manifiesto - Instituto Asturiano de la Mujer

Reunidos y reunidas en Avilés, hoy, 25 de septiembre, en conmemoración del Día
Internacional contra la explotación sexual y la Trata de personas, el Instituto Asturiano
de la Mujer del Gobierno de Asturias, el Ayuntamiento de Avilés y Asociaciones que
atienden a las víctimas de la trata, Asociaciones de Mujeres y Asociaciones Juveniles
de Asturias, elaboran este manifiesto con el objetivo de:
1.- Hacer visible la que es quizá la forma de esclavitud más cercana a la ciudadanía
española, y que, sin embargo, resulta invisible: la trata con fines de explotación sexual,
que afecta a miles de mujeres y niñas en España.
2.- Afirmar la necesidad de enmarcar la trata con fines de explotación sexual entre
las más atroces violaciones de los derechos humanos.
La trata con fines de explotación sexual afecta al derecho a la vida, a la integridad
física y psíquica, a la seguridad y a la libertad, a la dignidad de la persona. Vulnera
también otra serie de derechos humanos, como el derecho a no ser vendida en
matrimonio, ni sometida a esclavitud, o tortura, tratos inhumanos, crueles o
degradantes; el derecho a una vida familiar y a la intimidad, el derecho a la salud, a
una vivienda en condiciones de seguridad y a no ser discriminada por el hecho de ser
mujer.
3.- Recordar la importancia de identificar a las víctimas de trata y diferenciarlas de
las mujeres inmigrantes en situación irregular.
Para evitar la revictimización de las mujeres víctimas de trata, una de las
recomendaciones más importantes de los organismos internacionales de derechos
humanos es la de establecer protocolos de identificación, que permitan reconocer a
estas víctimas y no confundirlas con mujeres que migran de forma clandestina.
4.- Impulsar la colaboración entre los poderes públicos y la sociedad civil para
que los derechos humanos de las mujeres víctimas de trata sean una de nuestras
prioridades políticas, acorde a la adhesión de España al Convenio Europeo de Lucha
contra la Trata de Personas.
En este sentido, el Protocolo Marco de Protección a las Víctimas de Trata de Seres
Humanos y el compromiso de su aplicación supone un avance en la lucha, pues ha de
permitir visibilizar este problema y coordinar de una forma más eficaz la persecución
del delito de trata, así como la asistencia integral de las víctimas.
5.- Instar a los poderes públicos a establecer mecanismos de comunicación y
colaboración efectivos con las entidades especializadas en la atención integral a las
víctimas de trata, para garantizar una adecuada identificación y atención a las mismas.
6.- Garantizar una adecuada atención a las víctimas de trata, para lo cual éstas
deberían contar con:
- Asistencia en su recuperación física, psicológica y de integración social, con
independencia de que colaboren o no, tras un período mínimo de reflexión de 30 días,
con las autoridades competentes en la denuncia de la autoría del delito; garantizando
de esta forma su protección, asistencia y reparación.
- Acceder a un alojamiento seguro y adecuado a sus necesidades.
- Prestar especial atención a las víctimas de trata de seres humanos menores de
edad, teniendo en cuenta su mayor vulnerabilidad; siendo imprescindible su atención
en recursos especializados, implementando para ello los ya existentes.
- Acceder a una autorización de residencia y trabajo, sin sanciones por eventuales
infracciones en relación a la Ley de Extranjería o el asilo en España, si existe temor de
persecución en su país de origen.
- Ser informadas de sus derechos y de los recursos disponibles, en un idioma que
conozcan, a través de intérpretes profesionales que garanticen su confidencialidad.
7.- Recordar que en el caso de las víctimas que denuncian a los responsables de la
trata y que testifican deberían poder:
- Obtener la condición de “testigo protegido” con garantía de su seguridad y la de sus
familiares, y otras personas cercanas que puedan correr peligro.
- Contar con asistencia letrada gratuita y especializada.
- Obtener reparación moral y económica.
8. Implementar los programas de cooperación al desarrollo con países de origen y
destino, y trabajar conjuntamente para favorecer la protección de las víctimas y sus
familias.
9.- Afirmar la importancia de trabajar en el ámbito de la prevención, actuando en
las raíces más evidentes de la trata con fines de explotación sexual: la demanda
masculina de servicios sexuales comerciales y la feminización de la pobreza y escasez
de oportunidades de una vida digna para millones de mujeres en el mundo.
10.- Implicar a los hombres para que se involucren en la lucha contra la trata de
seres humanos y decidan no ser partícipes de esta cadena de graves abusos y
esclavitud.
11.- Fomentar la educación para la igualdad y la educación afectivo-sexual
coeducativa desde la infancia.
12.- Instar a los medios de comunicación y sus empresas editoriales a fomentar
mecanismos de autorregulación dentro de la prensa diaria, encaminada a eliminar la
publicidad de prostitución, con el objeto de evitar la banalización de la explotación
sexual.
A modo de conclusión recordamos la importancia de una intervención integral, no
sólo enfocada a la detección y persecución de las redes sino además hacia la
sensibilización social, la prevención, recuperación e integración de las propias
víctimas.
En consecuencia reivindicamos la necesidad de incluir en la
agenda política la elaboración de una Ley Integral Contra la
Trata de Seres Humanos de carácter estatal