 1896 “Murallas”. Leí que durante 15 años guardó el poema “La ciudad” por no gustarle, hasta que permitió su publicación en la revista “Nueva vida” (Los grandes poemas del siglo Veinte, ob. cit., p. 292). Sabina Berman (México 1956). Publicó “Lunas” (1988) y “Poemas de Agua” (1986). A los 15 años abandonó la poesía para dedicarse al teatro. Luis O. Tedesco (Argentina, 1941). Autor de los siguientes libros de poesía: “Los objetos del miedo” (1970), “Cuerpo” (1975), “Paisajes” (1980), “Reino Sentimental” (1985), “Vida privada” (1995), “La dama de mi mente” (1998), “En la maleza” (2000), “Aquel corazón descamisado” (2002) y “Lomas del Mirador. Diccionario temático de voces”. (2006). José Emilio Pacheco (México 1939). Novela: “Morirás lejos” (1968). Cuento: “El principio del placer” (1972), entre otros. Traductor director y editor de colecciones bibliográficas y diversas publicaciones y suplementos culturales. Fue secretario de redacción de la Revista de la Universidad de México. Dirigió la colección Biblioteca del Estudiante Universitario. Ha sido docente en diversas universidades del mundo e investigador del INAH. 30 Charles Bukowski (Alemania, en 1920-1994). Poeta y escritor estadounidense nacido en Alemania. Su infancia estuvo marcada por constantes enfrentamientos con sus padres. Aficionado al boxeo y a las bibliotecas. En 1969 escribió para "Black Sparrow Press", publicando la mayoría de sus obras en esa editorial. Emily Elizabeth Dickinson (Estados Unidos 1830-1886) es un caso especial pues vivió casi aislada del mundo y su obra, salvo dos de sus poemas, fueron publicados recién en la última década del siglo XIX. Hamlet Lima Quintana (Argentina 1923-2002). Autor de más de 200 canciones registradas, "La amanecida" y "Zamba para no morir", entre otras hermosas canciones folklóricas, y de unos 30 libros. Nicanor Parra (Chile, 1914). Director interino de la Escuela de Ingeniería de la Universidad de Chile (1948) y becado en Estados Unidos para realizar estudios en el campo de la física. En 1937 publicó “Cancionero sin nombre” y en 1954 “Poemas y antipoemas” en 1954 y “La cueca larga” (1958). A “Versos de salón” (1962) le siguieron “Manifiesto” (1963) y “Deux Poèmes” (1963). En 1969 obtuvo el Premio Nacional de Literatura. 31 Jaime Sabines (México 1926-1999). En 1950 escribió “Horal”, en 1951 “La señal” y en 1952 “Adán y Eva”. En 1956 “Tarumba”, en 1961 “Diario semanario y poemas en prosa”, en 1962 “Poemas sueltos”, en 1967 “Yuria” y en 1973 “Algo sobre la muerte del Mayor Sabines”. En 1982 obtuvo el premio Elías Sourasky y en 1983 el Nacional de las Letras. Alfonsina Storni (Argentina 1892-1938). Su primer libro, “La inquietud del rosal”, apareció en 1916. En 1916, un poema suyo, “Versos otoñales”, impactó porque la autora se miraba a sí misma, inusual en la época. De 1918 es “El dulce daño”, “Ocre” de 1925, “El mundo de siete pozos” de 1934 y “Nascarilla y trébol” de 1938, año en el que se suicidó en Mar del Plata. Sergio Raimondi (Argentina 1968). Publicó algunos poemas en la revista Diario de Poesía y en la antología Poesía en la Fisura. Su libro “Poesía civil” (2001) fue traducido al alemán y editado en 2005 por el sello WVB de Berlín. Es profesor de Literatura Contemporánea en la Universidad Nacional del Sur. Humberto Costantini (Argentina 1924-1987). Su primer libro de cuentos, “De por aquí nomás” (1958). Escribió cuento, poesía, teatro, novela. Su novela “De Dioses, hombrecitos y policías” se publicó en México y obtuvo el Premio Casa de las Américas. Otras obras: “Un señor alto, rubio, de bigotes”, “Más cuestiones con la vida”, “Una vieja historia de caminantes”, 32 “Háblenme de Funes”, “Los héroes de Trelew”. En 1976 se exilió en