GOBIERNO DE LA PROVINCIA DE CÓRDOBA MINISTERIO DE EDUCACIÓN Secretaría de Educación Subsecretaría de Promoción de Igualdad y Calidad Educativa Área de Gestión Curricular CAPACITACION EN SERVICIO: “Hacia una gestión situada...Toma de decisiones didáctico-pedagógicas en Educación Primaria” Identidad y Convivencia – Ciudadanía y Participación 1º Instancia 2011 Clase 2 La Evaluación: una mirada compartida Presentación La primera clase estuvo orientada a profundizar en los saberes propios de la Ciudadanía, la Ética y la Construcción Identitaria presentes en los espacios curriculares Identidad y Convivencia y Ciudadanía y Participación, según el Ciclo de escolaridad en que se encuentran nuestros estudiantes; a reconocer cómo el texto curricular recoge estos saberes y los transforma en aprendizajes a partir de las características de la infancia en estos tiempos, sus producciones y consumos culturales, ampliando de esta manera la relevancia del Currículo, y, finalmente resignificando los procesos formativos- a valorar y transformar tradiciones escolares de enseñanza moral y cívica según los requerimientos actuales de formación de la infancia para la integración a un mundo nuevo, diverso y plural, Los aprendizajes y contenidos que debemos considerar se refieren a: - conocimiento de normas básicas, tales como las del cuidado del ambiente; de tránsito, derechos de los niños, entre otras; - capacidad para dar razones (argumentar) sobre sus puntos de vista y justificar sus acciones, reconocer valores asertivos en situaciones cotidianas (en la escuela, en noticias periodísticas) y de ficción (dibujos, canciones, cuentos, películas y juegos); - disposiciones y actitudes en la vida social: formas de estar con otros, de relacionarse con sus compañeros, docentes, adultos presentes en la vida escolar y comunitaria, de cuidado personal… 1 Como expresamos en la primera clase, es nuestro deber trasmitir a los “recién llegados” aquellos aspectos de la cultura que les permita incluirse, ser recibidos, formar parte del “mundo común”, de esa parte de la cultura que los “humanice”, los incluya y posibilite la vida en comunidad: la formación social, política y moral. El fundamento, el para qué de la evaluación se refiere a valorar y reorientar esos aprendizajes de nuestros niños: Aprendizajes sociales, que posibiliten una mejor convivencia; identificación de tradiciones y prácticas sociales comunitarias, el reconocimiento y respeto de las diferencias culturales, de símbolos y elementos identitarios, de relaciones sociales violentas y discriminatorias, entre otras. Aprendizajes éticos, que les permitan valorar con justicia, libertad, solidaridad las acciones humanas y las propias, reconocer las tradiciones morales y ponerlas en cuestión proponiendo otras formas más justas y cooperativas de vivir en este mundo, de cuidar de él, de estar con otros, de resolver conflictos, de ser consecuentes con sus valores y creencias y responsables de sus acciones. Aprendizajes políticos, que contribuyan a desarrollar la capacidad ciudadana de actuar, proponer, cuestionar, a partir del conocimiento de normas, de instituciones, de derechos y obligaciones, formas prosociales de ser y estar en las instituciones, en los espacios públicos comunes escolares y no escolares, en el espacio de la red virtual-social, de reconocer e internalizar formas de trato social y normas en general. En esta segunda clase, la reflexión estará centrada en qué evaluar en Identidad y Convivencia y en Ciudadanía y Participación. Evaluar en estos espacios curriculares presenta algunas dificultades y requiere tomar decisiones pedagógicas y construir tradiciones didácticas a partir de novedosos instrumentos y prácticas evaluativas. ¿Qué y cómo evaluar valores y actitudes? Parecen ser, sino la primera, las más complejas de las cuestiones a resolver, puesto que si nos detenemos en los aprendizajes y contenidos del Eje Derechos y participación, encontraremos mucho material construido y puesto en práctica: derechos del niño, educación vial, Normas constitucionales... que forman parte del currículo tradicional. Compartir algunas consideraciones teóricas sobre Valores y Actitudes nos puede orientar al respecto: 1) Una actitud se estructura sobre diversos componentes a ser tenidos en cuenta al momento de enseñar y de evaluar lo aprendido: Cognoscitivos: saber sobre. 