POSIBLES CAUSAS DE PELIGRO De acuerdo con la “CONSUMER PRODUCT SAFETY COMISIÓN” de Estados Unidos, los incendios relacionados con estufas son principalmente causados por: • Elementos combustibles en contacto o demasiados cercanos al cañón. • Inflamación de los residuos en el interior del cañón, en instalaciones que no cumplen con las normas. • Instalaciones realizadas sin doble cañón, ni aislantes adecuados en los entretechos, o pasadas de entrepisos o tabiques. • Falla de materiales del cañón (utilización de materiales inadecuados). INSTALACIÓN DEL CAÑON • El cañón es el componente más importante desde el punto de vista SEGURIDAD de su calefactor, pues por él se evacuan los gases, producto de la combustión. Estos gases son muy corrosivos y alcanzan altas temperaturas y en muchas ocasiones contienen componentes combustibles. Estudios realizados han demostrado que los incendios relacionados con estufas se originan en las cercanías del cañón. Estos incendios son totalmente evitables. • La instalación debe ser realizada por una persona experimentada y capacitada. No acepte instalaciones realizadas por instaladores sin calificación o sin respaldo de alguna empresa prestigiada. • Revise que la instalación se haya realizado cumpliendo rigurosamente con todas las instrucciones del manual de instalación. Especialmente verifique que se cumplan las distancias mínimas desde el cañón a cualquier elemento combustible. • Utilice solamente elementos de instalación prescritos y los materiales indicados en el manual de instalación. El cañón principal debe ser de acero inoxidable calidad 304 o superior. Normas anteriores admitían aceros corrientes. Si su cañón es de acero corriente debe reemplazarlo como mínimo cada dos años. • El cañón debe ser lo más recto posible, en lo posible debe evitarse curvas y tramos no verticales. • La chimenea debe sobresalir al menos 60 centímetros de la cumbrera del tejado. • Si tiene dudas sobre su instalación, solicite inmediatamente una revisión a un técnico calificado o a la compañía de bomberos. • Si ha realizado trabajos, modificaciones o reparaciones en las cercanías del cañón o del calefactor después de su instalación, revise que no se hayan alterado ninguno de los detalles especificados en manual de instalación. • Si siente olor a quemado o tiene la sensación de un sobrecalentamiento en las cercanías del calefactor, solicite revisión técnica. ¿ QUE ES UN “CHIMNEY FIRE”? • En el interior del cañón se depositan hollín y residuos de la combustión de la leña, cerosota. • La cerosota es combustible y en determinadas circunstancias se inflama dentro del cañón, produciendo una temperatura extremadamente alta. En algunas ocasiones el se pone rojo incandescente. • Es posible que se produzcan de cerosota incandescente por el extremo superior del cañón. ¿CÓMO MANEJAR UNA SITUACIÓN DE “CHIMNEY FIRE”? • Mantenga la calma • Una instalación bien hecha debe resistir perfectamente esta situación. • Cierre bien la puerta del calefactor y ponga el comando del control en “MÍNIMO”. Posiblemente dentro de unos cinco minutos se terminara el fuego en el interior del cañón. No abra la puerta hasta treinta minutos después de terminado el “chimney fire”. De otra manera la inflamación podría comenzar nuevamente. • Vigile atentamente el cañón especialmente en la zona del entretecho. • Aleje todo material combustible de las cercanías del cañón. • Si la situación se prolonga demasiado o si sospecha que su instalación no fue bien hecha, llame inmediatamente a la compañía de bomberos. • No utilice su calefactor nuevamente, hasta que sea revisado por un técnico calificado. ¿CÓMO EVITAR UN “CHIMNEY FIRE”? • Cañón limpio: Es la clave para evitar un “chimney fire”. • Fuego caliente: Para mantener el cañón limpio, evite que su calefactor opere con fuego humeante sin llamas y baja temperatura. • Leña seca: La humedad de la leña necesariamente disminuye la temperatura del fuego y con ello aumenta la posibilidad de un “chimney fire”. • Al encender su calefactor, haga fuego vigoroso con poca leña por unos treinta minutos para calentar rápido el calefactor y la leña. • Al recargar su calefactor, evite enfriar el fuego ya existente. Abra el paso del aire al máximo e intente que los nuevos trozos de madera se calienten rápido. Solamente después de ello regule el control en la posición media o mínima. MANTENGA EL CAÑON LIMPIO • Es muy importante que inspeccione el cañón frecuentemente. Debe hacerse al menos una limpieza y revisión completa al año. • Inspeccione usted mismo el cañón cada dos semanas, en el periodo en que está aprendiendo a utilizar su calefactor y cada vez que una persona comience a operarlo. • También es recomendable esta frecuencia cuando reciba una nueva partida de leña.• Cada vez que observe depósitos de cerosota de mas de seis milímetros de espesor, haga limpiar el cañón. • No confíe en productos químicos para limpiar el cañón. Estos sólo sirven para prevenir la formación de cerosota, no para eliminarla. OTRAS PRECAUCIONES • Si el piso donde se encuentra el calefactor es de alfombra, madera o cualquier material combustible, protéjalo con una bandeja aislante. • Vigile que el calefactor sea operado por personas prudentes. • Cerciórese que ningún componente de la red eléctrica de su casa sea afectado por el calor del calefactor o del cañón. Verifique que los fusibles de su instalación eléctrica sean adecuados y que estén en buena condiciones. • Si su casa es de madera, mantenga siempre un extinguidor en un lugar visible y al alcance de todos.