México. Una de sus pasiones fue el tango, que cantó y bailó. En 1983 regresó a Buenos Aires después de 7 años de exilio. Elsa Fenoglio nació en Buenos Aires. Publicó: “Las presencias” (1976); “La fiesta de la piel” (1985); “La decepción” (1988); “Umbrales del origen” (1992); “El banquete” (1995); “La deshabitada” (2002). En narrativa: “Negativos para Fausto” (1989) y “La Huida” (2000). Colabora en revistas y diarios de Latinoamérica, España, Portugal y Estados Unidos. Ha recibido importantes Premios. Cesar Vallejo (Perú, 1892-1938) En 1923 publicó “Escalas melografiadas” y “Fabla salvaje”. Luego viajó a París, Moscú España. Autor de “Los heraldos negros” (1918);”Trilce” (1922); “Poemas humanos” (1939) y “España, aparta de mí este cáliz (1940). Gabriela Mistral (Chile 1889-1957). Maestra y después representante consular de su país en Europa, Brasil y Estados Unidos. Escribió “Sonetos de la muerte” (1915), “Desolación” (1922); “Ternura” (1924); “Tala” (1938) y “Lagar” (1954). Colaboró activamente en la campaña electoral del Frente popular (1938), que llevó a la presidencia de Chile a su amigo Pedro Aguirre Cerda. En 1945 recibió el premio Nobel. José Carlos Becerra (México 1936-1970). Publicó “Oscura Palabra” (1965), “Corona de hierro” (1966) y “Relación de los hechos” (1967). En 1969, obtuvo la beca Guggenheim. En 1973, se publicó “El otoño recorre 33 las islas”, una recopilación de su obra poética hecha por Gabriel Zaid y José Emilio Pacheco y prologada por Octavio Paz. Walt Whitman (Estados Unidos 1819-1892). Su principal obra fue “Hojas de hierba”, publicada en 1855, donde exalta los ideales demócratas y la alegría de vivir. Al terminar la Guerra Civil, publicó varios ensayos de carácter político. 34 BIBLIOGRAFÍA ♠ Maternidad, José Pedroni, www.poemasde.net/maternidad-jose-pedroni ♠ Sencillos deseos, Gioconda Belli, www.poemasde.net/sencillos deseosgiocondabelli ♠ Manos juntas, Carlos Drummond de Andrade, La mejor poesía. Selección de Héctor Yánover, Traducción de Estela dos Santos, Seix Barral, Buenos Aires, 1998, p. 103 ♠ Esos locos furiosos increíbles, José Agustín Goytisolo, www.amediavoz.com/goytisolo.htm ♠ La ciudad, Constantino Cavafis, La mejor poesía. Selección de Hé ctor Yánover, Seix Barral, Buenos Aires, 1998, p. 282-283 ♠ Con rabia, amor, Sabina Berman, Asamblea de Poetas Jóvenes de México, Siglo XXI, México, 1980, p. 202 ♠ Tendal, Luis O. Tedesco, Lomas del Mirador. Diccionario temático de Voces, Losada, Buenos Aires, 2006, p. 281 ♠ Alta traición, José Luis Pacheco, Tarde o temprano, Letras Mexicanas, FCE, México, 1986, p. 73 ♠ Siempre nos piden que entendamos, Charles Bukowski, www.grandespoetasfamosos.blogspot.com/2009/01/charlesbukowski.html ♠ Poema 1467, Emily Dickinson, ♠ Gente, Hamlet Lima Quintana, www.socavon.net/Poetas-yescritores/Quintana.htm ♠ El vino, Nicanor Parra, Poesía Iberoamericana Contemporánea, SEPUNAM, México, 1982, p. 291-293 ♠ Me encanta Dios, Jaime Sabines, www.poemasde.net/me-encanta-diosjaime-sabines ♠ ¿Qué diría? Alfonsina Storni, La mejor poesía. Selección de Héctor Yánover, Seix Barral, Buenos Aires, 1998, p. 349 ♠ Sueño y reparación, Sergio Raimondi, www.exargentina.org/anteriorescolonia2.html ♠ Gardel, Humberto Constantini, Cuestiones con la vida, Katún, México, 1982, p. 83-84 ♠ Los amigos, Elsa Fenoglio, Las presencias, Hojas del caminador, Buenos Aires, p. 14 ♠ Los heraldos negros, César Vallejo, La mejor poesía. Selección de Héctor Yánover, Seix Barral, Buenos Aires, 1998, p. 372 ♠ El placer de servir, Gabriela Mistral, webalia.com ♠ Palabra oscura, José Carlos Becerra, El otoño recorre las islas, Era, México, 1973, p. 48 ♠ No te detengas, Walt Whitman, www.personarte.com/whitman.htm 35