2 Afectivos: apreciar o considerar deseable (querer) de hacer o seguir. Comportamentales: actuar como. 2) Un valor puede ser definido como un marco de referencia u orientación de lo que se considera deseable tanto para el sujeto como para su comunidad. Es por esto que puede definirse como un horizonte de sentido. Formar parte de una sociedad y de una cultura en un momento determinado requiere del desarrollo de valores y actitudes; llamamos a esto formación integral de los sujetos, que les permita integrarse de manera justa y democrática y formar parte de la misión educativa inclusiva de la escuela. Como segunda cuestión, entonces, debemos reconocer la condición cualitativa de la evaluación en estos espacios curriculares, reconociendo que no sólo representa un problema técnico metodológico, sino también un problema ético, pues es nuestra responsabilidad como educadores desarrollar las virtudes necesarias e inherentes al ser humano en sociedad, cuyos aprendizajes se deben valorar en función de rasgos de conductas y no de características personales (se comporta en forma solidaria o egoísta, y no, es solidario o egoísta, por ejemplo), a fin de lograr niveles crecientes de desarrollo moral en los niños. Para orientar esto que estamos expresando, la pregunta a hacernos al momento de evaluar puede ser: ¿en qué medida se están incorporando o desarrollando las actitudes y valores que deseamos promover? Valorando por ejemplo, si se comportan en forma creciente de manera solidaria, si resuelven conflictos desde el diálogo, si pueden fundamentar sus acciones, si pueden identificar derechos vulnerados, si respetan las reglas y los acuerdos, si desarrollan conductas más cooperativas… El desarrollo ético y político-social constituye un proceso, activo y dinámico, y en tanto tal, los niños van aprendiendo a convivir, respetar, valorar, fundamentar a partir de ejercicios de reflexión que el docente les va presentando. Debatiendo, dialogando, analizando. No se nace justo y libre, se desarrolla (aprende-construye) el sentido de justicia y se conquista la libertad responsable, tal como sucede con otros aprendizajes del currículo: las operaciones matemáticas, la lectura y la escritura, por ejemplo: estos aprendizajes pueden ser enseñados, aprendidos y evaluados. La última reflexión que proponemos es pensar lo comunitario en la formación moral. La enseñanza y evaluación de aprendizajes de valores y actitudes requiere considerar los modos de pensar y los valores que caracterizan a las comunidades de los estudiantes, sin dejar de lado valores universales, puesto que a esta experiencia institucional y política que es la escuela (la 3 primera tal vez para algunos) acceden portando prácticas diversas de crianza y socialización, y estos puntos de partida necesitan ser identificados y trabajados pedagógicamente, promoviendo desarrollos morales y políticos de esas experiencias previas. Por otro lado señalamos que las decisiones pedagógicas sobre enseñar y evaluar valores y actitudes requieren decisiones institucionales, en equipo, debatidas y consensuadas entre todos los integrantes de la comunidad educativa: actores escolares docentes, no docentes, familias y comunidad. Introducción El propósito de esta segunda clase es inaugurar formas de evaluación en los espacios curriculares de Identidad y Convivencia y de Ciudadanía y Participación, atendiendo a las particularidades que plantean. Estas particularidades hacen referencia a aprendizajes con fuerte contenido actitudinal y procedimental puesto que la ética y la ciudadanía son atributos del actuar humano en sociedad y poseen estas características, sin soslayar los demás contenidos que implican la formación moral y cívica de los niños1. Esta primera consideración requerirá, además, que intentemos en esta clase diseñar instrumentos específicos para valorar los aprendizajes, alcanzar acuerdos institucionales para la enseñanza e indagar, en las comunidades de origen de los estudiantes, situaciones, valoraciones, disposiciones, tradiciones que deberán ser incorporadas al trabajo formativo de la escuela. Por lo expuesto, trabajaremos una primera instancia de aproximación a las particularidades de la evaluación en este campo, y luego en la ejercitación de instrumentos de evaluación, complementando ambas con la lectura de dos textos propuestos. En los casos en los que, en este documento, se utiliza la expresión niños/niño se lo hace con un alcance abarcador y comprensivo de las particularidades de género. 1 4 La producción resultante de las diferentes actividades será presentada –debidamente organizada en un solo trabajo que reúna las producciones individuales del/los docente/s participante/s– a modo de Trabajo Práctico Individual o Grupal. Consignar en la carátula los siguientes datos: Nombre de la Capacitación Clase Nº: Datos de la Institución: Nombre: Teléfono: ( ) Localidad: Departamento: Dirección de Nivel a la que pertenece: Datos del/los integrante/s del grupo de trabajo: Apellido y Nombre: Nº de DNI: Cargo: Indicaciones Técnicas: El archivo debe estar nombrado de la siguiente manera: nombredelaescuela-numerodeclase.doc (Ejemplo: marianomoreno-clase1.doc) y estar guardado en la versión Word 2003 o anterior (no Word 2007). Será enviado por correo electrónico al tutor asignado. 3 de mayo de 2011. Actividades Actividad 1 Analice el siguiente párrafo, extraído del texto La Evaluación en Educación en Valores de Eliana Aldea López: “Los criterios de aprendizaje de valores, normas y actitudes se pueden explicitar: aprender un valor significa que se es capaz de regular el propio comportamiento de acuerdo con el principio normativo que dicho valor estipula; aprender una norma significa que se es capaz de comportarse de acuerdo con la misma; aprender una actitud significa mostrar una tendencia consistente y persistente a comportarse de una determinada manera ante diferentes clases de situaciones, objetos, sucesos o personas. Esta definición permite formular los objetivos relativos a valores, normas y actitudes y, por lo tanto, los resultados de aprendizaje”. 5 A partir de esta lectura reflexiva, narre en forma escrita y breve, una situación escolar protagonizada por sus estudiantes e identifique un valor, una norma y una actitud aprendidas y presentes y un valor, una norma y una actitud no aprendidos o ausentes en esa experiencia. Les proponemos, a continuación, la lectura completa del siguiente texto: Aldea López, E. (s/f). La Evaluación en Educación en Valores. Disponible en: http://www.oei.es/valores2/boletin10a02.htm. Recuperado el 20 de enero de 2011. Actividad 2 ¿Cómo evaluar en Identidad y Convivencia y en Ciudadanía y Participación? La dificultad de determinar los contenidos de la evaluación en Identidad y Convivencia y en Ciudadanía y Participación tiene su correlato en el diseño de instrumentos para realizarla. Atendiendo a esto es que el Texto Curricular sugiere: “Es necesario atender distintos criterios y herramientas de evaluación Si se pretende evaluar el aprendizaje de contenidos conceptuales del área, el instrumento a utilizar puede ser una situación semejante a la que se utilizó para la enseñanza, es decir, volver a discutir un caso tomado de una película, una anécdota, una noticia, un cuento, etc. y ver si los contenidos enseñados se incorporan en las argumentaciones de los estudiantes. El criterio básico es garantizar el isomorfismo entre la enseñanza y la evaluación. Es relevante considerar la evaluación en el área como un seguimiento del proceso más que como un mero resultado. Si se trata de evaluar la disposición personal de un estudiante para la tarea grupal, seguramente será más útil la observación y el seguimiento individual durante el desarrollo de actividades grupales e instancias de evaluación entre pares. Se recomienda conversar con el estudiante acerca de lo observado para intercambiar opiniones acerca de su mayor o menor facilidad para asumir un rol activo, o para dejarse llevar por las decisiones de sus compañeros, su disposición para sugerir ideas o su compromiso y responsabilidad en el producto grupal. En este sentido, suele ser útil dedicar unos minutos de diálogo personal entre el docente y cada estudiante, en el que ambos manifiesten cómo evalúan los avances y retrocesos en el aprendizaje de los hábitos escolares, del respeto de las normas, de la participación en la deliberación sobre conflictos grupales, etc. Esta instancia personalizada suele generar valiosa información para el docente, tanto como aclarar a los niños qué es lo que el docente espera de ellos y propone como objetivos próximos.” 6 Estas recomendaciones inauguran formas dialógicas y personales de evaluar los procesos de desarrollo de habilidades sociales, autonomía moral, de empatía, de ejercicio del diálogo… Parten de considerar a los niños sujetos culturales y sociales, de posicionarse como un adulto frente a un niño que merece y requiere cuidados, orientación, refuerzos en su educación social. Les presentamos a continuación el desarrollo de una técnica de evaluación llamada Lista de Cotejo que se complementa con una Escala de Apreciación. Ésta constituye una manera interesante de evaluar (cotejar) el desarrollo de valores a partir de conductas de los sujetos. Estos rasgos de conducta denotan disposiciones, actitudes, valoraciones en el actuar, que pueden desarrollarse a partir de la reflexión y el refuerzo. Está tomada de: Marchant Mayol, J y Perez Lorca, A. (2010). La evaluación de actitudes y valores. En Transversalidad y Valores en el Desarrollo del Currículum y la Evaluación - Universidad de Santiago de Chile - Facultad de Humanidades. Disponible en: http://www.scribd.com/doc/36908998/5-Instrumentos-Para-Evaluar-Actitudes-y-ValoresRecuperada el 20 de enero de 2011. Ejemplo Lista de Cotejo y Escala de Apreciación: Rasgo a evaluar: Participación responsable del alumno en el trabajo en equipo Definición del rasgo: Se entiende como la participación activa del estudiante en la toma de decisiones del grupo, aportando con opiniones propias, respetando el turno para intervenir de cada integrante, escuchándolos atentamente y respetando la opinión del resto de sus compañeros de equipo. Lista de Cotejo: Indicadores SI NO Participa activamente en la toma de decisiones del grupo Respeta el orden de intervención Respeta las opiniones de los demás Expone sus propias ideas Escucha atentamente a los demás Escala de Apreciación: Indicadores P F O RV N Participa activamente en la toma de decisiones del grupo Respeta el orden de intervención Respeta las opiniones de los demás Expone sus propias ideas Escucha atentamente a los demás 7 P: Permanentemente F: Frecuentemente O: Ocasionalmente RV: Rara Vez N: Nunca Otro modo de evaluar, esta vez refiriéndonos a actitudes, lo constituyen las Escalas de Actitud; veamos cómo se diseñan y se aplican a partir del siguiente modelo: Escala de Actitud: Las escalas de actitudes corresponden a cuestionarios con una lista de enunciados (escalas clásicas de actitud, tipo Likert) o con adjetivos bipolares (diferencial semántico). Se solicita a los encuestados que respondan, según unos grados, de acuerdo con sus sentimientos o percepciones. Se entiende por actitud una disposición más o menos permanente, positiva o negativa, que presenta una persona hacia un determinado "objeto", el que puede estar representado por una persona, grupo, situación, característica, entre otras. Toda actitud posee tres dimensiones: cognitiva, afectiva y comportamental, y todas ellas deben estar representadas de manera equitativa en el instrumento que se elabora para su evaluación. DIMENSIONES PALABRAS INDICADORES Cognitiva (conocer) Pienso, considero, creo, entiendo, conozco, reflexiono,... Pienso que mi puntualidad favorece el trabajo de equipo. Afectiva (sentir) Agrado, desagrado, gusto, disgusto, disfruto, sufro,... Me agrada que mis compañeros de equipo cumplan con sus compromisos en los plazos establecidos. Comportamental (hacer) Acepto, aporto, reconozco, ayudo, Acepto las sugerencias de mis compañeros escucho, expreso, asisto, cuando trabajamos en equipo. preparo,... Criterios de construcción 1. Determinar la actitud a evaluar. 8 2. Definir la actitud. 3. Elaborar indicadores para cada dimensión de la actitud (cognitiva, afectiva y comportamental), tanto en sentido positivo como negativo. 4. Validar la relación lógica entre cada dimensión y sus indicadores, a través de juicio de experto (validez de contenido). 5. Utilizar la escala tipo Likert: Total Acuerdo (TA); Parcial Acuerdo (PA); Ni Acuerdo/Ni Desacuerdo (NA/ND); Parcial Desacuerdo (PD); y, Total Desacuerdo (TD). También se puede utilizar una escala de diferencial semántico. 6. Distribuir los indicadores al azar. 7. Incorporar indicadores control. 8. Diagramar el instrumento. Ejemplo Escala de actitud: Compañerismo escolar Nº INDICADORES TA PA NA/ND PD TD 01 Comparto mis materiales con los compañeros que no los tienen 02 Me gusta ayudar a mis compañeros en las tareas que no entienden 03 Creo que uno debe ayudar sólo a sus amigos 04 Me disgusta ayudar en el aseo de la sala cuando me lo piden 05 Pienso que uno sólo debe ayudar a sus amigos 06 Organizo actividades para integrar a los compañeros aislados 07 Presto atención cuando alguien necesita de mi 08 Me alegro con los logros de mis compañeros de menor rendimiento 09 Sufro con las penas o tristezas de mis compañeros 10 Incentivo a mis compañeros a superarse como estudiantes 11 Me burlo de mis compañeros cuando se equivocan 12 Estoy dispuesto a colaborar para que el curso fuera más unido 13 Pienso que es importante tener amigos en el colegio 14 Me agrada visitar a mis compañeros cuando están enfermos 15 No perjudico a ningún compañero aunque se lo mereciera 16 Me molesta compartir con aquellos que no son mis amigos 17 Comparto mi colación si un compañero no trae la suya 18 Me desagrada escuchar las disertaciones de algunos compañeros 19 Considero que uno no puede ser amigo de todo el curso 20 Me acerco al compañero que no tiene amigos en el curso A partir de los ejemplos anteriores, estarán en condiciones de imaginar y producir algunas escalas de actitud y listas de cotejo, a modo de ejercicio de transferencia y fijación de aprendizajes. 9 Les proponemos entonces que seleccionen 2 aprendizajes del Diseño Curricular de la Educación Primaria de la Provincia de Córdoba, Documento de Trabajo 2010 - 2011, y elaboren, para cada uno de ellos, una lista de cotejo o una escala de actitud. artículo Cómo última actividad, les proponemos la lectura completa del 2: Marchant Mayol, J y Perez Lorca, A. (2010). La evaluación de actitudes y valores. En Transversalidad y Valores en el Desarrollo del Currículum y la Evaluación - Universidad de Santiago de Chile - Facultad de Humanidades. Disponible en: http://www.scribd.com/doc/36908998/5-Instrumentos-Para-Evaluar-Actitudes-y-ValoresRecuperada el 20 de enero de 2011. Notas de Cierre: Hemos intentado iniciar juntos un recorrido por nuevas formas de evaluar, coherentes con los aprendizajes, contenidos, orientaciones didácticas, enfoques epistemológicos e ideológicos que impregnan y dan sentido al Diseño Curricular de Identidad y Convivencia en el Primer Ciclo y de Ciudadanía y Participación en el segundo Ciclo de la Educación Primaria. La tarea de construcción de prácticas no es sencilla y esperamos haber hecho algún aporte a la misma. De la misma manera, creemos que no se agota esa tarea en los textos y actividades que les hemos presentado, sino que Ustedes la enriquecerán con su experiencia. Aquí vienen “como anillo al dedo” aquellos versos de Antonio Machado: “Caminante no hay camino, se hace camino al andar”… Y como cada nuevo inicio de año lectivo nos trae nuevas perplejidades en función de nuevos aprendizajes y prácticas de nuestros niños, “se ve la senda que nunca se ha de volver a pisar”, ofreciéndonos la oportunidad de crear, innovar, profesionalizar la práctica educativa. ¡Adelante entonces en la tarea renovada de alojar desde la cultura común a los recién llegados a este mundo! Muchas gracias Las actividades previas a la evaluación final de este curso, tendrán sus fundamentos en instrumentos presentados por los autores de este artículo, por lo que les sugerimos una lectura atenta y reflexiva. 2 10 Equipo técnico Ciudadanía y Humanidades Área de Gestión Curricular Para seguir leyendo. Una sugerencia de lectura complementaria: Castro de Bustamante, J (2004) actitudes y desarrollo moral: función formadora de la escuela. En EDUCERE. Mérida, Venezuela: Universidad de Los Andes. 475-482. Disponible en: http://redalyc.uaemex.mx/pdf/356/35602705.pdf Recuperada el 20 de enero de 2011 La riqueza de este artículo radica en que realiza un sintético recorrido por diversas corrientes axiológicas y pedagógicas en el campo de la educación en valores y actitudes. 11